Artículo de opinión

Biografía del asesor

Wilfredo David Auris Villegas. Huancavelica, Perú, 21 de mayo de 1975, es un escritor,
cuentista, poeta, pedagogo, teórico de la pedagogía del amor y profesor universitario
peruano, perteneciente a la generación del siglo XXI.
David Auris Villegas, ha sido profesor, capacitador en temas de educación y
Comprensión lectora y Cómo redactar artículos científicos o papers, en la Universidad
Nacional Mayor de San Marcos; profesor invitado de pedagogía e Investigación de
Postgrado en la Universidad Nacional Daniel Alcides Carrión, profesor invitado de
pedagogía e investigación de postgrado en la Universidad Nacional de Huancavelica y
profesor de Comunicación en la Universidad Ricardo Palma, entre otras Universidades
Peruanas.
Además de su labor académica, escribe sus reflexiones cotidianas en su blog
(diariosdeunvagabundo), abordando diversos temas y diversos géneros de importancia
barnizado de fino humor, capaz de ser leído en cualquier momento.

Biografía del autor

María Alejandra Vásquez Guerra nació el 24 de julio del 2001, provincia de Chincha,
departamento de Ica. Es una estudiante de psicología en la Universidad Privada San Juan
Bautista, aficionada a escribir pequeñas lecturas a fin de algún día convertirse en una
reconocida escritora a nivel nacional.
Es la tercera hija de Lourdes Guerra Ching y César Vásquez Zabala, sus hermanos son
Renzo y Renato. Vive actualmente en el distrito de Grocio Prado, distrito de Chincha.
Empezó sus estudios primarios en la Institución Educativa Privada Santa Isabel,
culminando allí el nivel primario, después se insertó en el colegio privado Nuestra Señora
de Guadalupe, institución en la cual estuvo hasta cuarto de secundaria. Su último año se
trasladó a Lima, terminando el nivel secundario en el colegio nacional Pedro Galvez
Egúsquiza.
Iniciando el 2019 estuvo un periodo corto de dos meses en un centro pre universitario,
para reforzar sus conocimientos, luego de ello comenzó sus estudios en la universidad
San Juan Bautista en la filial Chincha, donde actualmente se encuentra estudiando.
Artículo de opinión

MITOS Y LEYENDAS EN LA VEREDA

Autor: María Alejandra Vásquez Guerra

Asesor: David Auris Villegas

La urbanización Los Viñedos en el distrito de Grocio Prado se caracteriza por ser pequeña
y cerrada, puesto que el perímetro está cercado. Esta urbanización suele ser unida,
acogedora y presta a ayudar para las causas justas. Las casas son cercanas unas a las otras,
la mayoría tiene similar infraestructura, pero diferentes colores.
Sin embargo, no todo es perfecto. Por las avenidas de la urbanización corren mitos y
leyendas, consumidas por la exageración de una sociedad mediocre, a estos le llamamos
coloquialmente “chismes”, en su mayoría inventan acciones nunca cometidas, tergiversan
la versión de los hechos o exageran acontecimientos.
¿Qué sucedería si nos enfocamos mas en nuestro barrio, en que éste crezca? ¿cómo
podemos crear una sociedad equitativa dispuesta a favorecer la mejoría de la vecindad?
Si lo miramos desde un buen punto de vista, no estamos para atrasar, sino para avanzar.
Si bien es cierto, desde hace 4 años que vivo en esta urbanización ha avanzado, pero han
sido cambios mínimos, que recién se relucen, esto evidencia la falta de interés en un
beneficio colectivo, ya que la mayoría descarga su tiempo libre siendo vigilantes
particulares, observando acciones ajenas con la intención de tener un nuevo chisme.
Fuera de ello, se consume un individualismo masivo dentro de la vecindad, no escuchan
los comunicados de las mañanas que pasan por el porta voz, no acuden a las reuniones
vecinales, no suman, pero sí restan.
Si toda persona se interesaría sobre el surgimiento de un barrio, habría una campaña de
concientización, a fin que toda persona entienda la necesidad de mejorar como persona
individual y como sociedad. Esto se puede lograr a cabo con una junta vecinal, y persona
que no pueda asistir dejar un folleto en su casa para mantenerse informado.
No obstante, si cada persona solo interviene en sus asuntos personales, no observaría si
las acciones de cualquier otro individuo son correctas o no, probablemente esté atentando
contra la tranquilidad de la vecindad y nadie lo toma en cuenta, ya que existiría solo un
interés propio a fin de no inmiscuirse en la vida ajena.
Para culminar, considero importante la observación, no solo de nosotros mismos, sino la
de los demás para así garantizar la paz de la sociedad, siempre y cuando no se exagere,
invente o tergiverse los acontecimientos sucedidos. Toda acción fortuita debe ser apoyada
por la vecindad, ya que así se llega a alcanzar la mejoría.