Sie sind auf Seite 1von 7

UNIVERSIDAD NACIONAL DE SAN CRISTÓBAL DE HUAMANGA

FACULTAD DE CIENCIAS ECONÓMICAS, ADMINISTRATIVAS Y


CONTABLES
ESCUELA DE ECONOMÍA

AGUA DULCE

Presentado por:

ARONE ESPINO, Deyby

Profesor: CANALES MOLINA, William D.

Ayacucho-Perú
Setiembre, 2019
INTRODUCCION
El agua es el elemento vital en el mundo, un recurso que a lo largo de nuestra existencia
ha cumplido un papel fundamental en diferentes aspectos de la existencia del ser humano,
aspectos como: la salud, cultivo alimentos, generación energía, protección el medio
ambiente, crear empleos y otros. Según el Banco Mundial actualmente, el 70 % del agua
que se extrae en el mundo se destina a la agricultura y en el 2050 para alimentar a 9000
millones de personas será necesario que la producción agrícola aumente en 60 % y la
extracción de agua en 15 % (BM, 2019); y solo estamos hablando de un sector económico.
La escasez de agua es hoy uno de los grandes retos que afronta la humanidad para el
futuro; El agua dulce constituye sólo un 3% del total del agua presente al planeta, y el
70% de esta no está disponible, puesto que se encuentra congelada a los bancos de hielo
polares y alas glaciares (UNESCO, 2016). Actualmente el acceso a este recurso se está
volviendo un problema debido a su agotamiento y escasez; este es un gran problema que
el mundo ya está enfrentando en estos momentos, y el impacto que está teniendo se está
volviendo cada vez más notorio sobre el medio ambiente y la calidad de vida de una
población cada vez más creciente; la población mundial alcanzará los 12 000 millones de
habitantes a mediados del próximo siglo y muchos de ellos vivirán probablemente en
países donde los recursos hídricos se emplean ya al máximo porque existe poco o ningún
margen entre el recurso disponible y la demanda como los son china, india, Nigeria,
México y Kenia. El crecimiento de la población exacerbará esas condiciones (UNESCO,
2016). El contexto ya no nos permite tratar al agua como un bien libre o normal, se debe
priorizar el tratamiento del agua y optimizar su uso de manera sostenible, de lo contrario
terminaremos con recursos y bienes que nunca podrán calmar la sed ni darnos una buena
salud.
DESARROLLO
El agua dulce es primordial para la existencia del hombre, pero de la misma manera lo
es para el resto de la vida en el planeta y el medio ambiente; los humanos, animales y
las plantas necesitan de ella para poder vivir, el agua dulce es nuestra fuente de vida
mediante su ciclo vital el agua produce energía en su paso por los ríos del planeta, el agua
regula el clima de muchos maneras por ejemplo siendo responsable de los grandes
espacios vegetales como bosques y selvas que son los pulmones de la tierra, ya que ahí
se produce oxígeno y se regenera el aire.

El agua es esencial para el desarrollo económico y social. Específicamente, es esencial


para mantener la salud, cultivar alimentos, generar energía, proteger el medio ambiente y
crear empleos, podríamos mencionar que la agricultura es el mayor consumidor del agua,
nuestra base alimenticia está puesta en ella, lo cual según el Banco Mundial actualmente,
el 70 % del agua que se extrae en el mundo se destina a la agricultura y en el 2050 para
alimentar a 9000 millones de personas será necesario que la producción agrícola aumente
en 60 % y la extracción de agua en 15 % (BM, 2019). Otra fuente muy importante de su
consumo es la industria, potencias mundiales excesivamente industrializadas y fábricas
pequeñas de los países subdesarrollados necesitan del agua para su producción.
Recordemos que el agua mueve turbinas, nos da calor, luz, frío. Como tercer consumidor
se encuentran nuestros hogares. El agua, es indispensable para el aseo, la alimentación,
la presentación personal, en fin, la necesitamos diariamente. Además, es frecuente
encontrar el agua en hermosas fuentes ubicadas en centros urbanos para representarnos la
belleza y el ornato.

El agua es uno de los recursos más escasos que tenemos en el planeta, además de un
elemento irremplazable para que la existencia de la vida. En los últimos siglos, con la
industrialización, el uso del líquido elemento ha sido cada vez peor, y las consecuencias
del mal uso del agua se empiezan a notar. La primera y más evidente consecuencia del
mal uso del agua es la escasez de agua en ríos o lagos. Además de dar la terrible imagen
de un río seco, los animales y plantas que viven en estos hábitats o que dependen de ellos
para sobrevivir ven afectado su entorno, viéndose obligados a cambiar sus hábitos o a
emigrar en el mejor de los casos. En el peor, se extinguen o su población se reduce
drásticamente.

El agua es un líquido maravilloso, lástima que los ciudadanos del nuevo milenio, sigamos
destruyéndola, maltratándola y evitando su conservación. Según el banco mundial: si
continúan el actual crecimiento demográfico y las prácticas de gestión del agua, el mundo
enfrentará un déficit de 40 % entre la demanda proyectada y el suministro de agua
disponible a fines de 2030 y las aguas subterráneas se agotan más rápido de lo que se
reponen. En 2025, alrededor de 1800 millones de personas vivirán en países o regiones
con escasez absoluta de agua (BM, 2019).

El agua dulce es sinónimo de vida; sin embargo, en estos últimos años, hemos podido
observar que su calidad y pureza se han ido perdiendo, dejando en su lugar contaminación
y muerte; pero, lo más inquietante es el hecho de que le estamos heredando a las futuras
generaciones de nuestro planeta un porvenir desierto y hostil; esto es preocupante, pues
dependemos de manera indispensable de este recurso natural. En el devenir histórico de
la humanidad, los avances científicos y tecnológicos gradualmente han proporcionado al
hombre la oportunidad de desarrollar sus actividades básicas con una mayor eficiencia,
en menor tiempo y a mayor escala, lo cual también significa que con cada paso del hombre
en la ciencia y la tecnología se ha dado un aumento en la explotación de los recursos y
obviamente en el deterioro ambiental.

La escasez de agua es hoy uno de los grandes retos que afronta la humanidad para el
futuro. El agua, sin embargo, es un elemento muy abundante a la Tierra, el problema es
que el 97% del total está formada por agua salada perteneciente a mares y océanos. Es
por esta razón que no es del todo acertado afirmar que el agua es un recurso escaso al
planeta. El elemento realmente escaso es el agua dulce, es decir, aquella que es
imprescindible para el desarrollo de la vida terrestre. El agua dulce constituye sólo un 3%
del total del agua presente al planeta, y el 70% de esta no está disponible, puesto que se
encuentra congelada a los bancos de hielo polares y alas glaciares (UNESCO, 2016).
SITUACION ACTUAL
La disponibilidad de agua dulce es uno de los grandes problemas que hoy en día en el
mundo y en algunos países es el principal problema, porque su escasez afecta la vida de
millones de personas. Dentro de los próximos 50 años, los problemas relacionados con la
falta de agua o la contaminación de masas de agua afectarán prácticamente a todos los
casi todos los habitantes del planeta. Y cada vez más regiones en el mundo sufren de la
escasez del agua y lo que más preocupa es que esa población exige cada vez más agua y
este recurso finito debe satisfacer también las necesidades de todas las formas de vida que
hay en el planeta (BID, 2011). El resultado podría ser una serie de desastres locales y
regionales y de enfrentamientos que resultarían en una crisis social, política y económica,
los problemas relativos a las aguas dulces de la Tierra nos hacen preguntar si. ¿Se puede
lograr los objetivos del desarrollo de la humanidad cuidando la naturaleza y lograr así el
objetivo del desarrollo sostenible? Es un dilema que es el tema de discusión de numerosas
instituciones ambientales y en que se ha abordado en varias conferencias recientes como
en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo
(CNUMAD, Río de Janeiro, 1992), y en donde se indican claramente que el agua es
indispensable para el desarrollo sostenible de la humanidad, más adelante diversas
instituciones realizaron una evaluación completa del agua dulce de la tierra planteándose
las siguientes cuestiones:

• La evaluación de las fuentes de abastecimiento de agua dulce en el mundo


• La disponibilidad y el uso de ese recurso.

Y se llegaron a las siguientes conclusiones que predicen que el margen entre el recurso
disponible en el mundo y el volumen de agua utilizado va a disminuir en el futuro y el
factor principal que ocasiona este resultado es el crecimiento demográfico especialmente
en los países con problemas de desarrollo. Ya que según las previsiones, la población
mundial alcanzará los 12 000 millones de habitantes a mediados del próximo siglo y
muchos de ellos vivirán probablemente en países donde los recursos hídricos se emplean
ya al máximo porque existe poco o ningún margen entre el recurso disponible y la
demanda como los son china, india, Nigeria, México y Kenia. El crecimiento de la
población exacerbará esas condiciones (UNESCO, 2016).
IMPACTO
Ante la escasez del agua dulce en el mundo las previsiones de crecimiento económico
esperadas son muchos menores para los siguientes años dado que el agua constituye un
factor de producción innato a cualquier actividad económica, esto sumado a la creciente
presión demográfica se constituye como uno de los principales problemas al que deberá
enfrentar el mundo en el futuro.
Existen muchas situaciones que nos hacen pensar acerca de nuestro compromiso en el
siglo XXI, según estudios, el agua tiene una mala distribución en el planeta, por lo que se
preven guerras por agua y no por tierras, además, el crecimiento demográfico en el mundo
es enorme y existe debido a eso más demanda de agua. Por otra parte, el hombre no ha
tomado conciencia que el descuido en el que estamos, nos llevará a catástrofes locales y
mundiales, porque lo que hasta aquí se ha hecho con las fuentes cristalinas, es
contaminarlas con materia fecal, las fábricas no tienen el tratamiento residual adecuado
para evitar la contaminación de los ríos, se queman los bosques, se tira basura, fungicidas
y nuestra agua sufre los estragos de la humanidad inconsciente.
Se prevé que en 2030 el mundo tendrá que enfrentarse a un déficit mundial del 40% de
agua en un escenario climático en que todo sigue igual.
Las demandas en competencia entre sí aumentan el riesgo de conflictos localizados y
conllevarán decisiones cada vez más difíciles en lo que respecta a la asignación de los
recursos y a limitar la expansión de sectores cruciales para el desarrollo sostenible.
Bibliografía
BID. (2011). Situacion del agua dulce. Madrid: La garza.

BM. (2019). El agua a nivel mundial. Washington: The New York Times.

UNESCO. (2016). informe del desarrollo de recursos hidricos en america latina y el caribe. New
York: the journal of economist.

Das könnte Ihnen auch gefallen