El contrato de intermediación inmobiliaria es el negocio jurídico por el que una persona

(cliente) encarga a un agente inmobiliario, la compra, venta o arrendamiento de un

inmueble (vivienda, terreno, departamento, estacionamiento, etc.) bajo unas condiciones
previamente pactadas. Esto es, el profesional tiene como objetivo facilitar la
aproximación entre el comprador y el vendedor con el objetivo de que la compraventa
se perfeccione.

En el presente artículo, abordaremos el caso de Pedro quien es propietario de un

departamento de 100 m² ubicado en el distrito de Miraflores, el cual desea arrendar a
US$ 1,000.00 (Un Mil con 00/100 Dólares Americanos)[1] mensuales, encargando ésta
gestión a María, una agente inmobiliario, suscribiendo para ello un contrato de
intermediación inmobiliaria.

En ese sentido, una vez María haya encontrado un arrendatario (inquilino) para Pedro,
María como forma de pago por su comisión y servicios como agente inmobiliario,
cobrará la totalidad del monto correspondiente al primer mes de la renta mensual del
departamento.

Teniendo en cuenta los términos del negocio inmobiliario, detallaremos las

características principales del contrato de intermediación inmobiliaria, así como la
forma en que se deberá redactar dicho contrato, de manera que resulte beneficioso para
ambas partes.

1. Consignar los datos personales del propietario y del agente inmobiliario,

determinando el estado civil de Pedro (si está casado bajo el régimen patrimonial de
sociedad de gananciales, y es un bien común deberá suscribir el contrato
conjuntamente con su cónyuge).
2. Identificar la ubicación del inmueble que se venderá, así como el número de partida
registral donde conste que Pedro es el propietario del departamento.
3. Determinar con claridad el precio de arrendamiento del departamento, así como la
forma de pago de la comisión que cobrará María por su labor de intermediación (la
totalidad del monto correspondiente al primer mes de renta). Indicando además, en
qué momento se cancelará la comisión a María (por ejemplo a la firma del contrato
de arrendamiento).
4. Señalar el plazo de vigencia que tendrá éste contrato, pudiendo establecerse una
prórroga automática de dicho plazo, previa comunicación; vale decir si se pactó que
el contrato sea por 3 meses, una vez finalizado estos 3 meses el propietario puede
comunicar a María que el contrato se amplíe a 3 meses más.
5. Por último, se puede pactar una cláusula de exclusividad a favor de María, mediante
la cual el propietario se compromete a no contratar a otro agente inmobiliario, caso
contrario deberá pagar a dicho agente un porcentaje establecido (3% por ejemplo)
del precio de arrendamiento del departamento, como una indemnización por daños y
perjuicios a favor de María.
Es muy importante tener en cuenta que al contratar a un agente inmobiliario, se está
dotando de seguridad la operación inmobiliaria, puesto que estos profesionales poseen
una mejor información sobre la situación actual del mercado. Asimismo, se encargan de
publicitar de forma adecuada el inmueble, investigar y analizar el perfil de los
candidatos a comprar o alquilar el inmueble, entre otras funciones.

Por otro lado, la SOCIEDAD PERUANA DE BIENES RAÍCES, pensando en Ud.

lector pone a su disposición la plataforma denominada “INMOCONTRATOS”,
mediante la cual puede descargar modelos de contratos inmobiliarios más usuales en el
mercado de bienes raíces.