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DIVORCIO Y NUEVO MATRIMONIO EN LA IPCP

¿Qué dice la Confesión de Fe?

La iglesia PC cree en el plan de Dios para el matrimonio monógamo heterosexual (Confesión


6.19 Dado que el matrimonio es primordialmente una relación de pacto delante de Dios entre
un hombre y una mujer, es inmoral e ilegal que cualquier persona tenga más de un cónyuge
vivo.)

Sin embargo ante los desastres familiares por la dureza del corazón humano, abre las puertas
para segundas nupcias: (Confesión 6.20 Cuando la debilidad humana y el pecado amenazan
la relación matrimonial, la comunidad del pacto tiene la responsabilidad de preservar la
santidad del matrimonio y ayudar a los esposos a fortalecer su relación. Si un matrimonio se
disuelve por divorcio, la comunidad del pacto es responsable de ministrar a las víctimas
incluyendo a los niños del matrimonio, y de aconsejar a las personas divorciadas que
contemplan la posibilidad de casarse de nuevo.)

¿Qué dice la Biblia?

- Dios aborrece el divorcio…

Mal 2:16 “«Yo aborrezco el divorcio —dice el SEÑOR, Dios de Israel—, y al que cubre de violencia
sus vestiduras», dice el SEÑOR Todopoderoso.”

- Fue permitido por la ley mosaica, aunque no fue parte del plan original de Dios…

Mt 19: 8 “Moisés les permitió divorciarse de su esposa por lo obstinados que son —respondió
Jesús—. Pero no fue así desde el principio.”

- Fue permitido en caso de inmoralidad sexual…

Mt 19:9 “Les digo que, excepto en caso de infidelidad conyugal, el que se divorcia de su esposa,
y se casa con otra, comete adulterio.”

- Fue permitido en caso de muerte del cónyuge…

Ro 7:2 Por ejemplo, la casada está ligada por ley a su esposo sólo mientras éste vive; pero si su
esposo muere, ella queda libre de la ley que la unía a su esposo.

- Fue permitido en caso de abandono del cónyuge…

1Co 7: 13 Y si una mujer tiene un esposo que no es creyente, y él consiente en vivir con ella,
que no se divorcie de él. 14 Porque el esposo no creyente ha sido santificado por la unión con
su esposa, y la esposa no creyente ha sido santificada por la unión con su esposo creyente. Si
así no fuera, sus hijos serían impuros, mientras que, de hecho, son santos. 15 Sin embargo, si
el cónyuge no creyente decide separarse, no se lo impidan. En tales circunstancias, el cónyuge
creyente queda sin obligación; Dios nos ha llamado a vivir en paz.

- Fue permitido en caso de algo reiterativo que dañe irremediablemente la integridad


personal o marital…

Dt 24:1,2 “Si un hombre se casa con una mujer, pero luego deja de quererla por haber
encontrado en ella algo indecoroso, solo podrá despedirla si le entrega un certificado de
divorcio. Una vez que ella salga de la casa, podrá casarse con otro hombre.”

- No existen evidencias bíblicas para creer que una relación sexual casa de manera
automática a una pareja o que separa a una conformada.

- No es coherente recibir en paz personas en segundos matrimonios y negar a otros esa


posibilidad (después de un riguroso análisis).

- Si un creyente se divorcia y contrae nuevas nupcias sin seguir las pautas bíblicas se le
considera culpable de adulterio hasta que confiese su pecado (Mr 10:11,12). Dios
perdona su pecado inmediatamente si existe arrepentimiento, y el creyente debería
continuar con su matrimonio actual.

- El divorcio debe evitarse a toda costa, la iglesia debe proveer los medios y el
acompañamiento para que las parejas perseveren en su pacto matrimonial, sin embargo
existen situaciones que por la dureza del corazón humano hacen insostenible el
matrimonio, no estamos hablando de simples pleitos o inconformidades mutuas, sino
de situaciones extremas. En estos casos la iglesia debe procurar la restauración de cada
persona afectada por el divorcio y analizar cada caso individualmente para así aprobar
unas nuevas nupcias.

- Vale aclarar que esto aplica a parejas heterosexuales, pues la IPC no aprueba las uniones
del mismo sexo y no presta sus instalaciones para estas.

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