1A GENEALOGIA DE LA SUBJEIVIDAD
LA CONCIENCIA PSICOLOGICA
La actividad animal es muy variada y compleja, les
a tener una muy fuerte similitud con la nctividad rere ine
no obstante, una diferencia que intentaremos explicitar. Los
animales actéian con arreglo a una programacién biolégica que se
trasmite en forma genética y constituye, por decirlo asf, el a priori
de todo cuerpo animal incluyendo también el del hombre. Las
ciencias naturales del siglo xx concibieron a la programacién
genética como un proceso de adaptacién reactiva del organismo
animal frente a las 6rdenes impartidas por el medio ambiente.
Esto provocd el repudio de Nietzsche porque «con ello se descono-
ce la esencia de la vida, su voluntad de poder; con ello se pasa por
alto la supremacia de principio que poseen las fuerzas esponta-
reas, agresivas, invasoras, ereadoras de nuevas interpretaciones,
de nuevas direcciones y formas por influjo de las cuales viene
luego la adaptacién; con ello se niega en el organismo mismo el
papel dominador de los supremos funcionarios en los que la
voluntad de vida aparece activa y conformadoras”. En lugar de la
adaptacién reactiva, hay que poner la intencionalidad que
Nietzsche define estupendamente en el parrafo citado. Hoy en
dia, la programacién genética es interpretada enel sentido nietzs-
cheano; la adaptacion no es mas que el resultado de los cambios
genéticos espontaneos, combinados con los cambios también
espontiineos del medio ambiente. En este juego defuerzas espon-
téneas se constituye toda la intencionalidad incluyendo a la que
Ga origen a la represion del deseo y por ende a lo social.
a programacién genética otorga a cada cuerpo cierta capaci-
dad de afirmacién discrecional que es creciente cla tescala de los
animales, hasta hacerse muy notable en los animales superiores.
Esta capacidad de afirmacién discrecional es interpretada a me.
nudo. como reacci6n a los estimulos del ambiente o como irritabi-
lidad propia de la materia organica para el caso de los organis-
mos més primitivos. La sociedad humana es un medio para
aumentar esta capacidad discrecional por encima de las posibili-
dades que ofrece la programacién genética.
La necesidad humana es pues un producto de la actividad
esponténea de afirmacién de los cuerpos, de la actividad produc-
tiva del deseo que se normativiza (se reprime) para ampliar
|LAETEROGENEIDAD ORIGINARIA DE LA CONCIENCIA 6
paradéjicamente su poder discrecional. Ahora bien, este poder
Fiscrecional que tiene cada cuerpo animal define su inteligencia
ue, como tal, permanece esencialmente anclada en la sensibili-
dad, para gran tragedia de toda hip6tesis idealista. El desarrollo
de la inteligencia se concreta primero en las mutaciones fisicas
del cuerpo animal. Por tanto, es necesario seguir algunas pistas
antropoligicas que identifican estas mutaciones fisicas.
Fl cerebro alcanza gran desarrollo entre los animales superio-
res y en especial entre los primates en virtud de cierta falta de
especializacién de sus cuerpos. Este desarrollo cerebral esta inti-
mamente vinculado con las caracteristicas fisicas del resto del
Cuerpo. Leroi-Gourham® ha mostrado con maestria sin igual Ia
estrecha dependencia que existe entre Ja contraccién del ésico, la
liberacién de la mano de funciones Jocomotores y la ampliacion:
fisiolégica del cerebro en tamafo y estructura. Por su parte,
George Thomson se vale de la correlacion cerebro-inteligencia,
para poder separar radicalmente las sociedades de insectos de la
jhumana. De otra forma, le seria imposible diferenciarlas en vir-
td de las similitudes exteriores entre ambos tipos de sociedad; y
en virtud también del plano teérico en que este autor se mueve,
asignando a ciertos rasgos empiricos un valor diferenciador fun-
Gamental, Asi nos sefiala Thomson que si bien las abejas, las
hormigas, y otros tipos de insectos, aparentemente «viven en
comunidades altamente organizadas, que se comportan con tan
ta inteligencia aparente que han sido comparados a menudo con
a sociedad humana». Al examinarlas, sin embargo, podemos ver
que su llamada inteligencia no reside de ninguna manera en la
capacidad cerebral, sino, en una division elaborada de funciones
puramente biol6gicas. En los animales superiores estas funcio-
nes, si exceptuamos las de reproduccién sexual, se combinan en
cada individuo de la especie; en estos insectos estan distribuidas
y coordinadas con un sistema de conducta que tiene una semejan-
za superficial con las relaciones sociales’, De manera que los
insectos son individuos tan especializados, que mas bien son
érganos sueltos de un solo individuo biologico, constituido por
toda la colonia, que desde fuera se asemeja a la sociedad humana.
‘La evolucién del cerebro es también la base para establecer
una diferenciacién entre animales inferiores y animales superio-
tea, Estos dltimos tienen un mayor desarrollo cerebral, el cual,