INTRODUCCION

Ética para amador es un libro que trata de ayudar al lector a reflexionar sobre la
importancia de la ética a un nivel más profundo (su naturaleza, su finalidad y su
razón de ser como una herramienta necesaria para que el ser humano pueda ser
pleno y vivir “la buena vida”). Todo esto a través de un lenguaje muy sencillo y
numerosos ejemplos para cada tema, pues según el mismo autor, este texto va
dirigido principalmente a adolescentes y jóvenes. Por lo que considero posible que
sea esta la razón que inspiro al autor a escribir este libro con un formato que
asemeja una carta/libro dirigida a su hijo adolescente de 15 años “Amador”. Donde
a través de esta, el autor (el padre) busca transmitir al lector (su hijo), ciertas
enseñanzas que según él lo menciona “a ratos quiso contarle, pero no supo cómo”
por miedo a causar ese fastidio o repudio típico de los adolescentes hacia sus
padres cuando estos “se ponen filosóficos”. De manera que, al dejar un libro que
pudiese ser leído cuando su hijo (el lector) realmente lo deseara, el autor podría
transmitir sus enseñanzas acerca de la ética de una manera en la que
posiblemente fueran mejor recibidas y provechosas para ambos.

DESARROLLO

Esta obra comienza por tratar de explicar que es la ética desde su raíz, por lo que
el primer tema que toca el autor es la existencia de lo “bueno” y lo “malo”, lo cual
describe como lo que percibimos que nos conviene y lo que no nos conviene.
Distinguir entre lo bueno y lo malo es un conocimiento que todos intentamos
adquirir, sin embargo en ocasiones lograr esta distinción no es tan sencillo pues
los criterios dependerán en gran medida de la educación, la cultura, el contexto,
las intenciones, etc... por ejemplo, mentir no es correcto pero ¿qué pasa si a la
persona a la que mentiremos tiene una enfermedad terminal y queremos que pase
sus últimos días sin preocupaciones, sigue siendo anti ético o ahora sería una
buena acción?. Todas estas situaciones ambiguas frente a las que debemos tomar
decisiones en nuestro día a día hacen que esta distinción se vuelva un tanto difícil.
Pero ¿por qué es tan importante tomar la decisión correcta?, bueno según el libro
el resto de nuestra vida es al menos en gran parte resultado de nuestras acciones

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y decisiones, si nuestro destino estuviera ya determinado nuestras decisiones
carecerían de importancia, pero al ser nosotros los arquitectos de nuestro propio
destino cobra importancia saber distinguir lo “bueno”, es decir “lo que es
conveniente para nosotros”.

El humano tiene la posibilidad de decidir actuar con o sin ética, pues cuenta con
un juicio que, a diferencia de los animales, le permite actuar no por instinto si no
por decisión propia. Y aunque bien es cierto que tu educación y tu cultura
determinaran en gran parte tu manera de pensar (tu “programación”) al final cada
persona tiene la libertad para actuar de una u otra manera.

Es importante hacer énfasis en que no somos libres de elegir lo que nos pasa,
pero si para responder a lo que nos pasa de tal o cual forma.

Existen muchas decisiones que se toman automáticamente, es decir sin pensar

demasiado en ellas, pues son actividades que forman parte de nuestra vida
cotidiana (como cepillarse los dientes). Sin embargo, toda acción que el humano
realiza es impulsada por un “motivo” (el por qué haces esa acción). El autor
reconoce en el libro tres tipos de motivos: ordenes (por obediencia), costumbres
(para no contrariar a otros/miedo a desentonar) y caprichos (por deseo propio) y
por esta razón recomienda antes de tomar cualquier decisión, preguntarse dos
veces ¿Por qué hago esto? Con la finalidad de poder identificar el verdadero
trasfondo de nuestras acciones ¿es una orden, costumbre, o un capricho?... y lo
más importante, ¿es esta orden/costumbre/capricho bueno(a)?. Es importante
examinar lo que hacemos a fondo para poder obrar de la manera correcta. E igual
de importante es que nuestro obrar ético sea, no por miedo a una consecuencia,
(“la ética de un hombre libre nada tiene que ver con huir de castigos o esperar
recompensas, pues no pasaría a ser más que un esclavo”) si no porque nos nace
hacerlo asi. A veces debemos alejarnos de las órdenes, costumbres, castigos y
recompensas (de cuanto quiere dirigirnos desde fuera) y debemos plantearnos
todo desde nosotros mismos, desde nuestra voluntad. “No preguntes a nadie lo
que debes hacer, no pierdas tu libertad poniéndote al servicio de otro”. Aunque
según menciona tambien el autor nuestra libertad es algo a lo que no podemos

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renunciar, aunque asi lo quisiéramos y por lo tanto tampoco la responsabilidad
ligada a nuestras decisiones.

Se trata entonces de, en el uso de nuestra libertad, hacer lo que queramos (tomar
nuestras propias decisiones), mas no lo primero que nos venga en gana (como
Esaú personaje bíblico que renuncio a sus derechos de primogenito por un plato
de lentejas pues de momento se sentía hambriento). Se trata de autoanalizarte y
determinar que es lo que en verdad queremos y es bueno, (detrás de los
caprichos) el ¿qué decisiones no llevaran a vivir la “buena vida humana”? Pero
¿en qué cosiste “la buena vida humana”? En ocasiones las personas confundimos
“la buena vida” con la posesión en grandes cantidades de bienes materiales, y
aunque poseer bienes materiales o querer poseerlos no es algo malo, es
importante que seamos conscientes de que lo que verdaderamente llena al
hombre usualmente proviene de las relaciones que mantiene con las otras
personas que le rodean. El amor o el respeto, por ejemplo, solo pueden provenir
de personas que tratemos como a iguales. “A las cosas hay que manejarlas como
cosas y a las personas hay que tratarlas como personas, de esta manera las
cosas nos ayudaran en muchos aspectos y las personas en uno fundamental que
ninguna cosa puede suplir, el de ser humanos.” Ahora, ¿porque tratar a las
personas como humanas? Bueno, sin las personas que nos rodean podríamos
vivir, pero no humanamente, pues es su humanidad y el tratarlos como tal lo que
nos da la nuestra. Una persona no puede tener una charla con una roca o con un
animal, no de la misma forma que lo podría hacer con un humano, pues son
actividades correspondientes a nuestra naturaleza humana. De manera que un
hombre no recibirá tanto de alguna cosa o animal como podría hacerlo de otro
hombre, es entonces que, incluso desde un punto de vista objetivo, resulta
conveniente tratar a las personas de un manera digna y humana, darles esa
humanidad para que ellos me la den a mi tambien y yo pueda asi sentirme pleno.
Es algo asi como respeta, para que te respeten. Gracias a la capacidad de
imitación tan grande que tiene el ser humano, es casi seguro que en la mayoría de
los casos nos trataran como se vean tratados. Y ¿Cómo podemos tratar a alguien
como persona?, tratamos a alguien como persona cuando nos ponemos en su

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lugar, cuando intentamos comprenderle desde dentro, de adoptar por un momento
su propio punto de vista y tomamos en cuenta sus derechos (tomarnos al otro
enserio, reconocer que es tan real e importante como tú mismo).

Otro tema que toca el autor es el del temor del hombre hacia el placer o al gozo.
Muchas personas por generaciones han ligado la inmoralidad al placer, llegando
incluso a creer algunos de ellos que lo más moral se encuentra en el puritanismo,
o que el sufrimiento es síntoma de estar obrando bien. Pero si la ética consiste en
lograr la buena vida y en apostar a favor de que la vida vale la pena tiene para el
autor más sentido el aferrarnos a disfrutar de los pequeños placeres que existen
en lo que nos rodea, los que enriquecen y nos hacen amar mas la vida. Según el
autor la máxima gratificación o recompensa que podemos obtener en esta vida de
cualquier cosa es la alegría. Por lo tanto “el placer es deseable cuando sabemos
ponerlo al servicio de la alegría, pero no cuando la enturbia o la compromete.” Es
bueno cuando sabemos utilizarlo con templanza.

Por último, en el ultimo capitulo el autor explica cuál es la relación que existe entre
la ética y la política, y desde un punto de vista ético, como sería un sistema
político deseable. Según el autor “la finalidad de la ética es encontrar lo que mas
nos conviene y vivir lo mejor posible” mientras que de manera similar el objetivo de
la política es “el de organizar lo mejor posible la convivencia social de modo que
cada cual pueda elegir lo que le conviene”. Ahora bien, si la ética parte de la
libertad sin la cual no hay “buena vida”, es decir “lo que conviene” a la persona,
entonces un sistema político ético deseable será aquel que no limite al mínimo los
derechos de la libertad humana (libre expresión, intervenir en asuntos públicos,
elegir, etc.) lo mas alejado a este seria por ejemplo una dictadura. De igual forma
un sistema político deseable es aquel que en uso de la libertad de decidir de cada
persona reconozca responsable a cada cual por sus méritos asi como por sus
fechorías. Y por último uno que busque fomentar la igualdad y la justicia, pues se
trata de la virtud que nos permite aprender a considerar los intereses del otro
como si fueran tuyos y los tuyos como si fuesen del otro.

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CONCLUSION

Ética para amador es un libro que de principio a fin logra que el lector se
mantenga reflexionando ya sea por un cuento, una frase, una cita o el tema mismo
que se está tratando. Considero que a pesar de ser este un libro relativamente
corto el contenido es algo denso, aunque es importante mencionar que de muy
fácil lectura, gracias al lenguaje tan sencillo que maneja, mismo que en ocasiones
siendo sincera encontré algo tedioso por parecer que se esta explicando todo a
una persona muy joven y por la cantidad de ejemplos que se utilizan para explicar
un mismo tema que en ocasiones volvían la lectura un poco mas larga, a mi
parecer, de lo necesario.

Sin embargo creo que este libro cambio, o enriqueció mucho mi perspectiva de lo
que es la ética, pues con anterioridad si se me hubiese preguntado que es la ética
creo que me hubiera limitado a decir que es algo que te ayuda a distinguir lo que
está bien y lo que está mal, o un conjunto de reglas morales que tiene una
persona y lo llevan a actuar de la forma en que lo hace. Pero despues de leer este
libro entendí que la ética es algo más profundo. La ética para mí se podría resumir
en buscar “la buena vida”, es decir en actuar de una forma favorable para mí, que
me ayude a conseguir “lo que en verdad deseo” (lo que en verdad me haría feliz).
Claro está, haciéndome consiente de que lo favorable para mí siempre será hacer
el bien a otras personas, tratarlas humanamente, pues eso me confiere a mi y a
ellos nuestra humanidad, sin la cual no podría ser capaz de ser del todo plena y
feliz (no podría vivir esa “buena vida”). Las cosas materiales que por lo general
solemos confundir con lo que “en verdad queremos” no nos podrán hacer felices
por sí solas, una casa grande o un auto nuevo poca satisfacción nos generara si
no podemos compartirla con alguien. Pues en los humanos, en nuestros
semejantes se encuentran cosas como el amor, el respeto, la aceptación y la
amistad que algo material jamás podrá generarnos. Y al ser esta, una de las
necesidades del hombre (como podemos observar por ejemplo en la pirámide de
las necesidades de Maslow o en este libro) el carecer de esa humanidad y de esa
aceptación/amor no nos permitiría alcanzar la plenitud la “buena vida”.