Sie sind auf Seite 1von 30

13 Cuídate a ti

mismo primero
Lectura bíblica: Marcos 12:28–34

Y amarle [a Dios] con todo el corazón, con


todo el entendimiento, y con todas las
fuerzas, y amar al prójimo como a sí mismo.
Marcos 12:33

Cierto o falso: Al comienzo de los vuelos por avión, la azafata

☐ Cierto ☐ Falso te dice el destino del viaje


☐ Cierto ☐ Falso señala las salidas de emergencia
☐ Cierto ☐ Falso explica cómo abrocharse el cinturón de seguridad
☐ Cierto ☐ Falso te indica: “En caso de una pérdida súbita de presión en la cabina,
usted tiene que ayudar al que tiene al lado a ponerse la máscara
de oxígeno, antes de ponerse la suya”.

Si marcaste “falso” a la última frase, eres un pasajero brillante. Esta es la regla: Si el


interior del avión de pronto sufre una falta de oxígeno, lo primero que tienes que hacer es
ponerte tu propia máscara de oxígeno. Recién entonces puedes ayudar a los que están
sentados a tu alrededor. Después de todo, si te falta el aire, no puedes ayudar a nadie, ni
siquiera ayudarte a ti mismo.
El amor que uno se tiene a uno mismo funciona de la misma manera. Jesús dijo que
amáramos a otros como nos amamos a nosotros mismos (ver Mateo 22:39) porque el tipo
apropiado de amor propio nos capacita para amar a otros.
• Físicamente: Te abrochas el cinturón de seguridad en el auto, te niegas a fumar,
beber, andar en drogas y duermes las horas que debes para no estar de mal humor.
• Mentalmente: Guardas tu mente apagando las videocintas, la música, las películas y
los programas de TV negativos.
• Socialmente: Evitas los grupos que te tientan a hacer lo malo.
• Espiritualmente: Llenas tu corazón con las Escrituras, te sientes responsable ante los
demás y te mantienes firme contra los intentos de Satanás de desanimarte.
Amor propio en el sentido que lo estamos usando aquí significa invertir tiempo y
esfuerzo en nuestro propio desarrollo de manera que estemos preparados para ayudar a
otros, porque no podemos dar lo que no tenemos. Sólo cuando nos amamos y cuidamos a
nosotros mismos nos vamos capacitando para amar y cuidar a otros como nos ordenó
Cristo.
Si hacemos menos, si no nos cuidamos sabiamente a nosotros mismos, nos
perjudicamos nosotros mismos y perjudicamos a otros. Nos privamos del amor sano que
Dios espera que nos tengamos. Y no tenemos lo que necesitamos para servir a otros. ¡Dios
te ama demasiado para dejar que te desprecies a ti mismo!

PARA DIALOGAR: ¿De qué manera


puedes amarte sabiamente a ti mismo? ¿De
qué manera puedes ayudar a otros en tu
familia a cuidarse a sí mismos?

PARA ORAR: Señor, te damos gracias


porque crees que vale la pena que nos
cuidemos.

PARA HACER: ¿Cómo te estás


privando de un amor propio sano? Elige un
área y una meta para cuidarte mejor a ti
mismo.

SEPTIEMBRE

14 Ni demasiado ni
poco
Lectura bíblica: 1 Corintios 12:14–27

Ahora bien, vosotros sois el cuerpo de


Cristo, y miembros suyos individualmente. 1
Corintios 12:27

Supón que llegas con tu familia, un viernes a la noche, a un restaurante que tiene todo
lo que puedas comer por un precio fijo. ¿Cómo te sentirías después de que te serviste? Vota
lo que más se parecería a ti.
(a) Vuelvo a casa empachado porque me comí todo lo que había a la vista, y después
hasta aspiré hondo para llevarme el olorcito a comida.
(b) Vuelvo a casa con hambre porque me serví unas cucharaditas chiquitas, aun de mis
platos favoritos. Me da miedo servirme más por temor a que después no alcance la
comida para todos.
(c) Vuelvo a casa satisfecho, y queda bastante comida para todos los demás que
comerán después.

¿Sabes que tienes las mismas tres opciones cuando de demostrar amor se trata?
Piénsalo:
(a) Puedes amarte tanto que no te queda nada de amor para nadie más en el mundo.
(b) Puedes privarte de amor por ti mismo hasta marchitarte.
(c) Puedes aprender a amar apropiadamente a tu prójimo como te amas a ti mismo.

En 1 Corintios 12 Pablo dijo que, como cristianos, tenemos algo aún más vital que el
alimento para compartir unos con otros. Explicó que el Espíritu Santo puso dentro de cada
uno de nosotros dones para servir a otros. No sólo eso, sino que también nos capacita a
cada uno con los dones exactos que quiere que tengamos. Nos ha hecho como un cuerpo,
cada persona es una parte del cuerpo. Ya sea que tengamos las habilidades de un ojo, un
oído o un pie, nuestra meta es apreciar, desarrollar y poner en práctica las habilidades que
Dios nos dio para bien del resto del cuerpo, o sea la iglesia.
¿Te das cuenta de que ese tipo de amor propio no es egoísta? Si te amas demasiado, te
guardarás tu don para ti exclusivamente. Si te amas demasiado poco, no creerás que puedes
ser de ayuda a nadie. Pero cuando te amas a ti mismo correctamente, ¡tienes una opinión lo
suficientemente buena de ti mismo como para poner en práctica esa serie de dones únicos
para bien de otros!

PARA DIALOGAR: ¿Te parece que te


amas demasiado —o demasiado poco— o en
la medida justa? El hecho de amarte a ti
mismo, ¿de qué manera te ayuda a amar a
otros?

PARA ORAR: Señor, ayúdanos a


amarnos a nosotros mismos en la medida
justa, ¡a fin de poder usar nuestros dones
para bien de otros!

PARA HACER: Respétate a ti mismo:


¡Usa tus dones para tener hoy un impacto
sobre la vida de alguien!
SEPTIEMBRE

15 “No sirvo para


nada”
Lectura bíblica: 1 Juan 2:1–6

Y si alguno peca, abogado tenemos delante


del Padre, a Jesucristo el justo. 1 Juan 2:1

“No sirvo para nada. No puedo ayudar a nadie”, se lamentó Miguel para sus adentros.
Unas horas después de haber finalizado la dramatización navideña en la iglesia, estaba
ayudando a empacar los disfraces. Le parecía que ofrecerse para ayudar era algo bueno.
Pero el hermano García no pensaba lo mismo.
—No puedes simplemente hacer un bollo con los trajes —dijo de mal modo el hermano
García—. Hay que doblarlos bien.
Desanimado, Miguel dejó los trajes, se fue a otra pila de objetos y empezó a
organizarlos. Pero pronto había mezclado las auras de los ángeles con las pañoletas de los
pastores. Y cuando Miguel tomó una figura de cerámica y la quebró, el hermano García
perdió la paciencia.
—Miguel Díaz, ¡qué lío estás haciendo! Me parece que te conviene llamar a tu papá
para que te venga a buscar.
Miguel se puso a llorar en cuanto se subió al auto. Le dijo a su papá:
—Cuando trato de ayudar, lo único que hago es un lío. Sé que se supone que tengo que
amar a otros como me amo a mí mismo, pero no veo en mí nada digno de amar.
La buena voluntad de Miguel terminó en un lío. ¿Te ha sucedido alguna vez algo así?
Por lo general, tarde o temprano nos pasa a todos. Y nos hace sentir inútiles.
Pero el reflejo de ti que ves en los ojos de los demás no siempre es acertado. Seguro, lo
que otros piensan de ti importa. Pero lo que importa mucho más es que obtengas el
concepto que Dios tiene de ti. Cuando te ves a través del Dios que te ama, ¡entonces te das
cuenta de que no tienes por qué sentirte inútil!
La ruta más directa a amarte a ti mismo es empaparte de las verdades bíblicas acerca de
quién verdaderamente eres en Cristo. Por ejemplo:
• Eres amado por Dios y vales la muerte de su Hijo (ver 1 Juan 4:10).
• Eres hijo de Dios (ver Juan 1:12; Romanos 8:14, 15).
• Eres amigo de Cristo (ver Juan 15:15).
• Tienes el Espíritu de Dios que vive en ti (ver 1 Corintios 3:16; 6:19).
• Eres nuevo en Cristo (ver 2 Corintios 5:17).
• Eres justificado en Cristo (ver Efesios 4:24).
• Estás en la luz, no en la oscuridad (ver 1 Tesalonicenses 5:5).
• Eres una obra de Dios (ver Efesios 2:10).
Cuanto más absorbas estas verdades acerca de quién eres en Cristo, más capacitado
estarás para amarte como te ama Dios aunque tus esfuerzos disten de ser perfectos. ¡Aun
cuando haces líos, estas verdades son ciertas!

PARA DIALOGAR: ¿Qué opinas de


todas esas verdades bíblicas acerca de tu
identidad en Cristo?

PARA ORAR: Señor, gracias porque


sigues creyendo en nosotros aun cuando
fallamos.

PARA HACER: ¿Hay algo en que te has


dado por vencido? ¡Vuelve a hacer la
prueba!

SEPTIEMBRE

16 Amistades
desparejas
Lectura bíblica: Romanos 15:1–4

Cada uno de nosotros agrade a su prójimo


para el bien, con miras a la edificación.
Romanos 15:2

Mucho antes de que Rafael tuviera edad para ir a la escuela, sus padres ya sabían que
tenía problemas de aprendizaje. Ya en la escuela, sus maestros se han desvivido por
mantenerlo a la par del resto de su clase. Pero, entre todas las personas que más lo han
ayudado, el que le ha ofrecido más aliento es Tomás, un compañero de clase.
Al principio Rafael no se animaba a confiar en Tomás. Sabía por experiencia lo que era
tener amigos que prometen ayudar pero después se olvidan. O que dejan de ayudar cuando
otros chicos les hacen burla por andar con “el tonto”.
A veces, nuestros amigos distan de ser perfectos. Es probable que ya hayas descubierto
a algunos que no eran los amigos auténticos que creías.
Tenemos que mantenernos en guardia en contra de por lo menos cuatro clases de
amigos que, más que seguro, nos decepcionarán o frustrarán.
• Amigos de medio tiempo. Tito es muy amigo de César cuando están solos. Pero Tito
ignora a César —o lo rechaza— cuando están en grupo. Algunos amigos de medio
tiempo son lo contrario: muy amistosos cuando están en grupo, un hielo cuando
están solos.
• Amigos condicionales. Para Irene, la amistad es como una carnada, te hace ver que
es tu amiga para que hagas lo que ella quiere. Es tu amiga mientras te tragues el
anzuelo y hagas lo que ella quiere. En cuanto no te prestas a hacerlo, la amistad
desaparece.
• Amigos imprudentes. Sonia cuenta secretos, chismosea y no cumple sus promesas.
Es difícil tener una amistad con ella porque nunca sabes qué está pensando de ti.
• Amigos superficiales. Aun cuando sus amigos necesitan una ayuda en serio, Simón
sale con un chiste. Está bien conversar y compartir actividades con él, pero es
dudoso que puedas esperar de él mucho más.
Quizá tengas en este mismo momento algún amigo de uno de estos tipos. Así que
comenta el asunto: ¿Tienes amigos y conocidos a quienes les quedan bien las descripciones
anteriores? ¿Has terminado desalentado, lastimado o solo?
Es imposible evitar completamente a los amigos que distan de ser perfectos. No
obstante, lo que nos toca a nosotros es ser amigos tan auténticos y transparentes como
podamos.

PARA DIALOGAR: Describe cómo es


un amigo auténtico. ¿Por qué son los amigos
así tan escasos y especiales?

PARA ORAR: Señor, ayúdanos a ser


amigos auténticos de las personas a nuestro
alrededor.

PARA HACER: ¿Muestras alguna señal


de ser un amigo de medio tiempo,
condicional, imprudente o superficial? ¿Qué
característica tuya como amigo quieres
mejorar o cambiar?

SEPTIEMBRE

17 Hablar a fondo
Lectura bíblica: Efesios 4:25–29
Ninguna palabra obscena salga de vuestra
boca, sino la que sea buena para edificación
según sea necesaria, para que imparta
gracia a los que oyen. Efesios 4:29

A Ricardo le gustaba el club de chicos de la iglesia que se reunía una noche por semana.
Participaba como loco en los juegos, memorizaba fielmente los versículos bíblicos y
prestaba mucha atención durante las lecciones bíblicas.
Pero cuando el líder del grupo anunció que formarían grupos pequeños por unos
minutos cada semana para un momento que él llamaba “Habla y Escucha”, Ricardo dijo:
“¡Jamás!”. No disimuló su desagrado.
—Las chicas parlotean —argumentó—. Los muchachos no.
A lo mejor te crees que puedes tener amistades de verdad sin hablar de temas serios. De
ser así, puedes hacerte amigo de una pared. Los amigos necesitan tiempo para conversar si
quieren estrechar su relación. Cuando más se compenetran en la vida del otro —hablando
de sus sentimientos, sus cosas favoritas y sus temores— se profundiza más su amistad.
Escucha estas tres maneras de hablar, profundizando poco a poco la amistad:
• Nivel 1: Conversación superficial. Tu conversación comienza y termina con: “Qué
tal chico, ¿cómo te va?”. “Muy bien, ¿y tú?”. Nunca vas más allá del “Qué
tal”.Nivel 2: Conversación sobre hechos concretos. Intercambian información sobre
intereses compartidos: puntajes de sus equipos deportivos favoritos, modas, cursos
escolares, conjuntos musicales, actividades en la escuela, etc.
• Nivel 3: Conversación sobre opiniones. Llevas las novedades, los hechos concretos,
al próximo nivel compartiendo tus pensamientos e ideas sobre ellos. Si están
hablando de puntajes, comentas cuál fue tu jugada favorita. Si hablan de música,
comentas lo que te gusta de la letra de un canto. Te estás acercando más a temas
personales, pero básicamente todavía te estás cuidando.
Aquí es donde profundizas más. ¿Alguna vez alcanzas estos niveles?
• Nivel 4: Conversación que incluye los sentimientos. Compartes lo que sientes acerca
de hechos concretos. “¡Cuando sucedió eso, me dio mucho miedo!”. “Esta ha sido la
semana más solitaria de mi vida”. “Desde que Jorge dijo esa mentira de mí, he
estado muy triste”. Comienzas a ver lo que está pasando adentro del otro.
• Nivel 5: Conversación a fondo. Charlan sobre sus sentimientos más profundos. Eres
totalmente transparente en todo lo que respecta a tu vida.
Todos necesitamos amigos en quienes podemos confiar tan completamente que
podemos ser absolutamente transparentes en cuanto a nosotros mismos. Es la única manera
de profundizar, ¡seas chica o chico!

PARA DIALOGAR: ¿Hasta qué punto


cuentas a tus amigos tus sentimientos más
profundos? ¿De qué manera podrías mejorar
en este sentido?

PARA ORAR: Padre, danos amigos con


quienes podemos compartir nuestros
pensamientos y sentimientos más profundos.

PARA HACER: ¿A qué nivel hablan


como familia? Tómense hoy el tiempo para
hablar profundamente.

SEPTIEMBRE

18 ¿Con quién
andas?
Lectura bíblica: Proverbios 4:10–16

No entres en el sendero de los impíos, ni


pongas tu pie en el camino de los malos.
Evítalo; no pases por él. Proverbios 4:14, 15

—Un grupo de chicas estábamos pasando la noche en la casa de una amiga —explica
Amanda—. Yo conozco a la mayoría de las chicas, pero había dos que no conocía bien. Ya
era tarde cuando a una de esas chicas se le ocurrió ir y “decorarle” el frente de la casa con
papel higiénico a otra chica que nadie quiere. No muchas se atrevieron a hacerlo. Pero
cuatro sí lo hicieron.
—Bueno, resulta que dos meses después pasábamos otra vez la noche juntas. Esta vez
hacer eso de “decorar” con papel higiénico no sonaba tan mal. Y las próximas veces, todas
estaban diciendo cosas como: “Sí, a mí tampoco me gusta para nada esa chica.
Hagámoslo”.
Amanda sigue reflexionando sobre la experiencia.
—Después de un tiempo empiezas a ceder ante la presión. Si muchas de tus amigas
hablan de hacer algo malo, tu conciencia parece tomarse una siesta, y se hace difícil seguir
pensando que está mal lo que piensan hacer. Al poco tiempo dices: “Seguro que sí. ¿Por
qué no?” y entonces lo haces.
Amanda tiene una percepción aguda, y demuestra por qué tenemos que cuidarnos con
quien andamos. No es ninguna novedad que las malas compañías te pueden arrastrar a una
conducta incorrecta que te puede distanciar de tus padres y tus amigos cristianos. Cuando
vamos en dirección contraria a lo bueno, sentimos una dolorosa soledad.
Tema para comentar: ¿Qué puedes hacer cuando estás atrapado en esa clase de
situación repleta de presiones? ¿Qué decisiones puedes tomar que prevengan esa situación?
La presión de tus amigos puede, por supuesto, impulsarte en la dirección correcta.
Puede ser una gran ayuda para vivir como Dios quiere. Como lo expresó cierto muchacho:
“Sé que mis amigos tienen una gran influencia sobre quién soy y en mi escala de valores.
Los amigos cristianos pueden brindar verdadero aliento cuando estoy luchando por hacer lo
bueno”. Si quieres la clase apropiada de presión de tus amigos, tienes que tener los amigos
apropiados.
Esas palabras de Proverbios que leíste contienen dos consejos provechosos. Primero, te
advierten claramente contra el peligro de caer en malas compañías. A veces tienes que
apartarte corriendo de la gente inapropiada, por más divertidos que parezcan. Segundo, te
ofrecen aliento sobre el valor de estar en buena compañía. Tienes que buscar amigos que
piensan como tú. Sea tu meta buscar la amistad de los que comparten tu convicción de lo
que es bueno y de lo que es malo.
Te guste o no, tiendes a parecerte a la gente con la cual andas. Así que aférrate a la
sabiduría de Dios. ¡Haz que tus amigos más cercanos sean el tipo de personas que quieres
ser tú!

PARA DIALOGAR: ¿De qué manera


están influyendo tus amigos tu formación?
¿A quién te puedes acercar que te pueda
impulsar en la dirección correcta?

PARA ORAR: Señor, danos sabiduría al


escoger nuestros amigos. Queremos que
sean amigos que nos ayuden a seguirte a ti.

PARA HACER: Sé hoy un gran amigo.


Estimula a alguien a tomar una decisión
correcta.

SEPTIEMBRE

19 Superamigo
Lectura bíblica: Proverbios 18:24
Hay amigos que uno tiene para su propio
mal, pero hay un amigo que es más fiel que
un hermano. Proverbios 18:24

Marisa se siente rechazada. Ella y Victoria fueron mejores amigas todo el verano. Se
hicieron muy amigas en un campamento. Después, pasaban la noche a veces en la casa de
una y otras veces en la casa de la otra. En la Escuela Bíblica de Vacaciones eran
inseparables.
Pero cuando se acabó el verano, su amistad se fue a pique. En la escuela, la iglesia, el
club o de paseo con otras chicas, Victoria trataba a Marisa como si no la conociera.
No todos los amigos se portan mal como Victoria. Si alguna vez te ha pasado lo que le
pasó a Marisa, sabes lo maravilloso que es tener un amigo del que puedes depender. Por
más maravillosas que sean algunas amistades humanas, contamos con una amistad tan
absoluta que sobrepasa y sobrevive a todas las demás. Es nuestra amistad con Jesucristo
quien ha prometido estar con nosotros para siempre (ver Mateo 28:20).
Tema para comentar: ¿Cómo es que Jesús es el amigo perfecto? ¿En qué sentido es
distinta la amistad que él ofrece a cualquier amistad con un amigo cristiano o un familiar?
Fíjate en estas verdades acerca de tu amigo perfecto:
Jesús es un amigo de tiempo completo. Siempre está a tu disposición. No te trata de una
manera cuando están solos y de otra manera cuando están con otros.
Jesús es un amigo incondicional. Siempre te perdona cuando le fallas. Se aferra a ti no
importa lo que pase en tu vida.
Jesús es un amigo de quien puedes depender. No tienes que temer que se burle de ti,
que te abandone o que cuente tus secretos. Y sus promesas son aún más seguras que el
hecho de que el sol saldrá mañana.
Jesús es un amigo profundo. Nunca es superficial ni trivial. Quiere una relación contigo
que te cambie la vida. Te trata con amor y respeto cuando le abres tu corazón. ¡Demuestra
un amor intenso y personal por ti!
Cuando Jesús caminó en la tierra, no era rígido ni orgulloso. La gente común no se
cohibía cuando se acercaba. No tienes que hacerte el superespiritual para que te dé su
atención. Sé con él tal cual eres, y él será contigo tal cual es.
En Jesús tienes un gran amigo incondicional y fiel. Cultiva tu amistad con él todos los
días, y tendrás la clase de amor que dura para siempre.

PARA DIALOGAR: ¿Has hecho de


Jesús tu mejor amigo? ¿De qué manera
notas que eso afecta tu diario vivir?

PARA ORAR: Señor Jesús, haz que


nuestra amistad contigo sea la mejor y más
importante amistad de todas.
PARA HACER: ¿Sucede alguna vez que
tu amistad con otras personas te quita
tiempo para tu amistad con Jesús? ¿Te
gustaría dedicarle algo de tiempo hoy?

SEPTIEMBRE

20 Libre de soledad
Lectura bíblica: Colosenses 3:12–15

Vestíos de profunda compasión, de


benignidad, de humildad, de mansedumbre y
de paciencia. Colosenses 3:12

Cuando Ignacio pasó de la primaria a la secundaria, los amigos de la primaria se


desparramaron por distintas escuelas. Rara vez los veía y su única esperanza de verlos era
después de la escuela, pero aun así, ya no se sentía cerca de ellos porque tenían cada vez
menos en común. Se sentía cada vez más distanciado de ellos y no encontraba nuevos
amigos. Ignacio empezó a sentir que su soledad era una condena a cadena perpetua.
Aun si nunca tuviste que cambiar de escuela, quizá has estado en alguna situación fea
en que te sentiste como Ignacio. Pensaste: Nunca tendré amigos de verdad. O pensaste:
Supongo que no merezco que nadie me quiera.
No tienes por qué quedarte atrapado en tu soledad. Aunque te sientes condenado a
cadena perpetua, puedes librarte de tu “condena” y vivir en un mundo de buenos amigos.
Tema para comentar: ¿En qué ocasiones te has sentido solo? ¿Qué hiciste para resolver
tu situación?
La próxima vez que estés atrapado en un cárcel sin amigos, sigue estas sugerencias:
Examínate honestamente. Examina honestamente tu vida. ¿Estás haciendo algo que
causa que los demás se alejen de ti?
Consigue ayuda. No tienes que anotarte para tomar lecciones sobre cómo ser
encantadora o cómo ser irresistible, pero eso no quiere decir que no te puedas apoyar en
alguien para que te muestre el camino. Ignacio se encontró con que su hermano mayor
podía darle algunos consejos que lo ayudaron a mejorar como amigo. Y su apoyo lo ayudó
a saber que no estaba enfrentando solo su problema.
Sé realista. Tratar de adaptarte al grupo de chicos populares por lo general te hace sentir
peor. ¡Determina si estás buscando un amigo o que te crean “alguien”!
Sé amistoso. La cuestión no es tanto conseguir amigos como ser amigo. Ignacio decidió
concentrarse en ser afectuoso con los demás en lugar de tratar de convencer a todos para
que fueran afectuosos con él.
Ignacio encontró nuevos amigos cuando empezó a acercarse a otros que habían sido
marginados. Resultó ser que estos chicos que había considerado fracasados habían sido tan
injustamente marginados como él. Sus nuevas amistades no surgieron de la noche a la
mañana. Pero fueron posible porque Ignacio tomó pasos pequeños y planeados hacia la
formación de nuevas amistades.

PARA DIALOGAR: ¿Qué tal te va con


tus amistades? ¿Cómo puedes obtener
amigos por ser un amigo?

PARA ORAR: Señor Jesús, ayúdanos a


ser la clase de amigos que has sido tú con
nosotros.

PARA HACER: A la mayoría le gustaría


tener más amigos. ¿Qué te gustaría hacer
hoy para ser un mejor amigo para alguien?

SEPTIEMBRE

21 Esto es amor
Lectura bíblica: Deuteronomio 28:1–6

Y sucederá que si escuchas diligentemente


la voz de Jehovah tu Dios, procurando
poner por obra todos sus mandamientos que
yo te mando hoy… bendito serás al entrar, y
bendito al salir. Deuteronomio 28:1, 6

Cecilia era responsable de hacer ciertas tareas en su casa, pero esa semana no las había
hecho. Y cuando sus padres le dijeron que tenía que terminarlas el sábado a la mañana —
antes de que empezara a hacer ninguna otra cosa— se puso insolente. Sus padres le
explicaron con calma que si ella no podía ayudar con las tareas de la casa esa mañana, ellos
no podían dejarla ir a la casa de su amiga esa tarde.
A Cecilia no le hizo gracia tal razonamiento. Miró con rabia a sus padres. Y les gritó:
—¡Si de veras me quisieran, me dejarían hacer lo que quiero!
Tema para comentar: Cuando alguien te hace obedecer alguna regla, ¿es bueno eso?
¿De qué manera nos demuestra amor el hecho de exigirnos hacer lo que es bueno?
No tienes que buscar lejos para encontrar chicos que no entienden que hay una relación
entre las reglas y el cariño. No sólo tienen problemas con que sus padres o maestros tengan
reglas. Creen que Dios debe ser un señor horrible por habernos dado un libro con tantas
órdenes. Razonan una de dos cosas:
(a) Si Dios me amara, no me exigiría que siga ninguna regla.
(b) Si Dios tiene reglas que espera que obedezca, no puede ser que me ame.

Esos chicos están confundidos. El amor es lo que motiva las reglas que Dios establece.
La introducción al segundo mandamiento aclara desde el principio: “Porque yo soy Jehovah
tu Dios,… muestro misericordia por mil generaciones a los que me aman y guardan mis
mandamientos” (Éxodo 20:5, 6).
Cuando Dios dio la ley, dijo que era “para tu bien” (Deuteronomio 10:13). Su propósito
era sustentar y proteger a su pueblo. Su meta al dar su ley era asegurar nuestra prosperidad
y nuestro gozo, y evitarnos sinsabores y sufrimientos.
Todas las reglas de Dios demuestran el amor de Dios también de otra manera. Son una
señal del amor de Dios porque nos indican cómo disfrutar del amor. Todo el propósito de
los Diez Mandamientos y otros mandatos bíblicos es explicar exactamente cómo es el
amor, y evitar los conflictos con los demás.
Quizá las palabras del rey David lo resumen mejor. Tenía un concepto increíble de las
reglas de Dios: “¡Cuánto amo tu ley!… más que el oro, más que el oro puro” (Salmo
119:97, 127). ¡Dios nos dio sus mandatos llenos de amor porque nos ama!

PARA DIALOGAR: ¿No te parece


maravilloso que Dios te ama tanto que te da
lo que necesitas para amarlo a él y amar a
otros?

PARA ORAR: Expresa tu gratitud a


Dios por la sabiduría de su amor.

PARA HACER: Dedica hoy un


momento para adorar al Dios que dio los
mandatos bíblicos.

SEPTIEMBRE
22 ¿Vale hoy el
Antiguo
Testamento?
Lectura bíblica: 1 Juan 2:7–11

Amados, no os escribo un mandamiento


nuevo sino el mandamiento antiguo que
teníais desde el principio… este es mi
mandamiento: que os améis los unos a los
otros. 1 Juan 2:7; Juan 15:12

Los padres de Alejandro le compraron una regla que tenía impresa los nombres de todos
los libros de la Biblia. En el campamento de la iglesia hasta aprendió un canto con todos los
nombres. Pero sigue estancándose allí por Abdías. Y lo peor es que no sabe qué tiene de
malo eso.
Tema para comentar: La primera parte de la Biblia, ¿tiene alguna importancia en la
actualidad?
¡Sí! Jesús dijo: “No penséis que he venido para abrogar la Ley o los Profetas. No he
venido para abrogar, sino para cumplir” (Mateo 5:17).
Los Diez Mandamientos, por ejemplo, nos enseñan cosas que debemos hacer por amor,
y cosas sin amor para evitar, en nuestra relación con Dios y con los demás:
1. No tendrás otros dioses delante de mí indica que tu amor a Dios debe ser puro, sin
competir con otras personas, cosas o ideas.
2. No te harás imagen de ningún tipo te indica que enfoques tu dedicación en Dios
mismo, no en objetos religiosos ni en dioses falsos.
3. No tomarás en vano el nombre de Jehovah tu Dios indica que tu lealtad a Dios
incluye respeto por su persona y por su nombre.
4. Acuérdate del día del sábado para santificarlo te indica que debes honrar a Dios
dedicando un tiempo semanal para adorarlo y para descansar.
5. Honra a tu padre y a tu madre te indica que expreses tu cariño por tus padres
respetándolos y obedeciéndolos.
6. No cometerás homicidio te indica que debes amar a tus prójimos por medio de
considerar de inmenso valor la vida humana.
7. No cometerás adulterio te indica que seas fiel y te conserves puro para tu cónyuge o
para tu futuro cónyuge.
8. No robarás te indica que demuestres tu amor a otros respetando sus pertenencias.
9. No darás falso testimonio contra tu prójimo te indica que demuestres amor por
medio de la honestidad y veracidad.
10. No codiciarás te indica que tu amor por tu prójimo debe centrarse en lo que puedes
dar a otros en lugar de lo puedes hacer para obtener lo que les pertenece a ellos.
Dios no quiere que tengamos que andar adivinando cómo se expresa el amor. Lo
explica claramente en sus mandamiento. ¡Tenemos un Dios que tiene un amor increíble!
PARA DIALOGAR: ¿Qué provecho te
brinda el Antiguo Testamento?

PARA ORAR: Señor, enséñanos lo


bueno y lo malo por medio de tus mandatos
que nunca cambian.

PARA HACER: Memoriza los nombres


de los libros del Antiguo Testamento o los
Diez Mandamientos.

SEPTIEMBRE

23 La gracia es
suficiente, ¿o no?
Lectura bíblica: Hebreos 10:1–10

La ley es sólo una sombra de los bienes


venideros y no la presencia misma de estas
realidades. Hebreos 10:1 (NVI)

Nora estaba confundida. Tenía el ceño fruncido y una expresión en su rostro que más
bien parecía un gigantesco signo de interrogación. Ella no era la única en la clase de la
Escuela Dominical que parecía perdida.
—Algunas de estas cosas del Antiguo Testamento son de lo más raras —le dijo al
maestro—. Lo que yo quiero saber es que si como cristianos se supone que también
tenemos que obedecer al Antiguo Testamento, ¿o no?
—Bueno, empecemos con la diferencia principal —sugirió el maestro—. Habrás notado
que los cristianos no siguen la práctica del Antiguo Testamento de sacrificar animales para
estar bien con Dios.
—Sí —respondió ella, asintiendo con la cabeza—. Nadie me dijo que trajera una vaca o
una paloma al templo y que la dejara aquí. Pero, ¿por qué le dijo Dios a su pueblo que
sacrificaran animales? Y si los animales reconciliaban al pueblo con Dios en el Antiguo
Testamento, ¿por qué tuvo que morir Jesús?
El maestro explicó que en el Antiguo Testamento el pueblo de Dios ofrecía granos, por
ejemplo, de trigo, aves y animales como un acto de adoración. Y una vez por año
celebraban un sacrificio muy, pero muy especial el día de la Expiación (ver Levítico 23:28).
Pero estos sacrificios tenían que repetirse un año tras otro, porque no limpiaban totalmente
al pueblo de sus pecados. Los que adoraban a Dios seguían sintiéndose culpables. Sabían
que necesitaban algo más.
Jesús fue ese “algo más”. Cuando Jesús vino al mundo, anuló los sacrificios de la fe del
Antiguo Testamento al pagar la pena por nuestros pecados una vez para siempre.
Cuando murió Jesús, hizo por nosotros lo que nosotros no podemos hacer por nosotros
mismos. Como cristianos, confiamos en Jesús como el pago de Dios por nuestros pecados.
Su muerte en la cruz significa que no necesitamos complacer a Dios tratando de ser
perfectos. Ni pagando por nuestros pecados con nuestra propia vida. Ni derramando la
sangre de animales.
Algunas veces, como creyentes, quisiéramos acelerar el Antiguo Testamento y
concentrarnos directamente en Jesús. Pero todo el Antiguo Testamento fue escrito para
enseñarnos (ver 1 Corintios 10:11). Y los sacrificios de la época del Antiguo Testamento
son una representación de cómo Jesús sacrificaría su vida para darnos perdón. Dios usó
cientos de años de sacrificios para pintarnos un cuadro de lo horrible que es el pecado y la
profunda necesidad que el ser humano tiene de un verdadero Salvador. ¡Seguramente Dios
cree que esas son lecciones importantes que debemos aprender!

PARA DIALOGAR: ¿De qué manera


fue Jesús un sacrificio mejor que el de
animales?

PARA ORAR: Señor, te damos gracias


por tu amor que nunca cambia. Gracias por
darnos a Jesús como el sacrificio perfecto y
completo por nuestros pecados.

PARA HACER: Determina una manera


de explicarle a un amigo la relación de los
sacrificios del Antiguo Testamento con lo
que Jesús hizo por nosotros.

SEPTIEMBRE

24 Un poco de
descanso y
relajación
Lectura bíblica: Mateo 6:19–24

No podéis servir a Dios y a las riquezas.


Mateo 6:24

—Está bien, entiendo que no puedo quitarle la primera parte a mi Biblia ni los
mandatos que contiene —dijo Nora—. Pero mire los Diez Mandamientos. Una amiga
creyente y yo tuvimos una discusión tremenda sobre el cuarto mandamiento, ese de
acordarse del sábado para santificarlo. ¿Eso quiere decir que si hago mis tareas escolares el
domingo estoy pecando? ¿O si hago trabajar a otro porque como en un restaurante el
domingo o porque miro la TV los domingos a la tarde? Mi amiga afirma que la Biblia dice
que no podemos trabajar los domingos ni siquiera para hacer las tareas escolares.
Aquí va la primera mitad de la respuesta. Los cristianos de la actualidad no están
obligados a seguir la ley del sábado del Antiguo Testamento. De hecho, es el único de los
Diez Mandamientos que no se repite en el Nuevo Testamento. Seguir esa ley significaría
paralizar todo trabajo desde la puesta del sol el viernes hasta la puesta del sol el sábado. Ese
es el sábado judío.
Pero aquí va la segunda mitad de la respuesta. Los cristianos primitivos siguieron
observando el principio moral en que se basa la ley al reservar el primer día de la semana
—el domingo— para descansar y adorar a Dios (ver Hechos 20:7; 1 Corintios 16:2;
Apocalipsis 1:10).
Ahora, junta esas dos partes: No tienes que obedecer la ley del sábado del Antiguo
Testamento, pero debes reservar un día por semana para descansar y adorar a Dios (ver
Hebreos 10:25).
El domingo da resultado porque es el día cuando se llevan a cabo la mayoría de los
cultos cristianos. Los creyentes que están obligados a trabajar los domingos deben dedicar
parte del domingo o de otro día para adorar al Señor y descansar. Pueden concurrir a los
cultos los sábados de noche que ahora realizan muchas iglesias.
Y esa no es una idea que es buena únicamente para los mayores. Si eres estudiante, la
escuela es tu trabajo. En este caso, Dios quiere que veas cómo puedes hacer para que tus
tareas escolares no interfieran con tu tiempo de adoración y descanso que Dios te quiere
dar.
Ahora bien, quizá estés inquieto por esos jugadores de fútbol que están obligados a
trabajar los domingos porque tú quieres acomodarte en el sillón para ver un buen partido.
Bueno, no pecas por mirar partidos de fútbol, o por correr por el patio, o por comer en un
restaurante o por comprar algo los domingos. Si los que te atienden quieren obedecer a
Dios, escogerán otro día a la semana para descansar y adorar a Dios. Si no lo hacen, es
decisión de ellos, no tuya.
Dios quiere que tengas la experiencia de enfocarte en él de una manera especial un día
por semana. También quiere que tengas un descanso. ¡Y esa adoración y ese descanso son
un regalo que te hace a ti!

PARA DIALOGAR: ¿Qué opinas de


un Dios que quiere que te tomes un tiempo
cada semana para descansar y adorarlo?
¿Qué te parece ese regalo cariñoso que te
da?

PARA ORAR: Señor, gracias porque nos


amas tanto que quieres que descansemos y
te adoremos.

PARA HACER: ¿Qué hacen ustedes


como familia para hacer del domingo (u otro
día) un día de adoración y descanso?

SEPTIEMBRE

25 Muy cerca y
personal
Lectura bíblica: Santiago 4:7–10

Acercaos a Dios, y él se acercará a


vosotros. Santiago 4:8

¿Qué te gustaría hacer para estar aún más cerca de Dios de lo que estás ahora?
(a) remontarte en un avión de caza a una altura de 25.000 metros
(b) escalar el monte Everest
(c) tener zancos soldados para siempre a tus pies.

Hablando en serio, acercarse a Dios no tiene que ver con acercarte físicamente al cielo.
Tu meta es acercarte relacionalmente. Este es un gran anhelo. En realidad, el hecho de estar
interesado en acercarte en una relación personal con Dios es un paso en la dirección
correcta.
Tema para comentar: ¿Qué intentos reales has hecho para acercarte a Dios? ¿Cuáles te
dieron mejores resultados? ¿Cuáles no?
Cuando quieres estar más cerca de Dios, aquí van tres cosas buenísimas para probar:
Primero, piensa lo acertado acerca de Dios. No cabe duda de que Dios quiere ser tu
amigo increíblemente cercano. Aún más de lo cerca que quieres estar tú de él, quiere estar
él de ti. Por eso, si alguna vez te preocupas de que Dios no se interesa por ti, sácate
enseguida esas ideas de la cabeza. No proceden de Dios. Él te ama y se acerca a ti todo lo
que lo tú dejas acercarse.
Segundo, dedícale tiempo a Dios. Esto lo logras con las actividades esenciales que son
leer su Palabra y hablar con él en oración. Así que lee su libro. Cuéntale tus temores y
esperanzas. Agradécele por amarte y querer ser tu amigo cercano. Confiésale tus pecados y
pídele que te ayude a quedarte cerquita de él al hacer las cosas que le agradan.
Tercero, dedícale tiempo a las personas que le dedican tiempo a Dios. Te acercas a
Dios por medio de la adoración: cantando alabanzas a Dios con otros creyentes, hablando
con él, pensando en él, recordando cuánto te ama, acordándote de lo que Cristo hizo por ti y
aprendiendo más de su Palabra al estudiarla con otros creyentes.
Tienes la clave en la sencillas palabras de Santiago: “Acercaos a Dios, y él se acercará a
vosotros” (Santiago 4:8). Con cada paso que tomas hacia Dios, él toma uno gigantesco
hacia ti. No puedes lograr estar más cerca de Dios por incluir unas pocas cosas “cristianas”
en tu vida. ¡Puedes acercarte más a él al tener una relación con Dios llena de propósito y
pidiéndole ayuda para poder conocerlo mejor!

PARA DIALOGAR: ¿De qué manera


estás tratando de acercarte más a Dios?
¿Hay algo que necesitas cambiar?

PARA ORAR: Señor, gracias porque


quieres ser mi amigo increíblemente
cercano.

PARA HACER: ¿Cuál es la cosa que


quieres hacer hoy para acercarte más a
Dios?

SEPTIEMBRE

26 No mientas
Lectura bíblica: Efesios 4:25

Por lo tanto, habiendo dejado la mentira,


hablad la verdad cada uno con su prójimo.
Efesios 4:25
Antonio estaba confundido. Creía que Julio y yo éramos amigos, pensaba. Si no quiere
jugar, debiera decírmelo. Es la cuarta vez que me dice que falleció su tía Beatriz y que
tiene que ir a su entierro.
Tema para comentar: ¿Tienes amigos que presentan excusas en lugar de decirte la
verdad? ¿O que dicen mentiritas para esquivarse de hacer lo que no quieren hacer?
Julio podía haberle dicho a Antonio: “No tengo ganas de jugar”. O podría haber
hablado sinceramente y decirle: “Prefiero no jugar porque siempre desordenas mi cuarto y
después no ordenas nada, y no me gusta tener líos con mi mamá”. O podía haber sido
absolutamente directo y decir: “Mira, la última vez que viniste atropellaste a mi perro con
tu bici y pusiste tan nervioso a mi gato que se le cayó el pelo a los cinco minutos que te
fuiste. ¡No me llames más!”.
Quizá puedas identificarte con Julio. Si tienes un amigo como Antonio, quizá te
preguntes si no está bien decir alguna vez una mentirita. Pero eso sería igual que preguntar:
“¿Qué tiene de malo si alguna vez pongo la mano en el fuego?” o “¿Qué tiene de malo si
alguna vez me pongo en las vías cuando viene un tren a toda velocidad?” o “¿Qué tiene de
malo comerme alguna vez el veneno para las ratas?”.
Decir la verdad es una de esas cosas absolutas, que siempre es correcto hacer. Es así
porque Dios siempre dice la verdad. Nunca es correcto ni bueno mentir. Ni siquiera alguna
vez. Ni siquiera un poquito.
A veces puede ser difícil decir la verdad. Pero hacer lo bueno es siempre bueno, aunque
no sea siempre fácil.
A la larga, vivir de la manera que quiere Dios es mejor para ti y para todos. Aunque no
lo creas, los que te rodean quieren que seas veraz con ellos. Si dices la verdad aun cuando
te resulte difícil, los demás se quedarán admirados. Tus amigos, compañeros de escuela,
familiares y vecinos creerán lo que dices.
Seguro, habrá ocasiones en que tendrás que decir: “No puedo contestar eso”, o
“Prefiero no decirlo”. O quizá tengas que decirle a alguien simplemente: “Gracias por el
regalo” sin decirle que no te gusta el color. Hazte la regla personal de siempre decir la
verdad, pero decirla con amor (ver Efesios 4:15). Es muy probable que tu dedicación a
decir la verdad motivará a otros a tu alrededor a ser también veraces.

PARA DIALOGAR: ¿Qué tal te va


como chico veraz? ¿De qué manera puedes
ser honesto y amable al mismo tiempo?

PARA ORAR: Señor, tú eres siempre


completamente honesto con nosotros, pero
eres también completamente amable.
Ayúdanos a hablar tan sabiamente como
hablas tú.

PARA HACER: Quizá te sientas


perdido en una telaraña de mentiras que has
estado diciendo por mucho tiempo. ¡Hoy
puedes empezar a ser veraz!
SEPTIEMBRE

27 A la basura con la
basura
Lectura bíblica: Filipenses 4:8

Todo lo que es verdadero, todo lo


honorable, todo lo justo, todo lo puro, todo
lo amable, todo lo que es de buen nombre, si
hay virtud alguna, si hay algo que merece
alabanza, en esto pensad. Filipenses 4:8

Boris, un tábano grande y negro, se estaba muriendo de hambre. Volaba ansioso


alrededor de la casa pegándose contra los vidrios y buscando un agujero por donde meterse.
Quería entrar para darse un banquetazo con las sobras y migas en la cocina. Pero la casa
estaba toda cerrada y con llave, y el tábano hambriento se estaba desesperando.
Al dar otra vuelta alrededor de la casa, Boris vio el recipiente de la basura en el patio
del fondo. Acercándose, casi se desmaya de alegría. En el pasto, al lado del recipiente,
había un pedazo grande de mortadela mohosa que alguien había tirado. Boris se fue en
picada aterrizando sobre el manjar y empezó a comerlo. Estaba delicioso, así que comió
hasta hartarse. Aun cuando sentía que no le entraba más, seguía mastica que te mastica.
Cuando Boris intentó remontar vuelo, estaba demasiado hinchado para despegar.
Aceleró las alas a su velocidad máxima, pero todavía estaba demasiado pesado para volar.
Necesitaba algo que lo impulsara en el aire. Mirando alrededor del patio vio una cortadora
de césped. Arrastrándose pesadamente llegó hasta la cortadora y empezó a trepar la rueda
hasta el motor, luego por el largo brazo hasta el mango. Pensó: Ahora puedo saltar y las
alas pueden hacerse cargo y llevarme volando a casa.
Otra vez Boris aceleró sus alas a toda marcha y dio un paso adelante al vacío. Todavía
estaba demasiado pesado así que cayó como un bólido estrellándose contra el cemento. El
pensamiento final de Boris fue: es desastroso querer volar cuando uno se ha llenado de
basura.
¡Pobre Boris!
El pobre Boris es prueba de que nada bueno resulta de llenarnos de basura.
Eso se aplica especialmente a la basura que puedes sentirte tentado a poner en tu
cabeza.
No está mal mirar televisión, escuchar música o mirar videocintas. Pero Dios quiere que
tengas discernimiento en cuanto a lo que los medios quieren meterte en la cabeza. Éstos
sirven mucha basura en los programas de TV, las videocintas y la música popular en
nuestra cultura. Y, como Boris, los que se alimentan de basura al final se estrellan.
Tú sabes qué medios son tan perjudiciales para tu mente como lo son una mortadela
podrida o un pan mohoso para tu estómago. Nunca se te ocurriría comer un plato de basura,
entonces ¡piensa qué importante es ser cuidadoso con lo que miras y escuchas!

PARA DIALOGAR: ¿Qué estás


poniendo en tu cabeza estos días? ¿Es bueno
para ti?

PARA ORAR: Señor, danos tu sabiduría


al pensar en los medios que consumimos.
Ayúdanos a vigilar nuestra mente.

PARA HACER: ¿Te hace falta cambiar


el tipo de medio que consumes? ¡Decídete
hoy!

SEPTIEMBRE

28 Arrastrado en la
cloaca
Lectura bíblica: Santiago 1:12–16

Pero cada uno es tentado cuando es


arrastrado y seducido por su propia pasión.
Santiago 1:14

—A mí me parece fascinante —dijo Betty en voz baja—. Quiero ver qué se siente
cuando uno fuma.
Jazmín sabía que su prima Betty fumaba. El verano pasado, cuando se había quedado en
la casa de Betty, ésta le mostró unos cigarrillos y encendió uno. Cuando Jazmín la amenazó
con contarle a los padres de ella, y con no volver a pasar la noche en su casa, Betty
prometió que no volvería a sacar los cigarrillos. Cumplió su promesa y Jazmín nunca le
contó a su tía ni a su tío, ni a sus propios padres. Pero ahora Betty estaba hablando de fumar
marihuana.
La curiosidad puede ser como un cocodrilo suelto en las cloacas de una gran ciudad. Ni
te das cuenta que anda por allí. Pero de pronto se trepa por el drenaje, te toma del pescuezo
y te arrastra hacia abajo al mundo oscuro y sucio donde vive. Y esta bestia no es producto
de tu imaginación.
La curiosidad puede ser una bendición o un pesadilla. Hay un mundo entero de cosas
buenas para despertar tu curiosidad. Puedes tener curiosidad por saber qué tal sería cierta
profesión, y te pones a explorarla. Te preguntas cómo será ir navegar en balsa los rápidos
de un río, y vas y pruebas.
Pero con frecuencia las cosas que más nos despiertan la curiosidad son las cosas que
Dios dice que no debemos hacer. Dios dice que nos harían daño, pero no le creemos. Dios
dice que están prohibidas, pero nos pasamos el tiempo imaginándonos lo que sería
participar de esas cosas.
Es entonces que, de pronto, la curiosidad se convierte en tentación. Santiago explica
cómo sucede: “Pero cada uno es tentado cuando es arrastrado y seducido por su propia
pasión. Luego esa pasión, después de haber concebido, da a luz el pecado; y el pecado, una
vez llevado a cabo, engendra la muerte” (Santiago 1:14, 15). Tan seguro como dejar que un
cocodrilo viva en las cloacas acabará con convertirte en la comida de un cocodrilo
hambriento, dejar que los deseos equivocados aumenten te arrastrará a las profundidades
del pecado.
Sigue estas dos sugerencias cuando notas que quieres hacer lo que no debes:
• Encara inmediatamente tu curiosidad. Si deseas algo inapropiado, háblale a Dios
sobre el asunto antes de que ello tenga oportunidad de morderte.
• Rodéate de amigos que comparten tu escala de valores. Prométanse que se
ayudarán a volver en sí cuando algún deseo los lleve a situaciones peligrosas.
Tu curiosidad es uno de los dones más grandes de Dios para ti. Pero tienes que
mantenerte en guardia cuando tu curiosidad te provoca a desear cosas malas. ¡Dios tiene
cosas mejores reservadas para ti!

PARA DIALOGAR: ¿En qué sentido


puede la curiosidad arrastrarte a lugares que
no debes ir? ¿De qué manera puedes luchar
contra eso?

PARA ORAR: Señor, queremos lo


bueno. Enciende nuestro deseo de ti y de
todo lo bueno.

PARA HACER: ¿Con quién puedes


hablar cuando la tentación de hacer lo malo
se va haciendo más fuerte? Busca un amigo
que te pueda ayudar a vigilar tu corazón.
SEPTIEMBRE

29 Una actitud de
gratitud
Lectura bíblica: Éxodo 20:17

No codiciarás la casa de tu prójimo; no


codiciarás… cosa alguna que sea de tu
prójimo. Éxodo 20:17

Carlos tiene una patineta de calidad profesional. Beatriz tiene un perro de pura raza.
Yoli tiene su propia TV y su propio teléfono. Francisco tiene un sistema de sonido tan
fuerte como para romper los vidrios de las casas a su alrededor. ¿Y Lito? Él lo quiere todo.
La crisis de querer lo que todos los demás tienen no es nueva. Ya en el tiempo cuando
dio los Diez Mandamientos, Dios sabía muy bien lo que era ansiar cosas. De hecho, él
pensó que tener que encarar los deseos era un tema bastante grande como para merecer su
propio mandamiento. Es el décimo.
Los otros nueve mandamientos tienen que ver con acciones hacia Dios y el prójimo. El
que tiene que ver con los deseos enfoca una actitud, las cosas que queremos.
En el décimo mandamiento, Dios nos dice que no “codiciemos”. Esta es una palabrita
rara. Pero significa tener un gran deseo de poseer algo que pertenece a otra persona.
Codiciar no es sólo que te guste algo. Es sufrir porque no lo tienes, y estar dispuesto a hacer
lo que sea para conseguirlo.
Dios reconoció un montón de tipos de cosas que nos volverían locos de deseos, cosas
que codiciaríamos. Listó casas y cónyuges ajenos, siervos y animales, y lo que todo lo
incluye: “ni cosa alguna que sea de tu prójimo”.
Quizá no quieras la casa de un amigo. (O quizá sí, la que tiene una piscina). Pero tus
amigos pueden tener muchas cosas más pequeñas que tú quieres. Y no importa si las cosas
son de tu vecino de al lado o del señor millonario. Si te mueres de deseo de tener algo que
no tienes, estás codiciando.
Existe un solo remedio para la codicia. Es el contentamiento. Es desarrollar una actitud
de gratitud por lo que ya tienes, sea poco o mucho.
¿Te suena imposible? No lo es.
Escucha como Pablo se las arregló para ser feliz con lo que tenía. Escribió: “He
aprendido a contentarme con lo que tengo. Sé vivir en la pobreza, y sé vivir en la
abundancia. En todo lugar y en todas las circunstancias, he aprendido el secreto de hacer
frente tanto a la hartura como al hambre, tanto a la abundancia como a la necesidad”
(Filipenses 4:11, 12). Eso es contentamiento.
Tener muchas cosas puede o no ser la voluntad de Dios para ti. Pero ser agradecido
siempre está dentro de los planes de Dios cuando perteneces a Cristo Jesús (ver 1
Tesalonicenses 5:18). ¿Tienes una actitud de gratitud?

PARA DIALOGAR: ¿En qué ocasión


han querido algo desesperadamente? ¿Cómo
pueden alentarse mutuamente para no querer
tanto?

PARA ORAR: Señor, queremos muchas


cosas. Pero realmente queremos desear
únicamente las cosas que tú quieres para
nosotros, a tu manera y a tu tiempo.

PARA HACER: ¡Prepara una lista de las


cosas por las cuales estás agradecido!
¡Pégala donde la puedas ver!

SEPTIEMBRE

30 Consigue amigos
que te ayuden
Lectura bíblica: 2 Timoteo 2:20–22

Huye, pues, de las pasiones juveniles. 2


Timoteo 2:22

Tú y tus amigos notan al chico nuevo en la reunión juvenil semanal. Pero nadie se le
acerca para saludarlo. Lo que hacen es quedarse en grupo al otro lado del salón,
ignorándolo. Te remuerde un poquitito la conciencia, la que te dice que te acerques y le
hables, pero no te cuesta ningún trabajo descartar esa idea.
¿Cuál de los siguientes pensamientos te pueden impedir ser amistoso?

☐ Se las puede arreglar solo. Como tuve que hacerlo yo cuando empecé a venir.
☐ Soy una chica. Los que deberían hablar con él son los muchachos.
☐ Soy un muchacho. Las que deberían hablar con él son las chicas.
☐ Parece un nene de mamá.
☐ Yo no lo invité. No es asunto mío. Es asunto del que lo invitó.

Di la verdad: Un par de estas excusas son dudosas. La mayoría son pésimas.


Es muy posible que después de este episodio de pura antipatía tendrás más
remordimientos. Camino a casa te sentirás mal por un rato porque el chico nuevo no pudo
integrar tu círculo. Quizá era un hermano creyente que realmente necesitaba un amigo esa
noche. O quizá era un chico que no conoce a Jesús, y ahora ustedes los creyentes lo
enfriaron completamente.
Lo que necesitabas era un empujoncito en la dirección correcta en el momento preciso.
Ahora es demasiado tarde.
Tema para comentar: ¿Cómo te hubiera podido ayudar en esa situación un amigo
decidido a hacer lo bueno?
La Biblia nos cuenta del tipo de amigos que pueden ayudar. Los puedes llamar “amigos
estilo 2 Timoteo 2:22”. Los amigos identificados al final de este versículo ayudan a dejar el
mal (huye de él) y a correr tras los bueno (busca y sigue buscando amigos que reflejen el
buen carácter de Dios). ¿No te parece que sería mucho más divertido escoger lo bueno con
amigos a tu alrededor que te ayuden?
Si estás buscando ayuda para vivir como un creyente, entonces los amigos estilo 2
Timoteo 2:22 son los amigos con que puedes contar para que te impulsen en la dirección
correcta. Ellos te ayudarán a demostrar las actitudes y acciones que Dios dice que son las
mejores. Tú eres el que tiene que tomar tus propias decisiones, ¡pero los buenos amigos te
pueden ayudar a tomar decisiones correctas!

PARA DIALOGAR: ¿De qué manera


te pueden ayudar día a día los amigos estilo
2 Timoteo 2:22? ¿Cuentas con amigos que
te ayudan a tomar buenas decisiones,
incluyendo las decisiones relacionadas con
más amigos? Si no, ¿cómo podrías
conseguirte algunos?

PARA ORAR: Señor, ayúdanos a


escoger amigos que nos acerquen más a ti.
Queremos amigos que nos ayuden a hacer lo
bueno.

PARA HACER: Dedica hoy tiempo para


estar con tus amigos estilo 2 Timoteo 2:22.
¡O traza planes para conseguirte algunos!
OCTUBRE

1. La tarea más maravillosa del mundo


2. El misionero en el espejo
3. ¿Tienes una meta?
4. Dios rompió tu molde
5. ¡Gracias a Dios por esos codos!
6. Más amor del que te imaginas
7. ¿Una Biblia santa o llena de errores?
8. Apoyados en las promesas de Dios
9. Detalles, detalles
10. Una vida que vale la pena observar
11. Ser amigo de todos
12. El profesional del amor
13. Puedes recurrir al poder del amor
14. Más que “identificarse contigo”
15. Las etapas del dolor
16. Ayuda para superar el dolor
17. Caído, pero no vencido
18. ¡Feliz Día de la Dependencia!
19. Acércate al que te comprende
20. La sabiduría de la locura
21. Adelante, Jesús
22. No depende de lo que tú hagas
23. Ser la mejor clase de amigo
24. A remontarnos sobre la tormenta
25. Divorcio es una mala palabra
26. Bien pegados
27. ¿Dónde está el chiste?
28. Amar a otros… con sinceridad
29. Amar venga lo que venga
30. ¡Acéptalo y disfrútalo!
31. ¿Estás seguro de que estás seguro?

OCTUBRE
1 La tarea más
maravillosa del
mundo
Lectura bíblica: Marcos 16:15–18

Id por todo el mundo y predicad el


evangelio a toda criatura. Marcos 16:15

Todos los días durante los últimos 20 minutos de clase, Nito hace de asistente del
maestro de música. Por lo general ayuda con la papelería, ordena el salón y lleva mensajes
a distintas partes del edificio.
Una tarde a último momento, el maestro llamó a Nito a su escritorio. Enfrente tenía un
fajo de billetes atados con un piolín. Un fajo grande.
—Nito, necesito que hagas algo importante —dijo mientras colocaba los billetes en un
sobre—. Aquí están los $850 que obtuvimos en el festival musical de anoche. Quiero que
los lleves a la Secretaría.
Nito nunca había visto tanto dinero junto. Boquiabierto, asintió con la cabeza y tomó el
sobre. Camino hacia la Secretaría, Nito no pudo menos que sentirse orgulloso de que el
maestro le hubiera confiado este encargo. Sonrió cuando entregó el sobre y le dijo a la
secretaria lo que era.
Tema para comentar: ¿En qué ocasión te ha demostrado alguien que confía en ti; por
ejemplo, pidiéndote que ayudes con una tarea importante? ¿Cómo te hizo sentir?
Es seguro que te gusta que te tomen en serio. La mayoría nos esforzamos todo lo
posible por ser dignos de la tarea como un modo de agradecer a la persona que puso su
confianza en nosotros.
Como cristianos, el Señor nos ha encargado la tarea más importante sobre la tierra. El
Dios del universo tiene un paquete superimportante. Es el mensaje de salvación que sólo
Jesús ofrece. Dios quiere que el paquete sea llevado a todos alrededor de todo el mundo.
¿Adivina a quién encarga que lo entregue? Sí, ¡a ti y a mí!
Uno de los mandatos últimos, más claros y más importantes que Jesús dio a sus
discípulos fue: “Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura” (Marcos
16:15; ver también Mateo 28:18–20). Esta “Gran Comisión” no sólo es una tarea grande.
La responsabilidad de compartir con el mundo la verdad acerca de Jesús es un regalo
grande. Es un privilegio que viene acompañado de la maravillosa promesa de que Jesucristo
siempre estará con nosotros para ayudarnos a cumplir la tarea.
Tu Dios todopoderoso hubiera podido encontrar innumerables maneras de contarle al
mundo acerca de su Hijo. Podía haberlo escrito en las nubes para que todos vieran su
mensaje. Hubiera podido cubrir el planeta con ángeles anunciando a viva voz el mensaje de
Cristo. En cambio, nos confía a nosotros el maravilloso mensaje. Sirve al Señor con alegría.
¡Y sé fiel en entregar el paquete!
PARA DIALOGAR: ¿Cómo te hace
sentir el hecho de que Dios te confió el
mensaje importante de su amor y su verdad?

PARA ORAR: Señor, gracias por


confiarnos las buenas nuevas de tu Hijo para
compartirlas hoy con otros.

PARA HACER: ¿Te gustaría tener una


parte en llevar el mensaje de Dios a todo el
mundo? Traza planes con tu familia para
empezar a hacerlo.

OCTUBRE

2 El misionero en el
espejo
Lectura bíblica: 1 Corintios 9:16

Porque si anuncio el evangelio, no tengo de


qué jactarme, porque me es impuesta
necesidad; pues ¡ay de mí si no anuncio el
evangelio! 1 Corintios 9:16

Nora creía que los misioneros eran señores pasados de moda, chapados a la antigua,
hasta que conoció a Dan Barker. Un domingo a la mañana durante un festival misionero en
la iglesia, Dan hizo arrancar el motor de su motocicleta clásica Harley–Davidson. Avanzó
ruidosamente por el pasillo central para anunciar desde el frente que esa noche presentaría
un mensaje interesante. Esa noche, vestido de ropa de cuero de pies a cabeza, Dan contó
sus experiencias con motociclistas desde Alaska hasta Argentina con quienes había
compartido las nuevas de Jesús.
De pronto, Nora se dio cuenta de que los misioneros podían ser personas fascinantes.
Los misioneros son personas como todas. Pero comprenden el mandato de Cristo a su
seguidores: “Id y haced discípulos a todas las naciones” (Mateo 28:19).
Te convertiste en un misionero en cuanto confiaste en Cristo como tu Salvador. Eso no
significa que tienes tomar el próximo vuelo a Tierra del Fuego. Lo que sí significa es que
dondequiera que vayas y sea lo que sea que hagas, tus palabras y acciones ayudan a los
demás a comprender mejor quién es Jesús.
Quizá te resulte difícil verte a ti mismo como un misionero. Dudas que seas lo
suficientemente bueno, inteligente o espiritual. Si es así, recapacita en lo siguiente:
• Dios te da el poder para hacer lo que te ordena hacer. El Espíritu Santo vive en ti,
por lo tanto, tienes en ti todo lo que necesitas para la tarea.
• Dios no espera que seas perfecto. Eres útil para Dios a pesar de tus fallas y fracasos.
• Dios no te encarga la tarea de ser un misionero aislado. Eres sólo una parte de un
mundo de creyentes. La tarea nos corresponde a todos.
• Dios da los resultados. No depende de ti cambiar el corazón de nadie ni forzar a
nadie a confiar en Cristo. Tú anuncias su mensaje a través de tus palabras y
acciones, y él se hace cargo de los resultados en la vida de cada uno.
Eres enviado por Dios para anunciar las buenas nuevas de Jesucristo vayas donde
vayas. Y has sido elegido como su representante a tus vecinos de al lado, tus compañeros
de escuela y a la gente alrededor del mundo. ¡Qué privilegio maravilloso!

PARA DIALOGAR: ¿Qué te hace


sentir saber que Dios te ha escogido para
que seas su representante?

PARA ORAR: Señor, gracias por


hacernos tus representantes. ¡Ayúdanos a
creer que somos dignos del desafío!

PARA HACER: Habla hoy con alguien


acerca de lo que Cristo ha hecho en tu vida.1

1
McDowell, J., & Johnson, K. (2005). Devocionales para la familia. El Paso, Texas: Editorial Mundo
Hispano.

Das könnte Ihnen auch gefallen