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Capítulo 7.

Generalización y Discriminación
Liberman

La generalización del aprendizaje tiene lugar cuando la conducta que se ha aprendido


en una situación aparece en otra situación. Los humanos tienen la capacidad de generalizar
los aprendizajes a nuevas situaciones con nuevos estímulos, gracias a esto el repertorio de
conductas no es restringido y no se pasa por el proceso de adquirir una respuesta nueva ante
cada nueva situación en la que se encuentren.
La generalización está regida por unas leyes que fueron descubiertas en las
investigaciones de laboratorio con animales. Una de las leyes refiere a la similitud de la
situación nueva respecto a la situación en la que se aprendió la respuesta originalmente.
Cuan mayor sea la similitud entre las características de los estímulos de ambas
situaciones, mayor será la probabilidad de que se dé la generalización.
Esto se puede observar cuando un niño está aprendiendo a hablar. Al principio solo
hablara en su casa y como respuesta a ciertas incitaciones (prompts) de determinadas
personas, generalmente padres. Con el tiempo, hablara también a otras personas y en otras
situaciones; es posible que el niño diga “papa” como respuesta ante varios hombres y “Po-
po” cada vez que vea un coche.
Cuando ciertos estímulos poseen ciertas características en común, es posible que se
dé la generalización. Por ejemplo: Una persona que aprende a conducir, puede generalizar su
“conducta de conductor” a otros tipos de coches, cuanto más sea parecido los coches más
rápido será la generalización.
En los casos clínicos es crucial para el resultado de la terapéutica. Porque para que
tenga éxito el tratamiento, es necesario que se produzca una generalización de la situación
terapéutica a las situaciones de la vida real.
Un paso importante del procedimiento de terapéutica de la conducta, es el paso final
de desplazar los efectos del tratamiento a la vida real. Por ejemplo:
- Un alumno con cambios positivos de la conducta que asiste a una clase especial,
en la que recibe especiales atención su maestro y un sistema de lecciones
programadas, con una contingencia de reforzamientos claras, consistentes e
inmediatas, tienen que trasmitirse con el tiempo a la clase normal.
- Se debe dar la generalización de los efectos del tratamiento desde la situación
psiquiátrica a la vida real.
En el Hospital Estatal de Camarillo, han desarrollado un procedimiento de
“Desaparición” gradual que potencia al máximo las posibilidades de los efectos de la
generalización. Los pacientes que se admiten en la Unidad provienen de otro centro, a ellos
se le aplican programas de modificación de conducta intensivos e individualizados.
Son pacientes con los que han fracasado con otros procedimientos. Y cuando se
muestra que algún enfoque terapéutico es válido, se promueve la generalización en su propia
sección del hospital o institución, de la siguiente manera:
- La unidad de investigacion y su personal va “desapareciendo” poco a poco del
marco del paciente, haciendo que este pase cada vez más tiempo en el lugar de
procedencia.
- El personal de la unidad acompaña al paciente en las visitas a su anterior lugar.
- Los terapeutas del paciente acuden a la unidad y se les instruye y prepara para que
continúen aplicando los métodos de tratamiento una vez que ya ha ocurrido la
generalización.
Se puede considerar un ejemplo de generalización del estímulo el concepto
psicoanalítico de transferencia. Es en donde el paciente responde al psicoanalista como si
fuera un padre. El analista comparte con los padres algunas características, como la figura de
autoridad, respetada, preocupada e interesada por el paciente y simpatizante con él. Cuanto
menos el paciente sepa del analista, mejor se realizara la transferencia o generalización. Esto
muestra que la transferencia tiene más probabilidades de ocurrir en el análisis que en la
terapia.
Cuanto más se parezca la situación del ambiente natural del paciente, mayor es la
probabilidad de que el tratamiento surta efectos deseados.
En el tratamiento de la depresión, algunos terapeutas (Lewinshn y cols, 1969) han ido
directamente al domicilio del paciente para hacer un análisis del problema en términos de
conducta y modificar después las pautas des adaptativas de interacción que están
manteniendo la conducta depresiva.
- Luego de las observaciones realizadas en el hogar, el terapeuta identifica aquellas
pautas de conducta interpersonal que supone que están relacionadas casualmente
con la depresión. Los hallazgos se exponen al paciente y a su cónyuge en varias
sesiones... se llega a un acuerdo sobre los objetivos de conducta... las visitas a la
casa se centran en la interacción entre el terapeuta y el paciente sobre los
problemas de conducta e interpersonales y constituyen una forma relativamente
fácil de implicar una parte importante del entorno del cliente en el proceso de
tratamiento.
Este tratamiento consiste en cambiar las contingencias de respuestas interpersonales
en el seno de familia, de forma que todos sus miembros colaboren en el esfuerzo, incluso la
persona designada como paciente. Resultados:
El terapeuta estructura, sistemática y conscientemente, de la situación del tratamiento
para que sea lo más parecido al ambiente natural en el que tiene lugar el problema del
paciente. Por ejemplo:
- El paciente experimental dificultades para reafirmarse a sí mismo en una situación
del trabajo, puede que el terapeuta decida hacer una representación de las
situaciones problemáticas que se le suelen presentar al cliente en su trabajo y hacer
que el cliente desempeña su papel, de forma que, al dar al paciente la oportunidad
real de intentar y ensayar la conducta nueva en una situación que se parece
extraordinariamente a la situación real, le facilite la generalización de su
aprendizaje.
En el caso de terapia aversiva con adictos a narcóticos, Liberman (1968), dispuso de
sus pacientes a que usaran utensilios normales para inyectarse en la situación de tratamiento.
Así quedaba asociado el estímulo aversivo (la náusea causada por la apomorfina) con los
mismos objetos que el adicto usaría más tarde fuera del hospital. Esto haría que aumente la
probabilidad de generalización de la experiencia aversiva, desde el hospital a los alrededores
de sus casas.
Otro ejemplo del uso de generalización es el programa de tratamiento de alcohólicos
llevado en Patton State Hospital, California (Schaefer, 1969). El método usado es la terapia
aversiva, la cual consiste en que los alcohólicos reciben una descarga eléctrica dolorosa, pero
inofensiva, en los dedos, cada vez que toman un sorbo de alcohol. La descarga acaba cuando
el paciente escupe el licor. Las probabilidades de que el tratamiento se generalice a la vida
en la comunidad se ven aumentada por el hecho de que el entorno terapéutico es una taberna
típica, con su barra, taburetes, tocadiscos automáticos y camarera (enfermera disfrazada).
El proceso que complementa a la generalización se le llama discriminación. Cuando
se emite una respuesta en una situación, pero no en otra diferente, se está mostrando una
discriminación, esto ocurre porque se ha reforzado en una de las situaciones, pero no en la
otra.
El proceso de reforzamiento diferencia nos capacita para aprender a actuar de manera
adecuada en cada situación. Ejemplos;
- Se puede disfrutar ininterrumpidamente comiendo con los dedos nuestra merienda
campestre, pero es muy posible que despertemos curiosidad e incluso criticas si
usamos los dedos en un restaurante.
- Ganará aplausos e inclusos premios si en un partido de tenis juega “duro”, pero si
su contrincante es su cónyuge es posible que ese juego tan “duro” solo le acarree
enfados y sentimientos heridos.
- Se puede conducir a 80h en la autopista, pero se debe bajar a 40 en la ciudad.
- Se levanta la voz en un partido, pero se susurra en las bibliotecas.
- Se viste deportivamente en la playa, pero nos arreglamos para una entrevista en
la que se solicita trabajo.
Cuando de la conducta se siguen diferentes consecuencias en diferentes situaciones,
se aprende a discriminar, ya que nuestra conversión en seres sociales depende de que demos
respuestas diferentes y apropiadas a las diferentes situaciones interpersonales, el aprendizaje
de la discriminación es un proceso fundamental en nuestras vidas.
Algunas personas pueden hacer mejores discriminaciones dado a sus historias de
reforzamiento diferencial. Ejemplos:
- Los criadores de perros pueden distinguir entre diferentes razas de caninos.
- Los asiáticos distinguen muchas más clases de arroz que los europeos.
- Los expertos en vinos son contratados para que establezcan diferencias entre
distintas cosechas.
- Los músicos profesionales pueden distinguir los tonos musicales mucho mejor
que un profano.
La gran parte de nuestras conductas, está bajo control de estímulos de situación o claves, que
se llaman Estímulos discriminativos. Ejemplos:
- Se acelera cuando la luz se pone verde, se frena cuando se pone roja.
- Es probable que se estreche la mano a un amigo que encontramos por la calle,
pero no a un extraño.
- Sonreímos ante la sonrisa de otra persona, pero no ante una sonrisa afectada.
- Las reglas de etiqueta y el protocolo diplomático se basan en la discriminación de
estímulos.
- Cuando se comporta de forma distinta ante una persona que tienen distinta
religión o raza, se está literalmente “discriminando”
Este control que los estímulos ejercen sobre la conducta, puede causar problemas
clínicos interesantes. Mas en los casos de que el estímulo-control emane de una
persona significativa en el espacio vital del paciente. Ejemplo:
- Moser (1965) ilustra como un niño autista respondía a estímulos discriminativos
humanos, de forma chocante; en el momento que el padre estaba en casa, Billy
era modelo. Sabía que su padre le castigaría rápida y desapasionadamente en el
momento que se portara mal. Pero cuando el papa dejaba la casa, se iba a la
ventana y miraba hasta que el coche se alejara. En el momento en que esto sucedía,
se transformaba...” se iba al armario, rompía los vestidos y se orinaba en la ropa
de la mama”. Destruía los muebles y recorría la casa mordiendo las paredes hasta
que toda la casa aparecía destrozada de un extremo a otro.
El padre de Billy servía como estímulo discriminativo respecto a ciertas
consecuencias disciplinarias de su conducta destructiva. En el caso de la madre era
un estímulo discriminativo “no castigo” para este tipo de conducta desenfrenada.
Es importante que el terapeuta tenga en cuenta la piedra alguna de enseñar a un paciente a
comportarse de forma distinta según las situaciones. Ejemplos:
- El esquizofrénico es diagnosticado como tal, en parte su conducta social y afectiva
no se adecua a la situación. Durante el tiempo que dura la hospitalización, el
personal del hospital proporciona un “feedback” diferencial (reforzamiento) al
paciente psicótico para ayudarle a poner su conducta bajo los estímulos de control
adecuado. Si es combativa o con tendencia a desnudarse, se coloca en una
habitación aislada. Si habla racionalmente con el personal, recibirá interés y
atención.
- La terapia de grupo consiste en una gran cante discriminativo de conducta social.
Las acciones de un miembro de un grupo, durante la terapia, reciben respuestas
diferenciales por parte de los demás miembros y del terapeuta, de forma que
gradualmente se va acercando a formas más sociales.
En conclusión la conducta va seguida por consecuencias diferentes en distintas
situaciones, se aprende a discriminar, cambiando la conducta según sea conveniente.
Aquellos estímulos o situaciones que indican las contingencias de reforzamiento que están
operando, proporciona claves que ayudan a modificar o modular la conducta y adecuarla a la
situación. A estas claves se les llama “estimulo discriminativo”

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