Alumna: Abril de Jesús Fernández Olivero.

¿Matrimonio Igualitario?
“Los modelos nuevos de familia están llevando a un retroceso de valores y pueden
perjudicar a los hijos/as”

Hoy en día vivimos en una sociedad donde los pilares como la familia y la religión católica
se están desvirtuando, tanto por una moda como revelación de jóvenes contra el sistema.

El artículo dos de la constitución argentina dice que el matrimonio entre dos personas
tiene que estar compuesto por dos individuos de distintos géneros.

Así como también en el diccionario de la Real Academia Española define al matrimonio

como “la unión entre un hombre y una mujer”. También otro cuestionamiento es si los
homosexuales podrían adoptar niños, ¿estos pueden cumplir la misma tarea de padres al
igual que cualquier otra familia o pareja normal? sin embargo muchos psicólogos dicen
que para un crecimiento mentalmente sano de un niño se necesita tener una familia
normal al igual que todos los demás chicos.

Si nos referimos a la naturalidad humana y de cualquier otro animal, la reproducción

podría darse solo en caso de una especia compuesta por macho y hembra creado por Dios,
es decir la homosexualidad no es natural.

Esta es una condición adquirida y, como nombré anteriormente, simplemente una

cuestión de moda juvenil. El matrimonio entre personas del mismo sexo proporciona la
homosexualidad en toda la sociedad, cuando deberíamos ayudar a los individuos a
superarlo y progresar como tal; al igual que muchas modas se ira, disolviendo.

El Código civil y Comercial de la Nación en el artículo 599 pone como condición de la

adopción de un niño estar en la institución del matrimonio porque este tiene derecho a un
padre y una madre que le otorgue cada uno por su parte valores necesarios e
irremplazables. Por ejemplo, si una pareja homosexual de hombres adopta a una niña, la
enseñanza particular de manejo de su cuerpo no podría ser enseñada por dichos padres,
ya que no poseen las mismas características corporales y, por consiguiente no poseen la
experiencia para el manejo de esa situación. ¿El padre va a enseñarle de ciclo menstrual a
la niña?

Es por esa razón que no debemos privar a los niños de una educación compuesta por una
familia real. Además de su enseñanza rescindimos en sus relaciones sociales futuras. La
discriminación que sufrirá ese niño en su época escolar por tener dos padres o dos
madres. Las preguntas sin responder y compromisos que le genera a sus educadores en
dicha institución también es otra forma de retroceso para ese niño, todo por un capricho
de sus “padres” o “madres”.

Entonces, pongamos en tela de juicio que es un avance en la sociedad y para los jóvenes
que son nuestro futuro.

No debemos retroceder llevando al descuido de lo que es culturalmente nuestro: La

Familia y la Institución del Matrimonio.