COORDINADORA EN DEFENSA

DE LA MUJER TRABAJADORA
JUNIO, 2017

La idea de la Coordinadora surge por iniciativa de compañeras y compañeros

trabajadores y jóvenes preocupados por la situación de la mujer trabajadora en las
fábricas, talleres y demás lugares de trabajo. Alarmados por los niveles de
violencia contra la mujer en nuestra sociedad, con un aumento de feminicidios
cada año, y ante la apatía, indolencia y abandono del Estado y sus instituciones
burocráticas, hemos decidido organizarnos para ser un punto de apoyo en la
lucha de las mujeres por sus derechos.

En una sociedad dividida en clases sociales y con un profundo carácter machista

arraigado por siglos de patriarcado se hace necesario más que nunca luchar
contra toda forma de violencia hacia las mujeres.

En el caso de la mujer trabajadora la situación se agrava porque se agregan otros

componentes ya que están completamente vulneradas y a merced de la
explotación, discriminación, violencia psicológica y física por parte de sus
empleadores y hasta de sus propios compañeros de trabajo. El machismo está
arraigado también en las instituciones propias de los trabajadores como son los
sindicatos y federaciones por lo que nos vemos en la necesidad de trabajar allí
mismo para transformarlos desde adentro en organizaciones que luchen y sean
vanguardia contra la violencia de genero. Esta vanguardia, no debe buscar
reconciliar a la mujer con el hombre bajo pensamientos burgueses y debe por el
contrario poner en pie de lucha a cada una de las integrantes, debe sacar el
espíritu combativo de cada una y las ganas de abolir los parámetros morales,
sociales, raciales y de género, construidos y reforzados por la sociedad capitalista.

Al mismo tiempo debemos entender que si bien el sujeto fundamental de esta

lucha es la propia mujer, esto no exime a los compañeros trabajadores de
reconocer que el machismo dentro el ámbito laboral no sólo viene de la patronal,
por lo que no los exime de tomar conciencia de la aguda situación de la mujer y
participar activamente en esta lucha contra la violencia.
Pero esta idea no está fundamentada en el subjetivismo, sino que nos basamos en
el análisis de datos empíricos que nos demuestran cómo además de la violencia
que sufre toda mujer en esta sociedad machista y patriarcal, las mujeres
trabajadoras en fábricas, talleres, etc., sufren otro tipo de violencias y sobre todo,
vemos que no existen organizaciones, ya sean ONG’s, iglesias, organizaciones del
Estado, de la universidad que se preocupan por el sector de las mujeres
trabajadoras y la violencia que sufren en el campo laboral.

Algunos datos:

Datos de la OIT nos dicen que las mujeres cobran 17% menos que los varones en
el mundo, la CEPAL nos dice que en América latina cobran hasta 35% menos.
Según el IESE en Bolivia las mujeres llegan a cobrar hasta 30% menos que los
varones por el mismo trabajo.

Por otro lado un 20% de las mujeres que trabajan en el sector formal no cuentan
con seguro a corto plazo (seguro de salud), mientras que los varones sólo el 5%
no cuenta con seguro de salud, esto sobre todo por la tendencia a no asegurar a
las mujeres por no querer pagar los subsidios de natalidad y lactancia.

Otro dato importante del IESE es que sólo un 45% de las mujeres recibe
capacitación en el trabajo para optar a algún asenso o aumento salarial, mientras
que casi el 60% de los varones reciben estas capacitaciones.

Los datos, nos muestran que las mujeres son víctimas de violencia física, violencia
psicológica, acoso laboral, acoso y violencia sexual, violencia económica,
aumentado sus horas de trabajo sin que se les pague horas extras por ejemplo, y
violando sistemáticamente diferentes derechos laborales (40 horas semanales,
trabajo riesgoso, trabajo nocturno, etc.). Por otro lado se ve que no tienen y no se
generan las condiciones necesarias para que las mujeres se empoderen y
conformen cargos políticos en los sindicatos ya que además del trabajo en las
fábricas o talleres, también deben realizar trabajo en el hogar, lo que implica una
doble jornada laboral no remunerada, y esto se convierte en un factor que no
permite su organización para defensa de sus derechos y en contra de la violencia
que sufren (un ejemplo es la Federación de Fabriles donde aparte de ser muy
pocas están en carteras de actas, hacienda, etc., pero no en carteras de decisión
política).

Los ejes de la coordinadora:

1.- La naturaleza de la organización: somos una organización que tiene un

carácter amplio pero se encuadrada en principios básicos que los componentes
deben compartir. En amplitud nos referimos que pueden ser parte distintas
organizaciones de mujeres, colectivos, etc., y que pueden tener diferentes
ideologías en el marco de los principios.

2.- De los objetivos de la organización: Defendemos a las compañeras

trabajadoras de los ataques psicológicos, ideológicos, económicos y físicos que
sufren en sus fuentes de trabajo. Al mismo tiempo debemos promover el
conocimiento y defensa de sus derechos laborales, sindicales y políticos. El fin es
poder organizar a las mujeres a través de la coordinadora para que cada vez más
trabajadoras la reconozcan como una organización propia y la fomenten en sus
lugares de trabajo. Así mismo debemos fortalecer sus propias organizaciones
como son los sindicatos allí donde existan y crearlos donde no haya.

3.- De los principios de la organización: entre sus principios están la defensa de

los derechos de la mujer trabajadora, la equidad de género, la lucha contra el
patriarcado y en contra del sistema capitalista opresor de la clase obrera.

4.- De los métodos de trabajo: Entre los métodos a aplicar consideramos la

importancia del trabajo activo entre las mujeres trabajadoras en los lugares
mismos del trabajo como son las fábricas o talleres, esto puede hacerse con
visitas semanales explicando a las compañeras los objetivos de la coordinadora.
También se puede realizar investigaciones, sondeos, etc., que nos permitan
conocer e identificar hechos de violencia y cuantificarlos para luego exponerlos a
la sociedad y a las propias trabajadoras. Esto puede exponerse mediante la
creación de un boletín especial propio de la organización donde se expongan
temáticas de derechos, género, etc. Realizar seminarios o charlas con ese tipo de
temáticas.
Las medidas para defender a las compañeras se evaluaran en cada caso concreto
en conjunto con la o las agredidas, pero pueden ser desde acciones legales,
penales, hasta métodos de acción directa como escrachar (muerte civil).

COMPAÑERA NO ESTÁS SOLA. FRENTE A LA INDIFERENCIA DEL ESTADO NUESTRA ÚNICA

DEFENSA ES LA UNIDAD.

QUE LA VIOLENCIA NO SEA PARTE DE TU VIDA

INFÓRMATE, DENUNCIA LOS CASOS DE VIOLENCIA Y SÚMATE A LA COORDINADORA

CONTACTOS: 71105447 – 70371594

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