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“AÑO DEL DIÁLOGO Y LA RECONCILIACIÓN

NACIONAL”

UNIVERSIDAD PRIVADA
ANTENOR ORREGO
FACULTAD DE MEDICINA HUMANA

Escuela Profesional De Psicología

Psicopatología Infantil, Adolescente y


Adulto – Historia Clínica

ASIGNATURA:
PSICOPATOLOGIA II
DOCENTE:
MOYA
INTEGRANTES:
- DAVILASANCHEZ, Ariana
- (chicos pongan sus nombres y de los demás)

2018 – I
TRUJILLO – PERÚ
2012-I INDICE

1.-Introducción:............................................................................................................................3
2.- Psicopatología.........................................................................................................................4

...Una gran
3.- Psicopatología Infanto-Juvenil................................................................................................5
3.1.- Definición........................................................................................................................5

Universidad
3.2.- Clasificación de los Trastornos Psiquiátricos Infanto-juveniles.......................................6
3.2.1.- Clasificación del Grupo de Avance de la Psiquiatría (GAP) de la Asociación
Psiquiátrica Americana.........................................................................................................6
3.2.2.- Clasificación Internacional de Enfermedades (CIE 10) y la clasificación de la
Asociación Americana de Psiquiatría (DSM IV)..................................................................8
5.- Formato de la Historia Clínica..............................................................................................11
6.- Bibliografía y Linkografia:...................................................................................................14
1.-Introducción:

El presente trabajo tiene como finalidad dar conocer alcances acerca de la psicopatología

infanto-juvenil y de la psicopatología en adultos así como también el formato de la

historia clínica. Dentro de la Psicología existen muchas ramas las cuales se centran

principalmente en todos y cada uno de los procesos mentales, como el inconsciente, los

procesos cognitivos, el aprendizaje social, como influyen los cambios fisiológicos en

nuestras emociones así como otro tipo de conductas. Pero dentro de esta gran variedad de

aspectos uno de los más importantes es la psicopatología o psicología anormal la cual

David Sue (2010) define como: “El estudio científico cuyos objetivos son describir,

explicar, predecir y controlar conductas que se consideran extrañas e inusuales”.

Dentro de la psicopatología tenemos el estudio de los trastornos en niños y adolescentes el

cual se preocupa del estudio transversal de la manifestación psiquiátrica como también

del estudio longitudinal de los cambios que este experimenta con el desarrollo. Para

precisar la existencia de la anormalidad psicológica es necesario comprender de qué modo

el proceso del desarrollo se aparta de lo esperado con respecto a la edad cronológica del

individuo.

De igual manera la psicopatología se encarga de analizar los trastornos en adultos, estos

en algunas situaciones tienen sus inicios en las anteriores etapas de la vida, sin embargo

debido a los cambios en los aspectos del hogar, sentimentales y del trabajo estos pueden

desarrollarse en la adultez presentándose por diversos motivos.

También se revisara el formato de la historia clínica la cual es instrumento que reúne

todos los datos disponibles que permiten descifrar y explicar el curso de la vida del

paciente en cuanto interesa para el estudio constituyendo la base para el diagnóstico, la

orientación y se completan con las observaciones y entrevistas realizadas así como el

resultado de las pruebas aplicadas y los informes de profesionales de otras disciplinas.


2.- Psicopatología

La psicopatología es la disciplina que analiza las motivaciones y las particularidades de

las enfermedades de carácter mental. Este estudio puede llevarse a cabo con varios

enfoques o modelos, entre los cuales pueden citarse al biomédico, al psicodinámico, al

socio-biológico y al conductual. La palabra psicopatología puede referirse a:

 Aquella área de salud que describe y sistematiza los cambios que se producen en

el comportamiento de los seres humanos y que no pueden ser explicados a través

de la maduración o del desarrollo del individuo y que se los conoce

como trastornos psicológicos.

 Al área de estudio de la psicología que se centra en estudiar aquellos estados no

sanos de la mente de los individuos, como ya hemos mencionado.

De esto se desprende que cualquier conducta que ocasione malestar, algún impedimento

o la discapacidad como consecuencia del deterioro de las funciones cerebrales

cognitivas es plausible de ser denominado como psicopatología.

La psicopatología es una disciplina que estudia lo anormal, lo desviado, lo trastornado,

etc; cuyo interés se centra en la naturaleza y las causas de la conducta anormal o

psicopatológica y se plantea como objetivo principal descubrir leyes que regulan la

conducta anormal o patológica mediante el método científico.

El interés de la psicopatología radica en la naturaleza y las causas de la conducta

anormal o psicopatológica. Sin embargo, es difícil establecer absolutamente y con total

precisión lo que debe entenderse por conducta anormal o psicopatológica, por lo cual es
útil conocer cuáles son los criterios o parámetros que nos permitirán ingresar al campo

de lo anormal o psicopatológico.

3.- Psicopatología Infanto-Juvenil

3.1.- Definición

La psicopatología infantil puede ser definida como el estudio científico de la

conducta anormal, o alteraciones conductuales, del niño. Dicho estudio científico

supone la descripción, la explicación y la clasificación de esa conducta y de las

variables responsables de las alteraciones conductuales que se producen durante el

período infantil (Luciano, 1989).

En el caso de las psicopatologías o trastornos psicopatológicos que se desarrollan

durante la infancia, niñez o adolescencia de un individuo podemos establecer que

existen varias tipologías entre las que se encuentra el retraso mental, los trastornos de la

comunicación, los trastornos generalizados del desarrollo, trastornos del aprendizaje,

trastornos por tics o trastornos de la ingestión y de la conducta alimentaria.

En el caso de los trastornos del desarrollo destacar que dentro de dicha definición se

incluyen aquellos que suponen que el individuo en cuestión sufra de una incapacitación

a distintos niveles. Dentro de esta categoría destaca, por ejemplo, el trastorno autista que

comienza en la infancia y que se traduce en una serie de incapacidades en lo que es el

área psicológica y también en el conductual.

Los cinco sentidos se ven afectados por anomalías en las personas autistas que además

se caracterizan por ser callados, apenas ríen, tienen limitaciones en materia de lenguaje

y comunicación y a nivel físico cuentan con una serie de deficiencias en la

lateralización.
Asimismo dentro de los trastornos psicopatológicos del desarrollo se encuentra también

el conocido como trastorno de Rett que se da en el género femenino y que se asemeja al

autismo en cierta medida. Un retraso mental así como en la coordinación motriz son las

dos señas de identidad de los pacientes de este síndrome que supone que aquellos

cuenten con una severa discapacidad en muchos sentidos.

En las últimas décadas, numerosos clínicos e investigadores interesados en el estudio de

los trastornos psicológicos de la infancia y la adolescencia han consolidado el modelo

teórico conocido como psicopatología evolutiva o psicopatología del desarrollo

(Cicchetti y Cohen, 1995a, 1995b; Cicchetti y Rogosch, 2002). En este enfoque de la

psicopatología, tanto la conducta normal como la anormal se entienden como

variaciones dentro de un continuo de rasgos o características y no como fenómenos

dicotómicos. Achenbach (1990), por ejemplo, refería que las conductas desviadas, que

normalmente son motivo de búsqueda de ayuda profesional, no son más que meras

variaciones cuantitativas de las características que pueden ser normales en ciertos

períodos del desarrollo.

3.2.- Clasificación de los Trastornos Psiquiátricos Infanto-juveniles

3.2.1.- Clasificación del Grupo de Avance de la Psiquiatría (GAP) de la Asociación

Psiquiátrica Americana

La clasificación de los trastornos psiquiátricos infantiles propuesta por el comité de

psiquiatría infantil del Grupo de Avance de la Psiquiatría (GAP) de la Asociación

Psiquiátrica Americana en 1996, formula una clasificación especialmente diseñada para

niños y adolescentes que tiene una base teórica amplia, considerando tanto los aspectos

psicosociales como los del desarrollo, incluyendo aspectos interacciónales, etiológicos y

fenomenológicos. Está constituida por 9 categorías jerarquizadas que se extienden desde

lo normal a lo más grave y desde lo más ambiental a lo más biológico, dejando abierta
una décima agrupación para otros trastornos (ver Tabla 1). Aunque esta clasificación no

ha tenido un papel importante en los estudios estadísticos de los trastornos psiquiátricos

infantiles, la ordenación que propone sigue siendo válida en la comprensión

psicopatológica y en la docencia. Su utilización deja implícito que no todo motivo de

consulta es una condición patológica y que puede corresponder a una respuesta normal.

El hecho de estar ordenada jerárquicamente facilita la comprensión de los diversos

trastornos que constituyen la especialidad.

TABLA 1

Clasificación del Grupo de Avance de la Psiquiatría (GAP) de la Asociación Psiquiátrica

Americana
TABLA 2
Clasificación Internacional De Enfermedades Cie-10 (Categorías Diagnósticas Para
Niños Y Adolescentes)

3.2.2.- Clasificación Internacional de Enfermedades (CIE 10) y la clasificación de la

Asociación Americana de Psiquiatría (DSM IV)

La existencia de ambos sistemas clasificatorios ha significado un estímulo recíproco al

perfeccionamiento de estos sistemas clasificatorios, estando en circulación desde 1993

la décima clasificación internacional y desde 1994 la DSM-IV. Además, han contribuido

a estimular en forma muy importante la realización de estudios de campo e

investigaciones ajustadas a los criterios Diagnósticos propuestos, lo que ha redundado


en un desarrollo importante de la psiquiatría, la construcción de numerosos

cuestionarios y entrevistas estructuradas o semiestructuradas para ser administradas a

los padres o a los niños, basados en los criterios diagnósticos de estas clasificaciones. El

uso de estos instrumentos de evaluación ha permitido aumentar la confiabilidad y

reducir la heterogeneidad en el proceso diagnóstico. Sin embargo, el aporte en la

práctica de estos cuestionarios es limitado, debido a que la información proporcionada

es insuficiente respecto a situaciones individuales del paciente, como también por la

escasa referencia a aspectos del desarrollo, ya que estos cuestionarios están orientados

fundamentalmente al estudio sindromático. Estos instrumentos pueden ser considerados

como auxiliares o complementarios en el proceso diagnóstico, puesto que no

reemplazan la evaluación clínica ni el examen mental. La DSM-IV (1994) presenta

descripciones comprensivas de cada desorden, criterios de diagnósticos específicos y

una organización más jerarquizada de las categorías diagnósticas. Utiliza un sistema

multiaxial de 5 ejes en que el eje primero especifica el cuadro clínico, el segundo se

refiere al desarrollo psíquico, el tercero describe la presencia eventual de patología

física agregada, el cuarto señala la presencia de agentes estresares psicosociales y el

quinto describe el nivel máximo del funcionamiento adaptativo del paciente en el último

año. La CIE-10, propone 6 ejes diagnósticos, los que se diferencian de los ejes descritos

en el DSM-IV en que separa el nivel intelectual en un eje aparte de los trastornos

específicos del desarrollo, Eje 1: síndromes psiquiátricos clínicos, eje 2: trastornos

específicos del desarrollo, eje 3: nivel intelectual, eje 4: condiciones médicas, eje 5:

situaciones psicosociales y eje 6: evaluación global de discapacidad. Ambas

clasificaciones presentan una sección dedicada a los trastornos generalmente

diagnosticados o iniciados en la infancia y adolescencia. Para las otras patologías

psiquiátricas que puede presentarse en la niñez y adolescencia (trastornos adaptativos,


esquizofrenias, depresiones, trastornos somatomorfos y otros), los manuales no hacen

diferencia con los criterios utilizados para el adulto (ver tablas 2 y 3).
TABLA 3
Clasificación De La Asociación Americana De Psiquiatría (Dsm IV) (Categorías
Diagnósticas Para Niños Y Adolescentes)

5.- Formato de la Historia Clínica

En un sentido amplio, la historia clínica en Psiquiatría infantil no difiere en gran medida de

la realizada para investigar otro tipo de problema de salud en el niño. El esquema general

se puede adaptar a tres tipos de formatos: las entrevistas estructuradas, formadas por

preguntas cerradas, las entrevistas abiertas, que se van elaborando sin un esquema previo, y

las entrevistas semiestructuradas, intermedias entre las dos anteriores. El formato


semiestructurado es el más recomendado por los distintos autores, debido a que permite

cierta flexibilidad en la realización de la historia, a la vez que proporciona una línea basal

para desarrollar la entrevista. Un ejemplo de entrevista semiestructurada es la elaborada

por un grupo de expertos pertenecientes a la Asociación Española de Psiquiatría Infanto-

Juvenil. Dicha entrevista está formada por once apartados principales:

1. Datos de filiación Comprende los datos personales, la institución o profesional que

remite al niño, la actitud inicial ante la consulta y el motivo principal de la consulta.

2. Historia evolutiva de los trastornos o problemas principales Incluye quién acompaña al

niño, qué le ocurre, desde cuándo, a qué lo atribuye, gravedad subjetiva, evolución,

consultas, tratamientos previos y resultados obtenidos, expectativas actuales y antecedentes

de otros trastornos psicopatológicos, tratamiento de los mismos y resultados.

3. El niño y su entorno Se hace hincapié en el carácter, comportamiento, estado de ánimo,

autoimagen y mecanismos de defensa del niño, sus relaciones con el entorno, incluyendo

padre, madre, hermanos, amigos, compañeros, profesores, etc. También los juegos y

actividades recreativas, las características del sueño y alimentación, la actividad habitual en

un día laborable y la actividad habitual en un día festivo y en vacaciones. Resulta

importante conocer los hábitos televisivos y el tipo de videojuegos más utilizados por el

niño, así como el tiempo total que dedica a cada actividad, debido a la importancia de estas

actividades en la infancia actual. El pediatra debe informarse sobre el contenido de los

programas televisivos y los videojuegos, para recomendar su idoneidad o desaconsejar su

uso.

4. Antecedentes personales Comprende la concepción, embarazo, parto, datos y

temperamento neonatal, características de la lactancia y características de la alimentación

preescolar.
5. Desarrollo evolutivo Contiene las características del desarrollo psicomotor, del

desarrollo del lenguaje, de la evolución afectiva, control esfinteriano, evolución de la

autonomía personal, lateralización progresiva, escolaridad, sexualidad, convivencia y

evolución de las separaciones de las figuras de vínculo, enfermedades somáticas e

intervenciones quirúrgicas y actitud de la madre y del padre ante el desarrollo del hijo.

6. Antecedentes familiares Incluye antecedentes maternos y paternos, fratría materna y

paterna, abuelos, otros antecedentes familiares de interés psiquiátrico, fratría del niño,

dinámica familiar, otras personas de convivencia familiar y características sociales de la

familia.

7. Exploraciones Comprende las características físicas y examen somático, exploración

neurológica, descripción de alergias, intolerancias y reacciones medicamentosas adversas,

el comportamiento y actitud de padres y niño, la exploración psicopatológica incluyendo

afectividad y estado emocional, motricidad, lenguaje y comunicación, nivel cognitivo,

atención, concentración, orientación, percepción, memoria, pensamiento, etc. En el último

apartado se especifican las exploraciones complementarias que precisa el niño.

8. Diagnóstico Incluye los trastornos clínicos, de personalidad, enfermedades médicas,

problemas psicosociales y ambientales y la evaluación de la actividad global, con un

apartado final de juicio clínico.

9. Tratamiento Se indica el tratamiento propuesto, en caso de que lo hubiese. Contiene la

posibilidad de especificar el tipo de tratamiento: higiénico-dietético, psicoterapéutico,

psicofarmacológico, rehabilitador y/o psicopedagógico, etc.

10. Observaciones Permite realizar las observaciones pertinentes.

11. Epicrisis Resumen final de la entrevista.


6.- Bibliografía y Linkografia:

-Lemos Giráldez, S. (2003). La psicopatología de la infancia y la adolescencia:

consideraciones básicas para su estudio .Papeles del Psicólogo

-Manual de clasificación DSM IV (1995)

-Neison y Allen, 1997, Psicopatología del niño y del adolescente (3ra edición).

-Pedro Javier Rodríguez Hernández, Oscar Herreros (2015). Historia clínica, evaluación y

diagnóstico en psiquiatría infantil. España

-Rodríguez Sacristán, J. & Lozano Oyola, J. F. (2009). Psicopatología Infantil

básica. Madrid: Pirámide.

Linkografia:

(A. 2018,01. Concepto de Psicopatología. Equipo de Redacción de Concepto.de.

Obtenido 2018,03, de http://concepto.de/psicopatologia/)

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