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UNIVERSIDAD AUTÓNOMA METROPOLITANA, UNIDAD XOCHIMILCO

DIVISIÓN DE CIENCIAS SOCIALES Y HUMANIDADES


DOCTORADO EN CIENCIAS SOCIALES

Incentivos a la Innovación para la Biotecnología


Agroindustrial-Alimentaria en México

Tesis para optar al grado de Doctora en Ciencias Sociales con


especialidad en Economía y Gestión de la Innovación presenta

Marcela Amaro Rosales

Director de Tesis

Dr. Daniel H. Villavicencio Carbajal

México, Distrito Federal a 20 de marzo de 2013


A Nin

Muchas gracias a todas las personas que estuvieron involucradas en este trabajo.
A todos los que aportaron, discutieron y criticaron el tema en el terreno académico
y también a todos los que personalmente me apoyaron de diversas maneras.

Gracias a Dany y Alo por quererme y acompañarme siempre, a Teresita y David


por motivarme a ser mejor y enfrentar nuevos retos. A Esther, Raquel, Fidel y
Leobardo por participar en mi educación desde que nací y a toda mi familia Amaro
y Rosales por su incansable amor hacia mí.

También agradezco a mis amigos por ser parte esencial en mí día a día, Eve,
Anís, Ix, Mara, Orqs y Juanchis, todos tienen un cachito de mi corazón.

Sin duda este camino no hubiese sido lo especial que fue sin la presencia de
Daniel que más que mi tutor es mi amigo. Gracias por creer, por enseñarme, por
confiar y por apoyarme siempre que lo necesite.

Gracias a Alberto y Matías por caminar y por compartir la vida conmigo, por
abrazarme cuando más lo he necesitado, por darme fuerza, por ayudarme a
construir ilusiones, por hacerlas realidad y sobre todo por amarme.

2
Índice

Introducción 11
Capítulo 1. Innovación e Instituciones 25
Introducción
1.1 El proceso de innovación 27
1.2 Sistemas de Innovación: nacional, regional, sectorial y tecnológico 32
1.3 Teoría de las Instituciones 35
1.4 Instituciones e Innovación 38
1.5 Marco institucional 42
Conclusiones 49
Capítulo 2. Incentivos y Barreras a la Innovación 54
Introducción
2.1 Teoría de los Incentivos 53
2.2 Taxonomía acerca de los Incentivos 56
2.3 El problema del Principal y el Agente 58
2.4 Barreras e Incentivos a la Innovación 62
Conclusiones 65
Capítulo 3. Capacidades para el desarrollo científico, tecnológico y de 68
innovación
Introducción
3.1 Capacidades Científicas 69
3.2 Capacidades Tecnológicas 70
3.3 Capacidades de Absorción 73
3.4 Capacidades de Innovación 75
Conclusiones 77
Capítulo 4. Metodología 79
4.1 Selección de la estrategia de investigación 79
4.2 Diseño de la investigación 80
4.2.1 Planteamiento y Debate 80
4.2.2 Objetivos 82

3
4.2.3 Pregunta de investigación 82
4.2.4 Hipótesis 83
4.3 Protocolo para los estudios de caso 83
4.4 Recopilación de datos y fuentes de información 86
4.5 Construcción del sector Biotecnológico Agroindustrial-Alimentario 90
Capítulo 5. Biotecnología en México 92
Introducción
5.1 Definiciones y caracterización 92
5.2 Contexto nacional y composición analítica 95
5.2.1 Empresas 96
5.2.2 Centros Públicos de Investigación e Industria Doméstica de soporte 100
5.2.3 Instituciones de Educación Superior 102
5.2.4 Recursos Humanos 104
5.2.5 Patentes 106
5.3 Perfil tecnológico del sector Agroindustrial- Alimentario 109
5.4 Características de la Innovación en el sector Agroindustrial-Alimentario 114
Conclusiones 117
Capítulo 6. Instituciones relacionadas con la Biotecnología 119
Agroindustrial-Alimentaria
Introducción
6.1 La construcción de un marco institucional para la Biotecnología 120
6.2 Bioseguridad y bioética 122
6.3 Las organizaciones regulatorias a nivel nacional 123
6.4 La legislación internacional y nacional 128
Conclusiones 136
Capítulo 7. Las Políticas Públicas como generadoras de Incentivos 140
Introducción
7.1 La política de ciencia, tecnología e innovación 142
7.2 Estrategias federales 147
7.2.1 Fundaciones PRODUCE 148
7.2.2 Sistema de prestadores de servicios profesionales 149

4
7.2.3 Fondo Sectorial de Investigación en materia agrícola, pecuaria, 150
acuacultura, agrobiotecnología y recursos Fitogenéticos (SAGARPA-
CONACYT-COFUPRO)
7.2.4 Fondos Mixtos 152
7.2.5 Fondo de Innovación Tecnológica SE-CONACYT 153
7.3 Estrategias locales 154
7.3.1 Guanajuato 154
7.3.2 Sonora 159
7.3.3 Yucatán 162
Conclusiones 164
Capítulo 8. Capacidades Científicas y Tecnológicas 171
8.1 Capacidades científicas 171
8.1.1 Guanajuato 171
8.1.1.1 Centros de Investigación 171
8.1.1.2 Recursos Humanos 176
8.1.2 Sonora 177
8.1.2.1 Centros de Investigación 177
8.1.2.2 Recursos Humanos 187
8.1.3 Yucatán 188
8.1.3.1 Centros de Investigación 188
8.1.3.2 Recursos Humanos 193
8.2 Capacidades Tecnológicas 193
8.2.1 Guanajuato 193
8.2.2 Sonora 197
8.2.3 Yucatán 198
Conclusiones 200
Capítulo 9. Capacidades de absorción e innovación 207
Introducción
9.1 Las empresas y los Productos del Sector Agroindustrial- Alimentario 207
9.2 Capacidades de Absorción e Innovación en Gto., Son. y Yuc 209
9.3 Capacidades de Innovación en el Sector Biotecnológico Agroindustrial- 215

5
Alimentario
9.4 Casos Representativos de Innovación en las Empresas 223
Conclusiones 229
Capítulo 10. Conclusiones Generales y Recomendaciones de Política 236
Pública
10.1 Preguntas de Investigación 238
10.1.1 ¿Qué tipo de Instituciones existen? 238
10.1.2 ¿Qué tipo de incentivos se generan? 242
10.1.3 ¿Qué tipo de interacciones existen entre los principales agentes 244
relacionados con la Biotecnología Agroindustrial- Alimentaria?
10.1.4 ¿Cuáles son los agentes portadores de la innovación y qué tipo de 245
innovación se da en el sector?
10.2 Contribuciones y Aportes al Campo de Conocimiento 248
10.3 Líneas de Investigación Futuras 249
10.4 Propuestas y lineamientos de políticas públicas y regulación 249
10.4.1 Leyes y Reglamentaciones 249
10.4.2 Vinculación y Servicios de Calidad 252
10.4.3 Financiamiento y Administración 253
10.4.4Fondos de Apoyo 254
Bibliografía 257
Anexo 277

6
Índice de cuadros

1.1 Dinámica del Marco Institucional


2.1 Modelo básico del principal y el agente aplicado al contexto Biotecnológico
2.2 Modelo ampliado del principal y el agente aplicado al contexto Biotecnológico
2.4 Barreras internas y externas para la innovación
2.5 Estructuras de incentivos
3.1 Antecedentes y resultados de la capacidad de absorción
4.1Planteamiento teórico-metodológico
4.2 Entrevistas realizadas
4.3 Estructura de la investigación
5.1 Características de las empresas biotecnológicas
5.2 Centros Públicos de Investigación CONACYT relacionados con la
Biotecnología
5.3 Distribución de los programas de doctorado en Biotecnología y áreas a fin
5.4 Distribución por área de las patentes otorgadas en México (residentes y no
residentes) en Biociencias y Biotecnología
5.5 Distribución por áreas de acuerdo al tipo de asignatario, para inventores
mexicanos (1980-2007)
5.6 Distribución por área de las patentes internacionales (1990-2008) otorgadas a
inventores mexicanos
5.7 Empresas Biotecnológicas en México por sector o rama industrial
5.8 Distribución de empresas medianas y grandes
5.9 Distribución de empresas micro y pequeñas
5.10 Distribución de empresa por su base tecnológica
5.11 Distribución sectorial de las empresas totalmente basadas en Biotecnología
5.12 Principales áreas de innovación en el sector agroindustrial-alimentario
6.1 Principales actividades de la CNB
6.2 Finalidad de la Ley de Bioseguridad de Organismos Genéticamente
Modificados
6.3 Trayectoria de la Legislación Nacional en Biotecnología

7
8.1 Relación de los proyectos de CINVESTAV-I (1998-2005)
9.1 Empresas de Biotecnología de propagación y/o micropropagación vegetativa
de plantas
9.2 Empresas de Biotecnología basadas en la producción de insumos biológicos o
bioquímicos
9.3 Proyectos del sector agroindustrial-alimentario
9.4 Niveles de Innovación de los Proyectos del Sector Agroindustrial-Alimentario
(FIT)
9.5 Grado de Innovación de los Proyectos del Sector Agroindustrial-Alimentario
(FIT)
10.1 Conectividad en los casos de estudio

8
Resumen

Una de las principales tareas de la Economía a lo largo del tiempo ha sido


identificar las variables que contribuyen al desarrollo de las sociedades. En la
actualidad existen diversos estudios que se centran en la emergencia de las
nuevas tecnologías tales como la nano o la biotecnología, bajo la premisa de que
éstas pueden ser motores de crecimiento económico y de mejoras sociales debido
al potencial que representan.

El desarrollo de la tecnología y su aprovechamiento como una “ventana de


oportunidad” depende no sólo de la propia tecnología, ya que hay factores
culturales, institucionales, sociales y económicos que acompañan a dicho proceso.

Las investigaciones hasta ahora realizadas en el campo de la Economía de la


Innovación dan cuenta de la importancia de la coordinación, la colaboración y la
conectividad pero sobre todo de la coevolución entre las modificaciones
institucionales y el desarrollo tecnológico.

Esta investigación retoma la tradición antes mencionada con la finalidad de


analizar el momento actual de la Biotecnología Agroindustrial- Alimentaria en tres
estados de la República Mexicana: Guanajuato, Sonora y Yucatán.

Se usa el concepto de Sistemas de Innovación, partiendo de la hipótesis que


versa sobre la relación positiva entre desarrollo tecnológico, crecimiento
económico y mejoras sociales. Se pretende constatar lo que sucede en el país a
través del marco institucional, los incentivos y/o barreras con la finalidad de
evaluar el desarrollo de capacidades científicas, tecnológicas y de innovación en el
sector.

9
Abstract

One of the main tasks in economics is to identify the variables that contribute to the
development of societies. Currently there are several studies wich focus on the
emergence of new technologies such as nano or biotechnology, under the premise
that they could become crucial factors in economic growth and social
improvements.

The development of technology and their use as a "window of opportunity"


depends not only on the technology itself, it depends too on cultural, institutional,
social and economic factors that go with this process.

The researchers in the field of economics of innovation point out the importance of
coordination, collaboration, connectivity and especially of the coevolution between
institutional changes and technological development.

This research takes the this tradition in order to analyze the current situation of the
Agro-Food Biotechnology in three states of Mexico: Guanajuato, Sonora and
Yucatan.

The concept of innovation systems, and the hypothesis of the positive relationship
between technological development, economic growth and social improvements
are very important in this work. It aims to find what is happening in the country
between the institutional framework and incentives and / or barriers, in order to
assess the scientific, technological and innovation capabilities in the sector.

10
Introducción

Existen investigaciones que atribuyen buena parte de las divergencias nacionales


o regionales en los patrones de desarrollo, a las formas particulares en las que los
comportamientos económicos se enraízan en redes más amplias de interacciones
sociales e instituciones. Dichas investigaciones argumentan que en los países
avanzados han existido mecanismos que llevaron a la coevolución de las prácticas
científicas, tecnológicas y de innovación con los patrones de organización
empresarial y las instituciones. Lo que derivó en progreso económico sostenido.
Esos mecanismos en parte son el resultado de acciones privadas, pero también
de la voluntad colectiva. A pesar de los diversos estudios sobre el tema, no existe
un tratamiento riguroso de estos procesos para comprender los mecanismos que
promueven o limitan dichas acciones (Nelson, 1995).

Las instituciones en conjunto con los incentivos económicos influyen sobre la


capacidad innovadora de cada país y frente a un determinado conjunto de
oportunidades tecnológicas, su aprovechamiento dependerá tanto de los
mecanismos particulares económicos de inducción (precios relativos, patrones de
demanda, etc.) como fundamentalmente, del grado de ajuste entre esas
oportunidades y las condiciones institucionales, naturaleza de las organizaciones
de I+D, políticas públicas, etc. y las capacidades empresariales existentes en cada
caso (Dosi y Soete, 1988).

Las asimetrías a largo plazo en el desempeño de las diferentes economías


nacionales se refieren a: i) la capacidad de innovar, imitar y adoptar nuevos
productos y procesos productivos; ii) la eficiencia real de los insumos; iii) los
patrones nacionales de producción; iv) las pautas de consumo; v) las formas
institucionales de organización de los principales mercados. Tomando en cuenta lo
anterior, los países pueden clasificarse según la eficiencia de sus técnicas de
producción y las características específicas de sus productos, independientemente
de los precios relativos y de las diferencias en la relación capital/producto, así las
asimetrías en la capacidad productiva se trasladan a la capacidad de innovación
(Cimoli y Dosi, 1994; Dosi, 1991). De acuerdo a lo anterior, hay cuatro vías que
influyen para que estas asimetrías surjan y persistan a través del tiempo: a) la
estructura productiva de cada país; b) las características y estrategias de las
firmas; c) el contexto institucional; d) el conjunto de incentivos económicos
vigentes.

En todo caso, el aprendizaje tecnológico no se relaciona directamente con el


funcionamiento de los mercados sino con los incentivos y oportunidades que
perciben los agentes, que son el resultado de historias particulares de tecnologías,
11
empresas e instituciones. Las líneas de desarrollo tecnológico a nivel internacional
no se determinan por características técnicas propias o ventajas económicas que
correspondan a todos los productores o naciones. Al contrario, son esencialmente
inciertas y dependen del azar, tanto las condiciones sociales e institucionales,
como las estrategias y elecciones de las firmas y las políticas públicas. Al mismo
tiempo, en el contexto de un determinado paradigma tecnológico, una vez definida
la tecnología líder, ella reflejará al menos en parte, las raíces históricas y las
opciones nacionales de una comunidad determinada; esto proporciona cierta
ventaja inicial al país innovador e influye en la configuración de los patrones de
comercio (Dosi, 1991).

Por lo tanto, una de las preocupaciones centrales en los países en vías de


desarrollo tanto de los científicos sociales, como de los policy makers es definir la
tecnología líder y aquellas variables que pueden ser consideradas como las más
significativas en la promoción del crecimiento económico.

La llamada sociedad del conocimiento ha permeado la definición de éstas y sobre


todo ha abierto posibilidades de insertarse en una dinámica donde las
capacidades científicas, tecnológicas y su transformación en innovaciones es
fundamental para lograr avances significativos económicamente. La sociedad del
conocimiento forma parte de un proceso en torno al cual las ventajas de un país o
de una región, se logran mediante el desarrollo de ciertas actividades relacionadas
con la generación de conocimientos que puedan traducirse en procesos de
innovación que incluya niveles tales como, la mejora de procesos y de productos
en áreas que incluyen a las propias organizaciones. El conocimiento ha sido el eje
del crecimiento económico y del aumento paulatino del bienestar social (David y
Foray, 2002), reflejado en la habilidad de innovar y de transformarse continua y
aceleradamente; el ritmo de esto es cada vez más rápido, además ha ido
adquiriendo formas más complejas que exigen distintas maneras de organización
específicas para producir y transmitir el conocimiento por distintas vías.

El conocimiento es en las economías avanzadas, el factor clave del crecimiento


económico; el desarrollo de la ciencia actúa como propulsor de los avances
registrados en el conocimiento, y la capacidad de las sociedades y países para
utilizar ese conocimiento para concebir productos, procesos o servicios nuevos o
mejorados que compitan ventajosamente en los mercados globales, en esencia su
capacidad para innovar, constituyen hoy la fuente de riqueza fundamental de estas
economías (Eaton, 1999).

La dinámica innovadora se ve fuertemente influenciada por las interacciones de


distintos agentes. En la actualidad sabemos que no basta con el desarrollo de uno
12
de los agentes; ya que en el pasado comúnmente se consideraba que el proceso
de innovación tenía lugar principalmente en la empresa y por lo tanto dependía de
la acción deliberada de llevar a cabo actividades internas de I+D. Sin embargo,
estudios recientes junto con la literatura acerca de los sistemas de innovación ha
demostrado que los resultados innovadores son producidos por una serie de
actores como el gobierno y la política de innovación, las universidades y los
desarrollos científicos, los agentes intermedios, los agentes financiadores, entre
otros (Lundvall, 1992; Freeman, 1995, Kim, 1997).

En la mayoría de las investigaciones hechas sobre el tema (Mehra,1999; Adeoti y


Adeoti, 2005), destaca la existencia de una relación generalmente positiva entre
las características de las instituciones y la dinámica innovadora en los países de
alta capacidad tecnológica y de innovación. Del mismo modo destacan la
importancia que han tenido ciertos hábitos y normas de conducta cultural en la
actividad innovadora, así pues se asume que el recurso fundamental en la
economía moderna es el conocimiento y que el proceso más importante es el
aprendizaje (Dosi,1988). El conocimiento difiere en forma crucial respecto de otros
recursos ya que es predominantemente interactivo y por lo tanto es un parte de un
proceso social asociado a un contexto institucional y cultural.

Cabe destacar que en países donde el desarrollo científico y tecnológico es


incipiente, las políticas de innovación implementadas por los gobiernos juegan un
papel fundamental, sobre todo en la creación de estrategias de vinculación entre
los agentes que realizan investigación pública (universidades y centros públicos de
investigación) y las empresas (Adeoti, 2005), además del establecimiento de
incentivos para los distintos agentes.

a. Biotecnología, Instituciones e Innovación

Los diversos estudios realizados acerca de la emergencia de nuevas tecnologías,


su fomento, aprovechamiento y consolidación como ventanas de oportunidad
(Pérez, 2004) las cuales pueden ser aprovechadas para lograr mejores
condiciones económicas de la población, muestran que existen factores
institucionales que se han modificado o han evolucionado a favor de las
tecnologías. En el caso particular de la Biotecnología, los estudios indican que
variables como las políticas públicas de ciencia, tecnología e innovación, la
creación o modificación de incentivos a distintos niveles, el sistema educativo, las
leyes, reglamentaciones y los derechos de propiedad, entre otros, han jugado un
rol muy importante en la promoción y crecimiento de dicha tecnología (Kaiser y
Prange, 2004; Momma y Sharp, 1999; Linskey, 2006; Hsu, et al. 2005;

13
Mehra,1999; Adeoti y Adeoti, 2005; Gittelman, 2006; Dohse,2000; Niosi y Banik,
2005, Van der Valk, 2009).

Las investigaciones mencionadas parten de la idea básica acerca de la existencia


de una relación directa entre las transformaciones institucionales y el impacto de
éstas en la evolución de la tecnología. Desde diversas perspectivas teóricas y
metodológicas, como puede ser el estudio regional o sectorial de la innovación,
bajo el esquema de los sistemas nacionales de innovación (Mehra, 2001, Niosi y
Banik, 2005) o bien desde la idea de un proceso coevolutivo (Linskey, 2006),
destaca que las variables que se consideran coinciden constantemente. En primer
lugar se analizan los cambios en las políticas públicas de ciencia y tecnología,
aunque en ciertos casos se retoma la política industrial (en el entendido de que la
primera es un componente de la segunda) y a partir de contextualizar las
decisiones a nivel macro, se analizan los mecanismos de incentivos, las
modificaciones a los sistemas educativos, las actividades empresariales y
finalmente el marco regulatorio legal, focalizando en el tema de los derechos de
propiedad1 (Ver anexo).

En la revisión literaria destaca que la gran mayoría de los trabajos retoman la


teoría de los sistemas nacionales de innovación (SNI), el enfoque de cambio
institucional, rigideces y barreras. Lo que demuestra cierto consenso en cuanto a
la forma de tratar el tema. Los estudios revisados consideran casi en su mayoría
que la variable institucional juega un papel relevante para comprender la dinámica
de un sector como la Biotecnología.

Para poder comprender y analizar un fenómeno complejo como el que se estudia,


es necesario integrar diversos enfoques. Ya que si bien entre éstos existen
algunas diferencias en el tratamiento que se da al objeto de estudio, en todos se
concluye que la direccionalidad que se manifiesta es gracias al cambio
institucional, entendido éste último como una serie de modificaciones
organizacionales de diversa naturaleza de los agentes relacionados con la
innovación.

Una de las grandes diferencias de los estudios mencionados previamente con el


caso que aquí se analiza, tiene que ver con los resultados obtenidos y con la
temporalidad. Todos los estudios hablan de casos de éxito y en general se
analizan una vez que los hechos han ocurrido, de manera que son descriptivos a
posteriori, sin embargo la evidencia presentada en esta investigación no
1
En el primer cuadro del anexo se presenta una recopilación de algunos de los principales trabajos sobre
Biotecnología en el mundo, a pesar de la divergencia en cuanto a los países analizados, existen muchas
convergencias en el tratamiento teórico de cada uno de ellos.

14
representa regiones exitosas, al contrario, lo que se estudia son los problemas y
desconexiones en el proceso innovador. Otra de las diferencias se relaciona con
las hipótesis planteadas, ya para las investigaciones mencionadas las
modificaciones institucionales fueron factor clave para la modernización de
algunos sectores económicos o bien, para el desarrollo en ciertas áreas. En esta
investigación se contrastará dicha hipótesis con el caso mexicano, el cual presenta
diferencias sustanciales.

Las investigaciones revisadas tampoco hacen una distinción clara en lo que


significa el cambio institucional ya que la mayoría hace referencia a modificaciones
en los elementos organizacionales y en la estructura formal, tal como leyes,
regulaciones o políticas públicas, ninguno toma en cuenta la variable instituciones
informales y la incidencia que éstas pueden tener en el proceso. Esto es
comprensible debido a la dificultad que implica el estudio de normas y reglas
conductuales, pero podrían ser factores importantes para comprender ciertos
aspectos relevantes.

En esta investigación se coincide con la necesidad de retomar a los sistemas de


innovación, el cambio institucional y los incentivos; todos ellos con relación a la
capacidad innovadora en el sector agro-biotecnológico en las regiones elegidas.
Podemos ver que a diferencia de los estudios antes mencionados, esta
investigación tiene un grado de focalización mayor, ya que el objeto de estudio no
es como tal la Biotecnología en el país, aunque cabe destacar que para situar el
tema tanto regional como sectorialmente, será necesario reflexionar desde el
ámbito general al particular. Es por esto que es importante retomar las teorías
generales, después analizar los tópicos utilizados en estudios similares y
finalmente la integración de una propuesta teórica que conjunte los elementos
necesario para analizar el caso que aquí se estudia.

b. Objetivo, Pregunta e Hipótesis de Investigación

El objetivo de esta tesis es determinar si a través de la dinámica institucional


relacionada con el sector biotecnológico agrícola-alimentario se generan
incentivos para el desarrollo de capacidades de innovación. Para dicho fin, se
exploraran las estrategias compartidas, normas y reglas a nivel federal y estatal
(en casos de estudio particulares) para la Biotecnología Agroindustrial -
alimentaria. Además, se busca determinar si la estructura institucional existente
conforma un sistema de incentivos para el desarrollo del sector, de manera que
conozcamos el impacto de todos los anteriores en la generación o no de
innovaciones.

15
Por lo tanto, la pregunta central se refiere a ¿Qué tipo de capacidades y
dinámica de innovación generan los incentivos y las instituciones en el sector de la
Biotecnología Agroindustrial -Alimentaria en los estados de Guanajuato, Yucatán y
Sonora?
Esta investigación se centra en analizar ¿qué tipo de instituciones y
organizaciones existen?, ¿cuáles son sus comportamientos?, ¿qué tipo de
jerarquía se establece entre ellas?, ¿qué tipo de incentivos se generan? y a partir
de ello definir el tipo de interacciones entre los agentes y el tipo de innovaciones
que se generan.

La hipótesis de esta investigación considera que la dinámica institucional


existente en México para la Biotecnología Agroindustrial -alimentaria incentiva el
desarrollo de cierto tipo de actores y capacidades, sobre todo las científicas y
tecnológicas. Sin embargo, existen disfuncionalidades en la relación Instituciones-
Sector que desincentivan la producción de innovaciones. De manera que el
desarrollo de capacidades de innovación es limitado frente al desarrollo de
capacidades científicas y tecnológicas, resultado del tipo de incentivos existentes.

Para poder responder a la pregunta planteada se requiere de un andamiaje teórico


que integre por una parte, los esquemas previamente utilizados como lo son los
sistemas de innovación a sus diversos niveles (sectorial, regional y tecnológico) ya
que ofrecen una base metodológica útil para el estudio de los agentes que
componen lo que comúnmente se denomina como sistema. En segundo lugar se
considera que es necesario profundizar en el papel de las instituciones como
proveedoras de incentivos o barreras para la generación de capacidades a
distintos niveles; por lo tanto es necesario también retomar conceptos como
capacidades científicas, tecnológicas, de absorción y de innovación. De manera
que se pueda evaluar a través de los casos de estudio en Sonora, Guanajuato y
Yucatán cómo es que la estructura institucional local influye favoreciendo u
obstaculizando el desarrollo de distintas capacidades a través de la generación de
incentivos o barreras y qué tipo de correspondencia existe con la estructura
federal, la cual podríamos suponer tiene efectos similares en los tres estados.

En esta investigación nos interesa fundamentalmente analizar si la estructura


institucional provee un marco de incentivos para la generación de capacidades de
innovación. Esto plantea un reto metodológico, ya que obliga a preguntarse ¿cómo
evaluar la capacidad de innovación, o la innovación en términos más generales?
Ya que saber si existen empresas que realizan innovación es necesario, pero no
suficiente. Es necesario definir qué tipo de innovaciones se realizan y para esto
será preciso construir algún tipo de indicador que nos ayude a juzgar el nivel y tipo
de innovaciones en el sector.
16
La base empírica que permea los estudios de la innovación ha dificultado el
esclarecimiento del papel de las instituciones en el avance tecnológico. Los
teóricos de la innovación han planteado que las instituciones importan en la
generación y difusión social de las innovaciones, pero no se ha podido establecer
la causalidad de dicha relación. El uso laxo y poco claro que se le confiere al
concepto de agentes institucionales contribuye de manera importante con esta
confusión. Pero el desconcierto que suscita el concepto de institución no es
privativo de los teóricos de la innovación, incluso las propias escuelas de
economía institucional no comparten un mismo enfoque para el estudio de las
instituciones. No sólo existen diversos enfoques para su estudio (Nelson y Sampat
2001), sino que no existe un consenso generalizado del significado del concepto
de institución ni de lo que debe contener el análisis institucional (Hollingsworth,
2000).

Por mencionar de manera breve sólo algunas interpretaciones conceptuales


construidas a partir de la economía institucional (EI), se refiere que las
instituciones son concebidas como estructuras de gobierno dentro y fuera de las
organizaciones, cuya función primordial es economizar los costos de transacción
de mercado (Williamson, 1996; Coase, 1937/1996). Otras vertientes
conceptualizan las instituciones como estructuras sociales que surgen a partir de
la interacción reiterada de los agentes que las constituyen, logrando equilibrios
evolutivos estables a partir de la conformación de expectativas comunes (Aoki,
2001). Por su parte, algunos teóricos de la llamada vieja escuela de economía
institucional, establece que las instituciones son fundamentalmente hábitos de
pensamiento, que permean en toda actividad de los sujetos ya que influyen de
manera preponderante en la conformación de gustos y preferencias individuales
(Veblen Mitchells). Algunos otros plantean que además de los hábitos y otras
conductas estandarizadas, las organizaciones son en sí mismas un tipo particular
de instituciones ya que se encuentran conformadas por reglas internas (Hodgson,
2007). Finalmente, una corriente muy difundida concibe a las instituciones como
reglas “formales” que se encuentran codificadas en estatutos, reglamentos o
constituciones políticas, y que requieren la fuerza de un agente externo para
sancionar su cumplimiento y reglas informales, donde se incluyen las normas y
convenciones sociales además de las reglas morales, cuya característica principal
es que generalmente no necesitan coerción estatal para hacerse cumplir
(North,1993; Mantzavinos, 2001).

Las diversas corrientes teóricas que conforman la economía institucional, no solo


divergen la delimitación del rango de estructuras o actividades sociales que

17
consideran instituciones. Una diferencia crucial entre ellas es el método que
utilizan para emprender su estudio.

Existe por tanto, un doble problema general para establecer la influencia de los
elementos institucionales en la generación de conocimiento e innovación, que no
sólo repercute en la discusión del contexto propio de los países emergentes. Por
el lado de la teoría de la innovación (TI) no existe un tratamiento teórico
sistemático al respecto, lo que se puede encontrar son múltiples estudios
empíricos sobre empresas, industrias o sectores concretos donde se examina la
relación de algunas variables institucionales en la generación de innovaciones; y
estudios históricos más amplios donde se estudia la conformación de los diversos
sistemas nacionales de innovación (SNI) (primordialmente en países
desarrollados), y por lo general las instituciones son equiparadas a las
organizaciones que intervienen en el proceso. Por su parte, la teoría económica
institucional, aunque ha profundizado notablemente en el desarrollo teórico,
presenta una notable divergencia conceptual metodológica y analítica entre sus
distintas vertientes, lo cual ha impedido que sus resultados nutran los marcos
teórico-conceptuales de otras disciplinas. En términos concretos puede advertirse
que se cuenta con una teoría de la innovación desprovista de una teoría
institucional, y con múltiples teorías institucionales fragmentadas, sin un enfoque
analítico compartido y en debate constante. Contar con una multiplicidad de
enfoques es una fortaleza dado que se puede recurrir a diversos instrumentos
teóricos para comprender fenómenos complejos como el que aquí se estudia, pero
al mismo tiempo puede ser una debilidad dado que al no tener un enfoque
integrado y congruente se corre el riesgo de usar elementos que no son los más
adecuados para analizar el fenómeno.

El planteamiento de esta investigación establece el estudio de la relación entre


instituciones, incentivos y Biotecnología Agroindustrial – alimentaria. En una idea
de causalidad, suponemos que una serie de acciones e incentivos, modifican las
interacciones entre los agentes. Dicha relación es una de las aportaciones de esta
tesis al debate, dado que hasta ahora no se ha considerado un esquema que
integre ambos elementos para estudiar este fenómeno y aunque existen avances
en el uso de la teoría institucional con la teoría de la innovación, consideramos
que aquí se presenta un esquema que puede ayudar a futuras investigaciones.

Lo relevante, no es conocer simplemente como se modifican de manera


descriptiva, sino en qué sentido tiene incidencia real en la generación de
capacidades de innovación en la Biotecnología Agroindustrial -alimentaria en
México, y si bien el estudio aquí presentado se basa sólo en tres estados,
Guanajuato, Sonora y Yucatán, éstos son relevantes en cuanto al desarrollo de
18
Biotecnología Agroindustrial-Alimentaria en el país y por lo tanto nos ofrecen una
visión cercana a la situación de todo el país.

c. La importancia de la Biotecnología Agroindustrial – Alimentaria

La historia del sector agroindustrial- alimentario en México comprende un extenso


número de factores que sin duda son necesarios para conocer el desarrollo del
mismo. Sin embargo, aquí sólo se remitirá a una serie de hechos o hitos
relevantes que ayudan a comprender fundamentalmente los aspectos tecnológicos
del sector.

Es a partir de los años cuarenta y por lo menos hasta 1965 que el sector jugó un
papel fundamental como base del desarrollo económico, ya que proporcionó
alimentos necesarios a la población creciente, así como materias primas para la
industria en expansión (Fujigaki, 2004).

Uno de los hechos más relevantes para el sector agroindustrial – alimentario


referente a la tecnología, es la llamada “revolución verde”. Esta se refiere a un
proceso de mejoras tecnológicas que dieron lugar en el decenio de 1940; esto
incluyó la introducción de variedades mejoradas, el riego y el empleo de
plaguicidas y fertilizantes minerales en los cultivos básicos, junto con inversiones
en infraestructuras institucionales y nuevos programas de investigación (FAO,
1996). Lo anterior tuvo como resultado un incremento de la productividad muy
importante sobre todo para los países en desarrollo, incluido México.

Las investigaciones se limitaron, al principio al maíz y el trigo, pero después se


extendieron al frijol, la papa, hortalizas, sorgo, cebada, forrajes y la ganadería.
Los resultados fueron nuevas variedades resistentes a las plagas, a la sequía y a
los insectos, y con un menor ciclo de desarrollo (Fujigaki, 2004). La revolución
verde en México implicó cambios sustanciales en los sistemas de irrigación, de
investigación; además del desarrollo de paquetes tecnológicos compuestos por:
semillas, abono y maquinaria. Y se acompañó por una serie de créditos para el
desarrollo agroindustrial.

El desarrollo alcanzado se vio mermado en la época de los sesenta gracias al


progreso de la tecnología enfocada a sectores intermedios, entre otros aspectos.
Pero es en la época de los setenta que se presenta un proceso de desarticulación
entre el desarrollo agroindustrial y el industrial que se profundiza a partir de 1980
debido a los desajustes previos, así como a un desarrollo desigual de los
productores resultado del tipo de propiedad y características tecnológicas con las
que contaban.
19
De manera que el sector agroindustrial – alimentario se ha caracterizado por
enfrentar crisis recurrentes en las últimas tres décadas sobre una base de
desigualdad productiva, de retraso tecnológico (Fujigaki, 2004) y de características
no controlables como el clima o las condiciones geográficas.

La década de los años 80 marcó fuertes cambios para el sector agroindustrial-


alimentario mexicano, hubo una importante reducción del gasto público y la
inversión, además de la eliminación de subsidios y créditos que junto con la
eliminación de los precios de garantía y las modificaciones al marco arancelario y
de permisos previos de importación de productos e insumos agroindustriales
(Pérez y Romero, 2002) se tradujeron en condiciones de alta vulnerabilidad para el
sector. Esto significó una tasa de crecimiento negativa promedio de 0.31% debido
al descenso de cultivos básicos como el maíz, frijol, sorgo y cebada (Pérez y
Romero, 2002).

Además de todo lo anterior, el tratado de libre comercio (TLCAN) y las


modificaciones al artículo 27 constitucional tenían como propósito fundamental
atraer la inversión privada al campo, concluir el reparto de tierras e incorporar al
mercado cerca de 103 millones de hectáreas de tierras ejidales y comunales
(Pérez y Romero, 2002).

Es en este panorama que la Biotecnología juega un papel relevante para el sector,


ya que como se ha visto, el sector se ha visto sumergido en una serie de
problemáticas profundas que involucran muy diversos aspectos, pero que al
representar oportunidades similares a las presentadas por la “revolución verde”
nos sitúa ante varias responsabilidades y decisiones, referentes tanto a los
desarrolladores de tecnología como a los potenciales usuarios, sin olvidar el tema
de la transferencia tecnológica, vital para este sector.

Para los fines de esta investigación consideraremos al Sector Agroindustrial-


Alimentario como todo aquello que incluye la producción de alimentos básicos
como granos, semillas, vegetales y frutas. La producción de alimentos y bebidas
(proceso industrial), así como aquellas industrias que transforman productos
agroindustriales, ganaderos o pesqueros, aplicándoles un proceso para su
conservación o bien transformándolos para producir bienes de consumo o
intermedios para la alimentación humana o animal, o para ser utilizados en otros
procesos industriales (SE, 2010).

En la actualidad dicho sector se ha visto modificado gracias a la creciente


actividad de áreas como la Biotecnología, que aunque siempre ha estado presente
20
de una u otra manera en el sector, en recientes etapas ha desempeñado un papel
clave para la generación de nuevos procesos y productos tanto de alimentos
básicos como procesados.

La Biotecnología moderna es vista como una actividad multidisciplinaria


sustentada en el conocimiento de frontera que se desprende de distintas
disciplinas, entre ellas: la biología molecular, la ingeniería bioquímica, la
microbiología, la genómica y la inmunología. Estas disciplinas permiten el estudio
integral de sistemas biológicos que abarcan desde los microbios hasta las plantas
y los animales. La Biotecnología agrupa a una serie de nuevas tecnologías
básicas o genéricas2. La ventaja tiene que ver con el uso productivo de seres
vivos o sus productos y partes; esto permite una extensa difusión y aplicación en
muchas industrias, y particularmente en todas las actividades productivas basadas
en procesos biológicos (OECD, 1989).

Al referirnos aquí al sector agroindustrial-alimentario y la estrecha relación que


mantiene con la Biotecnología, se hace alusión a esta última como el elemento
dinamizador del sector, lo que la convierte en el motor tecnológico con mayor
potencial innovador para los distintos componentes del sector. La Biotecnología
es vista como el principal impulsor tecnológico para realizar innovaciones dentro
del sector agroindustrial- alimentario.

El análisis aquí presentado tiene por objeto de estudio al sector agroindustrial –


alimentario, empero al considerar que el potencial innovador se da a través del
desarrollo biotecnológico, ha sido primordial construir una definición del sector que
incluya el desarrollo tecnológico.

El sector agroindustrial-alimentario relacionado con la Biotecnología está


compuesto por aquellas empresas que desarrollan técnicas, procesos o productos
mejorados genéticamente o basadas en procedimientos moleculares controlados,
además de los centros públicos y los diversos laboratorios y a los pequeños
productores que hacen uso de alguna técnica o procedimiento biotecnológico.

La aplicación de la Biotecnología en este sector se ha concentrado en la cadena


de producción primaria y transformación de productos agrícolas; así como en los
procesos industriales de transformación de insumos agrícolas para la generación
de productos. La Biotecnología se ha orientado a las cuatro fases de la producción
y transformación agrícola: semillas y variedades vegetales derivadas de

2
Tales como la ingeniería genética, la fusión celular, el mapeo genético, la hibridación de ácidos nucléicos, la
amplificación de genes, surgidas de los avances de la biología molecular y celular.

21
mejoramiento tradicional, insumos y sistemas para el manejo agronómico,
productos y procesos para el manejo post-cosecha y procesos industriales de
transformación de insumos agrícolas para la generación de productos (SE, 2010).
En lo que se refiere al área de alimentos, la Biotecnología se ha concentrado en
la generación de procesos integrados de transformación de productos animales o
vegetales, en la producción de ingredientes y en la preparación de alimentos
formulados, además de los sistemas orientados a la preservación de la inocuidad
y la calidad nutricia de los alimentos (SE, 2010)
El sector agroindustrial-alimentario es de vital importancia para el desarrollo
económico y social del país, dado que es un abastecedor de recursos necesarios
para la alimentación del país, además de dotar de insumos para la producción de
otro tipo de productos elaborados. Mientras que la Biotecnología representa una
oportunidad tecnológica que puede ser aplicada y desarrollada para solucionar
problemas que atañen al sector. En términos simples, se puede considerar al
sector (como comúnmente se hace) sólo a las empresas agroindustriales y
alimentarias y a la Biotecnología como la técnica aplicable. Sin embargo, aquí se
trata de construir una caracterización especial basada en el enfoque sistémico,
donde se considere sector a la Biotecnología agrícola-alimentaria y por lo tanto no
sólo a las empresas, sino a otros productores de tecnología como los laboratorios.

d. Estructura de la Tesis

La estructura de esta tesis se divide en tres bloques, el primero se integra por los
capítulos que presentan la discusión teórica y la metodología. En el segundo se
presenta el objeto de estudio, la evidencia y el trabajo de campo y finalmente el
tercer bloque está integrado por las conclusiones generales y las
recomendaciones.

El primer capítulo denominado “Innovación e Instituciones” se concentra en la


presentación de los tópicos sobre la Teoría de la Innovación, los Sistemas de
Innovación y la Teoría de las Instituciones. El objetivo de este capítulo es
presentar la revisión del estado del arte y la discusión en torno a cómo ha sido
tratado el tema de la Biotecnología en diversos estudios. Además de proponer un
esquema teórico que integra parte de la Teoría de la Innovación y la Teoría de las
Instituciones de acuerdo a las necesidades explicativas del fenómeno que aquí se
analiza.

En el segundo capítulo se presenta y discute el tema de Incentivos y Barreras a la


Innovación, se retoman los principales postulados de las Teorías de los Incentivos,
las taxonomías, el tema del principal y el agente y finalmente se concluye con la

22
propuesta de cómo pueden ser utilizados los conceptos de incentivos y barreras
para analizar y explicar a la innovación.

El tercer capítulo se enfoca en el tratamiento de las “Capacidades”. Aquí se


presentan las categorías sobre Capacidades Científicas, Tecnológicas, de
Absorción e Innovación, dado que son las variables fundamentales para esta
investigación.

En síntesis, los dos primeros capítulos constituyen el núcleo central de la


discusión teórica de esta investigación, dado que incluyen las herramientas que
sirven para dar coherencia a los casos estudiados. Mientras que el tercer capítulo
presenta el complemento en cuanto a aquello que constituye el objeto de estudio.

La metodología se presenta en el capítulo 4 y allí se despliega detalladamente


cuál fue la estrategia y diseño de la investigación teórica y prácticamente. Además
de explicar cómo se planearon y llevaron a cabo los estudios de caso, la
recopilación de la información. Finalmente se expone la construcción del sector
denominado Biotecnológico Agroindustrial- Alimentario, ya que como se ha
mencionado previamente ha sido necesario establecer claramente a que nos
referimos en esta investigación cuando hablamos de “sector” considerando las
diferencias del concepto con lo que en la economía se entiende comúnmente.
Además este capítulo trata de ser el enlace entre la parte teórica y la presentación
de la evidencia, busca ser una especie de bisagra que ayude a comprender cómo
es que los conceptos teóricos desarrollados previamente servirán para analizar el
objeto de estudio.

El segundo bloque se compone de cinco capítulos, el primero de ellos o capítulo 5


contextualiza a la Biotecnología en México, de manera que se presentan una serie
de definiciones para caracterizar lo que significa la Biotecnología en el sector
agroindustrial – alimentario, se construye el perfil tecnológico y se delimitan lo que
consideramos como “innovación” en el sector. Esto constituye un complemento a
la parte metodológica y muestra algunos datos sobre las características en el país,
lo cual servirá para entender el contexto de los tres casos de estudio.

El capítulo 6 “Instituciones relacionadas con la Biotecnología Agroindustrial –


Alimentaria” se construye con el análisis de lo que aquí hemos llamado como
marco institucional, se presenta la evidencia hallada en torno al tema, los cuales
incluyen un apartado sobre bioseguridad y bioética, uno más sobre las
organizaciones regulatorias a nivel nacional y sobre la legislación internacional y
nacional.

23
En el capítulo 7 se analiza cómo es que las políticas públicas se instauran en
México como generadoras de incentivos o barreras. Por lo que el capítulo
presenta un primer apartado sobre la política científica, tecnológica y de
innovación puntualizando en los temas referentes a Biotecnología Agroindustrial –
Alimentaria. Los siguientes apartados hacen un análisis de las estrategias
federales y locales referidos al mismo tema y concentrándose en la coherencia
entre los distintos niveles de gobierno.

Si bien el tema de capacidades fue presentado en un solo bloque en la primera


parte de la investigación, en la presentación de los casos ha sido necesario
dividirlo en dos capítulos. Esto responde al tipo de información a la que se pudo
acceder y a la forma que se construyo el objeto de estudio. El capítulo 8 concentra
la información y análisis referente a las capacidades científicas y tecnológicas.
Cada apartado a su vez es dividido en los tres estados analizados ya que si bien
no se pretende hacer una comparación, esto ayuda a evaluar los avances y límites
de cada uno de ellos.

En el capítulo 9 se analizan las Capacidades de Absorción y las de Innovación en


dos niveles, en el primero se retoman los casos de estudio y en el siguiente
apartado se presenta el análisis de las capacidades en el sector a nivel país.

El tercer bloque contiene el capítulo 10 en el cual se presentan las conclusiones


generales haciendo referencia a los objetivos, hallazgos, alcances y limitaciones
de esta investigación. Y un apartado final concentrado en las propuestas y
lineamientos de políticas públicas y regulación que se desprenden del análisis
aquí presentado.

24
Capítulo 1
Innovación e Instituciones

Introducción

El objetivo de este primer capítulo es presentar los elementos teóricos que


permitirán abordar el tema de investigación de esta tesis y los cuales nos
proporcionan la justificación, pertinencia y relevancia de lo que aquí se propone
investigar.

Este capítulo sitúa en un contexto amplio aquellas propuestas teóricas que han
sido utilizadas para el estudio de tecnologías emergentes como lo es la
Biotecnología, básicamente se exponen las características primordiales del
proceso de innovación. Una vez definidas dichas características, nos hemos
centrado en aquellas teorías que consideran a la innovación como un proceso
complejo que involucra no solamente a los aspectos técnicos y tecnológicos, sino
que mira a la innovación dentro de un entramado de relaciones entre distintos
agentes y que a su vez, esto implica cambio y adaptación al entorno.

Los enfoques que aquí se presentan han sido seleccionados gracias a que
consideran a la variable “institucional” como uno de los elementos fundamentales
para entender el proceso de innovación. Sin duda, existen muchos acercamientos
al tema de la dinámica innovadora, ya sea bien desde la empresa, desde la
relación entre el conocimiento básico y su aplicación, desde la relación
universidad- empresa o desde las políticas públicas. Sin embargo, aquí nos
interesa introducirnos desde el tema de las relaciones entre diversos agentes y la
construcción de un marco institucional3 que permite o restringe mediante distintos
incentivos la construcción de capacidades de innovación en un sector4,
proponiendo una visión más amplia de lo que significan estas capacidades
innovadoras.
La década de los años 70 marcó la aparición de las primeras empresas dedicadas
a la Biotecnología. Países como los Estados Unidos, algunos europeos y Japón
cuentan con una larga historia en la formación de empresas de este tipo. La
diferencia entre el primero y el último es que para el año de 1995 en Japón no

3
El tema de lo que en esta tesis se entiende por marco institucional será desarrollado al final del presente
capítulo, al presentarse ampliamente una discusión en torno a las instituciones y lo que aquí se propone como
concepto de análisis para el estudio de la Biotecnología Agrícola-Alimentaria.
4
Existe una amplia discusión en torno a si la Biotecnología puede ser considerada un sector económico que
aún no tiene conclusiones definitivas. Por decisión metodológica y gracias a que aquí se hace referencia
principalmente a la Biotecnología Agroindustrial -Alimentaria y por lo tanto a un número menor de técnicas y
procedimientos tecnológicos aplicables a lo relacionado con las semillas y los alimentos, se ha convenido
denominarlo como sector.

25
existía aún ninguna empresa de base biotecnológica, mientras que en USA había
alrededor de 250 bioventures, sin embargo en poco tiempo Japón logro establecer
una estrategia de desarrollo biotecnológico que condujo a un crecimiento
importante a corto plazo. Lo anterior ha llevado a una serie de investigaciones y
discusiones en torno a la posibilidad de construir un ambiente institucional a nivel
nacional que permita y fomente a través de las instituciones cierto cambio de
costumbres, de actividades, de percepciones y de acciones en este caso
referentes a la innovación (Linskey,2006).

Las diferencias en la dinámica en torno al desarrollo de capacidades científicas,


tecnológicas y de innovación en la Biotecnología son las razones por las cuales
autores como Marsh (2003), Hsu.et al (2005), Adeoti (2005), Niosi y Banik (2005)
consideran que, las características institucionales de cada país o región, son un
factor determinante en la creación de incentivos que modifican los ambientes,
conductas y relaciones en torno a la innovación.

Lo planteado anteriormente ha generado diversas discusiones; una de ellas tiene


que ver con la direccionalidad de los eventos, si es que las instituciones afectan
directamente a los actores, si los actores son los que modifican a las instituciones
o bien si existe un proceso de “mutua determinación o coevolución” como ha sido
comúnmente nombrado por algunos. De acuerdo con Dasgupta y Stiglitz (1980) el
establecimiento de un ambiente institucional favorable, debe acompañarse de
acciones simultáneas empresariales, de manera que exista determinación desde
el ambiente institucional a las empresas y de las empresas al ambiente nacional.
En esta investigación se plantea considerar no solamente a las empresas, sino a
todos los actores sociales involucrados. Esto es justamente lo que Linskey (2006)
en el caso de Japón denomina como un proceso de coevolución 5 a partir de
transformaciones institucionales como: los cambios en la legislación, la política, la
transferencia de tecnología, etcétera.

El marco institucional de un país es un importante factor determinante del


empresariado, del capital de riesgo, de la colaboración universidad-industria y de
los spin- off. Una de las funciones básicas de las instituciones es proveer de

5
El concepto de coevolución en biología se refiere a un proceso de adaptación evolutiva mutua producida
entre dos o varias especies de seres vivos, como resultado de su influencia recíproca por relaciones como la
simbiosis, el parasitismo, la competencia, la polinización, el mimetismo o las interacciones entre presa y
depredador. Por lo que al usarse en ciencias sociales debe hacerse con cierta cautela, ya que es los procesos
sociales guardan distancia con los procesos mencionados y es muy difícil equiparar unos y otros. Dicho
concepto ha sido usado por diversos autores como Nelson, 1994; Rosenkopf yTushman, 1994; Van de Ven y
Garud, 1994; Murman, 2003)

26
incentivos a través de normas y regulaciones (Scott, 1995; Edquist yJohnson,
1997)6

Bajo las anteriores consideraciones se parte de que las organizaciones son el


principal vehículo para el cambio tecnológico (Winter, 1990) y éstas son
fundamentalmente las empresas encargadas de realizar innovaciones, sin
embargo existen más actores igual de importantes para el proceso.

Otro de los intereses del presente capítulo es definir cómo las Instituciones
establecen incentivos para generar cierto tipo de comportamientos que no existen,
o bien para reforzarlos en caso de que los haya. Partiendo de la consideración de
que en países como México es fundamental que exista un proceso de generación
de incentivos para el desarrollo de innovación en la Biotecnología agrícola-
alimentaria, dado el comportamiento y los resultados hasta ahora observados.

La construcción de un esquema teórico que nos ayude a explicar el problema de


investigación que aquí se trata, pasa por una serie de discusiones en torno a
temas que hasta ahora no han sido resueltos adecuadamente para entender el
proceso de innovación en la Biotecnología.

El tema institucional ha sido tratado por diferentes especialidades y para diversos


fines, por lo tanto, se ha complicado concertar una única definición que sea útil
para todos. Hasta ahora no existe consenso acerca de lo que se habla cuando se
trata el tema de las Instituciones. Esto puede ser una desventaja dado que se
necesita hacer un largo recorrido para encontrar una concepción que se adapte a
las necesidades del problema a tratar, pero lo mismo representa una ventaja ya
que de acuerdo al problema que se analice se puede utilizar alguna de las
definiciones existentes o bien construir una a partir de diversos autores.

En esta investigación no se pretende tratar a profundidad las distintas


concepciones sobre Instituciones y tampoco discutir la pertinencia de cada una de
ellas o los debates internos que existen acerca del tema. Aquí se han
seleccionado y retomado algunas de las aportaciones que se consideran más
relevantes para esta investigación, y sobre todo se ha puesto especial atención en
aquellas que tocan el tema de los incentivos en las decisiones tanto individuales
como colectivas7.

1.1 El Proceso de Innovación


6
Traducción propia
7
Para conocer más sobre el tema Institucional se puede recurrir a Aoki (2001), Hodgson (2007) y Rutherford
(1994)

27
El concepto de innovación ha sido tratado desde diversas perspectivas, en general
la teoría económica evolutiva considera a la innovación como la aplicación y el uso
de nuevas ideas, conceptos, productos, servicios y prácticas, con la intención de
ser útiles en el incremento de la productividad y tiene lugar principalmente en la
empresa. La innovación está inserta en procesos de mercado, ya que son éstos
procesos los que determinan las ganancias y los recursos para la innovación; pero
también tiene una fuerte conexión con la ciencia y la tecnología desarrollada por
las universidades o laboratorios. De manera que la innovación es la intersección
de los sistemas de ciencia y tecnología (CyT) con los procesos de mercado
(Metcalfe y Ramlogan, 2008). De acuerdo con Jorde y Teece (1990) “la innovación
es búsqueda, descubrimiento, desarrollo, mejora, la aprobación y comercialización
de nuevos procesos, nuevos productos y nuevas estructuras organizativas y
procedimientos”.

Gracias a la importancia que ha ganado en el mundo la concepción de que la


innovación es un factor clave en el desarrollo de las economías (Nelson, 1993) y el
conocimiento es el más importante de los recursos y por lo tanto, el aprendizaje el
proceso más relevante (Lundvall y Jhonson, 1994) es que se ha reconsiderado a
la innovación como un proceso que implica interacción y comunicación constante
entre los miembros no sólo de la organización o empresa, sino como un complejo
proceso social.

Al considerarse como un proceso complejo, la innovación es vista como el


resultado de procesos interactivos donde las empresas utilizan recursos propios y
externos a través de la cooperación y coordinación con otros actores de su
entorno (Villavicencio y López, 2009). Por lo tanto, aunque las empresas son un
importante depositario de conocimiento, no son las únicas (Casas y Dettmer,
2008). La innovación es vista como un proceso social que evoluciona con mayor
éxito si está inserta en una red en la que existen interacciones intensivas entre
oferentes y compradores de bienes, servicios, conocimiento y tecnología, incluidas
las organizaciones del sector público que promueven la infraestructura de
conocimiento, tales como las universidades y las organizaciones gubernamentales
(Cimoli, 2000).

El concepto de innovación ha ido evolucionando a lo largo del tiempo y gracias a


la amplia discusión que ha existido, se ha re-conceptualizado entendiéndolo como
un proceso complejo donde el aprendizaje es un elemento fundamental para su
comprensión, además de las interacciones que surgen entre los actores.

28
La innovación se refleja en procesos o productos y existe una caracterización de
acuerdo al tipo de innovación que se realice. En general se han definido dos tipos
de innovaciones, por un lado las denominadas innovaciones radicales, las cuales
implican un cambio o introducción de un nuevo producto, servicio o proceso que
no se conocía antes y en segundo lugar las innovaciones incrementales,
referentes a la creación de valor agregado sobre un producto ya existente
mediante mejoras o modificaciones.

La innovación adquiere importancia económica sólo a través de un proceso


extensivo de rediseño, modificación, y pequeñas mejoras que lo convierte para el
mercado de masas y para la producción por medio de nuevas técnicas de
producción masivas (Rosenberg, 1976).

Los procesos de la innovación pueden ser cognoscitivos, organizacionales y/o


económicos; generalmente suceden en condiciones de incertidumbre en el
sistema capitalista y en medio de la competencia. Pavitt (2004) define tres amplios
subprocesos que se traslapan dentro de la innovación: la producción del
conocimiento; la transformación del conocimiento en productos, sistemas,
procesos y servicios; y el emparejamiento continuo del último a las necesidades y
a las demandas del mercado. De manera que las tendencias dominantes son: la
especialización del aumento en la producción del conocimiento; la complejidad del
aumento en artefactos físicos, y en las bases de conocimiento que las sostienen; y
finalmente, las dificultades de equiparar oportunidades tecnológicas con
necesidades del mercado y prácticas organizacionales.

Todo lo anterior ha dado pauta a reconsiderar el desarrollo económico y se ha


definido como un proceso multifacético, en el cual el cambio tecnológico, las
características de las firmas y sus comportamientos, además de las instituciones
son vistos como los factores que modelan patrones de desarrollo específicos. Es
en este contexto que se analiza ¿cómo se generan y difunden las innovaciones?,
¿a qué estructura de incentivos se enfrentan los agentes y la organización
interna?, además de las competencias y estrategias empresariales e
institucionales en las cuales los agentes están enraizados socialmente y que
restringen y guían tanto la coordinación microeconómica como el cambio macro
(Dosi et al. 1994b).

Como se ha mencionado previamente el tema de la innovación es visto como un


proceso complejo que implica el análisis de diversos tópicos. Autores como Dosi
(1994) y Lundvall (1992) destacan el hecho de que para entender la dinámica
innovadora es necesario analizar los aspectos organizacionales e institucionales,
así como las normas, hábitos, rutinas y prácticas (Edquist y Johnson, 1997). De
29
manera que la innovación puede verse también como un proceso que resulta del
aprendizaje interactivo y la acumulación de conocimientos, el cual puede ocurrir en
organizaciones sociales, empresas o universidades, entre otros (Lundvall, 1992).

Sin embargo y a pesar del avance en cuanto al entendimiento de lo que es y lo


que implica la innovación, existen varias críticas. En primer lugar destaca la falta
de consenso, ya que si bien el concepto de innovación como ha sido explicado
aquí es útil para comprender procesos de innovación en industrias y sectores de
alta tecnología, aún es complicado su uso en industrias tradicionales, donde
también existe innovación (Doloreux, 2002) o bien en países en desarrollo donde
existen características divergentes en algunos puntos, por lo tanto su uso como
herramienta analítica se ve cuestionado. Esto impacta a la presente investigación,
dado que las condiciones bajo las cuales se desarrolla una industria o sector de
alta tecnología son diferentes a las que muestran los estudios típicos.

En segundo lugar y también un problema de carácter metodológico, está


relacionado con la visión gradual y descriptiva del concepto, en general se ha
usado para analizar procesos ex – post, por lo que su capacidad explicativa
generalmente se usa para definir si hay o no innovación y en qué grado, más que
en un entendimiento complejo del proceso que allí sucede.

Finalmente y como el punto que aquí más interesa, es el problema en cuanto la


propia definición de innovación. En general, las investigaciones pioneras y las más
destacadas en cuanto al tema provienen de países desarrollados, donde existen
premisas distintas sobre los actores y las interacciones que allí surgen. La
innovación continuamente es asociada con actividades que toman lugar en la
frontera tecnológica, por lo tanto se le otorga un papel muy importante a lo que
sucede en el proceso científico, tecnológico, de investigación y desarrollo
(Mytelka,2000), pero esto deja en segundo plano la innovación imitativa o a la
innovación incremental. Sin duda, estos elementos son importantes para los
países en vías de desarrollo, ya que el proceso de innovación tiene características
diferentes a la dinámica de los países desarrollados donde las políticas
nacionales, los procesos de transferencia de tecnología, el proceso
organizacional, el desarrollo de incentivos y el establecimiento de relaciones de
cooperación juegan un papel muy relevante para la innovación. Aunque existen
propuestas (Villavicencio y López, 2009; Dutrénit y Dodgson, 2005; Cimoli, 2000;
Casas y Dettmer, 2008 y Valenti, et al. 2008) para construir una concepción
común en torno a cuáles son esas particularidades del proceso de innovación en
los países en desarrollo, aún no existe consenso acerca de lo que implica y mucho
menos un desarrollo conceptual, sin que esto signifique que no exista cierto
avance en la discusión.
30
Lo que se necesita es un concepto más amplio que perciba a la innovación como
un proceso de aprendizaje continuo, en el que se considere también a las
empresas que implementan cambios en el diseño, producción y comercialización
de bienes y servicios que son nuevos para ellos, aunque no necesariamente
nuevos en comparación con sus competidores nacionales o extranjeros (Mytelka,
2000). Un concepto del proceso de innovación, que abarque la mejora continua en
el diseño del producto y la calidad, los cambios en la organización y rutinas de
gestión, la creatividad en el marketing y las modificaciones al proceso de
producción (Mytelka, 2000). Aunque desde nuestra perspectiva, lo realmente
importante es situar a la innovación no como una meta en sí misma, sino como
una posible respuesta a problemas de la sociedad. Por lo tanto, la lógica de un
sistema de innovación debería construirse para la resolución de problemas locales
(Antonelli, 2001) que son resultado de problemas de mercado y problemas de la
CyT, pero que ganan importancia siempre y cuando estén estrechamente unidos
con una necesidad social.

Lo anterior, sin olvidar que el contexto global define gran parte de las interacciones
de unos países con otros y sobre todo existen fuerzas inevitables que determinan
los parámetros de actuación de los actores nacionales que se ven involucrados en
los procesos de innovación (Metcalfe y Ramlogan, 2008). Ya que el proceso de
innovación es complejo, es necesario considerar distintos niveles, desde el
mercado, la dinámica de producción de conocimiento, la transferencia del mismo,
la producción tecnológica, las barreras a la innovación, los aspectos culturales y
sociales, las políticas públicas, y los contextos regionales, nacionales e
internacionales.

En esta investigación proponemos el uso de un concepto que vaya más allá de la


empresa, buscamos ampliar la concepción de innovación y a la vez retomar lo que
hasta ahora se ha dicho. La innovación es el proceso constante de aprendizaje
que resulta de la interacción de diversos actores a nivel interno y externo y que
involucra la aplicación y el uso de nuevas ideas y conceptos en la modificación de
procesos, productos, servicios y prácticas con impacto en el desempeño de la
organización, ya sea empresa u otra organización y que necesariamente implica
cambio y cuyo fin es la resolución de un problema de la sociedad específico.

Este proceso es contextual y puede desglosarse en varios niveles: el nivel micro


analítico que refleja el proceso de cambio en las pequeñas unidades como los
agentes o las organizaciones. El nivel meso que considera a la innovación que
tiene lugar gracias a la relación entre diversos agentes en una región o sector; y el
nivel macro que surge en el esquema nacional.
31
Así pues, el tema de la innovación ha sido planteado como un gran tema que
implica el estudio no sólo del cambio tecnológico o la tecnología por sí misma, sino
que se ha tratado de contextualizar la relación que esto tiene con los distintos
actores involucrados. Lo anterior ha dado pauta a diversos enfoques de análisis
que integran al estudio de la innovación variables de tipo organizacional e
institucional. En el siguiente apartado se abordan los principales planteamientos
ofrecidos para el entendimiento de la innovación como parte de un esquema
complejo de interacción. Cabe destacar que no se abordan todas las propuestas
existentes, ya que está concentrado en aquellos que se consideran relevantes
para esta investigación.

1.2 Sistemas de Innovación (Nacional, Regional, Sectorial y Tecnológico)

Una de las aportaciones más completas para el estudio de la innovación a


distintos niveles la proporciona el cuerpo teórico de los sistemas de innovación. En
el siguiente apartado se presentan los principales conceptos de allí surgidos y un
análisis detallado de lo que se considera puede ser utilizado para esta
investigación.

Para Dahlman y Frischtak (1993) “un sistema de innovación es la red de agentes y


el conjunto de políticas e instituciones que afectan la introducción de tecnología
nueva para la economía”.

Un sistema de innovación se constituye por un conjunto de instituciones y agentes


que contribuyen al desarrollo y difusión de nuevas tecnologías. Además de que se
establece un marco gubernamental que dota de políticas para influir en el proceso
de innovación. Es un sistema de instituciones interconectadas para crear y
transferir los conocimientos, habilidades y artefactos que componen a las nuevas
tecnologías (Carlsson, 2006).

El concepto de sistemas de innovación ha sido diversificado, dependiendo de la


característica relevante. La connotación “nacional” sirve para ejemplificar la
dinámica que existe dentro de un país, la “regional” brinda elementos para estudiar
los elementos característicos bajo cierto espacio geográfico. Mientras que lo
sectorial y tecnológico sirve para particularizar si se habla de una industria o sector
sin importar las características de localización. Pero en general se parte de la
misma premisa, bajo ciertas consideraciones.

El concepto de Sistemas de Innovación recoge aportaciones de concepciones


previas tales como: los distritos industriales, medio innovador y regiones de
32
aprendizaje (Doloreux, 2002). Y retoma elementos de la discusión en la teoría
económica evolutiva, la economía institucional, la nueva economía regional,
economía del aprendizaje, economía de la innovación y teoría de redes.

El primer concepto surgido es el de Sistema Nacional de Innovación (SNI); este se


compone por los elementos y relaciones que interactúan en la producción, difusión
y uso de conocimiento nuevo y útil desde el punto de vista económico que están
localizados en una región determinada al que se concibe como el conjunto de
agentes, instituciones, articulaciones y prácticas sociales vinculados a la actividad
innovadora al interior de un país (Lundvall,1992). Esta caracterización pone
especial atención al papel de las normas sociales y a las trayectorias históricas del
sistema, por lo que ha sido considerada como la visión histórica del concepto
(Doloreux, 2002).

Para Nelson (1993) el SNI se centra en la interacción entre el sistema de


producción y el proceso de innovación, considerando primordialmente el papel de
los actores institucionales que tienen influencia en el proceso y en los mecanismos
de soporte. Esta visión ha sido considerada como la perspectiva institucional
(Doloreux, 2002) ya que pone énfasis en las relaciones entre las firmas y el
ambiente institucional y considera que los diferentes configuraciones
institucionales y los distintos roles que tienen las instituciones en la generación de
capacidades de innovación son el factor crucial para entender el proceso.

De manera que en términos generales un SNI pretende comprender cómo se


genera conocimiento, cómo se difunde y cómo se transforma en tecnología
(Martínez, 2008).

El Sistema Sectorial de Innovación (SSI) está compuesto por un grupo de agentes


tanto de mercado y no mercado, de interacciones para la creación, producción y
venta de productos sectoriales. Un sistema sectorial tiene una base de
conocimientos, tecnologías, insumos potenciales o existentes de la demanda. Los
agentes son individuos y organizaciones en diversos niveles de agregación, en
particular los procesos de aprendizaje, competencias, estructura orgánica, las
creencias, comportamientos y objetivos (Malerba,2004).

Para esta investigación resulta relevante el concepto de Sistema Regional de


Innovación (SRI), entendido como un sistema en el que empresas y demás
organizaciones participan sistemáticamente en el aprendizaje interactivo a través
de un marco institucional en un entorno caracterizado por el arraigo (Cooke, et al
1998) y Asheim e Isaksen (1997) añaden que un sistema de innovación (regional)
se compone de una estructura de producción (técnica y económica) y una
33
infraestructura institucional (estructuras político-institucional). Debido a que
consideramos que los elementos que constituyen el concepto de SRI son
especialmente útiles para esta investigación, se ahondará en comprender todos
los componentes y la dinámica de este tipo de sistemas.

El concepto de SRI involucra una serie de premisas en torno al proceso de


innovación y considera a factores internos y externos de la empresa, la
reproducción del SRI depende no sólo del stock de conocimiento creado por las
empresas y las instituciones, sino de las formas en que esas organizaciones
interactúan en un determinado ambiente (Doloreux, 2002). Los principales
elementos que componen al SRI son: las empresas; las organizaciones8como las
universidades, el gobierno y los agentes intermedios encargados de coordinar el
uso del conocimiento. Además de la infraestructura de conocimiento (física y
organizacional de soporte) y finalmente la política orientada a la innovación
regional encargada de proveer una serie de incentivos para incrementar el
esfuerzo innovador, a través de políticas de difusión de la tecnología, programas
de promoción o planes específicos.
Además de los elementos que componen al sistema, los principales mecanismos
internos son:
o Aprendizaje interactivo el cual se refiere al proceso de generación de
conocimiento compartido por los actores innovadores como las empresas y
las organizaciones, a través de rutinas organizacionales y convenciones
sociales.
o La Producción de conocimiento que implica un proceso constante de
retroalimentación entre los actores del sistema.
o La Proximidad de los actores, ya que para el SRI es muy importante la
interacción entre agentes que se localizan en una misma zona
(aglomeración) y que comparten un marcó general que regula sus
actividades. Además de el bajo costo que implica la comunicación y
transferencia de conocimiento y finalmente el compartir conceptos sociales
y culturales.
o Integración Social. Esto refleja el papel que desempeñan las relaciones
personales y las redes que se forman, y que sólo puede darse a través del
compartir un contexto institucional, social y cultural ya que se construyen
valores propios

Los elementos y mecanismos que considera el SRI junto con algunas


consideraciones de los SSI son muy importantes para esta investigación, ya que el
8
Es necesario mencionar que para algunos autores no existen diferencias entre organizaciones e instituciones,
por lo que algunos le denominan indistintamente. La discusión del capítulo 2 considera la diferenciación entre
ambas, por lo cual aquí se nombran como organizaciones.

34
estudio de la Biotecnología Agroindustrial -alimentaria en Guanajuato, Sonora y
Yucatán nos permitirá retomar metodológicamente lo aquí presentado. A pesar de
que existen algunos problemas de definición, ya que de la misma manera como
sucede con el concepto de innovación, tampoco existe consenso en lo que se
considera una región. En este caso específico retomaremos la propuesta
administrativa de considerarla en términos de los límites de organización de
acuerdo a la federación y los estados, más que a la idea de construcción social
compartida. Esta es una definición operativa que nos permite referirla como una
entidad “político – administrativa” y que en términos metodológicos nos ayuda en
el análisis del sistema normativo, político y regulatorio.

Hasta aquí se ha presentado una revisión sintética de las principales propuestas


para el estudio de la innovación. Se ha focalizado en aquellas que consideran a la
variable institucional dentro del complejo proceso que implica el desarrollo
tecnológico y la innovación. También debe mencionarse que existen propuestas
como los llamados bloques de desarrollo (Carlsson y Stankiewicz, 1991; Dahmen,
1989) y los marcos para la innovación (Lynn, et al. 1996) los cuales han sido
revisados, pero se considera que con las propuestas aquí retomadas se logra
situar el tema en un contexto general.

A pesar de los matices de cada una de las definiciones resulta relevante la


conceptualización que proponen, ya que ofrecen un esquema útil para comprender
la dinámica innovadora. Sin embargo, aunque el tema de las interrelaciones entre
los diversos agentes e instituciones es retomado de diversas maneras, no existe
un tratamiento riguroso acerca de la direccionalidad de dichas relaciones o
determinantes del comportamiento. En esta investigación, es relevante conocer
además del proceso de innovación, las posibles barreras y sobre todo la influencia
que puede tener la construcción de un marco institucional que proporcione los
incentivos adecuados para el fomento a un sector o una tecnología. Por lo que es
importante destacar algunos elementos sobre los sistemas de innovación e
introducir componentes de la teoría institucional. Lo que se pretende es integrar
una propuesta teórica que retome elementos de los sistemas de innovación, así
como del institucionalismo. En este primer capítulo nos centraremos en un primer
intento de conjuntar un marco general que será complementado con elementos
específicos en el segundo capítulos sobre los componentes y la dinámica aquí
planteada.

1.3 Teoría de las Instituciones

Existe amplio reconocimiento acerca de la importancia que tienen las instituciones


en el proceso de innovación, como un elemento que articula y ordena las
35
expectativas de los distintos participantes y determina su rango de acción, así
como sus posibilidades estratégicas (Morales et al, 2010).

No obstante, como se mencionó previamente, los estudios que hasta la fecha han
abordado la importancia de los factores institucionales en la perspectiva de la
teoría de la innovación, en su mayoría son estudios empíricos insertos en el marco
teórico de los Sistemas de Innovación. En ellos generalmente se equipara a las
instituciones con organizaciones (empresas, agencias gubernamentales,
universidades, etc.), y no se cuenta con un desarrollo analítico generalizable que
explique la incidencia de los factores institucionales en el proceso de innovación.
Mientras que la economía institucional ha desarrollado distintas corrientes
analíticas que estudian el proceso de conformación y desarrollo de las
instituciones, pero han dado poca prioridad al estudio de la innovación. Además no
existen consensos epistemológicos, metodológicos y analíticos al interior de la
economía institucional, lo que dificulta un tratamiento sistemático del tema
(Morales et al, 2010).

Bajo los supuestos de la teoría neoclásica, se asume que cada agente tiene la
capacidad de tomar decisiones adecuadas debido a que cuenta con información
completa y por lo tanto el mercado asigna eficientemente los recursos. De manera
que se habla de un supuesto de “eficiencia institucional” donde el mercado es en
sí mismo una institución social que opera de acuerdo a las reglas entendidas por
todos (Arrow, 1998). Dichas reglas se considera son comprendidas, aceptadas,
aplicadas, reforzadas y defendidas (Gandlgruber, 2003). Sin embargo, en la
realidad uno de los principales problemas es la “incertidumbre” de manera que los
agentes no pueden tomar decisiones claras y por lo tanto es necesario el
establecimiento de reglas que ayuden a solucionar problemas. Las instituciones
son procesos complejos que involucran la interacción, el aprendizaje y que ayudan
a la formulación de esas reglas.

Las instituciones han sido consideradas como contratos, rutinas o hábitos que
crean patrones de comportamiento compartidos al fundamentar percepciones y
decisiones individuales, orientando a los actores en sus actividades de acuerdo
con diversos contextos (Gandlgruber, 2003).

Para Hodgson (2001) las Instituciones son sistemas duraderos de reglas y


convenciones sociales establecidas e incrustadas que estructuran las
interacciones sociales. De manera que pueden restringir, pero también facilitar el
comportamiento de los agentes dado que establece aquello que puede y lo que no
puede realizarse.

36
Mientras que para Ostrom (2005) las instituciones son aquellas prescripciones que
los humanos usan para organizar todas las formas de interacciones repetitivas y
articuladas, incluidas las familiares, los mercados, firmas, ligas deportivas,
iglesias, asociaciones privadas y gobiernos en todas sus escalas.

Aoki (2001) y Grief (1998) conceptualizan a las instituciones como estructuras


sociales que surgen a partir de la interacción reiterada de los agentes que las
constituyen, logrando equilibrios evolutivos estables a partir de la conformación de
expectativas comunes. De manera que son como las reglas del juego que se auto
refuerzan y que son expresadas mediante la especificación de los jugadores, de
las acciones que pueden elegir y de los resultados que corresponden a cada
elección. Es un equilibro dinámico entre los participantes que se forma por reglas
creadas de manera endógena, a través de la interacción estratégica de los
agentes, estas son retenidas y por lo mismo auto reforzadas (Aoki, 2001). Cabe
mencionar que para esta concepción las reglas surgen internamente o sea de la
interacción de los agentes y por lo tanto es más sencillo internalizarla y hacer que
se cumpla, dado que no es impuesta por un externo. Pero también es pertinente
mencionar que el Gobierno en este esquema se considera como un agente interno
y se enfatiza en el hecho de que una representación sólo puede ser una institución
en la medida que los agentes creen en ella.

Desde la perspectiva de Edquist yJohnson (1997) son el conjunto de hábitos


comunes, rutinas, prácticas establecidas, reglas y leyes que regulan las relaciones
e interacciones entre los individuos y los grupos.

Una de las corrientes de mayor difusión acerca de las instituciones es la que


preside el premio Nobel de Economía Douglass North en la cual se establece a las
instituciones como reglas “formales” que se encuentran codificadas en estatutos,
reglamentos o constituciones políticas, y que requieren la fuerza de un agente
externo para sancionar su cumplimiento; y como reglas informales, donde se
incluyen las normas y convenciones sociales y las reglas morales, cuya
característica principal es que generalmente no necesitan coerción estatal para
hacerse cumplir (North, 1990; Mantzavinos, 2001).

Existen divergencias importantes en cuanto a la concepción que se tiene acerca


de institución, así como de los métodos que se utilizan para analizarlas. Algunas
corrientes se enfocan en el estudio de las características conductuales de los
individuos y sus interrelaciones, suponiendo que los resultados colectivos
aparecen como consecuencia de dicha actividad, o sea que la institución es un
resultado. Mientras que otras visiones presuponen que las instituciones anteceden
a la actividad individual, por lo que las características de los agentes y las
37
interacciones que establecen se encuentran influenciadas por las estructuras
institucionales en donde se desenvuelven9.

A manera de conclusión preliminar y refiriendo los objetivos de esta investigación,


se propone considerar a las instituciones como un esquema que impone
restricciones a la conducta individual, al mismo tiempo que posibilitan la existencia
de comportamientos que de otra forma serían irrealizables. Donde las funciones
más importantes de las instituciones son tres: a) el establecer un conjunto de
límites al comportamiento de los agentes en forma de reglas y regulaciones; b)
procedimientos para detectar y sancionar a quienes incumplen con la
reglamentación vigente; y c) la articulación de un conjunto de reglas morales y
éticas que reducen los costos de monitoreo y sanción (North, 1981).

Además es importante separar el concepto de institución al de organización, ya


que metodológicamente nos permite establecer jerarquías y retomamos de
Edquist y Jonhson (1997) la idea de que las instituciones son patrones de
comportamiento (reglas, rutinas, prácticas, etc.) que regulan las interacciones
entre grupos e individuos; mientras que las organizaciones son entidades de muy
diversos tipos (políticas, económicas, sociales, educativas) que tienen un
propósito común y un objetivo compartido.

1.4 Instituciones e Innovación

Aún cuando la teoría de la innovación (TI) ha construido un tratamiento del


desarrollo económico en el que se incluye el factor institucional como una variable
importante, no se ha desarrollado una teoría sistemática que especifique la
influencia de los parámetros institucionales en la generación de innovaciones
tecnológicas. En parte, esto se debe a que la TI se ocupa primordialmente de los
factores del crecimiento económico que considera “inmediatos o próximos” al
incremento de la productividad empresarial, entre los que destaca el avance
tecnológico como variable fundamental (Nelson y Sampat 2001). No obstante, al
analizar la importancia del desarrollo tecnológico en el crecimiento económico, los
teóricos de la innovación se han percatado desde el comienzo que las nuevas
tecnologías no surgen de manera aislada dentro de las empresas insertas en los
diversos sectores económicos; antes bien, la innovación tecnológica es un
proceso que emerge en un contexto social mucho más amplio.

9
Esta discusión es una parte central para esta investigación dado que es de vital importancia conocer cuál de
los dos procesos es determinante en el caso que se analiza, o bien si es una conjunción de ambos.

38
Debido a lo anterior, la TI ha postulado que el surgimiento y evolución de los
procesos de desarrollo tecnológico que conlleva la emergencia de innovaciones
productivas y organizacionales, ocurre dentro de un régimen específico de
interacciones organizacionales, que han denominado Sistema Nacional de
Innovación (SNI). Aunque la empresa ocupa una posición central dentro del
sistema por ser la organización donde se producen la mayor cantidad de
innovaciones, se acepta que la incidencia de otros actores colectivos es crucial
para que el progreso técnico tengan un impacto positivo en el desarrollo
económico. Desde sus formulaciones originales, el concepto de SNI ha sido
definido como una estructura institucional que confiere un soporte social para la
generación y difusión de las nuevas tecnologías, así como un medio de asegurar
su influencia amplia y permanente en el conjunto de la sociedad y en el desarrollo
económico.

El concepto de institución (en sus distintas acepciones) ha sido poco utilizado


como insumo teórico para analizar los distintos procesos de innovación, esto
debido a dos causas básicas: por un lado, los teóricos de la innovación no han
esclarecido aún en qué medida los procesos de emergencia y auto-organización
de patrones institucionales a partir de la interacción de los agentes involucrados
influyen en la generación de innovaciones (Morales et al., 2010) y en segundo
lugar, a la mencionada carencia de consenso entre los institucionalistas acerca del
concepto per se. Sin embargo destaca que en los últimos diez años se ha
rescatado como un elemento fundamental para analizar sectores intensivos en
conocimiento en algunos países emergentes. Este es el caso del tratamiento
dado por el Sistema Nacional de Innovación el cual ha sido tratado previamente.

Uno de los grandes aciertos de la teoría de la innovación ha sido considerar que


las nuevas tecnologías no surgen de manera aislada dentro de una empresa, sino
que es un proceso que toma lugar en un contexto social complejo y mucho más
amplio. Esto significa que el surgimiento y la evolución de los procesos de
desarrollo tecnológico e innovativo que a su vez conlleva innovaciones productivas
y organizacionales, ocurren dentro de un régimen específico de interacciones
organizacionales, denominado Sistema Nacional de Innovación (SNI).

El SNI ha sido considerado como una estructura institucional que confiere soporte
social y organizacional para la generación, adaptación y difusión de nuevas
tecnologías. Además de ser un medio que asegura que dichas tecnologías tengan
influencia y aceptación por el conjunto de la sociedad.

Freeman (1987) establece que el SNI puede conceptualizarse como una red de
instituciones públicas y privadas cuya función es principalmente la de promover e
39
impulsar el desarrollo de nuevas las tecnologías. Por su parte, Lundvall plantea
una idea más amplia al considerar que todo resultado innovador es una
consecuencia directa de un proceso previo de aprendizaje organizacional, por lo
que el SNI se encuentra conformado por todos los aspectos de la estructura
económica y del entramado institucional que afectan dichos procesos de
aprendizaje (Lundvall, 1992).

Las primeras formulaciones del concepto de SNI, aunque vagas en cuanto a la


especificación analítica de sus componentes, coinciden en plantear que una parte
fundamental del sistema se encuentra conformado por actores o elementos
institucionales y por las interacciones que establecen entre sí y con otros factores
estructurales. Pero, concretamente ¿cómo pueden caracterizarse o definirse esos
agentes institucionales que afectan la generación y difusión de nuevas
tecnologías? Freeman (1987) parece denotar con el concepto de institución a
diversos tipos de organizaciones colectivas estructuradas, tales como ministerios o
agencias gubernamentales, empresas, organizaciones educativas o de
capacitación y estructuras industriales. En el mismo sentido, Nelson y Rosenberg
(1993) identifican como actores institucionales del SNI a cierto tipo de estructuras
organizacionales, tales como la empresa, los laboratorios industriales de
investigación y las universidades que producen personal científico capacitado.
Estas organizaciones que propician el origen de los procesos de innovación
generalizados en los países desarrollados, se transforman paulatinamente hasta
convertirse en modernas corporaciones impulsoras del cambio técnico.

En la actualidad, los grupos de investigación dentro de las universidades


conjuntamente con los laboratorios públicos de investigación son una parte
fundamental del SNI, al proveer un importante cúmulo de conocimiento científico
en las aéreas de investigación básica y aplicada aprovechables por las diversas
industrias. Al mismo tiempo el Estado interviene como una organización que
financia cierto tipo de investigaciones científicas y establece marcos regulatorios
que incentivan la actividad empresarial innovadora (Morales et al., 2010)

Por su parte, Lundvall (1992) plantea que los elementos que constituyen el SNI
son: la organización interna de la empresa privada, las relaciones inter-
empresariales expresadas en diversos rangos de competencia y cooperación, el
sector público como un elemento que confiere soporte y regulación la avance
tecnológico, el sistema financiero cuya relación con la empresa resulta crucial para
la generación de soluciones innovadoras, y el sistema nacional de educación y
capacitación. Dentro de este conjunto de elementos heterogéneos, Lundvall no
realiza una pertinente distinción entre lo que llama factores relacionados con la
estructura de la producción y los factores del entramado institucional, por lo que no
40
es suficientemente explícita su idea de institución. Sin embargo, aún y con esta
ambigüedad explicativa es posible suponer que el concepto de institución para
Lundvall es más amplio que el de los autores anteriores, al considerar no sólo a
las estructuras organizacionales constituidas formalmente sino también cierto tipo
de relaciones que establecen los agentes institucionales u organizacionales entre
sí.

Niosi et al (1993) proponen una definición de SNI que de algún modo sintetiza las
posturas anteriores al considerar que un sistema donde interaccionan empresas
privadas y públicas, universidades y empresas con el objetivo de producir ciencia y
tecnología dentro de los límites de las fronteras nacionales. Es un sistema abierto
en tanto mantiene intercambios de conocimiento y otros factores con el exterior,
pero sus vínculos internos son más fuertes que los externos. Los agentes internos
se vinculan entre sí a través flujos financieros, relaciones legales y políticas, flujos
tecnológicos, científicos y de información, así como flujos sociales. En términos
analíticos, el SNI se define como un conjunto de instituciones interrelacionadas
que producen, difunden y adaptan conocimiento tecnológico (Niosi, 2002). Pero
existe una inconsistencia analítica en esta definición ya que cuando Niosi plantea
que el SNI se encuentra conformado por un “conjunto de instituciones” se refiere
primordialmente a las empresas, universidades y agencias gubernamentales,
restringiendo de esta manera el concepto de institución al de las organizaciones
formalmente constituidas (Morales et al, 2010).

Sin embargo, en el mismo texto, Niosi (2002) retomando a Johnson, define a las
instituciones como “hábitos, rutinas, reglas, normas y leyes que regulan la
interacción entre los individuos y moldean la interacción social”. ¿Esto quiere decir
que las organizaciones se definen al mismo tiempo como hábitos, reglas y leyes?
Al parecer, más bien el planteamiento consiste en suponer que las organizaciones
son una especie de instituciones formales encargadas de establecer los incentivos
necesarios para la generación y difusión del conocimiento tecnológico, pero que
en el desempeño del SNI también repercute la influencia de otro tipo de
instituciones “informales”, tales como los hábitos, normas y conductas.

La ambigüedad conceptual presente en las distintas interpretaciones del concepto


de SNI es producto de una falta de sistematización y profundización teórica que
tienda a establecer parámetros analíticos comunes. Esto se debe en gran medida
a que el concepto de SNI ha sido construido a partir de experiencias históricas
concretas, y de estudios empíricos centrados en explicar la aparición de
innovaciones en sectores económicos específicos. Por tal motivo, Lundvall (1992)
establece que no es factible delimitar las fronteras precisas del concepto de SNI,
más bien, la evaluación de los límites de los componentes institucionales que lo
41
conforman depende de cada caso concreto de estudio. En el mismo sentido, otros
autores establecen que no puede construirse un modelo general que explique la
operatividad y eficiencia del SNI, más bien estas dependen del contexto
institucional propio de cada país, entendido como el conjunto de leyes
regulaciones, normas, estándares técnicos, etc.

No obstante, esta explicación contribuye aún más a la ambigüedad conceptual: ¿el


SNI es en sí mismo un sistema de relaciones institucionales como ha sido definido
por varios autores, o es un sistema que se encuentra a su vez inserto en otro
sistema “institucional” más amplio, o ambas?.

Las instituciones tal y como se visualizan en esta investigación, tienen la función


de reducir la incertidumbre que enfrentan los agentes encargados de la
generación de desarrollos tecnológicos; operan también en la conformación de
patrones compartidos para la solución de problemas y conflictos relacionados con
la cooperación; y proveen incentivos de diversos tipos (pecuniarios, no
pecuniarios, derechos de propiedad, leyes o reglamentos) que alientan el
aprendizaje y la participación en el proceso de innovación (Edquist y Jonhson
1997). De tal manera, las organizaciones relacionadas con la innovación, planean
y ejecutan sus actividades innovadoras en función de las incentivos estructurados
en el marco institucional vigente; al mismo tiempo que, los cambios en la actividad
organizacional producto de las transformaciones evolutivas internas, tienden
también a modificar el marco institucional y adaptarlo a las nuevas circunstancias
productivas (Morales et al, 2010).

Así pues se denomina como “marco institucional” al encargado de diseñar,


ejecutar y sancionar el cumplimiento de los derechos de propiedad y que en
ocasiones antecede analíticamente a la formación de innovaciones empresariales,
aunque en otras las precede como resultado de la interacción previa de los
agentes. Pero la innovación es posible debido a que existe un marco jurídico-
normativo que específica la propiedad de los resultados del proceso. En un
contexto en el que existen derechos de propiedad laxos, no habrá incentivos
suficientes para invertir en nuevos desarrollos tecnológicos, debido a que la
ganancia que surge de ellos no se encontraría correctamente asignada a quienes
invierten sus recursos productivos. Por tal motivo, el contexto institucional es un
determinante clave y mantiene prioridad causal en los procesos de desarrollo
tecnológico (Morales et al, 2010).

1.5 Marco Institucional

42
El concepto de marco institucional, entendido como una serie de reglas y normas
que influyen de manera decisiva en la conducta de los agentes económicos, es
clave para comprender el desarrollo del sector biotecnológico. El marco
institucional impone restricciones a la conducta individual, al mismo tiempo que
posibilita la existencia de comportamientos que de otra forma serían irrealizables.
Un ejemplo claro de lo anterior son las normas de producción y apropiación de
conocimiento.

El marco institucional puede sancionar las conductas deshonestas u oportunistas


por parte de los agentes que producen conocimiento (apropiación indebida, robo u
otro comportamiento indebido) al mismo tiempo que posibilita que el intercambio
exista. Puede suponerse que sin reglas y normas que sancionen conductas
depredadoras, los agentes evitaran la inversión en adquisición y producción de
nuevo conocimiento, especialmente en sectores como el biotecnológico intensivos
en conocimiento. Las funciones más importantes del marco institucional son tres:
a) el establecer un conjunto de límites al comportamiento de los agentes en forma
de reglas y regulaciones; b) procedimientos para detectar y sancionar a quienes
incumplen con la reglamentación vigente; y c) la articulación de un conducto de
reglas morales y éticas que reducen los costos de monitoreo y sanción (North,
1981).

La estructura institucional es un factor imprescindible para establecer la dirección


específica en que los agentes económicos generan, absorben y se apropian del
conocimiento productivo. North (1981) establece que “la estructura de
organización política y económica es la que determina el desempeño de una
economía así como la tasa creciente de conocimiento y tecnología”. Por
organización política y económica denota la matriz institucional vigente en una
economía.

De acuerdo con North (1990/2006), un marco institucional se compone por reglas


formales y por normas informales. Las primeras incluyen normas jurídicas, leyes,
códigos, etc., y presentan la característica principal de estar formalmente
codificadas, es decir, de encontrarse escritas y ser accesibles (en términos
cognitivos) para los agentes involucrados; su ejecución requiere que un tercer
agente (generalmente el Estado) que tenga la capacidad de sancionar su
incumplimiento. Por su parte, las normas informales son estructuras no codificadas
de forma escrita, influyen en el comportamiento de los individuos por medios no
coercitivos y complementan a las reglas formales. Estas últimas pueden ser
convenciones, reglas morales o normas sociales (Mantzavinos, 2001). Ambas,
reglas formales y normas informales, en conjunto forman un sistema institucional
que establece límites específicos a la conducta de los agentes.
43
Ambos tipos de reglas descritos anteriormente interaccionan para formar un marco
institucional que determina la orientación de los diversos sectores económicos. Es
factible suponer que cada sector tendrá su propio marco institucional, entendido
como reglas formales y normas informales con particularidades específicas e
incidencia directa en los mecanismos productivos determinados del sector. El
marco institucional específico de cada uno de los sectores económicos se
relaciona con el marco institucional general de toda la economía, produciendo
mecanismos particulares que posibilitan o inhiben ciertas conductas en los
agentes que constituyen el sector. Así, por ejemplo, la ley de bioseguridad es un
mecanismo institucional específico rector de la conducta de los agentes que
intervienen en el sector biotecnológico; pero su vigencia y aplicación no ocurre en
un vacío institucional, antes bien, debe ser concordante con las directrices de la
constitución mexicana y con otra serie de códigos de aplicación más general. Lo
mismo ocurre con las normas informales. Ciertas prácticas productivas u
organizacionales deben estar en concordancia con las normas sociales vigentes
que practican las comunidades receptoras.

De acuerdo con lo anterior, existe una relación constante entre el marco


institucional de un sector específico, y el marco general que rige las interacciones
de toda la economía. Dicha interacción tendrá repercusiones particulares sobre el
sector en cuestión. Una insuficiente vinculación entre estos dos niveles tenderá a
retrasar el desarrollo de cualquier sector económico. De igual manera, si el marco
del sector es débil o insuficiente, no puede esperarse que incentivos específicos
emanen del marco institucional general.

No obstante, existen elementos institucionales que necesitan ser generados en el


espectro general político u económico, tales como los elementos coercitivos del
incumplimiento de las reglas y normas (sanciones o multas, aplicación de la
justicia, etc.), o los derechos de propiedad (véase más adelante) y convenios
comerciales que rigen la apropiación de los beneficios individuales en la
generación y difusión de conocimiento. Por tal motivo, una aplicación deficiente de
estos principios generales tendrá repercusiones negativas en el diseño y
aplicación de normas institucionales propias de cada sector

44
1.1Dinámica del Marco Institucional

Marco Institucional General


(Reglas formales y normas informales)

Marco Institucional del Sector Diversos Marcos de otros sectores


Biotecnológico Económicos
(Reglas y normas específicas) (Reglas y normas específicas)

Agente
1 Diversos Agentes en
interacción en cada
Agente Agente
2 3 sector

Elaboración propia

Elaboración propia

Como se aprecia en la figura 1.1 el marco institucional general, está compuesto


por reglas formales y normas informales, incide en el comportamiento de los
diversos sectores económicos. Dentro de este marco todos los sectores
interaccionan entre sí (en la figura solo aparecen dos por simplificación) regidos
por la normatividad general. Al mismo tiempo, cada sector económico cuenta con
marcos institucionales específicos que inciden en la conducta e interacción de los
agentes particulares. El marco institucional general y los diversos marcos
institucionales propios de cada uno de los sectores deben encontrarse articulados
y ser complementarios. De esta forma, la conducta de los agentes, se encuentra
influenciada por la normatividad general y por la normatividad particular de su
sector.

Es pertinente aclarar en este punto que la teoría institucional de North (1990/2006)


establece una diferencia clara entre reglas o normas y agentes o jugadores. La
caracterización de agente no sólo corresponde con individuos que intervienen en
los procesos productivos o de intercambio, también se refiere a organizaciones
corporativas con identidad propia y límites específicos, que se encuentran
constituidas por individuos que mantienen metas y objetivos comunes. Las
empresas son un claro ejemplo de agentes corporativos, pero no son los únicos,
también existen organizaciones tales como universidades, laboratorios públicos y
privados de investigación, agencias gubernamentales, entre otros. El marco
institucional influye en el comportamiento tanto de individuos como de

45
organizaciones corporativas, al mismo tiempo que se nutre de la actividad de sus
componentes.

Se acepta entre los teóricos institucionales que las reglas formales son diseñadas
y ejecutadas por el Estado a través de diversas agencias u organizaciones
gubernamentales, mientras que las normas informales comúnmente emergen a
partir de la interacción de los propios agentes que actúan en los procesos
productivos y de intercambio. Distintos tipos de normas informales pueden
convertirse, mediante su auto-reforzamiento constante y generalizado, en reglas
codificadas que se insertan en las normas jurídicas vigentes. Al mismo tiempo,
reglas que se promulgan de manera formal pueden no tener ningún tipo de
incidencia en la conducta de los agentes. Por lo tanto, las reglas formales
necesitan mantener un cierto grado de arraigo y reconocimiento social (consciente
o inconscientemente) para que puedan considerarse parte del marco institucional.

Consecuentemente, existen varios tipos de interrelaciones institucionales que


afectan el desempeño de los sectores económicos: en primer lugar la relación que
existe entre reglas formales y normas informales; en segundo lugar la relación que
existe entre las relaciones institucionales generales y las que son propias de los
sectores específicos; y, en tercer lugar, las relaciones que se establecen entre los
agentes u organizaciones productivas y las reglas formales e informales. Estos
tres tipos de relaciones constituyen la estructura interna de cualquier marcó
institucional, ya sea en el plano general o en el plano particular de los sectores
económicos.

La función principal del marco institucional es la generación de mecanismos que


incentiven u orienten hacia rumbos específicos la acción económica. De acuerdo
con la distinción propuesta anteriormente, puede haber incentivos generales que
determinen pautas de comportamiento comunes para todos los sectores
económicos, por ejemplo leyes de propiedad intelectual que establecen las
condiciones de apropiación y explotación de nuevo conocimiento: Al mismo
tiempo, existen también incentivos particulares para cada sector, cuyo propósito
es fomentar conductas delimitadas en algunos agentes específicos; tal es el caso
de la Ley de Seguridad de Organismos Genéticamente Modificados que regula el
manejo y producción de este tipo de organismos en empresas, universidades,
laboratorios de investigación, etc. Por otra parte, existen los incentivos que se
derivan del marco regulatorio formal en ambos niveles de aplicación (general y
sectorial), tales como estos dos que se han mencionado; pero también existen
incentivos emanados de las normas informales. Estos últimos pueden tener una
aplicación general, basada en normas de conducta compartidas por una
comunidad específica; o pueden ser de carácter particular, como las practicas que
46
emergen en una empresa producto da las creencias compartidas por los
empleados.

Sin lugar a dudas, los incentivos que se desprenden de las normas y reglas
informales en ambos niveles de aplicación son ampliamente dependientes del
contexto, por lo que su tipificación general resulta problemática. La identificación
de los incentivos informales dependerá de cada trabajo empírico. Estos pueden ir
desde rasgos muy generales relacionados con la cultura e ideología de grandes
grupos humanos, hasta normas y preferencias morales que rigen el
comportamiento psicológico individual. En este sentido, los incentivos personales
pueden ser monetarios, o bien reconocimiento simbólico o presión social y
finalmente la experimentación de algún tipo de sentimiento individual, satisfacción,
culpa, alegría o emoción.

No obstante, en este trabajo se exploran sólo los elementos formales del marco
institucional que rige el sector biotecnológico mexicano y particularmente a la
Biotecnología Agroindustrial -alimentaria en los estados mencionados. Son
elementos diseñados por organizaciones gubernamentales específicas con el
propósito de incidir positivamente en la generación de conocimiento tecnológico en
dicho sector. Se parte del supuesto de que al ser muy complicado modificar los
incentivos informales debido a que se encuentran enraizado en las creencias y
costumbres de los individuos, el proceso factible para el fomento un sector
económico ocurre mediante la modificación de los incentivos formales. De acuerdo
con North (1990/2006), el tipo de conocimiento que se genera en un sector
productivo depende de los incentivos que se establecen para desarrollarlo. Por tal
motivo, el diseño y ejecución de los incentivos que se derivan de las reglas
formales son muy importantes para el desarrollo de cualquier sector económico,
pero especialmente para los sectores intensivos en conocimiento como el
biotecnológico.

La parte formal del marco institucional, especialmente la que rige al conjunto de la


economía, es la encargada de establecer los derechos de propiedad, los cuales
son un estímulo imprescindible para la inversión productiva en nuevo
conocimiento. El estado establece un conjunto de normas y reglamentaciones
para asegurar una apropiación individual adecuada de los beneficios de la
generación de nuevo conocimiento, sin descuidar la aplicación social del mismo.
Como lo establecen North y Thomas (1973), un marco institucional eficiente es
aquel que genera incentivos para que exista una apropiación equitativa entre el
beneficio individual y el beneficio social.

47
Los agentes individuales que generan conocimiento (individuos, empresas,
corporaciones y organizaciones) encontrarán motivos para realizar su actividad en
la medida en la que el Estrado asegure su inversión y una ganancia adicional por
su esfuerzo. De la misma manera, amplios sectores sociales estarán en
disposición de seguir sosteniendo al Estado con sus impuestos sí este asegura
mayor bienestar para los ciudadanos, considerando que una parte importante del
incremento del bienestar, radica precisamente en la generalización de los
beneficios de la generación y difusión de nuevo conocimiento. Esto es aún más
cierto cuando el Estado participa con el financiamiento público para la generación
de conocimiento técnico y científico que potencialmente puede ser utilizado por las
empresas para generar desarrollos tecnológicos. Tal es el caso de los Fondos
Sectoriales o Mixtos implementados por el CONACYT para financiar desarrollos
científicos que incluyen el área de Biotecnología en algunos estados del país. La
lógica de estos proyectos es que diversas organizaciones, incluyendo a las
empresas, se involucren en la generación de conocimiento socialmente útil.

En consecuencia, el Estado se encuentra sometido a una serie de presiones por


parte de los agentes que interaccionan al interior de un marco institucional. Un
Estado autoritario dictará las normas y leyes que convengan a su estatus de
participante único en las decisiones, pero esta modalidad de gobierno entraña un
enorme riesgo de descontento y conflicto. Por lo tanto generalmente el Estado
tiende a estructurar la matriz de incentivos en función de las necesidades y
demandas de los agentes involucrados. Por lo general el Estado es más eficiente
cuando realiza tareas que ya conoce, es decir, cuando se trata de diseñar
estímulos generales para el desempeño económico, o de diseñar estímulos
particulares para sectores económicos que tradicionalmente han tenido un peso
relevante en la economía. No obstante, hay más probabilidad de que las políticas
gubernamentales sean fallidas cuando se trata de sectores emergentes, que no
tienen referentes previos de aplicación. Debido a esto la participación de los
agentes que intervienen en estos sectores para el diseño de la normatividad
particular que debe regir su actividad es muy importante.

Casos como estos, determinan una pauta de construcción de un marco


institucional bottom up que parte generalmente de los agentes involucrados y
termina con la generación de códigos legales particulares y modificaciones
constitucionales. Sin embargo, existen varios riesgos en este proceso. En primer
lugar, el riesgo de que los agentes involucrados no cuenten con una perspectiva
general del sector en que se desenvuelven, siendo miopes a las posibilidades de
crecimiento y vinculación con otros sectores. Otro riesgo de gran importancia es
que el Estado, a pesar de la presión de los agentes involucrados, sea indiferente
al desarrollo del sector, ya sea por intereses creados o por una falta de
48
perspectiva futura. Estos casos son muy comunes en los sectores intensivos en
conocimiento en México, donde los esfuerzos científicos y empresariales se
encuentran desvinculados y el Estado generalmente no tienen la capacidad de
construir un marco institucional que fomente adecuadamente el trabajo conjunto
en los sectores intensivos en conocimiento.

Conclusiones

Este primer capítulo se construyó con la finalidad de presentar algunos de los


tópicos teóricos fundamentales para el desarrollo de esta investigación. Se partió
del análisis de la innovación y su consideración como un proceso complejo que
involucra a una red amplia de actores y sus interrelaciones. Tratando de
contextualizar al proceso de innovación en un esquema social que implica no sólo
las actividades empresariales, sino la complementariedad de acciones entre
diversos agentes. Se propuso una visión extensa y diferenciada para los países en
desarrollo en comparación con los países en desarrollo.

A partir de dicha discusión, se abordó el estado del arte en cuanto a las grandes
propuestas para el estudio de la innovación, considerando siempre al sector de
análisis. Esto dio pauta para el tema de los sistemas de innovación y la
importancia que tienen para entender la dinámica innovadora. Esto nos permitió
presentar los principales planteamientos en cuanto a los Sistemas Nacionales,
Sectoriales y Regionales de Innovación; en este último se focalizo la atención
dado que se considera fundamental retomar para esta investigación.

Una vez planteados los elementos fundamentales, se realizo una revisión crítica
de cómo ha sido tratado el tema de las instituciones en la teoría de la innovación,
dado que es uno de los elementos centrales de discusión en esta investigación. La
crítica implicó un estudio detallado de las aportaciones y el reconocimiento de los
elementos que se consideran débiles.

El siguiente apartado y acercándonos a otro de los cuerpos teóricos


fundamentales en esta investigación, se partió de la pregunta ¿por qué retomar el
tema de las instituciones? bajo la visión de la innovación y en el contexto que aquí
se plantea. De manera que se plantearon algunos elementos introductorios sobre
el tema que se desarrolla ampliamente en el segundo capítulo.

En síntesis, se considera que las instituciones importan en el contexto de la


innovación, dado que son las encargadas de establecer las reglas, los premios y
los castigos para los agentes involucrados. Si bien como se explicó en el capítulo,
las instituciones han sido un tema recurrente en la teoría de la innovación, aquí
49
consideramos que el tratamiento dado era insuficiente para poder explicar lo que
sucede con el desarrollo de tecnologías emergentes como lo es la Biotecnología.

La Biotecnología es una tecnología que por sus características antes descritas,


necesita de la conformación de un marco institucional que establezca claramente
lo permitido, lo regulado y lo prohibido, sobre todo por las implicaciones sociales,
medio ambientales y de salud que pudiese involucrar su desarrollo o la
comercialización de ciertos productos.

Además de requerir una regulación para los aspectos mencionados, es necesario


contar con una estructura institucional capaz de soportar el desarrollo de la
tecnología. Recordemos que el proceso de innovación está inmerso en un
ambiente de alta incertidumbre y es riesgoso por sí mismo, ya que pocas veces se
puede conocer con anticipación tanto los resultados como los posibles beneficios
(económicos y sociales). Es por eso que establecer un marco institucional es de
especial importancia, ya que tiene como precepto fundamental disminuir la
incertidumbre, dotar de información a los agentes y establecer mecanismos que
incentiven o desincentiven cierto tipo de conductas.

La Biotecnología en México, ha sido considerada como un área estratégica de


crecimiento para el país y por eso es relevante conocer hasta qué punto se han
establecido los mecanismos de regulación y de fomento, dada la importancia que
le ha sido conferida en los dos últimos Programas de Ciencia y Tecnología
nacionales.

Este capítulo sintetiza una serie de aportes de la teoría institucional que son útiles
para analizar a la Biotecnología Agroindustrial -alimentaria, sabemos que la
discusión es mucho más amplia de lo que aquí se presenta, sin embargo la idea
principal ha sido formular un concepto que englobe lo que aquí se busca explicar.
De manera que el concepto de “marco institucional” ha sido desarrollado bajo esta
idea, ya que si bien está basado en las aportaciones de North y Ostrom
fundamentalmente; la construcción como resultado de la mezcla de diversas
concepciones es propia y con la finalidad de ser aplicado al estudio que aquí se
realiza.

Una vez que se han planteado los puntos fundamentales acerca del tema de las
instituciones y que se ha mencionado ya su papel como establecedoras de
incentivos, es pertinente presentar el siguiente capítulo, donde se busca
establecer conexiones de cómo funcionan esos mecanismos y cómo es qué se
transmiten a los agentes involucrados. Por lo tanto, el siguiente capítulo está
dedicado al tema de los incentivos y las barreras a la innovación.
50
En conclusión, se ha tratado de plantear el esquema amplio de discusión teórico y
una propuesta de integración y complementariedad en aspectos donde se
considera es posible. Tratando de puntualizar y ser específicos en el tratamiento
de ciertas variables y finalizando con una propuesta de un constructo teórico ad
hoc para esta investigación.

51
Capítulo 2
Incentivos y Barreras a la Innovación

Introducción

La teoría de los incentivos se ha desarrollado a lo largo del tiempo en muy


diversas vertientes, pero es en los últimos 40 años que ha sido punto nodal de
discusión en temas como el trabajo en equipo, la asimetría de información entre
compradores y vendedores, subastas y selección adversa, problemas de agencia
entre otros. El tratamiento dado a dichos temas se ha complementado con
formulaciones de teoría de juegos y uno de los modelos más usados
frecuentemente es “el agente-principal” dado que generalmente se busca
encauzar las acciones de uno o varios de los participantes para lograr un fin
común.

Sin embargo y a pesar del importante refinamiento matemático que se ha


realizado, existen pocos tratamientos al tema de los incentivos y la innovación.
Esto es relevante si partimos de la consideración de que la innovación al ser una
actividad incierta necesita un impulso externo que dirija las acciones, en caso de
que sea de interés para alguno de los actores, en este caso para el gobierno, dado
que puede representar una ventana de oportunidad.

De manera que esto representa un reto en términos de poder usar parte del
esquema desarrollado previamente, para un problema que no ha sido analizado
desde esta perspectiva.

Otro de los retos de este capítulo es establecer un puente coherente y lógico entre
parte de la teoría institucional, a través del uso de normas y reglas y cómo éstas
se traducen en incentivos para los agentes involucrados en el proceso de
innovación, partiendo de la discusión previa en el capítulo anterior y la propuesta
hecha de marco institucional.

Finalmente es importante retomar un tema por demás relevante para entender el


comportamiento innovador y que cobra importancia sobre todo en países como
México, donde más que estructuras claras de incentivos, existen una serie de
barreras que generan ambientes contrarios para la innovación. De manera que
complementando el esquema aquí planteado, se retoman algunas características
propuestas desde este enfoque.

La estructura del presente capítulo es la siguiente: en el primer apartado se


exponen los puntos más importantes y relevantes para esta investigación acerca
52
la teoría de los incentivos, después se presenta un esquema que sintetiza y
propone como es que las instituciones establecen incentivos que buscan
direccionar el comportamiento de los agentes involucrados en la innovación y
finalmente se concluye con la presentación del enfoque sobre las barreras a la
innovación considerando que puede ser parte importante para entender el
fenómeno que aquí se analiza.

2.1Teoría de los Incentivos

El modelo de competencia perfecta hace referencia a una condición específica de


mercado en la cual las empresas participantes carecen de poder para manipular
los precios de los bienes (precio-aceptantes), de manera que es posible maximizar
el bienestar dado el juego entre la oferta y la demanda. Es decir, existe una gran
cantidad de vendedores y compradores del mismo bien (producto homogéneo) y
tanto empresas como consumidores cuentan con información completa y esta es
disponible. Además de que no existen barreras de entrada y salida, movilidad
perfecta de bienes y factores y por supuesto no hay costos de transacción. Sin
embargo, las condiciones teóricas planteadas anteriormente son sumamente
restrictivas y poco aplicables para analizar la realidad. Lo que en algunos casos ha
llevado a plantear lo siguiente:

Cuando el mercado no puede conducir a una asignación eficiente de los recursos,


debe considerarse la intervención del Estado. La mano visible de la regulación
podrá actuar mejor que el de la competencia. - Finsinger J. y Vogelsang I. (1993,
pp. 225)

El que existan mercados que no funcionen eficientemente o bien que carecen de


alguna de las condiciones planteadas, ha provocado una fuerte discusión en torno
a la regulación y por lo tanto a los incentivos. Una vez observado que uno de los
problemas fundamentales en ciertas industrias o actividades económicas, es la
falta de información, la falta de control, la realización de prácticas depredadoras,
entre otros comportamientos es que se ha determinado que es necesaria la
creación de instituciones, de manera que éstas puedan dotar recopilar la
información necesaria para poder regular o fomentar cierto tipo de acciones.

En muchos análisis los incentivos son la parte neurálgica de ciertos fenómenos,


por ejemplo la coordinación de trabajo en equipo ha sido un tema muy trabajado,
dado que siempre existe el riesgo de no poder monitorear a todos los integrantes y
por lo tanto no obtener la meta establecida; en estos casos se plantea la
existencia de un nodo central de información que debe establezca no sólo las
metas y objetivos de cada uno de los integrantes, sino los premios o castigos
53
(incentivos). Este tipo de problemas generalmente se ha denominado como un
problema de agencia, donde es necesario regular los flujos de información, así
como las actividades que desempeñan los agentes.

Objetivos conflictivos e información descentralizada son dos de los problemas que


considera la teoría de los incentivos en mercados, organizaciones y grupos
tomadores de decisiones donde las normas y los comportamientos juegan un
papel muy importante en la conducta de los agentes. (Laffont y Martimort, 2002).

La teoría de los incentivos ha desarrollado esquemas que ayudan a solucionar


problemas en caso de riesgo moral, acciones ocultas, selección adversa,
conocimiento oculto y no verificabilidad. Se busca implementar mejores prácticas,
a través de una estructura de incentivos adecuada a cada tipo de agente,
partiendo del supuesto que cada uno actúa bajo su propio interés, existe
información asimétrica y el contexto organizacional requiere de un nuevo tipo de
equilibrio al estilo Bayesiano-Nash que describe estrategias de interacción entre
agentes bajo información incompleta10.

La teoría de los incentivos se remonta a los problemas que surgen por la división
del trabajo y el intercambio, ya que estos requieren de un proceso de delegación y
en algunos casos de contratos, por ejemplo, en la agricultura con grupos de
productores y en pequeñas empresas que no cuentan con la capacidad de
monitoreo. Adam Smith fue el precursor en cuanto al tema en la producción
agrícola, Chester Barnard en cuanto a la administración de los incentivos en las
organizaciones y rescatamos la siguiente idea:

[U]n elemento esencial de las organizaciones es la voluntad de las personas a


contribuir con sus esfuerzos individuales para el sistema cooperativo incentivos
inadecuados significan disolución, o cambios de propósito la organización,
o la falta de cooperación. - Barnard (1938, pp 139)

En síntesis, la teoría de los incentivos se ocupa de los problemas que enfrenta el


comúnmente llamado “planeador, diseñador, principal o gobierno” dependiendo

10
La teoría de juegos ha sido comúnmente utilizada para analizar la interacción entre grupos quienes actúan
de forma estratégica; la teoría de los incentivos se ha valido de los juegos con información incompleta para
modelar casos donde no se conoce la función de pagos de otro jugador, donde existe cierta incertidumbre
acerca de la motivación del oponente o bien si no existe cadena de conocimiento público. El equilibrio
Bayesiano de Nash implica juegos estáticos donde cada jugador i tiene un conjunto de acciones disponibles
Ai, donde algunos o todos los jugadores cuentan con información privada pero los pagos finales dependen no
sólo de las acciones decididas por todos los jugadores, sino de la información privada de los jugadores.

54
del contexto, cuando sus objetivos no coinciden con los de los demás participantes
o agentes11.

Además del problema sobre la coincidencia de las metas, en los problemas sobre
incentivos el principal o gobierno12 debe interesarse por lo que sepan o hagan los
agentes. Es decir, su función de objetivo debe depender de la información de los
agentes o de su comportamiento (Laffont yMaskin, 1993).

La manera en que el planeador o gobierno busca lograr sus objetivos es mediante


la puesta en marcha de de un “programa de incentivos”13 que se traduce como el
establecimiento de una regla que especifica por adelantado el comportamiento del
planeador o gobierno sobre la base de sus percepciones de la información y las
acciones de los agentes; por lo tanto un esquema de incentivos es una promesa
del planeador a reaccionar de alguna manera específica a lo que hagan o revelen
los agentes (Laffont yMaskin,1993).

Existen diversos problemas que enfrentan el planeador o gobierno; en general


éste no cuenta con toda la información necesaria para especificar una estructura
de pagos que sea suficientemente buena como para hacer que los agentes actúen
de tal o cual forma. A este caso generalmente se le denomina como “selección
adversa”. La segunda dificultad tiene que ver con que el planeador o gobierno no
tiene la capacidad de observar perfectamente las acciones de los agentes y por lo
tanto se vuelve muy complicado castigar en caso de que no cumplan con los
objetivos, de manera que surge un problema de “azar moral”.

El planeador o gobierno debe elegir un programa de incentivos con una doble


maximización, por un lado que maximice su ganancia propia, sujeto a la restricción
de que los agentes también maximicen su función objetivo. Para esto será
necesario garantizarles a los agentes una ganancia esperada mínima, de manera
que estén interesados en participar14.

Las ganancias del planeador o gobierno pueden tomar muy diversas formas,
pueden ir desde algo tangible hasta la concreción de una meta y obtenerla
dependerá de la respuesta de los demás agentes. De manera que lo que se busca

11
A diferencia de la teoría de los equipos, aquí se postula el conflicto dado que no existe coincidencia entre
los objetivos y metas.
12
Para los fines de esta investigación será llamado planeador o gobierno dependiendo del contexto que se
analice
13
Dependiendo del área de aplicación es que se puede utilizar el nombre “programa de incentivos”,
“mecanismo”, y en ocasiones en el contexto de elección social se utiliza “forma de juego”
14
En teoría de juegos a esto se le llamaría al planeador un “líder” de juego de dos movimientos, donde su
movimiento consiste en la selección de un plan.

55
es lograr un equilibrio que considere dos posibles respuestas; una cooperadora y
otra en conflicto, dado que puede suceder que los agentes no estén dispuestos a
cooperar entre sí o con el planeador.

Este planteamiento representa una de las visiones de la economía acerca de la


teoría de los incentivos, se ha retomado debido a que se considera que el
planteamiento hecho desde esta perspectiva nos permite situar gran parte de los
elementos que aquí interesan, además de brindarnos una serie de puntos que
serán retomados para analizar nuestro caso. Sin embargo, también se ha
considerado importante este esquema con algunas aportaciones hechas desde
otras ramas de las ciencias sociales. Por eso es que aparecerán algunas
anotaciones útiles provenientes desde la psicología y la sociología.

2.2 Taxonomías Acerca de los Incentivos

El tema de los incentivos ha sido tratado desde muy diversas perspectivas, si bien
como se expuso antes para la economía ha sido relevante para analizar diversos
fenómenos a nivel organizacional, empresarial o individual, también existen
aportaciones desde la sociología y la psicología. Dichos aportes han iluminado
parte importante sobre cómo es que los agentes toman decisiones y cómo es qué
estos pueden incidir de manera relevante en la conducta.

Existen diferentes conceptos acerca de lo que son los incentivos, en general


difieren de unos a otros por el tipo de agentes que estén tratando, esto se
explicará más adelante por el momento se retoman algunas definiciones usadas
en contextos similares al que se pretende tratar aquí.

Un incentivo ha sido considerado como un factor que como un elemento de fuerza,


provee un motivo para que un individuo adopte un comportamiento u oriente sus
preferencias al momento de elegir (Jaso, 2009).

Los incentivos son señales que condicionan, limitan o alientan y finalmente


inducen y refuerzan los comportamientos de los agentes (Puchet, 2008).

Comúnmente se entiende a los incentivos como un estímulo, una recompensa que


ofrece un tercero para conducir las acciones de otro. El incentivo puede ser una
gratificación o bien puede tomar forma mediante un sistema de penalización o
sanciones, que serían el peligro de ser ineficaz, ofreciendo recompensas por un
comportamiento deseado (Smith, 2004).

56
Así, se puede pensar en un sistema de incentivos o castigos ante la búsqueda de
ciertos comportamientos a nivel individual o colectivo. Como se ha mencionado ya,
los incentivos pueden ser una alternativa eficaz para la gestión de conflictos o para
la promoción de ciertas actividades (Amaro, 2008).

Existen diversas clasificaciones en el tema de los incentivos, el siguiente apartado


muestra algunas de ellas, tratando de focalizar en las que sean de mayor utilidad
para el esta investigación.

De acuerdo con Barnard (1938) los incentivos son un medio de persuasión a


través de los cuales se crean condiciones coercitivas, se racionalizan las
oportunidades y se inculcan motivaciones. Dependiendo del tipo de agentes a los
cuales estén dirigidos, serán las características de dichos incentivos. Por lo tanto
es necesario establecer niveles y jerarquías.

Se pueden establecer incentivos para agentes de manera individual y para grupos


u organizaciones. Los incentivos a nivel agente han sido estudiados por parte de
la psicología y la economía, sugiriendo que con respecto al individuo pueden
existir dos categorías:

1. Intrínsecos. Se refieren básicamente a las motivaciones internas de los


individuos tales como la búsqueda de reconocimiento social, autoestima,
reputación, liderazgo, etc.
2. Extrínsecos. Son aquellos que provienen del ambiente y toman forma en
premios, recompensas y castigos (Amaro, 2009).

Los extrínsecos a su vez pueden ser pecuniarios y no pecuniarios (Este P. y Patel


2007) y de igual manera, los primeros se refieren a una recompensa monetaria y
los segundos pueden ser reconocimientos simbólicos, éstos últimos tienen una
naturaleza especial ya que se relacionan con aspectos no cuantificables ligados a
valores y normas sociales en los que se desenvuelven los agentes, por lo que se
distinguen por su apreciación subjetiva, ya que la valoración depende de cada
individuo y en la mayoría de las ocasiones responde a las particularidades del
sujeto y su entorno.

A nivel organizacional también existen incentivos intrínsecos y extrínsecos,


pecuniarios y no pecuniarios.
1. En este caso los intrínsecos se refieren al reconocimiento proveniente
del propio grupo de trabajo u organización, por ejemplo cuando
compiten departamentos o áreas de una misma empresa

57
2. Los extrínsecos se definen como reconocimiento que proviene de un
tercero a todo el grupo u organización.
De acuerdo a lo planteado por Barnard (1938) existen dos tipos de incentivos para
las organizaciones:
a) Los denominados “específicos” que hacen referencia a la oportunidad de
acceder a materiales (no personales) y a mejores condiciones físicas.
b) Mientras que los “generales” se refieren a la asociación grupal, adaptación
a las condiciones (métodos habituales y de grupo), oportunidad de tener
mayor participación, cohesión.

Es difícil encontrar una taxonomía que pueda ser retomada en esta investigación y
que nos ayude a explicar el problema de investigación. De manera que se propone
lo siguiente:

Nivel Tipo Proveedor o planeador


Individual Físico y/o Material Mercado
Organizacional Simbólico Institución

El cuadro anterior sintetiza en la primera columna los niveles a los que se pueden
aplicar los incentivos, ya sea individual y/o organizacional ya que la existencia de
un nivel no excluye al otro. De acuerdo a lo presentado, se retoma la idea de que
existen tanto incentivos pecuniarios como no pecuniarios, pero aquí
denominaremos físicos y/o materiales a los primeros y simbólicos a los segundos.
Finalmente quien es el proveedor o planeador se ha situado únicamente en dos
niveles, el mercado y las instituciones, no es que no interesen los incentivos que
se proveen dentro de los propios grupos o aquellos que provengan de manera
individual. Pero será necesario establecer una jerarquía entre el nivel micro, meso
y macro para poder definir qué tipo de incentivos existen en cada uno de ellos.
Para el caso que aquí nos ocupa se plantearan en el siguiente apartado, una vez
que se hayan integrado para el caso de la innovación en la Biotecnología
Agroindustrial-Alimentaria.

2.3 El Problema del Principal y el Agente

El planteamiento hecho hasta ahora en esta investigación puede complementarse


con el modelo del principal y el agente, dado que lo que interesa es analizar cómo
es que las instituciones-gobierno establecen una serie de esquemas de incentivos
para los agentes involucrados en el desarrollo de innovaciones en la Biotecnología
agrícola – alimentaria, así como la dinámica y los resultados, es relevante un
modelo que ayude a comprender dicho proceso y que complemente lo
anteriormente discutido.

58
El modelo de principal y el agente se centra en las dificultades que surgen en las
organizaciones bajo condiciones de información incompleta y/o asimétrica entre el
principal, generalmente el dueño de la empresa o el director de la institución, y el
agente. Generalmente el empleado que ha sido contratado por el principal para
desempeñar ciertas tareas (Kastl et al. 2008; Ellingsen y Johannesson, 2000).

La existencia de información asimétrica entre los miembros de una organización o


de un equipo puede derivar en la formulación de objetivos y motivaciones
individuales, produciendo problemas de coordinación y posibles conflictos con los
objetivos de la organización (Laffont y Martimort (2002). Arrow (1963) ha señalado
que una vez que el agente ha sido contratado sobre la base de su conocimiento
especializado, es muy difícil que el principal pueda realizar una supervisión
exhaustiva sobre la conducta y el desempeño del agente. Por tanto, si el agente
formula una función objetivo diferente, pero no posee información privada (no hay
información asimétrica), el principal podría proponer un contrato (sistema de
incentivos) para controlar el agente y orientar su conducta hacia el cumplimento de
los objetivos que a él le interesan, en caso contrario, se produce un conflicto de
intereses que puede llevar a conductas no cooperativas (Amaro, 2008) debido
sobre todo a conductas oportunistas y a la falta de confianza (Amaro, et al 2009).

El problema central en el modelo convencional del principal y el agente consiste


en hacer converger o en armonizar los objetivos e intereses individuales del
agente con los objetivos e intereses del principal, en otras palabras, como lograr,
que las acciones (conducta) del agente se alineen con los objetivos del principal.
Desde el enfoque de la teoría económica de los incentivos, la implantación de un
sistema de incentivos adecuado por parte del principal generaría una conducta
cooperativa del agente tendiente a la consecución de los objetivos del principal,
sin embargo, desde el punto de vista de la teoría psicológica y sociológica de los
incentivos ello no necesariamente ocurriría y podría incluso producir un efecto
adverso, es decir, el agente podría desarrollar una conducta adversa a la
colaboración, o colaborar pero en conflicto con el sistema de incentivos informales
y contractuales (Amaro, 2008)

El argumento de Bénabou R. y J. Tirole (2003) sugiere que en algunas


circunstancias el principal y el agente poseen información asimétrica sobre las
tareas y los pagos que implica la colaboración. En esos casos, el agente tiene por
lo general mejor conocimiento del tipo de interplay que se genera entre los
agentes, así como sobre los beneficios (pagos) que resultan y se esperan de la
colaboración. Esta información, se obtiene de colaboraciones previas o de sus
propias experiencias durante el proceso de colaboración (Axelrod, 2004 y 2006).
59
El agente también recibe privadamente otras señales (incluyendo información de
terceras partes) sobre la atractividad y los riesgos de la colaboración. El principal,
por su parte, también podría tener información privada sobre posibles
colaboraciones, sobre los riesgos y oportunidades de la interacción, y sobre los
beneficios que podrían derivarse de ella (Amaro, 2009).

A continuación se presenta esquemáticamente como es que se visualiza a través


del modelo del principal y el agente el problema aquí planteado. En el círculo
central se localiza el “principal” que en este caso es el Gobierno, en términos
amplios él es también la Institución central dedicada a la formulación de reglas y
normas. Este tiene incidencia sobre los agentes, en este caso pusimos algunos de
los más relevantes, pero es claro que para cada caso que se analiza en esta
investigación esto podría variar. De manera general es como se representa el
esquema del principal y el agente con los actores genéricos de la relación en la
Biotecnología en México.

2.1 Modelo Básico de El principal y el agente aplicado al contexto Biotecnológico

Principal o Planeador

Agente 5
Agente 1
Gobierno
Incentivos Incentivos
Instituciones
Empresas de Educación
Superior
Incentivos
Incentivos

Incentivos

Agente 4

Agente 2 Agente 3 Centros


Públicos y
Agente 1
1Capital de
Organismos Fuente: elaboración propia
Riesgo Privados de
Intermedios
Investigación

Elaboración propia

60
En la figura 2.2 se muestra una parte complementaria de la figura 2.1, aquí se
observa que el gobierno toma forma a través de distintas organizaciones, que
funcionan como intermediarios entre los agentes y el principal. De cada
organización (dependiente del Gobierno) se desprenden una serie de “incentivos”
“normas o reglas” que se es el esquema de incentivos. En ocasiones hay
incentivos que se desprenden de dos o más organizaciones, aquí se ejemplifica
con lo que sucede entre los consejos estatales y los gobiernos estatales, tanto con
el Programa de CyT como con la Ley Estatal de CyT. No se desglosa cada uno de
los incentivos que influyen el sistema dado que existen particularidades que serán
analizadas posteriormente.

2.2 Modelo ampliado el principal y el agente aplicado al contexto Biotecnológico

Organismos
Reguladores
Leyes
Reglamentos

Consejos
Estatales Gobierno CONACYT
de Ciencia
y
Tecnología
Fuente: Elaboración Propia
Fondos a laElaboración
Fuente: Innovación, alPropia
Programas desarrollo Científico y
de Programa Estatal Tecnológico
promoción de CyT Gobiernos
a la CYT Estatales
Programas de Estímulos
Ley Estatal de CyT

Elaboración propia

El planteamiento del Principal y el Agente nos ha servido para mostrar, en


términos muy amplios, cuales son los principales actores del problema de
investigación. Empero es pertinente mencionar que aquí se considera que además
de que existe direccionalidad del Principal o sea del Gobierno, a través de las
diversas organizaciones ya mencionadas, existe también influencia de los agentes
hacia los esquemas de incentivos que plantea el Gobierno, de manera que más
allá del esquema de la figura 1 podríamos considerar interacciones o flechas
bidireccionales.

61
Se establece lo anterior dado que también existen grupos, organizaciones o
individuos que han influido o han tratado de influir en el esquema de incentivos
que plantea el Gobierno.

En algunos casos lo hacen para promover el desarrollo tanto de la investigación


como de las innovaciones, en otros casos lo hacen buscando una legislación más
férrea o consistente y en algunos otros para que existan prohibiciones para cierto
tipo de actividades. En los siguientes capítulos se retomará este aspecto ya que
es uno de los más importantes para comprender la dinámica de la Biotecnología
Agroindustrial - alimentaria.

2.4 Barreras e Incentivos para la Innovación

Se ha considerado que para comprender el tema del desarrollo de innovaciones


en la Biotecnología Agroindustrial -Alimentaria en países como México, es
necesario construir un marco teórico que contribuya a la explicación de cómo las
instituciones son generadoras de incentivos y cómo estos pueden ser un
mecanismo eficiente para lograr determinado tipo de conductas favorables a la
innovación, reduciendo la incertidumbre. Sin embargo, las particularidades del
caso mexicano permiten y obligan a considerar elementos que en otros estudios
no han sido tomados en cuenta; uno de ellos es el enfoque de las barreras a la
innovación, dado que al parecer es uno de los grandes problemas en el caso que
aquí se analiza.

Existen diversos factores que se han considerado como inhibidores de la


innovación; éstos han sido estudiados a niveles que van desde el ámbito
individual, organizacional y a nivel país. En general se ha puesto atención en el
nivel organizacional, considerando a la empresa como uno de los lugares donde
toma lugar el proceso innovador, pero a diferencia de esto, aquí se considera que
el proceso innovador al ser un proceso complejo que implica la intervención de
muy distintos actores – no sólo la empresa- es necesario reconocer que existen
otros niveles que también son relevantes.

En esta investigación definimos como “barrera” a cualquier factor que influencia


negativamente en el proceso de innovación (Piatier, 1984), de manera que son
inhibidores, obstáculos o limites. Mientras que los factores que influencian
positivamente son llamados “facilitadores” pero que en términos de esta
investigación son similares al concepto de incentivos, considerando que la
innovación es un fenómeno no natural que requiere de motivaciones, de un
esfuerzo extraordinario, tolerancia, capacidad de enfrentar riesgos y coordinación
entre los participantes (Hadjimanolis, 1999; Tidd et al.,1997).
62
Debido a que la mayoría de los enfoques sobre barreras a la innovación
consideran a la empresa como el núcleo donde se llevan a cabo las innovaciones,
las clasificaciones existentes centran su atención en este tipo de organización. Ya
que en esta investigación se consideran a muchos más actores, estas
clasificaciones se complementaran con algunas observaciones.

De acuerdo al origen de la barrera, se considera que existen barreras internas y


externas a la empresa aquí, consideraremos a cualquier organización. Las
primeras son aquellas, que como su nombre lo indica provienen de la propia
dinámica de la organización y se puede relacionar con sus hábitos, rutinas o
procesos. Las externas provienen del ambiente, por lo tanto son exógenas a la
organización (Hadjimanolis, 2003).

2.3 Barreras internas y externas para la innovación


Externas Internas
Relacionadas con el Mercado Relacionadas con las Personas
Relacionadas con el Gobierno Relacionadas con la Estructura
Otras Relacionadas con la Estrategia
Fuente: Hadjimanolis (2003)

El cuadro anterior muestra la taxonomía que será retomada para esta


investigación. A continuación se detalla cada una de las anteriores categorías 15.
1. Barreras externas
Barreras relacionadas con el mercado (fallas de mercado)
a. Escasa o insuficiente apropiabilidad de las rentas o ganancias derivadas de
la innovación por parte de la empresa
b. Inadecuado tamaño de la I&D
c. Carácter público de la innovación y su difusión social (know-how, spillovers)
d. Deficiencia de proveedores o consumidores
e. Visión de corto plazo
f. Problemas financieros y de inversión (altos riesgos que representa)
Barreras relacionadas con el Gobierno
a. Procedimientos burocráticos
b. Problemas de comunicación en la política (discriminación de ciertos grupos)
c. Leyes y regulaciones inadecuadas o insuficientes que incrementen la
incertidumbre y el riesgo, en lugar de disminuirla
d. Problemas en torno a la propiedad intelectual (laxa o muy fuerte)
e. Sistema de impuestos

15
Basado en la taxonomía presentada por Hadjimanolis, 2003

63
f. Rigideces o inercia institucional (entiéndase como dinámica de las
organizaciones y resistencia al cambio)
Otros
a. Problemas técnicos (obsolescencia tecnológica o falta de infraestructura)
b. Normas, valores y actitudes adversas de la sociedad hacia la C,T e I
c. Problemas de acceso al conocimiento y cooperación (nivel inter-
organizacional)
2. Barreras Internas
Relacionadas con las personas
a. Voluntad, capacidad y habilidad de los miembros de la organización
Estructurales
a. Flujos inadecuados de comunicación entre los miembros de la organización
o entre organizaciones
b. Sistemas inadecuados de incentivos
c. Obstrucción y problemas entre áreas o departamentos
d. Problemas en cuanto a la jerarquía y gobernanza
e. Inercia organizacional y cultural (normas, valores y creencias)
f. Juegos políticos internos
Estrategia
a. Rigideces para adaptarse al ambiente
b. Rigideces para cambiar las capacidades centrales
c. Problemas de adaptación y nuevas combinaciones organizacionales y
técnicas

Hasta ahora se ha tratado de estructurar un andamiaje teórico que sea eficiente


para analizar y comprender como es que las instituciones generan una serie de
incentivos para promover, desarrollar o frenar cierto tipo de comportamientos. En
el caso de esta investigación interesa como es que las estructuras institucionales
que existen y operan en México, relacionadas con la Biotecnología agrícola-
alimentaria han tenido incidencia en el desarrollo de capacidades de innovación.

Los planteamientos de los apartados previos han sido construidos para contribuir
al análisis de estructuras institucionales que existen y operan en un contexto
histórico de path dependence tecnológico, en el que puede encontrarse una
determinación causal importante entre los factores tecnológicos del sistema
productivo concentrados fundamentalmente en la empresa, y el marco institucional
conformado por derechos de propiedad eficientes y funcionales, y por políticas
públicas diseñadas para impulsar la competitividad nacional con base en el
avance tecnológico. Pero ¿qué ocurre en sectores intensivos en conocimiento en
países emergentes en los que no existe una matriz institucional consolidada que
fomente la innovación empresarial? ¿Los factores institucionales son importantes
64
para comprender la generación de innovaciones en este tipo de contextos?; en
caso de que lo sean ¿qué debe entenderse por factores institucionales en este
contexto?

Una de las hipótesis de esta investigación consiste en plantear que: en sectores


intensivos en conocimiento tales como la Biotecnología, establecidos en naciones
emergentes como México, donde existe una estructura institucional
macroeconómica difusa y disfuncional, y que por lo tanto establece incentivos
contradictorios para su constitución y consolidación, existen factores
institucionales que emergen de la interacción entre los agentes directamente
involucrados en el procese de innovación, tales como la cooperación, el desarrollo
de estrategias compartidas, normas de acción basadas en la confianza. Y estos
factores institucionales de carácter microeconómico se encuentran sustentados
primordialmente en incentivos personales, ya que comúnmente no existen
orientaciones de política general que establezca incentivos macroeconómicos para
las actividades tecnológicas emergentes o, en el caso de existir, se encuentran
desarticuladas y no representan una aplicación de uso generalizado para orientar
las actividades productivas.

Pero antes de poder probarla o desecharla como hipótesis de trabajo, es


necesario plantear lo que en esta investigación se considera como incentivos a la
innovación. De manera que se pueda establecer claramente tanto los niveles
como los tipos de incentivos que se consideraran para el análisis en esta
investigación.

2.4 Estructura de Incentivos


Tipo de Incentivo Estructura
Programas de CyT a nivel federal
Indirecto y estatal

Leyes y reglamentaciones
No Pecuniario

Directo relacionadas con la Biotecnología


Extrínseco

Agrícola y Alimentaria
internacionales, nacionales y
estatales

Fondos para la Ciencia,


Directo Tecnología e Innovación
(Estatales, Sectoriales, Federales)
Extrínseco
Pecuniario

Reconocimientos y Premios
Indirectos otorgado por un tercero
(monetarios)

65
Simbólicos Reconocimiento social, liderazgo,

Intrínsecos
orgullo

Elaboración Propia

Conclusiones

Debido a que no existe una teoría unificada de las instituciones y la mayor parte
de los estudios empíricos acerca del proceso de innovación en sectores e
industrias específicas retoma concepciones macroeconómicas descritas en el
capítulo anterior, es pertinente aclarar que la comprensión de los procesos
innovadores en el sector biotecnológico mexicano requiere otro enfoque de
análisis institucional. Por tal motivo, en esta investigación se retoma una definición
micro-analítica de instituciones propuesta por Ostrom (2005), en la que se
conciben como toda aquella prescripción utilizada por los individuos para organizar
sus interacciones. Esta definición es útil en un contexto donde priva la ausencia de
un marco regulatorio general que establezca los incentivos adecuados para el
desarrollo del sector biotecnológico, y donde cobra importancia el proceso de
auto-organización que emerge a partir de las aspiraciones, capacidades y
motivaciones presentes en los individuos relacionados con el sector, pero donde
además pueden existir una serie de incentivos que distorsionen el sistema o que
en algunos casos más allá de ser incentivos se conviertan en barreras.

Las características de la Biotecnología en los países desarrollados son distintas a


las de los países emergentes; las grandes empresas en países como México no
financia investigaciones a granel, por el contrario, son selectivas en la manera en
que invierten sus recursos. Y aunque se cuenta con una importante infraestructura
científico-educativa, esta no tiene un financiamiento significativo que proporcione
los recursos necesarios a los centros universitarios de investigación, por lo que
muy pocos se encuentran en la frontera de la investigación científica y cuentan
con reconocimiento a nivel internacional. El proceso es también distinto en cuanto
a los incentivos que alientan a las empresas nacionales y extranjeras a
relacionarse con las universidades generadoras de I + D. Algunas empresas
extranjeras reconocen el potencial de ciertas áreas de investigación y las
financian, sin embargo para las empresas nacionales aún no existe una cultura
que involucre el trabajo colaborativo y mucho menos la capacidad para invertir en
un proceso azaroso y riesgoso como la I + D.

66
Todo lo anterior nos obliga a pensar el desarrollo de la Biotecnología bajo otra
mirada, dado que no existen las condiciones que sí existen en otros países, es
necesario reelaborar un marco explicativo que en primer lugar nos ayude a
encontrar las barreras y en caso de que existan incentivos, nos permita dilucidar si
estos son efectivos, contradictorios si logran alinear los intereses hacia un objetivo
común o bien si es necesario un rediseño institucional que vaya más allá de las
organizaciones formales y que implique una reestructuración social que involucra
desde la percepción de la ciencia, la tecnología y la innovación.

El marco teórico aquí presentado esboza algunos de los elementos que se han
considerado como fundamentales para analizar el proceso en un país como
México, donde por la evidencia hasta ahora hallada, parece indicar graves
problemas institucionales no referentes a la inexistencia de las mismas, sino a
vacios y fallas de coordinación y coherencia que han distorsionado distintos
procesos en la ruta de la innovación.

67
Capítulo 3
Capacidades para el Desarrollo Científico, Tecnológico y de Innovación

Introducción

En el contexto de la economía de la innovación, el cambio tecnológico y en el


enfoque de los sistemas de innovación, es de especial importancia el estudio de
los elementos clave que explican el desempeño diferenciado entre regiones,
sectores o países. El estudio de las capacidades ha sido uno de los puntos
nodales en este sentido, dado que se han identificado como uno de los elementos
dinamizadores de los distintos casos estudiados.

Actualmente todas las teorías y modelos acerca del proceso de innovación


resaltan la importancia de desarrollar capacidades científicas y tecnológicas de
manera que de forma sincrónica fomenten la generación de innovaciones (Nelson,
1987; Dosi, 1988; Lall, 1992; Lundvall. 1992), además de caracterizar cuáles son
las capacidades que influyen en el proceso de desarrollo y crecimiento económico
(Edquist, 1997; Cohen y Levintal, 1990).

Existen diversas taxonomías utilizadas para el estudio de capacidades, aquellas


que consideran como determinantes las capacidades tecnológicas y de
innovación, o las que ponen mayor énfasis en las de absorción o en las llamadas
capacidades dinámicas. Dependiendo del objeto de estudio y las características
del mismo, es que se pone mayor atención a unas u otras.

Generalmente se ha estudiado el desarrollo de capacidades tecnológicas y por lo


tanto se focaliza en las actividades de la empresa, dado que se parte de la idea de
que es allí donde se conjuntan los elementos para desarrollarlas. O bien se parte
del tema de capacidades de absorción dado que en ocasiones es de suma
importancia el proceso de aprendizaje previo de los agentes para poder desarrollar
otro tipo de capacidades, como las de innovación.

En esta investigación se consideran cuatro tipos de capacidades, las científicas,


las tecnológicas, las de absorción y las de innovación. Si bien existe cierta
correspondencia y complementariedad entre las tres últimas y en ocasiones se
toman como sinónimos y sabemos que no pueden estudiarse unas sin las otras,
aquí se opto por marcar algunas pequeñas diferencias entre lo que significan unas
y otras debido a las características del objeto de estudio.

Se considera que para entender el desarrollo innovador de sectores como el de la


Biotecnología, donde el conocimiento científico es un elemento clave es necesario
68
tomar en cuenta también a las capacidades científicas como punto de partida,
para así entender a las capacidades tecnológicas, de absorción y las de
innovación.

La importante contribución del conocimiento y el papel que desempeña como


catalizador tecnológico ha implicado que haya mayor atención en las formas qué
se genera, traduce, transfiere y utiliza por parte de todos los agentes involucrados;
desde estudiantes, investigadores, científicos, técnicos, desarrolladores,
tecnólogos y empresas. Las capacidades científicas implican el estudio de este
tipo de actores y las relaciones que surgen en ese entramado.

Diferenciar entre capacidades tecnológicas y de innovación es importante, dado


que en el trabajo de campo realizado se encontró con un tipo de actores que
desarrollan un tipo de capacidades específicas que aunque parten de la ciencia,
muchas veces tienen que ver con aplicaciones, servicios o modificaciones técnicas
o tecnológicas, pero que no son propiamente capacidades para innovar, sino un
paso previo o en ocasiones simultaneo y/o complementario. Además de que son
agentes que no tienen los recursos para poner productos en el mercado, no tienen
la figura de una empresa, sino de centros de investigación que aunque trabajan
muy de cerca con ellas, no llegan a desarrollar ni la estructura ni las capacidades
de una empresa. Por eso la necesidad de diferenciar entre unas y otras. Y ante
este panorama, las capacidades de absorción se plantean como un paso previo
para éstas.

La estructura del presente capítulo es la siguiente, en el primer apartado se


presenta una definición de lo que aquí se considera como las capacidades
científicas, a continuación lo que se considera como las capacidades tecnológicas,
después las de absorción y finalmente una discusión acerca de las capacidades
de innovación.

3.1 Capacidades Científicas

El concepto “capacidades científicas” trata de dar cuenta de un conjunto de


recursos y aptitudes desarrolladas por todos aquellos agentes involucrados con la
ciencia. Además de considerar también, los resultados obtenidos.

Existen diversos niveles de desarrollo de las capacidades científicas, en primer


lugar a nivel micro se localiza a los individuos y por lo tanto las habilidades de
aprendizaje, investigación y transmisión del conocimiento a través de distintos
canales, ya sea físicos (libros, artículos, etc.) u orales (conferencias e impartición
de cátedra). A partir del anterior nivel, a continuación se localizan las capacidades
69
meso o intermedias que implican el desarrollo organizacional reflejado en el
establecimiento de grupos de investigación en universidades, redes de
colaboración y centros de investigación, además de la formación de recursos
humanos especializados y los resultados de las colaboraciones como son los
artículos o en algunos casos patentes.

El concepto de capacidades científicas evoca su uso en torno a un tipo particular


de actores y de conocimiento. En el nivel micro se considera a científicos,
investigadores y estudiantes como los agentes que desarrollan este tipo de
capacidades, donde el conocimiento científico es el objetivo primordial.

Comúnmente el análisis de las capacidades científicas se hace mediante una serie


de indicadores bibliométricos (autorías, coautorías, citas, patentes) los cuales
reflejan los resultados de la actividad científica, sin embargo en áreas como la
Biotecnología y sobre todo las áreas dedicadas a la agricultura y a los alimentos
esto puede ser un tanto engañoso dado que en ocasiones no son investigaciones
de relevancia internacional, sino que responden a necesidades muy locales que
son poco susceptibles a ser publicadas. Tampoco podría evaluarse a través de
patentes, dado que es un indicador de mediano y largo plazo y un mecanismo al
que pocas veces acuden los investigadores, sobre todo porque no existe ningún
incentivo que los motive.

Otro mecanismo es el análisis de las redes de investigación o colaboración que se


forman, para así conocer la dinámica, pero esto se puede hacer a través de las
publicaciones a nivel internacional en revistas indexadas, lo que selecciona sólo
una parte de lo que sucede en la realidad y queda fuera otra parte que no publica
a nivel internacional o que no publica.

A pesar de lo anterior y con las limitantes que se mencionaron, aquí se hará un


análisis de las capacidades científicas, tratando de aproximarse lo más posible
con datos sobre número de investigadores en el sistema nacional de
investigadores de CONACYT (SNI), número de graduados (licenciatura y
posgrado) en Biotecnología y áreas relacionadas con la agroindustria y los
alimentos, posgrados en Biotecnología y áreas a fin y redes de colaboración en
publicaciones indexadas. Esto puede ser un antecedente de la capacidad
científica acumulada en el país que además se complementa con las entrevistas
realizadas, dado que los juicios acerca de la calidad se hacen conforme a la
opinión de los propios expertos reconocidos a nivel nacional e internacional que
fueron entrevistados.

70
3.2 Capacidades Tecnológicas

El concepto de “capacidades tecnológicas” ha sido utilizado a nivel micro para


analizar la manera en que las empresas desarrollan, transfieren, imitan, adaptan y
asimilan conocimiento tecnológico. Además de que ayuda a comprender lo que
Dosi (1988) llamo como la permanente existencia de asimetrías entre empresas,
en términos de los procesos tecnológicos y la calidad de los resultados obtenidos.

El proceso de generación o desarrollo de capacidades tecnológicas implica


diversas fases y características, que dependerán de cada una de las empresas
analizadas. Se considera que existe un proceso de absorción o creación de
conocimiento tecnológico que puede provenir de fuentes externas o internas, esto
a su vez va generando una serie de habilidades que aplicadas tanto a procesos
previamente desarrollados, nuevos procesos o nuevos productos es que se
generan innovaciones de diversos tipos.

Existen diversas categorizaciones sobre el tipo de capacidades tecnológicas


desarrollas por las empresas (Katz, 1987; Dahlman et al. 1987; Lall, 1987).
Generalmente se considera que existen tres tipos de capacidades tecnológicas:
básicas, intermedias y avanzadas. Partiendo de la discusión presentada
previamente sobre el tema, sólo se mencionará aquí que el concepto que se utiliza
en esta investigación sobre dicho constructo teórico, no sólo se refiere a aquellas
capacidades que dan cuenta de la evolución de las empresas, sino que se
considera también a las capacidades que desarrollan laboratorios públicos o
privados que tienen incidencia directa con empresas.

Al no ser las empresas la unidad de análisis de esta investigación, sino cómo es


que los incentivos generados por las instituciones repercuten en el desarrollo de
capacidades científicas, tecnológicas y de innovación. Es que cobra relevancia el
análisis de las capacidades tecnológicas como un aspecto más amplio.

El concepto de capacidades tecnológicas describe las habilidades más amplias


que se requieren para iniciar un proceso de mejoras conducentes a un sendero de
crecimiento y desarrollo sostenido. La definición de capacidades tecnológicas
implica conocimientos y habilidades para adquirir, usar, absorber, adaptar, mejorar
y generar nuevas tecnologías (Bell y Pavitt, 1995; Lall, 1992). Partiendo de esta
definición, se entiende que las capacidades tecnológicas incluyen las capacidades
de innovación y las capacidades de absorción (Lugones et al., 2007).

Se parte de que el desarrollo de las capacidades tecnológicas es el resultado de


inversiones realizadas por las empresas en respuesta a estímulos externos e
71
internos, y en interacción con otros agentes económicos tanto privados como
públicos, locales y extranjeros (Lall, 1992). Esto implica que en la construcción de
capacidades tecnológicas hay factores que son específicos de la empresa y otros
que son propios de un país dado (régimen de incentivos, estructura institucional y
dotación de recursos–inversión física, capital humano y esfuerzo tecnológico). Por
lo tanto, el desarrollo de las capacidades es el resultado de la interacción compleja
de la estructura de incentivos con los recursos humanos disponibles, los esfuerzos
tecnológicos realizados y la incidencia de factores institucionales diversos. En
función de ello, las capacidades tecnológicas aparecen en distintos niveles
(Lugones et al., 2007). Así, es posible identificar la acumulación de capacidades
tecnológicas en el nivel microeconómico (en las firmas), pero también en el nivel
nacional (macroeconómico) y sectorial (mesoeconómico).

Al analizar al sector biotecnológico agroindustrial-alimentario en México se


encontró que existen un tipo de agentes que no son empresas, pero que
desarrollan capacidades tecnológicas entendidas como una serie de actividades
para transformar el desarrollo científico en desarrollo técnico y tecnológico,
aplicaciones que mejoran los procesos o productos o bien algunos servicios que
pueden ser usados por el sector, ya sea a nivel de la producción o de la ingeniería
y el diseño. Sin embargo, estos agentes no tienen la capacidad de desarrollar
innovaciones en sí mismas, son un tipo de agente puente que establece
comunicación con la investigación básica y la transforma en investigación aplicada
y que es capaz de resolver problemas de la industria.

Estos agentes se componen por centros de investigación públicos, algunos


privados y laboratorios de universidades. Que a su vez cuentan con investigadores
básicos y tecnólogos. Su labor no es el desarrollo de innovaciones, dado que no
pueden ponerlos en el mercado debido a la falta de financiamiento y a sus propias
características. Son traductores de necesidades y resuelven problemas
específicos. Desde nuestra perspectiva son agentes que tienen un cúmulo de
capacidades tecnológicas que muestran características distintas a las que la teoría
convencional sobre capacidades menciona.

Aquí consideramos que lo que han llamado como capacidades tecnológicas son
las capacidades de innovación, y las capacidades tecnológicas tienen otro tipo de
características en un plano intermedio entre las científicas y las de innovación.
Esta diferencia es válida ya que se parte de condiciones diferentes; por ejemplo en
los países desarrollados la tecnología está dada, de manera que las empresas
sólo aparecen como tomadoras de la misma, aprovechan lo existente y la decisión
primordial consiste en encontrar la combinación de trabajo y capital que maximice
sus beneficios (Lall,1992). Sin embargo en países como México es de crucial
72
importancia como es que se adaptan y adoptan los conocimientos desarrollados
en las universidades o centros, pero esto ha implicado una labor de traducción por
un tercer grupo de agentes. Esto debido a las características de las empresas que
son poco innovadoras y a las propias de las universidades y centros que no tienen
la vocación de transmisión de sus investigaciones y mucho menos la cultura de
solución de problemas industriales.

En esta investigación consideraremos como capacidades tecnológicas a los


proyectos incentivados por medio de los fondos y herramientas de CONACYT, a
través de los Fondos Mixtos (FOMIX) y el Fondo Sectorial SAGARPA-CONACYT-
COFUPRO dado que son proyectos que buscan solucionar algún tipo de
problemática del sector, sin que esto represente una innovación en sí misma, pero
si es un avance en cuanto al uso del conocimiento científico, susceptible de ser
aplicado a áreas muy específicas y como actores a los centros públicos
CONACYT en su vertiente tecnológica.

3.3 Capacidades de Absorción

El concepto de capacidades de absorción ha sido trabajado fundamentalmente por


Cohen y Levinthal en el documento de 1989, Innovation and Learning: the two
faces of R&D, y en el de 1990, Absorptive Capacity: A New Perspective on
Learning and Innovation. En el primero de ellos se plantea que la investigación y el
desarrollo tienen un doble rol, por un lado son generadores de nuevo
conocimiento, pero en el caso de las empresas también generan capacidades
endógenas o de identificación, asimilación y explotación del conocimiento
disponible. La I+D se considera un proceso de aprendizaje y un proceso de
creación de conocimiento.

La capacidad de absorción es la habilidad de las empresas para reconocer el valor


de la información nueva y externa, así como asimilarla y aplicarla con fines
comerciales, lo cual es necesario para la generación de capacidades de
innovación (Cohen y Levinthal, 1990)16.

El desarrollo de capacidades de absorción se ve influenciado por los llamados


factores contingentes (Todorova y Durisin, 2003): a) Mecanismos de integración
social, dado que son procesos organizacionales que dependen de los procesos de
interacción, colaboración e integración entre todos los miembros de la
organización; b) apropiabilidad, que es una de las partes fundamentales del

16
Zahra y George (2000) identifican no tres, sino cuatro dimensiones entre las que se encuentran, la
adquisición, asimilación, transformación y explotación del conocimiento externo.

73
proceso de retroalimentación, a través del cual las organizaciones refuerzan e
incentivan su actividad de absorción y c) relaciones de poder, planteadas en dos
niveles, internas a la organización o la jerarquía de gobernanza y las externas que
consideran las relaciones con proveedores, clientes y accionistas.

Hasta ahora se han identificado tres niveles para las capacidades de absorción
(Cohen y Levinthal,1990; Albaladejo, 2001; Giuliani, 2003): a) Empresa u
organizacional b) cluster y c) país. Además, dicha capacidad puede ser generada
y fortalecida a través de diversas formas (Dutrénit y De Fuentes; 2009):

1. Como un subproducto de la I+D


2. Como un subproducto de las operaciones de manufactura de las empresas
3. Por inversión directa, cuando las empresas envían personal para
entrenamiento técnico avanzado.

Lo anterior es sumamente relevante ya que si bien la I+D son fundamentales para


el desarrollo de este tipo de capacidades, en países como México existen un gran
número de empresas que las adquieren por distintas vías, como las mencionadas
previamente. Por ejemplo, existen autores como Lim (2000) quien plantea que al
utilizar a la I+D como indicador de la capacidad de absorción, nos encontramos
ante el problema de diferenciar si la empresa se volvió competitiva debido a la
capacidad de absorción o la competitividad que la I+D implica por sí misma.

3.1Antecedentes y resultados de la capacidad de absorción

Elementos que anteceden Resultados


1. Conocimiento previo relacionado
a. Dominio en diferentes campos del Capacidades innovadoras
conocimiento
b. Habilidades básicas Desempeño innovador
2. Mecanismos internos de integración del
conocimiento Formación más precisa de expectativas
a. Resolución de problemas
b. Experiencia previa de aprendizaje
c. Lenguaje compartido
Martínez R. (2004)

En general, el tema de capacidades de absorción ha sido desarrollado y usado


para evaluar el desempeño de las empresas, por lo que se han utilizado distintas
variables para medirlas, desde la interacción con el entorno exterior, las
características del conocimiento, la postura estratégica de la empresa, las

74
posibilidades de transmisión del conocimiento propio y externo dentro de la propia
organización (Quevedo, 2003; Marín y Bell, 2003 y Giuliani, 2003).

Para cada una de las categorías anteriores, se puede medir con diversas variables
y construir indicadores. Entre las más relevantes se encuentran (Martínez, 2004):

o Diversidad en la formación de los empleados


o Cualificación de los empleados
o Inversión en formación
o Especialización tecnológica
o Capacidad de desarrollo tecnológico
o Capacidad para adoptar tecnología externas
o Conocimiento de las tecnologías de los competidores
o Conocimiento de las necesidades de los clientes
o Esfuerzo orientado al desarrollo de nuevos productos
o Esfuerzo orientado a la reducción de costos
o Elevadas economías de escala

Existen diversas maneras de medición de las capacidades, pero la mayoría


coincide en que los indicadores utilizados deben relacionarse con: 1) formación y
aprendizaje del personal, 2) características y conducta organizacional, 3)
tecnología incorporada en equipos, 4) actividades de experimentación; y 5)
estructura de vínculos (Dutrénit y De Fuentes, 2009; De Fuentes, 2009). Debido al
interés de esta investigación, no se realizará una evaluación de las capacidades
de absorción tal y como se suele hacer, a través del análisis multivariado, pero sí
se consideraran parte de las variables antes descrita para realizar un análisis
cualitativo en términos del impacto que estas tienen en el desarrollo de
capacidades de innovación.

3.4 Capacidades de Innovación

Desde la perspectiva de esta investigación las capacidades de innovación son


aquellas que desarrollan las empresas para adaptar, usar y desarrollar
innovaciones. Son las habilidades que los agentes desarrollan para alcanzar
nuevas combinaciones de los factores existentes, internos a la organización y de
su entorno (Lugones et al., 2007). La idea es que cuanto mayor es la variedad de
estos factores dentro de un sistema dado, mayor es el alcance para nuevas
combinaciones de aquéllos, esto es, nuevas innovaciones y más complejas o
sofisticadas. Esto implica que las empresas tienen que aprender, monitorear los
avances de otros actores en el mercado, y buscar nuevas ideas, insumos y
recursos de inspiración. En la medida en que más empresas sean capaces de
75
aprender de la interacción con los recursos externos, mayor será la presión para
los seguidores y mejor será la capacidad de innovación de éstas y del sistema en
su conjunto (Fagerberg, 2003).

En los países en vías de desarrollo es de vital importancia el desarrollo de las


capacidades de absorción, las cuales pueden ser consideradas como un paso
previo al desarrollo de capacidades de innovación. Las capacidades de absorción
tienen tres dimensiones básicas:

1. Identificación de nuevo conocimiento o tecnología


2. Asimilación del nuevo conocimiento o tecnología
3. Explotación del conocimiento o tecnología

Las tres se encuentran sujetas al conocimiento previo adquirido por los agentes,
es decir por el proceso de acumulación de conocimiento y habilidades. No es
posible el desarrollo de capacidades de innovación sin un contexto previo de
desarrollo de habilidades que les permitan a los agentes apropiarse de lo nuevo.
Esto a su vez, significa el desarrollo de capacidades dinámicas o la habilidad de
adaptarse constantemente a las nuevas necesidades internas y externas, lo que
implica un constante monitoreo del ambiente y de la propia organización.

En esta tesis se considera que las capacidades de innovación son más que las
capacidades tecnológicas, dado que implican la habilidad no sólo de desarrollar o
mejorar un proceso y/o producto, sino la capacidad de situarlo en el mercado.

No significa que los tipos de capacidades antes descritas estén separadas, o


pertenezcan a momentos diferentes, las tres son complementarias y se deben
entender como parte de un proceso. Debido al desarrollo de la teoría es aún
confuso diferenciar entre las capacidades tecnológicas y las de innovación, ya que
como se explico antes generalmente son usadas como sinónimos, pero para el
caso de estudio presente en esta investigación vale la pena hacer marcar ciertas
diferencias, no porque la teoría este equivocada, sino porque las necesidades de
explicación para este fenómeno en particular obligan a separar las categorías.

Es importante mencionar que hasta el momento de realizar esta investigación no


se encontraron trabajos que realizaran evaluación de las capacidades
innovadoras, ya que la mayoría de los estudios previos se concentran o en las
llamadas capacidades “tecnológicas o de absorción”. Razón por la cual esta
investigación propondrá una forma de evaluación de la capacidad innovadora de
los agentes aquí analizados.

76
Conclusiones

El contexto bajo el cual se encuentran los países en vías de desarrollo implica


realizar un esfuerzo para el uso de los conceptos utilizados en los países
desarrollados. La mayoría de las ocasiones se adapta el fenómeno estudiado y
con las limitaciones existentes se analiza, aquí se consideró que era necesario
replantear parte de la teoría ya que no coincidía con el caso de estudio. Esto ha
sido un proceso constante de retroalimentación, porque si bien al realizar el
trabajo de campo, este se basó en las concepciones teóricas preestablecidas,
éstas se modificaron una vez que se realizó la investigación y esta arrojó un tipo
de actores con características que no ha sido considerada.

Lo anterior motivó al replanteamiento de lo que son las capacidades tecnológicas


y las capacidades de innovación, además de desarrollar un concepto sobre
capacidades científicas, ya que si bien existe una constante preocupación por
medirlas, existe poco trabajo por definirlas, probablemente esto se debe a que
éstas se modifican dependiendo del contexto y lo que en cada caso se busque
analizar. Por lo tanto, el concepto es aún poco difuso y amplio a la vez.

Aquí se considera “capacidades científicas” al cúmulo de recursos humanos


dedicados a la investigación biotecnológica y en áreas relacionadas con la
agroindustria y la industria alimentaria que desarrollan conocimientos,
investigaciones y proyectos con impacto en el sector. Estos generalmente se
miden por publicaciones y patentes, pero por el tipo de sector también se
consideraran a los agentes y la calidad de éstos, comparados a nivel internacional.

Las “capacidades tecnológicas” son las habilidades para resolver problemas de


producción o algún tipo de servicio, que no necesariamente implican el desarrollo
de alguna innovación, sino mejoras técnicas o tecnológicas implementadas por los
centros de investigación o los departamentos de investigación de las
universidades.

Las “capacidades de absorción” son definidas como la habilidad de una empresa


para reconocer el valor de información nueva y externa, asimilarla y aplicarla con
fines comerciales, lo cual es crítico para sus capacidades innovadoras.

Finalmente las “capacidades de innovación” son las habilidades que los agentes
desarrollan para alcanzar nuevas combinaciones de proceso o de productos y que
son comercializados.

77
Las categorías aquí presentadas serán utilizadas más adelante para evaluar cómo
es que los incentivos diseñados por las instituciones han afectado en el desarrollo
de cada una de ellas. De manera que el planteamiento de este capítulo tiene como
principal objetivo determinar qué es lo que se evaluará como resultado de los
mecanismos utilizados a través de las políticas públicas, leyes y reglamentaciones
(como incentivos) para el desarrollo del sector biotecnológico agroindustrial
alimentario.

78
Capítulo 4
Metodología

Introducción

Como se ha mencionado previamente esta investigación analiza al sector de la


Biotecnología Agroindustrial -alimentaria, el impacto de las instituciones a través
de la formulación de incentivos para el desarrollo de capacidades de innovación.
Normalmente, la Biotecnología no es considerada como un sector, sino como una
tecnología transversal que trastoca muchos sectores y con impactos diferenciados
de acuerdo al nivel de análisis.

Por lo que en esta investigación, uno de los primeros retos metodológicos ha sido
la delimitación de lo que podríamos considerar como “sector de Biotecnología
Agroindustrial -alimentaria”. Definirla ha implicado un constante proceso de
discusión y retroalimentación con los agentes involucrados y con la literatura
existente.

El presente capítulo tiene la finalidad de plantear ampliamente cómo se ha


caracterizado aquí al objeto de estudio, las herramientas que se usaron para su
análisis una vez definido y las variables que se consideraron para la evaluación de
los incentivos en las capacidades de innovación.

4.1 Selección de la Estrategia de Investigación

La hipótesis de esta investigación considera que la dinámica institucional existente


en México para la Biotecnología Agroindustrial – Alimentaria incentiva el desarrollo
de cierto tipo de actores y capacidades, sobre todo las científicas y tecnológicas.
Sin embargo existen disfuncionalidades en la relación Institución-Sector que
desincentivan la producción de innovaciones. Así que el desarrollo de capacidades
de innovación es limitado frente al desarrollo de capacidades científicas y
tecnológicas, resultado del tipo de incentivos existentes en el país.
Basados en dicho planteamiento la propuesta metodológica de la presente
investigación es una combinación de técnicas cuantitativas y cualitativas, ya que si
bien el centro son las técnicas cualitativas como la entrevista y la observación,
también hay un proceso de categorización de datos y variables macro y meso que
permitieron el desarrollo de cierto análisis cuantitativo.

Cabe mencionar que esta investigación se desarrolla utilizando herramientas


cualitativas, sobre todo el estudio de caso, el cual busca un análisis profundo de
79
las complejidades de cada caso individual, sin que esté necesariamente limitado
por la observación de ciertas variables y/o relaciones entre variables ex ante
(León, 2010).

Esta investigación se define como una investigación de tipo analítico ya que se


utilizan hechos e información disponible, la cual se emplea para hacer una
evaluación crítica de la misma. Aplicada dado que trata de dar respuestas a
fenómenos económicos y sociales de la actualidad, y básicamente empírica ya
que se centra en la observación de ciertos hechos, donde la base teórica ha sido
guía para el establecimiento de los hechos y las hipótesis planteadas, 17 esto ha
ayudado a problematizar y contextualizar nuestro fenómeno. Además de que tiene
un corte eminentemente cualitativo gracias al uso y construcción de un estudio de
caso que se explicará más adelante.

4.2 Diseño de la Investigación

La elección de la estrategia de investigación es muy importante, ya que dirige el


proceso de la misma, además de que permite el establecimiento de objetivos y
tareas de una manera congruente con una meta en común. Generalmente se
enfatiza en la necesidad de establecer correspondencia entre la pregunta (s) y la
estrategia de investigación (Yin, 1994).

En este apartado se retoman los principales planteamientos con los cuales se


debate en la investigación, así como la postura teórica, además de los objetivos,
las preguntas y la hipótesis planteada.

4.2.1 Planteamiento y Debate

Premisa 1.

La teoría de los Sistemas de Innovación (SI) se ha constituido como una “práctica


de consenso18” gracias a características compartidas entre diversos individuos,
que reconocen y explican fenómenos particulares.

Premisa 2.

17
Basada en las categorías planteadas por Kothari (2004)
18
Dichas características incluyen al lenguaje, las preguntas que se establecen como significativas, los
esquemas explicativos, los paradigmas que se reconocen como de autoridad, los experimentos, las
observaciones, los instrumentos, los ejemplares, los principios metodológicos, etcétera (Kitcher, 2001).

80
Sectores emergentes como la Nanotecnología y la Biotecnología se han analizado
comúnmente desde la perspectiva de los SI, en diversos países, regiones y
localidades.

Premisa 3.

Existe convergencia en las conclusiones de los estudios realizados acerca de la


existencia de una relación positiva entre “instituciones y tecnología (en este caso
Biotecnología)” (Kaiser & Prange, 2004; Momma & Sharp, 1999; Linskey, 2006;
Hsu, et al. 2005; Mehra,1999; Adeoti & Adetola, 2005; Gittelman, 2006;
Dohse,2000; Niosi & Banik, 2005, Van der Valk, 2009).

Premisa 4.

La relación positiva a la que se hace referencia determina que, la modificación –en


caso de que existan- o la formación de Instituciones que fomenten, desarrollen o
potencialicen a los sectores tecnológicos antes mencionados, es suficiente para
lograr relaciones virtuosas entre los agentes que componen al sector.

Premisa 5.

Las relaciones virtuosas entre dichos agentes, generan dinámicas capaces de


auto-reproducirse en el tiempo, dado que los incentivos que se estipulan son
suficientes para su desarrollo.

Premisa 6.

Los incentivos mencionados en dichos estudios, generalmente se definen como:


políticas públicas de fomento o desarrollo del sector, compuestas a su vez por
estímulos fiscales (de diversa índole, ya sea directos o indirectos). Leyes que
permiten la investigación, experimentación y comercialización o reglamentaciones
directas permisivas hacia ciertos aspectos como las pruebas piloto. Además de
que existen fuertes inversiones hechas por el Estado que acompañadas de planes
de mediano y largo plazo complementan el esquema.

Premisa 7.
Todos los análisis aquí citados parten de por lo menos dos ideas básicas. a) Las
instituciones existen; b) las instituciones que existen funcionan “adecuadamente”
sin distorsiones; c) éstas son capaces de alinear los incentivos de todos los
diferentes agentes participantes, de manera que ninguno entra en conflicto con
otro; d) existe coordinación y comunicación por parte de los agentes.
81
Premisa 8.

Los supuestos a partir de los cuales, tanto el enfoque de los SI y a su vez los
estudios que los retoman para explicar la dinámica de sectores como la
Biotecnología, parten de supuestos que en países en vías de desarrollo como
México no aplican. El conflicto principal tiene que ver con el punto de partida de
los análisis, las premisas que se retoman y los resultados mismos que de allí se
desprenden.

4.2.2 Objetivos

Determinar si a través de la dinámica institucional relacionada con el sector


biotecnológico agroindustrial-alimentario se generan incentivos para el desarrollo
de capacidades de innovación.

Lo anterior implica los siguientes objetivos particulares:


1. Explorar las estrategias compartidas, normas y reglas a nivel federal y
estatal (casos particulares) para la Biotecnología Agroindustrial -Alimentaria
2. Determinar si la estructura institucional existente conforma un sistema de
incentivos para el desarrollo del sector
3. Analizar el impacto de todos los anteriores en la generación de
innovaciones
4. Identificar los tipos de interacciones y los resultados que de éstas derivan

4.2.3 Pregunta de Investigación

¿Qué tipo de capacidades y dinámica de innovación generan los incentivos y las


instituciones existentes en el sector de la Biotecnología Agroindustrial -Alimentaria
en los estados de Guanajuato, Sonora y Yucatán?

Para poder responder a la pregunta de investigación ha sido necesario plantear


una serie de preguntas exploratorias, las cuales nos ayudan a esclarecer actores y
determinar roles.

1. ¿Qué tipo de instituciones existen?


a. Organizaciones, reglas, normas, comportamientos y jerarquías
2. ¿Qué tipo de incentivos se generan?
3. ¿Qué tipo de interacciones existen entre los principales agentes
relacionados con la Biotecnología Agroindustrial -alimentaria?
82
4. ¿Cuáles son los agentes portadores de la innovación?
a. ¿qué tipo de innovación se da en el sector?

4.2.4 Hipótesis

La dinámica institucional existente en México para la Biotecnología Agroindustrial -


Alimentaria incentiva el desarrollo de cierto tipo de actores y capacidades, sobre
todo las científicas y tecnológicas. Sin embargo, existen distorsiones en la relación
instituciones-sector que desincentivan la producción de innovaciones.
El desarrollo de capacidades de innovación es limitada frente al desarrollo de
capacidades científicas y tecnológicas, debido al tipo de incentivos.

4.3 Protocolo para los Estudios de Caso

Para lograr los objetivos que se han planteado en esta investigación se ha elegido
al estudio de caso como parte de la estrategia metodológica. Esto, gracias que
brinda la suficiente flexibilidad y movilidad entre las diferentes fuentes de
información y además permite obtener parte de la información necesaria para
validar la hipótesis de investigación.

Al planear un estudio empírico es recomendable basarse en modelo teórico


existente, ya que este nos ayuda a definir las variables a estudiar. Las categorías
principales en esta investigación son las instituciones, los incentivos y las
capacidades de innovación (ver capítulo 1,2 y 3). De manera que el esquema
teórico-metodológico se integra de la siguiente manera: las instituciones como
generadoras de reglas, normas y estrategias que se transmiten a los agentes en
forma de incentivos o desincentivos; éstos a su vez influyen en las actividades de
los agentes como las empresas, los centros públicos de investigación, las
instituciones de educación y superior, la industria de soporte y el sistema
financiero, además de que tiene incidencia en las interacciones que surgen entre
los grupos de actores (incidencia vertical y horizontal). Lo que sucede en la
llamada “arena de acción” o bien las interacciones que surgen a partir del
establecimiento de los incentivos, dan lugar a los resultados o la capacidad para
generar innovaciones en la Biotecnología Agroindustrial - alimentaria en México.

83
4.1 Planteamiento teórico-metodológico

Elaboración propia

Una vez que se han planteado las variables teórico metodológicas y basados en
ellas, se puede explicar el diseño de los estudios de caso.

Por razones metodológicas, se eligieron tres estados de la república mexicana:


Sonora, Guanajuato y Yucatán. El primer argumento para su elección es que los
tres cuentan con centros de investigación altamente calificados y los más
importantes para el sector agrícola y alimentario relacionado con la Biotecnología.
Por su localización geográfica: Norte, Centro y Sur pueden ser representativos de
la dinámica regional de cada una de las zonas, aunque esto no sea totalmente
confiable y válido, dado que cada estado de la República Mexicana cuenta con
una dinámica distinta; pero pueden ser representativos. Los tres estados cuentan
con un Consejo de Ciencia y Tecnología, lo que nos hace suponer que tienen
algún avance en lo que respecta a las políticas de innovación, elemento que será
constatado en los estudios.

A pesar de que se consideran tres estudios de caso, éstos no tienen la finalidad de


ser ejemplos comparativos ya que el interés no es contraponer dinámicas y
resultados en cada uno de los estados, sino la caracterización del fenómeno en el
país. Aunque sabemos que inevitablemente hay elementos que son más fácil

84
interpretar bajo la luz de la comparación con sus pares y aunque no es la finalidad
de la investigación, si es un elemento que será usado en ocasiones.

El protocolo planteado para esta investigación incluyó los siguientes pasos:

1. Preparación para la visita inicial


i. Previa revisión del estado del arte
ii. Confirmación de la cita y acceso a los CPI, IES, Consejos, etc.
iii. Presentación personal y del proyecto de investigación
iv. Propuesta del esquema de entrevista
2. Formalización del proyecto
i. Breve presentación del proyecto
ii. Ajuste del proyecto en acuerdo de ambas partes
iii. Formalización del proyecto
3. Planeación de la recolección de información
i. Definición de la unidad de análisis
ii. Definición de temas clave
iii. Preparación de las entrevistas para personal con funciones:
• De investigación
• Administrativas
• De gestión tecnológica
iv. Realización de las entrevistas
4. Análisis de la evidencia
i. Revisión de otras fuentes de información
ii. Valoración de la información obtenida
iii. Interpretación de datos
iv. Redefinición de variables

Cabe mencionar que antes de la realización del trabajo de campo con los estados
elegidos, se realizaron 41 entrevistas con expertos en Biotecnología y encargados
del área de vinculación y transferencia tecnológica de distintos centros y
universidades, de manera que sirvieran como punto de partida exploratorio.
Después de esto, se realizaron entrevistas en los tres estados tratando de que
fuesen similares los agentes a los que se entrevistaban, de manera que en los tres
se acudió a los Consejos Estatales de Ciencia y Tecnología, se visitaron todos los
centros y universidades dedicados a la investigación biotecnológica relacionada
con los alimentos y la agroindustria seleccionando a jefes de departamento o de
laboratorio (dependiendo de cada caso). Sus respuestas se validaron realizando
una entrevista de contrastación con algún integrante de cada lugar, estudiante,
técnico o investigador, además de revisarse los informes y documentos oficiales
de cada una de las áreas visitadas.
85
La limitante que se enfrentó esta investigación tiene que ver con el agente
“empresa”. En primer lugar por la escasez de agentes y en segundo lugar porque
no hay información acerca de las existentes, ya que éstas requieren estar inscritas
en registros públicos o algún sistema de información, lo cual no existe en el país,
por lo tanto es complicado establecer comunicación con ellas. En algunos casos o
tipo de producto lo que se puede hacer es contactar a los pequeños productores o
agricultores, pero ellos no pueden ser equiparados con las empresas. Dado lo
anterior, se optó por establecer comunicación con aquellas empresas que fueron
beneficiadas por el Fondo de Innovación de la Secretaría de Economía-
CONACYT y a través del proyecto FRONCYTEC Plan estratégico y transversal de
ciencia y tecnología en la frontera norte de México. Esto sesga los resultados, ya
que son empresas que cuentan con ciertas capacidades instaladas, pero a la vez
es posible caracterizar el tipo de problemas que se enfrentan aquellas que si
realizan algún tipo de innovación. Los casos presentados en el capítulo 9 sobre
empresas relevantes fueron localizados gracias a los dos proyectos antes
mencionados.

En algunos casos fue posible acceder a información como encuestas aplicadas


por otras organizaciones, entrevistas con algunos grupos empresariales u
asociaciones de productores, de manera que las entrevistas realizadas a las
empresas del Fondo son complementarias a la información obtenida en cada
estado.

En cada grupo de entrevistados, ya sea CPI, IES, empresas o Consejos se


realizaron las mismas preguntas, se elaboró un cuestionario semi-estructurado
con algunas líneas básicas y de allí se particularizaba dependiendo del desarrollo
de cada entrevista. Todas fueron grabadas y transcritas de manera que se tiene
un archivo documental.

4.4 Recopilación de Datos y Fuentes de Información

La obtención de los datos e información usada en esta investigación, se basó en


distintas fuentes con la finalidad de encontrar y realizar conexiones pertinentes
para la explicación de este fenómeno. Las principales fueron:

• La información macroestadística presentada en el INEGI, SE, SAGARPA,


OCDE, BID
• Información de la Web de la página de CONACYT, la Academia Mexicana
de Ciencias y diferentes asociaciones de Biotecnología.

86
• Diferentes journals, revistas internacionales y publicaciones acerca de la
Biotecnología en México
• Revisión de las convocatorias y estadísticas de los programas y fondos
CONACYT
• Revisión documental de los informes de actividades de cada IE y CPI
visitado
• Libros especializados sobre la Biotecnología
• Observación directa a través de las diversas entrevistas realizadas

Realización de entrevistas a las siguientes personas (para ver el formato de las


entrevistas, revísese el anexo de esta tesis).

4.2 Entrevistas realizadas

Nombre Institución
Lic. Ericka Guiselle Garibay Nava CONCYTEY
Dra. Marcela Zamudio Maya UADY
Dr. Sergio Rubén Peraza Sánchez CICY
Dr. Hugo Delfín UADY
Dr. Jorge Ibarra Rendón CINVESTAV
Héctor Borrego Bruciaga UIT-Gto
Mtro. Mercurio Molina PROFRESA
Dra. Adriana Martínez CONCYTEG
Dra. Mayra de la Torre CIAD
Dr. Luis Nuñez CIAD
Dra. Cristina Taddei CIAD
Dr. Jorge León CIAD
Dr. Francisco Vargas CIAD
Lic. Rebeca Ayala CIAD
Dr. Sergio Francisco Moreno UNISON
Ing. Rafael Retes López UNISON
Dr. Sergio Garza UNISON
Dra. Maria Eugenia Rentería UNISON
Dr. Jesús López Elías UNISON
Dr. José Eduardo Valdez Olguín UNISON
Dr. Armando Burgos UNISON
Mtro. Ernesto Urbina COECYT
Dr. Salvador Fernández Rivera INIFAP- D.F.
M.C. Luis Antonio Carreño CINVESTAV-Zacatenco
Dr. Eduardo Lucio Decanini Empresa IASA
Ing. Andrés Morales Grupo ALPES

87
M.C. Edna Casarrubias Paisajismo S.A.de C.V.
I.I. Catalina Ocelotl Paisajismo S.A. de C.V.
M.C. Juan Daniel Dzul Ingeniería Industrial S.A. de C.V.
Norma Edda Gaya Grupo Gaya
M.C. José Esteban Rodríguez Asociación Rural Plan de Arroyos
C.P. Armando León Cruz Asociaciones Agroindustriales Serranas
Mtro. Mario Trejo Loyo UNAM
Dra. Laura Palomares UNAM-IBT
Dra. Adriana Vélez UNAM-IBT
Dra. Lucie Burgaud UNAM
Mtra. Alejandra Zarco CONACYT
Ing. Jenaro Nosedal CONACYT
Dr. Mauricio Trujillo UNAM
Dr. Alfredo Gámez Corrales Secretaría de Economía Sonora
Dr. Jaime López ITSON-Obregón y BIODERPAC

Además de las entrevistas realizadas, se hizo en análisis de 38 proyectos del


Fondo de Innovación SE-CONACYT del área denominada como sector agrícola-
alimentario. La ruta de análisis fue la siguiente19:

1. Lectura y revisión de las fichas de solicitud de proyecto, dónde se


especifican datos del tipo de proyecto a realizar, poniendo especial atención
en las relaciones de colaboración y el tipo de producto a entregar
2. Con base en las fichas y en los productos entregables se realizo una
taxonomía de innovación basada en los estudios internacionales que
determinan las innovaciones en el sector
3. Una vez elaborada la taxonomía se hizo una escala numérica de manera
que cada proyecto obtuviera una calificación para ser evaluado en cuanto al
nivel o grado de innovación
4. Los proyectos se asociaron a una clasificación internacional de patentes
(CIP) de manera que pudiese ser evaluado si se encontraban en áreas
dinámicas de patentamiento a nivel mundial y nacional, tomando como
referencia a la United States Trade Patent and Trademark Office (USPTO) y
al Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI)

19
Dicho análisis se llevó a cabo bajo el auspicio del proyecto de evaluación del impacto de los proyectos del
Fondo Sectorial ECONOMIA-CONACYT en el cual participé a cargo del área agrícola-alimentaria. Las
entrevistas fueron financiadas gracias a dicho proyecto y los resultados son parte del informe final entregado a
la SE el cual aún se encuentra en proceso de revisión, de manera que los datos no son públicos.

88
5. Elaboración de una clasificación que distingue el resultado del proyecto, el
nivel de innovación, el área tecnológica, el área de impacto y el grado de
innovación
6. Selección de algunos proyectos para realizar visita y entrevista sobre el
desarrollo del proyecto y validación de datos20

Durante el trabajo de campo realizado para esta investigación se hizo una


búsqueda de las empresas en México relacionadas con la Biotecnología
Agroindustrial y alimentaria. Lo anterior implicó realizar un censo primero de todas
las empresas en cualquier área de la Biotecnología para así poder definir aquellas
que se encontraban en el sector de interés.

Ante la poca información que existe, se optó por integrar un directorio que
incluyera desde las empresas participantes en el Fondo de Innovación SE-
CONACYT21, el proyecto FRONCYTEC Plan Estratégico y Transversal de Ciencia
y Tecnología en la Frontera Norte de México22, las empresas registradas en el
informe PECYT y algunas otras que tiene registrada la Secretaría de Economía
como parte del diagnostico que realizaron sobre el sector en México.

También se hizo uso de la Encuesta elaborada por la UIA LEÓN, IPLANEG y


CONCYTEG denominada “Encuesta sobre los Procesos de Institucionalización,
Innovación y Estrategias Empresariales: hacia una Economía basada en el
Conocimiento (EIEBAC-2009)” 23 la cual ayudó a la caracterización empresarial del
estado de Guanajuato.

Finalmente se tuvo acceso al documento de análisis del Impacto asociado a los


proyectos apoyados por el Fondo SAGARPA-COFUPRO-CONACYT con datos
hasta el 2009 de las convocatorias 2002 al 2005 con un total de 218 proyectos
apoyados.

Todo lo anterior representa las principales fuentes de información a las que se


tuvo acceso y que son parte central de esta investigación. Más adelante se

20
Se realizaron un total de 10 entrevistas con empresas del Fondo de Innovación de la Secretaría de
Economía-CONACYT y 5 del proyecto FRONCYTEC
21
Gracias al Dr. Villavicencio por permitirme usar parte de la información recabada para el Proyecto en el
cual participé a su cargo, denominado “ Evaluación del Fondo de Innovación SE-CONACYT”
22
La información utilizada del proyecto FRONCYTEC será parte de una publicación con los resultados
finales de los seis estados de la frontera norte, agradezco de nuevo por permitirme usar parte de lo allí
investigado al Dr. Villavicencio
23
Gracias a la Dra. Adriana Martínez por compartir parte de los resultados de la encuesta, cuyos datos se
usaron para la caracterización del estado de Guanajuato en el proyecto financiado por el Banco
Interamericano de Desarrollo (BID) denominado “ Hacia la construcción de Sistemas Regionales de
Innovación en México: los caos de Guanajuato y Querétaro, México” a cargo del Dr. Daniel Villavicencio

89
explicará la importancia de cada uno de los elementos aquí mencionados y la
necesidad de recurrir a ellos como fuentes de información para la caracterización
de la Biotecnología Agroindustrial - Alimentaria en el país.

4.5 Construcción del sector Biotecnológico Agroindustrial – Alimentario

La Biotecnología no puede ser considerada como un sector tradicional, al contrario


es una tecnología que tiene impacto en muchas otros sectores como la salud, la
agricultura, la industria de los alimentos, la manufactura, etcétera. Justamente por
lo anterior ha surgido la necesidad de construir parte del objeto de estudio de esta
investigación de la siguiente manera:

El sector agroindustrial –alimentario lo constituyen los siguientes elementos:


1. Industria alimentaria
2. Industria de la bebida
3. Fabricación de fertilizantes, pesticidas y otros químicos orgánicos
4. Maquinaria y equipo agrícola
5. Maquinaria y equipo pecuario
6. Fabricación de otros productos químicos básicos orgánicos

Esta caracterización se basa en la clasificación de INEGI dentro de la industria


manufacturera. Pero también se consideran elementos de la producción agrícola
de productos básicos. Sin embargo, esta sólo es una parte del sector, ya que lo
que interesa en esta investigación es conocer la tecnología asociada a los antes
mencionados.

Es importante mencionar que la anterior no es la unidad de análisis, ya que el


punto nodal de esta investigación es el análisis de las instituciones como
generadoras de incentivos para el desarrollo de capacidades de innovación, de
manera que se visualiza de la siguiente forma:

4.3 Estructura de la investigación


Unidad de Análisis Metodología
Cap. 6 Instituciones
Programas
Instituciones y Fondos Cap. 7 Pol. Públicas
Incentivo

Cap. 8 y 9
Estudio de Capacidades
caso Científicas
s

Tecnológicas y
de Innovación
Capacidades de
Innovación en 90
BAA
Finalmente y en términos de mostrar esquemáticamente cómo es qué se
responderán las preguntas de investigación, a continuación se retoman y plantean
los mecanismos metodológicos que se usan para cada una de ellas.

Pregunta central:

¿Qué dinámica de innovación generan los incentivos y las instituciones existentes


en el sector de la Biotecnología Agroindustrial -alimentaria?

1. ¿Qué tipo de instituciones existen? Entrevistas a los organismos públicos


a. Organizaciones, reglas, normas, relacionados con la Biotecnología en
comportamientos y jerarquías México, universidades, centros de
investigación pública y privada además de
empresas.

2. ¿Qué tipo de incentivos se generan? Análisis de las políticas públicas federales


y estatales de los casos de estudio; Ley de
Bioseguridad, Ley de OGM, Leyes
Sanitarias, Legislación general.

3. ¿Qué tipo de interacciones existen Entrevistas con los organismos


entre los principales agentes intermedios, empresas, centros de
relacionados con la Biotecnología investigación, universidades y gobierno.
Agroindustrial -alimentaria?

4. ¿Cuáles son los agentes portadores de Entrevistas a centros de investigación,


la innovación? universidades y particularmente a
a. ¿qué tipo de innovación se da empresas que accedieron a los fondos
en el sector? públicos que promueven la innovación.

91
Capítulo 5
La Biotecnología en México

Introducción

El objetivo de este capítulo es presentar el estado actual de la Biotecnología en


México, se focaliza en lo que respecta a lo agroindustrial y alimentario, debido a
que es el área que interesa en esta investigación.

En la introducción se planteo en términos sintéticos lo qué es la Biotecnología, lo


cual abre camino para mostrar algunos indicadores en cuanto al contexto nacional
y dado que no está definido como “sector”, se opto por realizar una construcción
propia que nos ayude a definir aquello que se considera como parte del análisis.

A continuación se presentan un grupo de indicadores denominados macro y meso


sobre la Biotecnología Agroindustrial - alimentaria y finalmente los últimos dos
apartados muestran el perfil tecnológico con datos agregados sobre los agentes
involucrados para poder determinar lo que son las características de la innovación
en el sector. Para que de esta manera se logre establecer a qué nos referimos
cuándo hablamos de innovación en la Biotecnología Agroindustrial -alimentaria

5.1 Biotecnología, Definiciones y Caracterización

La Biotecnología moderna es vista como una actividad multidisciplinaria


sustentada en el conocimiento de frontera que se desprende de distintas
disciplinas, entre ellas: la biología molecular, la ingeniería bioquímica, la
microbiología, la genómica y la inmunología.

Generalmente se considera que existen tres generaciones en Biotecnología; la


Biotecnología de primera generación o tradicional de fermentaciones que incluye a
los productos obtenidos por un uso empírico de cultivos fermentativos, y
posteriormente formalizados como tecnología microbiana y dónde se localizan
procesos como la producción de alimentos y bebidas que incluyen procesos
fermentativos, las masas de panificación, las bebidas alcohólicas fermentadas
como vino y cerveza, o las fermentaciones que preceden de la destilación como la
del ron o el brandy o los derivados lácteos como los quesos y el yogur (SE, 2010).

La Biotecnología de segunda generación está relacionada con las fermentaciones


industriales, sobre todo aquellas para la producción de compuestos utilizados en
alimentación, farmacia y procesamiento de materiales. En esta generación se
92
ubican las tecnologías microbianas que sirvieron y aún sirven para la obtención de
antibióticos, aminoácidos, enzimas y ácidos orgánicos, alcoholes y solventes de
uso en las industrias química, farmacéutica y de alimentos (SE, 2010).

La tercera generación o ingeniería genética se refiere al manejo de genes o la


aplicación de la tecnología del DNA recombinante. Es utilizada con
microorganismos, en los métodos de propagación vegetativa de plantas y en la
clonación de células microbianas, vegetales y animales.

Para algunos investigadores, existe una cuarta generación basada en las


tecnologías derivadas de la biología molecular, altamente tecnificadas y dirigidas
al análisis genético, proteínico y de vías metabólicas de múltiples organismos y
comunidades biológicas o sea, la genómica, la proteómica y la metabolómica.
Todas las anteriores han sido consideradas como formadoras de la llamada “vida
sintética” o la generación de organismos que podrían desarrollarse a partir de
genes sintéticos y con un fin específico.

En esta investigación consideraremos tres generaciones biotecnológicas, ya que


desde nuestra perspectiva entre la tercera y la cuarta existen pocas diferencias.
En muchas ocasiones las características que se consideran como Biotecnología
dependen de aspectos poco claros, por ejemplo, en países europeos es muy
amplio lo que se considera como tal e incluyen aspectos microbianos, ciencias
agrícolas, tecnología de alimentos, et; mientras que en Estados Unidos se
considera únicamente a las técnicas derivadas del ADN recombinante. Cabe
mencionar que para el interés de esta investigación, nos centraremos en el
análisis de la Biotecnología de tercera generación.

A pesar de que la Biotecnología tiene una larga historia en la actualidad se plantea


que la ventaja tiene que ver con el uso productivo de seres vivos o sus productos y
partes, lo que permite una extensa difusión y aplicación en muchas industrias, y
particularmente en todas las actividades productivas basadas en procesos
biológicos (OECD, 1989).

La Biotecnología tiene una serie de efectos en el plano económico, se pueden


distinguir algunos aspectos como: el desarrollo de nuevos productos, en algunos
casos menores costos, lo que a su vez acelera la generación de otros productos;
las mayores posibilidades de manipulación de organismos y sus productos que
permite diseñar procesos más eficientes en cuanto al uso de energía y materias
primas, bajando los costos de producción, además de que reduce los riesgos e
incertidumbre al integrar la producción primaria con el procesamiento. En el largo

93
plazo permite el florecimiento de nuevos patrones de producción sostenibles en el
tiempo (Jaffé y Trigo, 1993).

Los continuos avances científicos en las áreas de la biología molecular y de las


ciencias relacionadas, así como las oportunidades que se abren a mediano y largo
plazo para el desarrollo de nuevos productos y procesos, permiten definir a la
Biotecnología como un nuevo paradigma tecnológico (CEPAL, 2008). Esta idea
aún se encuentra en el centro del debate, ya que si bien la Biotecnología ofrece
todo un nuevo espectro de desarrollo tecnológico, en muchos casos es
complementario con otras tecnologías como la nanotecnología o la informática.
Por lo que, distintos autores consideran que éstas tecnologías podrían ser en
conjunto un solo nuevo paradigma.

Sin embargo y a pesar de las discusiones existentes, nadie duda de la importancia


científica, tecnológica, económica y social que esta tiene en el mundo. De los
cambios que ha generado y de las posibles transformaciones que puede involucrar
en el futuro.

La Biotecnología puede clasificarse de acuerdo al área de aplicación con el cual


se relacione. Existen tres tipos de Biotecnología (SE, 2010):

a. Roja: relacionada con la biomedicina, la actividad médica y con el estudio y


aplicación de Biotecnología a la salud humana y animal
b. Verde: relacionada con las aplicaciones a la producción agrícola
c. Blanca: relacionada con las aplicaciones industriales (producción de
microorganismos, fermentaciones, especialidades químicas y
biotransformaciones)

Para el caso que analizamos aquí nos interesa profundizar en la Biotecnología


relacionada con la agroindustria y los alimentos o la denominada “verde”. Esta se
orienta a la superación de los factores limitantes de la producción agrícola, ya sea
mediante la obtención de plantas tolerantes a condiciones ambientales negativas
como las sequías o los suelos ácidos; resistentes a enfermedades y plagas, o bien
al mejoramiento de capacidades propias como la captación, absorción o
procesamiento de ciertos elementos del ambiente. Además de la mejora de las
características nutrimentales y de conservación, entre algunos otros24.

En un país como México donde el sector agrícola fue por muchos años base de la
economía nacional y sustento de la alimentación de la población, cobra especial

24
Este tema será ampliamente desarrollado en el quinto apartado del capítulo presente

94
relevancia pensar en los beneficios que podrían significar la adopción,
implementación y desarrollo de técnicas propias biotecnológicas para la resolución
de problemas de abasto y de comercio. Sin embargo, esto también ha
representado un conflicto de intereses entre los posibles involucrados, dada la
connotación cultural y simbólica que para el pueblo en general representan ciertos
cultivos originarios como el maíz, el frijol y el chile. Lo que implica un doble
esfuerzo, por un lado proteger a los cultivos criollos y por el otro convencer a la
sociedad basados en parámetros científicos, de que es posible obtener beneficios
del uso y desarrollo de la Biotecnología. Estos son algunos de los temas que
deben tomarse en cuenta para la formulación de políticas científicas, tecnológicas
y de innovación que cuenten con un amplio apoyo social.

5.2 Contexto Nacional y Composición Analítica

Como se explicó previamente, un sector se conforma por un conjunto de


actividades que están unificadas por una serie de relaciones con un grupo de
productos para una determinada demanda y que comparten algunos
conocimientos básicos (Malerba, 2004). Un sistema sectorial de innovación está
compuesto por un grupo de agentes tanto de mercado y no mercado, de
interacciones para la creación, producción y venta de productos sectoriales; en un
sistema sectorial se comparte una base de conocimientos, tecnologías, insumos
potenciales o existentes de la demanda. Este se conforma por agentes que incluye
tanto a individuos como a organizaciones en diversos niveles de agregación.

Todos estos actores interactúan a través de los procesos de comunicación,


intercambio, cooperación, competencia y mando, y su interacción está
determinada por las instituciones. Un sistema sectorial se somete a procesos de
cambio y transformación a través de la coevolución de sus diversos elementos,
conocimiento y tecnología, actores y redes e instituciones (Malerba,2004).

De manera que el desarrollo de la Biotecnología (entendida como un sector)


requiere de la conjunción de distintos agentes, que se involucren activamente para
crear las sinergias necesarias. Los agentes relevantes en desarrollo de la
Biotecnología son tanto las empresas por su capacidad financiadora y su
naturaleza innovadora, los Centros Públicos de Investigación (CPI) que en muchas
ocasiones son los traductores de las investigaciones científicas a la parte
tecnológica y las Instituciones de Educación Superior (IES) como generadoras de
conocimiento básico y formadoras de recursos humanos capacitados en ciencia y
tecnología. Junto a este tipo de agentes y en muchas ocasiones como árbitro
determinante, las políticas públicas y las reglamentaciones. Estos son algunos de
los elementos que comúnmente se conceptualizan para entender el desarrollo y la
95
evolución de la Biotecnología. Sin embargo, en México las características que
presenta son aún incipientes en muchos renglones.

Una serie de expertos en la materia, sobre todo biotecnólogos (Bolívar, 2003)


aseveran que las características en la biodiversidad biológica son un factor
relevante para el uso y desarrollo de la Biotecnología moderna en México, esto
debería implicar oportunidades para la conformación de investigación desde el
sector alimentario hasta la salud y la ecología. Sin embargo, aún es necesario el
consenso entre distintos actores sociales que brinden apoyo al mismo y sobre
todo para que se generen los mecanismos adecuados de fomento y regulación.

Las características de la Biotecnología en los países desarrollados es distinta a las


de los países en vías de desarrollo; las grandes empresas en países como México
no financian investigaciones a granel, por el contrario, son selectivas en cuanto al
tema. Tampoco se cuenta con una amplia infraestructura que dote de los recursos
necesarios a los centros universitarios de investigación para que se sitúen en la
frontera de la investigación científica y son pocos los que cuentan con
reconocimiento a nivel internacional. Y a pesar de que las empresas extranjeras
reconocen el potencia de la investigación nacional, son pocos los proyectos
financiados y aún menos los trabajos conjuntos de I+D.

En el caso de México el sector biotecnológico aún no es un sector consolidado;


existen ciertas áreas que cuentan con un potencial claro de expansión y con la
calidad para competir a nivel internacional. Pero aún es insuficiente la cantidad de
personas, organizaciones e instituciones involucradas. A pesar de esto, es posible
localizar ya algunos actores importantes en el sector biotecnológico mexicano.
A continuación se presenta un panorama de los distintos componentes y actores
en la Biotecnología Mexicana.

5.2.1 Empresas

Existe una distinción entre aquellas empresas que hacen uso de alguna técnica
biotecnológica y aquellas que desarrollan procesos o productos basados en la
Biotecnología.

A nivel mundial se suele dividir a las empresas de la siguiente manera25:

a) Empresas de Innovación Biotecnológica: Se caracterizan por desarrollar


patentes, publicar parte de sus resultados en revistas especializadas,

25
Basado en Secretaría de Economía 2010.

96
generalmente cuentan con protocolos establecidos para la transferencia
tecnológica y buscan constantemente nichos de oportunidad. Son
empresas que más que lograr desarrollos, logran avances científicos y
tecnológicos que venden o licencian a otras empresas. Este tipo de
empresas surgen por iniciativa de académicos o grupos de investigación,
pero que se mantienen al margen de las universidades.

b) Empresas de Innovación en Ingeniería: Suelen adoptar tecnología y tienen


la capacidad de escalar procesos, desarrollar ingeniería básica, de
aplicaciones de procesos y productos y de productos finales. Por lo que una
de sus habilidades principales es analizar la factibilidad técnica de procesos
y productos. Son consideradas como empresas de interfase entre las de
innovación y las de aplicación industrial y comercial.

c) Empresas de Manufactura de Productos Biotecnológicos: Se dedican al


desarrollo o la adaptación de procesos de producción a gran escala,
generalmente se dedican a la producción de insumos de muy diversos
tipos. A su vez, estas empresas se dividen de acuerdo a su grado de
tecnificación y a lo que producen.
a. Primer nivel, menor escala y mayor tecnificación. Cultivos
microbianos, producción de proteínas recombinantes, hormonas,
inmunorreguladores y vacunas. Además de las que trabajan con
células animales y reactores.
b. Segundo nivel, mayor escala y mayor tecnificación. Procesamiento
de caldos de fermentación por procesos de extracción y purificación.
Producción de enzimas microbianas, vegetales, antibióticos,
pigmentos, aromas, sabores y productos de origen vegetal.
c. Tercer nivel, alto desarrollo tecnológico y altos estándares de
inocuidad y sanidad. Productores de vacunas recombinantes para
uso veterinario y humano a partir de Escherichia coli, de Pichia
pastoris, o de Sacharomyces cereviseae, o incluso de cultivos de
células animales.

d) Empresas de Servicios Técnicos y Analíticos. Dedicadas a la validación en


pequeña escala de nuevos procesos, análisis de calidad e inocuidad,
mediciones físicas, de metrología y química fina.

e) Empresas Consumidoras de Productos e Ingredientes Biotecnológicos. Son


las grandes consumidoras de microorganismos probióticos, cultivos
lácticos, almidones, inoculantes, enzimas, etc. Se componen de
97
laboratorios farmacéuticos, compañías agroquímicas, de ingeniería
ambiental, comercializadoras agrícolas, etc.

De acuerdo a la clasificación presentada anteriormente, las empresas con mayor


valor agregado son las que realizan innovación, las de innovación tecnológica y
las de manufactura respectivamente. Las dos primeras se encuentran sobre todo
en países desarrollados y en menor medida en países en vías de desarrollo, ya
que en éstos últimos dominan las empresas manufactureras pero adaptadoras de
tecnología y las consumidoras de productos biotecnológicos. Cabe señalar que en
México son pocas las que se dedican a la prestación de servicios técnicos y
analíticos, pero esta labor generalmente la desarrollan los centros públicos de
investigación o en ocasiones algunos laboratorios universitarios.

Las empresas biotecnológicas en términos generales cuentan con características


definidas de la siguiente manera:

5.1 Características de las empresas biotecnológicas

Tópico Características
Ciclo de vida de producto, requerimientos Largo plazo, hasta 30 años. Habilidades muy
tecnológicos y profesionales desarrolladas, se requiere conocimiento técnico de
nivel doctorado
Requerimientos financieros y materiales Aplicación intensiva de capital y aplicación de
recursos a fondo perdido
Gestión de fondos La gestión de capital es esencial
Ciclos de I+D Para desarrollo de productos de 1 a 2 años. Para
desarrollos ligados a descubrimientos de 20 a 30
años
Requerimientos regulatorios y legales Profunda y estrictamente regulados
Intensidad de I+D Procesos prolongados y de investigación intensiva
Vinculación Intensa con institutos, centros o universidades
Propiedad industrial Uso de patentes
Tipo de empresas Pequeñas que innovan y en la mayoría de los casos
son adquiridas por las grandes
Fuente: Basado en Bergeron y Chan, 2004 y SE 2010

En México todavía es difícil diferenciar entre las categorías mencionadas, ya que


la mayor parte de los informes presentados no hacen una clara distinción y
tampoco existe información sobre el tema. Sin embargo y tentativamente se puede
separar a aquellas grandes empresas que suponemos aplican alguna técnica de
aquellas que desarrollan procesos y productos biotecnológicos en grandes
términos.

La presencia de empresas multinacionales permea el área de aplicación entre las


que se encuentran Coca Cola, Grupo Modelo, Pepsico, Lala, Sabritas, Bachoco,

98
CIGATAM, Bimbo, Gamesa, Pfizer y Bayer de México (para el listado completo,
véase el anexo cuadro 2).
En general, las nombradas anteriormente son grandes empresas y/o filiales de
alguna multinacional que no realizan investigación biotecnológica, sino que son
usuarias de las técnicas previamente desarrolladas en los laboratorios de las
matrices situados países desarrollados.

También se ha localizado otro grupo de empresas de capital nacional con un


trayecto importante en la Biotecnología y que desarrollan actividades en distintas
áreas. Entre las que se encuentran: AGROBIONSA, La Moderna, INVERNAMEX,
IASA, BIRMEX, MASECA, BIOCLON, Ingenio La Gloria, Desarrollo Agroindustrial
Gaya, Bioderpac entre algunas más (para el listado completo, véase el anexo
cuadro 3)26 . De acuerdo al trabajo de campo realizado identificamos que la mayor
parte de las empresas en México desarrolladoras de algún tipo de técnica o
proceso biotecnológico se concentran en el sector Agropecuario y Agrícola, sobre
todo aquellas que tienen que ver con modificaciones a granos, semillas, hortalizas,
frutales y con el desarrollo de bioplaguicidas. En segundo lugar se localizan
algunos laboratorios nacionales muy exitosos en el área de la química y la
farmacéutica y son precisamente estos: Instituto Bioclon S.A.de C.V. y
PROBIOMED S.A.de C.V. los únicos ganadores hasta el momento del Premio
Nacional de Ciencia y Tecnología en México (2005 y 1999 respectivamente) por
sus aportes a la Biotecnología en Salud (Véase anexo cuadro 3).

Las empresas que se localizan en el área de Medio Ambiente se dedican a ciertos


tipos de servicios especializados para el uso y tratamiento de aguas y residuos.
Mientras que los que tienen que ver con análisis de alimentos, se relacionan con
pruebas y test para algunos nuevos productos.

Existe una marcada diferencia entre aquellas empresas que hacen uso de las
técnicas y procesos biotecnológicos, que en su mayoría son las grandes
transnacionales y aquellas de capital nacional que desarrollan de manera
incipiente algún proceso. Son pocas aún las que cuentan con departamentos de
I+D propios, ya que la mayoría recurre por medio de relaciones informales a la
asesoría de expertos en el área. Hasta ahora no se cuenta con información clara y
oportuna del número de colaboraciones y la consolidación de relaciones entre
estas empresas y las universidades. Existen pocos casos exitosos que dan cuenta
de esto, pero no pasan de ser las excepciones y no la generalidad. Por lo que se
infiere que la mayoría de empresas sólo hacen uso de las técnicas biotecnológicas
26
Cabe destacar que la lista que se presenta no es exhaustiva, ya que al no contar con un sistema o directorio
de información sobre el tema, ésta se ha ido construyendo a través de datos aislados y el propio trabajo de
campo. Pueden existir algunas empresas no consideradas en la información actual.

99
y realizan pequeñas mejoras incrementales a ciertos procesos o productos
relacionados; aún no existe una capacidad innovadora consolidada y mucho
menos una dinámica sectorial de innovación que impulse a todos los agentes.

De acuerdo a la información presentada por Quintero (2009) existen en México


alrededor de 695 empresas biotecnológicas en los sectores de alimentos (incluye
bebidas), farmacéutica, medio ambiente, agrícola y pecuario. Aunque existen otros
datos como los de Trejo (2010) que hablan de 303 empresas de Biotecnología de
las cuales alrededor de 66 se enfocan a la agroindustria, 36 a los alimentos, 16 del
área ambiental, 23 de fermentaciones, 18 pecuarias, 118 farmacéuticas y 26 de
servicios. Sin embargo, no se distingue entre aquellas que sólo hacen uso de
alguna técnica biotecnológica y aquellas que desarrollan procesos de I+D. De
acuerdo a la exploración propia realizada, inferimos que son alrededor de 70
empresas (incluyendo las subsidiarias de transnacionales) las que desarrollan I+D
propia o bien que mantienen relaciones de vinculación con universidades o
centros públicos de investigación. La mayoría de estas empresas son micro y
pequeñas empresas concentradas en el sector agrícola que desarrollan mejoras
en algunos cultivos o bien en fertilizantes. Existen también empresas de alimentos
que en general realizan mejoras en los procesos de conservación y que en su
mayoría son pequeñas y medianas. Por su parte, están las empresas
farmacéuticas que aunque son pocas, han logrado los mayores avances en el
desarrollo de bio-medicamentos en áreas muy específicas de la salud27.

En general el panorama muestra pocas empresas, en su mayoría micro y


pequeñas que no cuentan con laboratorios propios de I+D. Tampoco existen
vínculos de colaboración constante con universidades u otras organizaciones que
generan conocimiento científico y tecnológico. Pueden hallarse subsidiarias de
transnacionales que dominan sobre todo en el sector agrícola, una empresa
azucarera que está incursionando en el tema del bioetanol y sólo el sector
farmacéutico tiene representantes nacionales con proyección a nivel internacional,
sin embargo no son elementos representativos del sector sino la excepción del
comportamiento general.

5.2.2 Centros Públicos de Investigación e Industria Doméstica de Soporte

En la industrias doméstica de soporte se localizan todas aquellas organizaciones


y grupos especializados de proveedores de bienes intermedios y bienes de capital,
además de todas aquellas instituciones que de alguna manera mantienen relación

27
Estas conclusiones se extraen del trabajo realizado para la Secretaría de Economía donde se analizo la
composición de las empresas receptoras de los recursos otorgados por el fondo de innovación.

100
y facilitan el desarrollo de la Biotecnología, como son los Consejos de Ciencia y
Tecnología Estatales, las distintas Sociedades como la de Toxicología (SMT) o la
Sociedad Mexicana de Biotecnología (SMB), el Instituto Mexicano de Tecnología
del Agua (IMTA) los Centros Públicos y Privados de Investigación, Sociedad
Mexicana de Biotecnología (SMB), la Academia Mexicana de Ciencias y la
Comisión Intersecretarial de Bioseguridad y Organismos Genéticamente
Modificados (CIBIOGEM). Así como una serie de organizaciones entre los que
localizamos a las Red Mexicana de Bibliotecas Agropecuarias (REMBA), la
Sociedad Mexicana de Control Biológico, el Instituto Nacional de Medicina
Genómica (INMEGEN).

Además del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología quien desarrollo un


conjunto de 27 instituciones de investigación que abarcan los principales campos
del conocimiento científico y tecnológico. Según sus objetivos y especialidades se
agrupan en tres grandes áreas: 10 de ellas en ciencias exactas y naturales, 8 en
ciencias sociales y humanidades, 8 más se especializan en desarrollo e
innovación tecnológica, y uno en el financiamiento de estudios de posgrado.
Algunos de estos centros realizan investigación básica o aplicada relacionada
directa o indirectamente con la Biotecnología, a continuación se presentan éstos.

5.2 Centros Públicos de Investigación CONACYT relacionados con la Biotecnología

Área Centro
Ciencias Exactas y Naturales Centro de Investigación en Alimentación y Desarrollo
A.C. (CIAD)
Centro de Investigaciones Biológicas del Noroeste,
S.C (CIBNOR)
Centro de Investigación Científica y de Educación
Superior de Ensenada, B.C (CICESE)
Centro de Investigación Científica de Yucatán, A.C
(CICY)
Centro de Investigación en Matemáticas, A.C.
(CIMAT)
Instituto de Ecología A.C. (INECOL)
Instituto Potosino de Investigación Científica
(IPICYT)
Desarrollo Tecnológico Centro de Innovación Aplicada en Tecnologías
Competitivas (CIATEC)
Centro de Tecnología Avanzada A.C. (CIATEQ)
Centro de Ingeniería y Desarrollo Industrial (CIDESI)
Centro de Investigación y Desarrollo Tecnológico en
Electroquímica, S.C (CIDETEQ)
Centro de Investigación en Química Aplicada (CIQA)

CONACYT 2009. http://www.conacyt.mx/centros/Index_Centros.html

101
5.2.3 Instituciones de Educación Superior

La institución educativa que concentra gran parte de la investigación científica y


tecnológica en el país es la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM),
seguida por el Centro de Investigación y de Estudios Avanzados
(CINVESTAV),después el Instituto Politécnico Nacional (IPN) y finalmente la
Universidad Autónoma Metropolitana (UAM). Cada una de estas instituciones
cuenta con áreas, departamentos o unidades que realizan investigación en
distintas áreas de la Biotecnología, sin que signifique que son las únicas que
realizan dicho tipo de investigación, pero si las de mayor envergadura.

En la UNAM se localiza el Instituto de Biotecnología (IBt), este cuenta con los


siguientes departamentos de investigación:

a. Departamento de Biología Molecular de Plantas


b. Departamento de Genética del Desarrollo y Fisiología Molecular
c. Departamento de Ingeniería Celular y Biocatalisis
d. Departamento de Microbiología Molecular.
e. Departamento de Medicina Molecular y Bioprocesos.

Además de contar con el Centro de Ciencias Genómicas, el Instituto de


Bioquímica, el Instituto de Biología y con facultades relacionadas al área como
Biología y Química28.

El IPN cuenta con el Centro de Investigación en Biotecnología Aplicada (CIBA), el


Centro de Biotecnología Genómica (CBG) y el Centro de Desarrollo de Productos
Bióticos (CEPROBI)29.

El CINVESTAV30 tiene campus en Coahuila, Monterrey, Tamaulipas, Guanajuato,


Jalisco, Querétaro, Zacatenco, Coapa y Yucatán. Pero sin duda el de Guanajuato
desarrolla la investigación más relevante en Biotecnología ya que allí se estableció
el Laboratorio Nacional de Genómica para la Biodiversidad (LANGEBIO) y que
goza de un amplio prestigio por su investigación en líneas como: la ingeniería
genética, la Biotecnología de plantas y la bioquímica.

28
http://www.unam.mx/, www.ibt.unam.mx/
29
http://www.ipn.mx/wps/wcm/connect/IPN%20HOME/ipn/estructura+principal/ciencia+y+tecnologia/cienci
a+y+tecnologia
30
http://www.cinvestav.mx/

102
Mientras que la UAM31 desarrolla investigación mediante sus departamentos del
área de Ciencias Biológicas y de la Salud integrados por el Departamento de
Biología, el de Biología de la Reproducción, Biotecnología, Ciencias de la Salud,
Hidrobiología, Producción Agrícola y Bioanimal y por el Departamento de Ciencias
Naturales e Ingeniería llamado Procesos y Tecnología.

Existen también áreas de investigación destacadas en la Universidad Autónoma


del Estado de Morelos32 (UAEM) que cuenta con el Centro de Investigación en
Biotecnología, el Centro de Investigaciones Biológicas y el Centro de
Investigaciones Químicas.

Finalmente el Tecnológico de Monterrey33 (TEC) también cuenta con el Centro de


Biotecnología donde se trabajan las líneas de ingeniería en bioprocesos,
Biotecnología farmaceútica médica, químico biológica y Biotecnología de
alimentos.
Cabe destacar el hecho de que existen universidades estatales que cuentan con
laboratorios o centros de investigación en Biotecnología, pero la mayoría se
encuentra en formación o son pequeños, por lo que en ocasiones no destaca su
actuación.

Además de los centros mencionados, existen diversas instituciones tanto públicas


como privadas que realizan algún tipo de investigación biotecnológica (anexo,
cuadro 4).

Finalmente cabe destacar que las organizaciones que realizan investigación


específicamente en el sector agroindustrial-alimentario son: INIFAP como la
principal institución de investigación agrícola e términos de presupuesto y
personal, a continuación el Centro de Internacional de Mejoramiento del Maíz y
Trigo (CIMMYT), el Centro de Investigación en Alimentación y Desarrollo (CIAD),
el Instituto Nacional de Pesca (INAPESCA), el Instituto Mexicano de Tecnología
del Agua (IMTA), el Centro de Investigación Científica de Yucatán (CICY), el
Centro de Investigación y Asistencia en Tecnología y Diseño del Estado de Jalisco
(CIATEJ), y las Fundaciones PRODUCE entre otros. Las universidades
desempeñan un papel fundamental en la investigación agrícola y su participación
ha aumentado de 26% en 1981 a 54% en 2006, medido por el número de
investigadores, mientras la participación de las instituciones gubernamentales se
ha reducido. Si bien la UACh, el Colegio de Postgraduados y la UAAN son las

31
http://www.uam.mx/
32
http://www.uaem.mx/investigacion/
33
http://www.itesm.edu/wps/portal?WCM_GLOBAL_CONTEXT=/migration/itesmv22/tecnol_gico+de+mon
terrey/investigaci_n/centros/por+campus/monterrey/centro+de+biotecnologia+cb.inv+itesmv2

103
principales universidades que representan 22.5% del presupuesto total, el resto se
reparte entre un gran número de instituciones de educación superior (OCDE,
2011).

5.2.4 Recursos humanos

El desarrollo de la Biotecnología requiere de recursos humanos altamente


calificados en las áreas de biología, química, medicina, etcétera. Un indicador
importante son aquellos investigadores que se dedican específicamente a la
Biotecnología y aquellos que se forman en las áreas mencionadas y que
potencialmente pueden aportar al desarrollo de la Biotecnología. De manera que
los recursos humanos se integran tanto de los formadores de recursos (profesores
y/o investigadores) como de los recursos formados (graduados de maestría y
doctorado).

En México la formación de recursos humanos ha mostrado un incremento notable


en el número de graduados a nivel doctoral y en especialidades en el área de
ciencias de la vida, incluidas las ciencias agrícolas, ciencias naturales y exactas,
ciencias de la salud, ingenierías y tecnología. Esto es positivo para el desarrollo de
la Biotecnología, dado que la investigación en esta área requiere de especialistas
de diversas áreas, ya que los grupos de trabajo son multidisciplinarios (Anexo,
cuadro 5).

A pesar de que los datos referidos muestran un incremento en las áreas


mencionadas, comparadas con los egresos de sociales, administrativas,
educación y humanidades, aún están muy por debajo. Sin que esto quiera decir
que sea bueno o malo, consideramos que sí se ha establecido a la Biotecnología
como un área prioritaria de desarrollo científico y tecnológico, esto no se ve
plenamente reflejado en este tipo de indicadores.

Otro de los indicadores relevantes en la formación de capital humano es el


referente a los miembros del Sistema Nacional de Investigadores, ya que muestra
el número investigadores en México que realizan o potencialmente pueden
relacionarse con investigación biotecnológica. Además de ser sujetos activos en la
formación de capital humano en Biotecnología. Los datos analizados reflejan que
en el área de Biotecnología y Ciencias Agropecuarias el número de investigadores
ha aumentado sostenidamente, lo que nos habla de un proceso constante e
importante de investigación en esta área (Anexo, cuadro 6)

También es importante destacar que existen instituciones que no reportan


claramente la incidencia que tienen en la formación de recursos humanos en la
104
Biotecnología, pero que se infiere que juegan un papel importante, por ejemplo los
Institutos Nacionales de Salud que no reportan programas de licenciatura y/o
posgrado, pero si participan en la formación de recursos humanos, al incorporar a
tesistas en sus equipos de investigación y a través de impartir cursos en diferentes
programas (Bolívar, 2003).

Debe mencionarse que en el trabajo realizado previamente (Bolívar et al, 2002),


se identificaron 100 programas en el campo de la Biotecnología y disciplinas
afines: 58 de maestría y 42 de doctorado. Además de 98 instituciones que
desarrollan I+D en Biotecnología; además del total de instituciones un 60%
contaba con investigadores en agricultura, 30% en alimentos y materias primas,
30% en salud, 19% en áreas ambientales y control de la contaminación, 13% en
ganadería y actividades pecuarias y 9% en biología marina. De los centros e
instituciones que realizaban investigación, el 15% eran consolidados, 57% en
desarrollo medio y 28% con un bajo nivel. Para el año 2010, se reportaron
alrededor de 3,100 investigadores en Biotecnología y áreas relacionadas, 185
programas de posgrado e investigación y del total de los investigadores, por lo
menos una tercera parte se dedica exclusivamente al desarrollo biotecnológico
(SE,2010).

En lo que respecta a los programas de doctorado en Biotecnología y su


distribución por áreas, podemos observar que la mayor parte de ellos se orientan
al área ambiental y al área industrial (69%); la Biotecnología médica es el 13% y el
área alimentaria, agrícola, pecuaria y vegetal el 18% en conjunto.

105
5.3Distribución de los programas de doctorado en Biotecnología o áreas a fin

6%
11% 1%
39% Alimentaria
13% Agrícola-vegetal
Pecuaria
Biomedicina
Industrial
30%
Ambiental

Fuente: SE, 2010

De los anteriores programas, la distribución geográfica se ubica de la siguiente


manera: el 28% se localiza en el centro del país, 18% en el suroriente, 11% en el
sureste, 19% en el noroeste, 6% en el noreste y 18% en el occidente. Sin que esto
tenga una correspondencia con las necesidades regionales de cada zona.

5.2.5 Patentes

Una patente es un derecho de propiedad otorgado por el gobierno de un país, en


el que se reconoce al inventor de un invento (ya sea de un proceso o un producto)
y al dueño que tiene el derecho exclusivo de explotar económicamente dicho
invento. La invención debe tener tres características: ser novedoso, tener
aplicación industrial y no trivial. Lo que significa que debe ser resultado de un
proceso científico o ingenieril (Reyes, 2011).

Las patentes son generalmente usadas como un indicador de resultado, ya que se


obtiene una vez que ha concluido un largo proceso previo de investigación y
desarrollo tecnológico. En sí misma la patente no representa éxito comercial, pero
suponemos que un alto número de patentes refleja capacidad científica, capacidad
tecnológica y de innovación en el área en cuestión. Es por eso que se usa como
indicador de la actividad innovadora, a pesar de que como ya se menciono
anteriormente, existan objeciones para su uso debido a que hay innovaciones que
no se patentan ya que son incrementales o como en el caso de la Biotecnología
depende de las regulaciones de cada país y varia lo que consideran susceptible

106
de ser patentado. Por ejemplo, en Estados Unidos es posible patentar secuencias
de ADN, pero en la mayoría de países Europeos no sucede de la misma manera,
lo que hace existan variaciones en el número de registros.

5.4 Distribución por área de las patentes otorgadas en México (residentes y no


residentes) en Biociencias y Biotecnología

Materias primas 267


Salud 104
Alimentos 28
Farmacéutica 443
Pecuario 32 Patentes

Marino 21
Acualcultura 18
Agrícola 178
Medio ambiente 59

0 100 200 300 400 500

Elaborado con información de IMPI y SE (2010)

De acuerdo a los registros del Instituto Mexicano de la Propiedad Intelectual


(IMPI), las patentes otorgadas en biociencias y Biotecnología, para residentes y no
residentes en el periodo 1980-2007 son 1,150. De las anteriores, el 10.6% del total
corresponde a inventores mexicanos; el 85% de las invenciones se localizan en
los sectores farmacéutico, salud, materias primas y agricultura y el 15% restante
en alimentos procesados, medio ambiente, Biotecnología marina, pecuaria y
acuacultura.

De las 122 patentes otorgadas a inventores mexicanos, el 60% corresponde al


área de alimentos, materias primas y agricultura y 17% en el área de salud y
productor farmacéuticos. De las patentes otorgadas en alimentos y materia
primas, destaca que la mayoría son para instituciones públicas, al igual que salud
y medio ambiente. A continuación se muestra la distribución para cada área.

107
5.5 Distribución por áreas de acuerdo al tipo de asignatario, para inventores
mexicanos (1980-2007)

Elaborado con información de IMPI y SE (2010)

De acuerdo a las oficinas internacionales USPTO y EPO, las patentes otorgadas a


mexicanos en el área de Biotecnología y áreas relacionadas son 66, de las cuales
más del 50% pertenecen a entidades públicas y privadas de investigación como la
UNAM, UAM, CINVESTAV, IPN, UANL, TEC y Centros CONACYT. La distribución
por áreas es la siguiente

108
5.6 Distribución por áreas de las patentes internacionales (1990-2008) otorgadas a
inventores mexicanos

Elaborado con información de IMPI y SE (2010)

La dinámica de patentamiento que se muestra es pobre comparada con otros


países en vías de desarrollo, probablemente esto se deba al tipo de legislación
presente en el país y las características de la investigación que se realiza. La
mayoría de las patentes registradas están a nombre de instituciones públicas, lo
que significa que muchas de ellas podrían ser licenciadas para explotación
comercial, sin embargo son datos no disponibles. Por ahora se estima que solo
alrededor del 15% de las patentes cuentan con explotación comercial, y estas son
mayormente del área de biomedicina.

Si se considera a las patentes como un indicador de resultado de la capacidad


tecnológica de la Biotecnología en el país, podemos decir que a pesar de la
existencia de una masa crítica que realiza investigación en el sector, esto no se
traduce en tecnologías explotables ni comercializables, además destaca la falta de
empresas.

También es importante mencionar que cuando se analiza la correspondencia de


las patentes con los programas de formación de recursos humanos vemos que no
existe coherencia entre el primer lugar ya que el área con mayor número de
programas de doctorado es la Biotecnología ambiental, mientras que en el gráfico
anterior podemos ver que las patentes se concentran en biomedicina. Aunque se
coincide en el área ambiental la cual es el segundo lugar en patentes y el primeo
en programas.

5.3 Perfil Tecnológico del Sector Agroindustrial-Alimentario

De acuerdo a la definición del sector que se realizó anteriormente, el sector


agroindustrial-alimentario tiene como uno de los principales motores de innovación

109
a la Biotecnología. Al no poder definir a la Biotecnología como un sector, sino
como una serie de tecnologías difuminadas en diversos sectores establecimos
lazos entre la tecnología y el sector, de manera que construimos al sector de
“Biotecnología Agroindustrial-Alimentaria” compuesto por aquellos agentes
relacionados con la investigación, desarrollo e innovación biotecnológica aplicada
al sector agroindustrial-alimentario. Tal problema metodológico ha implicado que
aquí se retomen las estadísticas acerca del sector agroindustrial-alimentario a la
forma tradicional y se integre la parte de la Biotecnología como si este fuese sólo
un componente tecnológico.

El interés de este análisis es comprender la dinámica de la innovación en la


Biotecnología. De manera que es importante retomar algunos datos acerca de lo
que se puede considerar como el sector de “Biotecnología Agroindustrial-
Alimentaria” de manera tradicional.

Como se mencionó anteriormente, la Biotecnología es un conjunto de


conocimientos y métodos a través de los cuales se hace uso de organismos vivos
para la generación de nuevos productos, procesos y servicios aplicables a las
áreas de la agricultura, alimentación, farmacia, química y a la protección del
ambiente, etcétera (SE, 2010). Y generalmente se considera la existencia de tres
o cuatro generaciones de Biotecnología.

A continuación se enuncian algunas características generales:

 Desde 1996 y hasta 2004 el incremento anual de la superficie cultivada por


OGM se ha incrementado a una tasa anual superior al 10%. La mayor parte
de esa superficie la ocupan cuatro países: Estados Unidos, Argentina,
Canadá y China. Estos cuatro países contribuyen con el 99% de la
superficie total cultivada con OGM en escala mundial. Dos terceras partes
de ese total corresponden a la superficie cultivada en los Estados Unidos,
seguido de Argentina, con el 23% del total (SE,2010).
 Los cuatro mercados más importantes para los productos agrícolas de
exportación de los Estados Unidos incluyen Japón (9,000 millones de
dólares); Canadá (8,100 millones de dólares); México (7,400 millones de
dólares), y muy lejos la Unión Europea (1,100 millones de dólares).
 El mercado en 2006 para los OGM de uso agrícola fue de alrededor de
7,000 millones de dólares.

110
 Se calcula que en México existen aproximadamente de 70 a 90 empresas34
biotecnológicas, de las cuales 30 se localizan en el área agroindustrial-
alimentaria.
 Se estima que en la actualidad, el mercado mexicano de Biotecnología es
de aproximadamente 1,000 millones de dólares (SE, 2010).

La distribución de las empresas de Biotecnología en México por sector muestra las


siguientes características:

5.7 Empresas Biotecnológicas en México por sector o rama industrial

Fuente: SE, 2010

El grueso de las empresas biotecnológicas se centran en el sector de


farmacéutica, seguida de la denominada agro Biotecnología; sin embargo si se
suma el porcentaje de la anterior con la Biotecnología alimentaria y la pecuaria
que en términos generales se consideran aquí como el sector agroindustrial-
alimentario, este supera a la farmacéutica.

La distribución de las anteriores empresas de acuerdo a su tamaño muestra que


dominan las pequeñas con un 35% seguida por las grandes con un 34%, después
las medianas con un 26% y finalmente las micro empresas que representan el 5%.
De estas casi el 50% de las empresas grandes pertenecen al sector farmacéutico

34
Inferencias propias basadas en entrevistas y trabajo de campo, además de diversos documentos que cuentan
con algunas aproximaciones generales como Trejo (2010) y SE (2010).

111
en contraparte de las empresas micro y pequeñas que dominan en el sector
biotecnológico agroindustrial-alimentario.

5.8. Distribución de empresas medianas y grandes

Fuente: SE, 2010

5.9 Distribución de empresas micro y pequeñas

Fuente: Secretaría de Economía, 2010

De acuerdo a diversos análisis sobre la Biotecnología en México, se considera que


la mayoría de las empresas del sector agroindustrial-alimentario se localizan en la
producción de fertilizantes, plaguicidas y bioactivos de origen vegetal o
microbiano, además de haber empresas especializadas en el desarrollo vegetal y
control fitosanitario.
112
Un tema relevante es el nivel de base tecnológica, ya que algunas son
simplemente usuarias (relacionadas), otras adaptadoras (parcialmente basadas) y
algunas desarrolladoras (totalmente basadas).

5.10 Distribución de empresas por su base tecnológica

Fuente: SE, 2010

De la anterior distribución, la mayoría de las empresas totalmente basadas en


Biotecnología destacan las del sector Agroindustrial-Alimentario, seguidas por las
de fermentación y productos biológicos y farmacéutica. Esto es interesante dado
que a pesar de que las empresas de este último sector dominan el total de
empresas, no son las principales desarrolladoras de la tecnología. Lo que en
términos generales nos estaría indicando la importancia de las empresas del
sector Biotecnológico Agroindustrial - Alimentario.

Los datos aquí presentados tratan de delinear las características del sector
biotecnológico agroindustrial-alimentario; destaca que aunque el tamaño
dominante es el micro y las pequeñas empresas, estas son totalmente basadas en
Biotecnología y su base tecnológica comprende desde la propagación de tejidos y
órganos vegetales que son técnicas consideradas como sencillas, hasta la
generación de nuevas variedades producto de la ingeniería genética. De manera
que las capacidades tecnológicas desarrolladas pueden ser muy variadas
dependiendo de las particularidades del área donde se desarrollen y de la propia
empresa.

113
5.11 Distribución sectorial de las empresas totalmente basadas en Biotecnología

Fuente: SE, 2010

Los datos anteriores muestran la conformación de lo que aquí se ha denominado


como sector biotecnológico agroindustrial-alimentario. La composición de las
empresas en el área agro biotecnológica está dada por pequeñas y medianas
empresas, a diferencia de lo que sucede en la industria farmacéutica donde
dominan las grandes empresas. Sin embargo, es importante destacar que la
mayoría de empresas localizadas en este sector no son desarrolladoras de
Biotecnología, sino usuarias y esto modifica sustancialmente sus actividades y
relevancia.

5.4 Características de la Innovación en el Sector Biotecnológico


Agroindustrial-Alimentario

El sector Agroindustrial-Alimentario cuenta con una larga historia de I+D aplicado


al desarrollo del mismo. Tanto a nivel internacional como nacional han existido
momentos de gran auge en el cual el aumento de la productividad, así como una
serie de mejoras en la calidad de los productos han sido resultado de grandes
inversiones públicas combinadas con estrategias particulares de algunas
empresas. Para el año 2000 se estimó que el gasto mundial en I+D en el sector
agrícola fue aproximadamente de 36,456 millones de dólares de los cuales el 63%
correspondió a inversión pública y el restante 37% a inversión privada (SAGARPA,
2010). La diferencia entre el tipo de inversión radica en que las inversiones
públicas se concentran en investigación básica y la privada se concentra en
productos específicos y tecnologías que solucionan problemas ya localizados.

114
Cabe mencionar que en las tres últimas décadas la tendencia de la inversión
pública en I+D ha mostrado una tasa de crecimiento que oscila entre el 2% y 3%
por década; además de que los países en desarrollo han invertido más que los
desarrollados.

A nivel mundial las grandes tendencias en cuanto a los procesos de innovación se


han dirigido en las siguientes líneas35:

5.12 Principales áreas de innovación en el sector agroindustrial-alimentario

1. Mejoras de la productividad. Generación de nuevas tecnologías en los cultivos que


incluyen mejoras en la maquinaria, así como aplicaciones de fertilizantes químicos
para el control de enfermedades, hierba, hongos, etc. Ingeniería genética para
mejorar la resistencia de los cultivos o investigación sobre distancias óptimas de
producción.
2. Control de riesgos de los productos agropecuarios. Mejoramientos genéticos que
evitan la propagación de enfermedades, plagas u hongos.
3. Optimización de las cadenas de suministro. Mejoras de calidad, apariencia, vida de
anaquel, refrigeración y empaque.

Esta caracterización clarifica el sentido de las innovaciones dentro del sector y se


complementa con la taxonomía presentada más adelante que diferencia entre
innovaciones internas y externas.

Las actividades del sector agroindustrial-alimentario son clasificadas en México


comúnmente como una sub-rama de las actividades de la industria manufacturera.
En comparación con otras ramas industriales, se considera equivocadamente que
esta área tiene un bajo potencial innovador, resultado sobre todo de lo que
reportan las empresas de los países integrantes de la OCDE del sector que
dedican a los gastos de I+D: 0.8% frente al 4% de la industria manufacturera
restante de gasto por unidad de producción (Rama, 1993).

Sin embargo, en las actividades alimentarias la receptividad de nuevas ideas, la


circulación de información, la capacidad de utilizar nuevos equipos e insumos, son
en muchas ocasiones, mucho más importantes que la generación interna de
nuevos productos y procesos. (Rama, 1993). A consideración de diversos
estudios, tanto la agroindustria como la industria de alimentos han tenido grandes

35
Las líneas presentadas se basan en el documento presentado por SAGARPA 2010 “Retos y Oportunidades
del sistema agroalimentario de México en los próximos 20 años”

115
avances en las últimas décadas debido al desarrollo de nuevos alimentos o
bebidas, resultado de modificaciones incrementales.

La innovación en el sector proviene de dos áreas fundamentales, por un lado


aquellas que pueden considerarse “externas” que se relacionan con aspectos
como los siguientes:

 Desarrollo de nuevos equipos o maquinaria para envasar


 Desarrollo de nuevos equipos o maquinaria para transformar las materias
primas, ya sea triturar, cortar, seleccionar, pelar, mezclar, rellenar, cocer,
etc.
 Aparatos o accesorios para fabricar nuevos alimentos
 Nuevos materiales de embalaje (envases de vidrio, polietileno, tetrapack,
etiquetado no dañino a la salud, etc.)
 Desarrollo de nuevos equipos o procesos para congelar
 Desarrollo de máquinas de control de calidad (peso, temperatura, tamaño,
color, etc.)

Se consideran como externas dado que aunque implican la transformación de la


materia prima, esta se ubica en la fase de procesamiento. Además de que se
relaciona con la vinculación de la industria agroindustrial- alimentaria con otros
sectores para incorporar innovaciones (Nuñez, 2011).

Las innovaciones “internas” son aquellas que tienen que ver con las
modificaciones o transformaciones agrícolas en semillas y variedades vegetales,
insumos y sistemas para el manejo agronómico, productos y procesos para el
manejo post-cosecha y procesos industriales de transformación de insumos
agrícolas para la generación de productos; además de la producción de
ingredientes y en la preparación de alimentos formulados o bien los orientados a la
preservación de la inocuidad y la calidad nutricia de los alimentos. En general
todos los procedimientos anteriores se relacionan con el insumo mismo e incluye
modificaciones más allá de los elementos externos o el procesamiento, sino en la
propia genética, por eso es que las técnicas y métodos biotecnológicos juegan un
papel preponderante en esta área. Cabe mencionar que aquí también se
considera a los fertilizantes, abonos o métodos potencializadores o mejoradores
de la calidad de cultivos, semillas, etc.

De manera que las innovaciones en el sector agroindustrial-alimentario no


únicamente se relacionan con lo que se ha considerado como el motor tecnológico

116
actual, que es la Biotecnología, sino también con elementos externos pero
directamente relacionados con las materias primas o alimentos.

En síntesis las innovaciones denominadas como externas están más enfocadas a


la industria alimentaria, mientras que las internas a la agroindustria. Sin que esto
signifique que son excluyentes, al contrario pueden ser procesos complementarios
del proceso innovador en el sector.

Conclusiones

La finalidad de este capítulo fue presentar una definición de Biotecnología que nos
ayudará a entender el objeto de estudio de esta investigación. Se partió de lo
general para llegar a lo particular y poder definir cosas como: qué es la
Biotecnología, a qué nos referimos con la Biotecnología Agroindustrial -
alimentaria, de qué se compone, cuál es su estructura, en qué estado se
encuentra actualmente en el país, las variables que definimos como pertinentes
para entender el contexto nacional (recursos humanos, empresas, centros de
investigación, etcétera) y sobre todo establecer el perfil tecnológico y las
características de la innovación.

En los primeros dos apartados se retoman una serie de definiciones acerca de las
características de la Biotecnología para poder construir un esquema que clarifique
a qué tipo de actores se hará referencia en los siguientes capítulos. Mientras que
los dos últimos se centran en conceptualizar lo que denominamos como “perfil
tecnológico” que no son más que las características tecnológicas de algunos de
los agentes. Pero también es sumamente relevante definir qué significa innovar en
este sector, para esto el último apartado recoge por áreas lo que en a nivel
mundial son las tendencias para la Biotecnología Agroindustrial -Alimentaria.

Los datos referidos en este capítulo nos muestran dos escenarios; por un lado
vemos una amplia capacidad científica desarrollada y en constante crecimiento,
pero poca correspondencia con las empresas. Esto debido a dos motivos, primero
a que existen pocas empresas y en segundo lugar porque existen aún menos con
capacidad innovadora, de desarrollo ingenieril y de manufactura avanzada.

De acuerdo al trabajo de campo elaborado previamente, inferimos que existen


alrededor de 70 a 90 empresas en el sector biotecnológico agroindustrial-
alimentario; pero de acuerdo a nuestras estimaciones 30 son del área
agroindustrial- alimentario y de éstas, un porcentaje aún menor son las que
realizan algún tipo de I+D que se traduce en mejoras de proceso o de producto.
Podemos definir que existen tres tipos de empresas en México:
117
a) Empresas grandes, filiales de multinacionales que no tienen laboratorios de
I+D en el país
b) Empresas medianas nacionales que desarrollan algún tipo de I+D con
algunas universidades o centros de investigación
c) Empresas pequeñas y micro que no desarrollan, ni demandan I+D

Lo anterior será más claramente expuesto y analizado en los capítulos siguientes,


pero es importante mencionar que se encontró una baja dinámica empresarial que
no muestra interés en el desarrollo de innovaciones en el sector.

Este capítulo vincula la parte teórica y la parte práctica de la investigación, ya que


introduce parte del objeto de estudio y permite establecer algunos de los agentes
que serán analizados más adelante.

118
Capítulo 6
Instituciones relacionadas con la Biotecnología Agroindustrial -Alimentaria

“La Biotecnología no es en forma innata buena o mala.


Tiene un potencial para aligerar o agravar el impacto de la agricultura al medio ambiente.
El reto es el desarrollar, proveer y manejar la Biotecnología en beneficio del ser humano y el
ambiente”.
Dale 2001

Introducción
En este capítulo se presentan los resultados del análisis sistemático de la
reglamentación y legislación de la Biotecnología en México. Se discute parte de
las implicaciones sociales y económicas que conlleva el establecimiento de un
marco regulatorio en la materia. Se realiza un trabajo de contrastación de los
elementos formales con la evidencia obtenida a través de la realización de
entrevistas y observación directa con algunos actores. El análisis se centra en la
Biotecnología Agroindustrial -Alimentaria, ya que es un punto constante de
controversia entre distintos actores sociales en el país. Para dicho fin, se proponen
una serie de características de lo que se ha denominado anteriormente como
“marco institucional” y bajo esa concepción, se analiza el caso mexicano.

Como se ha mencionado ya, la Biotecnología es considerada como una de las


áreas de desarrollo científico y tecnológico más relevantes en la actualidad
(OCDE, 2005; CEPAL, 2009). Su uso e impacto involucra áreas como la salud, el
sector agrícola, pecuario, el medio ambiente, y el sector industrial entre otros. Las
características de la misma han generado muchas expectativas sobre la incidencia
que puede tener en distintas áreas de la vida natural y social. Al mantener una
estrecha relación con los organismos vivos, la Biotecnología genera desconfianza
en cuanto al uso de la información que se obtiene, los procesos que se desarrollan
y los productos que se pueden obtener.

El desarrollo de una nueva tecnología genera incertidumbre sobre sus usos y


riesgos potenciales. En la mayoría de los casos es difícil prever todas las
implicaciones y sobre todo, la manera en que trastocará la forma de vida en su
conjunto. Sin embargo, a pesar del ambiente de incertidumbre en el cual se
desarrollan las nuevas tecnologías, existe conocimiento susceptible de ser usado
en la formulación de reglamentaciones y leyes que delimiten y establezcan el
desarrollo tecnológico con un enfoque de bienestar común y responsabilidad
social.

119
En México existen distintas iniciativas referentes a la reglamentación de la
Biotecnología.

Sin embargo, en comparación con algunos países desarrollados tales como


Canadá (Antal, 2009) o Alemania (Dohse, 2000; Casper y Matraves, 2003; Casper
y Whitley, 2004), donde hay un avance importante, las propuestas en México aún
presentan múltiples deficiencias. La envergadura del tipo de tecnología y las
posibles implicaciones, han fomentado una intensa discusión entre algunos
sectores de la sociedad; sobre todo aquellos que mantienen una relación estrecha
con la investigación biotecnológica o con el uso de la misma, así como entre
algunos empresarios interesados en el desarrollo del sector. No obstante, destaca
la falta de participación de la sociedad en general, ya sea en su carácter de
usuarios activos o potenciales, o como integrantes de una comunidad que directa
o indirectamente serán afectados por el la difusión de estas nuevas tecnologías.

Este capítulo tiene como objetivo mostrar y analizar la trayectoria de la


reglamentación y legislación de la Biotecnología en México, particularmente la
relacionada con la agroindustrial-alimentaria; discutir las implicaciones económicas
y sociales que conlleva el establecimiento de un marco institucional que coordine
las interacciones de los distintos agentes involucrados en el desarrollo de la
Biotecnología.

La estructura del capítulo es la siguiente, en el primer apartado se retoman


algunos puntos de la discusión teórica presentada en el capítulo 1 y 2 acerca de la
importancia de establecer un marco institucional, cuáles son sus objetivos y los
posibles resultados. En el segundo apartado se introducen algunos conceptos
básicos para comprender los puntos nodales en la discusión de la Biotecnología;
tales como la bioseguridad y la bioética. Finalmente se presenta una descripción
histórica analítica referente a cómo ha evolucionado la reglamentación y
legislación biotecnológicas en México.

6.1 La construcción de un marco institucional para la Biotecnología

La Biotecnología es una actividad multidisciplinaria resultado de la convergencia


de las áreas que estudian los sistemas biológicos (microbios, plantas y animales).
La Biotecnología busca hacer uso responsable y sustentable de la biodiversidad,
mediante el desarrollo de tecnología eficaz, limpia y competitiva para facilitar la
solución de problemas importantes en los sectores de la salud, agropecuario,
industrial y medio ambiente (Bolívar et al. 2002; Bolívar et al. 2004).

120
Como se expuso previamente, la gran revolución biotecnológica aparece en 1973
con las técnicas de recombinación in vitro de ADN, de manera que fue posible el
aislamiento de genes de un organismo para ser transferidos a otro, lo que dio
origen a los llamados “organismos genéticamente modificados” (OGM). Este tipo
de organismo tiene una nueva capacidad resultado del material genético
transferido, lo que busca solucionar problemas e diferentes sectores, con la
certeza de que estos organismo son seres vivos naturales y por ello, tienen un
menor impacto en el medio ambiente, biodiversidad y en la salud humana y
animal, que muchas otras tecnologías basadas en productos químicos (Watson et
al. 1996; Bolívar et al. 2002 y Bolívar et al. 2004 citado en AMC).

La producción basada en Biotecnología y su uso comercial tiene alrededor de 30


años debido a la necesidad de abastecer al mercado de productos para la salud
como la insulina, anticoagulantes, interferones o en la producción de enzimas para
alimentos como la quimosina que se utiliza para la producción de quesos,
pectinasas para la clarificación de jugos, catalasas para la deshidratación de
huevo, glucanasas para las cervezas o bien proteasas para los detergentes
biodegradables (López, 2004). Además de que la comercialización de plantas
transgénicas es legal desde hace 15 años, sin ningún reporte de daño a la salud
humana o a la biodiversidad, por el contrario, la mayoría de las ocasiones existe
una reducción del riesgo debido al menor uso de pesticidas químicos.

Debido a la naturaleza de la tecnología que tratamos, su relación con los


organismos vivos y los resultados que derivan, ha sido fundamental el desarrollo
de protocolos y pruebas que certifiquen la inocuidad36. Esto ha generado que la
mayor parte de la reglamentación desarrollada tenga que ver con la determinación
de inocuidad y bajo riesgo de los organismos transgénicos, a pesar de que este
demostrado científicamente que la plasticidad y capacidad de reorganización del
genoma y la transferencia horizontal de ADN es un fenómenos natural, que no
puede generar de ninguna manera una “catástrofe ecológica”; al contrario, esto ha
sido el mecanismo más efectivo de evolución y dado que todos los organismos
vivos contamos con la misma estructura general no existe riego de fenómenos de
cambio extremos ni antinaturales.

En ocasiones la preocupación de algunos grupos de la sociedad, sobre el uso


negativo de los OGM se encuentra fundada en información tendenciosa, de
dudosa calidad o poco documentada y es por esto que ha sido relevante la

36
Este tipo de pruebas se realizan para demostrar que el producto en cuestión no cause ningún tipo de daño.
Las medidas de inocuidad alimentaria garantizan la sanidad y seguridad de los alimentos que se consumen y
disminuyen el número de enfermedades que tienen su origen en alimentos contaminados. De manera que es
un factor determinante en la producción y comercialización de alimentos.

121
discusión en torno a los fenómenos de cambio y reorganización genética; ya que
uno de los principales motores de una reglamentación y un marco institucional
adecuado es brindar certidumbre acerca de los procesos tecnológicos y la
inocuidad de los resultados, tanto para los productores, como para los usuarios y
la sociedad en general.

El siguiente apartado presenta una síntesis de las áreas que discuten parte de las
implicaciones sociales y éticas del uso de los OGM. De manera que se tenga un
mejor acercamiento a cómo es que funcionan y bajo que contexto se han
establecido las organizaciones y las leyes que regulan la acción biotecnológica en
el país.

6.2 Bioseguridad y Bioética

La bioseguridad es considerada como aquellas acciones y medidas de


evaluación, monitoreo, control y prevención que se deben asumir en la realización
de actividades con organismos genéticamente modificados, con el objeto de
prevenir, evitar o reducir los posibles riesgos que dichas actividades pudieran
ocasionar a la salud humana o al medio ambiente y la diversidad biológica,
incluyendo los aspectos de inocuidad de dichos organismos que se destinen para
uso o consumo humano37.

En términos generales, la bioética intenta relacionar nuestra naturaleza biológica


y el conocimiento realista del mundo biológico con la formulación de políticas
encaminadas a promover el bien social (Lacadena, 1992). Se plantea una
estrecha relación entre los denominados “hechos biológicos” a diversos niveles
(individuo o especie) y los “valores éticos” respecto a la relación que se establece
del hombre con el entorno natural, ya sea plantas, animales o naturaleza
inanimada.

La bioética busca proveer los principios orientadores de la conducta humana en el


campo biomédico y otros aspectos que tienen que ver con la vida en general,
como lo relacionado con el medio ambiente, el uso de la Biotecnología en los
alimentos e inclusive la nanotecnología (Enciso, 2007).

En el mundo existen grandes avances en torno a la bioética, ya que esta toca


aspectos fundamentales como el aborto, la eutanasia, la investigación biomédica,
las pruebas clínicas, etcétera. El mayor énfasis ha sido puesto en lo referente a la
37
Ley de Bioseguridad de Organismos Genéticamente Modificados. Cámara de Diputados del H. Congreso
de la Unión. Texto Vigente Nueva Ley publicada en el Diario Oficial de la Federación el 18 de marzo de
2005.

122
regulación médica y hasta hace pocos años se ha atendido lo referente a la
genética y a la Biotecnología. Al ser una tecnología emergente, es comprensible
que aún este en un proceso de debate abierto y sin conclusiones determinantes.

México ha tratado de avanzar en las normas mencionadas anteriormente, tanto en


la legislación a nivel general referente a la investigación y producción, y en menor
medida al consumo, como en la generación de organismos que determinen reglas
sobre bioseguridad y bioética. Pero el menor avance lo ubicamos en la
determinación clara de los derechos de propiedad. Este es un tema muy
importante, ya que como se ha planteado previamente, el establecimiento de
derechos de propiedad es un mecanismo para incentivar la inversión productiva en
el sector. Si no existen las normas y reglamentos que aseguren la apropiación de
los beneficios de la generación de los nuevos conocimientos, esto se convierte en
un desincentivo.

Gracias a la aportación de especialistas en el tema, se considera que la utilización


de conocimiento científico y de la tecnología debe darse bajo los siguientes
términos38:

a) De forma responsable y respetuosa de la salud humana y animal y


cuidando el medio ambiente
b) De manera justa tratando de reducir diferencias sociales e inequidades
c) Respetando la riqueza natural
d) Conforme a un marco jurídico adecuado
e) Tras un análisis detallado de las ventajas y los riesgos que representa el
uso o no de una tecnología particular para la solución de algún problema

A continuación, analizaremos la trayectoria histórica de las normas y reglamentos


aplicables a la Biotecnología. El panorama de la evolución nos permitirá definir
cómo se ha construido el marco institucional para el sector.

6.3 Las Organizaciones Regulatorias a Nivel Nacional

Uno de los debates más importantes en el tema de la Biotecnología fue el que


surgió a partir de la utilización y liberación al ambiente de los OGM. La
controversia en tanto si causaban algún tipo de daño al medio ambiente generó a

38
Comité de Biotecnología de la Academia Mexicana de Ciencias. Por un uso responsable de los Organismos
Genéticamente Modificados. Anexo

123
nivel mundial un proceso de revisión por expertos, la creación de acuerdos a nivel
internacional y legislaciones a nivel nacional.

A nivel internacional el Convenio sobre la Diversidad Biológica y el Protocolo de


Cartagena fueron los primero intentos para establecer mecanismos de seguridad
en la Biotecnología; más adelante en este mismo apartado serán explicados
ampliamente.

Existen también una serie de organismos a nivel internacional encargados de


establecer mecanismos de cooperación en torno a la bioseguridad; entre ellos se
encuentra la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE)
encargada de organizar discusiones en torno a la generación de políticas,
lineamientos de seguridad y una serie de bases de datos sobre diversos temas de
la Biotecnología.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) también se ha pronunciado por el


desarrollo de métodos de evaluación del riesgo de la liberación de los OGM y junto
con la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura
(FAO) han desarrollado una serie de protocolos para pruebas en alimentos.

A nivel nacional, el primer acontecimiento surge en 1988 cuando la compañía


Campbell solicita al gobierno mexicano, mediante su filial Sinalopasta, permiso
para experimentar con un jitomate genéticamente modificado. Esta acción dio
origen a la primera iniciativa en el ámbito regulador para los Organismos
Genéticamente Modificados (OGM) en México. Se formo el Comité Nacional de
Bioseguridad Agrícola (CNBA) como cuerpo asesor de la Secretaría de Agricultura
(Antal, 2008). El siguiente acontecimiento ocurre en 1991, cuando la empresa
Monsanto dona una variedad de papa genéticamente modificada al CINVESTAV –
Irapuato, lo que provoco una gran discusión social en torno a los límites del uso,
desarrollo de los y entrada al país de los OGM, sobre todo por la falta de políticas
dirigidas a los pequeños productores (Antal, 2008).

A partir de dichos sucesos, en 1994 se realizaron reformas a la Ley de Sanidad


Vegetal, estableciéndose por primera vez la definición de “material transgénico” y
su relación con los insumos fitosanitarios en el país. Un año más tarde el CNBA
dictó la NOM 056 FITO 1995 en la cual se reglamenta el artículo 43 de la Ley de
Sanidad Vegetal y se establecen algunas funciones de dicho Comité39.

39
Diario Oficial de la Federación. 11 de junio de 1996

124
Después de algunos años de haberse permitido la experimentación de maíz en
México y de realizarse el primer foro acerca del flujo genético40 en el cual se logró
la definición de áreas permitidas y restringidas para la experimentación, así como
del segundo foro en 199741, con la finalidad de discutir los modelos de riesgo en la
experimentación del maíz y después de graves problemas para definir el no efecto
de las pruebas y falta de evidencia contundente y bajo una gran presión social, en
1999 la CNBA estableció la moratoria a la experimentación con el maíz. Esto
gracias a que no pudieron esclarecerse los efectos y posibles riesgos de los OGM.
El mismo año se formo la Comisión Intersecretarial de Bioseguridad de
Organismos Genéticamente Modificados (CIBIOGEM), la cual se integro con
personal de varias secretarías como: Agricultura, Salud, Medio Ambiente,
Hacienda, Comercio y CONACYT, la cual sustituyo a la CNBA.

La CIBIOGEM es la encargada de establecer las políticas relativas a la seguridad


de la Biotecnología con respecto al uso de OGM, además de las políticas de
producción, importación, exportación, movilización, propagación, liberación,
consumo, uso y aprovechamiento los OGM sus productos y subproductos.

A continuación se muestran las actividades principales y objetivos del


CIBIOGEM42.

40
Foro sobre Flujo Genético entre el maíz criollo, maíz mejorado y teocintle: implicaciones para el maíz
transgénico. Realizado en el año 1995, con sede en el CIMMYT
41
Taller de Maíz Transgénico, organizado por el CNBA y la Asociación Norteamericana de Protección de
Plantas (NAPPO)
42
http://www.cibiogem.gob.mx Consultado el día 13 de mayo de 2010

125
Junto con la CIBIOGEM, existen otras dependencias relacionadas directa o
indirectamente con la regulación de la Biotecnología en México. La primera de ella
es la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad
(CONABIO); esta tiene la misión de promover, coordinar, apoyar y realizar
actividades dirigidas al conocimiento de la diversidad biológica, así como a su
conservación y uso sustentable para beneficio de la sociedad43.

43
http://www.conabio.gob.mx

126
La segunda dependencia es la Comisión Federal para la protección contra riesgos
sanitarios (COFEPRIS), que se encarga en términos generales a todo lo
relacionado con la salud, por lo tanto, se encarga del supervisar el control sanitario
de la disposición de órganos, tejidos y sus componentes, células de seres
humanos, lo que se relaciona directamente con la Biotecnología médica.

Finalmente en 2005 se estableció la Comisión Nacional de Bioética (CNB) como


órgano desconcentrado de la Secretaría de Salud, con autonomía técnica y
operativa, responsable de definir las políticas nacionales que plantea esta
disciplina44. Sus principales actividades se describen a continuación:

6.1 Principales actividades de la CNB

Establecer las políticas públicas de salud vinculadas con la temática bioética


Fungir como órgano de consulta nacional sobre temas específicos de bioética
Propiciar debates sobre cuestiones bioéticas con la participación de los diversos sectores de la sociedad
Fomentar la enseñanza de la bioética. Particularmente en lo que toca a la atención médica y la investigación
en salud
Promover la creación de comisiones estatales de bioética
Promover que en las instituciones de salud públicas y privadas, se organicen y funcionen comités
hospitalarios de
bioética y comités de ética en investigación, con las facultades que les otorguen las disposiciones jurídicas
aplicables,
así como apoyar la capacitación de los miembros de estos comités.
Establecer y difundir criterios que deban considerar los comités hospitalarios de bioética y comités de ética
en investigación para el desarrollo de sus actividades

Elaboración propia con información de http://www.cibiogem.gob.mx Consultado el 13 de mayo de 2010

Las organizaciones descritas anteriormente, especialmente el CIBIOGEM y la


CNB tienen relación directa con el desarrollo de la Biotecnología en el país, sobre
todo con lo referente a la producción agrícola y alimentaria. A pesar de que existe
una clara delimitación en cuanto a las actividades que cada uno desarrolla, no
existen aún los mecanismos adecuados para llevar a cabo sus actividades. Con
esto queremos decir que su acción no está plenamente institucionalizada. A pesar
de que uno de sus objetivos es participar activamente en las políticas públicas
nacionales, sólo en momentos cruciales o de tensión, dichas organizaciones
aparecen en el escenario y su actuación es reactiva más que proactiva. Aunque
dichas organizaciones deben participar en la formulación y discusión de las
políticas públicas del sector, su papel ha sido menor y su injerencia débil.

Que sean organizaciones establecidas formalmente, no quiere decir que


establezcan las condiciones e incentivos para el sector efectivamente. Estas

44
http://www.cnb-mexico.salud.gob.mx

127
organizaciones establecen normas, pero pocas veces tienen la capacidad de
sancionar, lo cual las presenta como organizaciones débiles y poco relacionadas
entre sí. En términos de lo planteado aquí como marco institucional, éstas
organizaciones no establecen la direccionalidad de los agentes participantes,
aunque existen y establecen una serie de reglas formales aún no cuentan con la
capacidad de sancionar su incumplimiento y tampoco cumplen disminuyen la
incertidumbre.

6.4 La Legislación Internacional y Nacional

Las posibles implicaciones o riesgos que se le han atribuido a la Biotecnología, ya


sea de manera comprobada o por especulación han generado un debate muy
importante a nivel internacional en distintos sectores de la sociedad. Resultado de
esto en 1992 se estableció el “Convenio sobre la diversidad Biológica” en el cual
se discute acerca de la conservación de la diversidad biológica, la utilización
sostenible de sus componentes y la participación justa y equitativa en los
beneficios que se derivaran de la utilización de los recursos genéticos. Esto a su
vez, levanto nuevos puntos como el problema del acceso a dichos recursos, la
transferencia de tecnología, la financiación y los derechos de propiedad (CE,
2006).

El convenio anterior, dio pauta para la generación del “Protocolo de Cartagena


sobre Seguridad de la Biotecnología del Convenio sobre la Diversidad Biológica”
en el 2000, el cuál fue firmado por un número importante de países, entre ellos
México y a partir del cual se establecieron una serie de medidas acerca de la
manipulación, transporte, envasado, información de OGM, además del control y
manejo de riesgos. Cada país adscrito al protocolo asume el cumplimiento y
ejecución de los artículos señalados. A pesar del establecimiento de dicho
protocolo, en México no existen aún los mecanismos adecuados para su
ejecución. Además es sustancial señalar que México mantiene relaciones
comerciales agrícolas muy importantes con Canadá y Estados Unidos, siendo este
último uno de los países que no firmó el protocolo, lo que representa que no
considera la reglamentación allí planteada. Esto ha significado el establecimiento
de acuerdos trinacionales para salvar el punto del protocolo en México. Existió un
programa piloto para el comercio de maíz amarillo en el cuál se implementaba el
artículo 18.2 del Protocolo de Cartagena, referente a la presentación de
información acerca del contenido de organismos vivos modificados genéticamente.
Sin embargo, esto es voluntario para los productores que así lo deseen, por lo que
no hay certeza en cuanto al movimiento de OGM con ambos países en lo que
respecta a los productos agrícolas, a pesar de la existencia y firma del Protocolo
por parte de México.
128
Otros acuerdos a nivel internacional donde México ha suscrito su participación son
la Convención Internacional de Protección Fitosanitaria (IPPC), que es un tratado
internacional que busca la generación de acciones coordinadas y eficaces para
prevenir y combatir la introducción y propagación de plagas en plantas y productos
vegetales45. La Organización Norteamericana de Protección de Plantas (NAPPO)
la cual desarrolla la Norma Regional sobre Medidas Fitosanitarias (NRMF No. 14),
bajo la cual se ofrece orientación acerca de los riesgos, potenciales directos o
indirectos a las plantas y la sanidad vegetal que presentan la importación y
liberación en el medio ambiente de plantas transgénicas46.

También existe la Organización Mundial para la Salud Animal (OIE); esta


organización fundamentalmente elabora normas y directrices destinadas a
prevenir la introducción de agentes y enfermedades infecciosas durante el
comercio internacional de animales, material genético animal y productos de
fauna47. Y finalmente, la Comisión del Codex Alimentarius, encargada de la
elaboración de normas y directrices para los alimentos genéticamente
modificados.

La participación de México en dichas organizaciones y acuerdos es importante, sin


embargo, al establecerse sólo normas y sugerencias de cómo actuar en
determinados casos y al no existir ningún tipo de penalización o sanción, el
seguimiento o no de lo que se establece es responsabilidad de cada país. Si la
decisión fuese seguir las normas o hubiese alguna manera de difundirlas entre la
comunidad, la importancia de la partición de México sería más relevante, pero la
evidencia recolectada a través de entrevistas muestra que pocos agentes y
organizaciones conocen este tipo de reglamentación. En general actúan sin saber
siquiera que existen, lo que significa que el que México firme este tipo de acuerdos
o participe en dichas organizaciones no tiene influencia real en las acciones de los
agentes dentro del país.

A nivel nacional, la acción más importante, fue resultado de un proceso de


discusión y retroalimentación propuesto por diversos investigadores y grupos
sociales que junto con los legisladores lograron emitir la Ley de Bioseguridad de
Organismos Genéticamente Modificados (LBOGM).

Actores como la Academia Mexicana de Ciencia (AMC) y sobre todo algunos de


sus participantes, han jugado un papel relevante en la discusión y propuestas
45
http://www.ippc.int
46
http://wwwnappo.org
47
http//www.oie.int

129
surgidas para el país. Un primer intento fue el presentado en el libro “Biotecnología
moderna para el desarrollo de México en el siglo XXI; retos y oportunidades”
coordinado por el Dr. Bolívar
Zapata y publicado por el Consejo de Ciencia y Tecnología (CONACYT) en el
2002, en el cual se muestra una descripción de las capacidades desarrolladas y
sobre todo se proponen una serie de lineamientos para la consolidación de la
Biotecnología en el país.

Dicha publicación motivó un continuo trabajo de análisis y discusión en torno al


tema, que se complementó con un seminario sobre Biotecnología y Legislación en
el Senado de la República que se tradujo en una Iniciativa de la Ley de
Bioseguridad de Organismos Genéticamente Modificados (ILBOGM), que más
tarde fue aprobada en el 2003.

Junto con la aprobación de la Ley se llevaron a cabo actividades como foros,


simposios y reuniones entre distintos actores involucrados en la Biotecnología,
esto generó un proceso de discusión y retroalimentación que produjo distintos
resultados, por un lado ciertos acuerdos, pero también resistencia por parte de
ciertos grupos sociales.

Dicha Ley busca “regular las actividades de utilización confinada, liberación


experimental, liberación en programa piloto, liberación comercial, comercialización,
importación y exportación de organismos genéticamente modificados, con el fin de
prevenir, evitar o reducir los posibles riesgos que estas actividades pudieran
ocasionar a la salud humana o al medio ambiente y a la diversidad biológica o a la
sanidad animal, vegetal y acuícola”48.

La Ley se expidió hasta el 18 de marzo de 2005 y está compuesta por 124


artículos y 12 transitorios.

6.2 Finalidades de la Ley de Bioseguridad de Organismos Genéticamente


Modificados
Garantizar un nivel adecuado y eficiente de protección de la salud humana, del medio ambiente y la
diversidad biológica y de la sanidad animal, vegetal y acuícola, respecto de los efectos adversos que
pudiera causarles la realización de actividades con organismos genéticamente modificados;
Definir los principios y la política nacional en materia de bioseguridad de los OGM y los instrumentos
para su aplicación;
Determinar las competencias de las diversas dependencias de la Administración Pública Federal en
materia de bioseguridad de los OGM;
Establecer las bases para la celebración de convenios o acuerdos de coordinación entre la Federación,

48
Ley de Bioseguridad de Organismos Genéticamente Modificados. Cámara de Diputados del H. Congreso
de la Unión. Texto Vigente Nueva Ley publicada en el Diario Oficial de la Federación el 18 de marzo de 2005

130
por conducto de las Secretarías competentes y los gobiernos de las entidades federativas, para el
mejor cumplimiento del objeto de esta Ley;
Establecer las bases para el funcionamiento de la Comisión Intersecretarial de Bioseguridad de los
Organismos Genéticamente Modificados, a través de la cual las Secretarías que la integran deban
colaborar de manera coordinada, en el ámbito de sus competencias, en lo relativo a la bioseguridad de
los organismos genéticamente modificados;
Establecer procedimientos administrativos y criterios para la evaluación y el monitoreo de los posibles
riesgos que puedan ocasionar las actividades con organismos genéticamente modificados en la salud
humana o en el medio ambiente y la diversidad biológica o en la sanidad animal, vegetal o acuícola;
Establecer el régimen de permisos para la realización de actividades de liberación experimental, de
liberación en programa piloto y de liberación comercial, de organismos genéticamente modificados,
incluyendo la importación de esos organismos para llevar a cabo dichas actividades
Establecer el régimen de avisos para la realización de actividades de utilización confinada de
organismos genéticamente modificados, en los casos a que se refiere esta Ley
Establecer el régimen de las autorizaciones de la Secretaría de Salud de organismos genéticamente
modificados que se determinan en esta Ley;
Crear y desarrollar el Sistema Nacional de Información sobre Bioseguridad y el Registro Nacional de
Bioseguridad de los Organismos Genéticamente Modificados
Determinar las bases para el establecimiento caso por caso de áreas geográficas libres de OGM en las
que se prohíba y aquellas en las que se restrinja la realización de actividades con determinados
organismos genéticamente modificados, así como de cultivos de los cuales México sea centro de
origen, en especial del maíz, que mantendrá un régimen de protección especial
Establecer las bases del contenido de las normas oficiales mexicanas en materia de bioseguridad
Establecer medidas de control para garantizar la bioseguridad, así como las sanciones
correspondientes en los casos de incumplimiento o violación a las disposiciones de esta Ley, sus
reglamentos y las normas oficiales mexicanas que deriven de la misma
Establecer mecanismos para la participación pública en aspectos de bioseguridad materia de esta Ley,
incluyendo el acceso a la información, la participación de los sectores privado, social y productivo a
través del Consejo Consultivo Mixto de la CIBIOGEM, y la consulta pública sobre solicitudes de
liberación de OGM al ambiente, y
Establecer instrumentos de fomento a la investigación científica y tecnológica en bioseguridad y
Biotecnología
Fuente: elaboración propia con la información de la Ley de Bioseguridad de Organismos Genéticamente
Modificados. Cámara de Diputados del H. Congreso de la Unión. Texto Vigente Nueva Ley publicada en el
Diario Oficial de la Federación el 18 de marzo de 2005.

Como se puede observar, se plantean los objetivos básicos en cuanto al


tratamiento de los OGM. El reglamento de la misma Ley se expidió un día después
y es en el 2008 que se realizaron las últimas modificaciones, donde se especifica
los requisitos que debe cumplir el solicitante de un permiso para realizar
actividades de liberación al medio ambiente de OGM con fines de tipo
experimental o comercial; establece la presentación de solicitudes por escrito con
información sobre la caracterización del OGM, identificación de la zona o zonas
donde se pretenda liberar, estudio de los posibles riesgos que la liberación (tanto
en el medio ambiente como en la diversidad biológica); además de establecer los
plazos máximos para la resolución de las solicitudes de permisos.

131
Sin embargo, en la práctica constatamos que tanto investigadores de
universidades como de centros públicos no se encuentran familiarizados con este
instrumento de regulación, en la mayoría de los casos expresaron que su
desconocimiento se debía al poco impacto que esta tiene en el desarrollo de sus
actividades. Por el lado de las empresas esto es un poco distinto, si bien tampoco
es de dominio generalizado, hay empresas que se mantienen al tanto de las
modificaciones a la Ley de Bioseguridad o a las normas en general a través de
asociaciones como AgroBio las cuales agrupan algunas empresas internacionales
como Bayer Crop Science, Dow Agro Sciences o Monsanto, las cuales se
relacionan sobre todo con la Biotecnología agrícola, por lo que mantienen un
especial interés en el proceso de regulación de semillas y granos.

La Ley no ha logrado instaurarse como un incentivo a la innovación, si bien se han


logrado establecer algunas reglas del juego, éstas no han tenido el impacto
esperado. Es necesario un mecanismo de difusión de lo que plantea, de manera
que los agentes conozcan el ambiente el que se encuentran inciertos, ya que
hasta ahora son unos pocos actores los que se han involucrado en esta arena de
acción ya sea para usarla a su favor o para criticarla en diversos sentidos. De
acuerdo al esquema teórico que aquí se planteo en el capítulo 1, la Ley se ha
convertido en un espacio vacío de contenido de acción, ya que no hay un proceso
de apropiación por parte del grueso de los agentes, su impacto es limitado y para
algunos actores puede convertirse en una barrera, más que en un sistema de
incentivos.

6.3 Trayectoria de la Legislación Nacional en Biotecnología

Año Ley o Reglamento Particularidades


2003 Ley de Bioseguridad de Organismos Genéticamente Modificados Aprobación
2005 Ley de Bioseguridad de Organismos Genéticamente Modificados Expedición
2006 Reglamento de la Comisión Intersecretarial de Bioseguridad de los
Organismos Genéticamente Modificados
2007 Reglas de Operación de la Comisión Intersecretarial de Bioseguridad
de los Organismos Genéticamente Modificados
2008 Reglamento de la Ley de Bioseguridad de OGM Reforma al
artículo 65, se
adiciona los
artículos del 66
al 73
2009 Modificación de las Reglas de Operación de la Comisión
Intersecretarial de Bioseguridad de los OGM
2009 Reglas de Operación del fideicomiso denominado “Fondo para el
fomento y apoyo a la investigación científica y tecnológica en
bioseguridad y Biotecnología ” (Fondo-CIBIOGEM)
Elaboración propia

132
La Ley de Bioseguridad de OGM representa un avance significativo en diversos
aspectos, por ejemplo la evaluación de inocuidad que se realiza junto con la
Secretaría de Salud para concluir si un nuevo alimento es igualmente seguro y
nutritivo que el producto homólogo convencional con el que se le ha comparado
(Solleiro, 2005). Además de que en la Ley se presentan términos relevantes para
la evaluación de la Biotecnología, sin embargo presenta una serie de deficiencias
comentadas previamente.

Además de la Ley antes mencionada existen leyes que complementan el marco


regulatorio para la Biotecnología agrícola en México. A continuación
mencionaremos brevemente cuales son y sus principales características. Ley
Federal de Variedades Vegetales creada en 1996 establece las bases para la
protección, comercialización y fomento de la innovación en semillas y material
vegetativo (Solleiro, et al. 20005). Esta ley establece por si misma incentivos
importantes para la transferencia de nuevas tecnologías ya que, al poder proteger
materiales importados y nacionales, fomenta el acceso a los mercados gracias a
que al ser reconocido como obtentor de una variedad vegetal, se le permite la
explotación por 18 años de la especie. Aunque no es una patente lo que se otorga,
las condiciones son similares para ambos tipos de derechos de propiedad
intelectual. Para algunos investigadores (Solleiro, et al. 2005) esto representa
junto la Ley Federal de Derechos de Autor un esquema completo de propiedad
intelectual para los recursos agrícolas. Retomando las categorías analíticas del
primer capítulo, aún quedan huecos en torno a los usos y explotación de los
recursos biotecnológicos que se obtienen, por lo que no es un esquema
institucional claro y oportuno. Al contrario es aún un instrumento institucional con
deficiencias y vacíos, lo que puede convertirse en una barrera más que en un
incentivo ya que al no haber claridad del esquema de propiedad este aumenta la
incertidumbre a pesar de su existencia.

La Ley de Sanidad Vegetal tiene por objeto regular y promover, la sanidad vegetal,
así como la aplicación, verificación y certificación de los sistemas de reducción de
riesgos de contaminación física, química y microbiológica en la producción
primaria de vegetales y comprende actividades que se realicen en la producción y
el empaque de vegetales en campo49. Además de las anteriores, existe la Ley
General de Equilibrio Ecológico y Protección del Ambiente (modificación 1996) en
la cual se hace referencia a la Biotecnología como un mecanismo que puede
ayudar a promover la preservación, restauración y el mejoramiento del ambiente y
la biodiversidad.

49
http://leyco.org/mex/fed/117.html#t1c1 consultado el día 10 de junio de 2010

133
La Ley de Propiedad Industrial encargada proteger la propiedad industrial
mediante la regulación y otorgamiento de patentes de invención; registros de
modelos de utilidad, diseños industriales, marcas, y avisos comerciales;
publicación de nombres comerciales; declaración de protección de
denominaciones de origen, y regulación de secretos industriales.

Finalmente la Ley de Promoción y Desarrollo de los Bioenergéticos publicada en el


2008, la cual busca diversificar las fuentes de energía y el desarrollo sustentable a
fin de continuar en con el apoyo al campo (SE, 2010). Esta Ley busca promover la
producción de insumos para bioenergéticos, los cuales pueden derivarse también
de actividades agropecuarias, forestales, algas, procesos biotecnológicos y
enzimáticos del campo. Como resultado de la Ley, se estableció la Comisión de
Bioenergéticos, encargada de dar seguimiento a los programas derivados,
fomentar la agroindustria y la inversión e infraestructura necesaria, así como el
uso de tecnologías eficientes para la producción, almacenamiento, transporte,
distribución, comercialización y uso de los mismos (SE,2010).

Las leyes hasta aquí mencionadas forman en conjunto el marco institucional para
la Biotecnología, la incidencia en el desempeño de los actores aún no es fácil de
juzgar, pero la evidencia obtenida a través del trabajo de campo realizado en torno
a las percepciones de algunos agentes del sector muestra que su existencia no ha
sido un elemento detonador de la Biotecnología. Como se explico en el capítulo 1,
para que una ley funcione es necesario que todos los actores la conozcan y
acepten, pero en el caso de México destaca que los actores no conocen el entorno
institucional en el cual se mueven. En las entrevistas realizadas encontramos que
hay empresarios, investigadores, actores puente que ignoran estas legislaciones.
Sólo algunos han sido y son participes de la discusión, por ejemplo organizaciones
sociales como Greenpeace o AgroBio, los cuales tienen intereses particulares,
pero la impresión que hasta ahora existe es que las acciones de los agentes del
sector han tomado su propio camino sin considerar al marco establecido. De
acuerdo a la discusión teórica que se presento en el capítulo 1 pareciese que el
diseño institucional juega un papel mínimo en la determinación de las expectativas
de los agentes y en la disminución de la incertidumbre por lo que la conducta de
los mismos se encuentra mayormente determinada por esquemas que poco tienen
que ver con el diseño institucional en el país.

La teoría del Agente-Principal es útil para analizar parte de lo que aquí sucede, ya
que como se explicó previamente en el capítulo 2, se basa en la relación entre dos
partes, el agente que actúa como representante de la otra o principal, donde
existen problemas de información asimétrica lo cual genera problemas como
134
selección adversa, riesgo moral, choques externos y costos de agencia. En el
caso que aquí revisamos, vemos que el principal problema que se enfrenta en la
Biotecnología son los costos de agencia, dado que se ha establecido una
deficiente estructura de incentivos que ha propiciado que las preferencias del
agente y las del principal no sean compartidas, esto podría corregirse si se
establecieran controles adecuados ex ante y ex post, junto con modificaciones en
la estructura de incentivos, tratando de alinearlas.

El problema lo enunciamos de la siguiente manera y es un doble problema de


agencia50:

EstadoPrincipal / Regulados  Agente


1. El Estado delega facultades regulatorias a otros agentes, que pueden tener
preferencias diferentes a las de la sociedad o los agentes involucrados
(regulados o afectados)

2. Estos reguladores deben tener experiencia y conocimiento sobre el tema de la


Biotecnología (riesgos y potencialidades), un primer problema es que no los
tengan o que los tengan y presenten intereses previos en la materia, distintos
a los de Estado.
EstadoAgente / Regulados  Principal

1. El Estado actúa contra los intereses de la sociedad o agentes involucrados


(regulados) cuando las preferencias no están alineadas

2. Lo anterior sucede cuando los agentes regulados se componen por grupos


con distintas preferencias, de manera que el Estado no puede generar
consensos.

En la medida que se manifiesten problemas de agencia en la regulación, se


generaran iniciativas que no corresponden con los intereses del Estado, ni mucho
menos con los de los regulados. Además a esto se agrega el problema de la poca
efectividad en la supervisión de su cumplimiento, hasta ahora los organismos
ejecutores y sancionadores de la legislación han tenido una actuación moderada o
inexistente en algunos otros.

Lo anterior puede disminuir en la medida que se establezcan mecanismos de


control que permitan verificar que las regulaciones emitidas correspondan con los
intereses del Estado, pero sobre todo con esquemas de evaluación del
desempeño de la función regulatoria compartida, en el cual se permita que los
50
Se usa el término regulado para hacer referencia a todos los actores involucrados con la Biotecnología
Agroindustrial -alimentaria, esto incluye a empresas, universidades, centros públicos, privados, consumidores,
productores y organismos intermedios. Todos afectados por las decisiones de regulación.

135
beneficios obtenidos por los agentes privados dependan de que sus decisiones se
encuentren alineadas con las preferencias gubernamentales.

Conclusiones

Existen tres consensos muy importantes para la Biotecnología, el primero a nivel


internacional sobre el reconocimiento de evaluar y dar seguimiento, caso por caso
con base en el conocimiento científico a los OGM que deseen utilizarse, por lo
tanto es necesario el monitoreo, la comparación de beneficios y posibles riesgos
del uso de cada uno de los OGM.

También existe consenso en torno al desarrollo de investigación interdisciplinaria,


que fomente la discusión entre aquellos grupos de científicos que consideran la
existencia de posibilidades de que los transgenes pueden causar respuestas no
evidentes en los organismos receptores, y aquellos que consideran que no existe
ningún tipo de riesgo en la transferencia horizontal de material genético y por lo
tanto, el resultado son organismos naturales. Además de la incorporación de
disciplinas sociales y económicas que colaboren con estudios sobre diversos
aspectos.

El último consenso hace referencia al nivel nacional y el reconocimiento por parte


de la comunidad científica de que los OGM pueden representar una oportunidad
de desarrollo de la agricultura nacional, pero sin olvidar la importancia de un
riguroso control de la evaluación de riesgos en la salud humana y en la
biodiversidad. Aunque existen aún puntos discordantes en cuanto a ciertos
cultivos, por ejemplo el maíz donde hay por lo menos dos posiciones. La primera
donde se sugiere la liberación de permisos en determinadas regiones controladas,
después de las pruebas experimentales y otra donde se cancela la opción
totalmente. Y a pesar de no tener un punto de acuerdo, existen ya pruebas
legales permitidas a empresas como Monsanto y Down Agroscience a partir del
vencimiento de la moratoria impuesta en el tema, lo que debería obligar tanto a los
científicos, como a los productores nacional a avanzar en la discusión y plantear
una estrategia conjunta que no sólo beneficie a las grandes empresas
multinacionales, sino a las empresas y agricultores nacionales. Por lo tanto es
necesario el involucramiento de los sectores académicos, industria y gobierno, de
manera que se establezcan metodologías para:

a) Aprobación de uso y/o liberación al ambiente


b) Procesos de verificación
c) Procesos de seguimiento

136
Lo anterior no sólo es prioritario sino urgente, ya que en otros países la discusión
se centra en cómo hacer que coexistan cultivos tradicionales con cultivos de OGM,
mientras que en México aún no se avanza en el tema de las pruebas
experimentales (Royal Society y otras Academias de Ciencias 2000; Dale, 2002;
Thomas y Fuchs 2002; Schiemann, 2003; AEBC 2004; APBN 2004 y Ponti 2005) y
mucho menos en el tema de la construcción de un acuerdo social en el cual se
incluya la mayor parte de opiniones y se trate de encontrar puntos de acuerdo a
pesar de las divergencias. Recordemos que tal y como aquí se planteo en el
concepto de innovación, ésta no será aceptada si socialmente no implica la
solución de problemáticas cercanas a la población. La innovación resuelve y
permite a la sociedad encontrar puntos de conexión con su vida cotidiana. Pero
esto también implica un arduo trabajo de difusión y discusión, la cual no ha sido
incentivada como parte del mismo esquema institucional que rige a la
Biotecnología.

Por lo que se requiere que los legisladores y los tomadores de decisiones se


encuentren bien informados sobre lo que significa la liberación del uso de
transgénicos y cuáles deberían ser los elementos fundamentales para la
formulación de normas y reglamentos.

Debemos mencionar que en la actualidad, la Comisión Federal de Mejora


Regulatoria se encuentra evaluando y recibiendo comentarios acerca del
anteproyecto “Acuerdo por el que se determinan los centros de origen y los
centros de diversidad genética del maíz en el territorio nacional”, además del
formulario de manifestación de impacto regulatorio (MIR) remitidos por la
Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT).

Dicho documento ha generado muy diversas opiniones, desde aquellas que


consideran que el anteproyecto sobrepasa la Ley de Bioseguridad y establece
áreas permitidas para el uso de transgénicos o los que apelan a que es un
documento prohibitivo que rezagaría al país por una exclusión diferencial y
arbitraria de un conjunto de tecnologías, generaría una reducción drástica de
zonas y prácticas productivas, generará incongruencias metodológicas respecto a
los estudios y a la evaluación de riesgos en bioseguridad y cancelaría los
incentivos para la I+D por instituciones públicas y privadas. Sin duda, aún queda
un largo proceso de discusión en este tema en particular, pero es muy importante
decir que se necesita una mejor estrategia de comunicación y difusión de estas
actividades, justamente para lograr integrar a más sectores y agentes, de manera
que el proyecto culmine con una propuesta de consenso, que realmente implique
cambios en la actividad regulatoria de la Biotecnología.

137
A pesar de que la Ley es un avance significativo en cuanto al proceso de
regulación, esta presenta deficiencias, ya que aunque el texto incluye los términos
más relevantes sobre la evaluación de riesgo caso por caso, no se mencionan los
mecanismos para su implementación. El reglamento de dicha Ley entro en vigor
en 2005 y en 2008 sufrió una serie de modificaciones que han tratado de
complementar y mejorar su acción.

Para algunos grupos sociales, sobre todo campesinos la Ley de Bioseguridad de


OGM ha representado peligro constante, ya que según su apreciación es
demasiado permisiva con las grandes empresas, sobre todo transnacionales. Y
aunque esto merece un análisis profundo, podemos decir que uno de los graves
problemas con el marco institucional establecido es la resistencia que ha existido
por parte de algunos grupos sociales y la impresión generalizada en algunos
sectores de que más que regular, la Ley promueve el desarrollo de la
Biotecnología. Desde nuestra perspectiva, esto es equivocado ya que la Ley de
Bioseguridad junto con otras como la Ley de Sanidad Vegetal o la Ley de
Variedades Vegetales establecen verdaderas regulaciones e incentivos en ciertos
casos.

El problema es que no están siendo acatados como debería y el impacto no ha


sido el esperado, pero esto no tiene que ver estrictamente con la formulación de
las leyes sino con diversos aspectos como la desinformación que puede ser
resultado de una pobre estrategia de difusión por parte de las propias
organizaciones reguladoras, desinterés por parte de los agentes porque el marco
institucional no afecta su desempeño y por lo tanto esto se relaciona con las reglas
informales, los comportamientos enraizados socialmente que no cambian a pesar
de la estructura formal de incentivos o regulaciones, pero que se mantienen por su
debilidad.

Existe un marco institucional en México para la Biotecnología, sin embargo esta


débilmente planteado, sobre todo por la poca capacidad de sancionar y promover.
Y a pesar de existir, no son incentivos claros para los agentes. Es más un
problema de calidad y direccionalidad que de inexistencia; la generalidad de
ciertas normas y el desconocimiento por parte de los actores ha sido parte
fundamental de que no exista una retroalimentación positiva para el sector.

A pesar de la opinión de algunos investigadores al considerar que el sistema de


propiedad intelectual tal y como está diseñado representa incentivos para el
desarrollo biotecnológico, consideramos que este no funciona como un incentivo
real, gracias a las características de los agentes y las percepciones de la
sociedad.
138
El marco institucional existente no genera incentivos adecuados, ya que no son
claros y tampoco directos. La mayoría de las organizaciones y las leyes sólo se
encuentran en el nivel de normar la conducta, pero significa sobre todo
prescripciones, pero no incentivos ni reglas. No existen aún los mecanismos
necesarios para que pueda potencializarse la actuación de los agentes del sector,
éstos no los consideran incentivos en primer lugar por desconocimiento, pero
sobre todo por el bajo impacto que tienen al no castigar ni premiar conductas
favorables o no al desarrollo biotecnológico.

Tampoco percibimos sincronía y coordinación, esto es importante ya que si


existiera un programa o plan nacional referente a la Biotecnología, podrían
definirse más claramente lo que cada organismo y ley tiene como objetivo, límites
y alcances. Pero lo que aparece son una serie de iniciativas en respuesta a
problemas coyunturales. La falta de visión y planeación a mediano y largo plazo
muestra un marco desestructurado, con poca comunicación y sin una estrategia
integral. Sin duda, esto es un camino difícil dado que al ser una tecnología
emergente la incertidumbre aún priva en muchas de las decisiones que se toman,
pero es mejor tomar posición lo antes posible, ya sea con mecanismos claramente
favorables para su desarrollo, uso y explotación como sucede en países como
Canadá o bien para una estricta regulación. Esto plantearía rotundamente la
dirección hacia donde el país quiere ir, ya que ante la falta de un programa integral
que articule el marco institucional y sus diversos componentes sólo vemos un
escenario contradictorio o en muchas ocasiones difuso, donde no existen
posiciones claras, por lo tanto se carece de objetivos y metas.

Una de las posibles opciones para salvar la construcción de una estrategia integral
y un marco institucional que fomente lo que se determine como objeto de interés
público nacional, que regule lo que sea necesario y que prohíba lo que se
determine puede basarse en el análisis de los esquemas institucionales que otros
países en condiciones o con recursos similares han hecho.

139
Capítulo 7
Las Políticas Públicas como generadoras de Incentivos

Introducción

De acuerdo a las características antes mencionadas y con las particularidades de


un sector como el biotecnológico, es imprescindible la existencia de cooperación
entre el sector científico y el empresarial, sobre todo en países como México
donde las empresas o realizan muy poca investigación o en muchos casos, no
tienen la capacidad para implementar un laboratorio que cubra con sus
necesidades, por lo que es factible acudir a las universidades o centros de
investigación. Sin embargo, la evidencia demuestra que en México la vinculación o
cooperación son fenómenos poco comunes y con muchos problemas a su
alrededor, que pasan por la comunicación, las expectativas, la burocracia y la
incertidumbre sobre los derechos de propiedad de los resultados que de allí se
desprendan, ya sean procesos o productos nuevos.

La existencia de un marco institucional que dirija o coordine las acciones de los


agentes hacia la cooperación y hacia otras acciones que generen el desarrollo del
sector, será efectivo siempre y cuando se diseñen los incentivos concretos para
que sea posible dicha relación; esto se logra proveyendo un marco que no sea
contradictorio, que sea claro y que sobre todo plantee las herramientas a través de
las cuales se buscará cumplir y los mecanismos que sancionarán a aquellos que
no los cumplan.

Estudios previos muestran que para la existencia de cooperación entre


organizaciones científicas y empresariales en el área biotecnológica en México,
tiene relevancia el papel de los agentes y los incentivos subyacentes que emergen
de su cooperación en el nivel personal. La estructura institucional
macroeconómica parece no incidir en el proceso, por lo que la relación depende
en gran medida de la acción individual, la generación de confianza, la integración
de metas conjuntas y la constante comunicación (Amaro, et al. 2009). Sin
embargo, lo anterior sólo demuestra que los casos exitosos son la excepción y no
la generalidad, por lo que se debería apelar a la construcción de un marco
institucional que incentive a la mayoría de los agentes y qué logre modificar el
comportamiento de todos los involucrados, con la finalidad de generar sinergias
y/o complementariedades.

140
También existen un grupo de estudios realizados en varios países referentes al
éxito en el desarrollo de ciertas tecnologías, ya sea como variable sectorial,
regional o ambas que muestran una serie de factores relevantes en la trayectoria
que siguieron. Como se explicó previamente en la Biotecnología, los estudios
indican que variables como: las políticas públicas de ciencia, tecnología e
innovación, la creación o modificación de incentivos a distintos niveles, el sistema
educativo, las leyes, reglamentaciones y los derechos de propiedad, entre otros,
desempeñaron un rol muy importante en la promoción y crecimiento de dicha
tecnología (Kaiser y Prange, 2004; Momma y Sharp, 1999; Linskey, 2006; Hsu, et
al. 2005; Mehra,1999; Adeoti y Adeoti, 2005; Gittelman, 2006; Dohse,2000; Niosi y
Banik, 2005, Van der Valk, 2009).

Como se mencionó en el primer capítulo, la idea principal en dichos análisis infiere


la existencia de una relación directa entre las transformaciones institucionales y el
impacto de éstas en la evolución de la tecnología. A pesar de que las perspectivas
teóricas usadas son distintas, la mayoría coincide en analizar los cambios en las
políticas públicas de ciencia y tecnología, los mecanismos de incentivos, las
modificaciones a los sistemas educativos, las actividades empresariales y
finalmente el marco regulatorio legal y los derechos de propiedad.

En esta investigación se han retomado ya algunas de las dimensiones antes


mencionadas, como el marco regulatorio, por lo que el presente capítulo analiza y
busca establecer si las políticas CyT han sido un factor determinante en la
dinámica innovadora; por lo que consiste en comprobar si en México han sido un
elemento clave para el desarrollo de la Biotecnología y si han tenido la incidencia
esperada en el desarrollo de un sistema sectorial innovación. Partiendo de la
hipótesis, de que las políticas públicas son las encargadas de establecer el marco
regulatorio, los mecanismos de incentivos para los diversos agentes y sobre todo
de definir las prioridades nacionales, sectoriales o regionales en cuanto a la
ciencia y la tecnología.

En este capítulo se presenta una panorámica de las políticas tanto a nivel federal y
regional; éstas a su vez son contrastadas con algunos datos sobre la
Biotecnología en el país y con una serie de evidencia obtenida a través de trabajo
de campo, principalmente entrevistas y observación directa a distintos actores del
sistema.

El capítulo tiene la siguiente estructura: en el primer apartado se presenta la


revisión acerca de la importancia de las políticas de innovación en la actualidad, el
contexto en el cual se insertan los países en desarrollo como México y por lo tanto
la importancia que juega el establecimiento de metas científicas y tecnológicas
141
que promuevan beneficios para la sociedad. En el segundo apartado se hace una
revisión puntual de las estrategias federales y en el último apartado se revisan las
estrategias locales de cada uno de los estados analizados.

7.1 La Política de Ciencia, Tecnología e Innovación

De acuerdo a la definición propuesta en el capítulo 1, la innovación es el proceso


constante de aprendizaje que resulta de la interacción a nivel interno y externo, la
cual involucra la aplicación y el uso de nuevas ideas y conceptos en la
modificación de procesos, productos, servicios y prácticas con impacto en el
desempeño de la organización, lo que implica cambio y cuyo fin es la resolución
de un problema de la sociedad específico.

De acuerdo a la teoría de la innovación, existen tres modelos básicos para su


análisis en relación con las políticas que se implementan.

a. Modelo technology push (1950)


Aquí se plantea que los avances científicos estimulan a la innovación, ya que son
los abastecedores del conocimiento necesario para el desarrollo de procesos y
productos tecnológicos. El modelo se plantea como una sucesión de etapas que
tiene origen en el proceso de la ciencia básica, pasa al diseño e ingeniería,
manufactura y más tarde al proceso de mercadeo y ventas que es el espacio de
mercado.

b. Modelo demand pull (1960)


En este modelo se considera que las innovaciones son resultado de una demanda
insatisfecha de los consumidores o usuarios (Schmookler,1996; Dosi,1982). El
estímulo a la innovación en este caso viene de la demanda y a partir de allí es que
se sigue un proceso secuencial definido por las siguientes etapas: necesidades de
mercado, desarrollo, manufactura y ventas (Rothwell, 1994).

c. Modelo de acoplamiento entre ciencia, tecnología y mercado o modelo


interactivo (1970 y 1980)
Este último modelo ha sido llamado de distintas maneras, además de que se han
armado distintas versiones, lo relevante es la orientación que toma a diferencia de
los anteriores. En primer lugar, el proceso de innovación deja de ser un proceso
lineal, no existe un inicio definido ya que puede partir de distintos puntos; desde
las nuevas necesidades, por la generación de ideas o las nuevas tecnologías.
Este modelo introduce relaciones bidireccionales entre todos los elementos que
integran el proceso de innovación, comunicación y retroalimentación (Rothwell,
1994)
142
En países donde las empresas cuentan con pocos recursos para invertir en I+D y
sobre todo tienen escasa visión de lo que puede representarle en el futuro, y
donde la investigación científica esta desconectada de la solución a problemas
reales y existe una tendencia al desarrollo de ciencia básica y no aplicada, es
necesario establecer mecanismos desde el gobierno que direccionen la conducta
de los agentes para el beneficio social y económico del país.

La política de ciencia, tecnología e innovación (CTI) es un brazo fundamental


dentro de la política económica de cualquier país. Busca garantizar a las
empresas y a los consumidores un acceso adecuado y actualizado a la tecnología
al menor costo posible, fomentando la invención, la innovación y las mejores
prácticas tecnológicas (Barber y White, 1987).

La política de CTI se compone de una serie de instrumentos de los que dispone el


Estado para alcanzar objetivos enfocados a la creación de riqueza del país, ya que
está relacionado con el crecimiento de la productividad y la mejora de la calidad de
vida de la sociedad. Así, la política de Ciencia y Tecnología expande su espectro
de actuación ya que no sólo se ocupa del fomento de las actividades de
investigación y desarrollo, sino también del uso eficiente de las tecnologías, esto
significa la explotación de lo generado, ya que las invenciones son relevantes en
la medida que se conviertan en innovaciones a través de su inserción en el
mercado.

La política de ciencia y tecnología es esencialmente, una política dirigida a la


asignación de recursos y de reparto de recursos entre los actores del sistema
(Lowi, 1972), además de ser la encargada de establecer una estructura de
incentivos que estimule a todos los actores involucrados en las actividades
científicas y tecnológicas. Dichos procesos de distribución requieren de una serie
de mecanismos de legitimación (Feldman y March, 1981; Feldman, 1989).
Generalmente existen parámetros que se establecen como válidos para una
sociedad y a partir de los cuales se organizan prioridades en cuanto a la
asignación de los recursos; también se realizan evaluaciones de manera que se
puedan valorar los recursos asignados en el crecimiento económico.

En países donde el desarrollo científico y tecnológico es incipiente, las políticas de


ciencia, tecnología e innovación implementadas por los gobiernos juegan un papel
fundamental, sobre todo en la creación de estrategias de vinculación entre los
agentes que realizan investigación pública (universidades y centros públicos de
investigación) y las empresas (Adeoti, 2005), en el establecimiento de prioridades
a largo corto, mediano y largo plazo y por lo tanto, una de las preocupaciones
143
iniciales es el establecimiento de incentivos para los distintos agentes que
componen un sistema científico, tecnológico y de innovación.

En este contexto, las Políticas de CTI se enfocan a diversos actores y ponen


especial atención en las particularidades de los mismos. Al ser uno de los factores
fundamentales la promoción y la generación de nuevos conocimientos, que
cumplan con el ciclo de la innovación, juega un papel relevante cómo es que se
crearan estos nuevos conocimientos; las Universidades son consideradas como
un generador nato de conocimiento que brinda un pool basto que puede
aprovecharse de distintas maneras, y con la promoción y el marco institucional
adecuado, puede transferir y desarrollar conjuntamente conocimiento con otras
organizaciones. Por otro lado, las empresas se han vuelto también, un espacio en
el que se genera conocimiento, capacidades y habilidades específicas que
resuelven problemas en ciertos contextos, pero que muchas veces no encuentran
los canales adecuados para explotarlos en el mercado.

La experiencia de algunos países desarrollados generó un debate acerca de la


temporalidad de las políticas, ya que se definió cierto proceso de escalamiento
que implicaba en primer lugar el desarrollo de políticas científicas, después
tecnológicas y finalmente de innovación. Sin embargo, en países como México
esto ha mostrado grandes dificultades sobre todo por las características de
algunos actores.

En términos generales, las políticas públicas y en este caso las de CTI se dividen
en dos grandes grupos.

a) Políticas horizontales, donde no se distingue entre sectores, son


consideradas como no discriminatorias y cuentan con una temporalidad
definida. Los principales instrumentos que se usan son medidas de tipo
regulatorio, creación de marcos institucionales y legales que garanticen
la competencia

b) Políticas Verticales, tienen una dirección determinada y tratan de


resolver una serie de problemáticas específicas y bien localizadas, de
manera que generalmente se dirigen a algunos sectores o bien a grupos
determinados de la sociedad.

Distinguir qué tipo de políticas se han implementado en México para el desarrollo


de la Biotecnología es fundamental, para comprender la trayectoria que ha
seguido así como la direccionalidad, las prioridades, los aciertos y las posibles
mejoras a corto y mediano plazo.
144
A nivel general, México cuenta con la Ley para el Fomento de la Investigación
Científica y el Desarrollo Tecnológico 1999, la de Ciencia y Tecnología y la Ley
Orgánica de CONACYT de 2002 (Dutrénit et al, 2006), además de los Programas
Especiales de Ciencia y Tecnología que son el principal instrumento para la
aplicación de la política de ciencia y tecnología. El principal encargado de
organizar parte de los recursos que se destinan para la CTI en el país es el
Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (CONACYT) a través de una serie de
instrumentos de fomento, apoyo y consolidación para los distintos actores del
sistema nacional.

Dentro del marco señalado, la Biotecnología ha sido considerada como una de las
cinco áreas estratégicas del conocimiento señaladas por el CONACYT dentro del
Programa Especial de Ciencia, Tecnología e Innovación (PECiTI) 2001-2006. Y
dentro del PECyT 2007-2012 se estableció como uno de los Programas de
importancia nacional para el desarrollo del país. Así surgió la iniciativa del
Programa para el desarrollo de la Bioseguridad y la Biotecnología. Al revisar los
objetivos y estrategias a seguir, se encontró que se establecen varias líneas de
acción reconociendo que la Biotecnología ha sido desarrollada principalmente en
centros e instituciones de investigación pública; por lo que es necesario fomentar
la articulación y la vinculación entre estos centros de investigación y las empresas,
para lograr el desarrollo de tecnología competitiva a nivel internacional, al menos
en algunos campos (PECiTI 2001-2006), además de fortalecer y ampliar la red de
laboratorios de detección de organismos genéticamente modificados de las
diferentes instancias gubernamentales y extender los lazos con los laboratorios de
las instituciones educativas y de investigación (PECyT 2007-2012).

El énfasis es adecuado, ya que se reconocen fortalezas en la generación de


capital humano de calidad internacional, se localizan algunas empresas que
desarrollan procesos biotecnológicos y se señalan las debilidades. Lo que
establece como relevante la implementación de acciones para lograr vinculación
entre las universidades y las empresas. Sin embargo, no se establecen criterios
adecuados de premios y castigos que alienten la acción. El diagnóstico es
adecuado, pero no se plantean objetivos y estrategias de mediano o largo plazo.

A diferencia de lo que ha sucedido en otros países como Japón (Linskey, 2006);


India (Mehra, 2001); Nigeria (Adeoti & Adeoti, 2005) o Alemania (Dohse, 2000)
donde a partir de diagnósticos oportunos acerca de las fortalezas y debilidades
científicas y tecnológicas en Biotecnología, plantearon estrategias puntuales para
lograr el desarrollo del sector o por lo menos de áreas particulares. Esto implicó, la
formulación de una estrategia nacional e integral que abarcó a diversos
145
elementos; esquemas de incentivos para empresas, universidades, modificaciones
educativas y fiscales entre otras. Pero al mismo tiempo se articuló a los agentes
con necesidades localizadas; el impulso de la política no sólo se centró en
fomentar la base científica, sino en la creación de mercado para las innovaciones
que pudiesen resultar.

La diferencia fundamental con México es que por lo menos, en el discurso que


integra los planes y programas de política en la materia, no existe una estrategia
integral. Se ha llenado de intenciones más que de propuestas para actuar. No ha
sido clara la manera mediante la cual pueda alentarse a la Biotecnología en el
país y mucho menos, se han establecido prioridades o áreas estratégicas de
interés. Ya que si bien existen aplicaciones que son vistas con cierta
desconfianza, podría pensarse en acentuar esfuerzos en aquellas áreas de la
Biotecnología en la cuales se cuente con capacidades previas.

Si México tuvo importantes capacidades en el sector químico, podría proponerse


un programa de reconversión tecnológica donde se aplique la Biotecnología en el
área farmacéutica o si se cuenta con una importante historia de investigación en
ciertos cultivos agrícolas, se pueden implementar programas de integración entre
productores e investigadores de manera que se formulen agendas compartidas,
redituables para ambos.

Al ser el Programa Especial de Ciencia y Tecnología el instrumento fundamental


de planeación del gobierno federal, no se focaliza y existe demasiada generalidad.
La definición de áreas claves de desarrollo, no tiene sentido si no se genera una
estrategia propia para cada área propuesta. CONACYT al ser el encargado de
algunas herramientas e instrumentos, tampoco establece criterios diferenciados de
apoyo y ninguna de las áreas claves tiene prioridad sobre las otras, ya sea para
programas, proyectos, financiamiento y mucho menos existe un programa
especial. A diferencia de países como Alemania donde se apostó fuertemente por
crear la llamada Bio-Región o los Bio-Clusters de algunos países europeos; o los
programas focales hacia la Biotecnología agrícola en Canadá con fuertes
incentivos mediante los derechos de propiedad y los mecanismos de
comercialización (Niosi y Bas, 2004). Lo que demuestran los países citados es que
no solamente es necesario plantear las prioridades, sino la estrategia integral que
incluya incentivos claros y modificaciones institucionales.

Probablemente, lo más cercano que existe en el país son los apoyos otorgados a
través de los distintos fondos públicos. Por ejemplo el Fondo de Economía, los
Fondos Mixtos o los Fondos Sectoriales donde existe uno denominado “Fondo
Sectorial de Investigación en Materia Agrícola, Pecuaria, Acuacultura,
146
AgroBiotecnología y Recursos Fitogenéticos (SAGARPA-CONACYT-COFUPRO)”
que es prácticamente el único con dicha inclinación. Pero es importante destacar
que estos son los instrumentos que existen para el desarrollo tecnológico
fundamentalmente. Ya que el apoyo a las capacidades científicas es mayor.
Existen programas de becas para estudiantes de posgrado que aunque no hacen
diferencia entre las áreas que prioritarias, es fuente de una importante cantidad de
recursos humanos especializados. También existe el programa de apoyo a los
investigadores a través del Sistema Nacional de Investigadores (SNI) y algunos
otros fondos de investigación básica.

Aunque dentro de la política pública se ha enfatizado acerca de la importancia de


vincular los agentes que ofertan recursos científicos y tecnológicos con los que
demandan (modelo interactivo), investigaciones como la de Jaso (2005) muestran
que en realidad domina un modelo technology- push, ya que existe una gran
concentración en las capacidades científicas básicas. Estos instrumentos también
sugieren que en el país se han generado en la realidad políticas horizontales,
aunque en el discurso se apele a las políticas verticales. Sin embargo, es claro
que no existe discrecionalidad en los mecanismos y en general las medidas son
de tipo regulatorio por lo menos lo que concierne a nivel federal, sin que se
constituyan como un marco institucional que determine incentivos.

En México la Biotecnología ha sido considerada como una de las áreas prioritarias


de desarrollo en la ciencia y la tecnología. Sin embargo, no existe formulación de
política específica para dicho sector. La generalidad de los programas, no ha
permitido focalizar y tampoco existe una iniciativa federal o un programa especial.
Esto puede responder a la falta de consensos y de arreglos institucionales que
ante la ausencia de mercados de información definidos pueda actuar en pro de un
mejor sistema de apropiabilidad y de fomento de la variedad.

7.2 Estrategias Federales

A partir de la entrada de México al TLCAN se realizaron una serie de


modificaciones institucionales relacionadas con el sector agrícola, sobre todo las
referentes al extensionismo51 y a la nueva forma de gestionar y canalizar los
recursos para los agricultores a través de los diversos programas de SAGARPA.

Es con la Ley de Desarrollo Rural Sustentable (2001), que se plantearon nuevos


esquemas de apoyo a la generación y diversificación del empleo, a la
51
El extensionismo se refiere a todas las actividades de apoyo técnico y tecnológico para el sector agrícola.
En el país paso de ser un mecanismo prestado públicamente a uno privado a través de los denominados
Prestadores de servicios profesionales PSP´s.

147
incorporación y la participación del sector en pequeña escala en el desarrollo
nacional y se asigno prioridad a zonas consideradas débiles. Dicha Ley estableció
que la SAGARPA es la encargada de coordinar los órganos ejecutores cuyos
objetivos son la investigación agrícola, la generación de tecnología, la
experimentación y el extensionismo (OCDE, 2011). Para lograr los anteriores, se
planteo la generación de un Sistema Nacional de Investigación y Transferencia
Tecnológica para el Desarrollo Rural Sustentable (SNITT) como responsable de la
coordinación de las actividades del sector público como del privado en la
investigación agrícola, el desarrollo de tecnología y la transmisión de
conocimientos, los Comités Sistema Producto y el Sistema Nacional de
Capacitación y Asistencia Técnica Integral (SINACATRI) como responsable de la
capacitación y la transferencia de la tecnología (OCDE, 2011).

Otra de las modificaciones propuestas fue en relación a la forma de financiamiento


del sector; se determinó que tanto Fundaciones PRODUCE como CONACYT son
los encargados de distribuir y administrar fondos para la investigación en el sector
agrícola, mientras que INIFAP, IES, CPI´s y organizaciones de agricultores son los
ejecutores y beneficiarios de dichos apoyos, tratando de estructurarlo siempre
alrededor de los Comités Sistema Producto. La investigación que se financia en el
sector agrícola y alimentario es muy diversa y abarca muchas áreas de acción
diferentes, pero sin duda alguna, mucha de ella tiene relación o es Biotecnología
en sí misma.

A pesar de la inexistencia de una estrategia federal articulada para el desarrollo y


la promoción de la Biotecnología, existen una serie de instrumentos que de
manera directa o indirecta incentivan las actividades del sector. A continuación se
muestran los programas que generan algún tipo de estímulo.

7.2.1 Fundaciones Produce

Considerada como la principal innovación institucional (Ekboir et al., 2003; Ekboir


et al., 2009) en el sector agrícola, su objetivo es financiar la investigación, así
como la validación y transferencia de tecnología. Se constituyen a nivel estatal y
se organizan bajo la Coordinadora de las Fundaciones Produce (COFUPRO). La
mitad de su financiamiento corresponde al sector estatal y la mitad restante al
sector federal.

Las distintas fundaciones tratan de identificar de manera oportuna y eficaz las


demandas de los productores, para así poder influir y direccionar la investigación
en el sector. Para dicho objetivo se ha establecido una metodología en donde las
fundaciones lanzan convocatorias a nivel estatal y financian proyectos que den
148
soluciones a las demandas establecidas previamente por distintos comités en
cada sistema producto. De esta manera, las fundaciones definen parte del
programa de investigación definiendo prioridades de INIFAP y demás
participantes, además de que influyen en la asignación de recursos del Fondo
Sectorial CONACYT-SAGARPA del cual se hablará más adelante.

Las fundaciones PRODUCE han sido un mecanismo muy importante para la


organización de las demandas y para el desarrollo de investigación enfocada a la
solución de problemas específicos. Sin embargo existen una serie de debilidades
del diseño institucional que deberán ser atendidas en el futuro si es que se quiere
desarrollar un verdadero sistema de innovación en torno al sector agrícola en el
país.

Uno de los problemas que muestran las fundaciones es el mecanismo de


establecimiento de las demandas, ya que si bien es cierto que éstas se
especifican gracias a los productores, han quedado limitadas al extremo final de la
producción primaria de la cadena (OCDE,2011) y esto ha significado problemas
para identificar las prioridades estratégicas de mediano y largo plazo, dado que en
muchas ocasiones son investigaciones adaptativas y soluciones inmediatas, no
significa que éstas no sean importantes, pero sí restringe los ámbitos de
investigación financiable. El segundo problema tiene que ver con el sistema de
evaluación de los proyectos, ya que no existe ningún mecanismo que dé cuenta
de la eficiencia y el impacto de lo que se ha apoyado, de manera que el proceso
de aprendizaje es trunco debido a la falta de crítica, retroalimentación y mejora. En
términos generales estos problemas obedecen a un diseño institucional deficiente
que es susceptible a ser mejorado, ya que aunque el programa trata de establecer
una estrategia de mediano plazo, esta no logra concretarse y establecer incentivos
para la innovación por las distorsiones que ya se mencionaron.

7.2.2 Sistema de Prestadores de Servicios Profesionales

El servicio de extensión agrícola tiene larga historia en México, en la actualidad los


agricultores cuentan con asistencia técnica cuando acceden a los programas de
apoyo SAGARPA, este servicio funciona a través de contratistas del sector privado
o prestadores de servicios profesionales (PSP). Este tipo de servicios surgió a
partir de la desintegración de la Dirección Nacional de Extensión Agrícola y se
creó con el objetivo de generar un mercado que solucionara de manera más
efectiva las necesidades de los productores, sobre todo las relacionadas con la
planificación estratégica, la formulación de proyectos, el acceso a recursos
públicos, la asesoría técnica, las estrategias comerciales y la capacitación.
149
La organización del sistema depende de diversos niveles, en el nivel federal a
través de la SICATRI se supervisa la organización de los servicios (coordinación y
enlace), además de que establece las normas, la planificación e identificación de
prioridades. El Instituto Nacional para el Desarrollo de Capacidades del Sector
Rural (INCA Rural) es el encargado de diseñar y coordinar la capacitación, la
educación no formal, la evaluación, la acreditación y la certificación de servicios
profesionales para apoyar los programas públicos. Otras organizaciones que
participan en los programas de capacitación y extensión son FIRA, Financiera
Rural, Fundar, entre los principales; además de los gobiernos federales, estatales
y locales.

Los cambios al sistema de extensionismo en México han sido duramente


criticados, sobre todo porque no existe un proceso de integración de esfuerzos,
es un programa desarticulado y que depende de las zonas y la organización de los
productores, pero sobre todo los PSP sólo cumplen la función de intermediarios o
captadores de demanda para los programas de apoyo federal. Éstos en general
sólo tienen el incentivo al principio de poder ganar los proyectos y acceder a los
recursos, pero una vez que esto se logró, no existe ningún incentivo para que
estos mantengan relación con los proyectos, por lo suelen abandonarlos y no
existe evaluación del impacto (OCDE, 2011). De manera similar a lo que ocurre
con las fundaciones, no existe un diseño institucional adecuado que contribuya a
la formación de un marco estructurado, en principio por los incentivos y en
segundo lugar porque si bien ha modificado parte de la conducta de los agentes,
ésta no se alinea con los objetivos para desarrollar la innovación. Pero de nuevo,
es un problema de diseño institucional que no tiene definidos objetivos y metas
claras del sistema.

7.2.3. Fondo Sectorial de Investigación en Materia Agrícola, Pecuaria,


Acuacultura, Agrobiotecnología y Recursos Fitogenéticos (SAGARPA-
CONACYT-COFUPRO)

Los Fondos Sectoriales son un instrumento desarrollado por el gobierno mexicano


con la finalidad de resolver problemas de distintos sectores, además de promover
el desarrollo de los mismos. Los Fondos Sectoriales son fideicomisos que las
dependencias y las entidades de la Administración Pública Federal conjuntamente
con el CONACYT pueden constituir para destinar recursos a la investigación
científica y al desarrollo tecnológico en el ámbito sectorial correspondiente. Sus
objetivos principales son la promoción del desarrollo y la consolidación de las
capacidades científicas y tecnológicas en beneficio de los sectores. Y la

150
canalización de recursos para coadyuvar al desarrollo integral de los sectores
mediante acciones científicas y tecnológicas.

Los fondos sectoriales están dirigidos principalmente a las universidades e


instituciones de educación superior públicas y particulares, centros, laboratorios,
empresas públicas y privadas y demás personas que se encuentren inscritas en el
Registro Nacional de Instituciones y Empresas Científicas y Tecnológicas que
puedan brindar soluciones científicas y/o tecnológicas a las problemáticas de los
sectores .

Algunas de las dependencias y entidades participantes son: la Secretaría de


Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación; la Secretaría de
Economía (SE); la Secretaría de Desarrollo Social (SEDESOL); la Secretaría de
Gobernación (SEGOB); la Secretaría de Energía (SENER); Secretaría de
Educación Pública (SEP); Secretaria de Relaciones Exteriores (SRE) y algunas
otras dependencias como la Comisión Federal de Electricidad .

El fondo sectorial relacionado con las actividades agrícolas, alimentarias y


biotecnológicas es el compuesto por la SAGARPA, CONACYT y la Coordinadora
Nacional de las Fundaciones Produce, A.C (COFUPRO), - este último adherido
con carácter de aportante- denominado: Fondo Sectorial de Investigación en
Materia Agrícola, Pecuaria, Acuacultura, Agrobiotecnología y Recursos
Fitogenéticos.

Este fondo surgió específicamente para apoyar proyectos de investigación


científica y tecnológica que contribuyan a generar el conocimiento necesario para
atender los problemas, necesidades u oportunidades del Sector, consoliden los
grupos de investigación y de tecnología y fortalezcan la competitividad científica y
tecnológica del sector académico y productivo relacionados con el Sector,
busquen elevar el nivel de competitividad de las empresas y/o que promuevan la
creación de nuevos negocios a partir de la aplicación de conocimientos y avances
tecnológicos para lograr un mayor desarrollo armónico y equilibrado52. Hasta la
fecha el fondo ha financiado a 480 proyectos (OCDE, 2011). En la evaluación
realizada por Villavicencio (2011) los resultados muestran que gran parte de los
proyectos apoyados se concentran en laboratorios o centros públicos que han
hecho importantes inversiones en equipos con alto grado de especialización, lo
que los sitúa en un paso previo para generar innovaciones, pero son las bases
para la continua realización de proyectos. Sin embargo, nos dice Villavicencio
(2011) si no se dispone de una fuente de financiamiento complementaria que les

52
CONACYT-SAGARPA y COFUPRO, Convocatoria y Bases 2009-II

151
permita continuar o profundizar los proyectos, la inversión perderá su efecto
multiplicador y el conocimiento obtenido no podrá desarrollar todo su potencial.

También se observa una incapacidad generalizada para traducir los resultados


obtenidos en aplicaciones concretas que puedan ser transferidas a los productores
directos. Las barreras a la transferencia y a la apropiabilidad son: i) la definición
poco clara que se establece en las convocatorias de los mecanismos requeridos
para garantizar la transferencia de resultados; ii) la carencia de una entidad
específica encargada de coadyuvar a la transferencia y aplicación de los
resultados a los usuarios (Villavicencio, 2011).

Como incentivo el programa funciona parcialmente porque logra atraer a un


número importante de participantes y proyectos, pero existe una masa constante
de agentes que participa y conoce el funcionamiento del incentivo y
primordialmente motiva la investigación científica y tecnológica, pero no se ha
logrado fundar como un mecanismo que incentiva la innovación ya que de acuerdo
a las evaluaciones realizadas por Villavicencio (2011) del total de proyectos sólo
56 de ellos pueden ser considerados exitosos debido al proceso de asimilación de
la tecnología por parte de los productores, de manera que esto se traduzca en
innovaciones. Sin embargo, destaca la falta de conectividad y las capacidades de
absorción de los agricultores y agroindustriales en el país.

7.2.4 Fondos Mixtos

Los Fondos Mixtos53 son un instrumento para el desarrollo científico y tecnológico


regional, estatal y municipal, que permiten la confluencia de recursos tanto de los
gobiernos estatales y municipales como del CONACYT con el propósito de:

 Coadyuvar al desarrollo integral de las entidades federativas mediante


acciones científicas y tecnológicas.
 Fomentar el desarrollo y la consolidación de las capacidades científicas y
tecnológicas de los estados.
 Promover la descentralización de las actividades científicas y tecnológicas

Los principales objetivos son:


 Permitir a los gobiernos de los estados y a los municipios destinar recursos
a investigaciones científicas y a desarrollos tecnológicos, orientados a
resolver problemáticas estratégicas, especificadas por el propio estado, con
la coparticipación de recursos federales.

53
www.conacyt.mx

152
 Promover el desarrollo y la consolidación de las capacidades científicas y
tecnológicas de los estados/municipios.
 Canalizar recursos para coadyuvar al desarrollo integral de la entidad
mediante acciones científicas y tecnológicas.

Los Fondos Mixtos dependen en gran medida de las aportaciones estatales y del
establecimiento de las demandas que plantee cada estado, sin duda son uno de
los incentivos más relevantes para el desarrollo tecnológico e innovador estatal.
Sin embargo, tienen una alta dependencia de lo que se plantea como prioridad.
Esto puede ser benéfico o no para la Biotecnología porque al ser un área con
potencial de desarrollo suele ser considerada primordial, pero en ocasiones
depende de la especificidad de la demanda.

En los tres estados analizados en esta investigación encontramos que para el


caso de Sonora ha sido relevante el fondo dado que por mucho tiempo se
mantuvo como el único incentivo económico para el desarrollo tecnológico en el
estado y en la actualidad sigue siendo la mayor bolsa de financiamiento.

El caso más relevante es el impulso que a través del FOMIX Sonora tuvo la
empresa Bioderpac S.A. de C.V. para la puesta en marcha de sus actividades y
para el mantenimiento de las actividades de I+D. Lo cual coadyuvo a mantenerla y
fortalecerla junto con los esfuerzos de inversión que los propios socios hicieron.
Esta empresa es un caso relevante dado que el FOMIX significó un elemento de
soporte en la estrategia de la empresa. Lo cual la ha llevado a ser una de las más
importantes empresas en Biotecnología pecuaria en el estado54.

Pero a pesar de la importancia del FOMIX, este no es un mecanismo suficiente


para cubrir con las necesidades de financiamiento de la investigación científica y
tecnológica de los estados. Es un buen mecanismo de generación de incentivos,
pero insuficiente para los requerimientos de los estados.

7.2.5 Fondo de Innovación Tecnológica Secretaría de Economía - CONACYT

Este fondo es resultado del establecimiento de un fideicomiso entre la


Subsecretaría para la Pequeña y Mediana Empresa de la Secretaría de Economía
y el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (CONACYT) con fundamento en lo
dispuesto en el Plan Nacional de Desarrollo 2007-2012 y la Ley de Ciencia y
Tecnología (LCyT).

54
Dada la importancia y el caso paradigmático de las actividades de Bioderpac S.A. de C.V. en Sonora, más
adelante se retomará para ilustrar parte de la dinámica estatal.

153
Es un estímulo dirigido a las micro, pequeñas, medianas empresas y personas
físicas con actividad empresarial que presenten proyectos de innovación
tecnológica en las siguientes áreas: agroalimentaria, Biotecnología, multimedia y
tecnologías móviles, nanotecnología, tecnologías de la salud, tecnologías limpias y
renovables y sistemas de manufactura avanzada.

El fondo apoya tres tipos de modalidades:

1. Desarrollo de innovación tecnológica. Desarrollo de nuevos productos,


procesos y servicios o mejoras con contenido significativo de innovación.
2. Creación y consolidación de grupos y/o centros de ingeniería, diseño,
investigación y desarrollo tecnológico.
3. Integración de prospectos de negocios de base tecnológica (etapa pre
comercial)

Es importante considerar este fondo, debido a que es el único que en la


convocatoria y en los términos de referencia hace alusión tanto al área
agroalimentario como a la Biotecnología y aún más relevante porque es dedicado
exclusivamente a las propuestas de innovación.

En el siguiente capítulo se analizarán ampliamente los proyectos presentados en


este fondo, de manera que tengamos una caracterización de qué tipo de
propuestas se han apoyado, el impacto en el sector y sobre todo dónde se han
generado capacidades de innovación.

7.3 Estrategias Locales

Este último apartado recupera el trabajo de campo realizado en los estados de


Guanajuato, Sonora y Yucatán; se presentan los datos recabados acerca de las
estrategias que cada uno de ellos ha implementado en dos niveles. El primero son
aquellas que estrategias que implican a la ciencia, la tecnología y la innovación en
general y en segundo lugar aquellas que son especialmente para el fomento o
desarrollo de la Biotecnología.

7.1.1 Guanajuato

El estado de Guanajuato tiene una importante historia en cuanto al desarrollo de


capacidades institucionales de apoyo y fomento a la ciencia y la tecnología.
Cuenta con la Ley Federal de Ciencia y Tecnología, estableció la Ley de Fomento

154
a la Investigación Científica, Tecnológica y a la Innovación para el estado de
Guanajuato y además tiene su propio Plan Estatal de Ciencia y Tecnología 2030.

Si bien aún son pocos los años de desarrollo de la mayoría de las instituciones de
apoyo, sobre todo del Consejo de Ciencia y Tecnología (CONCYTEG) este ha
sido un ejemplo importante para otros consejos en distintos estados de la
República Mexicana.

El Consejo de Ciencia y Tecnología del Estado de Guanajuato surgió a partir de


una iniciativa de la Coordinación de Centros de Investigación del Estado de
Guanajuato (CINIDEG) que en conjunto con los investigadores del estado y su
reiterada preocupación, es que dicha propuesta fue rescatada por el gobierno del
estado en 1995 y es entonces cuando comenzó el diseño de lo que sería el
CONCYTEG. Así en 1996 se creó el Consejo Estatal de Ciencia y Tecnología del
Estado de Guanajuato (CONCYTEG) con la finalidad de coordinar los esfuerzos
en materia de ciencia y tecnología del estado, procurando la participación de los
distintos sectores de la sociedad, aprovechando la existencia de instituciones y
recursos humanos altamente calificados en las tareas de investigación y desarrollo
tecnológico (PECYT GTO 2030). Conformado por el Consejo Directivo del
CONCYTEG (su máximo órgano de gobierno) y cuatro Consejos Regionales que
son órganos consultivos del organismo.

Una de las primeras acciones que se emprendieron fue el lanzamiento de una


serie de convocatorias sectoriales y temáticas, una vez que fueron identificadas
áreas prioritarias de desarrollo científico y tecnológico en el estado. Las
convocatorias sectoriales incluyeron desde el sector más tradicional en el estado
como lo es el Cuero y Calzado, así como el Químico, el Metalmecánico, la
Cerámica Artesanal y los Alimentos. Mientras que las convocatorias temáticas
consideraron a áreas como: Salud, Agua, Calidad del Aire, Residuos Tóxicos y
Ciencias Sociales (PECYT GTO 2030). Aunque explícitamente no se hace
referencia a la Biotecnología, ésta se ve involucrada en diversas áreas como lo
son el sector de cuero y calzado y los alimentos.

La idea principal de dichas convocatorias fue establecer una serie de prioridades


aprovechando las capacidades ya desarrolladas en el estado y aquellas que
potencialmente podrían significar nuevas oportunidades científicas y tecnológicas
para el estado.

Al mismo tiempo comenzó un proceso de gestión entre el CONCYTEG, el


Gobierno del Estado y el CONACYT de manera que se estableció el convenio

155
“Fondo Mixto de Fomento a la Investigación Científica y Tecnológica CONACYT-
Gobierno del Estado de Guanajuato”.

El Gobierno del Estado ha conjuntado una serie de mecanismos propios con los
federales, entre los que se encuentran los estímulos fiscales, Fondos Mixtos y
Fondos Sectoriales, AVANCE, IDEA, Fondo PYME, entre algunos otros. Y al
mismo tiempo han definido una serie de áreas prioritarias: salud, desarrollo
industrial, desarrollo social y educativo, recursos naturales y medio ambiente,
alimentos. Y es precisamente en esta última que la Biotecnología cobra
relevancia ya que se ha promovido la formación de redes en frijol, chile, fresa,
agricultura protegida y tuna-nopal-xoconoxtle. Las redes se formaron bajo la idea
de que se convirtieran en un soporte de los sistemas de innovación locales. De
manera que apoyaran permanentemente el desarrollo y crecimiento de distintos
sectores, los agrupamientos industriales o bien que promovieran las cadenas de
valor a través de la atracción de proyectos de inversión y transferencia de
tecnología. Esto ha implicado que la Biotecnología agrícola sea una de las áreas
de apoyo de mayor interés en el estado.

A continuación enumeramos las redes relacionadas con el sector agroindustrial


impulsadas por el gobierno del estado:

• Centro de Innovación Tecnológica para el Cultivo del Chile del Estado de


Guanajuato A.C. (CITECH)
• Centro de Innovación Tecnológica en Nopal, Tuna y Xoconostle del Estado
de Guanajuato A.C. (CITENTUX)
• HIFRESI Hidroponía Fresas Irapuato A.C
• UIT FRIJOL Unidad de Innovación Tecnológica del Sistema Producto Frijol
Guanajuato A.C.

En el estado de Guanajuato se ha planteado una estrategia de política que abarca


distintos aspectos. Por un lado se promueve la capacidad científica con el
programa de becas y la feria de posgrados; estos junto con las becas que otorga
el CONACYT, los estímulos del SNI y las becas que se otorgan para
investigaciones específicas, se conjunta un acervo muy importante de recursos
humanos científicos de alta calidad. Al mismo tiempo se realizan actividades, foros
y programas de divulgación. Para las capacidades tecnológicas se apoyan
proyectos estratégicos, las redes de innovación, el premio estatal de innovación y
los fondos mencionados anteriormente. De alguna manera se ha tratado de nivelar
los apoyos tanto a la generación de capacidades científicas como los apoyos a las
capacidades tecnológicas, para que a través de un proceso de vinculación efectiva
se realicen innovaciones.
156
Al analizar tanto la Ley de Fomento a la Investigación Científica y Tecnológica del
Estado, así como el Plan Estatal de Ciencia y Tecnología, además de los
mecanismos implementados, notamos que no existe una direccionalidad
específica en el estado por el desarrollo de la Biotecnología. En todo caso lo que
existe es la definición del sector de alimentos como área prioritaria, lo que nos
hace pensar que la Biotecnología se encuentra incluida allí gracias a que en el
estado se localizan tres centros de investigación en alimentos y Biotecnología muy
importantes para el país.

La trayectoria que el estado de Guanajuato ha seguido en torno a la política de


ciencia y tecnología ha seguido es muy importante para el caso de México, ya que
si bien existen aún huecos importantes también ha sido uno de los estados con
mayor interés en el fomento de la ciencia, la tecnología y la innovación. Por eso la
importancia de revisar las estrategias que han seguido y analizar parte de los
resultados. Lo anterior no quiere decir que el esquema institucional funcione a la
perfección, al contrario, existen aún problemas graves, si bien no en el diseño de
ciertos programas, si en el proceso de seguimiento, vigilancia y control de
resultados.

En el trabajo de campo constatamos que la formación de las llamadas “redes de


innovación” descritas previamente tuvieron resultados divergentes, algunas como
la de la fresa lograron establecer mecanismos de transferencia de tecnología entre
algunas IES y empresas, también pudieron mantenerse funcionando aún después
de haber dejado de recibir el apoyo económico que les dio el gobierno estatal para
el primer año. A diferencia de todas las demás redes que no lograron establecer
un mecanismo de funcionamiento y alguna forma de autofinanciamiento, lo que
significó el paro de actividades de muchas de estas redes; no dejaron de existir,
pero sí de funcionar activamente. Esto no sólo tiene que ver con el seguimiento
que el CONCYTEG debió dar o la evaluación de resultados, ya que aunque esto sí
representa un problema, también tiene que ver con la conducta de los agentes y
de acuerdo a nuestro marco teórico diríamos que el incentivo pudo no haber
funcionado adecuadamente porque no estaba bien planteado, tanto así que no fue
capaz de modificar la conducta de los agentes o porque las características de los
agentes o del sistema no permiten que un mecanismo como este tenga los
resultados esperados y esto justamente representa lo que son las reglas
informales y la dificultad para modificar comportamientos enraizados fuertemente
en la sociedad.

Lo anterior expresa que a pesar de los avances en el estado, aún existen áreas
susceptibles de ser mejoradas. Es necesario evaluar las políticas y mecanismos
157
de incentivos porque el hecho de que existan planes y programas que consideren
a la Biotecnología como un área prioritaria, no implica que haya estructuras de
incentivos para desarrollar al sector. Hasta el momento de esta investigación y de
acuerdo con las entrevistas realizadas, el programa de redes a la innovación no
tuvo el impacto ni los resultados esperados. La inversión por parte del estado fue
importante, pero en el mediano plazo se convirtió en un gasto dado que no
tuvieron incidencia en la actividad agroindustrial – alimentaria en el estado, la
dinámica se mantuvo más o menos igual a como funcionaba antes del programa y
esto puede deberse a una razón extra, además de las dos mencionadas
previamente.

Para ejemplificar esto, hablaremos del caso de la red de frijol la cual conto con el
mismo apoyo que la red de fresa pero que sus características y resultados fueron
distintos. En México la producción de frijol ha tenido diversas etapas y formas de
organización a nivel nacional ya que hasta hace aproximadamente 10 años la
producción de las diversas variedades de frijol estaban repartidas en muchas
zonas del país, lo que provocaba una fuerte competencia entre productores. Para
solucionar esto el gobierno federal organizó una división de producción por
variedad, esto quiere decir que a cada estado se le asignó un tipo de frijol para su
producción, dependiendo de sus características naturales y de mercado, de
manera que se pudiera repartir equitativamente el mismo. Esto ha traído ventajas
para algunos y desventajas para otros, ya que existen variedades más
demandadas que otras. El estado de Guanajuato se quedó con unas cuantas
variedades a su cargo, pero el sistema de producción siguió a cargo de pequeños
productores y lo único que pudieron organizar para solucionar el problema de la
distribución fue una comercializadora, la cual es justamente la que estuvo
encargada de la red de innovación de este producto. Pero las condiciones de
producción, divididas en pequeños productores y sobre todo las características del
mercado les impidieron organizarse para formar una verdadera red interesada en
la generación de innovaciones, esto fue así debido a que sus intereses primarios
no eran la búsqueda de paquetes tecnológicos o mejoras a la productividad, sino
la comercialización. Este caso ejemplifica lo que sucede con distintos productos
agrícolas en México, donde debido al tipo de organización productiva y a la
estructura de mercado, las preocupaciones iniciales no corresponden con los
esquemas de incentivos que plantean los gobiernos, ya que antes que pensar en
la innovación, piensan en cómo integrar una estrategia de venta o
comercialización para los productos con los que cuentan y aunque acuden a las
convocatorias, los recursos sólo les sirven para obtener recursos temporales para
algunas actividades, pero en cuanto dejan de recibirlo cumplen con los informes
administrativos y al no contar con una estrategia de corto o mediano plazo para
mantener a la red esta simplemente deja de funcionar.
158
Más allá del esquema de redes en Guanajuato no se ha planteado una estrategia
integral por sectores que busque el fomento o desarrollo de la Biotecnología
Agroindustrial – Alimentaria. Lo que sucede aquí es la falta de coherencia y resalta
el hecho del poco aprovechamiento de la infraestructura gubernamental que han
desarrollado, ya que si bien el estado ha sido pionero en muchos programas,
éstos también tienen una fuerte dependencia de los recursos a nivel federal, no
existe aún un mecanismo interno de generación de recursos que promueva los
objetivos estatales, esto los debilita institucionalmente.

El análisis del programa de redes de innovación también nos ayudo a comprender


parte de la dinámica de colaboración entre las IES del estado y las empresas o
grupos de productores ya que al indagar sobre las causas de la escasa
vinculación de los investigadores con estas redes, constatamos que es incentivo
que les ofrece CONACYT a través de la permanencia en el SNI es muy fuerte para
algunos, por lo que la mayoría están más interesados en mantenerse dentro de
ese sistema que premia principalmente la investigación científica que la aplicada,
por lo que no existía un incentivo lo suficientemente atractivo para que éstos
modificaran su conducta regida por los mecanismos institucionales a nivel federal.
Esto demuestra la falta de coordinación y coherencia entre los diversos marcos
institucionales; nos encontramos justamente con un problema de jerarquía ya que
se contraponen los incentivos que alientan la productividad científica individual,
desde el esquema federal, con aquellos que en algún sentido buscan favorecer la
creación de redes a nivel estatal.

7.1.2 Sonora

En términos generales, Sonora tiene un deficiente desarrollo de políticas públicas


de ciencia, tecnología e innovación. Si bien se encuentran actualmente en un
momento de definición y diseño de un Plan Estatal de CTI, aún no son claros los
alcances que podrá tener.

El estado cuenta con la “Ley de Fomento a la Innovación y al Desarrollo Científico


y Tecnológico” publicado en el 2007, sin embargo esta aún no cuenta con un
reglamento o mecanismo que se traduzcan en acciones, programas o
herramientas a través de las cuales se lleven a cabo los objetivos allí planteados,
por lo tanto aún no se han establecido incentivos para el desarrollo tecnológico e
innovador.

159
La existencia del Consejo Estatal de Ciencia y Tecnología (COECyT) hasta ahora
no ha sido un factor determinante de las acciones desarrolladas en el estado en la
materia. Las actividades del Consejo han sido intermitentes, ya que hasta el 2009
que se articulo el reglamento interno y se estableció una nueva coordinación, es
que ha comenzado una organización y el planteamiento de objetivos y metas.

En términos generales se plantea que el Consejo Estatal de Ciencia y Tecnología


es un organismo descentralizado de la Pública Estatal, sectorizado a la Secretaría
de Economía, con personalidad jurídica y patrimonio propio, y tiene por objeto la
promoción y apoyo a la investigación científica, el desarrollo tecnológico, la
transferencia de tecnología y la innovación en el Estado55.

El COECyT se integra por la junta directiva, la dirección general, los órganos de


apoyo (consejos regionales y comité técnico) y las unidades administrativas
(dirección de investigación y desarrollo humano, dirección de articulación
productiva para el desarrollo e innovación tecnológica y la dirección de planeación
estratégica y administrativa). Todos los anteriores forman la estructura principal
del Consejo, sin embargo este apenas se encuentra en construcción e integración
de personal idóneo para desempeñar las funciones asignadas respectivamente.

En el trabajo de campo pudimos constatar que el COECyT se encuentra en


proceso de formación y en algunas actividades están tratando de consolidarse. Sin
embargo, existen diversos problemas a los que se enfrentan. El primero de ellos
tiene que ver con la definición de sus actividades, si bien esto siempre es un
problema al instituir una organización, ésta ha enfrentado problemas adicionales
ya que muchas de las actividades que generalmente realizan los consejos
estatales de CTI habían estado en manos de diversas áreas de la Secretaría de
Economía estatal y ha sido difícil establecer los límites entre lo que le corresponde
al COECyT y lo que pueden seguir haciendo áreas como la Dirección de Sectores
Tecnológicos o la Dirección de Vinculación. Esto a pesar de que han trabajado en
la integración y coordinación de las diversas actividades. Otro de los problemas
tiene que ver con la falta de presupuesto para poner en marcha nuevos proyectos
o programas, ya que no existe una partida específica para el funcionamiento del
Consejo, por lo que se ha convertido en un organismo gestor y en algún sentido
en un puente que difunde información sobre como acceder a diversos apoyos
federales e internacionales. Retomando el capítulo 1, podemos ver que existen
debilidades en el diseño institucional en el estado ya que a pesar de que han
buscado establecer coherencia entre las actividades que cada área desempeña,
existen problemas aún de coordinación y complementariedad.

55
Tomado del Reglamento Interior del Consejo Estatal de Ciencia y Tecnología. Sonora, 2009

160
En las entrevistas que se realizaron se pudo constatar que hay agentes que
reconocen que el COECyT es en sí mismo un avance para la organización de las
actividades de CTI en el estado, sin embargo destaca el hecho de la falta de
consolidación y autoridad en la toma de decisiones. En la práctica la toma de
decisiones aún es fragmentada y la jerarquía institucional sigue pesando mucho
en el proceso, esto significa que no hay autonomía por parte del COECyT para
proponer y ejecutar planes y programas para la promoción de la CTI. Esto tiene
que ver con la jerarquía institucional que predomina en el estado, donde hay una
gran dependencia de las decisiones del gobernador o del secretario de economía
y también con la falta de recursos. Todo en conjunto se traduce en un deficiente
marco institucional y al mismo tiempo y como consecuencia de esto no hay
incentivos para el desarrollo innovador.

Además de lo antes mencionado, el gobierno estatal apenas está conformando la


comisión legislativa de ciencia y tecnología 56, lo que complica aún más la
definición de incentivos para los diferentes actores. En el Plan de Desarrollo 2009-
2015 se establecen como prioritarios para el desarrollo del científico y tecnológico
del estado a los sectores: aeroespacial, agroindustrial, automotriz, Biotecnología,
energía, nanotecnología y tecnologías de la información. Esto contrasta con las
entrevistas realizadas en el estado, ya que si bien en los documentos oficiales los
sectores anteriores son los prioritarios, en la práctica existe una división de dos
grandes grupos de sectores, aquellos que son considerados como
“tecnológicamente prioritarios” entre los que se ubican el aeroespacial, las
tecnologías de la información y las energías renovables y los “tradicionales” que
son el minero, la agroindustria y el automotriz los cuales por su naturaleza y por la
larga tradición en el estado ya no necesitan la generación de incentivos para su
desarrollo, sino sólo para su consolidación y mantenimiento, según la visión de la
Secretaría de Economía (SES) del estado.

Lo anterior es una muestra de cómo existen dos dinámicas, una es la que se


establece en la normatividad y los objetivos que allí se plantean y otra es la real
que siguen las oficinas estatales incluyendo el COECyT y la SES.

Para el caso de la Biotecnología Agroindustrial - alimentaria no existe un programa


sectorial que establezca incentivos para su desarrollo o consolidación. Las

56
Cuando se realizó el trabajo de campo no existía una comisión legislativa de CTI en el estado, pero se
avecinaban elecciones estatales en las que habría cambio de gobierno y por lo tanto un reacomodo general de
las oficinas y nueva organización de las actividades. En la actualidad se ha conformado ya la comisión
legislativa, pero al ser de reciente creación no se pudieron hacer entrevistas para conocer sus planes, metas y
actividades. Por lo que ésta información tiene un desfase.

161
organizaciones estatales consideran que el sector agrícola y alimentaria es de
larga tradición en el estado y que de alguna manera tiene bases más sólidas que
los sectores emergentes en los que se han focalizado como la aeronáutica o las
energías renovables, pero no se dan cuenta de que un sector tradicional como el
agrícola y alimentario necesita de la configuración de un nuevo esquema de
incentivos que los lleve a moverse de las formas tradicionales al uso,
aprovechamiento y desarrollo de la Biotecnología. No ha sido identificado que si el
sector ya es importante en el estado, este podría serlo más gracias a un proceso
de reconversión tecnológica o bien al nuevo uso y aprovechamiento de las
tecnologías emergentes aplicadas en esas áreas específicas, pensando en la
generación de mayor valor agregado.

Lamentablemente al estar en formación o construcción la mayoría de aspectos


relacionados con la CTI, el análisis de este aspecto es relativamente sintético. Sin
embargo esto es también manifiesto de cómo es que las capacidades científicas y
tecnológicas en el estado se han desarrollado. No han existido incentivos
estructurados, ni direccionalidad, ni herramientas de ningún tipo que traten de
modificar las acciones de los agentes, esto como ya se menciono debido al
deficiente diseño institucional y a la poca coordinación.

Las deficiencias pueden verse como una oportunidad o como un problema, si


optamos por la primera opción podemos decir que el estado tiene una serie de
huecos institucionales relevantes que puede llenar y convertirse en elementos
detonadores del cambio. La falta de un Plan de CTI para el estado es una
oportunidad para formar un esquema de incentivos que no sólo se concentre en
los sectores emergentes considerados por el Plan Estatal de Desarrollo, sino que
también tome en cuenta a los sectores tradicionales y la posibilidad de
reconversión tecnológica. Esto sólo por citar una de las posibles opciones que
tienen en la construcción de un marco institucional que aproveche los vacíos
actuales.

7.1.3 Yucatán

En el estado existe la “Ley de Fomento a la Ciencia y Tecnología del Estado de


Yucatán” publicada en el año 2004 además de que cuentan con el Consejo de
Ciencia y Tecnología del Estado de Yucatán (CONCyTEY) como organismo
público descentralizado del Gobierno del Estado, con personalidad jurídica y
patrimonio propio y finalmente con la Comisión Legislativa de Ciencia y Tecnología
(CONACYT, 2008).

162
El CONCyTEY es el encargado de dictar las políticas gubernamentales en cuanto
a los apoyos, el desarrollo y la difusión de la CyT, así como de coordinar las
acciones y programas relacionados con el tema, de manera que pueda haber
generación, intercambio, adaptación, divulgación, transferencia y aplicación de los
conocimientos científicos y tecnológicos. Además de encargarse del fomento y
apoyo a la formación de recursos humanos. De manera que como objetivo se han
planteado lograr una efectiva vinculación entre la investigación y el desarrollo
tecnológico de los centros de investigación, con el sector productivo con la
finalidad de solucionar a los problemas y necesidades del Estado.

Lo anterior ha significado un proceso de identificación, sistematización y difusión


de la información científica y tecnológica de la entidad. Esto se ha llevado a cabo
sobre todo a través del departamento de Vinculación.

En el trabajo de campo y a través de las entrevistas realizadas constatamos una


serie de problemáticas en torno a la organización del Consejo. La primera de ellas
es que el Consejo aún no cuenta con la experiencia necesaria para desarrollar y
proponer esquemas novedosos de apoyo a la ciencia, la tecnología y la
innovación, a pesar de haberse fundado en el 2003 la mayoría de los jefes de
departamento se hallan en un proceso de aprendizaje importante, pero que aún no
rinde frutos. Esto probablemente responda a la falta de una estrategia clara dentro
del mismo Consejo ya que no existe un Plan Estatal de CTI en el que se
establezcan metas, objetivos, mecanismo e instrumentos. Hasta ahora lo que se
ha hecho es apoyar la formación de recursos humanos mediante becas, formular
algunas ferias informativas sobre CyT, reuniones con empresarios de la localidad
para conocer inquietudes y algunas pláticas con representantes universitarios,
pero no se ha formulado una agenda que plantee prioridades.

Hasta el momento en el que se realizaron las entrevistas para esta investigación,


se había elaborado un documento diagnóstico donde se recogían las
particularidades de la ciencia y la tecnología en el Estado, así como algunos
indicadores que daban cuenta de las características de la investigación y los
recursos humanos, además de la participación en los fondos de CONACYT, pero
aún no se había logrado formular un esquema institucional que promoviera el
desarrollo innovador y mucho menos que focalizara en el sector Agroindustrial-
Alimentario.

En comparación con Guanajuato y Sonora, en el estado de Yucatán existes


debilidades institucionales más profundas que obedecen a la falta de diseño y
mecanismos que establezcan objetivos y metas en CTI. En algún sentido el
163
proceso parecido a lo que sucede en Sonora, donde apenas se comienzan a
formular algunas líneas de acción en torno a la política científica, tecnológica y de
innovación. Pero en Yucatán hasta ahora no se han definido prioridades, ni líneas
estratégicas y mucho menos instrumentos focalizados en el tema de nuestro
interés. Esto es lamentable ya que como veremos en el siguiente capítulo, existe
un importante cúmulo de investigación biotecnológica en el área agrícola, pecuaria
y de alimentos que debiese ser potencializada para formar un círculo virtuoso de
expansión e innovación.

Conclusiones

El sector agroindustrial en México tiene una participación relativamente baja con


respecto a la economía total como porcentaje del PIB, aproximadamente de 8%
del mismo. Sin embargo, este dato por si mismo minimiza la importancia del
sector, ya que genera alrededor del 13% de empleo y aproximadamente el 24% de
la población vive en zonas rurales (OCDE, 2011). Además, el sector tiene
importantes eslabonamientos ascendentes y descendentes con otros sectores, y
ha mostrado una importante modernización en los últimos años.

La política agrícola en el país ha estado determinada por la Ley de Desarrollo


Rural Sustentable y la SAGARPA ha sido la principal ejecutora de la investigación
agrícola, la generación de tecnología, la realización de pruebas y el
extensionismo; pero a pesar del fomento de un sistema de innovación agrícola a
través de las fundaciones PRODUCE, la cual es una innovación institucional
relevante (Ekboir, et al. 2009) y el sistema de prestadores de servicios
profesionales, no se ha logrado consolidar una dinámica real y fructífera para el
sector. Si bien las fundaciones PRODUCE han tenido logros mediante los
sistemas producto, aún no hay un proceso de cooperación amplio en la mayoría
de los productos agrícolas. Además de que el sistema de PSP se ha establecido
como un mecanismo “captador de demanda” ya que no existen los incentivos
adecuados para que éstos den continuidad a los proyectos con los que se
relacionan y sobre todo evaluar el impacto de los mismos.

Otro de los grandes problemas de diseño institucional es el relacionado con los


instrumentos de la política pública, por ejemplo, al generar un mercado de PSP
privados donde éstos no se encuentran certificados y no hay mecanismos que
regulen su calidad, se traduce en PSP con bajo nivel técnico y tecnológico que
representan una barrera para la innovación ya que no ofrecen mejoras
tecnológicas relevantes. A esto se agrega el hecho de que los institutos de
investigación, las universidades o los centros no cuentan con mecanismos
164
factibles de transferencia de tecnología, de manera que los agentes capacitados
científica y tecnológicamente se encuentran desligados de los productores. El
arreglo institucional entre las organizaciones de productores y los generadores de
avances científicos y tecnológicos no ha sido el adecuado, no hay mecanismo de
interlocución ni conectividad.

Además es necesario generar mecanismo de supervisión, no sólo del cumplimento


de la reglamentación, sino de todo el sistema. Hace falta el análisis de impactos y
la evaluación de los fondos asignados. Este también es un problema que
evidencia la debilidad del diseño institucional ya que no hay asignación de
responsabilidades y tampoco valoración de los resultados. Esto a su vez complica
los procesos de rediseño y deja al descubierto otro problema que tiene que ver
con el ejercicio del poder y con las jerarquías de gobernanza ya que éstas pueden
ser usadas a favor de ciertos grupos o en detrimento de otros, lo cual más allá de
generar nuevas y mejoras estructuras institucionales, las convierte en barreras
burocráticas.

A pesar de la definición de la Biotecnología como área estratégica de desarrollo


tecnológico, no existen los mecanismos ni las herramientas a través de las cuales
se fomente y regule. No son claras y en ocasiones son contradictorias. Por
ejemplo, México al ser firmante del Protocolo de Cartagena acepta cumplir los
términos referidos, uno de ellos es brindar información acerca del uso de
transgénicos y el tipo de alimentos que los contiene, con la finalidad de dar
seguridad cuando se comercia entre países. Al mismo tiempo México pertenece al
TLCAN, donde uno de sus miembros, Estados Unidos no es firmante del Protocolo
antes citado, por lo tanto hay una controversia entre si debe o no informar a
México sobre el uso de transgénicos en los productos que comercia con México.
En los hechos no lo hace, de manera que existe un problema de cumplimiento y
coherencia entre las reglas que el país usa, esto demuestra un problema de
coherencia entre el marco institucional interno y la coordinación con los esquemas
normativos externos internacionales y los particulares a cada país.

Las políticas de ciencia y tecnología a nivel federal han puesto especial interés en
la formación de recursos humanos especializados, a través de distintos proyectos
como el otorgamiento de becas o el sistema nacional de investigadores. Con los
anteriores se ha tratado de estimular a este grupo de agentes; lo que ha
significado un crecimiento de la masa crítica tanto a nivel federal como estatal, sin
embargo, no existen los incentivos adecuados para que los recursos humanos
científicos sean capaces de movilizarse hacia el desarrollo tecnológico y aplicado.
Al describir la no existencia de incentivos, se está haciendo referencia a la falta de
demanda, ya que si bien la política en este tema ha tratado de incrementar el
165
número de recursos humanos especializados, muchos de ellos no son captados
por las empresas o los centros del país, aquí también existe un problema en
cuanto a la captación de éstos recursos. Este problema será analizado en el
siguiente capítulo.

Uno de los más graves problemas que se ha identificado es la falta de una


estrategia de transferencia tecnológica, por ejemplo, el INIFAP que tiene presencia
en los 32 estados del país, no ha logrado generar mecanismo ni vínculos con el
sistema y mucho menos las universidades o los centros, pocos son los que tienen
estrategias de difusión y búsqueda de colaboración. Pero no se reduce a un
problema de las IES, tampoco existe una estrategia federal o estatal que
promueva la transferencia tecnológica o un programa de promoción a la
colaboración o el establecimiento de organismos puente que ayuden a la
traducción de demanda y oferta en sectores como el biotecnológico agroindustrial-
alimentario.

Hasta ahora se ha señalado la evolución del proceso federal, pero esta


investigación también analiza el nivel estatal. Cabe mencionar que aquí se han
encontrado especificidades que se irán mencionando a lo largo de los siguientes
dos capítulos, pero destacamos que en lo referente a las políticas públicas,
apreciamos que a diferencia de lo que ha sucedido en Sonora y Yucatán, el
gobierno de Guanajuato ha mostrado mayor interés en el fomento y el desarrollo
de la ciencia, la tecnología y la innovación. Esto se ha traducido en una serie de
programas implementados y sobre todo en el otorgamiento de fondos para el
desarrollo de áreas estratégicas.

Una de las prioridades del estado de Guanajuato ha sido el sector “alimentario” y


para fomentar su renovación y modernización se propuso que, dentro de las
llamadas redes de innovación tecnológica, se generará un espacio a las redes de
alimentos57. En este caso se comprueba una vez más, que existen incentivos que
distorsionan el proceso de innovación, ya que si bien tanto el CONACYT como el
CONCYTEG se han preocupado por el fomento, la formación y la consolidación de
recursos humanos en ciencia y tecnología, ha existido un desfase entre aquellos
investigadores que se dedican sólo a la investigación básica y los que realizan
investigación aplicada e innovación. Los incentivos que se han establecido, no han
logrado vincular efectivamente las necesidades del sector empresarial con las
capacidades desarrolladas en el sector científico. Lo anterior, no significa que no
existan necesidades de las empresas, tampoco quiere decir que no hayan

57
Los resultados y el funcionamiento de la política como incentivo o no aún no se han analizado, pero son
tema del siguiente capítulo

166
capacidades para solucionar problemas por parte de los investigadores, lo que ha
sucedido es que no hay conectividad entre ellos ya que el proceso de transmisión
de dudas y problemas no ha sido solucionado, la comunicación no se ha
establecido. Esto responde en primera instancia a la contraposición entre los
marcos institucionales, a la controversia entre la jerarquía que cada institución
tiene y al tipo de incentivo que cada esquema maneja. Pero también a la falta de
traducción de necesidades y a una política pública estratégica y coherente que
integre una sola estrategia.

Aunque el gobierno estatal mediante el CONCYTEG se ha preocupado por


establecer un esquema de vinculación, este no ha rendido los frutos esperados en
lo que respecta a este sector. Parte de los incentivos creados sólo han tenido
influencia en un grupo reducido de agentes, pero no se ha logrado una integración
real y constante que genere un ciclo dinámico de intercambio de conocimiento y
solución de problemas conjuntamente con impacto en la generación de
capacidades de innovación.

En el caso de Yucatán, el Consejo de Ciencia y Tecnología aún se encuentra en


proceso de consolidación, lo que ha implicado que se concentren en actividades
administrativas y burocráticas. La falta de recursos y la poca disponibilidad de
personal, los ha obligado a focalizar en aspectos inmediatos más que en los de
mediano o largo plazo. La falta de un Plan Científico y Tecnológico para el estado
los limita en la construcción de políticas públicas, ya que aún se encuentran en el
proceso de definición de prioridades y objetivos. La ausencia de un agente que
coordine las actividades científicas, tecnológicas y de innovación ha tenido un
impacto negativo en el desarrollo del potencial que consideramos existe. Sin duda,
existen más factores que influyen en las decisiones de política de ciencia,
tecnología e innovación por ejemplo la trayectoria histórica y económica del estado
mismo, ya que por muchos años las metas de crecimiento se han planteado
alrededor del sector turístico. Como estado, han concentrado sus esfuerzos en
actividades desligadas a la producción, uso y aprovechamiento de los avances
científicos y tecnológicos de su propia región. Esto representa un reto, significa
reorientar la visión económica de las políticas públicas, de manera que se
reconsidere a su sector agroindustrial-alimentario como un posible motor de
crecimiento y por lo tanto se generen los mecanismos que incentiven el desarrollo
del mismo.

El estado de Sonora muestra una serie de similitudes con Yucatán. Por un lado,
cuentan con un Consejo estatal en ciernes y con debilidades institucionales
importantes, como resultado de haber sido, hasta hace algunos años, un
organismo dependiente de la Secretaría de Economía del estado, lo que los llevo
167
a la postergación de una serie de reformas necesarias para su funcionamiento en
la actualidad. Uno de los más graves problemas que enfrentan es la falta de un
presupuesto propio el cual puedan ejercer mediante el establecimiento de
objetivos y metas. El Consejo no cuenta con un Programa de ciencia, tecnología e
innovación, lo que tienen es una definición de áreas prioritarias entre la que
destaca la Biotecnología, sin hasta ahora haber definido líneas, estrategias,
mecanismos o algún tipo de incentivo. Lo anterior aunado al hecho de la falta de
información oportuna acerca de sus propias capacidades científicas y
tecnológicas, demuestra el bajo nivel de cohesión y desarrollo del sistema, a pesar
de que acuerdo a esta investigación cuentan con importantes capacidades
científicas y tecnológicas con potencialidades muy importantes en el sector.

Existen contradicciones relevantes en la formulación de la política, plantear áreas


prioritarias debería implicar la puesta en marcha de mecanismos e incentivos para
su desarrollo, no solamente establecerlo en el papel. En apariencia, la política
científica y tecnológica es vertical ya que plantea la importancia sectorial, pero en
los hechos se mantiene su carácter horizontal al no estructurar incentivos
diferenciados para las áreas que se busca fomentar; además de que los
instrumentos y herramientas generados tienen una desviación hacia la generación
de oferta más que nivelar y promover la demanda y sobre todo la
complementariedad y retroalimentación. Existen inconsistencias que contradicen
lo que se promulga con lo que se instrumenta, lo que conlleva a un deficiente
diseño institucional.

Si el escenario planteado en la introducción de esta investigación es cierto y la


Biotecnología es parte de la siguiente revolución tecnológica y determina el nuevo
paradigma científico y tecnológico, México debería estar construyendo desde hace
ya varios años una estrategia integral de fomento, apoyo y consolidación a la
Biotecnología por lo menos en alguna de sus áreas de desarrollo. Pero a pesar del
reconocimiento de las potencialidades que tiene y de la oportunidad que podría
representar, no se ha hecho un verdadero esfuerzo por diseñar una política
científica y tecnológica propositiva, con incentivos que consideren a todos los
actores y realmente se logre un impulso para el corto, mediano y sobre todo largo
plazo.

Hasta esta parte de la investigación, hemos podido identificar a la mayoría de los


actores de un sistema de innovación, sin embargo, lo que no existe es interacción
institucional, no hay mecanismos de colaboración ni de conectividad; por lo que es
necesario pensar en la dinámica del sistema. Preguntarse qué tipo de
capacidades institucionales requiere el sistema para mejorar y cambiar el camino
que ha transitado.
168
A nivel teórico se espera que exista correspondencia entre las políticas federales y
las estatales, esto dependerá de la dinámica micro y meso de los propios estados,
además de los arreglos institucionales que se logren entre ambos niveles. Lo que
se constata en esta investigación es que hay un desfase entre uno y otro, como lo
muestra el caso de Guanajuato con las redes, pero en general es el caso de la
conducta que se promueve a través del SNI en todo el país, ya que la
investigación sigue concentrándose en la ciencia básica, más que en la aplicada.

La mayoría de las políticas estatales se han formulado sin considerar las metas
federales, en todo caso existe cierta correspondencia con la normatividad, pero no
hay ningún arreglo institucional coordinado que permita integrar objetivos, planes y
programas. En los tres casos estudiados, sólo el estado de Guanajuato ha logrado
generar ciertos lazos, pero sin que sean determinantes para el establecimiento de
una agenda científica, tecnológica y de innovación. La falta de coherencia entre
los marcos institucionales, pero sobre todo la inexistencia de una política pública
estratégica que ordene los objetivos, metas y establezca las prioridades de CTI
hace que la jerarquía de gobernanza sea difusa y que en el caso de los programas
federales estos sean débiles institucionalmente y que en ocasiones se
contrapongan con los incentivos a nivel estatal.

Ante la pregunta de si las políticas públicas han sido generadoras de incentivos,


consideramos que lo han sido sólo “parcialmente”. A nivel federal, los mecanismos
de apoyo y financiamiento como el Fondo de Innovación de la SE o el Fondo
SAGARPA-COFUPRO han servido para incentivar la actividad innovadora de un
grupo de empresas y un grupo de investigadores; dichos instrumentos han sido
favorables para el desarrollo de procesos y productos biotecnológicos con
impactos diversos en el sector, que sin su existencia muchos de ellos no se
hubiesen desarrollado o lo hubieran hecho pero en un tiempo mayor y con
grandes dificultades. Por lo tanto, su ejecución como mecanismos de fomento y
desarrollo ha sido sumamente importante. Sin embargo, esto no ha encontrado
correspondencia con un sistema de innovación; en algunos casos los fondos son
sólo el primer paso de un camino que aún no es claro cómo transitar para muchos
agentes. El problema de la conectividad vuelve a aparecer dado que no existen los
mecanismos de uso, comercialización y distribución de las innovaciones. En los
programas analizados existen fuertes problemas de transferencia tecnológica, no
hay mecanismos que ayuden a la puesta en práctica de esas investigaciones o a
la asimilación de los productores. Las deficiencias de los programas se conjuntan
con la baja capacidad de absorber los desarrollos allí generados.

169
Así pues, los incentivos funcionan en un nivel, para organizaciones o empresas
que ya cuentan con cierto nivel de capacidades científicas y tecnológicas
(capacidades de absorción) y sobre todo que cuentan con la información de cómo
funciona el sistema de apoyos. Pero no funciona para los pequeños productores ni
para organizaciones medianas, donde sus requerimientos de innovación son
diferentes a las de los primeros. Además de esto, la desconexión de las
estrategias federales con las estatales es muy clara en el hecho de que sólo a
través del instrumento FOMIX se pueden plantear métodos de colaboración y
proyección de objetivos que respondan a ambos niveles, esto habla de la
imperiosa necesidad de establecer nuevos arreglos institucionales que fortalezcan
la coordinación y por lo tanto la definición de objetivos y metas conjuntos basado
en las prioridades nacionales, pero considerando las características estatales y
sus propias trayectorias.

La definición de una política pública integral y coherente en el sector


biotecnológico agroindustrial- alimentario implica conocer las características y
condiciones de las empresas y grupos de productores en el país. Se requiere
conocer profundamente las particularidades y problemáticas de toda la cadena de
producción, las necesidades y deficiencias. Es necesario tal y como se planteo en
el capítulo 1, apostar a la innovación que soluciones problemas, innovación que
identifique a los usuarios inmediatos, innovación contextual, timando en cuenta
que el proceso implicará costos de asimilación, de capacitación, de absorción, de
implantación, entre otros. Pero que en el largo plazo pueden convertirse en
oportunidades de crecimiento y desarrollo innovador, sobre todo en áreas como la
que se trata aquí donde existen capacidades instaladas susceptibles a ser
retomadas o reconvertidas.

170
Capítulo 8
Capacidades Científicas y Tecnológicas

Introducción

Este capítulo retoma la caracterización hecha previamente en el capítulo 3 acerca


de las capacidades científicas, tecnológicas, de absorción y de innovación para
mostrar y analizar el tipo de capacidades existentes en los estados estudiados, de
manera que podamos definir el estado actual de cada uno de los tópicos
mencionados.

Es necesario señalar que además de analizarse el desarrollo de capacidades, se


analiza el impacto de los incentivos previamente descritos para poder determinar
si es que se han constituido como verdaderos incentivos o barreras a la
innovación. De manera que se trata de conjuntar en este último capítulo la
evaluación de las leyes, los reglamentos y las políticas públicas como generadoras
de incentivos para las capacidades de innovación.

No se analizan las capacidades en el vacío, ni por sí mismas se juzga su


existencia, sino que se trata constantemente de hacer referencia a como estas
han sido el resultado de las modificaciones institucionales previamente descritas
en los capítulos 6 y 7.

Al no ser una tesis de carácter comparativo, sino con la intención de caracterizar la


dinámica de generación de capacidades científicas, tecnológicas y de innovación
con respecto a la Biotecnología Agroindustrial -alimentaria, se presentan los datos
recopilados mediante entrevistas y otros elementos como los fondos CONACYT
para dar cuenta de lo que hasta ahora se considera como dinámicas diferenciadas
debido al impacto de los incentivos. Esta caracterización ofrecerá una visión
ampliada de lo que sucede en el país, sin que esto quiera decir que ocurre en
todas las zonas y en todas las áreas biotecnológicas, se puede considerar que sí
brinda una fotografía cercana a lo que está sucediendo en el sector.

El capítulo presenta en el primer apartado la evidencia sobre el tema de


capacidades científicas en los tres estados; a continuación se muestran los datos
obtenidos sobre el tema de capacidades tecnológicas.

8.1 Capacidades Científicas

8.1.1 Guanajuato
171
8.1.1.1 Centros de Investigación

Los datos de CONACYT reportados para el 2006 registran un total de 1588


investigadores SNI en el área de Biotecnología y Ciencias Agropecuarias, lo que
significa que Guanajuato apenas cuenta con el 4.15% del total de investigadores,
sin embargo cuenta con el centro más importante en investigación agro
biotecnológica del país (CINVESTAV-I).

Las instituciones que realizan investigación científica y tecnológica en el estado,


se caracterizan por ser de gran importancia a nivel nacional y ampliamente
reconocidas por su desempeño y aportaciones en el área agro biotecnológica.

En el municipio de Irapuato se localiza el Centro de Investigación y de Estudios


Avanzados del Instituto Politécnico Nacional (CINVESTAV-I) el cual es
considerado como el centro más importante en investigación agro biotecnológica
del país. Además de localizarse una unidad de investigación del Instituto Nacional
de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (INIFAP), la Universidad de
Guanajuato, el Instituto Tecnológico de Celaya y algunos centros de investigación
como el CIATEC y al CIATEQ.

El INIFAP es una institución que de acuerdo con sus estatutos y objetivos busca
contribuir al desarrollo productivo, competitivo, equitativo y sustentable de las
cadenas agropecuarias y forestales, mediante la generación y adaptación de
conocimientos científicos e innovaciones tecnológicas y la formación de recursos
humanos para atender las demandas y necesidades en beneficios del sector y la
sociedad en un marco de cooperación institucional con organizaciones públicas y
privadas58. En el estado de Guanajuato se localiza un campo experimental que
desarrolla investigación en los siguientes productos: Hortalizas, cebada, frijol, maíz
grano, brócoli, avena, sorgo, ajo, chile, tomate, jícama, cebolla, bovinos doble
propósito, forrajes y especias no maderables.

El Centro de Investigación y de Estudios Avanzados del Instituto Politécnico


Nacional (CINVESTAV) es un organismo público descentralizado que cuenta con
personalidad jurídica y patrimonio propio. Fue creado en 1961 y se compone por
28 departamentos de investigación que se distribuyen en 9 planteles en todo el
país. Se desarrollan 583 investigaciones divididas en 4 grandes áreas: ciencias
exactas, biología y medicina, ingeniería y ciencias sociales. La unidad Irapuato
surgió gracias a la iniciativa de desarrollar investigación en aspectos
agroalimentarios, así comenzó con un grupo de investigación en plantas y más

58
http://www.inifap.gob.mx/quienes_somos/quienes_somos.htm

172
tarde se formarían dos departamentos de investigación: el de “Ingeniería Genética
de Plantas” y el de “Biotecnología y Bioquímica”59.

El Departamento de Ingeniería Genética comprende 17 investigadores quienes


trabajan en proyectos de investigación básica y aplicada, muchos de ellos
enfocados a resolver problemas específicos del sector agrícola de México60; la
investigación que se desarrolla cuenta con fondos que provienen de la industria,
agencias estatales, federales e internacionales y las principales líneas de
investigación son:

 Interacción planta-microbio y planta insecto


 Genética, genómica y evolución
 Fisiología, Biología y Metabolismo
 Biotecnología

El departamento de Biotecnología y Bioquímica desarrolla investigación en


grandes áreas de la Biología Moderna: desde la Bioquímica y la Biología
Molecular hasta la explotación de sistemas biológicos de interés agrícola e
industrial61. Pueden considerarse cuatro grandes líneas de investigación, pero
cabe desatacar que cada investigador desarrolla una línea específica propia, pero
se mantiene comunicación con las cuatro grandes62.

 Bioquímica de Proteínas Vegetales.


 Alimentos
 Microbiología
 Fitopatología

También existen áreas específicas que brindan servicios como63:


 Microbiología Ambiental
 Servicio de Identificación Molecular de Microorganismos Entomopatógenos
 Cultivo de Tejidos
 Micotoxinas
 Virus
 Fitobioquímica

59
www.ira.cinvestav.mx consultado el día 30 de enero de 2010
60
Ibidem
61
Ibidem
62
Toda la información aquí presentada se basa en lo publicado en la página oficial del CINVESTAV
www.ira.cinvestav.mx
63
Toda la información aquí presentada se basa en lo publicado en la página oficial del CINVESTAV
www.ira.cinvestav.mx

173
En el estado de Guanajuato también se localiza el Laboratorio para la
Biodiversidad y Genética (LANGEBIO) que depende directamente del
CINVESTAV –I. El director es el Dr. Luis Herrera Estrella y cuenta con el área de
Genómica.

El CINVESTAV Irapuato es uno de los centros más importantes en la realización


de investigación en Biotecnología en el área agrícola y alimentaria. El
establecimiento de dicha unidad en el estado de Guanajuato se consideró como
una acción estratégica dado el uso que puede significar para la zona, ya que como
se ha mencionado anteriormente, la zona del Bajío es muy importante en cuanto a
la siembra y cosecha de ciertos alimentos, granos y semillas; de manera que
ubicar a dicho centro en esta zona busca establecer relación directa con los
problemas que aquejan a los pequeños productores, así como a las empresas que
se desenvuelven en dicho sector. Aunque esto no implica que se establezcan
relaciones con otras organizaciones, dentro de México y/o extranjeras.

La unidad Irapuato no cuenta con un departamento propio de vinculación, estas


actividades las concentra la unidad central en el Distrito Federal en Zacatenco. Allí
se localiza la oficina que brinda servicios de distinto tipo como: asesoría,
mercadeo, transferencia de tecnología, entre otras actividades. Cada una de las
unidades que componen al CINVESTAV (Guadalajara, Irapuato, Mérida,
Monterrey, Querétaro, Saltillo, Tamaulipas y Zacatenco) reportan anualmente las
actividades consideradas como proyectos de vinculación, que propiamente dicho
implican algún tipo de servicio o colaboración entre el sector industrial y las
unidades. También existe información de las distintas fuentes de financiamiento de
los proyectos que realizan las unidades.

De acuerdo a la información obtenida a través de los anuarios, los proyectos


registrados, desde 1998 hasta el 2005 presentan la siguiente distribución:

8.1 Relación de los proyectos de CINVESTAV-I (1998-2005)


Tipo de Proyecto Número
Servicio de Laboratorio 8
Desarrollo Tecnológico 6
Asesoría 3
Investigación 1
Entrenamiento Técnico 2
Servicio educativo 1
Asesoría Teórica 1
Otros 14

174
Fuente: Elaboración propia con datos de los Anuarios del CINVESTAV Irapuato, 1998, 1999, 2000, 2001,
2002 ,2003 ,2004 y 2005.

El primer lugar lo ocupa los servicios de laboratorio, prestados fundamentalmente


a instituciones públicas de educación y de investigación. Los proyectos de
desarrollo tecnológico ocupan el segundo lugar y en su mayoría se concentran con
empresas y centros públicos de investigación. La asesoría se brinda tanto a
universidades como a pequeños grupos de productores. El entrenamiento técnico
es un tipo de apoyo que se ofrece para otras universidades y centros de
investigación, al igual que la asesoría técnica.

Las relaciones que ha establecido CINVESTAV-I son muy diversas, para observar
el panorama de manera general se analizan a continuación en periodos de dos
años a partir del 2000, ya que cabe destacar que en los informes de 1998 y 1999
no se encontró información respecto a los proyectos y servicios solicitados por la
industria y otros.

Periodo 2000-2001

Los proyectos de este periodo están dominados por los servicios de laboratorio
prestados para el análisis de ciertos tipos de componentes relacionados con el
sorgo, las harinas y la leche. Los proyectos de asesoría fueron para empresas y
se basaron en el almacenamiento y la conservación de granos; además de
asesoría a campesinos del medio rural basada en el diseño y construcción de silos
para almacenaje de maíz. Mientras que los proyectos de investigación se
realizaron para empresas en el área tequilera de México. Finalmente el
entrenamiento técnico se dio a una universidad extranjera en el área de
micotoxinas.

Periodo 2002-2003

Durante este periodo los proyectos estuvieron dominados por la asesoría teórica,
educativa y técnica principalmente a centros de investigación y a grupos de
productores. Se realizaron proyectos relacionados con el desarrollo tecnológico de
la cadena productiva del agave, transferencia de tecnología a una empresa y se
contribuyo con el Comité estatal de sanidad Vegetal de Guanajuato en el control
de plagas. En general, se nota una colaboración importante con las necesidades
regionales de ciertos grupos productores como los del agave, fresa y trigo,
además de un estrecho trabajo con el Consejo de Ciencia y Tecnología del estado
de Guanajuato, ya que uno de los proyectos fue precisamente la elaboración de
un programa de Biotecnología para el estado.

175
Periodo 2004-2005

Este periodo se encuentra dominado por servicios de laboratorio prestados a


centros de investigación como el CIATEC, así como a facultades universitarias y
empresas. También se realizaron proyectos de desarrollo tecnológico para
empresas en las áreas de cultivo de tejidos y proyectos de investigación en el
análisis de ciertos alimentos e ingredientes alimentarios relacionados con las
harinas. También se trabajo con la red del frijol, auspiciada por la SAGARPA.

Existen proyectos muy diversos y que mantienen relaciones con distintos tipos de
agentes, desde otras universidades nacionales y extranjeras, como grupos locales
de productores, empresas de la zona y sobre todo podemos notar que la
investigación que se realiza en la mayoría de los casos resuelve problemáticas
locales. Puede ser que el número de proyectos aún sea bajo, ya que en dicho
periodo sólo se contabilizaron 36 proyectos que responden a demandas
específicas de terceros, al contrario del número de éstos que se realizan en el
área de ciencia básica que sólo en el año 2000 fueron alrededor de 70. Esto
significa que la mayor parte de la investigación que se realiza en el CINVESTAV
Irapuato en su gran mayoría es básica, aunque existen relaciones establecidas
con algunos agentes en el estado, estas aún son pocas. Esto podría responder a
varias cosas, en primer lugar que no exista demanda por parte de empresas en el
estado para realizar proyectos conjuntos; que no exista la suficiente información
acerca de las actividades que realiza en centro o bien que gran parte de las
relaciones que se establecen sean de manera informal de manera que no existen
registros. Lo último podría ser una posible respuesta, dado que parte de la
dinámica que muestra la investigación científica en México y su relación con
empresas, centros o universidades hace notorio el hecho de que la mayor parte de
las relaciones se establecen de manera informal, por lo tanto no se genera ningún
documento que certifique que este proceso se llevo a cabo.

Además del campus INIFAP y del CINVESTAV, en el estado se localiza el IT de


Celaya y la Universidad de Guanajuato que cuenta con un número importante de
investigadores y líneas relacionadas con la Biotecnología.

8.1.1.2 Recursos Humanos

Otro de los datos relevantes para la caracterización de la Biotecnología es la


composición de los recursos humanos en investigación. Del total nacional de
2,179 de los investigadores en Biología y Química, el estado de Guanajuato
cuenta con el 2.66% del total (Anexo, cuadro 7). En términos comparativos, el
176
estado cuenta con un moderado acervo de investigadores en Biotecnología o
áreas a fin, registrados en el SNI, sin embargo en el trabajo de campo se constató
que existen más investigadores de los reportados, pero con la salvedad de que no
pertenecen al sistema mencionado. Por lo tanto, no se puede argumentar que las
capacidades científicas sean bajas o insuficientes, ya que aunque existiese un
número bajo de investigadores, estos pueden realizar investigación de alto
impacto para el sector.

Es importante mencionar que se buscó la información acerca del número de


graduados a nivel licenciatura, maestría y doctorado en el área de Biotecnología,
biología, química, etc., pero no existe información reciente ni completa acerca del
tema.

8.1.2 Sonora
8.1.2.1 Centros de Investigación

La investigación en el estado de Sonora tiene una larga historia, destaca que


algunas de las primeras en realizarse fueron relativas al agro (Sotelo, 2008; León
et al. 2011) en productos como el maíz y el trigo, aunque pronto se diversificaron
hacia productos del mar como el camarón.

La investigación en Sonora ha sido desarrollada básicamente por dos tipos de


actores: los centros de investigación universitarios y los centros públicos de
investigación. Dentro de los primeros destaca el Departamento de Investigaciones
Científicas y Tecnológicas (DICTUS) y el Departamento de Investigación y
Posgrado en Alimentos (DIPA) de la UNISON. Aunque cabe mencionar que dentro
de la propia UNISON existen áreas dentro del Departamento de Agricultura y
Ganadería, que se han integrado a los cuerpos académicos PROMEP y que
también realizan investigación, tales como el denominado “Cuerpo académico en
sistemas de producción agrícola” y el “Cuerpo académico en Biotecnología ” por
mencionar algunos64.

Mientras que los centros públicos de investigación como el Centro de


Investigación en Alimentos y Desarrollo A.C. han mantenido un ritmo constante de

64
Información obtenida a partir de las entrevistas realizadas con integrantes del Departamento de Agricultura
y Ganadería de la UNISON (febrero, 2011)

177
crecimiento, de manera que cuentan con subsedes en distintas regiones del
estado, así como en otros estados65.

A partir de la investigación realizada por León et.al (2011) acerca de las


características de los centros públicos de investigación e instituciones de
educación superior localizados en Sonora, se extraen los siguientes puntos:

 Los institutos tecnológicos y las universidades a pesar de que su principal


función es la de formar recursos humanos en áreas tecnológicas y
económico-administrativas, muestran una participación más activa y
preocupación por vincularse con otros sectores.
 Los centros de investigación han mantenido una constante vinculación con
la sociedad y parte del sector productivo. Esto significa que han existido
esfuerzos por responder a demandas sociales y problemas específicos de
la región.
 Destaca que en la mayoría de los planes de desarrollo institucional se
menciona la importancia de de la transferencia de conocimiento como una
estrategia primordial.
 Existe cierta evolución en cuanto a las actividades que desarrollan las
oficinas de vinculación y transferencia, dado que han ampliado sus
actividades incluyendo aspectos como la formación de incubadoras, áreas
de asesoría en cuanto a la propiedad intelectual, etcétera.
 Sin embargo, destaca el hecho de que por las propias características de los
centros y las universidades, las interacciones se localizan mayormente en
el ámbito de las prácticas profesionales, estancias en empresas,
consultorías, publicaciones conjuntas y participación en foros. Y en menor
medida en desarrollo compartido de investigaciones, proyectos de mediano
y largo plazo CyT, creación de empresas o licenciamientos.

Retomando parte del trabajo de campo, la investigadora del CIAD Dra. De la Torre
expresa en torno al punto anterior:

“Las actividades que se realizan comúnmente como parte de lo que llamamos


vinculación, implican solamente la transferencia de algunos procedimientos
simples que se han desarrollado previamente. Aunque muchas veces se trabaje
directamente con empresas, éstas sólo requieren mejorar ciertos procedimientos,

65
Información obtenida a partir de las entrevistas realizadas con integrantes del CIAD (febrero, 2011).
Destaca que los planes de crecimiento del CIAD se enfocan a establecer nuevas subsedes a lo largo del país y
alguna en el extranjero. Lo que demuestra el amplio reconocimiento científico y social con la que cuentan.

178
lo que no implica que llevemos a cabo investigación conjunta, sino la compra de
algún tipo de servicio o asesoría técnica”

En conclusión, podemos decir que a pesar de la presencia de oficinas de


vinculación y transferencia, el proceso aún se encuentra en una fase primigenia o
bien, concentrado en actividades sencillas, sin embargo sería importante
considerar cuales han sido las trabas o mecanismo que han impedido la evolución
de la relación entre dichos actores.

De acuerdo al trabajo de campo realizado, varios de los investigadores


entrevistados66 refieren que existen varios aspectos que limitan y perjudican el
proceso de vinculación y transferencia de tecnología:

1. Problemas para establecer líneas de investigación conjuntas. Dado que los


investigadores universitarios tienen definidas líneas muy especializadas de
investigación, en ocasiones es difícil convencerlos de ampliar o mover sus
intereses hacia aspectos que le competen a las empresas.
2. Problemas burocráticos en cuanto a los tiempos de realización de las
investigaciones y las entregas. La estructura organizacional de las
universidades y centros implican la mayor de las veces establecer
“convenios” que deben pasar por una serie de instancias que retrasan todo
el proceso.
3. Problemas referentes a la propiedad intelectual. A pesar de los avances en
cuanto a la definición de dicho tema en las universidades, aún existe
incertidumbre en cuanto a lo que sucederá una vez que se haya generado
algo en conjunto, definir a quién le pertenece y quién lo puede explotar y
quién lo puede difundir,67 sigue significando una fuerte traba para la
vinculación.
4. Problemas de comunicación entre los agentes. Más allá de un problema de
lenguaje – aunque también juega un papel relevante- existen problemas en
cuanto a la expresión de las necesidades de un agente y el entendimiento
del otro.

66
Entrevistas realizadas con: Dra. De la Torre, Dra, Palomares, Mtro. Trejo, Dra. Burgaud
67
Este es un tema por demás importante, dado que uno de los más importantes incentivos para los
investigadores pertenecientes al Sistema Nacional de Investigadores (SNI) sigue siendo la publicación de las
investigaciones realizadas, lo que en ocasiones se contrapone con los intereses de las empresas, dado que
prefieren mantenerlo bajo resguardo, secreto industria o no difundirlo hasta que se haya obtenido una patente.
Sin embargo, el promedio una vez que se ha finalizado una investigación hasta que se obtiene la patente versa
en un promedio de 2 a 5 años en México. Esto genera desincentivos para los investigadores, ya que al no
poder publicar las investigaciones que realicen con las empresas su productividad medida a través de artículos
se ve disminuida.

179
5. Problemas de difusión. La mayoría de las universidades o centros de
investigación no cuentan con una estrategia de difusión de las
investigaciones que realizan68. Esto se vuelve fundamental dado que en
ocasiones, a menos que el empresario o demandante busque entablar
comunicación directa, este desconoce si es que pueden ofrecerle una
solución o proponerle nuevas áreas de desarrollo.

Citando la entrevista con la Lic. Rebeca Ayala encargada de la Oficina de


Comunicación Social y Vinculación del CIAD Hermosillo, refiere lo siguiente:

“En un congreso que asistí el año pasado (2010) con todos los encargados de las
áreas de vinculación y transferencia de tecnología de los centros CONACYT, me
di cuenta de que no existen esfuerzos institucionales para generar una estrategia
de difusión de las actividades de investigación que se llevan a cabo en cada uno
de los centros, casi ninguno cuenta con un encargado que esté capacitado para la
difusión de los productos que pueden ofrecer los centros, en algunos casos es un
trabajo doble, por un lado convencer a los investigadores de compartir su trabajo y
a la vez traducirlo a un lenguaje comprensible, de manera que todos aquellos que
busquen puedan encontrar respuestas, por ejemplo: las empresas. De manera
que nuestra área es una especie de traductora entre demanda y oferta científica-
tecnológica, pero que hasta ahora sólo nosotros (CIAD) ha implementado”

La estructura de los centros de investigación existentes en el estado de Sonora,


muestra que existen capacidades formadas a través de los años en el área
alimentaria y agroindustrial. Sin duda la existencia de los centros en sí mismos no
demuestran el nivel de estas capacidades de investigaciones, sin embargo si nos
dan una idea de la existencia de líneas de investigación relacionadas con el tema
alimentario y agroindustrial y por lo constatado en las entrevistas, la gran mayoría
de estos centros desarrollan investigación biotecnológica de distintas
generaciones69. Para conocer más acerca de dicho tema y sobre todo para definir
exactamente dónde es que existen capacidades científicas en desarrollo o sólidas,
se ahondará a continuación en el caso del CIAD y de los departamentos de la
UNISON: DICTUS Y DIPA. Ya que en la exploración realizada se encontró que es
en estas organizaciones donde se localiza el núcleo de la investigación
Biotecnológica Alimentaria y Agroindustrial.
68
En el trabajo de campo realizado se encontró que el CIAD es el único centro que tiene una estrategia de
comunicación social bien estructurada, con una responsable y con una serie de metas establecidas a mediano y
largo plazo. Dicha estrategia incluye difusión de las investigaciones realizadas, boletines de información,
etcétera.
69
Para conocer el listado completo de los centros públicos de investigación relacionados con el área agrícola,
alimentaria y/o agroindustrial además de su año de creación y la localización, revisese en el anexo el cuadro
8.

180
Centro de Investigación en Alimentos y Desarrollo A.C. (CIAD)

El CIAD, A.C. se formó en el año de 1981 y este proceso dependió de distintas


organizaciones como la Secretaría de Educación Pública, el Consejo Nacional de
Ciencia y Tecnología, la Universidad Nacional Autónoma de México, el Instituto
Politécnico Nacional, el Gobierno del Estado de Sonora, la Secretaría de Pesca,
hoy Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación,
el Gobierno del Estado de Sinaloa y en 1997 el Gobierno del Estado de
Chihuahua.

Desde sus inicios el CIAD trató de responder a la problemática del sector


alimentario de México realizando estudios, asesorías, consultorías y servicios en
los sectores agroalimentario, pesquero, industrial y comercial, considerando su
impacto en tres ámbitos básicos; 1) la producción, conservación, calidad y
comercialización de los alimentos, 2) la salud y el desarrollo biológico del ser
humano y, 3) la repercusión social y económica de los procesos de desarrollo
económico e integración internacional70.

El CIAD se compone de 5 coordinaciones regionales: Guaymas, Cuauhtémoc,


Delicias, Mazatlán y Culiacán; además de la unidad central en Hermosillo.

La unidad de Hermosillo está dividida en las siguientes coordinaciones de


investigación: nutrición, desarrollo regional, ciencia de los alimentos, tecnología de
los alimentos de origen animal y tecnología de los alimentos de origen vegetal.
Cada coordinación tiene a su vez una serie de departamentos que a continuación
se describen71:
1. Nutrición
a. Nutrición y Metabolismo
b. Nutrición Pública y Salud
2. Desarrollo Regional
a. Economía regional
b. Desarrollo humano y bienestar social
c. Estudios sociales del sistema alimentario
d. Programa de estudios ambientales
3. Ciencia de los Alimentos

70
Tomado de http://www.ciad.mx/ consulta del día 16 de marzo de 2011
71
Cabe mencionar que al momento de realizar esta investigación se acababa de terminar un trabajo de
reorganización administrativa y de las líneas de investigación. Con la finalidad de establecer claramente los
grupos y líneas de investigación. Este trabajo ha sido coordinado por el Dr. Francisco Vargas al cual se
agradece la información brindada junto con la Dra. Cristina Taddei.

181
a. Bioquímica
b. Microbiología
c. Toxicología
4. Tecnología de Alimentos de Origen Animal
a. Área de productos cárnicos (res, cerdo, aves).
b. Área de productos lácteos.
c. Área de productos pesqueros (marinos, dulceacuícolas)
d. Área de Biotecnología Marina
e. Área de Biopolímeros
f. Biología Molecular de organismos acuáticos
5. Tecnología de Alimentos de Origen Vegetal
a. Biología y tecnología postcosecha de frutas y hortalizas
b. Procesamiento e ingeniería de frutas y hortalizas
c. Biotecnología de vegetales y hongos
d. Inocuidad de frutas y hortalizas frescas
e. Ciencia y tecnología de los cereales
f. Envases de alimentos y vida de anaquel

Las cinco áreas descritas anteriormente realizan tanto investigación básica como
aplicada, ésta última es fundamental ya que bajo el esquema de operación que
mantiene el CIAD es necesario acceder a recursos externos que financien las
distintas actividades del centro, por lo que se constituye como un incentivo
pecuniario al nivel de la organización.

Esto ha sido un generador de prácticas diferentes a las que suceden en otros


centros de investigación, por ejemplo los dependientes de una universidad; ya que
la escasez de recursos los obliga de cierta manera a tener una actitud más abierta
tanto a las necesidades sociales y regionales, como a las necesidades
empresariales. Esto sin duda es favorable para el establecimiento de relaciones
con diversos actores y ha sido un motor importante del crecimiento de los servicios
tecnológicos que el centro presta. Además de que es uno de los rubros que ha
mantenido un ritmo creciente, lo que se traduce en mayores ingresos para el
centro.

Retomando la categorización que se usa en esta investigación para definir las


capacidades que se forman en torno a estas actividades, encontramos que la
mayor parte de las vinculaciones que realiza el centro se encuentran en el área de
prestación de servicios en contraparte de la generación de proyectos conjuntos
centro-empresa. Esto indica que existe una fuerte transmisión de conocimientos
por parte del centro hacia la empresa, pero no está implicando una interacción
constante y de retroalimentación, que es una de las etapas más avanzadas dentro
182
de los esquemas de vinculación. Lo que se está generando son capacidades
tecnológicas en las empresas, pero no se potencializa la capacidad innovadora.

Las capacidades científicas con las que cuenta el CIAD son indudablemente de
las más desarrolladas en el país en el área de Alimentos y Agroindustria; existen
muy diversas líneas de investigación en Biotecnología aplicada a diversas áreas
tanto de los alimentos de origen vegetal como de origen animal, además del área
de ciencia de los alimentos. Esto ha desprendido importantes investigaciones con
aplicaciones a productos pruebas y comercializables. Como conclusión previa
acerca de las capacidades científicas desarrolladas a través de la investigación
básica y aplicada, se puede decir que tanto el amplio espectro y la gama de
líneas, temáticas y productos que se analiza, como el tipo de proyectos y las
actividades de vinculación que mantienen, los posiciona en un nivel alto de
desarrollo de capacidades científicas y aunque en menor medida, pero con un
desarrollo considerable en capacidades tecnológicas.

Universidad de Sonora (UNISON)

Si bien la actividad principal de la Universidad de Sonora no es la investigación,


sino la formación de recursos humanos a nivel profesional y a nivel posgrado, sí
existe experiencia y trayectoria en dos departamentos relacionados con la
investigación Biotecnológica tanto en alimentos como en el área agroindustrial.
Aunque cabe mencionar que no son los únicos espacios donde se realiza
investigación, por ejemplo el Departamento de Agricultura y Ganadería que
aunque no cuente con un área específica de investigación, se han establecido ya
dos cuerpos académicos con perfil PROMEP en formación y que incluyen áreas
de investigación como: uso eficiente del suelo y agua; cultivos protegidos; cultivos
tradicionales y emergentes el primero de ellos y el segundo cuerpo académico
denominado “Biotecnología Agrícola” incluye líneas como: Biología y genética
molecular; mejoramiento genético y por último agricultura orgánica. Ambos
cuerpos buscan establecer líneas robustas de investigación y han comenzado a
buscar financiamientos tanto de los fondos CONACYT, como lo son ciencia básica
o los fondos sectoriales, así como de otros fondos como los otorgados por
fundación PRODUCE o los internos de la propia UNISON72. Lo importante de
estos dos cuerpos académicos es que son espacios en formación que comienzan
a ganar espacio dentro de la investigación biotecnológica.

72
La información aquí presentada fue obtenida a través de las entrevistas realizadas con el Jefe del
Departamento de Agricultura y Ganadería Dr. Jesús López Elías, el Dr. Sergio F. Moreno encargado de
Investigación y el Ing. Rafael Retes encargado de Vinculación del mismo departamento el día 9 de febrero de
2011.

183
Los dos departamentos mencionados anteriormente que cuentan con una amplia
experiencia y un destacado prestigio son el Departamento de Investigaciones
Científicas y Tecnológicas (DICTUS) y el Departamento de Investigaciones y
Posgrado en Alimentos (DIPA).

El DIPA tiene como antecedentes los planes de la UNESCO para la educación en


Ciencias Alimentarias de la década de los sesenta y la Escuela de Ciencias
Químicas de la Universidad de Sonora, en la que se crearon las carreras de
Químico Industrial y Químico Farmacobiólogo, que incluían en su currícula
materias del área de alimentos tales como Análisis de Alimentos y Química de los
Alimentos, pero que no preveía una mayor especialización de los egresados para
la industria alimentaria.

En los años 70 inició la preparación de maestros en ciencias alimentarias, lo que


dio lugar a investigaciones incipientes, sobre usos del sorgo para tortillas y otros
productos, concentrado de proteínas de pescado, concentrado de proteínas de
hojas verdes y preparación de atoles enriquecidos con proteínas, de colores y
sabores diversos, elaboración de salchichas de diversos tipos de pescado entre
otros. Ya para los 80 se aprobó el programa de maestría y doctorado.

La UNISON se encuentra organizada de la siguiente manera; existen academias


que agrupan a su vez diferentes líneas de investigación, las actividades de los
profesores integrantes incluyen impartir clase en los distintos niveles de educación
(licenciatura, maestría o posgrado), así como realizar investigación. El DIPA se
compone de las siguientes academias y líneas de investigación73:

1. Nutrición y Toxicología
2. Academia de Ciencias Básicas de los Alimentos
3. Academia de Modelación Biológica en Alimentos
4. Ciencias Aplicadas a los Alimentos

En la gran mayoría de las líneas mencionadas anteriormente se utilizan y


desarrollan técnicas o procedimientos biotecnológicos, aunque no se mencione
directamente. Es importante decir que además de las academias mencionadas
existen cuerpos académicos que son: Fisicoquímica de Biomoléculas en
Alimentos, Química y Procesamiento de Cereales y Oleaginosas; Conservación,
Toxicología e Inocuidad Alimentario; Compuestos Naturales Bioactivos y
Microbiología Alimentaria; Química Agrícola y Manejo Postcosecha de Granos.
73
Toda la información aquí mostrada se obtuvo de la página oficial de la Universidad de Sonora
www.uson.mx y se complemento con la entrevista realizada al Jefe del DIPA Dr. José Eduardo Valdez Olguín
el día 10 de febrero de 2011

184
De forma similar que el CIAD, el DIPA tiene que buscar tanto en los fondos
internos de la propia UNISON como en los fondos externos para poder realizar
investigación. Al ser una universidad estatal y al contar con un presupuesto
restringido los obliga a enfrentarse a lo que podría considerarse como el mercado
de la investigación, ya que implica competir por los recursos con otras
universidades, centros y sobre todo los motiva a tener una mayor cercanía a las
necesidades de las empresas y los productores de la zona que puedan interesarse
en su investigación. Podría parecer que esto los limita, sin embargo han
desarrollado estrategias para poder mantener más o menos de manera constante
sus investigaciones, lo que a mediano y largo plazo puede ser beneficioso.

Departamento de Investigaciones Científicas y Tecnológicas (DICTUS)

El DICTUS, anteriormente CICTUS fue creado en el año de 1963 con el propósito


de impulsar la transformación de los recursos naturales y de implementar nuevas
tecnologías dentro del sector productivo del estado de Sonora.

El DICTUS se organiza de la misma manera que el DIPA, las academias se


integran por:
 Acuacultura
 Biología experimental y aplicada
 Biología conservación y manejo de ecosistemas terrestres
 Biotecnología de recursos naturales
 Ciencias del mar
 Desarrollo sustentable
Mientras que los cuerpos académicos se integran de la siguiente manera:
 Análisis y manejo de ecosistemas marinos
 Biomoléculas
 Biotecnología de recursos bióticos
 Ecología y sustentabilidad de zonas áridas
 Genética y sanidad de organismos acuáticos
 Modificaciones del medio ambiente

La mayoría de las academias se relacionan con recursos acuícolas, bióticos y


medio ambiente; además de Biotecnología de recursos bióticos, nutrición y
Biotecnología acuícola.

Existen una serie de servicios que se prestan al sector productivo como: asesoría
en la planificación, construcción y operación de granjas camaronícolas;

185
capacitación técnica en el cultivo larvario y maduración de camarón; evaluación y
diseño de nuevos alimentos para camarón, evaluación de sistemas de producción
de alimento vivo, evaluación de la calidad nutricia de microalgas, diseño y uso de
fertilizantes industriales en la acuacultura; patología acuícola; desarrollo
tecnológico de nuevos productos y tecnología de aceites vegetales y marinos;
además de contar con un herbario, apoyo al desarrollo costero, estudios de los
recursos naturales terrestres y programas de vinculación, extensión y educación
ambiental.

El DICTUS es uno de los centros de investigación más importantes en la región y


si bien no están dedicados exclusivamente a la Biotecnología Agroindustrial o
alimentaria, razón principal de esta tesis, fue importante realizar entrevistas con
sus integrantes y conocer la dinámica del departamento y con esto las
capacidades científicas que han construido a lo largo de un periodo largo, ya que
son uno de los primeros departamentos de investigación de la UNISON y sin duda
cuentan con recursos altamente calificados que directa o indirectamente se
relacionan con el desarrollo de Biotecnología Agroindustrial o alimentaria74.

Los centros antes analizados no son los únicos que realizan investigación
biotecnológica, existen otras unidades como el campus del INIFAP que desarrollan
investigación relacionada con el vid, nogal, garbanzo, hortalizas y cítricos;
buscando nuevas variedades, demostraciones de campo y sistemas de riego 75 y
que es un centro muy relevante sobre todo por la constante comunicación que
mantienen con productores y empresarios de todos los tamaños en la búsqueda
de soluciones, nuevos productos, procesos y pruebas de campo76.

Además de otros centros donde se realiza investigación biotecnológica asociada


con recursos pesqueros, acuícolas, etc. y que no fueron considerados para
analizados a profundidad debido al interés primordial de esta tesis en la parte
alimentaria y agroindustrial, pero que han sido mencionados en el primer cuadro
de este apartado y que constituyen parte de las capacidades científicas del
estado, ya que en muchas ocasiones tanto las investigaciones como los
desarrollos pueden ser utilizados en muy diversos ámbitos, de manera que
aunque se lleven a cabo para recursos del mar pueden utilizarse en espacios más
amplios.

74
Toda la información aquí presentada se obtuvo de http://www.dictus.uson.mx/ y de las entrevistas
realizadas con el jefe de Departamento Dr. José Eduardo Valdez Olguín
75
Información obtenida de www.inifap.gob.mx
76
Se realizó una entrevista con el coordinador de Vinculación de todos los centros INIFAP el Dr. Salvador
Fernández para conocer la dinámica de las unidades en los estados.

186
Lo anterior demuestra la existencia de un cúmulo de conocimientos básicos que
mantienen una dirección horizontal y transversal susceptible a ser usado en muy
distintas variedades, procesos y productos, pero sin el impacto que podrían tener,
dado que no existen mecanismos efectivos de transferencia de tecnología, de
manera que aunque existan importantes capacidades científicas desarrolladas por
algunos centros como los que se analizaron en este apartado, estos no logran aún
una conexión con las demandas sociales.

Sin duda, en conjunto constituyen capacidades científicas de alto valor para la


Biotecnología en alimentos y agricultura, pero no existe una articulación que
avance hacia la generación de redes y colaboraciones que permitan el uso de
dichas capacidades.

8.1.2.2 Recursos Humanos

Existen diversos tipos de recursos humanos especializados y que pueden ser


considerados como parte del acervo que compone las capacidades científicas de
la Biotecnología Alimentaria y Agroindustrial. En este apartado se retoman los
indicadores presentados por CONACYT para el estado de Sonora, de manera que
se caracterizaran aspectos como los investigadores dentro del SNI que como se
ha mencionado ya, son un activo fundamental dado que tienen diversas acciones
que aportan conocimiento y construyen fortalezas en la Biotecnología. Sus propias
actividades de investigación aportan directamente al trabajar en líneas
relacionadas, desarrollar nuevos procesos o productos o por sus actividades de
vinculación. Pero también tienen un papel importante en la formación de nuevos
recursos ya sea a nivel de pregrado o posgrado.

Del total de investigadores SNI hasta el 2010, el estado de Sonora reporta 341
investigadores, lo que representa el 2%. Del anterior porcentaje, la mayoría de los
investigadores se concentran en el área de Ciencias Físico Matemáticas y de la
Tierra, pero destaca que en segundo lugar se ubica la Biotecnología y las Ciencias
Agropecuarias y en sexto lugar la Biología y Química. Más del 50% son hombres y
a nivel nacional ocupan el lugar número 14, por debajo de Guanajuato y Yucatán
(Anexo gráfico 9).

Además de considerar a los SNI como parte fundamental del acervo de recursos
humanos, es necesario tomar en cuenta la formación de estudiantes a nivel
posgrado aunque sin duda, también debe considerarse a los estudiantes de
licenciatura ya que en muchos casos son estos los que se integran a las empresas
y generan capacidades tecnológicas que son aprovechadas gracias a la
capacitación y formación que reciben en la práctica profesional.
187
Sonora cuenta con 41 Instituciones de Educación Superior (IES), 95 están
inscritas en el padrón de la Asociación Nacional de Universidades e Institución de
Educación Superior (ANUIES), y cuenta con 3 Centros de Investigación, de
acuerdo al Directorio de ADIAT 200677.

Según el padrón Nacional de Posgrados de Calidad cuentan con 27 posgrados


vigentes 3 de especialidad, 17 de maestría y 7 de doctorado 78. Existen 151
instituciones y empresas científicas y tecnológicas reconocidas por el Registro
Nacional de Instituciones y Empresas Científicas y Tecnológicas (RENIECYT). En
esta clasificación se encuentran 111 empresas, 14 instituciones no lucrativas
(INL), 2 centros de investigación (sedes), 7 dependencia de la administración
pública (DAP), 11 instituciones de educación superior sedes (IES), y 6 personas
físicas (Sotelo,2008).

Haciendo un ejercicio de comparación con algunas estadísticas presentadas para


el 2007-2008 por ANUIES vemos que el total de doctorado paso de 94 en 2004 a
411 en 2008; maestría de 3,390 a 4,462 y especialidad de 138 a 340 estudiantes.
En términos generales todas aumentaron pero destaca el nivel doctorado que
muestra el mayor incremento (Anexo, cuadro 10 y 11)

Realizando el mismo ejercicio comparativo con los datos presentados por ANUIES
para el periodo 2007-2008 y los presentados por Rodríguez, et al. (2007) y estos a
su vez basados en información de la SEC-Sonora (2005), nos encontramos con
problemas ya que existen cambios muy bruscos, resultado de que en los datos
más recientes de ANUIES no se reporta la matrícula de licenciatura, lo que hace
parecer que existe una disminución en el total de la matrícula, pero se debe
mencionar que los 5,213 estudiantes reportados para 2007-2008 sólo se integran
por especialidad, maestría y doctorado. Tampoco se puede comparar con la
matrícula por áreas de conocimiento debido al mismo motivo (Anexo, cuadro 12).

8.1.3 Yucatán
8.1.3.1 Centros de Investigación

77
Tomado de Estado del Arte de los Sistemas Estatales de Ciencia y Tecnología, Sonora 2007. CONACYT
78
Op. Cit

188
De acuerdo a los datos presentados por CONACYT a través del SIICYT, en el
estado de Yucatán están registrados 72 investigadores con nivel SNI en el área de
Biología y Química, 86 en Biotecnología y Ciencias Agropecuarias. Esto suma 158
investigadores en Biotecnología y áreas relacionadas con el sector agroindustrial-
alimentario y en comparación con los otros dos estados, son el que cuenta con un
mayor número de investigadores en el área.

En el Padrón Nacional de Posgrados de Calidad registran 27 posgrados vigentes:


2 de especialidad, 20 de maestría y 5 de doctorado. Cuentan con tres centros de
la red de centros públicos CONACYT, entre los que se encuentran el Centro de
Investigación Científica de Yucatán A.C. (CICY), una subsede del Centro de
Investigaciones y Estudios Superiores de Antropología Social (CIESAS) y una del
Centro de Investigación y Asistencia en Tecnología y Diseño del Estado de Jalisco
A.C. (CIATEJ). Además de una sede del Centro de Investigaciones Avanzada
(CINVESTAV) en Mérida y un campo experimental del INIFAP en Mococha.

A continuación se presentan las líneas de investigación de los centros que son de


interés para esta tesis, debido a su orientación agroindustrial o alimentaria.

Centro de Investigación Científica de Yucatán A.C. (CICY)

Dedicado a la investigación científica y tecnológica y la formación de recursos


humanos en las áreas de biología vegetal, recursos naturales, ciencia de los
materiales y estudios sobre el agua para el desarrollo sustentable del país. El
centro se divide en seis áreas de investigación: Bioquímica y biología molecular de
plantas, Biotecnología, Ciencias del Agua, Materiales, Recursos Naturales y
Energía Renovable. Focalizaremos nuestra atención en las dos primeras.
1. Unidad de Bioquímica y Biología Molecular de Plantas. Se especializa en el
desarrollo de investigación básica para generar conocimiento en los
campos de la genética, la biología celular, la biología molecular, la
bioquímica y la fisiología de plantas de interés agroindustrial o nativas de la
península de Yucatán

2. Unidad de Biotecnología. Se compone por tres líneas de investigación, la


agroBiotecnología, la farmacoBiotecnología y la Biotecnología de
combustibles alternos. Cuentan con 18 investigadores, 25 técnicos, 33
estudiantes de posgrado y 40 estudiantes de licenciatura.

a. AgroBiotecnología: se realiza investigación científica e innovación


tecnológica para la utilización de plantas o sus procesos metabólicos
para la producción de bienes y servicios. Se desarrollan proyectos
189
enfocados al mejoramiento genético de cultivos agrícolas como
agaves, cedro, chile, plátano, papaya, cítricos y cocotero. Además de
producirse biomoléculas de alto valor agregado mediante técnicas
metagenómicas o en cultivos de microalgas verdes (agricultura
molecular), así como biopesticidas. Los temas de investigación
incluyen la resistencia a enfermedades, la tolerancia a estrés biótico,
sistemas integrales de micropropagación, marcadores moleculares,
metagenómica y bioinformática aplicada.
b. FarmaBiotecnología: uso de enzimas y de organismos como plantas,
animales o microorganismos para el diseño, producción y
administración de nuevos fármacos elaborados a partir de proteínas
recombinantes, péptidos y productos químicos naturales, la
preparación de métodos de diagnóstico con el uso de anticuerpos
monoclonales, manufactura de agentes terapéuticos, creación de
terapias génicas para el reemplazo de genes defectuosos o
ausentes, elaboración de vacunas y hormonas. Por lo tanto, se
recurre al uso de técnicas avanzadas a nivel mundial como la
biología molecular, la genética molecular, la ingeniería genética,
ADN recombinante, diseño de biorreactores y métodos de cultivo de
tejidos. Todo articulado en los temas de bioprospección,
farmacognosia, química de productos naturales y sistemas de
producción de proteínas recombinantes.
c. Biotecnología de Combustibles Alternos: se realiza investigación para
la obtención de tecnologías que ayuden al aprovechamiento de
fuentes biológicas alternas, de manera que se trabaja en el
establecimiento de protocolos para el procesamiento de biomasa
residual, el uso de enzimas y o microorganismos y en el
mejoramiento de cultivos. Los temas de investigación se dividen en
biocombustibles a partir de microalgas, biocombustibles a partir de
hongos lignocelulilíticos y biocombustibles a partir de cultivos
agrícolas.

Además de lo anterior, se cuenta con un posgrado en Ciencias Biológicas con


opción en Biotecnología, donde se puede elegir cualquiera de las tres áreas antes
mencionadas79.

Se tiene registro que desde 1989 hasta 2011 se han realizado 99 convenios a
nivel nacional con universidades, centros públicos, empresas, institutos, etc. A

79
Información obtenida a través de la página de internet www.cicy.mx y complementada con la entrevista
realizada con el Dr. Sergio Peraza.

190
nivel internacional se encuentran vigentes (fecha 2011) 9 acuerdos y 6 convenios,
la mayor parte de ellos con Estados Unidos y en segundo lugar Colombia, además
de países como Cuba, Canadá, España, Brasil, Francia, etc.

El CICY ha tratado de implementar una política de colaboración tanto a nivel


nacional, como internacional y a pesar de que cuentan con una importante
trayectoria de trabajo conjunto, aún no tienen una oficina de vinculación y
transferencia tecnológica. Como se ha visto antes, esto es vital para generar una
estrategia de difusión y de impacto de las investigaciones, de forma que no sólo se
generen redes científicas, sino tecnológicas y puedan haber mayores
innovaciones con relación a los productos que se trabajan.

En palabras del Dr. Peraza “ha sido muy complicado establecer un área de
vinculación y transferencia, dado que al ser un centro CONACYT necesitamos una
serie de trámites burocráticos que han retrasado el proyecto, pero a la vez ha sido
un problema grave para establecer vínculos porque en muchas ocasiones los
investigadores se desesperan de hacerlo ellos mismos o las empresas deciden
que el trayecto es demasiado largo como para seguirlo, sobre todo cuando se trata
de asesorías o servicios tecnológicos”

Además de pensar en la unidad de vinculación y transferencia como difusora de


las investigaciones y proyectos que se realizan, también es necesaria para captar
las necesidades regionales. Sobre todo por las características de la producción
agroindustrial en Yucatán, donde más que empresas, existen grupos de
productores que difícilmente se acercan a los centros de investigación, a pesar de
que tienen necesidades que podrían ser resueltas.

A pesar de la falta de una oficina de vinculación el CICY ha desarrollado proyectos


tecnológicos exitosos, como el que culminó con el establecimiento de una
biofábrica de producción de pre planta, la cual a través de métodos in vitro ha
logrado definir distintos proyectos del sector agrícola y agroindustrial en el país
(Trejo, 2010).

El CICY también tiene importantes vinculaciones con grupos de productores de


agave y coco para conocer más sobre la genética de estos productos y mejorar
sus características para protegerlos de ciertas enfermedades virales.

Universidad Autónoma del Estado de Yucatán (UAEY)

El Campus de Ciencias Biológicas y Agropecuarias es uno de los centros más


importantes a nivel estatal en la generación de recursos humanos e investigación.
191
Para licenciatura existe el programa de agroecología, biología, biología mariana y
medicina veterinaria y zootecnia. Además de contar con posgrados en producción
ovina tropical y ciencias agropecuarias y manejo de recursos naturales.

De los programas antes mencionados, el de Agroecología es relevante dado que


es una propuesta de desarrollar sistemas alimenticios basados en la agricultura
sostenible, pero complementada con la Biotecnología y la agricultura orgánica. De
manera que representa un importante semillero de nuevas propuestas para el
sector.

Las áreas de investigación son: apicultura tropical, bioecología animal diversidad


de los recursos florísticos de Mesoamérica, ecología tropical, manejo y
conservación de recursos naturales tropicales, producción animal en agro
ecosistemas tropicales, recursos marinos tropicales, reproducción y mejoramiento
animal y salud animal. Debe mencionarse que aunque no existe un área
específica de estudio de la Biotecnología agrícola, agroindustrial o alimentaria, en
muchas de las líneas mencionadas se realizan investigaciones relacionadas.
La Facultad de Ingeniería Química (FIQ) es otra de las áreas importantes dentro
de la UADY. Se compone por los programas de estudio en Química Industrial,
Ingeniería Química Industrial, Ingeniería Industrial Logística, Ingeniería en
Alimentos e Ingeniería en Biotecnología, ésta última ganadora del Premio Nacional
de Tecnología en 2002.

A la par de la generación de recursos humanos, la FIQ brinda servicios como:


técnicas analíticas instrumentales, análisis industriales para el sector alimentario,
análisis de aguas residuales y domésticas, técnicas de cromatografía de gases
líquidos y análisis por espectrofotometría. Además de ofrecer una serie de
servicios ambientales que pueden estructurarse para esquemas de capacitación y
actualización de acuerdo a las necesidades del demandante.

En lo que coincide el Campus de Ciencias Biológicas Agropecuarias y la Facultad


de Ingeniería Química es que son pocos los proyectos que se realizan en conjunto
con empresas, con las cuales priva más la dotación de servicios técnicos o
tecnológicos; en general son convenios de investigación científica los que cobran
mayor relevancia para la universidad. No quiere decir que esto sea malo, sino que
no existen los mecanismos ni los incentivos, para que las áreas de investigación
avancen de las fases más básicas de colaboración, hacia las avanzadas, de
manera que se puedan resolver problemas tecnológicos que impliquen el
desarrollo de innovaciones. Una vez más, al realizar el trabajo de campo, se
constato que el problema de los tiempos entre la universidad y las empresas es un

192
factor clave para la no vinculación, además de la falta de estrategia para
establecer una agenta convergente entre ambos sectores.

8.1.3.2 Recursos Humanos

Como se ha mencionado ya, es importante conocer el número de investigadores


SNI como uno de los elementos formadores de recursos humanos e investigación.
En el estado de Yucatán existen 281 SNI con la siguiente distribución: 71 en el
área de Biotecnología y ciencias agropecuarias, 56 en Humanidades, 49 en
Biología y Química, 44 en Física y Matemáticas, 30 en Ingenierías, 16 en Medicina
y 14 en C. Sociales (Anexo, gráfico 13)

Según los datos presentados por ANUIES para el año 2008, a nivel maestría en
áreas como ciencias agropecuarias, ciencias naturales y exactas e ingeniería y
tecnología la matricula fue de 430 estudiantes. Mientras que a nivel doctorado de
las mismas áreas, son 192. Esto en comparación con los otros dos estados es
muy bajo y sólo en doctorado se está arriba de Sonora.

También existen algunas instituciones que aportan recursos humanos como el


campus experimental de INIFAP Mococha, la sede de CINVESTAV en Mérida y el
Instituto Tecnológico de Conkal, el cual a nivel tecnológico y como generador de
capacidades técnicas, ha sido muy relevante, éste ofrece formación académica en
los programas de Ingeniería Agronómica, Ingeniería en Desarrollo Comunitario y
en Biología.

8.2 Capacidades Tecnológicas

En el capítulo 7 se explico cómo es que el estado mexicano a través de una serie


de políticas públicas, ha implementado herramientas como los fondos de apoyo a
la innovación, de manera que a traves de éstos se creen incentivos a la
generación de capacidades tecnológicas y de innovación. En este apartado
analizaremos dos fondos, el Fondo Mixto (FOMIX) y el Fondo Sectorial de
Investigación en Materia Agrícola, Pecuaria, Acuacultura, AgroBiotecnología y
Recursos Fitogenéticos (SAGARPA-CONACYT-COFUPRO) ya que consideramos
que para el desarrollo de Biotecnología Agroindustrial -Alimentaria son dos de los
mecanismos que proporcionan incentivos más claramente para el sector.

8.2.1 Guanajuato

El Fondo Mixto del estado de Guanajuato emitió hasta el 2007, 15 convocatorias,


de estas se aprobaron 359 proyectos, de los cuales 227 se encuentran en
193
desarrollo, 117 han finalizado y 15 fueron cancelados, por lo tanto se encuentran
vigentes 34480. La distribución por área de conocimiento muestra que el 39% se
concentra en Ingeniería e industria y en segundo lugar con 22% Biotecnología y
agropecuarias. (Anexo, gráfico 15)

Los 74 proyectos registrados en el área de Biotecnología y Agropecuarias se


dividen a su vez en distintas áreas del Programa Especial de Ciencia y Tecnología
(PECyT). Aquí se puede observar que dominan los proyectos en el área de
Biotecnología, a continuación las de ciencia y tecnología para la atención de
necesidades sociales y en tercer lugar el diseño de productos de alto valor
agregado y procesos avanzados para la manufactura (Anexo, gráfico 16).

Los proyectos son muy diversos y en ocasiones involucran el estudio de distintos


elementos, de manera que se han detectado las líneas generales de investigación
que se encuentran presentes en los proyectos vigentes en el área de
Biotecnología. Destacan las investigaciones relacionadas con los principales
cultivos en el estado, esto significa que gran parte de la investigación que se
realiza puede ser aprovechada en el mismo estado, ya sea por empresas de
distintos niveles (micro, pequeñas o grandes) o bien por los productores
individuales que requieran de ciertas soluciones.

En general los proyectos se localizan en cultivos nativos de la zona, sus usos,


aprovechamiento, mejoramiento y análisis de características biológicas, químicas
y genéticas.
 Estudios diversos sobre la tuna, maíz, chile, nopal y ajo
 Estudios diversos sobre el tomate, jitomate, papas y calabacitas
 Estudios sobre fertilizantes para distintos cultivos
 Estudios sobre el mezcal y el agave
 Aprovechamiento del suero de leche
 Estudios para la producción de trigo
 Biodiversidad y calidad nutricional
 Generación de etanol

De la distribución de los proyectos registrados en los Fondos Mixtos CONACYT


(2007), notamos que a diferencia de otros estados, el mayor número de proyectos
se concentra tanto en la investigación científica como en el desarrollo tecnológico,
esto podría traducirse en el desarrollo de capacidades en la investigación básica,
así como la traducción de estas en innovaciones, si existiese el contexto
institucional adecuado en conjunto con un sistema de incentivos.
80
Datos con fecha de corte al 2010.

194
Como se puede ver, existe una importante diversificación de los temas
desarrollados a través del FOMIX Guanajuato, destacando el hecho de que gran
parte de los proyectos se pueden relacionar con las necesidades de la región. Al
analizar a las organizaciones participantes, cuatro son las que destacan: INIFAP
que ostenta el mayor número de proyectos, en segundo lugar el Instituto
Tecnológico de Celaya, a continuación CINVESTAV –I y finalmente la Universidad
de Guanajuato. Los restantes proyectos los desarrollaron algunas empresas,
centros de investigación y algunas universidades (Anexo, gráfico 17). De esta
manera se constata que aunque hay participación de algunas empresas, los
proyectos FOMIX han sido dominados por organismos públicos y universidades.

Fondo Sectorial de Investigación en Materia Agrícola, Pecuaria, Acuacultura, Agro


Biotecnología y Recursos Fitogenéticos (SAGARPA-CONACYT-COFUPRO)81

El Fondo Sectorial de Investigación en Materia Agrícola, Pecuaria, Acuacultura,


Agro Biotecnología y Recursos Fitogenéticos fue puesto en marcha en el año 2002
y existe información disponible para su análisis hasta el año 2006.

De 2002 a 2004 se contabilizaron un total de 292 proyectos en dicho fondo. Estos


proyectos pertenecen a todos los estados de la República Mexicana. En 2002 se
aprobaron un total de 53 proyectos de los cuales sólo uno perteneció al estado de
Guanajuato (1.88%); en 2003 el total fue de 131 proyectos aprobados y de esos, 7
son de Guanajuato ( 5.34%) y para 2004 se aprobaron un total de 108 proyectos y
del estado sólo fueron 6 (5.5%) (Anexo, gráfico 18)

Cada convocatoria emitida cuenta con una serie de “demandas” que consisten en
temas específicos, ya sea como un sistema producto prioritario o una serie de
temas estratégicos transversales. Estas demandas se establecen en función de
los requerimientos científicos y tecnológicos establecidos por el sector. De
acuerdo a los informes presentados, la distribución de las demandas en el estado
presento la siguiente forma: 20% de los proyectos fueron en el área producto del
chile; otro 20% correspondió al área producto del frijol y 20% más al área de la
Biotecnología, cabe señalar que las convocatorias integraron a ésta última área a
partir del 2004.

81
Toda la información aquí presentada sobre los proyectos es parte de los resultados de las Convocatorias
Históricas y las Bases de Datos del Proyecto de Evaluación del Impacto de los Proyectos del Fondo 2010.

195
Con 15% los proyectos en el área del maíz, 10% en el área producto de la papa y
otro 10% en el área de bovinos – tanto cárnico como de leche - y finalmente un
5% de proyectos en el área producto del ajo (Anexo, gráfico 19)

Las instituciones participantes fueron 4 en total. La que presentó un mayor número


de proyectos es el Instituto Nacional de Investigaciones Forestales Agrícolas y
Pecuarias (INIFAP) con un total de 13 proyectos equivalente al 62% del total. El
Centro de Investigaciones y de Estudios Avanzados (CINVESTAV) conto con un
total de 4 proyectos que representan el 19% del total. En tercer lugar aparece el
Instituto Tecnológico de Celaya con 3 proyectos equivalentes al 14% del total y
finalmente la Universidad de Guanajuato con un proyecto que representa el 5%
del total. Como se puede observar el INIFAP es el más activo en este fondo y es la
única institución que desde la primera convocatoria ha participado activamente
(Anexo, gráfico 20)

La presencia de INIFAP y CINVESTAV no son sorprendentes, ya que como se


podrá recordar son dos de los principales centros de investigación en el país y en
el estado de Guanajuato en el área agrícola y de alimentos. Mientras que el IT de
Celaya y la Universidad de Guanajuato han estado llevando a cabo una serie de
investigaciones importantes en el área agrícola y de alimentos que los ha llevado a
posicionarse en un lugar importante.

Los datos presentados en este apartado muestran que el principal participante en


el Fondo SAGARPA-COFUPRO es el INIFAP; las investigaciones han sido
concentradas principalmente en el estudio del Chile, el Frijol y la Biotecnología,
aplicada a Chile principalmente. El número de proyectos del estado ha sido bajo
como parte del total de proyectos aceptados, probablemente existieron más
solicitudes de las aceptadas, pero es un dato que no conocemos. Sin embargo,
inferimos que la participación del estado en el fondo ha sido particularmente
conservadora, sobre todo si recordamos que tanto INIFAP como CINVESTAV son
dos de las principales instituciones científicas y tecnológicas en la investigación
agrícola y alimentaria, estas deberían ser líderes en el fondo.

Este instrumento debería ser aprovechado más ampliamente por los centros,
universidades o empresas del estado. Ya que precisamente destaca que no exista
ninguna empresa como participante, lo que una vez más nos habla de las pocas
capacidades tecnológicas a nivel empresarial del estado en este sector.

También es importante mencionar que es aún más preocupante que para el año
2006 no se haya aprobado ningún proyecto proveniente del estado.

196
Probablemente 2007, 2008 y 2009 mostraron una tendencia diferente, pero son
datos no disponibles hasta el día de hoy.

8.2.2 Sonora

Del total de 292 proyectos (2002-2006) del Fondo Sectorial SAGARPA-


CONACYT-COFUPRO, se aprobaron un total de 53 proyectos en el año 2002 de
los cuales el estado de Sonora no conto con ninguno; en 2003 el total fue de 131
proyectos aprobados y de esos, 1 perteneció al estado (0.7%); para 2004 se
aprobaron un total de 108 proyectos y del estado fueron 8 (7.4%). En 2005 se
conto con 9 y en 2006 con 5. El comportamiento ha sido errático, ya que no existe
una tendencia clara hacia una mayor o menor participación (Anexo, gráfico 21).

De acuerdo a los informes presentados, la distribución de las demandas en el


estado presento la siguiente forma: 18% de los proyectos fueron de ganadería,
que incluye proyectos desde producción hasta comercialización de distintos
animales como bovinos, porcinos, etc.; 14% correspondió al área acuícola
(nutrición y producción); 9% a control de plagas y enfermedades de diversos tipos,
9% para uva; 9 para nogal y 5% respectivamente para garbanzo, jitomate,
aguacate, mango, chile verde y finalmente 4% maíz, comercialización de
productos y especies endémicas respectivamente, Biotecnología. Cabe señalar
que las convocatorias integraron a ésta última área a partir del 2004.

Sin duda lo que destaca es que por lo menos en la investigación no existe un


producto que domine. Todos los proyectos se encuentran dispersos y muestran
poca continuidad (Anexo, gráfico 22).

Las instituciones participantes son 7 en total. La que presentó un mayor número


de proyectos es el CIAD con un total de 10 proyectos equivalente al 45.45%, le
sigue el Instituto Nacional de Investigaciones Forestales Agrícolas y Pecuarias
(INIFAP) con un total de 6 proyectos equivalente al 27.27% del total. La UNISON
contó con un total de 2 proyectos que representan el 9% del total. Todas las
demás organizaciones como lo son el Instituto de Acuacultura del Estado de
Sonora, el COLSON, el Centro de Investigaciones y desarrollo de ingeniería
avanzada y el Instituto Nacional de Pesca representan cada uno el 4.54% y solo
tienen un proyecto (Anexo, gráfico 23).

La presencia de CIAD e INIFAP no son sorprendentes, ya que forman parte de los


principales centros de investigación en el país tanto en el área agrícola como en
alimentos.

197
Fondos Mixtos Sonora

El Fondo Mixto del estado de Sonora hasta el 2007 emitió 9 convocatorias, de


estas se aprobaron 118 proyectos, de los cuales 59 se encuentran en desarrollo,
48 han finalizado y 11 fueron cancelados82 (anexo gráfico 24).

El 14% correspondiente al área de Biotecnología se compone de proyectos


referentes a la uva, al bacanora, camarón, hortalizas, rana-toro y larvicidas. Las
organizaciones participantes son el CIAD, que tiene el mayor número de proyectos
(aprobados y en desarrollo), el INIFAP, la UNISON, el Instituto de Acuacultura y
aparecen el Instituto Tecnológico de Sonora, el Fondo para proyectos productivos
del bacanora, una empresa llamada Casero S.R.L.

De manera que se constata la concentración de la investigación del sector en dos


instituciones principalmente, el CIAD e INIFAP, pero destaca que la UNISON la
cual cuenta con un centro muy importante de investigación en alimentos y
Biotecnología no aparezca frecuentemente y más bien sea marginal en este tipo
de fondos. Probablemente la dinámica de concurso interno por fondos de la propia
universidad los haga mantenerse dentro de una lógica distinta, que responde
sobre todo al desarrollo de investigación básica; sin embargo al ser una
universidad estatal que cuenta lo recursos limitados se podría pensar que su
actividad debería ser más frecuente en este tipo de fondos para adquirir recursos.

En la distribución de los proyectos registrados en los Fondos Mixtos CONACYT


(2007) notamos como a diferencia de otros estados, el mayor número de
proyectos se concentra tanto en la investigación científica como en el desarrollo
tecnológico, esto podría traducirse en el desarrollo de capacidades en la
investigación básica, así como la traducción de estas en innovaciones (anexo
gráfico 25).

8.2.3 Yucatán

Hasta el año 2007 el FOMIX del estado de Yucatán emitió 5 convocatorias de las
cuales se aprobaron 137 proyectos y de estos 77 se encontraban en desarrollo, 55
finalizados y 5 fueron cancelados.

La composición por proyectos vigentes (132) muestra que la mayoría son de


investigación científica y en menos medida para desarrollo tecnológico. Esto es

82
Datos con fecha de corte al 2010

198
interesante dado que en los otros estados había una mayor diversificación del tipo
de proyectos, sobre todo se localizaron proyectos en creación y fortalecimiento de
infraestructura y difusión científica y tecnológica. Aunque en general dominan los
proyectos de investigación científica, probablemente a nivel nacional el fondo tiene
una amplia participación de instituciones públicas, universidades y centros que
realizan mayormente proyectos con esta inclinación (anexo gráfico 26).

Al analizar las áreas de conocimiento de acuerdo a la clasificación CONACYT


notamos que de los 132 proyectos, 30 se localizan en el área de ingeniería en
industria siendo el primer lugar, seguidos de los proyectos en Biotecnología y
Agropecuarias (19) y de las áreas que interesan aquí se localiza en cuarto lugar la
Biología y la Química con 15 proyectos. Si se consideran los mismos proyectos
pero se utiliza la clasificación de PECYT, el mayor número de proyectos se
encuentra en el área denominada Ciencia y Tecnología para la atención de
necesidades sociales con 64 en total, mientras que el área de Biotecnología
concentra 26 de los proyectos (anexo gráfico 27).

El tipo de investigación dominante en los proyectos es aplicada, esto es


importante porque si bien dominan los de proyectos de carácter científico hay
correspondencia con el área de ingeniería industrial y lo que ellos consideran
como soluciones aplicadas. En segundo lugar los de desarrollo tecnológico y
finalmente los de básica.

Fondo Sectorial de Investigación en Materia Agrícola, Pecuaria, Acuacultura, Agro


Biotecnología y Recursos Fitogenéticos (SAGARPA-CONACYT-COFUPRO

En el periodo 2002-2006 el fondo otorgó 15 proyectos para el estado de Yucatán,


cabe destacar que en el primer año no hubo ningún proyecto asignado, en el
segundo se registraron 3, en 2004 obtuvieron el apoyo 5, en 2006 fueron 4
proyectos y en el último año no existe una tendencia clara de crecimiento, al
contrario después de haber obtenido el mayor número en 2003, hubo un descenso
constante perdiendo un proyecto por año.

Al analizar la composición de las organizaciones participantes, destacan dos:


CICY e INIFAP, cada una con 5 proyectos, lo que representa el 33% del total. En
segundo lugar la UADY con tres proyectos y finalmente CINVESTAV y UNAM con
un poryecto respectivamente (anexo gráfico 28).

Como se ha mencionado previamente, cada convocatoria establece demandas y


determina los sistemas productos prioritarios para el estado en cuestión. En el
199
periodo analizado, destacan los proyectos en el área de ganadería, algunos tienen
que ver con investigaciones para mejorar las condiciones de crianza de los cerdos,
la dieta de los bovinos, caracterización de los genotipos de los ovinos o control de
enferemedades de distintas especies ganaderas. De los dos proyectos sobre chile,
uno se concentra en el chile habanero para producir semillas mejoradas y otro es
para establecer oportunidades y perspectivas de negocio del sistema producto.
Los dos proyectos que se encontraron sobre cocotero refieren a estudios de su
producción y mejora genética. Finalmente destacan los proyectos sobre el plátano
ya que ambos se relacionan con la caracterización genética o con el control de
plagas (gráfico 29).

Conclusiones

Guanajuato se ha distinguido por ser uno de los estados más activos en cuanto a
la promoción de la investigación, el desarrollo y la innovación. La creación de un
Consejo estatal de ciencia y tecnología, el establecimiento de un programa
científico y tecnológico de largo plazo y la puesta en marcha de instrumentos
públicos para fomentar, desarrollar y consolidar dicho proceso ha sido de vital
importancia y da muestra del interés del gobierno estatal. Sin embargo, dichas
acciones no han tenido el impacto esperado y tampoco se han logrado los
eslabonamientos necesarios para considerar realmente la existencia de un
sistema sectorial de innovación, por lo menos en lo que corresponde a la
Biotecnología agroidustrial-alimentaria.

Como se mencionó ya, el sector agrícola alimentario en el estado de Guanajuato


ha sido de vital importancia en su economía; cultivos como el trigo, la fresa, el
brócoli, la cebada y la cebolla son algunos de los productos fundamentales del
sector, reportando el primer lugar en la producción a nivel nacional por parte del
estado. Aunque también destacan el chile, el nopal, el frijol, el esparrago y el maíz.
Sin embargo y a pesar de la tradición agrícola, en los últimos años se ha
registrado un decremento en la participación del PIB en el área de la agricultura,
silvicultura y pesca (INEGI, 2010). A pesar de esta tendencia, las características
agrícolas del estado jugaron a favor en el establecimiento de algunos de los
centros de investigación pública en el área de Biotecnología agrícola y alimentaria
en el estado, lo que en primer lugar estaría suponiendo que al establecerse en la
zona deberían ser un revitalizador del sector.

El estado de Guanajuato cuenta con características científicas relevantes. Dentro


del padrón del CONACYT registran 43 posgrados vigentes en distintas áreas;
1588 investigadores dentro del sistema nacional de investigadores (SNI) en el
área de Biotecnología y Ciencias Agropecuarias y aunque esto representa sólo el
200
4.15% del total nacional, en el estado se encuentran establecidos tres de los
centros de investigación en alimentos y agro Biotecnología más importantes del
país como lo son el CINVESTAV-Irapuato, el LANGEBIO y un campus de INIFAP.
Además de que esto se complementa con la infraestructura universitaria estatal
tanto de la Universidad de Guanajuato que cuenta con líneas de investigación en
el área alimentaria y agrícola, el Instituto Tecnológico de Celaya, el Instituto
Tecnológico Superior de Irapuato, etcétera. Estas instituciones además de proveer
de recursos humanos especializados, desarrollan investigación que puede ser
transferida potencialmente a diversos agentes, en especial empresas.

Dentro de los diversos programas que tiene CONACYT y que financia, el estado
de Guanajuato cuenta con 74 proyectos vigentes en el área de Biotecnología y
agropecuarias y 25 en biología y química. En comparación con otros estados, este
mantiene un número muy alto de proyectos en dichas áreas, lo que se traduce en
un gran cúmulo de investigación básica que puede ser utilizada y aprovechada en
el mismo estado.

Sin embargo y a pesar de este importante potencial desarrollado en el área


científica, no existen los mecanismos a través de los cuales esto pueda ser
transferido a otros agentes. Cabe mencionar que existe un vacío significativo de
agentes que funcionen de interfaz y traductores de necesidades dentro de los
mismos centros o universidades.

Si bien existen diversas investigaciones que pudiesen ser complementadas y/o


transferidas a ciertos grupos de productores o empresas, no se cuenta con una
organización que permita esto. En general, los centros de investigación como
CINVESTAV e INIFAP no cuentan con una oficina o un encargado propio de la
unidad que les permita monitorear el ambiente y enlazarse con diversos agentes.
Este tipo de actividades las llevan a cabo las oficinas centrales, las cuales se
encuentran un tanto desligadas de la problemática estatal o bien los propios
investigadores, lo cual a mediano plazo genera problemas ya que no están
capacitados en cuanto a la administración o gestión de un proyecto de vinculación.

Existen capacidades científicas en la Biotecnología Agroindustrial - Alimentaria


que no están siendo usadas por desconocimiento más que por su inexistencia. Lo
que a su vez demuestra que son necesarios los agentes intermedios y por
supuesto las oficinas de vinculación que se conviertan en promotoras de la
transferencia. Hay procesos de institucionalización asociados a la gestión de
proyectos, donde las organizaciones intermediarias son actores importantes. La
ausencia de este tipo de organizaciones vinculadoras pone en evidencia la
ausencia de agentes capaces de estructurar relaciones a través de conocimientos,
201
procesos y reglamentos que disminuyan la incertidumbre, tanto de la oferta como
de la demanda. Si bien en algún sentido las redes de innovación tecnológica
implementadas por el estado de Guanajuato han buscado establecerse como
estos agentes, aún no es claro que puedan funcionar para esto específicamente,
ya que en la mayoría de los casos aún es incierto el camino que seguirán y su
funcionamiento esta a expensas de conseguir financiamiento futuro.

De manera similar a lo que sucede en el estado de Guanajuato, en Sonora existe


un amplio potencial de crecimiento y consolidación de líneas de investigación
referentes a la agroindustria y a la industria de los alimentos. Las capacidades
científicas desarrolladas son también de alto nivel y cuantitativamente
significativas. Tienen uno de los centros de investigación en alimentos más
importantes del país (CIAD), además concentran a un número importante de
investigadores capaces tanto de desarrollar recursos humanos como de explotar
los conocimientos hasta ahora desarrollados. Existen investigaciones de primera
importancia en recursos pecuarios y ganaderos que son susceptibles de ser
llevados al mercado. Sin embargo, la dinámica de los centros de investigación
universitarios, en torno a la vinculación ha sido una barrera a la transferencia de
las investigaciones con empresas mexicanas, ya que si bien destaca la existencia
de una importante dinámica de vinculación tanto con las Universidades del sur de
Estados Unidos, en particular Arizona como con empresas de la misma zona,
anivel nacional existe una desconexión significativa. Además de mantener
relaciones con organizaciones productivas que no están constituidas como
empresas, pero que en algunos casos comercializan sus productos.

En general se distingue este tipo de patrón, un importante cúmulo de


vinculaciones con otros países, sobre todo Estados Unidos. Esto responde a
varios factores, por un lado la cercanía con el país del norte y la relativa falta de
comunicación con el resto de México. Y en segundo lugar, la falta de
demandantes. Con respecto a este punto, se constató en el trabajo de campo que
existe la disposición de realizar investigaciones conjuntas con empresas por parte
de la mayoría de los investigadores. Sin embargo existen problemas de empatar
oferta y demanda; en algunos casos no existe ni en el Estado ni en el país la
demanda de los conocimientos que se desarrollan y en otros, existen dificultades
como las ya mencionadas acerca de la comunicación, la burocracia y la
incertidumbre en torno a los derechos de propiedad.

Las capacidades tecnológicas también muestran mucha dispersión. Se


encontraron tres tipos de organizaciones empresariales, las primeras son las
grandes empresas de alimentos como Sabritas y algunas cerveceras, las cuales
recurren poco a los centros de investigación, ya que las primeras cuentan con su
202
propio centro y las segundas trabajan directamente con los grupos de INIFAP de
Biotecnología en cebada. El segundo grupo compuesto por empresas pequeñas y
micro que muchas veces sólo tienen necesidad de innovaciones incrementales o
en lo que se ha denominado como “externas” que se relacionan con el embalaje,
la refrigeración, o la preservación. Y las terceras que son asociaciones de
productores con problemas muy específicos que resuelven con cierto tipo de
capacitación o transferencia básica de tecnología.

Probablemente el sistema producto con mayor potencial hasta ahora explotado es


el relacionado con la ganadería y con los productos ganaderos; cabe recordar que
el Estado tiene una importante producción de cárnicos de exportación, que junto
con la uva de mesa y algunos cítricos son los productos clave del estado. Aunque
destaca el caso de la empresa Bioderpac la cual aprovecha los desechos
agroindustriales del camarón para la fabricación de distintos tipos de bio-
fertilizantes, mejoradores de suelo y nutrientes para la producción agrícola.

Por eso es necesario mirar aquellos productos con alta potencialidad como lo es el
camarón y las hortalizas, ya que se desarrolla investigación suficiente para ser
aplicada y concretada en innovaciones. Empero como se menciono anteriormente,
existe poca demanda por parte de los empresarios de la zona y apostar a nuevas
líneas de investigación como la acuacultura sigue siendo riesgoso, sobre todo
porque no tienen seguridad de sus inversiones.

Por ejemplo, existen cultivos como la calabaza, en el cual el estado es primer


productor a nivel nacional, sin embargo no existe ninguna línea de investigación ni
proyecto relacionada con el tema. A diferencia de la uva que si cuenta con algunos
proyectos tecnológicos. Pero es necesario enfocar los esfuerzos de desarrollo de
capacidades científicas hacia el perfil productivo previamente construido.

Existe investigación que a pesar del alto nivel científico, no tiene un impacto
directo y notorio en la zona ni en la región. Hay esfuerzos aislados de articulación,
pero no son lo suficientemente efectivos como para crear una dinámica virtuosa.
Tampoco existe el incentivo para las empresas o productores y muchos de ellos
optan por mantenerse con niveles bajos de productividad y a niveles de
subsistencia.

La Biotecnología agrícola alimentaria en Sonora muestra grandes avances y


capacidades reconocidas a nivel mundial, sin embargo no han existido los
mecanismos adecuados para convertirla en un catalizador del crecimiento
tecnológico e innovador del Estado.

203
Yucatán no muestra un panorama muy diferente a Guanajuato y Sonora ya que
cuenta con un cúmulo importante de investigación científica en áreas de
Biotecnología de alimentos, mejoramiento genético de plantas y semillas pero la
gran mayoría estan desvinculadas de las empresas, este tema será visto en el
siguiente capítulo pero destaca que aunque existen capacidades científicas y en
algún sentido tecnológicas, éstas no cuentan con la demanda necesaria para
convertirse en innovaciones. Esto puede deberse al tipo de producción en la zona,
ya sea que no haya empresas demandantes o que sean productores que
requieren de pequeñas mejoras o que la agricultura sea de subsistencia.

El sector biotecnológico agroindustrial-alimentario cuenta con un elevado


desarrollo de capacidades científicas; éstas se encuentran subutilizadas debido a
que no existen los mecanismos adecuados de información y transmisión de lo
desarrollado. La cultura científica aún esta permeada por la idea de la
investigación básica, desconectada del contexto económico productivo de los
estados. Además de que existe desconocimiento de la investigación que se realiza
tanto en centros como en universidades, susceptible de tener aplicaciones
tecnológicas.

Más allá de mostrar el panorama científico y tecnológico de cada estado, nos


interesa explicar cómo es que éstas capacidades se han visto influenciadas por el
marco institucional planteado en los capítulos previos. Durante el trabajo de
campo, indagamos con algunas preguntas realizadas en las entrevistas para
conocer el grado de información de los agentes sobre las regulaciones nacionales
mexicanas en el tema; encontramos tres tipos de respuestas: las de aquellos que
decían desconocer las leyes y reglamentos y por lo tanto no tenía influencia en
cómo planteaban sus investigaciones o estudios, los que las conocen pero
consideran que no son decisivas para diseñar líneas de investigación y los que las
conocen y han cambiado sus intereses de investigación al sentir mayor libertad de
acción en aquellas áreas que no estan reguladas o en constante escrutinio social,
por ejemplo investigadores que abandonaron al maíz como línea principal por la
presión social y la regulación de la que son objeto.

El tema de las políticas públicas como generadoras de incentivos para las


capacidades científicas y tecnológicas muestra diversos resultados y avances. Por
un lado, como se observó los programas de fomento para los recursos humanos
de alto nivel han funcionado muy bien, el número de graduados en ciencias
relacionadas con la Biotecnología ha ido en aumento, así como el número de
investigadores. Los incentivos a través de las becas para estudiantes de
posgrado, han funcionado como un aliciente para que se especialicen, si bien no
hay preferencia a la hora de otorgar becas a los estudiantes, éstos se ven
204
motivados si el posgrado al que desean entrar se encuentra dentro del padrón de
excelencia CONACYT83. El SNI ha jugado un papel relevante como un incentivo
para aumentar la productividad de los investigadores a través de la publicación en
revistas de excelencia y en la mayoría de los casos ha aumentado la capacidad
científica básica, a pesar de que en la actualidad también hay un proceso de
realineación de los incentivos, para promover el desarrollo tecnológico, aplicado,
evaluado a través de patentes, prototipos u otros mecanismos, aún no tenemos
evidencia suficiente para determinar si el SNI será una herramienta relevante para
el dearrollo tecnológico. Lo que si sabemos por ahora es que aún faltan incentivos
para promover las vinculaciones, más allá de las que existen entre académicos o
grupos de investigación. Sino entre empresas o productores e investigadores.

Los incentivos a traves de los cuales se busca fomentar el desarrollo de


capacidades tecnológicos ha tenido un impacto diferenciado, si bien los FOMIX
son un instrumento que comparte financiamiento federal y estatal, éste no ha
tenido el impacto esperado con las empresas ya que mayormente ha sido utilizado
por instituciones educativas o centros de investigación. Esto no es necesariamente
malo, pero distorsiona parte de su objetivo de creación. Por otro lado, el Fondo
Sectorial SAGARPA-COFUPRO-CONACYT es también un instrumento muy
importante, pero que también se encuentra dominado por IES o centros de
investigación, el impacto en empresas es moderado. Esto no es problema de los
Fondos, ya que ellos deciden entre los aplicantes, pero probablemente sería
necesario repensar las poblaciones objetivo, suponiendo que se puedan enfocar a
ser mecanismos de incentivos para el desarrollo tecnológico. O bien, buscar la
manera de que los resultados aquí obtenidos, puedan ser transferidos a usuarios
con capacidad de convertirlos en innovaciones.

A partir de la revisión de los dos anteriores fondos, considerarmos que adolecen


de una parte fundamental que tiene que ver con la evaluación de los resultados.
Es necesario un proceso constante de revisión tanto del funcionamiento del
instrumento, así como del impacto que han tenido a distintos niveles. Esto ayudará
a conocer la efectividad de los mismos, además de que podrían plantearse
respuestas rápidas y cambios que ayuden a responder a los objetivos planteados
por ellos mismos.

Como conclusión preliminar de la importancia que han jugado los instrumentos


hasta ahora utilizados para fomentar el desarrollo científico y tecnológico, a
traves de una serie de incentivos, consideramos que su desempeño es
83
Actualmente ya se tienen criterios de elegibilidad para los posgrados inscritos en el padrón, primero existe
un proceso de cuotas por área y por estado y luego se seleccionan. Pero ya existen criterios de preferencia por
áreas con potencial de desarrollo tecnológico.

205
diferenciado. Los mecanismos para el fomento de capacidades científicas ha
funcionado lo suficientemente bien, como para cumplir sus objetivos primordiales,
aumentar el número de recursos y ser altamente especializados. Pero los
instrumentos para el desarrollo de capacidades tecnológicas, aún no explotan el
potencial, debido a que no han logrado conectividad entre empresas, IES y
centros de investigación. Aún no se encuentra la manera de generar
comportamientos que impliquen la coevolución de comportamientos
empresariales, gubernamentales y de la ciencia en general, lo que vemos es que
muchas empresas siguen en un esquema de baja integración con las capacidades
científicas, en ocasiones por el desconocimiento y en otros por la falta de
capacidades de absorción y a las instituciones que cuentan con capacidades
científicas las vemos desconectas del proceso productivo, con un nivel bajo de
vinculaciones y complementariedades. Hay un proceso de desconexión y baja
integración del sistema, lo cual se traduce en barrera más que en incentivos.

También es necesario mencionar que debido a la poca diversidad de las fuentes


de financiamiento para el desarrollo de estas capacidades, se ha generado
dependencia con respecto a las fuentes dominantes. Si existiesen diversas formas
de financiamiento podría diversificarse el abanico de oportunidades, así como
promover mayores complementariedades. Esta concentración es parte de las
debilidades del arreglo institucional predominante en el sistema, sus cuellos de
botella y las disfuncionalidades que muestra.

206
Capítulo 9
Capacidades de Innovación

Introducción

Este capítulo complementa el capítulo previo, dado que también se retoma la


taxonomía propuesta en el capítulo 3 para analizar el desarrollo de capacidades
de absorción y de innovación, como resultado de los incentivos implementados por
las instituciones antes analizadas.

En el capítulo se trata de evaluar a través del trabajo de campo el tema de las


capacidades de innovación, cabe recalcar que como se mencionó previamente en
la metodología y ante la falta de empresas del sector biotecnológico agroindustrial-
alimentario en los estados mencionados, fue necesario recurrir a las empresas
que han sido beneficiadas en el Fondo de Economía- CONACYT, a pesar de que
esto representa un desfase con los otros dos apartados del capítulo previo, se
consideró que era necesario conocer la dinámica empresarial por medio de estas
empresas. Para así poder tener un acercamiento a nivel sector y saber dónde se
localizan las competencias centrales de innovación y hacia donde se están
integrando los esfuerzos. Además de que este tipo de empresas ayudaba a
comprender bien como es que responden ante los incentivos planteados mediante
las herramientas de política pública.

9.1 Las Empresas y los Productos del Sector Agroindustrial – Alimentario

De acuerdo a la caracterización que se hizo en el capítulo 5 sobre las empresas


consideradas en esta investigación, localizamos durante el trabajo de campo a
cuatro grupos. El primero de ellos se compone por las harineras de trigo, arroz,
fabricantes de masas, harinas y las de procesamiento de caña de azúcar. Estas
empresas no son en términos estrictos empresa de Biotecnología, pero sí son
demandantes de productos biológicos y bioquímicos altamente tecnificados lo que
puede representar un potencializador de la fabricación de productos o procesos
biotecnológicos (Trejo, 2010).

Las empresas que desarrollan Biotecnología de propagación vegetativa de plantas


o micropropagación que resulta en la producción de plántulas asociadas a la caña
de azúcar o agave, a plantas de ornato o a especies frutales como el café, plátano
o mango son un segundo grupo que ha tenido importantes avances sobre todo en

207
la generación de plántulas resistentes a ciertos patógenos fungales (Trejo, 2010).
Aquí se localizan empresas como:

9. 1 Empresas de Biotecnología de propagación y/o micropropagación vegetativa de


plantas
Empresa Proceso o producto
Biogenética Mexicana Plántulas para uso agrícola
Invernamex Plántulas para uso agrícola
Agromod Plántulas para uso agrícola
Vitro-Motz Caña de azúcar
Grupo Joel Semillas de papa
Invernaderos Evergreen de Chihuahua Plantas de ornato
Tequila Herradura Plántulas clonales de variedades seleccionadas de agave
Tequila Sauza Plántulas clonales de variedades seleccionadas de agave
Fuente: Elaboración propia basada en Trejo (2010), SE (2010) y datos propios

El siguiente grupo se basa en la producción de insumos biológicos o bioquímicos


de aplicación en la producción agrícola en el tratamiento post cosecha. Se
desarrollan inoculantes microbianos, insecticidas, nematicidas, fungicidas,
bactericidas, humus, concentrados de suelos, fertilizantes de plantas.

9.2 Empresas de Biotecnología basadas en la producción de insumos biológicos o


bioquímicos
Empresa Proceso o producto
Dinagra Inoculantes microbianos
Quimia Inoculantes microbianos
Biotecno Inoculantes microbianos
Quimcasa Inoculantes microbianos
Agrícola Genética Inoculantes microbianos
Agrobionsa Inoculantes microbianos
Consep Feromonas para el control biológico de insectos
Koppert de México Producción de invertebrados como agentes de control biológico
Agraquest Inoculantes de control biológico de hongos patógenos en frutales
Laboratorios Agroenzymas Fitohormonas y fitorreguladores
Novartis Insumos agrícolas y semillas
Monsanto Insumos agrícolas y semillas
Dow-Agro Insumos agrícolas y semillas
Dupont Insumos agrícolas y semillas
Plan Health Care Insumos agrícolas y semillas
Fuente: Elaboración propia basada en Trejo (2010), SE (2010) y datos propios

Además de las empresas mencionadas, hay importantes avances en el sector


azucarero, sobre todo en el desarrollo de innovaciones en la producción de la
caña y en el proceso de obtención del azúcar. Ejemplo de esto es Ingenio La
Gloria, ubicado en Veracruz el cual a través de importantes convenios de
colaboración con el CIBA-T o la UACh ha logrado importantes avances en la
generación de bioetanol derivado de los desechos de la caña de azúcar.

208
Otras empresas como Ingenio Motzorongo S.A.de C.V. y el grupo Machado,
además de PRODUTERRA son ejemplo de avances biotecnológicos industriales
basados en microorganismso fermentativos.

También existen importantes empresas en el sector pecuario dedicadas a la


producción de fármacos para uso veterinario como Bio Zoo, IASA y PRONABIVE.

Mientras que en el sector de los alimentos existen empresas grandes que en sus
procesos o productos utilizan materias primas, ingredientes naturales, cultivos
microbianos, enzimas, extractos y sabores derivados de la Biotecnología como
Bimbo, Sabormex, Jumex, La Costeña, Lala, Yakult, Danone, Nestlé, Mead and
Johnson, Anderson Clayton, Procter & Gamble o Sigma Almientos (Trejo, 2010).
Destacan empresas nacionales como Nekutli y Metco las cuales producen y
formulan prebióticos y fibras solubles con aplicaciones en alimentos y bebidas de
alto valor comercial. Ésta última ha logrado tres patentes en el área de
formulaciones avanzadas de nutrición y ambas mantienen importantes relaciones
de vinculación con IES mexicanas.

Existen también empresas que se dedican a la extracción y purificación de


biopolímeros con aplicaciones como aditivos alimentarios e industriales como
Coyo Foods Biopolymer and Biotechnology o Prodemex que produce oleorresinas,
extractos y concentrados de chile para la industria de los alimentos. Además de
empresas como Laboratorios Mixim que se dedica a los extractos vegetales,
Deiman en la producción de saborizantes, aromas y colorantes.

En el sector de producción de enzimas se encuentra Altech y Enmex, Danisco en


la producción de pectinasa y Gernasa en probioticos, además de algunas
empresas del área de procesamiento de frutas como Citrofrut y Citres.

Según los datos más recientes de la Secretaría de Economía basados en el Trejo


(2010) existen en México 36 empresas de alimentos y 66 de agroBiotecnología.
Según nuestra aproximación basada en el trabajo de campo, de esas 102
empresas, 30 desarrollan Biotecnología relevante para el sector.

9.2 Capacidades de Absorción e Innovación en Guanajuato, Sonora y


Yucatán

De acuerdo con Trejo (2010) en México la mayoría de empresas relacionadas con


la Biotecnología utilizan procesos de fermentación tradicionales, sus productos
son de alto volumen de producción y bajo valor agregado.
209
Del total de empresas biotecnológicas (sin distinción si son usuarias o
desarrolladoras) hay alrededor de 102 empresas en el área de agroindustria y
alimentos; de éstas se localizaron aproximadamente 10 en los estados de
Guanajuato, Sonora y Yucatán. Lo anterior no quiere decir que no existan
demandantes de Biotecnología en estos estados, sino que la estructura de la
producción es diferente, ya que están dominados por pequeños grupos de
productores que no aparecen como organizaciones empresariales o bien hay
empresas que no están registradas. De estas 10 empresas, el grueso se localiza
en Guanajuato y Sonora esto es indicativo de las dinámicas propias de cada
estado y corresponde también con la estructura de la producción agrícola y
alimentaria en el país. Recordemos que el norte y el centro han sido estructuras
más tecnificadas, lo que ha dado lugar a diversos tipos de empresas, mientras que
el sur mantiene una estructura de pequeños productores menos tecnificados y en
algunos casos dispersos. Lo anterior marca diferencias sustanciales entre los tres
estados ya que tanto la estructura interna como la dinámica del mercado a nivel
federal influyen en la constitución productiva y por supuesto en su relación con la
tecnología en general y en particular con la Biotecnología.

Al analizar la estructura productiva en estos estados identificamos que la falta de


empresas biotecnológicas en el sector agroindustrial-alimentario obedece a
razones históricas y económicas de largo alcance.

Resultado de la reforma agraria de la etapa cardenista, se estableció en el campo


una estructura de la producción que permitió la sobrevivencia del campesinado y
de las principales comunidades indígenas, ya que fueron reconocidos sus
derechos sobre la tierra (Fujigaki, 2004). A su vez, la reforma también protegió a
las pequeñas, medianas y grandes propiedades privadas, las cuales han logrado
mejorar sus niveles de productividad y eficiencia. Esta estructura productiva dual
se ha profundizado y polarizado a lo largo del tiempo y es una de las bases de la
crisis en la que sea visto inmerso el sector por décadas.

El tipo de estructura productiva que se ha mantenido en el país, donde coexisten


formas capitalistas de producción y formas campesinas lo que ha creado
polaridades entre aquellos que producen para el mercado y los de subsistencia.
Las reformas al artículo 27 constitucional intentaron una readecuación de las
relaciones para que el minifundio y la parcela ejidal se articularan eficazmente con
las medianas y grandes propiedades privadas, así como con el capital nacional y
extranjero con el fin de lograr la reactivación de la producción agrícola, sin
embargo por las propias características duales de la propiedad y ante la falta de
mecanismos que ayudaran a mejorar la competitividad de los pequeños
210
productores, se profundizaron las desigualdades tanto a nivel interno como
externo.

En la actualidad el sector muestra una fuerte dependencia a la importación de


granos, oleaginosas y productos cárnicos, maíz, frijol, arroz y trigo; esta diferencia
es resultado de la diferencia de costos y precios entre los productores
estadounidenses y los mexicanos (Castaño, Solleiro y Del Valle, 2003). La
desgravación de los insumos agrícolas, sumada a la mayor productividad y los
subsidios a la agricultura estadounidense, han hecho que las empresas
productoras de alimentos procesados en México prefieran importar tales insumos
ya que les resultan más baratos (Villavicencio, 2011).

El papel de la estructura de la propiedad, las formas tradicionales de explotación


del suelo, la falta de capital para las inversiones en mejoras técnicas y
tecnológicas y la estructura del mercado dominada por las importaciones baratas
ha determinado la ausencia de empresas dispuestas a invertir en tecnología para
generar productos de alto valor agregado. Todos los elementos anteriores forman
también parte del marco institucional, pero son condiciones adversas que forman
barreras estructurales para el desarrollo del sector biotecnológico agroindustrial –
alimentario en el país y consecuentemente en los estados analizados.

La estructura productiva de cada uno de los estados es diferente y también


depende del tipo de producto. Para el caso agrícola, los cultivos principales en el
estado de Guanajuato son: trigo grano suave, fresa, brócoli, cebada grano,
cebolla, chile, frijol, maíz. La mayoría son producidos por productores individuales
o grupos de productores que generalmente no demandan más que pequeñas
mejoras tecnológicas. Cabe mencionar que en el estado de Guanajuato se
instauraron las llamadas redes de innovación para la fresa, el chile, la tuna y el
frijol; sin embargo al realizar el trabajo de campo se constató que sólo la red de
innovación sobre la fresa ha mostrado algún tipo de resultado. Esta red logro
establecerse una vez finalizado el financiamiento inicial, ya que agruparon a una
serie de empresarios de manera que se generara un mecanismo de
financiamiento propio a base de cuotas. Con esto contrataron a un gestor y
responsable de la red que se dedica a integrar a los pequeños productores para
que se actualicen y capaciten en diversos procesos, vale la pena mencionar que la
producción de fresa en Guanajuato se compone de dos grupos, el primero que son
los productores que cuentan con pocas hectáreas y que producen fresa fresca en
pequeñas proporciones y los medianos productores con más hectáreas, pero que
generalmente producen fresa para el procesamiento o fresa congelada. Este tipo
de fresa no necesita ser de buena calidad o gran tamaño, ya que al ser
industrializada esto no es relevante. Ambos requieren mejoras tecnológicas, los de
211
fresa fresca necesitan mejora la calidad y cantidad de lo que se produce, mientras
que los de fresa congelada necesitan mejorar sus sistemas de conservación.

El gestor de la red además, tiene que establecer vínculos colaborativos con las
instituciones de investigación (universidades y centros) para solucionar diversos
tipos de problemas. Un interés fundamental de la red es lograr que los centros de
investigación les doten de un paquete tecnológico para la producción de fresa
fresca, dicho paquete incluye a ambos tipos de productores (individuales y
PYMES) dado que existe la intención de moverse de la producción de fresa
congelada a la fresca debido al margen de ganancia entre una y otra.

El interés que han puesto sobre todo las PYMES de la fresa en el funcionamiento
de la red la han mantenido a flote. A diferencia de lo que sucedió con la red del
frijol y la tuna, que no han logrado establecer mecanismos propios de
autofinanciamiento y un programa de gestión de la tecnología y mucho menos
para establecer vínculos con las IES o CPI para el desarrollo de innovaciones.

El programa de REDES implementado como estrategia local del gobierno del


estado de Guanajuato ha significado un incentivo poco explotado, ya que si bien
logró establecer tres redes relacionadas con la agricultura y la alimentación, sólo
una de ellas ha mostrado un desempeño favorable. Como incentivo ha tenido
problemas para establecerse dado que se contradice con otros incentivos, por
ejemplo, a pesar de que trata de fomentar la vinculación entre las capacidades
científicas y las tecnológicas para desarrollar innovaciones, éstas se contraponen
con los incentivos del SNI ya que este premia la labor individual y no el trabajo
colaborativo84. Existe un desfase entre los incentivos planteados por la estrategia
local y por los federales a nivel de ciencia y tecnología, lo que en este caso
específico podría considerarse como una barrera.

Sonora es otro estado con una estructura diferenciada por el tipo de producto,
existen pequeños productores individuales, pero también PYMES y grandes
empresas dedicadas sobre todo a la exportación. En el grupo de productores se
encuentran productos como el trigo, la papa, sandía, sorgo, garbanzo. Las
grandes empresas sobre todo se dedican a la producción de cítricos, vid y
algodón. Mientras que en las PYMES es variado ya que existen empresas en
algodón, maíz y algunos cítricos. Durante el trabajo de campo se constató que los
pequeños productores requieren mejoras tecnológicas pero generalmente cubren
estas demandas sólo con servicios o capacitación, mientras que las grandes

84
Jaso (2005) concluye el esquema del Sistema Nacional de Investigadores constituye un desincentivo para
el trabajo colaborativo y la investigación aplicada.

212
empresas que son las que demandan Biotecnología lo cubren con universidades
extranjeras, sobre todo de Estados Unidos gracias a su cercanía geográfica con
ese país y algunas otras con sus propios laboratorios. De manera que establecen
pocas relaciones con las capacidades científicas de la región y del país en
general.

El estado de Sonora muestra una contradicción muy particular que puede verse en
otros estados y en la agricultura en general; a partir de la entrada de México al
TLCAN se comenzó con un proceso de liberalización y apertura, pero al mismo
tiempo se reforzaron esquemas de subsidios para los productores, esto condujo a
la generación de dos tipos de productores, los que mantuvieron los viejos
esquemas basados en los apoyos estatales, poco preocupados por mejorara su
productividad y casi siempre con producción de subsistencia y aquellos que se
abrieron al mercado participando en un esquema más competitivo que los obligo a
desarrollar una cultura empresarial.

El segundo tipo de productores ha generado mecanismos para poder producir con


mayor eficiencia y además para comercializar sus productos, de manera que han
instaurado una serie de organizaciones en forma de brokers bajo la idea de
producir para el mercado y no para ganar beneficios estatales. Esto ha significado
que se pongan de acuerdo anticipadamente con los compradores para determinar
las especificaciones de cantidad y calidad.

Ambas dinámicas han acentuado las diferencias entre aquellos productores que
se dedican a la exportación y aquellos que siguen con un esquema antiguo.
Además de que existen serios problemas en torno a la atomización de la
propiedad lo que impide las economías a escala.

En el estado de Yucatán se cultivan henequén, naranja, berenjenas, calabazas,


chayote, camote, chile habanero, chile verde, frijol, hortalizas, lechuga, maíz,
melón, pepino, sandía, tomate. La gran mayoría de los anteriores dependen de
pequeños productores, gran parte de la producción es de autoconsumo y a
excepción de productos como el chile habanero o el henequén que cuenta con
algunas PYMES, los demás productos son dominados por pequeños productores
que demandan servicios tecnológicos o mejoras técnicas que poco fomentan el
desarrollo de innovaciones. Esto ha generado que a pesar de la existencia de
investigación y capacidades científicas en algunos de los productos, no exista
vinculación entre unos y otros. Además de que la demanda de Biotecnología es
prácticamente nula. En alguna de las entrevistas, un investigador expresó lo
siguiente:

213
“Dado que los productores son de subsistencia y viven de los apoyos que les
otorga el gobierno federal, muchas veces a pesar del esfuerzo por transferirles
tecnología, esto no tiene ningún tipo de resultado, les hemos dado técnicas de
diversificación de los cultivos, además de insumos que pueden mejorar su
productividad, pero al poco tiempo es abandonado debido a la incapacidad de
adaptarse a nuevos esquemas productivos, o simplemente porque no quieren
cambiar los estímulos que reciben”85.

La estructura de la producción y el tipo de productores se ha convertido en una


barrera para el desarrollo de capacidades de innovación. En primer lugar, porque
los productores individuales demandan pocas soluciones tecnológicas y en
segundo lugar porque las grandes empresas que demandan Biotecnología la
cubren con laboratorios en el extranjero.

Cabe mencionar que en los tres estados existen empresas dedicadas a la


generación de insumos y fertilizantes, pero estas son de menor categoría y no
cuentan con desarrollos importantes tecnológicamente hablando. En general o son
comercializadoras o prestadoras de algún tipo de servicio. Como se verá más
adelante, en México existen empresas destacadas en esta área, pero no sé
encuentran situadas en estas regiones.

En términos de la dinámica del sector en estas regiones, se puede decir que existe
una insuficiente demanda de las capacidades tecnológicas presentes en cada uno
de los estados. Probablemente en el estado de Guanajuato es el único donde
existen mayores redes y por lo tanto un proceso más estructurado de generación
de capacidades tecnológicas y en menor medida de innovación. Pero en Sonora y
en Yucatán la dinámica es aún disconexa, por el tipo de productores y por el tipo
de demandas de los que existen. Aunque cabe mencionar que también existen
problemas fuertes de comunicación (como se explico previamente) para poder
establecer agendas conjuntas entre los agentes productivos y los investigadores.

Debido a las pocas empresas localizadas en los estados analizados y en general


en el sector, fue necesario recurrir a los proyectos apoyados por el fondo de
innovación de la SE-CONACYT. Esto no quiere decir que sean las únicas
empresas, ni las únicas áreas donde se desarrollan capacidades de innovación,
sino que son una muestra para complementar el panorama hasta ahora descrito.
Además debe aclararse que las empresas y proyectos que se analizan son los
aprobados por el fondo, pero existen otros tantos que no fueron aprobados y que
no se analizan aquí, sobre todo por la falta de información y las limitaciones para

85
Entrevista con el Dr. Hugo Delfín Universidad Autónoma del Estado de Yucatán

214
poder entrevistarles o revisar sus fichas técnicas de propuesta86. Esto significa que
existen más agentes involucrados en la Biotecnología Agroindustrial -Alimentaria,
pero como la finalidad de esta investigación es caracterizar como es que los
incentivos existentes generan capacidades de innovación es que se ha optado por
este tipo de análisis primordialmente, pero también se ha valorado la necesidad de
mostrar por lo menos un par de casos que ilustren el aprendizaje de los agentes y
cómo el marco institucional provee o no de incentivos para ciertas excepciones. Es
por esto que al final del capítulo se presentan dos monografías que exponen el
caso de la empresa BIODERPAC en el estado de Sonora y el caso de IASA en el
estado de Puebla.

9.3 Capacidades de Innovación en el Sector Biotecnológico Agroindustrial-


Alimentario

El sector agrícola-alimentario tiene dos áreas fundamentales de crecimiento


tecnológico e innovador; como se mostró en los capítulos anteriores, existe una
gran área de desarrollo que tiene que ver con la aplicación de Biotecnología para
la mejora de diversos tipos de granos, semillas y alimentos básicos. Mientras que
la segunda área tiene que ver con el proceso de industrialización de las materias
primas en alimentos procesados, por lo tanto son importantes todos los avances
relacionados con la conservación y el embalaje.

Los capítulos pasados dan cuenta de las principales áreas de innovación a nivel
mundial, las cuales han sido definidas a través de una búsqueda en reportes
especializados y en la consulta con expertos en el tema. Es importante mencionar
que lo anterior se puede complementar con el análisis de patentes; sabemos que
existen algunas reticencias al usar este tipo de datos, sin embargo el valor de las
patentes puede variar de sector a sector, dada la propia naturaleza de cada uno
de ellos. En sectores maduros o bien en sectores emergentes pero de gran
velocidad innovadora, puede ser que no tenga tanta importancia adquirir un
derecho de propiedad como lo es una patente. Pero considerando las
características del sector aquí analizado, es pertinente revisar lo que sucede con
el patentamiento a nivel mundial y nacional.

Este apartado analiza los proyectos que han sido apoyados por el Fondo de
Economía-CONACYT, para poder determinar si se encuentran inmersos en una
dinámica innovadora importante a nivel nacional y mundial; por lo tanto reconocer

86
Pero esto puede traducirse en el futuro como una posible investigación donde se analicen los proyectos no
aprobados, dado que es relevante conocer porque no accedieron al recurso y el contenido de las
investigaciones tecnológicas que llevan a cabo. Además de indagar en sus fuentes alternativas de
financiamiento, si es que existen y cuáles son.

215
cuáles de ellos pueden ser exitosos como estrategias de largo plazo y verlos más
allá de un simple proyecto que traerá beneficio para la empresa en sí misma, sino
reconocer si es que tiene relevancia para la región en la que se localizan, en el
sector, en el país o bien si aportan algo a nivel mundial.

Se ubicaron 38 proyectos en lo que se ha denominado como sector agroindustrial-


alimentario, éstos han sido divididos de acuerdo a la Clasificación Internacional de
Patentes (CIP) y así se ha podido determinar a qué área pertenecen de acuerdo a
los datos presentados en la USPTO (EUA) e IMPI (México).

Las clasificaciones asignadas a cada uno de los proyectos se estableció


dependiendo de sus características, de esta manera se ha ubicado que, en las
primeras cinco categorías con mayor número de patentes en USPTO se localizan
13 proyectos que equivale al 34% del total. El resto se ubica en áreas de menor
dinamismo, aunque destaca que no se localizan en las más bajas, se mantienen
en la tabla media y hacia arriba. En lo que respecta al IMPI se ve una tendencia
similar dado que existen 10 proyectos en las clasificaciones de mayor
patentamiento (26% del total) y hay una concentración a mitad de tabla. En
términos generales esto muestra una serie de proyectos que se encuentran en
trayectorias exitosas a nivel internacional y nacional, sin embargo aún no son la
mayoría.

Es importante destacar que una vez que se han analizado los proyectos a
profundidad, notamos que existen proyectos de gran calidad en el área de
modificaciones genéticas y vacunas, las cuales son de las más avanzadas a nivel
mundial. Pero no son para salud humana, sino referentes a la veterinaria, esto
puede responder a dos cosas. Primero, los altos costos que implica desarrollar
este tipo de investigación en humanos, y en segundo lugar las capacidades
científicas y tecnológicas que se necesitan. Aunque no deja de ser interesante que
la existencia de investigación en estas áreas pueda significar en el mediano o
largo plazo, brincar hacia trayectorias de mayor plusvalía mundial (anexo cuadro
31)87.

A nivel mundial existe un volumen considerable de patentamiento de lo que se


denomina “procedimientos de modificación de los genotipos” y esto es coincidente
con lo que se explicó en los apartados anteriores, dado que existe un cúmulo de

87
El cuadro referido en el anexo muestra de manera desglosada el número de proyecto que se analiza, la
descripción del CIP al cual fue asignado, dependiendo de las características del mismo y a continuación una
serie de datos acerca del número de patentes registradas tanto en Estados Unidos como en México, asociada a
la participación de estas en la rama industrial, sin olvidar que esta es en referencia al indicador de patentes
únicamente

216
investigación muy importante que se realiza en torno a la modificación de plantas,
semillas y alimentos de origen vegetal en el mundo. Esto contrasta con lo que
sucede en México, dado que aquí no se puede patentar este tipo de
procedimientos, sino que se otorga un derecho de obtentor de variedades
vegetales; en esta área se encuentran dos proyectos.

La clasificación A01N también es una de las más prolíficas a nivel mundial e


incluye sub- clasificaciones como la producción de parasiticidas o herbicidas en
agricultura; bio- insecticidas en base a extractos vegetales y conservación de
cuerpos humanos animales o de plantas o a partir de ellos 88. Aquí se ubican tres
proyectos relevantes dado que en general esta área se encuentra dominada por
los grandes laboratorios químicos a nivel mundial, pero en México lo que hemos
notado es que existe un importante proceso de sustitución de importaciones a
través de la copia y mejoramiento de los productos. Esto es comprensible, dado
que la inversión que se requiere para desarrollar una molécula base de este tipo
de productos es inalcanzable para la mayoría de las empresas nacionales, de
manera que la estrategia más viable es mejorar y competir por mercados locales.

Si bien la mayoría de los proyectos no se localizan en áreas de gran


patentamiento, esto no significa que no tenga valor lo que se está desarrollando,
dado que la gran mayoría se relacionan con necesidades locales, regionales y
nacionales que tienen el claro propósito de sustituir importaciones, mejorar la
calidad de los productos existentes o bien competir en segmentos del mercado
que por su tamaño no son relevantes para las grandes empresas (anexo cuadro
32).

Para concluir el análisis de este sector y retomando las diversas clasificaciones


presentadas anteriormente, como la de las áreas de innovación en el sector y los
indicadores de patentes, se realiza un análisis proyecto por proyecto una vez que
se han revisado las fichas de cada uno, determinando el producto que se
comprometieron a entregar. La columna denominada “nivel de innovación” hace
referencia a una de las características más importantes del producto prometido,
dado que este puede tener injerencia a nivel global o local y/o puede ser parte sólo
del desarrollo de infraestructura o bien la compra de una licencia de uso.

88
La clasificación A01N se compone por: Conservación de cuerpos humanos, animales o de vegetales. En
tanto que sean desinfectantes pesticidas, herbicidas, biocidas,
productos que atraen o repelen a los animales perjudiciales, reguladores del crecimiento de los vegetales y las
plantas, conservación de productos alimenticios, cultivo de células o tejidos, conservación de la frescura de
las hojas entre otros.

217
De acuerdo a la clasificación presentada anteriormente denominada “principales
áreas de innovación en el sector agrícola-alimentario” se construyó la columna de
área tecnológica, esta nos ayuda a identificar al proyecto con alguna de las áreas
comúnmente consideradas como dinámicas de innovación, pero cabe destacar
que dicha columna fue complementada con la propia información de las fichas de
los proyectos, dado que había proyectos que no podían clasificarse dentro de las
áreas consideradas en la clasificación que se presento anteriormente

El área de impacto hace referencia a quienes va dirigido el proyecto, quienes


podrían ser los usuarios y beneficiados potenciales del desarrollo. Y finalmente el
grado de innovación en el cual se define si el proyecto es un desarrollo totalmente
nuevo en su área, lo que implicaría una innovación de producto generalmente. Si
se trata de un proceso de adaptación, puede representar que se utiliza un método
ya conocido para mejorar un producto, o el propio proceso con base a ciertas
particularidades. La categoría mejoramiento aplica cuando ya existe el producto y
sólo se hacen modificaciones incrementales.

9.3 Proyectos del sector agroindustrial-alimentario

Producto Nivel de Área Tecnológica Área de Impacto Grado de


Innovació Innovación
n
Agroquímico de base Local Biotecnología Productores de Mejora
natural papa
Proceso de Nacional Maquinaria y equipo Productores de Adaptación
refrigeración y berries
congelación de
berries
Sistema de Local Maquinaria y equipo Empresa que Adaptación
recuperación de agua desarrolla
Control de Plagas Local Biotecnología Productores de Mejora
papa
Películas para Nacional Equipo Invernaderos Adaptación
invernadero
Control de plagas Local Biotecnología Productores de Mejora
frutas, hortalizas y
flores
Centro de I+D Infraestruct ___________ Empresa que ________
ura desarrolla
Generación de Local Tecnologías Agroindustria Adaptación
Biogas (Biodigestor) Limpias
Producción de Global Biotecnología Sector Ganadero Desarrollo
embriones de bovino
in vitro
Planta piloto de Nacional Maquinaria y Productores de Mejora
secado por aspersión Equipo alimentos, bebidas,
(conservación de farmacéutica
alimentos)

218
Tratamiento de aguas Nacional Maquinaria y Sector pecuario y Adaptación
residuales Equipo zonas rurales
Centro de I+D Infraestruct ____________ Empresa que ________
ura desarrolla
Sistema de Local Maquinaria y Empresa que Adaptación
producción en Equipo desarrolla y
invernaderos (papa) productores de
papa
Centro de I+D Infraestruct ___________ Empresa que ________
ura desarrolla
Alimento especial Nacional Alimentos y Pacientes con Desarrollo
para pacientes con Biotecnología encefalopatía
encefalopatía hepática secundaria
hepática a cirrosis
Alimentos bajos en Nacional Alimentos y Población en Mejora
calorías Biotecnología general y empresa
Planta Piloto Local Infraestructura Empresa -------------
Análisis genético Global Plataforma de Sector ganadero Desarrollo
pecuario y Servicios
mejoramiento
genético bovino
Maquinaria Agrícola Global Maquinaria y Sector agrícola y Mejora
Equipo ganadero
Producto para control Global Biotecnología y Sector ganadero y Desarrollo
de la mastitis vacunas pecuario
Centro de I+D y Nacional Infraestructura y Productores Adaptación
fungicidas y Biotecnología Agrícola en general
fitonematicidas
Alimentos funcionales Local Alimentos Consumidores Mejora
del agave
Alimentos Nacional Alimentos y Consumidores Mejora
mínimamente Conservación
procesados
Bioinsecticida Nacional Biotecnología Agroindustria Desarrollo
Proyecto de I+D Infraestruct Ingeniería Maricultura Mejora y
ura Submarina Desarrollo
Centro de I+D Nacional Infraestructura Sector -----------
metalmecánico
Bolo rumial Global Biotecnología Sector ganadero y Desarrollo
parasiticida bovino
Sustratos Orgánicos Nacional Biotecnología Agricultura y Mejora
Horticultura
Molino juntador Local Maquinaria y equipo Agroindustria Mejora
Formula alimenticia Nacional Alimentos y Agroindustria Mejora
para gallinas Biotecnología
Biofertilizantes Global Biotecnología Agroindustria Desarrollo
Productos derivados Nacional Biotecnología Consumidores Mejora y
de la vainilla Desarrollo
Centro de Local Biotecnología Agroindustria Adaptación
Lumbricultura
Alimento funcional Nacional Biotecnología y Industria de Mejora
Alimentos Alimentos
Centro de I+D Nacional Infraestructura Industria de Mejora

219
Alimentos
Alimentos para Nacional Biotecnología y consumidores Mejora
mascotas Alimentos
Centro de I+D y Nacional Fertilizantes Agroindustria Mejora
fertilizantes
Centro de I+D y Nacional Infraestructura Sector ganadero y Desarrollo
desarrollo de Biotecnología bovino
embriones de bovinos
Elaboración Propia con información del Programa FIT

Los proyectos analizados en el sector agrícola-alimentario tienen una fuerte


incidencia en el nivel nacional, como se ha mencionado ya, muchos de ellos se
dirigen a sustituir importaciones de productos que realizan grandes laboratorios o
empresas agroindustriales (ver gráfico 9.4). Sin embargo, es importante destacar
que existe un proceso interesante en torno al desarrollo de biofertilizantes ya que
a nivel mundial esta tendencia está claramente marcada como un área importante
en contraparte del desarrollo de fertilizantes químicos.

9.4 Niveles de Innovación de los Proyectos del Sector Agroindustrial-Alimentario


(FIT)

18

10
Local
6
4 Nacional
Global
Infraestructura

Elaboración propia con datos del FIT, SE-CONACYT

Son pocos los proyectos que se localizan en el área de mejora y conservación de


alimentos y algunos proyectos referentes al desarrollo de formulas alimenticias
para grupos de consumidores muy localizados, como pueden ser los grupos de
enfermos.

Sobresale el hecho de la existencia de tres proyectos referentes a la papa en


distintos aspectos, de manera que se podría considerar que existen productores

220
de papa con problemas en torno a la producción de esta o bien que hay una
trayectoria tecnológica propia.

También existe una cantidad considerable de proyectos destinados a la


generación de infraestructura o creación de centros de I+D lo que muestra la
necesidad de dotar de los requerimientos básicos a ciertas empresas que
pretenden desarrollar proyectos tecnológicos propios.

En el siguiente gráfico podemos ver que la mayor parte de los proyectos se


concentran en el área de mejora de productos o procesos, esto es coincidente con
el hecho de que las innovaciones son sobre todo a nivel nacional. Esto da cuenta
del proceso en el que se encuentra el proceso innovador, ya que al ser mejoras
quiere decir que hay cierta capacidad de absorción y desarrollo contextual de
acuerdo a las necesidades internas y por lo tanto son proyectos que tienden a
sustituir productos extranjeros.

9.5 Grado de Innovación de los Proyectos del Sector Agroindustrial-Alimentario


(FIT)

15

8 8

Mejora Adaptación Desarrollo Mejora y S.C. *


Desarrollo

*S.C. Proyectos de creación de infraestructura, por lo que no tienen clasificación


Elaboración propia con datos del FIT, SE-CONACYT

Y finalmente, los proyectos con impacto global (ver gráfico 9.4) se encuentran
dentro del sector ganadero en lo que se refiere al mejoramiento genético en
bovinos. Destaca que son proyectos que desarrollan distintas técnicas y procesos,
pero la finalidad es mejorar la calidad de la producción ganadera del país.

Al analizar las capacidades de absorción, basados en parámetros sobre las


actividades de innovación y aprendizaje vemos que las empresas analizadas

221
tienen un nivel medio ya que demuestran capacidad de identificar lo más
avanzado dentro de sus respectivas áreas, pero no de asimilarlo completamente.
Basados en las entrevistas realizadas, concluimos que de las 38 empresas
participantes en el FIT, sólo 15 de ellas son las empresas que realizan acciones
de monitoreo y vigilancia, en general las grandes empresas son las que cuentan
por lo menos con una persona dedicada a esto89. Sin embargo, la gran mayoría no
tiene el personal necesario para llevar a cabo esto, sobre todo porque son
pequeñas empresas con capacidades organizacionales en ciernes o en proceso
de construcción. Destaca que las empresas con mayor capacidad de absorción
son aquellas que tienen una importante formación y experiencia por parte del
propietario y algunos mandos directivos, eso significa que los años de experiencia
y conocimiento se convierten en un punto crítico para los procesos productivos y
de innovación, lo anterior se traduce en un proceso de exploración y explotación
de muy diversas áreas.

También cabe destacar que aquellas empresas que lograron establecer vínculos
con otros agentes, tanto de la región como de su propio sector, ya sea
proveedores, clientes, competidores, universidades o centros de investigación,
también pudieron desarrollar importantes capacidades de absorción. En este
sector debido a su propia naturaleza, esto cobra mucha importancia ya que se
requiere constantemente del monitoreo de los nuevos conocimientos, de los
avances tecnológicos, de lo que se patenta y de lo que se comercializa.

Otro de los puntos relevantes en las capacidades de absorción es lo referente a la


tecnología incorporada en los equipos, y tal y como lo dice la teoría, a mayor
tecnología, mayores capacidades y es importante mencionar que en muchos
casos las empresas que se analizaron se encuentran en el proceso de
instauración y formación de equipos o laboratorios que los ayuden a entrar al
mercado de la Biotecnología, ya que muchos de ellos cuentan con equipos
obsoletos o atrasados en comparación con otras empresas. Este ha sido uno de
los puntos relevantes a tratar por medio de los apoyos federales, ya que en
muchas ocasiones lo primero que necesitan es crear un laboratorio con los

89
Las actividades de monitoreo que se realizan por parte de las empresas incluye la asistencia a ferias
tecnológicas, congresos científicos en el área de interés de la empresa, vigilancia tecnológica a través de
patentes, revistas especializadas y en algunos casos se realizan actividades pláticas con investigadores
nacionales para conocer los avances científicos más relevantes para la empresa en cuestión. Hay empresas que
realizan todas las actividades mencionadas, algunas otras sólo algunas de ellas o por lo menos una de las
mencionadas. Las empresas que aquí clasificamos como que no hacen “ningún” tipo de vigilancia tecnológica
en ocasiones realizan alguna de las actividades mencionadas, pero son acciones discontinuas, las cuales no
forman parte de un programa de gestión tecnológica de la empresa. Las 15 que aquí se mencionan son
aquellas que han integrado a su organización este tipo de actividades, por lo tanto son constantes.

222
recursos mínimos necesarios para poder desarrollar plenamente capacidades de
absorción y por lo tanto de innovación.

9.4 Casos Representativos de Innovación en las Empresas

A lo largo de esta investigación hemos expuesto el proceso de formación del


marco institucional para el sector agroindustrial – alimentario en México, también
se ha analizado como es que este marco carece de coherencia y en ocasiones
muestra importantes contradicciones en la dinámica de acción al contraponer
mecanismos e incentivos. También se ha mostrado como es que existen
importantes disfuncionalidades debido a las debilidades en el diseño institucional,
a la falta de una estrategia coordinada entre los diversos niveles de gobernanza y
a la ausencia de jerarquías claras entre los objetivos y metas de las políticas de
CTI. Sin embargo y a pesar del escenario adverso que se ha mostrado aquí,
también existen algunos casos de emprendimientos exitosos en el sector. Estos
casos son muy relevantes para nuestro análisis, dado que son contraejemplos que
nos enseñan cómo a pesar de los diversos problemas en el marco institucional y
en la formulación de incentivos, se pueden tener procesos exitosos de innovación.

En este apartado mostraremos sintéticamente el caso de la empresa BIODERPAC


S.A. de C.V. la cual se ubica en el estado de Sonora, objeto de estudio de esta
tesis, y el caso de IASA S.A. de C.V. localizada en el estado de Puebla. Ésta
última no coincide con los estados analizados aquí, sin embargo se consideró
pertinente retomar su experiencia debido al papel que han jugado los incentivos
federales en su desarrollo y consolidación.

BIODERPAC S.A. de C.V.90 es el resultado del trabajo de investigación del Dr.


Jaime López Cervantes profesor e investigador del Instituto Tecnológico de
Sonora (ITSON) campus Obregón, el cual inauguró hace 16 años una línea de
investigación sobre el aprovechamiento de los residuos agroindustriales. Esta
empresa surgió gracias al conocimiento que se desprendió de la asesoría a una
empresa de congelación de alimentos provenientes del mar. En ese proceso de la
cosecha del mar y de algunos de los servicios que el ITSON prestó a la empresa
para el procesamiento del camarón, se dieron cuenta de la gran cantidad de
desechos que significaba esto, ya que de 50 toneladas de camarón alrededor de

90
La información aquí presentada pertenece al Proyecto FRONCYTEC (Plan estratégico y transversal de
ciencia y tecnología en la frontera norte de México) en el cual participé durante 2012 como parte del grupo de
investigación, con la finalidad de identificar las capacidades en materia de ciencia y tecnología de los estados
de la frontera norte de México. Una versión completa donde se explica ampliamente el proceso de formación,
desarrollo y consolidación de la empresa BIODERPAC S.A. de C.V. será publicada como parte de los
resultados del proyecto, para más información www.froncytec.info.

223
15 eran basura. Es así como el Dr. López comienza la evaluación del potencial del
uso y aprovechamiento de los sobrantes del camarón a través de un proyecto que
sometió a concurso dentro del Sistema de Investigadores del Mar de Cortés
(SIMAC).

El proyecto se convirtió en la punta de lanza sobre el uso y aprovechamiento de


los residuos de camarón. Uno de los principales logros fue la extracción de quitina
de la cabeza de camarón por métodos biotecnológicos. Los resultados se habían
logrado a través de procesos químicos, pero los desechos químicos que surgían
del proceso eran aún más peligrosos que los desechos de camarón. Ello motivó al
Dr. López a seguir investigando en el tema de manera que se pudiesen encontrar
procedimientos más favorables.

Los resultados previos y la búsqueda de soluciones hicieron que la investigación


se orientara más hacia las técnicas biotecnológicas y con ciertos grupos
microbianos. Después de un largo proceso de investigación se logró obtener un
consorcio microbiano amplio que permitió el desarrollo de una tecnología que
admite micro encapsular organismos en polímeros que evita que mueran y al
ponerlo en contacto con los desechos de camarón se genera una fermentación
láctica adecuada a través de la cual se pudieron obtener tres productos: quitina,
pigmento y proteína.

Los resultados obtenidos impulsaron al Dr. López a mantenerse en esta línea de


investigación, por lo que sometió un nuevo proyecto donde retomaba el proceso y
ahora requería la caracterización de los compuestos. Para ello fue necesario
dotarse de infraestructura y equipos a través del Fondo Mixto del estado de
Sonora (FOMIX).

Además de las investigaciones que el Dr. López realizaba en lo referente al


aprovechamiento de los desechos de camarón, comenzó a tener algunas pláticas
con empresarios para compartir parte de los resultados y buscar inversiones. Es
así como Karl Reiner Fick quien se encontraba terminando sus estudios de
Administración de Empresas se mostro interesado en el proyecto que realizaba el
Dr. López. El interés no surgió de la nada, Karl Reiner Fick había investigado
sobre el potencial de la Biotecnología en el mundo, lo que dio inicio a una
importante asociación.

El Dr. López siguió investigando sobre la optimización del proceso de los


desechos de camarón y al mismo tiempo concursó con un proyecto dentro del
Programa de Mejoramiento del Profesorado (PROMEP), el cual consistía en dar

224
seguimiento a la caracterización que había comenzado previamente y que gracias
a los recursos obtenidos se pudo mejorar la infraestructura.

Al mismo tiempo que se desarrollaban éstas investigaciones, se comenzó a usar


el consorcio microbiano que habían obtenido previamente, para el mejoramiento
de suelos de cultivo en lugares que habían dejado de ser útiles debido al exceso
de fertilizantes químicos o bien debido a su composición salitrosa. El resultado fue
notorio y permitió la reconversión de suelos volviéndolos productivos nuevamente.

Los buenos resultados acumulados motivaron al Dr. López para concursar en


nuevo proyecto dentro de FOMIX, pero esta vez acudió a Karl Fick Rochin para
que el proyecto fuese presentado por ambos en colaboración. El proyecto
consistía en mejorar la optimización del proceso, ya que hasta ese momento
tardaba 40 días en realizarse y todos los días se producían entre 5 y 10 toneladas
diarias de camarón lo que se traducía en acumulación de desechos. Después de
dos años se logró el proceso de optimización reduciéndose a 3 días.

Mientras tanto, como investigador publicó artículos y libros mostrando los


resultados obtenidos. Pero la inquietud del Dr. López iba más allá, pues sabía que
los resultados del proyecto eran comercialmente viables y ecológicamente
destacados debido al impacto que tenía sobre los desechos camaroneros. Es por
eso que decidieron formar una empresa donde ambos invertirían sus
conocimientos y dinero.

Es así como nace la empresa BIODERPAC S.A.de C.V. la cual surge como
resultado de las investigaciones científicas y tecnológicas del Dr. López y el
acompañamiento e interés de Karl Fick dispuesto a arriesgar en un área nueva
para él, pero utilizando sus conocimientos como administrador de empresas.

La empresa se ha mantenido en una senda de crecimiento, han establecido una


dinámica de I+D sustentada por sus propias inversiones, pero también se han
mantenido participando en distintos fondos públicos como FOMIX y FONCICYT
para complementar sus metas de crecimiento.

El caso aquí presentado es el ejemplo de cómo un proyecto significativo


productiva y ecológicamente puede convertirse en un gran negocio innovador. Es
muestra también de cómo los investigadores pueden desarrollar actividades
científicas con alto impacto tecnológico, sin que esto represente una disminución
de la calidad de las mismas o una desviación de su trayectoria. El caso del Dr.
López como investigador del ITSON y del Lic. Karl Fick como empresario

225
dispuesto a arriesgar una importante cantidad monetaria para dar cabida a una
idea innovadora puede convertirse en un negocio a nivel mundial.

La trayectoria tanto de la investigación relacionada con el aprovechamiento de los


residuos agroindustriales como el surgimiento de la acuacultura ha crecido casi a
la par de un emprendimiento comercial llamado BIODERPAC. Este ha sido motor
del crecimiento financiero de la empresa, pero también ha significado derramas de
diversos tipos.

Una derrama estriba en la capacidad de dotar de infraestructura al ITSON a través


de los proyectos de colaboración con BIODERPAC. Otra se refiere a la formación
de recursos de alta calidad de diversos grados: licenciatura, maestría y doctorado.
Las patentes aunque han sido licenciadas, se encuentran a nombre del Dr. López
y por lo tanto cuentan para la institución educativa donde labora.

El proyecto que dio origen a todo este desarrollo ha representado una solución
para la enorme cantidad de desechos de los productos del mar, los cuales eran
focos contaminantes y a su vez, los productos desprendidos del aprovechamiento
han ayudado al fortalecimiento de suelos degradados y a la mejora productiva
basada en procesos orgánicos biotecnológicos.

Sin duda, el éxito de este proyecto que inició el Dr. López representa logros no
sólo para él, para la institución y para la empresa. Representa beneficios para el
sector y para el estado de Sonora, él cual ahora cuenta con una empresa de
calidad mundial, con capacidad de expansión, pero sobre todo con habilidades
para solucionar los problemas que aquejan a la producción de uno de los
principales sectores en la entidad.

Investigación Aplicada S.A. de C.V. (IASA)91 se encuentra ubicada en Tehuacán


Puebla y es una empresa con una historia que comenzó hace 50 años cuando la
familia Romero tenía a su cargo la producción de huevo para la región.

Debido al rápido crecimiento del número de aves y a los requerimientos técnicos y


de salud que esto significa, se vieron en la necesidad de integrar una estrategia
empresarial, de investigación y tecnológica que los ayudará a responder a sus
nuevas necesidades. Así fue como crearon IASA como el brazo tecnológico y de
soporte tecnológico a la producción avícola la cual inició sus actividades en 1963

91
La información aquí presentada forma parte del proyecto “Evaluación del Fondo de Innovación SE-
CONACYT” a cargo del Dr. Villavicencio, en el cual participé analizando el área de Biotecnología agrícola y
alimentaria. El caso presentado será parte de una publicación sobre los casos exitosos del fondo, por lo que
una versión completa en extenso podrá encontrarse en dicho documento.

226
con la formulación y elaboración de alimentos balanceados y estableció un
laboratorio de análisis bromatológicos y otro para diagnóstico y patología animal,
con la finalidad de dar soporte tecnológico a las necesidades de producción de las
empresas de la familia. Con el tiempo tuvieron que buscar soluciones a cierto tipo
de enfermedades que enfrentaban por el aumento de la población avícola.
Después comenzaron a dotar de servicios a distintos productores de la región, no
sólo en lo referente a los temas avícolas; ampliaron su capacidad de respuesta
hacia todo el sector pecuario gracias a las capacidades tecnológicas que
desarrollaron en los laboratorios que montaron, debido a un largo proceso de
investigación propia y de monitoreo de los problemas locales, regionales y
nacionales.
Todo lo anterior inauguró el desarrollo de productos biológicos y farmacéuticos
que cubrían las necesidades de las empresas familiares, pero también ayudo al
establecimiento de píe de cría para la repoblación de aves ponedoras y aves libres
de patógenos como insumo para la producción de biológicos de alta calidad.
La creación de IASA fue la respuesta a la falta de productos y servicios de calidad
para la producción avícola tanto a nivel nacional como internacional. Debido a
diversos factores internos como externos se vieron obligados hace
aproximadamente hace 15 años a replantear la estrategia de I+D y aprovechar la
capacidad instalada de su laboratorio de biología y diagnóstico, además de las
capacidades y conocimiento sobre las enfermedades propias de la población
avícola de la región y del país. Fue así como decidieron generar una estrategia
que diera solución a enfermedades localizadas que no eran de interés para los
grandes laboratorios. Esto los llevó a convertirse en una empresa dedicada a la
producción de Biotecnología aplicable para la identificación, prevención y solución
de problemas en nutrición y salud animal. Este paso los ha llevado al desarrollo de
herramientas diagnósticas de vanguardia, vacunas inactivadas por aspersión y
vacunas hiperconcentradas, inmunoglobulinas específicas para la prevención y
tratamiento de enfermedades en mamíferos y aves, además de adsorbentes de
micotoxinas de amplio espectro.
Todo lo anterior los ha situado como la principal empresa mexicana del sector
farmacéutico veterinario en el país y como un importante competidor de los
grandes laboratorios internacionales, no sólo en México, sino en muchos otros
mercados del mundo.
Es importante mencionar que a diferencia de los grandes laboratorios, parte de su
éxito nacional se ha basado en la atención personalizada a las necesidades de los
productores, porque existen casos en los cuales al ser enfermedades o
padecimientos locales o regionales muy específicos, los grandes laboratorios no
están interesados en darle solución, como en el caso de su primera experiencia.
Esto ha representado para ellos un importante reto para solucionar demandas de
la zona que a su vez significa conocer muy bien la composición y problemas de los
227
productores a nivel nacional y al mismo tiempo se traduce en generación de
capacidades innovadoras.
Gracias al esfuerzo continuo en la investigación y desarrollo en el sector
farmacéutico veterinario, IASA se ha convertido en líder de ventas nacional en su
ramo, en segmentos específicos del sector agropecuario nacional. Se han
posicionado entre los 3 primeros laboratorios nacionales y entre los 10
transnacionales en el mercado.

Sin duda la capacidad de generar soluciones innovadoras para el sector


farmacéutico veterinario ha sido construida a lo largo de los años por IASA gracias
al empeño, dedicación y arrojo que han mostrado para invertir en investigación y
desarrollo y apostarle a las ventajas que puede representar ser una empresa
innovadora, a pesar de los riesgos que esto implica, además de la persistencia por
entrar a mercados dominados por empresas transnacionales. Pero es justo
mencionar que esa capacidad se ha visto fortalecida y potencializada gracias a la
participación de la empresa en diversos Fondos otorgados por el Gobierno Federal
y Estatal a través de distintas instancias.

IASA ingreso en el año 2004 la primera solicitud ante las convocatorias para la
obtención de Fondos otorgados por la Secretaría de Economía-CONACYT Debido
a los resultados obtenidos y sobre todo después de un proceso de aprendizaje la
empresa decidió que seguiría participando anualmente en por lo menos una
convocatoria ya que su participación en los Fondos se tradujo en diversas
experiencias.

Uno de los aprendizajes resultado de su participación en el Fondo, fue la


experiencia de involucrarse en vinculaciones universidad-empresa. Gracias a la
iniciativa del Director del Centro de Investigaciones en Biotecnología Aplicada
(CIBA-Tlaxcala) del IPN quien había previamente establecido comunicación con
IASA ofreciéndoles la oportunidad de encontrar vetas conjuntas para explotar
intereses comunes, fue entonces que se decidieron a participar en un proyecto
conjunto que derivó en muy buenos resultados incluidos la producción de un
nuevo medicamento. El esquema flexible de vinculación que ofrece el Instituto
Politécnico Nacional representó una ventaja para la empresa, ya que justamente
buscaban que los términos de los contratos y los derechos de propiedad fuesen
beneficiosos para ambos, de manera que el esquema que les planteó el CIBA-
Tlaxcala les resulto factible.
La participación en los Fondos implicó establecer una relación con la academia
que hasta el día de hoy ha sido sumamente exitosa y que además los convenció
de establecer más relaciones a nivel nacional con algunos investigadores de la
UNAM y del CINVESTAV y a nivel internacional con el Departamento de
228
Agricultura de Estados Unidos, la Universidad de Illinois y ampliaron su sistema de
colaboración al comenzar proyectos de investigación con otras empresas como
Laboratorios SILANES S.A.de C.V., LAPISA y Boehringer Ingelheim.

Su constante participación en los Fondos estatales los condujo a establecer una


metodología propia que incluye una serie de etapas que comprenden desde la
revisión de las convocatorias CONACYT, la elección de algún proyecto en dado
caso de que sea viable someterlo a algún Fondo, establecer colaboraciones con
instituciones educativas, contactar a algún despacho gestor, elaborar la
descripción del proyecto, plan de negocios, y demás requerimientos, y en caso de
ser aceptado informar a los involucrados. Para cada uno de los pasos anteriores
existe un responsable y una serie de actividades por etapa, esto ha servido para
agilizar y aprovechar los beneficios de los Fondos.
La participación de IASA en los Fondos públicos también ha significado sobre todo
agilizar su capacidad de respuesta a problemas del mercado farmacéutico
veterinario, ya que a pesar de su historia en proyectos de investigación y
desarrollo estos dependen en muchas ocasiones de las inversiones requeridas.

La participación de IASA en distintos Fondos federales y estatales ha sido


constante, en lo que concierne al Fondo de Economía- CONACYT participaron en
la convocatoria de 2007 con el proyecto denominado “Obtención de
inmunoglobulinas contra los principales agentes causales de la mastitis de la yema
de huevo y su uso como una herramienta biotecnológica para el control de la
mastitis” Al cumplir satisfactoriamente con las metas del proyecto, la empresa
logró el desarrollo de un nuevo producto que se encuentra en proceso de
comercialización, el cual da solución a un problema que afecta anualmente a casi
3 millones de cabezas de ganado en México, y el más caro en cuanto al suministro
de tratamiento que enfrentan los productores de leche a nivel mundial, que es la
mastitis.

Además del desarrollo del producto médico-veterinario, IASA ha solicitado el


registro de la patente correspondiente ante la United States Patent and Trademark
Office's (USPTO) y el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI). Con
todo lo anterior, IASA ha logrado establecer una trayectoria de investigación y
desarrollo ya que también participó dentro del Fondo en el 2010 con un nuevo
proyecto. Además de los proyectos mencionados, también participan en el fondo
Innovapyme92 y en el de la Secretaría de Salud.

92
El cual surgió justamente de la búsqueda de opciones para usar la clara de huevo, de manera que junto con
CIBA Tlaxcala plantearon el desarrollo de productos biotecnológicos usando lisozima de clara de huevo
como agente antimicrobiano para su comercialización en la industria alimenticia, el cual se encuentra ya en
proceso de patentamiento

229
IASA es ejemplo de una empresa que ha conjuntado el desarrollo de capacidades
empresariales con el desarrollo tecnológico, es una empresa que ha seguido una
larga trayectoria de aprendizaje y que ha encontrado como principal incentivo la
innovación y la solución de las necesidades de su región y sector. Además de que
han logrado satisfactoriamente integrar mecanismos de uso y aprovechamiento de
los Fondos federales y estatales, donde éstos han jugado el papel de aceleradores
en sus propios procesos de I+D. No quiere decir que dependan de los recursos
públicos, sólo que han logrado dinamizar y generar más proyectos en un tiempo
más corto.

Conclusiones

La primera parte de este capítulo analiza la dinámica innovadora en los estados


seleccionados; destaca que en cada uno de ellos existen características
particulares. En el caso de Guanajuato los incentivos estatales junto con los
federales han impulsado algunas redes de innovación en productos como la fresa,
el frijol y el chile, siendo el primero de ellos el más exitoso debido a las
características de los agentes que componen la red. Sin embargo, no existen aún
los incentivos adecuados y suficientes para generar una constante comunicación
de las necesidades de los productores agroindustriales y alimentarios con la
producción de conocimiento en la zona, la conectividad se ha visto seriamente
afectada por la falta de mecanismos u organizaciones puente traductoras de las
necesidades en proyectos conjuntos.

En el estado de Sonora suceden cosas similares, ya que a pesar de las


capacidades científicas instaladas, éstas han sido poco aprovechadas y
explotadas por los productores de la zona, esto tiene que ver con dos cosas. Por
un lado con el tipo de necesidades, ya que muchas veces sólo requieren mejoras
incrementales o asesorías técnicas y en segundo lugar que aquellos productores o
empresas que pueden demandar los servicios se encuentran más relacionados
con la investigación en Estados Unidos que en México, por una cuestión de
localización geográfica. Existen también dinámicas diferenciadas entre los
diversos tipos de producto, por ejemplo las hortalizas, los cítricos y la uva de mesa
son productos para la exportación, lo que marca una diferencia crucial con el
grupo de pequeños productores dedicados a otro tipo de productos, que
generalmente son para la región o para la auto subsistencia. Todo lo anterior se
complementa con la falta de una política estatal que determine el tipo de
incentivos para el desarrollo de capacidades de innovación en el sector, ya que si
bien cuentan con algunos de los centros de investigación más importantes en el
área de alimentos, éstos son desaprovechados ya que no tienen demanda en el
estado.
230
Yucatán por su parte, aún se encuentra en un proceso incipiente de generación de
incentivos, al no contar con una Ley propia de ciencia y tecnología y tampoco con
los recursos necesarios, les ha sido sumamente complicado establecer prioridades
de desarrollo tecnológico. A pesar de reconocer que cuentan con investigación de
avanzada en productos de la región como el chile habanero o la papaya. Esta no
puede ser aprovechada por distintos tipos de barreras que van desde la cultura de
los productores que difícilmente aceptan el cambio técnico y que están
acostumbrados a los apoyos federales, de manera que éstos se prefiguran más
que como una ayuda, y por lo tanto como una barrera a la innovación, dado que
no incentiva a los agentes a buscar soluciones para mejorar calidad y
productividad.

En términos generales, aunque en los estados sí se cuenta con una serie de


mecanismos que tratan de funcionar como incentivos a la innovación, en los tres
destaca la falta de mecanismos de coordinación entre el gobierno federal y el
estatal, y más aún por la desconexión de las necesidades de los productores con
la investigación científica. Esto debido a que en ocasiones los productores no
demandan soluciones tecnológicas, o bien porque no existen organismos puente o
las empresas y en ocasiones éstas cubren sus necesidades con sus propios
laboratorios o cuando es empresa multinacional tienen laboratorios externos.

A nivel nacional, el sector agroindustrial-alimentario tal y como se construyó aquí


ha mantenido una participación estable en la economía nacional. De hecho, la
industria de los alimentos es la que ha mostrado mayor dinamismo por la
participación de las cerveceras o de las grandes empresas alimentarias. Mientras
que la participación de producción de insumos agrícolas y fertilizantes se ha
mantenido a la baja.

Lo anterior contrasta con la dinámica tecnológica del sector, ya que si bien


sabemos que los indicadores macroeconómicos están fuertemente influenciados
por las grandes empresas de la bebida (cerveceras) y de alimentos, se esperaría
mayor presencia en áreas como la maquinaría agrícola y la producción de
fertilizantes o biofertilizantes donde hay potencial innovador y donde se localizaron
algunas empresas relevantes, a través de los proyectos analizados.

El mundo la producción de semillas y alimentos genéticamente modificados está


dominado por algunas grandes empresas, sin embargo es importante mencionar
que a pesar de que en México existe una importante trayectoria científica, esta no
se ve reflejada en los proyectos apoyados por los fondos, probablemente porque
son escasas las empresas interesadas en este tipo de proyectos, dado el
231
ambiente incierto debido a las controversias en cuanto a la producción de
organismos genéticamente modificados destinados a la alimentación.

De acuerdo al análisis presentado previamente, se puede concluir que existen


algunos proyectos que están insertos en trayectorias relevantes a nivel mundial,
por ejemplo el mejoramiento genético en algunas especies animales sobre todo
ganado. También existe por lo menos un producto donde se distingue potencial
en cuanto a la investigación realizada, como es la papa, aunque no sabemos si se
refiere a un problema generalizado de los productores o sólo de las empresas que
desarrollan dichos proyectos.

Destaca la presentación de algunos proyectos en el área de fertilizantes,


fungicidas, herbicidas y sustratos orgánicos con base biotecnológica, ya que si
bien es una industria dominada por algunas empresas químicas, es importante
que las empresas mexicanas empiezan a apostarle a sustituir cierto tipo de
productos y además generar mayor valor agregado dado que su base ya no es
química-sintética, por lo que representa menos riesgos para la salud en general. Y
aunque estas empresas no puedan competir a nivel mundial, si pueden competir
por el mercado nacional donde cobra relevancia lo que desarrollan.

Existen algunos otros proyectos que no destacan en la trayectoria tecnológica del


sector, dado que se refieren a la generación de infraestructura y centros de
investigación y desarrollo, pero sin duda en el largo plazo pueden ser áreas de
oportunidad para nuevos proyectos, dado que ya se cuenta con el equipo básico
del cual carecen muchas empresas en el país. Además de que en algunos casos,
los proyectos de infraestructura también significan un aporte a la industria agrícola
y alimentaria, dado que cierto tipo de pruebas y análisis pueden llevarse a cabo de
manera eficiente y rápida, sin tener que contactar servicios en el extranjero, lo que
impulsa no sólo a la empresa que instala el centro de I+D, sino a todas aquellas
micro y pequeñas empresas que podrán acceder a los servicios.

En comparación con otros sectores, el sector agroindustrial – alimentario cuenta


con el mayor número de proyectos dentro del Fondo de Innovación (SE-
CONACYT). Esto podría darnos la idea de que existe un cúmulo importante de
innovación referente al sector, pero consideramos que aún existen muchas áreas
tecnológicas e innovadoras relevantes a nivel mundial que no se están
desarrollando en México, o que por lo menos no son significativas en los proyectos
que accedieron al fondo.

Es necesario impulsar la implementación, utilización y desarrollo de técnicas


novedosas relacionadas con la Biotecnología, con el mejoramiento genético y con
232
el proceso de conservación de los alimentos. Dado que si bien, se reconoce el
impulso por sustituir cierto tipo de importaciones, aún hay áreas de oportunidad
como lo referente a la investigación en cultivos básicos, oleaginosas, cítricos,
alimentos del mar, procesos de industrialización que se están desaprovechando y
que el fondo podría dirigir desde la convocatoria, dado que existe una fuerte masa
crítica de investigación que puede complementarse con algunas empresas en las
distintas áreas.

La falta de una estrategia nacional para el desarrollo y consolidación de la


Biotecnología que implemente incentivos coordinados entre los diferentes niveles
de gobierno ha convertido algunos mecanismos en barreras, más que en
oportunidades para el desarrollo de innovaciones, lo que muestra la ausencia de
diseño institucional apropiada a las características y necesidades del sector. Sin
duda es necesario implementar políticas públicas para la generación de actores
empresariales que rompan con la cultura de la protección gubernamental y que
estén dispuestos a implementar mejoras y nuevos procesos y productos. Pero
también es necesario que el estado a través de las leyes y las reglamentaciones
establezca lo deseado, lo permitido, lo obligado y lo prohibido. Esto con la finalidad
de generar certidumbre en un ambiente altamente incierto como lo es la
innovación y sobre todo en la Biotecnología, que como se mencionó antes, es un
foco de confusiones dada la relación que tiene con la vida humana, animal y
medio ambiental. Es necesario establecer reglas claras para los jugadores, porque
lo que hasta ahora existe no ha incentivado la generación de innovaciones, más
que en algunos casos aislados.

Al analizar los diversos periodos de la política pública para la ciencia y la


tecnología, incluida la Biotecnología, destaca que la generación de capacidades
científicas ha sido altamente incentivada, pero en ocasiones esto se contradice
con la generación de capacidades de innovación, por ejemplo el SNI que en
ocasiones puede ser un obstáculo ya que no fomenta la colaboración universidad-
empresa. Establecer que la Biotecnología es un área primordial para el desarrollo
nacional implica generar toda una estrategia planteando objetivos y metas a
distintos plazos, sin embargo en México las acciones han sido dispersas y
desconectadas, lo que ha generado contradicciones y problemas de coordinación
que se han transformado en barreras más que en incentivos para la innovación.

Cuando analizamos los casos de éxito vemos que los incentivos federales y
estatales pueden ser detonadores de procesos previos, ayudan a acelerar el ritmo
de I+D, pero no son el motor de ellas ya que están diseñados para empresas que
ya cuentan con ciertas capacidades, pero pocas veces funciona para las que van
iniciando.
233
El caso de BIODERPAC nos enseña que las actividades empresariales y de
innovación se pueden conjuntar con la investigación científica; la experiencia del
Dr. López demuestra que buscando soluciones a problemas que aquejan a la
industria, a la sociedad y al medio ambiente se pueden hallar opciones viables de
desarrollar procesos y productos rentables en el mercado y altamente
innovadores. A l mismo tiempo nos enseña que este caso dependió de las
capacidades individuales más que del contexto institucional, pareciera que el
comportamiento de los agentes se ve influido fuertemente por las características e
incentivos propios que por los institucionales. Y que éstos últimos sirven para
reforzar, una vez que ya existe la conectividad y cierta experiencia.

IASA es otro ejemplo donde una empresa va acumulando capacidades hasta el


punto de poder insertarse en trayectorias tecnológicas promisorias o exitosas a
nivel local, nacional y mundial. Pero también depende mayormente de los
esfuerzos individuales y la visión de la empresa, si ella está dispuesta a arriesgar,
a vincularse a pesar de malas experiencias o bien a entrar a concursar a Fondos a
pesar de la inexperiencia en el tema. En este caso los incentivos han ayudado a
potenciar y a agilizar la dinámica de I+D de la empresa, se vuelve un incentivo
complementario.

Ambos casos tienen fuertes incentivos individuales e internos, además coinciden


en la búsqueda de soluciones a distintas problemáticas, pero lo que las hace
perdurar a lo largo del tiempo y establecer estrategias de innovación es la
rentabilidad de las áreas donde se han insertado. El incentivo de mercado es el
motor fundamental que los hace continuar por la senda de la búsqueda,
exploración y explotación.

En síntesis, los casos presentados muestran que los incentivos que se generan a
través del marco institucional funcionan bajo ciertas precondiciones, los agentes
deben de contar con motivaciones muy específicas para que el incentivo sea
usado de manera adecuada. Porque también existen muchos casos de empresas
o proyectos aprobados los cuales no tienen impacto innovador, esto nos hace
pensar que para que sobrevivan los proyectos, se les de seguimiento o finalicen
en el mercado, los sujetos de apoyo deben contar con capacidades previas que
les permita potencializar los recursos que adquieren. Así los recursos deberían
complementar la estrategia de I+D de la empresa y probablemente se debería
pensar en cómo crear más incentivos que no sólo se centren en el financiamiento.

Los escasos casos de éxito también muestran la irregularidad del marco


institucional, las disfuncionalidades permean la conducta de los agentes, el
234
problema hasta ahora es que los incentivos que existen no tienen resultados
innovadores generalizados, sino algunas experiencias como las aquí presentadas.

235
Capítulo 10
Conclusiones Generales y Recomendaciones de Política Pública

La investigación aquí presentada ha respondido a dos inquietudes principales, por


un lado al interés científico de conocer la dinámica de una tecnología emergente
como la Biotecnología, además de analizar y explicar cómo el comportamiento de
los agentes se ve modificado o no, gracias al marco institucional y a los incentivos
que este provee.

El problema de investigación derivó de un largo periodo de reflexión donde se


conjuntaron distintas variables. Desde la discusión teórica interesaba responder
cómo es que en el terreno de las políticas públicas se va construyendo una
estructura normativa para el impulso de una tecnología considerada clave para el
desarrollo económico y social. Era de especial atención entender como este
proceso se forma y transforma a lo largo del tiempo, así como conocer la
evolución institucional y tecnológica. En el terreno de la práctica interesaba
conocer el estado actual de la Biotecnología Agroindustrial - Alimentaria en
México.

En primera instancia construir una monografía descriptiva con datos elementales


que dieran cuenta del estado actual del sector. Después se buscó conocer y
analizar la dinámica de la investigación, de la tecnología, del mercado y de las
relaciones que se entretejen alrededor del sistema. Esto a su vez implicó y motivó
a la delimitación del objeto de estudio; metodológicamente se construyeron una
serie de variables bajo la consideración que conociéndolas se podría tener un
acercamiento lo más veraz y oportuno posible a la conformación de la estructura
del sector.

Así que el esquema teórico que se construyó ha servido para analizar la evidencia
encontrada y en conjunto han dado lugar a este trabajo de investigación, la cual ha
implicado un ir y venir entre conceptos y hechos, datos y entrevistas. Se ha
construido una complementariedad indispensable para responder a las preguntas
de investigación que aquí se plantearon.

Sin duda este trabajo no es lo suficientemente exhaustivo que debería ser, aún
existen huecos en la investigación que podrán ser respondidos en el futuro y sobre
todo han surgido más preguntas que respuestas, ya que conocer la dinámica de
un sector va más allá de las reglas formales, que son en las que nos hemos
concentrado debido a las restricciones de tiempo y recursos.

236
Es así como hemos llegado al último capítulo en el cual se sintetiza y recopila
conclusiones anteriores, además de proponerse una serie de elementos en torno a
la política pública relacionada con el sector.

En la primera parte de este último capítulo se retoman las conclusiones


presentadas a lo largo de cada uno de los capítulos previos, enfatizando en las
preguntas de investigación planteadas al principio de la tesis. Además de
presentarse los hallazgos teóricos, contribuciones hechas en el trabajo y líneas de
investigación futuras.

La segunda parte está compuesta por una serie de propuestas y lineamientos de


políticas públicas y regulación, la cual a su vez se divide en: leyes y
reglamentaciones, vinculación y servicios de calidad, financiamiento,
administración y fondos de apoyo.

La pregunta central que guió esta investigación se enuncia de la siguiente manera:

¿Qué tipo de capacidades y dinámica de innovación generan los incentivos y las


instituciones existentes en el sector de la Biotecnología Agroindustrial -alimentaria
en los estados de Guanajuato, Yucatán y Sonora?

Para responderla se recurrió a un análisis multinivel que incluyó el estudio de las


leyes, reglamentaciones, proyectos de ley, organismos reguladores, organismos
formuladores de políticas públicas a nivel estatal y su contraparte a nivel estatal.
Basados en el enfoque metodológico de los sistemas de innovación (SI) se
entrevistaron a cuatro tipo de agentes principalmente: IES y centros de
investigación, empresas, policy makers y encargados de transferencia y
vinculación a nivel federal y en cada uno de los estados seleccionados.

También implicó la construcción propia de un enfoque que complementara lo


planteado por la teoría de Sistemas de Innovación y nos ayudará a comprender
los “incentivos” para la Biotecnología Agroindustrial -Alimentaria. Esta es una
primera aportación teórica, ya que se propuso una taxonomía propia que da
cuenta de los niveles y tipos de incentivos involucrados en el desarrollo de la
Biotecnología. Ya que si bien la teoría de SI fue útil metodológicamente para
delimitar a los actores y los mecanismos, ésta no esclarece cómo es qué las
políticas públicas y las instituciones promueven la creación de incentivos o cómo
éstos se convierten en barreras.

237
Es por eso que consideramos que existe progreso explicativo basado en la
incorporación de aspectos teóricos como los incentivos y las barreras, los cuales
ayudan a comprender mejor lo que sucede en el caso de México.

A su vez la pregunta general se operacionalizó en tres niveles: las Innovaciones y


las Instituciones, las Instituciones y los Incentivos y el desarrollo de Capacidades
Científicas, Tecnológicas, de Absorción y de Innovación.

10.1 Preguntas de Investigación

A continuación y de acuerdo a la evidencia presentada a lo largo de esta


investigación se responderá puntualmente a cada una de ellas, para finalmente
regresar a la pregunta general.

10.1.1 ¿Qué tipo de instituciones existen?

a. Organizaciones, reglas, normas, comportamientos y jerarquías


En México la Biotecnología Agroindustrial -Alimentaria muestra un entramado
institucional compuesto por una marco regulatorio que su vez se divide en leyes,
reglamentos y normas transmitidas a los agentes por las diversas organizaciones
públicas federales. Diversos tipos de agentes como las empresas, centros de
investigación, IES, investigadores, policy makers, organizaciones sociales,
consejos de CTI y los reguladores federales. Los agentes federales y estatales
construyen mecanismos en forma de incentivos que se transmiten a los agentes a
través de programas, fondos, leyes y reglamentaciones. Estos mecanismos
constituyen parte de los instrumentos que modifican la conducta de los agentes y
a su vez, se establecen jerarquías y formas de gobernanza específicos para el
sector.

A continuación describiremos los agentes que componen al sector en México:

a) Empresas de diversos tipos: las de innovación biotecnológica que se


caracterizan por el desarrollo de patentes, tienen algún nicho de
oportunidad, logran avances científicos y tecnológicos y que en el caso de
México son las menos, ya que de acuerdo al trabajo de campo, sólo se
cuenta con aproximadamente 30 empresas de este tipo de capital nacional
y que provienen de empresas consolidadas en el país, que han logrado
procesos de conversión tecnológica, por lo tanto han aprovechado sus
capacidades instaladas previas tecnológicamente y se han ido
abasteciendo de nuevos conocimientos. Las segundas son las empresas de
innovación en ingeniería las cuales adaptan tecnologías y escalan
238
procesos, por lo tanto sus competencias centrales se ubican en la mejora
incremental. Aquí se localiza el grueso de empresas de capital extranjero o
multinacionales como Monsanto filial México, la cual realiza I+D en otra de
sus sedes, pero aquí llevan a cabo procesos de mejora en productos. O
bien las grandes empresas nacionales cerveceras que desarrollan I+D
propia, pero sobre todo adapta las innovaciones realizadas en el mundo.
Finalmente se encuentran las empresas de manufactura de productos
biotecnológicos, en el caso de la agroindustria y el sector alimentario,
destacan aquellas que realizan la producción de insumos y se localizan en
la parte más baja de la cadena de valor, generalmente producen proteínas
o fermentaciones. De las empresas analizadas, también encontramos las
que tienen este tipo de características, con diversos niveles de
tecnificación, pero relevantes para el mercado, ya que sustituyen
importaciones.
De acuerdo al trabajo de campo realizado, constatamos que los incentivos
que se presentan para estas empresas funcionan principalmente para
aquellas que ya cuentan con mecanismos previos o capacidades
tecnológicas instaladas.
b) Organismos reguladores: integrados principalmente por la CONABIO,
CIBIOGEM, CNB y SENASICA que distribuyen mandatos desde el nivel
federal a través de la formulación de regulaciones a distintos niveles y para
diferentes agentes.
c) Formuladores de políticas públicas. A nivel federal, la formulación de
políticas públicas se encuentra en manos de SAGARPA, CONABIO y
Gobierno Federal a través de los Programas de Ciencia y Tecnología, las
Leyes de CyT. A nivel estatal están los Consejos estatales de C y T y las
Comisiones de CyT de las legislaturas en turno.
d) Financiadores y ejecutores. CONACYT, SAGARPA, COFUPRO como
coordinadores de los programas y fondos de apoyo a la investigación
científica y aplicada. INIFAP y Fundaciones PRODUCE como encargadas
de la ejecución.
e) IES y centros de investigación públicos y privados. Institutos de
investigación de la UNAM, UAM, IPN, CINVESTAV, UACH, UAG,
tecnológicos, CICY, CIAD, y todos los organismos descritos ampliamente
en esta investigación.
f) Otros. AgroBio, Genómica y Bioeconomía, Academia Mexicana de Ciencias
(AMC), Centro de Estudios para el Cambio del Campo Mexicano
(CECCAM), Greenpeace, el Grupo de Estudios Ambientales y la Unión de
Científicos Comprometidos con la Sociedad (UCCS)
La estructura institucional nacional compuesta por las reglamentaciones y las
leyes se encuentran conformadas por:
239
1. Ley de Bioseguridad de Organismos Genéticamente Modificados
2. Ley Federal de Variedades Vegetales
3. Ley de Sanidad Vegetal
4. Ley de Propiedad Industrial

En el segundo nivel de análisis de esta investigación y retomando los estudios de


caso, vemos la siguiente estructura:

10.1 Conectividad en los casos de estudio


GUANAJUATO

Empresas Investigación Políticas Públicas


Baja conectividad entre empresas e investigación y bajo impacto de las políticas públicas en
las empresas.

SONORA

Empresas Investigación Políticas Públicas


Baja conectividad entre empresas e investigación, bajo impacto de políticas públicas

YUCATÁN

Empresas Investigación Políticas Públicas


Nula conectividad entre empresas e investigación, nulo impacto de políticas públicas

El cuadro anterior muestra que en los tres estados existen agentes relacionados
con la Biotecnología, lo que destaca es la escasa o nula conectividad entre ellos.
Esto es resultado de la falta de estrategias por parte de los gobiernos estatales, a
excepción del estado de Guanajuato donde sí existen incentivos al desarrollo
biotecnológico, pero debido a la falta de monitoreo y supervisión éstos no han
dado los resultados esperados. En los tres estados destaca que el agente más
fuerte es la “investigación” lo que se traduce en importantes capacidades
científicas. Pero aún desligadas de la capacidad productiva tanto de las empresas,
como de las pequeños productores debido a la falta de incentivos o a las barreras
que significa la estructura económica y productiva de cada estado y la ausencia de
una estrategia general en el país de política industrial.

La conectividad es importante dado que la investigación científica y tecnológica


tiene la capacidad de solucionar problemas de diversa índole, características y
niveles. Puede ayudar desde pequeños productores hasta empresas nacionales
que ya tienen capacidades previas potenciales, pero en ciernes. Recordemos que
una de las premisas de la sociedad del conocimiento es que la alta conectividad

240
entre los agentes de los sistemas de innovación puede generar mejores
condiciones económicas, ambientales, de salud y en general de desarrollo basado
en la actividad científica, tecnológica y de innovación.

Pero la conectividad es importante sobre todo porque genera lazos de


comunicación, ayuda a los agentes a encontrar puntos de convergencia y en el
caso de la Biotecnología puede ayudar a desarrollar soluciones nacionales a
problemas reales que atañen a diversos actores, no sólo a las grandes empresas,
sino a comunidades, regiones, actores locales que necesitan ser competitivos a
diversos niveles.

La construcción del marco institucional para la Biotecnología Agroindustrial –


Alimentaria en México muestra debilidades en su diseño e implementación. Al
hablar de diseño nos referimos a la coherencia e integración de aspectos claves a
fomentar y delimitar. No existe una clara posición en materia regulatoria, es
ambigua y muestra falta de definiciones; no hay un proceso de apropiación del
marco institucional por parte de los agentes. A lo largo de esta investigación
descubrimos que la mayoría de los agentes no están interesados en conocer los
mecanismos de regulación porque estos no influyen en su toma de decisiones.
Hay una baja penetración social del marco institucional formal, por lo tanto se
reproducen comportamientos adversos a este.

Al analizar si existen mecanismos de correspondencia y coherencia entre los


distintos niveles de ejecución de las leyes, reglamentaciones y políticas públicas
descubrimos que esta se encuentra distorsionada, como consecuencia del débil
diseño institucional y gracias a la falta de una estrategia integral, general y común
en torno al sector. No existe una clara jerarquía institucional, lo que provoca
confusión y contradicciones en lo que llevan a cabo: no hay una clara delimitación
de funciones y tampoco hay autoridad para las actividades que cada organización
desarrolla, pero esto se debe principalmente a la inexistencia de reglas claras. La
gobernanza es no estructurada y en ocasiones contrapuesta, la operatividad para
enfrentarse a problemas de distintos niveles relacionados con la promoción y
gestión de la ciencia, tecnología e innovación es descoordinada y sin integración.
Aquí planteamos como hipótesis que estos se deben a la falta de posicionamiento
del gobierno mexicano hacia la tecnología. No ha existido una clara definición de
la estrategia que el país debería implementar, y esto se puede debe a falta de
interés, a una baja apropiación del tema o a la incapacidad institucional para
determinar planes de largo plazo o políticas estructurales que sobrepasen el límite
de los 6 años que dura cada mandato. Y esto se complica una vez que cada
gobierno estatal define sus prioridades sectoriales y tecnológicas. La continuidad

241
también se rompe por la falta de coordinación entre los niveles federal y estatal,
donde tampoco se integra una gobernanza proclive al desarrollo del sector.

10.1.2 ¿Qué tipo de incentivos se generan?

Esta investigación demuestra que existen incentivos diferenciados, por un lado se


han generado importantes incentivos para el desarrollo de capacidades científicas
a través de los instrumentos explicados previamente, pero no se han generado los
incentivos adecuados para la transferencia y vinculación de éstos agentes con el
sistema productivo. Por lo tanto, hay un desfase entre las capacidades
tecnológicas y de innovación con las capacidades científicas. El gobierno como
agente principal, no ha podido alinear el sistema de incentivos con los agentes, en
parte debido a la falta de definición clara de los objetivos de la política relacionada
con la Biotecnología Agroindustrial -alimentaria. No existe un mecanismo claro de
colaboración entre ambos niveles dado que los incentivos se contraponen, hay
organizaciones que pugnan por incentivos que les permitan libre acceso a
investigación y pruebas, mientras que hay otros que piden esquemas más
cerrados o hasta prohibitivos. Los intereses del principal o gobierno no se alinean
con ninguno de los dos, debido a la falta de definición y sobre todo a la
inexistencia de una política real para el sector.

Derivado de los hallazgos de esta investigación consideramos que ante la falta de


actores empresariales con habilidades innovadoras, es necesario replantear el
tema de las políticas públicas en CTI relacionadas con la Biotecnología
Agroindustrial - Alimentaria. No significa que no existan actores en el sector, lo que
vemos es que en un sector emergente intensivo en conocimiento se requiere de
un conjunto de incentivos claros que por un lado fomenten a la I+D, pero que al
mismo tiempo plantee los límites en áreas prioritarias como el uso de maíz
transgénico, dada la relevancia social, cultural y económica que tiene para los
mexicanos. Uno de los factores intrínsecos a las tecnologías emergentes, como se
explico en el capítulo 1 es la incertidumbre, si el marco institucional no se
construye bajo la premisa de disminuirla estableciendo lineamientos, barreras o
incentivos claros, los agentes pueden generar mayor resistencia. Y no sólo nos
referimos a las empresas, también a los investigadores, a los consumidores y a la
población en general.

La dinámica de mercado, como se ha expuesto previamente, no incentiva, debido


a varios factores. El primero es la estructura productiva del sector, es un sector
ampliamente polarizado entre los grandes productores dueños de grandes
cantidades de hectáreas, los cuales recurren a la adaptación de mejoras técnicas
para incrementar su productividad y mantener su cuota de mercado (en algunos
242
casos monopólica o cuasi monopólica)93 versus los pequeños productores que
cuentan con pocas hectáreas y que en su mayoría son economías de
subsistencia, por lo que no requieren de innovaciones, o si lo requieren son
mínimas. Es por esto que se argumenta que la estructura de mercado no
incentiva, y mucho menos en una tecnología dominada por altas tasas de
incertidumbre como lo es la Biotecnología. Se requiere de incentivos estatales que
ayuden a superar las barreras de la estructura productiva del país, así como las
propias barreras que genera la tecnología (capacidad de absorción). Pero
también se necesita demostrar que en ciertos nichos de mercado el desarrollo de
Biotecnología puede ser altamente favorable para posicionar a empresas a nivel
local, nacional y global. Esto se puede lograr a través de un proceso de difusión de
los casos exitosos, una estrategia de comunicación y sobre todo un proceso de
apropiación y asimilación social de la tecnología.

El sistema de incentivos que se plantea como estructura financiadora, también


muestra distorsiones. Por un lado, se requiere de insumos de información plurales
y casi masivos, de manera que la mayoría de las empresas o productores se
entere de que puede acceder a fuentes de financiamiento a través del desarrollo
de capacidades tecnológicas y de innovación. Como sistema de incentivo, el
financiamiento ha funcionado bien para un grupo de agentes muy particulares,
empresas medianas con ciertas capacidades instaladas y con cierta trayectoria en
la I+D para las cuales su participación en los mecanismos de apoyo
gubernamental son potencializadores de los desarrollos previos. Pero esto se
contrapone con los beneficios que pueden tener los pequeños productores o
regiones, los cuales no pueden acceder a este tipo de recursos debido a sus
propias características, a la falta de información y organización.

En el caso de los estados analizados, vemos que sólo Guanajuato ha establecido


un mecanismo de incentivos a través de las redes de innovación; ni Sonora ni
Yucatán han establecido un política estatal que les permita alinear intereses,
probablemente porque no existe la definición de prioridades, de manera que los
agentes en esta jerarquía responden mayormente a los incentivos planteados por
el nivel federal. A pesar de que los incentivos del nivel federal se contradicen o no
son claros en muchos aspectos.

Vale la pena recordar que en el Programa Especial de Ciencia, Tecnología e


Innovación 2008-2012 se plantea la importancia de apoyar las actividades de

93
En el caso de Sonora encontramos que existen grandes empresarios agroindustriales con capacidad de
invertir en I+D sin embargo, consideran más rentable destinarlas a la adquisición de franquicias tipo
Starbucks, Oxxo o 7 Eleven, las cuales representan un ingresos seguro. No existe la cultura del emprendedor,
ni mucho menos de la innovación.

243
innovación biotecnológica, además de proponer el fortalecimiento de la
apropiación social del conocimiento, la innovación y sobre todo el reconocimiento
público del carácter estratégico de la articulación de los agentes involucrados. Sin
embargo, no existen mecanismos reales de política pública o planes estratégicos
sectorizados que lleven a cabo dichos propósitos. Que exista una regulación para
los organismos genéticamente modificados y al mismo tiempo la propuesta de
desarrollar el sector, no plantea concordancia entre una y otra acción.

Como se explicó en el capítulo 7 dedicado a los casos estatales, Sonora y


Guanajuato han determinado como áreas estratégicas el desarrollo biotecnológico,
sin que esto haya significado la puesta en marcha de acciones reales o efectivas.
No existen definiciones claras de objetivos, metas, capacidades y límites para
dicho fin.

10.1.3 ¿Qué tipo de interacciones existen entre los principales agentes


relacionados con la Biotecnología Agroindustrial - Alimentaria?

Destaca que lo que más hace falta en el sector es la interacción, los tres casos
analizados muestran en este sentido que se adolece de conectividad. No ha sido
posible aún establecer los canales de diálogo, transmisión de inquietudes,
proyectos conjuntos entre diversos agentes, búsqueda de solución de problemas,
establecimiento de agendas conjuntas, comunicación fluida. Todo esto significa,
que no hay un empate entre demanda y oferta en el sector, no se ha logrado
generar mecanismos efectivos de transferencia y vinculación, porque en principio
no hay difusión de la información por parte de los que realizan investigación,
tampoco hay canales de discusión y poca demanda. Es importante retomar las
características de la demanda de las empresas en México mencionadas en el
capítulo 9, por un lado como ya se menciono en el capítulo existen en el país
grandes empresas biotecnológicas de nivel mundial como Bayer Crop Science,
Dow AgroScience, Monsanto, Dupont Pioneer y Syngenta las cuales realizan I+D
en laboratorios propios y que establecen pocas relaciones con las capacidades
científicas del país. Después se encuentran algunas empresas nacionales grandes
como IASA, BIODERPAC o Ingenio La Gloria, las cuales si establecen vínculos
cooperativos para la I+D y que son las que mayoritariamente aprovechan los
incentivos gubernamentales y finalmente las pequeñas y medianas empresas,
además de los productores que son los que mayormente requieren crear y
fortalecer capacidades tecnológicas, pero por su propia estructura encuentran más
barreras que incentivos. Lo que vemos es que aunque potencialmente puede
haber demanda importante de conocimiento biotecnológico, en la realidad este no
es solicitado. Además de la estructura de la demanda, la estructura de la oferta de
producción de conocimiento se ve permeada por una dinámica que no promueve
244
mecanismos de transferencia tecnológica hacia los ejidatarios o productores y en
muchas ocasiones tampoco existen mecanismos de comunicación para las
pequeñas y medianas empresas.

No hay una correcta alineación de los incentivos entre los agentes, de manera que
las interacciones se han visto permeadas por la desconexión. A pesar de que la
investigación que se realiza en las IES o los centros la mayoría de las veces es
potencialmente aplicable a las necesidades de la región, sin embargo, son pocos
los que acuden debido a la ausencia de un mercado de información bien definido.

10.1.4 ¿Cuáles son los agentes portadores de la innovación y qué tipo de


innovación se da en el sector?

Las empresas son las portadoras de la innovación, sin embargo destaca que ésta
no sería posible sin la intervención de la investigación científica que les
proporcionan las IES o los centros. La gran mayoría de las empresas analizadas
en esta investigación dieron cuenta de la importancia que para ellas ha tenido el
establecimiento de colaboraciones, la capacitación de sus trabajadores o la
existencia de por lo menos un agente convencido del potencial de la innovación,
generalmente el dueño de la empresa.

La innovación en este sector en México se encuentra dominada por mejoras


incrementales o procesos de adaptación. Sólo localizamos dos casos de
empresas que de acuerdo a la propuesta de indicador que se genero aquí, se
encuentran en trayectorias de relevancia a nivel internacional. La gran mayoría de
la innovación en Biotecnología Agroindustrial –alimentaria es sustitutiva de
importaciones, adaptativa y basada en mejoras incrementales de proceso y
producto. Lo cual es parte de un proceso de aprendizaje tecnológico (Villavicencio
y Arvanitis, 1994), ya que para poder escalar en el estado de la innovación, es
necesario primero solucionar aspectos básicos y requerimientos muy puntuales.
En el trabajo de campo se constato que hay empresas o productores que
enfrentan problemas relativamente fáciles de solucionar a nivel tecnológico, pero
que no han podido hacerlo debido a sus propias características, pero una vez que
lo hacen se insertan en una senda de confianza en la investigación, lo cual les
brinda las habilidades necesarias para embarcarse en proyectos más
demandantes o agresivos. Justamente porque pueden generar capacidades de
absorción, lo cual les facilita el camino de la innovación. Por más pequeña que se
la innovación, esta puede ser sumamente relevante para el contexto de la
empresa, del productor, de la región, del sector o del propio país.

245
Al respecto de este tema a través de las entrevistas que se realizaron con las
empresas presentadas como casos en el capítulo 9 vemos como hay distintos
procesos que pueden generar trayectorias exitosas. En el caso de BIODERPAC
es ilustrativo como se complementaron capacidades de investigación con
capacidades empresariales, al mismo tiempo que se descubrió una beta de
exploración de una nueva línea de investigación y producción, que a su vez
solucionaba un problema industrial de manejo de desechos orgánicos y un
conflicto ecológico. Todo en conjunto con el impulso de dos personas
emprendedoras generó un negocio rentable que soluciona diversas problemáticas
y que derivó en distintos tipos de productos exitosos en el mercado nacional y
global. En este caso el marco institucional sirvió como soporte del desarrollo de la
empresa, no fue promotor, pero ha impulsado sus capacidades a través de
diversos fondos. La vinculación en este caso no ha sido un problema, ya que ha
estado presente desde el principio por la naturaleza de uno de los socios. Pero es
justo esto lo más relevantes, el hecho de que un investigador haya estado
dispuesto a entrar como socio en la empresa, demostrando que se pueden
conjuntar actividades de docencia, investigación y hacerse cargo del área de I+D
de una empresa que ahora está consolidada y sigue en expansión.

En el caso de IASA vemos como una empresa fue capaz de acumular


capacidades a lo largo del tiempo y de reconvertirlas tecnológicamente para ser
competitivos a nivel nacional e internacional. Destaca la importancia de la cultura
emprendedora asumida por la familia dueña de la empresa, por el gestor de I+D y
sobre todo por institucionalizar mecanismos de gestión tecnológica constantes e
integrarlos a sus prácticas comunes. En este caso los incentivos federales y
estatales sirvieron para potencializar y agilizar los procesos de I+D y la
comercialización de los mismos. Aquí también ha sido relevante el papel de la
colaboración universidad – empresa como principal mecanismo en la generación
de capacidades tecnológicas y de innovación en la empresa. Lo que destaca es
que a pesar de la mala experiencia inicial con las vinculaciones, fue gracias a los
requerimientos en la participación de unos de los fondos federales, que la
empresa se vio obligada a generar relación con un centro de investigación, pero
después de un tiempo y gracias a los resultados logrados se dieron cuenta de los
mutuos beneficios que esto provocaba, por lo que ahora están convencidos de
mantener colaboraciones.

En los casos analizados no ha sido relevante el marco institucional regulatorio ya


que por el tipo de tecnología, proceso y producto no hay controversias en los
desarrollos, por lo que la incidencia más fuerte ha sido a través de los fondos
públicos, los cuales han sido acelerados y soporte de las estrategias de las
empresas.
246
La Biotecnología es una tecnología que por su cercana relación a la vida ha
generado una gran discusión en el mundo científico, tecnológico, empresarial y
social. A pesar de las pruebas que existen a favor y en contra, aún es difícil
establecer una posición en torno a los cauces que debería seguir. Y si bien en los
últimos años ha permeado la idea de que puede solucionar los problemas
mundiales de hambre y abasto esto aún no ha sido probado. Por lo que en México
deberíamos iniciar con mecanismos para dotar de información de calidad a la
población en general que de paso a un amplio e incluyente debate donde se
planteen riesgos y oportunidades del desarrollo biotecnológico agroindustrial-
alimentario. Sobre todo porque “México no puede adoptar una actitud radical,
porque tan importante es para el país la conservación de la biodiversidad, como
los negocios y acuerdos internacionales que tiene con relación a la
agroBiotecnología ” (Gálvez, 2000).

Pero es justamente este el reto más importante para México, plantear una
estrategia que respete la biodiversidad y que al mismo tiempo fomente aquellos
desarrollos que puedan significar mejores condiciones de vida para la población.
Lo anterior no se logrará a menos de que se plantee un plan sobre Biotecnología
en México, en el cual se tomen decisiones acerca de lo que se puede fomentar,
consolidar o limitar en el desarrollo biotecnológico. Además de que establezcan
claramente una regulación integral que considere a lo agrícola, ambiental, salud,
comercio e industria (Gálvez, 2000). Es necesario tomar decisiones basadas en el
mayor consenso posible fundadas en información científica y tecnológica veraz,
pero sin olvidar que esto también es un problema político donde hay inmiscuidos
intereses económicos diversos.

En esta investigación hemos partido de la hipótesis central que considera a la


Biotecnología como un posible motor de desarrollo económico y científico con
importantes derramas sociales; es por eso que el análisis presentado esta basado
en la dinámica a través de los incentivos para el desarrollo de capacidades de
innovación. Como hemos presentado previamente, aún existe una fuerte
desconexión entre los agentes involucrados, aún se mantiene una conducta
pasiva donde el gobierno actúa como el principal dotando de políticas y
distribuyendo recursos. Lo anterior más allá de generar incentivos para el
desarrollo del sector, por el contrario ha significado una barrera de crecimiento
para las innovaciones, ya que justamente por ser un sector con alta incidencia en
la vida humana, vegetal y con fuertes implicaciones sociales es que se debería
recurrir a una nueva estructura de gobernanza basada en la colaboración y
construida a través de procesos de negociación con todos o la mayoría de los
agentes involucrados. Se trata de caminar en la construcción de programas
247
multiactores y multidimensiones (MAP) (Casalet, 2009) en donde a través de la
discusión pensemos en cómo definir prioridades, cómo generar consensos y
acuerdos sociales. Sin la generación de redes interistitucionales y agentes
intermedios eficaces, será muy difícil construir metas comunes que ayuden al
desarrollo de la Biotecnología.

Esta tesis ha aportado algunos elementos para seguir en el camino de la


discusión, hemos visto como las políticas públicas a través de los instrumentos y
programas no ha podido alinear la conducta de los agentes, generando la
colaboración y participación. Más que incentivos, hay barreras porque más allá de
algunos pocos casos exitosos, no existe una política integral que ayude a superar
los límites de la investigación científica y la dinámica empresarial a través de una
política de vinculación. La falta de un mercado de información y de financiamiento
hace que un sector de por sí inmerso en la incertidumbre, genere aún más dudas
de sus alcances.

10.2 Contribuciones y Aportes al Campo de Conocimiento

Las aportaciones de esta investigación, son las siguientes: En términos


metodológicos, hemos aportado a la construcción del llamado “sector
biotecnológico agroindustrial-alimentario”. También logramos identificar y definir
qué es la innovación en el sector; se realizó un mapeo de los principales actores a
nivel nacional y estatal en cada uno de los casos, identificando las principales
capacidades científicas, tecnológicas y de innovación.

Teóricamente se logró la integración del tema institucional a través del diseño de


incentivos para comprender la dinámica de un sistema de innovación en
construcción. Ya que como se mencionó previamente, la propuesta de constructo
teórico “marco institucional” se integra gracias a las aportaciones de la teoría de
los Sistemas de Innovación y retoma aspectos de la nueva teoría institucional
sumando el tema de la importancia de los incentivos y las barreras a la innovación
en sectores de alta tecnología como la Biotecnología. Además de que propusimos
una taxonomía para evaluar a los diversos tipos de incentivos involucrados, así
como la importancia de las políticas públicas y su funcionamiento.

A pesar de las restricciones de información, obtuvimos datos muy importantes a


través del trabajo de campo que nos ayudaron a la caracterización del sector.
Finalmente, logramos a través de una serie de indicadores propuestos en esta
investigación situar el tipo de innovación que se realiza en el sector, lo que ayudo
a delinear la trayectoria tecnológica y la dinámica del mismo.

248
10.3 Líneas de Investigación Futuras

Esta investigación logró responder la mayoría de las preguntas planteadas, sin


embargo también se abrieron nuevas líneas de investigación. Ahora nos
preguntamos más cosas que al principio, por ejemplo ¿cómo construir un plan
estratégico para la Biotecnología que recoja la necesidad de proteger a la
biodiversidad, pero que al mismo tiempo promueva las capacidades de
innovación? O bien ¿cómo elaborar mecanismos de gobernanza que solucionen
las disparidades estatales y federales? ¿Cómo establecemos incentivos
coherentes con las capacidades científicas y tecnológicas de las comunidades
locales?. Pero sabemos que será labor de otra investigación indagar en las
nuevas líneas surgidas para poder tener respuestas puntuales a cada tema.

Debido al tema que se ha tratado y al haber hecho un análisis de las Instituciones,


se consideró de suma importancia hacer una reflexión en torno a lo que podrían
ser recomendaciones sobre políticas públicas en el sector, las cuales tienen que
ver con el diseño y el perfeccionamiento de los arreglos institucionales y con el
diseño de incentivos que reconozcan las especificidades del sector Biotecnológico
Agroindustrial-Alimentario. A continuación se presentan algunas de las ideas
centrales en el tema, como resultado de la investigación.

10.4 Propuestas y lineamientos de Políticas Públicas y Regulación

10.4.1 Leyes y Reglamentaciones

El tema de la regulación es en sí mismo complejo, para el caso de la Biotecnología


Agroindustrial - Alimentaria consideramos que es necesario aplicar principios tanto
de regulación económica como social, dado que es importante intervenir en la
estructura de mercado bajo el principio de competencia y competitividad sobre
todo porque existen grandes empresas internacionales como Monsanto y Agro
Down Science que en el mundo y en México dominan gran parte del mercado de
insumos agroindustriales, lo que los privilegia en términos de concentración de
mercado y prácticas desleales frente a los pequeños productores que mantienen
una posición de desventaja.

También es importante plantear esquemas de regulación social, dado que los


biotecnológicos tienen impacto en diversas áreas sociales, desde el medio
ambiente hasta la salud y alimentación humana; por lo tanto proponemos un
esquema de regulación basado en el principio de “riesgo” donde cabe la
posibilidad, más no la plena certeza de que algún evento no deseado se produzca
(COFEMER, 2012). Esto puede tener origen tanto en alguna falla de mercado,
249
como una externalidad o algún problema de información asimétrica. Pero también
puede venir de algún factor externo o del propio ambiente que resulta incierto.

En el caso de la Biotecnología y al no tener plena certeza del impacto de las


innovaciones en algunos planos, esta puede tener dos opciones, basarse en el
principio precautorio, lo que significa establecer regulaciones dirigidas a aminorar
riesgos potenciales, sin conocer con exactitud las relaciones de causalidad entre
el objeto sujeto a la regulación y sus riesgos, así como los posibles efectos de la
regulación. O bien, regular con la evidencia hasta ahora obtenida y comenzar un
amplio proceso de discusión acerca de la posición que se vaya tomar, ya que
aunque existen muchos estudios científicos rigurosos sobre la inocuidad y bajo
riesgo de la biotecnológica agroindustrial-alimentaria, también existen estudios
argumentando lo contrario. De manera que se deberían establecer mecanismos
de validación de dicha información, probablemente el mejor método sería formar
un panel de expertos reconocidos en las diversas áreas biotecnológicas en el país
y a partir de allí generar conclusiones y consensos de los que en verdad son
riesgos y lo que son potencialidades.

Es importante mencionar que la primera opción es justamente la que el gobierno


mexicano tomó durante mucho tiempo con el maíz (principio precautorio), pero a
su vez se corre riesgo tanto de sobre-regular94 o de sub-regular95 dado que se
establecen reglas que generalmente se mantienen estáticas por largo tiempo. Y en
el caso de México también inhibió la investigación científica en el maíz.

Vale la pena recalcar que el riesgo nulo es inalcanzable (COFEMER, 2012); una
sobre-regulación puede aminorar riesgos, pero también puede generar grandes
costos regulatorios y riesgos en otras áreas. Pero si se sub-regula, la población u
otros agentes involucrados pueden quedar vulnerables.

Como propuesta para los mecanismos regulatorios de la Biotecnología


Agroindustrial Alimentaria consideramos que es necesario retomar el enfoque
basado en riesgo, pero estimando y evaluando los niveles de contingencia y
revisando la respuesta óptima de acuerdo a criterios de máximo bienestar social y
eficiencia de los recursos regulatorios. Generar una regulación diferenciada que
obedezca a principios equitativos, que se evalúe constantemente y que se pueda
encontrar un punto eficiente entre el error tipo I y el tipo II, pero al mismo tiempo

94
Conocido como el error tipo II en donde las regulaciones establecen restricciones que superan a los riesgos
que se busca atender
95
Error tipo I donde las regulaciones fallan en atender a los riesgos existentes y generan graves consecuencias
en la población

250
establecer un panel de expertos que alimente la discusión, las propuestas y los
mecanismos.

Este punto nos lleva al siguiente, ya que si bien es importante redefinir los
mecanismos regulatorios existentes y crear nuevos, es muy relevante establecer
formas de “información, vigilancia y cumplimiento”. La primera porque el trabajo de
campo revelo que la gran mayoría de los actores involucrados con la
Biotecnología y la población96 en general, no conoce la existencia de la Ley de
OGM y mucho menos las regulaciones complementarias. De manera que un
primer paso es una amplia campaña de información de lo que hasta ahora se ha
avanzado en la materia, hacer participes a todos los actores incluyendo la
sociedad, con la finalidad de recibir retroalimentación. Una vez que los actores
conocen la legislación, éstos pueden tomar mejores decisiones o por lo menos,
decisiones basadas en información oportuna y clara. Por ejemplo, si los
investigadores conocen cómo funciona la legislación en torno a los derechos de
propiedad, ellos podrán decidir si participan en la I+D, en los procesos de
vinculación, en los licenciamientos o plantearse como objetivo el desarrollo de sus
propias empresas de base tecnológica.

La información brinda certidumbre y en un espacio como este, es fundamental


contar con ella, por eso destacamos como primer paso dotar a los agentes de ella,
como insumo para la toma de decisiones.

La existencia de un marco legislativo y regulatorio, no implica que por sí mismo


funcione. Su puesta en práctica depende de que los agentes lo conozcan, asimilen
y practiquen. Por lo tanto, se requiere de mecanismos de supervisión y vigilancia.
Es necesario encontrar la manera a través de la cual, las instituciones generen
leyes vivas y aplicables.

Si bien fue mencionado previamente, es importante destacar que actualmente la


COFEMER tiene el anteproyecto denominado “Acuerdo por el que se determinan
los centros de origen y los centros de diversidad genética del maíz en territorio
nacional”; dicho documento ha generado gran controversia, sobre todo porque hay
posiciones disímbolas en torno a el mismo. Desde los que opinan que es
permisivo y los que creen es prohibitivo. Más allá de esto, consideramos relevante

96
Basado en el trabajo La influencia de la percepción social en el desarrollo de la Biotecnología en
México. Ponencia presentada en IX Jornadas Latinoamericanas de Estudios Sociales de la Ciencia y la
Tecnología. México 2012. ISBN 978-607-02-3278-7

251
su existencia y su discusión ya que plantea mecanismos de uso y desarrollo de
investigaciones y pruebas en un tema delicado como lo ha sido el maíz en México.

10.4.2 Vinculación y Servicios de Calidad

Como se ha expuesto previamente, el sistema agroindustrial no ha encontrado los


mecanismos a través de los cuales vincular efectivamente oferentes con
demandantes. Esto es claro cuando vemos el proceso del extenionismo en el país;
ya que si bien la idea era generar justamente un mercado que ofreciera soluciones
a las necesidades de los productores, éste se ha instaurado como un sistema
captador de demanda, donde los PSP se encargan de conseguirles fondos para
sus proyectos, pero no existe ningún incentivo para que den continuidad y
evaluación. Además de que no cuentan con los conocimientos necesarios para dar
soluciones innovadoras a los requerimientos de los productores.

En este sentido consideramos que el extensionismo es una parte fundamental en


el proceso de innovación agroindustrial, si bien las fundaciones PRODUCE han
desarrollado un mecanismo propio a través de la integración de sistemas producto
y el sistema de investigadores, esto se puede complementar con la
instrumentación de varias opciones. Proponemos dos opciones, la primera implica
que se establezca una comisión evaluadora de los PSP, en la cual se dicten
parámetros de calidad y certificación de los participantes. Con esto se puede
generar un directorio de aquellos que cuenten con las capacidades científicas y
tecnológicas necesarias para dar respuesta a las necesidades de los productores.

En segundo lugar, proponemos que se establezca una oficina puente la cual


realice un censo de los grupos de investigación a nivel nacional, relacionados con
la Biotecnología agrícola – alimentaria, la cual pueda brindar servicios e
innovaciones a los productores. Establecer mecanismos de cooperación y un
nuevo arreglo institucional que haga realmente efectiva la conexión y
comunicación. De manera que más allá de un mero trámite burocrático para
obtener fondos por parte de los productores, se generen sinergias innovadoras.

Es necesario pensar en nuevos mecanismos de gobernanza de las relaciones


entre públicos y privados, de manera que las oficinas de transferencia tecnológica
se conviertan a través de diferentes procesos de aprendizaje en impulsoras de
“relaciones de confianza” y no sólo en oficinas de trámites, que jueguen un papel
más activo sobre todo como promotoras de nuevos comportamientos que
fortalezcan la creación de consensos.

252
10.4.3 Financiamiento y Administración

Otro de los elementos fundamentales que debe replantearse como parte la política
pública y del diseño institucional es el financiamiento; si bien en los últimos años
este ha aumentado considerablemente, es necesario generar mecanismos
diferentes a los de los apoyos por fondos públicos. Es necesario crear un mercado
de inversión, a través del cual se puedan fondear las innovaciones, si bien este es
un tema sumamente complejo y no lo concluiremos aquí, si podemos dar una serie
de ideas al respecto. Como se ha mencionado ya, la innovación en Biotecnología
tiene enormes grados de incertidumbre, por lo que en general desalienta la
inversión privada y los únicos motivados para realizarla son los propios
productores, sin embargo la innovación también tiene grados de diversidad. Lo
que hemos identificado en esta investigación es que en muchas ocasiones una
innovación con alto impacto en el mercado no requiere ser una innovación radical,
sino incremental o de proceso. Por lo tanto en el contexto mexicano se podría
generar una bolsa de productos financiables basados en estudios de mercado que
certifiquen un nivel de ganancia esperado mínimo para los inversionistas, y que de
alguna manera brinde certidumbre al proceso. Esto pensando en que una serie de
innovaciones incrementales, pueden apoyar a la mejora de la competitividad y en
el futuro se puede apostar por las radicales.

Otra propuesta se centra en la idea de generar una Banca de Inversión para la


Innovación que pueda financiar a través de préstamos con bajas tasas de interés a
proyectos que muestren características promisorias. Sabemos que las opciones
enunciadas aquí, son un tema que amerita una mayor discusión, pero no debemos
olvidar qué es necesario pensar en la diversificación del financiamiento, sobre todo
en este país donde sólo contamos con los apoyos públicos federales y algunos
estatales.

Debemos considerar como bien señala Casalet (2009) que la implementación de


una agenda de ciencia, tecnología e innovación depende de los propios sistemas
de innovación, del sector público, de la comunidad científica, de la vinculación con
el sector privado y de la sociedad civil. Por lo tanto es fundamental pensar en un
esquema de gobernanza que supere el modelo del principal y el agente, donde
sólo el gobierno controla las decisiones sobre objetivos, instrumentos y
posibilidades de política en el país. Es necesario construir nuevas formas de
organización basadas en redes que construyan un proceso basado en la
colaboración a través de la negociación, los acuerdos, las relaciones formales e
informales. Y todo esto sin duda, pasa por el tema del financiamiento y los canales
de distribución de los recursos.

253
El tema del financiamiento nos conduce a un tema aún más apremiante, que es el
tema de la definición de los objetivos de un sistema de innovación Agroindustrial-
Alimentario Biotecnológico, primero es necesario definir a la población objetivo,
recordemos que México muestra una dualidad de conformación en el sector, por
un lado se encuentran los grandes productores agroindustriales que han
tecnificado y que mantienen importantes tasas de productividad frente a los
pequeños y medianos productores dueños de pocas hectáreas y con bajos niveles
de productividad y que mayormente es producción de subsistencia. Esto implica
pensar en dos objetivos y dos tipos de necesidades, una que tiene que ver con
cómo se mejora la productividad de los pequeños y medianos productores, de
manera que puedan integrarse en organizaciones de productores de manera que
a través de mejoras incrementales puedan insertarse en cadenas de valor
relevantes, esto mediante el apoyo técnico- tecnológico y otro donde se resuelvan
necesidades de innovación de los grandes productores.

Definir e identificar a los actores del sistema ayudará a poder plantear objetivos
reales y alcanzables en un espacio temporal definido.

Una de las propuestas más recientes en el tema, es la que se desprende del


análisis hecho por la OCDE en 2011 sobre el sistema de innovación agrícola en
México, en el cual argumentan a favor de la creación de un Consejo Nacional para
la Innovación de la Agricultura, como órgano dependiente de la SAGARPA. En
términos generales es una idea interesante que habría que discutirse aún
profundamente, ya que más allá de la creación de más dependencias, es
necesario mejorar la dinámica, la relación entre organismos federales y estatales y
hasta entre las propias dependencias, esto significa lograr mejores acuerdos
interistitucionales y diseños institucionales coherentes. Aunque también se
reconoce que al concentrar la política y las decisiones en un solo órganos puede
ayudar a disminuir los costos de agencia y a mejorar los resultados.

10.4.5 Fondos de Apoyo

Si bien durante los últimos años el gobierno mexicano ha reconocido que el


contexto cambiante en el cual se encuentra inmersa la economía requiere de
nuevos planteamientos, aún no se ha encontrado la manera más eficiente de
diversificar las instituciones relacionadas con la innovación en el sector
agroindustrial- alimentario. El Estado necesita redefinir su papel con respecto a la
inversión de recursos públicos en la innovación del sector. Hasta ahora ha
trabajado en el establecimiento de un marco que involucre tanto al sector público
como el privado, y ha tratado de separar las funciones en tres niveles: formulación
de políticas primordialmente a través del SNITT, SINACATRI y SAGARPA;
254
financiamiento mediante el Fondo CONACYT-SAGARPA-COFUPRO y las
Fundaciones Produce y la ejecución a través de INIFAP. Además del marco
normativo a través de las cadenas de valor para apoyar la generación y difusión
de las tecnologías; el problema es que en la mayoría de ellas participan los
mismos agentes, existe un proceso de superposición y poca variedad, lo que ha
generado vicios en el esquema. A pesar de que existen espacios donde si hay
una diversificación institucional a través de la participación de universidades o
institutos de investigación, estos aún muestran graves deficiencias en la
transferencia de las tecnologías.

Los instrumentos utilizados como mecanismos de fomento, desarrollo o


consolidación de las capacidades científicas, tecnológicas y de innovación han
tenido muy diversos resultados. En nuestra evaluación, consideramos que los
programas de apoyo a las capacidades científicas han sido exitosos en cuanto que
cumplen con sus objetivos, en comparación con aquellos destinados a las
capacidades tecnológicas y de innovación. Los cuales han quedado rezagados por
diversos motivos. Es necesario reformular parte de la estructura de estos
mecanismos, de manera que se conviertan en verdaderos incentivos para el
sistema.

En el caso de las Fundaciones Produce, las cuales funcionan como captadoras de


demanda se presenta un problema muy importante. Al tener relación directa con
los productores en su mayoría pequeños agricultores, la prioridad estratégica se
concentra en la producción primaria, lo que ha llevado a la construcción de
carteras de investigación adaptativas y de corto plazo, por lo tanto, como fuente de
financiamiento no está impulsando el desarrollo de capacidades de innovación
radical, sino incremental. Sin querer decir que esto sea malo, si limita los posibles
resultados de este tipo de instrumento, al no considerar toda la cadena de valor.

Para todos los mecanismos de apoyo y financiamiento instaurados por el gobierno


federal, es necesario plantear sistemas de evaluación, tanto para los programas
como para los proyectos que se financian. Es necesario conocer el impacto de lo
que hasta ahora se ha apoyado, de manera que a través de un proceso de
retroalimentación se pueda avanzar en el proceso de aprendizaje institucional y
fortalecer el sistema.

Es necesario replantear en todos los programas de apoyo los mecanismos de


transferencia de la tecnología. Si la mayoría de los beneficiados son las IES o los
centros de investigación, es de vital importancia establecer vías de flujo del
conocimiento. Esto ayudará a generar complementariedades y conectividad,

255
probablemente a través del cambio en las reglas, donde se establezca la
participación colaborativa de todos los agentes involucrados.

En síntesis, se necesita trabajar en un gran consenso social que involucre a la


mayoría de los agentes relacionados con el sector, de manera que se trabaje en
un diseño institucional coherente, integrado y con incentivos y reglas claros para
cada uno de los participantes, incluyendo a la sociedad.

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Otros recursos

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Foro sobre Flujo Genético entre maíz criollo, maíz mejorado y teocintle:
implicaciones para el maíz transgénico. Realizado en el año de 1995, con sede en
el CIMMYT
Taller de Maíz Transgénico, organizados por el CNBA y la Asociación
Norteamericana de
Protección de Plantas (NAPPO)
Ley de Bioseguridad de Organismos Genéticamente Modificados (LBOGM),
(2005) México, http://www.diputados.gob.mx/LeyesBiblio/pdf/Ley_BOGM.pdf
Ley de Desarrollo Rural Sustentable (2001)
Plan Nacional de Desarrollo 2007-2012
274
Ley de Ciencia y Tecnología
Programa Especial de Ciencia y Tecnología de Guanajuato 2030
Ley de Fomento a la Investigación Científica y Tecnológica del estado de
Guanajuato
Plan Estatal de Ciencia y Tecnología de Guanajuato
Ley de Fomento a la Innovación y al Desarrollo Científico y Tecnológico de Sonora
2007
Reglamento Interior del Consejo Estatal de Ciencia y Tecnología. Sonora, 2009
Ley de Fomento a la Ciencia y Tecnología del Estado de Yucatán.

Anexo
1. Estado del arte de los estudios de la Biotecnología en el mundo
2. Grandes empresas con aplicaciones y usos de la Biotecnología en México
3. Empresas de Biotecnología en México
4. Entidades e investigadores en el campo de la biotecnología
5. Egresos por áreas seleccionadas CONACYT 2006
6. Miembros del SNI por área de la ciencia, 1997-2006p
7. SNI por área 2007, Guanajuato
8. Centros de Investigación relacionados con el sector alimentario/agroindustrial
en Sonora
9. Principales áreas de conocimiento en el estado de Sonora
10. Matrícula por nivel de escolaridad para el año 2004, Sonora
11. Matrícula por áreas de conocimiento para el año 2004, Sonora
12. Matrícula por área de conocimiento (2007-2008)
13. Número de SNI´s 2007, Sonora
14. Proyectos vigentes por modalidad FOMIX 2007, Guanajuato
15. Distribución de proyectos FOMIX por área de conocimiento, Guanajuato
16. Proyectos FOMIX, Guanajuato 2007
17. Instituciones participantes FOMIX y número de proyectos hasta el 2007,
Guanajuato
18. Proyectos registrados en el Fondo Sectorial SAGARPA-CONACYT-
COFUPRO. Guanajuato 2002-2005
19. Proyectos por área de demanda en el Fondo Sectorial SAGARPA-CONACYT-
COFUPRO. Guanajuato 2002-2005
20. Proyectos en el Fondo Sectorial SAGARPA-CONACYT-COFUPRO.
Guanajuato 2002-2005, por institución
21. Proyectos registrados en el Fondo Sectorial SAGARPA-CONACYT-
COFUPRO. Sonora 2003-2006
22. Proyectos por área de demanda en el fondo sectorial SAGARPA-CONACYT-
COFUPRO. Sonora 2003-2006
23. Proyectos en el Fondo Sectorial SAGARPA-CONACYT-COFUPRO. Sonora
2003-2006, por organización
24. Distribución de proyectos FOMIX por área de conocimiento, Sonora
25. Proyectos vigentes por modalidad FOMIX, 2007 Sonora

275
26. Proyectos vigentes por modalidad FOMIX, 2007 Yucatán
27. Distribución de proyectos FOMIX por área de conocimiento
28. Proyectos registrados en el fondo sectorial SAGARPA-CONACYT-COFUPRO.
Yucatán 2003-2006
29. Proyectos en el Fondo Sectorial SAGARPA-CONACYT-COFUPRO. Yucatán
2003-2006, por organización
30. Proyectos por área de demanda en el fondo sectorial SAGARPA-CONACYT-
COFUPRO. Yucatán 2003-2006
31. Análisis de la producción de conocimiento patentado de los proyectos
aprobados por el CONACyT 2007-2009. Rama industrial: Alimentaria y
agroindustrial.
32. Análisis de la producción de conocimiento patentado de los proyectos
aprobados por el CONACYT 2007-2009. Rama industrial: Alimentaria y
agroindustrial.

276
Anexo

1. Estado del arte de los estudios de la Biotecnología en el mundo


Nueva Zelanda D. Marsh (2003) Sistemas de Innovación (Freeman, 1987; Lundvall, 1992;
Nelson,1993)
Sistema Tecnológico (Carlsson,1999)
Sistema Nacional de Innovación Biotecnológica (Bartholomew,1997)

Taiwán Hsu, et al. (2005) Policy Tools (Rothwell ,et al. 1981)
Políticas Públicas (Lall &Teubal, 1998)

India K. Mehra (2001) Sistema Nacional de Innovación (Freeman, 1997; Lundvall, 1992)

Japón Fransman (1991); Instituciones Primarias e Instituciones de Soporte en el SNI


Linskey (2006); (Lundvall, 1992)
Woolgar (2007) Cambio Institucional, marco regulatorio , coevolución, cambios
legislativo s y regulatorios
Innovación Regional (Jaffe, 1989);

Nigeria Adeoti (2005) Sistema Nacional de Innovación (Freeman, 1987; Lundvall, 1992;
Nelson,1993)

Portugal Fontes & Novais Oportunidades Tecnológicas (Nelson &Winter, 1982; Malerba
(1998) &Orsenigo, 1996; Breschi, 2003)
Sistema Nacional de Innovación (Lundvall, 1992)

Canadá Niosi &Bas (2004); Sistema Nacional de Innovación (Freeman, 1987; Lundvall, 1992;
Niosi &Banik (2005) Nelson,1993)
Sistema Nacional de Innovación Biotecnológica (Bartholomew,1997)
Sistemas Regionales de Innovación
Incentivos

Países Bajos Van del Valk, et al. Regimen tecnológico y oportunidades tecnológicas (Nelson &Winter,
(2009) 1982; Malerba &Orsenigo, 1996; Breschi, 2003)
Administración de la Biotecnología (Khilji et al. 2006)
Socio-cognitivo y enfoque institucional (Bijker & Law, 1992; Garud
&Rappa, 1994; Rao, 2001)

Estados Senker (1996), Relación U-E (SIN Lundvall, 1992)


Unidos Gittelman (2006) Entrepreneurship ( Mowery & Shane, 2002); Arenas Institucionales (
Latour & Woolgar, 1979)
Redes inter-organizacionales (Bartholomew, 1997; Casper &Whitley,
2004)

Alemania Momma &Sharp Rigideces Tecnológicas


(1999); Kaiser & Cambio Institucional
Prange (2004); Sistemas Nacionales de Innovación (Freeman, 1987; Lundvall, 1992;
Dohse (1999) Nelson,1993)
Elaboración propia

277
2. Grandes empresas con aplicaciones y uso de la Biotecnología en
México

Nombre de la Empresa Área o Sector


Coca- Cola Femsa Bebidas
Grupo Modelo Bebidas
Pepsico Bebidas
Nestle Alimentos
Femsa Cervezas Bebidas
Grupo Industria Lala Bebidas y Alimentos
Kimbrely Clark de México
Grupo Sabritas Alimentos
Sigma Alimentos Alimentos
Grupo Bachoco Alimentos
British American Tobacco Cigarros
CIGATAM Cigarros
Gamesa Alimentos
Desc. Sector Químico Química
Grupo Bimbo Alimentos
Pfizer Química y salud
Roche Corp. Química y salud
Merck Sharp & Dome Química y salud
Bayer de México Química y salud
Grupo Novartis Química y salud
Schering Plough Química y salud
Farmacias del Ahorro Química y salud
Grupo Herdez Alimentos
Glaxo Smith Kline Química y Salud
Grupo Celanese
Aventis Pharma Química y Salud
Seminis (Monsanto) Frutas y Hortalizas
Novartis Farmacéutica Química y salud
Bristol Myers Squibb Química y salud
Boehringer Ingelheim Promeco Química y salud
Nacional de Drogas Química y salud

Construido a partir del PECiTI (2001-2006).

3. Empresas de Biotecnología en México


Sector Nombre de la Empresa Estado
Agraquest de México S.A.de C.V. Tlaxcala
Agrícola Genética S.A.de C.V Distrito Federal
Agrobiológica S.A. de C.V. Sinaloa
Agrobioquim S.A. de C.V. Tamaulipas
Agroindustriales El Álamo S.A de C.V. Baja California
Agromod S.A. de C.V. Chiapas
Agronova S.A.de C.V. Guadalajara
Agroproductos y Servicios Orgánicos de Uruapan Michoacán
Agrobilógicos de Sinaloa S.A.de C.V. Sinaloa
(AGROBIONSA)
Alianza con la Biosfera (Ali-Bio) S.A.de C.V. Distrito Federal
Agroindustrial Alltech de México S.A.de C.V. Distrito Federal
Alternagro S.A.de C.V. Estado de México

278
Atlapalli México S.R.L. Distrito Federal
Basf S.A de C.V. Estado de México
Berni Laboratorios S.R.L. Aguascalientes
Bioderpac S.A.de C.V. Sonora
Biofábrica Siglo XXI S.A DE C.V. Morelos/D.F.
Grupo Savia (Savia, S. A de C.V.) Nuevo León
Biogenética Mexicana S.A.de C.V Michoacán
Bioextracto S.A de C.V. Distrito Federal/Qro.
Biotec Internacional S.A.de C.V Nuevo León
Biotecnic S.A de C.V Distrito Federal
Bioteksa, S.A de C.V. Chihuahua
Buckman Laboratories S.A.de C.V. Morelos
Grupo Agrícola “Joel” S.P.R. de R.L. DE C.V. Chihuahua
Corporación Bioquímica de México S.A.de C.V. Estado de México
Chemoniva Agro S.A. de C.V. Distrito Federal
Dow Agrosciences de México S.A.de C.V. Guadalajara
Dupont México S.A. de C.V.
Farmacia Agroquímica de México S.A. de C.V. Coahuila
Grupo Bioquímico Mexicano S.A. de C.V. Coahuila
Hidroponia Maya S.A. de C.V. Quintana Roo
Haifa Chemicals S.A. de C.V. Distrito Federal
Humus Líquido S.A. de C.V. Nayarit
Industrias Vepinsa S.A. de C.V. Sinaloa
Ingeniería Industrial S.A. de C.V. Estado de México
Internacional Química de Cobre S.A. de C.V. Distrito Federal /Edo.
Méx.
Insumos Agrícolas de Nayarit S.A. de C.V. Nayarit
Invernamex S.A.de C.V. Estado de México
Laboratorios Agroenzymas S.A. de C.V. Estado de México/ Tlax.
Mezclas y Fertilizantes S.A. de C.V. Guanajuato
Monsanto Comercial S.A. de C.V. Distrito Federal
Naturalmente Pureza S.A. de C.V. Durango
Nutrimentos Vegetales S.A. de C.V. Estado de México
Palau Bioquim S.A. de C.V. Coahuila
Pepsico de México (Centro de I+D Agrícola) S.R.L. Estado de México
de C.V.
Plant Health Care de México S.R.L. de C.V. Distrito Federal
Polaquimia S.A. de C.V. Distrito Federal
Pro- Agro Sinaloa
Productos Blitzer S.A. de C.V. Jalisco
Productos Químicos de Chihuahua S.A. de C.V. Chihuahua
Produterra S.A. de C.V. Distrito Federal
Promotora Técnica Industrial S.A. de C.V. Distrito Federal
Prosi S.A. de C.V. Estado de México
Provindisutrias de Occidente S.A. de C.V. Jalisco
Quimcasa de México S.A. de C.V. Estado de México
Champiñones Camargo S.A. de C.V Chihuahua
Química Amvac de México S.A. de C.V. Jalisco
Química Foliar S.A de C.V. Estado de México
Química Internacional Aplicada (QUIMIA) S.A. de Sinaloa
C.V
Química Lucava S.A. de C.V. Estado de México/Gto.
Química Sagal S.A. de C.V. Nuevo León
Rancho Aldave Estado de México

279
Synbios S.A. de C.V. Querétaro
Syngenta Agro S.A. de C.V. Distrito Federal
Técnica Agrícola Chiapas S.A. de C.V. Chiapas
Tekchem S.A. de C.V. Distrito Federal/Gto.
Valent de México S.A. de C.V. Jalisco
Velsimex S.A. de C.V. Distrito Federal
Vitromotz Veracruz
Almidones Mexicanos S.A.de C.V. Jalisco
Auroquim S.A. de C.V. Jalisco
Bimbo S.A. de C.V. Distrito Federal
Cargill de México S.A. de C.V. Distrito Federal
Champiñones San Miguel S.A. de C.V. Guanajuato
CHR Hansen de México Distrito Federal
Citrex S.A. de C.V. Distrito Federal
Alimentos Citrofut S.A. de C.V. Nuevo León
Coyotefoods Biolpolymer and Biotechnology S.R.L. Coahuila
CPIngredientes S.A.de C.V. Jalisco
Danisco Mexicana S.A. de C.V. Distrito Federal
Danone de México S.A. de C.V. Distrito Federal
Deiman S.A. de C.V. Distrito Federal
Degussa Flavors and Fruits Systems México S.A. Distrito Federal
de C.V.
Fortitech México S.A. de C.V. Distrito Federal
Grupo Gamesa S.R.L. de C.V. Distrito Federal
Grupo Industrial Maseca Distrito Federal
Elaboración propia con datos de La Biotecnología en México. Informe elaborado por Trikarty e Hiperion
Biotech para Genoma España 2005, RENIECYT 2009, Corona 2006, Solleiro 2008.

4. Entidades e investigadores en el campo de la biotecnología


Depende de: Número Entidades Núm.
de Investi
entidades gador
es
SAGARPA 4 CP,INIFAP,U.A.A.N y U.A. Chapingo 72
SEP 4 Institutos Tecnológicos Agropecuarios 21
6 Institutos Tecnológicos
1 Instituto Tecnológico Forestal
3 Centros de Investigación (CINVESTAV) 87
CONACYT 9 Unidades (6 centros, 1 colegio y 2 institutos) 79
SSA 11 Unidades (8 Institutos Nacionales, 1 Dir., 2 Hosp.) 44
IMSS 2 Centros de Investigaciones Biomédicas (Occidente y Sur) 30
Centros Médicos Nacionales (La Raza y Siglo XXI)
2
SENER 1 Instituto Mexicano del Petróleo 11
Instituto de Investigaciones Nucleares 2
SEMARNAT 1 Instituto Mexicano de Tecnología del Agua, CNA 1
SEDENA 1 Universidad del Ejército y Fuerza Aérea 2
UAM 2 Planteles Iztapalapa y Xochimilco 26
UANL 6 Facultades 27
U. de G. 3 Centros Universitarios 18
UNAM 1 Centros de Investigación 184
7 Facultades
9 Institutos de Investigación

Otras Universidades 23 Universidades Autónomas y Estatales 99

280
IPN 5 Centros 49
1 Escuelas Nacionales
1 Unidad Profesional
Centro Internacional 1 Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo 1
(CIMMYT)
Centro 2 Centro de Ciencias de Sinaloa 0
Público/Instituto Instituto Tecnológico de Sonora
Tecnológico Autónomo
Instituciones Privadas 3 Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de 9
Monterrey
Fundación Universidad de las Américas Puebla
Fundación Clínica Médica Sur
Total 109 Entidades 762
Tomado de Bolívar et al. 2003

5. Egresos por áreas seleccionadas CONACYT 2006


Ciencias Ciencias de la Ingeniería y Total por año
Agropecuarias Salud Tecnología
Año
1995 373 533 1,614 2,520
1996 431 536 2,025 2,992
1997 530 639 2,172 3,341
1998 539 585 2,146 3,270
1999 471 558 2,711 3,740
2000 582 721 2,919 4,222
2001 602 802 3,136 4,540
2002 533 811 3,476 4,820
2003 556 968 4,025 5,549
2004 576 1,013 4,304 5,893
2005 585 1,088 4,670 6,343
2006 593 1,163 5,036 6,792
Total por áreas 6,371 9,417 38,234
Elaboración Propia con datos de CONACYT, Indicadores Científicos y Tecnológicos

6. Miembros del SNI por área de la ciencia, 1997-2006p

Año Ciencias Biología y Medicina y Humanidades Ciencias Biotecnología Ingeniería TOTAL


Físico Química Ciencias y Ciencias de Sociales y Ciencias
Matemáticas de la Salud la Conducta Agropecuarias
y de la
Tierra
1997 1,436 1,314 650 1,118 673 463 624 6,278
1998 1,571 1,406 703 1,172 675 530 685 6,742
1999 1,621 1,435 721 1,266 738 642 829 7,252
2000 1,569 1,435 765 1,269 810 700 918 7,466
2001 1,612 1,436 846 1,362 920 856 986 8,018
2002 1,771 1,661 927 1,552 1,096 1,011 1,182 9,200
2003 1,878 1,767 1043 1,700 1,233 1,131 1,437 10,189
2004 1,968 1,776 1,168 1,798 1,369 1,257 1,568 10,904
2005 2,074 1,891 1,343 1,964 1,608 1,441 1,775 12,096
2006p/ 2,278 2,179 1,427 2,170 1,854 1,588 1,989 13,485
p/ Cifras preliminares.

281
El total puede no coincidir debido a que el reporte se generó después de los resultados de reconsideración.
Fuente: Conacyt, Base de datos del SNI, 1997-2006.

7. SNI por área 2007, Guanajuato

SNI por área 2007


Medicina y Cs de la Salud Cs. Sociales Económicas y Políticas
Humanidades y Cs. de la Conducta Biología y Química
Biotecnología y Cs. Agropecuarias Cs. De la Ingeniería
Física, Matemáticas y Geociencias

145

66 81
58
19 20 22

CONACYT (2007) Dirección Adjunta de Desarrollo Científico y Académico

8. Centros de Investigación relacionados con el sector alimentario/agroindustrial en


Sonora
Año de creación Nombre Líneas de Localización
investigación
1943 Centro Internacional de Biotecnología, semillas Cajeme
Mejoramiento de Maíz y transgénicas y
Trigo mejoramiento genético
de maíz y trigo
1944 Centro Regional de Biológica-pesquera, Guaymas
Investigación Pesquera análisis de impacto
ecológico-económico de
artes de pesca
alternativos, bio-
seguridad y calidad en
cultivos acuícolas
1955 Centro de Investigación Cadenas Cajeme
Regional Noroeste- agroindustriales,
INIFAP forestales, agrícolas y
pecuarias, inocuidad
alimentaria y
transferencia de
tecnología
1955 Instituto Tecnológico de Utilización de energía Cajeme
Sonora eléctrica, calidad de
agua, planeación y
manejo de
hidrosistemas, sanidad y
producción animal

282
1963 Departamento de Desertificación, ecología, Hermosillo
Investigaciones agronomía de especies
Científicas y nativas y domesticación,
Tecnológicas de la silvicultura y recursos
Universidad de Sonora naturales renovables
(DICTUS)
1969 Centro de Manejo de pastizales, Hermosillo
Investigaciones nutrición en agostadero y
Pecuarias de Sonora forrajes de riego
1978 Departamento de Hermosillo
Investigación y Posgrado Estudios de calidad
en Alimentos de la nutricional de granos,
UNISON (DIPA) leguminosas y cereales,
entomología de
productos almacenados,
control de calidad y
evaluación sensorial de
productos acuícolas
1981 Centro Regional Tecnología agrícola y Cajeme
Universitario del pecuaria, mercados
Noroeste (CRUNO) agropecuarios y
Universidad Autónoma organización social para
Agraria Antonio Narro el desarrollo rural.
(Chapingo)
1982 Centro de Investigación Nutrición, ciencia de los Hermosillo
en Alimentación y alimentos, tecnología de
Desarrollo (CIAD) alimentos de origen
animal y vegetal,
desarrollo regional,
acuicultura y manejo
ambiental
1984 Centro de Acuacultura, agricultura Guaymas
Investigaciones en zonas áridas,
Biológicas del Noroeste ecología pesquera,
(CIBNOR) planeación ambiental y
conservación.
2004 Centro de Promoción a Desarrollo y Hermosillo
la Acuacultura (ITESM) transferencia de
tecnología para la
acuacultura, patología y
sanidad acuícola,
producción de
reproductores de
camarón libres de
enfermedades.
Instituto de Acuacultura Cría de peces Hermosillo
del Estado de Sonora, dulceacuículas, semilla
Bahía de Kino (IAES) de moluscos bivalvos.
Elaboración de
proyectos de inversión
técnicos y financieros en
actividades acuícolas,
pesqueras y de
ecoturismo.

Elaborado a partir de la información presentada por Sotelo (2008) y por la Comisión de Fomento Económico
del estado de Sonora (2009)
Nota:
Algunos de ellos cuentan con subsedes, pero sólo se hace mención de la oficina central. Se dejaron fuera
algunos centros de investigación científica y tecnológica o bien económico-social, dado que interesa

283
centrarnos en aquellos relacionados con el tema de esta investigación. Parte de la información presentada en
este apartado fue obtenida gracias a la colaboración del Dr. León (Profesor-Investigador CIAD-Hermosillo)

9. Principales áreas de conocimiento en el estado de Sonora

CONACYT 2010. SIICYT

10. Matrícula por nivel de escolaridad para el año 2004, Sonora


Nivel de escolaridad Matrícula
Técnico superior 4,362
Licenciatura* 64,152
Especialidad 138
Maestría 3,390
Doctorado 94
Total 72,136
*Incluye la matricula de educación normalista (4,516 estudiantes) Tomado de Rodríguez, et al. 2007

11. Matrícula por áreas de conocimiento para el año 2004, Sonora


Área Matrícula Porcentaje del total (%)
Ciencias Sociales y administrativas 31,834 44.13
Ingeniería y Tecnología 21,906 30.36
Educación y Humanidades 11,143 15.44
Ciencias de la Salud 3,394 4.70
Ciencias Exactas y Naturales 2,626 3.64
Ciencias Agropecuarias 1,233 1.70
Total 72,136 100
Tomado de Rodríguez, et al. 2007
12. Matrícula por área de conocimiento (2007-2008)
Área Matricula Matricula Matricula Total*
Maestría Doctorado
Ciencias Agropecuarias 26 0 26
Ciencias de la Salud 146 0 159
Ciencias Naturales 125 94 219

284
Ciencias Sociales y Administrativas 2499 244 2951
Educación y Humanidades 1439 69 1616
Ingeniería y Tecnología 227 4 242
Total 4462 411 5213
*La matricula total considera también a la matricula de especialidad Fuente: Anuarios Estadísticos 2005-2008.
ANUIES

13. Número de SNI´s 2007, Sonora

CONACYT (2007) Dirección Adjunta de Desarrollo Científico y Académico

14.

Fuente: Estado del Arte de los Sistemas Estatales de la Ciencia y la Tecnología. Guanajuato 2007.
CONACYT 2008

285
15.

Elaboración propia con datos del Estado del Arte de los Sistemas Estatales de la Ciencia y la Tecnología.
Guanajuato 2007. CONACYT 2008

16.

Elaboración propia con datos del Estado del Arte de los Sistemas Estatales de la Ciencia y la Tecnología.
Guanajuato 2007. CONACYT 2008

286
17.

Elaboración propia con datos del Estado del Arte de los Sistemas Estatales de la Ciencia y la Tecnología.
Guanajuato 2007. CONACYT 2008

18.

Elaboración propia con datos de los Proyectos SAGARPA 2002-2006

287
19.

Elaboración propia con datos de los Proyectos SAGARPA 2002-2006

20.

Elaboración propia con datos de los Proyectos SAGARPA 2002-2006

288
21.

Elaboración propia con datos de los Proyectos SAGARPA 2002-2006

22.

Elaboración propia con datos de los Proyectos SAGARPA 2002-2006

289
23.

Elaboración propia con datos de los Proyectos SAGARPA 2002-2006

24.

290
Elaboración propia con datos del Estado del Arte de los Sistemas Estatales de la Ciencia y la Tecnología.
Sonora 2007. CONACYT 2008
25.

Fuente: Estado del Arte de los Sistemas Estatales de la Ciencia y la Tecnología. Sonora 2007. CONACYT
2008

26.

Estado del Arte de los Sistemas Estatales de la Ciencia y la Tecnología. Yucatán 2007. CONACYT 2008

291
27.

Estado del Arte de los Sistemas Estatales de la Ciencia y la Tecnología. Yucatan 2007. CONACYT 2008

28.

Elaboración propia con datos de los Proyectos SAGARPA 2002-2006

292
29.

Elaboración propia con datos de los Proyectos SAGARPA 2002-2006

30.

Elaboración propia con datos de los Proyectos SAGARPA 2002-2006

293
31.
Análisis de la producción de conocimiento patentado de los proyectos aprobados por el CONACyT 2007-2009.
Rama industrial: Alimentaria y agroindustrial.

Estados Unidos (USPTO) México (SIGA)


CIP/País CIP/País
Total % No. Proyectos Total % No. Proyectos
A01H 16,770 22.0 2 A23L 122 23.5 4
A01N 14,828 19.5 4 A01N 72 13.8 4
A01K 8,110 10.6 2 A23G 42 8.1 0
H02J 7,023 9.2 1 A23C 34 6.5 1
A23L 6,178 8.1 4 H02J 30 5.8 1
C02F 2,981 3.9 1 A01B 28 5.4 0
A01G 2,981 3.9 2 A01C 23 4.4 5
A01D 2,856 3.7 1 A23K 22 4.2 2
A01B 1,794 2.4 0 A01G 16 3.1 2
A01M 1,705 2.2 0 A23B 15 2.9 4
A23G 1,620 2.1 0 A23J 14 2.7 1
A01C 1,278 1.7 5 A01K 11 2.1 2
A23K 1,276 1.7 2 A23P 11 2.1 0
A23C 1,067 1.4 1 A01D 10 1.9 1
A23B 910 1.2 4 A01M 10 1.9 0
A01F 760 1.0 1 A61D 10 1.9 1
A23J 745 1.0 1 C02F 8 1.5 1
A23P 683 0.9 0 A01H 8 1.5 2
A23D 645 0.8 0 A23F 8 1.5 0
A01J 520 0.7 0 A23N 7 1.3 0
A61D 474 0.6 1 A01J 6 1.2 0
A23N 411 0.5 0 A23D 6 1.2 0
A23F 357 0.5 0 A01F 3 0.6 1
A01L 184 0.2 0 A01P 3 0.6 0
A01P 54 0.1 0 A01L 1 0.2 0
NE 6 NE 6
Total RI 76,210 100 38 Total RI 520 100 38

294
32.
Análisis de la producción de conocimiento patentado de los proyectos aprobados por el
CONACYT 2007-2009. Rama industrial: Alimentaria y agroindustrial.

Número de Patentes 2000-2010


Generalidades del proyecto
Estados Unidos (USPTO) México (IMPI)

No.
Descripción del CIP (a) (b) (c) (d) % (e) (c) (d) % (e)
Proyecto

72501 Métodos de fertilización A01C 21/00 A01C 43 1,278 3.4 0 23 0.0


72648 Congelación de frutas y verduras A23B 7/04 A23B 36 910 4.0 1 15 6.7
72792 Industria del azúcar en general A01D 45/10 A01D 16 2,856 0.6 0 10 0.0
72971 Parasiticidas o herbicidas en agricultura
A01N 25/00 A01N 414 14,828 2.8 4 72 5.6
73341 Invernaderos (campanas) A01G 9/14 A01G 40 2,981 1.3 3 16 18.8
79378 Procedimientos de modificación de los genotipos
A01H 1/00 A01H 2,065 16,770 12.3 1 8 12.5
79381 Métodos generales de conservación para A23Bcarne,
4/00 embutidos
A23B 101 910 11.1 3 15 20.0
79427 Conservación de cuerpos humanos oA01N animales,
1/00 o partes
A01N de ellos 147 14,828 1.0 0 72 0.0
79474 Deshidratación; rehidratación posteriorA23B 7/02 A23B 47 910 5.2 4 15 26.7
80167 Tratamiento biológico del agua, aguaC02Fresidual o de alcantarilla
3/00 C02F 600 7,630 7.9 6 59 10.2
80674 -- -- -- -- -- -- -- -- --
80765 Envoltura o preparación de las semillas
A01C 1/00 A01C 84 1,278 6.6 3 23 13.0
80967 Tratamiento de proteínas para la alimentación
A23J 3/16 A23J 70 745 9.4 5 14 35.7
81209 Alimentos o productos alimenticios; su preparación
A23L 1/00 o tratamien
A23L 638 6,178 10.3 23 122 18.9
81579 Que contienen aditivos A23C 9/152 A23C 119 1,067 11.2 2 34 5.9
81722 Almidón; almidón modificado; derivados
A23Lde almidón A23L
1/0522 128 6,178 2.1 10 122 8.2
81855 -- -- -- -- -- -- -- -- --
81874 Disposición en silos forrajeros A01F 25/16 A01F 18 760 2.4 0 3 0.0
81994 -- -- -- -- -- -- -- -- --
82042 Conservación o maduración química A23B de frutas
7/00o verduras
A23B 75 910 8.2 0 15 0.0
92603 Bioinsecticida en base a extractos vegetales
A01N 65/00 A01N 774 14,828 5.2 4 72 5.6
92755 Cría o cultivo de peces, cangrejos, langostas,
A01K 61/00 mejillones
A01K 203 8,110 2.5 4 11 36.4
92892 -- -- -- -- -- -- -- -- --
92972 Productos alimenticios para animalesA23K 1/00 A23K 384 1,276 30.1 8 22 36.4
92998 Cultivo de setas A01G 1/04 A01G 33 2,981 1.1 0 16 0.0
93104 Equipos para el pastoreo A01K 3/00 A01K 89 8,110 1.1 0 11 0.0
93105 Granos para aves de corral A23K 1/24 A23K 2 1,276 0.2 0 22 0.0
93108 Métodos de fertilización A01C 21/00 A01C 43 1,278 3.4 0 23 0.0
93149 Productos derivados A01H 5/02 A01H 68 16,770 0.4 0 8 0.0
93266 Métodos de fertilización A01C 21/00 A01C 43 1,278 3.4 0 23 0.0
93327 Productos a base de semillas de cereales
A23L 1/172 A23L 13 6,178 0.2 2 122 1.6
93344 -- -- -- -- -- -- -- -- --
129999 Productos a base de carne A23L 1/31 A23L 348 6,178 5.6 7 122 5.7
130335 Métodos de fertilización A01C 21/00 A01C 43 1,278 3.4 0 23 0.0
130503 Alimentaria y agroindustrial A01N 1/00 A01N 147 14,828 1.0 0 72 0.0
81923 Alimentaria y agroindustrial A61D 1/00 A61D 89 474 18.8 0 3 0.0
82040 -- -- -- -- -- -- -- -- --
79426 Sistemas de acumulación de energíaH02J eléctrica.
15/00 H02J 23 7,023 0.3 0 30 0.0
Fuente: Elaboración propia a partir de USPTO y SIGA.
(a) Subclase de la CIP asociada al proyecto.
(b) CIP asociada al proyecto analizado.
(c) Número de patentes otorgadas a la Subclase de la CIP asociada al proyecto, por la USPTO e IMPI.
(d) Número de patentes otorgadas a la CIP del proyecto, por la USPTO e IMPI.
(e) Participación de la subclase dentro de la CIP de la rama industrial.

295

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