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El Plan de la Patria, oficialmente llamado el Segundo Plan Socialista de Desarrollo

Económico y Social 2013-2019, es un programa de gobierno y ley venezolana presentada


inicialmente por Hugo Chávez el 12 de junio de 2012 para lo que sería su período presidencial
2013-2019,2 el cual no pudo concretar por su fallecimiento en 2013. Posteriormente fue
presentado por el presidente Nicolás Maduro ante la Asamblea Nacional de Venezuela en
2013, aprobado el 3 de diciembre y publicado al día siguiente, el 4 de diciembre, en la Gaceta
Oficial extraordinaria 6118. El documento está basado en la ideología de Hugo Chávez
(chavismo) y en el socialismo del siglo XXI. Más tarde, el documento sería actualizado para
las elecciones presidenciales de 2018 como el «Plan de la Patria 2019-2025».
Este plan es una profundización del Plan de la Patria 2012-2013 al 2018. Su
arquitectura, sus objetivos históricos son los mismos, signados solo por la radicalización en
la construcción del pensamiento chavista, revolucionario, de la direccionalidad histórica al
socialismo.

Elaboración del Plan

En un proceso sin precedentes el presidente Nicolás Maduro convocó al Pueblo al


debate del plan. Se trata de uno de los ejercicios democrático de mayor envergadura. No solo
son los actos electorales que superan cualquier paradigma internacional, sino que más aun la
confección popular del plan de gobierno.
Se generó un proceso de debate que se ha extendido por dos meses, tanto desde el
punto de vista sectorial como territorial, así como también con las opciones de carga
individual de propuestas.
Las propuestas han sido cargadas en un sistema informático, así como la asistencia
ha sido georreferenciada en las asambleas a través de las aplicaciones de código QR del
carnet de la Patria. Hoy se cuenta con un sistema geográfico de información con la base de
datos de las propuestas, y las asambleas de debate y participación, con instrumento
fundamental para la gestión, seguimiento y desarrollo del plan.
Temas centrales del Plan

Se han mantenido los 5 Objetivos Históricos y se han detallado otros, que por las
condiciones de desarrollo de la revolución lo han requerido en función de la guerra
económica e imperial, condiciones reales de los procesos, en función de la profundización
para la direccionalidad socialista. Así, por ejemplo, a los 24 objetivos nacionales se han
incorporado 8; totalizando 32 objetivos nacionales, los objetivos estratégicos se han
desarrollado con mayor detalle pasando de 151 a 176 objetivos estratégicos, los objetivos
generales se han desarrollado en atención a las líneas de acción estratégicas pasando de 656
a 739 objetivos generales. De la misma forma, ha sido una necesidad imperiosa direccionar
los planes sectoriales y espaciales, incrementar el nivel de detalle para la eficiencia en el
trabajo y direccionamiento de la acción revolucionaria. En atención a esto se desarrollaron
los objetivos específicos para cada caso, generándose un total de 1.796 objetivos específicos
como herramientas de lucha para el combate.
De la misma forma, el plan ha contemplado las líneas estratégicas de políticas y
proyectos estructurantes, que alimentan la definición del plan de inversión, así como un
primer conjunto de indicadores bases para la gestión y el seguimiento de 120 indicadores;
agrupados por metas y objetivos.
El eje central de lectura del plan se asume con la resolución de la contradicción
económica. La soberanía, la economía, la construcción geopolítica, ecosocialista y del
socialismo en sí mismo, orbita con la economía como resolución fundamental a resolver en
esta etapa.

Objetivos Históricos

Gran Objetivo Histórico No. 1: Defender, expandir y consolidar el bien más preciado que
hemos reconquistado después de 200 años: la independencia nacional.

La defensa de la soberanía es el gran logro histórico de esta fase del Plan de la Patria.
El comandante Chávez advertía la independencia como gran valor histórico de la etapa
bicentenaria. En este sentido, la soberanía se mantiene como gran objetivo histórico al tiempo
que asume la dimensión fundamental de gestar independencia del aparato económico
productivo y procesos de blindaje ante cualquier agresión imperial. De manera notoria se
incorpora un objetivo asociado a la descolonización, así como otro referido a los delitos y
formas de la guerra económica, de agresión a la moneda como modalidades de injerencia
sobre la República.
Así, se incorporan las estrategias para el blindaje y defensa de la República, del
sistema económico y financiero, de nuestra moneda, las capacidades logísticas, de
distribución y de abastecimiento, para garantizar las libertades económicas del pueblo, la
contraofensiva de la guerra económica y la responsabilidad de los autores de crímenes de la
guerra económica. De la misma forma, se continúa desarrollando la soberanía alimentaria
como un desafío central para la independencia, con un enfoque agroecológico y ecosocialista,
profundizando el combate frontal al latifundio e incorporando el fortalecimiento de
capacidades de monitoreo y seguimiento.

Gran Objetivo Histórico No. 2: Continuar construyendo el socialismo bolivariano del siglo
XXI en Venezuela, como alternativa al modelo salvaje del capitalismo y con ello asegurar
la “mayor suma de seguridad social, mayor suma de estabilidad política y la mayor suma
de felicidad”, para nuestro pueblo.

El Plan de la Patria 2025 tiene como premisa la construcción de una sociedad


igualitaria y justa, el desarrollo pleno de la democracia en todas las dimensiones. Desatacan
de manera especial los mecanismos de protección social del Pueblo, el sistema de misiones
y grandes misiones, la atención de las necesidades sociales como derechos y no mercancías.
De manera particular se incorporan las aplicaciones y sistema de registro y el potencial del
carnet de la patria, no sólo para la protección, sino para la comunicación y vinculación directa
pueblo – gobierno.
Destacan adicionalmente la protección y ofensiva con los sistemas de injerto
económico, gran tema pendiente en la fortaleza planteada por el comandante Chávez para el
florecimiento de una nueva economía, los esquemas de economía local, así como sistema
empresarial del Estado y la imperiosa necesidad de avanzar en los métodos de gestión
socialista, de altas formas de eficiencia y muestra de una cultura pos rentista, del trabajo.
La comuna y el poder popular tienen un rol estelar en la edificación de todas las
dimensiones de la sociedad y en especial en la transición radical a la ruptura definitiva con
el burocratismo y transformación popular del Estado, y el avance de los métodos de gobierno
de calle. Destacan formas políticas organizativas de responsabilidad económica como los
CLAP, la economía local y agricultura urbana, entre otros.
De esta forma, se otorga especial énfasis a la transformación revolucionaria del
Estado para la irrupción definitiva del Estado popular, participativo y comunal, garantizando
el control popular y la transferencia de competencias para el combate a la ineficiencia, el
burocratismo y la corrupción, desde la participación plena del pueblo organizado en la
planificación acción, gestión, seguimiento y control de la gestión conjunta pueblo – gobierno.
En este objetivo histórico se abre un espacio especial al enfoque de inclusión
incorporando a la perspectiva de respeto y celebración de la diversidad y la pluralidad, el
desarrollo del feminismo, de los aportes de los pueblos indígenas, afrodescendientes, la
juventud, para la construcción de una sociedad más humana, impregnada de los valores, la
ética, los modos de hacer, de nuestro pueblo para la construcción del socialismo bolivariano.
Finalmente se incorporan dos temas de importancia estratégica el sistema de
apropiación y distribución de excedentes a efectos de garantizar la justicia y reducción de
desigualdades, de forma estructural y el desarrollo de la economía del mantenimiento, como
una visión económica y cultural enfocada en la coyuntura, pero con sentido estratégico para
construir el postrentismo, y la máxima de hacer más con menos y mejor.

Gran Objetivo Histórico No. 3: Convertir a Venezuela en un país potencia en lo social, lo


económico y lo político dentro de la gran potencia naciente de América Latina y el Caribe,
que garanticen la conformación de una zona de paz en nuestra América.

Se asume como un elemento de desafío central. Se trata del desarrollo de la Agenda


Económica Bolivariana y su siembra en el territorio, desde la identidad de cada región, para
el desarrollo de las fuerzas productivas, así como la generación de un nuevo sistema logístico,
de distribución, precios, lógica del sistema de divisas, así como de forma especial el
desarrollo de los motores productivos. Así como las formas de gobierno económico
devenidas del desarrollo de la Gran Misión Abastecimiento Soberano, como tema estructural
del país. En este mismo orden, motores industriales como el militar y el rol energético son
profundizados en la visión integral del modelo económico.
De la misma forma se adecua el sistema regional, subregional y urbano regional, así
como la infraestructura y servicios como soportes del sistema productivo. La organización
del espacio económico, las regiones y distros motores son asumidos como herramientas
cruciales para definir una estructura descolonizada del espacio y sembrar la agenda
económica bolivariana.
De la misma forma, el desarrollo de vectores fundamentales como la especialización
del sistema técnico y universitario. Surge un nuevo objetivo nacional asociado a la juventud,
sus enormes potencialidades y espacio en el modelo económico y espacial del país, en
particular con el direccionamiento del bono demográfico: la juventud como un motor central
del desarrollo del país potencia.

Gran Objetivo Histórico No. 4: Contribuir al desarrollo de una nueva geopolítica


internacional en la cual tome cuerpo mundo multicéntrico y pluripolar que permita lograr
el equilibrio del universo y garantizar la paz planetaria.

Las condiciones de desarrollo geopolítico del país, el andamiaje construido por el


comandante Chávez, son una clave fundamental para el desarrollo de la presente etapa de la
Revolución.
Profundizar la diversificación de nuestros mercados internacionales de hidrocarburos,
con el objetivo de utilizar la fortaleza de ser un país potencia energética, para desplegar
nuestra propia geopolítica. Consolidar nuestra participación en la OPEP en defensa de los
intereses nacionales, así como nuevas monedas de referencia para el mercado petrolero
internacional.
Se enfatiza la consolidación de las instancias de integración Latinoamericanas y
Caribeñas como el ALBA-TCP, Mercosur, Unasur, CELAC y PetroCaribe entre otros, así
como los esquemas de relacionamiento Sur – Sur, con países hermanos y bajo una lógica de
solidaridad y complementariedad.
Se plantea, en el marco de la agresión imperial, el andamiaje del sistema anti-bloqueo,
continuar desmontando el sistema de dominación imperial y blindando la república frente a
amenazas externas, un nuevo marco financiero de protección, con experiencias como la
criptomoneda, orientar nuevas rutas de logística e insumos, así como la diversificación de los
mercados. Con énfasis en el relacionamiento estratégico con países no hostiles para la
sustitución de importaciones, así como el desarrollo soberano del sistema productivo.
Se asume el rol específico vinculado a la tecnología, los nuevos esquemas de
relacionamiento, en el marco de ruptura de amarras en todas las dimensiones de la sociedad.

Gran Objetivo Histórico No. 5: Contribuir con la preservación de la vida en el planeta y la


salvación de la especie humana.

Incorporación plena del ecosocialismo como elemento fundamental del socialismo


bolivariano, frente a la crisis del sistema depredador, insostenible, ecológica y socialmente,
del capitalismo. En este sentido, no solo se trata de la lucha contra el cambio climático, sino
que más aun del desarrollo de una doctrina práctica de defensa de la vida en el planeta.
Se ha avanzado en el desarrollo de la doctrina ecosocialista como construcción de
modos de vida armónicos y de respeto de los derechos de la Madre Tierra y de todos y todas
sus habitantes, desde la celebración de la diversidad, el rescate y promoción del patrimonio
cultural venezolano, nuestroamericano, de los saberes ancestrales, indígenas,
afroamericanos, para descolonizar y transformar nuestros modos de vida para la construcción
de una civilización sostenible.
De la misma forma, y de manera particular se desarrolla un nuevo objetivo referido a
la construcción de la ciudad socialista, incluyendo la concepción ecosocialista de la ciudad,
los urbanismos y la vivienda y el hábitat, en una concepción integral. Esta es una doctrina
que asume temas como la renta del suelo, espacio público, sistemas integrados de transporte
públicos y eficientes, recolección de desechos sólidos, así como asumir a los urbanismos de
la Gran Misión Vivienda Venezuela como injertos urbanos, más allá de la vivienda. Esto es
la economía local, el equipamiento y la infraestructura, el desarrollo social, los viviendo
venezolanos. Finalmente, se asume en la escala de la vivienda que no hay vivienda
ecosocialista sin hábitat, se trata de las variables de diseño con fuentes alternas de energía,
eficientes, asociadas a la geohistoria y tradiciones y costumbre.

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