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PERMANENTE EN BOGOTÁ?
CULTURA AMBIENTAL
POLITECNICO GRANCOLOMBIANO
BOGOTA D.C
2019
¿LA MALA CALIDAD DEL AIRE ES UN PROBLEMA QUE TIENDE A SER
PERMANENTE EN BOGOTÁ?
“A diferencia del agua, no puedes comprar aire potable, no puedes elegir el aire que
respiran tus hijos. Todos vamos a respirar el mismo aire contaminado. Entonces es un
asunto que nos compete a todos”.
Bogotá desde el año 2018 ha venido presentando una crisis como nunca antes en cuanto
a contaminación del aire. fue en ese año que se decretó la alerta amarilla para ciertas zonas
de la ciudad debido a que los niveles de PM habían aumentado hasta un punto tan
peligroso que los capitalinos que vivían en estas zonas tuvieron que tomar medidas como
no hacer actividad deportiva afuera, restringir las salidas con niños menores de dos años,
y el uso de tapabocas N95. Durante este periodo también se implementó un pico y placa
especial, con el propósito de reducir la contaminación, pero ¿qué pasó después de que
bajaron los niveles de PM y todas estas medidas ya no eran necesarias? pues parece que
todo volvió a la normalidad, sin embargo, seguimos alimentando un estilo de vida
altamente contaminante, que a largo plazo puede provocar que la alerta amarilla que
vivimos en el año 2018 se convierta en nuestro día a día.
Esto no solo quiere decir que que nuestro clima será afectado, sino también la
disponibilidad de agua dulce disponible para el consumo humano se ve afectada debido
al incremento del nivel del mar. En Bogotá el aumento o disminución muy prolongada de
la temperatura, así como las granizadas son algunos de los efectos visibles del cambio
climático, producto de la contaminación del aire.
De acuerdo con los análisis realizados por el Ministerio de Ambiente y Desarrollo
Sostenible la contaminación atmosférica en Colombia es uno de los problemas
ambientales de mayor preocupación para los colombianos por los impactos generados
tanto en la salud como en el ambiente ya que provoca enfermedades respiratorias como
asma o cáncer de pulmón, y pueden aumentar el riesgo de enfermedades de corazón y los
vasos sanguíneos.
A los problemas de contaminación que se han evidenciado con altos índices de afectación
ambiental y a la salud de los habitantes, debemos todos, las autoridades distritales y los
ciudadanos reducir la contaminación de la ciudad, evaluar cuales son las políticas
ambientales nacionales y distritales y asumirlas con criterio social solidario, a fin entre
otros de mejorar las condiciones de habitabilidad y salud pública.
Las políticas públicas deben ser sustentables y permanentes en el tiempo, no pueden ser
tema de un día o una semana porque las mediciones del IDEAM o de la secretaría del
medio ambiente dan para una alerta naranja o roja, el nivel de actuación queda limitado a
la implementación de medidas correctivas, más no preventivas, eso solo demuestra la
improvisación con la que actúan las autoridades y el conformismo ciudadano, nos falta
liderazgo y líderes.
Debemos tener en cuenta que la legislación colombiana es más laxa que la sugerida por
la Organización Mundial de la Salud (OMS). Si, en cambio, utilizáramos los límites
sugeridos por la OMS con alerta o sin ella, obliga a la ciudad a establecer planes claros
para corregir este incumplimiento y proteger a los ciudadanos. La capital no puede
depender de las condiciones climáticas para garantizar un entorno sano.
Concejo de Bogotá, Ciudades con mayor riesgo por el cambio climático, Recuperado de:
http://concejodebogota.gov.co/bogota-entre-las-ciudades-con-mayor-riesgo-por-el-
cambio-climatico/cbogota/2019-02-21/143027.php