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La leyenda de Filemón y Baucis (Griega)

Por Miriam Marti

Cuenta una leyenda griega que en la antigua ciudad de Tiana existe, en lo alto de una colina, un
viejo roble milenario y un hermoso y gran tilo de la misma edad. Al parecer, estos elementos del
paisaje son en realidad el final de una hermosa leyenda, la leyenda de Filemón y Baucis.

Un día, Zeus y Hermes decidieron realizar un viaje transformados en mendigos. Llegaron a esta
ciudad en mitad de una gran tormenta, así pues, decidieron pedir cobijo a todos sus habitantes. La
sorpresa de los dioses fue que ninguno de sus ciudadanos quiso alojar a ambos mendigos.

El enfado de los dioses era más que evidente, no obstante, una pareja mayor, Filemón y Baucis, les
ofrecieron su humilde cabaña, quizá una de las más humildes de todo el pueblo. Los dioses los
acompañaron con sus vestimentas de mendigos.

Los anfitriones ofrecieron a los dos extraños su comida y bebida. No obstante, en un momento de la
noche Baucis notó que las copas y los platos no disminuían en cuanto a su contenido. Esto le extrañó,
y llegó a la conclusión de que estos individuos eran en verdad dioses, y que por ello, su comida y
bebida mortal no les satisfacía.

Filemón fue corriendo a los establos para tomar el único animal que tenían, un ganso. Pero cuando
estaba dispuesto a matarlo para ofrecerlo a los dioses, este ganso corrió a los brazos de Zeus. El
dios se levantó y aseguró que no era necesario el sacrificio del animal. Asimismo, agradeció la actitud
hospitalaria de la pareja.

Antes de marcharse, Zeus pidió al matrimonio que lo acompañaran al monte, pues pensaba destruir
la ciudad dada la mala respuesta que había obtenido del resto de ciudadanos. Una vez arriba, en la
montaña, el matrimonio observó cómo su ciudad y todos los habitantes que allí residían eran
destruidos. Un castigo que ni hizo ni parpadear al gran y enfadado Zeus.
Tan sólo quedó la casa del matrimonio, que posteriormente fue convertida en santuario, siendo ellos
los encargados del mismo. Además, Zeus decidió convertirlos tras su muerte en un gran roble y un
precioso tilo, en muestra del agradecimiento a su comportamiento.

Otras leyendas de la mitología griega:

 Atenea, la diosa que nació de la cabeza de Zeus


 Gea, la Diosa Madre
Y si lo que quieres es ojear nuestro archivo mitológico de Grecia, aquí tienes otros enlaces que te
interesarán…
Mito del nacimiento de Osiris (Egipto)
La joven y bella diosa del cielo, Nut, se enamoró de Geb, dios de la tierra.

Ra, dios del sol y padre de Nut, no podía aprobar ese matrimonio, porque un adivino le había dicho
que el niño nacido de esa unión gobernaría la humanidad.

Ra, elevó una maldición sobre Nut diciendole: Nut, te prohíbo que tengas un niño con Geb en el
término de un año de 360 días. No lo tendrás ni de día ni de noche.

Nut, desesperada, corrió a pedirle ayuda a su amigo Thot que era muy astuto. Thot sabía que un
mandato del jefe de todos los dioses no podía desobedecerse, pero tramó un plan para ayudar a
Nut.

Thot se reunió con Selene, la diosa de la luna, con la excusa de jugar a las cartas. Ambos
apostaron fuertemente, pero Selene apostó un poco de su luz. La decimoséptima parte de sus
iluminaciones, y las perdió.

Por esa razón la luz de la luna es más débil en ciertos periodos no pudiendo competir con la luz del
sol.

Con la luz que Thot le ganó a Selene, creó cinco días más que agregó al año, que por entonces,
solo tenía trescientos sesenta días. Esos cinco días no pertenecían a ningún mes y tampoco a
ningún año.

Nut, mediante ese ardid y sin desobedecer a su padre, pudo tener a sus hijos durante esos días.

El primer día tuvo a Osiris, el segundo, a Horus, el tercero a Set, el cuarto a Isis y el quinto a Neftis.

Cuenta la leyenda que cuando nació Osiris, se escuchó una voz que desde el cielo proclamaba:
¡Ha nacido el señor de toda la tierra!
La leyenda de El perro y Kaskabal
(maya)
La leyenda

Cuenta la leyenda que… “Había un hombre que siempre vivía de mal humor y nunca perdía
la ocasión de maltratar a su perro, quien era muy infeliz. Un espíritu del mal, llamado
Kakasbal, observó la situación y detectó que podía sacar mucho provecho de esto y de la
rabia que seguramente sentía el perro contra el hombre. Por lo que un día se le apareció al
perro y entablaron esta conversación:

Kakasbal: ¿Te veo triste, te sucede algo?

Perro: Cómo no voy a estarlo si mi amo me pega y me maltrata cada vez que puede.

Kakasbal: Los he estado observando y sé que te trata muy mal. ¿Por qué no lo abandonas?

Perro: Porque él es mi amo y debo serle fiel.


Kakasbal: Pero si necesitas ayuda, yo podría ayudarte a escapar.

Perro: No. Nunca lo abandonaré.

Kakasbal: Pero nunca va a valorar tu fidelidad. Ni si quiera te lo va a agradecer.

Perro: Pero siempre le seré fiel.

Kakasbalcontinúo insistiendo por un largo rato, por lo que el perro decidió quitárselo de
encima diciéndole:

Perro: Me has convencido. ¿Qué debo hacer?

Kakasbal: Es muy fácil, solo debes entregarme tu alma.

Perro: ¿Que obtendré si te la doy?

Kakasbal: Lo que tu desees.

Perro: Entonces quiero que me des un hueso por cada pelo de mi cuerpo.

Kakasbal: Está bien, acepto.

Perro: Entonces empieza a contar.

Kakasbalempezó a contar los pelos del perro pero cuando llego a la cola el perro recordó la
fidelidad que debía a su amo y pegó un salto, haciendo que Kakasbalperdiera la cuenta.

Kakasbal: ¿Por qué te mueves?

Perro: Las pulgas hacen que me dé comezón y no puedo dejar de moverme. Vuelve a
empezar.

Kakasbal tuvo que empezar una y otra vez, hasta llegar a cien veces. Al fin Kakasbal dijo:

No cuento más. Me has engañado pero me has dado una lección. Ahora sé que es más fácil
comprar el alma de un hombre que el alma de un perro”.

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