Beruflich Dokumente
Kultur Dokumente
Con una nueva realidad que apela al interés colectivo, superando el cuadro típico
de las empresas inmaculadamente capitalistas, que defienden el interés
individualizado, por medio del supremo fin; la ganancia económica, que por encima
del trabajo y los trabajadores, fija el éxito y el crecimiento por conducto de la
competencia. Desde la dimensión democrática, la tradición liberal reconoce al sujeto
como un ser autónomo miembro de una sociedad, en la que establece relaciones
concretamente contractuales, teniendo al Estado como actor arbitral (“neutral”)
respetando los procesos “naturales” del mercado en que participan los individuos,
este diseño es un universo análogo a las empresas capitalistas quienes operan
desde la misma lógica, concibiendo al individuo-trabajador desde esta misma
concepción.
“… las cooperativas nacieron de una reacción de la clase obrera contra los abusos
del capitalismo. Los obreros encontraron su fuerza en la asociación” (Aranzadi,
citado en Gómez, 2000: 697-698).
1
Fuente: Gómez Cabranes, Leonor (2000). “Cooperativa y comunidad”, en Revista
Arbor, CLXV, 652, Consejo Superior de Investigaciones Científicas, pp. 697-714.
Los atributos que el modelo cooperativo despliega, son tan funcionales, que se
presentan en otras organizaciones que no son de este tipo, se sirven de su diseño,
organización y ejecución, y aun que no se denominan como tales operan de la
misma forma, este fenómeno lo ha identificado la Organización Internacional del
Trabajo (OIT), en un informe sobre América Latina del que señala: “… es
significativa la presencia de modalidades empresariales que se rigen por principios
análogos a las cooperativas aunque tienen otro nombre” (citado en Gómez, 2000:
706), algunos ejemplos son las asociaciones de microempresas, empresas
comunitarias, ferias de consumo familiar, etc.
3
Democracia como valor (Rousseau) y como procedimiento (Schumpeter)