Sie sind auf Seite 1von 19

Género, clase y etnia.

Los modos de ser joven


MARITZA URTEA

Desde hace más de treinta años el país y el globo v


do grandes cambios en las dimensiones económ
social, demográfica y cultural, las cuales están mo
tivamente la vida diaria de las personas y, en espec
jóvenes. Se trata de transformaciones drásticas en
sociales y culturales que hicieron posible la emerge
de la juventud en la socied~d moderna mexicana
trucción de nuevos' marcos de interpretación de
juvenil actual. Éste es un texto exploratorio que
variables constructoras de juventud como eje de p
teórica de las maneras de ser joven en el México
Si bien gran parte del análisis social nos tiene
a tratar estas variables como si fueran fronteras s
procesos sociales autónomos que se explican por s
tanto, al objeto / actor que se investiga-, o a usarl
escenarios que condicionan las prácticas de los a
la luz del replanteamiento sobre el actor juvenil d
nes constructivistas y estructuracionistas, conside
mas de tratar las relaciones de la juventud con
acuerdo con la clase, la etnia y el género, no nos ay
cómo los actores juveniles están estructurando y r
través de sus prácticas sociales y culturales y repr
bre las mismas, nuevas realidades y significados d
ro y de etnia, y cómo éstas, reconfiguradas, estructu
juvenil contemporánea. Es decir, la pregunta eje

15
16

en torno a cómo y desde qué dimensiones de la vida social los jó- danía juvenil se estén considerando, al menos, al
venes están participando (acelerando, retrasando, negociando sus tercer ámbito o nivel: el estructural.
posiciones) en los cambios y transformaciones que vienen acaecien- Parafraseando a R. Rosaldo, y de manera e
do en el último cuarto de siglo en la sociedad mexicana y global, y texto propone tratar las relaciones entre juventu
particularmente en las formas de vivir y representar la clase, lo género en la sociedad contemporánea mexicana
étnico y el género. se intersecan en zonas contemporáneas tmnsfrontcriza
Las categorías "juventud", "clase", "etnia" y "género" no son líneas: urbana, rural, regional, global, de preferenc
neutras, pues conforman tipos específicos de desigualdades, pro- ciona!, generacional, de nacionalidad, política, de v
ducto de relaciones sociales y de poder históricamente constituidas musicales, etcétera, que complejizan aún más el a
en cada país y región, y son usadas como herramientas para regu- nil contemporáneo. Más que variables separadas
lar y normar asimétricamente las relaciones entre jóvenes y adultos, en última instancia, clase, etnia y género pueden
ricos y pobres; entre quienes poseen capital y poder y quienes no líneas que se entrecruzan, en determinados con
lo poseen; entre mestizos, blancos e indígenas, entre hombres y particulares, a nivel global, regional y local, pro
mujeres. Son construcciones socioculturales que han convertido las agente juvenil, determinadas zonas fronterizas que
diferencias de edad o las biológicas del sexo en jerarquías de po- nales, en el sentido de ser exclusivamente constru
der, de estatus y de ingresos a través de complejos sistemas de radas por las instituciones socializadoras, sino siti
diferenciación y distinción culturales, que justifican constantemen- creativa, "porosos" por la heterogeneidad, movilida
te la posición subordinada y dependiente de las mujeres, los jóvenes, los actores -culturas parentales, medios y nuevas
los pobres, las clases medias y populares, y los indígenas. Cada ma escolar, sistema laboral, etcétera, así como las cu
categoría tiene su propia historia, en la que han intervenido múl- nales- que participan en ellos saturándolas de de
tiples procesos que tienen que ver con las relaciones de poder en y dominación (Rosaldo, 1991). Se pueden abordar
distintos planos, y el poder es algo relativo a muchos recursos y inconsistencia / diferenciación interna como conte
capacidades. Cada una de ellas tiene diferentes ámbitos o niveles 'al interior de los cuales la. experiencia juvenil y
de análisis: un aspecto microsocial (vinculado con enfoques que tener negado el acceso y participación a las instit
subrayan las capacidades individuales), un aspecto relacional o centrales puede ser densamente descrita" explora
interaccional (vinculado con la producción de estas desigualdades proéesual y cualitativa las vidas de los jóvenes co
en diversos campos de la interacción social) y un aspecto estruc- de participación en la transición del ciclo de vida
tural (más holístico, ubicado en las estructuras de posiciones y zonas de exclusión.
mecanismos más ampljos de distribución de los beneficios y las El ~exto está dividido en cuatro partes: en la pr
cargas). Un análisis de estas categorías debería tomar en cuenta un replanteamiento de la definición de juventud
la interconexión o imbricación entre estos diferentes tipos de modernidad á partir de la teoría de la estructuració
desigualdad en sus diferentes niveles o ámbitos; sin embargo, y cia del actor. En la segunda expongo sumariament
hasta el momento, la literatura al respecto sólo identifica los dos niciones clásicas en tomo a las clases sociales, para
primeros ámbitos en las prácticas, representaciones e imaginarios maneras en que los estudios mexicanos sobre la juv
juveniles, aunque en los debates en tomo a los derechos de ciuda- dado la relación entre clase y jóvenes, y desarrollo
18 MARITZA UI{TEAGA CASTRO-POZO GÉNERO, CLASE Y ETNIA

abordamiento de las distinciones y diferenciaciones internas en los de conocimientos sobre elser. Me gustaría r
mundos juveniles. En la tercera desarrollo una propuesta para el tancia que tiene asumir la concepción socioc
estudio de lo juvenil indígena migrante en la ciudad, y en la cuarta tud como construcción relacional entre los ac
expongo algunos avances teóricos en tomo al género, el sexo, la los agentes de sus entornas sociales inme
sexualidad y los cuerpos, para luego preguntar cómo un análisis ancianos, jóvenes y niños) y los de sus entor
que imbrique juventud y género puede potenciar el conocimiento pero presentes.
de ciertos segmentos juveniles contemporáneos, emplazados aún 2) La juventud es una variable del análisis so
en los márgenes de la investigación sobre la juventud. ser separada de otras variables, como gén
región, entre otras.
3) La juventud, las relaciones sociales y las cultur
JÓVENES y AGENCIA CULTURAL merecen ser estudiadas en sus propios términos
ca la necesidad de situarse en las prácticas y
El nuevo paradigma sobre la juventud se prop(:me como un espacio los actores -en interacción social con los ad
teórico o interpretativo que ayuda a comprender la construcción y los niños= construyen sobre sí mismos y su
de la juventud como una institución social que existe más allá de sin perder de vista los aspectos más relevant
la actividad de cualquier joven en particular. Esto significa que el de sus vidas, aquellos que ellos mismos po
concepto de "juventud" es una formación discursiva al interior de
la cual diferentes tipos de jóvenes, y el concepto mismo de "juven- Esta perspectiva, en suma, subraya el rol p
tud", son construidos en cada cultura en diferentes momentos his- tienen lbs jóvenes en el diseño de su experiencia c
tóricos. Esta perspectiva se instala en las prácticas sociodiscursivas resultados de su estatus como categoría. Rechazan
de los jóvenes, en la dimensión cotidiana de sus vidas y en su re- de los roles y modelos funcionalistas, los relatos
cuperación a través de narrativas y retóricas. Algunas características sobre el "hacerse ser social" (o alcanzar la "comple
de este paradigma emergente s<?n: el paradigma anterior atribuía sólo a los adultos) e
promiso activo de los jóvenes en la construcción
1) Es importante concebir la juventud como construcción social de sus propias vidas, de las vidas de quienes los
de-una fase particular en el ciclo de vida que cambia de forma sociedades en las que viven (idem). La propuesta
y de contenido a través del tiempo y del espacio. La biología tatuto y respetabilidad epistemológica a la juven
de los cuerpos juveniles en maduración no es la determinan- que los jóvenes son creadores y poseedores de c
te principal e invariable de su identidad categorial, sino que ventud, y otorga prioridad a las prácticas y form
está sujeta a diferentes marcos de interpretación entre y den- simbólicas a través de las cuales la sociedad es exp
tro de las culturas y de diferentes épocas históricas (James, la-gente joven, revelando su posicionamiento ca
1995, p. 45). Desde esta perspectiva, la categoría "juventud" particulares del curso de la vida.
se construye a través de los juegos de reglas que prescriben Un trabajo temprano de Eisenstadt sobre
y proscriben las acciones sociales de los miembros de esta (1956) subraya la relegación estructural de la juv
categoría. Son estas acciones las que configuran un conjunto genes de la sociedad y señala las rutas estructurad
ción del periodo de la juventud a la adultez. Para Eisenstadt, la naría un papel determinante en la estructuración
cuttura juvenil representa básicamente un antídoto para la experien- ca de desigualdad en la sociedad capitalista. Prec,
cia problemática de la marginación, al "suavizar" o amortiguar la articulado e influyente concepto de "clase" en la h
transición de la infancia a la adultez. A pesar de que su teoría de miento social es el de Marx, aunque el trabajo de
las generaciones fue formulada dentro del marco funciona lista y clave en el discurrir de la categoría. Ambos autore
de que actualmente se le percibe como problemática, [ames (1995) ses en la dimensión económica de la vida social y
propone utilizar sus ideas sobre la marginación social y la cultura gencia en las relaciones sociales y de poder de la socieda
generacional como lentes teóricos para comprender el proceso de libre concurrencia y expansión", aunque sus vis
socialización, enmarcándolas en el trabajo antropológico sobre los torno a los determinantes económicos cruciales. P
ritos de paso y liminalidad de Victor Turner. Ambas permitirían damento de las clases es la relación con los medio
enfocar e iluminar las culturas de la niñez y la juventud no como Los poseedores de los medios de producción cont
subculturas aparentemente fijas en su oposición al mundo adulto talmente el acceso a los recursos, al empleo y a
o como malos remedos del mismo, sino como contextos geertzianos apropiación del excedente socialmente producido.
al interior de los cuales la experiencia generacional de tener nega- quien queda excluido de esta propiedad son neces
dos el acceso y la participación a las instituciones sociales centrales tos a los de los primeros. De la propiedad privada
puede ser densamente descrita. Además, permiten explorar de ma- producción vigente en la sociedad capitalista se o
nera procesual y cualitativa las vidas de los niños y los jóvenes en permanente conflicto: los propietarios del capit
como experi,encias de participación en la transición, más que como los propietarios de la fuerza de trabajo, u obreros
zona~ de exclusión, en el ciclo de vida. Por último, el estudio de la relación 'asimétrica entre ambos constituye la ma
juventud en sus propios términos corregiría el error académico de desigualdades en este tipo de sociedades.
pensar que todo lo que hacen los jóvenes es por referencia al mun- Si bien Marx observó en la sociedad de su tie
do adulto, y rescatar la creatividad propia que se genera en estos tura de clases bastante más compleja, sugirió q
nichos categoriales productores de prácticas y discursos que-deben propietarios o los campesinos eran reminiscencias
ser comprendidos desde los lugares de sus prácticas y desde sus precapitalista que desaparecería con el desarrollo
perspectivas (Caputo, 1995; Marín y Muñoz, 2002). embargo, un aspecto del concepto que se renueva
con cierta constancia el pensamiento)' el activi;mo
de nuestras sociedades es su consideración (o la
JÓVENES y CLASE SOCIAL las cla..seseran más que una forma de describir (r
sicióneconómica de grupos diferenciados; para
Uno de los estructuradores más importantes de lo juvenil, y parti- dades tangibles)' fuerzas sociales reales con la ca
cularmente de su heterogeneidad, ha sido atribuido a la clase social. formar la sociedad.
A diferencia del género y la etnia, estructuradores emplazados teó- Para Weber el fundamento de las clases social
ricamente en la dimensión cultural y simbólica de la vida social, el posición en el sistema económico, el cual determin
concepto de "clase social" fue emplazado, desde los clásicos, en la des de vida de cada uno. Sin embargo, reduce de
dimensión económica, esfera a la que teóricamente Karl Marx asig- la importancia de la propiedad, acentúa los eleme
y el estatus y junto a las clases propietarias introduce las clases ad- ortodoxos de la corriente marxista ayudó a retar
quisitivas -empresarios, profesionistas, banqueros, comercian- académica sobre determinados segmentos de la
tes-, el fundamento de las cuales es la capacidad de 'ofrecer los las mujeres Y los jóvenes, que terminaban subsurni
servicios necesarios para el desarrollo del sistema capitalista. Se gen de clase" (Pérez Islas, 2008). Este término fue
llega de esta manera a una multiplicación de las clases y de los cri- dar cuenta de las distancias sociales entre los grup
terios de demarcación y de identificación que favorecen el gradual Una de las primeras propuestas teóricas que
desplazamiento hacia una acepción ardinal de las clases sociales. en las relaciones entre juventud y clase social fu
El concepto ha sido desarrollado en dos vertientes o posicio- Birmingham, en la Inglaterra de los alias sesenta, m
nes teóricas, ambas muy apegadas a sus mentores. Una tiene como con el nacimiento de algunos estilos juveniles en
eje la reflexión sobre las clases sociales y se desarrolla dentro del de la posguerra, en pleno periodo de opulencia ec
pensamiento crítico político y sociológico europeo, en lo que se ha tradujo en el crecimiento de la escolaridad y de la
denominado teorías del conflicto; la otra, la vertiente más weberiana, nómica de los jóvenes (consumo y modas), la co
hace de la noción de estrqtificación social su eje reflexivo y ha sido Estado de bienestar, uxijarc state, el surgimiento d
fundamentalmente desarrollada por las teorías funcionalistas de la consumo, el apogeo de la música rock, el fin del Im
sociología estadunidense. Ambas se han construido como sólidas y la llegada a la metrópoli de grandes contingentes
posturas teóricas, pero constantemente encontramos autores que provenientes de las antiguas colonias, que llevaron
han rebasado los límites de las posturas para realizar aportes fun- pautasestéticas y culturales y se agruparon en barri
damentales en estos conceptos.' En este momento surge una variedad de estilosjuv
En los estudios sobre la juventud ha sido muy complejo ope- culares, como los teddy boys, rockcrs, niods, skinhcad
racionalizar un concepto definido en términos de la relación de los La propuesta de estudio de lo juvenil en esta escu
sujetos con los medios de producción, particularmente porque, en blanco de su crítica "las tesis tan en boga en aquello
su definición moderna, la juventud se caracteriza por su no inte- cultura juvenil como conglomerado homogéneo e in
gración o integración parcial en las estructurasproductivas y re- lizada exclusivamente en términos de conflicto
productivas de la sociedad. Fondeadas / emplazadas en otro ámbi- (Feixa, 1998). El estructural-funcionalismo, lugar d
to, el de su preparación para el logro del esta tus adulto, las esta propuesta, llega a considerar la emergencia
transiciones juveniles toman como referencia terrniriar la escuela, como una nueva clase. La escolariza~ión generalizad
dejar el hogar paterno, casarse, tener hijos y obtener un empleo. Por y las modas eran interpretados por los funcionalistas
otro lado, la centralidad del análisis de clase en los textos más tos unificadores de un grupo social que, por defin
analizarse por su ubicación dentro del proceso pr
1 Las aportaciones de los estructura listas franceses han sido {u;'damentales
para el desarrollo del concepto de "clase" que incorpora algunas de las discpsío- los aportes más importantes del grupo de Birmin
nes de la sociología estadunidense en tomo al origen de la estratificación social reubicar las culturas juveniles, la experiencia gener
y algunos aspectos relacionados con el poder de instituir y organizar el proceso lativa autonomía en el interior de las formaciones
(re)distributivo o el poder de ordenar el reparto de lo socialmente producido y
contextos socioculturales más amplios. La introducc
de lo sobrante de bienes y servicios, La introducción del poder -en el sentido de
Weber- en el reparto ha dado lugar a discusiones sobre el privilegio y el pres- ve de esta escuela, Resistance Through Rituals (H
tigio, categorías vinculadas con las funciones del poder (Balandier, 1975). (eds.), 1998 [1975]), desarrolla, entre otros temas, l
rica entre cultura y clases sociales, cultura juvenil y subculturas ju- estudiantiles. SII1embargo, la prolongación de la ju
veniles; un modelo de análisis de las subculturas a partir de una jóvenes proletarios y, más ampliamente, entre la
"triple articulación": con las culturas parentales (los medios ecológí- y / o marginal, coloca a estos sectores, por primera ve
cos, las redes sociales y los valores que los jóvenes comparten con los que definen el concepto de "joven".
adultos de su clase); con la cultura dominante (las instituciones edu- El debate sobre las razones de la emergencia
cativas y de control social hegemónicas en la sociedad), y con los juveniles -fracaso del modelo de desarrollo cap
grupos de pares (los ámbitos de sociabilidad y valores genera- debilitamiento de las instituciones sociales nacional
dos entre los propios jóvenes) (Feixa, 1998); y la interpretación de los cutir sobre su origen y / o ubicación social. La discus
estilos juveniles como intentos simbólicos elaborados por los jóvenes investigadores entre aquellos que los emplazan e
de las clases subalternas para solucionar las contradicciones no re- clases urbanas marginales del desarrollo económico,
sueltas en la cultura parental. Si bien las propuestas de esta escuela tural del país (León, 1985; Gomezjara y Villa fuerte,
llegaron muy tardíamente a México, me interesa rescatar algunos de que los ubican dentro de los sectores excluidos ins
estos últimos planteamientos, que incorporo luego en la propuesta de la familia, la escuela, el trabajo, de manera soc
que expongosobre las maneras en que los jóvenes están participan- viven en el mundo de la precariedad extrema urbana (
do en la estructuración de las clases sociales contemporáneas. y aquellos que los emplazan en el ejército industria
En México, una primera discusión sobre juventud y clase so- proletariado (EIRP) o superpoblación obrera (Alarcó
cial tuvo lugar en el curso del debate en torno a las "bandas juve- del nuevo subproletariado (Villa fuerte, 1987), integrad
niles" en el espacio urbano de los años ochenta, cuando se inicia producción y circulación capitalista: Esta discusión
la construcción teórica de lo juvenil. A diferencia de los estilos erner- tancias y desigualdades que existían entre grandes
gidos en la Gran Bretaña del uxifare sta te de los años sesenta, las juveniles en materia de empleo e ingresos, pero
bandas juveniles emergen como consecuencia de la crisis del Estado limitaciones de enfoque cuando definió a los jóven
de bienestar mexicano (mediados de los años setenta en adelante), clases, sectores u estratos marginados / excluidos u
ya sin capacidad para la absorción de los numerosos contingentes exclusivamente de.su relación (nula, débil o fuert
, de jóvenes a la educación, el empleo, el consumo, etcétera, e inicia productiva, dejando de lado el accionar cultural
el proceso de expulsión de los jóvenes de los sectores medios y capacidad autogestiva manifestada por los jóvene
populares de las instituciones que tradicionalmente se encargaban Valenzuela (] 988),.Reguillo (199]~, Feixa (1
de su socialización. Esta situación marca un cambio en la condi- (1996c) ubican al suieto banda y cholo teóricamente
ción de juventud de los sectores obrero-populares. Antes de la cri- subalternas, en las culturas populares urbanas y e
sis, aquéllos parecían quemar sus etapas de felicidad para asumir nía / subalternidad, con lo que introducen la dimens
la responsabilidad del trabajo, "adultecían" tempranamente. La cri- ra y el poder en la definición de juventud. La noció
sis los fuerza a prolongar su juventud al no poder acceder a la esfera culturas juveniles, que desde la tradición gramscia
del trabajo y tampoco a la escolar, sino sólo circunstancialmente. El culturas subalternas o culturas de los sectores dom
marco de la crisis contradice abiertamente el estereotipo construido les se caracterizan por su precaria integmcion en la cu
por la sociedad mexicana sobre ser joven, históricamente definido a De maneras algo distintas, otros investigadores, m
partir de las actitudes y comportamientos de los sectores medios el estructural-funcionalismo, problematizan el no lu
joven en la sociedad mexicana y su escaso poder de decisión y barrio o vecindario, el trabajo o r:o trabajo, la escu
elección (Encinas, 1994). Ambas vías, sin embargo, llevan a focalizar tancias de control social. La esnaciaíiutcitn: pública
la mirada en los actores juveniles al interior de sus diversos campos esfimdamental a su constitución como sujeto« sociales,
de interacción social y en sus necesidades como jóvenes. Sin em- _transforma / configura- la ciudad, al tejer y art
bargo, "culturas juveniles" permite entrar en la heterogeneidad de la diferencia entre los varios grupos juveniles q
sociocultural de los jóvenes y, particularmente, en su agencia cul- contextos locales urbanos y globales metropolitanos
tural en la construcción de espacios sociales en interacción constante vergentes. En sus interacciones de disputa, conflict
con los ámbitos hegemónicos y parentales, pero sobre todo gene- negociación, los grupos juveniles van estableciendo
racionales. Entre fines del siglo xx y lo que va del XXI, la noción de prioridades con criterios diferentes que intervienen
culturas juveniles ha sido vital para interpretar las prácticas y re- ciudad, aunque con diferenciada visibilidad y pod
presentaciones de diferentes segmentos juveniles como metáforas 2001; Carda Canclini, 2004; Vergara, 2005). Jóvene
del cambio social, "hacer hablar" al conjunto de elementos con los cién migrados que viven en las periferias de la ciu
que los jóvenes interactúan -desde diferentes ámbitos y desde zan para trabajar y obtener ingresos y algo de div
múltiples dimensiones, como posición socioeconómica, género, gares de la ciudad más parecidos a los espacios
generación, etnia, región, espacialidad urbana, rural, etcétera- y pueblos de origen -la Alameda, la Villa, Chapu
con los que construyen nuevas formas de relacionarse y concebir otros iguales a ellos / ellas; jóvenes trends' cuya cond
la política, las relaciones sociales y afectivas, y la cultura. lita disfrutan y espacializan en las zonas más ur
Esta perspectiva reveló al actor juvenil interviniendo activa- ciudad -Centro Histórico, Roma, Condesa, Polanc
mente en su construcción, y movilizando y negociando una serie muy diferentes a ellos / ellas; jóvenes "fresas" del
de recursos y capacidades culturales y simbólicas, desde el ámbito Monterrey que viven la ciudad a través de circuito
del tiempo libre y el ocio. Tiempos, espacios, formas agregativas e clusivos" acotados por las ofertas del mercado para
identidades, estéticas, hablas, cuerpos, músicas y producciones ta" o VIP en zonas nice -el corredor lnsurgentes-
culturales, formas de socialidad o modos de estar juntos, son estu- pos!bles contaminaciones con unos otros que se per
diados profusament'e (Marcial, 2001, 2006; Nateras, 2002, 2004; "faltos de clase"; y jóvenes agregados en clicas /
Piña, 2004; Valenzuela, 1997, 1999; Urteaga, ] 998; Guerrero, 2004). pandillas, ser barrio, que hacen del espacio público
Mis propios estudios sobre la relación espacio urbano- jóvenes la esquilla, el fraccionamiento- un espacio "paralel
revelan prácticas espaciales inscritas en prácticas cultural-simbóli- de habitar una ciudad que sienten que los excluye
cas que arti~ulan prácticas estéticas, "modos de estar juntos", re- 2007). Los estudios revelan: I) la figura juvenil com
presentaciones e imaginarios extremadamente diversos. Los movi- cúmulo de capacidades, habilidades y recursos cul
mientos de los jóvenes en ~l espacio urbano trazan itinerarios licos -extraídos de referentes locales y globales-
efímeros y rutas significativas en la ciudad, apropiaciones simbó- la dimensión cult;ual y de la socialidad, modifican
licas de espacios, que transforman en lugares con mucha densidad tancias y el espacio físico en que se encuentra; 2) qu
afectiva, así como configuraciones físicas e imaginarias de "ciuda-
des juveniles" en las ciudades, donde invierten las relaciones de
2 Treuds, trenásctiers, categoría del marketing que se ref
subordinación que viven en ámbitos cotidianos como la familia, el posicionadas en las tendencias de estilos de vida por venir.
no son neutras, hablan de estilos de vida que se desean distinguir ¿cómo están haciendo los jóvenes frente a experienc
en lo público a través de prácticas de consumo conspicuo frente a das en las que se ha roto con la unidad y la continu
otros pares que no pueden o no quieren acceder a ellos. tema-mundo de vida?
Simultáneamente, algunos investigadores sobre la juventud El planteamiento de Picrre Bourdicu ha sido c
dan cuenta de la inserción del país en los procesos de globalización biar radicalmente el estudio de las clases sociales. E
dirigidos por políticas de corte neoliberal, del quiebre del modelo de ea su definición de clase social en una teoría multid
desarrollo capitalista del siglo xx y de las profundas transformacio- las diferencias)' desigualdades sociales. La clase soci
nes en las instituciones modernas que produjeron a los jóvenes. Este la estructura de las relaciones entre todas las propied
debate se expresa en el cambio de términos como "integración / in- tes, que confiere su propio valor a cada una de ella
corporación" o "institucionalidad / marginalidad", "expulsión de que ejerce sobre las prácticas" (Bourdieu, ] 988, p. 10
la institucionalidad", creados en el marco de las tensiones de poder de reconocer el consumo, y particularmente el aspec
propias de un Estado nacional, al de términos como "inclusión" o . mismo, como un espacio decisivo en la constitució
"exclusión", enraizados en la globalización económica y mundia- sociales y en la organización de sus diferencias, y su
lización cultural. Estos y otros términos serán usados'por los inves- de focalizar la atención en las diferencias y desiguald
tigadores para dar cuenta de la acelerada profundización de las cas relacionándolas con otras formas de poder simb
desigualdades sociales entre ricos y pobres, la segmentación desigual cruciales para el estudio de la reproducción y difere
de la población juvenil, la desinstitucionalización y desafectación En México, la EN) 2000 aplicó algunos de sus ejes de
social de las nuevas generaciones, así como del ingreso de la infor- cultural, económico y social, y consumo) al estudio d
malidad económica y social, el crimen organizado y el narcotráfico juvenil, con muy buenos resultados. Ella permite ub
en el tejido social y en las tramas de la cultura, convertidos en po- damente ese gran conglomerado denominado juventu
sibles estilos de vida (ReguilJo, 2000; Cubides et al., 1998; Carda un plano sociocultural e iluminar aspectos de la desi
Canclini, 2004; Hopenhayn, 2004; Pérez Islas, 2002; Perea, 2004). se y género hasta entonces desconocidos en esa escal
Todos estos cambios tienen implicancias en la reconformación de el eje central: la transición de la escuela al trabajo. Ide
las clases sociales en el México actual. ¿De qué maneras la espacia- nar del actor joven en su hacer, en su experiencia,
lizacion de las diferencias juveniles en el espacio urbano remite a su dando salida a la ruptura / fractura del sistema de tr
activa participacipn en la construccíón de estilos de vida diferen- e;cuela-trabajo a través de la detección las prácticas
ciados y desiguales enmarcados en la recomposición / reconfigu- supervivencia alrededor de un bien, el trabajo / emp
ración de las clases sociales, en curso desde el quiebre del modelo de dición fundamental de la vida juvenil, pues casi d
desarrollo capitalista anterior y el cambio en el sistema de referen- juventud mexicana trabaja desde los ]5 años (43.9
cia social? Esto exige respuestas en dimensiones múltiples. La En- 17.1"'/0estudia y trabaja), 21 %, en su mayoría mujeres
cuesta Nacional de Juventud. (EN!) 2000 Y 2005 empezó a responder trabaja, y \U1a minoría sólo estudia (16.1 %). Pero,
por la agencia de los jóvenes en las dimensiones más duras de la cuenta de sus habilidades para movilizar los referen
vida social juvenil: ¿cuál y cómo es su accionar en la política, la eco- formales o recursos para acceder al mercado de traba
nomía, las instituciones educativas, las familias? De alguna mane- como informal, y de la importancia de hacerse de u
ra, la pregunta central de ambas encuestas la propone Reguillo: siete de cada diez jóvenes consiguen empleo a trav
30 MARITZA URTEAGA CASTRO-POZO GÉNERO, CLASE Y ETNIA

sociales derivadas de la relación construida con los amigos y la familia. y representación de las clases sociales? Remito n
También, da cuenta de su acceso en condiciones de sobreexplotación dimensión cultural en los espacios de interacción
- "trabajo de lo que salga o de lo que sea" -, de su precariedad, se han dado a sí mismos para convivir, como el
de cómo el comercio formal e informal coloca a los jóvenes en condi- Planteo abordar la socialidad -forma lúdica de
ciones de sobreexplotación, sin compensarlos de forma alguna, sin cial- como faceta de la construcción de lo real,
invertir en ellos y sin ofrecerles un mínimo de oportunidades para agenciamiento juvenil, a través de un activo "traba
una carrera laboral. Un estudio que continúa en esa línea es el de y con los pares generacionales y con otros grupos
Adrián de Garay (2004), que penetra las diferenciaciones internas sólo es "aprendizaje de la competencia comunicativa
de los alumnos de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) y de acción preestablecidas que operan por convenció
las consecuencias de ese proceso en su incorporación a la vida uni- ción, creación o innovación de los modos de esta
versitaria. La EN} 2005 tiene como ejes de indagación los conceptos de estéticas (formas de sentir y compartir en colectivo),
"informalidad", "formalidad", "ilegalidad" y "mernbresía", y conti- de viejos y nuevos principios, así como de nuevas
núa en el conocimiento de las maneras -diversas, desiguales, inclui- bles de conducta social, lenguajes verbales y corpor
das / excluidas- en que los jóvenes mexicanos intentan accesos, dad es el vértice social donde los agentes juveniles
reubicaciones e inventan respuestas que los ayuden a desempeñarse el habitus y se relacionan con valores,fashions y tend
socialmente mediante el uso combinado de recursos formales e infor- gías provenientes del mercado, de las industrias de
males (García Candini, 2(07). Dicha encuesta dibuja "dos juventudes to y las nuevas t~cnologías, así como de las tradicio
mexicanas", la "desconec~ada y desigual", "con escaso o nulo acceso locales y irasnacíonales que también reglan y rigen s
a servicios de salud, garantías laborales, informalizada, cuyos recla- expresividad, sus relaciones con el mercado, con la
mos se inscriben en una lógica absolutamente estructural, aspiracio- cundantes y gran parte de sus gustos y actividades.
nes elementales de justicia social y bienestar", y la "bien ubicada" en En ese sentido, la socialidad juvenil puede anal
cuanto a conectividad y acceso a satisfaetores fundamentales como ,pacio de mediación, puente o correa de transmisión
educación, empleo y salud (Reguillo, 2007, pp. 130-131). En realidad, sión macro y la dimensión micra de la vida social, zo
estas dos juventudes que, parafraseando a Beck (1999), podríamos reproducen y reconstruyen la vida social. Retomand
denominar como "Qijos de la necesidad" e "hijos de la libertad", a M'lffesoli, quienes se preguntan por la incidencia
muestran los dos grandes escenarios sociales en los que los jóvenes social o la socialidad en la macroestructura, el pri
mexicanos viven y "performancean? su diversidad y, sobre todo, sus punto de vista más normativo y reproduccionista, y
cada vez mayores desigualdades en el plano objetivo. imaginario y el cambio cultural, quisiera proponer
¿De qué maneras los investigadores podemos profundizar en mientas como dos polos de interpretación o análisis de las
la indagación sobre la participación de los / las jóvenes en la cons- píricas por investigar en estos espacios. Entre ambos p
trucción de la reproducción y el cambio actuales, desde su vivencia comportamientos / conductas / prácticas interactivas, es
rales de una diversidad de jóvenes de carne y hueso q
3 Uso este término en lugar de "actuar" porque considero que el performance
pando activamente en la construcción de sus cultura
tiene menores condiciones de exigencia para su puesta en escena: los personajes
no son actores, son flexibles, móviles, y los libretos cambian al compás de las
ra. El espacio de transmisión de los cambios cultu
coyunturas. culturas juveniles a la cultura hegemónica es el d
GÉNERO, CLASE Y ETNIA

Sin embargo, esta categoría no me permite dar cuenta de la capital (composición del capital) y cuánto se pose
densidad y complejidad cultural de los procesos y contextos que men global) es lo que en el fondo determina la
dan sustento a estos intercambios sociales, ni cómo esos contactos agentes. Desde esta perspectiva, las culturas, subcu
se entretejen nuevamente con los universos juveniles en cuestión. cas juveniles, tan diversas y desiguales, pueden se
Tampoco me permite dar cuenta de la densidad histórica de los como subcampos, constituidos por agentes posicion
sujetos juveniles en juego, ni de sus interacciones con los imagina- ra diferencial -según la posesión de ciertos bienes
rios juveniles subculturales. ¿Cómo podemos los investigadores y / o prestigio o distinción - en la red de relacion
captar teórica y metodológicamente los cambios y distinciones den- construyen cotidianamente como mundo social. A
tro de las culturas juveniles sin que ello implique nuevamente sub- tos bienes se generan espacios de juego "histórica
valorar el aporte particular -disminuir, anquilosar o borrar esta tuidos con sus instituciones específicas y sus ley
espontaneidad vital, muchas veces instituyente del accionar social y miento propias". A pesar de que Bourdieu da un
. cultural- que realizan los jóvenes en el cambio cultural y social de organización de los agentes basada en la distribuc
la sociedad, entre los que se encuentran sus propias representacio- económico y el capital cultural, no anula la opción d
nes de clase? Esta pregunta fuerza a trasladarse a otro lugar teórico. tes según otros principios. Aquí me interesa discuti
En lo que sigue, expongo a grandes rasgos una propuesta en la que dad de los capitales que están en juego en el espaci
hago uso del concepto de "espacio social" construido por Bourdieu Estudios anteriores señalan que la música es
(1985) como punto de partida para penetrar con él los valores y je- cipios estructurantes / organizadores más importan
rarquías internas en los mundos juveniles. Propongo su conceptua- renciación (y de la jerarquía de distinciones) e in
lización como "espacio social juvenil", como un recorte / campo del culturas y prácticas culturales juveniles, aunque no
mundo social al que Bourdieu representa en forma de espacio de ton (1996) penetra las culturas de jóvenes ingleses
varias o múltiples dimensiones, gira alrededor de los clubes y los raves de músic
"culturas del gusto", para preguntarse por las m
construido sobre la base de principios de diferenciación o distri- estos jóvenes crean las distinciones y jerarquías de
bución constituidos por el conjunto de propiedades que actúan nificaciones, actitudes, ideales y valores de su cultu
en el universo social en cuestión, es decir, las propiedades capaces juveniles agregadas en tomo a la música pasan po
de cQJ;ferir a quien las posea con fuerza, poder, en ese universo. jerarquías culturales. Cada una de ellas crea sus pr
Los agentes y gT\!pos de agentes [en ese espacio social] se definen nes y jerarquías de los gustos, significaciones, acti
entonces por sus posiciones relativas en el espacio [Bourdieu, valores en su cultura. Pero existen jerarquías de l
1985, p. U). las subculturas al interior del gran espacio juvenil.
ple~ distinciones, que analíticamente pueden ser p
Las propiedades actuantes pueden verse también en forma de ca- subcategorías o subespecies de capital cultural (T
pitales vigentes en cada campo del espacio social, en forma de tres parecen ser fundamentales en gran parte de e
capital objetivado o incorporado, y representan el poder en ese co versus lo falso, lo original versus lo comercial (he
campo. Los capitales pueden ser económico, cultural y social, y vndergrouná (subterráneo) versus la media. Ellas expre
simbólico (reputación o prestigio). La posesión de cierto tipo de nes entre juventud, música, medios y cultura com
34 MARITZA URTEAGA CASTRO-POZO GÉNERO, CLASE Y ETNIA

de "esta tus cultural" al interior de estas culturas y en su relación central en la investigación antropológica ni social
con otras culturas juveniles. así lo señala una revisión de la literatura etnográfica
Los discursos / distinciones de las subculturas de la música no índíos de México producida entre los años cincuent
son relatos inocentes de "las cosas tal cual son", sino ideologías los noventa. Son varias las razones de este desenten
subculturales por las que la juventud se imagina a sí misma y a ellas la no existencia, sino hasta épocas muy recien
otros grupos sociales y defiende su carácter distintivo negando su do etario que pudiera ser reconocido por la soci
condición de masa anónima; esto es, son ideologías que realizan las estudio como diferenciado de la infancia y la aduIte
agendas específicas de sus seguidores. El descrédito, si no es que años se han registrado cambios en la cantidad y ca
desprecio por lo inauténtico, lo comercial y los medios -así como dios y aproximaciones al tema de los jóvenes indíge
el interés en lo auténtico y en la distinción- en las "culturas de muy pocos, demuestran el creciente interés de jóve
club", no son prácticas ni discursos neutrales, sino distinciones que en un nuevo fenómeno: la emergencia de algo que
reclaman cierta autoridad y presupone~ la inferioridad de los otros narse periodo juvenil eptre la población étnica qu
y "hacen sentido en el servicio al poder" -aunque estos poderes los pueblos como en las ciudades.
sean modestos (ibid., p. 10). Estas prácticas han venido transforman- Los estudios identificaron cuatro grandes cond
do, de manera segmentada y clasista, las estructuras y dinámicas gencia de lo juvenil étnico en áreas rurales y urbana
del mercado, el espacio urbano, las industrias del entretenimiento gráfico actual de los jóvenes en los grupos étnicos (
y las nuevas tecnologías. Dentro del espacio social juvenil, los me- Y 2(05); los flujos migratorios de finales de siglo
dios y las nuevas tecnologías no son simplemente mercancías simbólicas nacional e internacional, en los cuales la significació
. o marcadores de distinción, sino redes cruciales -hi5, MySpace o Youtu- mestizos e indígenas en la construcción de la den
be- en la definición y distribución del conocimiento cultural. La dife- migrante es fundamental; la extensión de la obli
rencia entre estar dentro (in) o fuera (out) de la moda, alto o bajo en escuela secundaria o la introducción de la telesecu
, capital subcultural, etcétera, se correlaciona de maneras complejas pueblosindios: y las estrechas relaciones entre la
con grados de información, creación y exposición a los mismos. dio y las diversas poblaciones étnicas tanto en zo
urbanas," Todas ellas apuntalan la construcción d
fronteriza en la sociedad contemporánea. Nos hall
Lo JUVENIL EN LO ÉTNICO: PROPUESTA poderoso reto intelectual, tanto desde la antropolo
PARA UN ESTUDIO DE LO JUVENIL INDÍGENA el campo de estudios sobre lo juvenil. Varios supu
MIGRANTE EN LA ClUDAD4 la antropología -conceptos "cerrados", coherente
partidos de cultura, etnia, comunidad y las consec
Si bien la temática indígena ha sido recurrente y tradicional en la taciones que se construyeron sobre los pueblos in
antropología mexicana, el tema de los jóvenes indígenas no ha sido razones- son obstáculos importantes para, prim
sujeto emergente, lo juvenil étnico, y construir una
4 Aquí trato algunos planteamientos de un estudio sobre los jóvenes indí-
genas migrantes en la ciudad de México y su zona conurbada realizado para la
Comisión para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas (COI) entre 2004 y 2006.
Véase Urteaga (2007). s Desarrollo en profundidad en otro texto. Véase ídem.
sobre lo que se abre como uno de los ámbitos contemporáneos más dones muy desiguales, e imagiñan nuevas y var
importantes del estudio sobre lo juvenil. bles para sí y los otros,(Appadurai, 2001) en la ci
El reto de una antropología contemporánea es iluminar los proce- Las preguntas con las que me acerqué al obje
sos de cambio e inconsistencias internas, los conflictos y las contradicciones to diferentes a las de quienes se habían acercado
y la movilidad de los sujetos étnicos. La temática "jóvenes indígenas" (Pérez Ruiz, 2002; Martínez c., 2002; Anguiano, 20
impulsa a moverse entre fronteras y hacer de esta áreafronteriza -dcntro De la Peña, 2004; Martínez C. y Rojas, 2005) e int
de las zonas de diferencia al interior y entre culturas- el objeto / centro de lo juvenil, lo étnico y lo migrante desde la perspec
indagación, exigiendo alertidad teórica frente a la reemergencia y / o _¿quiénes eran?, ¿cómo vivían y percibían su pr
resignificación de lo "viejo" en las nuevas circunstancias sociales y estaban haciendo en la ciudad?-, emplazándolos
culturales. Desde los estudios sobre la juventud, toca iniciar las inda- ciones (adaptación, negociación, conflicto y prést
gaciones sobre la especificidad de la juventud que se está formando con tres escenarios socioculturales en la construcc
en muchos grupos étnicos bajo el paradigma del agenciamiento ju- -la cultura hegemónica, las culturas parentales y
venil. Se trata de radicalizar la mirada al objeto "jóvenes indios con- les+? en sus propios términos. En este caso, come
temporáñeos", emplazándolo en sus variados lugares - interseccio- pensar en los jóvenes indios: a) como receptáculos
nes transitadas por múltiples líneas (variables) estructuradoras como nocimiento, de las características culturales y los
género, clase, generación, nacionalidad, política, vestido, gustos mu- en sus etnias de origen (como en las etnografía s
sicales, preferencia sexual, etcétera -, para leer desde allí cómo están: totalmente enredados en los valores individualista
1) participando activamente en la configuración de estas zonas fronterizas mestiza y moderna; b) como iguales y homogéneo
de la sociedad mexicana contemporánea, y ~) dotando de contenidos con base en investigaciones anteriores (Pérez Ruiz
y sentidos diversos su experiencia juvenil, así como su etnicidad. dad y desigualdad en sus condiciones de clase, de g
¿Cómo se está construyendo lo juvenil indígena migrante en generación, etcétera, que brindan "un cierto rango
la ciudad de México? A finales del año 2004 inicié una primera y expectativas entre los migrantes, así como el m
exploración en los denominados jóvenes indígenas migrantes en la nes entre las qúe deben escoger y desenvolverse"
ciudad de México, que terminé en abril de 2006 en un taller ~eflexi- diseño, seleccioné aquellas situaciones que los ac
vo en tomo a tres ejes: lo juvenil, lo étnico y lo migrante, encontrán-
dome con una gran y compleja heterogeneidad. Desde mi primera
.
múltiples "zonas fronterizas" de las que se comp
.
7 1) Las instancias exploradas en relación con la cultura
incursión en el campo de asfalto sentí que abría una caja de Parido-
escuela; sistema productivo y laboral, ejército, medios de
ra, pues la categoría englobadora "jóvenes indígenas migrantes" es nos de control social, migración. 2) En las culturas paren ta
una etiqueta bajo la cual jóvenes, hombres y mujeres de diferentes algunas normas de conducta y valores vigentes en el med
etnias del desplazamientcé viven situaciones muy diversas, en condi- los jóvenes; sin limitarme a la relación entre padres e hijos, i
amplio de interacciones cotidianaa entre miembros de ge
al interior de la familia y las redes de parentesco, el vecind
las redes de amistad, las entidades asociativas (organizacio
6 Con "etnias del desplazamiento" me refiero a los miembros de etnias en tera. 3) En las culturas generacionales exploré redes ami c
migración, fenómeno que Mora et al. (2004) define "corno el desplazamiento horizontal que los jóvenes indígenas podrían haber con
territorial, orientado al cambio residencial de los grupos sociales, con el fin de (primaria, secundaria, preparatoria, universidad) y otros i
mejorar su calidad de vida". instituciones de las culturas de origen corno de la cultura
y las percepciones sobre ellas. ¿Qué significa vivir entre fronteras comunicación, música, artes plásticas, eran las car
-la escuela básica, la universidad, el empleo, la migración, las igle- la ciudad. y entre los profesionistas encontré aboga
sias, las relaciones interétnicas, los medios masivos de comunicación politólogos Y administradores públicos. Los 35 a
e información, etcétera - y desde posiciones de frontera: ser joven, tenían una edad promedio de 22 años. La may
ser indígena y ser migrante? Por último, apoyándome en mi propia hombres Y mujeres pertenecían a grupos étnic
experiencia como investigadora urbana, me emplacé en escenarios estuvieron presentes quienes no se autoadscribieron
citadinos donde podía "capturar" a los jóvenes indígenas como jóve- A pesar de su pertenencia universitaria, sus res
nes" y fuera de los escenarios étnicos (grupos y pueblos étnicos visi- mas planteados fueron muy heterogéneas, expresa
bles e institucionalizados en la ciudad) bajo los cuales habían sido ya de vida muy diferentes y posicionamientos étni
explorados (Martínez C, 2002; Anguiano, 2002). género, muy distintos y desiguales.
La primera parte de este estudio reveló una gran diversidad Es difícil resumir en este breve espacio el c
de situaciones en las vidas de los jóvenes. Entre los once entrevis- entramado de significaciones que esta heterogeneid
tados -hombres y mujeres- había estudiantes, trabajadores, e~- gena en la ciudad experimenta en su interacción co
tudiantes y trabajadores y profesionistas con edades muy disímiles sos ámbitos / campos de la vida social y con diverso
(los mayores entre 29 y 30 años; un grupo intermedio entre 20 y 25 se salidas múltiples. Precisamente, la heterogeneid
años, y los más pequeños entre 13 y 14 años). Me encontré con me presentó el segundo reto teórico: su representac
vendedores ambulantes de artesanías y café, trabajadoras domés- La cuestión de la representación no es una cuestió
'ticas, albañiles, abogados y estudiantes universitarios. No sólo pro- truye al objeto, en este caso, en esa diversidad d
venían de etnias muy distintas (triqui, mixteca, otomí, tzeltal, za- jóvenes y migrantes" en la ciudad, con su abanico
poteca, purépecha), con periodos de arribo muy diversos: algunos vida: no limitadas a tipologías y correlaciones cuy
llegaron siendo niños y otros ya jóvenes, y los había nacidos en el radica en ubicar a los sujetos dentro de mayorías
Distrito Federal. Algunos vivían con sus familias en los predios nales con las que comparten algunas variables.
étnicos del centro de la ciudad, otros vivían entre citadinos (en sus entre las situaciones más críticas ql.\e vive la totalid
casas familiares, como en las casas de las familias para las que tra- bajo estudio en su relación con la cultura hegemón
bajaban) y otros de manera independiente, con sus propias familias o tión del empleo (escaso, mal pagado, sin beneficios
allegados con parientes. Alganos estaban muy "amarrados" a sus últimos escalones) y la escolaridad (acceso restringi
etnias de origen y otros muy alejados de las mismas, aunque todos tunidades), situación de indefensión que comparte
estaban vinculados con sus familias, La segunda parte del estudio de la población joven mexicana (EN], 2000; EN], 200
-cuando se realizó el Taller de Intercambio- convocó a una gran Sin embargo, los análisis micro y relacional die
diversidad de estudiantes (en su mayoría universitarios, pero tam- redes familiares y comunitarias étnicas de apoyo
bién secundarios y preparatoria nos) y-profesionistas jóvenes. An- laboral y culturalmente en la ciudad que las genera
tropología, etnohistoria, lingüística, historia, geografía, filosofía, de migrantes construyeron y que funcionan como
sos y de empleo tanto para los indígenas pobres com
8 Plazas públicas y algunas instituciones (universidades, escuelas, organiza-

ciones indias con presencia juvenil en la ciudad) fueron mis lugares de contacto
lo son. Redes que, aun con sus limitaciones, son
y de seguimiento de jóvenes que me llevaron a otros jóvenes. permite mejorar paulatinamente, o en el peor de
menos sobrevivir", pues pertenecer a ellas es mucho mejor que no viviendo en la ciudad, siempre y cuando se cump
contar con alguna. Situación que padecen los jóvenes indios recién rior" ,(Ortega, 2001). Aquí me encontré con una ins
egresados de la universidad, pertenecientes a etnias de "reciente tiva clave en la reproducción cultural de las etnias c
migración"," quienes viven su experiencia laboral en la ciudad como en México, así como con un aporte fundamental a
"rnultiusos" dentro de un horizonte cerrado en opciones. Para mu- de lo juvenil contemporáneo. Socializarse en los prin
chos jóvenes de las nuevas generaciones altamente escolarizadas tarios marca una gran diferencia con las maneras mo
(algunos con maestrías y doctorados), esas mismas redes dejan de trucción de juventud. Sin embargo, en estos ámbito
series útiles para acceder a mejores puestos de trabajo y al logro de las étnicas en la ciudad, observé, como otros investigado
nuevas expectativas generadas. Este pequeño sector ilustrado está 2(08), ciertas tensiones generacionales entre adultos
utilizando con mucho éxito la vulnerabilización de la condición in- venes, que responden a las diferentes percepciones y
dígena por parte del gobierno federal y los gobiernos estatales, a cada actor tiene sobre el proyecto de recomposición
través del acceso a becas en programas de educación superior, ID sin ticipación de los actores en él. Los primeros percib
dejar de pertenecer a las redes étnicas. Sin embargo, la pertenencia migrantes de manera ambivalente, come sostén im
a estas redes comunitarias, y a los grupos y cargos de poder y deci- comunidad (esperanza) y, a la vez, como fuentes del
sión, no se hereda, ni se garantiza simplemente por haber nacido en mientras los jóvenes con una mayor educación y m
los pueblos de origen: se gana, se trabaja, se construye asumiendo ciudad tienen expectativas y demandas en su prese
un compromiso con la comunidad a través de la asunció~ de cargos y den ser satisfechas en el marco actual (y ancestral)
otras responsabilidades comunitarias -como el tequio-, así como de poder comúnitarias sin que algo de esas relacion
familiares, como "mano vuelta", "gozona", guetza, que toman di- en beneficio de la continuidad y la reproducción
versos nombres en cada pueblo. pueblos étnicos. Algunos sostuvieron que dentro d
Para los jóvenes, la asunción paulatina de estos compromisos des los jóvenes no contaban: tenían voz, pero no v
significa ir haciendo pública su voluntad de pertenencia étnica, que Ser "joven", ser "indio" y ser "migrante" son p
posibilita una forma comunitaria de vida que "la ciudad no puede , tera en la medida en que-los sentidos de los actore
ofrecerles" y empezar a asumir que "uno existe gracias a la comu- términos están siendo construidos dentro de una
nidad", principio contradictorio al individualista, que prevalece en fuera de las fronteras de los mundos que hasta ha
la ciudad, donde "todo existe gracias a uno"." Por otro lado, cum- fijos e inmutables ylos cuales aún sirven de refe
plir con estas obligaciones otorga "derechos sobre la tierra, aun no sean los únicos- en la construcción de sus fo

9 Fines de los años ochenta y durante la década de los años noventa.


I3
10 Maestría en lingüística indoamericana (CIESAS y CDI); maestría en educa- EL GÉNERO EN LO JUVENIL
ción indígena (UPN); Programa SNA; EL 5aberes (becas para estudios de posgrado
a indígenas en la UNAM, CDI y gobierno del estado de Chiapas); programa de Uno de los estructuradores más poderosos de juvent
becas Ford para estudios de licenciatura y posgrado; además de las actuales uni-
versidades indígenas o intercuIturales, algunas de las cuales operan en Sinaloa, concepto complejo y teñido por una densa historia
Estado de México, Michoacán y la Huasteca (Pérez Ruiz, 2008, p. 13).
11 http://www.indigenasdf.org.mx/pueblos /21/ sistemas-de-cargo-de-los- 12 Taller de Intercambio de Experiencias, abril de 2006
pueblos-indígenas, Consultado el 3 de mayo de 2006. 13 En esta parte agradezco la colaboración generosa de
GÉNERO, CLASE Y ETNIA

tido, en pocos años, en un campo interdisciplinario de investigación años noventa incluyó discusiones acerca de los cru
que trabaja sobre el concepto de "género". En la actualidad, el tér- teóricas, problemas de interpretación (categorías na
mino es utilizado para referirse a la construcción social y cultural de la universales, relaciones entre sistemas de pensamient
feminidad y la masculinidad en su re/ación. Sin embargo, su origen está clasificación Yla acción del individuo o agencia, y
imbricado fuertemente en los estudios feministas que durante la condiciones materiales. Estas nuevas miradas e inst
década de los años setenta y parte de los años ochenta hicieron de estudios de género contribuyeron a revelar que las
las mujeres -la "mitad peligrosa", como la denomina Balandier- hombres Y mujeres están asociadas con construccio
su objeto de investigación y teorización. Buena parte de sus esfuer- sobre lo que significa ser varón y ser mujer y con
zos se dirigió a explicar las razones y las fuentes de la opresión y poder entre personas de distinto sexo.
subordinación de las mujeres, encontrando que radicaban en la cul- Entre los conceptos más fructíferos y polémico
tura y la estructura social, más que en la biología. Sus estudios re- está el de "identidad de género", el cual se vincula
velaron que las ideas sobre su biología, que ubicaban a las mujeres ciones identitarias, como las juveniles, pero también l
cercanas a la naturaleza, fuera de la producción o dentro de la esfera cia o representación, la discusióh sobre el concepto d
doméstica, no eran hechos naturales, sino elaboraciones culturales aparejada a la discusión sobre el individuo y la sexu
sobre la diferencia biológica. Sin embargo, estas conclusiones lleva- sidad e identidad y el retorno de la relación sexualid
ron al lugar que se había tratado de evitar, que por fuera de la todo ello tuvieron importante papel los movimient
explicación sociológica, cultural o material, el origen de la subordi- homosexual y lesbiano, al que se sumaron unos "
nación femenina parecía radicar en los "hechos" biológicos de la sexuales.o "no identificados".
reproducción. 'La salida a este punto muerto -separar el concep- Simultáneamente, el concepto de "identidad d
to de "género" del de "sexo", más ligado a la biología y anatomía, fica en mucha de la investigación inetitucioruú nacion
y abrirse a una más amplia comprensión de la diversidad a partir En realidad, la identidad de género en los / las jóv
de los conceptos locales de "género" - dio lugar al actual concep- con ciertos "problemas" (institucionales) como la sa
to de género (Pine, 2002). Dos conjuntos de argumentos alimentaron el embarazo adolescente, madres adolescentes,
esta decisión teórica: por un lado, estudios antropológicos argumen- sexuales y reproductivos. La investigación académ
taron que no todas las culturas representaban las diferencias de la identidades juveniles concentra su atención en el es
misma manera o daban el mismo énfasis a la diferencia sexual; por ticas de distinción generacionales en los espacios de
otro lado, las teorías posmodernas y el postestructuralismo iniciaron titaria y entre los grupos de jóvenes. Estas prácticas
la deconstrucción de las dicotomías universales, revelándolas como mente vinculadas con la consiruccién cultural del
partes de un~ construcción discursiva específica, la occidental do- través de rituales de iniciación (al grupo), decoració
minante, y por ende, histórica y socialmente ubicada. fachadas, estilos, consumos de música, de ídolos
El género se convierte en una clave para reflexionar / investigar ción pública de roles masculinos (Piña, 2004; Nater
la diferencia, dejando de asumir, a priori, la dominación masculina 2004). La mayoría de los estudios da cuenta de la pr
y la subordinación femenina como universales y las dicotomías ba- mujeres al interior de estos cuerpos colectivos sin
sadas en la filosofía e ideas occidentales en torno a la base biológica existencia. Un estudio exploratorio sobre las jóvene
de las diferencias sexuales. El discurrir de este concepto durante los dades de México y de NezahualcóyotI (Urteaga, 19
44
MARITZA URTEAGA CASTRO-POZO GÉNERO, CLASE Y ETNIA

mitió imbricar los contextos de clase -jóvenes de los sectores medios como histórica y culturalmente construido (Pine, 2
bajos y populares urbanos- con la construcción femenina de unas por la dimensión sexual de nuestras vidas y sobre c
jóvenes que se adscribieron a la identidad punk y que hicieron uso biado y está cambiando en el momento actual, tra
de la fuerza de las imágenes femeninas punks, para construir una (2005) del género socialmente construido al cuerp
imagen propia -chavas activas punks-: que orientaría sus acciones presenta en géneros - "los cuerpos humanos son
y sus relaciones de amistad y amor erótico con los jóvenes punks agru- gel/erizados" -, tiende a indicar un mundo que es
pados en bandas, otros jóvenes y colectivos de acción cultural. Sin mismo y cuyos movimientos superan sus propios
embargo, esa misma identidad que les posibilitó, no sin tensiones, 2002). Esto último remite a la esfera de la sexualidad
construirse un espacio propio, cuando las jóvenes se salían de control sexuada de los cuerpos, que parece haberse ya sep
por el nivel de autonomía que asumieron sus prácticas colectivas y dición genérica y se inscribe "en el individuo, no
personales (sexuales), las irá presionando y luego excluyendo en un de una identidad genérica sino como base y func
intento de retomar el control sobre ellas.
tidad personal" (Vendrell, 2005, pp. 100, 107-109)
El concepto de "género" sigue en discusión; el desarrollo de Desde el carnpo'de estudios de lo juvenil poc
los postulados construccionistas de Foucault ha permitido a algu- por problematizar, desde los desarrollos teóricos
nas autoras / autores confrontar abiertamente los conceptos de sobre género, la relación juventud / género. Durante
"género, identidad" y "sexo". Para J. Butler (2001), por ejemplo, elgé- algunos estudios de género han tomado como ob
nero se construye a través de las relaciones de poder, a través de las segmentos de mujeres jóvenes, incluso a jóvenes
restricciones normativas que no sólo producen, sino que además reduciendo su condición a mero escenario donde
regulan y norman los diversos seres corporales. De esta manera se identidades de género, focalizando su atención en
construye lo "natural" y lo "normal" en la sexualidad. El género y institucionales (embarazo adolescente, prevención
la heterosexualidad son concebidos como "naturales" porque el des, etcétera), más que en las de los jóvenes, po
sistema está construido con base en dicotomía s complementarias, captar la particularidad de sus prácticas. Desde nu
hombre / mujer, y a la vez opuestas, heterosexualidad '" normal / lance 'también es negativo: limitamos a sólo dar c
homosexualidad = anormal. Sin embargo, como observa Vendrell tencia de las muchachas o de grupos de homosexua
(2005) en un estudio exploratorio sobre las prácticas sexualesode .diciones de desigualdad e inequidad en que las rn
·algunos jóvenes' de Cuerna vaca, Morelos, que mantienen relaciones desenvuelven en el país, nos quita los ángulos de
con personas de cualquier "sexo / género" y que eluden identificar- captar las prácticas y narrativas que los actores cons
se mediante las etiquetas sexuales tradicionales, ambas dicotomías experiencias de vida y sobre sus entomos más ce
están en la actualidad naturalizadas y ambos modelos presionan' ¿Cómo nos pueden servir las recientes redefinicione
sobre sus miembros para adscribirse a los "guiones sexuales" co- ro, el sexo, la sexualidad, el cuerpo (generizado
herentes, 'pautados y bien delimitados, sancionando, si no expul- imbricación multidimensional con los poderes de
sando, a aquellos que no se ajustan a ellos.
y la capacidad de cada uno de ellos para normar y
Las fronteras, distinciones, entre sexo y género se han vuelto pos y conductas humanas? La EN] 2005 identificó
cada vez más borrosas / difusas a partir de estudios que presentan sexualidad como uno de los cambios más fuertes
no sólo las prácticas sexuales, sino el cuerpo sexuado, en sí mismo, por los jóvenes en relación con la generación prece
GÉNERO, CLASE Y ETNIA

Estas discusiones escriben nuestra agenda de pendientes en el Appadurai, Arjun, La modernidad desbordada. Dimen
conocimiento de amplios segmentos de jóvenes, como las mujeres, la globalización, Buenos Aires, Trilce / fCE, 2001.
los homosexuales, lesbianas, gays, bisexuales y otros que no quie- Balandier, Georges, Antropo-légicas, Barceiona, Pen
ren ser etiquetados en ninguna identidad colectiva y menos en pa- Beck. Ulrich (comp.), Hijos de la libertad, Buenos Air
tologías médicas o psicológicas: ellos / ellas son un reto intelectual Bourdieu, Píerre, "Espacio social y génesis de las c
que enriquecerá el campo de estudios sobre la juventud. núm. 2, México, julio-agosto de 1985, pp. 24-35
Clases sociales tradicionales que se descomponen, y otras emer- ____ , La distinción: criterio y bases sociales del gust
giendo y necesitadas de capital social para legitimarse como tales,
1988.
actores juveniles de diversos estratos y condiciones construyendo Butler, [udith, El género en disputa. El feminismo y
redes y capital social que les permitan acceder informal, e incluso identidad, México, Paidós / Programa Universita
ilegalmente, al mercado corporativo o a la institucionalidad en re- Género, UNAM, 2001.
configuración. Jóvenes indígenas migrantes fuera de sus lugares ___ _,. Cuerpos que importan. Sobre los límites mat
tradicionales y forméndpse en lugares transfronterizos; géneros e del "sexo", Buenos Aires, Paidós, 2002.
identidades de género que constriñen, por su carácter normativo, a Caputo, Virginia, "Anthropology's Silent 'Others'
los sexualmente no identificados y a mujeres y hombres jóvenes que oí Some Conceptual and Methodological Issue
no se comportan "como debieran" ni genérica ni sexualmente, Youth and Children's Cultures", en Vered Am
optando por replegarse hacia el interior, hacia su individualidad. Wu)ff (eds.), Youth Culiures. A Cross-Culturoi Pe
~taInOS ante una realidad que no deja de mutar y ante actores juve- Routledge, 1995, pp. 19-42.
niles mutantes con habilidades y recursos diferenciados y desiguales Cubides, Humberto et al. (eds.), viviendo a toda. Jóv
cuyas prácticas, representaciones e imaginarios, exigen la cons- turales y nuevas sensibilidades, Bogotá, Funda
trucción de epistemologías de frontera que den cuenta de su agen- Central/Siglo del Hombre, 1998.
ciamiento y el papel central que ocupan en la construcción de los Eisenstadt, Sarnuel, From Generation to Generation,
mundos c~ntemporáneos.
Free Press, 1956.
Encinas,José, Bandas juveniles, perspectivas teóricas, Méx
Feixa, Carles, El reloj de arena. Culturas juveniles en Mé
BIBLIOGRAFÍA sa Joven / SEP, 1998. •
Gallino, Luciano, Diccionario de sociología, México, S
Alarcón, Alejandro el al., "Las bandas juveniles en una zona industrial Garay, Adrián de, Integración de los jóvenes en el si
de la Ciudad de México", tesis de licenciatura, Escuela T:-Jacionalde Prácticas sociales, académicas y de conSU1J1Ocultural,
Antropología e Historia, 1986 .
2004.
• Amit Talai, Vered, "ConcJusion. The 'Multi' Cultural oí Youth", en·Ye- Garda Canclini, Néstor, Diferentes, desiguales y iesco
red Amit Talai y Helena Wulff (eds.), Youth Cult u res. A Cross-Cul- la interculturalidad, Barcelona, Gedisa, 2004.
iural Perspectioe, Londres, Routledge, 1995, pp. 223-233.
-- __ , "La modernidad en duda", en 1M] / SEP,
Anguíano, Marina, "Jóvenes huicholes migrantes de Nayarit", en Diario del Siglo XXI. Encuesta Nacional de Juventud 2000,
de Campo, supl. 23, México, 2002, pp. 37-50.' pp. 59-73.
Giddens, Anthony, Modernidad e identidad del yo. El yo y la sociedad en la Martínez c., Regina, "La invención de la adolescencia:
época contemporánea, Barcelona, Península, 2000. . banas en Guadalajara", en I(iario de Campo, supl. 2
Goffman, Erving, Los momentos y sus hombres/Yves Winkin (sel.), Bar- pp. 23-36.
celona, Paidós, 1991. _ Y Angélica Rojas, "Jóvenes indígenas en l
Gomezjara, Francisco y Fernando Villafuerte, Las bandas en tiempo de gociación de las identidades en nuevos espaci
crisis, México, Nueva Sociología, 1987. Antropologías Y Esuuiios de la Ciudad, núm. 1, M
Guerrero, Antonio, "Rockeros y gruperos. Presentación a partir de la 105-122.
Encuesta Nacional de Juventud 2000", en JOVENes. Revista de Es- _--y Guillermo de la Peña, "Migrantes y comu
tudios sobre juventud, núm. 21, año 8, México, Causa Joven / SEP, en Guadalajara", en Pablo Yanes et al. (coords.)
2004, pp. 76-87. indígenas Y etnicidad, disponible en http: / / www
Hall, Stuart y Tony Jefferson (eds.), Resistance Through Rituals. Youth Sub- mx / libros / indigenas / seminario_permanente_20
culiures in Post-War Britain, Londres, Routledge, 1998. Mora, Teresa et al., "La etnografía de los grupos ori
Hopenhayn, Martín, "El nuevo 'mundo del trabajo y los jóvenes", en mígrantes indígenas de la ciudad de México", e
JOVENes: Revista de Estudios sobre juventud, núm. 20, año 8, México, al. (coords.), Ciudad, pueblos indígenas y etnicida
Causa Joven / SEP, 2004, pp. 54-73. http://www.equidad.dLgob.mx/libros / indige
Instituto Mexicano de la Juventud / Secretaría de Educación Pública, permanente_2004.pdf
Jóvenes Mexicanos del Siglo XXI. Encuesta Nacional de juventud 2000, Nateras, Alfredo, "Metal y tinta en piel, la alteración
México, 2002. poral: perforaciones y tatuajes en jóvenes urba
--_-" jóvenes Mexicanos. Encuesta Nacional de Juventud 2005, México, Nateras (cornp.). jóvcncs, culturas e identidades
2007. UAM/Porrúa, 2002, pp. 187-205. '
[ames, Allison, "Talking of Children and Youth. Language, Sociali- ___ ...•"Trazos y trayectos de lo emergente juvenil
zation and Culture", en Vered Amit Talai y Helene Wulff (eds.), en Rossana Reguillo et al. (coords.), Tiempo de híb
Youth Cuitures. A Cross-Cultural Perepcciioe, Londres, Routledge, jóvenes México-Catallliia, México, SEP / 1M)/ Secr
1995, pp. 43-62. Joventut-CJIMU,2004, pp. 101-113.
León, Fabrizio, La banda, el consejo y otros panchos, México, Grijalbo,
1985.
.
Ortega Conzález, Zósimo, "El derecho triqui de Xum
'
urbano", en Revista Crítica jurídica, núm. 18, Mé
Maffesoli, Michel, El tiempo de las tribus, Barcelona, Icaria, 1990. nible en http://www.triquis.org / html / module
Marcial, Rogelio, jóvenes y presencia colectiva. Introducción al estudio Perea R, Carlos Mario, "Joven, crimen y estigma", e

.
de las culturas juveniles del siglo xx, México, El Colegio de Jalisco,
2001.
de Estudios sobre juventud, núm. 20, año 8, México
2004, pp. 140-168.
___ -" Andamos como andamos porque S01110Scomo SOI1l0~: culturas juve- Pérez Islas, José Antonio, "Integrados, ~ovilizados,
niles en Guadalajara, México, El Colegio de Jalisco, 2006. de juventud en América Latina", en Caries Fe
Marín, Martha y Germán Muñoz, Secretos de mutantes. Música y creación Movimiel1tos juvel1iles el1 América Latina. Pachucos
en las culturas juveniles, Bogotá, Siglo del Hombre / Universidad tas, Barcelona, Ariel, 2002, pp. 123-150.
Central, DIUC,2002.
Pérez Islas, José Antonio, "La juventud: un concepto en disputa", en Urteaga Castro-PoZO, Maritza, "Imágenes juveniles
José Antonio Pérez Islas el al. (coords.), Teorías sobre la [uucntud. Las derno", en José Antonio Pérez Islas y Maritza Urte
miradas de los clásicos, México, Miguel Ángel Porrúa / ClI) I UNAM / (COOrds.), Hist(Jrias de los jóvencs CII México. 511 prese

IISUE / CRIM / SES / SI), 2008, pp. 9-33. México, SEI' / 1M) / AGN, 2004, pp. 33-89.
Pérez Ruiz, Maya L., "Jóvenes indígenas y su migración a las ciuda- __ "Espacialidades juveniles. Usos, apropiacio
des", en Diario de Campo, supl. 23, México, 2002, pp. 7-20. nes del espacio urbano y contemporáneo", en JO
___ (coord.), jóvenes indígenas y globalización en América Lalina, ES/l/dios sobre [uucntud, núm. 23, año 9, México, C
México, INAH, 2008. 2006, pp. 210-228.
Pine, Francés, "Gender", en Alan Bamard y [onathan Spencer (eds.), __ -" "La construcción juvenil de la realidad. Jó
Encuclopedia of Social and Cultural Anthropology, Londres, Routled- contemporáneos", tesis de doctorado, UAM lztap
ge, 2002, pp. 253-263. Valenzuela, José Manuel, ¡A la brava eset, México, Cole
Piña Mendoza, Cupatitzio, Cuerpos posibles ... cuerpos modificados. Ta- Norte, 1988.
tuajes y perforaciones en jóvcncs urbanos, México, SEP / 1M], 2004. • _-- ...•
, Vida de barro duro. Cultura popular juvenil
Reguillo, Rossana, En/a calle otra vcz. Las bandas: identidad urbana y usos Universidad de Guadalajara / COLEF, 1997.
de la comunicación, México, ¡TESO, 1991. ___ --1, "La siesta del alma. Los góticos y la sim

___ --, Emergencia de culturas [uoeniles. Estrategias del desencanto, Bue- JOVENes. Revista de Estudios sobre [uocntud, núm.
nos Aires, Norma, 2000. Causa Joven / SEP, 1999, pp. 24-61.
-t-r-__ --" "Legitimidad(es) divergentes", en jqvcnes Mexicanos. Encuesta
Vendrell F., [oan, "Sexualmente no identificados. Ap
Nacional de juventud 2005, t. 1, México, 1M] / SEP, 2007, pp. 77-133. madismo sexual entre jóvenes mexicanos", en Re
Rosaldo, Renato, Cultura y verdad. Nueva Propuesta de análisis social, AI1/ropología Sexual, núm. 1, vol. 1, México, 2005
México, GrijaIbo / CNCA, 1991. Vergara, Abilio, "Desde la posciudad, repensando
Thornton, Sarah, Club Culiures. Music, Media and Subcultural Capital, tropología. Antropología urbana como producci
Cambrigde, Wesleyan University Press / University Press of New Antropologías y Estudios de la Ciudad, núm. 1, vol
England, 1996.' • junio de 2005, pp. 187-227.
Urteaga Castro-Pozo, Maritza, "Chavas activas punks: la virginidad Zermeño, Sergio, "Nuevos planteamientos en la rela
sacudida", núm. 40, vol. xr~ México, 1996a, pp. 97-118. puIar-juventúd estudiantil. Los estudiantes y e
____ , "Flores de asfalto. Las chavas en las culturas juveniles", en dificil", ponencia en el II Seminario Latinoame
JOVENes. Revista de Estudios sobre juventud, núm. 2, año 1, México, gaciones sobre Juventud, México, 1988.
Causa Joven / SEP, 1996b, pp. 50-65.
___ --""Organización juvenil", errlosé Antonio Pérez Islas y Patricia
Maldonado (coords.), Jóvenes: una eva{uación del conocimiento. La
investigación sobre juventud en México 1986-1996, México, Causa
Joven / SEP, 1996c, pp. 150-26l.
-----1, Por los territorios del rock.Identidades juveniles y rock mexicano,
México, Causa Joven / CNCA / SEP, 1998.

Das könnte Ihnen auch gefallen