VILA
Chomsky: lenguaje como un órgano mental con una determinación cuasi biológica y que su
aparición responde a la maduración de especificaciones innatas que constituyen la esencia
de la especie humana. El lenguaje no aparece por el entendimiento ni la cognición, aparece
por mecanismos específicos de naturaleza innata.
Piaget: a diferencia de Chomsky, afirma la primacía de lo cognitivo sobre el desarrollo del
lenguaje y la comunicación. El lenguaje aparece como expresión de la función simbólica, y
por lo tanto lo entiende como una representación.
Vygotsky: manifiesta que lo individual – la RP- y lo colectivo – la comunicación- no se
pueden separar en la explicación de la ontogénesis.
Piaget y Vygotsky
Existe un desarrollo comunicativo previo a la aparición del lenguaje, desarrollo que es
especifico y no depende del desarrollo cognitivo, en el que la contribución de los
cuidadores es importante, al igual que la del propio niño. Ya que los bebes se implican en
rutinas sociales con sus cuidadores, y esta actividad se da en un contexto socialmente
organizado por la cultura y las personas del entorno. La comunicación abarca el lenguaje, y
ambas son capacidades humanas. Para Piaget la capacidad de comunicación con otros
implica algo más allá de la postura planteada por Chomsky.
Brunner: lenguaje se construye en la interacción con otros, funcionan como herramienta.
La vida social del bebe, relacionada con su cuidado implica una simbiosis afectiva con sus
cuidadores de la que surgen unos significados fundamentales que son utilizados para
regularla y a la vez, se encuentran en la base de los inicios de la CC o de la subjetividad.
Trevarthen utiliza “intersubjetividad primaria” para designar la acomodación que los bebes
hacen de su control subjetivo a la subjetividad de los otros, en esta subjetividad están los
inicios de la CC o la intencionalidad individual. 2 son los aspectos a destacar de la Int.1°: Las
características de las prácticas en que se inscriben las interacciones adulto-niño en sus
rutinas cotidianas, el adulto busca situaciones del tipo “ahora me toca a mí-ahora te toca a
ti”, en las que cada participante adopta su turno. Posibilita que él bebe reconozca la
adecuación de sus conductas en relación con las conductas de sus cuidadores. Estas
interacciones se basan en la acción e interacción mutua, sin referirse a objetos o
situaciones externas, se habla de intersubjetividad primaria (interacción yo-tu). El adulto
acomoda su conducta a las pautas innatas infantiles y sincroniza sus movimientos, gestos y
vocalizaciones en una especie de “dialogo” que se denomina “proto conversación”. 2) La
intencionalidad implícita en los primeros intercambios adulto-bebe. Los adultos tratan a los
recién nacidos como seres humanos con intenciones, deseos y sentimientos semejantes a
los adultos; si él bebe emite un sonido cualquiera, el adulto responde con un “¿Qué tenes
hambre?”, tratando como intencional y llena de contenido comunicativo la conducta del
bebe.
Piaget: la intención comunicativa- aparece a lo largo del estadio SM cuando él bebe es
capaz de coordinar secuencias de conductas dirigidas hacia una meta.
Hacia el final del primer año de vida. Protoimperativas: (“dame agua”) el niño era
capaz de emplear al adulto como un medio para obtener un obj. Modifican el entorno.
Para realizarlas el niño debe comprender las relaciones entre la acción y la
atención.Protodeclarativas (“mira mi muñeca”) emplear un objeto para atraer la
atención del adulto. Influyen en el estado interno del adulto; el niño, además de
controlar las relaciones anteriores, debe poder representarse al adulto como alguien
que puede representarse algo como interesante.Esta situación es de
“intersubjetividad secundaria” ( interacción yo-tu-obj):la comunicación entre él bebe
y el adulto gira no entorno a la relación entre ambos, sino a obj y situaciones externas.
Bruner: desde el nacimiento, él bebe puede realizar conductas que subyacen a un
acto intencionalmente comunicativo, pero es incapaz de secuenciarlas en relación a
un objetivo. Se cree que él bebe prefiere un tipo de estímulos y sus conductas se
despliegan a la obtención, por eso su conducta se torna intencional. Estudia este
periodo y utiliza el formato para describir las características de este tipo de
interacción social. Es el momento en que el adulto y él bebe se implican
conjuntamente en una serie de juegos que adoptan la forma de rutinas, cuyas
variaciones son predecibles por parte de los bebes. Bruner aborda el estudio de los
formatos para comprender su papel en la adquisición del lenguaje y en el progreso de
las habilidades comunicativas. Formato se relaciona con la intersubjetividad y
andamiaje. Intersubjetividad: adulto y un bebe implican conjuntamente en una
actividad- porque entre ambos existe intersubjetividad o porque son capaces de
reconocerse sus propias subjetividades y leerse mutuamente sus intenciones. Sino
sería imposible que ambos participaran en situaciones rutinarias, pautadas y
secuenciadas en las que cada uno hace lo que le toca en relación al otro para que la
interacción se mantenga. Andamiaje. Le muestran un objeto, se lo extienden, y dicen
“toma” “es tuyo”, etc, y el adulto le coloca el objeto en la mano del bebe. Esta
situación se repite numerosas veces. 2 o 3 meses después, el adulto extiende el objeto
hacia él bebe para que este extienda su brazo y lo agarre. A los 12 meses finaliza
cuando aparece el “dar-y-tomar” ambos juegan a pasarse un objeto del uno al otro. El
adulto puede ya retirar el andamiaje que funcionaba como soporte al aprendizaje del
bebe pq puede reconocer de forma global, sus diferentes segmentos, las secuencias y
los momentos en que puede actuar, etc. Considera que más allá de las capacidades
iniciales del bebe en el momento del nacimiento, lo que se construye, gracias a la
manera en que el adulto andamia los comportamientos en el ámbito de la interacción
social, es un aprendizaje de como comportarse de forma adaptada en un contexto
situado culturalmente.