Usos del cilantro en la cocina

El cilantro es necesario para curar ciertas enfermedades y un

buen desenvolvimiento del sistema de defensas. Pero, ¿cómo lo
consumimos?. Existen diferentes maneras de comerlo, aquí te
decimos cuáles son los usos más comunes que se le da a esta
hierba, en la cocina.
Existen dos tipos de cilantro que podemos tener en nuestra
cocina, la semilla se muele y lo que se usa es el polvillo que
deja.

Cilantro de Marruecos: Es el más común de usar, es un

condimento especial en la cocina de esta cultura. Aunque la
podemos usar en todos los países.
Cilantro de la India: Es similar al marroquí, lo que cambia es
el color. Este tiene un color más claro. La semilla se pone a
tostar antes de moler, y esto intensifica el aroma de la especie.
Las comidas en las que más se usan estas semillas son aquella
recetas que desean un sabor ligero y un aroma dulce:

 Carnes, para sazonar y dar un aroma intenso. Se usa en

diferentes platillos de carne, cerdo y cordero
 Bollería y panadería en general
 Postres que contengan leche y/o frutas
 Arroces o pasta
 Diferentes embutidos como: salami y salchicha
 Ensaladas con remolacha o espinacas: Se usa la hoja
 Alcohol
 Aroma para chocolates
 La hoja de usa para la sopa
Es un planta que da muchos beneficios tanto al sabor de la
comida, como en remedios caseros que ayudan a calmar ciertos
dolores. Pero existen ciertas contraindicaciones en las que
deberíamos limitar el consumo:

 Proceso de embarazo: El consumo de la hierba, podría

frenar el proceso para engendrar
 Embarazada: Podría sufrir un aborto
 Cuando se da de amamantar: No es prohibitivo, pero lo
recomendable es disminuir el consumo
Es una hierba en la que se usa tanto la semilla como la hoja. En
muchas ocasiones, se le confunde con el perejil, su parecido es
inmenso. Pero la manera más rápida de diferenciarlas es a
través del olor, en esto no se parecen. El olor del cilantro es
muy característico, por eso a la hora de comprarlo, huélelo. Si
no te permiten olerlo, puedes reconocerlo a través de sus hojas,
que son más redondas.

Nombre científico

Coriandrum sativum, llamado popularmente cilantro, coriandro, culantro

europeo, perejil chino o dannia, es una hierba anual de la familia de las
apiáceas (antes llamadas umbelíferas). Es la única especie del género
Coriandrum, que es también el único miembro de la tribu Coriandreae.

Sus orígenes parecen inciertos, aunque generalmente se considera nativo

del norte de África y el sur de Europa. Es de hábito anual y bajo condiciones
normales, el cilantro alcanza de 40 a 60 cm de altura. Se da bien en suelos
flojos y permeables, y en climas templados o de montaña en la zona
tropical. Aunque es bastante resistente al frío, no sobrevive en terrenos
encharcados.
Es una hierba poco complicada que puede plantarse en jardines o macetas.
Sus flores, pequeñas y blancas aparecen en verano.
Las semillas se siembran en hileras, a 30 cm unas de otras, poniéndolas a
1 cm de profundidad; a más profundidad no germinan pues necesitan
claridad. A las tres semanas brotan las plantas y hojas.
A escala industrial, generalmente se siembra en hileras separadas de 30 a
50 cm con la misma maquinaria utilizada para los cereales. Se usan de 20 a
40 kg de semillas por hectárea.
Sus principales problemas son el pulgón del coriandro (Hyadaphis
coriandrii) y los hongos si hay excesiva humedad.1

Que es el cilantro
El cilantro pertenece al grupo familiar de las umbelíferas o apiáceas. Su tallo
puede medir hasta ochenta centímetros de altura, presentando hojas
filiformes en su parte superior y dentadas en su parte inferior. La planta
tiene flores de tonalidad rojiza y da unos pequeños frutos con aroma.
Por lo general las hojas del cilantro se consumen frescas, mientras que
las semillas y los frutos se utilizan cuando se secan. Las hojas suelen picarse
o cortarse en trozos muy pequeños para añadir al plato al momento de
servir. Cuando está fresco, el cilantro no se cocina ya que el calor modifica
su sabor y su fragancia.
Las hojas de cilantro también se emplean para elaborar guacamole y salsa
verde o para condimentar guisos, carnes, sopas, ensaladas y otras
preparaciones. En cuanto a los frutos, las semillas e incluso las hojas secas,
es habitual que se muelan para utilizar en la elaboración de panes,
salchichas y otros productos.
El cilantro cada vez es más usado en la cocina porque se considera que trae
consigo una larga lista de ventajas, entre las que podemos destacar las
siguientes:
-Se considera que tiene propiedades antiinflamatorias.
-Es muy útil para poder acabar con las náuseas, ya sea porque se está
embarazada o porque se tiene cualquier enfermedad.
-Se cree que es útil para poder mejorar lo que es el llamado colesterol
bueno.
-Es muy apropiado para reducir e incluso eliminar los cólicos que se sufren
durante la menstruación.
-Tiene propiedades antioxidantes.
-El cilantro también es útil para reducir los riesgos de sufrir una infección
de tipo urinario.
-Es un alimento útil para evitar o acabar con la anemia. Sí, porque aporta al
 organismo unas importantes cantidades de hierro.
-También mejora y refuerza el sistema inmunológico.

A todo eso hay que añadir que es útil para frenar el envejecimiento de los
ojos, que alivia la conjuntivitis, que reduce la cantidad de azúcar en sangre
y que ayuda a acabar con eczemas y hongos. También ayuda a acabar con
el mal aliento, previene las úlceras orales e incluso es un producto
estupendo para aportar al organismo vitaminas variadas, especialmente la
de tipo C.

Se aconseja que las mujeres que se encuentran esperando un hijo

consulten previamente a su médico si pueden tomar o no cilantro. Y es que
existen algunos estudios que establecen que tomado en cierta cantidad
puede traer complicaciones al embarazo e incluso llegar a provocar el
aborto.

Es importante mencionar que hay varias plantas que suelen recibir el

nombre de cilantro. Una de ellas tiene la denominación científica
de Coriandrum sativum: la única especie de la tribu Coriandreae y del
género Coriandrum.

1. Escoge la época del año. La mejor época para cultivar cilantro depende del
lugar dónde vives. El cilantro no sobrevive a condiciones heladas, pero
tampoco soporta el calor extremo. En climas templados, la mejor época
para empezar a cultivar cilantro es a finales de primavera, entre los meses
de marzo y mayo (en el caso del hemisferio norte). En climas más
tropicales, el cilantro crece mejor durante épocas más frías y secas del año,
como en el otoño.
 También puedes plantar exitosamente el cilantro a finales del verano y
dejar que crezca durante el otoño.
 Si el clima se pone muy caliente, las plantas de cilantro comenzarán a
brotar, lo que significa que florecerán y dejarán semilla, así que escoge
sabiamente la época del año para sembrar. Para aprovechar mejor el clima,
siembra las semillas en interiores y luego trasládalas al exterior cuando el
clima mejore.

2
Prepara un lugar en tu jardín. Escoge un pedazo de tierra donde el cilantro
tenga exposición total al sol. Puede soportar algo de sombra en las zonas
del sur donde el sol se pone muy caliente durante el día. El suelo debe
estar ligero y bien drenado con un pH entre 6,2 y 6,8.[1]
 Si deseas preparar el suelo antes de sembrar, utiliza una pala, motocultor o
laya para crear una superficie de entre 5 y 8 cm (2 y 3 pulgadas) de abono
orgánico, como la composta, las hojas en descomposición o el estiércol
sobre la capa superior de la tierra. Rastrilla el área para dejarla suave antes
de sembrar.

3
Siembra las semillas de cilantro. Siembra las semillas a 5 mm (¼ pulgada) de
profundidad, separadas entre 15 y 20 cm (6 y 8 pulgadas), en filas con
aproximadamente 30 cm (1 pie) de distancia. Las semillas de cilantro
necesitan bastante humedad para germinar, así que asegúrate de regarlas
 frecuentemente. Necesitan cerca de 3 cm (1 pulgada) de agua a la semana.
Se supone que germinarán al cabo de 2 a 3 semanas.[2]
 Como el cilantro crece tan rápido, debes sembrar un nuevo lote de semillas
cada 2 o 3 semanas para asegurarte de tener un suministro fresco de
cilantro durante toda la temporada de cultivo.[2]

4
Cuida el cilantro. Una vez que las semillas alcancen una altura cercana a los
5 cm (2 pulgadas), puedes fertilizarlas con fertilizante de nitrógeno soluble
en agua. Ten cuidado de no sobrepasarte con el fertilizante, solo necesitas
alrededor de 1/4 taza por cada 7,5 m (25 pies) de espacio cultivado.
 Una vez que las plantas se establecen, no necesitan de mucha agua. Tu
objetivo es mantener el suelo húmedo (pero no empantanado), ya que el
cilantro es una hierba de clima seco.[3]

5
Evita la sobrepoblación. Detén la sobrepoblación de cilantro, cortando las
plantas que tengan entre 5 y 8 cm (2 y 3 pulgadas) de alto. Quita las plantas
más pequeñas y deja que crezcan las más fuertes, dejando una distancia de
entre 20 y 25 cm (8 y 10 pulgadas) entre cada planta. Puedes utilizar las
plantas más pequeñas para cocinar o comer.[4]
 También puedes evitar que crezca la mala hierba cubriendo con un poco de
mantillo alrededor de la base de las plantas apenas sean visibles por
encima del suelo.
 6
Cosecha el cilantro. Recoge el cilantro cortando las hojas y tallos
individuales de la base de la planta (cerca del suelo) cuando el tallo tenga
entre 10 y 15 cm (4 y 6 pulgadas) de altura. Utiliza los brotes nuevos y
frescos en la cocina, no utilices los más viejos (los que parecen helecho)
debido a que pueden saber amargo.[1]
 No cortes más de un tercio de las hojas en una sola cosecha, sino la planta
podría debilitarse.
 Después de cosechar las hojas, la planta continuará creciendo durante al
menos 2 a 3 ciclos más.[1]

7
Decide si vas a dejar que las plantas de cilantro florezcan. Tarde o temprano
las plantas de cilantro florecerán. Cuando eso pase, la planta deja de
producir nuevos brotes frescos con hojas comestibles. En este punto,
algunas personas cortan las flores con la esperanza de que la planta
produzca más hojas.
 Sin embargo, si quieres recoger semillas de cilantro, debes dejar que
florezca. Cuando la flor muera, podrás cosechar las semillas de cilantro y las
podrás usar en la cocina.
 Puedes dejar que las semillas caigan naturalmente al suelo de modo que
estas crezcan por sí solas, proveyéndote de más plantas de cilantro para
cultivar la próxima temporada de siembra.[5] También puedes guardar las
semillas secas y plantarlas en la siguiente temporada.