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CABLE DE ACERO

Un cable de acero es un tipo de cable mecánico formado un conjunto


de alambres de acero o hilos de hierro que forman un cuerpo único como elemento de
trabajo. Estos alambres pueden estar enrollados de forma helicoidal en una o más
capas, generalmente alrededor de un alambre central, formando los cables espirales.
Estos cables, a su vez, pueden estar enrollados helicoidalmente alrededor de un
núcleo o alma, formando los cables de cordones múltiples. Estos cables se pueden
considerar como elementos y también se pueden enrollar helicoidalmente sobre un
alma, formando los cables guardines, o bien acoplarse uno al lado del otro, para
formar los cables planos.
Características fundamentales
Diámetro
Se considera diámetro de un cable a la circunferencia circunscrita a la sección del
mismo, expresado en milímetros (mm).
Cuando un cable nuevo entra en servicio, los esfuerzos que soporta le producen una
disminución del diámetro, acompañada de un aumento en su longitud, a causa del
asentamiento de los distintos elementos que forman el cable. Esta disminución de
diámetro es mayor cuanto mayor es la proporción de fibra textil que lo forma.
Composición
Combinando la disposición de los alambres y los cordones se obtienen cables de
composiciones muy diversas. Los fabricados con alambres gruesos resisten bien el
desgaste por rozamiento, pero tienen una gran rigidez y son poco resistentes a
la flexión. Los cables compuestos por un gran número de alambres finos no son muy
flexibles, y poco resistentes al rozamiento y a la corrosión.
Almas o núcleos
El alma del cable es el soporte de tamaño y consistencia aptos para ofrecer un apoyo
firme a los cordones, de modo que, incluso a la máxima carga no lleguen a entallarse
los alambres de los cordones entre sí.
Generalmente, el alma de los cables es de fibra textil, siempre y cuando no se trabajen
en ambientes con un elevado porcentaje de humedad y elevadas temperaturas, ya que
estos factores difieren con la resistencia del alma, haciéndola débil hasta punto tal que
se pueda cortar. Para ello, se utilizan almas metálicas, que no se ven afectadas con
estos últimos factores.
Arrollamiento
Los alambres de los cordones están colocados en forma de hélice alrededor de un
alambre central, formando una o más capas.
El paso del cordón es la longitud que abarca una vuelta completa del alambre
alrededor de su núcleo central. Esta distancia se mide paralelamente al eje del cordón.
En los cables corrientes, las distintas capas de alambres que forman los cordones
tienen pasos diferentes.
Los cordones, a su vez están colocados en el cable en forma de hélice alrededor del
alma. El paso de hélice que describe un cordón es el paso del cable.
Clases de arrollamiento

Arrollamiento cruzado izquierda.

Arrollamiento cruzado derecha.

Arrollamiento lang izquierda.

Arrollamiento lang derecha.

Arrollamiento alternado izquierda.

Arrollamiento alternado derecha.


Considerando los sentidos de arrollamiento de los alambres en el cordón, y de los
cordones en el cable, se pueden distinguir:
Arrollamiento cruzado o corriente es aquél en que los cordones están arrollados en
sentido contrario al de los alambres que los forman.
Arrollamiento Lang, los alambres en el cordón y los cordones en el cable están
arrollados en el mismo sentido.
Arrollamiento alternado, con cordones que están alternativamente arrollados en el
mismo sentido que el cable y en sentido contrario.
Además, estos tres grupos pueden estar arrollados a derechas o a izquierdas.
Preformado
En el proceso de fabricación de los cables corrientes, los alambres adoptan la forma
de hélice y ocupan sus posiciones respectivas gracias a una deformación elástica, que
origina unas tensiones internas en dichos alambres. Por causa de estas tensiones
internas, al suprimir las ligadas, o al romperse un alambre, los extremos tienden a
recuperar su forma recta primitiva.
En los cables preformados, tanto los alambres como los cordones sufren durante el
proceso de fabricación una deformación permanente, adoptando la forma de hélice de
acuerdo ya con la posición que habrán de ocupar en el cable.
Al suprimir la deformación elástica se eliminan las tensiones internas existentes en los
alambres de los cables no preformados y que contribuyen a la rotura de dichos
alambres por fatiga.
Las principales ventajas de los cables preformados son:
Mayor flexibilidad, ya que al curvarse no se sumarán las tensiones internas de
fabricación al esfuerzo de flexión debido al arrollamiento en poleas y tambores. Esto
equivale por tanto a una reducción de los esfuerzos de flexión.
Evita efectos de cortadura, al no enredarse las puntas de alambre que se rompen por
fatiga, no quedan éstas aprisionadas entre el cable y las gargantas de las poleas,
evitándose así que corten otros alambres.
Mayor duración, consecuencia de las dos ventajas anteriores.
Fácil manejo. Al cortar un cable preformado los cordones y alambres permanecen en
su sitio al no tener tendencia a descablearse y desenrollarse formando cocas.
Facilita el uso del arrollamiento Lang, al reducir los inconvenientes más propios de
dicho arrollamiento, hace posible adaptarlo en mayor número de aplicaciones.
Material
El alambre trefilado que se utiliza para la fabricación de cables se obtiene partiendo
de fermachine de acero Martin Siemens o de acero al horno eléctrico. su contenido en
carbono varía generalmente del 0,3% al 0,8% obteniéndose dentro de esta gama los
aceros dulces, semiduros y duros.
El índice de pureza puede variar según las características requeridas; no obstante,
estos tipos de acero no pueden contener más de un 0,04% de fósforo y un 0,04% de
azufre.
Tipos de cables
Los cables también se pueden clasificar según su estructura y características más
destacadas en los siguientes grupos
Cables espirales o cordones
Se conocen también como cables de simple arrollamiento, en ellos los alambres están
colocados en una o más capas arrolladas en forma de hélice alrededor de un núcleo.
El núcleo generalmente lo forma un solo alambre.
Si esta construcción es ya un cable terminado, los alambres de las diferentes capas se
arrollan en sentido alternado a izquierda y derecha y entonces se llama cable espiral.
Cuando es un elemento de otro cable mayor, las distintas capas de alambres se
arrollan en el mismo sentido y entonces se le llama cordón.
En general los cables espirales resisten bien el desgaste por rozamiento al tener una
superficie aproximadamente cilíndrica y muy lisa. En ellos se aprovecha bien la
sección ya que en un diámetro relativamente pequeño se obtiene una capacidad de
carga considerable. Al estar arrollado de forma alterna resiste bien la torsión. Además
tienen un elevado módulo de elasticidad.
Al ser poco flexibles se usan fundamentalmente como cables estáticos, en cables finos
se emplean para frenos y mandos de vehículos. Se usan también como cables carril
de teleféricos, cables portadores de puentes colgantes, cables guía en extracción
minera, contrapeso en ascensores y montacargas muy antiguos, en los montacargas y
ascensores actuales se usan cables más flexibles de 6 y 8 cordones.

Cables normales
Se forman con cordones cilíndricos arrollados helicoidalmente en torno a un núcleo o
alma que puede ser de fibra o metálica.
Los cordones de estos cables son de alambres del mismo diámetro y el número de
alambres en cada capa aumenta de 6 en 6, en progresión aritmética. Al ser todos los
alambres del mismo diámetro son cables muy homogéneos
Las torsiones de las distintas capas tienen todo el mismo sentido y están arrolladas
con el mismo ángulo de cableado, de esta manera los pasos de las distintas capas son
diferentes y proporcionales a los diámetros medios de cada capa.
Al tener las capas de alambres diferentes pasos, cuando soportan una presión los
alambres se cruzan y entallan entre sí, produciendo esfuerzos de flexión al doblar el
cable.
En estos cables el esfuerzo a la tracción se reparte de manera uniforme entre todos
los alambres al estar arrollados con el mismo ángulo de cableado.
Su campo de aplicación es muy extenso, su limitación en el uso viene dada por su
poca flexibilidad
Cables de igual paso
Las distintas capas de alambres que forman sus cordones están cableadas bajo el
mismo paso, por ello los alambres de los cordones de las distintas capas no se cruzan
entre sí y se apoyan a lo largo de toda su longitud en las ranuras que se forman entre
cada dos alambres contiguos de la capa inferior. Su aspecto exterior es igual al de los
cables normales y es preciso observar su sección para poderlos diferenciar.
Cables guardines
Se podrían denominar como cables de cables, ya que están formados por varios
cables, llamados ramales, arrollados helicoidalmente alrededor de un alma central de
fibra o metálica.
Cables planos
Los cables planos se denominan también trenzas de cable o cables de cinta, se
componen de varios cables o ramales de 4 cordones cada uno, dispuestos en paralelo
uno junto al otro y cosidos entre sí mediante alambres de costura. Normalmente los
ramales se disponen en número par y se eligen de manera que sus arrollamientos
presenten alternativamente torsión a la derecha y a la izquierda. Los cables planos
pueden estar cosidos con costuras simples o con dobles costuras.
Cables semicerrados y cerrados
Son cables de un solo cordón, formado generalmente por varias capas de alambres
redondos recubiertos por una o más capas de alambre de forma. Cuando el perfil de
los alambres de la última capa tiene forma de X se colocan alternando con alambres
redondos y el cable se llama semicerrado. Cuando el perfil de los alambres tiene forma
de Z, son todos iguales y encajan unos con otros, llamándose entonces cable cerrado.
Igual que en los cables espirales, las capas de alambres de los cables cerrados se
cablean alternativamente a derecha y a izquierda con el fin de reducir su reacción a la
torsión.

Conservación y restauración de metales


La conservación y restauración de metales es la actividad dedicada a la protección y
preservación de objetos históricos (religiosos, artísticos, técnicos y etnográficos) y
arqueológicos hechos en parte o totalmente de metal. Incluye todas las actividades
encaminadas a prevenir o retrasar su deterioro, así como la mejora de su accesibilidad
y la facilidad de su lectura como objetos del patrimonio cultural. A pesar del hecho de
que los metales se consideran generalmente como materiales relativamente
permanentes y estables, en contacto con el medio ambiente se deterioran poco a
poco, algunos más rápido y otros mucho más lento. Esto se aplica especialmente a los
hallazgos arqueológicos.
Es muy importante que un conservador de metales tenga conocimiento de las técnicas
básicas de elaboración de metales, historia de la metalurgia, historia del
arte, arqueología, corrosión de los metales, métodos investigación
científica, teoría y ética de la conservación-restauración.

Deterioro de los metales

Perseo con la cabeza de Medusa en la galería Loggia dei Lanzi en el borde de la


Piazza della Signoria en Florencia, foto tomada después de la limpieza y restauración
de la estatua.
Una causa esencial de deterioro es la corrosión de los objetos de metal o deterioro del
objeto por interacción con el medio ambiente. Como factores más influyentes en el
deterioro de los objetos históricos deben ser señalados la humedad relativa y la
contaminación del aire, mientras que en los objetos arqueológicos tiene un papel
crucial la composición, la profundidad, la humedad y la cantidad de gases en el suelo.
En los casos de agua de mar o dulce los factores de alteración más importantes son la
cantidad y composición de sales solubles, la profundidad del agua, la cantidad de
gases disueltos, la dirección de las corrientes de agua y el papel de los organismos
vivos, tanto microscópicos como macroscópicos.
Deterioro de materiales asociados con metales
El deterioro de materiales asociados depende de que sean materiales orgánicos o
inorgánicos. Los materiales orgánicos normalmente se degradan en un período
relativamente corto de tiempo, principalmente por biodegradación. Con materiales
inorgánicos estos tratamientos son mucho más largos y complejos. La cantidad de
aire, la humedad, la profundidad y la composición del suelo son muy importantes. En
caso de agua salada y dulce son esenciales la cantidad de aire disuelto en el agua, la
profundidad del agua, la dirección de las corrientes y los organismos vivos
microscópicos y macroscópicos.
Básico
Al igual que las intervenciones de conservación y restauración de cualquier otro
material, deben respetarse los principios básicos de conservación-restauración
basados en la calidad de la ejecución y en la mejor preservación de la identidad e
integridad de los objetos culturales, históricos y tecnológicos. Intervención mínima,
reversibilidad y capacidad de reproducción del tratamiento elegido son esenciales, así
como la posibilidad de una fácil identificación de las partes restauradas.2
Recientemente el uso de materiales y procedimientos naturales no tóxicos empieza a
ser importante, tanto en la relación entre el objeto y el conservador-restaurador como
también en relación con el medio ambiente.

Conservación preventiva
Los objetos metálicos del patrimonio son sensibles a las condiciones ambientales
como la temperatura, la humedad, la contaminación del aire y la exposición a la luz
ultravioleta y la luz visible. Deben ser protegidos en un ambiente controlado donde
dichas variables se mantengan dentro de un rango de niveles de daño limitado.
La conservación preventiva, también conocida como el cuidado de colecciones, es un
elemento importante de la política del museo. Es una responsabilidad esencial de los
profesionales del museo crear y mantener un entorno de protección para las
colecciones a su cargo, ya sea en el almacén, en la vitrina, o durante su traslado. Un
museo debe vigilar cuidadosamente el estado de las colecciones para determinar
cuándo un objeto requiere una intervención de conservación y los servicios de un
conservador-restaurador cualificado.

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