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Trabajo de Filosofía de las ciencias sociales.

Presentado por: Jeffrey Palomino

Presentado a: Roger Sepúlveda

Universidad del Atlántico

Facultad de Ciencias Humanas

Programa de Filosofía

Filosofia de las Ciencias Sociales.

Colombia-Barranquilla

28/02/2019
La hermenéutica desde sus inicios para la exegesis de las sagradas escrituras, ha
servido como un método de interpretación tanto de textos escritos, como de textos
sociales (esto es, el ser humano como objeto de estudio en una comunidad).
Teniendo esto de relieve, la hermenéutica ha sido de gran ayuda para las ciencias
sociales, ya que ésta brinda una serie de métodos para poder llegar a la
comprensión e interpretación más cercana respecto al comportamiento del ser
humano. Es así como en el siguiente ensayo trataré de dar una respuesta a la
pregunta “¿Qué aporta la hermenéutica a las ciencias sociales?” basándome en las
preceptivas que tenga sobre el tema y teniendo de relieve una serie de textos para
aclarar ideas y darle fuerza a la tesis que se desarrollará.

Desde que la hermenéutica empezó como un método de interpretación de las


sagradas escrituras -así también como su uso en el derecho y la filología- su uso
empezará a ramificarse en la medida de que ya no solo la religión, y las otras
disciplinas mencionadas, se servirán de ella para llegar a la interpretación de un
texto dentro del campo en el que se lleve a cabo la aplicación, sino que la
hermenéutica pasará así a ser de sumo interés y pertinencia para las ciencias
sociales y la manera en que ésta se pueda llevar a cabo. La hermenéutica en las
ciencias sociales servirá como un método para acercarnos más a la comprensión e
interpretación del comportamiento del ser humano.

La hermenéutica desde las ciencias sociales tendrá en cuenta aspectos históricos;


aspectos objetivos dentro de un contexto en particular para analizar los factores en
común que comparten ciertos comportamientos; aspectos subjetivos en la medida
en que se tenga en cuenta al hombre como un individuo capaz de causar un cambio
dentro de una situación en específica, para así ver los factores que llevaron a
desembocar un acto; así también como un aspecto ontológico para analizar al
hombre ya como un “ser” y ver a este “ser” como un objeto más de estudio para la
hermenéutica.

Ahora bien, la hermenéutica en las ciencias sociales se vuelve un tema fructífero y


polémico por las diversas posturas que hay alrededor de ésta, ya que, teniendo en
cuenta que el objetivo de la hermenéutica es llegar a comprender un fenómeno dado

2
mediante una serie de técnicas o método, las diversas tesis o fundamentos que hay
pueden diferir unos con otros por la manera en que la hermenéutica, desde sus
preceptivas, se debe llevar a cabo.

Tal es el caso de Gadamer que discrepará con Dilthey por la manera en que este
último fundamentaba el proceder hermenéutico desde una ciencia del espíritu:
“teniendo en cuenta el influjo que tuvo Heidegger en la hermenéutica, la
hermenéutica contemporánea empieza a partir de Hans Gadamer, y éste al igual
que Heidegger, pensaba que la hermenéutica no se tenía que fundamentar dentro
de una teoría de las ciencias del espíritu, sino el modo de comprender que esta se
mostraba como una presencia ontológica, en la cual se dirigen las preguntas de la
metafísica y la religión”1. Así, partiendo de ese supuesto y de la pregunta ¿cómo es
posible la comprensión?, Gadamer se centrará en “rastrear y mostrar lo que es
común a toda manera de comprender: que la comprensión no es nunca un
comportamiento subjetivo respecto a un “objeto” dado, sino que pertenece...al ser
de lo que se comprende” esto dicho por Gadamer, que, desde mi parecer, es una
de las posiciones más acertadas, ya que Gadamer tiene en cuenta el límite que
puede tener el estudiar las ciencias sociales (esto es, las múltiples variables que
posiblemente desembocaron en un acontecimiento) con la hermenéutica y analiza
otro aspecto que, de por sí, es pertinente a la hora de realizar el trabajo de
interpretación o comprensión: el aspecto ontológico. Hay que tener de relieve a la
ontología desde la hermenéutica con Gadamer, ya que, como se mencionó, éste se
basará en los preceptos de Heidegger para poder realizar su modelo de
hermenéutica.

Ahora, tantas posturas al respecto de la hermenéutica, como lo dije, han surgido en


torno a un replanteamiento de ésta en el ámbito de las ciencias sociales, y unas de
las problemáticas que en ella radicaba era la metodología que se tendría que usar
para desarrollar la hermenéutica en las ciencias sociales.

1
Levya, G. “La Hermenéutica clásica y su impacto en la epistemología y teoría social hoy”. En De La Garza, E;
Levya, G. “Tratado de metodología de las ciencias sociales: perspectivas actuales. (140-200).

3
Si bien Schleiermacher fue el primero en formular una teoría hermenéutica general,
limitó su teoría a la interpretación de textos2. Posterior a él, y teniendo en cuenta su
influjo, Dilthey se vio en la labor de fundamentar una teoría general de la
hermenéutica para la compresión de las ciencias sociales: “para Dilthey la teoría
hermenéutica constituye un "vínculo esencial entre la filosofía y las disciplinas
históricas, y en general un componente esencial de la fundamentación de las
ciencias humanas mismas", en cuanto que su propósito es "asegurar la validez
general de la interpretación en contra de las intromisiones de los caprichos
románticos y la subjetividad escéptica, y brindar justificación teórica de esa validez,
sobre la cual toda certeza del conocimiento histórico está fundada”3.

Aunque Dilthey propuso un método diferente al que se pretendía en ese entonces


con los positivistas, mover los métodos de las ciencias naturales a las ciencias
sociales, esto es un “monismo metodológico”, éste cae en el error de fundamentar
una teoría general para comprender los diversos modelos sociales, ya que, aunque
tenga de relieve aspectos importantes para el desarrollo de ésta (aspectos sociales,
históricos), el generalizar una teoría con tantas variantes sueltas dependiendo del
contexto histórico, social, incluso cultural, no podría ser aplicado en todas las
instancias, ya que cada cultura o sociedad o persona, va tener una manera diferente
de comprenderse o interpretarse.

Es ahí donde los positivas con su “monismo metodológico” quisieron fundamentar


las ciencias sociales. Grandes teóricos, como es el caso de Adam Smith, que intentó
llevar las leyes de la física a la de las ciencias sociales para explicar o predecir el
comportamiento de la sociedad. Ésta tendencia de ese entonces, se volvió relevante
en la medida de que las ciencias sociales, a pesar de su objeto estudio un cuanto
complejo, trataba de buscar una ley que describiera a la sociedad de una manera
general y radical para así poder avanzar en las investigaciones de las ciencias
sociales. A pesar del arduo trabajo que se tuvo a lo largo del problema
epistemológico que suscitaba en esta “ciencia” no se pudo obtener el resultado

2
Velasco, Ambrosio. “Hermenéutica y ciencias sociales”. En De La Garza, E; Levya, G. “Tratado de
metodología de las ciencias sociales: perspectivas actuales. (210-259).
3
W. Dilthey, Ibidem, p. 244.

4
anhelado, ya que estas leyes de las ciencias naturales (más exactos la de física y
las matemáticas) dejaron muchos cabos sueltos en la praxis de las ciencias sociales
por la diferencia que éstas tenían, tanto metodológica como pragmáticamente.

Es así como la hermenéutica aparece como aquel separador de las ciencias


naturales con las ciencias sociales, pactando así una serie de métodos o técnicas
que, dentro del campo de las ciencias sociales, eran más factibles de llevarse a
cabo que con la pretensión de los positivistas con su “monismo metodológico”.

Es así como aparece un pensador muy reconocido por sus aportes a esta rama de
las ciencias llamado Max Weber. Este tratará, a partir de la hermenéutica, de dar
una serie de conceptos y unas praxis fundamentadas en la sociología para poder
comprender e, incluso, -cosa que va contraria con lo que normalmente se
fundamentaba en la hermenéutica que ésta servía para nada más para comprender-
explicar. Por tanto, la compresión no se opone a la explicación, sino que constituye
un momento necesario de ésta. Las ciencias sociales se interesan por conocer el
contexto y significado de cada acontecimiento en sus manifestaciones actuales y
las causas de su producción histórica.4 Weber planteaba una noción de acción, la
cual se definía como una serie de aspectos sociales, racionales, de intencionalidad,
de relación social, de individualidad, esto es, el individuo, que determinaban como
tal la acción llevada a cabo por un individuo: “el individuo es la unidad más simple
susceptible de un comportamiento significativo; más allá de él no hay sino metafísica
o adivinación. Todos los conceptos pueden ser reducidos a acciones y relaciones
entre individuos, ya que la sociedad no es más que el conjunto de las numerosas
interacciones de individuos en situaciones concretas”5. Se dirá entonces que la
intencionalidad será la que le dé sentido como tal a la acción, y la que un sujeto
puede explicar.

Weber también plantea una noción de racionalidad la cual se fundamentará en el


supuesto de que, si la acción llevada a cabo por un individuo tiene racionalidad, esta

4
Gómez, Amparo (2005). La filosofía y la metodología de las ciencias sociales (Pag 46).
5
Gómez, Amparo (2005). La filosofía y la metodología de las ciencias sociales (Pag 47).

5
acción se podrá explicar y comprender mejor. Hay que poner de relieve que, si bien
esta es una manera de llegar al objeto más claramente, el resultado que se obtenga
no será absoluto, sino que probable: “las uniformidades que se dan en el proceder
humano sólo pueden expresarse en términos de la probabilidad con que una
circunstancia concreta producirá una determinada respuesta por un agente o
pluralidad de agentes. Toda relación social se sustenta en la probabilidad”6.

La teoría de los tipos ideales fue el mayor aporte de Weber para la metodología de
las ciencias sociales Los tipos ideales no son tipos sociales empíricos, ni promedios
estadísticos, aunque el material empírico contribuya a su formación. Se construyen
con los aspectos más importantes, más relevantes para el investigador en cada
caso y pueden considerarse modelos elaborados a partir de la selección de ciertos
elementos y propiedades de los hechos y acontecimientos en cuyos términos se
comparan y explican7.

Es así que teniendo en cuenta los preceptos que dejó Weber para la investigación
en las ciencias sociales, se podría decir que él nos acercó más a la comprensión y
explicación de los comportamientos del ser humano, teniendo como relieve 2
aspectos importantes: la racionalidad y la acción actuando convergentemente para
llegar a una realidad probable y así dar una respuesta a los hechos sociales.

Ahora bien, teniendo en cuento lo dicho en el desarrollo del trabajo, se podría


responder a la pregunta problema de la siguiente manera: la hermenéutica aporta a
las ciencias sociales no solo una serie de “técnicas” para el desarrollo de ésta, sino
que propone una serie de diversos conceptos que enmarcan la mayoría de aspectos
que componen un texto a interpretar o comprender o, -en el caso de los positivistas
y su nulo intento de “ciencia social”, así como también dice weber-, explicar (en este
caso, el texto social) para ya no vagar a ciegas y sin un camino fijo en las ciencias
sociales.

6
Gómez, Amparo (2005). La filosofía y la metodología de las ciencias sociales (Pag 48)
7
Gómez, Amparo (2005). La filosofía y la metodología de las ciencias sociales (Pag 49)

6
Bibliografía:

- Gómez, Amparo (2005). La filosofía y la metodología de las ciencias sociales


- De La Garza, E; Levya, G. “Tratado de metodología de las ciencias sociales:
perspectivas actuales.

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