Babe's Bible

[pág.
1]
La biblia de las chicas
[Traducción de Abel Debritto y Mercè Diago]
1
[pág. 2]
Gráficos
Richard Rockwood
Dedicatoria
A los hombres que nos inspiran: para Raff y Paul con amor.
[pág. 3]
La biblia de las chicas
Elizabeth Eran y
Sada Walkington
[pág. 5]1
Índice
Prólogo
Cómo entender al hombre moderno
Los arquetipos contemporáneos
¿Cuál es tu arquetipo?
Cómo utilizar la biblia de las chicas
El playboy
El adicto a las emociones extremas
El empresario
El ejecutivo
El intelectual
El erotómano
El activista
2
El doctor buen rollo
El hombre de los medios de comunicación
El trotamundos
El colega
El filósofo
El hombre uniformado
El adicto en fase de recuperación
El hombre del mundo del espectáculo
El hombre cibernético
El dictador
El artista
El guerrero ecológico
El amante obsesivo
El heredero
El bohemio
El amante de la moda
El hombre zen
Agradecimientos
[pág. 7]
Prólogo
¿Estás soltera y te gustaría tener a un hombre a tu lado? ¿Estás
segura de conocer bien a la persona con quien compartes la cama?
¿Cuántas veces has tomado la decisión equivocada? ¿O te has
sorprendido o decepcionado cuando él no ha estado a la altura de
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las circunstancias? Y si ahora mantienes una relación, ¿comprendes
por qué él es cómo es?
La clave del éxito en el juego de buscar pareja consiste en
encontrar al “tipo” correcto, al hombre que más te convenga, con
el que congenies mejor en un momento determinado de tu vida. Pero
¿cómo sabrás reconocerlo y, una vez conquistado, cómo harás para
conservarlo?
La biblia de las chicas ofrece una visión desenfadada sobre un
tema serio, una revisión de la realidad enraizada en la dinámica
que motiva a los hombres hoy día. Nos hemos sumergido de lleno y
sin miedo alguno en la psique masculina y hemos obtenido 24
perfiles de personalidad basados en los antiguos arquetipos para
representar a los distintos hombres actuales. Hemos unido los
puntos y salvado el vacío entre los sexos para brindarte la
oportunidad de comprender cómo se ve a sí mismo, su mundo y sus
relaciones.
Si alguna vez te has sentido frustrada por el silencio de los
hombres, su escasa inclinación a comunicarse y, seamos sinceras,
¿quién no se ha sentido así alguna vez?, éste es el libro que
buscabas. Esta guía no está únicamente pensada para ayudarte a
reconocer los distintos tipos que existen en el mundo y prepararte
mejor para encontrar al hombre que te conviene sino que es también
un manual de mantenimiento cuyo objetivo reside en explicar la
postura del hombre en el juego interactivo de las relaciones.
Así que si quieres sacarle el máximo partido al amor,
relájate, date un baño y tómate la noche libre. Estás a punto de
descubrir los antiguos secretos por los que se rige el hombre
4
moderno.
[pág.8]
Cómo entender al hombre moderno
En el pasado las sociedades de todo el mundo clasificaban a las
personas según sus impulsos y motivaciones. En los mitos y
leyendas de la mayoría de las culturas aparecen personajes con
rasgos concretos que invalidan las restricciones de los
estereotipos sociales. Estos arquetipos, como se han dado en
llamar, se encuentran en los cuentos de hadas, en la religión e
incluso en el cine comercial actual.
Echa un vistazo al típico hombre de acción de Hollywood y
verás que es una adaptación del arquetipo del héroe mitológico.
Lleva la misma camiseta ceñida para marcar músculos durante toda
la película. Primero dispara y luego pregunta. Le darán una
paliza, pero cuando comiencen a aparecer los créditos ya habrá
salvado el mundo, conquistado a la chica dura de turno y
encontrado tiempo para darle de comer al perro.
Hace miles de años el rol masculino estaba claro: en las
sociedades tribales el hombre tenía que confiar en los instintos y
en la fuerza para sobrevivir. Los antropólogos han llegado a la
conclusión de que se consideraba que el jefe de la aldea encarnaba
las características de todos los arquetipos antiguos. El jefe era
Rey, Guerrero, Mago, Altruista, Amante, Héroe, Inocente y
Trotamundos. Como tal, era el jefe supremo, el profeta y el
vidente, el más sabio, un consejero divino y el guardián de los
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secretos. Lo respaldaban los ancianos, cuya responsabilidad era
educar a los niños de la aldea para que se convirtieran en
guerreros poderosos con cualidades heroicas.
Los ancianos guiaban a los niños durante las distintas etapas
que conformaban su viaje, desde el nacimiento hasta la edad adulta
pasando por la adolescencia. Se les educaba según las enseñanzas
sagradas para asegurarles el paso por los ritos iniciáticos que
les prepararían para los rigores de la vida adulta. Y les contaban
historias tribales para mantener vivas las creencias ancestrales.
Este traspaso de sabiduría disparaba la imaginación de los niños y
delimitaba su destino. Sus vidas quedaban marcadas por quienes
tanto tenían que ofrecer gracias a la experiencia ganada a pulso.
Hoy día los niños que se adentran en la adolescencia se
enfrenta a un reto nuevo. Si se cría junto a una figura paterna,
el padre habrá hecho cuanto haya podido, pero hace ya mucho que el
jefe de la aldea y los ancianos no existen. Si el niño es
afortunado es probable que algún pariente o amigo íntimo de la
familia desempeñe ese papel en parte. Sin embargo, ya no cuenta
con la oportunidad de disfrutar de una iniciación estructurada que
conduzca a una identidad amalgamada basada en los arquetipos
masculinos existentes.
Sin duda alguna, es el Guerrero Inocente y debe descubrir por
sí mismo los otros roles que están a su alcance. Dado que ya no
puede recurrir a las enseñanzas ancestrales a lo largo de su
proceso de maduración, tendrá que aprender de lo que le rodea. El
entorno y sus modelos de comportamiento ejercerán una gran
influencia. Encontrará héroes en los juegos bélicos de ordenador,
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cómics, vídeos o superproducciones cinematográficas. Buscará
modelos de conducta para valores como la confianza, la sabiduría,
la cooperación y la comunión.
[pág. 9]
Todo el mundo necesita un héroe y, para el niño, esta
necesidad representa la añoranza del padre idealizado. Se
identificará con el hombre que le gustaría ser. Esa elección llega
cuando un acontecimiento importante dispara su imaginación; puede
que se identifique con un héroe del deporte nacional o que siga
los pasos de su padre. Esta necesidad de identificarse con un
modelo de conducta masculina es esencial. Así es cómo aprenderá de
los hombres, al observar e interiorizar la trayectoria vital de su
héroe. Su adolescencia estará marcada por ritos iniciáticos, y las
características propias de su “tribu” ejercerán una gran
influencia en su emergente identidad masculina. Desarrollará su
inquietud vital, la cual determinará su postura ante la vida y el
objetivo de ésta. Así, el joven se convierte en hombre y emplea el
arquetipo que domina en él para obtener lo que quiere de la vida.
Esa es la teoría. En la práctica, creemos, la mayoría de los
hombres constituye un complejo entramado de aspectos arquetípicos.
Un arquetipo dominante gobernará sus ideas y su corazón. Pero las
experiencias de la vida relativas a la transición y a la
transformación tal vez le permitan adoptar arquetipos secundarios.
En el caso de la paternidad, por ejemplo, el Guerrero tiene la
oportunidad de acceder a su arquetipo de Inocente.
Imagínate a un joven cuyo padre dictatorial le obliga a
7
abandonar sus planes de estudiar en la escuela de cine. Su
arquetipo de Amante queda reprimido y entonces se dedica a la
banca corporativa. Prospera y, durante cierto período de tiempo,
olvida los ideales de juventud. Pero llega un día en que ya no le
apetece seguir interpretando el papel del guerrero urbano. Le
falta algo, pero ¿el qué? Tiene dinero, mujer, el despacho de la
esquina, pero desde un punto de vista emocional funciona con el
piloto automático. Ha olvidado cómo divertirse y cree que ya no
tiene ningún objetivo en la vida. Así que llama a un tipo que
conoció el pasado fin de semana en el curso de formación
corporativa, un hombre tranquilo y con las ideas claras, capaz de
escucharle sin prejuicios.
Por desgracia, sin embargo, a un hombre le resulta mucho más
fácil fingir que todo le va bien. Vivimos en una época en la que
los hombres se hallan sometidos a la constante presión de ser
fuertes y “centrados”. Lo más sorprendente es que muchos hombres
reconocen la necesidad de interactuar de forma más inteligente,
expresiva, perspicaz y respetuosa con los otros hombres y mujeres.
Los hombres del siglo XXI quieren mantener relaciones comprensivas
y afectuosas con las mujeres, así que ha llegado el momento de que
las mujeres los acepten tal y como son. Necesitamos llegar a un
compromiso con ellos. Y eso no es fácil; ¡han cambiado tantas
cosas en el juego del amor! Las preocupaciones de los hombres han
desconcertado y confundido por igual a las mujeres. En pocas
palabras, ya no existen reglas. Debemos escucharnos los unos a los
otros. Seamos honestos.
8
[pág. 10]
Los arquetipos contemporáneos
El psicoanalista Carl Jung, influido por la obra del mitólogo Karl
Kerenyi, dio una identidad psicológica a los arquetipos antiguos y
los empleó para describir los principales impulsos que yacen en lo
más profundo del inconsciente. Según Jung, existían cuatro
arquetipos, los guías de nuestro interior que gobiernan los
instintos humanos primarios, como cazar, hacer vida social, amar y
ser padres. En la actualidad, los psicólogos jungianos continúan
analizando y expandiendo la naturaleza y el número de estos
arquetipos.
Influidos por la teoría jungiana, las doctrinas espirituales,
la antropología, la mitología y la literatura, hemos ordenado los
veinticuatro perfiles de personalidad masculina actuales en un
grupo general de ocho arquetipos que, juntos, definen la dinámica
de la idiosincrasia masculina. Creemos que esta clasificación
ofrece una perspectiva valiosa. Por supuesto, no se trata de una
solución para las complejidades de la naturaleza humana. Sin
embargo, lo que revela sobre los impulsos y las motivaciones
subyacentes a la conducta de los hombres, las distintas maneras en
que los hombres alcanzan su potencial y, sobre todo, cuán
diferente es su postura ante el amor, la convierte en una guía
práctica para ayudarte a reconocer y a tratar a los hombres que
conozcas. Tal vez el héroe hollywoodiense sea inalcanzable, pero
los hombres de este libro son reales como la vida misma. Existen.
Los conoces.
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A continuación ofrecemos los veinticuatro perfiles de
personalidad, clasificados según sus descripciones arquetípicas,
pero primero nos gustaría explicar los términos “personaje” y
“sombra”, que aparecen a lo largo de todo el libro. A lo largo de
nuestro viaje por la vida ponemos de manifiesto lo que queremos
que los otros sepan y aprecien de nosotros. La interpretación y
comprensión psicológica de Jung le condujo a adoptar la palabra
“personaje”, procedente del término latino referido a la máscara
de un actor, para describir la imagen socialmente aceptable con la
que nos protegemos, al igual que nuestros antepasados guerreros se
defendían con espadas y escudos. La “sombra” es el yo oculto, a
veces tan bien escondido que incluso nosotros mismos llegamos a
olvidarnos que somos algo más que una imagen. La personalidad
oculta desempeñará el papel de saboteadora, causará conflictos y
hará que sea difícil cambiar.
Amante
Filósofo, artista,
Amante obsesivo, erotómano
Su personaje se dedica a la búsqueda de satisfacción sensual,
romántica, artística y creativa. Su conciencia estética procede de
su entorno. Los sentidos ejercen una gran influencia sobre él. No
se siente separado del cosmos. Su sombra representa su duda sobre
sí mismo, su omnipresente irritabilidad, su nostalgia infantil por
la adoración y su pereza. No es respetuoso y no pone límites a su
sexualidad. Es posible que no sepa cómo separarse de los demás.
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Mago
Hombre del mundo del espectáculo, bohemio,
Amante de la moda
Su personaje sabe tomar sus propias decisiones y ser dueño de su
vida. Se cree invencible. Su energía dispara el pensamiento
progresista. Puede crear algo importante a partir de la
inspiración en estado puro. Posee una fuerza transformadora. Su
sombra es el rebelde que insiste en hacer las cosas a su manera.
Su egoísmo será destructivo y la falta de consideración
contaminará su visión de futuro. La necesidad de ser el centro de
atención le distanciará de los demás, y su exigencia extrema así
como el falso orgullo le cerrarán puertas.
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Altruista
Doctor buen rollo, el hombre zen
Su personaje se vuelca de lleno en anteponer el bienestar de los
demás al suyo. Ha aceptado su mortalidad. Genera buenas opiniones,
compasión y entusiasmo. Promueve la libertad y la generosidad de
espíritu. Su sombra representa la necesidad de ser necesitado para
mitigar el dolor de los demás. Asumirá demasiadas
responsabilidades de forma compartida. Se valdrá de los demás para
reafirmar su autoestima. Descuidará su bienestar personal. Cruzará
los límites personales de los demás.
Héroe
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Hombre uniformado, adicto a las emociones extremas,
Adicto en fase de recuperación, activista
Su personaje le obliga a luchar por la justicia. Tiene una misión.
Le atrae la aventura, por lo que persigue metas elevadas y corre
riesgos con tal de resultar vencedor. Es un hombre de proezas y
valor admirables. Su sombra representa la falta de atención al
detalle. Baila cerca del abismo de la mortalidad y hará caso omiso
de las advertencias. No recurrirá a la autorregulación. Es un
experto en echar las culpas a los demás.
Guerrero
Empresario, ejecutivo, hombre de los medios de comunicación,
Guerrero ecológico
Su personaje se motiva ante el éxito y la competitividad. Cultiva
la autosuficiencia y defiende sus deseos primarios. Se centra en
la competencia y reafirma su identidad en el mundo. Su sombra es
donde esconde el sentimiento de culpa. Es agresivo y arrogante. Se
niega a colaborar con los demás. Sustituirá el calor emocional por
las ganancias materiales.
Inocente
Colega, heredero, playboy
Su personaje intenta ganarse la confianza de los demás. Se le da
muy bien el trato social y se esfuerza para establecerse en el
mundo valiéndose de un encanto que no resulta nada intimidatorio.
Su ingenuidad resulta atractiva. Su sombra está constreñida por
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una conducta inmadura. No aceptará que el dolor y el sufrimiento
formen parte de la vida. Es inseguro e indeciso. Evitará no dar
cuentas a nadie de sus acciones si comete errores.
Trotamundos
Trotamundos, hombre cibernético
Su personaje es su espíritu libre, que le guía en el viaje hacia
el tesoro, el regalo de su verdadero yo. Se enfrenta a lo
desconocido en un viaje consciente y se vale del mundo para
ampliar su experiencia. Asegura que no se viene a la vida a sufrir
sino a experimentar. Su sombra se basa en la necesidad de no
rendir cuentas a nadie. Es el viajero solitario: pasa demasiado
tiempo solo, lo cual puede limitar sus aptitudes en las
confrontaciones cara a cara.
Rey
Intelectual, dictador
Su personaje posee unos conocimientos infinitos y se vale de su
posición privilegiada. Es un defensor de las normas y se le
considera un líder y un modelo a seguir. Tiene la suerte de gozar
de sabiduría y se le suele ver como a un anciano sabio. A su
sombra le preocupa cómo reducir el dolor y multiplicar los
elogios. Puede llegar a ser tiránico y cruel. Empleará medios poco
éticos para obtener control. Es incapaz de ver sus debilidades y
no dudará en destruir a los adversarios más profesionales.
Aborrece las críticas y se muestra del todo insensible si así
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logra sus objetivos.
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¿Cuál es tu arquetipo?
Este pequeño test te ayudará a encontrar tu pareja ideal. Estas
preguntas en apariencia simples han sido pensadas para analizar tu
actitud hacia la vida y el amor y para indicar cuál de los ocho
arquetipos actuales complementa mejor tus rasgos personales.
La relación basada en los principios complementarios es la que
cuenta con un mayor potencial para desarrollarse y pasar por los
ciclos de la vida. Para comprobar las respuestas, consulta la
página siguiente.
1 Si fueras un par de zapatos, ¿cuál serías?
A Unas sandalias de tiras baratas de andar por casa, con un bolso
a juego, por supuesto.
B Tus botines de ante de toda la vida: combinan con todo y han
estado en todas partes.
C Unos zapatos de salón planos, sencillos y discretos o unas
sencillas zapatillas de ciudad.
D Unas botas italianas de confección artesana del mejor cuero
blando.
2 ¿Cuál es tu postura sexual preferida?
A Con las dos piernas por detrás de la cabeza; una postura
práctica que aprendiste en las clases de ashtanga yoga.
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B Bien juntitos porque es íntimo, cariñoso y dulce.
C Te da lo mismo siempre y cuando los dos podáis veros en un
espejo de cuerpo entero.
D La postura del misionero: te encanta que tu amante te rodee con
los brazos y besarle mientras hacéis el amor.
3 Es la primera vez que os vais juntos de fin de semana. ¿Qué
haces?
A Es una sorpresa: él lo prepara todo, desde el hotel hasta la
música que suena de fondo en el restaurante.
B Te lleva al pueblo en el que creció para que veas cuán lejos ha
llegado en la vida.
C Organiza un fin de semana para practicar rafting en aguas
rápidas en Gales y te coge de la mano mientras pasáis por los
rápidos.
D Te lleva a una solitaria casita de campo con chimenea y una cama
enorme.
4 ¿Tienes un guru o un modelo de conducta?
A Diana, la diosa de la caza: una mujer fuerte y terrenal.
B Sí. Lo encontraste en una cueva en Nepal y empleas sus
enseñanzas dondequiera que estés.
C Admiras a Stella McCartney, que combina el glamour más moderno
con una actitud descarada y abrupta.
D La vida es tu guru: consideras que todo lo que te ocurre es una
experiencia de aprendizaje.
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5 ¿Qué es lo más sorprendente de tu aspecto?
A Bajo tu vestido blanco y virginal se ocultan varias prendas de
interior de color rojo.
B Estás igual de buena desnuda que vestida, y vestida estás
fantástica.
C Tu belleza natural y sencilla es en realidad el resultado de
largas horas en el centro de estética, el gimnasio y en los rayos
uva.
D No sabes qué aspecto tienes hoy: hace semanas que no te miras en
el espejo.
6 ¿Cuál es la profesión con la que sueñas?
A Volver a la universidad y hacer un doctorado sobre la literatura
erótica en la época victoriana.
B Trabajar en una peluquería; lo que sea con tal de mantener
impecables tus mechones largos y sueltos.
C Algo que valga la pena, como investigar curas para el cáncer o
cuidar de sus enfermos.
D Dirigir una agencias de viajes por Internet y aprovecharte de
todos los vuelos baratos.
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7 ¿Qué te gusta que te lea tu hombre?
A Los poemas de amor de William Butler Yeats o Lord Byron, a la
luz de las velas, por ejemplo.
B Los últimos cotilleos de las páginas de moda de una revista
independiente y alternativa.
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C Las cartas de amor que su abuela envió a su abuelo durante la II
Guerra Mundial.
D Fragmentos de la biografía de un hombre brillante y audaz como
John F. Kennedy.
8 ¿Cuál es tu bebida preferida?
A Chocolate caliente y espumoso recubierto de nata batida y con un
chorro de licor irlandés suave.
B Una copa larga del mejor champán añejo.
C Una bebida energética con guaraná difícil de encontrar y
conocida en Brasil.
D Un delicioso café negro sin cafeína que sólo se puede pedir por
correo cuyas ganancias están destinadas, en parte, a ayudar a los
trabajadores de las plantaciones de Perú.
9 ¿Crees que el hombre debe dar el primer paso?
A Sí, siempre. Siempre ha sido así y no tiene por qué cambiar.
B Ninguno debe dar el primer paso. Debería bastar con que tus ojos
atravesaran una habitación/tren/playa atestada y que los dos lo
supierais.
C No. Hay que dejarle creer que ha dado el primer paso, pero tú no
has dejado de seducirle en momento alguno.
D No. Si le ves y te gusta, ve a por él. Siempre consigues lo que
quieres.
10 ¿Aceptas la infidelidad en según qué casos?
A Después del matrimonio, no. Es un compromiso para toda la vida.
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B El sexo esporádico y los ligues superficiales de una noche
pasan, pero una relación sentimental con otra persona es una
traición.
C Depende de quién corteja a quién: cuanto más tenaz es el acoso,
más aceptable resulta la infidelidad.
D La infidelidad no existe porque la otra persona no te pertenece.
Puntuación
Cada respuesta corresponde a uno de los arquetipos actuales. El
arquetipo con la puntuación más alta es el que más te conviene.
Consulta las páginas 10-11 para ver los tipos que deberían
gustarte. Si dos arquetipos obtienen la misma puntuación entonces
es posible que en el mundo exista más de un tipo para ti.
1.
a) Mago
b) Trotamundos
c) Inocente
d) Héroe
2.
a) Altruista
b) Inocente
c) Mago
d) Héroe
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3.
a) Rey
b) Guerrero
c) Héroe
d) Amante
4.
a) Guerrero
b) Trotamundos
c) Mago
d) Altruista
5.
a) Rey
b) Guerrero
c) Inocente
d) Trotamundos
6.
a) Rey
b) Amante
c) Altruista
d) Trotamundos
7.
a) Amante
19
b) Mago
c) Inocente
d) Rey
8.
a) Amante
b) Guerrero
c) Héroe
d) Altruista
9.
a) Héroe
b) Amante
c) Inocente
d) Mago
10.
a) Rey
b) Trotamundos
c) Guerrero
d) Altruista
[pág. 14]
Cómo utilizar la biblia de las chicas
Creemos que observando el rol específico de los hombres en la
sociedad, la forma en que se ven a sí mismos y en que los demás
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los ven, podemos vislumbrar con mayor claridad por qué toman
ciertas decisiones relativas al trabajo y al amor. Dicho de otro
modo, por qué se comportan como se comportan.
Los veinticuatro perfiles de personalidad de este libro
comprenden los tipos masculinos básicos que se encuentran en la
sociedad occidental actual. Mientras leas el libro te percatarás
de que algunos perfiles comparten rasgos de conducta. El playboy y
el adicto a las emociones extremas comparten por igual la emoción
del acoso, pero con resultados muy distintos. El doctor buen rollo
y el hombre zen quedan definidos por su preocupación por el
bienestar de los demás. Recuerda que, del mismo modo que ningún
hombre se halla gobernado por un único arquetipo, es muy difícil
encontrar a un hombre cuya personalidad pueda resumirse con un
solo perfil. La mayoría de los hombres que conozcas serán una
enigmática maraña de impulsos y motivaciones. El que identifiques
la combinación de perfiles exacta depende de ti. De todos modos,
no olvides que tu hombre es único.
Imágenes
Una ventana a su mundo: observa detenidamente y verás los símbolos
que expresan quién es.
Descripción arquetípica
Este es su fuerte, al que siempre recurrirá. También incluimos una
breve perspectiva general de sus atributos más característicos.
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Personaje/sombra
El personaje es la psique revelada e intelectualizada. Esta es la
información que quiere que sepamos y creamos. La sombra es la
psique oculta y emotiva. Es donde se encuentran sus verdaderos
motivos y se dice que es responsable de los pequeños lapsus.
Características de este tipo
Aquí exponemos sus características sociales: cómo se comporta en
público, sus actitudes, su voluntad y su intelecto.
Características del alma
Aquí revelamos sus pensamientos y sentimientos más profundos y
complejos. El alma alberga su naturaleza esencial. Observa su
espíritu y aprende sobre su mundo interior. ¿Cuánto ha avanzado en
el camino del autodescubrimiento?
El arte del amor
¡Explicamos resumidamente las pistas para averiguar sus verdaderas
intenciones románticas! Descifra sus estrategias para encontrar
pareja al observar las zonas amorosas problemáticas y sabrás cómo
ayudarle.
En acción/interacción
Esta información es la más importante. Cómo ligártelo, no perderlo
o plantarlo.
22
Lección de amor
Nuestra misión es aconsejarte como lo haría una hermana: darte lo
que necesitas para amar con prudencia: ayudarte a elegir al hombre
correcto y proteger tu corazón.
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Los iconos Estas son las fórmulas abreviadas para que sepas los
defectos y virtudes claves de cada perfil de personalidad.
Disponibilidad
¿Puede amarte con absoluta libertad? ¿Mantendrá su palabra y serás
su principal prioridad?
Compromiso
¿Sabrá satisfacer tus necesidades y deseos? ¿Es capaz de
comprometerse? ¿Y sabe vivir en consecuencia?
Sexualidad
¿Con cuánta desenvoltura actúa en y fuera del dormitorio? ¿Le
preocupa tu placer o el suyo? ¿Es aburrido o fogoso? ¿Seguro o
torpe?
Umbral de la ira
¿Cuánto se enfada? ¿Es un maniático del control o un bravucón? ¿Un
cobarde o un luchador honesto?
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Aptitudes sociales
¿Le caerá bien a tus amigos? ¿Podrás presentárselo a tu madre? ¿Te
protegerá y mejorará la imagen que los demás tienen de ti? ¿O
destruirá tu confianza?
Inteligencia
Siempre quiere tener la razón, pero ¿es Einstein, enigmático o
simplemente exagera? ¿Y sabe lo que significa la inteligencia
emocional en el mundo real?
Espiritualidad
¿Se detiene para ayudar o sigue su camino? ¿Conoce su misión?
¿Busca alguna verdad? ¿Se cuestionará su existencia?
Honestidad
¿Tiene el valor de decir la verdad aunque duela? ¿Es honesto
consigo mismo? ¿Puedes confiar en él?
Detector de amor
¿Está dispuesto a amar en este momento de su vida? ¿Seguirá los
dictados de su corazón o de su cabeza?
Fidelidad
¿Se trata de un ligón inocente o de un pícaro peligroso? ¿Podrás
dormir tranquila cuando no esté? ¿Te será fiel?
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El playboy
El arquetipo: El Inocente, trotamundos seductor, coleccionista de
amantes, odia el compromiso
El personaje
Qué imagen da
Cómo reconocerle: Será al que se le salgan los ojos de las órbitas
cuando entres. Su lenguaje corporal grita: “Tengo el mejor polvo
de la ciudad”. Su vestuario reafirma el mensaje. Estará en el bar
con otros depredadores parecidos, a la caza.
Expresión/Registro verbal: Comentarios con dobles intenciones e
indirectas; ingenioso en el campo de los cumplidos. Dirá cualquier
cosa con tal de llamar la atención; no hay forma de hacerle
callar.
Frase para iniciar conversación/ligar: “¿Te gusto, nena?” “Vaya,
nena. ¡Qué buena estás!” “No puedo quitarte los ojos de encima”.
Inquietud vital: Hacer tantas muescas como sea posible en el
cabezal de la cama. Es un lobo de pies a cabeza.
Accesorios: Su cuerpo. El coche. El nidito de amor. La
imprescindible lista de chicas.
Profesión: Playboy profesional, propietario de una agencia de
modelos, informático sobrevalorado, pequeña celebridad famosa por
ser famosa.
Historial amoroso: Las desea, las atrae, las lame y las deja.
Canción: “You’re The One That I Want”, de Olivia Newton John y
John Travolta.
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Fantasía: Invitado de honor en el yate del amor con destino a la
Isla del Deseo, donde será Robinson Crusoe entre un reparto de
mujeres nativas desnudas y sedientas de sexo.
La sombra
Quién es en realidad
Malas costumbres: Promete de todo pero sólo da excusas y mentiras
piadosas, se niega a desconectar el imán de mujeres en público y
alardea de su vida sexual con tu mejor amiga.
Lo que no dice/Secretos y silencios: “Soy un misógino. A lo mejor
tu madre me odiará, pero ¿es sexy? Las relaciones íntimas se me
dan muy bien; lo mío es compartir. Eres mi tipo, nena.”
Agenda oculta: Ligar y jugar; luego plantar a la chica y
desaparecer. Escoge a mujeres sencillas para reafirmar su frágil
ego. Hacerse famoso como donjuán.
Mantra filosófico: Viajar ligero.
Accesorios: Bronceado permanente, número secreto de móvil, dos
apartamentos, colección de tangas en el ajuar.
Barómetro energético: Va a todas las fiestas para llamar la
atención. Las conversaciones matutinas son inexistentes. El exceso
de estimulación provoca el agotamiento orgásmico. Fuma después del
acto sexual. Se olvida de la estimulación previa al acto sexual y
se olvida de ti.
Futuro de la relación: Sacrificará la integridad por su aspecto.
Su idea de intimidad es su coche deportivo de dos asientos. No
pienses en una relación duradera hasta que cambie la preocupación
por sí mismo por el compromiso.
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Canción: “Sexy Boy”, de Air.
Rendimiento sexual: Buenas noticias: siempre está dispuesto a
practicarlo. Malas noticias: pero no siempre contigo.
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Este tipo es divertido, romántico y tiene una libido muy subida.
El deseo de encontrar a la mujer perfecta alimenta su pasión.
Nunca renuncia al juego de la incitación. Mucha veces resulta
seductor y encantador y parece sincero hasta el final. Te
transportará hasta un nivel celestial de supuesta intimidad falsa,
pero supuesta al fin y al cabo.
Es un profeta de las relaciones: sabe cómo va a iniciarla y
cómo va a acabarla. Esta pauta recurrente arroja luz sobre sus
complejidades de donjuán. Sí, da lo que parece que es amor, pero
en realidad vive en una fantasía que le exime del amor verdadero.
Su mayor preocupación consiste en conseguir más (por “más” léase
“sexo”) y se convierte en un esclavo de su propia complacencia a
medida que intenta organizarse.
Sus grandes dotes para hacer vida social ocultan su
incapacidad para concentrarse. Le encontrarás en cualquier lugar
menos en casa. Le gusta el alboroto de los sitios ruidosos y
atestados ya que le permite mostrar su conducta descaradamente
insinuante. Le verás mirando conjuntos nuevos en tiendas finas
dirigidas a mujeres sexys o detrás de un par de gafas de sol,
observando a la gente. Este tipo es un auténtico arribista. Le
27
importa de veras lo que los demás dicen o hacen. El menor atisbo
de crítica le hará sentirse incómodo y nervioso. Lo interpretará
como una especie de rechazo y, puesto que se niega a rendir
cuentas de su conducta, elegirá la salida fácil y evitará el
enfrentamiento. Y no está preparado para cambiar. Es un misil
termodirigido a la espera de una misión. Las conquistas de una
noche son la recompensa de tantas bravuconadas.
Al playboy le encanta ser el centro de atención. Es su
terreno; al sentirse querido, necesitado y, por lo tanto, seguro,
su ego se afianza. Las cosas irán de mal en peor cuando pierda el
control. La dinámica cambia: lo elevado de la búsqueda se ve
reemplazado por una compulsión por hacer daño. Mientras la
negatividad bulle en su cabeza, lo que antes consideraba adorable
ahora lo pone en duda con toda tranquilidad. Una vez te ha
atrapado, se irá a la sala de embarque. Si te has enamorado de un
tipo que encaja en esta descripción será mejor que despiertes.
Aunque su potencial parezca maravilloso, un leopardo nunca cambia
sus manchas. ¡Ponte las zapatillas de deporte y echa a correr!
(1) Te transportará hasta un nivel celestial de supuesta intimidad
falsa, pero supuesta al fin y al cabo.
[pág. 19]
El playboy juega. Como soltero empedernido, poco le preocupan las
relaciones a largo plazo. Nunca ha compartido en igualdad de
28
condiciones. Ha aprendido a no tener en cuenta a los demás para
satisfacer una lujuria egocéntrica por el gozo sexual. Este tipo
interpreta la vida como una aventura hedonista y repleta de
excesos.
Recorre la ciudad con la determinación de reafirmar su
identidad masculina. Es probable que en cualquier encuentro social
haga algún comentario sobre su éxito con las mujeres. Sus amigos
reconocerán y honrarán su innegable virilidad. Envidian su
supuesto éxito y lo elevan a la categoría de super semental, y es
el reconocimiento de los otros hombres lo que alimenta su
autoestima. La opinión de las mujeres no cuenta tanto. Su encanto
seductor es de lo más dulce pero te sientes decepcionada cuando se
comporta de forma engañosa, calculadora y egoísta. La pregunta es:
“¿Es lo bastante profundo para ti?”
Su principal objetivo consiste en satisfacer su fantasía de
una perversidad romántica. Se siente independiente y le gusta
interpretar al niño que no quiere quedar atrapado en las
complicaciones y en los compromisos propios del amor maduro. Como
prefiere seguir siendo un adolescente, no se cansa de la vida. Sin
embargo, desea tanto disfrutar de la poca intimidad que ha
experimentado que intenta rememorar cada momento memorable con su
última víctima.
Le encanta la idea de los caprichos pasajeros, pero
imposibilita cualquier respuesta emocional auténtica al reducir
cada encuentro a un mero asunto de atracción sexual. Sin embargo,
incluso esta necesidad aparentemente abrumadora no siempre se basa
en la realidad. Lo que alimenta su fantasía es la distorsión de la
29
realidad. Anulará cualquier posible reacción natural con la
intención de ganar más o menos tiempo mientras interpreta
distintos guiones. Para él, todo vale en el amor.
(1) En la vida real
El donjuán del barrio
[pág. 20]
El arte del amor
Es de los que saben conseguir lo que quieren: tiene una voz
profunda, segura de sí misma y suave; es discreto y, por supuesto,
sexy. Te atrae con sus sonrisas juveniles y una mirada que promete
sexo eterno. De niño practicaba ante el espejo. Es el Peter Pan
moderno, el joven que nunca envejece. Le guía su insaciable
apetito por el amor o lo que él entiende por amor. Sueña con la
mujer perfecta, pero es un sueño adolescente basado en una
fantasía del despertar sexual perpetuado por la idealización
propia de la falta de experiencia. Se niega a madurar, asumir
responsabilidades y pasar a la siguiente etapa de la vida adulta.
Al reducir las oportunidades de vivir como compañero limita su
crecimiento personal y se queda en el estadio del “yo” más que en
el del “nosotros”. Este problema en su desarrollo le impide
madurar y le obliga a buscar todo tipo de diversiones para huir
del tedio.
Se le podría considerar una víctima de la relación madre/hijo
edípica. La madre, por amar demasiado a su hijo, le dificulta la
30
separación que marca el paso a la edad adulta, por lo que el hijo
está predestinado a convertir en objetos a las mujeres en su
búsqueda de la perfecta sustituta de la madre. El playboy sólo ve
a las mujeres en términos de belleza física, por lo que la imagen
importa mucho más que el cerebro o la personalidad, y centra toda
su vida emocional en el último objeto de su atención. En cada
encuentro sexual su psique revive el cariño adolescente por su
madre, pero a otro nivel, a fin de reafirmar su independencia
intenta evitar la intimidad.
Lo que en realidad le ocurre es que tiene miedo: su misoginia
es tanto una defensa contra “lo verdadero” (amor) como el apego
incierto por su madre. Considera que los peligros que correría al
exponer su vulnerabilidad en cualquier relación son una carga
excesiva y no puede controlar o superar este miedo. Resultado:
sabotea las relaciones que inicia siendo infiel o, al menos,
pareciendo que lo es. De ese modo, aunque parezca independiente,
en realidad depende por completo del amor para sentirse
necesitado. Su mayor miedo es envejecer solo: puede que nunca
encuentre el ideal que personifique su fantasía de una mujer
perfecta. El alcance de su profundidad puede medirse por el hecho
de que hace todo esto a sabiendas.
El playboy es un hombre a quien le obsesiona la idea de la
caza. Le encanta que las mujeres caigan en su trampa. Su truco
consiste en dejarse fascinar por el objeto de sus atenciones. Su
innegable encanto le ofrece la posibilidad de acceder al estado
emocional y psicológico de su presa. Pero es un artista de la
huida emocional. No permite que la gente intime con él. Centra
31
toda su energía en parecer que está bien y divirtiéndose. No te
creas nada de lo que te diga: ponlo en tu brazo pero no en tu
corazón.
[pág. 21]
(1) El gancho
Destaca entre la multitud. Da la impresión de que estás libre y
dispuesta. Responderá a cualquier insinuación así que no seas
tímida. Ya ha participado en este juego. Compórtate como una chica
sin complejos y hazle también insinuaciones. Recuerda que sus
indirectas están dirigidas a provocar respuestas sexuales; no
existe el menor compromiso emocional. Cuando creas que ya lo
tienes, no bajes la guardia. Mantenlo interesado con una
impotencia femenina y añade un desinterés equívoco para volver a
despertar su libido.
(2) En pareja
Si es a largo plazo, no será nada fácil. Prepárate a conciencia
porque los fuegos artificiales del comienzo se quedarán en nada.
Mantente en tus trece y resiste. Evitará los enfrentamientos, lo
que te frustrará, sobre todo cuando emplee el humor con la
intención de distraerte. ¡Sugiérele que se pase un fin de semana
entre hombres para que se encuentre a sí mismo! Debes prepararte
porque los progresos serán pocos y lentos. Sé cariñosa y escucha
todas y cada una de sus palabras si te permite entrar en su
32
corazón.
(3) Fin de la relación
Cuando finalmente descubras lo inevitable, que es un lobo con piel
de cordero, un niño con traje de hombre, márchate discretamente.
No vale la pena que te esfuerces en intentarlo de otra manera. Sé
realista sobre lo que era auténtico y sobre lo que no lo era.
Corta por lo sano y márchate sin pensártelo dos veces.
(4) Lección de amor
Los hombres se sienten fuertemente atraídos por la mujeres que les
hacen sentir dioses del sexo.
[pág. 23]
El adicto a las emociones extremas
El arquetipo: El Héroe, buscador de emociones, adicto a la
adrenalina, despreocupado
El personaje
Qué imagen da
Cómo reconocerle: Será mejor que te des prisa, nunca se está
quieto. Los zapatos no son lo suyo, sino las sandalias más
modernas y los botines. Los logotipos definen lo que entiende por
alternativo: el macho actual que está en la onda. Es probable que
incluso sea capaz de demostrarlo. Si tienes dudas, dale un codazo
cuando pases junto a él.
Expresión/Registro verbal: Cotilleos sobre el deporte con una
33
buena dosis sobre el tiempo en el mundo y conversaciones en tono
alucinado. Domina la jerga del surf y del monopatín; ha redefinido
el lenguaje para que se ajuste al deporte en cuestión.
Frase para iniciar conversación/ligar: “Parece que estás en
forma”. “¿Quieres encerarme la tabla?” “Yo me ocuparé de todo; tú
sólo tráete el canguro”.
Inquietud vital: Escalar la montaña.
Accesorios: Cronómetro, agente de viajes, tablas, esquís, botas,
aletas, cuchillas, palos, bicicletas, protección solar del 30,
casco protector, seguro de vida, bebidas energéticas, perros
esquimales.
Profesión: Vendedor en una tienda de deportes, camarero, barman,
agente de viajes, estudiante, deportista profesional, profesor de
educación física, loco del surf y la nieve.
Historial amoroso: Le gusta pensar que por su cama han pasado más
chicas que las pulgas que tiene un puercoespín africano.
Canción: “Disco Inferno”, de The Trammps.
Fantasía: Gana la lotería y se compra dos billetes a la luna.
Despega en diez segundos: fuerza de la gravedad, tanga y punto G.
La sombra
Malas costumbres: Ocupas un segundo lugar, tras su obsesión por el
deporte. Es impulsivo hasta el punto de resultar molesto. Es
desordenado, olvida el desodorante, come deprisa y deja la tapa
del váter levantada.
Lo que no dice/Secretos y silencios: “Tengo miedo. Cuidado con el
34
deje de macho. Soy un machista intransigente”.
Agenda oculta: Disfrutar de su propio horario, sin restricciones.
Superar su propio récord. Ser el campeón.
Mantra filosófico: Puedo hacerlo.
Accesorios: Condones, botellas de cerveza, invernadero de
marihuana, pelo largo, sombreros ridículos, pantalones anchos,
colección de camisetas, carné de conducir falso, cómics, medallas.
Barómetro energético: Energía alucinante. Tanta actividad provoca
que tenga ganas de vivir. Es de armas tomar y espera que estés a
la altura.
Futuro de la relación: Posible, pero él no lo verá así. Es como un
niño en una tienda de golosinas: quiere escoger la que le apetezca
y saborearla mientras dure.
Canción: “Private Psychedelic Reel”, de The Chemical Brothers.
Rendimiento sexual: No es demasiado sentimental. Cuando hay que ir
al grano sintoniza con su cuerpo pero no con su cerebro. Todo un
tiarrón. Guíñale el ojo mientras se sube la cremallera.
[pág. 24]
Al adicto a las emociones extremas le vuelven loco el deporte, el
éxito y las chicas. La vida es una aventura. Tiene una agenda muy
apretada y si hace falta se levanta antes del amanecer. Es activo
y despreocupado. Extrovertido y demasiado dinámico. Instintivo. Le
encanta vivir.
Lo suyo es la supervivencia y se entrena duro para lograr sus
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objetivos. Establece sus propias metas y está muy motivado.
Compite consigo mismo, pero no necesariamente con los demás. A un
nivel de principiante disfruta de lo que hace por la emoción que
le proporciona. Cuando se desliza en un trineo montaña abajo a la
velocidad del sonido el corazón le late deprisa, la adrenalina le
sube y no pierde la concentración. No tiene miedo. Eso es lo
máximo. Es para lo que se ha entrenado: rechazar la cobardía y
sentirse repleto de fe y valor.
Desde un punto de vista social, el adicto a las emociones
extremas está rodeado de amigos participantes. Los tipos sin miedo
salen juntos. Cuando reflexionan sobre un día normal y corriente
dan rienda suelta a la imaginación con historias en las que se
salvan milagrosamente. Quedar mejor clasificados que los demás es
parte de la camaradería que les une. Pero el deseo de intercambiar
experiencias es sólo una de las razones por la que el adicto a las
emociones extremas forma parte de un equipo. Dado que le encantan
las emociones, es el primero en admitir que confía en él mismo
cuando las cosas salen mal. Confía en él como si la vida le fuera
en ello.
El peligro le amenaza cuando se extralimita en sus fuerzas.
Este tipo necesita que le adviertan si su ego se pone a cien. Le
obsesiona la idea del reto y se cree inmortal. Corre riesgos de
forma instintiva. Vive para eso. Es su derecho divino. Se
enorgullece de los extremos a los que es capaz de llegar. Su
dilema: ¿cómo podrá continuar recreando el entusiasmo que tanto
ansía?
La determinación, la energía ilimitada y la actitud de que
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sólo se vive una vez acabarán preocupando a cualquiera que no sea
tan propenso a la aventura. Mientras el resto de la ciudad duerme,
él galopa hacia la próxima aventura. Su espíritu indomable no
admite las palabras “no puedo”. Su mente es veloz, aunque no tan
rápida como su cuerpo. Te divertirás en su compañía, sobre todo
cuando intenta no ser previsible. Tiene una poderosa personalidad
de guerrero, si bien su enemigo más implacable es él mismo. Lo
impredecible de la madre naturaleza puede llegar a hacerle perder
los estribos. Si tiene un mal día estará enfurruñado. Si tiene un
buen día te abrumará con su entusiasmo y persistencia. Es
indisciplinado y alocado. Dómale si te atreves.
(1) Le obsesiona la idea del reto y se cree inmortal. Vive para
eso. Es su derecho divino.
[pág. 25]
Cuando el buscador de emociones regresa a casa agotado tras la
última aventura su entusiasmo todavía sigue incandescente. Podría
resplandecer en la oscuridad. Siempre presente, siempre preparado,
siempre con las pilas cargadas, ansioso por comenzar la siguiente
búsqueda. El cambio de marchas no es lo suyo, pero el relax es
sagrado. Necesita volver a poner los pies en el suelo para el
reencuentro.
La plegaria y la reflexión de este hombre es estar siempre
haciendo algo. Ser es duro. Se siente joven de espíritu dando por
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sentado el regalo de la vida. Lo que le sostiene es su fe en el
orden del universo, aunque no siempre sabe si hay una ley suprema
que le protege. Es un fatalista, un hombre dispuesto a correr
riesgos y mantener la mente abierta. No lo admitirá pero siente un
fuerte anhelo por la muerte; se limita a aceptar el peligro como
parte del proceso de crecimiento. Este temerario saltará confiado
hacia lo desconocido. Las experiencias trascendentes que consigue
haciendo deporte harán que su espíritu se llene de energía. Acepta
el trato pero no expresa lo que entiende por destino. No ha
vendido su alma al diablo. Más bien al contrario: está convencido
de que existe un poder en el universo, una fuerza vital. Se une a
esta fuerza vital a través de lo físico. Fuerte y atlético,
celebra la vida en su forma más pura. Está en el mundo de los
vivos. Su alma es como un pájaro en libertad. Su campo de juegos
es un enorme espacio abierto donde vuela. Está en todas partes y
en ninguna. Es seguro e inseguro, joven pero sensato, tonto pero
serio, todo a la vez.
Sólo se siente satisfecho cuando ha logrado su objetivo, por
lo que se toma sus aventuras muy en serio. El éxito y llegar hasta
el final son su recompensa. Esto es lo que le produce satisfacción
y felicidad. La euforia le desborda, por lo que su compañía
siempre resulta agradable. Es un marchoso en plena forma. Su
aspecto radiante resulta contagioso y muchos envidian la fe que
tiene en sí mismo. Le sobran agallas. Cita el valor como uno de
los criterios para ser hombre y cree que sus esfuerzos por vencer
el miedo constituyen el terreno de pruebas de su masculinidad.
Este es el ruedo en el que resuelve sus dudas personales. La falta
38
de confianza en uno mismo es un estado mental que no tiene en
cuenta. La obsesión por la valentía le impedirá tener la
oportunidad de evaluar su vida. Para él eso supondría arriesgarse
a implicarse demasiado en el mundo más ordinario de la vida
diaria.
(1) En la vida real
Fanático del gimnasio, piloto de vuelos sin motor de fin de
semana, líder de expediciones al Antártico, jinete, aprendiz de
astronauta, conductor temerario, peatón imprudente
[pág. 26]
El arte del amor
Se enamora enseguida. Se da prisa cuando ve una cara con una
sonrisa pícara que encaje con su aspecto juvenil e informal. Toda
esa testosterona y seratonina suponen una fuente inagotable de
energía sexual. Para su confianza es importante ir a por todas con
las mujeres. La atracción inicial es como una capa roja para un
toro, con todas las hormonas incluidas. ¡Y te embestirá!
El amor forma parte de su vida pero es la lujuria la que
normalmente le atrae más. El que su vida amorosa le preocupe poco
significa que es un tío que va a por todas cuando llega el momento
de salir y ligar. Vive en un mundo de juegos y aventuras. Cortejar
a las mujeres no es más que otro entretenimiento. Si hace ojitos
en tu dirección, lánzate. Pero tiene mucha labia y sabrá
engatusarte. Aunque tiene tendencia a exagerar es una persona
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equilibrada que ama fervientemente el deporte.
En el campo del amor tendrás que aceptar que sus subidas de
adrenalina son más importantes que tú. Le proporcionan el estímulo
que necesita para el resto del día. ¿Has oído hablar de las viudas
de los deportistas? Sólo los amantes de las pasiones extremas que
están bien informados comprenderán que las mujeres también quieren
pasárselo bien. Su mejor pareja es una chica vivaz y deportista.
La necesidad de compromiso no será tan apremiante si puede
disfrutar de esa actividad en pareja. Busca a alguien que sepa
arreglárselas sola y que no le quite mucho tiempo. Lo que más odia
es la puntualidad. Detesta las agendas, los horarios y los planes
impuestos para un futuro lejano. No quiere rendirle cuentas a
nadie. Si intentas atarle se largará corriendo. Se está
divirtiendo como nunca y es incapaz de tomarse las cosas en serio.
Si el zapatito de cristal es de tu número entonces te abrirá
su corazón. Pero no es tan franco como parece. Se mostrará
bastante irritable en los asuntos del corazón. Su actitud infantil
puede resultar inmadura y egoísta y estos rasgos tal vez impidan
que disfrute de una felicidad romántica. Es una pena que sea tan
guapo, y encima es vital y decidido. Está en la onda, feliz y le
encanta el sexo.
[pág. 27]
(1) El gancho
Vístete informalmente y ponte las pilas. Quiere verte en acción.
40
En marcha, chica, en marcha. Le gusta que en sus actividades
extracurriculares haya un poco de sudor y suciedad. Le encanta
sentirse vivo así que demuéstrale que tú lo estás. Debes ligar con
una actitud despreocupada y relajada. Así le atraerás, “no
problemo”. Su carisma, alegría y sexualidad desbocada le llevan
hasta la chica sexy que esté más cerca. Ama los retos así que sé
irreverente.
(2) En pareja
Le encanta comer, dormir y respirar. Asegúrate de que haga todo
eso contigo. Un buen consejo: durante la luna de miel, que para él
no es más que un mero ciclo lunar, no se te ocurra quejarte jamás.
Necesita saber cuáles son las ventajas de mantener una relación
contigo. Deja las cosas claras en lo que al tiempo y la fidelidad
se refiere. Tómatelo en serio y siente la euforia de ir en la
cresta de la ola de este tipo. No pierdas el equilibrio nunca. Ten
valor.
Si te cansas de que haya arena en las sábanas, de la ropa sucia y
de no salir nunca en plan romántico, déjale por teléfono. No
podrás con él cara a cara.
Esta vida no es un ensayo. Reclama tu asiento en la montaña rusa.
[pág. 29]
41
El empresario
El arquetipo: El Guerrero, luchador infatigable, creyente, máquina
de éxitos
El personaje
Qué imagen da
Cómo reconocerle: Está en la onda y tiene mucha labia y, dado que
se siente a gusto consigo mismo, sabe mantener la atención de
cualquier persona. Bebía buenos vinos y fumaba buenos puros antes
que nadie.
Expresión/Registro verbal: Agradable. Sabe escuchar y hace que te
sientas cómoda: quiere conocer la historia de tu vida sin revelar
la suya. Genérico y anecdótico, desenvuelto pero sin llegar al
desparpajo, ingenioso cuando se le presiona para que impresione.
Frase para iniciar conversación/ligar: “Hola, permíteme que me
presente”. “¿Te apetece pasar un día en las carreras?” “¿No te vi
la semana pasada en Cap Ferrat?”
Inquietud vital: Triunfar en la vida mediante el esfuerzo
personal. Encontrar su destino.
Accesorios: Chófer, ama de llaves, chef de un restaurante
distinguido, entrenador personal ocasional, tarjetas de platino,
muchos amigos entre los nuevos ricos, licencia de piloto,
colección de arte, bodega, coche antiguo.
Profesión: Promotor inmobiliario, restaurador, propietario de una
cadena de sushi y sándwiches, franquiciador de empresas de café,
inversor financiero, inventor de páginas de web.
Historial amoroso: Al principio las chicas monas y luego con un
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poco de cabeza, pero caerá en las garras de una mujer de bandera.
Canción: “Material Girl”, de Madonna.
Fantasía: Ser el nº 1 en la lista Fortune 500 y elegir las chicas
de entre el subsiguiente correo de admiradoras.
La sombra
Malas costumbres: Lo primero es el trabajo; tú quedas relegada a
un segundo plano. Entregado por completo al trabajo, sin
escrúpulos, avaricioso y nada ingenuo. El materialismo le ciega y
soluciona los problemas pagando. Emplea tácticas de poder en los
negocios y en la cama. La confianza en sí mismo se transforma en
presunción.
Lo que no dice/Secretos y silencios: “Sin el dinero no soy nada”.
Agenda oculta: Deshacerse de cualquier cosa que le entorpezca el
camino hacia la cumbre. Ser objeto de los cotilleos sociales.
Mantra filosófico: No hay nada mejor que la confianza.
Accesorios: Acuerdo prenupcial, comida basura, remedios contra el
insomnio.
Barómetro energético: No sabe cuándo debe parar y es posible que
acabe quemándose; se queda atascado en la quinta cuando compite
con los recién llegados.
Futuro de la relación: Los sostenes económicos son, en potencia,
idóneos para formar familias, pero asegúrate de que sus días de
competencia desenfrenada han llegado a su fin.
Canción: “Stairway to Heaven”, de Led Zeppelin.
Rendimiento sexual: Un hombre de este tipo con experiencia nunca
43
te decepcionará. La experiencia es la mejor consejera. La promesa
de placeres divinos te mantendrá al trote.
[pág. 30]
La grandeza y el viaje del héroe le inspiran. Hará lo que sea con
tal de hacer realidad su sueño. Considera que la autodisciplina y
el dinamismo son los componentes clave del éxito. Su arma secreta
es la inquebrantable capacidad de no perder la realidad de vista.
Todas las etapas de un proyecto, desde la concepción hasta la
realización, son sagradas. Podría decirse que es su “obra”.
En muchos aspectos anhela sobresalir, dejar su impronta en el
mundo. La clave reside en la individualidad, aunque parece buscar
un estatus social al que llegar con el sudor de su frente. El
empresario, a quien no le inhiben las historias de fracasos,
confía en una fuente interna de optimismo y opiniones sólidas. La
experiencia le ha enseñado que vale la pena arriesgarse.
Está dispuesto a innovar y se valdrá del ritmo de los cambios
económicos y sociales mientras persigue oportunidades para hacer
negocio de la forma más rápida y ventajosa. Amasa su fortuna
convenciendo a los demás de que sus intereses son idénticos a los
suyos. Se siente realizado ayudando a sus amigos y familia y
participando en su negocio y en la comunidad en general.
Dispone de la resolución y del valor para liberarse de los
confines de su existencia y tomar las riendas de su destino. La
transformación le permite aceptar perspectivas nuevas. Su
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capacidad para encauzar su vida le resulta esencial para
desarrollarse como persona y triunfar. Pero cuidado: a medida que
haga realidad sus sueños es probable que se muestre receloso de
los motivos por los que las personas quieran entablar amistad con
él. Está convencido de que la gente quiere aprovecharse de él. Le
cuesta pedir ayuda emocional en medio de una crisis. Conoce el
dicho: “Si no has pensado en un plan para tu vida, alguien ya lo
habrá hecho”.
Al parecer, “derrota” es una palabra que no existe en su
vocabulario. Está dispuesto a aceptar nuevos retos: la vida es una
aventura temeraria o nada. Sin embargo, en su interior todo es muy
distinto. Teme el fracaso y perder cuanto ha ganado. La peor de
las pesadillas sería despertarse y descubrir que no tiene nada; la
posesión está íntimamente ligada con su autoestima y se sentiría
como un objeto sin valor.
(1) Al parecer, “derrota” es una palabra que no existe en su
vocabulario.
[pág. 31]
Ansía la seguridad. ¿Qué si no le motivaría a perseguir el dinero
y el estatus social? Es un ganador y no se detendrá hasta caer
muerto. Pero lo más importante es no perder el primer premio.
Sabe que la vida es una rueda de la fortuna con altibajos. Los
hechos no siempre le han favorecido. Puede que fuera el chico que
45
abrió el puesto de limonadas en la playa y que trabajó horas extra
bajo todo tipo de circunstancias meteorológicas. Desde entonces ha
tenido que hacer frente a desilusiones reales. Sin embargo, su
determinación y entrega son impresionantes y le ayudaron a sortear
todos los obstáculos del camino. Su éxito simboliza que es capaz
de superar las penurias de la vida, pero ¿sabrá salirse con la
suya la próxima vez que la rueda vuelva a girar?
La curiosidad le es inherente. Es lo que le motiva a adaptar
su vida, con absoluto entusiasmo, a las infinitas posibilidades
que se le presenten por el camino. El coraje alimenta su
determinación: busca fuerza en su interior, ahuyenta el desaliento
y se centra en el éxito. La confianza en sí mismo es lo que le
permite dar el salto diario. La pasión por sus intereses es
esencial, al igual que la capacidad para el trabajo duro.
El empresario es bastante accesible: se mete de lleno en todas
las iniciativas. Su compañía resulta cautivadora porque su actitud
dinámica infunde autoestima a los demás y abre la puerta de la
experimentación sin límites.
(1) En la vida real
Empresario autosuficiente, vendedor ambulante, minorista de comida
rápida, franquiciado, hombre dedicado a la importación y
exportación
[pág. 32]
El arte del amor
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Tiene unas ganas de vivir ilimitadas. Le encanta obtener lo mejor
de todo. Es capaz de convertir lo negativo en positivo cuando le
apetezca. Desde un punto de vista emocional funciona a dos
niveles: combina la sensación infantil de asombro con la
agresividad adulta que necesita para que las cosas le salgan bien.
Quienes compiten con él consideran que su optimismo es práctico
pero la lealtad es la otra cara de su moneda.
Siempre está centrado, lo cual le impide saber cuáles son sus
objetivos en el amor. Está atrapado en su mundo de adquisiciones y
seguridad y cree que su éxito es un punto de referencia al que los
demás deben aspirar. La necesidad constante de resultados
inmediatos le dificulta su vida emocional y no suele escuchar su
voz interior ya que apenas se permite tiempo para la reflexión.
Es posible que su dinamismo incesante por conseguir más dinero
y un estatus mejor oculten una bancarrota emocional. La vorágine
de actividades mantiene su corazón cerrado. Más que sentir actúa.
Necesita aprender cuándo debe parar y permitir que sus
sentimientos afloren. Esto es algo que el empresario teme
profundamente: en su lucha por demostrar su valía al mundo
exterior se distancia de las personas que sólo necesitan su amor y
su tiempo. Se dice a sí mismo que el siguiente trato será que el
que le satisfaga y se disculpará mientras evita mantener
relaciones serias.
Al equiparar las estrategias emocionales con las estructuras
empresariales teme que le traicionen. Dado que el amor es
impredecible, decide no arriesgarse y rehuye el compromiso total.
Su carácter autoprotector y envidioso pueden acabar por contaminar
47
cualquier indicio de confianza. Como no reconoce la libertad que
otorga la sinceridad, el empresario tal vez desaproveche lo que se
le ofrece.
[pág. 33]
(1) El gancho
Este tipo busca a alguien en quien confiar. Entabla una amistad y
gánate su corazón. Las conversaciones sobre temas triviales le
ayudarán a relajarse en tu compañía. Hazle creer que contigo la
armonía es posible. Tiene que saber que le necesitas: los síntomas
de un cariño verdadero le abrirán el corazón. Cumple tu palabra y
así le tranquilizarás.
(2) En pareja
Sé honesta respecto a tus intenciones. Admira a las mujeres que
saben cómo satisfacer los deseos de su corazón y que tienen claro
lo que quieren en la vida y en la pareja. Le atraen las personas
que persiguen el éxito; el espíritu competitivo le ha abierto las
puertas del mundo. Si éste es tu tipo, muéstrale sus
inseguridades. Haz que se dé cuenta de que teme el fracaso. Sé
comunicativa con él a todos los niveles.
Si te conviertes en una chica emocionalmente exigente recuerda
la rutina del triunfador: depende de ti que logres apartarle del
mañana y que se centre en el aquí y en el ahora. La sinergia en
equipo sellará el trato y os mantendrá unidos.
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Distánciate separándote poco a poco de él. Se sentirá traicionado
de inmediato. Pondrá en duda los motivos por los que quieres dejar
la relación así que prepara un discurso realista en el que queden
claras tus buenas intenciones y contrarresta su sensación de
pérdida. Aprenderá el valor de correr riesgos en el amor.
Cumple tus aspiraciones así como las suyas.
[pág. 35]
El ejecutivo
El arquetipo: El Guerrero, clon corporativo, estadístico, experto
en tratos ventajosos
El personaje
Qué imagen da
Cómo reconocerle: De gris, negro, trajes oscuros de raya
diplomática, tirillas limpias. Preparado para la reunión de las
ocho, impecablemente vestido, o afeitado y con el pelo corto bien
arreglado en la pesadilla que supone el desplazamiento diario para
ir al trabajo.
Expresión/Registro verbal: Habla deprisa y va al grano
rápidamente. De buenos modales y sin acento marcado, pero el mano
a mano le sulfura.
Frase para iniciar conversación/ligar: “¿Te apetecería cenar
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conmigo?”
Inquietud vital: Hacerse rico más temprano que tarde.
Accesorios: Tarjetas de visita, agenda electrónica, corbatas de
tiendas libres de impuestos, novelas de tapa blanda de misterio
escritas por autores masculinos, cuenta de gastos de
representación reducida, bolsa de deporte con raqueta de squash,
perro triste y solitario en casa.
Profesión: Banquero, contable, agente de seguros, abogado avezado,
jefe de ventas, consultor, presidente, director de una empresa.
Historial amoroso: El viernes por la noche ya le va bien. Soltero
en busca de carne fresca: chicas a la carta, que el domingo por la
mañana han perdido la mayor parte de su encanto.
Canción: “Money, Money, Money”, de Abba.
Fantasía: Comprar la empresa, seducir a la hija del presidente,
llenar un jet privado de jóvenes bonitas y tontas y huir del
mundanal ruido.
La sombra
Malas costumbres: Estreñimiento. Se niega a poner en duda sus
propias limitaciones, no cuenta chistes buenos, no sabe
administrarse las medicinas y se olvida del cumpleaños de su
sobrina.
Lo que no dice/Secretos y silencios: “¿Te puedes poner un vestido
si vamos a ver a mis padres el fin de semana? La situación lo
exige”.
Agenda oculta: Ir sobre seguro y evitar los problemas. Que lo vean
50
como el chico estrella. Sacar mucho partido con el mínimo
esfuerzo. Disimular sus errores.
Mantra filosófico: La felicidad ganada con el sudor de la frente
se saborea el doble.
Accesorios: Trasplante capilar, despertador, desodorante y elixir
bucal, planta del dinero, el Financial Times, acceso a las páginas
web eróticas desde el PC del trabajo.
Barómetro energético: Normal durante el aperitivo anterior a la
cena, alto durante la cena y cayendo en picado cuando estáis a
punto de volver a casa. Sueña con meterse en la cama con o sin ti,
ya le da lo mismo, pero intentará esforzarse. Sólo para ver el
resultado.
Futuro de la relación: Familia nuclear: 1,8 hijos, la crisis de
los siete años.
Canción: “Boys Don’t Cry”, de The Cure.
Rendimiento sexual: Sexo los viernes si está soltero y los
domingos si está casado. El resto de la semana depende de lo que
beba.
[pág. 36]
El ejecutivo es listo. Sigue los pasos de la brigada del bombín,
los dinosaurios-ejecutivos del pasado cuando la palabra era la que
creaba vínculos. Tanto si es producto del sistema educacional, la
escuela y luego la universidad, o un licenciado en la escuela de
la vida, lo han tentado con el mundo lleno de dinero de los peces
51
gordos. Quiere un futuro garantizado, la recompensa de un mundo
empresarial en un proceso de cambio constante y quizás el acceso a
un trabajo divino. Pero ¿tiene la fuerza y el empuje necesarios?
¿Sabe soportar la rapidez de los cambios? ¿Sabrá estar a la altura
de las circunstancias? Las malas nuevas es que no muchos de ellos
llegan a la sala de juntas y sólo lo consiguen si demuestran su
valía para la empresa.
Lucha por mantener su identidad en un trabajo que le brinda la
oportunidad tanto de destacar como de deshumanizarse si permite
que la política interna del trabajo se apodere de él. Este mundo
ejerce sobre él una presión personal y profesional debido a la
demanda de resultados. Es un entorno intimidatorio, donde debe
trabajar solo pero rendir cuentas a un equipo. Es probable que la
presión temporal reduzca el contacto con el jefe a un aluvión de
mensajes de correo electrónico pensados para evitar una
reprimenda. ¿Le puedes echar la culpa? Claro, cuenta con
orientación empresarial y preparación corporativa experimentada:
dispone de programas para la resolución de conflictos y puede
asistir a seminarios sobre dotes comunicativas. Sin embargo, el
hincapié recae en lograr los objetivos y el éxito sólo se mide en
términos económicos. Toda sensación de logro es meramente
secundaria, el deseo de reconocimiento se manipula con toda
crueldad y las relaciones empresariales no es lo que mide el éxito
de la empresa. ¿Resultado? Los egos tóxicos se desmadran.
Trabaja duro. Dedica las horas que hagan falta. Es duro en un
entorno predominantemente masculino en el que no existen la
compasión y la confianza. Nunca sabrás quiénes son los malos de la
52
película. Todos tienen la misma cara. La lucha diaria por la
supervivencia reafirma su energía masculina y ése el motivo por el
que se centra en la competencia y en el éxito. Si se muestra
incompetente podría resultar herido. Para ganar tiene que ser
acérrimo. En este entorno resulta esencial un talante competitivo,
al igual que un carácter cortante y abrupto, características que
sólo sirven para acentuar la lucha por la autoestima.
Irónicamente, es posible que este tipo ya tenga un papel
predeterminado. Se tiene constancia de su perfil, su trayectoria,
desde la primera entrevista. Está a merced de los que detentan el
poder. La jerarquía empresarial suele ganar.
(1) La lucha diaria por la supervivencia reafirma su energía
masculina.
[pág. 37]
En el mercado financiero tener una visión espiritual de la vida es
poco probable y contraproducente. El dinero es el único Dios y los
gurus de la economía de EE.UU. la inspiración. Este tipo vive en
un mundo de conflictos. Apenas le queda tiempo para otra cosa que
no sea el camino hacia el podio. El éxito le obsesiona. No le da
importancia alguna a los aspectos espirituales. La veta
competitiva es la que tira de él. La prima de fin de año es la
recompensa a su actuación.
Valora la obediencia y la conformidad con el status quo. Lo
53
que queda del amiguismo le sirve para establecer vínculos con los
colegas y aumentar su sensación de seguridad. Sin embargo, su
grupo de compañeros representa una amenaza e impone la necesidad
de tácticas asesinas; nunca se sabe quién te acuchillará por la
espalda. Un aspecto crucial de su mundo interior es el deseo de
demostrar su valía a sus superiores. Entró en la industria sin
experiencia y entusiasmado. Pero se protege rápidamente para
evitar el desprestigio. Emana autocontrol. En realidad recurre al
poderío del guerrero para acabar con los dragones o cualquier otra
cosa que se interponga en su plan maestro. Es inseguro y teme que
pasará desapercibido si no cumple.
Poco a poco cae en la corrupción: es la única forma de
sobrevivir en ese entorno. Las tácticas intimidatorias sustituyen
la interacción humana auténtica. La delgada línea que separa la
afirmación y la agresión suele cruzarse con facilidad. En el campo
de batalla de los psicópatas corporativos no existe cortesía en lo
que a las necesidades de los demás se refiere. Las relaciones
interpersonales están mal vistas, independientemente del cargo, y
el status más importante gana sin el menor esfuerzo. La principal
motivación es la avaricia. Lo que cuenta es la superioridad que
todo lo puede.
Al final, el hombre se convierte en un monstruo. La compasión
humana desaparece, la justicia se evapora y vendería lo que le
queda de alma por cerrar el trato. Disfruta de los frutos de su
vida laboral. Su actitud triunfante lo dice todo. Se considera un
vencedor en su lucha por la supervivencia. Es consciente de que si
perdiera la chispa de chico de oro le ignorarían, le marginarían,
54
le sustituirían y se olvidarían de él. Bajo ningún concepto debe
permitir que le vean como una presa fácil. El cinismo reduce su
visión del mundo. Los remordimientos no cuentan; si contara
estaría firmando su dimisión.
(1) En la vida real
Licenciado en Ciencias, cínico agente de seguros de mediana edad,
vendedor en un puesto callejero que ha llegado a comerciante,
agente inmobiliario inteligente, tipo al que tuvieron que despedir
por despecho.
[pág. 38]
El arte del amor
El vínculo del placer se encuentra en un plano físico. Las
apariencias (suyas y de ella) y el status de las mismas le
acomplejan. Es un entusiasta de las fantasías. Cree que el amor es
algo a corto plazo, una oportunidad para aprovecharse de tantas
compañeras como sea posible. La acumulación de poder guía el ego
masculino del ejecutivo. Se siente presionado porque su carrera
tiene los días contados: en este trabajo se quemará mucho más
rápido que en cualquier otro.
Sólo se pone serio cuando se cansa de la persecución y decide
que quiere tener hijos. Anda a la caza de una compañera que esté
dispuesta a pasarse a su estilo de vida y que resulte aceptable a
un nivel social, pero es consciente de que no debe apresurarse. Lo
que ofrece es estabilidad y protección en un mundo de roles
55
masculinos y femeninos que cambian constantemente. Si te sientes
tentada, no olvides esta advertencia: el ejecutivo formará la
unidad familiar según sus ideales, virtudes y defectos. Los
valores en los que hace hincapié, la disciplina y el beneficio
económico, son los que buscará y fomentará en una pareja adecuada.
Una vez que haya decidido tomarse en serio una relación
triunfará sobre su aparente alienación emocional y logrará
comunicarse a un nivel más profundo. Sin embargo, la ética de la
competencia brutal del trabajo en ocasiones se extiende a su vida
personal. La autoestima del ejecutivo se reafirma si el éxito
implica una lucha. Es un guerrero desorientado porque la cultura
materialista le ha engullido y ya no sabe quién es. Para no perder
la satisfacción de mejorar el status y obtener más dinero y más
poder se permite una política organizativa de lo más brutal. En el
amor se tranquiliza al pensar que cuenta con los requisitos
externos para tentar a las mujeres que le gustan.
Al comienzo de la relación está más libre y dispuesto y más
vinculado a sus fantasías. Por desgracia, una veta de machismo
refuerza la presión que ejerce sobre su compañera para ganarse los
elogios de sus colegas y superiores. La reciprocidad es crucial en
cualquier relación con el ejecutivo de ciudad. Él exige que ella
esté despampanante ante sus compañeros y amigos; a cambio, ella
tiene la oportunidad de lucirse.
[pág. 39]
56
(1) El gancho
Ante cualquier insinuación sé sincera y dulce. Le gustan las
chicas que van bien arregladas. La frescura y la juventud hacen
méritos y te mantendrán en su pequeña agenda de posibles ligues.
Si quieres ser el centro de atención escucha sus anécdotas
directamente. En cierta ocasión, un ejecutivo llamó a su novia
para que se pusiera “una minifalda lo bastante corta como para que
se viera el espacio entre los muslos”. Sal de compras.
(2) En pareja
Necesita darse cuenta de su potencial para disfrutar de la vida
sin tener que luchar. Enséñale el mundo que está más allá de su
trabajo. Déjale que descanse cuando vuelva a casa y no le
bombardees hasta que no se haya relajado. Te costará cambiar su
actitud a la vieja usanza sobre el “reino de la pareja” pero los
dos saldréis ganando cuando se abran las líneas de comunicación.
Haz que sienta que no tiene nada que demostrarte cuando está
contigo.
Si es incapaz de hacerte un hueco en su corazón no te rindas a la
primera. Sugiere una breve separación. Reevalúa la situación. Si
quieres dejarlo porque crees que no se compromete lo bastante,
entonces pídele que se comprometa. Si te dice que no está
preparado, créele y búscate otra rana que besar.
57
Te irá mejor si encuentras un buen filón y lo aprovechas al máximo
que si vas de mina vacía en mina vacía.
[pág. 41]
El intelectual
El arquetipo: El Rey, generador de conocimientos, gimnasta
cerebral, cerebro andante
El personaje
Qué imagen da
Cómo reconocerle: Enzarzado en una partida en tablas en un torneo
de ajedrez o en la línea de fuego en una convención de
superdotados. Suele vestir con pana o terciopelo y calcetines
desparejados. Cuando hace frío siempre lleva bufanda.
Expresión/Registro verbal: Sabe de todo. Al principio parece un
tanto críptico y alcanza cotas de sobrecarga informativa. Habla
con claridad pero, si le dejas, te volverá loca con sus teorías.
Frase para iniciar conversación/ligar: “¿Soy profesor tuyo?” “Eres
algo más que una cara bonita, ¿no?”
Inquietud vital: Sacar sus propias conclusiones. Ser el pionero en
el campo.
Accesorios: Estudio, objets trouvés polvorientos, mochila muy
gastada, archivador personalizado, base de datos, proyector de
diapositivas, varios carnés de biblioteca, suscripciones a
publicaciones periódicas, pajarita.
Profesión: Profesor, conferenciante, funcionario con gran futuro.
Historial amoroso: La última le dejó porque él no quería casarse.
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Las mujeres con vista de lince siempre tienen una oportunidad.
Canción: “Aire en cuerda de sol” (de la Suite Orquestal nº 3), de
J.S. Bach.
Fantasía: Una relación peligrosa: la presentadora de un concurso
le seduce en directo. Aprieta el botón y responde correctamente
todas las preguntas. Un chico listo.
La sombra
Malas costumbres: Se ríe a carcajadas cuando cree que lo que dices
es ridículo. Ha tenido pocos idilios y es de lo más despistado; no
sabe dónde ha dejado las llaves de la casa, la bicicleta y las
mascotas. Es desordenado, entierra la cabeza en el periódico y se
cronometra cuando hace crucigramas.
Lo que no dice/Secretos y silencios: “El trabajo me absorbe. No
llegaré a casa a la hora de la cena. No tengo una buena
coordinación visual-manual. Creo que el sexo opuesto es ilógico”.
Agenda oculta: Ganar el premio Nobel.
Mantra filosófico: Pienso, luego existo.
Accesorios: Ayudante de investigación estresado, animales
disecados en el dormitorio, plantas en macetas, entradas en el
pelo, una alhaja extraordinaria, ábaco, actitud políticamente
correcta.
Barómetro energético: Siempre está ocupado. Se escabulle
constantemente, está en todas partes y asume el trabajo como si la
vida le fuera en ello.
Futuro de la relación: Busca una mujer educada que lleve liguero.
59
Canción: “Why Does My Heart Feel So Bad?”, de Moby.
Rendimiento sexual: Te seducirá con su abrazo autoritario. El
exceso de trabajo y la falta de divertimiento significa que
tendrás que recordarle las nociones más básicas de biología, pero
aprende rápido.
[pág. 42]
Al intelectual le sobran células cerebrales. Y, como dice el
refrán, el tamaño sí importa. No tiene por qué ser el tipo
filosófico. Su baza es su inagotable curiosidad. Le encanta que
algo le fascine. La información, hechos, datos, estadísticas,
teorías, es su oxígeno. Sin ella, ¿quién sería? Su personalidad
gira en torno a la necesidad de recabar información para sustentar
razonamientos lógicos. La razón es su razón de ser y su pasión es
demostrar o refutar las opiniones de los demás. La semántica le
entusiasma.
Dará la talla si se le desafía intelectualmente. Le encantan
los buenos razonamientos y se deleita agitando los armazones de
los demás. Siempre está alerta, es muy incisivo y emplea la lógica
para derrotar a quienquiera que se enfrente a él. Respetará a
quienes sepan de lo que hablan y no pierde el tiempo con los
seudo-intelectuales o los que se miran el ombligo. La lógica
femenina le desconcierta: considera que es irritante pero también
atrayente… e incluso cautivadora. Sin embargo, pierde la paciencia
con la ignorancia y sobre todo con los tontos, a quienes rechaza
60
sin rodeos ni ceremonias. Y, por irritante que resulte, estará
convencido de que tiene razón.
Desde un punto de vista social, le gusta formar parte de un
grupo que aprecie su brillantez. Disfruta con las charlas
intelectuales, ya sea en el cara a cara o con un grupo de amigos o
colegas leales. Distinguir a un intelectual en un encuentro social
es de lo más fácil. Parecerá fascinado si está inmerso en una
conversación en la que considere que vale la pena participar.
Tendrá la cabeza inclinada hacia un lado, la frente surcada de
arrugas y mirará hacia abajo, ajeno a lo que le rodee. Le cuesta
mirar directamente a los ojos cuando analiza un concepto. Ya ha
girado la llave de contacto y su mente está en otro lugar.
Cruzará sin esfuerzo alguno las barreras de clase. Puede que
sea un esnob intelectual, pero no en el aspecto social. Tiende a
ir directo al grano y disfruta con las mentes brillantes las
encuentre donde las encuentre. Por este motivo el intelectual
suele salir con personas poco comunes.
Lo más extravagante de su personalidad es la forma con la que
se relaciona con las personas que no pertenecen a su círculo. De
carácter introvertido, puede que al principio parezca reservado o
indiferente, pero esto ocurre porque no intenta impresionar a
quienes no se lo piden. La superficialidad no es lo suyo. Por otro
lado, puede que se limite a observar y a esperar que llegue el
momento adecuado para participar (y ganar) en el razonamiento. La
idea que el intelectual tiene del mundo perfecto es en el que él
siempre tiene la última palabra.
61
[pág. 43]
El tema preferido del intelectual es la teoría de la creación. El
origen del universo y el fin del mismo son cuestiones que le
intrigan. Hablar de su alma no es tan fácil. Aparte del marco de
la teoría científica intentará encontrar una explicación del cómo
y del por qué existe. Para debatir los aspectos relativos a la
existencia del alma exige hechos concretos, hechos que pueda
medir, analizar y organizar. Para llegar a una conclusión
satisfactoria debe ser capaz de demostrarla mediante un
razonamiento lógico. El hincapié en la razón y el conocimiento
hace que le quite importancia a cualquier cosa que no pueda
comprobarse según su marco de referencia.
Sin embargo, el alma no se descubre a través del intelecto o
de la experiencia racional. Su significado y valor provienen
directamente de la experiencia vital. Lo que confunde al
intelectual es la idea de una existencia que no es del todo
cuantificable. Le cuesta comprender quién es a un nivel más
profundo y personal. Una mente brillante no le otorga la
sabiduría.
Las cuestiones espirituales están inextricablemente unidas a
los sentimientos, emociones y actos de una persona, y al
intelectual le resulta más difícil comunicarse consigo mismo y la
parte expresiva de su psique. Su relativamente escasa inteligencia
emocional y la acumulación de aptitudes interactivas que
desempeñan varios papeles en las relaciones personales es lo que
62
impide el desciframiento de su alma.
Para hacer frente a lo que él percibe como un mundo crítico el
intelectual construye una vida exterior perfecta. Tal vez sea
consciente de que su preocupación por la perfección le aleja de
otras personas, pero valora mucho el éxito. Al fin y al cabo, lo
cierto es que lo que enseña a los demás no es el alma sino sus
logros intelectuales. Se impone principios elevados que no siempre
consigue, y se angustia cuando siente que no ha satisfecho sus
objetivos. Esta es la razón por la que muchos intelectuales son
adictos al trabajo.
Como no se da la oportunidad de experimentar el flujo y
reflujo de una vida emocional compleja, el intelectual se cierra
el camino que conduce a los niveles más profundos de su espíritu.
En lugar de eso, imita la perfección de un ser superior mediante
su personalidad perfeccionista y esto es lo que entiende por
“alma”.
(1) En la vida real
El inventor en el cobertizo, prodigio, estudiante maduro,
científico espacial, matemático de salón, maestro del puzzle
[pág. 44]
El arte del amor
El intelectual enamorado retrocede en el tiempo y se comporta como
un colegial tímido. Ligar no es lo suyo y, aunque no cabe duda de
que es un hombre, si confías en que te lleve escaleras arriba y te
lance a la cama durante la primera cita, ¡olvídalo!
63
Le gusta tomarse las cosas con tiempo cuando entra en el baile
del amor. Tratar con un intelectual enamorado es como apostar por
la tortuga en el circuito de carreras. Es lento pero, si se le da
la oportunidad, irá más rápido que la liebre. No le gusta
arriesgarse. Querrá evaluar y juzgar las etapas del amor. Sin
embargo, si el momento es el adecuado sabrá responder a la
seducción. Lo que le excitará de veras es que tengas la capacidad
para intercambiar los papeles: deja que haga de estudiante y tú de
profesora.
Cualquier reto intelectual le entusiasma y buscará una amante
lista y avispada. Le da gran importancia a los logros académicos y
valora la sed de conocimiento de su pareja. Lo interior importa
más que lo exterior.
Lamentablemente, la lógica no siempre compensará su falta de
conocimiento sobre los aspectos emocionales. Recuerda que el
principal motivo de fracaso con un intelectual es su inagotable
deseo de ser competitivo. Sólo obtendrá la felicidad a largo plazo
si encuentra a una mujer que satisfaga sus necesidades analíticas
y con la que pueda dialogar. El tener una compañera con quien
hablar le satisfará sumamente, por lo que está hecho para una
mujer concienzuda que sepa apreciar y tolerar la necesidad de
estimularlo mentalmente. Sin embargo, por paradójico que parezca,
prefiere los altibajos de los encuentros entre mentes espontáneos
y con chispa porque mantienen el desafío vivo.
Cuando se enfrenta a dilemas del corazón, el intelectual no
está tan a la altura de las necesidades de su compañera como sería
de esperar. Su resistencia a resolver problemas emocionales
64
sencillos proviene de su particular punto de vista: se planteará
lo que debe hacerse y no lo que necesita hacerse. Y retará a su
pareja a que refleje su sentido de la responsabilidad y
compromiso. Su acercamiento sin términos medios a las cosas
significa que con él es o todo o nada.
El intelectual enamorado puede comportarse de forma
conservadora. Le cuesta compartir las intimidades porque no está
en sintonía con sus sentimientos. Es tímido y vacila antes de
revelar su lista de deseos. Sin embargo, pensar en los misterios
del amor es algo que le intrigará. Sus particularidades seguro que
te arrancan una sonrisa y, al igual que todavía hay miles de
misterios por resolver en el universo, el intelectual enamorado
también tiene los suyos.
[pág. 45]
(1) El gancho
La seducción absoluta es la mejor manera de sacudir las telarañas.
Desvístele durante la primera cita. Sorpréndele de nuevo al hablar
sobre temas que sabes que le abrirán el apetito sexual. Gánate su
afecto al mostrarte confiada en tus convicciones. Sobre todo, no
temas llevarle la contraria cuando sabes que tienes razón.
(2) En pareja
No te muestres demasiado sociable: le darás un susto de muerte.
65
Tus objetivos de superarte como persona y formalidad harán que no
se preocupe más. Para mantener vivo su interés conviértete en la
mujer del intelectual y provoca la conexión intelectual entre los
dos profundizando en su mente.
Crea una válvula de escape para discutir los problemas
abiertamente en lugar de interiorizarlos. Esto afianzará o acabará
con la relación; de cualquier modo, así te resultará más fácil
conocerle. Cuanto más le ayudes a encontrar caminos vitales
alternativos más se arrojará a tus brazos.
Dado que su meta es la de ganar todos los razonamientos es
probable que a veces te saque de quicio. Si las batallas de poder
afloran intenta evitarlas. Si eso ni funciona y quieres dejar la
relación no hables sobre el tema o nunca lo dejarás. Se separará
de ti desde un punto de vista emocional para protegerse. Déjale
que lo haga sin tomártelo a pecho.
Esfuérzate por obtener un par de títulos académicos. Para que el
diálogo del amor no decaiga inicia pasatiempos intelectuales del
corazón. Escribe una o dos cartas de amor…
[pág. 47]
EL erotómano
El arquetipo: El Amante, embaucador, demoledor de tabúes sexuales,
crea su propio universo moral
66
El personaje
Qué imagen da
Cómo reconocerle: Su lenguaje corporal es explícito: sabe quién
es, de qué va y qué quiere.
Expresión/Registro verbal: Si recibe la señal, de la conversación
sobre temas triviales pasa volando a las insinuaciones sexuales.
Frase para iniciar conversación/ligar: “¿Te han dicho alguna vez
que tienes unos ojos que prometen sexo eterno?” “Los dos sabemos
que eres deslumbrante”.
Inquietud vital: Experimentar actos sexuales poco comunes.
Accesorios: Iluminación ambiental, bar bien surtido, encendedor
sexy, cactus fálicos, sandalias, ostras, cama mayor de lo normal,
cristales que son espejo por un lado y ventana por el otro, arte,
cintas, películas y libros eróticos, jacuzzi, agenda con la lista
de posibles ligues.
Profesión: Estrella de la pornografía, fotógrafo de desnudos,
“curandero” sexual, productor de vídeos amateur, proxeneta,
propietario de una barra americana, proveedor de sadomaso,
organizador de fiestas hedonistas.
Historial amoroso: Se ha divertido experimentando, explorando y
excitando. Las chicas normales huyen despavoridas y las
pervertidillas revolotean a su alrededor.
Canción: “If You Want My Love”, de Jennifer Lopez.
Fantasía: Ser el mejor y disfrutar sin límites del placer y del
dolor en su justa medida con un inagotable suministro de
accesorios y atuendos fetichistas.
67
La sombra
Malas costumbres: Se ausenta si dar explicaciones. Nunca responde
preguntas sobre su pasado, cierra la puerta del baño, llama a los
teléfonos eróticos, le hace proposiciones deshonestas a tu amiga,
te mira por encima del hombro en las fiestas y te pide prestada la
ropa interior. Es posible que haga de dominatriz durante el día.
Lo que no dice/Secretos y silencios: “Soy más raro de lo que
creías. Quiero compartirte. Soy bisexual. Soy un transformista. Se
te ven los pezones”.
Agenda oculta: Ser un agitador.
Mantra filosófico: Soy un entendido del sexo.
Accesorios: Binoculares de aumento, esposas, artículos de bondage,
collar de perro, látigo, botas de cuero, vendas, joyas para los
genitales, juguetes sexuales, aceites de masaje, colección de
máscaras, contraseña.
Barómetro energético: Energía sexual inagotable: las posibilidades
de lo que pueda suceder le estimulan sumamente y siempre está al
pie del cañón.
Futuro de la relación: En teoría quiere un “gemelo” sexual, pero
mientras tanto prefiere estar solo. Es menos complicado.
Canción: “Sexual Healing”, de Marvin Gaye.
Rendimiento sexual: Se estimula enseguida si sabes qué le excita.
Te sorprenderá con su infinita variedad de recursos para el
momento.
68
[pág. 48]
El erotómano es un clásico ejemplo de los extremos de la psique
humana. Persigue el que quizás sea el más antiguo de los placeres,
la gratificación sexual. Se aparta de lo que se considera la norma
en la conducta sexual y, en ese sentido, es diferente. Pero el
término no se emplea en un sentido crítico. A diferencia del
playboy, a quien lo que le motiva es la búsqueda, al erotómano le
interesa el acto. A este experto del sexo le gusta explorar y
poner en práctica sus fantasías sexuales, dar y recibir en actos
mutuos de placer. Los deseos no le causan conflictos porque suele
satisfacerlos.
Tendrá el aspecto y se comportará como el hombre medio de la
calle, pero no llamará la atención innecesariamente. Es la clase
de persona que contempla lo que sucede desde el final de la
multitud. Sabrás quién es al observarle observándote. No se pierde
nada. Es sociable pero reservado y busca cualquier alusión para
iniciar el contacto. Es un individuo sin prejuicios que sabe cómo
hacer que los demás se sientan a gusto. La naturaleza de su
sexualidad implica que sólo revela su lado más extravagante si
siente que existe confianza y su código moral le dicta que sólo
deber ir allá donde es bien recibido. Nunca debe obligar a nadie a
entrar en su mundo.
Es probable que piense que las opiniones fóbicas de la
sociedad sobre la sexualidad son injustas. Su defensa es la
retirada. Protegerá su espacio privado para, si lo necesita,
69
mantenerse alejado del mundo exterior. La distancia de seguridad
equivale a protección de la exposición no deseada. Cualquier
intercambio confidencial está inevitablemente cargado de
emociones. Lo que más le tranquiliza es la garantía de los
secretos compartidos.
Siente un apetito voraz por todo tipo de información visual y
la emplea para alimentar su activa vida repleta de fantasías. Su
interés por la literatura erótica se extiende al mundo de la
estética. La pintura, la escultura, las fotografías de desnudos y
el film noir le estimulan y huye de la vida cotidiana para
sumergirse en el mundo de su imaginación y mantener alto el nivel
de excitación.
(1) Sabrás quién es al observarle observándote
[pág. 49]
Coqueteará con el peligro para alcanzar un clímax sexual máximo.
Ha descubierto, para su alegría, una válvula de escape para su
imaginativo juego, un lugar donde se le acepta y aprecia. Se rodea
de una amplia comunidad de proveedores sexuales: personas a
quienes ve con regularidad para experimentar un psicodrama sexual
que abarca prácticas extremas como el sadomasoquismo, el bondage,
el sexo auto-erótico, el fetichismo, las orgías, el cambio de
identidades y la humillación. Disfruta con la libertad que le
supone ampliar sus fronteras sexuales y no entiende por qué la
70
sexualidad no se explora tanto como otros aspectos de la vida.
Le atrae la idea de una vida secreta, una vida fuera de lo
común. A veces cree que cuando los sentimientos acaban doliendo
hay que dejarlos marchar. Es cierto que su estilo de vida le
permite compartimentar su vida emocional y su sexualidad. Es muy
ritualista y perfeccionista, como los hombres que eligen a la
misma prostituta en la misma habitación a la misma hora. Le gusta
estar rodeado de la misteriosa parafernalia de la personificación
sexual. Sea cual sea el ritual, lo planifica para tenerlo bajo
control en todo momento.
Es un hombre compulsivo que sólo tiene en cuenta una limitada
variedad de emociones durante el acto sexual. Quizá grite, se ría
y chille, pero todo forma parte del proceso de satisfacción
física. Experimenta el orgasmo en su estado más básico y
biológico. En el momento de la eyaculación es cuando se siente más
unido a su compañera. A no ser que se trate de una relación
comprometida, será el único momento de contacto con la otra
persona. Si es un voyeur permitirá que sus emociones sólo afloren
en privado.
Cuando regresa de sus aventuras su alma desea un poco de paz y
tranquilidad. Puesto que se mantiene distante de los demás su
estilo de vida fantasioso le libera. La visualización poderosa
protege su alma escapista. Su estética es surrealista y personal.
Cambia la realidad para dar sentido a su mundo y se vale de la
memoria eufórica para revivir los momentos más sublimes.
71
(1) En la vida real
Mirón, fetichista de los pies, dependiente entusiasta en un sex-
shop, travestido, flagelador
[pág. 50]
El arte del amor
El erotómano no es un gran comunicador y todas las relaciones
dependen de lo que se revela. La autoprotección siempre es su
primera línea de defensa. Rehuye de la espontaneidad y su
necesidad de lo previsible puede haberle llevado al aislamiento
como observador, como desconocido. Ha combinado la incomunicación
emocional con el desapego espiritual. La forma que prefiere para
interactuar con otra persona es la sexual. La cercanía sin
intervención verbal apenas requiere contacto para mantener una
relación.
Es probable que durante muchos años haya sido un solitario y
haya participado en actos sexuales anónimos. Los rostros y lugares
sin nombre resultan prácticos porque la intimidad es esencial:
puede disfrutar de sus fantasías sexuales secretas sin que le
juzguen. Puede retrasar u ocultar las emociones. O es posible que
haya mantenido contacto con un grupo de forma regular. Si es así,
se sentirá más seguro, y la dinámica de grupo da pie a una enorme
cantidad de experimentos tentadores, incluyendo las polaridades de
dominador y dominado.
Si el amor se materializa, el erotómano necesita relacionarse
con alguien que tenga la misma energía sexual. Puede que esté
72
buenísimo y confíe en su despliegue de comunicación sexual no
verbal; es sexy, extravagante e instintivo. Cuando comparte su ser
sexual con otra persona, comparte algo que considera sagrado. Si
ambos satisfacéis vuestros tabúes sexuales, se creará una poderosa
sensación de intimidad porque habréis encontrado a alguien que
acepte vuestras preferencias sexuales y respete vuestra necesidad
de privacidad. El rechazo deja de ser importante.
Si se compromete contigo, a veces la vida será espeluznante,
sensacional, emocionante y alocada. Los encuentros intensos tal
vez sean cortos pero si está enamorado serán mucho más
significativos. Intercambiaréis más confidencias que otros
amantes. Existen muchas probabilidades de que si él está preparado
para el amor también se convierta en tu confidente y agitador.
[pág. 51]
(1) El gancho
Desnúdale con los ojos. Mueve los dedos del pie y cíñete el
cinturón. Susúrrale: “Voy a ponerme algo más cómodo”. Imita todo
lo que haga. Cuando sonría, sonríe. Cuando alargue la mano para
tocarte, haz otro tanto. Mantén el contacto y haz que sea intenso.
Sube el volumen, atenúa las luces y quítate alguna prenda. Pero no
te precipites.
(2) En pareja
Consigue que no pierda la pasión ni el deseo. Le encanta estar en
73
ese estado. No le gustan las situaciones competitivas o polémicas
así que ahórrate las batallas de poder para las fantasías en la
cama. Que tu pasión se convierta en sensualidad. Es probable que
os cueste acostumbraros a estar solos el uno con el otro. Ambos
necesitaréis sentiros desinhibidos y comprendidos. Deja volar la
imaginación para desterrar los deseos nostálgicos.
Si todo se vuelve demasiado extravagante, elige el momento para
separarte. Déjale con sus ansias con la esperanza de que sigáis
siendo sólo buenos amigos.
Disfrutar del sexo es una cosa, pero amar bien lo es todo.
[pág. 52]
El activista
El arquetipo: El Héroe, incansable, líder de grupo, persuasivo y
anarquista
El personaje
Qué imagen da
Cómo reconocerle: Lo verás atado a un árbol o pidiéndote que
firmes una petición. Es el que hace más ruido del grupo y se pone
rojo mientras expone su razonamiento.
Expresión/Registro verbal: Todo lo que dice transmite su mensaje
mientras recalca su ideología o intenta convencerte de su forma de
74
pensar.
Frase para iniciar conversación/ligar: “¿Estás libre el sábado?
Necesitamos a muchas personas” “¿Eres una espía?” “¿Eres una
rebelde sin causa?”
Inquietud vital: Invalidar todo lo que se oponga a sus creencias.
Construir su sueño del futuro. Obtener apoyo.
Accesorios: Secuencias de vídeo, megáfono, pintura, busca,
disfraces, ganzúa, binoculares de bolsillo, excelente memoria,
organizaciones afiliadas, amistades con cargos importantes,
historias heroicas para leer en la cama.
Profesión: Corresponsal político, fotógrafo periodístico,
político, estudiante, celebridad, líder sindical, abogado de
oficio.
Historial amoroso: No existen víctimas… sólo voluntarias. No toma
rehenes emocionales.
Canción: “Bring the Noise”, de Public Enemy.
Fantasía: Volver a casa a ver a su ayudante, su Cleopatra
personal, llevarla hasta la cama con dosel y, todavía con el
estruendo de la victoria en los oídos, abrumarla.
La sombra
Malas costumbres: Conducta agresiva, opiniones autoritarias,
actitud sexista, pensamiento polarizado, sumamente fiel pero
proclive a difamar a los demás. Evita las opiniones discrepantes,
incumple las normas y las reglas, jamás olvida la traición y se
entrega de lleno a la venganza.
75
Lo que no dice/Secretos y silencios: “¿Realmente vale la pena
luchar a pesar del sufrimiento?”
Agenda oculta: Ganar en medio de la adversidad.
Mantra filosófico: Se sabrá la verdad.
Accesorios: Lugares seguros, nombre en clave, estadísticas,
videocámara oculta, grabadora, antecedentes penales, fondo para
sobornos, matones, agentes secretos, saboteadores.
Barómetro energético: Tiene fuego en el cuerpo. Mucha energía mal
encauzada, que es lo que le ha mantenido en pie tanto tiempo,
aunque a veces es formidable. No sabe estarse quieto.
Futuro de la relación: Acostúmbrate a las despedidas largas.
Canción: “All Along the Watchtower”, de Jimi Hendrix.
Rendimiento sexual: Dejará marcas de quemaduras superficiales en
las sábanas. Si cree que compartes el mismo manifiesto, su pasión
te desbordará. Cuando sabe que estás en su bando en la cama es un
auténtico semental.
[pág. 54]
El activista ha evolucionado a partir del idealista inocente y sin
experiencia que quería cambiar el mundo, reparar las injusticias,
proteger a quienes corren peligro y salvar el medio ambiente. La
vida ha sido dura y exigente. No ha olvidado los ideales elevados
ni los ha cambiado por lo políticamente correcto. Todo lo
contrario, la experiencia le ha proporcionado el entusiasmo para
actuar en el ruedo político y ahora se compromete a hacer campaña
76
contra quienes se opongan a sus ideales. Se considera un Motivador
y su determinación no conoce límites. Se entrega por completo a su
causa, ya sea política, religiosa, social o económica. Su objetivo
principal es desafiar, y en última instancia cambiar, la
decisiones que afectan nuestras vidas. Está acostumbrado a las
situaciones difíciles y reconoce que sus actos deben dejar más
huella que sus palabras.
No le falta confianza. Es consciente de que no todos estarán
de acuerdo con lo que tenga que decir y tiene mucha práctica en
evitar las conversaciones sobre temas triviales. No tolera la
falta de sinceridad ni la superficialidad. Siempre desafiará la
propaganda. No se cree todo lo que le dicen, es agudo, serio y no
es fácil engañarle. Si cree que le están tomando el pelo es
probable que se vuelva inflexible y recurra a sus métodos poco
limpios. Intentará no perder los estribos y parecer ecuánime.
Si es un jugador experimentado, se ocupa de las situaciones
difíciles con absoluta diplomacia y tranquilidad. Ha aprendido a
ser embajador de la causa que representa. Como sabe que la
polémica no siempre sirve para ganarse a la gente, ha descubierto
otras tácticas más discretas para convencer a los demás. Puesto
que hace caso omiso de la oposición sabe que a veces debe
cotillear, divertir y perder. No se dejará vencer por la
autocompasión aunque no logre que la causa avance un poco más.
Debe mantener alta la autoestima para sentirse motivado. Es esta
persistencia la que anima a ser leales, honestos y audaces a
quienes hacen causa común con él.
Si te da la impresión de que es un personaje complejo, no te
77
descorazones. Tal vez sea una ilusión. Sin embargo, su
personalidad es de lo más contradictoria: asegura que lucha por la
causa, por poner en práctica “un camino mejor”; lo que ocurre es
que también es “su” camino. Sí, en la mayoría de los hombres
existe una veta propia del activista. Protege su vida personal de
la amenaza de una intrusión política o de las batallas de poder.
Atento a las oportunidades, siempre está preparado para
interactuar con otros activistas, cuya pasión o protesta apoyará o
rechazará. La vida es una lucha constante. El activista la endulza
con las buenas intenciones de siempre.
(1) Su objetivo principal es desafiar, y en última instancia
cambiar, la decisiones que afectan nuestras vidas.
[pág. 55]
El activista del siglo XXI tiene que ser creativo para que le
entiendan. Y, en un mundo repleto de puñaladas por la espalda,
falta de honradez y violencia, es inevitable que en ocasiones se
sienta desilusionado y piense que han tergiversado sus palabras.
Su alma debe ser muy fuerte y resistente, ¿por qué si no
continuaría luchando contra todo? Ese espíritu batallador tolera
algunas críticas pero necesita una barrera constante para sentirse
optimista. Sea lo que sea lo que necesite, lo consigue solo; la
búsqueda que induce al cambio es lo que le proporciona la energía.
Cree en sí mismo y en la causa que ha elegido.
78
El activista aprecia la diversidad de sus compañeros
agitadores: los activistas abarcan generaciones y culturas. Todos
comparten el deseo de cambiar y esta característica es la que
asusta e informa a los demás. Algunos lo consideran el Robin Hood
del mundo cambiante actual. Da cuanto tiene a la causa: incluso su
espíritu tiene una estrategia para la campaña. Está decidido a
transmitir su mensaje, aunque esto puede provocar actos radicales.
Y ése es su dilema: puede que el precio de la justicia sea la paz.
Llamar la atención y crear problemas porque sí no es algo que
necesariamente le guste. No todos los activistas son extremistas.
Aunque a veces asume el papel de agitador y cabecilla, destaca más
como reformador que como revolucionario. El límite al que llegará
para lograr la reforma depende por completo de él. Sea cual sea su
elección, basará sus estrategias y métodos en principios sinceros.
Tiene la capacidad de identificarse, sobre todo con los
desamparados, los desvalidos y los marginados. Ese anhelo de
justicia yace en lo más profundo de la psique del activista y le
estimula a ayudar a los demás. Cree que el poder de la gente es el
instrumento adecuado para encauzar la acción, así que se esfuerza
en infundir confianza y en alentar a los demás a que rechacen lo
inadmisible. Como voz del pueblo, busca soluciones concretas para
poner de relieve la importancia de las libertades civiles. Se
opone a las corporaciones, a las multinacionales y, a veces, al
sistema. Su misión se encuentra en su alma: sea cual sea, su
entrega es absoluta.
Es un comunicador de corte heroico. La mentalidad “nosotros
contra ellos” le ayuda a establecer vínculos poderosos con los
79
individuos de ideas afines. Su fuerza radica en el hecho de que no
teme la derrota. Su resolución, basada en la integridad,
invalidará cualquier dilema que tenga.
(1) En la vida real
El ciudadano consciente, acusador público de la corrupción,
fanático religioso, luchador en pro de la libertad, ecologista,
feminista, voluntario en una organización sin ánimo de lucro,
periodista partidista
[pág. 56]
El arte del amor
El activista enamorado es un espíritu incansable. Es un alma
inquieta. Le encanta estar alerta, preparado para la acción. Es
emprendedor y tiene capacidad para ocuparse de varios proyectos a
la vez. Apartarlo de su amada causa es una misión imposible.
Olvida la vida normal: lo suyo no es el trabajo de nueve a cinco.
No le sobra el tiempo y no piensa desperdiciarlo. Pero su vida es
tan impredecible que es probable que busque una vida familiar
estable, donde pueda refugiarse de la presión que supone
protestar.
Si lo quiere, el amor es su causa. Pero sólo invita al amor
cuando está seguro de que habrá química. No está preparado para
perder demasiado tiempo con pasatiempos banales. Le gustan las
mujeres con sustancia y es difícil resistirse a su masculinidad
cruda. Se le da bien lo que hace y uno de sus talentos es su
80
capacidad de convicción. Es probable que te seduzca con su
seguridad en sí mismo y su entrega absoluta a una causa. Si te
convence para quedar un día, considérate afortunada; su tiempo es
oro.
Dado que está au courant, es posible que espere igualdad en la
relación. El debate también se le da bien y las discusiones
acaloradas entre los amantes pueden llegar a ser fantásticas. Sin
embargo, la inversión que realiza en el derecho a pensar, elegir y
actuar de manera independiente le otorga a veces una sensación de
superioridad emocional. Por ello, podría mostrarse receloso de las
intenciones de la pareja. Si no estás de acuerdo con sus ideales,
ten cuidado con su desaprobación. Se muestra rencoroso con quienes
desestiman el valor de la protesta en un mundo cambiante.
Acostumbrado a pertenecer a una fuerza unida, querrá disfrutar
de la seguridad de una relación sólida. Por lo tanto, es
imprescindible compartir la misma visión del futuro. Te necesitará
para que creas en él y en lo que defiende. Sin la comprensión
mutua y un acuerdo sincero no habrá un respeto verdadero.
La necesidad que tiene de informar implica que querrá que la
relación sea dinámica y franca. No es de los que corren un velo
sobre los problemas. Querrá exponerlos para hablar sobre los
mismos y encontrar una solución. El activista enamorado se tomará
las promesas en serio. Es un hombre de palabra y no le gusta
cambiar los planes a medio camino. La mayoría de los activistas
tendrá el radar encendido para detectar la manipulación emocional.
No soporta la dependencia por lo que se alejará de inmediato de
una compañera que insista en ese sentido. Para lograr unos
81
cimientos sólidos en el amor deberás apreciar su habilidad para
comprometerse.
[pág. 57]
(1) El gancho
La feminidad más desenfadada atraerá de inmediato al activista. Sé
valiente: enséñale que no estás hecha de algodón. Para atraerlo
pon en práctica tu derecho a protestar con medios pacíficos.
Responderá a una mujer que no tenga miedo a decir lo que siente.
Basa tus razonamientos en los hechos: tus conocimientos sobre las
libertades civiles le impresionarán. ¡Sube a esas barricadas!
(2) En pareja
Detrás de todo hombre excepcional debería haber una mujer
excepcional. Prepárate para pasártelo en grande; le cogerás de la
mano y marcharás en la primera fila bajo las pancartas ondeantes.
Sé consciente de cuánto confía en tu aprobación. Necesita sentirse
respaldado y la mejor forma de lograrlo es apreciarle. Sobre todo,
estad unidos.
Si intenta constantemente ser Superman es posible que acabes como
Lois Lane: fuera del escenario. Está bien que en tu vida sexual
haya una especie de conducta rebelde pero, si fuera de la cama
demuestra que es un anarquista, no lo consientas. Te aburrirá lo
82
indecible. No te pongas histérica; márchate cuando no se dé
cuenta. ¡No podrá resistirse a emprender una campaña para
recuperarte!
Se necesita perseverancia para llegar hasta este héroe obstinado.
Está acostumbrado a los enfrentamientos; ¿qué tal si le hablas en
voz baja para hacerte oír?
[pág. 59]
El doctor buen rollo
El arquetipo: El Altruista, seguidor de la New Age, hombre de
mente-cuerpo-espíritu, curandero en la onda
El personaje
Qué imagen da
Cómo reconocerle: Le encontrarás en los talleres de guerrero de
fin de semana, en una comuna o de peregrinación. Le encantan las
buenas vibraciones así que prepárate para las fiestas de buen
rollo y alocadas, donde los nostálgicos de los sesenta todavía se
lo montan.
Expresión/Registro verbal: Una mezcla de la jerga de la New Age y
Woodstock. Hace llegar su mensaje en voz baja y con una intensidad
deslumbrante.
Frase para iniciar conversación/ligar: “Soy el doctor buen rollo.
Te escucho.”
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Inquietud vital: Enseñar a los demás a sentirse a gusto consigo
mismos.
Accesorios: Esterilla de yoga, incensario, santuario, sandalias,
guru, equinacea en líquido, exprimidor y prensa de grama, botas
para la gravedad, tabla de progresos, furgoneta-caravana,
intérprete de sueños.
Profesión: Naturópata, homeópata, herborista, profesor de yoga o
del método Pilates, terapeuta, profesor de meditación, organizador
de festivales, propietario de una sauna campestre, curandero que
sana con cristales.
Historial amoroso: Vida anterior = asuntos de compromiso. Esta
vida = todavía busca la pareja perfecta. Vida siguiente =
preparado para la pareja perfecta. Mientras tanto, disfruta de los
besos largos.
Canción: “Easy”, de The Commodores.
Fantasía: Es un sumo sacerdote en un viaje de por vida en un
autobús mágico con un alma gemela de larga melena que sólo lleva
un caftán transparente.
La sombra
Malas costumbres: Abluciones matinales, uñas largas, flipa
demasiado y pierde el conocimiento, corrige tu postura, maniático
con la comida, se vuelve un fanático del conocimiento
enciclopédico más irritante sobre los misterios de la vida para
desintoxicarse.
Lo que no dice/Secretos y silencios: “Todavía no he encontrado el
84
sentido de la vida. Dios santo, me comería un filete poco hecho
con patatas fritas”.
Agenda oculta: Si me conozco, entonces te conoceré.
Mantra filosófico: Este es mi hobby, hacer feliz a la gente.
Accesorios: Parches de nicotina, remedios para las resacas,
cólicos, chilum y alijo secreto.
Barómetro energético: Es un purista que se deleita con el placer
de sentirse vivo. Está abierto al contacto físico. Sus chakras
(centros de energía) equilibrados son su orgullo y dicha.
Futuro de la relación: Es exigente y si tiene dudas consultará el
Tarot.
Canción: “Satisfaction”, de The Rolling Stones.
Rendimiento sexual: Te esperará en la cama si es capaz de volverse
a centrar tras dar tanto. Este curandero emocional necesita tiempo
para explorar tus zonas erógenas. Pon el vídeo.
[pág. 60]
Es un curandero consumado. Su realidad se basa en la capacidad
para escuchar, interpretar y orientar. Tranquiliza a quienes le
consultan. Su confianza engendra esperanza. Su empatía suaviza la
dura realidad de los demás. Sabe cómo lograr que hasta la persona
más afligida se sienta atendida. Arroja luz donde había oscuridad
y amor donde había dolor. Se preocupa por quienes le rodean y
colabora para que las cosas de la vida salgan bien. La escasa
tolerancia que muestra hacia el sufrimiento humano encaja a la
85
perfección con su deseo por sobresalir.
Es un optimista que cree que el pensamiento positivo favorece
la salud mental y el bienestar físico. Se propone objetivos para
que la vida resulte más fácil y placentera. Se esfuerza por
inculcar esa concienciación en los demás e intenta poner en
práctica lo que preconiza. Aunque se toma en serio su
responsabilidad para con los demás, también encuentra tiempo para
sí mismo. Sabe que su crecimiento personal determina cuánto podrá
cuidar de los demás.
Le sobra energía. Es abierto y desenfadado y su compañía es
amena. Sabe ocuparse de las proyecciones e inquietudes de los
demás cuando interactúa en un grupo. Se ha desprendido de la
necesidad de ser todo para todos y sus intenciones son claras
cuando permite que los demás tomen sus decisiones y lleguen a sus
conclusiones. Atrae a la gente, que se pregunta el por qué. Tiene
una sonrisa radiante y te mirará a los ojos cuando te lo
presenten. Pero su popularidad reside en su buena voluntad y
magnanimidad. Y esa felicidad proviene de su filosofía de la
aceptación. Ha decidido aprovechar la vida al máximo. Al valorar
lo que tiene, se relaja y se siente contento. No obstante, no
conoce todas las respuestas. De hecho, al alentar a los demás a
que desafíen y cambien sus debilidades, se le debe recordar que él
también es de carne y hueso. Cualquier guru puede desarrollar un
sentido desmesurado del ego; el doctor buen rollo a veces pierde
de vista su doctrina. La mejor cura es una relación. No te
preocupes: un doctor buen rollo auténtico es un altruista movido
por la fe, la esperanza y la caridad. Disfruta.
86
(1) Sabe cómo lograr que hasta la persona más afligida se sienta
atendida.
[pág. 61]
Es un alma antigua en un mundo moderno. Es un buscador a quien le
preocupa el viaje del alma. Cree que la vida es misteriosa y
maravillosa y su objetivo es ayudar a que los demás respondan la
gran pregunta de la vida: “¿Quién soy?” Tal vez base su cuidado y
preocupación por los demás en creencias psicológicas o
espirituales, pero encuentra la serenidad en su interior.
Al reconocer el hecho de que la vida es difícil huye de la
fantasía escapista de un mundo perfecto. Ha aprendido cuál es el
poder de la acción, tanto en su vida como en la de las personas a
quienes aconseja, al aceptar las inevitables y extrañas vueltas de
la vida. Es un espíritu libre que se zambulle en el río de la vida
y da la bienvenida a los retos que le esperan. Cree que la vida
cambia constantemente y su objetivo es lograr un elevado nivel de
concienciación. Nunca se rasca el ombligo, pero saborea los
escasos momentos de melancolía.
Está al tanto de todo; nunca pierde de vista la correlación
entre mente, cuerpo y espíritu. Considera que su profesión es una
vocación y quiere entregarla al mundo de manera holística. Al
eliminar el diálogo interior negativo y sustituir el miedo por la
fe, integra la lógica y la compasión en una comunicación directa y
87
eficaz. Es un experto de la diplomacia y del cuidado del espíritu
humano por lo que intenta convencer a quienes acuden en busca de
consejo o enseñanza que siempre hay una elección y una forma de
superar las dificultades. Gran parte de su aptitud se basa en la
intuición: pasa mucho tiempo sintonizando con los demás y sacando
a relucir sus potenciales y su resistencia.
Como hombre que encarna la humanidad sabe gobernar y orientar
y ayuda a los demás a conseguir una vida más completa. Como toma
las decisiones de manera consciente encuentra un equilibrio
adecuado entre la ambición personal y la generosidad, e intenta
que la misma generosidad resplandezca en los demás. Es un hombre
que puede enseñarnos la relación entre el afecto y la prosperidad.
(1) En la vida real
Le encanta desintoxicar, adicto a la autoayuda, terapeuta
principiante, viajero convertido en chamán
[pág. 62]
El arte del amor
El campo emocional del doctor buen rollo es vasto. Es consciente
de todas las clases de amor. Sabe cuál es la diferencia entre el
amor propio y el egoísmo y que el amor propio, basado en la
autosuficiencia, es necesario en toda relación amorosa. Como decía
lord Goring en Un marido ideal, de Oscar Wilde: “… amarse a sí
mismo es el inicio de un romance para toda la vida”. El doctor
buen rollo enamorado prefiere la interdependencia a la co-
88
dependencia. La interdependencia fomenta el crecimiento y la
flexibilidad en la interacción. La co-dependencia crea
expectativas poco realistas de la inversión emocional en cualquier
relación. En este estado, los dos son esclavos de las emociones y
quedan prisioneros tras unas murallas de miedo, ira, vergüenza y
dolor. El doctor buen rollo busca el reflejo de sí mismo para
satisfacer sus necesidades, una compañera equilibrada que pueda
complementar sus virtudes y defectos. Dado que ha alcanzado un
estado de independencia, su pareja ideal sería una persona que
tuviera la misma fuerza interior.
Es un hombre capaz de crear y mantener relaciones importantes
y conseguirlo resulta esencial para su felicidad a largo plazo.
Puesto que da una gran importancia al desarrollo de relaciones de
calidad a veces se enamora de la idea de una relación perfecta;
querrá que le envuelva el resplandor de una conexión cósmica.
Necesita darle tiempo a una relación para que se desarrolle y debe
estar preparado para trabajar al respecto. Sin embargo, es
consciente de la importancia de la sinceridad en el amor, y ésta
es la clave para una intimidad duradera. Sabe que la interacción
del amor y el miedo sustenta cualquier relación humana y que el
amor verdadero no es para los pusilánimes. No es perfecto pero su
punto de referencia es el amor, no el miedo. Si hay un desacuerdo,
querrá discutirlo abiertamente para solucionarlo. Cuando esté
preparado para el amor no se dará por vencido hasta que encuentre
a su alma gemela.
[pág. 63]
89
(1) El gancho
Le atraerá alguien que esté a gusto consigo mismo. Relájate: deja
tus neuras en casa. Busca una mujer que sepa cuidar de sí misma en
todos los aspectos. Mantente de una pieza; sé comunicativa y
expresiva con tus sentimientos. Invítale a la danza de la
fascinación mutua.
(2) En pareja
Si le da un vuelco a tu corazón, asegúrate de tomarte la relación
en serio. Querrá aprovechar al máximo el tiempo que pasa contigo y
te exigirá una entrega total. No le gustan los jueguitos. Utiliza
tus creencias espirituales para fortalecer vuestro vínculo. Nunca
olvides que es un hombres especial: sensible y perspicaz. Sé fiel
con él celebrando siempre vuestro amor. Confía en ti y en él por
igual.
Piensa bien lo que estás dejando. ¿Vale la pena una segunda
oportunidad? Dejarle no te será fácil. Juntos habéis experimentado
una relación profunda. Si estás preparada, suavízale el golpe. Se
lo tomará como algo personal. Es un hombre sensible y sagaz a
quien no le gustan las tonterías. Dile cómo te sientes de
inmediato. Sé todo lo sincera que puedas sobre tus cambios
emocionales. Necesitará tiempo y espacio para aceptarlo.
90
Somos ángeles con una sola ala. Sólo podemos volar si nos
abrazamos a los demás.
[pág. 65]
El hombre de los medios de comunicación
El arquetipo: El Guerrero, nacido para ganar, absolutista
creativo, con un sentido competitivo del yo
El personaje
Qué imagen da
Cómo reconocerle: Está en el epicentro de cualquier encuentro
social; su postura protagonista denota obsesión consigo mismo.
Reparte besos por compromiso con energía directa y de alto
octanaje y una sonrisa seductora; lleva el mando, con las
emociones en piloto automático, buscando desesperadamente alcanzar
popularidad. El rendimiento es lo que cuenta.
Expresión/Registro verbal: Jerga de los medios de comunicación,
habla con acento neutro y, si se le presiona, es bilingüe,
transmisión en cadena en una millonésima de segundo, con garra
política, máxima económica: “cuanto más millones, mejor”.
Frase para iniciar conversación/ligar: “¿Nos conocemos, y si no,
por qué no?” “¿Perteneces al mundillo?”
Inquietud vital: Nacido para ganar, una y otra vez. Contactos,
contactos, contactos.
Accesorios: Tía buena, coche deslumbrante, dos móviles, memoria
91
RAM extra en el bloc de notas del PC, rollo de películas y cartera
de trabajos, socio del club más in, viaja en primera clase siempre
que puede, últimas ediciones de las revistas para hombres siempre
a mano.
Profesión: Productor de música o películas, DJ radiofónico,
ejecutivo de agencia publicitaria galardonado, relaciones públicas
de primera categoría, diseñador gráfico vanguardista.
Historial amoroso: Una entre bastidores, una en el plató, una con
la que estuvo a punto de casarse y una a la que no puede olvidar.
Canción: “Hanging on the Telephone”, de Blondie.
Fantasía: El Kama Sutra, con él de protagonista junto a su
starlette preferida masajeándole su hastiada alma.
La sombra
Malas costumbres: No te devuelve la llamada con rapidez, se olvida
de presentarte, te llama por otro nombre y te deja sola en las
fiestas.
Lo que no dice/Secretos y silencios: “No soy libre. Quiero a mi
madre pero no soy de los cariñosos. ¿Tendrás el mismo aspecto a
los cincuenta? El cara a cara no es mi fuerte”.
Agenda oculta: Encontrar a una mujer independiente con vida
propia. Continuar flirteando de forma sutil incluso cuando está
enamorado.
Mantra filosófico: Consigues lo que consigues.
Accesorios: Combinado con Martini, marihuana boliviana, dos hijos
de su primer matrimonio.
92
Barómetro energético: El tipo ideal con el que ir a una fiesta.
Adicto al trabajo, perfeccionista, estoico. Su hiperciclo suele
acabar en un final rápido.
Futuro de la relación: Ella hace planes, él se pone en camino. La
gestión del tiempo necesita trabajo. La novia a tiempo parcial
debe ser flexible con su agenda. El amor superficial le ha
desilusionado. Atrápale al final de su carrera, cuando esté
preparado para salir de la pista rápida y aceptar el para siempre
jamás.
Canción: “Video Killed The Radio Star”, de Buggles.
Rendimiento sexual: Demasiado cansado para echar un polvo.
Necesita pasar el fin de semana en la campiña para que haya sexo
de verdad.
[pág. 66]
Es brillante, centrado y creativo. Es competidor por naturaleza.
Su personaje guerrero le protege mientras persigue la fama y la
fortuna. Su deseo de obtener amor y autorreconocimiento hace que
se esfuerce por triunfar. Los modelos de conducta son esenciales
ya que se convierten en el punto de referencia de lo que hace. El
estatus entre sus iguales aumenta la presión que lo convierte en
una máquina luchadora de lo más eficiente. Lo sabe todo sobre la
zanahoria inalcanzable que le mantiene en la carrera. Es probable
que él mismo la colgara.
La necesidad de que sus ideas creativas y propuestas
93
empresariales sean admiradas y aplaudidas es fundamental para que
su autoestima no se desvanezca. Esta sensación de aceptación
recuerda el impulso primordial de satisfacer su verdadero yo. El
miedo inconsciente a no ser lo bastante bueno lo lleva a rendir
por encima de lo esperado. Sobrecompensará y tal vez exagerará sus
logros pasados y su potencial futuro. Tiene un modo de pensar
perfeccionista que reafirma su miedo a la ineptitud. No desea
sentirse indigno, y así es como se siente cuando no es capaz de
hacer algo que cree que debería ser capaz de hacer. La idea de ser
un farsante, de no ser listo, excepcional o con talento, hará que
se decepcione. La confianza inquebrantable y la duda de sí mismo
se alimentan la una de la otra en un ciclo de altibajos.
Sigue una disciplina profesional. Sin embargo, no puede
decirse lo mismo en el terreno sentimental. Como tiene un estilo
de vida siempre atareado donde los límites del trabajo y del
placer suelen confundirse, apenas encuentra tiempo para las
relaciones íntimas, pero le gusta que la situación sea así. Es
mucho mejor pasárselo bien en el local de moda y perderse en la
euforia de la multitud. Es vivaz y seductor cuando se lo propone:
la otra cara de la moneda es la imagen que envuelve a muchos de
los hombres de los medios de comunicación que llevan tiempo en el
ruedo. La vida se convierte, literalmente, en un mar de rostros
apabullantes en las previsibles fiestas de estreno. A no ser que
se preocupe de reservar tiempo para ti y para él, apenas tendrá
fuerzas para dedicarse a las cosas más sencillas de la vida.
Una buena forma de aprovechar su lado más blando, lo cual
podría proporcionarle la satisfacción que tanto ansía, sería
94
alentarle a realizar actividades lejos del mundanal ruido. Su
resistencia a cambiar será desalentadora, pero no insalvable.
Aceptará el resto de la intimidad siempre y cuando no origine
conflictos con los compromisos previos. Las inseguridades propias
del hombre de los medios de comunicación ponen de relieve su
orgullo apabullante, por lo que tal vez lo mejor sea atraerle a
las realidades más sutiles del amor.
(1) El estatus entre sus iguales aumenta la presión que lo
convierte en una máquina luchadora de lo más eficiente.
[pág. 67]
Toma café por la mañana. Está listo para salir; ha cruzado la
puerta y va de camino al coche. Necesita estar con los juguetes
que ha reunido. Se despierta sintiéndose vacío pero a media mañana
es un hedonista con una sonrisa en el rostro. Los días abarcan las
noches. Es ambicioso. Sus objetivos poco realistas le aumentan el
estrés, lo que origina una especie de caos controlado. Hace
malabarismos con diez pelotas a la vez. Está al mando y cumple.
Nunca se pasa un plazo límite. Obtiene su concienciación extrema
de sus ideales perfeccionistas.
El negocio diario es una oportunidad para la expresión
personal dinámica: cualquier situación puede acabar
beneficiándole. Su necesidad gira en torno al deseo de una salva
de aplausos eterna, de aprobación. Las iniciativas profesionales y
95
artísticas se presentan como situaciones para ganar; oportunidades
para demostrar su veta competitiva. Ganar es lo que cuenta: es su
objetivo, su modus operandi. La necesidad interna de
entretenimiento es lo que alimenta todos los actos. El deseo de
triunfar en el lugar de trabajo oculta su espíritu. Lo mismo
sucede con el amor. Las altas expectativas ejercen una gran
presión en cualquier compañera y es posible que, por este motivo,
ella se aparte de él.
Por desgracia, la ansiedad que ha creado su necesidad de
mantener todo en funcionamiento le aleja de la situación
inmediata. En muchas ocasiones parece estar trastornado. Se asusta
cuando se le pide que ponga toda su concentración en el aquí y en
el ahora. El miedo a ahondar en su alma puede hacerle sentirse
débil. Es probable que incluso rechace el concepto de la búsqueda
del alma como algo sentimentalista.
Para lograr cambiar tendrá que buscar algún proceso mediante
el cual pueda meditar sobre el sentido de la vida. La primera
etapa será construir puentes entre el mundo interno y el externo.
Esto requerirá introspección por su parte; algo que, consciente o
inconscientemente, evita en su vida laboral. Como adicto al
trabajo, sus logros resuenan de inmediato. La mayoría de la veces
su participación en planes creativos se limita a ser la de uno de
los múltiples colaboradores, y se siente satisfecho al completar
la idea de otra persona. Lleva todos los proyectos a buen término
y después se marcha; una vez finalizados, la responsabilidad cesa.
El ciclo de inicios se reanuda y la oportunidad de meditar vuelve
a desvanecerse.
96
(1) En la vida real
El aspirante a profesional independiente, miembro no reconocido
del equipo de producción, arribista de la lista de invitados,
cinéfilo
[pág. 68]
El arte del amor
Su obsesión por la perfección le impide disfrutar del arte del
amor. Le resta importancia a lo que pueda aportar a cualquier
relación. El análisis autorreflexivo desempeña un papel tan
importante en su relación con los demás que se queda paralizado
desde un punto de vista emocional. Es tan cerebral que no sabe ser
cariñoso. Desconoce que es normal tratar con lo imperfecto.
Al aceptar la dualidad de quiénes somos, nuestra virtudes y
defectos, logramos la unidad. Cuando nos sentimos completos y a
gusto con nosotros mismos descubrimos una tersura natural. Esta
naturalidad es el primer requisito al amar y ser amados; se trata
de la atracción. Esta es la aceptación que debe aprender: en
última instancia tendrá que bajar la guardia y participar en el
baile de la vida. Esto significará que tendrá que estar dispuesto
a trabajar con otras personas para obtener un resultado
comunitario, a trabajar con un compañero para lograr el mismo
objetivo y estar preparado para soltarse y dejarse llevar por las
complejidades que ha reprimido. Tiene la oportunidad de encauzar
su dinamismo inagotable hacia un grupo de ideas afines. Todavía
97
tiene la oportunidad de vivir a tope, pero con claridad.
Al enamorarse podría experimentar la integración del yo
exterior con el interior. No teme el compromiso; la resistencia a
la confianza y la rutina le han frenado. La receptividad emocional
cuesta lo suyo; si considera que es un trabajo duro es posible que
pierda la oportunidad de expresar su particular manera de amar.
Sabe que la vida no es “segura” y, no obstante, se ha vuelto
demasiado seguro al evitar su propio corazón. Para evolucionar
tendrá que restablecer la confianza en sí mismo. Sólo entonces
podrá confiar en los demás y resolver la necesidad de ganar,
ganar, ganar. Su objetivo es evitar la derrota ganando. Le cuesta
aceptar que el espíritu no tiene motivos ocultos. Al proceder de
un mundo de perfiles y egos le parece prácticamente imposible
entregarse al amor. Tiene que abandonar conscientemente el marco
de la influencia profesional y penetrar en su otra vida: ni
demasiado deprisa ni con demasiada cautela. Ahí tendrá
posibilidades de aprender a dejarse llevar por la corriente.
Le han educado para que persiga objetivos propios del ego,
muchas veces sin cuestionárselos. La seguridad material resta
importancia a esos objetivos previsibles. La entrega verdadera,
con todos sus riesgos, sólo se experimenta en el amor. La decisión
de permanecer en ese nivel seguro siempre existirá, pero el hombre
de los medios será un compañero agradecido si está dispuesto a
dejarse llevar y ya no pueda echarse atrás. Es decir, salir de las
limitaciones del “yo” para sumergirse en la identidad expandida
del “nosotros”.
98
[pág. 69]
(1) El gancho
Su segunda casa es su mesa favorita en cualquiera de los
restaurantes de obligada visita abiertos esta temporada en que se
lleva la moda sibarita. Sigue las tendencias de la vida nocturna y
le encontrarás. Ten bien presente quién eres cuando estés en su
compañía. Muéstrate a la moda de forma sencilla para despertar su
sentido del estilo: “actual” es aplicable a todo. Recuerda: es
importante que se sienta a gusto. La conducta coqueta tendrá que
quedar en suspenso durante las maniobras devoradoras de hombres
que asegurarán la atracción. Su capacidad de concentración es
exigua pero nunca apaga el radar para detectar mujeres.
(2) En pareja
Sé fuerte desde el principio. Hay probabilidades de que la pasión
se desate en el dormitorio así que ármate de paciencia. Todas esas
noches que sale hasta tarde pueden haber minado su resistencia:
prepárate para abrumarle con un toque sensual. Tu papel puede que
implique equilibrar la relación al poner en armonía su trabajo y
sus compromisos sociales y personales. Invertir tiempo en esta
estrategia sería lo más prudente, ya que activará su sentido de la
diversión y la picardía.
Sé oportuna. Escoge el momento y actúa con rapidez. Aunque no ha
99
logrado cumplir con lo prometido, tiene sentimientos y los podría
encauzar de forma negativa para consigo mismo. Tal vez se culpe
por no haber sacado partido del amor, un proyecto que considera
problemático. Déjale con algunas insinuaciones sobre las aptitudes
de las personas, reafirma su potencial humano y convéncele de que
el derrotismo no es el mejor camino. Si el tiempo se le ha
escapado de la manos, hazle ver que el compromiso también tiene un
lugar y un momento y que en esta ocasión ha perdido el tren.
Dile honestamente lo que quieres, pero sé consciente de la
diferencia entre la agresividad y la seguridad en sí mismo.
[pág. 71]
El trotamundos
El arquetipo: El Trotamundos, espíritu libre, explorador
solitario, culo de mal asiento, navegante
El personaje
Qué imagen da
Cómo reconocerle: Esperando que salga su vuelo: su actitud
despreocupada delata al viajero experimentado. El vestuario
consiste en una mezcla ecléctica de prendas de todo el planeta. El
estilo se ha convertido en sinónimo de individualidad.
Expresión/Registro verbal: Adopta la jerga del lugar por el que
pasa.
100
Frase para iniciar conversación/ligar: “Oye, nena, deja al pelma
ese para embarcarnos en un viaje interminable”.
Inquietud vital: Zambullirse en lo desconocido.
Accesorios: Sandalias, mochila destrozada, tienda de campaña
individual, cacerola, borceguíes, dirección de correo electrónico,
hilo y aguja, cámara, amuleto de la suerte, diario de papel hecho
a mano, manta peruana o himalaya, ropa interior térmica, comida
liofilizada.
Profesión: Marginado contracultural, lo que significa que trabaja
por temporadas para ahorrar lo que necesita para viajar.
Historial amoroso: Bellezas esporádicas complementan los idilios
durante los viajes.
Canción: “Black Magic Woman”, de Santana.
Fantasía: Viajar en el tiempo hasta Venus, donde le recibe un clan
de guerreras que lo veneran por ser el ancestral espíritu terrenal
que regresa a casa.
La sombra
Malas costumbres: Se esfuma, llama a cobro revertido, nunca tiene
dinero, deja arena en la cama, vacía la nevera y planea el
siguiente viaje justo cuando tú te enamoras.
Lo que no dice/Secretos y silencios: “Sólo trabajo por dinero. No
duraré mucho. Tengo una amante en cada puerto. No me acompañes”.
Agenda oculta: Huir de las banalidades de la vida cotidiana.
Evitar tener que responder a todo el mundo.
Mantra filosófico: En la vida todos caminamos solos.
101
Accesorios: Tabaco para liar, sarong porque es un tipo sexy,
colección de camisetas cuidadosamente seleccionadas, yodo,
condones occidentales, varilla de zahorí, licencia de motos falsa,
zapatos con compartimento secreto, agente de seguros engañado.
Barómetro energético: Se pasa el día tumbado en una hamaca colgada
entre dos palmeras hasta quedarse grogui. Cuando tiene que coger
un avión, tren o coche, es como un rayo, pero siempre tarde.
Futuro de la relación: Posible, pero olvídate de la alianza.
Canción: “Nowhere To Run”, de Martha Reeves and The Vandellas.
Rendimiento sexual: Está impaciente por demostrar sus poderes de
persuasión sexual, lo cual se le da de maravilla cuando hay una
barrera idiomática.
[pág. 72]
Es el héroe errante por antonomasia. En los mitos y en las
leyendas es el joven caballero cuyo rey o padre tirano expulsa al
mundo y que encuentra un tesoro oculto que lleva de vuelta a su
tierra natal para colocarlo triunfalmente ante el altar del reino.
En la vida moderna la autoridad es lo que aleja a este tipo. Es un
inconformista que manifiesta su recelo de cualquier sistema,
institución o persona que él crea que subestime su individualidad.
Puesto que muchas veces piensa que él mismo es un estereotipo
prisionero de una identidad falsa y rígida impuesta por los
modelos de conducta masculinos imperantes en la sociedad, toma una
decisión crucial para experimentar en otras culturas para así
102
reafirmar su yo.
No cree en absoluto en las soluciones convencionales. Sin
embargo, cuando rechaza las normas de la sociedad debe llenar los
huecos con una forma de vida alternativa. Por lo tanto, es posible
que viva en los límites de la sociedad: ni muy dentro del sistema
ni demasiado fuera del mismo.
Dinámico y entusiasta, ha decidido que la vida no es monótona
sino una aventura emocionante, fenomenal y alocada. Es bastante
maduro, aunque sea joven, porque se ha buscado una vida propia. Ha
tomado la decisión de seguir el camino solitario para intentar
liberarse de la presión de lo que piensan los demás. Es raro y no
le importa. Se aleja del nido y recorre el mundo para descubrir
quién es. Pero olvida que debe llevarse a sí mismo vaya donde
vaya.
Hoy día muchas personas viajan pero pocas viven viajando. Los
viajes del trotamundos tienen un mayor grado de exploración que
los de los demás. Para él se trata de una búsqueda. Asimilará los
paisajes, sonidos, olores y energías de los países que visite y se
sentirá a gusto en situaciones que desalentarían a otros. No se
perderá ni un detalle de lo que le rodea ni de lo que es
importante mientras experimenta la belleza y la fealdad de la
vida. Una de sus virtudes es que siempre se siente a sus anchas
con los demás.
Aprenderá a ser autosuficiente y, si bien elige la libertad,
con el tiempo regresará para desempeñar un papel activo en la
sociedad. Seguirá siendo espontáneo e ingenioso con un marcado
sentido de la identidad, básicamente porque se ha comprometido a
103
hacer lo que quería.
(1) Los viajes del trotamundos tienen un mayor grado de
exploración que los de los demás.
[pág. 73]
Ama la soledad. Crea una soledad extrema para desarrollarse como
persona. Paradójicamente, como trotamundos que es y va donde le
lleven los pies, su supervivencia depende de su flexibilidad. Debe
dominar el arte de la adaptación y encontrar su sitio en cualquier
entorno desconocido y remoto.
Puede parecer egoísta: es cierto que no siempre tiene en
consideración los sentimientos de los demás. Sin embargo, sería
más preciso decir que es un hombre que no acepta la ética
tradicional porque sí. En lugar de ceder a la presión de imitar y
ajustarse a los principios sociales de amar y vivir, prefiere
inventar su propia ética. La búsqueda de la autodefinición es lo
que le motiva. Es atrevido, tanto en la exploración del mundo
externo como del interno. Se aleja de quienes aprecia para
realizarse como persona, extrae conclusiones a partir de su propia
experiencia y encuentra la visión verdadera en la noche oscura del
alma.
Para materializar su deseo de viajar renuncia al papel de
sostén económico, temporal o permanentemente, y pone en peligro su
economía y amistades. El ansia de experimentar la variedad y la
104
riqueza del mundo externo sustituye el deseo de un triunfo
económico. Sin embargo, la sociedad suele considerar que la forma
que tiene de buscar respuestas a sus preguntas no es más que una
evasión. Le dicen que no le sirve de nada a nadie, que es un
soñador. Se tomará esas críticas muy en serio. En concreto, la
sensación de vergüenza inherente al fracaso en Occidente podría
debilitarle.
De hecho, el trotamundos sólo se equivoca cuando sacrifica la
intimidad por la independencia. Tal vez haya reprimido su
necesidad de amor y compromiso porque cree que violará su
independencia. Falso. Puede tener ambas. Ningún hombre es un isla,
como dijo el poeta John Donne, y la ilusión del trotamundos de
poder estructurar una vida en torno a la creencia de que sólo
confía en sí mismo se desmorona lentamente cuando se da cuenta de
lo mucho que teme que le abandone la persona que ama. Si ama,
claro. A veces cree que la independencia es un valor romántico, el
mayor símbolo de masculinidad. Sólo cuando sienta la tristeza y
soledad propias de esta situación estará dispuesto a cambiar.
En la vida real
Temporero que recoge fruta, joyero, entrenador deportivo por
temporadas, plantador de árboles, vendedor ambulante en las
fiestas
[pág. 74]
El arte del amor
105
Decir que se busca a sí mismo allá donde viaja es contar sólo la
mitad de la historia. También viaja en busca del amor verdadero.
En su interior ha colocado una vela encendida con la pregunta:
“¿Dónde estás?” Su sueño es que ella también recorra el planeta
viajando y que alguna fuerza desconocida acabe uniéndoles.
Cuando está solo siente, si se lo permite, la desesperación de
la soledad. Es el momento en que todo cede. La red de seguridad no
está colocada y se encuentra cara a cara con el impulso primario
de enamorarse y experimentar lo que el amor aporta a la vida.
Tiene dos elecciones. La primera es prepararse para el amor para
que cuando conozca a la mujer adecuada sepa reconocerla. La
segunda es dejar pasar el momento y tomarse una taza de chai en el
salón de té de la esquina. Si el trotamundos aprende la lección
será un compañero increíble. Cuando llegue el momento, seguirá los
dictados de su corazón con la misma convicción con la que viajaba.
Y considerará que el mundo de la pareja es un viaje para toda la
vida en el que ambos podrán experimentar qué significa estar
juntos.
Cuando haya resuelto el conflicto entre el amor y la necesidad
de ser independiente, ya no sentirá la separación. Y el
aislamiento voluntario ya no tendrá sentido alguno. Se ha puesto
en primer lugar y ha cumplido sus sueños, por lo que ya puede
permitirse el lujo de amar. Sin embargo, el impulso de no sentirse
presionado es muy fuerte. Puede ser un romántico poco convencional
y contradecir cualquiera de las leyes del amor romántico, pero si
intentas minar su singularidad te clavará su aguijón de escorpión.
Tiene que sentir que su lugar en la comunidad es el de la
106
individualidad. En cuanto se haya hecho valer en una relación ya
no se sentirá amenazado por la misma.
Al trotamundos siempre le gustará saborear lo desconocido.
Querrá que compartas su placer por las culturas extranjeras y su
conocimiento de los distintos estilos de vida. Renuncia a toda
esperanza de llevar una vida normal y acompáñale en el camino, sin
saber jamás dónde os llevará la siguiente curva.
[pág. 75]
(1) El gancho
Haz una reserva en el mismo compartimento del tren con coches cama
con destino a algún paraíso terrenal. La mejor manera es tentarle
con tu variedad de platos. Hazle un buen paquete con alimentos y
te estará agradecido. No pierdas la compostura y da la impresión
de estar segura de ti misma. Finge que eres una viajera
experimentada y emplea tu talento de mujer exploradora para
impresionarle. Al día siguiente, partid juntos. Recoge leña, haz
una hoguera, prepara una cena de tres platos en una olla, ofrécete
a remar… ¡No fallará!
(2) En pareja
Si todo va bien, detén el momento. Saborea el presente y no le
asustes haciendo planes. Aliéntale a disfrutar de la vida estable.
El hogar, más que nada, es un estado de ánimo. Si lo suyo es
errar, viajad juntos. Sobre todo, permítele tomar decisiones sobre
107
cómo quiere que sea su vida. No intentes imponerle tus propios
sueños. Si estáis hechos el uno para el otro, vuestros sueños
serán los mismos.
Si te cansas de hacerle bajar de las nubes y de ser el elemento
estabilizador de la relación, díselo. Si juntos no lográis dar con
el justo medio, deja de intentarlo. Quizás en tu caso prefiera
estar solo. No reserves un billete de salida. Soporta el dolor en
casa. Se te pasará.
Confúndele antes de vampirizarle. Y no dejes que te seduzca si no
va en serio.
[pág. 77]
El colega
El arquetipo: El Inocente, rey de los chicos, animal de
costumbres, depende del visto bueno del grupo
El personaje
Qué imagen da
Cómo reconocerle: Sigue los silbidos, comprueba los andamios, mira
por la boca de las alcantarillas, toca el claxon a los fanáticos
de la velocidad en el carril situado junto a ti.
Expresión/Registro verbal: Farfullas machistas, vaya vaya, a ver a
108
ver, tú ya sabes, argot con rima, vulgar y arrogante tras las
cervezas de turno. Y se inventa historias.
Frase para iniciar conversación/ligar: “Estoy organizando una
competición de camisetas mojadas; tú podrías ganar”. “¿Por qué no
cambias el sillín de la bicicleta por mí?” “¿Es que no sabes
aceptar una broma?”
Inquietud vital: No le importa una XXXX.
Accesorios: Equipo para jugar al fútbol, vaqueros de diseño
exclusivo, mando a distancia, mesa de billar, diana, padres
indulgentes, pelota de rugby autografiada, coche trucado,
barbacoa, Play Station, pub local, sueldo semanal, novia de la
infancia.
Profesión: De no cualificado a cualificado: de banquero a paleta.
Historial amoroso: El ligón de turno que se dedica a romper
corazones.
Canción: “My Way”, de Sid Vicious.
Fantasía: Espectáculo simultáneo en un hotel de Las Vegas: en la
televisión de pantalla plana de tres metros dan el Mundial; en el
techo de espejo se ve a una rubia haciéndole proezas sexuales
dignas de una matrícula de honor. De postre, un paquete de patatas
fritas y media cerveza para bajarlas.
La sombra
Malas costumbres: Enseña el culo, eructa y se tira pedos sonoros
con frecuencia, engulle la comida, nunca baja la tapa del váter,
se pone ketchup en todo, cree que clavar la mirada es ligar, es un
109
fanático de los deportes y tiene las manos largas después de
varias cervezas.
Lo que no dice/Secretos y silencios: “¿Pueden acompañarme mis
colegas a la luna de miel? Echo de menos a mami; es la mejor
cocinera”.
Agenda oculta: No dejar de mirar a las chicas y hacer comentarios
en voz alta a las mujeres que pasan.
Mantra filosófico: Si no está roto no lo arregles.
Accesorios: Se deja el dinero en el bar, barrigón si ve la
televisión, neverita para latas, sartén quemada, platos con curry
a las tantas (cuanto más picantes, mejor), remedios para las
resacas, vídeos de porno blando, fotos de tías buenas, ceniceros
de recuerdo, maquinillas de afeitar desechables, poco jabón.
Barómetro energético: Grita durante el partido, alcanza el clímax
en el pub pero está fuera de combate durante las relaciones
sexuales. Las noches que se queda en casa e ingiere demasiada
comida para llevar es como si no existiera. A veces es un
auténtico vago.
Futuro de la relación: Se reservará una noche libre por semana
para ti. Atenta: es tacaño con las emociones.
Canción: “Wonderwall”, de Oasis.
Rendimiento sexual: Folla por la noche. Olvídate del amor por las
tardes.
[pág. 78]
110
Jamás pierde la chispa adolescente de fanfarrón. Cuando mejor se
lo pasa es cuando está con sus amigotes. Para él, la presión de
crear o proyectar una imagen resulta irrelevante. No le importa lo
más mínimo lo que los demás piensan de él; los “demás” son todos
aquellos que no pertenecen a su grupo.
Tiende a acercarse a un grupo en el que pueda ser él mismo. Es
todo un hombre y quiere una vida fácil. Sabe cuál es su sitio en
la sociedad y lo acepta sin poner pegas. Se encuentra en todos los
estratos sociales: lo que le diferencia es su buena voluntad a
pasar por el aro. No le gusta causar problemas. Se siente bien al
saber de dónde procede y le tranquiliza el hecho de que sus padres
no le hayan presionado para que les supere o sea mejor que ellos.
Sin embargo, si quisiera superarse, le apoyarían en un cien por
cien. Es leal a quienes ama y a sus amigos. Entabla amistades para
toda la vida. Su temperamento desenfadado refleja lo de “consigues
lo que ves”.
El calendario deportivo le ofrece los momentos más
emocionantes de la vida e ir a ver los partidos es la rutina de la
temporada. Apoyará al equipo: ya sea críquet, rugby, fútbol o lo
que le interese. Le encanta vegetar en el sofá de casa, con sus
amigos, mucha cerveza y su fiel mando a distancia. La vida es
dulce. Las oportunidades no le interesan lo más mínimo. Estudiará
algo que encaje con su forma de vida práctica: apartarse de la
rutina no es algo que le atraiga.
Es machista y marca su territorio. A veces es muy dogmático y
eso le perjudica cuando la vida o el tráfico no avanzan como
debieran. Los insultos, reales o imaginados, le exasperan y
111
entonces su pasividad se convierte en agresividad. El fariseísmo
también puede provocar ataques en la dirección equivocada cuando
no logra salirse con la suya, lo cual puede dar lugar a
antagonismos. Sin embargo, supera los arrebatos de furia de
inmediato. En casi todos los hombres hay rasgos del colega. Los
chicos siempre serán chicos.
(1) Es leal a quienes ama y a sus amigos
[pág. 79]
Tal vez haya cantado en el coro de la iglesia, pero nunca le verás
haciendo la postura del loto ni buscando la clave de la
iluminación personal. Puede que esto le beneficie desde un punto
de vista espiritual. Puesto que no se complica la vida con
preguntas existenciales sobre el paradero de una energía superior,
ve la vida de forma objetiva y práctica. Y, por lo tanto, recurre
a sí mismo para encontrar significados y valores.
No hace falta gran cosa para despertar su espíritu. A veces es
ordinario e impertinente, irreflexivo y falto de tacto, pero tiene
corazón y se deja guiar por la amabilidad. Haría lo que fuera por
alguien a quien aprecia, ya sea su abuela o el vecino. Es un buen
tipo, el tipo al que llamarías cuando te olvidas las llaves dentro
de casa y no puedes volver a entrar. Lo más difícil es empezar a
conocerle.
Sus colegas son lo más importante. Juntos forman una
112
asociación de admiración mutua. Para el colega, el grupo significa
protección. La camaradería, el humor y el descaro son las
aptitudes a las que recurre una y otra vez. Está a las duras y a
las maduras, pero tiende a reprimir sus sentimientos. Odiaría que
le consideraran un sentimental, por lo que a veces es homofóbico.
Irónicamente, su marcada vinculación afectiva masculina guarda
parecidos con el mundo homosexual. Al mismo tiempo, con la llegada
de la independencia económica de la mujer y la crisis de la
identidad masculina, muchos hombres heterosexuales se han visto
obligados a demostrar su masculinidad en grupos afines
tradicionalmente asociados con el tipo colega.
La introspección no es lo suyo. Sus amigos no se la piden y él
tampoco. Ese sería un paso gigantesco para este hombre casi
inocente. Su filosofía es la de “las cosas fáciles, cariño”. Para
él, rezar equivale a beber cerveza y meditar a dormir
profundamente. La satisfacción proviene de la estabilidad. Es
afectuoso y alentador, hogareño y, sin dudas, un animal de
costumbres.
(1) En la vida real
El limpiaventanas descarado, asiduo del centro social, bromista,
basurero, vendedor de coches, asiduo a las discotecas los viernes
y sábados por la noche, lechero
[pág. 80]
El arte del amor
113
Cuando quiera darle a la lengua optará por sus colegas. La mujer
media habla mucho más que el hombre medio; el colega habla
bastante menos que cualquiera de los dos grupos y, si al final del
día se ha quedado sin palabras, no se molestará lo más mínimo en
esforzarse. El tiempo entre hombres es una opción segura para el
tipo que no tiene prisa por poner en marcha su lado femenino. Sus
colegas no le plantarán cara, ni le acosarán para que se abra o
actúe.
En el terreno amoroso da muchísimo trabajo. Lo suyo no son las
relaciones a largo plazo y, más o menos, se conforma con las
relaciones superficiales hasta que sus amigos comienzan a sentar
cabeza. Le cuesta interpretar y satisfacer las necesidades
emocionales de las mujeres. No quiere ocuparse del rencor que
provoca debido a su incompetencia emocional por lo que crea una
distancia entre él y cualquier compañera y se vuelve indiferente y
frío.
Si se recluye y no habla quiere decir que está pensándose las
cosas. No se siente aliviado al expresar sus problemas, que
siempre serán asuntos mundanos y ordinarios, y se preocupará si se
ve incapaz de tratar los problemas de los demás. En el fondo, teme
decepcionarlos. Para relajarse lee las páginas de deporte o ve la
televisión. Suele sentirse mucho mejor a medida que el partido
transcurre y ése es el motivo por el que el deporte es tan
importante para él.
[pág. 81]
114
(1) El gancho
Sé una coleguita. Sé la animadora de su equipo. Sé dura. Para
romper el hielo, invítale a una cerveza. Si quieres sexo esa misma
noche, cómprale una bolsa de cortezas de cerdo. Enseña piernas y
escote; le van los culos y las tetas. Aparenta que eres de buen
beber. Nunca le dejes en ridículo delante de sus amigos. Invítale
a salir, pero la mejor reacción será en privado. Dile que le amas
tal y como es.
(2) En pareja
Olvídate de las pantuflas de gatita y prepárate para ser la chica
de los recados. No hagas preguntas, no exijas, no critiques y no
esperes nada. Prepara carne con verduras los domingos. Ofrécete a
organizar una salida nocturna con chicas cuando sus colegas vengan
por casa. Enséñale la multiplicidad del amor: sé el chef en la
cocina, una dama en el salón y una puta en la cama. Le despertarás
la curiosidad. Nunca le pidas que te acompañe a ir de compras.
¿Estás harta de cocinar, limpiar y ser la chica de los recados?
Haz la maleta y lárgate. Está acostumbrado a que las relaciones
acaben así por lo que es poco probable que te persiga. Sé
valiente. Cambia de bar.
Disfruta de la juventud, pero no esperes que cambie nada.
115
[pág. 83]
El filósofo
El arquetipo: El Amante, buscador de significados, analista de la
vida, está sumido en sus pensamientos
El personaje
Qué imagen da
Cómo reconocerle: Le oirás antes de verle. No viste con esmero y
da la impresión de ser animado e intenso gracias a una serie de
gestos que refuerzan su técnica de debate a la antigua. Te tomará
como rehén si entras en un juego psicológico con él.
Expresión/Registro verbal: Se emociona cuando intenta defender su
punto de vista, inteligente y astuto, desenfadado, cínico si no
está de humor.
Frase para iniciar conversación/ligar: “¿Quién eres? Me gustaría
saber por qué eres como eres”. “¿Cómo definirías el amor?” “¿Te
gustaría saber el significado de la vida?”
Inquietud vital: Cuestionarse la existencia una y otra vez…
Accesorios: Batín para los momentos de cavilaciones profundas,
pipa, gafas, libros sobados y con las esquinas dobladas, cintas
para aprender griego antiguo, estilográfica, cartera, zapatos de
piel muy gastados, sillón muy cómodo y juego de ajedrez.
Profesión: Escritor, investigador, profesor, periodista
comprometido, comentarista social.
Historial amoroso: Sólo contempla a las estudiantes de su escuela
de pensamiento.
116
Canción: “Imagine”, de John Lennon.
Fantasía: Seducir a todas las mujeres ignorantes, viajar en el
tiempo a través de los siglos con Afrodita, la diosa del Deseo, al
timón del Culto a la lógica.
La sombra
Malas costumbres: No te mira cuando habla, se hurga la nariz y
habla entre dientes.
Lo que no dice/Secretos y silencios: “Soy terriblemente aburrido.
Intento encontrarle el sentido a todo. Mi momento preferido para
pensar es cuando estoy en el váter. Mi espacio mental es sagrado.
Nunca quito el polvo”.
Agenda oculta: Que le tomen en serio.
Mantra filosófico: No vale la pena vivir una vida sin
interrogantes.
Accesorios: Caja de galletas y tetera, cobertizo, videojuegos para
cuando tiene la mente cargada, las obras completas de Platón.
Barómetro energético: Este tío está tan acostumbrado a meditar
sobre el significado de la existencia que prácticamente pasa de
hacer otra cosa. Pero compensa la falta de presencia física
leyéndote poemas y recortes de periódico interesantes.
Futuro de la relación: Desesperante. Este tipo está siempre
analizando la química del romance en espera de sacar tajada.
Canción: “The Dark Side of The Moon”, de Pink Floyd.
Rendimiento sexual: ¡Lo que anhela es un orgasmo mental, no
genital! Ponte la toga y combina los dos.
117
[p. 84]
Es un introvertido a quien poca falta hacen los estímulos
externos. Su marco de creencias y expectativas le lleva a estudiar
los procesos del pensamiento y el significado de la vida. Le
inspira el arte, la psicología, la literatura y los clásicos: le
encontrarás en el museo, consultando manuscritos antiguos o en la
biblioteca, leyendo a filósofos como Aristóteles o Jean-Paul
Sartre.
Se considera distinto del resto de la gente, y lo es. No
abundan este tipo de hombres. Vive en un mundo de conceptos.
Adquiere información para defender su mundo interior. Planifica y
articula sus argumentos para controlar el mundo exterior. Es un
orador con talento: insistente y flexible en su enfoque, se le da
bien convencer al público de sus ideas. Oirás los piñones de su
cerebro girando y runruneando mientras charlas con él. Posee una
capacidad crítica excepcional aunque, por desgracia, no siempre la
traduce en acciones. Prefiere las ideas y la teoría a la práctica.
En muchos sentidos, es más bien soñador. Se contenta con vivir en
sus sueños porque todos tienen sentido.
Su compañía es amena si no se pone muy melancólico. Es un
hombre lleno de sugerencias sobre cómo vivir la vida. Literalmente
da rienda suelta a la lengua. De día le encontrarás en la
cafetería y por la noche en el bar del barrio; vuelve a mirar a
ese hombre solitario que da de comer a los patos en el parque.
118
Quizás esté solo pero nunca temerá entablar conversación con casi
cualquier persona que le aborde. No es quisquilloso. No se
considera superior aunque lo más probable es que quiera
convencerte de su forma de pensar. Busca a una persona admirable
como él con la que relacionarse. No es avaricioso y los bienes
materiales no le parecen demasiado estimulantes. Es considerado y
afectuoso. Compartirá contigo todo lo que tenga.
(1) Se considera distinto del resto de la gente, y lo es.
[p. 85]
Es una persona crédula. La verdad es su absoluto, más que un dios
o una energía superior. Constantemente compara su búsqueda del
significado de la vida con ese absoluto. Le encanta ser racional y
analítico. Este tipo vive en su mundo. Para él es fundamental
entender las raíces de la religión, la sociedad, la cultura y el
amor. Su mente bulle de ideas, teorías y, en ciertos casos,
aventura. Le encanta hacer planes e imagina un futuro brillante
para él en su ávida búsqueda de la verdad. Las expectativas le
dejan profundamente decepcionado cuando las cosas no salen bien,
pero su capacidad para recuperarse emocionalmente le vigoriza y
sus pasiones son más conceptuales que sentidas. En su mente
alimenta la ilusión de la falta de apego.
Este hombre tiene pocas necesidades emocionales o posesiones.
No valora tanto la riqueza material como el entendimiento
119
filosófico. Esto es lo que le excita. Es su único objetivo.
Disfruta creando y desarticulando su propio sistema de
valores. Justifica sus cambios o adaptaciones constantes de
actitud como la respuesta inevitable a la información nueva o
revisada. Su búsqueda de la verdad se enmarca en unos valores
morales y éticos fuertes, pero hace de abogado del diablo cuando
se plantea la racionalidad del bien y el mal. Considera que el
estrecho margen que los separa es el trampolín de todo el
potencial humano. Los filósofos sociales son caritativos, se
interesan por la política y les encanta enseñar o ser el centro de
atención. Los filósofos idealistas tienen una percepción de la
vida más profunda e intuitiva, son más apasionados y se preocupan
más por el aspecto espiritual de la existencia. Ambos luchan por
vivir en un mundo idealizado y les fascina la noción del orden
cósmico y los orígenes del universo.
El filósofo reconoce que existen principios eternos que guían
el espectáculo pasajero al que llamamos vida. Lo irónico del caso
es que este tipo necesita una señal para encontrar su espíritu. Y
sólo la verá cuando se libere de la constante actividad mental y
renuncie a invertir el tiempo en analizar cuanto le rodea.
(1) En la vida real
El cosmólogo, antropólogo social, el que pontifica, agnóstico,
borracho del bar
[pág. 86]
120
El arte del amor
El filósofo anhela que le toquen. Quiere experimentar lo que
siente en su mundo interior de preguntas y conceptos. Como se
siente atraído por las personas que se interesan en él y son
interesantes, desea reunir todas las piezas de su ser fragmentado
y unirlas en el entendimiento del amor verdadero. Sueña llevar una
vida relacionada con su mundo interior a través de los
sentimientos, y del mundo exterior, a través de sus relaciones con
la gente. Le estimulan los mitos antiguos clásicos de la creación,
Eros, por ejemplo, que se interpreta como la personificación del
impulso de unir el amor pasional y romántico, la necesidad,
universal e inconsciente, de llegar a la fusión, la totalidad, la
plenitud.
El hombre filósofo siempre intenta ser encantador. Suele ser
romántico, aunque dentro de este grupo también haya escépticos. En
el amor busca el flechazo. Espera a la mujer que lo deslumbre con
su integridad y flexibilidad de pensamiento. Quiere una mente
refinada con la que poder juguetear. El hecho de tener pareja le
relajará y le dará una razón para vivir en sus sentimientos en vez
de en su mente. Pero el tipo pensante puede acabar preocupado por
lo que no entiende. Nunca está satisfecho con lo que sabe y desea
saber más, lo cual le hace inquisitivo en el amor.
Si se enamora de verdad, el intelecto pasará a un segundo
plano, después de este deseo y dedicación nuevos. Su asombro pasa
de los hechos a los sentimientos. La ignorancia se considera el
único mal, así que cuidado con su actitud posesiva. Querrá saberlo
121
todo de ti y le costará aceptar que las cosas son sencillas y
francas, incluso cuando lo sean. Irá perdiendo idealismo a medida
que pase a un plano inferior de la conciencia y se torne humano
como los demás. Para que el filósofo llegue a un plano superior en
el amor, debe sentir la dicha del amor así como su dolor y sus
aspectos más conmovedores. Cuando lo consigue, este tipo te
trasladará a la cuarta dimensión, la del tiempo. La compañera que
acepte y comparta sus abstracciones avivará su estado de dicha.
[pág. 87]
(1) El gancho
A este tipo le gusta que le escuchen. Posee un humor cáustico.
Rétale con tu agudeza. Esta paloma solitaria será tan sutil en el
amor que tendrás que hacer de detective para interpretar las
pistas. Sé discreta. Parece tener las ideas muy claras pero seguro
que es tímido. Le cautivará más una mujer que tenga curiosidad por
la vida que una mujer despampanante.
(2) En pareja
Más que amante apasionado, el filósofo es un compañero
interesante. Será un amigo fantástico y ésa es una buena base para
una relación amorosa. Evita no respetar sus valores. Si eres más
extrovertida que él, sé consciente de su introversión. Plantéate
la diferencia como niveles de energía, sobre todo en un entorno
social. Por encima de todo, entabla una relación fuerte con tu
122
hombre antes de tratar temas controvertidos. Este tipo odia que no
estén de acuerdo con él; la armonía es el camino a seguir.
Si no quiere dejarte marchar, moléstale hablando demasiado,
bajando el nivel de tus teorías sobre la vida e invadiendo sus
momentos de tranquilidad y intimidad. Le volverás loco. Es fácil
conservar la amistad del tipo filósofo: compartiréis un pasado de
ideas importantes. Pero lárgate si su escepticismo ensombrece el
futuro.
El viaje más largo es el que va de la cabeza al corazón.
[p. 89]
El hombre uniformado
El arquetipo: El Héroe, se enfrenta al peligro, respeta las
jerarquías, asume responsabilidades
El personaje
Qué imagen da:
Cómo reconocerle: Le reconocerás de inmediato a no ser que esté en
una operación secreta. Le encontrarás tras las líneas enemigas, en
zona de guerra, en la escena del crimen, salvando vidas o
rescatando a gatos encaramados a árboles.
Expresión/Registro verbal: Es un hombre de pocas palabras, su tono
123
tipo megáfono y pronunciación clara transmiten orden y
disciplina. Es perro ladrador pero poco mordedor.
Frase para iniciar conversación/ligar: “Por esta vez será sólo una
advertencia. Bien, ¿qué te parece si vamos a cenar?”
Inquietud vital: Sentirse útil. Mantener el statu quo.
Accesorios: Botas relucientes, galones, chaleco antibalas,
pantalón de cuero reglamentario, ropa de camuflaje, reflectante,
casco o sombrero, maquinilla para raparse el pelo al 1, manguera,
porra, munición, navaja del Ejército suizo, el boca a boca.
Profesión: Bombero, policía, militar de las fuerzas armadas,
paramédico, miembro de un equipo de rescate aéreo o marítimo,
guarda de seguridad.
Historial amoroso: En el pasado ha tenido que quitárselas de
encima como si fueran moscas; actúa rápido cuando suena la alarma.
Canción: “Heroes”, de David Bowie.
Fantasía: Responder a la llamada del deber, salvar el mundo y
volver a casa con su modelo preferida vestida con uniforme y
liguero, preparada para hacerle un strip-tease.
La sombra
Malas costumbres: Suelta muchos tacos, impone demasiada disciplina
al cachorrito, confunde el baile con las marchas, se le olvida
quitarse el uniforme después del trabajo y está de mal humor
cuando le toca el turno de noche.
Lo que no dice/Secretos y silencios: “No, estoy ocupado” a una
señorita en apuros.
124
Agenda oculta: Que respeten su autoridad. Ser una fuerza a tener
en cuenta. Estar bien considerado dentro de la comunidad.
Mantra filosófico: El honor es la primera y última vocación.
Accesorios: Asesor emocional, petaca, supositorios, nudilleras de
metal, vídeos de héroes de acción, desnudos en la puerta de la
taquilla, programa de entrenamiento, hierro, almidón, recuerdos de
batalla, cartas del frente.
Barómetro energético: Es difícil de dominar cuando tiene la
adrenalina subida. Mantiene la cabeza fría en momentos de crisis,
cambia de marcha para subir la temperatura entre las sábanas.
Futuro de la relación: Si no soportas el calor, sal de la cocina.
Los turnos en el trabajo y el tiempo pasado fuera de casa aumentan
la presión en las relaciones.
Canción: “If Everybody Looked The Same”, de Groove Armada.
Rendimiento sexual: Sé realista pero no pierdas la esperanza.
Máxima energía + mínima ansiedad = el Big Bang. Cuidadosamente
seleccionado, es un oficial y caballero.
[p. 90]
El hombre uniformado vive su vida de acuerdo con las normas, que
aseguran su puesto en la sociedad. Es experto en reinstaurar la
ley y el orden y le satisface el trabajo bien hecho. Posee una
extraordinaria habilidad para actuar primero y preguntar después.
Valora mucho la disciplina y ha tenido que cuestionar sus
instintos básicos para sobrevivir a los rigores de la formación:
sobreponerse a sus debilidades y desarrollar sus puntos fuertes le
125
ha compensado en situaciones en las que tenía todas las de perder.
Es un contrincante feroz en constante estado de alerta, con un
sentido de la supervivencia muy desarrollado, su excepcional
valentía le permite actuar con eficacia frente a la adversidad.
Cuando surge una situación amenazadora, automáticamente da
prioridad a la seguridad de los demás en vez de a la suya.
Ha descartado la idea de que la profesión elegida no sea más
que un trabajo. Por el contrario, es realista sobre el lado oscuro
de la naturaleza y las manifestaciones violentas de la crueldad
entre los hombres. Para el hombre uniformado hay un conflicto
interno entre el bien y el mal. Valora el enfoque moral y honesto
ante la vida. Lucha por no corromperse siguiendo los dictados de
su conciencia.
Su forma de entender el caos y las matanzas alterará sus
percepciones y expectativas. Quizá intente ver la vida como una
lucha en la que las víctimas salen bien paradas y él es el
protector victorioso. Pero, ¿quién controla al controlador? La
integridad del tipo se ve constantemente cuestionada o perturbada
por las circunstancias. Que logre equilibrar su experiencia y siga
siendo compasivo y no sentencioso dependerá de su fortaleza
emocional.
Para algunos este dilema se convierte en una preocupación
constante. Si está predispuesto al sentimiento de culpabilidad, se
comerá el coco pensando en cómo podía haber actuado con mayor
eficacia, y esta interiorización resultará contraproducente. El
tipo necesita ver las ventajas de conocerse a un nivel más
profundo. A la larga, le resultará más útil estudiar sus
126
reacciones con la misma intensidad que dedica al trabajo que tener
una imagen de sí mismo poco realista. Aunque se toma la vida con
seriedad cuando es necesario, posee sentido del humor para reducir
la tensión en sus momentos de crisis.
Está preparado para trabajar en grupo y éste le ofrece
respaldo. Si quiere ascender en su trabajo también es importante
que sea un miembro competitivo del grupo. Pero la auto-motivación
es imprescindible para mantener la moral alta y vivo el espíritu
de equipo.
(1) Posee una extraordinaria habilidad para actuar primero y
preguntar después.
[p. 91]
El hombre uniformado intenta entender el amor y el odio que
presencia día tras día. Su experiencia le ha mostrado en repetidas
ocasiones que la amabilidad es necesaria, que la muerte y la
destrucción deben ir seguidas de la restauración y la renovación.
Esta es la clave de su existencia: no puede funcionar sin creer
que es posible mejorar la vida. Esto es lo que le empuja a luchar.
Si se le observa desde la distancia en los momentos más
difíciles se ve cómo se protege a sí mismo en una situación
complicada: es capaz de separar la amenaza mental del daño físico
en un mundo violento. Pero no te engañes. Se lleva las secuelas
emocionales a casa en los recovecos de su mente. Posee más
experiencia sobre la fragilidad de la condición humana que la
127
mayoría: más conocimiento sobre la desesperación y la conmoción de
las vidas destrozadas. Reconoce que el dolor y el sufrimiento son
inevitables y el precio es la pérdida de inocencia. Si se viera
obligado a negarlo, tendría que convertirse en un cínico para
sobrellevarlo.
Quizá luche contra la percepción que de él tienen otras
personas. Sabe que debe cambiar su estilo y lenguaje para
adaptarse a cada individuo. Descarta la idea democrática de que
interactuar con todo el mundo de la misma manera,
independientemente del rango y la clase, te convierte en un
ciudadano modelo.
Es un hombre que debe enfrentarse a claros juegos de poder por
parte de quienes están en contacto con él. Muchos se sienten
alienados, ansiosos y suspicaces ante la autoridad. Como guardián
del orden, debe tranquilizar a la gente demostrándole los
beneficios de su actuación. A veces utiliza el tacto y la
persuasión para conseguir lo que quiere. Pero su formación también
le ha enseñado el valor de la audacia, que disimula la timidez y
mantiene la impresión de poder. Esta aparente confianza en sí
mismo atrae tanto como repugna a otras personas. No obstante, la
psique de este tipo funciona gracias a la aprobación y el
reconocimiento; detrás de la placa hay un ego hambriento que debe
alimentarse. Necesita ser respetado y respetar a sus iguales y
superiores. La subordinación, la responsabilidad y cierto grado de
conformidad están presentes en toda percepción de jerarquía.
(1) En la vida real
128
Miembro del Ejército Territorial o la Legión Británica, gorila,
guardia de tráfico, enfermero
[pág. 92]
El arte del amor
Es un defensor de la fe. Dada su intención de hacer el bien y de
mantener la estructura de la sociedad, no le interesa ver la
política de control y dominación inherente. La tan extendida
opinión de que hay muy pocos individuos capaces de utilizar el
poder de forma pacífica queda obstaculizada porque los tipos
uniformados reconocen la necesidad de un sistema de valores que
justifique la causa. Para luchar contra el enemigo debes creer que
defiendes lo correcto: así pues, el fin puede justificar los
medios. Pero no todo el mundo comparte esta opinión, por lo que le
aplauden amplios sectores de la comunidad y unos pocos le hacen el
vacío. Si ha notado el rechazo de la sociedad, quizá se le haya
endurecido el corazón.
Este tipo es duro por fuera y blando y vulnerable por dentro.
Quizá evite el amor y luche por mantener a la gente que se
preocupa por él a una distancia emocional segura. Puesto que está
preparado para neutralizar las reacciones emocionales que puedan
inmiscuirse en la labor que esté desempeñando, es difícil acceder
a él. Siente la necesidad de controlar su entorno, de dedicar
tiempo a readaptarse después del drama diario y, no obstante, este
experto en reinstaurar el control quizá albergue el deseo secreto
de liberarse de todas las limitaciones. A un nivel más básico,
129
para él la seguridad en una relación resulta indispensable. Es un
hombre que necesita organización en todos los aspectos de la vida:
fuera del marco correspondiente se siente amenazado.
Es consciente del efecto que causa en las mujeres. Algunas lo
ven como un protector poderoso. Una de sus fantasías son los
hombres uniformados: pueden considerarlos objetos sexuales o
idealizarlos como homenaje a la masculinidad. Ambos casos
encenderán su propia fantasía heroica: semental, invencible y
totalmente irresistible, pero bajo este machismo late un corazón.
En realidad, no se le da bien lo de estar emocionalmente presente.
Tiende a desconectar cuando se le preguntan sus sentimientos más
íntimos. También le cuesta encajar las críticas y es probable que
se haga el duro para evitar que descubras su punto débil. Tiene
que readaptarse para dejar espacio a la intimidad en una relación.
Pero, a pesar de su respuesta “lo tomas o lo dejas” ante el amor,
valora la verdadera camaradería.
[pág. 93]
(1) El gancho
Enseña las piernas, ¡aunque sea en invierno! Pide ayuda y pon cara
de desesperada. Le encanta sentirse necesitado y que controla la
situación. Deja que se lo crea. Asiente y sonríe. Él andará a la
caza de una mujer con brillo en la mirada, alguien que haga que
aflore su lado rebelde. Enciende su fuego con llamas de dulzura.
Necesita muchas palabras tranquilizadoras: tras su fachada galante
130
hay un hombre que tiene ganas de hacerlo lo mejor posible.
(2) En pareja
Haz que vuestra casa sea un lugar maravilloso al que volver. No te
preocupes si su necesidad de control es abrumadora: puedes
enseñarle tácticas nuevas. Tendrás que consolarle si está abatido.
Su compromiso con el trabajo puede resultar excesivo en algunas
ocasiones. Asegúrate de que vuestros dos mundos no chocan, el suyo
es prácticamente inamovible. Sé su punto de apoyo, te lo
agradecerá.
¡No dejes una dirección en la que comunicarse contigo!
Tira su reglamento. Diseña tu propio código de conducta, haciendo
el amor y no la guerra.
[pág. 95]
El adicto en fase de recuperación
El arquetipo: El Héroe, huérfano herido, superviviente, Ícaro
volando hacia el sol
El personaje
Qué imagen da
Cómo reconocerle: Nunca se sabe.
131
Expresión/Registro verbal: Difícil de descifrar para las no
iniciadas en el vocabulario de los procesos de recuperación. Le
encanta parecer profundamente psicológico, lo cual puede dejarte
totalmente confusa.
Frase para iniciar conversación/ligar: Alcohólico = “¿Vamos a
tomar una copa? ¡No!” Adicto al sexo = “Espero que no te importe
que te lo diga pero se te ve la raya de los panties”. Drogadicto =
“¿Qué has dicho, que si quiero ir a la playa o si quiero una
raya?” Co-dependiente = “¿Café, té o yo?” (¡Elígeme, elígeme!)
Inquietud vital: Fundar un hogar al borde del acantilado.
Accesorios: Lista para encuentros con 12 pasos a seguir,
patrocinador, psicoanalista, los colegas de Alcohólicos Anónimos,
espejo, vitaminas, botella de agua, sonrisa tipo “nueva vida”,
tarjetas de inspiración y saco de arena.
Profesión: El espectáculo debe continuar y, si se le da la
oportunidad, volverá a brillar.
Historial amoroso: Una ex mujer que nunca llegó a conocerle y una
nueva compañera que lo está intentando.
Canción: “Golden Brown”, de The Stranglers.
Fantasía: Alcohólico = ser bebedor social. Adicto al sexo =
reencarnarse en conejo. Drogadicto = llegar a tener un orificio
especial para pincharse. Co-dependiente = reencarnarse en hermano
siamés.
La sombra
Malas costumbres: Se desahoga durante la cena y tarda siglos en
132
animarse. Te planta por una recién llegada al grupo.
Lo que no dice/Secretos y silencios: “Sálvame. No me dejes nunca.
Si te engaño, tú harás lo mismo”.
Agenda oculta: Justificar que es un descontrolado. Manipular los
malentendidos con una perspicacia recién descubierta. Hacer que
sus sentimientos sean más prioritarios que los tuyos.
Mantra filosófico: Vive la vida siguiendo las pautas que te marca.
Accesorios: Gafas de sol, pastillas de menta, el teléfono de la
línea de crisis, tabletas de chocolate, libros de recuperación sin
abrir, cintas para curar al niño que lleva dentro, oso de peluche
que nadie quiere, familia disfuncional, antecedentes penales.
Barómetro energético: Podría pasarse 24 horas hablando.
Físicamente se queda fuera de juego a las diez de la noche. Mejora
emocionalmente cuando ha ido a una reunión.
Futuro de la relación: No el primer año, querida.
Canción: “Walk On The Wild Side”, de Lou Reed.
Rendimiento sexual: La lujuria recién despertada hace que sea una
apuesta segura en la cama. Es consciente de sus sentimientos y de
los tuyos.
[pág. 96]
Los heridos tienen que recorrer un largo camino hasta llegar a
buen puerto. Se trata de una especie poco común que acaba teniendo
dos vidas: la que desearía no haber tenido nunca y la que todavía
le queda por vivir. Salió del fondo poco profundo del pozo de los
133
genes jurando no ser nunca como su padre/madre adicto/a pero la
historia tiene la extraña peculiaridad de repetirse. Durante años
creyó que era único y especial. Se abstuvo de llevar una vida
corriente: la gente era un mero instrumento que utilizar para su
adicción. Ahora su sueño es rebobinar las cintas de la vida y
actuar de forma distinta. Pero debe llevar sus años perdidos en el
bolsillo interior de la chaqueta: nunca le dejan. Perseguido por
el pasado, cargado de sentimientos complejos, está siempre
desconcertado. La adicción es tanto una obsesión mental como una
compulsión física. Sería tan fácil volver a los hábitos del pasado
y recaer…
Lo que convierte a este tipo en alguien tan especial es su
decisión de salvar su propia vida. Ha resuelto dejar de alimentar
su adicción. Y luego parar. Después de tomar esta decisión, debe
luchar siempre contra la tentación, día tras día. Este tipo entra
en fase de recuperación con poca autoestima y, al cambiar de
actitud, descubre una nueva seguridad. La adicción ha desempeñado
el papel de amante, eliminando el vacío del sentimiento. ¿Por qué?
Porque la vida era muy dura. La única escapatoria era la muerte y
asustaba demasiado. Así que probó otro camino pero no vio que,
espiritualmente, acarreaba las mismas consecuencias. La adicción
lo dejó anestesiado. Le permitió escapar de todo sentimiento
verdadero y detuvo su crecimiento emocional. Adicción: el lento
camino hacia la muerte.
Es un hombre en transición. Lo que le salvó fue que en cierto
momento reconoció el vacío de su existencia. Comprendió que no
había respuestas, que nunca las ha habido y que todos viajamos en
134
el mismo barco. Así que se tragó su orgullo y se enfrentó cara a
cara con los demonios que había creado. Se rindió para empezar a
ganar.
(1) Ha resuelto dejar de alimentar su adicción. Y luego parar.
[pág. 97]
Este hombre ha caído, y en el espacio nadie oye tus gritos. Su
caída empezó por la desilusión y acabó en desesperación. Los
excesos desempeñaron un papel importante en su pasado.
Autocompasivo e ingenuo, se alimentó durante demasiado tiempo de
las tentaciones del mundo, sin reconocer las consecuencias de sus
acciones. Inconscientemente puso a prueba su mortalidad con una
estrategia de dolor auto-inflingido. Ahora opta por un único
objetivo, el de mantenerse a flote.
La rehabilitación implica rescatar al niño interior, perdido y
olvidado. Para ello necesita recuperar la autonomía y la
seguridad, utilizando la autodisciplina, tan vital para el
bienestar emocional y espiritual. Pasará tiempo hasta que el alma
de este tipo resurja: es como si hubiera pasado por el quirófano
sin anestesia. De repente se ve inmerso en el mundo real: un
lugar en que las emociones se sienten y expresan. Todos los
programas y centros de tratamiento disponibles tienen el mismo
objetivo: dotarlo de una meta en la vida, lo cual va acompañado
del reconocimiento de lo que se ha perdido. Eso le enoja, consigo
135
mismo y con el resto del mundo. Y la sensación no desaparece así
como así. Él es el león que llora y el que ruge.
Pronosticar su futuro a largo plazo puede resultar desastroso.
Si teme que cada día sea arduo, no será capaz de avanzar. Así pues
aprende a ser moderado consigo mismo y a relacionarse con personas
que comparten su aflicción. Oyendo hablar sobre el dolor de otras
personas, se pone en contacto con el suyo propio.
La transformación se produjo cuando se decidió por la
recuperación, cuando se armó de la comprensión necesaria para
cuidar de y curar sus propias heridas con el poder del auto-
perdón. Con el tiempo su alma se abre a las posibilidades de la
interacción y el compartir y se vuelve considerado. Cuando esto
ocurre, tiene el potencial de ser una persona extraordinaria.
(1) En la vida real
Discreto; es el tipo que dice: “No, gracias”.
[p. 98]
El arte del amor
Cualquier hombre que haya estado en el infierno y consiga rehacer
su vida vale su peso en oro. Ha aprendido a despreciar lo que ya
no le sirve para lograr su objetivo. La adicción le ha roto el
corazón pero sigue deseando amar. Se encuentra en las primeras
etapas del descubrimiento personal.
Si te sientes atraída por un adicto en fase de recuperación,
espera el momento adecuado. Probablemente su adicción fomentara la
136
mayor de las soledades y el hecho de ir despojándose de las capas
de protección, una por una, resulta doloroso. Hasta que no supere
su ira para con el pasado no podrá mantener una relación en el
presente. Muchas situaciones de la vida diaria funcionan como
catalizadores, lo cual le causará dolor. Es crucial que se haya
armado de la valentía suficiente para enfrentarse a ellas sin
echar a correr o recurrir a otras personas para que le encuentren
la solución.
Este hombre será un cometido temible si está contigo por las
razones equivocadas. Según su actitud ante el amor sabrás lo
preparado que está para comprometerse. Si está obsesionado consigo
mismo y es desconsiderado, entonces es casi seguro que sigue
temiendo el reto de una relación.
En cuanto esté en paz consigo mismo podrá relacionarse con
otras personas sin temor a que lo juzguen. Se trata de un hito
importante, un indicio de que empieza a aprender a amar.
Al aceptar su fragilidad y cobardía humanas se ha
transformado. Podrá volver la vista atrás y sorprenderse de lo
lejos que ha llegado. El adicto sigue corriendo el peligro de
intentarlo con demasiada insistencia y acabar sobrecompensando.
Será vulnerable, por lo que necesita ser reconocido y cuidado de
forma no amenazadora. Pero agradece la posibilidad de experimentar
lo que es estar enamorado, algo que hace con prudencia y cuidado.
[pág. 99]
137
(1) El gancho
Prepárate para ser seducida, acechada o silenciada, es un tipo con
múltiples opciones. Utiliza tu mejor criterio para calibrar si
está dispuesto a arriesgarse: es más que probable que perdiera a
gente por el camino. Dale tiempo y espacio. Querrá enamorarse de
verdad, asegúrate de que tienes capacidad para escuchar y mucha
paciencia. Si posees una personalidad reactiva, piensa antes de
hablar.
(2) En pareja
Para mantener esta relación necesitarás un vínculo fuerte, líneas
de comunicación abiertas y fronteras claras. Tienes que estar
disponible para él y sus constantes confesionarios: querrá
compartir sus progresos contigo. Pero reserva tiempo para ti misma
y tus sentimientos. Quizá desee evitar situaciones delicadas, pero
tienes que utilizar un amor a prueba de bomba para darle
seguridad.
Su peor pesadilla será que tú le abandones: los intentos de darle
la espalda son sinónimo de rechazo. Querrá que se lo trague la
tierra. El hecho de que se valga por sí solo dependerá de hasta
qué punto cree en él mismo. Tómate el tiempo necesario para
tranquilizarle. No te sientas culpable. Si desaparece del mapa,
cúbrete las espaldas.
138
La clave está en la aceptación.
[p. 101]
El hombre del mundo del espectáculo
El arquetipo: El Mago, buscador de emociones, actúa ante el
público, un egocéntrico sobre ruedas
El personaje
Qué imagen da
Cómo reconocerle: Presenta buen aspecto. Le encanta observar y
evaluar a la competencia. Gestos manuales ampulosos, fanfarrón al
bailar, sacude el cabello, mohín y risa bien calculados; todo ello
apunta a que desea ser el centro de atención.
Expresión/Registro verbal: Diálogos extraídos de viejas películas
en blanco y negro. Imita a sus héroes y espera impresionar.
Recitará un soneto o fingirá que toca la guitarra después de una o
dos copas. Gran conversador telefónico.
Frase para iniciar conversación/ligar: “¿Quieres ser mi primera
actriz?” “Puedo ayudarte con la cinta de demostración”.
Inquietud vital: Que le amen por sus actuaciones.
Accesorios: Agente, carné del sindicato de actores, fotos de
primeros planos, rollo de película, cintas de demostración,
zapatillas de ballet, mallas, guiones, partituras, maquillaje
artístico, familiares para llenar la primera fila su primera
noche.
Profesión: Actor, bailarín, mimo, cómico, payaso, cantante,
139
músico, presentador.
Historial amoroso: Muy largo. A este hombre de talento le han
llovido las ofertas. Sabe cuándo mostrar su encanto, cuánto y con
quién. Admirado desde lejos, ha dado un taconazo para
entretenerlas.
Canción: “Let Me Entertain You”, de Robbie Williams.
Fantasía: Aplauso, aplauso, aplauso, risas, gemidos, gruñidos, más
aplausos, aplausos, aplausos.
La sombra
Malas costumbres: Mucha ansiedad, inestabilidad. Se mira en todos
los cristales para ver su reflejo, busca los cumplidos, ensaya sin
cesar, flirtea con sus compañeras de rodaje, le ponen histérico
las críticas negativas, se acuesta tarde y se le acaban los
cartones de leche.
Lo que no dice/Secretos y silencios: “Basta ya de hablar de mí…
¿qué opinas de mí? Mentí sobre mi cumpleaños. Las estrellas me
vuelven loco”.
Agenda oculta: Encontrar a alguien que lo haga famoso durante más
de quince minutos. Ser insolente y que se lo permitan. Lograr que
la gente crea en él.
Mantra filosófico: No puedo vivir sin actuar. Lo llevo en la
sangre.
Accesorios: Pata de conejo para la buena suerte, nombre artístico,
ataques de pánico, pañuelos de papel, recortes de prensa cursis,
colección de autógrafos, adicción a las telenovelas, groupies,
140
planta del dinero.
Barómetro energético: Cuanto más trabaja, más actúa. Suele ser
extrovertido y aprovecha al máximo sus momentos “en escena”.
Futuro de la relación: Nunca sabe a dónde le llevará su camino o
si en su barco hay sitio para dos.
Canción: “… Baby One More Time”, de Britney Spears.
Rendimiento sexual: Promete mucho pero el resultado depende de su
temperamento cambiante. Se siente a gusto en el contacto cuerpo a
cuerpo así que hazle una jugarreta y píllale por sorpresa.
[pág. 102]
El hombre del mundo del espectáculo tiene un objetivo: quiere ser
consumado e ingenioso en todo lo que hace. Utiliza la auto-
evaluación y la crítica constructiva para mejorar su talento y
perfeccionar sus habilidades. Pone de manifiesto su vena
perfeccionista con la atención al detalle. Es capaz de examinar
con la lupa de la autocrítica cada minuto de su actuación,
centrándose despiadadamente en detalles que otros quizá no hayan
ni advertido.
Como hombre del mundo del espectáculo, este tipo está
acostumbrado al rechazo. Pero cuando se produce se siente
incómodo. Una audición fallida o una crítica feroz pueden poner en
peligro su seguridad y hacer que corra a refugiarse. Cuando la
situación le resulta insoportable, se recrea en elogios pasados y
halagos actuales hasta recuperar la fe. Entonces se desempolva y
141
vuelve a salir al exterior.
Si permite que la ambición ciegue su visión creativa, será
implacable en la búsqueda de fama y fortuna. Nada ni nadie se
interpondrán en su camino. Olvídate de luchar en la habitación de
un piso compartido: quizá empezara allí pero seguro que no
terminará en el mismo sitio. Esta feroz determinación demuestra
que el tipo tiene la fuerza de voluntad suficiente para
materializar sus sueños. Cree en su talento. Esta creencia le
ayuda a ser optimista frente a la competencia. Y, al fin y al
cabo, el juego se llama competencia. Tiene que ser valiente y
enfrentarse a distintos trabajos para sobrevivir en el mercado.
Cualquier trabajo es mejor que ninguno.
No hay duda de que a este tipo le encanta ser el centro de
atención. Odiaría diluirse en un segundo plano, sin ser
descubierto, desconocido, solo. Cree que tiene un don: algo que
otras personas querrán experimentar. Los aplausos le encantan. La
oportunidad de explorar y expresar la experiencia de la vida a
través del medio escogido resulta de vital importancia. Esa es la
fuente de su vida: una inspiración que le produce una gran
satisfacción. No para ni un solo momento, planea la próxima
producción, el siguiente espectáculo, la siguiente actuación.
(1) Cree que tiene un don: algo que otras personas querrán
experimentar.
[pág. 103]
142
Como miembro del mundo del espectáculo, este hombre debe usar sus
habilidades para comunicarse. Puede convertirse en quien quiera.
En las actuaciones exterioriza su talento para la
conceptualización y eso es lo que transmite a su público. Cuando
actúa, transmite su visión, su iluminación. Atrae a las personas
al mundo de su imaginación, invitándolas a creer que ésa es la
realidad, aunque sólo sea durante un momento. Apela directamente a
las emociones de su público. Puede deleitar, inquietar, indignar o
mortificar pero, independientemente del sentimiento que genere,
resulta evocador. La gente responde a la revelación que cree estar
presenciando. Para establecer esta relación, debe encontrar un
punto de calma interior. Debe estar centrado y concentrado, y su
espíritu cobra vida cuando ejecuta su magia.
La labor que desempeña este tipo le permite adoptar distintas
personalidades: masculina o femenina, fuerte o débil, feliz o
triste. Si quiere resultar creíble, debe ser capaz de adaptarse de
forma instintiva a los patrones de vida de otras personas. En este
sentido es profundamente empático. Aun así, a pesar de esta
curiosidad innata sobre lo que mueve a las demás personas, en lo
esencial lo hace por interés propio. El temor constante de que su
talento se seque y desaparezca le tortura. Pero no se lo revela a
nadie.
Quizás en el fondo sea un escapista que desea ocultar su
identidad real tras la máscara de la ilusión. Este tipo de hombre
no se abre ante cualquier persona. Oh, no. Crea un personaje para
143
cuando está fuera del escenario, observa a quienes le acompañan
desde detrás de una capa protectora, neutral. De este modo, el
hombre real, su verdadero yo, permanece escondido. Está en
contacto con lo que hay detrás del personaje, pero siente un
profundo temor a ser un farsante y que le descubran. Ofrece todo
lo que es a su público, pero ¿cuánto de ello es el verdadero yo y
cuánto es técnica? Esta es la razón por la que el aplauso y el
reconocimiento son tan importantes. Ser alguien a los ojos de los
demás significa que no es un don nadie a sus propios ojos.
(1) En la vida real
El bailarín de strip-tease, fan del karaoke, músico callejero,
abogado
[pág. 104]
El arte del amor
¿Qué hace grande a un gran actor? La atracción sexual. Hay un
componente sexual en todas sus muestras de espontaneidad
desinhibidas e irreverentes. Quizá también juegue con la comedia
para atraerte. Sin duda puede embriagarte. Pero en el amor este
tipo es una apuesta arriesgada. Quiere controlar cómo le ves. Y,
como es famoso en su propia mente, hay obstáculos en el camino
hacia el verdadero amor.
Busca a alguien que reafirme su imagen: no pasa nada si
todavía llama más la atención. Pero cuidado, odiaría que un recién
llegado le eclipsara. Sobre todo su recién llegado.
144
Se entrega en cuerpo y alma a todo lo que hace y eso incluye
su vida amorosa. Este tipo está acostumbrado a trabajar con las
emociones intensas: en su vida profesional experimenta con
frecuencia subidas de adrenalina y un aumento del ritmo cardiaco,
por lo que busca esa misma intensidad en el amor. Tal vez se pasee
por ahí con muchas caras bonitas pero se reserva su compromiso
para el final. Su personaje fuera del escenario, que utiliza para
el ojo público, oculta el deseo de encontrar un alma gemela.
Necesita compartir su complejidad, su temor, su debilidad con otro
ser humano.
Esto puede no ser fácil. No todo el mundo está dispuesto a
embarcarse con un tipo de este mundillo. Sus inseguridades quizá
le angustien o le vuelvan paranoico. Su trabajo lo deja eufórico
pero es capaz de derrumbarse en un segundo. Su reputación y su
personaje fuera del escenario están muy presentes cuando hace vida
social. No siempre está seguro de cuándo puede relajarse y ser más
contenido. En el amor, este hombre es camaleónico. Sabe lo que las
mujeres buscan en un hombre. Pero es tan hábil y confía tanto en
su capacidad para generar emoción que es capaz de rechazar sus
sentimientos por considerarlos poco auténticos. Este tipo no se
muestra todo lo introspectivo que debería. Necesita tiempo y
espacio para pasar de su personaje fuera del escenario a su yo más
personal.
[pág. 105]
145
(1) El gancho
Sé atrevida pero no demasiado obstinada. Mándale flores la noche
del estreno. Mándale besos desde los bastidores. Lánzale las
bragas. Pídele un autógrafo. Repítele cuánto te gusta su trabajo.
Háblale de los ídolos que tenéis en común. Ofrécete para fundar su
club de fans. Ofrécete para protegerlo de las grupies. Pero
conserva tu igualdad continuamente. Hazlo sonriendo. Sedúcelo con
tu indecencia: finge que sólo quieres una cosa de él.
(2) En pareja
Ámale por lo que es, no por sus logros. Valora su fórmula ganadora
con respecto a gustos y estilo. Ayúdale a dejar de lado el guión
de amante romántico que ha asimilado a través de la música, la
danza y el cine. Acércalo a la realidad retando su sentido del yo.
¿Siente lo que tú sientes? Anímalo a “ser” sentimientos en vez de
a “hacer” sentimientos. Si sigue tu ejemplo, le proporcionarás
satisfacción personal cuando se acerque más a ti y a él mismo.
Tómatelo con calma. Se siente dolido fácilmente debido a su temor
hacia el rechazo y a ser descubierto. Sigue llevando su club de
fans.
Adórale pero no seas la suplente. Asegúrate de que no te mantiene
al margen de su mundo.
146
[pág. 107]
El hombre cibernético
El arquetipo: El Mago, as de Internet, excursionista
extraterrestre, viaja por el mundo virtual
El personaje
Qué imagen da
Cómo reconocerle: Navegando por las páginas web. Se queda en la
sala de chat, va encadenado a su portátil a la oficina y en el
transporte público. En el quiosco sólo mira las revistas de
informática.
Expresión/Registro verbal: Monosilábico. Es muy callado. “Me tengo
que ir… es la hora del chat en línea”. No da información de motu
propio pero se chifla por su último descubrimiento en la Red.
Frase para iniciar conversación / ligar: “¿Eres un punto com?” “Si
quieres puedo hacerte un sitio web a medida”. “¿De qué color
llevas las bragas?”
Inquietud vital: Visitar realidades alternativas en el
ciberespacio.
Accesorios: Tazas de café, ordenador, escáner, disquetes,
cartuchos de cinta magnética, unidades Zip, programas antivirus,
manuales de usuario de mil páginas muy gastados, cámara digital,
lámpara halógena, mobiliario ergonómico, médicos para los
problemas de espalda, vista y cuello.
Profesión: Técnico o vendedor de informática, diseñador de sitios
web, proveedor de software, editor electrónico, científico
147
informático, empleado de sistemas de comunicación, programador de
aplicaciones.
Historial amoroso: Yo, yo mismo y mi módem.
Canción: “Are ‘Friends’ Electric”, de Gary Numan.
Fantasía: Entrar en la dimensión desconocida: un entorno generado
por ordenador donde mantener encuentros íntimos con desconocidas
beatíficas.
La sombra
Malas costumbres: Se queda demasiado tiempo en su santuario, paga
facturas de teléfono astronómicas, se le olvida regar las plantas
y tiene sudores nocturnos. Se queda dormido en la cena, tiene
pocos amigos de carne y hueso y no está en forma.
Lo que no dice/Secretos y silencios: “Ahora no puedo venir… Estoy
practicando el sexo cibernético. Formo parte de la comunidad de
guerreros tecnológicos. Yo estoy conectado y tú no. Soy anónimo”.
Agenda oculta: Buscar los puntos oscuros del ciberespacio para
encontrar placer en línea. Navegar todo el día.
Mantra filosófico: La tecnología es el futuro.
Accesorios: Manchas de café en el albornoz, peces hambrientos,
cenicero rebosante de colillas, padres separados, novelas de
ciencia ficción, diccionario de informática, juguetes tecnológicos
de lo más moderno, archivo secreto en el disco duro.
Barómetro energético: Poca energía física pero mucha actividad en
el hemisferio izquierdo. No es tan flexible como antes.
Futuro de la relación: Si es capaz de dejar a las amiguitas
148
cibernéticas secretas, quizá tenga la oportunidad de juntarse con
una terrícola.
Canción: “Hyperballad”, de Björk.
Rendimiento sexual: Bajo, a no ser que haya un chat caliente en
línea. Se reserva la sexualidad para http://www.tus
preferencias.com.
[pág. 108]
Cuando el hombre cibernético cuelga el cartel de “No molesten” en
la puerta y se conecta, se olvida de la vida real tal como la
conoce y se embarca en su propia nave espacial. La fibra óptica le
ayuda a dar el gran salto desde donde está a la página de inicio.
Las células de su cerebro empiezan a funcionar cuando entran en un
terreno nuevo. El tiempo y la distancia se desvanecen. Su mano
guía su imaginación mientras se pasea por las configuraciones de
la información instantánea. Eso es lo que ansía. Recorre la
pantalla con la vista y se descarga todo aquello que le llama la
atención. Tiene una habilidad especial para establecer conexiones,
en paralelo o en plural. Este mundo virtual no conoce fronteras ni
puertas cerradas. Ahora la vida en Marte es una posibilidad.
Los tipos más exagerados viven literalmente en el ordenador.
Es un autodidacta. En el colegio quizá fuera un solitario que
pasaba el tiempo libre frente al teclado, o un superdotado, a
quien marginaron debido a su comportamiento extravagante. Sus
149
habilidades son lo que le definen. Como hombre cibernético, tiene
que recurrir a la jerga informática para encontrarle sentido a su
realidad. Se inició descifrando este lenguaje. Para aprender más
sobre las posibilidades de la inteligencia artificial, se ha
convertido en alguien sumamente analítico. Forma parte de una
gigantesca comunidad mundial donde todo el mundo es bien recibido,
que se desarrolla gracias a acceder y manipular información a
discreción. Si es un genio de la técnica, utilizará su experiencia
para simular sus propios pensamientos con programas creativos, de
resolución de problemas que combinan la lógica, las matemáticas y
las habilidades gráficas.
Está convencido de que la alta tecnología prevalecerá. La
realidad del hombre cibernético es sencilla. Puede estar donde
quiera cuando quiera. Se siente miembro de una subcultura que le
acoge cuando se sienta en su escritorio y se pasa la hora del
almuerzo en la sala de chat. Se conecta para evitar la soledad o
el aburrimiento, o ambos. Si pasa excesivo tiempo en el terminal,
su personalidad puede ser difícil de entender.
(1) Tiene una habilidad especial para establecer conexiones, en
paralelo o en plural.
[pág. 109]
El hombre cibernético tiene muy claro quién es. Su alma quizá no
resulte tan obvia, pero existe. Está profundamente convencido de
150
que el método de difundir información define a la sociedad. Está
entregado a un nuevo comienzo con un conducto más democrático para
el significado, que ofrece participación e interacción para todos
nosotros. Los tipos así desafían los límites del mundo real: las
fronteras, las instituciones, las normas y leyes, el
condicionamiento silencioso que cala en todos nosotros. La
historia empieza de nuevo aquí.
En la comunicación se inclina por lo mínimo y elimina todo lo
superfluo. La estética del lenguaje informático, al igual que el
de las matemáticas, reside en la simplicidad y la verdad de su
lógica. Para él la solución elegante a un problema posee una
dimensión mística. Esta es su iluminación, su forma de romper con
la monotonía de la vida diaria.
El ciberespacio es el lugar donde confluyen todo tipo de
fascinaciones, desde plataformas de lanzamiento minúsculas hasta
experimentos monumentales en tres dimensiones. En la vida real
este tipo no es más que un rostro entre la multitud pero ahí puede
perfeccionar sus fantasías. Cruza la frontera electrónica para
encontrar su lugar en el mundo. El ciberpunk dotado de poderes
especiales, el androide de la ciencia ficción y el príncipe de la
paz: todos son personajes en una realidad a la que accede a través
de su ordenador, y todos asumen la misión del héroe mítico: salvar
el mundo. Cuando se interconectan las matrices de las
imaginaciones, el hombre cibernético se reinventa a voluntad. Eso
explica la necesidad de este tipo de volver una y otra vez a la
pantalla. Siempre hemos estado solos en el paisaje de la
imaginación pero ahora el ciberespacio nos permite compartir y
151
experimentar mundos imaginarios. Para el hombre cibernético se
trata de una experiencia espiritual, y para él la introspección se
extiende a la jungla de la teoría de la conspiración cibernética,
con su discurso sobre quién o qué posee el poder máximo.
(1) En la vida real
El oficinista que trasnocha, compañero de piso aburrido,
universitario en el paro, adolescente solitario, desviado sexual
[pág. 110]
El arte del amor
En línea este tipo es anónimo. Es quien quiere ser, dependiendo de
su estado de ánimo. Puede ser gay o bisexual, casado o soltero,
rico o pobre, alto o bajo. Incluso puede ser una mujer si desea
saber más sobre el sexo opuesto.
La intensidad del noviazgo cibernético procede de la aparente
franqueza del encuentro y la ausencia de distracciones normales.
El diálogo entre el hombre cibernético y su amiguita cibernética
se convierte en una relación íntima mucho antes que en la vida
real. En este tipo de relaciones en el ordenador no hay
interrupciones. No hay ni “ums” ni “ahs”, ni pausas. El hombre
cibernético no es una presencia física sino virtual. La zona de
interacción se minimiza y la conversación es selectiva.
Básicamente, sólo da para recibir.
Su fantasía quizá no conozca restricciones pero este tipo debe
mantener a raya su personalidad cibernética si quiere tener sus
152
dos mundos en compartimentos separados. ¿Dónde está la gracia?
Quizá no sepa cómo interactuar con su pareja a nivel físico, tal
vez sienta amor pero sea incapaz de expresarlo sin un teclado. O
quizá se sienta atraído por la comodidad del anonimato y sólo
busque un “subidón” rápido. Al fin y al cabo, si se conecta y
juega bien con las palabras puede obtener una respuesta fabulosa.
Puede satisfacer su ego como un león hambriento frente a su presa.
Se siente tan querido, tan buscado, como si fuera “uno entre un
millón”. Y ahí está el peligro. El amor en Internet no tiene nada
que ver con el amor en el mundo real. No tiene que vérselas con
las molestas costumbres y gestos que enloquecen a las parejas
reales. No tiene que despertarse a su lado ni limpiar nada de
ella. Se autoconvence de que el amor sin complicaciones es mejor
que el amor verdadero, que se encuentra en el meridiano entre lo
sagrado y lo profano. En comparación con el nivel de su
interacción intelectual, su integridad emocional es limitada. Da
lo mismo. No le importa volver a hacerlo todo mañana.
[pág. 111]
(1) El gancho
Entra en la dimensión desconocida. Tu contraseña es la llave de
oro. Teclea: ¿Hay alguien ahí? Espera respuesta.
(2) En pareja
Sé su foco de poder romántico. Compatibiliza dos mundos. Utiliza
153
tu criterio: no entres en zonas restringidas.
Deséale lo mejor. Desconéctate con educación. Acto seguido, pulsa
la tecla Escape.
Hazlo bajar del mundo virtual al real. Activa sus habilidades
interpersonales acercándolo al mundo.
[pág. 112]
El dictador
El arquetipo: El Rey, guerrero prominente, adicto al poder,
carismático y autocrático
El personaje
Qué imagen da
Cómo reconocerle: En público y entre bastidores, el comportamiento
es coherente: quiere ser el centro de atención. Es el que cuenta
chistes en un círculo de amigos. Ríe y grita igual de fuerte.
Expresión/Registro verbal: Sofisticado. Todo está bien planeado,
planificado y ensayado: este tipo no conoce los lapsus. Posee un
carisma fuera de serie y su elocuencia y voz profunda derriten a
las mujeres.
Frase para iniciar conversación / ligar: “Bésame o te mato.”
Inquietud vital: Dominación global.
Accesorios: Sonrisa de tirano multimillonario, empastes perfectos,
154
ropa interior limpia cada día, listas de cosas que hacer escritas
a mano, dinero en el bolsillo trasero, cortaúñas para los dedos de
los pies, cadena de oro, reloj de muñeca último modelo, agenda
diaria.
Profesión: Director de colegio, manager de un equipo, general
militar, narcotraficante, jefe de una organización criminal
internacional, magnate de una fábrica donde se explota al
personal.
Historial amoroso: Dirigir a las jugadoras femeninas en un entorno
tipo “Dragones y mazmorras”. Huye y pide consejo a quienes te
precedieron.
Canción: “My Favourite Game”, de The Cardigans.
Fantasía: Categoría especial en el club de quienes han mantenido
relaciones sexuales en un avión: estimulación oral por parte de
una ninfa anónima, esposada para evitar la eyección si hay
turbulencias.
La sombra
Malas costumbres: Presuntuoso, dogmático. No planifica nada para
que lo hagáis juntos, compra tu afecto y nunca está solo.
Lo que no dice/Secretos y silencios: “Quiero que me clonen. Cuando
empecé, quería salvar el mundo. Nunca me compares con otro
hombre”.
Agenda oculta: Buscar a mujeres enloquecidas por el poder.
Bloquear los horrores de su vida con fantasías escapistas.
Mantra filosófico: Voy a vivir eternamente.
155
Accesorios: Lista de éxitos, libro de cocina para pasta, remedios
para el dolor de cabeza, vídeos de medianoche, bolas para aliviar
el estrés, tinte para el pelo, colección de regalos para
disculparse.
Barómetro energético: Actividad mental: 24 horas al día. Actividad
física: combinación de vagancia e hiperactividad, diezmada por
niveles elevados de ansiedad. Si lo atrapas en un momento de
euforia, te deslumbrará con su actuación.
Futuro de la relación: No la tiene a no ser que optes por
rendirte: sumisión y discreción serán las exigencias máximas. Las
geishas sin conquistar provocan palpitaciones del corazón
ocasionales.
Canción: “It’s A Man’s, Man’s, Man’s World”, de James Brown.
Rendimiento sexual: La mayoría de veces “aquí te pillo, aquí te
mato y adiós”. Más exagerado cuanto más se acerca a la categoría
de semidios.
[pág. 114]
El dictador, un ejemplo claro de megalomanía, es alguien
esclavizado por el ansia de riqueza, grandeza y poder. El poder
corrompe así que quizá sea un idealista que ha enloquecido. Al
caer en picado tal vez haya decidido ignorar su conciencia y
rechazarla por irrelevante.
Ha creado su propio mundo y actúa movido por una ambición
insaciable para hacer valer su propia ética. Es la clave de cómo
156
se ve y cómo quiere que le vean los demás. “Muy disciplinado” y
“ritualista” es la mejor forma de describir a este tipo, y
necesita sentirse respetado por su comunidad. Pero en realidad las
reglas se instauran para que las cumplan otros: él las hace y
luego las incumple.
Junto a la necesidad de dominio del dictador subyace una
desconfianza instintiva hacia los demás. Los delirios de grandeza
y persecución batallan en el interior de su cabeza y la obediencia
se convierte en algo primordial. Con el temor paranoico de perder
el control que inunda sus pensamientos, sus poderes de
manipulación resultan fundamentales para mantener su ideología.
Para satisfacer su necesidad de convertirse en un icono, te
embelesará al máximo si quiere conseguirte. Del mismo modo, no
dudará en recurrir a un control férreo para imponer su voluntad.
Nada es accidental, todo es premeditado.
Despiadado y malicioso, te arrancará la piel y te la devolverá
con una sonrisa en los labios. Pero prefiere actuar desde la
distancia en vez de cara a cara. Si puede, dejará que los demás le
hagan el trabajo sucio y evita las consecuencias de sus acciones
alejándose, aislándose de sus sentimientos. Uno de sus rasgos en
un contexto social es la risa hueca con un trasfondo frío; todo
forma parte del envoltorio, diseñado para hacer que cualquier
audiencia se sienta inferior.
Este tipo posee pocas cualidades agradables. Su pasión por la
autoprotección elimina toda posibilidad de sentimiento. No valora
la sensibilidad hacia los pensamientos y sentimientos de los
demás. Los considera debilidades: un indicio de pérdida de
157
control, algo que no soporta que le pase a otros, y mucho menos a
él mismo. Irónicamente, la incapacidad del doctor Maléfico para
controlarse es lo que le destruye.
Si pudiera, el dictador se inyectaría poder y, contra toda
lógica, eso también es lo que quiere toda persona que se siente
atraída por él. El poder tiene glamour pero, aunque te gusten los
retos, piénsatelo dos veces, y luego dos veces más. A no ser,
claro está, que la sumisión te resulte fácil.
(1) Junto a la necesidad de dominio del dictador subyace una
desconfianza instintiva en los demás.
[pág. 115]
La puerta de su alma está cerrada con llave y sólo él tiene una
copia. Alimentado por el encanto y la furia, ha cambiado la
sensibilidad por la supremacía y, al hacerlo, reniega de su
espíritu una y otra vez.
El carisma es su tarjeta de presentación y la utiliza sin
escrúpulos. Quienes la aceptan, sus peones, se sienten elevados y
despreciables a la vez. Por momentos forman parte de la magia que
él evoca para convencerlos de que su objetivo debe ser el de
ellos. Sabe lo halagador que resulta ser arrastrado al círculo de
los elegidos, pues uno se siente deslumbrado y especial y, por
tanto, distrae y desarma a las personas para dominarlas. La otra
cara de la moneda es su aterradora capacidad para enfurecerse.
158
Vete con cuidado si corre peligro de quedar mal. Esto hará que su
autoprotección se dispare y la erupción será como la del Vesubio.
La poderosa combinación de furia y encanto es lo que hace que el
dictador resulte invencible y los demás tan dóciles: este hombre
puede hacer cualquier cosa.
Sin embargo, también es el origen de su aislamiento. La
indiferencia es lo que distancia al dictador de aquellos que le
importan de verdad y, al final, la falta de proximidad se
interioriza. Esto ocurre cuando, emocional y espiritualmente,
abandona toda intimidad y sensibilidad. No hay nadie en casa y,
por consiguiente, se pierde toda esperanza de serenidad. Es un
lugar desagradable al que llegar.
El dictador sustituye la espiritualidad por un dogma
extremista que puede ser religioso. Es lo que justifica sus
acciones y es la forma con la que intenta contener sus temores de
pérdida de control. Pero hay dos cosas que escapan a nuestro
control: la primera es el amor y la segunda la muerte. El amor es
irracional y la muerte impredecible. La muerte es lo que más le
asusta y eso es consecuencia de haber evitado el dolor y las
consecuencias de sus acciones durante toda la vida. Una de las
pesadillas que se le repiten es la del juicio final, que estará
personificado con la figura paterna de Dios, sea religioso o no.
Constantemente se reafirma con una especie de falsa inmortalidad:
exagerando su propio poder e importancia aquí y ahora.
(1) En la vida real
El novio dominante, jefe de empresa agresivo, padre disfuncional,
159
funcionario obnubilado por el poder
[pág. 116]
El arte del amor
Para el dictador, la tentación de ser extraordinario resulta
abrumadora. Le gusta presentarse como un personaje exuberante. Ser
normal y estar en sintonía con el resto del mundo le parece
demasiado aterrador. Debe evitar que lo traten injustamente.
Necesita ganar y lo consigue siendo invencible.
¿Quiere amor? La respuesta es que probablemente sí, pero no
sabe cómo porque nunca se lo han enseñado. O no lo ha aprendido.
En alguna etapa de su vida, este hombre tomó la decisión
consciente de no resultar herido. Todo indica que desea evitar a
toda costa revivir alguna experiencia sumamente dolorosa de la
infancia. Sin duda, la ira es una manifestación de dolor
psicológico, en concreto sentimientos de dolor, culpa, vergüenza y
fracaso, y decide exteriorizar su dolor a través de la
confrontación directa, mediante ataques de ira furibunda.
Para evitar la posibilidad de mayores traumas, sacrifica el
amor espontáneo por un sustituto reprimido del mismo,
distorsionado y empañado por su costumbre de perseguir. Así pues,
como cree que la obediencia es el máximo símbolo de amor, busca la
sumisión en su pareja. De hecho, su masculinidad se basa en un
modelo de dominación que anula a los demás. Para reafirmar su
autoridad, se torna cada vez más dominante y sentencioso.
Pero tiene una imagen espantosa de sí mismo. Está al margen de
160
toda relación íntima. Tiene un temperamento compulsivo. La primera
opción nunca es perdonar. Debe castigar. Aun así, la fiereza de su
emoción le aterroriza. El exceso tóxico diezma toda posibilidad de
amor. Y esta pérdida de control tiene como consecuencia una enorme
sensación de ineptitud.
Inevitablemente, el amor implica una serie de decepciones. Su
perdición será su incapacidad de ver a la persona verdadera.
Proyecta sus propias necesidades y temores en toda mujer que le
atrae, y la imagina como una Virgen, totalmente pura y digna de
ser adorada desde la distancia, o como una prostituta, por la que
sólo siente desprecio. Ella, a su vez, queda imantada por su
carisma, pero se asusta cuando tiene un ataque de furia. ¿Puede
conquistarla? Su éxito en el momento de hacer las paces siempre
significará más para ella que para él. La autotransformación a
través de la integración de su sensibilidad le resultaría
increíblemente liberadora.
[pág. 117]
(1) El gancho
Lo encontrarás en el lado oscuro de la luna. Si te gusta estar
bajo la influencia de este tipo, baja la cabeza cuando te habla y
dale la razón cuando te insulta. Prepárate para que se convierta
en tu dictador.
(2) En pareja
161
Hazte una lobotomía.
Aumenta tu propio umbral de tolerancia.
Esfuérzate para suavizar las confrontaciones. Nunca saldrás
vencedora.
[pág. 119]
El artista
El arquetipo: El Amante, creador, innovador estético, experimental
y conceptual
El personaje
Qué imagen da
Cómo reconocerle: Con los bichos raros. Le encontrarás junto a su
obra más reciente, nervioso o resplandeciente. Tiene un estilo
propio y le gusta. Su aspecto nunca parece forzado. Sea cual sea
su especialidad, destaca.
Expresión/Registro verbal: Se expresa bien y con entusiasmo,
curioso y culto, voluble y volátil, emana creatividad.
Frase para iniciar conversación/ligar: “Me gustaría saber lo que
opinas de mi obra. ¿Te dice algo?” “Francamente, eres surrealista
y me gustaría captarlo”. “El mío es un estudio abierto”.
Inquietud vital: Seguir teniendo talento.
162
Accesorios: Metal, madera, plástico, bronce, arcilla, mármol,
pintura, papel-maché, cámara de cine/vídeo, caballete, chaise
longue, pantalla, cuarto oscuro, pluma y tinta, máquina de
escribir, dictáfono, lista de agentes.
Profesión: Artista visual de cualquier medio, escritor, poeta.
Historial amoroso: En el sofá, en molde, en película, en papel:
todas han desempeñado su papel en el proceso creativo y, cuando
las recuerda, le brillan los ojos.
Canción: “Tangled Up In Blue”, de Bob Dylan.
Fantasía: El reino de los sentidos: ménage à trois con la musa
actual y la anterior, manteniendo ocultas sus identidades.
Nirvana.
La sombra
Malas costumbres: Bruscos cambios de humor: llora de alegría y
arde de furia de forma espontánea. Está obsesionado consigo mismo
y necesita atención constante. Se encierra en su espacio de
trabajo y no abre la boca durante días si las cosas no van como
esperaba.
Lo que no dice/Secretos y silencios: “No soy mujeriego… soy muy
mujeriego. Cuando la obra esté acabada, nosotros también. Hazme un
favor y déjame solo. Necesito halagos para desayunar, almorzar y
cenar. Patrocíname, ¿por qué no?”
Agenda oculta: Dejar una impresión duradera. Provocar. Ser
reconocido por el sistema. Pasar del sistema.
Mantra filosófico: La expresión es el descubrimiento de la verdad.
163
Accesorios: Facturas sin abrir, comida preparada, vino pasado,
mala pata, amigos rechonchos y bajos, descubierto en la cuenta,
perro loco y dejado, mono manchado de pintura, colección de
sombreros, boquilla antigua, autorretrato hecho trizas.
Barómetro energético: Alto bajo, alto bajo.
Futuro de la relación: Es un lienzo en blanco, nena.
Canción: “Night Nurse”, de Gregory Isaacs.
Rendimiento sexual: Es un gran seductor. Le gusta crear un
ambiente intenso para empezar a actuar.
[pág. 120]
Para el artista, trabajar es como un juego. Es fiel a la voz
interna que le pide que se exprese y, con la pasión como fuerza
vital, posee la espontaneidad para ser creativo. A través de su
visión, explora la existencia con mayor profundidad. Se dedica de
forma inquebrantable a su vertiente artística intentando
transmitir su mensaje; es una figura romántica, imbuida de
emoción, belleza y concepto.
Es sumamente sensible hacia todos los elementos de su entorno
y confía plenamente en los estímulos que le proporcionan. A menudo
se siente atraído por lo sensual, lo extraño, lo extremo. Como
materia prima de sus sueños y visiones, filtra sus percepciones a
través del entramado de su imaginación para crear nuevos
significados. Quizá tenga un enfoque provocativo, vanguardista
hacia su arte o sea tradicionalista. Los momentos de inspiración
164
le provocan una alegría metafísica; en su entusiasmo por
transmitir lo que siente sobre cierta persona, situación o actitud
se sumerge en otra dimensión.
Este hombre tiene tendencia a ser contemplativo y distante.
Cree que la vida es arte y muestra cierto desdén por lo ordinario
o poco imaginativo. Se considera un elegido, un eslabón perdido en
un universo munificente, y, por tanto, crea una burbuja en la que
aislarse de la existencia ordinaria. Este hombre lo dejará todo
para hacer lo que tiene que hacer. Su objetivo es demostrar su
autenticidad, no a otra persona, sino a sí mismo. Lo da todo por
su arte y en el proceso de creación de una nueva obra quizá se
aísle y parezca un hombre poseído.
Como su trabajo es una parte esencial de su personalidad,
necesita una reafirmación continua. Debe sentirse aceptado dentro
de su círculo. La aprobación y el reconocimiento resultan
esenciales para su autoestima, validan su contribución al mundo y
eso es importante para él. Si te gusta el tipo artista, cuídate
del ego debilitado. Por desgracia, es muy sensible a las críticas
negativas. Está tan ligado a su trabajo que no es capaz de
tomárselo a la ligera, se ofende con facilidad. La forma como
responda te dará una idea real de su verdadera personalidad.
Conoce su obra antes de intentar intimar con él a un nivel
romántico. No le interesarás mucho si no te muestras claramente
entusiasmada por lo que hace.
(1) Es una figura romántica, imbuida de emoción, belleza y
concepto.
165
[pág. 121]
El alma del artista queda al descubierto en cada etapa de todas
las obras de arte que produce. Su objetivo en todos los casos es
hacer una declaración personal sobre un tema en concreto. Quizá
quede oculta, debido a la naturaleza de su obra, pero la intención
existe y su objetivo siempre es obtener una respuesta espontánea.
Su interpretación de lo que ve, oye, siente, toca y saborea da
vida a su estética a medida que avanza por los procesos de
contemplación, comprensión y crítica interna.
Es consciente de la larga sombra que la religión ha proyectado
en la historia y en el desarrollo de la expresión creativa. Pero
tiene su propia fe. Su meta es encontrar y expresar su verdad. El
vacío de la desolación, de la nada, no desconcierta a este hombre.
Llena el espacio con palabras o imágenes para crear su propia
interpretación de la existencia. Y, de este modo, cuando pone a
prueba los límites de la expresión personal, asume el papel de co-
creador o mediador.
Ya sea hedonista y vulgar o tímido y discreto, el artista está
en sintonía con sus energías. Vive dentro de su inconsciente
creativo y aprovecha sus sensaciones y vibraciones, abiertas a una
invasión desde la zona del inconsciente colectivo. Su mayor
conciencia e intuición permiten que incluso las ideas más
abstractas se cristalicen. Su sensibilidad acentuada le hace
sintonizar con lo conmovedor y la sutilidad de muchos ámbitos de
166
la vida. Dado que le afecta todo lo que sucede a su alrededor, ya
sea magnífico o atroz, se siente libre para expresar sus
respuestas. Y esta libertad es su forma de estar en paz consigo
mismo. El intelecto y la emoción se unen cuando habla a través de
un lenguaje personal de símbolos o signos.
Crear ideas y ver que se materializan ante sus ojos le
emociona y le satisface. Es lo que le mantiene vivo y feliz de ser
mortal. Así pues, cuando el trabajo va bien, su euforia hace que
sea una compañía agradable. Pero su alma también es el lugar donde
guarda sus temores más profundos y luchará contra los demonios de
la falta de seguridad en sí mismo cuando su talento no sea
reconocido. Para él la vida es como una puerta giratoria, en
cuanto que experimenta los altibajos de la psique artística.
(1) En la vida real
El artista amateur, escritor que aún no ha publicado, poeta de
panfletos, repartidor de postales hechas por él, adicto a los
vídeos caseros, escultor sobre hielo, aficionado a la papiroflexia
[pág. 122]
El arte del amor
El artista recibe el éxtasis del amor con los brazos abiertos. Su
sensualidad exige que sea él quien te atraiga: a su mente, a su
corazón y a su cuerpo. Para él el amor puede ser encantador y
devorador. Querrá entablar una relación si consigue luz verde, te
hará sentir en las alturas cuando secuestre tu corazón,
167
susurrándote palabras de amor y llevándote al cielo y de vuelta
otra vez. Ama con ansia, y el corazón le late más deprisa cuando
el objeto de su deseo entra en su órbita. Sus fantasías se hacen
realidad en un río de pasión y excitación que fluye rápidamente a
todo color.
La revelación del amor es algo que aprecia mucho e
intentará instituir la verdad dentro de la relación. Quizá no
siempre quiera expresar sus sentimientos pero, cuando lo haga, los
expresará de forma hermosa. Es un hombre muy considerado y a veces
se puede explotar esa predisposición. Demuestra su deseo de
agradar en la forma que hace regalos con valor sentimental. Otorga
una ternura al amor que podría durar para siempre. Y si su
compañera muestra una actitud tierna hacia el amor, sin duda le
hará sacar su lado cariñoso y confuso. Su pareja tendrá que
alimentar su temperamento artístico y será suya y solo suya. Pero
los lazos que le unen a otras mujeres también son importantes para
él y quizás incluso representen un aspecto de su obra. Ni se te
ocurra intentar cortarlos.
La musa que le robe el ojo y el corazón tendrá que andarse con
cuidado. Este tipo no es ajeno al lado oscuro del amor. Es
abiertamente sensible y quizá desee prolongar un momento hermoso
demasiado tiempo. A veces puede perder la perspectiva y volverse
inseguro, posesivo, defensivo e incluso agobiante. Como le cuesta
librarse de los sentimientos negativos, no reconoce el efecto que
tal comportamiento puede tener en su pareja. Es importante que
entienda la necesidad de espacio de las demás personas.
Sin duda, se deja dominar por las emociones, quiere
168
experimentar el amor en su estado más sublime y odia pensar en el
fracaso. Quizá albergue unas expectativas poco realistas sobre el
amor para negar el hecho que la mayoría de las relaciones empiezan
con la esperanza y acaban de forma dolorosa. Lo que está claro es
que se rinde ante el amor. Lo que debe aprender es que el amor
posee un ciclo natural propio. Al igual que las plantas, a veces
se marchitan y a veces florecen.
[pág. 123]
(1) El gancho
Ponte una máscara, oculta tu identidad y deja que sus fantasías se
multipliquen. Debes ser una diosa o una bruja, sin duda dos
papeles muy distintos. Le gusta el poder místico y mágico de una
mujer. Sé su inspiración, quédate siempre a un paso de su alcance.
Muévete como la hierba cuando sopla el viento y seguro que se
fijará en ti. Confía en tu femineidad y atráele con tus tácticas
“irracionales”.
(2) En pareja
No puedes permitirte el lujo de jugar con su corazón: es frágil.
Este hombre necesita que le recuerdes que es importante para ti,
pero aléjate de un comportamiento que suponga la co-dependencia.
Búscate un hueco en su programa, que sin duda será caótico. Aporta
amor a los confines de la realidad despertándolo del sueño y
animándolo a solucionar su ingenuidad. El deseo le consume así que
169
evita que se le vayan los ojos detrás de otras manteniendo el
misterio de vuestro amor.
Las crisis de inseguridad quizá hagan que tengas que rescatarlo
demasiado a menudo. ¿Vale la pena? Si la relación te resulta
demasiado opresiva porque es posesivo y celoso, márchate con una
despedida breve.
Expresa tus sueños más atrevidos pero asegúrate de no perder de
vista lo que es real y lo que no.
[pág. 125]
El guerrero ecológico
El arquetipo: El Guerrero, visionario, creador intuitivo,
oficiante cíclico
El personaje
Qué imagen da
Cómo reconocerle: Extasiado una noche de luna llena. Fíjate en las
botas; luego en la ropa (colores terrenos) y el rostro (las
facciones curtidas lo distinguen de los chicos guapos pero se
enorgullece de su masculinidad).
Expresión/Registro verbal: Habla sobre ecología verde, quizá con
acento regional, llama a las cosas por su nombre, no le van las
florituras. Le desagrada la contaminación acústica de todo tipo.
170
Frase para iniciar conversación/ligar: “No tengas miedo. Es
biológico”. “¿Vas en bicicleta? ¡Qué bien!” “Nunca compro flores.
Las cultivo yo mismo”. “¿Estás en contra de la energía nuclear…?”
Inquietud vital: Aprovechar todo su potencial creando estructuras
ecológicas auto-sostenibles.
Accesorios: Hacha, tijeras de podar y pala, carretilla y estiércol
de granja ecológica, manguera, veleta, bicicleta de montaña,
tienda de campaña, ropa para las inclemencias del tiempo, chimenea
abierta.
Profesión: Jardinero, guardabosque, silvicultor, pescador,
activista ecológico, biólogo marino, horticultor, granjero,
apicultor, geólogo, cuidador de árboles.
Historial amoroso: Es hombre de una sola mujer que sufrió una
decepción en el pasado. Busca una compañera preparada para ir por
caminos poco trillados.
Canción: “Harvest Moon”, de Neil Young.
Fantasía: Oberón con Titania, que lo adora, ocultos en un bosque
frondoso: el sueño de una noche de verano.
La sombra
Malas costumbres: Su ego de ecologista le convierte en un mal
oyente en temas que considera propios. Come raíces y hojas, le
cuesta compartir una tarea y le gusta llevar calcetines
malolientes.
Lo que no dice/Secretos y silencios: “Quiero estar solo cuando
hago mis cosas. ¿Te gusta estar en la cocina? No, no puedes venir
171
a pescar. Los hombres sí lloran”.
Agenda oculta: Conocer y formar pareja con una exploradora madura
para actividades al aire libre y picnics.
Mantra filosófico: Yo Tarzán, tú Jane.
Accesorios: Lazo y látigo, picana para vacas, compañeros de
juergas, señoritas en apuros.
Barómetro energético: Del amanecer al atardecer.
Futuro de la relación: Los pies en el suelo y la cabeza en las
nubes.
Canción: “King of Pain”, de The Police.
Rendimiento sexual: ¡Agárrate! ¡Es orgásmico! Prepárate para las
escapadas al aire libre y el sexo con sol, viento, lluvia y nieve.
[pág. 126]
El misterio es básico para la personalidad del guerrero ecológico.
Es un enigma y los enigmas siempre resultan intrigantes. Esa
intriga combinada con encanto hacen que este tipo sea de los más
seductores que existen. Si consigues entablar una conversación con
él, te hablará de un sinfín de temas que le inspiran. Es una
especie de filósofo: construirá una casa y hablará contigo del
edificio. Su temperamento, cómo se define y su narrativa, son lo
que llama la atención. Es complejo y relajado.
No le gustan necesariamente las actividades en grupo. Muchos
guerreros ecológicos escogen profesiones solitarias. La razón de
ello es que, sobre todo, le encanta estar solo, saborear su
172
espacio y su tiempo. Ya sea en el bosque, en la cima de una
montaña, durmiendo bajo las estrellas o sudando bajo el sol, el
entorno natural es su terreno. Huele las rosas que cultiva, pero
¿adónde le lleva su fragancia? Nadie lo sabe.
Quizá niegue aspectos de su personalidad en un intento por
permanecer en silencio y “seguro”, aunque está bien asentado en la
realidad de nuestras vidas en este planeta. Contrarresta toda
desilusión en su vida diaria con el ciclo estacional. De la
oscuridad a la luz, del invierno a la primavera y de la escasez a
la abundancia, ofrece equilibrio y armonía a lo que, él reconoce,
sería una existencia dura. Su meditación diaria lo conecta con la
tierra. La sensación de soledad que le embarga fomenta una de sus
cualidades más atractivas: el deseo de cultivar. Como visionario
práctico, ve lo que es posible y aplica todos los recursos
necesarios para conseguir su objetivo.
Es un superviviente. Su política ecológica ofrece una escala
de valores que da origen a la necesidad de dejar su huella en el
mundo. El apoyo a proyectos que mejoren la calidad de vida de la
comunidad tiene una importancia vital para él: le encontrarás
plantando árboles donde no había, fomentando el florecimiento de
nuestro entorno natural. Es un testimonio de la longevidad y el
legado. Es un hombre que se preocupa por el pasado, el presente y
el futuro de este planeta.
(1) La sensación de soledad… fomenta una de sus cualidades más
atractivas: el deseo de cultivar.
173
[pág. 127]
Se trata de un hombre que pasa la mayor parte del tiempo al aire
libre. Le encanta hacer hogueras, cortar leña y cavar. En este
sentido, disfruta con muchos de los placeres más sencillos de
nuestros antepasados cavernícolas. Contento en su propia piel, su
lado masculino está satisfecho. Esto lo hace increíblemente
atractivo para los demás, que lo consideran autosuficiente. Le
gusta la sensualidad: le encanta sentir el polvo y la suciedad en
la palma de la mano. A través del plano físico construye su mundo
externo y reconoce y celebra esta concienciación de forma
excepcional.
No es un hombre superficial. Ha aprendido a enfrentarse al
miedo aceptando las fuerzas de la naturaleza. Su sueño es honrar
este compromiso con la tierra y este impulso inconmensurable
alimenta su fuerza interior.
Sin embargo, el guerrero ecológico está absorto en su propio
mundo. Aunque su afinidad con su entorno natural le permite
contemplar en soledad la esencia de quién es y qué quiere de la
vida, tanto con como sin otras personas, su naturaleza cerrada
proyecta una sombra en su alma. Esto se debe a que su relación con
el entorno físico es su conexión primordial. Es más natural, más
instintivo que el vínculo entre él y su pareja. Incluso es posible
que evite las relaciones íntimas. Atrapado por su deseo de
explorar sus raíces primarias, puede llegar a tener una percepción
distorsionada de la realidad de forma que se considere un
174
solitario y casi nunca piense que tiene lo que merece en una
relación.
Vas a tener que aguantar mecha desde un punto de vista
emocional. A menudo le costará expresar sus sentimientos, por lo
que crea una barrera entre el mundo y él y se refugia en la
naturaleza donde, según parece, es aceptado, bien recibido y
absorbido totalmente por la búsqueda de paz y armonía interior.
Parecerá enigmático, pero es natural en un hombre que no te hace
saber lo que más quiere y necesita. A veces su profundo pesar
puede expresarse en forma de arrogancia. Guárdate de él cuando
vuelva a su hábitat. La naturaleza le ofrece un buen refugio con
lugares sagrados desde los que observar desde la distancia.
Asegúrate de que te lleva con él.
(1) En la vida real
El fabricante de abono vegetal, reciclador, salvador de pájaros,
miembro de Greenpeace, calza zapatos de cáñamo, ciclista,
confeccionista de tipis.
[pág. 128]
El arte del amor
En el amor, el guerrero ecológico puede cumplir sus sueños pero no
invitar nunca a los demás a compartirlos. Ello se debe a que le
cuesta incluir a los demás. No es que no quiera, es que no sabe.
El secretismo y la alienación son como un acto reflejo para él
cuando se encuentra en una situación social donde no está del todo
175
cómodo. En muchas ocasiones aparece antipático y frío. Pero esto
se debe a su orgullo. La superioridad puede ocultar su verdadera
vulnerabilidad. Recuerda que no es más que pura fachada.
Consigue una identidad masculina madura a través de su
vitalidad y estando en contacto con su propio plano físico. En
muchos sentidos es casi una figura mítica. Su imaginación
romántica forma una secuencia de imágenes sexuales expresivas.
Este tipo es ritualista y su sensualidad sorprenderá, deleitará y
excitará a cualquiera que comparta con él esos momentos íntimos.
Como sostén económico, puede ser aplastante y dominante sin
querer. Para muchos guerreros ecológicos se trata de una táctica
de defensa automática. Muestra la necesidad de mantenerlo todo en
su sitio y bajo control. Si advierte una pérdida de control, se
sentirá amenazado. Por desgracia, esta falta de consideración
puede apartar a otras personas.
No obstante, el guerrero ecológico quiere compartir unos
valores comunes en pareja. Antes de que tome una decisión sobre
los asuntos del corazón, te pondrá a prueba analizando tus
intereses, opiniones y actitudes. Tiene unas expectativas elevadas
porque es fiel, firme y de buen corazón. En el amor, el guerrero
ecológico tiene paciencia. La compenetración sexual será tan
importante para él como la naturalidad. Te valorará más allá de su
beneficio personal.
[pág. 129]
176
(1) El gancho
Repite conmigo: “Apoyo a las ballenas, bailo con los lobos y no
ensucio las calles”. Conecta con él a nivel ético, luego aporta tu
feminidad. No le gustan los labios pintados (puf, sabe fatal) y no
le gusta el perfume (camufla tu aroma). Físicamente, este tipo
quiere tu verdadero yo. Cuanto más real seas, más provocativo y
voraz será él. Si le quieres, la seducción sutil es lo mejor. La
sencillez es hermosa para el guerrero ecológico. Al natural le
enloquecerás pero si no es tu estilo, no intentes disimular.
(2) En pareja
El amor con este tipo tiene posibilidades. Quiere estar
acompañado, en confianza, en la verdad y de forma transparente,
pero sus propios demonios pueden dañar la relación. Déjale que
luche por buenos motivos. Alienta su viaje interior no siendo
reactiva cuando se enfrenta a su propia alma. Aporta ternura,
inocencia y coherencia a su vida. Recoge alimentos de los campos y
cocinad juntos. Para el guerrero ecológico la riqueza es un
complicado equilibrio entre lo necesario y lo disponible.
Si quieres huir, no dejes rastro. Este hombre te seguirá. No
puedes esconderte. Tendrás que luchar para apartarte de él cuando
te llame para que vuelvas. Su sensibilidad desprotegida u oculta
le convierten en la excepción que confirma la regla con respecto a
las rupturas: le cuesta decir adiós. “Seamos amigos, sigamos
siendo amantes y con mis condiciones” sería una solución ideal
177
para él. Disfruta de su aislamiento pero teme el abandono. Si de
verdad quieres librarte de él, márchate a otro huso horario.
Recuérdale que el amor es la fuerza más poderosa del universo.
[pág. 131]
El amante obsesivo
El arquetipo: El Amante, romántico herido, ex lapa, avestruz con
la cabeza en la arena
El personaje
Qué imagen da
Cómo reconocerle: Rebosa energía y entusiasmo si está enamorado,
se siente triste y desamparado si está en apuros emocionales.
Arenga al DJ para que ponga canciones de amor. No te quita los
ojos de encima si le dejas tirado.
Expresión/Registro verbal: Encantador y persuasivo. Elogioso,
nervioso, rápidamente concierta una cita. Su objetivo es
engatusarte para que estés con él y así buscar parecidos para
entablar una relación.
Frase para iniciar conversación/ligar: “¿Nos conocimos o fue todo
un sueño?” “Sabes que soy irresistible, así que ríndete ya”.
“Estamos destinados a estar juntos, sólo tienes que darte cuenta
de ello”.
Inquietud vital: Encontrar a su media naranja.
Accesorios: Cuenta en la floristería, corchos de botellas de
178
champán, recuerdos románticos, fotos enmarcadas, compilaciones de
canciones de amor, filtros de amor para el baño, alfiletero en
forma de corazón, albornoz suave y esponjoso de repuesto, patito
de goma, velcro para adherir tu corazón al suyo.
Profesión: Cualquiera, pero le gusta tener la noche libre para
actuar por despecho.
Historial amoroso: Juega a las uniones emocionales con todas las
mujeres que ha amado. Nunca sabe decir adiós.
Canción: “Love Is The Drug”, de Roxy Music.
Fantasía: El jardín del Edén antes de la Caída: Adán y Eva a sus
anchas.
La sombra
Malas costumbres: No acepta que “se acabó” significa “se acabó y
ya está”, deja mensajes en el contestador automático de su ex
amante y/o bombardea a su víctima con mensajes de correo
electrónico, encuentra excusas para pasarse por su casa y está en
contacto con los amigos y familia de su ex amante.
Lo que no dice/Secretos y silencios: “Voy a hacer que me quieras.”
Agenda oculta: Que le amen a pesar de ser quien es.
Mantra filosófico: El amor es para siempre.
Accesorios: Orden contenido, terapeuta emocional, antidepresivos,
amigos aburridos, correo devuelto al remitente, anillos de
compromiso devueltos, libros de autoayuda sobre la dependencia muy
usados.
Barómetro energético: Dedica toda su energía emocional a los
179
sueños, que alcanzan su apogeo cuando piensa en la reconciliación.
Su energía física es cíclica, determinada por su bienestar
emocional.
Futuro de la relación: De primera si conoce a alguien que esté en
tratamiento por adicción al amor; de segunda si piensa en la
reconciliación; de tercera si los amigos confían en él lo
suficiente para presentarle a una amiga mutua.
Canción: “Don’t You Want Me”, de The Human League.
Rendimiento sexual: Fantástico si cree que no va a volver a estar
contigo. No se esforzará demasiado si ya les ha dado una copia de
las llaves de tu casa.
[pág. 132]
El amante obsesivo es el romántico herido. Puede ser un ex novio,
un ex amante o el prometido que no te quiere soltar. Ya es
historia pero se niega a aceptar que tiene que superar las
relaciones pasadas para cumplir con las del futuro. Se
autoconvencerá de que tiene tanto amor que dar que lo demás
importa poco. El problema es que no sabe dónde termina él y
empiezan los demás y esto provoca situaciones en las que es fácil
que resulte herido.
Este tipo escoge una vida azotada por grandes olas de emoción.
Sabe claramente a qué tipo de mujer atrae. El hincapié que hace en
el amor idealista distorsiona su visión y a menudo se chifla por
alguien inaccesible. Alguien que vive en otro país, que viaja rara
180
vez a su ciudad sería la opción perfecta porque le ofrecería
interminables oportunidades de fantasear. Un encuentro casual
iniciará la primera escena de este guión romántico, y como una
telenovela eterna, la obra vuelve a empezar: el mismo tipo con un
actor distinto.
El amante obsesivo está en un punto aislado de la cumbre de su
adicción amorosa. Todo le hace sentirse sensible, melancólico y
estar a la defensiva, cree que el mundo está contra él. La
desconfianza y la paranoia son las consecuencias inevitables. Como
es impulsivo, le cuesta enfrentarse a las dificultades. Otro
aspecto de su personalidad es su incapacidad para expresar sus
deseos o necesidades. Se convencerá de que el silencio es una
buena forma de mantener la paz y llevar una vida fácil. Pero vive
en el pasado, rebobina escenas conflictivas y revisa lo que podría
haber dicho o hecho. El amante obsesivo lleva la máscara de la
negación y el engaño, y decide quedarse quieto mientras el mundo
sigue moviéndose a su alrededor.
Los hombres que entran en la categoría de amantes obsesivos
son extrovertidos cuando les atrae alguien. Realmente intentan
impresionar en las primeras fases de la seducción, precipitándose
al entablar una relación. No te sorprendas si te envía flores y te
lleva a la ópera o a París a pasar el fin de semana.
Es un hombre soñador al que le encanta pasar el máximo tiempo
posible con su pareja y el menos posible consigo mismo.
Quizá se muestre tímido acerca de su pasado y se centre en
acontecimientos futuros. Pero este tipo no es ningún misterio, es
un manipulador. Quiere amar y ser amado. Es el tipo que está en
181
una fiesta e intenta atraparte con una mirada larga y tendenciosa.
¡Está ahí fuera y es sociable!
(1) El amante obsesivo lleva la máscara de la negación y el
engaño, y decide quedarse quieto mientras el mundo sigue
moviéndose a su alrededor.
[pág. 133]
El amante obsesivo va por la vida con la sensación de que le falta
algo. Se siente incompleto sin la presencia de otra persona con
quien compartir todas sus experiencias: la vida es el vaso medio
vacío en vez de medio lleno.
Este tipo no está en sintonía con su alma. Como individuo
sumamente sensible, su máxima necesidad es entenderse a sí mismo y
su complejo mapa emocional. Aunque cree que se ha pasado la vida
satisfaciendo las necesidades emocionales de otras personas, en
realidad sólo ha creado una sensación de pérdida, un vacío, en su
interior. Recuerda la sabiduría que encierran estas palabras:
“Nadie puede dar a otra persona lo que no es capaz de darse a sí
mismo”. Quizá rece constantemente en el altar de la devoción para
que su amada no lo abandone nunca, pero sigue estando desencantado
y confundido, incapaz de entender por qué no sabe mantener una
relación a largo plazo.
De hecho, aunque anhela una unión apasionada y plena, le
aterroriza eso que busca con tanta desesperación. La abnegación ha
182
distorsionado su visión interna y ha provocado fantasías, anhelos
románticos y esperanzas de uniones futuras, y le han dejado mal
preparado para enfrentarse a la responsabilidad del compromiso.
Centra su atención en lo que le falta en la vida y, en
comparación, lo que tiene le parece poco atrayente. Plantará las
semillas de una relación en un arriate poco profundo y arrancará
de raíz la planta para ver cómo están las raíces, sin dejarles
tiempo para que crezcan. Luego le entra el pánico y crea un drama
para representar su temor al tornarse dominante, posesivo, celoso
y envidioso. Y no puede dejar de repetir esta forma de sabotaje
subconsciente y destructivo.
Asume la postura del amante que echa en falta a su amada,
saboreando tanto la tristeza de la pérdida del amor como la
anticipación romántica de una futura pareja perfecta. El presente
es como un ensayo del momento en que su alma se despierte gracias
al amor, cuando se sentirá realizado y feliz. Decide hacer caso
omiso de las demandas de la realización personal y prefiere la
familiaridad de la dulce melancolía, y la sensación de ansia que
le acompaña adquiere la cualidad de introspección. Este
comportamiento, siendo como es una mera etapa para muchos
adolescentes cuando exploran los extremos de la vida emocional, en
su caso se transforma en una pauta que limita su crecimiento
espiritual.
(1) En la vida real
El vampiro emocional
183
[pág. 134]
El arte del amor
El amante obsesivo es un torbellino de actividad cuando detecta a
su amor. Hace complots y planes para seducir y ganar. De repente
es primavera en diciembre y no puede controlar su alegría. Sus
atenciones obsesivas pueden hacer que el objeto de su afecto se
sienta más como un ídolo que como una persona reconocida,
apreciada y amada por ella misma. Como es inmaduro emocionalmente,
espera lo mismo y exige dedicación total, toda la atención y
disponibilidad constante.
Sin embargo, en cuanto cree que ha cumplido el deseo de su
corazón, se asusta. El temor a la pérdida empieza a dominar sus
pensamientos y utiliza la prueba del fuego para estudiar a su
nuevo amor, a fin de protegerse a sí mismo del abandono. Para
rechazar antes de ser rechazado, intenta no resultar herido
cambiando el clima emocional. En vez de crear una base sólida para
la intimidad, diezma toda esperanza de seguridad en la relación.
Una y otra vez llega a una situación de crisis, lo cual repite el
ciclo de obsesión y pérdida.
Para sobrevivir en el amor abriga un sueño que promete
satisfacción en el futuro, pero le produce insatisfacción cuando
lo consigue. Seduce y luego rechaza, para después readoptar. “No
sabía si te quería hasta que nos separamos, y luego te echaba
mucho de menos”. Éste es el guión que marca la vida del amante
obsesivo. Lo que mejor se le da, su distintivo, es preparar y
jugar al juego de la distancia emocional. Valora a las personas
184
cuando las quiere y se muestra indiferente, incluso malicioso,
cuando no. Se distancia en cuanto se le necesita y reclama
atención y afecto en cuanto otros quieren marcharse. Estas
conductas desequilibradas son las que minan la confianza que
sostiene una relación.
Cuando su ex se ha marchado, se aferra a los recuerdos del
pasado. Al retirarse a su banco de recuerdos para estar a salvo,
cruza la línea que conduce al autoengaño, diciéndose que sus
fantasías del amor representan una relación auténtica e intensa,
ya desaparecida, que se reanudará en cuanto recupere a su amada.
Tira la precaución y la autodisciplina por la ventana cuando coge
el teléfono. Se conformará incluso con un contestador automático e
iniciará la fantasía emocional que necesita con tanta
desesperación. Almacena sus relaciones, acumula pilas de asuntos
sin terminar, al tiempo que persigue esperanzas y sueños poco
realistas del futuro.
[pág. 135]
(1) El gancho
Como es un romántico que nunca está satisfecho con lo que tiene,
deslúmbralo con tu indiferencia y actitud distante. Haz ver que no
te interesa en ningún sentido. Hazle el vacío y lo tendrás a tus
pies, embobado. Este tipo se pone tenso cuando las cosas parecen
predecibles así que no le devuelvas las llamadas, tómate tu tiempo
para responder a sus invitaciones y haz que no sepa a qué
185
atenerse. Demuéstrale tu originalidad en el momento oportuno.
(2) En pareja
Ayúdale a tener en cuenta el territorio que se encuentra entre el
amor y el odio: para él es un vacío sin la gratificación emocional
a la que está acostumbrado por intentar huir o acercarse a él.
Intenta ayudarle a adaptarse a la intimidad tranquilizándole sobre
las ventajas de su relación contigo. Para infundir seguridad en la
relación aliéntale a que se relaje y viva el día a día,
disfrutando de los pequeños placeres de la vida.
Piénsatelo dos veces y vuélvetelo a pensar otra dos más: ¿de
verdad quieres acabar? Si es así, ahórrate a ti y a él muchos
quebraderos de cabeza y dile que no quieres que lo vuestro sea
estable. No caigas en su sentimentalismo o sus intrigas “déjame o
quédate”, que no harán más que prolongar la agonía. Dale el máximo
de confianza y honestidad posibles y márchate.
Un pie en el pasado y otro en el futuro significa que no hay
ninguno en el presente. No entres en ese círculo vicioso.
[pág. 137]
El heredero
El arquetipo: El Inocente, beneficiario de las circunstancias
familiares, sucesor, primogénito
186
El personaje
Qué imagen da
Cómo reconocerle: A la derecha de su padre, trabajando hasta tarde
en la pizzería familiar, arreglando cercas en la finca de la
familia, recogiendo el correo para el negocio familiar.
Expresión/Registro verbal: Regional, urbano, suburbano, pijo,
burgués… todo vale.
Frase para iniciar conversación/ligar: “¿Sabes cómo manejar una
cosechadora?” “¿Cuántas bandejas eres capaz de llevar?” “¿Eres
fértil?”
Inquietud vital: Seguir el negocio familiar.
Accesorios: Dinero para gastos personales, parientes, dormitorio
siempre listo en casa para el hijo nº 1, niñera envejecida,
emblema familiar, tartán del clan familiar, apartamento familiar
en la Costa del Sol.
Profesión: Carnicero, panadero, candelero: los trabajos van desde
ayudar en el puesto de perritos calientes a alquilar el salón de
baile para conferencias de empresa. Aprende el oficio de su padre.
Los muchachos entusiastas heredan la ética laboral del trabajo
bien hecho pero los aristócratas venidos a menos se resisten a
tener un jefe.
Historial amoroso: La búsqueda de pareja empieza pronto. Se acerca
a todas las féminas, desde las debutantes inútiles hasta las
reinas locales de la belleza; las cazafortunas quedan eliminadas.
La historia se repite cuando se casa con la preferida de sus
padres.
187
Canción: “My Generation”, de The Who.
Fantasía: Conocer a una mujer que no sepa nada de sus orígenes y
le quiera por lo que es.
La sombra
Malas costumbres: Trabaja a horas intempestivas. Cuando el deber
le llama, responde. No sabe divertirse. Se olvida de tu
cumpleaños, muestra poca empatía por tu mundo y te compara
desfavorablemente con tu madre.
Lo que no dice/Secretos y silencios: “Necesito un heredero. He
estado esperando esto toda mi vida. La tradición cuenta. La
familia siempre tira”.
Agenda oculta: Anular toda interferencia por parte de sus
hermanos. Hacer ver que el trabajo duro es fácil. Ampliar lo que
se le ha dado.
Mantra filosófico: Se cosecha lo que se siembra.
Accesorios: Secretos de familia, tía-abuela loca, contable de la
familia, copa o petaca de papá, traje a medida heredado, cocina
casera, lema familiar.
Barómetro energético: Si tiene que abrir y cerrar el negocio,
estará demasiado cansado para disfrutar de los frutos de su
trabajo. El heredero duerme con un ojo abierto.
Futuro de la relación: Hace planes; mamá fija fechas. Este tipo
está sobreprotegido y quizá consentido. No sacrifiques tu última
chocolatina.
Canción: “I Want to Break Free”, de Queen.
188
Rendimiento sexual: Cuando está a punto, disfruta del amor bajo
las sábanas. Sexualmente es perseverante pero no es un semental.
¡Querrá que le cantes una nana después!
[pág. 138]
A este hombre le han dado algo en bandeja, pero quizá no sea un
billete para la libertad. Quizá sea una bola y una cadena. Hay
herederos de muchos tipos, desde el vecino de tu casa, que hereda
el puesto de su padre en el mercado, al príncipe de la realeza.
Todo es relativo. Desde pequeño le han inculcado su papel
predeterminado en la vida. Le han educado para que crea en los
vínculos familiares y no le cabe la menor duda de que la familia
es lo más importante.
Ya sea rico o pobre, este hombre es el centro de numerosas
expectativas. Se le considera afortunado, el muchacho que entra en
la vida adulta con el don de la tierra, el dinero o el negocio
familiar. Se siente presionado para satisfacer las ideas de otras
personas sobre quién y qué es. ¿Tiene lo que hace falta? ¿Dará
prioridad a los intereses de la familia? ¿Puede sacar la empresa a
flote? ¿Se ocupará de los miembros más ancianos del clan?
El paquete también incluye una lista de derechos de primer
orden. Seguro, ingenioso y preparado para mantener la atención de
su público, es probable que suelte halagos con facilidad;
cualidades todas ellas que sirven para ligar. Y quizá su derecho
de nacimiento signifique que este hombre puede elegir lo mejor de
189
entre todos los estratos sociales. Pero, como es leal al protocolo
familiar, el heredero recela de los intrusos. Le cuesta romper con
las actitudes características de su círculo familiar.
Probablemente, sus pautas de comportamiento reemplacen sus
ideales.
Su código de conducta puede ser la clave para escoger
compañeros, para el trabajo y para el placer, y el hecho de que se
centren demasiado en su papel puede provocar una búsqueda obsesiva
de la perfección. Está atrapado en una búsqueda narcisista de
alguien parecido a él. Este reflejo en las relaciones satisface su
necesidad de seguridad. El personaje que ha sobrevivido es
producto de una de dos educaciones: privación emocional,
estudiando tal vez en un internado, o consentimiento absoluto por
parte de sus padres, que le han dado todos los caprichos.
Su éxito o su ruina dependerán de la forma según la cual el
heredero se abra camino a través de estos obstáculos. Quizá pase
un periodo de inestabilidad con estallidos subidos de tono,
románticos o escandalosos que serán como un rito iniciático a sus
nuevas responsabilidades. O tal vez sea un anarquista de la clase
privilegiada, que adopte una ética en la que no rija ninguna
norma. Algunos herederos, sobre todo los que tienen los bolsillos
llenos, caen en una frenética espiral de decadencia. Aunque
resulte destructivo, su viaje a la libertad y al descubrimiento
personal representan una forma de introspección. Si quieres
atrapar a un heredero que hace tiempo que dejó atrás a sus amigos
de la flor y nata, dirígete a los locales con espectáculo de las
zonas de mala muerte.
190
(1) Le cuesta romper con las actitudes características de su
círculo familiar. Probablemente, sus pautas de comportamiento
reemplacen sus ideales.
[pág. 139]
El alma del heredero se esconde detrás de una fachada que ha
sido moldeada y abrillantada por sus padres, y quizá durante
generaciones anteriores a la suya. Tal vez le parezca terrible
hacer los cambios necesarios y aceptar nuevas formas de actuar.
Para mirar la vida con otros ojos y ver a través de las
restricciones del sistema familiar, tendrá que replantearse cómo
responder a las exigencias del deber y la lealtad con un verdadero
sentido de la responsabilidad para sí mismo. Y ese tipo de
responsabilidad no está en su lista.
El aristócrata, sobre todo, no estará influido por las
visiones fugaces del pensamiento de nueva ola. Su sistema de
creencias se basa en una confianza extraordinaria en el pasado y
queda confirmada por lo previsible de su entorno. La historia
salvaguarda su compromiso con el grupo y liberarse de esta
subcultura puede suponer un sacrificio.
Más allá de las instituciones del matrimonio y la religión, el
heredero no se dedica a la introspección. Se siente a gusto con su
propia espiritualidad, las dudas no existen para él y no reconoce
las ironías del derecho de nacimiento. Sencillamente, la felicidad
191
recae en quien hace de sostén económico.
El hecho de formar parte de una unidad familiar fuerte le ha
proporcionado una base sólida desde la que empezar la vida. Pero
si tuvo una existencia de clase alta, donde la disciplina y el
comportamiento correcto eran primordiales y la definición de la
intimidad familiar eran la privacidad y la discreción, quizá haya
reprimido toda capacidad de ser espontáneo y haya adoptado una
respuesta limitada ante la calidez emocional. Al otro extremo del
espectro, el hecho de tener unos padres pasivos puede haberle
robado la idea de disciplina, y tal vez muestre unas pautas de
comportamiento en la edad adulta que lo igualen a un “niño
mimado”, que exige lo que quiere en vez de pedirlo. Sea cual sea
su situación, las expectativas que han depositado en él le
plantean tantas exigencias que quizá esté confundido y asustado
sobre cómo cumplirlas.
No obstante, la necesidad que tiene su alma de relacionarse
con otros seres humanos es fuerte y, por tanto, se inicia un
conflicto interno, que resurge para inhibir el amor del heredero
por él mismo. Como consecuencia de ello, quizá salga perdiendo al
equivocarse en las elecciones.
(1) En la vida real
El rentista, el que hereda el negocio, la propiedad o el título,
hijo único, sobrino favorito
[pág. 140]
192
El arte del amor
En algún momento de su vida le llamarán para actuar por el bien de
la dinastía. El matrimonio y la paternidad refuerzan los vínculos
familiares y resuelven problemas de herencia, por lo que le
presionarán para que tenga hijos y se incorpore plenamente al
clan. Esto supone un tormento para el hombre que todavía no ha
decidido si amar a la familia o dejarla.
Si huye de la familia, el castigo será su exclusión del mundo
que conoce. Pero el mundo de los privilegios tiene un precio: el
compromiso, por vistoso que sea el envoltorio. Este hombre es un
eslabón en la cadena genética. La lealtad y la historia compartida
le obligan a escoger entre lo que podría y lo que debería hacer.
Lamentablemente, para este hombre suele existir una discrepancia
entre las exigencias del amor y las del matrimonio.
Regla número uno: olvídate de los cuentos de hadas. No es un
hombre crédulo. Probablemente ceda a la presión familiar para
casarse con una candidata “adecuada”, una compañera que parezca
fuerte, una mujer cuyos estrechos vínculos familiares se
correspondan con los suyos, alguien que pueda manejarse con
habilidad en el clan. Un final feliz supondría que él tendría que
trabajar duro para conseguir independencia. Pero el heredero que
ha tenido una infancia solitaria busca personas que cuiden de él y
le protejan. Tras sobrevivir a una educación muy estricta, siente
el anhelo infantil del amor incondicional. Cuando este muchacho
creció, quizá tuviera una sensación de decepción con respecto al
papel de sus padres en su educación y el resultado inevitable es
193
una enorme pérdida de confianza en sí mismo. Con relación al “niño
mimado”, la atención constante a sus necesidades y deseos hacen
que le resulte difícil manejarse en situaciones en las que no todo
resulta de su agrado.
Para que florezca un amor genuino, el heredero debe resistir
la tentación de permanecer en estas situaciones negativas. La
resolución depende de su capacidad para superar su impresión de
derecho a ciertas cosas. Esta perspectiva le lleva a tener una
falsa sensación de seguridad, en la que cree que le espera una
vida perfecta. Sueña con tener la pareja que él quiere y que
cumpla las expectativas de su ideal de familia. Si es afortunado,
encontrará amor en “un matrimonio apropiado”. El destino y la
dinastía a veces pueden fundirse con éxito y la magia de una boda
por amor verdadero puede darse. De lo contrario, su llamado
privilegio será la ira.
[pág. 141]
(1) El gancho
Recuerda que raras veces está solo en una multitud, así que
tendrás que hacer maravillas desde la distancia. Sonríe, míralo
fijamente durante un rato y luego aparta la mirada. Le atrae el
aplomo, la elegancia y la soltura naturales. Muéstrate apasionada
por la vida: este tipo aprecia el optimismo. Si de verdad te
interesa, sé respetuosa y modesta.
194
(2) En pareja
La fórmula para ganar la medalla de oro es conseguir confianza.
Intenta darle la confianza necesaria para que se muestre intuitivo
con sus emociones. Pero si te precipitas, no serás la reina de su
futuro. Su necesidad de ser amado quizá no sea nada sutil y tal
vez esté acostumbrado a conseguir lo que quiere. Reconforta su
corazón poco a poco: el amor por la música o la poesía pronto
transformarán su timidez en sensualidad.
Este hombre tiene expectativas no sólo para ti sino para él. Un
fracaso amoroso significará con toda probabilidad que responderá
rechazándote antes de que tú le rechaces a él. Su factor de
enfriamiento implica que sabe cómo mostrarse frío, así que no te
sorprendas si contraataca con el “no me toques”.
No le consientas. Eres su pareja, no su madre.
[pág. 143]
El bohemio
El arquetipo: El Mago, amante de la libertad, idealista romántico,
intuitivo y poco ortodoxo
El personaje
Qué imagen da
Cómo reconocerle: Cruzando la calle para comprar leche con un
195
batín, fumando maría en un jardín japonés a las 10 de la mañana, o
codeándose alegremente con gente distinguida en un antro de
perdición secreto. Es el que destaca en la multitud.
Expresión/Registro verbal: Una mezcla de lenguaje de la calle y
lirismo romántico. Habla con acento pronunciado, el que se ha
inventado, y cultiva su lenguaje para su propio deleite. Le
encanta oír las palabras brotando de su boca ante un público que
tiene que descifrar su significado.
Frase para iniciar conversación/ligar: “Sé una trovadora y tócame
el laúd”. “Qué ojos tan bonitos tienes, caperucita roja”. “¿Has
leído a los poetas metafísicos?” “Querida, estoy enamorado de tu
mente”. “¿Estás en la onda?”
Inquietud vital: Explorar y explotar la sensualidad.
Accesorios: Coche raro o clásico para desplazarse, primeras
ediciones de los libros, montañas de periódicos viejos, colección
de sillas esquineras, alijo de opio.
Profesión: Rentista o pobre de solemnidad: ser bohemio es una
ocupación a tiempo completo.
Historial amoroso: Las adora y las acosa.
Canción: “Love Like Laughter”, de Beth Orton.
Fantasía: Que le den de comer uvas y le acaricien al mismo tiempo.
La sombra
Malas costumbres: Muy crítico: busca imperfecciones en la forma
que tienes de hacer cosas mundanas, cotidianas. Se pierde en
nimiedades, se frustra cuando no haces las cosas a su manera,
196
llega tarde a las citas y se olvida el vino tinto.
Lo que no dice/Secretos y silencios: “¿Se me ve la quemadura de
cigarrillo? Ser un rebelde es cansado. Por favor, no me partas el
corazón”.
Agenda oculta: Seducirte para que entres en su mundo de palabras y
sabiduría, libertinaje y rebeldía, sueños y exquisiteces.
Utilizarte como el pimiento chile: para sazonar sus días. Ser
aceptado plenamente.
Mantra filosófico: El mañana, gente, es lo que cuenta.
Accesorios: Vino, mujeres y música no comercial, herbario, tabla
de cortar y cuchillo para la mantequilla de cacahuete, ceniceros
robados, acostarse tarde, ropa usada de otros.
Barómetro energético: Como una serpiente en la hierba, sin que el
vientre le toque el suelo, este tipo se dejará caer para el Juicio
Final.
Futuro de la relación: Crea unas riendas invisibles y monta al
tigre a pelo para el viaje de placer de tu vida.
Canción: “Water From A Vine Leaf”, de William Orbit.
Rendimiento sexual: Poco sexo deprisa y corriendo: a este tipo le
gusta tomarse su tiempo. ¡Te convertirá en una bohemia!
[pág. 144]
Características del tipo
El bohemio es poco original de pensamiento, palabra y obra. Su
enfoque vanguardista procede de su objetivo instintivo de
definirse como persona aparte del resto, y está muy a gusto con su
197
singularidad. La necesidad de ser estrafalariamente distinto en
todo lo que hace es fundamental, al igual que la informalidad.
Obsérvalo en acción y verás que improvisa su identidad poco
concreta, cambiante; tiene en cuenta todas las experiencias que el
mundo le ofrece y reacciona a ellas con espontaneidad, aunque su
única idea preconcebida es que su respuesta debe ser distinta. Su
experiencia de la vida diaria parece ser más reflexiva que la de
otras personas. Para él, todos los segundos cuentan. Parece
hacerlo todo con cierta inconsciencia, con cierto ritmo. Si
prepara té o café, seguro que será té de jazmín o café recién
molido. Sin leche, le mataría el sabor. Y para el bohemio el sabor
es lo que importa.
Inevitablemente, este hombre se meterá de lleno en travesuras
raras cuando dé rienda suelta a su libre albedrío, pero su
absurdidad es totalmente espontánea. En este tipo no hay nada
premeditado, y por eso es especial. Es vanidoso pero su vanidad es
una reacción ante el exterior más que el interior. Cuando se
siente perseguido por los demás empieza a reconocer y a disfrutar
de su propio atractivo. Quizá sólo tenga un espejo en casa pero
eso no significa que carezca de inseguridades. Socialmente brilla
con luz propia. Le encanta estar donde hay ambiente. Pero debe ser
de una manera que le permita sentirse seguro: quiere sentir que la
gente busca orientación en él. Y lo hacen. A este tipo le aprecian
quienes comparten su visión y quienes aspiran a ser tan
independientes de pensamiento como él. Es maravilloso en un grupo
o en el mano a mano. Como es un observador con talento, no se
pierde nada.
198
En este hombre abundan las particularidades y él atraerá al
bicho raro que hay en ti. El exotismo es su distintivo. Pero su
deseo de ser distinto tiene un inconveniente: lo imprevisible de
sus reacciones. La rebeldía determina su vida emocional: puede ser
imprevisto, egoísta y testarudo. Pasa de ser cariñoso a mordaz y
vuelta a empezar. Y tal vez posea una memoria impecable, capaz de
recordar lo bueno y lo malo, los halagos y los desaires.
El bohemio no es consumista pero se rodea de ciertos objetos
cuidadosamente escogidos que muestran su necesidad de una vida
rica en referencias culturales. También se implicará en culturas
alternativas que aboguen por una actitud estrafalaria. Vive al
filo de la sociedad: nunca acaba de estar ni fuera ni dentro del
sistema.
(1) Su experiencia de la vida diaria parece ser más reflexiva que
la de otras personas.
[pág. 145]
El bohemio evolucionado es un verdadero fatalista. Su actitud
hacia la vida se basa en gran parte en el optimismo: se deja guiar
por el instinto. Este tipo ha reconocido el papel que el azar
desempeña en los acontecimientos que han marcado su vida y le
otorga la debida importancia: ha aprendido una de las lecciones de
la existencia terrenal. El tipo menos experimentado y quizá más
joven seguirá luchando contra las contradicciones y variables de
199
la vida.
El bohemio tiene que defender su individualidad en un mundo
concebido para la mayoría. Debe enfrentarse a la presión de los
demás para ajustar sus percepciones sobre cómo debería ser. Como
sus valores y ética pueden ser más difíciles de aceptar que su
persona, se habrá acostumbrado a justificar su filosofía personal.
Y nadie sabe justificar su vida como él. Se ha esmerado en dar
forma a su respuesta.
Le gusta considerarse una personalidad compleja. Quiere que le
vean seguro de sí mismo, que tome decisiones que le distingan del
resto, despreciando las normas y reglamentos que definen la
cultura contemporánea dominante y cuestionando el pensamiento
lineal. Pero también se proyecta como alguien pensativo,
preocupado por honrar el impulso del alma, alguien que le da
vueltas al sentido de la vida. De hecho, es increíblemente
despreocupado, más dedicado a seguir adelante con una muestra
natural de estilo que otra cosa. Espiritualmente se siente libre,
no limitado por ninguna obligación a comportarse de una forma
concreta.
Sin embargo, es sensible e intuitivo, y sabe lo que valora. El
placer es su punto de partida. Todo lo que sea lánguido, lujoso y
romántico es muy significativo para él. La contraseña para su
psique es la veneración. Le gusta obsequiar al mundo y lo hace a
menudo con su imaginación vívida y sensual.
Al no pertenecer por completo al mundo ordenado y cotidiano,
el bohemio afirma sus convicciones. Y, siendo fiel a sí mismo,
crea un lugar al que pertenecer, su lugar bajo el sol. Este hombre
200
es un ejemplo extraordinario de la fortaleza individual basada en
la confianza personal.
(1) En la vida real
El hippy envejecido, criador de llamas, marginado social, artista,
cuenta-cuentos, inspirador
[pág. 146]
El arte del amor
La libertad resulta esencial para el bohemio enamorado. Necesita
la libertad de estar alegre y la libertad de sufrir. Debido al
hecho de que ha superado la seguridad de una identidad fija, tiene
acceso a los extremos de la emoción física y espiritual. Le
deleita su capacidad de ser versátil y adaptable, y nunca
comprometerá su independencia aceptando un único rol. Por eso el
bohemio necesita encontrar una confirmación de su valía en el
mundo.
Por desgracia, no siempre tiene en cuenta los sentimientos de
quienes le rodean. Le gusta pensar que él es más listo y le
resulta prácticamente imposible admitir una derrota, o reconocer
su propia obstinación. Como nunca comprometerá su identidad, se
vuelve auto-protector si siente que lo están compartimentando. Así
pues, la arrogancia y la actitud extremadamente defensiva pueden
amargar su capacidad para amar. Es el que siempre está fuera de
lugar y piensa cambiar. Se arriesgará a salir perdiendo en el amor
en vez de ser derrotado. Eso es lo más duro que su pareja tendrá
201
que aceptar. Recuerda que ser “distinto a la norma” aísla pero
también puede ser una fuente de inspiración.
Con tal elección en el cuadro de personalidad, el bohemio
puede apuntar a cualquier objetivo amoroso. Quizá sea un ligón sin
igual y le encante jugar. Propiciar el caos cuando hay calma y
calma cuando hay caos. Pero, aunque juega con los corazones, en
secreto busca una compañera. Quiere inspiración y pasión. Busca a
alguien que comparta su entusiasmo por la vida.
La declaración de amor de un bohemio es digna de confianza. Ha
invertido tanto tiempo en la búsqueda de la autenticidad que
cuando la encuentra, sabe distinguirla. Se entregará completamente
para crear un remanso de paz en el que el amor pueda crecer.
Respetará y responderá a las muestras de afecto de su pareja,
devolviendo sonrisa con sonrisa, beso con beso, caricia con
caricia. Esto representa una dulce fórmula para el amor, con todas
las oportunidades de confiar, arriesgarse y compartir que ello
conlleva.
Pero si te somete a su mirada escrutadora, vete con cuidado.
Que el mantenimiento saldrá caro es quedarse corto. El coste de un
excéntrico es enorme; de hecho, nunca termina. Por muy
gratificante que sea, con su visión única de la vida y sus
opiniones sobre cómo vivirla, pondrá tu paciencia a prueba. Como
se implica tanto desde el punto de vista romántico, se irritará
ante lo que él considera que son tus imperfecciones y exigirá que
cumplas sus extravagantes requisitos de protocolo. Su romanticismo
no puede soportar la futilidad. Debería pero, ¡ojo!, todos somos
humanos.
202
[pág. 147]
(1) El gancho
Sé directa si quieres que se fije en ti. Compórtate con
tranquilidad pero sin indiferencia. Atrévete a ser distinta. Sé
auténtica y sensata. Preséntate como alguien que adora la vida y a
quien no importa compartir el secreto. Cautívalo con tu mirada
inflexible, quien se arriesga gana, y luego provócale con tu
sencillez y humor.
(2) En pareja
Refuerza la relación siendo sensible ante su vulnerabilidad cuando
se abra a ti. Debes estar dispuesta a abrazar su visión del
futuro, pero no pierdas de vista tu propia identidad. Cread
juntos. Tómalo con una pizca de sal. Cuando pierda los estribos,
no reacciones a sus arrebatos. De ese modo se sentiría más
inseguro. Sal de la habitación y dale tiempo para que se calme. Es
una persona maravillosa y te asombrará con sus ideas estimulantes.
Córtale las alas.
Atrévete a vivir.
203
[pág. 149]
El amante de la moda
El arquetipo: El Mago, guerrero del estilo, fanático de la
belleza, rey de lo más “in”
El personaje
Qué imagen da
Cómo reconocerle: Es fácil. Le encanta su papel de complacedor de
la gente. Se comporta en una multitud como si compartiera vidas
pasadas con cada uno de ellos. Beso por aquí y por allá, abrazo
por aquí y por allá, luego…
Expresión/Registro verbal: Habla de moda: el color, la forma y el
corte dejan poco espacio para la política y la filosofía. Este
hombre es la superficialidad personificada. Pero ¿a quién le
importa? El último cotilleo es quién fotografía a quién.
Frase para iniciar conversación/ligar: “¿Tienes edad suficiente
para ser una celebridad?” “Me parece que eres mi nuevo
descubrimiento. Gírate hacia la luz para que te vea el perfil… ah,
divino”. “¿Tienes algún hermano?”
Inquietud vital: No me dedico a la moda. Es una forma de vivir.
Accesorios: Cinta métrica, alfileres, bloc de dibujo, biblioteca
de diseños de época, camiseta negra, sushi, pasaporte, carpeta de
trabajos, Polaroid.
Profesión: Diseñador de moda, fotógrafo de moda, redactor de moda,
estilista de peluquería y maquillaje, coreógrafo de pasarela,
modelo.
204
Historial amoroso: Desinhibido con las celebridades. Incestuoso
como es, el pasado es un misterio. Odia que le etiqueten como
heterosexual u homosexual así que da por supuesto que es bi. No
pierdas el tiempo en calcular cuántas relaciones habrá tenido.
Canción: “The Model”, de Kraftwerk.
Fantasía: Ponerse elegante para que lo desnuden en una orgía para
travestirse titulada “Glamurama” en algún palacio italiano.
La sombra
Malas costumbres: Te absorbe y luego te escupe, te da una puñalada
en cuanto le das la espalda y hace un mohín cuando no se sale con
la suya.
Lo que no dice/Secretos y silencios: “No me gustas pero te
necesito. Encanto, ese color no te favorece nada de nada. No me
eclipses”.
Agenda oculta: Ganar medallas de oro gracias a los que mueven los
hilos del mundo. Fomentar su carrera a cualquier precio; aniquilar
a la competencia.
Mantra filosófico: La calidad del último espectáculo es lo que
cuenta.
Accesorios: Valium para el estrés supersónico, kava para el
equilibrio orgánico, drogas de diseño, abogado para los casos de
despido improcedente, madre en un campamento de caravanas para
firmar autógrafos cuando él no esté por ahí.
Barómetro energético: Este tipo es como un yo-yo: en lo más alto y
en lo más bajo. Su atención (cuando la centra en ti) es
205
abrumadora, su atención al detalle exasperante.
Futuro de la relación: Si te da el papel, habrá momentos
inolvidables. Pero ¿querrá compartir el primer plano?
Canción: “You’re So Vain”, de Carly Simon.
Rendimiento sexual: La mayoría de las veces será sexo rápido, que
contrastará con los escasos momentos robados en los que se deja
vencer por el romanticismo.
[pág. 150]
Bienvenida al mundo del mercader de sueños. Bienvenida al mundo
del aquí y ahora. Muchos son los llamados pero pocos los elegidos.
Este tipo es un visionario de la creatividad. Irradia inspiración.
Tiene una pose. Cualquier publicidad es buena publicidad. ¿Tímido
ante las cámaras? Ooh, nunca. Siempre está preparado para los
primeros planos. Esta reina del drama gregario rezuma demasiada
categoría de estrella para figurar en la categoría de los meros
mortales. Vive cada momento como si se tratara de un documental
titulado “Mi vida” que es obra suya. Abre su caja de Pandora y
encontrarás el eslabón perdido con su pasado. Se trata de un
hombre preocupado por pasar de la última fila a la primera. Aspira
a ser el rey del meollo mientras los focos rebotan contra las
paredes.
Él es su propia creación a partir de lo que se ha hecho antes
y lo que se hará de nuevo. Olvídate de pasar las tardes en un
café: este tipo busca lo nuevo, lo último. Sabe lo que es actual y
206
lo que no; lo que va a morir y lo que está muerto. Este hombre del
momento crea escuela, allá donde va otros le siguen. Nos llevará a
lugares donde nunca hemos estado y, a cambio, exige estatus y
reconocimiento profesional.
El amante de la moda que tenga éxito será camaleónico o
poseerá la intemporalidad del Estilo Sublime. Adopta muchas
fachadas o sólo una. Es un manipulador de bazas, habilidad que ha
aprendido en la jungla de los egos. Su propio ego desmesurado hace
que le guste jugar y, en este sentido, conserva un espíritu
juvenil. Hay una parte de este tipo que acepta el engaño, puede
llegar a actuar de forma maquiavélica. Inescrupuloso y falso, sus
métodos de persuasión le garantizan un puesto en el editorial de
la revista de moda. Pisoteará a los muertos para conseguir lo que
quiere. Pero no es un negociador con talento porque su atención al
detalle le abocan a ser demasiado perfeccionista. En el trabajo no
le importa delegar pero siempre exigiendo lo mejor.
La creatividad para el rey de lo más “in” es la madre del
invento. Tiene una personalidad fluida, siempre cambiante, que se
adapta para ajustarse a su obsesión actual. Su sed de estímulos e
inspiración pueden convertirlo en un esclavo de “lo más”. Su
aspecto femenino va encaminado a la construcción de una identidad
célebre. Formar parte de los cognoscenti del mundo de la moda
implica que debe actualizar su perfil constantemente. Aquí y
ahora. La vida al filo de la navaja es diversión que se alimenta
de adrenalina. Se inspira en su última musa. Entonces esa musa
(sea hombre o mujer) entra en su círculo particular. El amante de
la moda sólo vive para materializar sus propias fantasías y
207
obtiene el placer gracias a la mezcla de lo real con lo irreal.
Robar la belleza es su ocupación a tiempo completo.
(1) Tiene una personalidad fluida, siempre cambiante, que se
adapta para ajustarse a su obsesión actual.
[pág. 151]
Su percepción de la aventura le lleva a explorar el campo de los
sueños. Por superficiales que puedan ser, la satisfacción le
transporta a un lugar de confianza en sí mismo y estrellato. La
moda es su pasión y le llena, al igual que la adoración que le
transmite el público. Como mucho, llegará a ocupar el estatus de
icono. Pero, como reza el refrán, no es oro todo lo que reluce. El
mundo de fantasía puede entorpecer el viaje de este hombre
conduciéndole a la negación de sí mismo. El ansia de fama y
fortuna le impide tener una comprensión más íntima de sí mismo, lo
cual crea un conflicto entre los mundos de la futilidad y la
sustancia. Como sólo muestra su fachada, el amante de la moda
queda definido por lo que aparenta y por lo bien que lo presente.
El aspecto creativo de su personalidad es el que ofrece una
ventana a su corazón y alma. Si tienes la oportunidad de verlo en
acción, obsérvalo concienzudamente desde el margen. Su
consideración de belleza es fundamental para entender su idea del
mundo. A través de la belleza es capaz de combinar aquellas
cualidades que son un placer para la mente y los sentidos. En su
208
forma de entretejer las fuentes de inspiración demuestra su
capacidad para tomar lo que necesita del mundo exterior y
reinterpretarlo a su manera. Hurgando en el pasado, adapta y crea
las imágenes de estilo de vida, prediciendo quiénes seremos, cómo
viviremos y qué vestiremos mañana.
Su valía personal parece intacta, pero lo que motiva a este
tipo es la necesidad de aprobación constante. Se valora a sí mismo
a partir de la mirada de otros, como un huérfano, lleno de
inocencia boquiabierta y asombro. Viviendo la vida del amante de
la moda, siente que forma parte de una familia o colectivo,
mezclándose con muchos rostros distintos, muchas tribus distintas,
aceptado por su naturaleza poco conformista, rebelde incluso.
(1) En la vida real
El adicto a ir de tiendas, esclavo de la moda, guardián del
estilo, suscriptor de revistas de moda
[pág. 152]
El arte del amor
Ah, el amor, ah, el romanticismo, ah, la cena para dos. Música,
luces, cámara, acción. Para el amante de la moda el arte de amar
es puro teatro. Todo debe ser perfecto; todos los detalles
cuidados. El cortejo necesita un lugar adecuado: es la excusa
perfecta para crear la ocasión. Se derretirá bajo la luna, te
reirá los chistes. El romanticismo será excepcional si él quiere.
Su corazón ansía la aventura. Está dispuesto y deseoso de despegar
209
a la órbita de la utopía donde los sueños pueden interpretarse,
donde un roce de labios se convierte en un boca a boca.
Su sensibilidad operística le convierte en el mikado del amor.
Idolatra lo que él ve como puro, pero necesita una pareja que goce
tanto con el placer sensual como él. Una relación peligrosa le
atraerá al máximo: “Me encanta, lo quiero y tengo que tenerlo”.
Para este tipo es difícil conformarse con una sola cosa. Es un
coleccionista. Como era de esperar, cualquier objeto del deseo
debe tener buen aspecto: sonrisa, ojos y dientes grandes. La
salida es tu entrada. La desventaja de este mundo es tu fecha de
caducidad. Este tipo ansía lo oculto e inexplorado. Querrá ganarse
el cariño de su mirada errante. Siempre ojo avizor, mirando por
encima de tu hombro, oteando el horizonte. A no ser que esté
perdidamente enamorado, su compromiso con el amor es temporal.
Para dejar ver su lado más humano y blando, el amante de la
moda tendrá que abandonar el dramatismo que ha generado para su
vida. Los momentos de extravagancia exagerada tendrán que acabar
siendo limitados si de verdad quiere ser auténtico, compartir con
otra persona sus temores y emociones más íntimas. Pero estar
tranquilo y apartado de la presión de las exigencias profesionales
puede ser algo poco común. Cuando llega la temporada, su horario
se prolonga las 24 horas del día y de vez en cuando perderá los
estribos. Los berrinches y las críticas despiadadas son uno de sus
métodos para combatir la ansiedad extrema. Estás avisada: no es
consciente de su capacidad para herir en lo más hondo. Los enfados
se le pasan rápido. Los supera y sigue con lo suyo. Gracias a su
magnetismo, te hará volver a por más, pero debes tener la
210
suficiente fortaleza para enfrentarte al desafío que supone el
momento en que deje de ser el foco de atención.
[pág. 153]
(1) El gancho
Sé una estrella rutilante: coquetea desde la distancia. Gánatelo
mostrándote misteriosa y tímida. No te dejes encasillar. Debes
tener un estilo natural y, sobre todo, tener buen porte.
Tranquila, no te precipites. Pero sé consciente de lo que te
espera si quieres entrar en el mundo de este tipo. Estás ahí para
reafirmar su fama. Cuando le hayas pillado desprevenido con tus
encantos seductores y juguetones, asegúrate de que le dejas claro
que estás preparada para la fantasía a la hora de los sueños.
Hagas lo que hagas, no compitas.
(2) En pareja
Cuando aceptes una invitación a la intimidad, actúa con rapidez
para satisfacer su desmesurada curiosidad. Tiene mucha energía y
tendrás que esforzarte para estar constantemente a la altura de su
faceta inspirada. La mejor manera de hacerlo es convertirte en su
fuente de inspiración. Sé espontánea en tus muestras de afecto.
Necesita experiencia de primera mano sobre quién eres para
cimentar una relación. Este sentido de intercambio profundo y
genuino es lo que le falta en su mundo superficial y
unidimensional de conocidos.
211
Si sientes la necesidad de alzar el vuelo, no adoptes una postura
pasiva y evita provocar rumores. Como persona que complace a los
demás, su fachada e imagen de sí mismo quedarán inevitablemente
dañadas si siente que es el abandonado. Ándate con pies de plomo y
permítele que tenga una reacción visceral. Quizá sea vengativo.
Déjale aceptar el cambio de circunstancias: no le intentes
tranquilizar ni envolver en algodones. Es un superviviente y puede
recuperarse y llevarse con él lo mejor del tiempo que pasasteis
juntos.
Dale una sensación de amor a tiempo completo mientras vives la
magia del momento.
[pág. 155]
El hombre zen
El arquetipo: El Altruista, vidente, médium que ve todos los
aspectos de una cuestión
El personaje
Qué imagen da
Cómo reconocerle: En una reunión, envuelto en un aura de amor,
compasión y felicidad. Sentado bajo el árbol del conocimiento, el
hombre que irradia luminosidad.
212
Expresión/Registro verbal: Sencillez, claridad, autenticidad:
escucha más que habla.
Frase para iniciar conversación/ligar: “Cuando el discípulo esté
preparado, el maestro llegará”.
Inquietud vital: Convertir el mundo en un lugar mejor.
Accesorios: Gong, alfombrilla para oraciones, vela.
Profesión: Guru, monje, sacerdote, asesor espiritual o maestro,
mago blanco, místico de nuestro tiempo.
Historial amoroso: Voto de silencio.
Canción: “Natural Mystic”, de Bob Marley.
Fantasía: Dos que se convierten en una unidad.
La sombra
Malas costumbres: Es demasiado amable, demasiado sincero y no
siempre está disponible.
Lo que no dice/Secretos y silencios: “¡Despierta! Soy humano y
también necesito amor”.
Agenda oculta: No la tiene.
Mantra filosófico: Cultivar la amabilidad afectuosa.
Accesorios: Ninguno.
Barómetro energético: Se guarda la energía para abrir el tercer
ojo y restablecer el narcisismo.
Futuro de la relación: Espera a su amada en cualquier momento.
Canción: “Spiritual Love”, de Urban Species.
Rendimiento sexual: Es un maestro semiconsumado del sexo tántrico.
213
[pág. 156]
Es un asceta. Lleva una vida no tóxica y se abstiene de todo lo
que no le resulte beneficioso: alcohol, cigarrillos, cafeína,
drogas recreativas, promiscuidad sexual. Existe dentro del mundo
pero no forma parte de él, acepta su lugar como ayudante y hombre
generoso. Se caracteriza por su sensación de unidad con lo Divino:
estado que experimenta a través del misticismo, la revelación o
sentimientos profundos como el júbilo y la satisfacción.
Este miembro hecho y derecho del planeta Tierra es consciente
de todo lo que hace. Su objetivo es devolver la armonía a un mundo
confundido y se esfuerza en no hacer daño a otras personas. Es una
persona sabia, considerada y respetuosa. No le tienta ni ser más
rico ni mejorar su condición social. Tampoco busca la fama: se
mantiene alejado de toda apariencia de falsedad.
El Zen es un hombre reservado pero sólo se esconde cuando
necesita recargar energías. No es inalcanzable e incluso puede
resultar excesivamente sociable. Disfruta de la compañía de los
demás y no declina invitaciones. Es muy participativo y resulta
gracioso sin ser cruel, cariñoso sin ser condescendiente y honesto
sin dárselas de superior.
Su falta de miedo y su magnetismo hacen que resulte atractivo
para casi todo el mundo y no le importa lo más mínimo la opinión
que la gente tiene de él. Está tranquilo y feliz en su propia
compañía. Este hombre se ha aceptado a sí mismo y se ha enfrentado
a las razones de su existencia. Directo, firme y ético, el hombre
214
zen no escatima sonrisas. Es el armonizador supremo y a menudo la
gente recurre a él para que resuelva los malentendidos entre sus
amigos.
A este hombre le encanta levantarse temprano. Se despierta
fresco como una rosa y se prepara para el día practicando un poco
de tai chi, chi gong, yoga, el método Pilates o cualquiera de las
técnicas orientales de moda para el bienestar corporal que lleva
años estudiando. Acto seguido, disfruta de unos momentos de
tranquilidad, sentado meditando o visualizando mandalas para
conseguir la paz mental. Luego se hace un zumo con su combinación
preferida de zanahoria, apio, jengibre y manzana, que es su
inyección de vitalidad. Para él, cada día es un nuevo comienzo.
Este hombre tiene defectos pero, en comparación con cualquier
otra persona, son casi imperceptibles. La amabilidad es su
característica principal y tiene una paciencia infinita. Reserva
con antelación una serie de actividades extraacadémicas, como los
ejercicios espirituales, festivales pacíficos, encuentros
ecológicos y sesiones de purificación. Será una persona
excepcionalmente tranquila entre la multitud de entusiastas
excitables. Lo que diferencia al hombre zen de los otros tipos es
que vive el aquí y el ahora. Cuando te habla, está presente. ¡Qué
alegría!
(1) Se caracteriza por su sensación de unidad con lo Divino.
[pág. 157]
215
El hombre zen es un ser evolucionado. Ha visto su inmortalidad. No
teme la muerte, por lo que se ha convertido en la luz que guía a
los demás en su viaje hacia una conciencia superior. Caracterizado
por su compromiso con una forma de vida espiritual, siente que el
mundo le necesita para transmitir un mensaje de amor y paz. Tal
vez sea un iniciado de una organización religiosa o espiritual
pero eso no es esencial.
El hombre zen tiene un alma magnífica. Al igual que un junco
de excepcional belleza que brota del pantano, no puede pasarse por
alto. Este tipo ha experimentado la transformación psicológica y
espiritual: logro que mucha gente considera irrealista o
innecesario. Ha analizado su vida y la ha cambiado abandonando
viejas actitudes y patrones de karma. Es riguroso con su
mantenimiento espiritual, purifica su ser intentando purgar las
impurezas y quemar sus aspectos negativos. Además, en el plano
terrenal de allí donde pisa, ha aprendido las lecciones de la vida
y ha crecido a través de las adversidades para avanzar por el
camino de la iluminación. Necesita disciplina y perseverancia para
sacrificar aspectos de sí mismo, pero su alma está en tan buen
estado porque se ha mantenido fiel a su objetivo.
Se mantiene alejado de toda actividad que infle su orgullo y
su ego. Ambos interrumpirían su voz interior y contaminarían la
purificación a la que se ha sometido. Pero nunca se queda parado
en el proceso de cambio, considera que la verdad se descubre
viviendo. Está siempre abierto a la experiencia, se permite sentir
216
sus sentimientos y luego controlarlos.
Siente compasión por todos los seres sensibles y considera que
las plantas, los animales y los humanos poseen un alma. Esto hace
que resulte una compañía agradable. Es fácil comunicarse con él
porque es indulgente consigo mismo. Ha dejado de lado los juegos
psicológicos, las inseguridades y la dureza y ha adoptado al amor
por mentor.
Este tipo es perspicaz y tiene capacidad para curar. Su
profunda introspección le ayuda a comprender y tolerar los
defectos y proyecciones de o tras personas, y su experiencia de
cambio atrae a los demás hacia él. Empleando sus grandes dotes
consejeras, es capaz de iniciar una transformación positiva. Nunca
se siente abrumado por las dificultades, y cuenta con la madurez
suficiente para encontrar oportunidades en lo que la vida ofrece a
todos y cada uno de nosotros.
(1) En la vida real
El filántropo, escritor de libros de meditación, gurú autollamado
y orador circulante, tipo con veinte ahijados
[pág. 158]
El arte del amor
El hombre zen es el mejor partido del siglo. Es radiante y su
fuego interno atrae a las amantes como las mariposas a la luz.
Para él, el amor es el orden universal. Necesita amar y que le
amen. Aspira al ideal más noble del amor: un estado en el que
217
compartirlo todo con la otra persona.
Enamorarse de un hombre zen brinda la oportunidad de encontrar
el amor y el consuelo incondicionales. Se entrega a la vida de
forma compasiva y levanta un imperio inexpugnable de fortaleza y
claridad emocionales. Cuando oye el grito del corazón humano,
responde con ternura y sentido común. No es el tipo de hombre que
te tomará el pelo sólo para sentirse más macho. Él es el sostén,
no el ladrón, de muchos corazones. Sus atributos hacen que resulte
atractivo para las mujeres que buscan un hombre completo. Tales
tesoros no abundan y, sorprendentemente, algunas mujeres los
consideran demasiado buenos.
Busca a alguien que pueda dar y recibir. Acierta en sus
juicios sobre las personas y tomará la decisión que le dicte su
corazón. Si el hombre zen se fija en ti, te verá como la flor de
un árbol y esperará a que madure el fruto. No es avasallador en el
amor y pondrá cuidado en no espantarte con la profundidad de sus
sentimientos.
Siente una fe profunda sobre el poder del amor y, en
cuestiones del corazón, se lo juega todo a una carta. No obstante,
reconoce que hay obstáculos que dificultan las relaciones
amorosas. Ha aprendido a aceptar las heridas de su corazón, y
utilizará la relación para aprender más de si mismo y de ti.
La ventaja más importante del hombre zen es su carácter no
sentencioso. Te cuidará y apoyará en tus momentos bajos. A cambio,
debes responsabilizarte de tus actos. Con este tipo no hay forma
de esconder los sentimientos verdaderos, no se chupa el dedo. Y no
des por supuesto, sólo porque es un maestro semiconsumado del arte
218
tántrico, que lo soportará todo. Nada más lejos de la realidad. El
hombre zen reconoce el chantaje emocional a la legua. Te plantará
cara si te pilla y te dejará las cosas claras. Ésta es su idea de
integridad: exige un intercambio honesto entre dos almas y espera
que haya sinergia. Si se enamora de ti, te inundará de pétalos de
rosa y se ocupará de todas tus necesidades. Su intención es dar
sin esperar nada a cambio pero incluso el hombre zen más
evolucionado puede tropezar.
Es el amante ideal porque integra por completo las polaridades
de sus energías masculina y femenina. Esto implica que,
sexualmente, lo pasaréis en grande. Si encajas, esperará que
aportes tu magia personal y querrá experimentar tu sexualidad
plenamente, disfrutando de cada caricia, momento a momento. No te
resistas a buscar nuevos horizontes con él. Lo más importante que
debes tener en cuenta es que quizá sólo tengas una oportunidad.
[pág. 159]
(1) El gancho
No te precipites: entabla amistad primero y espera a ver adónde
llega. Muéstrate equilibrada. Demuéstrale que posees una
integridad innata. Luego aumenta la intensidad pasando más tiempo
juntos. Coquetea con tu hombre zen entrando en su espacio personal
con ternura y sensibilidad. Perfecciona tu mirada insinuante.
(2) En pareja
219
La principal preocupación del hombre zen es si podéis vivir en
armonía, como la luna y el sol. Pero no comprometerá su estilo de
vida. Él espera que tú disfrutes de lo que él tiene que ofrecer.
Intenta no interrumpirle la vida y no te vayas a vivir con él
hasta que hayáis pasado un año juntos como pareja. Respeta su
necesidad de tranquilidad, continúa con tus propios intereses y
hazte vegetariana.
Si quiere cambiar tu cama por un calvario, pídele que se tome un
respiro fuera de casa contigo antes de tomar una decisión. Si se
convierte en una verdadera lata, háblale para levantarle la moral
como haría él y reza por él cuando te marches del nido de amor.
Seguid siendo amigos.
No intentes buscar pruebas o razones si te dice que te ama. Es
verdad.
[pág. 160]
Agradecimientos
Estamos en deuda la una con la otra por una colaboración
gratificante que nos ha enseñado humildad, cortesía y audacia.
Gracias a la luna llena en Escorpio y a las risas que dieron vida
a este libro. Gracias a todas las personas cuya ayuda y dedicación
hicieron posible la redacción de esta obra. A todos aquellos que
220
nos dieron el apoyo necesario. A Griselda Laroche y su mesa de
cocina que, sin duda, tiene poderes propios. A Lisha Spar, nuestra
agente, que creyó en nosotras desde el comienzo.
Gracias a Gerard Cunningham por hacernos empezar y por asumir
el riesgo. A Nathan Gelber por enseñarnos que los muebles son más
importantes que los zapatos. A Raffik Brodie, por tu talento y el
tiempo dedicado a nuestras palabras. Gracias a Martín Lloyd-
Elliott y a Mary Vango por su generosidad.
Gracias a todo el personal de Quadrille por su entusiasmo e
indicaciones inagotables; a Alison Catie, Anne Furniss y Mary
Evans por su integridad, orientación y flexibilidad; a Richard
Rockwood y Ben Owen por su talento creativo; a Lawrence Morton por
su inspiración y consejos; a Jo Barnes, Jim Smith, Emma Noble y
Helen Desmond; a nuestra editora Mary Davis por su comprensión
entusiasta y por ir un poco más allá. Gracias a todos los hombres
y mujeres que participaron en las investigaciones para este libro.
Gracias a Dotty Irving y Melody Odusanya de Colman Getty; a
Jenny Halpen, Helena Saddler y Jo Melzak de Halpen Associates; a
Sidonie Schoeff de Joseph; a The Pink House por su aprobación; a
Heather Reynolds y Erica Spellman de Nueva York; a Tim Motion por
su maravillosa fotografía; y a Stephen Tungay de The Color Company
que dio prioridad a nuestra propuesta.
Gracias a nuestros amigos por su apoyo incondicional: Susie
Biddu, Kam Gi Chak, Henrietta Palmer, Mathilda Bowan, Jenny Wood,
Karima Olukun-Ola, Kathleen Scott, Mia Flodquist, Bev Corlete,
Anne Macalpine-Leny, Avtarjeet Dhanjal, Romina Marshall, Alain
Yewall, Bisi Lalemi, Diane Schwartz, Vismaya Jeager, Gordon y
221
Claire Barnes y James Lo. Sois todos estrellas rutilantes. Gracias
a nuestras familias con un reconocimiento sincero.
Y, por último, ¡a todos los hombres de todas partes que hacen
girar el mundo de las chicas!
Todas las ilustraciones son de Richard Rockwood, excepto las de
las páginas 16, 64, 76, 100 y 106, que son de Ben Owen.
Agradecemos especialmente a Adrian Nicholas y a Olav Zipser que
nos permitieran utilizar la imagen de Adrian y la fotografía de
Olav en la ilustración del adicto a las emociones extremas.
Directora editorial: Anne Furniss
Directora creativa: Mary Evans
Diseñador: Richard Rockwood
Ayudante del diseñador: Jim Smith
Ayudantes editoriales: Helen Desmond, Emma Noble
Producción: Julie Hadingham, Vincent Smith
222

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La biblia de las chicas

[Traducción de Abel Debritto y Mercè Diago]

La biblia de las chicas

Cómo entender al hombre moderno

Los arquetipos contemporáneos

Cómo utilizar la biblia de las chicas

El adicto a las emociones extremas

El hombre de los medios de comunicación

El adicto en fase de recuperación

El hombre del mundo del espectáculo

¿Estás soltera y te gustaría tener a un hombre a tu lado? ¿Estás

segura de conocer bien a la persona con quien compartes la cama?

¿Cuántas veces has tomado la decisión equivocada? ¿O te has

sorprendido o decepcionado cuando él no ha estado a la altura de

por qué él es cómo es?

La clave del éxito en el juego de buscar pareja consiste en

encontrar al “tipo” correcto, al hombre que más te convenga, con

el que congenies mejor en un momento determinado de tu vida. Pero

¿cómo sabrás reconocerlo y, una vez conquistado, cómo harás para

La biblia de las chicas ofrece una visión desenfadada sobre un

tema serio, una revisión de la realidad enraizada en la dinámica

sin miedo alguno en la psique masculina y hemos obtenido 24

perfiles de personalidad basados en los antiguos arquetipos para

representar a los distintos hombres actuales. Hemos unido los

puntos y salvado el vacío entre los sexos para brindarte la

oportunidad de comprender cómo se ve a sí mismo, su mundo y sus

Si alguna vez te has sentido frustrada por el silencio de los

hombres, su escasa inclinación a comunicarse y, seamos sinceras,

¿quién no se ha sentido así alguna vez?, éste es el libro que

buscabas. Esta guía no está únicamente pensada para ayudarte a

reconocer los distintos tipos que existen en el mundo y prepararte

mejor para encontrar al hombre que te conviene sino que es también

un manual de mantenimiento cuyo objetivo reside en explicar la

postura del hombre en el juego interactivo de las relaciones.

Así que si quieres sacarle el máximo partido al amor,

relájate, date un baño y tómate la noche libre. Estás a punto de

descubrir los antiguos secretos por los que se rige el hombre

Cómo entender al hombre moderno

En el pasado las sociedades de todo el mundo clasificaban a las

personas según sus impulsos y motivaciones. En los mitos y

leyendas de la mayoría de las culturas aparecen personajes con

rasgos concretos que invalidan las restricciones de los

estereotipos sociales. Estos arquetipos, como se han dado en

llamar, se encuentran en los cuentos de hadas, en la religión e

incluso en el cine comercial actual.

Echa un vistazo al típico hombre de acción de Hollywood y

verás que es una adaptación del arquetipo del héroe mitológico.

Lleva la misma camiseta ceñida para marcar músculos durante toda

la película. Primero dispara y luego pregunta. Le darán una

paliza, pero cuando comiencen a aparecer los créditos ya habrá

salvado el mundo, conquistado a la chica dura de turno y

encontrado tiempo para darle de comer al perro.

Hace miles de años el rol masculino estaba claro: en las

sociedades tribales el hombre tenía que confiar en los instintos y

en la fuerza para sobrevivir. Los antropólogos han llegado a la

conclusión de que se consideraba que el jefe de la aldea encarnaba

las características de todos los arquetipos antiguos. El jefe era

Rey, Guerrero, Mago, Altruista, Amante, Héroe, Inocente y

Trotamundos. Como tal, era el jefe supremo, el profeta y el

vidente, el más sabio, un consejero divino y el guardián de los

educar a los niños de la aldea para que se convirtieran en

guerreros poderosos con cualidades heroicas.

Los ancianos guiaban a los niños durante las distintas etapas

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