Sie sind auf Seite 1von 6

Abtrac

Se investigó la micromorfología esofágica del roedor, African Palm Squirrel para llenar la
escasez de información sobre la histología de este órgano de la literatura disponible y
ayudar a comprender su biología del tracto digestivo. El órgano después de la extracción
se sometió a un procedimiento histológico de rutina para microscopía óptica. La
microanatomía orgánica fue típica de la histología del órgano tubular mamario. El epitelio
bien desarrollado era de células escamosas estratificadas. La propria laminar que
contenía fibras de tejido elástico era aparentemente más pequeña que el epitelio grande y
la muscularis mucosa. El músculo estriado muscularis mucosa se arrugó
longitudinalmente. La pequeña submucosa contenía tejido conectivo regular delgado. La
túnica muscular estaba formada por células del músculo esquelético que estaban
dispuestas en una orientación circular interna y oblicua externa, con el plexo mientérico
ubicado entre estas dos capas musculares. La adventicia contenía vasos sanguíneos. El
epitelio bien desarrollado es una adaptación a los piensos ásperos y gruesos que
consume en la naturaleza, especialmente la capa fibrosa de la fruta de la palma de aceite
y otras nueces duras.

Introducción
El esófago se ha descrito como el tubo de tránsito que conecta la cavidad orofaríngea
con el estómago (Nzalak et al., 2010; Ikpegbu et al., 2012). La morfología del esófago
se ha descrito en algunos animales domésticos (McGeady et al., 2006), rata gigante
africana (Nzalak et al., 2012), serpiente gopher (Khamas y Reeves, 2011), camello
(Dellmann et al., 1968; Jamdar y Ema, 1982), ratón de laboratorio (Berghes et al.,
2010); Bagre africano (Ikpegbu et al., 2012), pero ninguno ha sido documentado en la
ardilla africana de palma (APS). Se han reportado variaciones en las diferentes capas
de este órgano. Estos incluyen el tipo de epitelio (Schummer et al., 1979; Berghes
et al., 2010), naturaleza y composición de la lámina propia (Sukon et al., 2009),
presencia o ausencia de la muscularis mucosae, incluso el tipo de célula muscular
(Nzalak et al., 2010), presencia y naturaleza de glándulas esofágicas (Rossi et al.,
2006) y tipo y orientación de los músculos en la túnica muscular (Sukon et al., 2009).
Como parte del estudio continuo de la biología de los roedores salvajes, se informa el
hallazgo sobre la histología de esta especie. Los resultados del presente estudio
servirán como línea de base para referencia futura en histología esofágica de
roedores. Los resultados no solo llenarán la brecha de conocimiento, sino que también
ayudarán a comprender la biología del tracto digestivo y su papel en la adaptación de
la ardilla de palma africana en la naturaleza. Además, el resultado de la
microestructura del esófago de la ardilla de palma africana servirá como una ventaja
para el futuro intervención clínica y terapéutica de enfermedades del tracto digestivo del
roedor.

MATERIALES Y MÉTODOS

Se utilizaron cinco ardillas de palma africanas adultas de ambos sexos capturadas en la


naturaleza de Olokoro, Umuahia en el estado de Abia, Nigeria, desde marzo de 2013
hasta septiembre de 2014, utilizando trampas de jaula metálica. Olokoro, Umuahia se
encuentra en la vegetación de la selva tropical del sur de Nigeria caracterizada por fuertes
lluvias y espesos bosques de manglares.
Los roedores fueron transferidos inmediatamente al Laboratorio de Anatomía Veterinaria
de la Universidad de Agricultura Michael Okpara, Umudike, para aclimatación. Durante
este período, los animales fueron alimentados con pastos, frutos de palma aceitera y agua
a voluntad. Las ardillas se sedaron con cloroformo y se sacrificaron por decapitación
cervical. El peso del animal se tomó con una balanza Mettler (Modelo Ohaus Scout
PRO200) con una sensibilidad de 0.1 g. El animal se colocó en decúbito dorsal y se abrió
a través de una incisión ventral media desde la región inguinal hasta la sínfisis
mandibular. El esófago se disecó y las rodajas se fijaron en formalina tamponada neutra
al 10%.
Los tejidos se procesaron en primer lugar, deshidratándolos en etanol graduado.
Posteriormente, se limpiaron en xileno, se impregnaron y se embebieron en cera de
parafina. Se obtuvieron secciones de 5 µm de espesor con Leitz Microtome Model 1512.
Se tiñeron con hematoxilina y eosina para un examen con microscopía óptica (Bancroft y
Stevens, 1990). Se examinaron las diapositivas y se tomaron fotomicrografías con la
cámara Motican 2001 (Motican, Reino Unido) conectada al microscopio Olympus.

RESULTADOS

El esófago APS con bajo aumento presentaba epitelio prominente, muscularis mucosae y
túnica muscular (Figura 1). A mayor aumento, el epitelio escamoso estratificado se
compuso de la superficie a la propriaviz laminar subyacente: estrato córneo que contiene
5-8 capas de células, estrato granuloso, estrato espinoso y estrato basal profundo (Figura
2).

Figura 1: sección transversal del esófago,


la luz L, epitelio E, muscularis mucosae M y túnica
muscularis TM. Tenga en cuenta la luz L, que
contiene células descamativas. H y E (barra de
escala = 4 µm)

Figura 2: sección del esófago que muestra el


epitelio que contiene el estrato córneo C, el
estrato granuloso (flecha blanca), el estrato
espinoso (flecha negra) y el estrato basal B.
Observe la propria laminar LP, muscularis
mucosae MM y las células descamativas (flecha
en forma de Z) cabeza). H y E (barra de escala = 40
µm)
Se observaron fibras de forma poligonal a regular que contienen células escamosas
descamativas que se adhieren a la superficie apical del estrato córneo epitelial, por lo que
se convierten en la estructura más proximal que rodea la luz esofágica (Figuras 2 y 3). La
propria laminar contenía linfocitos y fibras elásticas que Capa papilar formada que se
interdigita con las crestas o clavijas epiteliales. Las muscularis mucosas bien
desarrolladas eran de músculo esquelético dispuestas de forma longitudinal (Figuras 2 y
4). La submucosa era relativamente pequeña y contenía una capa delgada de fibras
regulares de tejido conectivo (Figura 4).
Figura 3: Sección del esófago que muestra las
células descamativas (flecha negra), que se
separa del epitelio E. Tenga en cuenta que la capa
de células descamativas DS, ahora rodea la luz L,
directamente. H y E (barra de escala = 40 µm)

La túnica muscular contenía células del músculo esquelético dispuestas en una


orientación interna circular y externa longitudinal a oblicua (Figuras 4 y 5). No se observó
músculo liso. Se observó plexo mientérico entre las dos capas musculares de la túnica
muscular (Figura 5). La túnica adventicia de la capa fibrosa irregular suelta contenía vasos
sanguíneos (Figuras 5 y 6).

Figura 4: Sección del esófago que muestra


el epitelio E, la propria laminar LP, que
contiene fibras elásticas (flecha blanca) y
linfocitos (flecha negra), muscularis
mucosae MM, que contiene células del
músculo esquelético dispuestas
longitudinalmente. Tenga en cuenta la
submucosa SM, que contiene fibras de
colágeno. H y E (barra de escala = 40 µm)

Figura 5: Sección del esófago que muestra


la túnica adventicia TA, los músculos
esqueléticos de la túnica muscular
dispuestos en una capa circular interna CM
y la capa oblicua externa OM. Obsérvese el
plexo mientérico MP, entre las dos capas
de la túnica muscular. H y E (barra de
escala = 40 µm)
Figura 6: Sección del esófago que muestra la
Tunica adventicia TA que contiene la arteria
A y la vena V. Observe la túnica muscular que
contiene el músculo esquelético circular. H y
E (barra de escala = 40 µm)

DISCUSIÓN

Este estudio ha intentado exponer la microestructura del esófago de la ardilla africana de


la palma. El resultado del estudio mostró que la histología esofágica de roedores APS es
típica de los órganos tubulares de mamíferos. Este hallazgo ha sido reportado en el
Chinchilla laniger (Calamar et al., 2014).
La célula escamosa estratificada es un epitelio protector contra los materiales alimentarios
ásperos (Sukon et al., 2009). Este tipo de epitelio puede estar relacionado con su hábito
de alimentación y la presencia de una capa de células descamativas (Dellmann y Brown,
1987). La célula escamosa estratificada es un epitelio protector contra los materiales
alimentarios ásperos (Sukon et al., 2009). Este tipo de epitelio puede estar relacionado
con su hábito de alimentación y la presencia de una capa de células descamativas
(Dellmann y Brown, 1987).
Este tipo de epitelio queratinizado se ha descrito en rumiantes, caballos y roedores, pero
el epitelio estratificado no kreatinizado como se ve en este estudio, se ha informado en
humanos, perros, gatos y ratas gigantes africanas (Schummer et al., 1979; DeNardi y
Riddell, 1991; Fawcett y Raviola, 1994, Nzalak et al., 2010). Se ha descrito un epitelio
columnar simple de columna a psuedostratificado en la serpiente Gopher Pituophis
catenifer (Khamas y Reeves, 2011), mientras que se ha informado un epitelio columnar
ciliado con células caliciformes mucosas en Varanus niloticus (Ahmed et al., 2009). La
glándula esofágica no se observó en este estudio. Esta podría ser la razón de las células
de descamación luminal observadas, que representa un alto recambio celular. Además, la
ausencia de las glándulas esofágicas resultó en la falta de disponibilidad de lubricante
intrarregional para ingesta en tránsito a través del tubo. La ausencia de glándula
submucosa esofágica como se ve en este estudio se ha informado en la serpiente gopher
(Khamas y Reeves, 2011), ratón de laboratorio (Berghes et al., 2010), rata gigante
africana (Nzalak et al., 2010), pero Se ha informado de su presencia en la anatomía
esofágica de la Llama - Lama glama (Sukon et al., 2009), donde se asocia con una mayor
capacidad de amortiguación y absorción de ácidos grasos volátiles. La presencia de fibras
elásticas en la lámina propia permitirá cierta elasticidad delesófago cuando se consume
un gran volumen de alimentos. Esta elasticidad ayudará a reducir la fricción en el epitelio,
por lo tanto, una adaptación compensatoria para la falta de glándulas secretoras. También
es posible que los productos documentados de las glándulas salivales puedan ayudar a
ablandar los alimentos en la cavidad oral antes del tránsito a través del tubo (Parillo et al.,
2005; Selvan et al., 2008; Nzalak et al., 2010; Ikpegbu et al. ., 2013), pero se debe hacer
más trabajo en la relación volumen-órgano de las glándulas salivales para determinar esta
sugerencia. Se han descrito glándulas mucosas de lámina propia esofágica en el ave
Rhynchotus rufescens (Rossi et al., 2006). La bien desarrollada orientación
longitudinalmente del esqueleto muscularis mucosa en relación con la submucosa más
pequeña puede ser una adaptación para reforzar la contracción del músculo esquelético
circular predominante de la túnica muscular y el músculo oblicuo externo. Esta
contracción complementaria bajo control voluntario asegurará un movimiento peristáltico
uniforme pero regular desde todas las direcciones durante la deglución. Esto reducirá la
incidencia de estasis alimentaria en el tubo, un fenómeno si ocurre será peligroso en la
naturaleza donde el animal debe consumir suficiente comida en poco tiempo debido a la
relación presa-depredador y también a la competencia del hombre que considera su
hábito de alimentación como actividad de plagas Esta observación estuvo de acuerdo con
Sarosiek y McCallum (2000), quienes declararon que este órgano es altamente
especializado para el empuje de alimentos desde la boca hasta el estómago. Se ha
informado de ausencia de muscularis mucosae en la rata gigante africana (Nzalak et al.,
2010). Se ha informado de muscularis mucosa esofágica que contiene células de músculo
liso (Dellmann y Brown, 1987).
Existen variaciones en el tipo y orientación de la célula muscular de la túnica muscular. En
humanos, caballos, gatos y cerdos, las porciones superior e inferior del esófago están
compuestas de músculos estriados y lisos, respectivamente, con una porción mixta entre
ellos (Schummer et al., 1979). En perros, rumiantes y roedores, incluidos ratones, ratas y
hámsteres, la capa muscular del esófago se compone principalmente de fibras
musculares estriadas (McGeady et al., 2006). En el ratón de laboratorio, las capas
musculares circulares internas y longitudinales externas son músculos completamente
estriados que cambian a músculo liso en el esfínter esofágico (Berghes et al., 2010), en el
bagre africano es músculo completamente estriado (Ikpegbu et al., 2012 ) En este estudio,
la túnica muscular estaba compuesta principalmente de músculo estriado oblicuo externo
circular y más pequeño interno, la disposición informada en los dos tercios craneales del
esófago del caballo es el circular interno y el longitudinal externo (Schummer et al., 1979);
En el rumiante y el camello, la disposición de las fibras musculares estriadas de la túnica
muscular en las capas interna y externa es mixta, oblicua y en espiral (Getty, 1975;
Jamdar y Ema, 1982). El plexo mientérico observado en el estudio fue muy prominente
como el reportado en el ganado (Vittoria et al., 2000; Teixeira et al., 2001), pero en el
camello e Ilama, se informó que era escaso y difícil de localizar ( Jamdar y Ema, 1982;
Sukon et al., 2009). Aunque la naturaleza de la función del plexo mientérico estriado del
músculo esofágico es aún desconocida (Diamant, 1989; Conklin y Christensen, 1994;
Wörl y Neuhuber, 2005; Clouse y Diamant, 2006; Sukon et al., 2009; Shiina y Shimizu,
2012), pero informes recientes en la literatura han indicado la inervación dual de ambas
fibras nerviosas del vago y del plexo mientérico en las placas terminales del músculo
esquelético esofágico en el conejillo de indias y la rata (Zhou et al., 1996; Neuhuber et al.,
2001)

Das könnte Ihnen auch gefallen