Beruflich Dokumente
Kultur Dokumente
De INADI http://internet.inadi.gob.ar/buenas-practicas/
NIÑOS Y NIÑAS:
¿Qué es la discriminación en Internet?
Es importante que comprendas que nadie tiene derecho a agredirte de ninguna manera. ¿Qué
significa esto? Que así como en la “vida real” tenés derechos, también los tenés en Internet.
Es decir que si alguien te agrede burlándose de tu sexo, tu aspecto físico, tu religión, tu origen
étnico o el de tu familia o tu condición económica, social o intelectual; o si alguien te amenaza
con agredirte, esa persona o personas están discriminándote.
Cadenas de e-mails en las que se insulta, se amenaza o se invita a excluir a una persona de
un grupo o comunidad.
Grupos en Facebook u otras redes sociales que invitan a sumarse en contra de una persona
en particular o a excluirla de las actividades tanto dentro de internet como en la escuela, el
club o los juegos.
Grupos en Facebook u otras redes sociales que invitan a sumarse en contra de una
comunidad o de una idea o de una religión.
Juegos creados para pegarle a determinada persona o para tirarle cosas o para cualquier
situación que implique una agresión.
¿Qué hacer?
a. Si sos discriminado o discriminada, compartí lo que te pasa con tu papá, tu mamá,
tus maestros, maestras, profesores o profesoras, y con tus amigos y amigas.
Compartir lo que te pasa con tu papá, tu mamá, tus maestros y maestras, y tus amigos y
amigas te va a ayudar a no tener miedo ni sentirte solo o sola. Sabemos que es difícil pero
también sabemos que una de las cosas más importantes es que las personas que te quieren y
te respetan sepan lo que te está pasando para que puedan acompañarte, ayudarte y
defenderte. Además, tu silencio hace que quienes te agreden se sientan más fuertes.
En la mayoría de las redes sociales hay herramientas para denunciar a las personas o sitios
que difunden textos o fotografías que pueden ofender a otras personas. Saber cuáles son y
cómo funcionan te va a ayudar a defenderte.
c. Conocé cuáles son las herramientas para decidir con quiénes compartís tu
información personal en Internet y para bloquear a las personas que te molestan o
discriminan.
En la mayoría de las redes sociales hay filtros para que vos puedas compartir tu información
personal sólo con tus amigos. También existen las herramientas para bloquear a personas
que molestan, agreden o discriminan.
d. Si te llega una cadena de e-mails o una invitación a un grupo que está agrediendo o
amenazando a una persona o grupo, no te sumes.
Todos somos diferentes. Y es bueno que sea así. Incluir es sumar. Excluir es restar. Si
excluimos –por medio de burlas, agresiones o discriminación– a otras personas, nos estamos
perdiendo de compartir con ellas experiencias, vivencias y costumbres que nos enriquecen.
e. Si alguno de tus amigos o amigas está siendo discriminado, sé solidario con él o ella.
Podés explicarle lo que sabés sobre discriminación, podés acompañarlo o acompañarla para
que se anime a compartir con los adultos lo que le pasa, podés alentarlo o alentarla a que
denuncie a quien o quienes discriminan, o podés estar ahí para que no se sienta tan solo o
sola y para que no tenga miedo.
ADOLESCENTES:
Discriminación es cualquier forma de maltrato que haga sentir inferior a una persona o
comunidad, tanto sea por su género, etnia, religión, aspecto físico, posición política, o
condición social o económica.
También hay discriminación en Internet y se produce de muchas maneras: acoso por mail o
mensajeros instantáneos (messenger, gtalk, etc.); creación de grupos en contra de una
persona o comunidad en redes sociales como Facebook, difusión de imágenes con fines de
burla; juegos en los cuales se agrede a determinada persona.
No vamos a darte muchas instrucciones porque, a tu edad, vos ya sabés que cuando por
ejemplo reenviás un mensaje o te sumás a un grupo que ofende a una persona o comunidad,
estás haciendo sentir mal a mucha gente.
Por eso, sólo te pedimos que, antes de hacerlo, pienses un minuto. Tu diversión de un ratito
puede ser un problema para otros chicos o chicas, sus familias y amistades.
Si, en cambio, si estás siendo víctima de discriminación, hay varias maneras de prevenir estas
acciones o de neutralizarlas cuando ya están en marcha.
Hablalo con tu mamá, tu papá, tus profesores y profesoras, y con tus amigos y amigas. Las
personas que te quieren y te respetan son de gran ayuda en caso de que estés siendo objeto
de acoso o discriminación. Además, quienes te acosan o discriminan suelen sentirse más
fuertes si vos ocultás lo que te pasa.
La mayoría de los sitios cuenta con filtros para definir quiénes pueden acceder a tus datos.
Saber utilizar estas herramientas es muy importante para evitar situaciones desagradables.
La mayoría de los sitios tienen herramientas para excluir a la persona o personas que vos
decidas.
Por último, si tenés algún amigo o amiga que esté siendo discriminado, sé
solidario con él o ella.
Contale lo que sabés sobre discriminación y acoso en internet. Alentalo o alentala a que
compartan con personas de su confianza lo que les está pasando y a que denuncien a
quienes están discriminándolo o discriminándola. Y, sobre todo, quedate a su lado para que
no se sienta tan solo o sola, y para que no tenga miedo.
ADULTOS:
Así como intercambian archivos con información escolar o ven videos musicales, también
deciden las salidas y encuentros por mensajeros instantáneos –por ejemplo, messenger– o
bien en los muros de Facebook, que son el lugar en el que aparecen sus pensamientos, sus
sentimientos y sus fotografías. Curiosamente, ese espacio público contiene buena parte de la
vida privada de nuestros hijos.
Por lo general, las víctimas de este tipo de acciones son niños, niñas y adolescentes que
sufren en silencio las situaciones de discriminación por género, aspecto físico, religión, origen
étnico, condición económica, social o intelectual.
Frecuentemente, los niños, niñas o adolescentes que están siendo sometidos a una estrategia
de acoso sistemático tienen cambios en su conducta: se muestran tristes y silenciosos, se
cierran sobre sí mismos, tienen altibajos en el rendimiento escolar y, en algunos casos
extremos, presentan trastornos conductuales –de la alimentación, del sueño, de agresividad–
más serios debidos a la angustia contenida. Asimismo, en ocasiones también comienzan a
prestar una desmesurada atención a lo que sucede en los sitios que habitualmente frecuentan
en internet porque están pendientes de cualquier nueva agresión que se produzca.
Es importante que como padres y madres prestemos atención a los cambios de conducta, que
hagamos que se sientan contenidos y confiados para que puedan compartir con nosotros sus
preocupaciones, y que cada una de nuestras acciones esté dirigida a hacer que nuestro hijo o
hija se sienta protegido.
Si nuestro hijo o hija está siendo víctima de acciones de acoso y discriminación podemos
ayudarlo o ayudarla de la siguiente manera:
2. Sin echarle la culpa a Internet. La interacción en Internet tiene las mismas características
que la interacción en la vida “off line” o “vida real”. La queja acerca del medio o la prohibición
de utilizarlo no solucionan el problema. Cerrar el perfil de Facebook tampoco.
3. Hablando mucho con él o ella acerca de qué tipo de información brindar en las redes
sociales y cuáles son las herramientas digitales con las que cuenta para protegerse.
c. El derecho a la privacidad
Los niños, niñas y adolescentes tienen derecho a la privacidad. Por lo tanto, como padres,
madres o adultos responsables por los menores, tenemos que respetar y preservar este
derecho.