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PRESENTACIÓN
El documento que presentamos a continuación es fruto del trabajo realizado por un equipo
profesional multidisciplinario durante los meses de mayo y agosto de este año en distintas
zonas del país.
(i) Establecer costos de referencia para fijar las tarifas a considerar en los contratos del
PCR, variables según tipo y nivel de servicio del camino;
El estudio se inició en el mes de mayo del presente año, con una presentación general ante los
funcionarios del PCR, encabezados por su Director Ejecutivo y los miembros del “Grupo de
Trabajo”. Previamente, a fines del mes de abril, aprovechando la estadía de las misiones del
Banco Mundial y del BID, el Equipo Técnico expuso los alcances de su propuesta, recibiendo los
comentarios de la misión.
Durante el mes de mayo, se desarrollaron numerosas reuniones con el “Grupo de Trabajo” a fin
de exponer los avances del estudio e identificar una muestra de caminos y microempresas
representativa que permita, de un lado, validar las propuestas de tipología y niveles de servicio,
y de otro, una razonable estimación de las cargas de trabajo. El 15 de mayo presentamos
nuestro Plan de Trabajo y el 30 del mismo mes el Primer Informe.
En el mes de junio y primeros días del mes de julio el Equipo Técnico realizó las visitas de
campo a 6 oficinas zonales el PCR(1). El 16 de julio se presentó el Informe de Medio Término,
conteniendo la propuesta de los productos más importantes de la consultoría. El 19 y 20 de
julio participamos en el taller de fortalecimiento institucional “El PCR y los Retos de la II Fase”,
oportunidad en la que presentamos el estudio a un auditorio conformado por funcionarios de
las gerencias de la sede central y por los profesionales de las oficinas zonales de todo el país.
El Equipo Técnico del Consultor estuvo compuesto por el Ing. Civil Julio Escudero Meza, como
director del estudio; el Ing. Samuel Hómez López (2) como asesor principal; los Ings. Gustavo
Atahualpa, Gary del Carpio, Luis Vásquez, especialistas viales; el Eco. Humberto Villaverde,
especialista social; el Eco. Mag. en Finanzas Roddy Rivas-Llosa, especialista informático; los
señores José Infante, Oswaldo Molina, Andrés Pun, asistentes de informática; los Bachilleres en
Ingeniería Civil y Economía, Miguel Castro y Diana Prudencio, como asistentes del director del
estudio; y 11 ex monitores viales y administrativos que apoyaron eficazmente el trabajo de
campo.
(1)
Cajamarca, Ancash, San Martín, Huánuco-Pasco, Puno y Madre de Dios
(2)
Administrador Vial del Instituto Nacional de Vías -INVIAS- de Colombia
Queremos agradecer el gran apoyo recibido por los profesionales del PCR, en especial de los
Directores Ejecutivos Ing. Mario Quiroga G. (3) y Eco. Raúl Torres T.(4), de los miembros del
“Grupo de Trabajo”, Ing. Oscar Chávez, Gerente de Mantenimiento; Ings. Roberto Peralta,
Jorge Urdanivia y Napoleón Bazán, Jefes de las Oficinas Zonales de Ancash, Huánuco-Pasco y
Madre de Dios, respectivamente; Ing. Ana Orcón, de la Gerencia de Mantenimiento; y Arq. Luis
Sotelo, de la Gerencia de Promoción Social y Desarrollo Institucional.
El Informe Ejecutivo que presentamos pretende sintetizar los aspectos más importantes
relacionados con el estudio; expone, en primer lugar, las principales conclusiones y resultados
del estudio; y, finalmente, las recomendaciones.
Por razones de orden didáctico, y a fin de mantener la secuencia del estudio, la presentación se
ha ordenado de la siguiente manera:
(i) Metodología para determinar la tipología y el nivel de servicio de los caminos bajo
mantenimiento rutinario del PCR;
El Equipo Técnico del Consultor espera que los productos elaborados contribuyan al
afianzamiento de la gestión del mantenimiento de los caminos rurales a través de
microempresas, otorgándole la necesaria sostenibilidad al sistema, tal que permita expandir el
modelo a un programa de alcance nacional que coadyuve a mejorar la calidad de vida de la
población más pobre, justamente aquella asentada en el medio rural.
(3)
mayo y agosto 13 del 2001
(4)
a partir del 13 de agosto del 2001
A. TIPOLOGÍA
1. Objetivo: Establecer un modelo sencillo y de fácil aplicación que permita clasificar los
kilómetros de un camino en grupos homogéneos, según sus demandas de mantenimiento,
evaluando los principales factores relacionados con sus características físicas y con las
particularidades del entorno en que se ubican.
3. Las variables representativas para establecer las diferencias entre los segmentos de un
camino son:
Relieve:
Pendiente Longitudinal;
Estabilidad de Talud.
Drenaje:
Número de Obras de Drenaje;
Precipitación Pluvial.
Calzada;
Vegetación.
Tipo I: Tramos que discurren por terrenos de relieve plano u ondulado, con taludes
estables, generalmente de altura menor a 3 metros; tienen, en promedio, 2 obras de
drenaje por kilómetro, eventualmente podrían tener 3 ó 4 estructuras en segmentos
localizados; ancho promedio de la calzada hasta 4.5 metros, esporádicamente mayor;
vegetación escasa (en la sierra), ocasionalmente moderada o abundante (en la selva).
Son tramos con características o condiciones muy favorables, que determinarán menores
cargas de trabajo en las actividades del mantenimiento rutinario; estas características se
encontrarán preferentemente en los caminos ubicados en los valles interandinos y en la
sierra alta o puna.
Tipo II: Tramos que discurren por terrenos de relieve ondulado o accidentado,
ocasionalmente ondulado, con taludes inestables, generalmente de alturas mayores a 3
metros, pero menores a 7; tienen en promedio 3 a 4 obras de drenaje por kilómetro,
eventualmente 5 o más; ancho promedio de la calzada hasta 4.5 metros, esporádicamente
mayor; vegetación moderada a abundante (en la selva), eventualmente escasa (en la
sierra).
Tipo III: Tramos que discurren por terrenos de relieve accidentado o muy accidentado,
con taludes inestables, mayores a 7 metros; generalmente tienen más de 5 obras de
drenaje por kilómetro, aunque también se encontrarán caminos con 3 a 4 obras de drenaje
por kilómetro; ancho promedio de la calzada hasta 4.5 metros, esporádicamente mayor;
vegetación moderada a abundante (en la selva), eventualmente escasa (en la sierra).
Son caminos con características muy desfavorables, que determinarán mayores cargas de
trabajo en el mantenimiento rutinario; estas características se encontrarán preferentemente
en los caminos ubicados en la selva alta y en la sierra intermedia
B. NIVELES DE SERVICIO
1. Objetivo: Establecer un modelo sencillo y de fácil aplicación que permita agrupar los
caminos según sus demandas de mantenimiento, vinculadas a su importancia, uso y nivel
de transitabilidad y/o accesibilidad deseados.
Nivel de Servicio Alto (A): Bajo esta categoría califican todos los caminos de la red
nacional o departamental, actualmente bajo mantenimiento del PCR; igualmente, los
caminos vecinales con altos flujos vehiculares y reconocida importancia socio-económica por
servir para el transporte de la producción local hacia los mercados regionales y/o
nacionales.
Permiten el tránsito de todo tipo de vehículos, sin restricciones, durante toda época del año
y bajo cualquier condición climática. El mantenimiento periódico debe ser efectuado cada
tres años. La respuesta, ante la eventualidad de alguna emergencia que afecte la
transitabilidad debe ser inmediata. Las microempresas que atiendan el mantenimiento de
estos caminos deben prever la conformación de piquetes o turnos extraordinarios,
especialmente en épocas de lluvia, para atender las emergencias que pudieran ocurrir. PCR
debe reservar recursos y promover mecanismos de participación de los municipios
El tránsito puede ser restringido, durante períodos cortos no mayores a un día, cuando se
presenten condiciones climáticas adversas. El mantenimiento periódico debe ser efectuado
cada cuatro años. Las microempresas que atiendan el mantenimiento de estos caminos
deben prever la conformación de piquetes o turnos extraordinarios, especialmente en
épocas de lluvia, para atender las emergencias que pudieran ocurrir. PCR debe reservar
recursos y promover mecanismos de participación de los municipios provinciales, distritales,
y/o gobiernos regionales (vía la suscripción de convenios) para atender el mantenimiento
extraordinario que pudieran requerir estos caminos.
C. MUESTRA DE CAMPO
1. En coordinación con el “Grupo de Trabajo” y los Jefes Zonales del PCR se identificó una
muestra de caminos y microempresas representativas tal que permita validar las
metodologías planteadas para establecer la tipología y el nivel de servicio de los caminos
bajo mantenimiento del PCR; así como una razonable estimación de las cargas de trabajo
para cada categoría o grupo definido.
Trece (13) caminos (40.6%) califican en el Nivel de Servicio Alto (A); mientras que los 19
restantes (59.4%) se agrupan en el Nivel de Servicio Básico (B). Es importante señalar que
de los trece caminos considerados en el nivel (A), 10 son departamentales o nacionales.
En opinión del Equipo Técnico del Consultor, la metodología para determinar el nivel de
servicio de los caminos es consistente y válida para su aplicación en el resto de caminos a
cargo del PCR.
CAMINOS BAJO
RED RED RED
MANTENIMIENTO
DEPARTAMENTO NACIONAL DEPARTAMENTAL VECINAL
DEL PCR
(km) ( % ) (km) ( % ) (km) (%) (km) (%)
ANCASH 1,297 12% 44 3.4% 161 12.4% 1,092 84.2%
APURÍMAC 1,132 10% 218 19.3% 914 80.7%
AYACUCHO 1,373 13% 506 36.9% 867 63.1%
CAJAMARCA 1,438 13% 49 3.4% 65 4.5% 1,324 92.1%
CUSCO 1,114 10% 22 2.0% 524 47.0% 568 51.0%
HUANCAVELICA 1,062 10% 258 24.3% 804 75.7%
HUÁNUCO 1,087 10% 155 14.3% 254 23.3% 678 62.4%
JUNÍN 660 6% 77 11.7% 583 88.3%
MADRE DE DIOS 182 2% 182 100.0%
PASCO 428 4% 158 36.9% 270 63.1%
PUNO 630 6% 110 17.4% 520 82.6%
SAN MARTÍN 397 4% 20 5.1% 124 31.2% 253 63.6%
TOTAL 10,800 100% 291 2.7% 2,454 22.7% 8,055 74.6%
Fuente: Gerencia de Promoción Social y Desarrollo Institucional del PCR – Agosto 2001
3. Una proyección realizada en base a los resultados obtenidos nos muestra la probable
distribución, por tipo y nivel de servicio, de los caminos actualmente bajo mantenimiento
del PCR.
PROYECCIÓN: CLASIFICACIÓN DE LA RED POR TIPO Y NIVEL DE SERVICIO
Por Tipo: 3,153.40 km. (29.20%) se agruparían en el Tipo I; 5,407.2 km. (50.07%) en el
Tipo II; y, 2,239.40 (20.73%) en el tipo III.
Por Nivel de Servicio: 6,959.70 km. ( 64.44%) se clasificarían en el Nivel de Servicio Básico
(B); mientras que 3,840.30 km. (35.56%) en el Nivel de Servicio Alto (A)
E. NORMAS TÈCNICAS
1. Uno de los objetivos de la consultoría fue la actualización preliminar del Manual Técnico
para el Mantenimiento Rutinario de los Caminos Rurales. En la medida en que este manual
debía recoger las mejores prácticas identificadas durante el estudio, una de las tareas
previas que el Equipo Técnico realizó, a partir del trabajo de campo sobre una muestra
representativa de 30 microempresas exitosas, fue identificar las actividades de
mantenimiento rutinario habitualmente desarrolladas por las microempresas, y a partir de
ello, establecer las normas de cantidad o cargas de trabajo, por tipo y nivel de servicio del
camino; así como definir las normas de ejecución y de evaluación para cada una de las
actividades determinadas.
2. En ese sentido, el estudio incluye una sección referida a Normas Técnicas en la que se
plantea una serie de disposiciones orientadas a estandarizar -en base a las mejores
prácticas-, los procedimientos de ejecución; establecer pautas para la medición de
rendimientos y productividades; así como introducir mecanismos de evaluación que
aseguren el cumplimiento de los indicadores de mantenimiento.
Las Normas Técnicas comprenden: (i) Normas de Ejecución; (ii) Normas de Cantidad; y,
(iii) Normas de Evaluación.
Establece una codificación de las actividades en función a los elementos del camino; define
con mayor precisión la descripción, objetivos y procedimientos de ejecución de cada
actividad; redefine la conformación de las cuadrillas tipo y las unidades de medida; precisa
el número mínimo de herramientas y los materiales necesarios para cada actividad; e
incluye, en el rubro indicadores de comprobación, las tolerancias y respuestas que servirán
para evaluar el grado de cumplimiento del trabajo.
2. Las normas de ejecución establecen, igualmente, rendimientos, que no es otra cosa que
la producción promedio que debe alcanzar un grupo de trabajadores en la ejecución de una
determinada actividad.
3. Una de las falencias más notorias del actual sistema de mantenimiento rutinario es la
ausencia de criterios para priorizar la ejecución de las actividades de mantenimiento, las
microempresas realizan sus labores sin una idea definida de las actividades cuya
desatención podría tener mayor repercusión en la seguridad del viaje, con el consecuente
riesgo de la integridad física de los usuarios de la vía.
2. Para estimar las cargas de trabajo, se consideró, igualmente, la frecuencia con que se
repetían las actividades del mantenimiento rutinario en el lapso de un año, que
generalmente está determinada por factores naturales del lugar y condiciones propias del
camino.
3. Las cargas de trabajo, por tipo y nivel de servicio del camino, se muestran en el Cuadro
E.2.3:
F. PRODUCTIVIDADES
2. Otro de los aspectos críticos del actual sistema está relacionado con la
programación anual de las actividades del mantenimiento rutinario; la capacidad de
programación de la mayoría de microempresas se reduce generalmente a la administración
cotidiana del trabajo, sin que las actividades que realizan guarden relación, necesariamente,
con las prioridades, estacionalidad y/o requerimientos del camino.
5. En ese sentido, la actualización preliminar del Manual Técnico pone énfasis en los
siguientes aspectos:
Amplía el glosario de términos normalmente utilizados en la gestión del mantenimiento
de los caminos;
Establece dieciséis (16) actividades de mantenimiento rutinario que habitualmente
vienen ejecutando las microempresas; incorporando tres actividades: (i) limpieza de
calzada; (ii) remoción de derrumbes y, (iii) reforestación;
Actualiza y complementa las normas de ejecución actualmente vigentes;
Incorpora criterios para priorizar la ejecución de actividades;
Establece rendimientos estándar para las dieciséis (16) actividades del mantenimiento
rutinario identificadas;
Incorpora Normas de Cantidad que establecen cargas de trabajo diferenciadas, por
kilómetro-año, para cada una de las actividades del mantenimiento rutinario, según el
tipo y nivel de servicio del camino;
Incorpora Normas de Evaluación que establecen los indicadores de calidad que deberán
alcanzar las microempresas; así como las sanciones o penalidades a las que estarán
sujetas en caso de incumplimiento;
Incorpora una metodología sencilla para programar anualmente las actividades de
mantenimiento rutinario de un camino;
Incorpora recomendaciones para un adecuado registro de las actividades diarias de la
microempresa mediante el “Cuaderno de Mantenimiento”;
Incorpora formatos para el registro estandarizado de las cargas de trabajo; e,
2. Para determinar los costos diferenciados del mantenimiento rutinario se han aplicado
jornales de referencia, económicamente razonables y socialmente aceptables, que
coadyuvarán al eficiente mantenimiento rutinario de los caminos. Se establecieron dos
jornales de referencia, uno para la Región Sierra de S/. 13.00 y otro para la Región Selva de
S/. 15.00.
4. Las tarifas diferenciadas por km-año (en dólares americanos y en nuevos soles), por
tipo y nivel de servicio del camino, se muestran en los siguientes Cuadros:
REGIÓN TARIFAS POR TIPO DE CAMINO Y NIVEL DE SERVICIO
(US$/ km-año)
IB IA IIB IIA IIIB IIIA
SIERRA 550 590 720 820 1,020 1,200
SELVA (*)
510 550 680 770 970 1,150
(*)
Las tarifas en la selva no consideran el IGV
5. Las tarifas cubren los costos operativos de las microempresas (costos directos e
indirectos), permiten cancelar los impuestos de ley; generando, además, un pequeño
margen de ahorro del 5%.
(i) posible reducción o aumento del número de socios como consecuencia del proceso de
adecuación al indicador técnico de productividad propuesto por la consultoría;
(ii) cambios en la organización y composición de las cuadrillas para adecuarse a los
rendimientos establecidos y cumplir con los indicadores de calidad del servicio
propuestos; y,
(iii) reordenamiento de la administración del presupuesto para el mantenimiento, el cual
deberá ser utilizado de acuerdo a las partidas y conceptos previamente definidos,
evitando el manejo discrecional de los recursos.
7. Las estimaciones financieras, para cada uno de los departamentos donde interviene
el PCR, se han realizado según el tipo y nivel de servicio de la red vial de acuerdo a las
tarifas aplicables a cada caso. Los cálculos se muestran en el Cuadro Nº H.7.1
10. Considerando que los municipios aportarán US$ 300 por kilómetro-año para el
mantenimiento rutinario de los caminos vecinales de su jurisdicción , cualquiera sea el tipo o
nivel de servicio, se ha realizado un ejercicio con el objeto de precisar los montos del co-
financiamiento, determinándose que al PCR le correspondería financiar US$ 3´471,790 y a
los municipios US$ 2´416,553. Los resultados estimados, por departamento, se muestran
en el Cuadro N° H.10.1
11. Finalmente para efectos de comparar la carga financiera de las tarifas diferenciadas
únicamente de la red vecinal respecto a la tarifa plana que hasta el año 2000 vino aplicando
el PCR, se ha elaborado el siguiente cuadro, en el que se puede apreciar que el ahorro que
se generaría sería del orden del 39%. Debemos tener en cuenta que este ahorro es mucho
más importante considerando que en el mediano plazo se estima que esa carga financiera
debe pasar a los municipios.
10.000,0
M 9.000,0 9,666
I
L 8.000,0
E
S
7.000,0
D
E 6.000,0
5,888.3
D 5.000,0
O
L 4.000,0
A 3,777.7
R 3.000,0
E
S 2.000,0
1.000,0
-
TARIFA PLANA TARIFA DIFERENCIADA AHORRO
39%
12. En relación a la actualización de las tarifas, la regla es la siguiente: si existen cambios en las
cargas de trabajo o en los costos unitarios, se deberá realizar el ajuste correspondiente de
las tarifas.
Para evaluar los cambios en las cargas de trabajo será necesario monitorear las cantidades
de trabajo ejecutadas por cada microempresa en cada uno de los caminos de acuerdo al
plan de mantenimiento. Esta evaluación deberá efectuarse anualmente registrando en
forma ordenada la información obtenida
Esta tarea de relevamiento y registro de información será la base para una correcta
estimación de las cargas de trabajo y un eficiente control de los rendimientos.
En relación a los costos unitarios una de las variables principales a evaluar será el costo de
la mano de obra.
Para la actualización de las tarifas el Equipo Técnico ha preparado una guía, acompañada
de formatos de registro.
I. MODELO DE CONTRATO
contrato elaborado por el Equipo Técnico incluye los siguientes elementos: (i) tarifas
diferenciadas por tipo y nivel de servicio del camino; (ii) normas de ejecución que
establecen los procedimientos para realizar cada actividad; (iii) normas de evaluación que
incluyen las responsabilidades de la microempresa, indicadores de cumplimiento, tolerancias
y plazos para levantar cualquier observación que se pudiera plantear; y, (iv) una escala de
penalidades, según prioridades, que sancione a las microempresas que no alcancen los
resultados esperados.
2. Debemos señalar que, si bien es cierto que este modelo mantiene la estructura de los
contratos actualmente vigentes en el PCR, contiene adecuaciones importantes que, muy
sucintamente, pasamos a señalar:
Por otro lado, es claro que de acuerdo al actual esquema de distribución del Fondo de
Compensación Municipal -por número de habitantes- las municipalidades provinciales
seguirán disponiendo de mayores recursos financieros para atender, entre otras prioridades,
las necesidades de su red vial. Esta realidad nos indica que no tendría mayor sentido
otorgarle a ambos las mismas facultades y responsabilidades en los servicios viales cuando
la asignación de los recursos tienen otra relación distributiva.
El siguiente cuadro resume el estado de situación general que afecta a más del 80% de las
municipalidades provinciales y distritales del país:
11. Resulta evidente que uno de los principales problemas de los municipios es
la escasez general de recursos y la dependencia casi exclusiva al Fondo de Compensación
Municipal para la atención de sus necesidades corrientes y de inversión, además de la
deficiente gestión municipal. Por ello, a nuestro juicio, los aspectos que deben ser
atendidos en un programa de fortalecimiento, son los siguientes:
(i) Si la gestión de los caminos rurales debe ser centralizada o descentralizada. Como
hemos observado la experiencia en otros países es variada y va desde opciones
“municipalistas” hasta la posibilidad de que sea el propio “ministerio del sector” el que
asuma todas las responsabilidades.
(ii) Si la red vial debe ser distribuida con diferentes competencias institucionales o si es
mejor asignar dicha responsabilidad a una “agencia vial”. Debemos advertir que
aunque en apariencia esto podría parecer contradictorio, el concentrar
responsabilidades en una agencia vial puede ser perfectamente compatible con un
modelo descentralizado, en la medida que sean los gobiernos locales y regionales los
que asuman su gestión.
(iii) Si el financiamiento de la red vial del país, incluido los caminos rurales debe ser
asignado a cada partida presupuestal de los municipios, o si debe constituirse un
fondo vial. Si fuese este caso, se debe definir si es conveniente que el fondo tenga
carácter provincial, departamental o nacional; o si la distribución se realiza en función
de responsabilidades sectoriales.
Como se puede notar las respuestas a los tres asuntos de fondo planteados son
interdependientes.
Curiosamente, el PCR, que en su origen tenía un rol transitorio, podría cumplir -en el
mediano plazo- un rol fundamental como entidad de segundo piso que promueva políticas
viales, que facilite asistencia técnica y soporte institucional, y eventualmente financiero a los
municipios agrupados en consorcios municipales, asociaciones viales, institutos; o
independientemente.
Si bien es cierto que aún no existen resultados concretos sobre el modelo de “Instituto Vial”
que se implementará en la provincia de Arequipa, es posible que dicho modelo sólo sea
replicable en provincias cuyos municipios tengan recursos y capacidad de gestión
-normalmente capitales de departamentos-. Visto desde esta perspectiva, no parece ser
muy sostenible la posibilidad de replicar esta experiencia en provincias con menor potencial
financiero y de gestión.
13. El financiamiento de los caminos vecinales es uno de los problemas más serios que
afectan a la mayoría de nuestros países. Por una parte, estos caminos no despiertan ningún
tipo de interés para los inversionistas, de allí que sus posibilidades de concesión sean nulas,
de otra parte, siendo caminos de tercer nivel, de relativa importancia, con bajos volúmenes
de tránsito, normalmente no reciben recursos suficientes para la atención de sus
necesidades.
En el PCR2 se busca consolidar los resultados de la primera fase, habiéndose definido como
ejes centrales la implementación progresiva de un sistema de financiamiento compartido
con los municipios; y, la transferencia gradual de la gestión vial a las municipalidades de las
provincias y distritos.
Así, nos encontramos ante un problema cuya solución no depende solamente de nuevas
propuestas para generar recursos, sino que requiere definir una política financiera para
todos los caminos vecinales. Esto no será posible si, de una parte no se optimizan los pocos
recursos existentes para el mantenimiento, y de otra, sino se implementan fondos viales a
nivel departamental.
K. SISTEMAS
(i) Una base de datos que registre toda la información relevante para el mantenimiento
rutinario (MR) de caminos rurales. En particular, a la base de datos le correspondía:
5. Una revisión inicial del estado situacional de los sistemas del PCR arrojó algunos
elementos de interés para el proyecto, que se consignan brevemente a continuación:
(i) La mayor parte de las estaciones de trabajo encontradas en la sede central son de
clase Pentium I, con velocidades de entre 90 y 133 Mhz y un espacio de
almacenamiento en disco de 2Gb, en promedio. Se apreció, además, que la
distribución de la carga de trabajo asignada a cada equipo no está acorde con su
capacidad.
(ii) En cada Unidad Zonal se cuenta con un Servidor IBM Netfinity, con procesador
Pentium II con 450 Mhz de velocidad. Al darse inicio a la consultoría, estos servidores
no venían siendo aprovechados propiamente como tales, sino como estaciones de
trabajo. Esto implica una clara sub-utilización del equipo disponible. La instalación de
las redes de las Unidades Zonales se basaba en una configuración de red de punto a
punto (red de pares), en las que todas las computadoras comparten una misma
jerarquía.
(iv) Las líneas de interconexión telefónica RDSI que el PCR contrató con Telefónica del
Perú para conectar las Oficinas Zonales y la Sede Central no se encontraban
plenamente operativas a la fecha de culminación del proyecto, lo que impedía las
pruebas, configuración e instalación del módulo de interconexión de datos y el
subsistema de sincronización de datos a través de servidores SQL-Server entre la sede
central y las unidades zonales.
(ix) La necesidad de brindar adelantos formales a las MEMRs, de modo que PCR colabore
decisivamente en la formación del capital inicial de dichas MEMRs y se garantice el
inicio oportuno y efectivo de las actividades de MR.
(xii) Evaluar la extensión del período de tiempo de seis días que se le proporciona a las
Unidades Zonales para entregar el cheque a cada MEMR, teniendo en cuenta las
dificultades de acceso físico y comunicaciones encontradas en muchas zonas.
Las características del sistema han sido implementadas de acuerdo con las cercanas y
permanentes coordinaciones con la Oficina de Planificación y Sistemas del PCR, de modo
que satisfagan las expectativas de sus futuros usuarios.
El cuerpo del informe final presenta una amplia descripción tanto de la interfaz operativa del
sistema como de las estructuras de datos subyacentes al mismo, localizadas en la base de
datos GeMa.
Cabe señalar que a la fecha de redacción del presente documento, el sistema se encuentra
apto para su instalación e ingreso de información. No obstante, la puesta en funcionamiento
del sistema en las oficinas zonales requiere de algunas precondiciones previstas desde la
fase inicial del proyecto y que hasta el momento no se han completado en su totalidad,
debido fundamentalmente a la demora de proveedores externos al PCR. Éstas tareas clave
son:
(ii) La puesta a punto de dichas redes de tal forma que hagan uso del servidor de datos
de prestaciones similares a SQL Server a través del paquete MSDE.
(iii) La configuración de dichas redes para que hagan uso efectivo de las líneas telefónicas
RDSI con las que actualmente cuenta el PCR para interconectar sus servidores y el
servidor central de la oficina en lima, habilitando la sincronización de bases de datos
entre Lima y Provincias.
9. Durante los días siguientes, mientras estas tres tareas son atendidas por la
Oficina de Planificación y Sistemas, se procederá al ingreso de información en un ambiente
especialmente preparado en la Sede Central del PCR, que simulará con la precisión
necesaria la configuración informática de las Unidades Zonales. Paralelamente, se
desarrollará un seminario de capacitación para el que hará falta reunir a los usuarios clave
de las oficinas zonales, previamente seleccionados por sus respectivas oficinas.
2. RECOMENDACIONES
3. La tipología y el nivel de servicio de los caminos deben ser evaluados cada tres o
cuatro años, coincidentemente con la ejecución del mantenimiento periódico. Sin embargo,
este período podría acortarse en caso de ocurrir algún evento extraordinario que modifique
las características de camino, o de producirse un incremento significativo del tránsito.
11. La Gerencia de Mantenimiento y las Oficinas Zonales, deben definir los criterios y
procedimientos uniformes que aplicarán para instruir a las microempresarios en el uso y
aplicación del Manual Técnico.
13. Las tarifas propuestas para la contratación del mantenimiento rutinario tendrán
un impacto directo en las microempresas, puesto que deberán adecuarse a la productividad
(km/trabajador/año) establecida para el tipo y nivel de servicio del camino. Esto implicará
un proceso de reestructuración que deberá ser monitoreado con suma atención por el PCR,
toda vez que ocasionará cambios en su organización y funcionamiento:
(ii) establecimiento de turnos rotativos en el caso de que no sea posible reducir el número
de miembros de la micreoempresa; y,
14. La propuesta de tarifas diferenciadas permitirá que el PCR pueda efectuar, en los
próximos meses, una reestructuración del presupuesto previsto para el mantenimiento
rutinario en el periodo 2002-2005; en ese sentido, recomendamos determinar el costo
financiero en tres niveles: (i) presupuesto global del PCR; (ii) presupuesto departamental; y,
(iii) presupuesto provincial.
16. Se debe realizar una evaluación o diagnóstico para definir las necesidades de
capacitación y asistencia técnica a las microempresas, priorizando la atención de aquellas
que no tuvieron ningún tipo de apoyo.
20. PCR debe diseñar una estrategia para seleccionar personal idóneo que se
encargue de supervisar las actividades de las microempresas. Igualmente debe estudiar
mecanismos para racionalizar la carga de trabajo de los Monitores Viales; así como evaluar
su rendimiento.
21. Las Oficinas Zonales deben realizar el monitoreo y evaluación trimestral de los
contratos, aplicando con firmeza, las sanciones establecidas a aquellas microempresas que
no alcancen los resultados especificados.
22. El Sistema de Gestión del Mantenimiento -GeMa- debe ser instalado en todas las
Oficinas Zonales del PCR, iniciándose de inmediato el ingreso de información.
23. Se debe separar en forma definitiva el objetivo del mantenimiento vial de los
otros objetivos económicos. En el proceso de reestructuración de las microempresas es
posible que el número de miembros se reduzca; en ese sentido, PCR debe diseñar una
política para derivar esta fuerza laboral hacia el desarrollo de los proyectos productivos,
fomentando, igualmente, la incorporación de nuevos socios para esta actividad. Por otra
parte, este componente de proyectos productivos no debería ser responsabilidad del PCR,
su función debería ser canalizar las demandas existentes hacia las entidades públicas y
privadas encargadas de la promoción de las microempresas, tales como las ONG`s,
PROMPYME, Cámaras de Comercio, Direcciones Regionales, Vice Ministerio de Promoción
Social, entre otros. A fin de viabilizar la propuesta se recomienda al PCR preparar un
directorio de microempresas de mantenimiento que hayan generado proyectos productivos,
en los que se incluya información del proyecto emprendido, tales como: sector y rama de la
actividad, ubicación, número de socios, inversión, activos (caja-bancos, herramientas,
maquinarias), pasivos, etc.
24. El PCR debería elaborar una Agenda para la Gestión Vial Municipal. Esto significa
establecer un programa de trabajo para los próximos 4 años con fases de intervención que
puedan significar hitos por alcanzar. Esta agenda podría distinguir tres fases:
26. Es conveniente elaborar una base de datos municipal para monitorear los
procesos de cofinanciamiento; así como un mecanismo de evaluación y seguimiento con
indicadores que facilite medir el grado de cumplimiento y perfomance de los municipios.
28. Los caminos vecinales forman parte de una red vial mayor que incluye los
caminos departamentales y nacionales; siendo esto así, no se puede pretender resolver
exclusivamente el problema del mantenimiento de los caminos vecinales, sin enfrentar todo
el problema. En ese sentido, es imprescindible concertar con los municipios, CTAR´s,
empresas de transporte, empresas mineras y usuarios, algunos criterios o reglas para el uso
de los caminos de tal forma de proteger la inversión vial realizada y buscar mecanismos de
responsabilidad compartida.
30. Una cuestión de fondo que debe ser expuesta por el PCR, es la imposibilidad de
resolver “el financiamiento del mantenimiento de los caminos rurales”, al margen de los
caminos departamentales, e incluso de los nacionales. Esto significa que se hace imperativo
repensar el concepto de “red vial departamental” y observar la necesidad de elaborar un
diseño conjunto que integre los caminos vecinales y los departamentales. En suma, se trata
de concertar esfuerzos a nivel regional y departamental para proponer un "Fondo Vial
Departamental” aprovechando las circunstancias políticas favorables al tema de la
descentralización y redistribución de recursos hacia el interior del país.
ANEXOS: