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Índice General
A primera vista parecería fácil distinguirlo de otros términos cercanos, como ecociudad por
ejemplo, pues por lógica relacionaremos ecobarrio con una actuación realizada dentro de
una ciudad existente o en su periferia, pero integrado en el sistema urbano, y en cambio
pensaremos que ecociudad se refiere a una realización autónoma con entidad propia. Sin
embargo en la práctica estos términos se confunden y lo mismo se denomina ecobarrio a
actuaciones que por su lejanía del núcleo urbano de referencia realmente no actúan como
tales, como se llama ecociudad (por ejemplo en relación con el programa Ecocity de la UE)
a actuaciones realizadas dentro de terreno urbano consolidado y que incluyen incluso
rehabilitación de patrimonio construido.
Por otra parte, atendiendo a la escala de las realizaciones, en principio no debería ser lo
mismo una actuación de una escala reducida, que desarrollos que por su extensión o
ocupación de terreno natural podríamos entender más bien como ecoPAUs. Efectivamente,
encontramos proyectos urbanos de este tipo que, más allá de su carácter experimental y sus
bondades como repertorio de mecanismos ecológicos, están contraviniendo los principios
más claros de la sostenibilidad, al mantener un modelo expansivo de ocupación del
territorio y extensión de la urbanización.
Una de las ideas que generalmente se relaciona con el término ecobarrio es el de nuevo
desarrollo, debido a que parte de los proyectos más espectaculares que llevan este nombre
se han realizado de esa manera; pero la asociación no es del todo correcta, ya que existen
igualmente realizaciones en terrenos urbanos, basadas en la recuperación y rehabilitación
de construcciones existentes. Este punto es muy importante, pues en él se encuentra la clave
de que el término adquiera unas connotaciones de transformación radical del modelo
urbano o se quede en el tipo de actuaciones más simples que se tiñen de verde pero no
inciden en los problemas básicos.
En ese sentido hay que destacar que en la actual coyuntura de extensión de la urbanización
por el territorio es vital disminuir la presión sobre el suelo no ocupado y preservar el paisaje
cultural y los usos productivos tradicionales así como los ecosistemas naturales. Por otro
lado en cuanto al modo de vida de los nuevos desarrollos verdes, se da por supuesto que las
relaciones y las redes sociales van a surgir de una configuración física y una variedad
tipológica de las viviendas. Esto puede ser así, pero el proceso para que llegue a ocurrir es
lento, pues en estos nuevos barrios se establecerán personas sin una historia o unos
referentes comunes que les den el sentido comunitario. Por el contrario, en la reforma y
adaptación de los barrios históricos ya se cuenta con una complejidad social y una identidad
compartida claves para la acción comunitaria.
Aunque las acciones encaminadas a lograr mayor eficiencia energética en el ámbito urbano
están en pleno desarrollo, en parte porque las exigencias de las normativas europeas así lo
requieren, y por tanto se han desarrollado métodos de control y certificación, es necesario
ampliar el análisis y realizar una contabilidad ambiental de todo el proceso constructivo,
desde el movimiento de tierras, al transporte de materiales y maquinaria, puesta en obra,
etc. En este sentido sería interesante realizar un análisis comparativo de lo que supone la
adaptación en términos de sostenibilidad de un barrio existente frente a la construcción de
uno nuevo.
En las definiciones de los siguientes autores constataremos que el aspecto ambiental (el
puro metabolismo urbano) y el diseño físico, sólo son uno más entre varios de los factores
que definirían un ecobarrio. Los aspectos sociales y económicos: de diversidad y
participación, de gestión de lo público, de desarrollo local; modos de vida: consumo,
alimentación, creatividad, uso del tiempo, implicación... son tanto o más importantes.
Desde esta perspectiva de la complejidad todos están relacionados y pueden influirse
potenciándose mutuamente, es decir de una manera sinérgica.
Aunque este marco teórico viene construyéndose desde hace unos diez años (el primer
texto de referencia que citamos data de 1999), no ha sido trasladado en toda su extensión a
las realizaciones físicas, tan de moda en los últimos años, que están absorbiendo el
significado del término.
Por tanto se puede considerar que el término ecobarrio es un término en proceso y también
en conflicto. Al no contar con una definición oficial consensuada, aún depende de la
defensa que se haga de sus aspectos radicales que no sea empobrecido y se extienda su
interpretación más débil. El modelo de ecobarrio tal como lo entendemos, al igual que el de
sostenibilidad, requerirá un cambio en el modelo de consumo y en la gestión de los
recursos. Más allí de actuaciones puramente técnicas debe ampliarse e incluir los procesos
sociales, la participación y la autogestión, y los estilos de vida caracterizados por diversos
aspectos como el empleo, o los modos de alimentación.
Definiciones
Building the 21st Century Home. The Sustainable Urban
Neighbourhood (Rudin y Falk, 1999)
Los autores inciden en la importancia de cada una de las palabras del término utilizado
Sustainable Urban Neighbourhood (barrio urbano sostenible). La idea es que se trata de un
entorno construido sostenible, que forma parte de una ciudad y que las actuaciones se
refieren a la escala de barrio y se sitúan dentro de esos límites. El barrio sería el entorno lo
bastante extenso como para acometer transformaciones amplias y lo bastante reducido
como para que sus habitantes se sientan implicados en ellas. Consideran que el modelo
teórico de asentamientos sostenibles conformado por pequeños núcleos densos
interconectados, como podrían se el modelo defendido por las ecoaldeas, no se puede
generalizar en un territorio ya ocupado y apuntan que el reto de la sostenibilidad urbana
está en la recuperación de las ciudades existentes. Siguiendo los epígrafes utilizados por los
autores, veremos cuáles son los elementos que conformarían un barrio urbano sostenible.
Sostenibilidad
Respecto a los residuos, más allá de los sistemas centralizados de recogida separativa, se
deberían aprovechar las actividades económicas relacionadas con la reutilización y el
reciclaje como elemento de desarrollo local. En el ciclo del agua, las acciones estarían
encaminadas a reducir los gastos asociados al sistema lineal de distribución y depuración,
cerrando localmente los ciclos, mediante materiales y sistemas que faciliten la absorción o
evaporación de pluviales, o su aprovechamiento para riego y otros usos secundarios. En
cuanto a las aguas grises y negras, el uso de sistemas de depuración por filtrados, lagunaje,
algas, plácton... relacionándolas también con los residuos orgánicos para la obtención de
compost. Además destacan la importancia de los espacios verdes dentro del barrio,
destinados a aumentar la calidad ambiental y el bienestar de los habitantes, y como espacios
de biodiversidad. Se propone la introducción de la agricultura urbana en esos espacios
verdes, como una actividad relacionada también con el reciclaje de los residuos y el agua.
Estructura urbana
Sostenibilidad social
Para que una comunidad sea sostenible socialmente es necesario que mejore la calidad de
vida de sus habitantes, y que el entorno sea agradable para vivir y para visitar. Para lograr
la complejidad requerida es necesario el paso del tiempo para que se desarrolle el sistema
urbano en todos sus aspectos. Para conseguir la diversidad no es sólo importante la mezcla
de usos y la existencia de distintos modelos de alojamiento: en compra, alquiler, etc. La
simple mezcla de rentas en el mismo espacio no es suficiente para lograr que funcione
como una comunidad compleja. La diversidad y cooperación social sólo se puede lograr
mediante una comunidad de intereses y objetivos. El carácter urbano al que se hacía
referencia en el anterior epígrafe facilitaría el sentimiento de apropiación y responsabilidad.
Además mediante los procesos de participación en el diseño de proyectos de vivienda
social o la creación de cooperativas de gestión, se responde a las necesidades y deseos de
los habitantes y además se crea una estructura comunitaria, en la que los participantes
desarrollan un sentimiento de responsabilidad hacia el grupo y el edificio o espacio. Las
actuaciones urbanas realizadas en extensiones reducidas, parcela a parcela, pueden corregir
mejor los fallos al tener mayor capacidad de reacción y adaptación a los cambios. La
diversidad favorece la evolución en tiempos lentos.
Crecimiento natural
El modo de asegurar el éxito de una estructura local de este tipo tiene que ver con la
capacidad de decisión de la comunidad que la habita. Será sólo desde el conocimiento, el
respeto y el cariño al del lugar, a su gente y a su historia como se podrá actuar mejorando el
todo. El modo en que tradicionalmente se creaban las ciudades estaba basado en esa
capacidad de transformación de sus habitantes, un crecimiento y transformación natural que
no puede ser planificado sino que requiere un espacio de libertad de acción. Según C.
Alexander una estructura urbana de este tipo sólo puede generarse mediante un crecimiento
a pequeñas dosis, realizado a lo largo del tiempo. La morfología total se constituirá
naturalmente a partir de las decisiones en lo local. Las personas poseen el conocimiento
instintivo de lo que encaja bien en los entornos que habitan, por la simple experiencia y
conocimiento del lugar. El espacio urbano es entendido en positivo en estas actuaciones.
Aunque los autores asumen que los principios del modo intemporal de construir definido
por Alexander parecen responder más al modo en que se construyeron históricamente las
ciudades y no es fácil de compatibilizar con el modo de planificación actual, destacan
algunos ejemplos de diseño urbano en los que se ha trabajado con guías y códigos de diseño
más o menos restrictivos que pretendían favorecer la variedad de actuaciones y el
crecimiento natural.
Uno de los criterios que el autor destaca como fundamentales en relación con el ecobarrio
es su modo de inserción en la ciudad. El concepto de ecobarrio centra la atención en la
importancia del barrio como ámbito físico local en el que se desarrollan los procesos
urbanos. No se trata de un elemento aislado, sino integrado en una ciudad y un territorio
concretos con los que interactúa. Por una parte debe producirse una conexión adecuada del
barrio con el resto de la ciudad, de modo que sus habitantes puedan acceder a los servicios
y equipamientos centrales, pero además se debería potenciar la importancia del propio
barrio dentro de los flujos urbanos, localizando en él equipamientos o elementos atractores.
En palabras del autor:
rasgos distintivos de un ecobarrio serían también el respeto a las preexistencias y los hitos
considerados signos de identidad cultural local, el respeto y la integración de los
elementos paisajísticos y la preservación de las áreas naturales [...] Sin embargo, si
hubiera que resumir en tres rasgos esenciales la imagen de un ecobarrio éstos serían la
densidad, la mezcla de usos y el predominio del transporte público, ciclista y peatonal
sobre la movilidad basada exclusivamente en el vehículo privado. En efecto, en estos
criterios confluyen y se solapan sinérgicamente muchos de los factores que contribuyen a
la sostenibilidad de un sistema urbano.
Verdaguer (2000)
El espacio público debe ser concebido como lugar de encuentro y contar con valores
simbólicos con sentido para sus habitantes; además debe ser diseñado atendiendo a su
seguridad y a la diversidad de usos. Un sistema de movilidad sostenible será el que facilite
el acceso a los servicios y equipamientos y al trabajo, consiguiendo la reducción de
desplazamientos en coche. Una movilidad de este tipo sólo es posible si está ligada a una
estructura con una densidad adecuada y en la que se produzca la mezcla de usos urbanos.
En relación con el metabolismo urbano, la escala del barrio resulta especialmente apropiada
para hacer frente a la gestión de los recursos, uno de los criterios fundamentales del
urbanismo sostenible. En efecto, es en esta escala intermedia donde se pueden aplicar
sistemas más controlados de gestión del agua, de los residuos y sistemas de energías
renovables. Dicha gestión deber introducir criterios de ahorro y reducción de la demanda,
así como asegurar la eficiencia en la distribución.
Compacidad
Complejidad
La complejidad estaría relacionada con la acumulación de información que porta cada uno
de los actores del sistema urbano. La diversidad de actividades económicas, instituciones y
asociaciones urbanas, la mezcla de usos y funciones en el marco del ecobarrio posibilitan el
aumento de la relación y contacto entre estos actores y «proporciona una de las
características básicas de las ciudades complejas: la creatividad» (Rueda, 2005), que será
lo que le permita influir en el presente y controlar el futuro, reaccionando ante distintas
situaciones para adaptarse a ellas.
Eficiencia
Cohesión social
Criterios de definición
A continuación intentaremos hacer una síntesis de las definiciones de los diferentes autores.
agrupando en lo posible los criterios que mencionan. Aunque la terminología utilizada en
cada caso no coincide exactamente y en ocasiones se producen diferencias sobre los
diferentes aspectos constitutivos de un ecobarrio, y el grado de importancia que se les
otorga, consideramos que hay ciertos conceptos fundamentales que se repiten y que
intentaremos ordenar de acuerdo al siguiente esquema:
Aunque éste es un buen instrumento para identificar los factores clave que definirán el
ecobarrio, eso no quiere decir que se pueda trasladar directamente a la realidad como un
listado de actuaciones que se pueden ir sumando para obtener la máxima puntuación. La
suma de muchas acciones aisladas no puede tener el mismo valor que una concepción
compleja, con acciones que actúen de manera transversal y sinérgica entre los diferentes
procesos urbanos. Será el sentido que se dé a cada una de esas acciones y su relación e
interacción con las demás lo que defina un modelo verdaderamente fuerte de ecobarrio.
Sostenibilidad ambiental
Inserción en el entorno (urbano y natural)
Metabolismo urbano
Energía
Transporte
Agua
Gestión del agua destinada a distintos usos según sus exigencias de calidad.
Eficiencia en la distribución.
Sistemas de recuperación de pluviales: evitar su llegada al alcantarillado, mediante
sistemas separativos, favoreciendo la evaporación o absorción (pavimentos porosos,
zonas verdes), la recogida o el uso (cubiertas aljibe, depósitos, cisternas).
Sistemas de reutilización de aguas grises (inodoros, riego).
Sistemas de aprovechamiento de aguas negras (elaboración de compost, plantas de
biogás).
Sistemas de depuración local mediante filtrados por gravas, humedales artificiales:
lagunas de decantación, algas y macrofitas, otros tipos de organismos.
Elemento de confort climático: uso en el espacio público mediante canales, fuentes,
láminas de agua...
Elemento de disfrute: interacción y juego.
Elemento educativo: visibilizando las distintas fases de su ciclo.
Materiales
Modelo urbano
Barrio con autonomía y a la vez conectado.
Densidad y mezcla de usos (residencial, equipamientos, empleo).
Distancias cortas.
Calidad de vida.
Espacio multifuncional, legible, seguro (trazado, iluminación, control visual).
Presencia de ciclos naturales (vegetación, agua), confort ambiental.
Presencia de equipamientos.
Elementos de identidad: hitos, recorridos, variedad de situaciones urbanas. Inserción
de elementos atractores de mayor escala.
Valores representacionales y simbólicos.
Transición de lo público a lo privado
Sostenibilidad social
Lugar de encuentro, participación, e iniciativa social. El barrio como organización
compleja, que acumula información y debido a ello tiene capacidad de adaptación y de
transformación. En relación con la secuencia: relaciones sociales --comunicación --
concienciación -- asociación -- acción.
Diversidad y cohesión
Participación
Autocontención
La idea básica del proyecto era la de un de diseño urbano denso, con criterios de consumo
mínimo de energía para las viviendas, espacios verdes y accesible en transporte público.
Mediante el proceso participativo liderado por la asociación local de vecinos Forum
Vauban se introducen en el planeamiento nuevos objetivos: el concepto de ciudad sin
coches, la construcción de viviendas pasivas, el fomento de la autopromoción,
construcción, mantenimiento y gestión de los edificios a través de grupos cooperativos; la
inclusión de un centro comunitario y la participación de los vecinos en el diseño de
espacios públicos.
Además existen otros grupos implicados, como la Asociación de Coche compartido y los
30 grupos y cooperativas de vivienda. Las empresas constructoras son 153, y los pequeños
constructores 233, de los cuales 185 son grupos de autopromoción.
Actuaciones específicas
Movilidad
Mediante las iniciativas Barrio sin coches y Barrio sin aparcamiento, se introduce un
modelo de movilidad basado en los desplazamiento peatonales o en bicicleta. El 40% de los
habitantes del barrio no tiene coche. En el plan se prohíbe la construcción de aparcamientos
en las parcelas, delimitando un aparcamiento común en el perímetro del área residencial.
Sólo se permite la entrada de coches para reparto y recogida, con una velocidad máxima de
circulación en el distrito de 30 km/h, y en las áreas residenciales de 5 km/h, priorizando la
movilidad peatonal.
Energía
En el plan se obliga a las viviendas a consumir menos de 65 kWh/m2 anuales, para ello
recomienda el uso de energía solar mediante colectores y placas fotovoltaicas. Se introduce
una planta de cogeneración que funciona con astillas, destinada a proveer de calefacción a
todo el distrito.
Los distintos grupos de vivienda incorporan diversas medidas para lograr el consumo de
energía marcado por el plan. Uno de los proyectos más destacados en este sentido es el de
Passiv Haus (Viviendas Pasivas), de las que se han construido 100 unidades; en ellas las
necesidades de calefacción son casi cubiertas con ganancias pasivas y mediante un sistema
técnico de recuperación de calor. También el proyecto de viviendas Energía Plus centra sus
innovaciones en sistemas de ahorro energético, son diez unidades de viviendas pasivas
mejoradas, que producen más energía de la que consumen.
Agua
En cuanto a los mecanismos de recuperación del ciclo natural del agua, se mejoran las
infraestructuras existentes en el barrio, introduciendo un sistema de alcantarillado
separativo. Mediante la distribución de espacios verdes se consigue una filtración de
pluviales al terreno natural en el 80% del área residencial.
Además en una de las cooperativas de vivienda, Wohnen und Arbeiten [Habitar y trabajar],
se ha desarrollado un proyecto piloto de inodoros al vacío, en el que las aguas negras son
conducidas junto a los residuos orgánicos a una planta de biogás en la misma parcela, la
energía obtenida se utiliza en las cocinas. Las aguas grises por su parte, se depuran en una
plantas de filtrado biológico y se devuelven al ciclo natural.
Construcción
Además de las determinaciones relativas al bajo consumo energético el plan de desarrollo
incluía otros criterios relacionados con la edificación, como la obligación de conservar los
árboles existentes y plantar otros nuevos, el uso de materiales ecológicos, de cubiertas
verdes, o de sistemas de filtración de pluviales. Las cooperativas y grupos de vivienda por
su parte han incorporado determinaciones más exigentes en algunos aspectos y han añadido
nuevos criterios como el uso de materiales locales.
Proceso de participación
El proceso participativo organizado por la asociación Fórum Vauban abarca aspectos
informativos, formativos (talleres, visitas, jornadas, festivales) y de decisión (talleres de
diseño).
Otro tipo de talleres realizados con los vecinos son los de diseño de espacios públicos, en
concreto las calles y las zonas verdes y de juego; y el taller para la rehabilitación de un
cuartel como centro comunitario, utilizando el método Planning for Real.
House37
Es el nombre que se le ha dado al centro comunitario. Alberga servicios sociales, como una
guardería, y locales para trabajo comunitario, en los que se reúnen diversos grupos de
jóvenes, mujeres, y relacionados con iniciativas ecológicas y sociales. También actúa como
centro de actividades culturales: teatro, conciertos, conferencias, cine y diversos actos.
Es un grupo constituido en un principio básicamente por estudiantes, pero a los que pronto
se unen desempleados y madres solteras debido al interés del proyecto. Aprovechando el
plan Vauban, proponen la conservación y rehabilitación de los cuarteles, y finalmente
consiguen que se les asignen cuatro para un proyecto de vivienda social en ayuda mutua,
que alberga a unas 260 personas.
Ellos mismos rehabilitan los edificios mediante 24 equipos de construcción. Organizan las
viviendas en 10 apartamentos por edificio, en los que se alojarán de 1 a 10 personas. En las
rehabilitación se procura demoler lo mínimo y las reformas se realizan con materiales
naturales del entorno. El aislamiento de cubiertas y fachadas se realiza mediante celulosa o
planchas de corcho. Se incorporan sistemas de recogida de pluviales mediante cisternas y se
desarrollan diferentes sistemas de reciclaje. Entre las mejoras del entorno que realizan
destaca el campo de juegos para niños, los locales destinados a talleres de trabajo y el
centro social que se sitúa en los antiguos calabozos.
La vieja prisión rehabilitada como centro comunitario funciona como lugar de encuentro,
en el que se realizan las asambleas, y reuniones de diversos grupos, como la cooperativa de
alimentos ecológicos, también tiene una biblioteca, salas de exposiciones, y una cafetería,
en la que se realizan diversos actos lúdicos, como proyecciones de cine.
Por último es necesaria una referencia explícita al desarrollo del proyecto ECOCITY y a la
publicación de sus materiales de difusión, proceso en el que ha participado Carlos
Verdaguer, autor de uno de los textos de referencia utilizados para ilustrar el término
ecobarrio. El proyecto ECOCITY fue patrocinado por la Comisión Europea en el 5º
Programa Marco, y aunque en sus inicios se orientó al estudio de alternativas de movilidad
y transporte sostenibles, fue ampliándose hasta convertirse en un programa integral sobre
sostenibilidad urbana, que ha aportado un marco analítico y conceptual amplio, y ha
desarrollado nuevas técnicas y herramientas para la planificación. Entre 2002 y 2005 se
realizaron los siete proyectos piloto, y en los años siguientes se comenzaron a difundir los
resultados, con la publicación de la versión original del libro en 2008, y su traducción al
castellano en 2009. El libro Proyecto Ecocity. Manual para el diseño de ecociudades en
Europa, consta de dos tomos, el Libro I. La ecociudad: un lugar mejor para vivir, expone
el marco conceptual, la descripción de los proyectos y su evaluación. El Libro II: La
ecociudad: cómo hacerla realidad, expone las directrices para el diseño de una ecociudad,
describiendo indicadores, técnicas y herramientas concretas utilizadas y desarrolladas
durante el proyecto.
Referencias bibliográficas
EMVS (2005) Ecobarrios en Europa. Nuevos entornos residenciales. Empresa
Municipal de Vivienda y Suelo, Ayuntamiento de Madrid.
Forum Vauban e.V. (2002) Construcción del barrio sostenible de Freiburg-Vauban
(Friburgo, Alemania), Experiencia seleccionada en el Concurso de Buenas Prácticas
patrocinado por Dubai en 2002, y catalogada como BEST. En Catálogo de Buenas
Prácticas de la Biblioteca CF+S. http://habitat.aq.upm.es/dubai/02/bp312.html
Rudin, D. Falk, N. (1999) Building the 21st century home. The Sustainable Urban
Neighbourhood. Architectural Press
Torres, V. (2006) «Urbanismo sostenible en Friburg», El Ecologista, 50, diciembre
2006. Madrid
Verdaguer, Carlos (2000) «De la sostenibilidad a los ecobarrios», Boletín CF+S, 14.
Hacia una arquitectura y un urbanismo basados en criterios bioclimáticos. Diciembre de
2000. http://habitat.aq.upm.es/boletin/n14/acver.html
Recursos en internet
ECO-City project: http://www.ecocity-project.eu
Vauban: http://www.quartier-vauban.de
Forum Vauban: http://www.vauban.de / http://www.forum-vauban.de
Passiv Haus: http://www.passivhaus-vauban.de
GENOVA: http://www.genova-freiburg.de
SUSI: http://www.susi-projekt.de/
Haus 37: http://www.haus037.de
Notas
[1]: Este artículo forma parte del trabajo de documentación Glosario de términos clave
relacionados con un urbanismo y una arquitectura más sostenibles realizado en
Departamento de Urbanismo y Ordenación del Territorio de la Escuela Técnica Superior
de Arquitectura de Madrid, desarrollado a lo largo del curso de doctorado Por una Ciudad
más Sostenible. El Planeamiento Urbano frente al Paradigma de la Sostenibilidad bajo la
tutela de Agustín Hernández Aja
[2]: Para un trabajo más reciente de Verdaguer sobre ecobarrios ver Adenda marzo de 2011
en este documento.
[3]: Publicado con motivo de las jornadas del mismo nombre celebradas en Madrid en julio
de 2005.
[4]: Desde 2008 se han lanzado tres ediciones del congreso internacional Ecocity
Conference Ecocity World Summit, en 2011 en Montreal http://www.ecocity2011.com/, en
2009 en Estambul, y en 2008 en San Francisco