Beruflich Dokumente
Kultur Dokumente
El currículo que ofrezca la institución o escuela deberá estar bien planificado con
innovaciones actuales y que lleve un adecuado plan de proceso y aprendizaje que
le permitan al estudiante ir logrando y mejorando su comprensión y preparación
académica con visión a un mejor futuro en base a su formación curricular.
Dentro del currículo una parte fundamental es la capacidad del maestro con
habilidades y cualidades con compromiso que le permitan llevar a cabo la trasmisión
de conocimientos en un ambiente de respeto y comunicación y así facilitar la
solución de problemas que de la impartición de clase se le presenten.
También se definirá lo que es un plan de estudios y como este tiene una gran
importancia a la hora de hacer un plan metodológico de las materias para el
desarrollo de un perfil en el alumno.
Las maestras y los maestros reconocerán en este plan de estudios parte de sus
mejores prácticas, propuestas que han presentado en diversos foros y otras en los
años recientes, ocupan un espacio relevante en la discusión académica sobre la
educación y sus procesos. Por ello reconocer y compartir los fundamentos y la visión
1
es avanzar a una valiosa transformación de la educación Básica, además de que
representa tener una mejor escuela preparada, para atender las necesidades
específicas del aprendizaje de cada estudiante.
ACERCAMIENTO AL CURRICULUM
Para comenzar el estudio de los significados del currículum es preciso hacer una
consideración previa de índole etimológica. La palabra currículum es una
voz latina que se deriva del verbo curro y que quiere decir' carrera'; alude a una
pista circular de atletismo (a veces se traduce como pista de carrera de carros). En
el latín clásico se utiliza curriculum vitae vivendi haciendo referencia a una carrera
de vida.
Este breve recorrido etimológico del término es sólo un punto de partida, pues las
diversas connotaciones que a lo largo de los siglos se le han dado (y que se le dan
en el presente) al término currículum nos permiten entrever la complejidad de su
conceptualización. Ahora bien, ¿por qué el acercamiento a la definición de
currículum plantea obstáculos e incógnitas? La razón es que las ideas sobre
currículum no son universales, es decir, no están mas allá de las determinantes
2
históricas. Por el contrario, el currículum es un producto de la historia humana social,
así que cambia -como todas las construcciones sociales- de tiempo en tiempo, de
acuerdo con las transformaciones e innovaciones en las ideas, en las utopías, en la
ordenación de la vida social, en la estructura de los discursos sobre la vida pública
y privada, etcétera.
Antes de ver las definiciones, habrá que recordar que el currículum es, en gran
medida, de naturaleza prescriptiva, es decir, se aspira a definir algo que se
caracteriza por ser una pretensión de realidad, un querer ser, un deber ser. Lo
anterior supone circunscribir y seleccionar un conjunto de intencionalidades que se
consideran como las 'verdaderas' o 'mejores' respecto a otras; aquí entran en
3
escena las diferencias de valor que permiten legitimar ciertas posiciones y excluir y
rechazar otras. Esto no debe inducir a pensar que estas posiciones son arbitrarias,
es decir, que en última instancia da lo mismo elegir una conceptualización u otra.
Por el contrario, la elección de uno u otro concepto de currículum depende de la
capacidad para integrar en un esquema prescriptivo para la acción, tanto las
reflexiones derivadas de la practica como los aportes teóricos provenientes de la
investigación curricular, de la enseñanza y del aprendizaje.
Stenhouse (1987, pp. 28-29) comenta tres definiciones del currículum-(He aquí tres
importantes definiciones americanas del currículum):
4
Es necesario detener esta lectura y preguntarse si estas reflexiones, desarrolladas
a partir de las anteriores definiciones de currículum, cubren de manera adecuada
los requerimientos de un primer acercamiento. Para ello nos preguntamos: ¿Es el
currículum una planeación que prevé todos los aspectos posibles a desarrollar?
¿Qué tan abierto o cerrado puede ser el plan curricular? ¿El currículum formula
necesidades como conductas terminales? ¿Puede el currículum anticipar también
los procesos a desarrollar? ¿Existen otras alternativas al modelo medio-fines?
De tal manera, el currículum es visualizado, por una parte, como intención, plan o
prescripción respecto a lo que se pretende que logre la escuela; por otra parte,
5
también se le percibe como lo que ocurre, en realidad, en las escuelas. Esto le hará
expresar a Stenhouse (1987, p. 27) que: 'el estudio del currículum se interesa por
la relación entre sus dos acepciones: como intención y como realidad. Las dos
acepciones nos remiten a la vieja (y siempre nueva) cuestión de la relación teoría-
practica; por ello, el autor citado (1987, p. 27) expresa: 'El problema
central del estudio del currículum es el hiato existente entre nuestras ideas y
aspiraciones y nuestras tentativas por hacerlas operativas.
6
En síntesis, el plan de estudios y los programas son documentos -guías- que
prescriben las finalidades, contenidos y acciones que es necesario llevar a cabo por
parte del maestro y sus alumnos para desarrollar un currículum.
El currículum real (o vivido) puesta en práctica del currículum formal con las
inevitables y necesarias modificaciones que requiere la contrastación y ajuste entre
un plan curricular y la realidad del aula. No habrá que olvidar que el currículum real
encuentra su razón de ser en la práctica educativa.
Por otra parte, el currículum oculto es una categoría de análisis que nos permite
interpretar con mayor precisión la tensión existente siempre entre intenciones y
realidad, entre currículum formal y currículum real. El currículum oculto es, según
Arciniegas (1982, p. 75): “proveedor de enseñanzas encubiertas, latentes,
enseñanzas institucionales no explícitas, brindadas por la escuela -puesto que ésta
es un microcosmos del sistema social de valores, ya que la educación no es un
proceso neutro y aséptico, es inevitable y necesario el componente ideológico,
moral y político que existe en cualquier empresa educativa que los seres humanos
emprenden. De ahí la presencia del currículum oculto, tanto en el currículum
formal como en el currículum real, a través de los lenguajes implícitos -verbales,
escritos, gestuales-. Como señala McLaren (1984, p. 224).
7
El currículum favorece ciertas formas de conocimiento sobre otras y afirma los
sueños, deseos y valores de grupos selectos de estudiantes sobre otros grupos y a
menudo discrimina a partir de la raza, la clase y el género. En general los teóricos
críticos están interesados en cómo las descripciones, las discusiones y
representaciones en los libros de texto, materiales curriculares, contenidos de
cursos y relaciones sociales materializadas en la práctica en las aulas benefician a
los grupos dominantes y excluyen a los subordinados. En este contexto
frecuentemente se refieren al 'currículum oculto'.
La distinción entre currículum formal, currículum real y currículum oculto tiene por
objeto reafirmar el análisis sobre las intenciones curriculares (currículum formal,
currículum oculto) y las concreciones en el desarrollo curricular (currículum real -
currículum oculto). Por lo tanto, siempre que nos refiramos a currículum, en este
8
texto, estaremos englobando en ese concepto tanto las tres categorías enunciadas,
como sus aspectos teóricos y practico, es decir, intenciones y desarrollo curricular.
A partir de lo anterior, estamos en condiciones de formular algunas preguntas.
He aquí un planteamiento sobre el currículum que trata de vincular los dos aspectos
mencionados: intenciones y realidades.
9
Algunos estudios del currículum, como los realizados por Glazman e Ibarrola (1983,
p. 283), le otorgan un carácter más trascendente a la idea del currículum como
proyecto.
El proyecto universitario comprende la propuesta de finalidades políticas
académicas precisas, a partir de una definición de las posiciones ideológicas
adaptadas por la universidad y del compromiso que asumen en el tratamiento y
solución de la problemática social, filosófica, científica, y técnica del país.
Para estas autoras es necesario contar con este tipo de referente para luego
abocarse a las tareas de planear, diseñar y realizar el currículum.
10
ocasiones y dependiendo de los modelos hostigados como veremos, la innovación
se ve ignorada e incluso cauterizada.
11
posición ante las políticas, las frecuentemente reflejan el punto de vista del gobierno;
de modo que las políticas curriculares representan una posición política concreta.
Existen tres clases de políticas curriculares: las políticas formales e implícitas
aparecen en los documentos, los cuales adoptan una variedad de nombres. Las
políticas formales son guías oficiales y obligatorias, están diseñadas para leerse
como instrucciones sobre el contenido y los resultados del curriculum escolar, sus
planteamientos se expresan de diferentes maneras.
En algunas escuelas algunos alumnos tienen éxito y otros no, esto depende del
contexto y el estatus económico. Según el capital cultural, así como el recurso
económico. Los que tienen mayor solvencia son los que van a las mejores escuelas
y compran los mejores productos académicos con el fin de elevar el desempeño
académico de sus hijos. Los de menor solvencia se conforman con la educación
12
que les imparten en las escuelas públicas, así mismo están a expensas del material
que estas mismas les otorgan o simplemente no cuentan con el recurso académico.
13
implementación de las políticas es siempre local. Dado a que la agenda política de
los gobiernos busca cambios rápidos y notables, al tiempo que la escuela y los
docentes tienen una lógica e intereses distintos; la docencia es por lo general
conservadora y rutinaria. Y podría ser de otra forma, por lo general, los docentes
tienen una carga de trabajo estresante y unos hábitos de trabajo bien establecidos
y difíciles de cambiar.
Existen pocas excepciones de reformas que partan de abajo hacia arriba, de una
evaluación que involucre a los principales interesados reúna suficientes evidencias
de los aspectos positivos y negativos del curriculum vigente, se socialicen y a partir
de esa socialización, se realice de la nueva reforma y sus políticas. La evaluación
del aprendizaje, un sistema de competencias; tiene la función de que las escuelas
rindan cuentas. Las evaluaciones masivas y estandarizadas ejercen una presión
constante en el curriculum, si bien es sabido los docentes terminan reduciendo. Se
14
ven obligados a descartar otros aspectos relevantes y formativos, debido a que esta
evaluación de aprendizaje se ha convertido en un arma de dos filos.
Estas políticas son muy ambiciosas, se puede argumentar que han tenido poco
éxito, debido a su racionalidad limitada de los que las diseñan. Al establecer el
discurso vertical en el horizontal se establecen métodos diferentes, lo cual lleva a
que se den resultados no esperados. Se debe tomar en cuenta la necesidad, el
contexto cultural de cada país. Esto con la finalidad que, al implementar una reforma
curricular acorde a la necesidad educativa, se vean resultados positivos en el
aprendizaje significativo de los involucrados.
CURRICULUM DE LA EDUCACIÓN.
Díaz Barriga sostuvo que cuando uno piensa un cambio curricular, una adecuación
de planes de estudio, lo que uno se enfrenta es a un reto. “En este sentido, lo que
necesitamos es pensar a qué obedece este interés de modificar un plan de estudio”,
agregó.
El investigador mexicano agregó que otra pregunta que habría que responder es
qué es lo general en todo cambio curricular y que es lo específico en la formación
docente, además de cómo realizar un cambio curricular que no sea de arriba hacia
abajo, del Ministerio de educación hacia los docentes, ni de abajo hacia arriba, por
la imposibilidad técnica de que todos los docentes estén participando en los grupos
de redacción.
15
El disertante expresó: “Para pensar la docencia como profesión creo que debemos
recurrir a la sociología de las profesiones. Efectivamente, tenemos un cuerpo de
saberes propios, pero no logramos imponerlos en el plan de estudio ni en la
sociedad. Los medios de comunicación cuestionan el trabajo docente y no tenemos
capacidad para decirles que los alumnos salen mal del trabajo de matemáticas, pero
no es solamente nuestra responsabilidad. Es una responsabilidad social donde
también las familias guardan relación, donde los medios de comunicación guardan
relación. Empecemos a asumir nuestras responsabilidades. El problema tiene que
ser enfocado desde una dimensión mucha más amplia. Nuestro estatus en este
momento está puesto en cuestión, reconozcámoslo. En este momento la sociedad
duda de contar con un buen cuerpo de profesores. Y yo creo que es algo que las
instancias de formación de profesores y los mismos profesores tenemos que
trabajar, para que en la sociedad se nos empiece a tratar de otra manera”.
Diaz Barriga manifestó que los docentes consideran que los alumnos deben seguir
fieles a la palabra, al pizarrón y al libro, cuando nuestros estudiantes están
obteniendo información desde otros lugares. “Tienen una hiper estimulación y, por
lo tanto, mayor precocidad. Es ahí donde entra el tema de la sexualidad integral.
Cada vez vamos encontrando más temprano el desarrollo de la sexualidad, y no es
porque sean diferentes a como fuimos nosotros, sino que es porque están
fundamentalmente con mayores estimulaciones de todo su entorno”, agregó.
“En toda reforma curricular hay temas que permanecen, porque son saberes
nucleares de la profesión. Una reforma curricular no es cambiar todo, implica
también la permanencia de aquello que sostiene una formación profesional. Es, de
alguna manera, necesario encontrar un equilibrio entre una sólida formación
disciplinaria y una sólida formación pedagógica. Y la integración de esto en el acto
educativo, con tres ejes: lo pedagógico, lo disciplinar y la integración en la práctica
docente”, explicó Barriga Diaz.
El investigador mexicano sostuvo que el reto es cómo crear una síntesis entre un
modelo de arriba hacia abajo y un modelo de abajo hacia arriba, que la reforma no
16
es solamente cambiar las asignaturas y que el otro problema es cómo logramos que
los docentes tomen el proyecto curricular como una posibilidad de cambio.
“Formar un docente es un reto enorme para quien intenta realizar esta tarea, pero
vale la pena enfrentar este reto. Tenemos que asumir que hay un cambio en el ser
docente, lo que significa formar en responsabilidad frente a la formación y el
aprendizaje, frente a la pasión intelectual y frente al desarrollo profesional en su
tarea, una capacidad para entender nuevas formas de ser en el alumno, nuevas
formas de aprender, nuevas formas de conocer y la necesidad de traducir temas en
problemas”
Dentro de este pequeño ensayo expondré algunas de las ideas que se tienen a
cerca del currículo, acercándome precisamente a la parte del significado que tiene
este concepto para dos de los precursores más importantes de la década de los
50´s; con esto me refiero a Hilda Taba quien nace en Estonia en 1902 y que
destacan dentro de sus trabajos la investigación sobre el curriculum de la educación
para mejorar la relación intergrupal, Taba expone ciertas ideas que le permiten
profundizar sobre lo que debe importar para la realización del curriculum.
Por otro lado, tenemos a Ralph Tyler nacido en Chicago en el año de 1902; dentro
de sus valiosas investigaciones se puede señalar la apertura que dio a los estudios
orientados al currículo, en su obra “Principios básicos de Currículo e Instrucción”
señalando aspectos importantes, los cuales deben poseer las personas encargadas
de diseñar los currículos que se manejan en las instituciones educativas.
17
enuncia a Hilda Taba y a Ralph Tyler, quienes realizan trabajos centrados en los
aprendizajes y en la educación de la década de los 50´s.
Por un lado Hilda Taba manifiesta que la elaboración del currículo debe ser científico
y racional, las decisiones sobre estos elementos deberán adoptarse sobre la base
de algunos criterios validos que pueden provenir de distintas fuentes: la tradición,
las presiones sociales, los hábitos establecidos y los factores que constituyen una
base razonable para el currículo son el estudiante, el proceso de aprendizaje, las
exigencias culturales y el contenido de las disciplinas (Taba, 1974).
Las percepciones que tiene Taba sobre los factores que influyen en la realización
del currículo a ciencia cierta son muy importantes puesto que se sabe que dentro
del programa influyen situaciones que no solo tienen que ver con cómo es que se
desempeña el estudiante, sino que va más allá de lo que el alumno puede hacer,
tiene que ver principalmente en cómo es el medio en el que se desarrolla el alumno,
y con respecto al medio me refiero a la relación el vínculo que establece no solo en
la familia sino también en esquemas más amplios como la misma sociedad y los
diferentes tipos de cultura que de ella vienen, considero que de esto dependerá en
gran medida que el currículo funcione y que cumpla sus objetivos. Por otro lado
Taba abre la discusión sobre la propuesta curricular la cual adquiere mayor solidez
conceptual, y en ella las etapas para la formulación de un plan y un programa de
estudios que tienen por objeto lograr la articulación entre la teoría y la práctica.
Hilda Taba concibe el programa escolar como un plan de aprendizaje que, por lo
tanto, debe representar una totalidad orgánica y no tener una estructura
fragmentaria; sin embargo, insisten en que las decisiones que se tomen con relación
al mismo “tengan una base reconocida, valida y con algún grado de solidez.” (…)
Taba hace una aportación muy importante respecto a la necesidad de elaborar los
programas escolares con base en una teoría curricular. El desarrollo de esta teoría
esta fincado en la “investigación de las demandas y los requisitos de la cultura y de
la sociedad. Taba considera que el análisis de la cultura y la sociedad brinda una
guía para determinar los principales objetivos de la educación, para la selección del
18
contenido y para decidir sobre que habrá de insistirse en las actividades de
aprendizaje. (Barriga, 1997)
Desde otra perspectiva se tiene el trabajo realizado por Ralph Tyler en el cual
sobresale la propuesta curricular en la cual se formula una etapa de tecnificación
del pensamiento educativo y dentro de esta prevalece el objetivo de centrase en la
necesidad de elaborar objetivos conductuales.
Para Ralph Tyler las decisiones en relación con los aprendizajes que deben
promoverse en un programa escolar deben ser resultado del análisis de diversas
investigaciones (sobre los alumnos y sus necesidades, sobre la sociedad, el análisis
de tareas y los procesos culturales, y sobre la función y el desarrollo de los
contenidos). A los resultados de estas investigaciones los denomina “fuentes”, las
cuales son, según él, de naturaleza diversa, por ello plantea que “ninguna fuente
única de información puede brindarnos una base para adoptar estas decisiones”.
Estos fundamentos se traducirán en objetivos conductuales. A estos dos los
denomina “filtros” y su fin es organizar objetivos “filosóficamente coherentes y
factibles en el proceso del aprendizaje” (Barriga, 1997)
De esta forma y de acuerdo a lo expresado por Díaz Barriga sobre lo que opina
Tyler con relación al currículo se puede observar que él se enfoca principalmente
en la implementación de objetivos que le permitan a los diseñadores de los
programas llegar a una meta, que es en sí, la creación o el diseño de un currículo
que se vea compuesto por múltiples factores tanto de índole educativa como del
aspecto social. Así pues Tyler señala que “no se puede malgastar el tiempo
enseñando aquello que tuvo validez hace cincuenta años” pues es bien sabido que
los aconteceres cotidianos cambian y tal vez la historia antigua no lo haga pero
siempre hay muchas otras ramas del conocimiento que se encuentran en una
constante actualización.
19
Ahora bien, ya expresados los dos tipos de pensamiento en los que se mueven
Taba y Tyler y de acuerdo al Programa de Educación Preescolar, me parecen muy
rescatables algunos puntos, comenzando por la importancia que le dan al ambiente
social en el que tendrá cabida la implementación del programa, que por consiguiente
y de acuerdo al PEP es fundamental el contexto en el que se desarrollan los
pequeños y aunque el programa es de carácter nacional, este es adaptado por las
educadoras de acuerdo a la región del país en la que se encuentren trabajando y
de acuerdo a la situación que viven los niños en el ámbito social. Por otro lado los
autores se centran en la importancia del docente como precursor del currículo,
situación que en programa que distribuye la SEP hacen saber a las educadoras y
educadores lo vital que es su trabajo para que las propuestas curriculares que se
hacen lleguen a un solo objetivo, que es el de proporcionar una educación de
calidad a los niños y las niñas mexicanas y por último también se presenta el hecho
de la importancia de los aprendizajes que se quieren lograr en los individuos,
respondiendo a la pregunta que formula Tyler y de acuerdo a lo que postula Taba
enfocándose a las necesidades de los alumnos, considero que el PEP también se
ve influenciado con respecto a estos dos últimos, pues en él se plasma el hecho de
que la educadora debe responder a los interés y a las necesidades que tienen los
niños en edad preescolar.
CONCLUSIÓN.
20
21