La humanidad y sus relaciones intrínsecas han formado avances culturales a lo largo
de la vida, esta construcción psicoevolutiva ha creado una cúspide dentro de la sociedad misma, el comportamiento motivacional hacia una persona hace crecer un inconmensurable cambio en sus diferentes ámbitos pero dentro de esta ha surgido una necesidad al tratar de lograr a toda costa la autorrealización escudriñando el crecimiento para sacar lo mejor de sí sin criticar ni condenar ni quejarse; sabemos que las relaciones humanas son la base para lograr el éxito en los objetivos propuestos durante el transcurso de la vida; tan solo el hecho de relacionarse y compartir con otras personas es todo un reto y existen barreras que nos hacen dudar y con aprecio y nuestra inteligencia al relacionarnos las podemos superar, para lograr relacionarnos y alcanzar nuestro más alto potencial teniendo en cuenta que tratar bien a las personas no es más que una forma de mantenerse al margen de los requerimientos de la sociedad, pero el hecho de interactuar con las personas no es solo el hábito de regirse al margen establecido por años sino que al momento de mostrar interés ante alguien se logra mantener un vínculo que a veces nos permite formalizar relaciones través del tiempo; este tipo de relación se ira salvaguardando, dependiendo de una serie de aptitudes cotidianas y de comportamiento que nos permiten ser más agradables ante las personas que nos rodean en cuanto a la opinión, inclusión y aceptación de los aportes que nos son compartidos de las personas, los cuales tienden a formarnos como personas tolerantes y capaces de relacionarnos con una mayor facilidad. Relacionarse con los demás tiene un giro entorno a ellos, demostrándoles que tan importantes pueden llegar a ser para nosotros, expresándoles y haciéndoles ver cuánto son valorados simplemente al realizar cosas tan básicas por ellos, corresponder incluye una serie de conexiones ligadas al razonamiento, las emociones, las acciones, una fuerte convicción verídica y creíble donde las personas pueden o no escuchar tus palabras pero perciben tu actitud e interés hacia ellas, esta es la que te permitirá establecer relaciones con ellos y ganarte su confianza o repulsión. Por esto debes apelar a su sentido de la vista, su intelecto y emociones. Es de gran importancia tener un buen relacionamiento con las personas que nos rodean, el saber entender y comprender tanto nuestros puntos de vista como los de los demás, ayudan a facilitar buenas interacciones en la comunicación. El poder aceptar nuestros errores será de gran vitalidad para demostrar cuanto nos importa la buena relación con las personas con quienes compartimos nuestro entorno. El hecho de entablar relaciones con los demás no es algo que ocurrirá por sí solo, para lograrlo se debe de tener la intensión de hacerlo y eso siempre requiere tener pericia para basar los hechos en realidad; ahora bien, es de suma importancia aplicar preceptos simplemente humamos, somos animales racionales de costumbres basadas en la imitación evolutiva de la especie, la necesidad de comunicarnos ha dado grandes avances, inicialmente al desarrollo de las cuerdas vocales, hasta que hoy por hoy logramos una gran capacidad para relacionarnos interpersonalmente poder vivir y ser aceptados ante el mundo, lo interesante de una persona al pasar de los años siempre serán sus modales, su buena educativa, corrección en sus actos y en la manera de cómo afronta las diversas decisiones que lo exponen frente a un halo mental, este libro nos abre las puertas y nos ayuda a comprender de una mejor forma el “comportamiento humano”. Nos podríamos remontar a un ejemplo muy cotidiano expresado directamente en las oficinas de cualquier empresa, si las secretarias de atención al cliente reciben elogios y aprecio hacia su forma de trabajo la disposición ante nuestras peticiones será muy buena, en cambio si nadie les retribuye su trabajo tendrán una actitud cerrada y no darán todo de sí para realizar las labores que se les encomiendan. Este ejemplo nos demuestra que debemos influenciar a la persona para que a partir de nosotros ellos se empeñe en nuestra idea y tomen como suya la labor y no sientan que es una orden sino una petición. Siempre debemos recordar que la otra persona se sienta involucrada en la decisión y así podamos tener un mejor resultado en el proceso, dejar de lado el egoísmo y trabajar de una manera más compacta y resolutiva, ineficaz somos tan despreciables y egoístas que no pedimos irradiar algo de felicidad y rendir un elogio honrado sin tratar de obtener algo a cambio si nuestras almas son de tal pequeñez iremos a un dogma que embargue nuestras almas de egoísmo. Para poder coexistir y darle forma a una mejor visión en las influencias humanas que tiene cada persona en la propagación de sus cualidades y cosas en particular. En pocas palabras construir versiones de nosotros mismos que sean importantes para los demás sinceramente. “Quien puede hacer esto tiene al mundo entero consigo; quien no puede, marchar solo por el camino “debemos aceptar nuestros errores si sabemos que de todas maneras será demostrado nuestro error ¿no es mucho mejor ganar al frente y reconocerlo por nuestra cuenta? Cuando tenemos razón tratemos de atraer nuevamente y con tacto a los demás con nuestra manera de pensar y cuando nos equivocamos admitirlo rápidamente y con entusiasmo para no desencadenar un circulo de enemistad y desfase emocional.