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Unidad 1

Commented [1]: https://wikiar.org/C%C3%A1tedra_W


Historia de la Psicología Social ainstein
Susana Seidmann https://wikiar.org/Historia_de_la_psicolog%C3%ADa_s
ocial
Historia del pensamiento acerca del hombre https://filadd.com/doc/resumen-primer-parcial-
Este camino fue históricamente dicotómico, dividido en dos. psicologia-social-wainstein

Antiguos griegos (Platón, 427-347 a.C) → se buscó comprender dos órdenes, lo objetivo y lo
subjetivo.
Aristóteles (384-322 a.C) → hombre pertenece a la naturaleza, es un animal capaz de pensar e
inhibir un impulso natural. Sienta los ppios. básicos de la influencia y la persuasión sociales.
Fue un precursor del empirismo.
Cristianismo medieval → retrasó el estudio de la conducta humana porque se puso a Dios
a la cabeza. Hombre concebido como una criatura divina que no pertenece a la naturaleza.
Renacimiento (S. XIV) → se recupera el interés.
S. XVI y XVII → conducen el pensamiento humano hacia la ciencia moderna.
René Descartes (S. XVII) → cambio de paradigma, legó a las ciencias humanas una
consideración dualista del hombre: res cogitans, alma pensante (mente incorpórea) y el
cuerpo como una máquina.
2da mitad S.XIX → la psicología surge como una disciplina científica autónoma de la
filosofía.
El desarrollo del pensamiento humano progresa a través de saltos cualitativos, cambios
discontinuos. Son las rupturas epistemológicas según Bachelard o los cambios de paradigma
según Kuhn.

La psicología social
- Aborda la psicología desde la problemática de la interacción entre individuo y medio
ambiente, individuo y sociedad.
- La caracteriza el concepto de relación, interdependencia, interacción, influencia, es
decir, la modificación de la conducta de una persona debido a la presencia de otros.
- Enlaza la conducta a fenómenos micro y macrosociales.
- Implica una perspectiva, no individual, para enfrentar la problemática humana.
- Aborda la experiencia social subjetiva de las personas, tal como se construye en la
interacción social.
- “La PS es una rama de las ciencias sociales que intenta explicar cómo la sociedad
influyó en la cognición, la motivación, el desarrollo y el comportamiento de individuos
y es influida por ellos” acá D. Cartwright destaca las relaciones recíprocas entre
sociedad e individuos a través del ambiente social y el comportamiento social.
El contexto social en el surgimiento de la PS
Allport (1954) considera que las raíces de la PS están en la Europa occidental y su
florecimiento es americano, en el periodo post-guerra.
Con la Segunda Guerra Mundial, llegaron una gran cantidad de problemas y necesidades
críticas que requerían respuesta. Se dio un flujo migratorio de científicos europeos a EEUU
generando un retraso de la PS europea y un crecimiento de psicólogos sociales en EEUU. Estos
cuando llegan se encuentran con el conductismo americano investigando para generar leyes
generales de conducta para solucionar los problemas acarreados por la guerra, por ejemplo la
reinserción de los soldados a la vida cotidiana. Este era un conductismo empirista y positivista
que estudia la conducta observable.

Los precursores
Estos se encontraban en Europa a finales del siglo XIX. En Francia con Gabriel Tarde y en
Austria con Gustav Ratzenhofer.
Se da una polémica entre Tarde y Durkheim acerca de lo individual vs. lo social.
- Durkheim enfatizó la primacía de lo social sobre lo individual (modelo
supraindividual). Ve lo social como irreductible a una explicación psicológica
individual. Sale de la mirada introspeccionista e interpretativa y toma un objeto de
estudio medible y cuantificable: las representaciones colectivas, estudiadas tomando
objetivamente los hechos sociales. Estos son un constructo social que da cuenta de los
fenómenos estadísticamente representativos que suceden en un contexto determinado y
que se replica en un número considerable de casos.
Plantea una relación del individuo con la solidaridad social y como esta genera la
conciencia colectiva (sistemas organizados de creencias y conocimientos sobre la
realidad), esta se genera a través de la fuerza coercitiva del orden social.
- Tarde enfatizó el papel del individuo sobre el desarrollo social (modelo
interpsicológico). El sujeto interioriza normas sociales que se transforman en lo más
íntimo del mismo. Estudia los actos individuales.
Para entender el funcionamiento social del individuo se debe ver la interacción entre
este y sus pares. Establece dos fuerzas para el funcionamiento de la interacción:
imitación e innovación. La primera la caracteriza como dinámica y selectiva. Tarde se
refiere a la reciprocidad de las imitaciones en el proceso social, donde los individuos se
influyen recíprocamente construyendo una conciencia colectiva.
Establece que la conciencia colectiva no tiene una existencia independiente de los
individuos y que la coerción normativa, asimilada a la conciencia, se hace inferior
frente a las creencias y deseos.

Dicha polémica es resuelta por Mead, quien desarrolla que hay un proceso por el cual nos
construimos personas y a la vez construimos la sociedad.

Historia de la psicología social


Prevalecieron 2 corrientes:
1) Psicología Social Psicológica
- Deriva de la psicología general, principios del S. XX, EEUU.
- Deriva del conductismo. Se dejó de estudiar los procesos mentales para estudiar la
conducta observable, para poder medir y observar de forma objetiva y llevar a métodos
experimentales.
- Se buscaban leyes generales de la conducta social, atendiendo más a lo que la gente
hace y no a lo que piensa/siente.
- La unidad de estudio y conceptualización fue el individuo y su forma de relacionarse
con el medio circundante.
- Surge el pensador Stanley Milgram quien estudió la obediencia debida, es decir, las
razones por las cuales la gente obedece a órdenes criminales emitidas por una autoridad
legítima, la compulsión a hacer el mal como resultado a factores contextuales.

2) Psicología Social Sociológica


- Vinculada al interaccionismo simbólico. (Chicago - inicios S.XX)
- Pensadores como Cooley, W. Thomas y George Mead dicen que “las influencias más
importantes sobre la conducta son las simbólicas, que derivan del uso del lenguaje y
que impregnan de significado la conducta social”.
- Conformación de la persona a través de la internalización de significados plasmados
en la interacción social e incorporados al sí mismo, que le permiten ver al mundo
como los demás → desarrollo evolutivo.
- Surge Mead:
Cuestiona el conductismo reduccionista de Watson y dice que hay una dialéctica y una
intervinculación entre lo social y lo individual, una interacción recíproca, donde se
construye el individuo y nace la mente.
Plantea que la mente surge en la comunicación humana y en la experiencia social de las
personas. Es una teoría genética, dado que la persona se desarrolla cognitivamente a
través de la experiencia social de adoptar los roles de los demás, internalizando así lo
cultural e incorporando el punto de vista de los otros, permitiendo la constitución del
individuo y su conciencia reflexiva.
El individuo nace como un organismo biológico potencial de sujeto social que necesita
un otro que cumpla el rol de crianza, imponiendo pautas y normas sociales. Este otro
es un ser significativo y ejerce el cuidado interactuando con el organismo biológico que
se desarrolla con símbolos lingüísticos y se conforma como sujeto.
Estos símbolos lingüísticos son el lenguaje, este es un código común compartido que
produce transformaciones, por ejemplo la incorporación de significantes y la
construcción de la persona.

Construccionismo social
En 1966 Berger y Luckmann publican su obra La construcción social de la realidad. Partiendo
desde un enfoque fenomenológico estudiaron las formas sociales de conocimiento. Sostienen
que el significado de la vida humana constituye en la conciencia y establecen como
características de nuestra especie, la conciencia reflexiva e intencional, la individuación, la
especificidad del cuerpo vivo, la socialidad y la constitución histórico social de la identidad
personal.
Proponen un modelo de creación del mundo social -realidad objetiva- y de constitución de la
realidad subjetiva. Toman teoría de diferentes autores como Durkheim, Marx, Weber y
especialmente desde el interaccionismo simbólico de Mead, plantean que la conducta humana
es de carácter simbólico, que los hombres interpretan permanentemente la realidad atribuyendo
significados en la interacción a los tramos de experiencia compartida. Los significados son el
eje central para comprender la conducta humana.
De esta obra, Kenneth Gergen, deriva el nombre construccionismo social para el movimiento
constructivista de la psicología social.

El constructivismo es una posición epistemológica con raíces en la historia de la filosofía y el


pensamiento. Su problemática central es el conocimiento de la realidad y de la existencia
objetiva de la realidad.
Teoría postobjetiva → el sujeto construye activamente el conocimiento del mundo externo.
El conocimiento no es un reflejo de una realidad objetiva eterna, sino una activa construcción
determinada por la estructura del sujeto. El sujeto construye el mundo que conoce y
paralelamente se construye a sí mismo.
Cada persona construye una representación del mundo al que percibe como realidad. Son
representaciones consensuadas que constituyen un mapa del mundo, una representación de
nuestra experiencia, que nos orienta para actuar en el. Nuestro conocimiento del mundo es una
construcción de la realidad y esta construcción es asimismo construida.
El constructivismo en la psicología social (construccionismo) comienza con Kurt Lewin,
quien enfatizaba la importancia de la “realidad psicológica” tal como era construída por el
sujeto.
Según Gergen, el construccionismo social, considera el conocimiento del mundo como un
artefacto de intercambio comunal (ni como reflejo ni como mapa). Dice que emerge del proceso
de intercambio social, de comunicación; intenta superar el dualismo sujeto/objeto.
El construccionismo comienza con una duda de cómo el mundo es dado por supuesto y como
las personas explican o dan cuenta del mundo en el que viven y que los incluye, estas
comprensiones y significados se dan por intercambios históricamente localizados posibles a
través de la comunicación, la negociación, el conflicto y la retórica.

El construccionismo:
- Pone en duda todo lo establecido, crítica lo dado por obvio, desafía la base objetiva del
conocimiento y a la epistemología positivista, cuando señala que fenómenos como las
emociones, la identidad, el género o la violencia emergen de la atribución de
significados en contextos de intercambio histórico que configuran formas de acción
social. Cuestiona ideas básicas acerca de nuestras vidas, nuestra identidad, nuestros
valores. La interacción social crea los significados de las acciones y construye
socialmente a la persona.
- Establece una especificidad histórico-cultural. El contexto social tiene una relevante
influencia en los fenómenos humanos.
- El conocimiento se da entre las personas conjuntamente durante la comunicación, es un
producto socialmente elaborado a través de prácticas colectivas (no son conocimientos
aislados). La comunicación es un proceso circular, inconcluso, reflexivo. Los
significados consensuados construyen la realidad, validan la cultura.
- Los modos de definir el mundo suponen la forma de ver el mundo. El lenguaje como
dimensión performativa, ordena y da sentido a la vida.

Reflexión final:
1ro la psicología alcanza el status de ciencia, se acerca al positivismo y a las ciencias
naturales. 2do el conductismo estadounidense con el método experimental en el S.XX. 3ro
el desarrollo de la PS sociológica surge el interés por la experiencia de las personas, la forma
en que otorgan significado a sus vidas (investigación cualitativa), aumento de lo social. 4to
con una epistemología postobjetiva, constructivista, llega la importancia de los significados
y el cognitivismo. Interpretativismo, hermenéutica, fenomenología, constructivismo. Se
destacan los procesos de intercambio social y la comprensión de la conducta humana a partir
de su contexto histórico, político, ideológico y cultural.

Conceptos de la Unidad 1
Psicología social:
Teoría de la psicología social psicológica:
Teoría de la psicología social sociológica:
Paradigma de la complejidad:

Unidad 2

Una Introducción al Construccionismo Social - Cap.1


Vivien Burr
Introducción
¿Qué es el construccionismo social?
Es una orientación teórica que sustenta a todos los nuevos abordajes, que ofrecen alternativas
radicales y críticas en psicología y en psicología social, como la psicología crítica, el análisis
del discurso, la deconstrucción, el postestructuralismo, etc.

¿Hay una definición de construccionismo social?


No hay una única definición, debido a que por más de que algunos autores construccionistas
sociales tengan características en común, no hay una única característica que unifique una
posición construccionista social. Así que podemos agrupar bajo el nombre de
“construccionismo social” a cualquier enfoque que tenga como base uno o más de los siguientes
supuestos clave:
1) Una postura crítica respecto del conocimiento dado por supuesto:
El construccionismo social nos invita a ser críticos con la idea de que nuestras observaciones
del mundo nos brindan su naturaleza sin problemas, y a desafiar el punto de vista de que el
conocimiento convencional se basa sobre la observación objetiva y sin sesgos del mundo.
Se opone al positivismo o empirismo, no necesariamente lo que existe es lo que percibimos
que existe. Dice que debemos desconfiar de nuestros supuestos acerca de lo que el mundo
parece ser y que las categorías establecidas, mediante las cuales aprehendemos el mundo, no
son divisiones reales/naturales. Por ejemplo: el género.

2) Especificidad histórica-cultural:
Las formas en que habitualmente comprendemos el mundo, las categorías y conceptos que
usamos, son histórica y culturalmente específicos; dependen de donde uno vive y en qué
época.
Todas las formas de comprensión don relativas a una cultura y a un momento de la historia y
también son productos de esa cultura e historia. Las formas específicas de conocimiento que
caracterizan na cultura son artefactos de esa cultura.

3) El conocimiento se sustenta en procesos sociales:


Según el construccionismo social nuestro conocimiento del mundo, nuestra forma de
entenderlo, es constituido en la interacción cotidiana entre personas. Lo que sucede entre las
personas, en el curso de la vida cotidiana, es considerado como las prácticas en las que se
constituyen nuestras versiones compartidas del conocimiento, lo que consideramos como
“verdadero” (variando histórica y culturalmente).
No deriva de la observación objetiva del mundo, sino de los procesos sociales e interacciones
en los que las personas se comprometen constantemente entre sí.

4) El conocimiento y la acción social van de la mano:


Estas comprensiones construidas en procesos sociales invitan a los seres humanos a un
diferente tipo de acción. Según cómo definimos algo o pensamos ese algo, actuamos de
determinada forma. Las descripciones o construcciones del mundo sostienen, por lo tanto,
algunos patrones de acción social y excluyen otros.

¿En qué se diferencia el construccionismo social de la psicología


tradicional?
1) Anti-esencialismo:
Psicología tradicional: corrientes como el psicoanálisis o la teoría del rasgo se basan en la
idea de que hay de antemano un “contenido” dado en las personas, son posturas esencialistas
que consideran que la persona tiene una naturaleza identificable ya sea por la biología o el
entorno.
Construccionismo social: como el mundo social y nosotros mismos somos producto de
procesos sociales, establece que NO puede haber una naturaleza dada. No hay esencias en las
cosas o personas, que las hagan ser lo que son.

2) Anti-realismo:
Psicologías tradicionales: la búsqueda de la verdad ha sido el camino de toda ciencia social
desde sus comienzos.
Construccionismo social: niega que nuestro conocimiento sea producto de una percepción
directa de la realidad. Construimos nuestras propias versiones de la realidad entre nosotros y
cuando se acepta el relativismo histórico y cultural, la “verdad” se vuelve problemática. No
hay hechos objetivos.

3) La especificidad histórica y cultural del conocimiento:


Psicologías tradicionales: buscan definiciones definitivas de la naturaleza humana, leyes, sin
tener en cuenta la especificidad histórica y cultural.
Construccionismo social: Así como las formas del conocimiento, las teorías y explicaciones
de la psicología quedan ligadas al tiempo y la cultura. No pueden ser tomadas como
descripciones definitivas de la naturaleza humana y deben virar al estudio histórico del
surgimiento de las formas actuales de la vida psicológica y social, y de las prácticas sociales;
la compleja cuestión de cómo la gente crea y es creada por la sociedad.

4) El lenguaje como una condición previa del pensamiento:


Psicologías tradicionales: psicólogos como Piaget creían que el pensamiento se desarrollaba
en el niño antes de la adquisición del lenguaje; y también la psicología tradicional sostiene la
asunción tácita de que el lenguaje es una expresión directa del pensamiento.
Construccionismo social: A medida que se desarrolla la capacidad de utilizar el lenguaje, se
adquieren conceptos y categorías, como los marcos conceptuales y las categorías usadas por
nuestros antecesores. El modo en que la gente piensa es provisto por el lenguaje, es una
precondición del pensamiento.

5) El lenguaje como una forma de acción social:


Psicologías tradicionales: consideran al lenguaje como el vehículo pasivo para nuestros
pensamientos y emociones.
Construccionismo social: pone en un lugar central a las interacciones cotidianas entre las
personas, las cuales producen activamente las formas de conocimiento, usando el lenguaje;
por lo que este puede ser pensado como una forma de acción con un rol performativo.

6) El énfasis puesto en la interacción y en las prácticas sociales:


Psicologías tradicionales: busca explicaciones de los fenómenos sociales dentro de la
persona.
Construccionismo social: el enfoque debe estar en las prácticas sociales en las que
participan personas y las interacciones entre ellos. Buscar las explicaciones en los procesos
interactivos, no en la psiquis individual.
7) El énfasis en los procesos:
Psicologías tradicionales: plantean las explicaciones en términos de entidades estáticas,
como los rasgos de personalidad, modelos de memoria, etc.
Construccionismo social: expresan las explicaciones en términos de la dinámica de la
interacción social, poniendo énfasis en los procesos y no en las estructuras. Por ejemplo, el
conocimiento es visto no como algo que las personas tienen o no tienen, sino como algo que
las personas hacen juntas.

Podemos llamar construccionistas sociales a quienes parecen acordar (explícita o


implícitamente) con uno o más de los principios antes mencionados.

¿Es real la realidad? - Parte I y II


Paul Watzlawick

Las dos realidades


Tesis → NO existe una realidad absoluta, sólo visiones o concepciones subjetivas, y en parte
totalmente opuestas, de la realidad, de las que se supone ingenuamente que responden a la
realidad “real”.
Solemos mezclar dos conceptos muy distintos de la realidad; el primero es el de las propiedades
puramente físicas de las cosas y responde al proceder científico objetivo, el segundo afecta a
la suma de un sentido y un valor a estas cosas y, por ende, a la comunicación.
Realidad de primer orden (R1): aspectos de la realidad que se refieren al consenso de la
percepción y se apoyan en pruebas experimentales, repetibles y verificables. Normas objetivas.
Realidad de segundo orden (R2): es la significación o el valor que se le da a estas cosas, a
estas realidades de primer orden. Es una realidad consensuada que se da en procesos de
interacción. Es absurdo discutir sobre lo que es “realmente” real. Normas subjetivas.
“Si cambia tu forma de mirarme, cambia mi realidad” → si cambian las significaciones,
cambia la realidad.

Vivimos bajo la ingenua suposición de que la realidad es naturalmente tal como nosotros la
vemos y que todo el que la ve de otra manera tiene que ser un “malicioso o demente”. Esta es
una construcción socio-histórica.

LA REALIDAD ES RELATIVA

Acerca de estar sano en un medio enfermo


David L. Rosenhan

Estamos personalmente persuadidos de que podemos separar lo normal de lo anormal, pero las
pruebas no son concluyentes. Benedict (1934): la normalidad y la anormalidad no son
conceptos de validez general.
Esta diferenciación es apoyada por la psiquiatría en el criterio aparentemente objetivo de la
“adaptación a la realidad” de un individuo.
Hay un convencimiento científico de que los pacientes presentan síntomas, susceptibles de ser
divididos en categorías y que por lo tanto es posible distinguir a los enfermos mentales de los
sanos.
Este ha sido cuestionado por reflexiones teóricas y antropológicas. Muchos psicólogos opinan
que el diagnóstico es inútil y a veces perjudicial. Los diagnósticos solo existen en la cabeza del
observador y construyen realidades (constructo rígido y negativo, estigma).

Proyecto
- Se internaron a personas normales (sin síntomas de trastorno psíquico) en clínicas
psiquiátricas para comprobar si llamaban la atención como sanas mentalmente.
- Se tomó un grupo de 8 pseudopacientes muy heterogéneo, que usaron pseudónimos, se
les asignaron presuntos diagnósticos y fueron internados en 12 clínicas.
- El paciente llegaba a la clínica y se quejaba de haber oído voces. Dichas voces eran
desconocidas y del mismo sexo que el pseudopaciente. Los acontecimientos principales
de la vida de los pseudopacientes fueron presentados tal como habían ocurrido
realmente, con las alegrías y los disgustos.
- Inmediatamente después de la internación, los pseudopacientes dejaron de aparentar
normalidad. Hablaban con los demás pacientes y con el personal. Acataban las
indicaciones. Pasaban el tiempo escribiendo todas sus observaciones sobre el servicio,
los pacientes y el personal. Todas estas actividades no eran secretas.
- Ningún pseudopaciente fue desenmascarado. Se les diagnosticó a todos esquizofrenia
en “remisión”. Sólo los otros pacientes se daban cuenta que eran normales.
- Los médicos tienen una fuerte inclinación a cometer un error de tipo 2: Se inclinan más
a considerar enferma a una persona sana, que sana a una persona enferma.
Pero este error es mucho más fatal en la psiquiatría que en la medicina, un diagnóstico
psiquiátrico conlleva estigmas personales, jurídicos y sociales.
- Experimento ilustrativo, demuestra que la tendencia a clasificar a personas sanas como
dementes es reversible en la medida e que haya cosas importantes en juego.

Las clasificaciones psicodiagnósticas se pagan


En cuanto el pseudopaciente ha sido clasificado una vez de esquizofrénico, nada puede hacer
para librarse de ese estigma. Se distorsiona la opinión de otros acerca de él y de su propia
conducta. Se crea así una REALIDAD.

La clasificación es tan poderosa que muchas de las formas de conductas de los


pseudopacientes fueron pasadas por alto o totalmente malinterpretadas, con el fin de que
correspondan a la realidad preparada. → el diagnóstico no fue influido en modo alguno por
la vida relativamente normal de los pseudopacientes, todo lo contrario, la imágen de las
condiciones de vida fue conformada de acuerdo con el diagnóstico.

Otra característica de los diagnósticos psiquiátricos es que buscan la fuente de la confusión


mental dentro del individuo y no en los estímulos que lo rodean, así es como las formas de
conducta provocadas por el entorno son adjudicadas por lo general erróneamente a la
enfermedad del paciente.
Una clasificación psiquiátrica crea una realidad propia y con ello, sus propios efectos. Cuando
se le diagnostica esquizofrenia, la expectativa es que lo siga siendo; cuando en algunos casos
se llega a diagnosticar la esquizofrenia “en remisión”, la clasificación lo sigue persiguiendo,
dandole la expectativa de que va volver a conducirse como esquizofrénico. Y así finalmente el
paciente termina aceptando el diagnóstico y comportándose correspondientemente,
adaptándose a esta construcción de una realidad interpersonal.

En conclusión, las conductas de los enfermos mentales y las personas normales se confunden
notablemente. Una persona no es sana constantemente, ni un enfermo mental está
constantemente loco.

La vivencia de la hospitalización psiquiátrica


En la sociedad “los locos” son los parias, la actitud de la gente frente a ellos se caracteriza por
el miedo, la hostilidad, la desconfianza y el horror. Frente a esto se acudió a la expresión
“enfermedad mental”, en busca de sentimientos humanitarios que deseen mejorar la posición
de los seres trastornados psíquicamente y la compasión publica; se los intenta equiparar a los
que padecen enfermedades físicas.
El hecho de que esto se encuentre en la generalidad de la población no es tan grave como que
se encuentre entre los profesionales de la salud mental. La relación de las personas que trabajan
en psiquiatría con los pacientes es ambivalente, sienten compasión y a la vez temor,
produciendo un alto grado de despersonalización.
La despersonalización llegaba al nivel de que los pseudopacientes se sentían invisibles o por
lo menos no dignos de ser tomados en cuenta. Estas actitudes negativas son el resultado natural
del sello que llevan los pacientes y del entorno en el que los encontramos.

La despersonalización:
Causas: - El personal evitaba tener contacto verbal con los pseudopacientes. El contacto visual
y la comunicación verbal reflejan el interés y el desarrollo de la personalidad. La falta de ambos
significa evitación y despersonalización.
- La pérdida de derechos legales, como la privacidad. En base a su calificación
psiquiátrica pierden credibilidad y su libertad de movimiento de limita.
- La administración de medicamentos en grandes cantidades, el personal se convence
de que este es el tratamiento y que no es necesaria mayor comunicación.
- La estructura jerárquica del hospital psiquiátrico, donde los que están en la cima
son los que menos contacto tienen con los pacientes, esto influye en los demás colaboradores,
causando la idea general de que cuanto menos interés les prestes a los pacientes mayor poder
tenés.
Consecuencias: - Impotencia frente a una situación de constante despersonalización y
destrucción de la personalidad.

Conclusión
En las clínicas psiquiátricas no es posible distinguir entre las personas sanas y los enfermos
mentales. La propia institución crea una realidad especial, en la cual el significado de las formas
de conducta muchas veces es malinterpretado. La consecuencia para los pacientes es la
impotencia, la despersonalización, el aislamiento, la humillación y la desvalorización.

La realidad inventada: Profecías que se autocumplen


Watzlawick

Una profecía que se autocumple es una suposición o predicción que, por la sola razón de
haberse hecho, convierte en realidad el suceso supuesto, esperado o profetizado y así confirma
su propia exactitud.
Por ejemplo, si alguien asume que no es respetado, debido a su propia suposición actuará de
manera tan hostil, susceptible y suspicaz que él creará y atraerá el irrespeto de los demás. Por
bien conocido y concurrente que sea este mecanismo, en su base hay circunstancias que de
algún modo forman parte de nuestro pensamiento cotidiano y que tienen una profunda y vasta
significación en la imagen de la realidad que nos formamos.
Nuestra manera de pensar es de forma lineal: “evento B” es el resultado de “causa A” que la
precede. La causalidad es lineal, y B le sigue a A en el curso del tiempo. B no puede tener
efecto sobre A, porque esto significaría revertir el flujo del tiempo.
Sin embargo las cosas suceden de otra manera, por ejemplo: Un día los periódicos
comunicaron que se aproximaba una escasez de combustible, los motoristas acudieron a las
gasolineras para llenar sus tanques. Esto significó llenar 12 millones de tanques, dejando así
sin reservas, y por tanto verificando la predicción de un día para el otro.
Con este caso, el tradicional pensamiento lineal de causa-efecto se quebró. La escasez nunca
hubiera ocurrido si los periódicos no lo hubieran pronosticado. Un hecho que no existía, creó
un efecto real y presente. El futuro determinó el presente.

Este singular revertir de la causa y efecto es particularmente obvio en conflictos


interpersonales en donde lo que se llama puntuación de una secuencia de eventos está
invariablemente presente. Por ejemplo una pareja de esposos discuten conflictivamente y
ambos asumen que es el otro quien tiene la culpa, cuando su propia conducta es simplemente
una reacción a la conducta de su pareja. La mujer se queja de que su esposo se aleja de ella, lo
cual él admite, pero él ve su silencio o su lejanía como reacción a las constantes quejas,
acusaciones y críticas de ella.
La realidad interpersonal de él es que la mujer refunfuña (causa) y el se aparta (efecto). En
cambio, la realidad de la mujer es el marido se aparta (causa) y ella refunfuña (efecto). Hay
una puntuación opuesta donde se crean dos realidades contradictorias y se engendran dos
profecías que se autocumplen: los dos modos de conducta que subjetivamente se consideran
como reacción a la conducta de su cónyuge, provocan esta conducta en el otro.

El experimento de Rosenthal es un claro ejemplo de cómo, de manera profunda e incisiva, los


seres humanos somos afectados por nuestras expectativas, prejuicios, supersticiones y deseos
(los cuales son puras construcciones mentales, que suelen ni asemejarse a la realidad); y cómo
estos descubrimientos erosionan nuestras cómodas convicciones de calidad en lo hereditario y
características innatas.

Las profecías autocumplidas, el descubrimiento de que nosotros creamos nuestras realidades,


son fenómenos que no solo cuestionan nuestras creencias personales de la realidad, sino que
echa dudas sobre la visión de la ciencia.
La realidad inventada se convertirá en realidad factual sólo si la invención es realmente creída.
Donde el elemento de fe, de convicción ciega está ausente, no tendrá lugar ningún efecto. Con
el mejor entendimiento de la profecía autocumpllida, nuestra habilidad para trascenderlos
crece.

Condiciones
- Deben ser expresadas, enunciadas. No puede ser algo implícito.
- Tiene que haber una creencia de que un hecho que todavía no ocurrió puede generar efectos
en el presente. Inversión del modelo tradicional de causalidad lineal AB.
- Comportamiento acorde: no son profecías surgidas por arte de magia. Se habla de
comportamientos humanos que hacen que se autocumpla la profecía.
- La profecía de la cual sabemos que es sólo una profecía, ya no puede autocumplirse, porque
está presenta la posibilidad de elegir otra cosa y la posibilidad de infringirla.

Conceptos de la Unidad 2
Construcción intersubjetiva:
Realidad de primer orden:
Realidad de segundo orden:
Profecía autocumplida:
Construccionismo social:

Unidad 3

La construcción social de la realidad


Berger y Luckmann

Prólogo
Tesis central: La realidad se construye socialmente y la sociología del conocimiento debe
analizar los procesos por los cuales esta se produce.
¿Cómo es que la realidad ha llegado a darse por establecida? ¿Cómo se conservan o no esas
definiciones en la sociedad? ¿A partir de qué procesos, lo que aceptamos como de determinada
forma, eso que no cuestionamos, lo que está ahí, a nuestra disposición, se ha constituido como
tal?
Explican el funcionamiento de la realidad.
Realidad
Propiedad de los fenómenos que hace que la reconozcamos como independientes de
nuestra propia realidad → no dudamos, lo hacemos.
Conocimiento
La certidumbre de que esos fenómenos son reales y de que poseen características específicas.
“Esto siempre fue así”, se da por establecido.
Sociología del conocimiento
Se ocupa de lo que la gente “conoce” como “realidad” en su vida cotidiana, no teórica. El
conocimiento del “sentido común” y no de las “ideas”.
Suponen la relación entre el pensamiento humano y el contexto social donde se origina.
Se preguntan cómo el conocimiento común se enraiza en la vida social de un contexto socio-
histórico.
No intenta relevar “distorsiones” sino estudiar sistemáticamente las condiciones por las que se
constituye determinado conocimiento.
Establecen una relación entre sociedad-realidad objetiva-realidad subjetiva:
- Realidad objetiva: hechos sociales considerados como cosas - lo compartido.
- Realidad subjetiva: el objeto de conocimiento de la sociología es el complejo
significado subjetivo de la acción.
La realidad es objetiva porque está compartida y aceptada por un cierto contexto, pero es
subjetiva también por el uso y significado que le da cada individuo.
La sociedad tiene un carácter dual: facticidad objetiva y significado subjetivo. No funcionan
por separado, se dan simultáneamente: la construcción objetiva del orden social se da en
simultáneo con la construcción subjetiva.

Cap 1: Los fundamentos del conocimiento en la vida cotidiana


¿Cómo se construye la realidad subjetiva?

- La realidad de la vida cotidiana


Objetivo del texto → análisis sociológico del conocimiento que orienta la conducta en la
vida cotidiana.
La vida cotidiana se presenta como una realidad interpretada por los hombres. Para ellos tiene
el significado subjetivo del mundo coherente. Es un mundo que se origina en sus pensamientos
y acciones, y que está sustentado como real por estos. Es vista como la suprema realidad.
Buscamos, entonces, clarificar los fundamentos del conocimiento en la vida cotidiana, las
objetivaciones de los procesos subjetivos por medio de los cuales se construye el mundo
intersubjetivo del sentido común. El método más conveniente es el análisis fenomenológico,
que es descriptivo e empírico, el sentido común encierra interpretaciones pre científicas y cuasi-
científicas sobre la realidad cotidiana que da por establecida.

La conciencia es siempre intencional, dirigida a “algo”. La conciencia se mueve por las


diferentes esferas de la realidad de la vida cotidiana, es decir, tenemos conciencia de que el
mundo consiste en realidades múltiples y cuando se pasa de una realidad a otra experimentamos
un impacto, causado por el desplazamiento de la atención que implica dicha transición.
Entre las múltiples realidades se encuentra una que se destaca por excelencia, la realidad de
la vida cotidiana. Esta es suprema debido a su posición privilegiada. Se impone sobre la
conciencia de manera masiva, urgente e intensa, es imposible de ignorar. Es la única realidad
a la que vamos a dirigir nuestra conducta, nos vemos obligados a prestarle atención total y
experimentar la vida cotidiana en estado de vigilia. Es esto para nosotros algo normal y
evidente, constituye nuestra actitud normal.
Es una realidad ordenada, coherente, sus fenómenos están dispuestos de antemano, en pautas
independientes de nuestra aprehensión, se nos imponen. Es una realidad que se presenta ya
objetivada y está organizada en 3 ejes:
- Lenguaje: nos proporciona las objetivaciones indispensables y dispone orden dentro del
cual éstas adquieren sentido y dentro del cual la vida cotidiana tiene sentido para
nosotros. Marca las coordenadas de mi vida en la sociedad y llena esta vida de objetos
significativos.
- Tiempo y espacio: la vida cotidiana se organiza alrededor del “aquí” de mi cuerpo y el
“ahora” de mi presente; son el foco de la atención que presto a la realidad de la vida
cotidiana, es lo realissimum de mi conciencia.También abarca fenómenos que no están
presentes “aquí” y “ahora”. Experimentamos la realidad en grados diferentes de
proximidad y alejamiento, tanto espacial como temporal. Lo más próximo a nosotros
es cuando dominamos nuestra conciencia, podemos controlar corporalmente nuestra
vida cotidiana y nuestra atención está determinada por lo que hacemos, lo que ya
hicimos o lo que pensamos hacer. Es nuestro mundo por excelencia.

La realidad de la vida cotidiana se me presenta como un mundo intersubjetivo, que establece


una señalada diferencia entre la vida cotidiana y otras realidades de las que tengo conciencia.
No puedo existir en la vida cotidiana sin interactuar y comunicarme continuamente con otros.
Hay una correspondencia continua entre mis significados y sus significados. Sé que mi actitud
natural (actitud de la conciencia del sentido común) para con este mundo corresponde a la
actitud natural de los otros, sé que organizan este mundo con un “aquí y ahora” y que su
perspectiva no es idéntica a la mía, mi “aquí” es su “allí” y mi “ahora” no se superpone del
todo con el suyo. El conocimiento del sentido común es el que comparto con otros en las
rutinas normales y auto-evidentes de la vida cotidiana.

La realidad de la vida cotidiana se da por establecida como realidad, se impone por sí solo y
cuando quiero desafiar esa realidad tengo que hacer un esfuerzo deliberado y nada fácil. La
vida cotidiana se divide en sectores según su forma de aprehender: rutina y problemas.
- La rutina son las situaciones que conforman parte del conjunto de hábitos que hacemos
de forma automática. Es un ahorro de energía cognitiva. En tanto prosigan sin
interrupción, serán aprehendidas como no problemáticas.
- Los problemas son situaciones que rompen con la rutina y nos llevan a solucionarlos
de una determinada forma. Pero que no se salen de la realidad de la vida cotidiana, sólo
la enriquecen al incorporar conocimientos y habilidades requeridas para solucionarlos.
Ahora, cuando el problema que surge es completamente de otra clase, que trasciende los límites
de la realidad de la vida cotidiana y apunta a una realidad distinta, estas otras realidades
aparecen como zonas limitadas de significado, dentro de la suprema realidad.

Las zonas limitadas de significado se caracterizan por desviar la atención de la realidad de la


vida cotidiana, por ejemplo una obra de teatro: uno viene en su realidad de la vida cotidiana y
cuando se sube el telón y empieza la obra (impacto de cambio de esfera), se entra a una zona
limitada de significado y toda nuestra atención va a parar ahí, se genera una transición de la
realidad, se entra a “otro mundo” con significados y un orden propios; y cuando se cierra el
telón se vuelve a la suprema realidad de la vida cotidiana.
Este desplazamiento de la atención es extrema, produce un cambio radical en la tensión de la
conciencia

El mundo de la vida cotidiana se estructura tanto en el espacio como en el tiempo. La estructura


espacial posee una dimensión social ya que mi zona de manipulación se intersecta con la de
otros. La temporalidad es una propiedad intrínseca de la conciencia, el torrente de la
conciencia está siempre ordenado temporalmente. Se pueden distinguir diferentes niveles de
temporalidad que se construyen intersubjetivamente, el mundo de la vida cotidiana tiene su
propia hora oficial consensuada intersubjetivamente.
No puede haber simultaneidad total entre estos diferentes niveles de temporalidad. Tanto mi
organismo como la sociedad me imponen, e imponen a mi tiempo interior, ciertas secuencias
de hechos que requieren una espera. El hecho de que los diferentes niveles deban
correlacionarse en todo momento, advierte una alta complejidad de la estructura temporal de
la vida cotidiana.
Es coercitiva, porque no puedo invertir a voluntad las secuencias que ella impone. Hay
determinados tiempos para determinados procesos.
La misma estructura temporal proporciona la historicidad que determina mi situación en el
mundo de la vida cotidiana y va rigiendo mi autobiografía en un determinado contexto
histórico.

- Interacción social en la vida cotidiana


La realidad de la vida cotidiana es compartida con otros. ¿Cómo se experimenta esta
interacción?

+ flexibles Esquemas tipificadores - flexibles

Cara a cara Anonimato

Contacto Contacto Contemporáneos Antecesores Sucesores


cotidiano ocasional
↙↘
Alta probabilidad Baja probabilidad

1) “Cara a cara” → es la experiencia más importante, ya que es el prototipo de interacción


social y del que se derivan todos los demás casos.
→ el otro se encuentra en un presente vivido que ambos compartimos y
el resultado es un intercambio continuo entre mi expresividad y la suya. Esta continuidad
expresiva es utilizada por ambos simultáneamente, la subjetividad del otro es accesible
mediante muchos síntomas. El otro es completamente real.
→ Mi subjetividad me es accesible de una manera como jamás podrá serlo
la suya. Pero el conocimiento propio requiere de reflexión y esta es típicamente ocasionada
por la actitud que me demuestran otros. Es una respuesta de espejo a las actitudes del otro.
→ Son sumamente flexibles, es difícil imponer pautas rígidas a la interacción
cara a cara, se modifican por la variedad y sutileza del intercambio de significados subjetivos
que se produce.

Yo aprehendo y “trato” al otro por medio de esquemas tipificadores contenidos en la realidad


de la vida cotidiana. Estas tipificaciones afectan continuamente la interacción.
→ Los ET “cara a cara” son recíprocos, los dos ET entran en negociación
continua.

2) Anonimato → A medida que nos vamos alejando del “cara a cara” y nos acercamos al
anonimato, los esquemas tipificadores se vuelven más inflexibles y rígidos, y la interacción se
vuelve más tipificada y abstracta.

Entre el “cara a cara” y el anonimato se distinguen diferentes tipos de relación:


a) Asociados con contacto cotidiano: Se interactúa “cara a cara” cotidianamente, hay un
contacto frecuente. Ejemplo: la familia, amigos, compañeros de trabajo/estudio.
b) Asociados con contacto ocasional: Personas con las que se interactúa “cara a cara” pero
ocasionalmente, quizás sólo una vez en tu vida, no hay un contacto frecuente ni una
relación estable. Ejemplo: una conversación con alguien en un colectivo.
c) Contemporáneos: Son personas que viven en contemporaneidad con uno, es decir, en
la misma época; pero en contextos sociales o espaciales tan diferentes que es casi
imposible llegar a tener un contacto directo “cara a cara”. Se de su existencia como
seres humanos concretos, pero puedo aprehenderlos solo por medio de tipificaciones
anónimas.
Se dividen en alta probabilidad de contacto directo y baja probabilidad de contacto
directo. Los primeros son los que es posible que se de alguna que otra situación “cara
a cara”; los segundos tienen potencial pero es improbable que se de, por ejemplo, el
presidente.
d) Antecesores: Estos son completamente anónimos, es imposible un contacto “cara a
cara”, no hay interacción, es sumamente abstracto. La relación se da mediante relatos y
mitos a partir de los cuales adquirimos las tipificaciones. Por ejemplo, los padres de la
patria.
e) Sucesores: Estos conforman una proyección sustancialmente vacía, casi desprovistas
por completo de contenido individualizado. Claramente, también es imposible
cualquier tipo de interacción. Por ejemplo, las generaciones venideras.
(A pesar del sumo anonimato de estas dos últimas, forman parte de la vida cotidiana y
direccionan nuestra conducta)
- El lenguaje y el conocimiento en la vida cotidiana
La expresividad humana se puede objetivar, o sea se manifiesta en productos de actividad
humana que están al alcance de sus productores y de otros hombres. Las objetivaciones sirven
como índices duraderos de los procesos subjetivos de quienes los producen.
La realidad de la vida cotidiana es posible por estas objetivaciones. Estoy todo el tiempo
rodeado de objetos que proclaman las intenciones subjetivas de mis pares.
Un caso especial de objetivación es la significación.

La significación es la producción humana de signos, el cual tiene una intención explícita de


servir como indicio de significados subjetivos.
Los signos se agrupan en una cantidad de sistemas. Así los signos y los sistemas de signos son
objetivaciones, son accesibles ,as a lla de la expresión de intenciones subjetivas “aquí y ahora”.

El lenguaje (sistema de signos vocales):


- Es el sistema de signos más importante de la sociedad humana. Es la capacidad intrínseca de
expresividad vocal que posee el humano, que se vuelven lingüísticas al integrarse dentro de un
sistema de signos accesibles objetivamente.
- Se origina en la situación cara a cara, pero también puede separarse de ella fácilmente, ya que
tiene la capacidad de comunicar significados que no son expresiones directas de subjetividad
“aquí y ahora”.
- Es capaz de transformarse en un depósito objetivo de acumulaciones de significado y
experiencia, que se puede preservar a través del tiempo y transmitir a las generaciones futuras.
- Posee la cualidad de reciprocidad. Cada uno oye lo que dice el otro en el mismo momento en
que lo dice, y esto posibilita el acceso continuo, sincronizado y recíproco a las dos
subjetividades. Como yo objetivo mi propio ser, este se hace accesible para mí a la vez que
para el otro. El lenguaje hace más real mi subjetividad, la cristaliza.
- Se presenta como una facticidad externa y obliga a adaptarse a sus pautas, efecto coercitivo.
Se debe tomar en cuenta las normas aceptadas en el habla correcta para diversas ocasiones.
- Tipifica experiencias, permitiéndome incluirlas en categorías amplias en cuyos términos
adquieren significado para mi y para otros.
- Tiende puentes entre diferentes zonas dentro de la realidad de la vida cotidiana y las integra
en un todo significativo. Las trascendencias tienen dimensiones espaciales, temporales y
sociales.
- Es capaz de trascender la realidad de la vida cotidiana. Puede referirse a experiencias que
corresponden a zonas limitadas de significado, y abarcar zonas aisladas de la realidad. Por
ejemplo, interpretar “el significado” de un sueño integrandolo lingüísticamente a la realidad de
la vida cotidiana.
- Construye enormes edificios de representación simbólica que parecen dominar la realidad de
la vida cotidiana. El simbolismo y el lenguaje simbólico llegan a ser constituyentes esenciales
de la realidad de la vida cotidiana y de la aprehensión de esta en el sentido común.
En la vida cotidiana, el conocimiento aparece distribuido socialmente. Diferentes
individuos lo poseen en grados diferentes. No sé todo lo que saben mis semejantes, y
viceversa.
Cap. 2: La sociedad como realidad objetiva
¿Cómo la realidad subjetiva, constructo de la realidad humana, se hace objetiva?

1. Institucionalización
a. Organismo y actividad
¿Cómo se forma el orden social en el cual nos movemos como sujetos?

- El ser humano necesita de un orden social para poder constituirse porque posee un equipo
biológico insuficiente, carece de medios biológicos que proporcionen estabilidad a su
comportamiento, no posee ambiente específico de su especie firmemente estructurado por la
organización de sus propios instintos. Hay naturaleza humana en el sentido de que tenemos
constantes antropológicas, un substrato establecido biológicamente que determina la
variabilidad de las formaciones socioculturales; que se diferencia de las constantes biológicas
de los animales, los cuales presentan una biología altamente desarrollada que les provoca una
alta clausura al mundo, tienen un ambiente de desarrollo delimitado pero instintos altamente
desarrollados.
Constantes antropológicas:
● Apertura al mundo
● Plasticidad de los Instintos
Apertura al mundo: posibilidad de adaptarnos a distintos ambientes. Esta apertura al mundo
produce, a su vez, una clausura al mundo ya que no existe nada que esté fuera del mundo social.
Existencia humana es transformada por el orden social en una relativa clausura al mundo.
Plasticidad de los Instintos: posibilidad de utilizar el equipo biológico humano para poder
aplicarlo en las distintas necesidades/actividades. Esto le permite la apertura al mundo.
- El hombre construye su propia naturaleza, se construye a sí mismo. A partir de las constantes
antropológicas se empiezan a armar las sociedades.

Construcción del sujeto social


- Una persona es un emergente social que se construye en una interrelación gracias a la
plasticidad y a la sensibilidad frente a la influencia social → interaccionismo simbólico.
- El ser humano en desarrollo se relaciona no sólo con un ambiente natural determinado, sino
también con un orden social y cultural específico mediatizado para él por otros significantes.
Es decir, el organismo humano nace con ciertas potencialidades que necesitan de un “otro
significativo”, el cual le brinda sostén y manipulación para desarrollar este potencial de
estímulos, lo hace estableciendo pautas y normas (de una determinada cultura), generando así,
más que instintos, comportamientos sociales y se logra la constitución del “yo” humano.
Los presupuestos genéticos del yo se dan, claro está, al nacer, pero no sucede otro yo hasta que
se experimenta más tarde como identidad reconocible subjetiva y objetivamente. Los mismos
procesos sociales que determinan la plenitud del organismo producen el yo en su forma
particular y culturalmente relativa. Por lo tanto, se da por sobreentendido que el organismo y
más aún el yo, no pueden entenderse adecuadamente si se los separa del contexto social
particular en el que se formaron.

La existencia humana se desarrolla empíricamente en un contexto de orden, dirección y


estabilidad. Porque en primer término: el desarrollo individual del organismo está precedido
por un orden social dado; la apertura del mundo, biológica y precedida por el orden social. Y
en segundo término: esta apertura al mundo es siempre transformada por el orden social
causando una relativa clausura al mundo.
Esta clausura al mundo se da cuando nacemos y se nos comienza a imponer cierta socio-
cultura, la cual produce una restricción y limitación del sujeto, delimitando la plasticidad de
sus impulsos.
Esta apertura y clausura al mundo se da en 2 momentos:
1) El organismo humano nace con capital biológico para desarrollar y plasticidad en sus
impulsos, lo cual lo hace susceptible a influencias externas que marcan su apertura
al mundo.
2) Con el desarrollo bio-psico-social del organismo humano se van marcando las
diferencias con el resto de las especies. Se ve implicado si o si un “otro significativo”
que transmite a través de la crianza pautas y normas socioculturales que van a
redireccionar los instintos a estadíos lógicos superiores. Estas pautas y normas son
externas al organismo humano en un principio y son coercitivas, es decir,
inevitablemente van a ser impuestas por el orden social. Esta imposición delimita la
plasticidad del sujeto causándole una clausura al mundo.

Orden social → Es el producto de la actividad humana en su proceso de externalización,


generando acciones habitualizadas (pautas, reglas, hábitos) en el tiempo que guía la conducta.
No se da biológicamente, existe solamente como producto de la actividad humana.
Existen tres momentos dialécticos en la actividad humana:
1. Externalización
2. Objetivación
3. Internalización
La externalización: es una necesidad antropológica fundada en la constitución biológica del
hombre. El ser humano se concibe dentro de una esfera cerrada de interioridad estática, tiene
que externalizarse en actividad continuamente para proporcionar un contorno estable. El
hombre se externaliza en actividades y crea su propio mundo, se expresa a través de su
actividad, construye el producto social por excelencia, los significados.

Orden social se explica con la INSTITUCIONALIZACIÓN

b. Orígenes de la institucionalización
Toda actividad humana está sujeta a la habituación → Todo acto que se repite con
frecuencia, crea una pauta que luego puede reproducirse con economía de esfuerzos y que
inmediatamente es aprehendida como pauta por el que la ejecuta (el individuo solitario,
introduce hábitos en su actividad). Comporta la gran ventaja psicológica de restringir las
opciones y provee el rumbo y la especialización de la actividad que falta en el equipo
biológico del hombre.
- Estos procesos de habituación anteceden a toda institucionalización, pueden aplicarse a un
hipotético individuo solitario, separado de cualquier interacción social.

- La institucionalización aparece cada vez q se da una tipificación recíproca de acciones


habitualizadas por tipos de actores. Esta tipificación es la institución.
Las tipificaciones de la acciones habitualizadas que constituyen las instituciones, siempre se
comparten, son accesibles a todos los integrantes de un determinado grupo social, y la
institución misma tipifica tanto a los actores individuales como a las acciones individuales.
- Para que se produzcan estas tipificaciones recíprocas debe existir una situación social
continua en la que las acciones habitualizadas de dos o más individuos se entrelazan. La
aparición de un tercero cambia el carácter de la continua interacción social. La aparición de un
tercero permite armar la historicidad de la institución y la objetivación (intercambio cara a cara
es lo que queda objetivado). La objetivación se transmite a través del lenguaje de una
generación a otra.

Ejemplo → Cuando A y B interactúan se producen tipificaciones, se observan y atribuyen


motivos a los actos del otro y viendo que se repiten los tipifican como recurrentes,
produciéndose una tipificación recíproca. Estas se expresan en forma de pautas específicas
de comportamiento, o sea roles. Surgirá una colección de acciones tipificadas recíprocamente
que cada uno habitualizará en papeles o roles. Ahora su vida juntos es una esfera de rutinas
establecidas, la vida cotidiana. Esta rutina da lugar a la división del trabajo entre ambos
llevando a nuevas habitaciones y poniendo en vía de construcción un mundo social.
Esta tipificación recíproca no llega a ser una institucionalización, pero esta ya está
presente, su objetividad se mantiene tenue→ institucionalización en germen
Cuando entra un tercero, C, cambia el carácter de la continua interacción entre A y B. Ahora
el mundo institucional entre ellos se transmite a otros (a C), perfeccionalizandose así la
institucionalización, las habitaciones y tipificaciones de la vida cotidiana de A y B ahora se
convierten en instituciones históricas y adquieren objetividad. Las instituciones ahora se
experimentan como si poseyeran una realidad propia y se presentan a C como un hecho externo
y coercitivo. En este proceso de transmisión a la nueva generación la objetividad “se espesa”
y “se endurece”, el mundo logra firmeza en la conciencia y se vuelve real masivamente, aparece
como una realidad dada.
Tenemos así un mundo social, una realidad amplia y dada que enfrenta al individuo de modo
análogo a la realidad del mundo natural y solamente así, como mundo objetivo, se puede
transmitir a las nuevas generaciones. Historicidad + objetividad = institucionalización
La objetividad → proceso mediante el cual la subjetividad humana se encarna en productos
que son accesibles para uno mismo y para los demás en tanto elementos de un mundo
común. Permite el establecimiento de una significación consensuada. Es el proceso por el
cual los productos externalizados de la actividad humana alcanzan el carácter de
objetividad, el cual se realiza a través del lenguaje. Implica que los productos de la
externalización humana se pasan a un código compartido. Como mundo objetivo, las
formaciones sociales se pueden transmitir de generación a generación.
2 tipos de Objetividades:
● Objetividad de Primer Orden: la puesta en palabras de la subjetividad. Lo vuelco hacia
afuera
● Objetividad de Segundo Orden: la justificación de las acciones habitualizadas. Surge la
legitimación.

Las instituciones implican historicidad (se construyen en el curso de una historia compartida)
y control (establecen pautas definidas de antemano que canalizan el comportamiento humano
en una dirección determinada).
Decir que un sector de actividad humana se ha institucionalizado ya es decir que ha sido
sometido al control social. Las instituciones se manifiestan en colectividades que abarcan
grandes cantidades de gente. El proceso de institucionalizador de tipificación recíproca se
realizaría aun cuando dos individuos empiezan a interactuar de nuevo. Sociedad es producto
humano, una realidad objetiva y el hombre es, a su vez, un producto social.
“Pautas establecidas de antemano” → hace referencia a la RUTINA

Roles
Las tipificaciones se expresan como pautas específicas de comportamiento y ahí se
desempeñarán los roles, los cuales marcan o forman la institución. Cuando los individuos
desempeñan roles quiere decir que participan de un mundo social.
Orígen de los roles: reside en el mismo proceso fundamental de habituación y objetivación que
el orígen de las instituciones.
Características de los roles: Son intercambiables ya que pueden ser ejercidos por otras
personas. Son propios de una colectividad/sociedad propiamente dicha. Los roles marcan la
división del trabajo. Representan el orden institucional
- Cuando uno internaliza los roles, cobra una realidad subjetiva, me apropio del mundo en el
que estoy, lo internalizo.
Los roles aparecen cuando se inicia el proceso de tipificaciones recíprocas de comportamiento,
proceso que se da en la interacción social y previo a la institucionalización.

- Tenemos que destacar que la relación entre el hombre (productor) y el mundo social (su
producto) es y sigue siendo dialéctica. Es decir, que el hombre y el mundo social interactúan.
El producto vuelve a actuar sobre el productor. La externalización y la objetivación son
momentos de un proceso dialéctico continuo.
La externalización es el proceso por el cual las instituciones aparecen fuera del individuo,
persistentes en su realidad "están ahí", existen como realidad externa, el individuo no puede
comprenderla por introspección: debe "salir" a conocerlas, así como debe aprender a conocer
la naturaleza.
La objetivación es el proceso por el cual los productos externalizados de la actividad humana
alcanzan el carácter de objetividad. Los significados se materializan permitiendo que el sujeto
se vuelva accesible a los conocimientos de su entorno y a las experiencias de su práctica
cotidiana.
El tercer momento de este proceso, es la internalización, a través de la cual el mundo social
objetivado vuelve a proyectarse en la conciencia durante la socialización. Se define como la
aprehensión o interpretación inmediata de un acontecimiento objetivo en cuanto expresa
significado. A través de la internalización se produce la transmisión del mundo social a una
nueva generación.

La conciencia retiene sólo una pequeña parte de la institucionalización, las experiencias quedan
estereotipadas en el recuerdo como entidades reconocibles y memorables. Esa parte retenida
se sedimenta porque si no lo hiciese, las personas no encontrarían sentido a su biografía
humana. Mi conciencia arma mi propia biografía. Este proceso se conoce como
sedimentación. Puedo tener una biografía común compartida, convirtiéndose así en un
depósito de experiencias y esta es la sedimentación social.

El mundo institucional requiere legitimación, o sea, modos con que poder “explicarse” y
justificarse. Esto no es porque parezca menos real. La realidad del mundo social adquiere
mayor masividad en el curso de su transmisión. Esta realidad es histórica y la nueva generación
la recibe como tradición más que como recuerdo biográfico.

c. Alcance y modos de la institucionalización


La institucionalización no es un proceso irreversible, por una variedad de razones
históricas se puede producir la desinstitucionalización.

Reificación: esta se da con la objetivación de la institucionalización, es un paso extremo de la


objetivación por el que el mundo objetivado pierde su comprensibilidad como empresa
humana. Es la aprehensión de fenómenos humanos como si fueran cosas no humanos, algo
distinto a los productos humanos, como hechos de la naturaleza, resultados de leyes cósmicas
o manifestaciones de la voluntad divina. La reificación implica que el hombre es capaz de
olvidarse que él mismo a creado el mundo humano, permitiendo que la dialéctica entre el
hombre (productor) y sus productos pase inadvertida para la conciencia. El mundo reificado es
un mundo deshumanizado.
La aprehensión del mundo es sumamente reificada. Cuando justifico que el mundo social fue
creado por humanos, se desreifica.

2. Legitimación
La legitimación es un proceso de 2do orden, siendo la institucionalización uno de primer orden,
que justamente legitima la institucionalización. Cuando se produce la transmisión de valores a
las nuevas generaciones, a través del lenguaje, le llega de forma diferente, ya con historicidad
y objetivación. Este mundo social transmitido se debe justificar a través de un proceso
educativo para insertarlas en la sociedad (socialización), este proceso es la legitimación.
La legitimación “explica” el orden institucional atribuyendo validez cognoscitiva a sus
significados objetivados, adjudicando dignidad normativa a sus imperativos prácticos. La
legitimación tiene un elemento tanto cognoscitivo como normativo, le da caracter normativo
al orden social.
Se producen nuevos significados que sirven para integrar los ya atribuidos a procesos
institucionales dispares. Intenta lograr que las objetivaciones de primer orden ya
institucionalizadas lleguen a ser objetivamente disponibles y subjetivamente plausibles.
Hay 4 niveles de legitimación:
1. nivel pre-teórico o incipiente
2. Nivel rudimentario
3. Teorías Explícitas
4. Universo simbólico
1er Nivel - Pre-teórico: corresponde a las pautas arbitrarias o objetivaciones incuestionables
que se imponen en el sujeto, es muy incipiente, es él “así se hacen las cosas”. Está expresado
en el lenguaje, se transmiten datos informativos. No hay cuestionamiento, se da por sentado.
Va de generación en generación.
2do Nivel - Rudimentario: son esquemas explicativos que tienen un significado objetivo (“lo
que está bien” socialmente). También son incuestionables, son como un apoyo de las máximas
sociales. Por ejemplo los proverbios, leyendas, mitos, cuentos populares, etc.
3er Nivel - Teorías Explícitas: son un grupo de teorías por las que un sector legítima en término
de cuerpo de conocimiento diferenciado (teorías científicas o teorías avaladas por un cierto
sujeto especializado), es la teorización. Se lo utiliza cuando se necesita una justificación mayor.
“ Porque lo dice el médico”.
4to Nivel - Universo Simbólico: es una integración de los 3 niveles anteriores, ofrece el más
alto nivel de integración de los significados discrepantes dentro de la vida cotidiana de la
realidad. Son cuerpos de tradición teórica que abarcan el orden institucional en su totalidad
simbólica, un universo matriz de todos los significados objetivados socialmente y
subjetivamente reales.
La cristalización de los universos simbólicos sucede a los procesos de objetivación,
sedimentación y acumulación de conocimiento. Permite ordenar la historia y ubicar a todos los
acontecimientos colectivos dentro de una unidad coherente que incluye al pasado, presente y
futuro.

4 mecanismos que permiten el funcionamiento del Universo Simbólico:


● Mitología
● Teología
● Filosofía
● Ciencia
Estos mecanismos se utilizan cuando es necesario defender el universo simbólico.

- Cuando un individuo intenta apartarse del Universo Simbólico, existen dos mecanismos para
mantenerlo:
1. La Terapia: introducimos mecanismos conceptuales para que “los desviados” puedan
reinsertarse, permanecer dentro de las instituciones dadas en la realidad. Se toma un cuerpo
teórico de conocimiento. Se utiliza un cuerpo teórico de conocimiento que consiste en una
teoría de desviación (“se desvía por malos hábitos”), un aparato de diagnóstico (una
sintomatología que explique esa conducta) y un sistema de cura (técnicas para curar esas
conducta).
2. La Aniquilación: se utiliza la legitimación por la negativa. Niega toda realidad que no encaje
dentro de su universo. Lo puede hacer de 2 modos:
- Darle un estatus negativo o inferior ontológico a las definiciones fuera del universo
simbólico, lo que hace que carezca de seriedad.
- Intentar incorporar las concepciones desviadas dentro del universo propio dando
explicaciones de esas concepciones con conceptos del propio universo, con esto busca
liquidarlas definitivamente

Conceptos de la Unidad 3
Naturaleza humana:
Plasticidad y apertura al mundo:
Orden social y clausura al mundo:
Dialéctica de la construcción del orden social:
Externalización, objetivación, internalización:
Esquemas tipificadores:
Zonas limitadas de significado:
Habituación:
Institucionalización:
Legitimación:
Roles:
Reificación:

Unidad 4

Cap 3: La sociedad como realidad subjetiva

1. Internalización de la realidad
Sociedad
La sociedad se entiende como un continuo proceso dialéctico compuesto por tres momentos:
externalización, objetivación e internalización. Estos no ocurren en una secuencia temporal, se
dan simultáneamente. La sociedad es un abstracto que no depende del sujeto, nos preexiste y
subsiste.
Socialización
La socialización es la inducción amplia y coherente de un individuo en el mundo objetivo de
una sociedad o en un sector de él.
A través de este proceso, la realidad objetiva adquiere sentido y se hace subjetiva.
Los individuos nacen con una predisposición hacia la socialización y luego llega a ser
miembro de una sociedad. Esto se da en el proceso ontológico de la socialización. En este, si
existe una secuencia temporal, en la cual el individuo es inducido a participar en la dialéctica
de la sociedad.
El primer paso, es la internalización: la aprehensión o interpretación inmediata de un
acontecimiento objetivo que expresa significado (externalizado) por un código común
incorporado, el lenguaje. Esto es una manifestación de estados subjetivos del otro significativo
que, en consecuencia, se vuelven subjetivamente significativos para el organismo humano.
Comienza cuando el individuo “asume” el mundo en el que ya viven otros. Constituye la base
para la comprensión de los propios semejantes y del mundo en cuanto a realidad significativa
y social. (“comprendo” el mundo en el que él vive, y ese mundo se vuelve mío).
“otro significativo” externaliza → objetiva → “organismo humano” internaliza ese objetivo
→ lo interpreta y subjetiva.

La socialización se divide en 2 etapas: la socialización primaria que es la primera por la que


el individuo atraviesa en la niñez y a través de la cual se convierte en miembro de la sociedad,
y la socialización secundaria que es cualquier proceso posterior que induce al individuo ya
socializado a nuevos sectores del mundo objetivo de su sociedad.

a. Socialización primaria
Es la primera socialización, la más importante, a través de la cual se convierte en miembro de
la sociedad y la que constituye las bases para que se de la socialización secundaria.
El individuo nace dentro de una estructura social objetiva → los “otros significantes” le son
impuestos coercitivamente y se encargan de su socialización → las definiciones dadas por
estos le son presentadas al individuo como realidad objetiva → no solo nace en una
estructura social objetiva sino que en un mundo social objetivo → los otros significantes
funcionan como intermediarios, mediatizan el mundo social objetivo al organismo humano,
pero en el curso de esta mediatización lo modifican según sus idiosincrasias individuales,
biológicamente arraigadas → se “filtra” el mundo social.

Identificación
La característica principal de la socialización primaria es el LAZO EMOCIONAL. El
aprendizaje dado no es sólo cognoscitivo, tiene una fuerte carga emocional. Este lazo
emocional consiste en la identificación del niño con los otros significantes y esta identificación
es condición para la internalización, por lo que es condición para la socialización.
La identificación se da cuando el organismo humano acepta los “roles” y actitudes de los otros
significantes, con un aprendizaje bio-psico-social, los internaliza y se apropia de ellos. A través
de esta, se vuelve capaz de identificarse él mismo, de adquirir una identidad subjetivamente
coherente y plausible. El YO como entidad reflejada, porque refleja las actitudes que
primeramente adoptaron para con él los otros significantes → el individuo llega a ser lo que
los otros quieren que sean (Ejemplo: responde al nombre de María).
Es un proceso dialéctico que contiene 2 momentos: La identificación con los otros,
subjetivamente asumida, y la auto-identificación, objetivamente atribuida. Commented [2]: asi o al revés?
La identidad se define objetivamente como ubicación en un mundo determinado y se asume
subjetivamente sólo junto con ese mundo, es decir, todas las identificaciones se realizan dentro
de horizontes que implican un mundo social específico.
(El proceso de identificación es un tipo de internalización mediatizada por los otros
significantes)
Roles
En la S1 se crea en la conciencia del niño una abstracción progresiva que va de los “roles” y
actitudes de otros significativos específicos, a los “roles” y actitudes en general, de un “otro
generalizado”.
En un principio hay un “otro significativo” que nos muestra como son las cosas como ejemplo
de extensión al mundo. A medida que el niño se va desarrollando, la S1 va aumentando el grado
de abstracción en cuanto a roles y actitudes, provocando que la generalidad de la norma se
extienda subjetivamente, esta generalización se denomina otro generalizado. Ahora se
identifica con la sociedad y logra estabilidad y continuidad de su auto-identificación.
La formación del otro generalizado dentro de la conciencia del niño, implica la
internalización de la sociedad y el establecimiento subjetivo de una identidad coherente y
continua → la realidad y la identidad se cristalizan subjetivamente en el mismo proceso de
internalización.

Lenguaje
Este es el instrumento más importante de la socialización y se corresponde directamente con la
cristalización de la realidad y la identidad. Es el vehículo principal del proceso continuo de
traducción de la realidad objetiva a la realidad subjetiva y viceversa.

Socialización primaria coercitiva


En la S1 no existe ningún problema de identificación. La sociedad le impone al organismo
humano, candidato a la socialización, grupo predefinido de otros significantes, sin posibilidad
de optar por otros. Y se identifica con ellos casi automáticamente, internaliza ese mundo como
el único existente y que se puede concebir, este mundo se implanta en la conciencia con mucha
más firmeza que en la S2.
Legitimación
Existe una internalización de los rudimentos del aparato legitimador. El niño aprende “por
qué” los programas son lo que son.
Ciertas legitimaciones pueden requerir un grado más alto de complejidad lingüística que otras
para ser comprendidas y las formas van variando según el estadío evolutivo del niño. La S1
comporta secuencias de aprendizaje socialmente definidas, a la edad A el niño debe aprender
X y a la edad B debe aprender Y. Además esta definición socialmente establecida de las etapas
de aprendizaje presenta una gran variabilidad histórico-social.

La socialización primaria finaliza cuando el otro generalizado se ha establecido en la


conciencia del individuo, siendo ya miembro efectivo de la sociedad y en posición
subjetiva de un yo y un mundo.

b. Socialización secundaria
Comienza con cualquier proceso posterior a la S1, en especial cuando se reconoce que el mundo
familiar no es el único, sino que este tiene una ubicación específica y se entiende que hay una
estructura social. Se induce al individuo ya socializado a nuevos sectores objetivos de su
sociedad.
La S2 es la internalización de submundos institucionales o basados en instituciones y la
adquisición del conocimiento específico de “roles”(relacionado con la división del
trabajo).
Estos submundos internalizados son generalmente realidades parciales que contrastan con el
mundo de base adquirido en la socialización primaria. Los submundos también requieren los
rudimentos de un aparato legitimador, acompañados con frecuencia de símbolos rituales o
materiales. Este proceso de internalización involucra identificación subjetiva con el rol y sus
normas apropiadas. Existe una gran variabilidad histórico-social en las representaciones que
comporta la socialización secundaria.
El problema que se le presenta a la S2 es que debe pasar si o si por una S1 antes, debe tratar
con un yo formado con anterioridad y un mundo ya internalizado, no puede construir la realidad
subjetiva. Por lo que todos los nuevos contenidos que ahora haya que internalizar deberán
superponerse a esta realidad ya presente. Mantener esta coherencia presupone ciertos
procedimientos conceptuales para integrar los diferentes cuerpos de conocimiento.

El alcance y carácter de la S2 se determinan por la complejidad de la división del trabajo y la


distribución social del conocimiento específico. A partir de esto surgen los roles, los cuales se
identifican por este conocimiento específico y los individuos que asumen estos roles se definen
institucionalmente (roles profesionales).
La S2 requiere la adquisición de vocabularios específicos de “roles”, por lo tanto, se produce
una internalización de campos semánticos que estructuran interpretaciones y comportamientos
de rutina dentro de un área institucional.
Estos roles son: intercambiables, ya que son una realidad fugaz, descartables, ya que se pueden
dejar fácilmente atrás debido a su poca carga emocional, y reductores de complejidad, debido
a que permiten saber qué esperar de la persona que lleva este determinado rol.
La socialización secundaria puede prescindir de la carga emocional y afectiva requerida en la
primaria. No es necesaria una identificación, se puede proceder efectivamente con la sola dosis
de identificación mutua que interviene en cualquier comunicación entre los seres humanos.
Algunas de las crisis que se producen después de la socialización primaria se deben realmente
al reconocimiento de que el mundo de los propios padres no es el único que existe, sino que
tiene una ubicación social muy específica.
Los roles de la socialización secundaria comprenden un alto grado de anonimato, se separan
fácilmente de los individuos que los desempeñan. El mismo conocimiento que enseña un
maestro de tantos puede enseñarlo otro. Esta formalidad y este anonimato se vinculan, al
carácter afectivo de las relaciones sociales en la socialización secundaria.
El individuo establece una distancia entre su yo total y su realidad, por una parte, y el yo
parcial específico del rol y su realidad por la otra. El acento de realidad del conocimiento
internalizado en la socialización secundaria debe ser forzado por técnicas pedagógicas
específicas, debe hacérselo sentir al individuo como algo familiar.

c. Mantenimiento y transformación de la realidad subjetiva


La socialización nunca se termina y los contenidos que la misma internaliza enfrentan
continuas amenazas a su realidad subjetiva, por lo que toda sociedad viable debe desarrollar
procedimientos de mantenimiento de la realidad para salvaguardar cierto grado de simetría
entre la realidad objetiva y la subjetiva.
Hay dos tipos de mantenimiento de la realidad:
1) Mantenimiento de rutina: consiste en mantener la realidad internalizada en la vida
cotidiana, se reafirma continuamente en la relación del individuo con los otros (conversación,
diálogo casual que reafirma implícitamente la realidad). El vehículo más importante del
mantenimiento de la realidad es el diálogo, mantiene, modifica y reconstruye continuamente
su realidad subjetiva.
2) Mantenimiento de crisis: consiste en mantener la realidad en situaciones de crisis. Se
utilizan los mismos procedimientos que el anterior pero más explícito e intensivo y también
técnicas rituales (funerales).

La realidad subjetiva puede transformarse mediante procesos sociales. Este proceso de llama
alternación, requiere procesos de resocialización, semejantes a la socialización primaria,
porque tienen que volver a atribuir acentos de realidad y deben reproducir la identificación
afectiva como en la S1 (ej. conversión religiosa).
En estos procesos, se crea una situación ficcional que devuelve al individuo a los estados de la
S1, en ese momento de crisis y ruptura de la S1 se le vuelven a atribuir los acentos de realidad,
se incluyen nuevos otros significantes y fuertes vínculos emocionales, dando lugar a una
transformación radical de la realidad. Se vuelve a mediatizar, se produce una ruptura
autobiográfica y se forman nuevas pautas sociales.

2. Internalización y estructura social


La socialización siempre se efectúa en el contexto de una estructura social específica. No solo
su contenido, sino también su grado de “éxito” tienen condiciones y consecuencias socio-
estructurales.
Por “socialización exitosa” entendemos el establecimiento de un alto grado de simetría entre la
realidad objetiva y la subjetiva (junto con la identidad, por supuesto). El orden internalizado es
coherente con la realidad subjetiva, lo aprehendido en la S1 coincide y sirve para la S2.
Inversamente, la “socialización deficiente” presenta un alto grado de asimetría entre la realidad
objetiva y la subjetiva. Puede ser resultado, de la heterogeneidad en los elencos socializadores,
rivalidad entre las definiciones de realidad; o de una discrepancia entre la S1 y la S2.
La socialización tanto totalmente eficiente como totalmente deficiente son prácticamente
imposibles. La socialización deficiente suele ser causa de alguna patología orgánica extrema.
Las sociedades que poseen una división del trabajo sencilla y una mínima distribución del
conocimiento, generan las condiciones óptimas para una socialización que produzca
identidades socialmente pre-definidas y perfiladas en alto grado. Identidades que representan
totalmente la realidad objetiva dentro de la cual está ubicada (todos son lo que se supone que
sean), identidades que se reconocen fácilmente tanto objetiva como subjetivamente, por lo que
no suelen existir “problemas” de identidad en la conciencia, aunque esto no implica que el
individuo se sienta satisfecho de su identidad.

3. Teorías de la identidad
La identidad es un elemento clave de la realidad subjetiva y se halla en una relación dialéctica
con la sociedad. La identidad se forma por procesos sociales. Una vez cristalizada, es
mantenida, modificada o reformada por las relaciones sociales. Procesos determinados por una
estructura social. Y recíprocamente estas identidades, reaccionan sobre la estructura social
dada, manteniéndola, modificandola y reformandola.
Las estructuras sociales históricas específicas engendran tipos de identidad, tipificaciones de
las que dependen la orientación y el comportamiento en la vida cotidiana. Estos tipos de
identidad son “observables” y “verificables” en la experiencia pre-teórica y pre-científica.
-La identidad es un fenómeno que surge de la dialéctica entre el individuo y la sociedad-
- Los tipos de identidad son productos sociales, elementos de la realidad objetiva-
Estos tipos de identidad constituyen el tópico de teorización en cualquier sociedad, es decir,
las teorías de la identidad. Estas teorías se hallan insertas en una interpretación más general
de la realidad, están empotradas en un universo simbólico y dependiendo de esto varían sus
legitimaciones teóricas. Cualquier teorización de la identidad se debe producir dentro de un
marco de referencia.

4. Organismo e identidad
el organismo presenta presupuestos y limitaciones para la construcción social de la realidad.
El organismo afecta cada base de la actividad constructora de la realidad del hombre y, a la
vez, esta actividad afecta al organismo. El hombre es capaz de realizar actividades orgánicas,
como comer, y actividades constructoras de realidad, como teorizar, al mismo tiempo →
coexistencia continua de la animalidad y la socialidad del hombre. Dialéctica entre la
naturaleza y la sociedad.

Socialización primaria Socialización secundaria


• El niño la atraviesa en la niñez y se • Empieza a incorporar otras instituciones o
transforma en miembro de la sociedad. submundos además de la familia.
• Hay carga afectiva. • Adquisición de roles específicos.
• Es más difícil modificar lo aprendido. • Hay poca carga afectiva.
• Internalización del mundo objetivo, ese • El yo, que va naciendo el la socialización
mundo es el único posible. primaria, aquí queda ya construido.
• Finaliza cuando aparece el otro • Hay mayor posibilidad de elección.
generalizado (incorpora la norma). • Hay un problema de coherencia entre la
• Hay una dialéctica entre la soc. primaria, que tiende a persistir y la
autoidentificación y la identificación que secundaria, que es más susceptible a
hacen de él. desplazamiento.
• El lenguaje debe internalizarse.
• El otro generalizado es la sociedad.

Escritos de Psicología Social


Martín Wainstein y Otros

- La construcción social de la mente, una teoría de la intersubjetividad

Conceptos
Definiremos conceptos como mente, alma, conciencia, subjetividad, etc. Estos no son
observacionales, son intangibles y definidos mediante inferencias (deducción de unas ideas
a partir de otras ideas).
Estas inferencias son llamadas hipótesis, son argumentaciones obtenidas mediante
deducciones construidas respetando las reglas de la lógica. Estas reglas o paradigmas enmarcan
los modos de pensar aceptados por los científicos y otorgan legitimidad inicial a estas hipótesis.
Estos paradigmas son un conjunto de teorías o argumentaciones que funcionan como una
especie de reglamento y están sustentados en un acuerdo de constructos aceptados.

Complejo más que complicado


En la ciencia actual predomina la idea de “realidad compleja”. El término complejo designa
una comprensión del mundo como una entidad donde todo se encuentra entrelazado
constituyendo “la cosa” y el contexto donde ella ocurre, es algo formado por muchos o
infinitos elementos que establecen muchas e ilimitadas relaciones que cambian en cada
momento.
El desafío de la complejidad es justamente reconocer las tramas o redes de relaciones y la
imposibilidad humana de agotarlas en conocimiento. El pensamiento complejo es el apto para
unir, contextualizar, globalizar y al mismo tiempo reconocer lo singular, individual y concreto.
Permite acceder a la realidad conociendo su infinitud y busca un conocimiento surgido de
acuerdos colectivos para sobrevivir esa realidad.
Desde una perspectiva construccionista algo “es lo que se dice que es” en un acuerdo
temporal, histórico, entre subjetividades. Un constructo social existe como producto de las
interacciones entre las personas.

El interaccionismo y la mente, la teoría del yo-espejo


Las teorías interaccionistas de la Psicología plantean que decir acciones humanas es decir
interacciones.
Pioneros:
Cooley → formuló la Teoría del yo en el espejo con la que contribuyó al desarrollo del
concepto del sí mismo (self), es el “yo” del lenguaje habitual, lo que llamamos comúnmente
con los pronombres yo, me, mí.
El sí-mismo social plantea que no existe un sentido del “yo” sin su correlativo sentido del “tú”.
La auto-identificación surge a partir de la captación de la imagen de uno mismo en el otro.
El yo espejo de Cooley sugiere un juicio imaginado, un sentimiento imputado, como el efecto
imaginado de este reflejo en la mente del otro. Siempre imaginamos los juicios de otra mente.
(¿Qué imaginamos que el otro se imagina sobre nosotros?). Toda referencia con nuestro
sentimiento la produce la importancia que damos al “espejo social” en cuya mente nos vemos.
“El YO” como entidad reflejada. → un otro significante nos muestra lo que se espera de
nosotros.

George Mead y la construcción social de la conciencia


Mead intenta romper con el dualismo cuerpo-espíritu y es pionero en entender la comunicación
social como eje de la sociedad. Establece que la conducta humana solo puede ser entendida
considerando al individuo en sus relaciones sociales, de comunicación e interrelación e
interdependencia con otros individuos.
Las ideas de Mead establecen la superación de la controversia acerca de la prioridad del
individuo o de la sociedad, de la conocida polémica entre Durkheim y Tarde, estableciendo el
concepto de interaccionismo simbólico. Mead resuelve también la antítesis planteada por
Wundt, entre su psicología fisiológica experimental y sus psicología social histórica,
proponiendo que el individuo es un producto de la interacción recíproca a través de la cual
surge la mente y esta constituye también un producto social.

La mente emergente
Lo “emergente” es siempre un enriquecimiento de lo precedente. Por ejemplo la emergencia
de la mente dentro del orden social.
Algunos de los principales emergentes son la mente (social) y el sí-mismo (personal). No se
nace con la mente o el sí-mismo constituidos, no son fenómenos biológicos o genéticos, se
constituyen en la socialización. El orden social y la identidad no se oponen ni se imponen una
sobre la otra, surgen de su interacción: la identidad es la manera específica en que cad uno
interioriza el mundo (orden social) que lo rodea y el mundo es lo que emerge de las
interacciones de las identidades que este continuamente crea.

¿Cómo se construye la mente?


La constitución de la mente se va dando en diferentes etapas o fases de desarrollo, que van
desde un organismo biológico hasta una comunidad de seres autoconscientes que poseen un
self, es decir, la capacidad reflexiva del “yo” y el “mi”. No se nace siendo persona, se va
construyendo la subjetividad.

Primer etapa: Esta primer etapa se caracteriza por la conversación de gestos, donde el
organismo es apenas capaz de interacciones rudimentarias, es una interacción asimétrica y
preverbal con un otro adulto (madre-bebé).
Establecer el proceso de comunicación es tarea de el otro significante cuidador. Debe prestar
atención a los gestos potencialmente comunicativos del bebé y sincronizarlos con su propia
actividad de modo que ambos construyan un patrón de de actos comunicativos recíprocos.

En esta etapa el niño desarrolla 2 habilidades sociales:


La subjetividad: principios de una conciencia individual.
La intersubjetividad: la capacidad de adaptar su subjetividad a la de los otros.
Se puede considerar al organismo como un Yo cuyo entorno se limita al que representa su
criador. Este Yo define su individualidad, pero biológica y presente al nacer, es pura
potencialidad biológica arrojada a una sociedad.
Cuando el niño nace se encuentra con un “otro” criador, este adulto ya es persona, ya pasó por
este proceso y ya es portador de la cultura local en la que el organismo nace. Este adulto va a
interpretar y definir el significado de los gestos del niño, para luego externalizarlo en un
acto social y comenzar el proceso de socialización. Este es el resultado de un intercambio
sistemático y recursivo de comunicaciones niño/criador.

Segunda etapa: En esta segunda etapa el niño interioriza la acción del “otro” e instala en sí
mismo (aprende) lo que significan sus propios gestos. El patrón sistemático y repetitivo de
ciertas respuestas del otro constituye “la expectativa que tiene el otro de mí”.
El MI: se constituye a partir de la interiorización de las expectativas del “otro generalizado”.
Es el resultado de la acumulación de respuestas que el YO recibe del “otro”. (Ejemplo, si
alguien (yo) está seguro de que se llama Martín es porque “otro” le puso ese nombre).
El mi es la instancia desde la cual alguien se percata, evalúa y valora su Yo, desde las
expectativas que los otros tienen de él. A medida que el niño crece y participa más en la vida
social incorpora “más expectativas de los otros”, las cuales acumuladas constituirán el SELF
(o aspecto reflexivo de la identidad)
El YO: queda como una “zona residual menos socializada”, fuente de una potencial creatividad
y de la individualidad personal menos expuesta socialmente.

Entre el YO y el MI hay una relación dialéctica: se influyen recíprocamente. Están separados


en el proceso, pero deben estar juntos en el sentido de ser partes de un todo, formando una
personalidad a través del lenguaje, este incorpora la situación social externa a la conducta del
individuo.

El Otro Generalizado: Es la persona ya constituida, es el otro significante pero generalizado


porque ahora porta con el orden social, representa la actitud generalizada de la sociedad.

To Role-talking, to play, to game


Estos tres conceptos describen estas dos etapas de la vida planteadas por Mead y permiten la
constitución como persona del organismo humano en socialización.
Role-talking (asumir el rol del otro):
Es un constructo transversal social-cognitivo. Es la capacidad de aprender mediante
interacciones con los otros a relacionar dos o más elementos, lo propio y lo ajeno, a la vez, esto
lleva a la habilidad social de comprender el punto de vista de los otros y el propio, permitiendo
controlar y relativizar el propio punto de vista a la hora de evaluar a los demás.
Se diferencian tres aspectos:
- Perceptivo: capacidad de situarse en la perspectiva visual de los otros.
- Conceptual: capacidad de situarse en la perspectiva cognitiva del otro para imputarle
conocimientos, intenciones, actitudes, pensamientos, etc.
- Afectivo: capacidad de situarse en la perspectiva emocional del otro para imputarle
sentimientos, reacciones emocionales, etc.

Dos etapas de la vida del niño y su constitución como persona:


JUEGO: primeras asunciones del rol del otro, puede ponerse en el rol de alguien pero no hay
reglas. Ej: Un chico juega a ser bombero
DEPORTE: interiorización de todos los roles y normas de comportamiento. Es el primer
encuentro con el “Otro generalizado”.

¿Qué es entonces la mente para George Mead?


Para Mead la mente es por una parte la reflexión, en tanto lenguaje y conversación interior del
sujeto consigo mismo y diferente de la conversación con otro. Es lo que en términos de sentido
común serían los pensamientos.
Esta conversación interna es la que permite la emergencia de la conciencia, que se constituye
cuando el sujeto puede referirse a sí mismo como objeto. Primero es objeto para otro, luego
interioriza que es objeto para otro y puede pensarse a sí mismo como otro lo pensó a él y se
convierte en objeto para sí. Esta reflexividad define su conciencia.

Reflexión y conciencia constituyen dos aspectos importantes de la mente humana. Esta es


considerada un proceso, un conjunto de funciones que derivan de la interacción del individuo
con otras personas, la conexión neuronal y la entidad del cerebro como totalidad.

La mente es la capacidad de pensar, la conciencia son nuestros pensamientos y el pensamiento


es una actividad del cerebro. → “sujeto sin cerebro no piensa, por lo que el cerebro es el que
piensa”
Pero plantean que no se puede sostener la subjetividad sólo mediante conexiones neuronales,
sin los estímulos externos, es decir, si se suprime la sociedad, los otros, se suprimen los
pensamientos y la conciencia.
Según Mead no era viable encontrar la mente como resultado de la actividad solitaria y única
de las neuronas, ni del cerebro, ni de la identidad cuerpo-mente, ni de las interacciones, sino
de las propiedades sistémicas de todas esas instancias.

La acción también es constitutiva de la mente. Plantea que la subjetividad y la mente no


pertenecen a un espacio interior, se desarrollan en un espacio mediacional interpersonal. El
resultado es un espacio interactivo no biológico, sino social, percibido en términos de
significantes cuya materia es el símbolo.

Símbolos significantes
Son gestos que surgen de un individuo para el cual constituyen el mismo tipo de respuesta que
se supone provocarán en aquello a quienes se dirigen. Así logramos la comunicación.
El lenguaje es un símbolo significante, con la función de proporcionar mayor facilidad para la
adaptación y readaptación entre los individuos en cualquier acto social.
El significante es la palabra. Ese sonido, arbitrario, llega a tener un significado y abandonar su
arbitrariedad gracias a la existencia de un código lingüístico compartido y una situación
compartida que le otorgan sentido.
El pensamiento sólo es posible a través de estos significantes. Es una conversación interna del
individuo consigo mismo por medio de estos gestos.
El símbolo y el significado son una propiedad de la acción interactiva, la comunicación, allí se
establece la mente.

Autobiografía del YO
Bruner

¿Debe considerarse el Yo como un núcleo permanente y subjetivo o como distribuido?

- Localiza al Yo, no en la rapidez de la conciencia privada inmediata, sino también en una


situación histórico-cultural.
- El Yo considerado como una construcción que procede del exterior al interior, y del interior
al exterior (de la cultura a la mente y de la mente a la cultura).

Rasgos universales de orientarse hacia la cultura y el pasado:


- Reflexividad humana: es la capacidad de volvernos al pasado sin alterar el presente
en función de él, o de alterar el pasado en función del presente.
- Capacidad intelectual para imaginar alternativas: idear formas de ser, actuar y
luchar.
- El Yo, utilizando su capacidad de reflexión y de imaginar alternativas, rehúye o abraza
o reevalúa y reformula lo que la cultura le ofrece.

El YO conceptual
La creación de un Yo, para Bruner, es un arte narrativo. Y tiene un lado interno y uno externo.
El interno es la memoria, los sentimientos, las ideas, las creencias. El externo, la aparente
estima de los demás y las expectativas de la cultura a la que pertenecemos.
El YO narrador:
Bruner en su concepción sobre lo humano se basa en un “YO narrador”, si nos ponemos a
pensar siempre estamos contando historias de lo que nos pasa, de lo que pasa a nuestro
alrededor, etc. nuestra vida es constantemente narrada, no solo por nosotros sino también por
las personas que nos rodean, desde esta perspectiva el “YO” viene siendo un cuento, y como
tal, es narrado por muchas personas.

El YO está distribuido entre las múltiples relaciones con las que se desarrolla.

Noción del Yo como narrador

- El Yo cuenta historias en las que se incluye un bosquejo del Yo como parte de la historia. En
el reparto, al Yo le corresponde el papel de un narrador que elabora relatos sobre una vida.
- La meta de la narración del Yo en terapia no es que encaje con alguna “realidad” oculta, sino
lograr que fuese coherente, viable y apropiada tanto externa como internamente.
- Estamos siempre contando historias sobre nosotros mismos Al contarlas, nos las contamos a
nosotros mismo.
- Los otros también se presentan de forma narrativa. Narración doble.
- Esta imagen del Yo es distribuida.
- Logramos nuestra identidad personal y el concepto de nosotros mismos mediante el uso de la
narración, y damos unidad a nuestra existencia entendiéndola como la expresión de una historia
singular que se despliega y desarrolla.

El yo, entonces, es una configuración de acontecimientos personales en una unidad


histórica, que incluye no sólo lo que uno ha sido sino también previsiones de lo que uno
va a ser.

Requerimientos sobre el estudio del Yo:


- Significados: se define al Yo tanto por parte del individuo como parte de la cultura
en que este participa.
- Prácticas en que el significado del Yo se alcanza y pone en funcionamiento. Estas nos
proporcionan una visión más distribuida del Yo.
- Dimensión histórica: el Yo histórico es un Yo desde el pasado hasta el presente.

La autobiografía es una descripción de lo que uno cree que ha hecho, en qué situaciones, de
qué maneras y por qué razones. Tendrá que ser inevitablemente una narración. Es un relato
efectuado por un narrador en el aquí y ahora sobre un protagonista que lleva su nombre y que
existía en el allí y entonces. La historia termina en el presente, cuando el protagonista se funde
con el narrador.

El YO saturado
Gergen

Tesis

La tesis del libro es que el proceso de saturación social está produciendo un cambio profundo
en nuestro modo de comprender el yo.

- Concepción romántica (s.xviii - xix)

Atribuye a cada individuo rasgos de personalidad: pasión, alma, creatividad, temple moral.
Pone el acento en lo que no se ve, prima lo emocional a lo racional. Gran parte de nuestro
vocabulario contemporáneo de la persona y sus formas de vida asociadas tiene su origen en el
período romántico. Es un vocabulario de la pasión, de la finalidad, de la profundidad y de la
importancia del individuo.

- Concepción moderna (s.xix - xx)

El contexto histórico- cultural se posiciona en la Revolución Industrial, donde el papel principal


lo tiene el Positivismo: prima la razón a lo emocional. Surge en el contexto de expansionismo
mercantil del mundo occidental y el auge de la producción en masa.
Las ciencias estaban dando buenos frutas, y era antirromántica. Reconocía sus ancestros en el
Iluminismo, en el poder de razonar y observar .
Capacidad de raciocinio para desarrollar nuestros conceptos, opiniones e intenciones
conscientes. Se exacerba el conocimiento y los saberes. Los elementos clave del
funcionamiento humano son la razón y la observación, se establece un YO cuantificable y
medible.

La psicología emprendió la tarea de esclarecer la naturaleza del yo básico. Se aplicaron de


manera sistemática la razón y la observación. Experimentos (por ejemplo, «pesar el alma»),
surgen los tests psicométricos. La imagen de la máquina suministró la metáfora predominante
para la persona. Se consideró la esencia del hombre como racional. El conocimiento se
construye a partir de la observación.

- Concepción posmoderna (s.xx - actualidad)


Es una conjunción de las dos anteriores. Existe el mundo sensible y el de la razón. El Yo como
poseedor de características reales tales como la racionalidad, la emoción, la voluntad. Está
signado por una pluralidad de voces que compiten entre sí para ser aceptadas como lo
verdadero o bueno. Los objetos de los que hablamos no están en el mundo sino que son el
producto de las perspectivas particulares. Las personas existen en un estado de construcción y
reconstrucción permanente.

Los cambios históricos que llevan a un “yo posmoderno” fueron:


- Medios de comunicación
- Medios masivos de transporte
Los medios de comunicación traen ciertas consecuencias como la disminución del tiempo y a
multiplicidad del yo. La simultaneidad de roles ejercidos produce una fragmentación del yo →
estoy en todos lados al mismo tiempo (avance de la tecnología). El yo industrializado sufre
una saturación del yo que lo lleva al Síndrome de Multifrenia.
Los medios masivos de transporte nos llevan a pensar en los conceptos de Progreso y
Pregreso: Todo proceso de evolución conduce a un proceso de involución.

- Tecnologías de saturación social

Las nuevas tecnologías traen manifestaciones de un cambio social profundo, que nos sumerge
cada vez más en el mundo social y nos expone a las opiniones, valoraciones y estilos de vida
de otras personas. Gergen propone que esta inmersión nos empuja a una nueva conciencia de
nosotros mismos: la posmoderna.

Las tecnologías de la saturación social son centrales en la supresión contemporánea del yo


individual. La saturación invadió la vida cotidiana y al asociarnos cada vez má a nuestro
entorno social, terminamos por reflejarlo. Hay una colonización del ser propio que refleja la
fusión de las identidades parciales por obra de la saturación social. Y está apareciendo un estado
multifrénico en el que comienza a experimentarse el vértigo de la multiplicidad limitada.
En el proceso de saturación social nuestros días están cada vez más colmados por la cantidad,
variedad e intensidad de las relaciones.

Avances de bajo nivel: lo más espectacular de esta fase fue la simultaneidad de sus múltiples
avances, fue un fuerte primer impacto que inició el proceso de saturación. Casos como el
ferrocarril, servicios postales públicos, automóvil, teléfono.

Avances de alto nivel: la segunda fase de saturación social fue en especial los avances en
materia de transporte aéreo, televisión y comunicación electrónica. Las tecnologías de este
siglo aumentan las relaciones, la frecuencia de contacto humano y su duración. Cuando
aumenta a un punto extremo, se llega a un estado de saturación social.

- Multiplicación de las relaciones

Antes en las relaciones directas cara a cara el reparto de personajes se mantenía más o menos
estable.
Ahora, nuestros pensamientos y sentimientos ya no están ocupados únicamente en la
comunidad inmediata que nos rodea, sino en un reparto de personajes diseminados por todo el
planeta y que cambian de manera constante. Hoy ni la distancia ni el tiempo constituyen un
serio inconveniente para una relación.

Y en una aceleración al futuro, el ritmo de las relaciones se incrementa y hace que se concreten
en días o semanas procesos cuyo desarrollo antes llevaba meses o años.

Aparecen nuevas pautas de relación: La tecnología además de ampliar la gama de relaciones


humanas modifica las preexistentes. Al desplazarse del vínculo cara a cara al vínculo
electrónico las relaciones con frecuencia se alteran. Ej, amantes amigables, relación de
microondas.
Amantes amigables: Se sale del “amor romántico” donde el objeto de su amor consumía todo
su ser, el “amor verdadero” pierde credibilidad. Surgen romances amistosos con moderado
compromiso.
Relaciones de microondas: La saturación social interfirió profundamente en la concepción
tradicional de la familia. El hogar ya no es un “nido” sino un lugar de paso

La tecnología también incrementa el nivel emocional de muchas relaciones, la gente llega a


sentir en mayor profundidad y expresar más plenamente.
Las relaciones prolongadas tendían a la normalización y a buscar el equilibrio emocional. La
comunidad cara a cara se presta a un alto grado de vigilancia informal, en el actual contexto de
saturación no está presente ninguna de estas condiciones.
En las relaciones contemporáneas de la saturación social, al ser permanentemente
interrumpidas les es difícil normalizarse. A su vez la brevedad de los encuentros ocasionales
contribuye a aumentar su intensidad.

- La colonización del yo
Es la capacidad de adquirir múltiples y dispares posibilidades de ser. Las tecnologías de la
saturación social nos exponen a una enorme variedad de personas, otras formas de relación,
circunstancias y oportunidades únicas en su género, e insospechadas intensidades del
sentimiento.
Esto no solo abre nuevas posibilidades a las relaciones sino que además la vida subjetiva queda
totalmente recubierta. A medida que avanza la saturación social, el yo de cada uno adopta cada
vez más el carácter de todos los otros, se coloniza . Ya no somos uno ni unos pocos, sino que
contenemos multitudes. Nos presentamos a los demás como identidades íntegras pero, con la
saturación social, cada uno alberga vastas posibilidades. Los individuos suelen sufrir un
conflicto interno de dudas generalizadas.

- Multifrenia

Es el estado resultado de la colonización del yo y los afanes de este por sacar partido de las
posibilidades que le ofrecen las tecnologías de relación. Se produce cuando se detecta una
nueva constelación de sentimientos o sensaciones, una nueva pauta de conciencia de sí. Es la
escisión del individuo en una multiplicidad de investiduras de su yo.
A medida que las posibilidades propias son ampliadas por la tecnología uno recurre cada vez
más a tecnologías que le permitirán expresarse y a medida que se utilizan aumenta el repertorio
de posibilidades. Sería un error considerar este estado multifrénico como una enfermedad.

- Aspectos positivos del posmodernismo

El posmodernismo tiene algunos aspectos positivos, que se revelan al evaluar algunos aspectos
del modernismo, como el progreso, el individualismo y las creencias firmes.

El argumento del progreso no es universal. El progreso tiene efectos colaterales, lo cual exige
medidas correctivas para compensarlos. Estas compensaciones ponen en marcha una ola
adicional de repercusiones desequilibrantes en otros dominios, lo cual vuelve a exigir una
compensación, y así sucesivamente. Entonces, cada acción emprendida en nombre del progreso
puede poner en marcha un proceso de pregresión, una regresión. Además, la táctica
posmoderna de deconstrucción y reconstrucción permite a la cultura emanciparse de los efectos
problemáticos del argumento moderno del progreso, pues éste no es más que el lenguaje
preferido por una comunidad en particular, entre otras muchas.

En el posmodernismo los procesos de razón, intención y decisión moral individuales pierden


su carácter de realidades. Se desdibujan los límites del individuo como unidad y pasa a ser el
resultado de una construcción social. Los individuos por sí mismos no pueden significar nada,
sus actos carecen de sentido hasta que se coordinan con los de otros. Así, el posmodernismo
abre la posibilidad de reemplazar la cosmovisión individualista por una realidad relacional.

Las visiones romántica y modernista de la persona son totalizadoras, tienen una coherencia
interna pero rechazan cualquier otra explicación de la realidad. Y como admiten un solo
vocabulario para la comprensión del yo, establecen importantes límites a la acción humana. En
contraste con los límites opresivos de los sistemas de comprensión totalizadores, el
posmodernismo abre las puertas al libre juego de todos los discursos. Insta a una heteroglosia
del ser, a un vivir a partir de múltiples voces.

Conceptos de la Unidad 4
Construcción social de la intersubjetividad:
Socialización primaria:
Socialización secundaria:
Socialización deficiente:
Alternación:
Identidad:
Identidad posmoderna:
Multifrenia:
Aspecto relacional:
Construcción del YO:

Unidad 5
Teoría de la comunicación humana
Watzlawick

1. Introducción

Un fenómeno permanece inexplicable en tanto el margen de observación no es suficientemente


amplio como para incluir el contexto en el que dicho fenómeno tiene lugar. El observador de
la conducta humana pasa de un estudio deductivo de la mente al estudio de las manifestaciones
observables de la relación. El vehículo de tales manifestaciones es la comunicación. El estudio
de la comunicación humana puede dividirse en tres áreas: semántica, sintáctica y pragmática.
La semántica abarca los problemas relativos a transmitir información. La comunicación afecta
a la conducta, y este es un aspecto pragmático. Así toda conducta es comunicación, y toda
comunicación afecta a la conducta. Nos interesa el efecto de la comunicación sobre el receptor
y el efecto que la reacción del receptor tiene sobre el emisor.

Noción de Función y Relación


Las variables no tienen un significado propio, sino que resultan significativas en su relación
mutua, esto constituye el concepto de función. Las investigaciones sobre los sentidos y el
cerebro han demostrado acabadamente que sólo se pueden percibir relaciones y pautas de
relaciones, y que ellas constituyen en esencia la experiencia. Así, la esencia de nuestras
percepciones no son cosas sino funciones y éstas no constituyen magnitudes aisladas sino
signos que representan una conexión una infinidad de posiciones posibles de carácter similar.

Información y retroalimentación
La retroalimentación puede ser positiva o negativa. La negativa caracteriza la homeostasis
(estado constante) por lo cual desempeña un papel importante en el logro y mantenimiento de
la estabilidad de relaciones. La positiva lleva al cambio, osea a la pérdida de estabilidad o de
equilibrio. Los grupos interpersonales (grupos de desconocidos, parejas, familias, etc.) pueden
entenderse como circuitos de retroalimentación, ya que la conducta de cada persona afecta a la
de las otras, y la de los demás a ésta.

Redundancia
La redundancia ha sido ampliamente estudiada en dos de las áreas de la comunicación humana,
en la sintáctica y en la semántica. Cada uno de nosotros posee vastos conocimientos acerca de
la legitimidad y probabilidad estadística inherentes tanto a la sintáctica como a la semántica de
las comunicaciones humanas. Desde el punto de vista psicológico este conocimiento resulta
interesante por el hecho de hallarse casi por completo fuera de la percepción humana. Nadie,
excepto un experto puede establecer las probabilidades de las secuencias o los órdenes
jerárquicos de las letras y palabras en un lenguaje dado, a pesar de lo cual todos podemos
percibir y corregir un error de imprenta, agregar una palabra que falta, etc.. La redundancia
pragmática es cuando contamos con un monto elevado de conocimientos que nos permiten
evaluar, modificar y predecir la conducta.
Metacomunicación y el concepto de cálculo
La metacomunicación es cuando dejamos de utilizar la comunicación para comunicarnos y la
usamos para comunicar algo acerca de la comunicación. Así utilizamos conceptualizaciones
que no son parte de la comunicación sino que se refieren a ella.

2. Algunos axiomas exploratorios de la comunicación

1º Axioma: La imposibilidad de no comunicar


Este axioma hace referencia a que la conducta es analógica (no puede haber ausencia de
conducta), por lo que, al ser imposible no emitir conducta, es imposible no comunicar.
Se llama mensaje a cualquier unidad comunicacional singular o bien se habla de comunicación
cuando no existen posibilidades de confusión. Una serie de mensajes intercambiados entre
personas recibe el nombre de interacción, ya que constituyen un nivel más elevado en la
comunicación humana.
Si se acepta que toda conducta en una situación de interacción tiene un valor de mensaje, es
decir, es comunicación, se deduce que por mucho que uno lo intente, no puede dejar de
comunicar. Cualquier comunicación implica un compromiso y define el modo en que el emisor
concibe su relación con el receptor.

Respuestas
Las respuestas a este axioma pueden ser “no patológicas” o “patológicas”. (Al decir patológicas
no hablamos de una enfermedad, sino de una patología de la comunicación, un tipo de respuesta
de la comunicación)
Las no patológicas son:
- aceptación de la comunicación. Ejemplo: -Docente: ¿Querés pasar a dar el resto de la
clase? +Alumne: sí
- rechazo de la comunicación. Ejemplo: -Docente: ¿Querés pasar a dar el resto de la
clase? +Alumne: no

Las patológicas son:


Una situación típica de esta clase es un encuentro entre dos desconocidos, uno de los cuales
quiere establecer una conversación y el otro no, por ejemplo, dos pasajeros en un avión que
comparten un asiento. Supongamos que A sea el que no quiere hablar. Hay dos cosas que no
puede hace, no puede abandonar físicamente el campo y no puede no comunicarse. La
pragmática de este contexto comunicacional se ve así limitada a unas ciertas reacciones
posibles:
- Rechazo: A puede hacer sentir a B, en forma más o menos descortés, que no le interesa
conversar. El rechazo acá no es de la comunicación sino del self de la persona. Es un
rechazo directo, cara a cara y fuerte, se deja bien en claro que no se quiere comunicar.
- Aceptación: A terminará por ceder y entablar conversación, acepta sin querer.
- Descalificación de la conversación: A puede defenderse mediante una técnica de la
descalificación, invalidando totalmente la conversación, se ignora la respuesta. Hay 3
formas:
a. por inconsistencia
b. por desviación de tema
c. por malos entendidos
- El síntoma como comunicación: se da cuando hay un problema físico específico que
no permite la comunicación. Es un tipo de descalificación pero que está fuera del
control de los individuos. A puede fingir somnolencia, sordera, borrachera, ignorancia
del idioma o cualquier otra deficiencia o incapacidad que justifique la imposibilidad de
comunicarse.

2º Axioma: Los niveles de contenido y relaciones de la comunicación


Toda comunicación implica un compromiso y por ende, define una relación. Una comunicación
no solo transmite información sino que al mismo tiempo, impone conductas. Siguiendo a
Bateson, estas dos operaciones se conocen como los aspectos referenciales y connotativos de
toda comunicación.
El aspecto referencial de un mensaje transmite información, por ende en la comunicación
humana es sinónimo de contenido del mensaje.
El aspecto connotativo se refiere a qué tipo de mensaje debe entenderse que es, y por ende, en
última instancia, la relación entre los comunicantes.
El aspecto referencial transmite datos de la comunicación y el connotativo dice cómo debe
entenderse la misma.
La relación puede expresarse en forma con verbal gritando o sonriendo, y puede entenderse
claramente a partir del contexto en que tiene lugar.
La capacidad para metacomunicarse es condición para la comunicación eficaz y está
íntimamente vinculada con la percepción del self y del otro.
Así llegamos al 2º axioma "Toda comunicación tiene un aspecto de contenido y un aspecto
relacional tales que el segundo clasifica al primero y es, por ende, una metacomunicación".
- El aspecto de contenido es el mensaje transmitido, la palabra. Ejemplo: “ey linda”
- El aspecto relacional clasifica si este mensaje es correspondiente o no. Ejemplo: si este
“ey linda” te lo dice tu novie y está consentido por ambas partes, la relación y el
contenido se corresponden y está todo bien; ahora, si el “ey linda” te lo dice un
desconocido en la calle, ahí ya no corresponde el contenido con la relación y va a ser
extraño y desubicado.

Respuestas patológicas

1. En el mejor de los casos, los participantes concuerdan con respecto al contenido de sus
comunicaciones y también al de relación.
2. En el peor de los casos, encontramos la situación inversa: los participantes están en
desacuerdo con al nivel de contenido y también al de relación.
3. Entre ambos extremos hay varias formas mixtas importantes:
a. Los participantes están en desacuerdo con el nivel de contenido pero ello no perturba
su relación.
b. Los participantes están de acuerdo con el nivel de contenido pero no en el de su relación.
c. Otra posibilidad son las confusiones entre los dos aspectos: "contenido y relación".
d. Por último están todas aquellas situaciones en las que una persona se ve obligada de un
modo u otro a dudar de sus propias percepciones en el nivel del contenido a fin de no
poner en peligro una relación.
En los trastornos de la comunicación debidos a la confusión entre el contenido y la relación, el
desacuerdo puede surgir en cualquiera de los dos niveles, y ambas formas dependen una de la
otra.

Definición del self y del otro


A nivel relacional, las personas proponen mutuamente definiciones de esa relación y del sí-
mismo (self) de la otra persona. La otra persona puede dar dos respuestas diferentes:
- Confirmación: acepta la definición y por lo tanto autoconfirma su self.
- Rechazo: rechaza la definición pero no niega su self.
- Desconfirmación: no se refiere a la verdad o a la falsedad de la definición que se da al
self, sino más bien, niega la realidad de la otra persona como fuente de tal definición.
La desconfirmación afirma de hecho: "Tú no existes".

Niveles de percepción interpersonal


Estamos en condiciones ya de volver a la jerarquía de mensajes que surge cuando analizamos
la comunicación en el nivel relacional. Hemos visto que ante la definición que P da de sí
mismo, O puede dar tres respuestas posibles: confirmación, rechazo o desconfirmación. Por
medio de cualquiera de ellas O comunica: "Así es como yo te veo". Esto lleva a contextos
metacomunicacionales cuya complejidad hace tambalear la imaginación y que sin embargo,
tienen consecuencias pragmáticas muy específicas.

Impenetrabilidad: La visión que el otro tiene de mí es tan importante como la que yo tengo
de mí mismo. Lo que hace que la impenetrabilidad sea tan difícil de resolver desde el punto de
vista terapéuticos es el hecho de que las relaciones no son realidades concretas, sino
experiencias puramente subjetivas o construcciones hipotéticas.

3º Axioma: La puntuación de la secuencia de los hechos


La puntuación organiza los hechos de la conducta. La falta de acuerdo con respecto a la manera
de puntuar la secuencia de los hechos es la causa de incontables conflictos en las relaciones.
Así llegamos al 3º axioma "La naturaleza de una relación depende de la puntuación de las
secuencias de comunicación entre los comunicantes"

4º Axioma: Comunicación digital y analógica


Estos dos tipos de comunicación -uno mediante la semejanza auto-explicativa y otro mediante
una palabra- son, desde luego, equivalentes a los conceptos de las computadoras analógicas y
digitales. Las palabras son signos arbitrarios que se manejan de acuerdo con la sintaxis lógica
del lenguaje. La comunicación analógica es toda comunicación no verbal, incluyendo la
postura, los gestos, las expresiones faciales, el tono de voz, la secuencia, el ritmo y la cadencia
de las palabras. Los seres humanos se comunican tanto digital como analógicamente. El
lenguaje digital cuenta con una sintaxis lógica sumamente compleja y poderosa, pero carece de
una semántica adecuada en el campo de la relación, mientras que el lenguaje analógico posee
la semántica pero no una sintaxis adecuada para la definición inequívoca de la naturaleza de
las relaciones.

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