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II. El H2O2, que potencialmente es tóxico para la célula, se degrada a H2O y O2 por acción de otra enzima
peroxisómica, “PEROXIDASA”.
PEROXIDASA
H2O2 H2O + O2
Citoesqueleto:
Conjunto de filamentos proteicos que se encargan de otorgar sostén, forma y movilidad a una célula.
Está compuesto por tres tipos de fibras:
Microtúbulos
Microfilamentos
Filamentos intermedios
Microtúbulos:
Son polímeros de una proteína globular, “TUBULINA”. Ésta se presenta en la célula en forma de dímeros,
compuestos por dos tipos distintos: “α y β tubulina”.
La α tubulina, contiene un sitio de fijación a GTP, el cual se hidroliza liberando la energía necesaria para la
polimerización del microtúbulo.
Proteínas MAPs: Los MT ensamblados de extractos celulares ricos en tubulina contienen proteínas asociadas que
mantienen una estequiometria constante con la tubulina tras varios ciclos de polimerización y despolimerización
(MAPs).
Los microtúbulos, son estructuras altamente dinámicas, que sufren un cambio constante de subunidades de
tubulina; se polimerizan por un extremo y se despolimerizan por el otro. Están dispuestos a lo largo de toda la
célula, formando dos retículos distintos:
Los cuerpos basales, funcionan como núcleos de polimerización de las prolongaciones celulares, encargadas de la
movilidad extracelular (cilios y flagelos). Formados por una estructura “9+2”, que consta de 9 pares de
micotúbulos externos dispuestos radialmente y 2 centrales.
Mientras que los centrosomas se encargan de la polimerización de las fibras del huso mitótico y están formados
por una estructura “9+3” (9 microtúbulos externos y 3 centrales, uno de ellos incompleto).
Los centríolos están formados por una estructura “9+0”, 9 tripletes de microtúbulos. Funcionan como sitios de
anclaje de microtúbulos, y al inicio de la división celular forman el huso mitótico que permite el desplazamiento
de los cromosomas que se distribuyen en las células hijas (organizadores de microtúbulos).
Los microtúbulos citoplasmáticos, se encargan de la movilización intracelular, es decir, el desplazamiento de
vesículas a lo largo del citoplasma y además, contribuyen en la determinación de la forma celular. Se disponen
longitudinalmente atravesando íntegramente el citoplasma, constituyendo carriles para el movimiento de las
moléculas a través de éste.
Estas proteínas motoras, constan de dos dominios característicos: una cabeza, que presenta un sitio de fijación a
ATP y otro sitio que asocia a la vesícula a transportar, y una cola que interacciona con el microtúbulo.
Microfilamentos:
Se encargan de catalizar los movimientos contráctiles de la célula e intervienen en la movilidad extracelular lenta.
Compuestos por dos proteínas distintas:
ACTINA: es una proteína globular, capaz de fijar ATP y polimerizarse con otras moléculas formando
filamentos de gran longitud.
MIOSINA: proteína motora de la actina. Está formada por 4 subunidades proteicas, dos cadenas pesadas
que componen los dominios de la cabeza, capaz de fijar ATP y la cola, asociada a actina, más dos cadenas
livianas que conforman el dominio del cuello, encargado de regular la actividad de la cabeza.
Mecanismo de la contracción: inicialmente la miosina no está unida a ATP, por lo que se une en forma laxa a la
actina. Una vez que se asocia con una molécula de ATP, adquiere un estado de rigor sobre la actina, capaz de
generar movimiento.
Posteriormente, ese ATP es hidrolizado y la energía liberada es utilizada por la miosina para desplazarse sobre la
actina, transmitiendo su movimiento a éste. Por último, la miosina libera el ADP+Pi, producto de la hidrólisis del
ATP, y retorna a su conformación laxa.
De membrana: se disponen formando una red que le entrega sostén a la membrana y además conforman
prolongaciones celulares, “seudópodos o lamelipodios”, las cuales se encargan de la movilidad extracelular lenta.
Los seudópodos, están formados por actina, la cual se fija a un sustrato determinado, mientras que la miosina
cataliza la retracción hacia adelante del resto del cuerpo celular. De esta manera, se logra una movilidad lenta y
controlada (característica de protozoos y amebas).
Citoplasmáticos: se encargan de todos los procesos contráctiles en la célula. Por ejemplo: musculares o las
corrientes citoplasmáticas. Estas últimas son movimientos contráctiles coordinados de todo el citosol, que
sirven para el desplazamiento de vesículas o sustancias en las células carentes de citoesqueleto (ej.:
vegetales).
Filamentos intermedios:
Intervienen en el sostén de la célula y la determinación de la forma. Estructuras poco dinámicas, no hay recambio
y son bastante estables. Están compuestos por un conjunto heterogéneo de proteínas, siendo las más
importantes la queratina y desmina.