Sie sind auf Seite 1von 4

E L L U G A R D E P L A T Ó N EN LA HISTORIA DE LA LINGÜÍSTICA

Javier Campos Daroca Universidad de Almería Platón tiene ganado un lugar en la historia de la lingüística o, al menos,
en la historia del pensamiento lingüístico. Pero la continuidad de su presencia va acompañada de una extrema
delimitación de los contenidos pertinentes de la obra platónica para las disciplinas y los saberes lingüísticos, lo cual
queda bien reflejado en la notable homogeneidad del tratamiento del filósofo en las obras al uso. A Platón se le reserva,
ciertamente, un puesto de honor por el hecho reconocido de haber abordado problemas que podríamos llamar
"fundacionales" del pensamiento sobre el lenguaje, en los que se reconoce la moderna reflexión lingüística,

La lingüística mod erna remite Platón a un nuevo horizonte de problemas que poco tienen que ver con las cuestiones a
las que tradicionalmente daba respuesta. La relevancia de Platón no se mide ya desde la perspectiva gramatical, sino por
su papel en el paradigma cognitivo qu e domina hoy día la indagación teórica en lingüística, paradigma que, al menos en
algunas de sus orientaciones, enlaza con la tradición dualista (Schwarz, 1992:16 -19), cuyo punto de partida se
encuentra sin lugar a dudas en Platón (Alonso-Cortes, 1989, quien desarrolla una interesante tipología del conocimiento
en general aplicable al conocimiento del lenguaje). Esta reubicación del interés lingüístico de la obra platónica no ha
tenido, sin embargo, consecuencias en la práctica historiográfica más común, la de los manuales de "historia de la
lingüística". Tal vez es todavía pronto para que esta nueva circunstancia del interés lingüístico por el viejo Platón tome
carta de naturaleza en el status questionis del pensamiento lingüístico de la antigüedad

En uno de sus más importantes libros teóricos delimitaba Chomsky los planteamientos sobre el lenguaje y su estudio
científico en forma de "problemas", formulados como una serie ordenada de preguntas a las que deberá responder la
lingüística; La pregunta es si es inevitable esta position de Platón como ancestro del proyecto chomskyano de
investigación del lenguaje o, en general, detestado patriarca del dualismo occidental. Ciertamente, podernos leer la
doctrina de la rememoración en una clave que nos llevaría a las antípodas del pensamiento de Chomsky, y esto gracias
a un pensador como E. LLedó, quien ha dedicado a los pasajes del Menón un par de breves pero enjundiosos trabajos
que sacan a Platón de las filas innatistas (Lledó 1961, 1964).

Aristóteles y su concepción lingüística

Resumen La figura de Aristóteles aparece en las obras generales de la historia de la lingüística. Se estudia su
contribución al pensamiento lingüístico con conceptos de gramática y lógica, así como del análisis del discurso retórico y
poético. Tratan de él historiadores como W. Thomsen, fundador de la historia de la lingüística en 1902, R. H. Robins y
otros más recientes, como R. Harris, T. J. Taylor y V. Law. Los comentarios de estos historiadores, diversos y en
ocasiones incompatibles, ilustran sobre la condición dinámica de la historiografía y de la influencia de los paradigmas en
su tarea crítica. La tesis del artículo es que el estudio integral de la obra de Aristóteles revela que fue un visionario de la
reflexión lingüística, puesta al servicio de una función cívica. Palabras clave: Aristóteles, historiografía, historia de la
lingüística,

ARISTÓTELES Y SU CONCEPCIÓN LINGÜÍSTICA DE UN ENTORNO


CÍVICO
Xavier Laborda
(Universidad de Barcelona)
laborda.xavier@gmail.com
Fecha de recepción: 19-9-2017 / Fecha de aceptación: 15-12-2017
Resumen
La figura de Aristóteles aparece en las obras generales de la historia de lalingüística. Se estudia su contribución al
pensamiento lingüístico conconceptos de gramática y lógica, así como del análisis del discurso retórico y poético.
Tratan de él historiadores como W. Thomsen, fundador de la historia de la lingüística en 1902, R. H. Robins y otros
más recientes, como R. Harris, T. J. Taylor y V. Law. Los comentarios de estos historiadores,
diversos y en ocasiones incompatibles, ilustran sobre la condición dinámica de la historiografía y de la influencia de los
paradigmas en su tarea crítica. La tesis del artículo es que el estudio integral de la obra de Aristóteles
revela que fue un visionario de la reflexión lingüística, puesta al servicio de una función cívica

ALEJANDRO MAGNO

la creación de innumerables ciudades, los matrimonios conjuntos de macedonios con princesas asiáticas, la
conservación de instituciones y prácticas (en regiones que por siglos habían pertenecido a imperios multiculturales y
multiétnicos), los planes para la transportación de poblaciones no sólo de Grecia a Asia, sino también viceversa; todo
esto, muestra de que Alejandro había visualizado la creación de un imperio nuevo, y no de la adjunción simple de
territorios al reino de Macedonia.

De la misma manera que en años anteriores la grandeza militar de Atenas se conjuga con su grandeza cultural, teniendo
como resultado el predominio del dialecto ático frente al jónico, así la expedición victoriosa de Alejandro contra los persas
en la segunda mitad del siglo IV, crea el marco político y las condiciones adecuadas de expansión de la lengua griega y,
consecuentemente, de la cultura helénica. La lengua de la época, conocida como “koiné”, se desenvuelve
paulatinamente como una lengua unificadora, gracias a su uso por parte de muchos habitantes del dominio helénico, en
lugar de los diferentes dialectos arqueo-helénicos.

En el estado alejandrino, la concepción de “ciudadano” de la época clásica es sustituida por aquella del “cosmopolita” y
las ciudades griegas se fundan por todos lados. Griego es aquél que “es parte de nuestra educación”.
Consecuentemente, el término “griego” (/ellin/) no se relaciona forzosamente nada más con la descendencia racial, sino
esencialmente con la educación griega y el modo de vida expresado en todo momento en la lengua griega. Se trata de
algo que corresponde a macedonios, a griegos de la época clásica, a los persas y a los “otros pueblos” de Asia o incluso
de toda la región. Esta lengua constituye una versión más simplificada del griego ático, hecho que se circunscribe a sus
nuevas necesidades de uso por grupos multiétnicos de población en el extenso imperio de Alejandro. La lengua griega
helenística (“koiné”) se vuelve una lengua internacional y es utilizada por los griegos y los extranjeros helenizados de
Asia Menor, de Egipto, de Siria, del mundo intelectual, de la literatura, siento también la lengua de los intercambios
comerciales, el código común de diversos habitantes del mundo helenístico, la lengua franca de la época.

En la época helenística (323 a. C. hasta 30 a. C.), el estudio de la lingüística era necesario, ya que el imperio
de Alejandro Magno era muy extenso y dentro de él se hablaban muchas lenguas diferentes. Por eso se crearon
institutos de enseñanza de la lengua griega (la lengua oficial del imperio), como medio de cohesión y dominio de los
pueblos bajo la influencia griega. Asimismo, los estudiosos intentaban preservar los niveles de gramática y estilo griego
que habían alcanzado los grandes autores clásicos. Algunos estudiosos del lenguaje se orientaban hacia
la literatura (como Dionisio de Tracia); otros, hacían mayor referencia a los principios lógicos y psicológicos que
subyacen al lenguaje.
Dionisio de Tracia
Ir a la navegaciónIr a la búsqueda

Dionisio de Tracia (en griego Διονύσιος ὁ Θρᾷξ) fue un gramático griego que vivió entre el 170 y el 90 a. C. Fue
discípulo de Aristarco y perteneciente por tanto a la escuela alejandrina.1 Se le atribuye la redacción de la Tékhne
Grammatiké (Arte gramática), considerada la primera gramática griega en términos contemporáneos, que sirvió de base
a las posteriores gramáticas del griego, del latín y de otras lenguas europeas hasta bien entrado el Renacimiento.1 La
autoría de Dionisio es discutida por varios motivos, entre ellos que:

 en el prólogo se mencionan 6 partes pero sólo conocemos una sobre el estudio de las irregularidades analógicas;
 otro gramático posterior, Apolonio Díscolo, habla de él pero no de su gramática;
 el único manuscrito que se conserva es del siglo V, muy posterior a la vida de Dionisio de Tracia.

M. Terencio Varrón
Reatino primer humanista romano En el bimilenario de su muerte La celebración del centenario del nacimiento o de Ia
muerte de alguno de los máximos representantes de las letras griegas o latinas es una prueba evidente de Ia vigente
actualidad del pensamiento clásico. Pese al clima contestatario frente a cuanto se refiere al mundo clásico de los griegos
y romanos, Ia memoria de sus máximos exponentes no ha desaparecido del todo, como vemos en Ia celebración de
Congresos Internacionales en que se estudian las obras de los grandes escritores de Grecia y de Roma. Marco Terencio
Varrón es sin duda alguna, entre los antiguos, el hombre de más cultura y erudición: filósofo, filólogo, gramático, poeta,
historiador. Varrón se ocupó de los temas más variados: poemas y saturae, obras de filosofía, biografías, cuadros
históricos, compilaciones arqueológicas, tratados de historia literaria y de gramática, obras de agricultura. Recogemos
tan sólo los lítulos de algunas de las obras de Ia inmensa producción literaria de este extraordinario polígrafo, para el que
no hubo secretos ni dificultades en ninguno de los géneros literarios: Saturae Menipeae libri CL; Imagines o Hebdomades
libri XV; Antiquitatum reriim diuinarum libri XVI; Antiquitatum rerum humanarum libri XXV; Rerum rusticarum libri III; De
lingua Latina libri XXV; Disciplinarum libri IX; El elenco de sus escritos4 pone bien de manifiesto que no hubo parcela
del saber humano o divino donde Varrón no aportase algo nuevo, al menos su espíritu de conquistador, abriendo de ese
modo a sus contemporáneos vías nuevas del pensamiento y legando a las generaciones posteriores parte de sus
múltiples conocimientos. las letras dentro de un medio que a muy pocos les fue concedido. Pero este hombre de estudio
y de letras, que disfruta del retiro para recoger los materiales que luego empleará en Ia construcción de su gran obra
literaria, fue al mismo tiempo hombre de armas y de cargos públicos. Romano de su tiempo, fue magistrado, triunviro
capital, edil, legado y procuestor de Pompeyo.
Elio Donato
Ir a la navegaciónIr a la búsqueda
Elio Donato (latín: Aelius Donatus) fue un gran gramático en lengua latina del siglo IV. Fue, sin duda, el gramático más
influyente de su época (como señala el título de clarissimus que le fue otorgado), si bien de su vida no se conoce mucho.
Probablemente es de origen africano, enseñó también retórica y tuvo entre sus alumnos a Jerónimo de
Estridón y Tirannio Rufino.
Ars grammatica[editar]
Pertenecen al primer grupo Ars grammatica, tan renombrada en la antigüedad que suscita el interés de comentarios
posteriores como Marco Servio Honorato, Cledonio y Pompeo Mauro.
La primera parte, más breve y simple, está dedicada a aquéllos que comienzan los estudios gramaticales; estructurada
con un modelo de preguntas y respuestas, trataba de las ocho partes del discurso. La segunda parte, dividida en tres
libros, trataba de fonética, métrica y estilística.
Normalmente estas dos secciones están identificadas como Ars minor y Ars maior y seguidamente son consideradas dos
obras separadas. Tal separación es consecuencia del progresivo abandono de la primera parte más simple a favor de la
segunda más completa, iniciado en la época antigua (con Pompeo) y consagrado posteriormente en época medieval.
El ars minor permaneció, de todos modos, hasta el Renacimiento como texto útil para iniciar el estudio del latín.
Comentario a Terencio[editar]
Entre las obras exegéticas se recuerda el comentario sobre las comedias de Terencio, incompleto, pues no nos llegó la
parte relativa al Heautontimorumenos.
La obra se abre con una biografía del poeta, trata del De viris illustribus de Suetonio, pero ampliada por el mismo Elio
Donato; sigue una introducción al género literario de la comedia; luego un comentario sobre cada una de las comedias de
Terencio, cada una introducida con observaciones sobre la estructura, la historia, los personajes y el nudo.
Sobre el origen de tales comentarios los estudiosos no tienen certidumbre. El extremo desorden de las noticias en él
contenidas, de hecho, ha dado de qué pensar, inicialmente en las relativas interpolaciones del texto (Lessing).
Posteriormente, se reconocieron dos tendencias interpretativas diferentes entre sí, se ha elaborado la hipótesis de que el
texto que nos ha llegado fuese una unión de dos comentarios diferentes, uno en forma de glosa, ambos de Donato, que
después fueron reunidos (Sabbadini, Wessner).
Comentario a Virgilio[editar]
El comentario a Virgilio, realizado con certeza antes del 363, nos llegó desafortunadamente mutilado: permanecen
solamente la carta de dedicatoria a su patrón L. Munatius; la biografía del poeta; la introducción a las Bucólicas (§ 47-69)
y el inicio de su explicación (§ 70-72).
En la Carta Donato expone el método filológico seguido por él. Sus fundamentos están constituidos por la entera de
la brevitas, con una continua referencia a sus fuentes, sin excluir algunas intervenciones personales.
La Vida es en cambio extraída de Suetonio, de la Vita Vergili parte del De poetis, sección del De viris illustribus, que se
perdió en algún momento de la época.
La introducción (la Praefatio) a las Bucólicas está constituida por una primera parte sobre el autor y el título de la obra,
el género literario, los motivos que indujeron a Virgilio a escribir la obra y su significado. La segunda parte, en cambio,
ofrece un comentario específico de la obra, concentrándose en los aspectos estéticos y métricos o en la exegesis textual.

Das könnte Ihnen auch gefallen