Origen y Antecedentes de Factoring

El factoring, tal y como lo conocemos hoy en día, es un servicio administrativo y

financiero relativamente nuevo. No obstante, sus raíces se remontan tiempo atrás
en la historia. Tres mil años antes de Cristo, los mercados babilonios tenían la
práctica de ceder las cuentas por cobrar generadas de la venta de mercancías.
Muchos autores coinciden en afirmar que el factoring moderno es oriundo de
Inglaterra y, por lo tanto, su denominación proviene de la palabra en inglés
“Factors”, que era utilizado para nombrar a los comerciantes que eran enviados a
conquistar el mercado de los Estados Unidos. Los orígenes del factoring se
encuentran en la época de la colonización de Norteamérica por el Reino Unido,
cuando los factores eran los agentes comerciales de las empresas de la metrópoli.
En esta época los comerciantes ingleses, franceses y españoles encargaban a un
factor residente de las colonias, la comercialización de sus mercaderías, pues
esto, le permitían conquistar un nuevo mercado completamente insatisfecho y
desconocido para ellos. En esta primitiva operación de factoring es posible
apreciar los caracteres conceptuales del contrato de comisión, en su modalidad
típica de la comisión de venta por cuenta del comitente exportador del Viejo al
Nuevo Mundo. Con el enunciado anterior, identificamos claramente que el
factoring nace de una actividad estrictamente comercial, entre compradores de las
nuevas colonias y las grandes empresas europeas, donde se destacaban
especialmente las de la industria textil.

Frecuentemente, los Factores asumían roles que iban más allá del servicio de
vendedor por comisión que se le había encomendado desde un principio. La
expansión de la funcionalidad y beneficios que obtenían posibilitaron que
comenzaran a financiar las operaciones con préstamos, anticipando pagos a los
comitentes. El factor deja ser quien proporciona los compradores y empieza a
asumir responsabilidades de cobranza de facturas, financiamiento de operaciones,
garantías de crédito, que algunas veces eran avaladas por el mismo vendedor, y
en esporádicas ocasiones ofreciendo un adelanto del producto de las ventas, que
posteriormente se convertiría en su principal. De este modo, las empresas
europeas eliminaban muchos de sus temores de exportar al nuevo mundo, tales
como: riesgo de vender sin conocer la solvencia de los compradores,
especialmente cuando estas ventas eran al crédito; costosas gestiones de cobro y
falta de liquidez por crédito comercial otorgado. Los factores prestaban servicios
de administración de cartera de clientes, y en algunas ocasiones asumían riesgo
financiero al otorgar créditos a los compradores.

De esta antigua actividad se desprende ciertos conceptos fundamentales

inherentes al factoring moderno, tales como las operaciones de factoring con o sin
anticipo de fondos, y con sin recurso contra el vendedor.
Considerando al Factor no como un representante de ventas del exportador, sino
como un tercer participante en la actividad comercial, con funciones propias de
cobranza y financiación al comprador, crece considerablemente a la actividad de
anticipos de las facturas al vendedor, otorgando parcialmente fondos generados
por las ventas al crédito aún no cobradas. De esta forma, el Factor se constituye
como un agente financiero del vendedor, proveyéndole fondos sobre ventas
realizadas y no devengadas, que mejoran su situación de liquidez.
Vemos entonces como la figura del Factoring evoluciona desde una actividad
estrictamente comercial entre empresarios del Viejo mundo y agregados
comerciales en las colonias americanas, hasta lo que puede definirse como el
factoring moderno: Un servicio administrativo y financiero especializado, que
incluye tres puntos básicos: prestación de servicios, financiación y asunción de
riesgos.

CONTRATO FACTORIG

El Factoring es un contrato mediante el cual una parte denominada factorado se

obliga a ceder los créditos actuales o futuros que tenga sobre su clientela, y la otra
parte, denominada factor se obliga a intentar su cobranza o adquirirlos,
anticipándole a aquel una parte del cobro como precio por la cesión a cambio de
una comisión.
El factoring puede definirse como un mecanismo mediante el cual una empresa
financiera especializada en Factoring, ofrece financiamiento de corto plaza a otra
empresa comercial, industrial o de servicios, mediante la compraventa de las
cuentas por cobrar la segunda y prestando otros servicios adicionales como,
administrativos de cartera, evaluación e investigación de clientes gestión de
cobranza entre otros.

CARACTERISTICAS CONTRATO DE FACTORING

 PRINCIPAL: permite identificar a algo o alguien y esto ayuda a distinguirlo

de sus semejantes.
 TRACTO SUCESIVO: consiste en que una cosa sucede o se sigue de otra,
o bien el lapso de tiempo que sucede o sigue desde un determinado
momento a otro.
 DE ADHESION: se da en el momento que las partes deciden adherirse o
no al contrato.
 NOMINADO Y TIPICO: es el contrato que se encuentra regulado por una
ley.
 CONMUTATIVO: es aquel contrato que genera obligaciones y cargas
contractuales y reciprocas entre las partes.
 CONSENSUAL: es el que se perfecciona con la voluntad y manifestación
del consentimiento de las partes.
 BILATERAL: es aquel contrato que de acuerdo al derecho genera entre las
partes involucradas obligaciones de carácter reciproco.
 ONEROSO: es el contrato por el cual ambas partes tienen obligaciones y
ventajas económicas reciprocas.

MODALIDADES CONTRATO DE FACTORING

1. SEGÚN LA FINANCIACIÓN
Bajo este supuesto, puede decirse que el Factoring puede clasificarse si existe o
no el otorgamiento de financiamiento del Factor a su cliente. “El anticipo de los
fondos es la forma en que se pone de manifiesto, en el contrato de Factoring. La
función de financiación que el Factor puede proporcionar a sus clientes

Con Financiación:
Cuando existe el anticipo de los fondos, se les conoce en inglés como <Credit
Cash Factoring> en el cual el Vendedor tiene la opción, desde el momento en el
que cede la cuenta al Factor, a recibir el pago inmediato de los créditos cedidos,
hasta la fecha de vencimiento de la factura. En ese momento, el Comprador se
convierte en deudor del Factor, y este empieza a devengar ingresos por concepto
de intereses a costa del primero, a una tasa pactada al inicio del contrato, y que
varía dependiendo del plazo al vencimiento de la factura, solvencia de los
deudores y condiciones de mercado.

Sin Financiación:
Cuando no existe anticipo de los fondos, el servicio generalmente se centraliza en
la asistencia técnica, contable y administrativa como objeto principal del contrato,
mientras que el pago de los créditos cedidos se realiza conforme sea el
vencimiento normal de cada una de las facturas en este caso, el Factor ofrece un
servicio de cobranza puro, pues generalmente no asume ningún riesgo económico
o financiero por cuenta propia

2. SEGÚN EL SERVICIO PRESTADO

Bajo este supuesto, las distintas modalidades de Factoring pueden diferenciarse
dependiendo del servicio que el Factor puesta a su cliente (el vendedor) es tan
amplía la gama de servicios que pueden prestarse en tomo a la figura del
factoring, que habría muchas alternativas de segmentación, existen dos
modalidades que pueden distinguirse por la aplicación de este criterio:

Old Line Factoring:

Los servicios ofrecidos por el factor son: la gestión de cobro, la garantía de cobro y
la contabilidad de las ventas. Las entidades financieras especializadas brindan
estos servicios aparte del Factoring, tal es el caso de las cobranzas simples o
documentarias y contratación de contabilidad externa.

New Style Factoring:

Caracterizado por una oferta más amplia de los servicios conexos a la gestión de
ventas, como podría ser la prospección de mercados, así como por un mayor
desarrollo de las prestaciones de índole financiera. Incluso, las figuras que pueden
manejarse bajo este supuesto pueden ser las siguientes:

Una relación del servicio de Factoring exclusiva entre el Vendedor y el Factor,

suponiendo que al primero no le interesa la gestión de cobro y conexas que
pueden proveerle el Factor, sino únicamente le interesa el anticipo o descuento de
los documentos generados por sus ventas, comprometiéndose a cancelarlo al
vencimiento de la operación comercial.

3. SEGÚN LA CESIÓN DEL RIESGO

Esta variante se distingue en el hecho que el Factor puede o no asumir a su cargo
riesgos de insolvencia, demora o falta de pago de los créditos transferidos por
parte de su cliente (Vendedor). Este supuesto de fondo y no de forma, puede ser
considerado la característica

Factoring sin Riesgo:

Desde el punto de vista financiero, se puede definir el concepto “Riesgo” como la

probabilidad de ocurrencia de algún evento desfavorable” que afecte en alguna
medida el capital invertido. Desde el punto de vista lucrativo para que la empresa
de Factoring, si prestan servicios que involucran riesgo, el rendimiento esperado
sobre la operación debiera ser mayor a medida que el riesgo, el rendimiento
esperando sobre la operación debiera ser mayor a medida que el riesgo es mayor
y un menor rendimiento a medida que el riesgo es menor.
En la teoría de compensación de riesgo, el Factoring sin recurso involucra mayor
riesgo en cuanto a la garantía de la recuperación del capital, y por ende el
rendimiento esperado debe ser mayor. En la práctica, muchas veces se cumple la
teoría pero existen otras condiciones que de una u otra manera influyen en el
precio del servicio, especialmente el riesgo inherente al cliente y su mercado

Factoring Con Recurso:

La esencia de este supuesto es que el riesgo que asume el Factor se minimiza al
contar con una doble garantía, tomando al Vendedor como el último responsable
de la cuenta pendiente de su cliente. En caso la operación de cobro al deudor
(comprador) sea fallida, el factor puede recurrir a cobrar el monto de la obligación
al Girador.

4. SEGÚN SU ÁREA GEOGRÁFICA

Esta característica del Factoring centra su diferenciación en la ubicación
geográfica, jurisdicción, domicilio legal o administrativo, de las distintas partes
intervienen en la operación de Factoring determinada, existen dos clasificaciones
generalmente aceptadas: Nacional e Internacional.

Nacional:
Se clasifica como Factoring Nacional o Local, si el proveedor o vendedor de
bienes y servicios y sus respectivos compradores o clientes residen en el mismo
país. Bajo esta modalidad, el Factoring cumple con su función de operación de
financiamiento pero no tiene relevante importancia en su función de apoyo en
mercados desconocidos.

El Factoring Nacional se utiliza mucho cuando ciertas empresas que por su

actividad cuentan con grandes carteras de créditos pequeños, homogéneos y
resolventes, desean descontarlos para contar con liquidez y capital de trabajo su
gestión comercial, un claro ejemplo de este tipo de empresa puede ser la emisora
de tarjetas de crédito, distribuidores al mayoreo.
Internacional:
Se clasifica como Factoring Internacional si cualquiera de las partes que
intervienen en la operación comercial, operan en diferentes países, esta
modalidad de Factoring es un poco más compleja pues generalmente involucra un
mayor número de participantes, así mismo puede convertirse en una importante
herramienta para el cimerio intra-regional o internacional, no obstante, su
complejidad de índole legal especialmente, no ha permitido su desarrollo

SUJETOS DEL CONTRATO FACTORING

Vendedor:
También llamado Adherente, girador, cedente o librador, es el propietario de la
cuenta que será objeto a factorizar. Es el principal interesado en utilizar el servicio
de factoring, especialmente porque obtendrán a cambio ventajas económicas,
financieras y administrativas, solo con el hecho de ceder, vender, endosar,
transmitir o trasferir, temporal o permanentemente, la propiedad de cuenta por
cobrar generada por una venta al crédito.

Comprador:
También llamado aceptante librador o deudor es el que asume carácter de deuda
al comprar o adquirir al crédito mercadería o servicios, que serán el objeto a
factorizar. Generalmente al comprador pacta las condiciones o términos de crédito
con su vendedor, en algunas ocasiones con asistencia del factor, como el plazo
para cancelar la factura u obligación y la tasa de interés para el financiamiento.

Agente del Factoring

También conocido como Factor, Empresa de Factoring o Cesionario, es una
persona natural o jurídica, que presta el servicio de Factoring. Es contactado por el
Girador, para que preste un conjunto de servicios financieros y administrativos,
con la intención de mejorar su situación de liquidez, gestión de cobranza y
administrativo de cartera de clientes. Con el simple hecho de disponer de los
títulos de crédito generados de la venta de dos empresas comerciales ajenas a
ella, se convierte en el nuevo propietario de una cuenta por cobrar y el rendimiento
que de ella se pueda obtener.

FUNCION CONTRATO DE FACTORING

Se presenta como una característica en el que una empresa encarga a otra,
normalmente un banco para que se encargue de su facturación y cobranza
mediante la transmisión de sus créditos frente a terceros. El factoring está
directamente relacionado con los servicios que un banco presta a sus clientes.

Es una técnica por medio del cual, y sobre la base de un convenio establecido
entre ciertas partes, un organismo especializado se encarga del cobro y de la
concesión de créditos de las empresas que forman su clientela y de quienes toma
sus derechos a su cargo, a medida que se van produciendo, sin posibilidad de
recursos y que si su cliente lo quiere tiene la facultad de financiar toda su cartera
de deudas.

REFORMAS CONTRATO DE FACTORING

Nueva ley de Factoreo en Guatemala Enero de 2018.
Una vez entre en vigencia el decreto aprobado por el Congreso, las empresas
podrán obtener liquidez mediante el descuento de sus facturas por cobrar.

DEL COMUNICADO DEL CONGRESO:

Con 85 votos a favor, el ple no del Congreso de la República aprobó el decreto 1-

2018 Ley de Factoraje o Descuento, el cual fomenta la inversión en países.