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Serie: LINGÜÍSTICA YFILOLOGÍA, nº 50 GRACIELA REYES

METAPRAGMÁTICA
LENGUAJE SOBRE LENGUAJE, FICCIONES, FIGURAS

REYES, Graciela
Metapragmática: lenguaje sobre lenguaje, ficciones y figuras/ Graciela
Reyes, - Valladolid: Universidad de Valladolid, Secretariado dePublicaciJ-
nes e Intercambio Editorial, 2002
116 p.; 24 cm.- (Lingüística y Filología; nº 50)
ISBN 84-8448-184-0
1 Pragmáatica 2. Lenguaje y lenguas- Filosofía l. Universidad de Valladolid,
Secretariado de Publicaciones e Intercambio Editorial II. Serie
81
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SECRETAIUADO DE PUBLICACIONES
E INTERCAMBIO EDl'fORIAL
UNIVERSIDAD DE VALLADOLID

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© GRACIELA REYES, Valladolid, 2002


SECRETARIADO DE PUBLICACIONES E INTERCAMBIO EDITORIAL
UNIVERSIDAD DE VALLADOLID

Diseño de cubierta: Miguel Ángel de la Iglesia


Jesús Vicente Martín

ISBN: 84-8448-184-0

Dep. Legal: VA - 837 ! 2002

Composici6n: SECRETARIADO DE PUBLICACIONES

Imprime: Angelma
Este trabajo es resultado de una investigación realizada mientras ocupaba la
cátedra honorífica "Juan de Valdés" en el Departamento de Lengoa Española de la
Universidad de Valladolid. Agradezco al director del departamento, César Hernández
Alonso, su invitación generosa y cordial.
Las citas bibliográficas de este libro, citas que he reducido al mínimo para
facilitar la lectura y porque es mejor nombrar a pocos, cuando es imposible nombrar a
todos, no hacen justicia a mis deudas intelectuales, que son muchas y diversas.
Aunque no trato aquí la lengoa literaria, debo mucho a la lectora de los poetas,
conciencias metapragmáticas privilegiadas.
Finalmente, doy gracias a quienes --cercanos o distantes- me inspiran y ayudan
a trabajar; entre ellos, en lugar destacado, la doctora María Ana Senatore de Reyes.

CHICAGO, NAVIDAD DEL 2000.


INTRODUCCIÓN

PRAGMÁTICA YMETAPAAGMÁTICA

l. PRAGMÁTICA

La pragmática es la teoría de la interpretación de los significados lingüísticos,


tal como se 1nanifiestan en la co1nunicación. Tiene dos aspectos interrelacionados: es,
por una parte, el estudio de cómo significa el lenguaje cuando es usado para la
comunicación, y, por otra parte, es el estudio de las propiedades lingüísticas que hacen
posible la comunicación, o sea, de la índole misma del lenguaje en cuanto este sirve
para la vida social. El primer aspecto puede incorporarse a una teoría de la
comunicación lingüística, donde confluyen la sopiolingüística, la psicolingüística, las
teorías sobre inteligencia artificial, la antropología lingüística, la teoría literaria, el
análisis de la conversación. El segundo aspecto se integra a la lingüística descriptiva.
La pragmática, así entendida, pertenece por un lado a la lingüística descriptiva, y por
otro lado coopera con otras teorías en el análisis de la comunicación humana, sin
perder por eso su unidad, ya que su objeto es siempre el estudio del funcionamiento
significativo del lenguaje.
Véase un ejemplo de la primera dimensión de la pragmática, el análisis de la
conducta lingüística. Supóngase que le digo a una amiga que debo llegar rápidamente a
un sitio, y que ella me dice:
(1) Tengo el coche en la puerta.
En muchos contextos fáciles de imagínar, si mi amiga dice esto lo que debo
entender es que me ofrece su coche, ya sea para que yo lo use, ya sea para llevarme
ella misma adonde tengo que ir. Esta relación entre un enunciado sobre la ubicación de
un coche y el ofrecimiento del coche es una relación pragmática: lo que he hecho es
entender lo que mi amiga dijo y algo extra, que ella transmitió voluntaria e
implícitamente. Como en nuestras interacciones comunicativas decimos, por lo
general, solamente una parte de lo que queremos decir, e incluso decimos cosas
aparentemente no relacionadas con lo que queremos decir, y sin embargo nuestros
interlocutores suelen entender nuestra intención, pueden proponerse principios que

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explican los procesos inferenciales de la comunicación verbal. La pragmática ha Para entender el significado de este enunciado e identificar a la chica en
establecido una serie de principios regulares para describir el comportamiento cuestión debo hacer una inferencia sobre el significado de dos. Semánticamente, dos
lingüístico, partiendo de la noción clave de "significado no natural" propuesta por significa 'por lo menos dos'. Con esa información solamente, el intérprete de este
Grice, por la cual el significado, en lugar de estar en las palabras, pasa a estar en el enunciado no podría localizar a la chica, si hubiera a la vista otras chicas con varias
reconocimiento de la intención con que se dicen las palabras. En esta línea de análisis, bolsas, ya que tanto la que tiene dos bolsas como la que tiene tres o cuatro tienen,
entender lo que otro dice es reconocer su intención comunicativa. Con esta propuesta lógicamente, 'por lo menos dos'. Sin embargo, la referencia que hace este enunciado
se da importancia teórica, por primera vez, al papel que desempeña la inferencia en los es muy clara: la sobrina es la que tiene 'dos como máximo'. Este valor no forma parte
intercambios comunicativos. del significado invariable de dos, sino que es una inferencia pragmática que, por lo
El segundo aspecto de la pragmática, el puramente lingüístico, es el que analiza previsible y generalizada, parece formar parte del significado semántico. Sabemos que
la gramática y la semántica de una lengua, para determinar qué propiedades hacen es una implicatura, sin embargo, porque puede cancelarse sin contradicción, como
posible usar el lenguaje en la comunicación, es decir, qué relación hay entre la sucedería en este caso si dijéramos algo así como:
estructura de los enunciados tipo y las inferencias contextuales. La noción de (5) Tiene dos bolsas, bueno, en realidad tiene cuatro, si cuentas la mochila de la
implicación pragmática o implicatura, central en el análisis de la interacción espalda y el bolsito.
comunicativa, ha producido una reconsideración de la semántica y la gramática de las En este enunciado la hablante no se contradice, pues quien tiene cuatro por
lenguas. Podemos asignar a ciertos ítemes léxicos y gramaticales significados estables, supuesto tiene dos. Pero en el uso de la lengua, los cardinales producen la implicatura
invariables, y resolver la ambigüedad o la polisemia recurriendo a la noción de generalizada 'como máximo X', y gracias a esa implicatura la referencia de "la que
implicatura. Esto nos pe1mite a la vez simplificar la semántica y refinar nuestro análisis tiene dos bolsas en la mano" resulta inequívoca.
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del significado lingüístico. Veamos un ejemplo (volveremos sobre este tema en el
Capítulo 1). De modo que para llegar a establecer a quién se refiere una frase nominal usada
para identificar a alguien, identificación imprescindible para reconstruir la proposición
La conjunción disyuntiva o parece ambigua, pues tiene una interpretación básica del enunciado y asignar a este valor de verdad, tenemos que aplicar, a veces,
exclusiva y otra inclusiva, como ilustran los siguientes ejemplos:
principios de pragmática, transgrediendo los límites entre semántica y pragmática. La
(2) El gato se escondió en el armario o debajo de la cama. (exclusivo) pragmática es en ocasiones lógicamente anterior y no lógicamente posterior a la
(3) Están invitados los parientes o amigos íntimos. (inclusivo) representación semántica, lo que altera el cuadro de componentes de la lingüística que
Pero en lugar de considerar que la conjunción o es ambigua, podemos tener en hemos recibido de la sintaxis generativa (véase Levinson, 2000, cap. 3). Incluso la
cuenta su uso, y hacer un razonamiento co1no el siguiente. En el uso, la conjunción o relación entre gramática y pragmática puede reinterpretarse, como se verá en el
contTasta, en una escala informativa, con la conjunción y, que es más fuerte, de 1nodo Capítulo 1, dando a la pragmática un valor explicativo más extenso que el que tenía
que quien usa o indica, metapragmáticamente, que no puede usar y, el término más originalmente.
informativo de la escala. De este modo, se puede asignar a la conjunción o un valor El éxito de la pragmática como disciplina lingüística ha sido extraordinario. Su
semántico, gen~al, inclusivo, pero en su uso habitual un valor exclusivo, ya que poder explicativo crece, y ya no hace falta defender su existencia, como hace apenas
no1malmente la mterpretamos como la negación implícita de y. diez o quince años. Por entonces la pragmática no tenía programa ni definición claros,
La pragmática puede jactarse ya, pese a su cmta vida como disciplina, de y a algunos lingüistas les parecía que era solamente el deseo confuso de otra lingilistica
algunos logros importai'tes. Aunque todavía no se pueda explicar cuál es -exacta y que no dejara fuera el uso del lenguaje. No quiero decir que la pragmática esté ya
definitivamente- el mecanismo mental que nos permite recuperar, por lo que nos afianzada y que todos los estudiosos del lenguaje estén dispuestos a admitir que tiene
dicen, lo que nos quieren decir, sin embargo las teorías sobre las inferencias progresan un proyecto nítido yunitario. Pero al menos (por la indole de su objeto quizás) somos
y han despejado algunos de los misterios de la comunicación. Las dos teorías muy conscientes de sus metas, de sus restricciones y sus deficiencias, de modo que la
inferenciales más prestigiosas en este momento, la teoría de la relevancia y las teorías pragmática reflexiona continuamente sobre sí misma y no parece en peligro de caer en
neogriceanas, pese a sus profundas diferencias, concuerdan en proponer que incluso la autocomplacencia y el dogmatismo (véase Verschueren, 1999b).
para llegar al significado literal de una expresión (desde siempre dominio de la Una ojeada a las metáforas que han servido para hablar de pragmática muestra
semántica) necesitamos hacer inferencias pragmáticas. Véase el siguiente enunciado: bien su desplazamiento de la marginalidad al centro. De la pragmática se dijo primero
(4) Aquella chica, la que sale de la tienda con dos bolsas, es mi sobrina. que era la papelera (the wastebasket; Bar-Hillel, 1971) de la lingüística, a la que iban a
parar todos los temas qu~ no podía tratar adecuadamente la sintaxis. Años más tarde,
cuando ya parecía estableéida como disciplina, Levinson (1983) la llamó Cenicienta,
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ya que, desde la oscuridad y el desdén, tenía que luchar para tener un lugar dentro de la usan la lengua o de cómo deberían usarla, y las preferencias, hábitos o prejuicios que
lingüística. Ahora las metáforas han cambiado. En la reciente convocatoria a un dan fonna a su propia pragmática. Hacemos metapragmática cada vez que tenemos en
coloquio en homenaje a Jacob Mey, editor del copioso Journal ofPragmatics, se la cuenta explícitamente, en la descripción de un fenómeno, las elecciones deliberadas
llama "arma cargada". Esta frase evoca otra del lingüista norteamericano Dwight del hablante y su evaluación del lenguaje que usa y del acto comunicativo mismo,
Bolinger, quien llamó "arma cargada" al lenguaje. Lo sugerido por la metáfora es que presuponiendo que la pragmática del hablante, o su capacidad para producir
si el lenguaje es un arma cargada (cargada de significados posibles, implícitos, que enunciados contextualmente adecuados y eficientes, está regida por una competencia
pueden utilizarse de mala fe), solamente la pragmática, que estudia el ejercicio de metapragmática más o menos consciente que abarca todos los niveles del uso de la
nuestra facultad de hablar y sus rigores culturales, sociales y cognoscitivos, puede dar lengua.
una idea de por qué el lenguaje es como es. Por su parte, Mey (1993) dice que la La pragmática de la pragmática, es decir, la reflexión sobre el uso del \
pragmática, más que un cubo de basura, es una caja de Pandora (lit, 'lata de gusanos', ) lenguaje, regula y contribuye a hacer posible el uso del lenguaje. Los hablaotes poseen
can of worms) que van a desparramarse sobre toda la lingüística. Y, finalmente, en su conocimientos metapragmáticos más o menos conscientes, que abarcan un conjunto de
monumental obra sobre la implicatura, Levinson (2000) dice que la pragmática hace no1mas indispensables para usar el lenguaje, y por lo tanto indispensables para la vida
intrusiones en la semántica, es una intrusa que desbarata las tradiciones recibidas y social, vida social que estas normas ayudao a establecer y a la vez reflejan, y por lo
cambia la arquitectura de la teoría del significado (acabamos de verun ejemplo de esta tanto dejan inscritas en el lenguaje. Hay indicadores metapragmáticos en casi todos los
intrusión). niveles lingüísticos. También hay reflexiones metapragmáticas implícitas; las
Armas cargadas, cajas de Pandora, intrusos... Estas metáforas intentan ser principales son las que resultan de las elecciones de los hablantes, cuando la selección
agresivas y chocantes, pero ya no defienden la necesidad de una disciplina de los de una expresión puede contrastarse con la selección de cualquiera de sus compañeras
desechos, porque nadie piensa que los fenómenos pragmáticos sean desechos. La de paradigma o de campo semántico.
pragmática ha alcanzado rango académico, y creo que nadie le niega abora su lugar El caso típico de reflexión metapragmática explícita es la cita, como muestra el '.'.:\..
dentro de la lingüística, ya que es indiscutible que una teoría completa del lenguaje ejemplo siguiente, tomado de una conversación:
tiene que incluir una teoría sobre su uso, aunque más no sea porque hay un conjunto de
(6) Dijo que está "exhausto".
signos, estructuras y mecanismos que codifican inequívocamente la relación entre
La palabra entrecomillada es o no es una representación literal de lo que dijo el (
lenguaje y contexto de uso y la relación entre el lenguaje y la conciencia lingüística de
las comunidades. hablante citado, pero, por tener una entonación especial, indica un comentario por \)
parte del hablante, que le atribuye la expresión a alguien y además la comenta (como 1
certera, exagerada, extraña, etc.) y de paso hace un comentario sobre el hablante
citado.
2. METAPRAGMÁTICA Un caso interesante de reflexión metapragmática implícita,, a su vez, es la
elección de un elemento dentro de una serie paradigmática o de un campo semántico.
Mi intención en este trabajo es intentar el análisis de cómo pensamos la Supóngase el siguiente diálogo: ·
pragmática los hablantes al hablar: quisiera investigar__ algunos aspectos del (7) A: - ¿Quién es ese hombre que está con ella?
conocimiento de los hablantes sobre el uso del lenguaje, tal como se manifiestan en B: - Su amante.
ciertos fenómenos lingüísticos que comparten la propiedad de ser reflexivos. La
Si alguien dice "amante" transmite implícitamente que no lia elegido la palabra
reflexividad es la capacidad del lenguaje de referirse a su estructura y a su uso.
"marido", que pertenece al mismo campo semántico, pero es más específica y tiene un
La metapragmática, es, ante todo, una perspectiva de análisis dentro de la contenido más prestigioso socialmente: tanto, que si B supiera que el hombre es el
pragmática: un modo de analizar hechos lingüísticos teniendo en cuenta en el análisis marido tendría que decirlo, suponiendo que actúa de buena fe. En la elección hay una
la intervención de los hablantes en su propio discurso, sea esta intervención explícita o reflexión implícita sobre la propiedad o adecuación de las palabras, que el interlocutor
no, consciente o menos consciente. Dicha participación es reflexiva: implica da por sentada, de modo que, en este ejemplo, el interlocutor debe entender que B ha
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decisiones, evaluaciones y preferencias lingüísticas que se reflejan en la estructura del seleccionado amante porque la palabra marido no hubiese sido apropiada. No hay
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i texto, en cómo se distribuye y evalúa la información transmitida, en qué se dice y qué incompatibilidad lógica entre ser marido y ser amante, pero hay una gran diferencia
se deja implícito, en qué elecciones gramaticales, léxicas, fonológicas, gráficas, se entre ambos papeles, desde el punto de vista social, y por lo tanto es inapropiado decir
hacen, en qué recursos eatilísticos se ponen en movimiento, en cómo se reproducen "amante" si se puede decir "inarido". Los hablantes hacen tales reflexiones -1nás o
otros textos. Estas actividades muestran la conciencia que tienen los hablantes de cómo
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GRACIELA REYES METAPRAGMATICA, LENGUAJE SOBRE LENGUAJE, FICCIONES, FIGURAS 17

menos conscientemente-- y deciden en consecuencia, porque la pragmática tiene evolutionary prerequisites for the development of language. It is so central,
razones que la lógica no entiende. furthermore, that ali verbal communication is se/f-referential to a certain degree. In
Pragmática y metapragmática son dos conjuntos de prácticas simultáneas en other words, there is no language use without a constan! calibration between
nuestra actividad lingüística cotidiana: no hay pragmática -uso de la lengua- sin pragrnatic and metapragrnatic fanctioning (1999a, pág. 187).
metapragmática -alguna conciencia del uso--. En la actividad pragmática, los textos,
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gracias a ciertos dispositivos lingüísticos ad hoc y a los principios generales de la
Si toda comunicación es, hasta cierto punto, autorreferencial, como propon~·\
comunicación verbal, se conectan con sus contextos lingüísticos, sociales y fisicos, y
Verschueren, el análisis pragmático y el metapragmático se superponen, excepto en los
así se constituyen en espacios de interacción comunicativa. La pragmática otorga
casos en que hay claros indicadores de conciencia metapragmática, por ejemplo verbos
sentido y validez a las experiencias sociales textualizadas, que, a su vez, están
que categorizan los hechos lingüísticos (decir, exigir, preguntar, protestar, etc.),
reflejadas en el lenguaje mismo. La metapragmática, por su parte, es una práctica
conectores discursivos, estructuras de discurso indirecto, etc. Pero aun en los casos en (
reflexiva, que se manifiesta como un comentario continuo sobre los enunciados
que es dificil despegar un nivel del otro, vale la pena intentar la ampliación del análisis
presentes y ausentes, sobre el valor comunicativo de las palabras, sobre el alcance y
consecuencias de decir y no decir algo en ciertos tipos de situaciones, sobre por qué
para incluir las actividades metapragmáticas realizadas por los interlocutores. j
Tomemos el ejemplo de la deixis. Se puede estudiar, por ejemplo, el
una práctica lingüística es afortunada o desafortunada, sobre las relaciones entre
siguificado de los tiempos verbales en el discurso como un significado pragmático, que
lenguaje y estados internos de los hablantes, en suma, sobre el valor social, poético,
retórico, heurístico, político, histórico, del lenguaje. consiste en contextualizar el discurso, en conectarlo con el tiempo cronológico, con el
presente de los hablantes. Sin embargo, todas las manipulaciones de la temporalidad
Como práctica paralela a la práctica lingüística, la metapragmática no es ni una expresadas por los morfemas de presente, pasado y futuro dependen del conocimiento
novedad ni un fenómeno invisible, y además su importancia es reconocida por todos que tengan los hablantes de la relación entre el discurso y el contexto y de qué aspectos
los que estudian los usos del lenguaje, especialmente a partir de la idea de que la de esa relación quieran comunicar. Estos conocin_iient()S son metapragmáticos, porque
; reflexividad -la capacidad del lenguaje de referirse a sí mismo-- es una propiedad
incluyen 110 solamente la capacidad de empleadas formas apropiadamente, sino
· específica y fundamental del lenguaje humano.
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también información extralingüística (sobre el mundo al que se refieren las formas) y,
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Todavía no se han estudiado el alcance y las manifestaciones de la especialmente, sobre la relación deseable entre lo lingüístico y lo extralingüístico
reflexividad en el uso corriente del lenguaje, es decir, no se ha incorporado según las normas que rigen un particular hecho de habla. Véanse los siguientes
sistemáticamente el nivel metapragmático al analizar fenómenos pragmáticos. Una enunciados:
de las razones para este aparente descuido es la extensión de la reflexividad, la (7) a. Mi madre dijo que el sábado me traía una paella.
dificultad de distinguir niveles, especialmente cuando la pragmática y la
metapragmática son coextensivas. b. Mi madre dijo que el sábado me va a traer una paella.
En estos dos enunciados típicos del lenguaje coloquial la hablante manipula el
Analizando un texto de Campanile, "Paganini no repite", cuya comicidad
tiempo del verbo traer según consideraciones extralingüísticas, s~gún qué quiere
consiste en que Paganini tiene que repetir hasta la exasperación la frase "Paganini no
comunicar y por qué quiere comunicarlo. Nótese que los dos enlinciados podrían
repite" (en la cual enuncia su decisión de no repetir nunca una pieza musical),
emitirse antes del sábado en cuestión, y en ambos casos entendemos que la madre
Umberto Eco comenta lo siguiente: "La duda es si en ese trozo nos reímos de las
traerá la paella el mismo sábado. Pero el uso de va a traer en (7b) resitúa el enunciado
contradicciones entre lenguaje y metalenguaje, de las que está entretejido el texto,
de la madre en el presente del intercambio, o sea, pone explícitamente la paella en el
exhibiendo su propio fracaso, o si nos reímos porque en el equívoco de ese texto
futuro de los hablantes, no solamente en el futuro de la madre al hacer el anuncio. Con
vemos nuestro mismo equívoco de usuarios de un lenguaje que no consigue aclarar
nunca si es "rneta" o no" (Eco, 1998, pág. 79). esto, comunica una implicatura generalizada propia del tiempo futuro (que no
transmite el imperfecto utilizado en (7a)): que la intención mencionada (traer una
En efecto, la referencia al lenguaje penetra en todos sus usos, es ubicua y muchas
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i veces indiscernible de otras referencias. Verschueren considera que la conciencia
paella) $e·cumplirá (habrá paella el sábado). El valor informativo de (7b), gracias a esa
implicafura;·es mayor que el de (7a), con lo cual la afirmación queda realzada y,
reflexiva, en todas sus gradaciones, es tan importante que puede considerarse uno de los además, es más relevante, ya que tiene conexión directa con el presente de los
1 requisitos evolutivos originales del desarrollo del lenguaje humano:
! i While al/ linguistic choice-making implies sorne degree of consciousness, sorne
hablantes. En (7a) meramente se retransmite lo que dijo la madre, lo que elimina las
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implicaturas relacionadas con el futuro usado en (7b). Esta relocalización depende de
choices openly rej/ect upan thernselves [... ] or upan other choices [... ]. Reflexive consideraciones extralinl;¡\iísticas, y toda muestra de que el hablante intenta realzar una
awareness may be so central that it could be regarded as one of the original información es una señal explícita de conciencia 111etap~agmática.

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Este fenómeno es también pragmático, por supuesto, ya que en esta rutinaria o siga patrones previsibles. No hay reglas fijas, pero sí hay, necesariamente,
retransmisión la hablante asocia la acción de traer la paella a otras acciones, presentes un sistema normativo, como hay en otros aspectos de nuestra vida social.
y futuras, de la vida de los participantes del diálogo, y para eso provoca ciertas Somos más o menos conscientes de cómo usamos el lenguaje, y tenemos un
implicaciones que sean accesibles para los interlocutores en el contexto. La perspectiva sistema de ideas, que suelen llamarse "ideologías lingüísticas" (Blommmaert, 1999;
metapraginática pone de relieve en qué consiste la actividad pragmática, más o menos Urciuoli, 1998 ), sobre cómo es mejor y más apropiado usarlo, para qué y por qué.
consciente, de la hablante: pone a la hablante bajo el foco del análisis. Vale la pena Ningún usuario carece de estos conocimientos, y casi todos los usuarios los expresan
hacerlo, porque ganamos conocimientos sobre el lenguaje como hecho social, sobre en sus discursos. Como veremos en el Capítulo 2, una parte enorme de nuestra
normas de uso que sobrepasan la voluntad individual o las intenciones de un hablante. actividad lingüística consiste en representar y analizar (intentar reproducir, criticar,
En el caso de la deíxis, adoptando un punto de vista metapragmático podríamos venerar, tergiversar) enunciados ajenos, fragmentos de acción lingilistica arrancados de
i;
encuadrar la pragmática de estas formas en las percepciones sobre el tiempo y el otros contextos, algunos de ellos imaginarios. En nuestra tradición judeocristiana, el
espacio originadas en normas sociales tanto cuanto en capacidades cognoscitivas: acto de creación del mundo es un acto lingüístico, y la divinidad es la que al hablar
añadiríamos así una nueva dimensión a la pragmática de todas las formas que conectan actúa, en acto eminentemente creador: dada la importancia central de la palabra ("en el
con el contexto, y podríamos analizar con mayor generalidad los sistemas de metáforas principio fue el verbo"), nuestra atención a la palabra, divina o no divina, importante o
subyacentes. También haríamos un aporte al estudio de la gramática, indicando a qué trivial, es constante y obsesiva, es un tema continuo de discusión. Discutimos el uso de
se deben algunos "en"Ores" del uso. Véanse otros dos ejemplos: la palabra, mucho más que la palabra misma como signo convencional: si bien
(8) a. Le dije que trajera una paella. hace1nos muchas observaciones 1netalingüísticas del tipo "'oír' se escribe con acento",
b. Le dije que traiga una paella. las más candentes reflexiones son las que se concentran en la práctica lingüística, no en
Mientras (8a) respeta las reglas gramaticales de consecutio temporum, (8b) las formas más o menos arbitrarias de las palabras, salvo que estas sean relevantes en
muestra un error del tipo de los que se corrigen en la escuela. Pero, aceptemos o no el empleo y significado de las expresiones.
que (8b) es una oración correcta, sí entendemos que el uso de traiga en lugar de trajera La producción de discursos está profundamente ligada al conocimiento
se origina en el deseo de situar la acción en el futuro respecto del presente del locutor, metapragmático. El uso artístico del lenguaje, tema que todavía espera una teorización
como sucedía en (7b), más arriba, que es aceptable para la gramática, sin embargo. Y lingüística (que no puede venir sino de la pragmática), depende de manera crucial de la \'
estos movimientos, y otros más audaces, que hacen los hablantes con las fonnas normativa metapragmática. La noción de estilo podría reestudiarse desde la
verbales, responden a normas que no son, claro, gramaticales, sino metapragmáticas, a metapragmática: la disposición de los elementos de un texto, las fi!l\lfas elegidas para
interpretaciones de la relación entre lenguaje y realidad que permiten expresar ciertos no hablar literalmente, lo que se deja sin decir, etc., todo eso depende de decisiones \
significados, aun a costa de forzar la sintaxis. meta¡iragmáticas, aunque esas decisiones queden implícitas muchas veces.
Nótese, por cierto, que un error de sintaxis no es tan comprometedor co1no un
error de pragmática, como señala Caffi (1998). Todos sabemos que podemos
comunicar algo aunque nuestra frase no esté perfectamente bien formada (¿qué seria, si 3. TEMAS DE ESTE LIBRO
no, de los que tenemos que comunicarnos en lenguas extranjeras?). En cambio un error
de pragmática consiste en decir algo inadecuado o inefectivo, y las consecuencias de
tales fallos pueden ser graves. La metapragmática normaliza el comportamiento El plan de este trabajo es el siguiente. En el primer capítulo se trata, de una
1 ¡
lingüístico, le da principios, sentido, hábitos aceptables. Esto no significa que nuestra manera general, el alcance de la noción de metapragmática, se mencionan algunos
vida lingüística esté regida por principios inmutables de comportamiento: hablar con fenómenos gramaticales y discursivos que revelan la participación reflexiva de los
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otros es hacer elecciones continuas y negociaciones continuas, y para eso empleamos hablantes en su discurso, y, finalmente, se enlaza el análisis metapragmático con los
las formas convencionales del lenguaje como podemos, usándolas y abusando de ellas estudios sobre interacción cooperativa, dentro de la tradición de Grice. En los dos
capítulos restantes se analizan dos procesos comunicativos que son plenamente
también, forzando nuevos significados o creándolos en la conversación, es decir,
metapragrnáticos, es decir, que no podrían describirse adecuadamente si no
explotamos al máximo lo que tenemos (el sistema gramatical y semántico de la lengua)
para alcanzar un éxito razonable en el empeño de comunicar algo y de interpretar lo incorporáramos este nivel de análisis: el capítulo 2 trata de la reproducción de discurso, y
que nos dicen. Como explica Verschueren (1999) el lenguaje es adaptable, y lo el capítulo 3 analiza la ironía.
usamos creativamente, ~unque una gran parte de nuestra acción lingüística sea La reproducción de discursos es la actividad metapragmática más conocida y \
estudiada. Las lenguas eurepeas estándares poseen una gramática básicamente idéntica,

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20 ÜRACIELA REYf\S
MIITAPRAGMATICA. LENGUAJE SOBRE LENGUAJE, FICCIONES, FIGURAS 21

que perr;iite citar directamente (poniendo mayor énfasis en los aspectos expresivos y
pragmállcos del enunciado reproducido), o indirectamente (reformulando el contenido una parte del conjunto de normativas sociales que regulan la pragmática, y revelan un
proposicional de los enunciados). En este trabajo se presenta una visión general de los conocimiento muy sólido del uso del lenguaje. Cuando los ejercicios requerían, en
tipos de cita, y se intenta poner de relieve el carácter fictivo de las reproducciones de cambio, interpretar significados ocasionales, dependientes por completo del contexto,
discurso, donde el texto citado es un texto ya usado o bien posible, imaginario o virtual. el trabajo de reproducción y análisis era mucho más dificil, en ciertos casos imposible.
La riqueza y complejidad de la interpretación no pueden reproducirse fácilmente para
Entre los usos del lenguaje que consisten en comentar la relación entre una
el análisis. El hecho de que seamos capaces de superar esa complejidad y todas las
expresión Y un estado de cosas, la ironía ocupa m1 lugar central. La ironía ha sido
incertidumbres de la comunicación, en nuestros diálogos cotidianos, guiando a
intensamente estudiada por la pragmática lingüística, ya que es una reflexión sobre la
nuestros oyentes para que hagan las inferencias requeridas, revela nuestra conciencia
comunicación lingüística. Vale la pena, teniendo en cuenta esos análisis reenfocar el
'ieno1neno,
'
para describirlo con mayor nitidez: la ironía, que es una manera,de "usar mal"
metapragmática.
el lenguaje deliberadamente, es el fenómeno metapragmático por excelencia. Cualquier Y, por supuesto, podemos hacer comeniarios metapragmáticos sobre la
tratarruento de la ironía que olvide su dimensión metapragmática será inadecuado.
Hasta hace poco, teníamos que reivindicar el derecho a tratar esos temas como
metapragmática, como estamos haciendo ahora, gracias a esa misma conciencia y a las
propiedades reflexivas del lenguaje. Dice John Lucy en la introducción a un libro (el
primero, que yo sepa) dedicado íntegramente al lenguaje reflexivo:
l
temas de pragmática. En el prólogo a mi libro Polifonía textual. La citación en el
rdato '.iterarlo (1984), escrito cuando todavía no se habían publicado los primeros Language provides a powerful too! for representing and characterizing the'\
libros importantes de pragmática, afirmé con cie1to arrojo que mi libro contenía world, and much of human activity consists of using linguistic uttenmces to effect
análisis pragmáticos. Queria decir entonces que estudiaba la reflexividad como un certain actions. When, therefore, as scholars, we undertake to develop accounts of \
fenómeno lingüístico y contextual, aunque lo analizaba en la literatura. Hoy en día, la human life, one of our central tasks must be to characterize !he use oflanguage. This '
reflexividad es el tema central de la metapragmática, y estamos en condiciones de use depends in crucial ways on !he reflexive capacity oflanguage, that is, the capacity /
aprovechar los análisis excelentes hechos por los críticos literarios y aportar las nuevas of language to represen! its own strncture and use, including !he everyday 1
perspecbvas de la lingüística. metalinguistic activities of reporting, characterizing and commenting 'on speech. \
(Lucy, 1993, pág. 1).
E~ los años que sigui.eran al libro mencionado estudié varios de los temas que
hoy considero metapragmáticos, especialmente estrncturas lingüísticas que tenían que
ver c?n fenómenos de contextualización: tiempos verbales, por ejemplo, o Si estudiarnos las normas que siguen los hablantes para usar el lenguaje
moda~izac10nes. Incluí en mi~ trabajos fenómenos comunicativos que se trataban (y tendremos acceso a la conciencia humana por un camino privilegiado: el lenguaje. Y a
todavia se tratan) como propiedades del discurso, sin incorporar el nivel de acción la vez tendremos acceso a nuestra propia conciencia, al trabajo que hacemos como
lingüística. En esos casos y en otros me esforzaba por mostrar la índole pragmática de estudiosos del lenguaje: sabremos mejor cómo usamos el lenguaje, bajo qué
esos te~~s. Ahora ya no es necesario justificar el papel de la pragmática en la condiciones, con qué prejuicios, con qué expectativas. Debemos estar atentos y
descnpc1on de los fenómenos gramaticales. Las nociones de pragmática son ahora vigilantes, porque tratamos las prácticas lingüísticas haciendo prácticas lingüísticas,
parte del vocabulario descriptivo general de la gramática. estudiamos la reflexividad reflexivamente, imponiendo todavia otro nivel al análisis, y
Pero es un proyecto reciente el que tiene relación directa con este libro. Escribí sie1npre empleamos nuestras normas, las que nos parecen "normales" y que quizá no
hace poco, en colaboración con dos alumnos míos, un librito de ejercicios de lo sean. ¿Desde qué cortesía lingüística estudiamos la cortesía lingüística, por ejemplo?
pragmática (Reyes, .Baena y Urios, 2000). Se 11·ata de una empresa metapragmática, ya ¿Desde qué principios y con qué responsabilidad sobre la reproducción textual
que propone practicar la pr~gmática. Fueron quizá las dificultades de proponer analizamos la reproducción textual, sus riesgos y sus abusos? ¿Con qué ideologias
semeJa,nte tarea las que nos dieron, como recompensa, una visión más clara de cómo lingüísticas tratamos las ideologias lingüísticas, y qué prejuicios activamos al hablar de
está regulado nuestro comportamiento lingüístico cotidiano. Si no se puede proponer prejuicios? La elección de teorías, la elección de ejemplos, nuestros pasos
fácilmente un ejercicio de pragmática es porque el ejercicio amputa el texto de su aparentemente más inocentes, están guiados por normas que no podernos eludir.
entorno. y de sus. ~ormas, lo convierte ipso facto en no actual, en ficticio, y al Nuestra misión como investigadores es ser conscientes de que somos parte de lo que
convertido en fict1c10 le da .una forma distinta de accesibilidad: ya no se puede exigir investigamos y distinguir cuidadosamente los niveles, para analizar todas las voces que
que nad1~ lo mterprete de cierta manera, excepto en ciertos aspectos que responden a participan en el entramado complejísimo de la interacción lingüística y mostrar los
e~p~ctallvas generales por defecto. Estas expectativas, que hacen previsibles ciertos riesgos, las consecuencias, las glorias de la comunicación y de la reflexión sobre la
sigmficados y permiten pfoponer situaciones estereotípicos para hacer ejercicios, son comunicación que hacen los hablantes y que hacemos los que estudiamos a los
hablantes. Esa es la difiéultad y la fascinación de investigar el uso del lenguaje.

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1

CAPÍTULO 1

LA COMUNICACIÓN METAPRAGMÁTICA

1. EL CONOCIMIENTO DEL LENGUAJE

Somos felices poseedores de una lengua, que es un conjunto de expresiones tipo


regladas por una gramática. La lengua, con sus patrones fonológicos, morfológicos,
sintácticos y semánticos, es un conjunto de recursos que sirven para la comunicación,
• 1
y que utilizamos según las necesidades de la vida social. Al parecer, poseemos los
• 1
patrones de la lengua de manera inconsciente y, además, inaccesible, en gran medida,
.'
¡ a la introspección. En cambio, los principios sobre cómo usar esos patrones son más o
i ¡' : :.
menos conscientes y sujetos a comentario y reajuste en nuestro empleo cotidiano del
. '' lenguaje .
Como hemos dicho en la Introducción, la metapragmática es un nivel de análisis \
dentro de la pragmática, nivel que incluye explícitamente las operaciones que reflejan
la conciencia de los hablantes sobre las prácticas lingüísticas. El objeto de la - · ·
metapragmática es el conjunto de usos reflexivos del lenguaje que tienen por función
dominante hacer comentarios sobre los usos del lenguaje. Las reflexiones
metapragmáticas analizan y evalúan el modo en que empleamos el lenguaje,
incluyendo la manera en que diseñamos textos y con ellos constituimos interacciones
sociales. La expresión "metapragmática" se aplica normalmente a la competencia de \
los hablantes sobre el uso de la lengua, es un área del conocimiento lingüístico. En este
capítulo pondremos atención en cómo se comunica ese conocimiento, especialmente
en la comunicación metapragmática implícita.
Como hemos visto en la Introducción, podemos hablar sobre la lengua y sobre \
1
1
1
los usos de la lengua gracias a la capacidad que tiene esta de referirse a si misma. El
1 nivel metalingüístico del. lenguaje es el que toma al lenguaje (y no al mundo) como
objeto de referencia y predicación. En el enunciado
I'

24 ÜRACIELA REYES METAPRAGMATICA, LENGUAJE SOBRE LENGUAJE, FICCIONES, FIGlíllAS 25

(1) "Guión" se puede escribir sin acento. efectos de la comunicac1on en sus participantes, aparte de preocuparse por la
la palabra entrecomillada es el objeto (lingüístico) sobre el cual se predica, y no eficiencia. La proposición citada en (3) está doblemente interpretada por la hablante,
tiene referencia propia; la predicación sobre esa palabra es lenguaje metalingüístico, es que la evalúa siguiendo reglas metapragmáticas, ya que indica no solamente lo que
decir, que trata de lenguaje. está mal hacer (usar a alguien) sino lo que está mal decir (decirle a esa persona que se
La actividad metapragmática no es solamente una parte de la actividad la ha estado usando). Incluso la expresión sab~s, con su alusión al estado mental del
metalingüística, ya que tiene otras características: incluye tanto un conocimiento del interlocutor, a quien se atribuyen ciertas creencias compartidas, muestra conciencia
lenguaje como del mundo social, de los parámetros del uso del lenguaje, de las normas metapragmática.
de comportamiento, incluso las lingüísticas, y de todo lo relacionado con los textos y En otros casos, el comentario es 1nenos explícito:
su papel en nuestra vida. En efecto: los comentarios sobre la actividad lingüística (4) Juan ya ha llegado, porque está el coche en la puerta.
entrañan una reflexión sobre la relación entre lo lingüístico y lo extralingüístico, que se La reflexión metapragmáticaestá contenida en el uso peculiar de porque, que no
manifiesta en todos los niveles, desde la entonación hasta el léxico y la sintaxis. El articula directamente la relación entre ya ha llegado, por una parte, y está el coche en
ejemplo (2) muestra claras huellas de concienciametapragmática: la puerta, por otra, sino la relación entre el hecho de decir que Juan ha llegado y la
i '. ( (2) No estoy... deprimido, exactamente, ~líi~m, que estoy cansado, exhausto, presencia del coche en la puerta, que, por inferencia, permite al hablante afirmar que
má~ bien... _ Juan ya ha llegado. La relación entre los dos segmentos unidos por porque podría
El hablante de (2) (segmento tomado de una conversación) hace un comentario indicarse con una paráfrasis como "lo digo porque". El c_oJ]JenJ~rio mell\pra¡imático
reflexivo metapragmático, ya que analiza el uso de la palabra "deprimido", juzgando sirve, en este caso, para 1nostrai_:_1ª_fu~11!~ -~~ 1:1~,_99~g9i_;niento, es decir, para justificar
que podría aplicarse, pero no con total propiedad, a su situación, y propone otras un'i~firm~ión. Otro ejempTo-con porque: ..
expresiones que le parecen más apropiadas. Este conocimiento del lenguaje requiere (5) No dejes el dinero a la vista, porque va a venir el mafioso de tu primo.
conocimientos sobre qué expresiones sirven o no sirven para describir ciertas cosas, Aquí el comentario reflexivo incluye una evaluación de ciertas propiedades del
qué expresiones se usan con poca precisión y por qué, etc., más un segundo nivel de primo, que están implícitas y deben ser inferidas. Solamente contando con esas
conocimientos: el de las situaciones de las que se trate. La efectividad de las palabras inferencias tiene sentido el enunciado completo y su comentario sobre sí mismo, que
requiere, para evaluarse, conocer tanto sentidos como realidades. También el ejemplo equivale a una advertencia: "te digo esto porque... "
siguiente exige, para una con-ecta interpretación de su contenido, conocimientos no En general, hacemos comentarios metapragmáticos para evaluar si nuestras
lingüísticos:
expresiones son "Jlropiadas (si se articulan adecuadamente con sus presuposiciones, si
(3) La insultó, sabes. Bueno, le dijo la verdad, le dijo que ... que sí, que sí, que corresponden a la sTtilación); si son efectivas (si realizan las implicaciones necesarias);
la había estado usando. si son retóricamente aceptables (si algo se debe o no debe decir para lograr ciertos
El uso del verbo insultar implica ciertos conocimientos sobre los actos de habla fines). Estos comentarios tienen por trasfondo nuestro conocimiento de los principios y
y sobre las relaciones humanas, ambos codificados socialmente. En la segunda regularidades del uso del lenguaje, o sea de la pragmática o nivel pragmático del
oración, que sirve para desan-ollar lo dicho en la primera, la hablante reproduce el lenguaje (véase Silverstein, 1993). Pero el alcance de la metapragmática del discurso
contenido de un enunciado, sea este real o imaginario. Se reproduce la proposición
("que la había estado usando") y una expresión que parece atribuida literalmente al
hablante original, "sí" (es muy frecuente, como veremos, la mezcla de estilos directos
es mucho mayor, ya que las reglamentaciones sobre el discurso provienen de nuestras
ideas sobre para qué sirve el lenguaje: sobre el papel del lenguaje para constituir la
vida social. La metapragmática es una reflexión paralela a la pragmática o uso del
1
e indirectos). Este texto representado, real o no, está, a su vez, evaluado por la lenguaje, es un comentario constante sobre el lenguaje como acción, y sirve tanto para
expresión "la verdad". En estas frases, tomadas de una conversaci6n,-hay una regular la pragmática (las relaciones de los signos con su contexto) cuanto para mostrar
normativa im]Jllc1ta sobre el uso del lenguaje, que incluye proposiciones como las nuestras ideas sobre lo que el lenguaje hace o debería hacer.
siguientes (no todas aplicables a este ejemplo, en su contexto): "decir la verdad es Dado el papel del lenguaje en la constitución de la vida social, toda reflexión
insultante, a veces, por lo tanto ciertas verdades no se dicen", "decirle a alguien que se sobre el lenguaje es una reflexión sobre la sociedad, y la metapragmática es una
lo ha estado usando para algo es una ofensa", "no debemos usar a la genteni tampoco nonnativa, a veces implícita, que refleja las ideas que una sociedad tiene de sí misma,
1
ofender a la gente", etc.; esta normativa contrasta con los requisitos de eficiencia sus ideales, su historia, su política. La tradición comunitaria recoge esta normativa en
comunicativa propuestos por Grice, que exigen, entre otras cosas, decir la verdad. Pero mitos (que muestran y comentan el papel del lenguaje en la acción social; cfr. Urban,
Grice se refería solamente al intercambio de información, y las ideologías lingüísticas 1993 ), y en leyendas y refianes. Porotra parte, el tratamiento de los iconos de discurso, 1
de los hablantes dan lug~r importantísimo a las relaciones interpersonales y a los
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26 ÜRACIELA REYES METAPRAGMATICA, LENGUAJE SOBRE LENGUAJE, FICCIONES, FIGURAS 27

/ mediante formas de discurso directo e indirecto, indica modos ideológicamente práctica, y que se manifiesta, .básicamente, de dos modos: como formas de
potentes de legitirnización e imposición de interpretaciones (cfr. Parmentier, 1993). cornu¡¡icación (por ejemplo, la comunicación negativa que veremos en el apartado
Un ejemplo notable-entre otros- de la preocupación actual, comunitaria, por el siguiente) y CQmo un copjunto de indicadores gramaticales y discursivos que tienen la(
"'...ol-
lenguaje y de su relación con la política y la historia es el análisis al que se someten función de referirse al discurso mismo (por ejemplo los patrones de entonación, las
ciertos discursos políticos, no solamente en cuanto a su capacidad para mostrar expresiones deícticas, los marcadores discursivos, las estructuras de discurso indirecto,
intenciones de gobierno o describir correctamente situaciones, sino en cuanto piezas etc.).
retóricas. En ciertos países hay programas de radio y de televisión dedicados Creo que es útil reseñar otros sentidos, más generales, que tiene este término en í_

explícitamente a comentar discursos de personas influyentes, sobre todo políticos (pero pragmática. Según Caffi (1998), la metapragmática es ante todo un saber hacer y un 1
pueden ser también científicos célebres, a veces escritores o artistas, o personas que, en saber decir lo que se hace: un tipo de competencia. Pero señala que el término/
determinado momento histórico, adquieren relevancia pública). En esos programas, el "metapragmática" se aplica por lo menos a tres tipos de actividad diferentes. En primer
panel que discute el asunto y el público que llama por teléfono hacen el trabajo casi lugar, la metapragmática es una reflexión que tiene por objeto la pragmática misma: ~u
profesional de un especialista en análisis del discurso, mostrando conciencia del valor objeto, su fundamentación epistemológica, sus metas, su metodología, su coherencia
político y social de ciertas figuras retóricas, de ciertas omisiones o repeticiones, de la teórica. En segundo lugar, se llama metapragmática a la explicitación del conjunto de
creación .del locutor en su discurso, y del auditorio a auditorios que ese discurso condiciones que deben cumplirse para que el uso del lenguaje sea posible y sea
construye 1 • Pese a lo que afirma el refrán rnetapragmático "obras son amores, y no eficiente; esta segunda metapragmática pertenece a una teoria general de la
i; buenas razones", los hablantes saben bien que hablar es un modo de hacer que repercute comunicación. El tercer sentido deslindado por Caffi es el que nos concierne en este \
'! directamente en su vida, en sus valores y en su futuro. El hecho de que alguien con poder libro: la planificación, control y guía de las interacciones lingüísticas y los juicios de
¡: de decisión e influencia se permita ciertas bromas, el hecho de que dé legitimidad a algo adecuación sobre el comportamiento lingüístico, más las elecciones que determinan la 1
i: por nombrarlo, o pretenda hacer olvidar algo por no nombrarlo, o el hecho de que hable disposición de los textos y guían su interpretación.
i en la lengua o dialecto de una minoría, o que use un registro que excluye a otros, o que
1

La metapragmática como debate sobre la pragmática es una empresa teórica que


muestre que sabe hablar con humildad, o con firmeza, o bien que sea confuso y tiene por función revisar las bases epistemológicas de la pragmática, la definición de su
embrollón, o, sobre todo, que sea capaz de expresar, como los poetas, lo que sienten los objeto, su metodología y su alcance. Aunque Caffi, en el trabajo citado, no entra en el
demás, uniendo a la comunidad en el momento adecuado, todo se origina en nociones debate, podemos añadir a su exposición un par de temas que requieren este tipo de
metapragmáticas explícitas (hay "laboratorios"de palabras para producir discursos reflexión metadisciplinaria. El más importante es, sin duda, el papel que vamos a otorgar
,,,
1. políticos y publicitarios, y hay también escritores que tienen por oficio escribir discursos en pragmática a los significados que no surgen de convenciones ni de ningún tipo de
:; 1:¡, públicos siguiendo normas específicas) y provoca, a su vez, análisis metapragmáticos en implicaturas (sean previsibles u ocasionales) sino de factores debidos a la estructura y
. i;
~ 1 ' '
los destinatarios, afectados directamente por la forma y fondo de esos textos. Productores condiciones de la interacción comunicativa misma. Aunque se reconoce la existencia de
1 i 11, y receptores son conscientes de que unos y otros conocen y aplican normas estos significados, todavía no se los ha estudiado sistemáticamente en pragmática teórica.
metapragmáticas y saben que los otros lo saben, etc., de modo que el juego es Un problema que se relaciona con este es el de la metodología y el papel de los ejemplos
i•¡''
''
'1: complicado y produce a veces un efecto paradójico: nadie parece creer en el lenguaje en pragmática: las exposiciones teóricas descansan (a veces, exclusivamente) en ejemplos
i¡'
l.!
público, pero, sin embargo, se le da una importancia extraordinaria. reconstruidos por los autores, ejemplos que indican posibilidades en el uso de la lengua.
i ¿Cuál es el estatus de estos ejemplos en relación con fragmentos tomados directamente
de intercambios comunicativos? Las decisiones se complican porque estos últimos, por
2. SENTIDOS DE LA EXPRESIÓN "METAPRAGMÁTICA" obra del procedimiento mismo de la cita, se pueden volver ininteligibles y no contribuir
realmente al análisis más adecuado de un fenómeno. Menciono este problema, entre otros
que podría tratar la metapragmática, porque tiene que ver con los temas que trataremos en
Tal corno la entendemos en este trabajo, la metapragmática es un tipo de el Capítulo 2, aunque no los vamos a encarar desde el punto de vi~ta de la
práctica o actividad estudiada por la pragmática, y también, por lo tanto, un nivel de rnetapragmática como debate sobre la pragmática, sino desde el punto de vista de las
análisis pragmático. También hemos dicho que metapragmática designa el condiciones y límites de la reproducción de textos. Por otra parte, al tratar la ironía, en
conocimiento, poseído por los hablantes en cuanto seres sociales, que hace posible esa el Capítulo 4, tendremos que confrontamos con la dificultad de analizar ejemplos que
requieran imaginar contextos particulares, y veremos qué difícil es no imponer
1
Para una evaluaciónmetapragmática de un discurso político, y en especial la construcción presupuestos sobre el lecter, es decir, manejar asépticarnente el lenguaje, por exigencia
del locutor y el público, puede verse Reyes, 1988.

---1
METAPRAGMATICA. LENGUAJE SOBRE LENGUAJE, FICCIONES, FIGURAS 29
28 GRACIELA REYES

participan en un acto comunicativo, y por eso, como señala Caffi, hay_ que comparar
profesional, cuando lo que queremos estudiar es precisamente lo que el lenguaje tiene los verbos de acción lingüística con lo que la _gente cree que hace en tiempo real, en
de vivo y de contaminado, no de aséptico. sus prácticas lingüísticas. El gran problema de \a metapragmática (en esta área Y en \
La segunda actividad metapragmática señalada por Caffi tiene una distinguida cualquier otra) es que el lenguaje no existe fuera del l~nguaje: no tenemos.~n punto de
tradición en nuestra disciplina: el análisis de las condiciones que hacen que el uso del vista extralingüístico para analizarlo, como hemos dicho en la Introduccton. ,
lenguaje sea posible y sea efectivo. Esta metapragmática se relaciona con los Finalmente, la metapragmática puede entenderse como el estudio de la !
universales de la comunicación, y tiene que ver con los elementos constitutivos del competencia de los hablantes sobre la propiedad de las expresiones lingüísticas Ysobre ·
conocimiento humano. En sus manifestaciones más conocidas, esta práctica teórica se el comportamiento comunicativo y las condiciones de la te~tualidad. Esta pragmática j'
ha concentrado en el estudio de la posibilidad y de las condiciones de felicidad de los se ocupa del cómo hacer, del planeamiento y control de las mt~racc1ones. Los.~á!ts1s ·
actos lingüísticos. Se trata de determinar en qué consisten las acciones lingüísticas, si de este libro están enmarcados por este tipo de teoría, cuyo objeto es la reflex1v1dad Y(
son universales, si se deben asociar a formas lingüísticas (por ejemplo, modo sus manifestaciones. La concienci~ metapragmática de los hablantes deja :astr~s ~n el 1 V
indicativo, imperativo e inte1rngativo). Identificar un acto como unidad está ligado al discurso, ya se trate de la entonación (o las grafias), o rasgos articulator10s, fox1c?s, 1
problema de las condiciones que subyacen a la ejecución de un acto. En estudios sintácticos, discursivos. Pero no siempre las decisiones sobre el uso del lenguaje dejan
recientes, por ejemplo sobre la cortesía lingüística, se ha planteado la necesidad de huellas en los textos, e incluso puede suceder, como señala Verschueren (1999a, pág.
revisar la noción de acto de habla, y también la necesidad de establecer si •podemos 188) que los textos que resultan de procesamientos más controlados sean los que
hablar de universales pragmáticos que nos permitan hacer comparaciones entre modos presentan una superficie totalmente nivelada, sin señales de reflexividad.
de llevar a cabo actos verbales. Algunos autores sostienen (por ejemplo, Brown y
Dentro de esta metapragmática hay que incluir todas las manipulaciones
Levinson, 1978, Introducción; Levinson, 2000, cap. 1), que, contrariamente a lo que se
ejercidas más o menos conscientemente por los usuarios de la lengua, y que..afoctan
suele afirmar, los rasgos pragmáticos (ya sea los principios que guían la cortesía, o, en
diversos ámbitos: la presentación de sí mismo y del otro, las sel~c~'.ones lmgufati~~s,
otro plano, la capacidad para hacer inferencias por defecto) tienen más probabilidades
los procesos de corrección, explicitación de presupuestos y defimcton (o redefimc10n)
de ser universales que los rasgos de la gramática. Este debate acaba de empezar y sin
de lo que se está haciendo. El lenguaje es a la vez insuficiente y dú~til, y los hablantes
duda va a repercutir en las actividades del primer tipo de metapragmática.
operan, con notable maestría, en varios niveles a la vez, con el objeto de asegurar un
Hasta ahora, se ha estudiado con éxito cómo una determinada comunidad nivel de funcionamiento aceptable.
reconoce ciertos actos lingüísticos. Caffi divide la materia en condiciones:
Los lectores notarán que las !Tes metapragmáticas señaladas por Caffi (la
Condiciones para pensar ciertos actos, que están registradas en el diccionario epistemológica, la que estudia las condiciones de la acci_ón lingüística Y la q~e. ~e
con los nombres de los verbos perfonnativos, o como indicadores de fuerza ilocutiva. concentra en la reflexividad) no son, realmente, investigaciones separadas. El anahsts
Pero (contrariamente a lo propuesto por la te01ia más influyente sobre los actos de de la reflexividad, por ejemplo, en cualquiera de sus manifestaciones, va a repercutir
habla, la de Searle, 1969), no hay correspondencia entre la forma del acto y qué inevitablemente en nuestro modo de concebir la pragmática, y por lo tanto provocará
cumple el acto, o sea entre forma y fuerza ilocutiva. alguna investigación correspondiente al primer tipo de metapragrnática.. Si analiz'.""os,
Condiciones de factibilidad. Cómo es el procedimiento, expectativas y por otra parte, la cortesía como fenómeno que rev~la de manera p~lmana la conciencia
finalidades que nos permiten reconocer las distintas formas de acción lingüística. La reflexiva de los hablantes (puesto que, como hare notar más abajo, demuestra que el
teoría de la cooperación de Grice es el intento más logrado, hasta el momento, de hablante se adelanta a interpretar lo que podría interpretar el oyente, y que este lo sabe,
rendir cuenta de cómo la colaboración comunicativa produce intercambio real de etc., y que esta reflexividad es imprescincible Pª:" describir la m~yoría de los actos
información siguiendo una lógica propia. lingüísticos), entonces, haciendo metapragm_át1ca del tercer t1~~· caemos en
Condiciones de interpretación. La metapragmática, en este segundo sentido que consideraciones que son propias del segundo tipo. La metapragmattca, al _poner en
estamos considerando, estudia los procedimientos que ofrece cada lengua para permitir e!
primer plano la intervención del hablante en discurso, provoca, en.el mejor de los
la interpretación, los procesos inferenciales y los fenómenos de coordinación y casos , una revisión de fenómenos pragmáticos: es otra perspecttva para hacer
"saliencia" comunicativa que explican la transmisión de información implícita. pragmática.

,J Siempre dentro de este tipo de actividad metapragmática, se han hecho también


comparaciones léxicas entre verbos de acción lingüística. El léxico opera como
interfaz entre gramática y pragmática, pero no basta estudiar el léxico para comprender
1 '
la dinámica de la intera~¡¡_ión, que es tan compleja. El conjunto de verbos de acción
lingüística de una lengua no agota lo que los hablantes pueden creer que hacen cuando
1 !

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30 ÜRACIELA REYES MRTAPRAGMATICA. LENGUAJE SODRE LENQUAJE, fllCCIONES, FIGURAS 31

3. LA PRAGMÁTICA DE GRICE Y LA METAPRAGMÁTICA Echemos una ojeada al estado actual de las teorías sobre la implicatura y el nuevo
modelo d.e Levinson (2000).
3.L Teorías recientes en pragmática Al comenzar el nuevo milenio, la joven pragmática está más vigorosa que/
nunca, pero no presenta un núcleo teórico unificado. La teoría de ~rice y la teoría de.la
relevancia' siguen ~iend~ inconciliables, Como .sabernos, l~ te~na de la r~levanci.a,
En este apartado haremos una breve excun¡iów para mostrar la afiliación de la
manteniendo la noción griceana de la mtenc10nahdad comunicativa y extendiendo auri
persp.ectiva rnetapt'!81!1ática con la pragmática de 'ori_Qd, presentaré muy brevemente el más el papel de la inferencia en la comunicación, propone que la c?municación e~
estado.delapragmática teórica en el año 2000, tras la aparición de un libro importante
posible por un proceso mental automático, la búsqueda de relevancia, Frente a esta\
(Levinson, 2000), que contiene un desafío a las teorías cognoscitivas en pragmática y
visión cognoscitiva de los fenómenos pragm~ticos, los neogriceano~ m.anuene_n que las\
replantea el papel de la pragmática en una teoría general de la comunicación.
ideas de Grice sobre la cooperación y los hábitos de uso del lenguaJe siguen siendo las
Partamos de la idea de elección, que nos permitirá presentar la relación entre la más adecuadas para explicar la comunicación verbal, e intentan probarlo recuperando ¡
perspectiva rnetapragmática y el modelo de Grice. El concepto de elección es clave en y ampliando nociones griceanas, especialmente la noción d~ que hay usos hab~t_tJales \,
'. pragmática, puesto que el proceso selectivo realizado por el hablante en varios niveles del lenguaje que dan lugar a implicaturas automáticas, antenores a la computac10n del 1
revela que este tiene algún grado de conciencia de las formas lingüísticas que usa y de contexto.
1
las funciones que quiere cumplir con ellas, En las teorías del significado que se derivan Si la pragmática debe ser, ante todo, una contribución a la teoría general del
del "principio de cooperación" de Gríce se da nueva importancia al papel de la significado lingüístico, la disidencia teórica entre relevantistas y neogriceanos ilustra
i comunicación rnetalingüística. Lo que se transmite por no decir algo que se podtia
''' muy bien la dificultad de construir tal teoría, pero a la vez revela la clandad. ~on que
haber dicho está en la base de la distinción entre lo dicho y lo implicado, terna central se exponen los problemas y el refinamiento al que se ha llegado en el anáhsis del
de la pragmática, Si el hablante intenta y logra comunicar más de lo que literalmente
'.' "dice" es porque, entre otras cosas, desde el momento en que ha elegido unas
significado.
La teoría de la relevancia, muy difundida actualmente, tiene el gran atractivo de
expresiones ha descartado otras que también podría haber usado. Dice Levinson:
su unicidad teórica: en lugar de proponer que el significado lingüístico está compuesto
'
i' The idea is simple but crucial to a theory of cornrnunication: when we say
' '
de ingredientes heterogéneos (por ejemplo presuposiciones, fuerza ilocutiva, .
sornething, we find ourselves cornrnitted to rnuch more, just by virtue of choices condiciones de felicidad, implicaturas de diverso tipo) propone que un solo proceso, la
:,,¡
¡1,; between ali the ways we could have said it. (Levinson 2000, pág. 367.)
relevancia -que es una propiedad psicológica- sirve para explicar cómo se recupera lo
i ji Este fenómeno depende de lo que podríamos llamar "conciencia del explícito y lo implícito de una comunicación. Los relevantistas afin_nan su fe ~n dos
'' I''', paradigma": tanto el hablante como el receptor conocen las formas del paradigma que principios. En primer lugar, en un principio cognoscitivo, la tendencia a max1m1zar la
'''
: I! están a su disposición, de modo que, si el hablante escoge una, el receptor entenderá información disponible, o sea a obtener toda la información posible por la menor
'' que el hablante niega que las otras formas disponibles sean apropiadas, Esa "negación" cantidad de esfuerzo. En segundo lugar, en un principio comunicativo, que consiste en
implícita forma parte del significado intencional, o sea, más precisamente, de las la transmisión de una garantía de relevancia: cuando usamos un estímulo lingüístico
implicaturas transmitidas. Lo que el hablante elige no decir (tenga plena conciencia o para llamar la atención de alguien, transmitimos automática.mente la garantía d~ q~e la
muy vaga conciencia de su elección) es una clave general para los procesos información que vamos a dar es relevante, Este segundo pnnc1p10, llamado pnncip10
interpretativos; teniendo esto en cuenta daremos un lugar teórico a principios de relevancia se enuncia así: "cada acto de comunicación ostensiva comunica la
metapragmáticos, que son los que, junto con las reglas gramaticales y con las presunción d; su relevancia óptima" (Sperber y Wilson, 1995, pág. 270). El principio
necesidades pragmáticas de la contextualización y la referencia, guían nuestro de relevancia actúa siempre, indefectiblemente.
comportamiento lingüístico.
La teoría de la relevancia no considera que el lenguaje esté diseiíado para la \
El punto de vista metapragmático entronca naturalmente con la tradición de.la comunicación, ni tampoco influido por el uso. Para esta doctrina el lenguaje, como
pragmática de Gríce, donde se explica, mediante un modelo de comportamiento sistema representativo gobernado por ~a gramática'. .no es comu~ica~vo smo 1
cooperativo, la interacción comunicativa y la capacidad de los hablantes de transmitir cognoscitivo: sirve para procesar y memonzar 1nformac1on. La c?mun1cac1ón e~ un
significados implicados. Han sido los seguidores de Grice, y en especial Levinson, uso adicional del lenguaje. Cualquier organismo dotado de memona y de la capacidad
'1 muy recientemente, quienes han analizado en qué consiste la comunicación
metalingüística implícita dentro de una teoría de la comunicación inspirada en Grice.
2 Véanse Levinson (1983, cap. 3) y Sperbery Wilson (1995). Para una breve presentación de
ambas teorías, consúltese Reyes (2000, 1995).
32 ÜRACIELA REYES
METAPRAGMATICA. LENGUAJE SOBRE LENGUAJE, FICCIONES, FIGURAS 33

/ en una teoría de la ~~municación. C~ntraviniendo la arquitectura tradicional del


de hacer inferencias debe poseer un lenguaje cuyas fórmulas tienen relaciones
sintácticas y semánticas entre sí. El lenguaje humano se distingue de otros porque se )
proceso de mte1pretac1on, donde la semant1ca figuraba como lógicamente anterior a la
usa como medio de comunicación, pero eso es posible gracias a la capacidad
pragmática (es decir, los procesos semánticos, especialmente la asignación de
inferencia! del ser humano, y no al lenguaje mismo, y por eso la comunicación no nos
cualidades veritativas, eran previos a los pragmáticos), en las dos teorías iriferenciales,
puede decir nada sobre la naturaleza esencial del lenguaje (Sperber y Wilson, 1995,
la relevantista y la neogríceana, la pragmática se mete en territorio semántico,
pág. 173).
colaborando en la recuperación del contenido veritativo del enunciado. Al enunciado
Sperber y Wilson coinciden con todos los pragmatistas cuando afirman que la completo, explícito, listo para crear efectos contextuales, los relevantistas lo llaman
semántica de las lenguas es demasiado limitada, que no codifica todos los significados explicatura. La explicatura es el conjunto de supuestos comunicados explícitamente
que necesitamos comunicar. La descodificación produce representaciones mentales por un hablante, si ese conjunto es el desarrollo de la forma lógica codificada por el
que son usadas como esquemas para identificar la forma proposicional del enunciado. enunciado (Sperber y Wilson, 1995, pág. 182). La explicatura resulta de procesos de
Allí empieza a funcionar la inferencia, que permite enriquecer y precisar esa fonna, y desambiguación, asignación de referencia y enriquecimiento que requieren trabajo
así obtener una explicatura (lo "dicho"). Una vez descodificado e inferido lo explícito, inferencia!, o sea procesamiento pragmático. Este trabajo inferencia! que, combinado
podemos iniciar el segundo proceso inferencia!, que recuperará lo implícito. Nótese con la descodificación, produce una proposición, requiere datos del contexto, de modo
que en esta visión, la pragmática interviene en el establecimiento de lo explícito, y por que, para los relevantistas, el contexto. interviene ya en el establecimiento de la
lo tanto de las condiciones veritativas del enunciado, invadiendo terreno semántico. proposición.
1.
Al proponer que el uso del lenguaje no nos dice nada sobre la índole del Véase por ejemplo un enunciado como el siguiente:
lenguaje, la teoría relevantista no parece la más apta para estudiar la relación entre ( 6) Los niños de Luis.
comunicación y estructuras lingüísticas (en esto contrasta con la visión de los
neogriceanos, quienes proponen que las convenciones de uso no solo dejan huellas en Dada la ambigüedad de la construcción de Luis, que puede indicar que Luis es
i: la gramática y en el léxico, sino que también permiten prever ciertos fenómenos, por el padre de los niños, pero también otras cosas (que es el maestro, el médico que los
•i. atiende, etc.) el hablante, haciendo inferencias en contexto, llegará a desambiguar la
ejemplo la lexicalización de algunos significados). Pero los relevantistas consideran
que la forma lingüística es la que guía las inferencias, de modo que cumple un papel expresión y recuperará el significado consecuente con el principio de relevancia
fundamental en el proceso comunicativo. Para Sperber y Wilson, la comunicación se contextual.
·1 :!· parece a un baile de salón: uno guía (el hablante), y el otro se deja guiar (el oyente). En Para los neogríceanos, el significado de la misma IJXpresión ambigua depende
1 1

'1'11 este proceso se utilizan todos los recursos lingüísticos y estilísticos: los enunciados se ante todo -salvo que el contexto obligue a hacer una interpretación distinta- de una
. '(".'
1 " van diseñando con el propósito de ayudar al destinatario a ir haciendo hipótesis y implicatura generalizada, o sea una implicatura que, por producirse normalmente en el
':¡,¡
11'!
eligiendo siempre la interpretación intentada por el hablante, que es la que tiene uso de cierta expresión, se produce automáticamente, y solo queda descartada si hay
'!·i relevancia óptima en un contexto. Esta atención de la teoría de la relevancia a la forma datos del contexto que la bloqueen. Las implicaturas generalizadas son cancelables
lingüística como medio utilizado por los hablantes para guiar a sus oyentes en la como todas, pero previsibles, y por lo tanto suponen unos hábitos de uso y unas
!:i!' búsqueda de relevancia ha traído como consecuencia análisis muy interesantes de interpretaciones esperadas, unos significados que Levinson (2000) llama "significados
: :~ : : :
presumibles" (presumptive meanings). La distinción entre implicaturas generalizadas y
fenómenos lingüísticos, por ejemplo los conectores discursivos (del tipo de pero,
! i'¡il además), cuyo significado procedural tiene la función de restringir las implicaturas particularizadas (u ocasionales) procede de Grice, pero ha sido Levinson quien ha
' 1",.,
1' posible~! concepto de elección presupone unos conocimientos metalingüísticos del teorizado mejor su importancia para una teoría de la comunicación. A nosotros nos
(!lahlallte, por supuesto, pero en la teotia de la relevancia no se alude a los saberes interesa la existencia de este nivel de significado presumible porque depende de usos
1 i'

' 1 metapragmáticos, ya que todo el énfasis está puesto sobre los procesos cognoscitivos y habituales, o sea de saberes metapragmáticos, socialmente establecidos, pero siempre
1

) no se analiza el lenguaje como fenómeno social, y además, como ya he dicho, no se sujetos a revisión y cancelación.
:¡ En el caso de (6), esos saberes nos penniten, casi inconscientemente, recurrir a
¡, tiene en cuenta la relación entre comunicación y esb.ucturas lingüísticas, que es, en
todo caso, accidental. la interpretación normal, estereotípica, que nos indica que si el hablante no especifica
il¡ ·
1 más, debemos entender que Luis es el padre de los niños. La implicatura general
Ambas teorías, la griceana y la relevantista (ambas llamadas "radicales"),
i1 1
1'
1
1 extienden notablemente el papel de la pragmática en la teoría del significado. Unos particularizada se explica por nuestros hábitos de uso del lenguaje. Para los
'! ·¡¡ 1
.!'proponen principios de comportamiento y otros principios cognoscitivos, pero tanto los 1 relevantistas se trata de un significado explícito pero no codificado; para los
¡, neogríceanos como los relevantistas dan a la actividad inferencia! un lugar prominente 1
neogríceanos se trata de 1!11 significado implícito esperado, por defecto, no codificado
pero perteneciente al nivéf de las expresiones tipo, al nivél metalingüístico donde opera
11¡J 1

' 11

1 !·¡
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34 ÜRACIELA REYES METAPRAGMATICA. LENGUAJE SOBRE LENGUAJE, FICCIONES, FIGURAS 35

el conocimiento del uso del lenguaje. Tenemos aquí otro tipo de saber, otra conciencia pero sabemos que sucede, y podemos pensar que existen ciertas condiciones generales
lingüística, no ya conciencia del paradigma, sino del uso habitual de las expresiones. que favorecen las interpretaciones. En el caso del lenguaje, hay, según Levinson,

Los hablantes de lenguas extranjeras son los que notan, por lo general cuando convenciones de uso que agilizan el trabajo inferencia!. Esto es muy importante porque,
'' experimentan infortunios comunicativos, que, si bien comprenden ciertas expresiones, por un lado, la semántica de la lengua suele ser vaga o incompleta, y, por otro, tardamos
las encuentran insuficientemente informativas, ambiguas o desconcertantes, porque mucho en articular: es más lo que queremos decir que lo que podemos articular, y por eso
carecen del conocimiento requerido, que es conocimiento del uso habitual. Este agregamos significado extra, inferible, a lo que decimos. Esta teoria propone que a veces
,, 1

conocimiento rara vez se adquiere consultando el diccionario: hay que vivir en la inferimos con piloto automático, por así decirlo. Maximizando las implicaciones que el
comunidad, participar de los hábitos y normas de la comunicación, para adquirirlo. uso ha generalizado y hecho previsibles, ahorramos esfuerzo y tiempo, y podemos
Los neogriceanos no nos exigen fe en ningún principio, salvo en los de comunicar más y mejor. Por eso hemos desarrollado lo que Levinson llama unas
racionalidad e intencionalidad heredados del padre de las teorías inferenciales, Grice. heuristicas, unos métodos empíricos de interpretación, que funcionan automáticamente si
Pero nos piden una atención minuciosa a las inferencias no contextuales, que, en las ningún dato contextual los bloquea, Esta dinámica produce una vasta zona del significado
nuevas teorías, han pasado a ser las estrellas de la pragmática, no por su importancia lingüístico, que podríamos llamar "significados convencionalizados por el uso": no
intrínseca, sino porque muestran los trabajos del lenguaje mejor que las demás, codificados ni sujetos a las condiciones de verdad, sino pragmáticos, pero, por su
muestran que hay unos hábitos del uso, impresos en las formas lingüísticas y quizá propiedad de funcionar por defecto, presumibles, esperables. Pertenecen a esta zona una
,. ! :
más universales que los principios de la gramática. El foco se desplaza del significado serie de fórmulas cotidianas, por ejemplo los saludos, las expresiones de pesar o alegria,
"; : del hablante, tema básico de pragmática hasta ahora (organizado en tomo a la noción todas ellas ya convencionalizadas hasta el punto de que no nos exigen trabajo
de implicaturas particularizadas) a los significados típicos, esperables, que provienen inferencia], Las implicaturas conversacionales generalizadas, las mismas que
de hábitos de uso que han dejado su huella en las formas lingüísticas. No se trata de distinguió Grice en su teoría de la implicatura, son las más interesantes
significados codificados, que no interesan a la pragmática, ni tampoco de significados manifestaciones de este tipo de significado.
únicos generados por un contexto particular, sino de significados creados por el uso,
• I
''¡1 inscritos en la lengua y a la vez cancelables, como toda implicatura. 3.2. La comunicación negativa
; ¡]¡¡ Donde la relevancia ve implicaturas "originales", propias del contexto,
. 'I' obtenidas a base de hipótesis guiadas por principios cognoscitivos, los neogriceanos El ejemplo clásico de implicatura generalizada nos lo ofrece el uso de los
1;11
ven hábitos de los hablantes que van pasando, poco a poco, al lenguaje, de modo que numerales, que pueden ponerse en una escala de acuerdo a su mayor o menor fuerza
!¡11,
1 :1 lo que una vez fue implicatura particular y única en un contexto complejo, puede llegar informativa. Si digo, por ejemplo,
'r a hacerse hábito, y a ser implicatura generalizada, previsible, en muchos contextos, sin
:!:i ,: exigir mayor trabajo de inferencia. Y algún día, en este proceso de congelamiento
(7) Susanita tiene dos vestidos.
1li:: implico estrictamente que tiene por lo menos dos, pero comunico
l!J: semántico, la implicatura generalizada será más que generalizada y se convertirá en
!
negativamente (y metapragmáticamente) que no tiene más de dos (tres, cuatro, etc.).
'; i 1i
1

parte del significado convencional de una expresión.Ya no estamos en el ámbito de la


La escala, en el caso de los cardinales, indica que cuando se emplea un elemento más
. 1"'I' ': mente y sus tendencias, sino de las convenciones del uso del lenguaje y sus
débil, en lugar de uno más fuerte de la misma escala, se niega el más fuerte. Este tipo
: il!! manifestaciones lingüísticas.
de negación metalingüística es puramente pragmática, y la pmeba decisiva es que
Los neogriceanos han ampliado el modelo clásico de Grice, dando nueva puede cancelarse sin que se produzca contradicción. Para cancelar la implicatura
importancia a las implicaturas que dependen de convenciones de uso, distintas, claro, habitual tenemos que añadir algo al contexto, como, por ejemplo, en (8):
de las convenciones lingüísticas; estas convenciones de uso nos permiten hacer
(8) Susanita tiene dos vestidos, bueno, tiene tres, si cuentas uno que ya le queda
inferencias rápidamente, por defecto, aun en ausencia de contextos suficientemente
1 chico.
completos, por ejemplo al comienzo de una comunicación, o cuando tenemos que 1
.1 .j Como se ve, las implicaturas pragmáticas, por muy habituales que sean y por
interpretar textos escritos, parcialmente descontextualizados.
mucho que parezcan confundirse con el significado codificado de una fonna (por
El razonamiento de Levinson (2000) es más o menos como sigue. Así como de un 1
ejemplo, dos hace pensar automáticamente en 'exactamente dos') son cancelables, y
dibujo apenas esbozado es probable que muchos espectadores obtengan más o menos la 1
en eso muestran su naturaleza pragmática.
misma imagen, de la misma manera ocurre que a partir de una expresión lingüística que
suele ser vaga, apenas un bosquejo de lo que queremos decir, muchos hablantes obtienen El concepto de escala ha originado mucho trabajo y mucha discusión en
:1
fácilmente la misma intetpretación. No tenemos la menor idea de por qué sucede esto, ' pragmática. Por lo general se distinguen dos o tres tipos distintos. Hay escalas cuyos
i'
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11

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1 •

36 GRACIELA REYES METAPRAGMATICA. LENGUAJE SOBRE LENGUAJE., FICCIONES, FIGURAS 37

miembros se implican lógicamente (es decir, el más fuerte implica estrictamente al más Nótese que la expresión simpática, cuando esta escala funciona, tiene más sentido
débil, como sucede con los números), otras donde no hay implicación sino asimetría negativo que positivo, de modo que (9) puede ser un elogio tibio, o no ser un elogio en
informativa, y otras menos ortodoxas, que revelan hábitos comunicativos y no principios absoluto. En pragmática, importa tanto lo que una palabra significa
lógicos. En ciertos contextos, por ejemplo, opera la escala <EXCELENTE, independientemente del uso cuanto el modo en que se usa, y puede pasar que el
INTERESANTE> Así, cuando decimos que un libro es interesante implicamos que no significado en uso modifique al significado semántico, en parte debido al hecho de que
podemos decir que es excelente, aunque, por supuesto, ambos conceptos son compatibles, cada elección lingüística evoca casi automáticamente, en determinados contextos, otras
y por eso la implicatura puede cancelarse: Es interesante, en realidad excelente. En un elecciones que fueron descartadas por el hablante. Esta evocación es posible porque los
mensaje que fue célebre en su momento, el presidente Clinton dijo en público, hablantes comparten conocimientos metapragmáticos, y por lo tanto la comunicación
admitiendo sus relaciones extramatrimoniales con una mujer (que había negado unos días negativa implícita ilustrada por (9) es un fenómeno típicamente metapragmático.
antes), "he hecho algo inapropiado; en realidad, algo equivocado". Estas palabras Este enfoque nos permite entroncar nuestro estudio del significado con ideas
parecían proponer, al principio, la escala <EQUIVOCADO, INAPROPIADO> (wrong; básicas de lingüística, especialmente la de significado negativo, que procede de
lnappropiate), donde el segundo término es menos fuerte y niega la aplicabilidad del Saussure, y también con las intuiciones de la semántica .estructural sobre los campos
primero, más fuerte. Pero el hablante mismo cancela tal implicatura, admitiendo que en semánticos. Además, nos permite volver a analizar la complejidad del lenguaje mismo,
:: : su caso se aplica, más bien, el término fuerte. El valor retórico de esta frase es muy las sutilezas y refinamientos qne adquieren las palabras en uso gracias a regularidades
:! ;
1 •:

;·: grande, pues admite la gravedad de la mala conducta de manera gradual, evocando las que pueden verificarse.
i' !: etapas del proceso: la conducta en cuestión pareció primero solamente inapropiada, pero
¡, La comunicación negativa metapragmática que puede derivarse del modelo
1
:1, ! ahora hay que admitir que es mala (errónea, equivocada). De paso, queda dicho que clásico de Grice descansa en dos de las tres heuristicas o estrategias interpretativas
'' !i,, podría considerarse solamente inapropiada, en otras circunstancias (si, el hablante no
tuviera el puesto que tiene, por ejemplo). La estrategia consiste en crear una escala,
propuestas por Levinson para explicar cómo se procesan casi automáticamente
implicaturas generalizadas, es decir implicaturas que son implicaturas (se pueden
,, sugerir una posible evaluación no tan dañina para el hablante, y luego cancelarla y cancelar) pero son tan habituales en el uso que se infieren sin necesidad de contexto.
admitir la dañina, en un acto de humildad y coraje. En cada etapa, el hablante se presenta La estrategia más productiva es la que deriva de la máxima de cantidad de
lo mejor que puede: primero indiscreto, víctima de la tentación, carente de juicio; Grice, que Levinson enuncia así: "Diga todo lo que pueda", o Principio Inferencia! C
después juicioso, humilde y dispuesto asumir las consecuencias. Quienes recuerden (de cantidad). Como en el caso de las máximas de Grice, se trata no de mandatos para
este incidente podrán añadir que la mayor parte del público consideraba el asunto comunicarse bien, sino de expectativas nonnales en la comunicación. El oyente espera
inapropiado, pero no realmente malo, de modo que Clinton utilizaba con habilidad los que el hablante dé la mayor cantidad de información que venga al caso, y la inferencia
dos puntos de vista y se mostraba admitiendo lo que le obligaban a admitir. Al hacerse habitual es que si no afirma algo más informativo es porque no puede hacerlo. De ahí
eco de los dos grupos de opinión preponderantes, representados en la gradación de la que esta comunicación sea metalingüística y negativa.
escala, el presidente enviaba mensajes cruzados a ámbas partes. El segundo principio inferencia! responsable de comunicación metapragmática
Son frecuentes las escalas ad hoc, que provocan significados negativos no implícita deriva de la máxima de manera de Grice, especialmente las submáximas "sea
accesibles para personas ajenas a la comunidad de habla. En ciertas comunidades, por claro" y "sea breve", y puede enunciarse así: "Marque formalmente las situaciones
ejemplo, existe una escala para evaluar a las mujeres, formada por los calificativos anormales". Por un principio icónico, tendemos a decir lo simple shnplemente, y lo
<LINDA, BONITA, INTELIGENTE, SIMPÁTICA>, donde linda es, al menos para menos simple, o sea lo menos habitual o esperado, de maneras más marcadas. Este
muchos hablantes, el término más fuerte (que puede indicar belleza fisica y gracia social, segundo principio inferencia! se llama Principio M (de manera). Por el principio M se
e incluso bondad y talento), y los otros son progresivamente más débiles, de modo que entiende que si el hablante ha elegido una forma más complicada es porque la más
cada uno niega implícitamente a los situados a la izquierda. Para los hablantes que simple no le parece apropiada, según sus conocimientos sobre el uso del lenguaje, y
interpretan las evaluaciones según esta escala ad hoc, una mujer puede ser meramente transmite negativamente este conocimiento.
bonita, y por lo tanto no plenamente linda; puede ser inteligente, y carecer del encanto de Compárese, por ejemplo, el doblete siguiente:
las lindas o las bonitas; o puede ser solo simpática, a falta de otras prendas. Así, si ante,
(10) informador I informante
una pregunta del tipo ¿cómo es la novia de Juan? se responde
Informante, frente a informador, está claramente marcado: se refiere a la
(9) Es muy simpática.
persona que da información en contra de su propio grupo. Quien elige informante
a falta de otros datos contextuales tendríamos que entender que el hablante no evoca y descarta informtJ<ior, refiriéndose reflexivamente a su mensaje y llamando la
está en condiciones de decir que la novia de Juan es linda, ni bonita, ni inteligente. atención, con el sustantivo marcado, sobre una situación no estereotípica (la de que

ij
!I
r

38
METAPRAGMA TICA, LENGUAJE SOBRE LENGUAJE, FICCIONES, FIGURAS 39
GRACIELA REYES

alguien dé información contra sns propios compañeros). Podemos agregar muchos 3.3.1. El caso de la conjunción disyuntiva
': 1¡:
ejemplos tomados del léxico:
( 11) discusión I disputa Como vimos, al pasar, en la Introducción, la conjunción disyuntiva o tiene una
. ' interpretación exclusiva y otra inclusiva:
casa I residencia
comer / ingerir (14) A esta hora está saliendo de la oficina o ya en camino a casa. (lectura
exclusiva)
matar /causar la muerte
Tiene socios o clientes, no amigos. (lectura inclusiva)
parar / hacer parar
En lugar de considerar que la conjunción o es semánticamente ambigua,
Disputa es más marcado que discusión, residencia es más marcado que casa,
podemos tener en cuenta su uso, y hacer un razonamiento como el siguiente. En el uso,
ingerir es 1nás marcado que comer, causar la muerte señala una acción inenos
la conjunción o forma una escala informativa con la conjunción y: <Y, O>. La
estereotípica que matar, e hizo parar el coche se refiere a una realidad menos
conjunción y es semánticamente más fuerte, de modo que quien usa o indica,
estereotípica que paró el coche (que equivale simplemente a frenó). Las formas
metapragmáticamente, que no puede usar y, el término más fuerte de la escala. De este
simples remiten naturalmente a los estereotipos con que tenemos categorizado nuestro
modo, se puede asignar a la conjunción o un valor semántico, general, inclusivo, pero
acceso. habitual a la realidad, de modo que las formas no normales, las marcadas,
en su uso habitual un valor exclusivo, ya que normalmente la interpretarnos como la
niegan el estereotipo, y en eso consiste la comunicación negativa a la que me refiero,
negación de y.
1 !
en estos casos: a una negación metalingüística del estereotipo, comunicación posible
:¡ ' porque los hablantes poseen conocimientos sobre el uso del lenguaje y su propiedad.
El Principio M ("Marque formalmente las situaciones anormales") nos da 3.3.2. El caso del artículo
acceso teórico a los fenómenos de estilo. La repetición, por ejemplo, señala
significados complejos, menos estereotípicos que los expresados por las La diferencia entre el artículo definido y el indefinido puede analizarse también
correspondientes formas no repetidas: partiendo de la noción de inferencia generalizada, del tipo que estamos viendo, que
(12) Los años de la infancia pasaron, pasaron. consiste en transmitir lo que uno dice y en transmitir a la vez que uno no dice lo que
La redundancia de la repetición transmite emoción, ya que evoca la persistencia podía haber dicho pero ha elegido abiertamente no decir.
de la nostalgia, o lo irremediable de lo ya pasado, etc. Si el estereotipo es el camino Los determinantes sirven para restringir y definir la referencia de los sintagmas
fácil y eficiente por el que nos movemos en nuestras interacciones, la negación del nominales.
estereotipo es una invitación a mirar la realidad de nuevo y a ponderar otras cosas. El artículo definido el (la, los, las) suele distinguirse semánticamente del
Por otro lado, las formas rebuscadas pueden ser marcas de ironía: compárese indefinido un (una, unos, unas) atribuyéndole la propiedad de designar información
i 1
: il!' :. (13a) y (13b): conocida y la propiedad de designar un referente único: el artículo definido presenta
los referentes como únicos y como accesibles. Por una implicatura convencionalizada,
1
'1
;
:
:¡L,;!:¡
1 ::'
1
(13) a. Paco es médico.
b. Paco es un ilustre galeno.
es decir, ya codificada por la gramática del español, las expresiones definidas
.
1
· 1111·.1:. i especifican la clase de conjunto, mutuamente accesible, en que el referente es único.
l 1 1 1:1,'
Es probable que (13b), en un contexto adecuado, transmita una evaluación
' .I ! irónica de Paco, precisamente por lo rimbombante de la descripción.
El artículo indefinido es solamente un cuantificador existencial, es decir, no
1
señala la localización del referente. Su rasgo básico-la indefinitud- explica que se use
i ·:·¡' .,1· para introducir referentes nuevos en el discurso, que no tenga funciones anafóricas, y
1 i¡
i i:l,¡¡ ·:::i!,
'' 1

! 1 3.3. Comunicación negativa y descripción gramatical que se refiera a referentes no accesibles.


Poniendo los artículos en una escala <DEFINIDO, INDEFINIDO>, en la que el
1l
1 .1¡ 1·
Veamos ahora cómo se podrían explicar algunos fenómenos gramaticales y 1
.!
definido es el elemento más informativo, y aplicando el Principio C, podemos decir
1 semánticos desde una perspectiva metapragmática, recurriendo, en especial, al 'i
que el indefinido toma su presunción de no unicidad por contraste con el definido,
¡11 salvo cuando ·el contexto cancela esa presunción.
i1 Plincipio C (plincipio de cantidad). Los siguientes son solamente ejemplos del punto

i de vista metapragmático aplicado a descripciones gramaticales, ejemplos Si entendemos los artículos no independientemente, sino como partes de una
:¡, necesariamente breves y desnudos, ya que no intento entrar en el análisis de la
complejidad de estos feri6menos.
escala en que el definide>"s más fuerte por señalar accesibilidad del referente, resulta

'111]
1¡'! ·:
i: :.''
;, l'!i
! i!j¡l:
!• 1·,
r 1

40 GRACIELA REYES METAPRAGMATICA. LENGUAJE SOBRE LENGUAJE, FICCIONES, FIGURAS 41

que si el hablante usa el indefinido es porque no está en condiciones de usar la 3.3.3. El caso del imperfecto
! : expresión más fuerte. Así, si digo
(15) Entré en una casa.
El Principio C puede aplicarse también a la descripción de los significados de
solamente indico, mediante el artículo, la existencia de una casa, pero, como las formas verbales. En trabajos míos anteriores propuse que los significados de los
estoy negando, por el Principio C, la aplicabilidad del artículo definido, qu€ es la tiempos verbales pueden organizarse distinguiendo, en primer lugar, el significado
expresión más fuerte de la escala, indico implícitamente que esa casa no es semántico del pragmático. El significado semántico es el prototípico. El significado
mutuamente accesible a nuestro conocimiento, de modo que no puede ser, por pragmático, en mi descripción, está constituido por los significados secundarios y las
ejemplo, mi propia casa. implicaturas habituales. Los significados secundarios son, en esa descripción,
Pero el contraste entre (16} y (17) presenta una situación ligeramente distinta: contextuales, o sea se explican por inferencias en cada contexto (Reyes, l 990a y
(16) Me corté el dedo. 1990b).
(17) Me corté un dedo. En el caso del imperfecto, el significado básico es temporal y aspectual: el
El dativo de (16) indica, aquí, posesión, y dedo es una palabra relacional imperfecto señala acción anterior al presente e imperfecta (o sea, abierta, sin indicación
(solamente puede ser un dedo de alguien). Salvo especificación del contexto, si uno de principio ni fm}. El significado secundario general del imperfecto se produce por un
dice el dedo, la cabeza, el brazo se refiere a su propio dedo, cabeza o brazo3 . Como desplazamiento temporal: cuando el imperfecto no se refiere a un pasado abierto, sino,
tenemos varios dedos, es también posible usar el indefinido, como en (17), que por ejemplo, al momento presente o al futuro, se modaliza (salvo en los casos en que la
demuestra que en este caso la escala es inoperante, y que no podemos explicar el temporalidad queda protegida por la estructura del estilo indirecto), y, sin perder del
contraste entre (16) y (17) tal como explicarnos (15), donde la oposición entre el todo su valor aspectual, adquiere otros valores, que se explican por el mismo rasgo
artículo definido y elindefinido muestra la vigencia de la escala. modal 'aserción restringida'. De ahí surgen el imperfecto prelúdico, el de conato, el de
Obsérvese, por fm, cómo funciona la escala en la referencia anafórica. Si digo cortesía, el citativo, el contrafactual, el de sorpresa, apuntados ya en las gramáticas
latinas.
(18) La mujer entró en la sala. Una mujer se sentó en la última fila.
Si adoptamos un punto de vista m~tapragmático, podemos sistematizar la
la expresión una mujer no hace referencia a la mujer ya mencionada, puesto que
pluralidad semántica del imperfecto no ya proponiendo que sus variados significados
para referirnos a la misma mujer hubiéramos usado una expresión definida.
son inferibles en cada contexto, sino que la polisemia depende de los contrastes con
Negativamente, una mujer indica que se trata de una mujer diferente de la primera, y
otras formas del paradigma verbal que son accesibles en ciertos tipos de contextos. En
esto es lo que esperamos del artículo indefinido, que no realice ligazones anafóricas.
un contexto como el de (20), donde se pide algo, contrastan, por ejemplo, (20a) y
En todo caso, recuérdese que las implicaturas escalares son implicaturas y no (20b):
significados convencionales: pueden cancelarse pornuestro conocimiento del mundo o
(20) a. Quiero pedirte.
el significado de ciertas construcciones, y así podemos usar el indefinido contrariando ¡
la presunción de no unicidad, como en las declaraciones existenciales del tipo de (19): b. Quería pedirte.
1
(19) Nueve tiene una raíz cuadrada positiva, 1 En un contexto como (21) contrastan, a su vez, (2la) y (2lb):
1

Estos ejemplos nos llevan a un problema mayor, el de la ausencia total de ! (21) a. Mañana es la conferencia.
'I
artículo, como en tiene novio, usa muletas, que sería interesante analizar dentro de este !I b. Mañana era la conferencia.
enfoque metapragmático de la significación. 1

!i Veamos primero la escala <PRETÉRITO, IMPERFECTO>. Esta escala, en


11 donde el imperfecto es el miembro menos informativo, indica que, en el uso habitual,
¡; el imperfecto señala que el hablante no puede afirmar que la acción de que se trata se
i! ha cumplido efectivamente en el pasado. Compárense las siguientes ejemplos:
¡1, (22) a. Paco llegó anoche de Bruselas.
'.i
b. Paco llegaba anoche de Bruselas.
3
Lo que a su vez puede explicarse por un principio no metalingüístico, el principio de ¡j -~--

(23) a. Lucía quiso ir;


1

'
infonnatividad, tratado por Levinson junto con los dos principios inetalingüisticos que estmnos 11
considerando. El Principio l se condensa en la 1náxima "No diga lo innecesario". Según este '1
b. Lucía quería ir.
principio, el receptor enrique~ el contenido de lo que se le comunica buscando la interpretación 1nás
específica. Véase Levinson (2000), cap. 2. 1 (24) a. Maria salió-cuando llegó su he1mano.

'l
42 ÜRACIELA.REYES METAl'RAGMATICA. LENGUAJE SOBRE LENGUAJE, FICCIONES, FIGURAS 43

b. María salía cuando llegó su hennauo. Menos frecuente y más curioso es el imperfecto de descontento y el de sorpresa:
En estos casos, el pretérito simple indica que la acción se tenninó y por lo tanto (36) (Decepcionado, al ver el trocito de tarta que le han guardado:)¿Y esto era
se cumplió en el pasado, y el imperfecto niega, por comunicación negativa, que la todo?
acción haya terminado y que quizá se haya cumplido en el pasado. En oposición con el (37) (Sorprendido, al oír a alguien tocar el piauo) Oye, qué bien tocaba el piauo
pretérito, y sin necesidad de desplazamientos temporales, el imperfecto expresa tu hijo4 •
negativamente que el hablante no puede afinnar la terminación o quizá cumplimiento
He explicado en estudios anteriores (Reyes, 1994a y 1994b) estos valores y
de la acción, ya que hay acciones que solamente se cumplen si se tenninan, como
otros semejantes, notando que, cuando el imperfecto aparece modalizado, a veces
llegar, venir, entrar, etc. El significado implicado por el imperfecto seria
:; neutralizándose con el condicional e incluso con el subjuntivo, señala retóricamente el
::¡ 'incertidumbre sobre el cumplimiento de la acción', que contrasta con la certidumbre
choque entre una cognición pasada y una presente: 'yo creía, o sabía, o suponía, que·
expresada por el pretérito indefinido. Por tratarse de una implicatura generalizada de
esto era así, pero resulta que es de otra manera'. Yo esperaba más tarta, por ejemplo, o
cantidad, puede cancelarse. Las tres versiones siguientes de los ejemplos anteriores
yo esperaba que tu hijo tocara el piauo bien pero no tan bien, etc. El contraste sirve
muestran la cancelación de la implicatura "incertidumbre sobre el cumplimiento de la
bien para hacer un elogio, según el esquema "Yo pensaba bien de ti, pero esto es tau
: ;, acción", lograda, como siempre, por el afiadido de otra infonnación:
:! bueno que supera mis expectativas". En cada caso el imperfecto, al expresar tiempo
¡; (25) Paco llegaba anoche y efectivamente llegó. pasado, desvía la atención a la expectativa pasada, para contraponerla a la realidad
(26) Lucía quería ir y fue. presente, ya sea que la realidad sea peor, como en el caso de la tarta, o mejor, como en
(27) María salía cuando llegó su hennano y efectivamente salió. el caso del piano. Esta contraposición está muchas veces expresamente marcada por la /
Véase ahora la posibilidad de que esas mismas acciones expresadas en conjunción adversativa pero:
imperfecto en los casos (22-24) se cumplan en el presente o el futuro: (38) Pero qué bien tocaba el piano tu hijo.
(28) Paco llegaba ahora/mañaua de Bruselas. La contraposición existe, y podemos teorizarla como una escala, con lo cual
(29) Lucía quería ir la semana que viene. resaltaremos el valor metalingüístico de muchos de los significados del imperfecto:
(30) María salía el lunes. quien dice cantaba, en ciertos contextos, expresa que no puede decir canté, o canto, o
cantaré. - -----~-v.._~ , ___ _
En cada uno de estos ejemplos el imperfecto contrasta en una escala
infonnatíva, ya sea <PRESENTE, IMPERFECTO> o<FUTURO, IMPERFECTO> y Aliá!isis metapragmáticéis-5omo estos ponen de relieve los conocimientos del
transmite la misma implicatura, 'incertidumbre sobre el cumplimiento de la acción', hablante SObre'<rómo"usa. la lengua, aunque estos conocimientos sean apenas
qne puede cancelarse en ambos casos utilizando la expresión más fuerte: conscientes, como lo son para la mayoría de los usuarios. Pero podemos verificar
fácilmente que los hablantes tienen algún grado de consciencia de cómo usan las
(31) Paco llegaba; efectivamente, aquí llega.
. 'I;
fonnas disponibles, ya que tienden a corregirse rápidamente, en el caso de que los
(32) Lucía quería ir e irá.
· 11 :.
'I':i!
',,

(33) María salía el lunes y de hecho saldrá.


desplazamientos temporales puedau provocar malentendidos. La corrección más
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::
frecuente se realiza cuando lo que está en juego es el presente de la comunicación: si
! 1 i 11 La implicatura de incertidumbre puede explotarse para indicar cortesía, y de ahí algo es válido en el presente, el hablante tiende a indicarlo así, forzando la gramática
1
expresiones como (como vimos en la Introducción) o bien afiadiendo aclaraciones. Otro indicio de la
(34) Venía para preguntar ... conciencia del hablante sobre la ambigüedad posible de los desplazamientos
(35) Qué deseaba, señora. temporales es el cuidado en evitarlos en la lengua escrita, a causa del riesgo de la
Estas fónnulas de distanciamiento fingido, típicos casos de cortesía (el hablante comunicación diferida y la ausencia de contexto situacional compartido. Por otra parte,
no quiere imponer nada al interlocutor, y por eso presenta la acción como si no se muchos hablantes niegan la gramaticalidad de secuencias como (38), si se les presenta
como ejemplo de referencia al presente. Pero, por supuesto, hay cierta diferencia entre
cumpliera), también se explican por la escala <PRESENTE, IMPERFECTO>, o sea se
lo que los hablantes creen que hacen y lo que hacen realmente cuaudo usau la lengua,
explican si interpretamos que el hablante que utiliza el imperfecto como en (34) y (35)
ya que no podemos esperar que indiquen explicitamente todas las motivaciones de sus
transmite negativamente que no utiliza una fonna más fuerte porque cuida la imagen
de su interlocutor y no quiere imponerle nada, como le impondría con el presente, y de elecciones lingüísticas.
1 ' esa manera, restringiendo la afirmación, transmite cortesía.
i i' 4
O decepción, si fuera aceptable decir, en un contexto co1no el que nos hace imaginar este
ejemplo, "Oye, qué 1nal tocaba el piano tu hijo".
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44 GRACIELA REYES METAPRAGMATICA. LENGUAJE SOBRE LENGUAJE, FICCIONES, FIGURAS 45

Los significados escalares, como los que nos han servido para repasar los Aplicando a esto una perspectiva metapragmática, podemos concluir que al
valores comunicativos del imperfecto, son cancelables, ya que son implicaluras suspender la aserción, el hablante expresa negativamente que no puede afirmar. La
conversacionales, aunque pertenecen al grupo de las generalizadas, y por lo tanto son razón por la que cuestiona la factualidad (duda o irrelevancia) depende de los
constantes y previsibles. Debido a esta previsibilidad, es fácil confundir estas contextos y de la estructura del discurso (de qué se afirmó antes, por ejemplo, o de qué
implicaturas con significados convencionalizados, pertenecientes al código de la información se quiere realzar). De modo que podemos postular una implicatura
lengua, que son parte del valor semántico de las formas, independientemente de los generalizada, automática, que es negativa, según el Principio C, a la que se agregarán
'i'
contextos de uso. En algún caso, como el imperfecto de cortesía, vemos que la
' 1' ¡' '!!'~ luego, para completar la interpretación del subjuntivo, implicaturas contextuales
'. implicatura generalizada está ya a punto de congelarse y convertirse en una implicatura particularizadas.
• 1
convencional. El análisis por escalas nos permite ver mejor el proceso de
congelamiento semántico: cuanto más operativa es la escala, menos convencionalizado
está su significado, pero, a la vez, podemos predecir que en algún momento el 3.4. Alcance de la noción de elección
significado escalar, de puro habitual, pasará a ser una implicatura codificada y no
dependiente del contexto. Los análisis anteriores son ejemplos, muy simplificados, de cómo se puede
aplicar la noción de comunicación negativa para describir fenómenos ~naticales.
3.3.4. El subjuntivo Mirando las elecciones gramaticales con esta perspectiva, notamos el continuo trabajo
del productor y del intérprete en la constitución del significado lingüístico, y el sentido
que adquiere tanto lo dicho abiertamente cuanto lo implicado, y la relación entre uno y
El subjuntivo forma una escala con el indicativo: <INDICATIVO, otro. Dice Verschueren que cuando usarnos el lenguaje estamos obligados a hacer
5
SUBJUNTIVO> • En esta escala el indicativo es el ténnino semánticamente fuerte, elecciones entre los elementos disponibles, aunque estos no nos sirvan para satisfacer
de modo que el uso del subjuntivo implica una negación del uso del indicativo. Esto es del todo nuestras necesidades comunicativas (1999a, pág. 57). Por supuesto, los
así porque el indicativo expresa una aserción del hablante sobre la realización de una hablantes son solamente conscientes hasta cierto punto de las elecciones que hacen, y
acción. El subjuntivo, en cambio, significa 'aserción suspendida' (véase Reyes, algunas, muchas, son automáticas. Si queremos hablar, tenemos que decidir
1990a). En el discurso, la aserción puede suspenderse porque el hablante no tiene continuamente entre una serie de opciones: la lengua que usaremos, las formas y
suficiente certeza o bien porque afirmar no es relevante comunicativarnente, o es estrategias, los registros, el vocabulario. Y cada elección evocará sus alternativas:
redundante en ese punto del discurso. Así, si alguien tiene dudas sobre el precio de un
... Any choice of a form motivated by its placement along any dimension of
libro, y emite un enunciado como (39):
meaning not only desiguales that specific placement but conjures up the entire
(39) Aunque sea caro lo voy a comprar. dimension as well. This is why tense choices in English almos! inevitably bring the
,,1
su subjuntivo expresará incertidumbre, ya que el hablante cuestiona la dimension of time into the representation of an action or event (because of the
factualidad de lo dicho. Si, en un contexto distinto, es un dato conocido que un libro "¡¡ availability of grammaticalized reference to past, present and future). In the area of
es caro, y el hablante emplea el mismo subjuntivo de (39), su decisión de no afirmar !i lexical choices, it is easy to demonstrate that communicative effects are often scored as
que el libro es caro puede deberse a que no es necesario afirmar algo que se da por much by not choosing an available option as by the actual choice that is being made.
presupuesto. En el primer contexto, donde el hablante no sabe si el libro es caro, (Verschueren, 1999a, pág. 58.)
estamos ante un caso de factualidad cuestionada, y en el segundo, donde tal
infmmación es presupuesta, ante un caso de factualidad irrelevante. Ambos
il Lo efectivamente dicho no solamente evoca implicaturas asociadas con el
significados se explican bien según el esquema clásico de las máximas de Grice, ya
!i contexto, sino otro tipo de implicitud, que hemos visto en el análisis de los ejemplos
gramaticales: evoca lo posible pero no elegido, lo que podíamos haber dicho y no
que el hablante quebrarla la máxima de cualidad si afirmara algo de cuya verdad no :¡ dijimos, y además, como sefiala Verschueren en el fragmento citado, toda la
tiene pruebas, y la segunda submáxima de cantidad si diera más información de la dimensión paradigmática en que se origina cada elección. A su vez, las elecc10nes
necesaria.
están constrefiidas por el lenguaje mismo. El lenguaje nos impone límites, pero, gracias
i! a su variabilidad, nos permite utilizarlo creativamente, si hace falta. Verschueren
!! explica convincentemente cómo la variabilidad del lenguaje nos da un amplio margen
de negociación: las elecciones no son mecánicas ni regidas por reglas inquebrantables,
5
Agradezco a Dinorah Scott su sugerencia de analizar los modos verbales siguiendo la teoría sino que tenemos much~.flexibilidad para elegir (1999a, pág. 59). La empresa de
de la itnplicatura generalizada. 1 comunicarse es arriesgada y siempre susceptible de fracaso, pero podemos explotar el

1
46 GRACIELA REYES
METAPRAGMATICA. LENGUAJE SOBRE LENGUAJE, FICCIONES, FIGURAS 47
__ ¡-

lenguaje para hacerlo útil a nuestros propósitos, y, en teoría, cualquier enunciado que
Veamos primero qué debe entenderse por funcionalismo. Hay muchos tipos de
sea, fuera de uso, un sinsentido, puede adquirir sentido en el contexto adecuado. No
funcionalismo, pero todos comparten la idea (rebatida por Chomsky6) de que la
hay asteriscos en pragmática.
función básica del lenguaje es servir para la comunicación. En la tradición de Saussure,
Esto nos lleva a otro problema: la relación entre nuestras necesidades los signos se organizan en interrelaciones y dependencias que se verifican en todos los
comunicativas y las estructuras de las lenguas. Parece existir una correlación entre las niveles de las estructuras lingüísticas, y esas operaciones hacen andar la maquinaria
propiedades de unas y otras, tal como han señalado las corrientes funcionalistas en entera del sistema y permiten la comunicación. Funciones son las relaciones
gramática. Un buen ejemplo es el de los sistemas deícticos: la necesidad de relativamente estables entre las unidades de los distintos niveles lingüísticos. En
contextualizar el enunciado, es decir, de conectarlo con la situación de habla, tiene su palabras de Hernández Alonso: "El hablante conoce la serie de estructuras
correlato en los sistemas deícticos de las lenguas. Otro buen ejemplo es el de los sintagmáticas con que funciona aquella (la lengua); y según el mensaje que quiere
procesos de congelamiento semántico que mencionamos arriba: algunas implicaturas transmitir, selecciona unos signos, cuyos siguificados responden a conceptos, y los
ocasionales se convierten en rutinarias, y pasan a ser generalizadas, es decir, se coloca en los huecos funcionales de la estructura conveniente" (1996, pág. 33). Y
producen en todos los contextos, si ninguna información las bloquea. Una vez que añade más abajo: "La noción de función está íntimamente ligada al papel que
estas implicaturas se vuelven constantes y esperables, puedervcristalizarse y formar desempeña un elemento o un término dentro de una estructura perteneciente a un
parte del código, como sucede, por ejemplo, con los siguificados de los verbos sistema. Función, estructura y sistema son inseparables. Las funciones vienen a ser el
auxiliares; estos verbos empezaron por funcionar como principales hasta que •sus conjunto de interrelaciones que unos elementos guardan con otros dentro de un sistema
implicaturas se generalizaron y finalmente alcanzaron el estatus de auxiliares o para formar una estructura" (págs. 33-34).
modales (cfr. Levinson, 2000, pág. 263, y Bybee, Pagliuca y Perkins, 1991). Los A partir de la idea de que la gramática se usa en la comunicación y refleja las
procesos de gramaticalización ofrecen abundantes ejemplos de cambios lingüísticos
.¡ necesidades comunicativas, se ha estudiado de manera muy insistente, en los últimos
cuya dirección está determinada por el uso (véase, entre otros, Traugott y Reine, ¡ ! ·<i 1 años, la relación entre gramática y discurso. Estas corrientes funcionalistas proponen
1991 ).
! ¡ u tomar el discurso como fuente de datos, y buscar las correlac10nes entre la estructura
Pero la relación entre gramática y pragmática no siempre es tan clara y directa. i i del discurso y la estructura de la gramática, tal como hace, por ejemplo, la "gramática
Parecería que muchas regularidades sintácticas se producen independientemente, y que '¡l.
,¡ sistémica funcional" de M. A. K. Halliday (véase especialmente Halliday, 1985). Esta
no hay ninguna explicación funcional para estas regularidades. ' gramática está orientada semántica y socialmente, y por lo tanto puede asociarse a
1 ciertos análisis pragmáticos. Pero entre todas las versiones del funcionalismo, que no '\
3.5. Funcionalismo y pragmática ¡ puedo siquiera mencionar aquí, me interesa destacar la que propone una gramática de ·'"i¡
la interacción, procedente del análisis de la conversación, porque es la más cercana a ¡ ··'·
las tendencias más empíricas de la pragmática actual (sobre estas tendencias véase
1 Las gramáticas funcionales establecen una correlación entre la función 1
comunicativa de la lengua y su morfosintaxis, y se oponen abiertamente a entender la 11 Levinson, 1983, cap. 3).
1 ·· -Ochs, Schegloff y Thompson (1996) proponen una gramática llamada
gramática como una facultad autónoma de la cognición humana, es decir, ajena al uso
"interacciona!", que es una gramática del uso, por oposición a una gramática de reglas
. /
1

de la lengua. Esta posición no coincide enteramente con la de los pragmatistas, que por 1

o principios autónomos, y que está lejos tanto de la tradición funcional como de las
l J\
lo general (aunque con diferencias entre ellos) admiten la existencia de fenómenos
puramente sintácticos, ajenos al uso, y por lo tanto independientes de la pragmática. corrientes innatistas. Se trata de una gramática de la conversación, es decir, un
Los fenómenos puramente sintácticos son los que no están motivados por las presiones conjunto de estructuras que pueden estudiarse en correlación con la formación de 'j'
y necesidades del uso, y reflejan principios abstractos y universales, que no son
1 turnos en la conversación natural espontánea. Esta teoría concibe la gramática de una
producto de ningún aprendizaje. Sin embargo, algunos de estos fenómenos podrían ¡1
1 lengua como un conjunto de recursos organizativos que subyacen a la organización de
reinterpretarse con principios pragmáticos, y hay una tendencia a plantear nuevos · la vida social, de modo que las construcciones sintácticas sirven para representar
análisis que muestran a la pragmática en su papel de intrusa: intrusa en el territorio 1 estados de cosas y también para organizar la interacción, es decir, para regular el modo
1
semántico, como hemos visto en el apartado3, y en territorio morfosintáctico también. en que el lenguaje interviene en los procesos comuuicativos y cognoscitivos.

6
Escribe, por ejemplo, Chomsky: "As for the idea that 'the basic function of na~ral langua~e
is to mediate communication', it is unclear what sense can be given toan absoJute notton of 'bas1c
function' for any biologicaLsystem; and if this problem can be overcome, we 1nay ask why
1 cotnmunication is the 'basic function'" (Chomsky, 2000, pág. 30).
48 ÜRACIELA REYES METAPRAGMATICA. LENGUAJE SOBRE LENGUAJE, FICCIONES, FIGURAS 49

,¡ La gramática no está en la cabeza del hablante, en esta teoría, sino distribuida que se expresa y entiende efectivamente en el uso lingüístico, y para explicar ese
] (distributed grammar) entre los hablantes, el contexto y la interacción misma. Los desnivel no podemos acudir a la noción de correlación función-forma, al menos no
patrones gramaticales identificables son un destilado de las prácticas lingüísticas y el podemos en muchísimos casos, ya que esa correlación no existe (piénsese en las
destilado se va formando por parecidas situaciones y rutinas. Pero además, en cada ironías, en las metáforas, en las insinuaciones, en los sobreentendidos e implícitos,
caso, la interacción vuelve a diseñar esos patrones, de modo que si bien hay etc.). Pero a la vez la pragmática parte de la convicción de que la comunicación afecta
construcciones que forman parte del repertorio de recursos disponibles, en cada uso directamente la lengua, como hemos visto arriba, y de que no podemos explicar todas
esas construcciones pueden adquirir matices nuevos de significado. Puede haber, por las estructuras morfosintácticas y semánticas sin entender el uso.
ejemplo, unas construcciones que llamamos pasivas, pero en cada interacción el Levinson (1991) considera que la tendencia estándar en pragmática consiste en
hablante reinterpreta el valor de los sujetos y verbos, de modo que puede producir una considerar que los principios explicativos de la pragmática complementan los de la
construcción Hpasiva" que es periférica respecto de lo que se considera "centralmente" sintaxis, de modo que estos principios no entran ·en conflicto con las teorías de
pasivo. La lengua adquiere significado solamente en contexto, lo que lleva a proponer universales lingüísticos de origen biológico. Pero, segón Levinson, como la pragmática
una "indicialidad generalizada" (cfr. Fox, 1994), que está muy lejos de la teoría es la Cenicienta de la teoría lingüística, todavía no se ha estudiado sistemáticamente si
funcionalista clásica e incluso de los análisis lingüísticos inspirados por la pragmática hay asuntos de morfosintaxis y de semántica que se expliquen mejor utilizando
:i
radical. En la teoría interacciona!, lo sociolingüístico, lo pragmático y lo interactivo no ' principios pragmáticos. No se trata, para él, de reducir todo a pragmática, sino de
son complementarios respecto de la descripción gramatical, sino que se nos propone simplificar las explicaciones gramaticales, utilizando explicaciones pragmáticas.
empezar de nuevo, considerar que la gra1nática tiene una matriz interaccional, y crear i
'.! Levinson acaba de ofrecemos el intento más exhaustivo de analizar un fenómeno, la
nuevas categorías que permitan hacer abstracciones y generalizaciones a partir de lo i anáfora, pragmáticamente, contrariando profundamente las teorías generativistas
observado en interacciones reales.
Los análisis pragmáticos de las estructuras lingüísticas son, por definición,
li (Levinson, 2000, cap. 4).
Para muchos teóricos, el problema de estas explicaciones es que siempre
11
funcionales, pero no comparten todos los principios de las gramáticas funcionales ni incorporarán elementos extralingüísticos. En ese sentido, es más "lingüística" la teoría
1
1 interaccionales. Especialmente discutida es la noción central de correlación entre !1 de la relevancia que la teoría de Grice, ya que la primera propone principios innatos
forma y función comunicativa. Para Verschueren, muchos tratamientos del uso del :¡ semejantes a los de la gramática generativa, y la segunda, en cambio, trabaja sobre el
lenguaje presentan lo que él llama "funcionalismo romántico": la convicción de que en i),, problema de la coordinación comunicativa, y por eso deja entrar, en la teoría, la
el lenguaje se reflejan las funciones básicas de la comunicación (1999b, pág. 874). participación del oyente y la normativización social y cultural de esa participación. En
Desde el punto de vista de la pragmática como estudio del funcionamiento completo .1 este momento, en que se está ampliando el alcance de la pragmática del modo que
del lenguaje, importa más comprobar cómo con el lenguaje se pueden hacer cosas que hemos visto en este capítulo, la pragmática propone reconsiderar ciertos fenómenos
11
el lenguaje no está diseñado para hacer. Sin negar que el sistema lingüístico nos ofrece aparentemente sintácticos a la luz de nociones pragmáticas, sin por eso cuestionar la
una serie de recursos para comunicarnos, Verschueren parte de una idea central de la :¡
1,
existencia de principios morfosintácticos independientes (véase especialmente
pragmática, la infraespecificación sintáctica y semántica, para intentar explicar qué :¡ Levinson, 2000, cap. 4).
hacen realmente los hablantes cuando, a su juicio milagrosamente y con muchos
riesgos, consiguen comunicarse. Para él no hay casi relaciones fijas entre forma y
"q Verschueren, en posición contraria a la de Levinson, niega rotundamente que la
pragmática seaun componente del análisis lingüístico, y propone en cambio que la
1
1
función, y todas las convenciones lingüísticas pueden explotarse con otros fines .1 pragmática es "una perspectiva funcional -cognitiva, social y cultural-del lenguaje",
comunicativos: "Everything conventional is liable to further strategic use or cuyo tema de investigación es "el funcionamiento significativo del lenguaje en su uso
explotation. That is why there are hardly any fixed form-function relationships in real" (1999a, pág. 11 ), en todos los niveles, desde el fonológico al semántico. Por eso
language when regarded from a pragmatic perspective. "(Verschueren, 1999a, pág. critica el funcionalismo de la gramática estructural, que analiza las formas por sus
156). valores opositivos, ya que esos análisis tratan el lenguaje como un sistema
La idea fundamental, en pragmática, es cómo los hablantes logran transmitir completamente autónomo, en el que cada forma se explica por lo que no es en
más de lo que dicen, o algo distinto de lo que dicen, y por eso es dificil, para un il comparación con otra, o sea, por su función contrastiva dentro del sistema de la lengua.
pragmatista, aceptar una correlación estricta entre forma y función, ya que la Frente a esta concepción inmanente del lenguaje, la pragmática como perspectiva
·.' ·1''·.·.. explotación de las convenciones (que es uno de los principios básicos de la pragmática [I propuesta por Verschueren analiza los aspectos sociales e interaccionales de la
i.. 1
,..
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griceana) nos permite precisamente decir más o decir otra cosa. Queda un desnivel a comunicación e intenta asignar significados y valores teniendo en cuenta cómo se
i; ,u!
I· lil
veces muy grande entre la,gramática (entendida como morfosintaxis y semántica) y lo genera el significado en'toda clase de textos, no solamente la conversación. En la
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50 ÜRACIELA REYES METAPRAGMATICA. LENGUAJE SOBRE LENGUAJE, FICCIONES, [lJGURAS 51


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I'
1
teoría de Verschueren, la propiedad esencial del lenguaje, llamada "adaptabilidad", nos (41) a. Lee este borrador y dime qué te parece,
",,' 1
permite seleccionar entre una serie de variedades morfosintácticas y léxicas y b. Ya sé que estás ocupadísima. Pero te lo tengo que pedir a ti, porque
¡¡ 1! manipular esos significados según las necesidades del uso, contraviniendo o solamente me fio de ti. Sé buena una vez más, y, cuando tengas un rato, lee esto y
I', "explotando" la nonna gramatical, si es necesario. dime qué te parece. Siento mucho fastidiarte, la verdad, y te lo agradezco en el alma,
En estos casos, el hablante ejerce el derecho a usar la lengua lo mejor que puede eres un ángel.
en cada contingencia, confiando en que los interlocutores entiendan lo que les quiere Los segmentos corteses, usados por los hablantes en las conversaciones
decir, pero nunca de manera totalmente arbitraria. Aquí la función regulativa de las transcritas, y sin duda los más frecuentes y natnrales en cada caso, son, como salta a la
ideologías lingüísticas (de lo que se puede hacer en asuntos lingüísticos y por qué) es vista, más engorrosos que los "directos", y menos sinceros. En (40b) se otorga una
muy fuerte y no siempre está en buenas relaciones con la norma gramatical, importancia desproporcionada al simple acto de llenar el tanque de gasolina (el acto
Regulaciones más específicas forman la "libertad vigilada" con que nos expresamos en exigía muy poco esfuerzo, en este caso particular). En (4lb) hay una serie de
cada uno de los géneros textnales, y el conjunto de convenciones, estrategias y justificaciones, alabanzas y reconocimientos que por un lado parecen aumentar el favor
licencias propio del uso artístico de la lengua. que se pide (la destinataria puede alarmarse: ¿se tratará de un borrador de mil
1

i! 1 páginas?) y por otro se aseguran la buena voluntad de la interlocutora, porque quien


: .. ¡
, 3.6. La cortesía como metapragrnática pide se hace cargo de las dificultades de lo que pide. Por supuesto, las estrategias de
!.' 1

cortesía a veces exigen un procedimiento contrario al de (4lb): cuando se pide mucho,


I'' !1:::,
1
'
Vamos a tratar, finalmente, una manifestación de la comunicación
es mejor presentarlo como poco, transmitiendo una implicatura del tipo "te pido esto
i sin muchas excusas porque, como sabes, yo haría otro tanto por ti", para no dar
metapragrnática que es objeto actnalmente de un interés extraordinario: la cortesía
! '.!¡; ocasión al rechazo, e incluso, en el mejor de los casos, para convertir la petición en un
1 1 !:!
lingüística. Se llama cortesía a un aspecto del proceso comunicativo, el que depende
halago a los talentos, bondad, y sobre todo amistad del destinatario. Pero en todo caso,
1
~ '1 :1 de elecciones hechas con el propósito de satisfacer las necesidades psicológicas
mutuas, Este aspecto fundamental de la comunicación es ajeno, en principio, a la el cálculo de la captatio benevolentiae es patente, el mensaje tiene las huellas de la
,¡:¡ 1 mutualidad de intereses y de los reparos y consideraciones que cada hablante debe al
economía informativa. Sucede que, si bien a veces la cortesía consiste en dar mucho
'1::,,,,1' otro. Lo que importa es expresar cortesía, dar con el procedimiento que transmita
1 1!'1 por poco precio, es decir, mucha información por poco esfuerzo, en un despliegue de
' ·!~ 1· 1 : . '
lo que Sperber y Wilson llamarían óptima relevancia7 , por lo común pasa lo contrario:
cortesía de la manera más efectiva posible, aunque parezca habe,r una contradicción
l 111' ' entre ser cortés y ser efectivo: no la hay, porque la cortesía es un razonamiento
'lj'''I:,
• 1:·.I ser cortés es ser menos económico, menos eficiente y aparente1nente menos racional.
1"
'" ,,
11'
reflexivo destinado a llevar a cabo de la mejor manera posible las acciones lingüísticas.
1 ' 1!:!.:I'
I
:· La estrategia de atenuar una orden o una petición, por ejemplo, afecta la
Uno es cortés solamente cuando demuestra que es cortés, La ausencia de
i ' 1 ·I
' ::,,,1:' econonúa y, aparentemente, la efectividad del uso del lenguaje, es, estrictamente, una
cortesía no es neutralidad, sino que, como señaló Goffman (1967, 1971) en sus
: :'¡1i1 '1'; 1
' complicación, exige más esfuerzo, puede provocar confusiones en determinadas
trabajos pioneros sobre este tema, la ausencia de cortesía revela hostilidad,
, : ¡ : ,.,. circunstancias y es, encima, una manera poco sincera de hablar, una actuación más
cualesquiera que sean las intenciones del hablante. Uno de los aprendizajes sociales
.'I' , . teatral que otras, en nuestra experiencia cotidiana del lenguaje. Sin embargo, la
': ! ;
1
:,1
\i:.
I ,,,,,,¡
1

1 ,,
atenuación es obligatoria en circunstancias nmmales: no podernos usar el lenguaje y
ser sistemáticamente descorteses, porque el daño sería muy grande para nosotros
más arduos es sin duda el de calibrar la relación entre nuestra persona, nuestra palabra
y la persona a quien nuestra palabra va dirigida, directa o indirectamente. Una enorme
1 111 mismos. fuente de conflictos en nuestra vida diaria son las fallas de comunicación que,
¡ ;¡·
1 ,,
;I técnicamente, son fallas de cortesía y provocan ofensas, desconfianza, desinterés, o
Compárense (40a) y (40b), y (4la) y (4lb); (40a) procede de una conversación redondamente malentendidos.
r.¡, 11 y (4lb) de un mensaje electrónico.
l' , ! ; Las fórmulas de cortesía son sefiales metapragrnáticas que transmiten, por
(40) a. Ponele nafta al coche.
d¡'' encima del mensaje, un solo significado básico: que el productor está tomando en
b. Si te queda tiempo, haceme el favor de ponerle nafta al coche, y te lo cuenta la imagen del receptor. En un caso como (42), está claro para ambos hablantes
¡:¡: ! voy a agradecer mucho.
i! que el elogio es exagerado, y no creo que el productor tnviera intenciones de que su
elogio fuera entendido literalmente:
7 (42) A: Qué bueno está (el pastel). Es el mejor que he tomado en mi vida.
Pero las nociones de cortesía, y, en general, las que tienen que ver con las regulaciones
sociales de la comunicación, igualdad, desigualdad, poder, dominación, jerarquía, deferencia, etc. no B: Calla, menJiroso.
tienen lugar en el modelo relevantista.
••
;'!

:i 52 ÜRACIELA REYES METAPRAGMATICA, LENGUAJE SOBRE LENGUAJE, FICCIONES, FIGURAS 53


,,
,,
1

! ,,
!'
Basta que B reconozca la intención cortés de A para que entienda lo que este le transgredir la frontera sagrada de la independencia y la dignidad del interlocutor, no
1!
transmite, que es aprecio por lo que recibe, admiración, cariño, etc. A, con exageración
,,!'I
:1. y todo, ha prestado atención a los deseos básicos de B, que c~nsisten, gr~sso modo, en
imponiéndole nada.
Aunque hay, indudablemente, aspectos universales en la cortesía, especialmente
i' que a los demás les guste lo que a ella le gusta, en ser bien mirada y quenda. Y eso es
!'j la idea central de que los usuarios del lenguaje deben protegerse unos a otros,
mucho más importante, para la relación social de los interlocutores, que una asegurarse la buena voluntad mutua y respetarse, sin embargo las manifestaciones de
'
' ,¡ evaluación acertada del pastel. Porque no es el pastel lo que está en juego, no es la cortesía varian en el tiempo y en el espacio, y dependen a veces de factores muy
realidad (representada aquí por el pastel) lo que cuenta, el lenguaje no tiene por complejos y sutiles, incluso de la historia de la relación entre dos o más personas. Si
función, en este intercambio trivial, describir el mundo, sino reforzar las relaciones quisiéramos escribir un manual de divulgación sobre "cómo ser cortés y trinnfar en la
interpersonales. Y hay que agregar que el intercambio es trivial, pero no exento de :! vida" tropezaríamos con un problema gravísimo: que lo mismo que puede ser cortés en
riesgos, como todos los usos del lenguaje. Usar el lenguaje es arriesgarse no sol~ente !
,I una situación puede volverse descortés en otra, y· que hay que atender cada vez a
a transmitir mal la información que se quiere transinitir, o a ser mal interpretado, sino a tantos factores, que no se pueden dar directivas generales. La cortesía varía de persona
,! perder al interlocutor: a ofenderlo, volverlo indiferente u hostil. Un elogio demasiado
1:: a persona, de familia a familia, de grapo a grupo y, además, depende de la evolución
·,i• tibio o demasiado cálido o la falta de un elogio pueden provocar catástrofes, como de la conversación.
todos sabemos. El piropo a una mujer, por ejemplo, puede ser percibido como una falta
Veamos un ejemplo de esta dinámica. Si trato de tú a alguien, expresando con
de consideración, un ataque a la dignidad o un modo de h~stigamiento sexual; La
ello intimidad y afecto, el cambio súbito a usted, forma que en el sistema lingüístico
ausencia de piropo, en otras circunstancias, puede ser entendida como desatencion Y
expresa mayor deferencia y por lo tanto mayor cortesía, puede ser percibido como
por lo tanto desamor.
hostilidad, o sea como suspensión de la cortesía, y este nuevo significado se deriva,
En el uso de las fórmulas de despedida y de condolencia, muy primeramente, de su localización en la conversación. Pero esto depende de las
convencionalizadas, se ve bien que la cortesía es un proceso reflexivo: las fó1mu~as se circunstancias. Si una alunma mía que trabaja conmigo hace afios y me tutea utiliza, al
usan como menciones de sí mismas, su significado está en el gesto de amistad, hacerme una pregunta en una conferencia, la forma usted, no lo interpretaré como
simpatía, etc., que las motiva. Esa motívación es lo que el hablante quiere que se hostilidad, sino como el deseo de mostrar su respeto por mí en público. Puedo apreciar
reconozca que transmite, no el contenido literal de la fórmula, aunque, desde luego, el el cambio, o considerarlo algo rebuscado, pero en todo caso rescato su intención
hablante puede ser consciente de la pobreza semántica de los lugares comunes, e cortés, recibo cortesía. Las normas metapragmáticas implícitas que regulan estos
intentar cambiarlos o al menos protestar por su pobreza. Es interesante notar que aun comportamientos son sumamente complejas, cada persona las aplica lo mejor que
en momentos difíciles, apasionados o incluso desesperados, los hablantes, obligados a puede, y no siempre acertamos con ellas, pero queda vigente, siempre, la necesidad
expresarse mediante el lenguaje, pueden referirse al lenguaje y quejarse de sus social de cumplirlas, y de aprenderlas si no las conocemos bien. La cortesía es un
limitaciones. valor social muy alto: se exige incluso en circunstancias en que es dificil ser amable,
El aspecto reflexivo de la cortesía se ve también en la noción de "ofensa porque, como indica el refrán, lo cortés no quita lo valiente.
virtual", que procede de Goffman (1967, 1971). Cualquier enunciado puede ser En la teoría, ya clásica, de Brown y Levinson (1978) las necesidades o deseos
ofensivo y para anular ese peligro los hablantes se adelantan a interpretar lo que psicológicos de los hablantes, en cuanto seres sociales y usuarios del lenguaje, son,
podrían lnterpretar los oyentes en el peor de los casos. Por cortesía atr!buimos al 1
1 fundamentalmente, de dos tipos: deseos de ser querido y aceptado y deseo de ser
oyente una interpretación negatíva: que una orden va a ofenderlos, por ejemplo. En 1 respetado, de que nadie transgreda los límites de nuestro territo1io o autoestima. Suele
cada comunidad hay una evaluación diferente de los riesgos de los actos de habla y del llamarse cortesía positiva, o solidaridad, a las prácticas en que se muestra atención por
derecho que tienen unos y otros a comportarse de ciertas maneras, pero en todas las 1 el primer tipo de deseos (como en (42), por ejemplo), y cortesía negativa, o deferencia,
comunidades parece existir la tendencia a crear un preámbulo implícito, en que se l al conjunto de procedimientos lingüísticos que comunican al oyente que se lo respeta
previene una interpretación generalmente espantosa de lo que uno va a decir. Hay 1 (tratándolo de usted, por ejemplo). En el ejemplo siguiente, una enfermera utiliza una
personas que realizan este preámbulo por medio de enunciados autodenigrantes: '¡ fórmula de tratamiento muy respetuosa y una fórmula cortés para hablar con una
(43) Soy un pesado, ya sé, pero ... paciente que está muy enferma y sometida, además, a la indignidad que conllevan
Esta estrategia puede perder efectividad si se incomoda al destinatario ciertos tratamientos médicos:
atribuyéndole, en la ficción cortés, demasiados calificativos dirigidos contra uno (44) Profesora Sullivan, si me permite, voy a asearla un poco.
1nismo, pero en todo caso, y se realicen como se realicen, estas comunicaciones Esta acción lingi\ística de la enfermera, que presencié en un hospital de
metapragmáticas responden a la necesidad de fingir pesimismo, y de este modo no Chicago, intentaba conirlbuir a que la paciente se sintiera, pese a su situación
54 ÜRACIELA REYES

miserable, parte todavía del mundo de la gente sana y respetable. Por supuesto lo que
percibía la paciente era la intención cortés, la atención a su imagen. La obvia
inadecuación de pedir permiso para algo que de todos modos, con o sin permiso, se va
a hacer, cumple una función importante: es un uso cortés, que suaviza la brutalidad de CAPÍTUL02
la situación y asegura a la paciente que otra persona quiere que ella sepa que esa otra
persona sabe que ella merece ser tratada como ha sido tratada antes de caer en cama. Y
esa otra persona, en este caso la enfermera, se toma el trabajo de expresar tal actitud LA REPRESENTACIÓN DE DISCURSO
usando unas fórmulas rutinarias pero seguras, acompañadas de otras señales de
deferencia, como el tono de voz, la sonrisa, la mirada, etc.
Podriamos considerar que estos significados corteses, suscitados por fórmulas
lingüísticas que nadie se toma literalmente o bien por la serie de procedimientos,
algunos complicados, estudiados por Brown y Levinson; satisfacen nuestra
convicción, profunda y quizá nunca explorada, de que la persona humana es algo
sagrado que merece, mutatis mutandis, el tratamiento que otorgamos a lo sagrado. El
insulto, el ultraje, al atacar la imagen de una persona, pueden producir daños
irreparables, y por algo un trato sistemáticamente descortés, abusivo, puede lograr la
degradación y dominación de otros, cuando el que maltrata tiene mayor jerarquía y l. LA REFLEXIVIDAD
poder, o se lo asigna. El estudio de la cortesía exige el estudio del poder y de la
dominación, de la conversación entre iguales y de la conversación desigual: este debe En el uso del lenguaje hay una continua regulación entre el funcionamiento
ser uno de los objetivos de la metapragmática, que nos da una posición privilegiada pragmático y el metapragmático, entre la creación e interpretación de textos en el
para observar cómo los hablantes han normativizado sus respectivos lugares y roles tiempo real y el control y legitimación social de esta actividad. El nivel pragmático
sociales. Es un tema que aquí debemos dejar en suspenso. incluye la totalidad de las relaciones entre el texto y su contexto (que puede incluir
Se acepta comúnmente, en pragmática, que la cortesía no es indispensable, otros textos). Según Silverstein, cada ocurrencia lingüística es histórica y contingente,
porque los actos lingüísticos pueden cumplirse perfectamente en ausencia de cortesía. y para engarzarse efectivamente en el contexto presupone algo sobre el contexto o
Mientras las expectativas indicadas por el modelo de Grice (cantidad, cualidad, implica pragmáticamente (crea más significados en contexto). Para que esto sea
relación, manera), u otras de ese tipo que puedan proponerse, son necesarias para que posible, los signos deben tener dos propiedades que son indiciales: ser apropiados
se produzca la transmisión de información, las estrategias de cortesía, en todas sus (presuponer adecuadamente) y ser efectivos (poder implicar) (cfr. Silverstein, 1993).
intrincadas variedades, no parecen ser constitutivas del proceso de transmisión de La metapragmática, entendida como un conocimiento de los hablantes, como un
información. Sin embargo, dada la función social del lenguaje y la atención que conjunto de prácticas o como un nivel y perspectiva de análisis, según vimos en el
prestan los hablantes a sus propias imágenes durante sus intercambios comunicativos, Capítulo 1, incluye todo lo que sabemos sobre el uso del lenguaje: su capacidad para
la cortesía no puede quedar fuera de un estudio pragmático. Además, las gramáticas de describir y categorizar, sus estrategias retóricas y los procesos de constitución e
las lenguas son permeables a estas funciones sociales del lenguaje, y sería imposible interpretación de los textos. La metapragmática refleja nuestra capacidad para
describir una lengua sin aludir a ellas. "pragmatizar'', o sea para contextualizar signos y hacerlos significativos' .
La coordinación tácita que nos hace intercambiar significados corteses es
reflexiva y se manifiesta por medio de procedimientos reflexivos, muchos de ellos
8
grarnaticalizados, de modo que la cortesía es por definición un ejercicio de El conocimiento metaprag1nático es parte del conjunto de conochnientos que nos penniten
metapragmática, y uno de los más importantes para las funciones sociales del lenguaje. cotnunicamos, no todos ellos lingüísticos, y que se suelen incluir en la noción de "competencia
comunicativa" propuesta por Hy1nes ( 1971 ). Se entiende por co1npetencia comunicativa el conjunto
de conoci1nientos que debe poseer un hablante para comunicarse efectivamente. Esta co1npetencia
sobrepasa la competencia gramatical chomskiana (conjunto de reglas abstractas e inconscientes,
independientes del uso) e incluye tanto la capacidad para manipular los signos lingüísticos (y los
significados, valores y creencias que trans1niten) como el 1nanejo de todos los códigos operativos en
la comunicación real: gestoSr posturas, mirada, etc. Como sefiala Hudson, algunas partes de la
co1npetencia comunicativa pueden atribuirse a principios prag1náticos tratados como universales en
.i

56 ÜRACIELA REYES METAPRAGMATICA. LENGUAJE SOBRE LENGUAJE, FICCIONES, FIGURAS 57

La conciencia metapragmática es requisito del funcionamiento pragmático: las f. Ah sí, ella es muy "bian". [exagerando la nasalización]
acciones que consisten en utilizar, en contextos determinados, con propósitos g. Le contesté que no me importaba.
determinados, los recursos lingüísticos para producir significado social están h. Anunciaron que iban a devolver los prisioneros.
controladas y cuestionadas por los hablantes, que se preguntan continuamente hasta
Lucy (1993) distingue otras formas de reflexividad: descripciones del propio
dónde les sirve el lenguaje para comunicarse, y cómo les sirve, y lo usan lo mejor que
discurso (por ejemplo, las que hacen los verbos performativos), referencias al
pueden, sin ocultar esos escrúpulos, forzándolo cuando hace falta, explotando sus
intercambio verbal por medio de deícticos, uso de nombres propios (que se refieren a sí
posibilidades más allá de las normas, o, a veces, usándolo 1nal, infravalorando. sus mismos), etc. También nuestros sistemas de cortesía, que incluyen formas de
capacidades por carencia de saberes lingüísticos, de fe o de energía. Es habitual
atenuación, impersonalización, etc., se originan en nuestra conciencia 1netapragmática,
comentar lo apropiado o no apropiado de nuestras palabras y las de los otros, y
11 exacerbada cuando los actos de habla se consideran más amenazantes (véase el
dudamos, corregimos, analizamos nuestro propio discurso y el ajeno. La
Capítulo 1). El lenguaje está impregnado de refláividad, lo que tiene importantes
metapragmática estudia ese discurso reflexivo paralelo a casi todo discurso, no t¡mto
consecuencias para cualquier consideración pragmática del significado lingüístico.
como actividad social, sino sobre todo como un fenómeno que deja trazas en las
estructuras lingüísticas. Los análisis más conocidos de la reflexividad lingüística proceden de la lógica y
la semántica. En esta tradición se han deslindado las nociones fundamentales de uso y
Entre los indicadores de reflexividad se encuentran los que relacionan las
mención del lenguaje, la noción de metalenguaje y lenguaje objeto, y la distinción
estructuras lingüísticas con el contexto (por ejemplo shifters, morfemas de modo,
entre interpretación de re y de dicto. Estos análisis surgen de intereses muy diferentes
evidenciales), los que aseguran la conexión entre las partes del texto o el modo de de los de la pragmática: no se originan en la necesidad de entender las funciones
interpretarlo (conectores discursivos, contextualizadores, curva de entonación) y los
sociales y psicológicas del lenguaje, sino de la preocupación filosófica sobre la
que interpretan acciones lingüísticas, sobre todo los verbos de comunicación y las
capacidad del lenguaje para describir el mundo y por lo tanto ser vehículo de
estructuras de representación de discurso. Como se ve, los indicadores
conocimiento (cfr. Lucy, 1993, pág. 14). Esta perspectiva de la filosofia, de la
metapragmáticos se encuentran en todos los niveles estructurales, ya que la conciencia
lingüística, y, al menos en los primeros años, de la pragmática, ha impedido estudiar
metapragmática de los hablantes se extiende a todas las dimensiones del uso del
sistemáticamente el papel social y comunicativo del metalenguaje y de la
lenguaje (cfr. Verschueren, l 999b).
metacomunicación y su efecto en la estructura de las lenguas, restdngiendo los
Casi toda nuestra actividad metalingüística es metapragmática, puesto que tiene enfoques funcionales.
que ver con el uso apropiado del lenguaje. Los tipos más conocidos de lenguaje
El problema de la metacomunicación ha sido estudiado en semiótica, en teoría
reflexivo son, tal como los describe Lucy (1993, pág. 17), los comentarios sobre
de la comunicación y en sociolingüística (véanse, entre otros, Bateson, 1972;
regularidades del lenguaje y las imitaciones y reformulaciones de discurso. Enunciados
Goffrnan, 1974, 1981; y Silverstein, 1976, 1993). La capacidad de metacomunicarse,
como los siguientes son ejemplos del primer tipo de actividad, entre muchísimos otros
es decir, de comentar la propia comunicación y la relación entre los hablantes, es
posibles:
indispensable para la comunicación. A su vez, la fuución metalingüística es una de las
( 1) a. "Caber" es un verbo irregular. propiedades esenciales del lenguaje humano, y hace posible los tratamientos artísticos
b. "Banquina" y "arcén" son sinónimos. de la palabra y la existencia de una institución literaria. La autorreferencialidad del
c. Algunas lenguas no tienen pronombres equivalentes a "tú" y ''usted". lenguaje es una de las funciones reconocidas en el difundido modelo de Jakobson
Las reformulaciones e imitaciones se producen en enunciados como los (1960), que distingue la función referencial, la emotiva, la conativa, la fálica, la
siguientes (que proceden de conversaciones): metalingüística y la poética.
(2) a. Había un, digamos, "clima'', favorable. Lucy indica que tres de las funciones más importantes del lenguaje reflexivo son
las siguientes: organizar el discurso, señalando incluso tipos especiales (narración
b. No sé si "angustia" es la palabra más apropiada para describir lo que siento.
personal, poesía, etc.); representar otros hechos de babia (discurso directo e indirecto);
c. Le dijo, literahnente, "get out ofhere". representar la estructura del código (glosas) (1993, pág. 29). En este capítulo voy a
d. ¿Así que "se olvidó", eh? referirme a la segunda función, que llamaré "representación de discurso".
e. Ese es un asunto desmoralizante, como tú dices. Primero, dos palabras sobre mis elecciones terminológicas. La expresión
"representación de discurso" me parece más adecuada que "discurso referido" porque
los modelos de Gricey de Sperbcr y Wilson, presentados aquí en el Capitulo 1. (Cfr. Hudson, 1996, esta se limita a los texto&-parrativos, y mejor que "reproducción de discurso" porque
pág. 224). "reproducción" podría dar a entender una versión idéntica a otra, y no meramente
i 58 ÜRACIELA REYES METAPRAGMATICA. LENGUAJE SOBRE LENGUAJE, FICCIONES, FIGURAS 59
1

silnilar. El término "traslación" es inaceptable por sugerir un 1nero cambio de descriptivas se incluyen descripciones de estos tres tipos de retransmisión tomando
contexto, y la cita es 1nucho más que eso. "Representación" no carece de también como fuente de datos los textos literarios.
¡:··
.,
connotaciones indeseables; la peor de todas es la de "copia exacta" de un original. Pero La utilización del relato literario como material exclusivo para estudiar los
:,,. no tenemos otra palabra mejor, más amplia y que recubra un proceso, el de citar, que mecanismos de cita ha tenido algunas consecnencias negativas fuera de la narratologia
¡1; puede realizarse de diferentes maneras y con diferentes propósitos, pero que se y la literatura. En primer lugar, ha creado la falsa impresión de que los estilos directos
1 ~i 1
caracteriza por crear una semejanza (real o ficticia) entre un texto y otro, como e indirectos son más frecuentes, interesantes o significativos en la literatura que en la
veremos más abajo. Fludernik considera que el término "representación" tiene la vida diaria del lenguaje. La segunda consecuencia es que esta tradición de análisis y su
.1; ventaja de admitir el reemplazo por "estrategia" (estrategia retórica, mimética, etc.), prolongación en las gramáticas descriptivas han impedido asignar importancia teórica
,i¡ ,,:1 lo que nos acerca más a las funciones de las citas en los textos (Fludernik, 1993, pág. adecuada al lenguaje reflexivo y a su penetración en todo tipo de textos. En tercer
:1 16). A lo largo de este capitulo, la expresión "cita" se usará en el sentido más amplio e lugar, la atención dedicada al lenguaje literario, como si este fuese modelo de otros
i,' i1, ¡I
111
'I
'. iil. inclusivo: se referirá a cualquier tipo de representación de discurso, a la actividad de 'i usos, ha impedido analizar adecuadamente, hasta hace pocos años, la relación entre el
1,
' l!I
1 representar discurso y a su resultado. En ningón caso debe entenderse este término con texto original y el texto reproducido. En los relatos literarios las citas que hace el
,,il!·' el sentido restringido que se le da en el lenguaje corriente, donde indica, por lo general, narrador no tienen ningún "original", y debemos considerar que la versión que leemos,
i reproducciones literales. Uso "cita" corno denominación que recubre todos los
1 1 salvo clara indicación en contrario, es fidedigna, ya que el narrador nunca miente.
1: procesos de representación, más o menos miméticos o parafrásticos, incluso aquellos Todas las citas son ficticias, y todas son ciertas, en el mundo ficticio del relato. Lo
::
I',. !! que tienen manifestaciones apenas visibles en la superficie textual. importante es que la cita satisfaga las necesidades de verosimilitud interna de la obra y
I'
La representación de discurso por medio de discurso ha sido tema, todas las regulaciones del contrato inicial de lectura.
tradicionalmente, de los estudios literarios, y por lo tanto se ha analizado de La concentración en relatos literarios llevó a proponer (explícita o
preferencia en los relatos literarios. Esta tendencia está justificada, ya que la literatura implícitamente) que las citas de la conversación eran distintas, en cuanto a la relación
no solamente contiene representaciones de lenguaje, sino que, por su índole, consiste con el original. Es verdad que, aunque en el uso cotidiano del lenguaje tampoco
en la representación de lenguaje en uso (cfr. Reyes, 1984). En un libro reciente, Mey tenemos acceso, o pocas veces lo tenemos, a las versiones originales de lo citado, nos
(1999) considera que el tema central de la pragmática literaria es lo que él llama preocupamos, a veces, por cuestionar la relación entre lo que se dijo originalmente y lo
voicing, vocalización. Segón Mey, escribir literatura es vocalizar experiencias, dar voz que alguien reproduce con cualquier tipo de procedimiento sintáctico, y también
a puntos de vista sobre una realidad imaginaria. "Voz" es la articulación de un punto podemos preguntamos si existió o no el texto original presupuesto por la cita. "¿Lo
de vista, de una manera de mirar el mundo ficticio. Cada voz es el conjunto de dijo así?", "¿dijo eso, en serio?", preguntamos cuando nos cuentan un chisme, y no
propiedades de una instancia focalizadora, es decir, es la expresión coherente de un hay insolencia en la pregunta, ya qne, por nn lado, sabemos que es dificilísimo
punto de vista desde el cual se narran los hechos o expresan los sentimientos, y entre recordar palabras, y, por otro, estamos acostumbrados a producir y a aceptar
esas voces hay que contar también la del lector del texto, "citado" (representado) en la continuamente, en la conversación, reproducciones de palabras nunca dichas, y por lo
obra. Dice Mey que el principio central de la interpretación literaria es la distinción tanto tenemos derecho a exigir garantías, si la situación lo requiere. Pero la norma es
entre voces, o sea entre subjetividades y por lo tanto sus experiencias: "Identifyingthe aceptar las ficciones, no pretender versiones fidedignas, como en los textos legales,
voice of the current speaker, knowing who is speaking, is the first and foremost académicos y periodísticos, donde sí las esperamos.
condition for understanding literature" (1999, pág. 188). En los últimos años los sociolingüistas, los analistas de la conversación y
Siguiendo esta inspiración, la pragmática literaria debe retomar la tradición de últimamente los antropólogos han desplazado el análisis de las reproducciones de
análisis procedente de la nrurntología, aportando, como hace Mey, una visión discurso a textos no literarios, especialmente a los relatos espontáneos, y han puesto de
pragmática del manejo y los efectos de las representaciones verbales y del papel del relieve muchos rasgos interesantes. Hay dos que son destacables: las citas de la
lector. Los análisis literarios de la representación textual se han concentrado hasta conversación son muy complejas sintáctica y estilísticamente, tanto como las litennias,
ahora en el trabajo citativo del narrador literario: cómo reproduce el narrador las y, en segundo lugar, estas citas, especialmente las directas, son, en gran proporción,
palabras de los personajes, qué mecanismos sintácticos se ponen de manifiesto, y cuál construidas o ficticias, con el beneplácito de los hablantes (véanse, entre otros, Tannen,
es la relación entre esos mecanismos y el intento de describir la subjetividad. Tanto en 1989; Sternberg, [982; Reyes, 1984; Fludernik, 1993). En cuanto se usa el lenguaje
español como en otras lenguas europeas hay numerosos análisis de los estilos directos como icono de lenguaje surgen licencias que forman parte de la nonnativa social, y
e indirectos y de una variedad intermedia, el estilo indirecto libre. En las gramáticas aunque esta normativa no es explícita en todos los géneros, en todos revela la
60 GRACIELA REYES METAPRAGMATICA, LENGUAJE SOBRE LENGUAJE, FICCIONES, FIGURAS 61

conciencia metapragmática de los hablantes, que conocen las limitaciones de la The tapie of a speaking person has enormous importance in everyday life. In
actividad de reproducir y evaluar lenguaje y sus funciones comunicativas. real life we hear speech about speakers and their discourse at every step. We cango so
La constante manipulación del lenguaje en repeticiones, glosas, alusiones, far as to say that in real life people talk most of al! about what others talk about -they
comentarios, etc. abre una serie de cuestiones importantes para la pragmática. ¿Cómo transmit, recall, weigh and pass judgement on other people's words, opinions,
tratan los hablantes el lenguaje cuando el lenguaje mismo es el tema (o uno de los assertions, information; people are upset by other's words, or agree with the1n, contest
temas) de la comunicación?, ¿cuáles son las convenciones que regulan la producción e them, referto them and so forth. Were we to eavesdrop on snatches ofraw dialogue in
interpretación de imágenes lingüísticas en el discurso?, ¿con qué propósitos manipulan the street, in a crowd, in lines, in a foyer and so forth, we would hear how often the
los hablantes las imágenes de lenguaje?, ¿según qué principios pragmáticos se words "he says", "people say", "he saíd", are repeated, and in the conversational
interpretan las citas? Para responder a ese tipo de preguntas, señalaremos los rasgos hurly-burly ofpeople in a crowd, everything fuses into one big "he says ... you say ... I
'
más importantes de las citas y de su interpretación, tomando como punto de partida el '1 say" (... ) One must also consider the psychological importance in our lives of what
lenguaje coloquial. others say about us, and the importance, for us, ofunderstanding and interpreting these
Una breve anécdota puede servir de introducción a un tratamiento pragmático
J words ofothers. (Bakhtin, 1981, pág. 338).
·i En este capítulo voy a esbozar un tratamiento pragmático de la cita y a presentar
de la cita. Un amigo mío, que practica el trabajo intelectual con mucho rigor, estaba á
punto de terminar el manuscrito de su primer libro, y me confesó que le daba miedo un esquema general de las actividades reflexivas centradas en la representación de
publicarlo. "¿Miedo a qué?", pregunté yo. "Miedo a que me citen mal", contestó. otros textos. Haré hincapié en el valor ficcional de las representaciones, es decir, en los
Y o misma estoy citando las palabras de mi amigo de forma incompleta y acuerdos tácitos de los hablantes sobre el estatus que tiene cada texto representado,
probablemente inexacta, aunque recuerdo bien que usó esa frase. Su miedo está acuerdos que se derivan, en parte, de expectativas generales sobre el comportamiento
justificado, ya que es imposible citar completamente "bien": la tergiversación de lo comunicativo, y en parte de las convenciones de cada género textual.
citado es un aspecto inevitable del proceso mismo. Aun cuando se cita con fidelidad al El tratamiento de los textos refleja, mejor que ninguna otra actividad, las
texto original, lo citado es, por fuerza, solamente una parte del acto lingüístico donde normativas metapragmáticas, y estas comprenden ideas sobre el lenguaje y su función
estaban las palabras citadas, ya que la reproducción no puede incluir ni todo el en la acción social, incluso sus funciones políticas, a las que aludimos en el capítulo
contexto ni todas las intenciones, connotaciones, recuerdos de conversaciones anterior. En lo siguiente tendré que dejar a un lado el aspecto político de la citación,
anteriores o, en los escritos, de lecturas anteriores, etc., que intervienen en los procesos que comprende cuestiones como las siguientes: con qué fines de legitimización de
de producción e interpretación. Si algo nos ha enseñado la pragmática, es que casi autoridad se citan miméticamente ciertos discursos; qué discmsos se consideran dignos
nunca todo lo que decimos está en las palabras que elegimos pronunciar, sino que esas de citarse y cómo; para qué se cita en la oratoria política (cfr. Parmentier, 1993); para
palabras suscitan muchos otros significados, algunos solamente recuperables en el qué se reconstruyen, en todo tipo de textos, enunciados nunca dichos; qué funciones de
contexto, cuando esto es posible, y otros no atribuibles al hablante, sino a su cohesión y coherencia cultural tienen las citas en los discursos públicos; quiénes tienen
interlocutor. Por lo tanto, la reproducción de un discurso, y más si se hace, como en mi poder para citar, y cómo.
caso, repitiendo algo dicho oralmente, es siempre incompleta, a veces superficial, y
potencialmente errónea. Al mismo tiempo, y cualquiera sea su relación con el texto
original (si tal texto existe), la cita puede transmitir un modo de hablar o de pensar 2. LA NOCIÓN DE LENGUAJE SEMEJANTE
típicos, o reflejar, metafóricamente, sentimientos, actitudes, estados de ánimo de
manera económica y acertada. Lo veremos más abajo.
Voy a llamar "cita" a la representación lingüística de un enunciado o un aspecto
Todo lo que decimos o escribimos está expuesto a ser citado, y por lo tanto de un enunciado, es decir, a la conversión a texto de una parte de una acción lingüística
"mal" citado, como teme mi amigo. Nadie que use el lenguaje se escapa al destino de anterior, posible o imaginaria. La parte citada puede ser una expresión, una idea, una
reproducir palabras o conceptos ajenos y de que sus palabras sufran el mismo intención comunicativa, una presuposición, una implicación, ya que atribuhnos a otros
tratamiento, porque citar es una parte fundamental de nuestra conversación cotidiana y no solamente palabras efectivamente pronunciadas, sino significados implícitos e
de otros géneros: los escritos académicos, la prensa oral y escrita, los relatos
intenciones de querer decir algo. La cita es texto en texto y también texto sobre texto,
históricos, la ficción literaria.
dado que realiza una interpretación y un comentario (explícito o no). En algunos casos,
Como ha estudiado Bajtin en un trabajo clásico, la mayor parte del tiempo citamos solamente el código, como cuando decimos cosas del tipo de "'can' significa
hablamos de lo que dicen otros: 'perro"'; a esta actividad,\a llamaremos glosa. La glosa es un proceso metalingüístico
(cita de lenguaje), y suele manifestarse como un componente de otras citas, las más
62 GUACJELA REYES METAPRAGMATICA, LENGUAJE SOBRE LENGUAJE, FICCIONES, FIGURAS 63
'
1

!' .
i: frecuentes, que son metapragmáticas, porque comentan el uso de las expresiones Aunque es casi siempre imposible determinar exactamente la relación entre el
citadas, como los ejemplos vistos en (2 a.- e. ), en los cuales se cita una expresión y se texto anterior (o ficticio, o posible) y su reproducción, una descripción adecuada de la
'¡,
'i·
comenta su propiedad o adecuación. Toda cita retiene cierta opacidad, pero el lenguaje representación de discursos debe hacer lugar a toda la complejidad del fenómeno, que
i reproducido se usa para algo, de modo que opacidad y transparencia (referencia al permite tanto las sutilezas de la mezcla de voces y perspectivas en la literatura cuanto
'11
mundo) coexisten, en proporciones que varían según los géneros, las intenciones, los toda clase de abusos. El lenguaje es un arma cargada y las manipulaciones del lenguaje
contextos. son todo lo peligrosas que sugiere esa imagen. A veces, el proceso de representación
Por lo general, la cita realiza una recontextualización: una ~'pragmatización" de textual incluye la definición de la fuerza ilocutiva del pasaje citado. Supóngase que
lo ya (real o supuestamente) "pragmatizado", de lenguaje usado. En estos casos, la escuchamos un fragmento de conversación entre dos desconocidos, o que encendemos
cita consiste en la reproducción y comentario, más o menos explícito, de palabras o la televisión en el momento en ,que un personaje de una película le dice a otro:
pensamientos (a veces, percepciones verbalizadas) que han sido ya contextualizados o (3) Te vas ...
que se presentan de ese modo. Imaginemos que la frase es dicha con una entonación suspendida al final, de
Hemos dicho que la cita es la conversión a texto de alguna parte -solo alguna modo que no está claro si es una afirmación o no. Según una serie de inferencias de las
parte- de una acción lingüística anterior o posible. Muchos estudios gramaticales y que somos responsables, al citar esas dos palabras podemos adjudicarles fuerza
literarios de este fenómeno parten de una concepción puramente referencial, ilocutiva:
descriptivista, del lenguaje: estos estudios tratan proposiciones originales y "referidas" (4) a. Le reprochó que se fuera.
como si la comunicación fuese un intercambio de proposiciones y citar fuese sacar una b. Le ordenó que se fuera.
proposición de un sitio y trasladarla a otro sitio. La comunicación, es, por el contrario,
c. Le preguntó si se iba.
una acción dentro de constelaciones de acciones, y el significado lingüístico tiene
varias realizaciones y potencialidades en cada acto de empleo de la palabra. Es preciso d. Le pidió que confümara si se iba.
La función metapragmática de los verbos de comunicación es clasificar las
tener en cuenta todos los niveles del significado lingüístico para poder teorizar sobre la
cita. En principio, tendríamos que poder determinar qué aspecto se ha citado, y qué ¡ acciones comunicativas. Algunos verbos son neutros, especialmente decir, que no
impone una interpretación del acto de habla, pero sí crea una enunciación que quizá no
nuevo significado adquiere lo que se ha citado, una vez sometido a nueva 1¡j
contextualización. Es posible, por ejemplo, citar una implicatura de algo dicho, en ,¡
ha existido en realidad. En todo caso, la representación de discurso es mucho más que
,¡ cambiar de sitio una proposición, manteniéndola más o menos intacta en el traslado.
lugar de lo dicho, o, por el contrario, se puede citar la expresión dicha sin incluir la
implicatura correspondiente, que se perderá, al desaparecer el contexto original. Es, más bien, evocar una proposición, que puede ser posible o imaginaria, y hacerla
Los abogados conocen bien los riesgos de las implicaturas perdidas o falsas de funcionar en un nuevo contexto, con algún propósito y sin garantías de fidelidad, salvo
las citas, como puede comprobarse observando las preguntas, aparentemente en casos contados.
superfluas, que hacen a los acusados y testigos en las vistas. Tales preguntas parecen La semejanza entre dos proposiciones o expresiones se explota para comunicar
superfluas porque pretenden hacer explícitas las implicaturas, como ha señalado algo, de modo que cada versión de un texto citado adquiere significaciones nuevas, sin
Levinson (1983, pág. 121 ), lo que, en nuestra conversación habitual, sería inadmisible dejar de ser similar en algo al texto que le da origen. En el trabajo lingüístico hay una
(gracias a las implicaturas nos comunicamos con 1nás eficiencia, y sacarlas a relucir constante intertextualidad. No siempre se puede distinguir la palabra ajena de la propia
sistemáticamente a1ruinaría la comunicación). Pero en un juicio, si la expresión María (ni existen, rigurosamente hablando, palabras "propias" y palabras "ajenas"). En cada
es alérgica a las rosas implica fuertemente, en contexto, que María no estaba con el texto hay huellas de muchos otros, incluso los textos posibles. El lenguaje es de todos
acusado a esa misma hora, un abogado puede preguntarlo, para lograr un y al usarlo, inevitablemente, tenemos que usar lo usado, reproducir fragmentos de
pronunciamiento explícito sobre el asunto, que pase a la versión escrita de la vista y discurso: como ha mostrado Bajtin (1981) en su trabajo sobre la "heteroglosia" o juego
luego se pueda citar "literalmente" y usar a favor o en contra del acusado. Aunque la de voces intratextuales, la heterogeneidad enunciativa, la oscilación entre puntos de
implicatura sea evidente para todos, no se puede citar luego "literalmente". Un vista y expresiones propias y ajenas, es parte constitutiva de ese lugar de interacción
procedimiento inverso a este de hacer explícito lo implícito es forzar a alguien a decir, social que es un enunciado.
explícitamente, algo que al citarse "textualmente" produzca, fuera de su contexto, Entre los propósitos más frecuentes de los hablantes que citan figuran relatar lo
implicaturas indeseadas, como podemos ver todos los días en la prensa poco que otro dijo o pensó; aducir la fuente de una afümación; describir el modo de ser,
escrupulosa. sentir o pensar de una persona o grupo; y, en casi todos los casos, mostrar alguna
actitud propia, que pueéle ir de la adhesión total al rechazo y ridiculización del
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64 ÜRACIELA REYES METAPRAGMATICA. LENGUAJE SOBRE LENGUAJE, FICCIONES, FlGURAS 65

pensamiento citado. De manera simultánea, se cita para expresar algo propio, en ¿Qué es, exactamente, lo interpretado? Según Sperber y Wilson, tanto los
proporciones muy variables según las intenciones comunicativas y el género textual, pensamientos como los enunciados tienen un contenido proposicional. Los enunciados
de modo que las palabras de otro nos expresan y nos expresamos a través de las no están lingüísticamente determinados (su contenido puede ser vago, insuficiente),
palabras de otros. Vamos entremezclando diferentes voces con la propia, en armonía o pero un pensamiento siempre está completamente determinado. Los enunciados
conflicto, y oscilamos continuamente entre la atribución y la apropiación de lenguaje. interpretativos serán más o menos fieles al contenido o forma proposicional del
Esto es así en la mayor parte de nuestras prácticas verbales cotidianas. La cita es un pensamiento representado.
fenómeno constante en géneros orales y en géneros escritos, aunque no siempre esté La semejanza entre las formas proposicionales del enunciado y del pensamiento
marcada por la gramática de las lenguas: en textos que interpretamos como citativos se mide por las implicaciones, tanto lógicas como contextuales, que ambas formas
pueden faltar verbos de cita, comillas, entonaciones diferentes, deícticos desplazados, proposicionales comparten. Las implicaciones lógicas son las que determinan el
etc. Nuestra capacidad para interpretar citas no marcadas de ninguna manera depende contenido proposicional de un enunciado aislado de todo contexto. Las contextuales
de los mismos factores de los que depende toda interpretación: conocimientos son las que se producen por la intersección de un enunciado y un contexto de
compartidos, inferencias sobre la situación y sobre las intenciones del hablante. supuestos y creencias que permite interpretarlo. Por ejemplo, en detenninado contexto
La única teoria pragmática que se ha planteado el problema de la reproducción los enunciados
! ¡:¡;-
¡ de discurso es la de Sperber y Wilson, donde se propone la noción de lenguaje (5) Eisa tiene treinta y ocho años.
1¡J interpretativo. Esta noción (que se aplica también a la ironía, como veremos en el
i 1 i' (6) Eisa tiene treinta y ocho años y medio.
1
i!~ ¡: capítulo siguiente), es, según indican los autores en el Posfacio a la segunda edición de
:• ' que difieren desde el punto de vista de las condiciones de verdad, producirán
" Relevance, fundamental para la teoria de la relevancia (1995, pág. 259). No es
los mismos efectos contextuales, pues darán una idea adecuada de la edad de Eisa. Las
necesario, sin embargo, aceptar el concepto de relevancia (con todas sus implicaciones
,¡:.: expresiones son literalmente distintas, pero dan a entender lo mismo en varios
de innatismo y de interpretación garantizada; véase el Capítulo 1), para utilizar la
contextos posibles, es decir, producen más o menos las mismas implicaciones. De ahí
,¡¡. noción relevantista de interpretación, que nos da acceso a la cualidad esencial de todas
su semejanza, que solamente puede evaluarse en contexto.
:111!
las citas: su condición de imágenes (de ser presentadas como imágenes) y Qos permite
111, ·
,¡"' salir del corsé gramatical: hay cita donde el lenguaje es interpretativo, no solamente en En el ejemplo siguiente de cita directa,
1

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los conocidos casos de discurso directo y discurso indirecto, dos categorías
gramaticales que no abarcan la extensión real del fenómeno. No es necesario, además,
que las palabras citadas hayan sido pronunciadas o pensadas por nadie realmente, basta
(7) El tonto me dijo "me quiero casar contigo".
para que el texto entrecomillado sea interpretado como una cita, debe entenderse
que hay una semejanza entre el contenido de lo citado y el texto original al que se
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1
con que se presenten así. La noción de lenguaje interpretativo es la única noción alude. Este texto original, las más de las veces irrecuperable, podria ser diferente o no
:,¡ll¡: pragmática disponible, y tiene la ventaja de mostrar la propiedad central del fenómeno existir, pero la cita es fiel en la medida en que el hablante garantiza un grado aceptable
,¡;: : '1: de la reproducción de palabras y sus dimensiones, que van más allá de los aspectos
gramaticalizados.
de fidelidad entre su enunciado y el pensamiento que ha querido representar o
reconstruir.
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i: :Ir 1
Según Sperber y Wilson, algunos enunciados -a los que llaman
"interpretativos"- no son representaciones de estados de cosas, sino de otros
Algunas enunciaciones interpretativas no atribuyen el pensamiento interpretado
a nadie, a diferencia de los casos típicos de discurso directo o indirecto, en que hay una
1 i 11 1!
enunciados, y su adecuación informativa en contexto, o relevancia, depende de que se fuente explícita o implícita del pensamiento o texto representado. La noción de
1 !: IJ,: interpreten como tales. Si se considera que tanto los pensamientos como los lenguaje interpretativo recubre, por lo tanto, fenómenos que no se tienen en cuenta
1 "I' enunciados son representaciones, estas representaciones pueden ser de dos tipos: cuando se tratan los estilos directos e indirectos.
!' ·i!' descriptivas e interpretativas. Las representaciones descriptivas describen un estado de Véase el siguiente ejemplo:
l ;¡! ;
1:!
cosas, por lo cual puede decirse que son verdaderas o falsas. Las interpretativas, en (8) (Llaman a la puerta. Juan se esconde en la habitación de al lado).
.' 1'
cambio, representan pensamientos, no estados de cosas, y no pueden ser verdaderas o
w falsas, sino más o menos fieles en su semejanza con el pensamiento interpretado .
9 Juan (a María)-¡No estoy!

¡i: I'
1 1i
L~ 9 En la teoría de Sperbery Wilson todos los enunciados, sean descriptivos o interpretativos, nivel es interpretativo o descriptivo. Resulta de esto que el concepto de descripción co1no
representación que puede evaluarse según propiedades veritativas es el más importante en sernántica,
I'~
"•
i,! ¡ '
son, básican1ente, interpretaciones del pensatniento del hablante, que puede ser, a su vez, una
descripción verdadera o falsa de un estado de cosas o bien una interpretación más o menos fiel de y el concepto de interpretación, o representación en virtud de seinejanza en el contenido, es la noción
otro pensainiento. En el nivel más básico, todo enunciado es interpretativo, y solo en el segundo fundainental de pragmática. (Wilson y Sperber, 1988, pág. 152).
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'1 66 GRACIELA REYES METAPRAGMATICA, LENGUAJE SOBRE LENGUAJE, FICCIONES, FIGURAS 67

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'¡''·"·I Maria (al que llama): -No está. 3. REPRESENTACIÓN Y EVALUACIÓN
El enunciado de Juan es una interpretación de lo que quiere que María diga: la
versión original es un enunciado imaginario, deseado por Juan. Cuando Maria lo usa, . Tod~ palabra citada, como afirma Volosinov (1973) en su trabajo
se lo apropia, lo recontextualiza y lo asume ante el que llama a la puerta. Juan, en 1mprescmd1ble sobre la 01ta, es palabra comentada, en alguna medida. Citar a otro es
cambio, no está afirmando nada sobre el mundo (su afirmación sería falsa y absurda), hablar con Y hablar contra -y todas las posibilidades intermedias, incluso un cambio
¡ sino meramente reconstruyendo otro enunciado, el que desea que Maria use. La cita es constante de punto de vista que da a ciertos discursos agitación y colorido.
1 1
la reconstrucción de otro enunciado, reconstrucción en la cual importa su calidad de Veamos un ejemplo de cita tomado de una conversación:
1 ¡·,' imagen de otro texto. (10) Ahora operan con láser.
Véase otro ejemplo del mismo tipo de cita, que tomo, modificándolo un poco,
La persona que emite (10) quiere que entendamos que eso se lo han dicho otros
de Wilson y Sperber (1988, p. 136):
en "".te caso particular porque así la infonnación tiene más peso, ya que proviene del
(9) a. Abogado (hablando al oído del acusado): ¡Ese dinero nunca se cobró! médico. La hablante asume la verdad de lo dicho, pero comunica también la
b. Acusado: ¡Ese dinero nunca se cobró! P.rocedencia de la.afirmación. En la conversación de la que extraje (10), el médico ha
Es el abogado el que cita, no el acusado, que afirma algo por su cuenta. Lo que sido menc10nado 1mnedrntamente antes, y se implica fuertemente que es la fuente de lo
el abogado cita no tiene más versión original que el enunciado que él quiere que su afirmado en (1 O). Obsérvense algunas posibilidades de construir el mismo enunciado
cliente emita: un enunciado deseado, propuesto, sugerido. Cuando el acusado lo usa, se siempre indicando una fuente, individualizada o no: '
lo apropia, lo asume, se compromete con la verdad de lo que dice: su enunciado es (11) Me dijo el médico que ahora operan con láser.
descriptivo. El abogado, en cambio, no está afirmando nada sobre el mundo, sino (12) Ahora operan con láser, dicen.
meramente reconstruyendo otro enunciado. Como ese enunciado (o pensamiento)
(13) Parece que ahora operan con láser.
suele ser ajeno, el hablante citador no se compromete del todo con su verdad,
(14) Evidentemente, ahora operan con láser.
solamente garantiza cierta fidelidad con el original, sea este real o provocado, como un
fantasma, por la cita misma. Todos estos ejemplos ilustran casos de testimonialidad o evidencialidad: alusión
Las citas, definidas, a mi juicio correctamente, a base de semejanza, pueden •.una fuente por medio de expresiones como parece que, al parecer, o bien mediante
considerarse figuras, es decir, expresiones que no reflejan de manera exacta otro texto 01ertos elementos léxicos o estructuras sintácticas, incluido el estilo indirecto estándar.
u otro pensamiento o percepción, sea del hablante o sea de otra persona, pero que lo En todos los casos, y c?n finalidades que variarán según los contextos, podemos
representan adecuadamente en contexto, de acuerdo con las necesidades del hablante, suponer que la hablante mtenta transmitir que su afirmación procede de otra fuente.
que usa esa cita para comunicar a algo, para contribuir al intercambio. Si la cita fuese Nmguno de estos enunciados, salvo (11), ilustra casos de "discurso referido", pero,
sie1npre reproducción exacta, no sería productiva, solamente serviría para conservar por supuesto, todos son citativos, en la medida en que se perciba la interacción con un
(superficialmente) textos o perpetuar visiones del mundo. Según los contextos, puede enunciado distinto, anterior, y, en el caso de (1 O), emitido por alguien identificable que
valer tanto una reproducción al pie de la letra de otro texto como una reproducción se ha mencionado antes. Los hablantes aluden continuamente a sus fuentes, y esto
muy libre, e incluso una reproducción ficticia de un texto original inexistente. Las citas prueba la importancia de asignar orígenes al discurso y salvaguardar nuestra
evocan textos, pensamientos, percepciones, y lo que cuenta, en la conversación y en responsabilidad. No solo queremos ser entendidos correctamente, sino también dar una
muchos géneros orales y escritos, es el valor comunicativo de esa evocación, no la imagen positiva de nosotros mismos, como personas dignas de confianza. En citas
como (10) el comentario metapragmático es implícito, y consiste en atribuir una
preservación de la forma o del contenido originales, o de ambos, si hay un texto
prop~sición a otros, aunque la proposición se asume totalmente (pero es muy diferente
original. Esto explica el modo laxo con que los hablantes tratan las citas: la semejanza
asu~1r lo que. se p~esenta como dicho por un experto que afirmar algo por cuenta
está subordinada a otros factores, y, en todo caso, importa transmitir,
prop~a). La atnbuc1on no se hace abiertamente, pero el contexto provee de datos para
metapragmáticamente, que hay alguna semejanza, es decir, que se abre un metanivel
1~fe~1rl~. En lo~ ejemplos (12)-(14) la intención de indicar otra fuente ha dejado trazas
en el cual se oye otra voz, otro punto de vista supuestamente reproducidos.
lmgiüsticas VISlbles, que permiten un estudio empírico del proceso de atribución (sobre
evidencialidad, véase Reyes, l 994b).
: ....
,
, i¡ 1 . Toda cita es, aunque sea mínimamente (como en (1 O)), un comentario sobre sí
1 ,, misma. Cuando no hay füsión de puntos de vista, la evaluación de lo citado se
manifiesta con mayor claridad, y a veces explícitamente. La actitud ante lo citado
68 ÜRACIELA REYES METAPRAGMATICA, LENGUAJE SOBRE LENGUAJE, FlCCIONES, FIGURAS 69

1
puede variar desde la adherencia total hasta la separación más sarcástica. Las_ citas se (18) (Juan actúa groseramente y María comenta su grosería diciendo:) Qué
'
impregnan de afectividad: de apoyo, de reservas, de rechazo. Véanse dos ejemplos amable es Juan.
inuy simples, procedentes de conversaciones: Lo que llamamos ironía es una actitud hacia una proposición, proposición que
(15) Ese es un asunto desmoralizante, como tú dices. se ha citado con el propósito de ridiculizarla. La hablante finge afirmar algo, que en
(16) Es un ejemplo "interesante", según la profe. realidad no afirma; lo que dice es representación de un enunciado que no está atribuido
En (15) hay evaluación positiva de la palabra "desmoralizante", que se a nadie en particular. Una cita como esta se distingue de otras sin atribución (por
considera aplicable y apropiada; en (16) las que hablan son dos alumnas que, si bien ejemplo la ilustrada por (8), arriba) en que la hablante muestra una actitud de
no son abiertamente críticas de la profesora, evocan la costumbre de esta de llamar ridiculización de sus propias palabras, para indicar que no pueden aplicarse
apropiadamente a Juan.
.
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"interesantes" a los casos complejos, dificil es; el ejemplo al que se refieren les resulta
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bastante incomprensible y por eso usan, con cierta ironía, la calificación que haría la
profesora, y esa expresión tipifica a la profesora y también al ejemplo. No hay, en todo
caso, asunción del término, sino cierta discordia y por supuesto un análisis del término 4. MODELO ESTÁNDAR DE LOS TIPOS DE CITA
mismo.
En los casos semejantes a (1 O), los hablantes asumen las proposiciones citadas En los trabajos sobre reproducción de discurso, las citas se estudian
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como propias, las adoptan, pue_den llegar a una fusión total entre su discurso y su punto exclusivamente en los relatos (sean literarios, periodísticos, o narraciones personales),
de vista y el discurso y punto de vista ajenos. Esta fusión se produce tanto en la y se distinguen en tipos según su estructura gramatical. La denominación "discurso
conversación diaria como en otros géneros, especialmente el discurso expositivo referido", que se emplea habitualmente en español, semejante a discours rapporté en
académico, que es un entramado de informaciones y puntos de vista de muchas francés o reported speech en inglés, abarca los modos de relatar palabras,
procedencias, algunas cuidadosamente marcadas, otras perdidas. Cu~nd~ la pensamientos o percepciones que se distinguen entre sí, ante todo, por la presencia o
compenetración de puntos de vista es total (o se presenta como total) es dificil ya ausencia de subordinación sintáctica: las citas directas no son subordinadas, las
percibir la cita como cita. A veces, por ejemplo, al describir creencias ajenas, indirectas sí lo son, como se ve en los ejemplos siguientes:
adoptamos un "tono antropológico", neutro, que disuelve las fronteras entre las
(19) Juan dijo: "Estoy cansado".
opiniones propias y las descritas, y presenta todo en el mismo plano. El siguiente
(20) Juan dijo que estaba cansado.
ejemplo procede de una carta personal:
(17) ... tienen ideas muy tradicionales. Una chica violada no va a encontrar La motivación pragmática que se atribuye a la cita directa es representar unas
marido nunca. Ha sido deshonrada y no merece ser esposa de nadie. palabras (o pensamientos) de manera fidedigna, aunque ya es un lugar común, en las
descripciones de estos fenómenos, admitir que en ciertos géneros, y en especial en la
La última oración es reproducción de una opinión ajena, pero se cita sin ningún
conversación las citas directas no reproducen sino que reconstruyen con mayor o
1
comentario. La hablante de (17) (que era en ese momento trabajadora social en un
menor libertad, o, simplemente, inventan, palabras y pensamientos. Si la cita directa
campo de refugiados) no suscribía la opinión expresada en su cita, pero tal
intenta rescatar el "sabor pragmático" de una expresión, reconstruyéndola, la cita
distanciamiento no estaba marcado de ninguna manera, tampoco en el entorno
indirecta es, por el contrario, un intento de trans1nitir el contenido semántico de un
lingüístico: formaba parte de los conocimientos compartidos por las dos interlocutoras.
texto anterior, sin respetar necesariamente su forma. Los deícticos funcionan de
Por supuesto, atribuir a la hablante de (17) la creencia de que una chica violada ha sido
maneras distintas en ambos sistemas (véase Reyes 1993).
definitivamente deshonrada sería una falsedad, ya que en el contexto está claro que no
es ella quien afirma tal cosa. Una correcta interpretación de (17) exige incluir la Desde su "descubrimiento" en la narrativa literaria francesa y alemana, el estilo
actitud implícita de la hablante, y por lo tanto dar carácter citativo a la frase que indirecto libre se ha añadido, como forma intermedia, a la dualidad directo-indirecto.
El estilo indirecto libre es el resultado de una mezcla de voces, la del narrador y la de
comentamos.
un personaje, ambas discernibles, aunque compenetradas sintáctica y discursivamente.
El caso más conocido de no adhesión es el de la ironía. En la ironía, el hablante
Por lo general, el estilo indirecto libre presenta los contenidos de conciencia de un
reproduce un pensamiento ajeno (en este ejemplo un enunciado que se usa
personaje (sus pensamientos o percepciones), o, menos habitualmente, sus palabras,
habitualmente para destacar una conducta socialmente aceptable) y se distancia de él,
intercaladas en el relato; el tiempo es el pasado de la narración, y no el presente que
poniéndolo en solfa:
correspondería a la subjetividad que se reproduce. La voz que narra no se interrumpe
para ofrecernos pasajes dramáticos en estilo directo, sino que actualiza la experiencia

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'1 70 ÜRACIELA REYES METAPRAGMATICA. LENGUAJE SOBRE LENGUAJE, FICCIONES, FIGURAS 71

del personaje incluyéndola en su narración, adoptando sus expresiones y estilo, y c. Dijo "me voy", muy mal, con mal tono, y que no tenía ningún sentido
también su sistema deíctico, especialmente Jos adverbios de tiempo y espaciales, que estar allí, así que eso, se iba.
contrastan brutalmente con el pasado del relato. La mezcla de perspectivas se La interfaz entre el indirecto libre y el indirecto es también fluida. Pero se
intensifica por Ja ausencia de verbo de comunicación introductor (en algunos casos, el mantienen las fronteras entre el indirecto libre y el directo. Aunque ambos reproducen
verbo de comunicación se pospone). Véanse dos ejemplos típicos: miméticamente la subjetividad ajena, el indirecto libre deja en suspenso si hubo o no
(21) Ahora tenía mucho, mucho sueño. hubo acto de habla o pensamiento, de modo que es radicalmente distinto del directo,
(22) Mañana era su cumpleaños, ¿se acordaría Tita de llamarlo? que finge reproducir unas palabras al pie de Ja letra, afirmando de ese modo (tenga o
no tenga verbos introductores de comunicación) que existió un acto de habla.
En (21), el adverbio deíctico ahora se refiere al presente del personaje que
padece Ja experiencia, sin interrumpir el relato: el imperfecto señala la confluencia Semino, Short y Culpeper (1997), en un estudio de las formas de traslación en
entre el pasado del narrador y el presente del personaje. La repetición de mucho, propia textos literarios y periodísticos, han añadido dos variedades, que, según ellos,
completan las formas de discurso referido que podemos encontrar en un relato: Ja
del estilo oral, produce el efecto de dejar oír la voz del personaje. En (22) ocurren
procesos semejantes. El adverbio temporal deíctico mañana, que indica futuro, se "narración de acción lingüística" y la "narración de voz". El primer tipo es el relato de
yuxtapone a era, tiempo verbal de pasado: el adverbio se origina en el personaje, el cualquier acción lingüística, pero no lleva reproducciones de palabras o de contenidos
pasado en el narrador. Como el imperfecto, por su aspecto imperfectivo, sirve para semánticos. El segundo tipo está todavía más lejos de la cita: es Ja mención de una
indicar el transcurrir de una acción, estado o proceso, sin atención a su principio o a su actividad verbal. Ejemplo de narración de acción lingüística podría ser el siguiente:
fin, es la forma verbal idónea para expresar el punto de vista doble del narrador, que (24) Paco se despidió.
retiene su perspectiva de pasado, y del personaje, que experimenta algo en su propio A su vez, (25) es un ejemplo de narración de voz:
presente (siempre a través del narrador). El estilo indirecto es implícito, ya que el (25) Ella no le habló.
narrador no menciona ningún acto de habla del personaje, solamente se pone en su Los autores eluden la expresión "representación de discurso" y usan en cambio
Jugar y hace como que ve el mundo desde su conciencia, sin garantizamos que el "presentación", lo que les permite, sin entrar en definiciones y recogiendo las
personaje sea realmente consciente de esas percepciones, y, menos aún, que sea capaz categorías tradicionales, recubrir mejor el campo de la narrativa, que es el que
de verbalizarlas. estudian. En su trabajo proponen categorías idénticas para la presentación de palabras
Este mecanismo de representación está documentado en el inglés oral, donde, al y para Ja de pensamientos o estados internos, de manera que presentan un esquema con
parecer, suele ser irónico (véase Fludemik, 1993). En español sus manifestaciones cinco categorías, que se duplican para aplicarse al pensamiento: estilo directo 10 ,
coloquiales son menos frecuentes y siempre discutibles, a mi juicio, y por eso, a falta indirecto, indirecto libre, narración de acción lingüística (o de pensamiento), narración
de análisis extensos del estilo indirecto libre en Ja lengua hablada, prefiero tratarlo de voz (o de estados internos). Este esquema, heredero de otros que también proponían
como un procedimiento no exclusivo, pero sí típico de Ja literatura y de otros géneros categorizar todas las formas de narración de discurso (por ejemplo McHale, 1978),
que recurren abiertamente a rasgos estilísticos propios de Ja literatura, como el intenta ser exhaustivo, respetando a la vez la ley de no multiplicar innecesariamente las
periodístico (véase Reyes, 1984, cap. 3). categorías.
Paralelamente al indirecto libre, se suele postular un estilo directo libre, que Desde nuestro criterio de semejanza, Ja narración de acción o pensamiento y Ja
carece de Jos marcos de cita del estilo directo canónico. De este modo, en el esquema de voz o estados internos (dos categorías útiles, sin duda, para estudiar Ja narración) no
habitual, el discurso referido tiene cuatro manifestaciones sintácticas: directo, directo son realmente citas, ya que no representan interpretativamente lenguaje o pensamiento,
libre, indirecto, indirecto libre. Varios autores insisten en que estas categorías forman sino que se limitan a mencionar hechos (externos o internos) de índole lingüística,
un continuum (véase, entre otros, Semino, Short y Culpeper, 1997; y Fludemik, 1993, clasificando el acto, pero sin reproducir ni su forma, ni su contenido, ni ninguna
pág. 283). A veces, en efecto, y sobre todo en Ja lengua hablada y, entre los textos combinación de ambos. Compárese (24), arriba, con (26):
escritos, sobre todo en el periodístico, el estilo directo y el indirecto se mezclan y (26). Paco se despidió. Dijo "adiós, mi amor" con lágrimas en los ojos.
confunden, y podemos encontrar casos como Jos siguientes, dos de los cuales proceden
Mientras (24) es un enunciado reflexivo porque categoriza Ja acción lingüística
de conversaciones, y otro de Ja prensa oral: de Paco mediante el léxico disponible, la segunda oración de (26) es reflexiva porque
(23) a. Dijo que estaba "muy cansada''.
b. El director de Ja Reserva Federal dijo que en el 2001 podría haber
10
"crecimiento más lento".,.pero no describió el proceso. (tomado de un noticia1io de En este 1nodelo, el discurso directo libre queda eliminado como categoría: es solmnente una
variedad del discurso directo. Cfr. Sernino et al., 1997, pág. 40.
televisión)
1

1'
72 GRACIELA REYES MBTAPRAGMATICA. LENGUAJE SOBRE LENGUAJE, FICCIONES, FIGURAS 73

crea otra instancia de un enunciado anterior, reproduciendo, en este caso, su forma. habituales y las propiedades distintivas de cada procedimiento. Para distinguir las
Hay reflexividad en ambos casos, pero solamente en uno hay cita. actividades que incluyen representación textual, atribuyo a cada actividad un nivel o
Semino et al. presentan como un problema la categorización de un ejemplo grado de reflexividad, según el siguiente esquema: el nivel 1 es el de la referencia
como el siguiente (que traduzco y abrevio): metalingüística; el nivel 2 es el de la referencia metapragmática; y el nivel 3 es el de la
(27) Según una fuente, seis vehículos blindados rusos fueron abandonados en referencia metapragmática con representación textual. A este último nivel pertenecen
llamas. las citas.
Para Semino et al., este podria ser un caso de estilo indirecto, pero no tiene el El cuadro 1 resume todas las prácticas, que se explicarán a continuación:
i :
' '
marco habitual, con su verbo introductor, o bien podria ser un caso de estilo indirecto
¡' libre, pero no posee ningún rasgo léxico o deíctico que garantice tal lectura. Actividad Manifestaciones Pr:opiedadcs Nivel de
i ,: Efectivamente, (27) no parece estilo indirecto ni estilo indirecto libre (mucho menos reflexividad
1·'"
1 este último, si nos atenemos a la descripción gramatical y pragmática propuesta GWSA 1
arriba). La solución de los autores es considerar (27) un caso ambiguo entre el estilo COMENTARIO 2
indirecto y el estilo indirecto libre. Creo que esta solución no es satisfactoria, sobre CONEXIÓN INTRA E Ddxis discursiva 2
todo porque (27) no es un caso aislado, sino un tipo frecuente de cita, en la lNTERTEXTUAL Patrones temáticos y rítmicos 2
i
¡'
conversación, en la prensa escrita y oral, en textos académicos, y merece ser SUMARIO DE ACCIÓN Narración de acció11 lingiifstica 2
distinguido de otras representaciones. El procedimiento ilustrado por (27) forma parte LINGÜÍSTICA Narració11 de estados b1temos 2
del sistema del "estilo cuasi indirecto", presentado arriba (cfr. (10) y (17)).
"Monumental"
Modelos como el de Semino y al., concentrados en la narración, dejan fuera no Expllcito/Impllcito
solamente mecanismos como el de (27), sino todos los que nos sirvieron para presentar Estilo directo Atribuido/No atribuido J
el fenómeno de lenguaje semejante, por ejemplo (9) y (10): RECONSTRUCCIÓN Narrativo
MIMÉTICA
(9) a. Abogado (hablando al oído del acusado): ¡Ese dinero nunca se cobró! "Monumental"
b. Acusado: ¡Ese dinero nunca se cobró! Implfcito
Eco
(10) Ahora operan con láser. Atribuido/No atribuido 3

Tampoco pueden tratarse, en este modelo y otros semejantes, nuestros casos Interactivo

(12), (13), (14), (15), (16), (17) y (18). '"'Monumental" y "sintético"


Implícito
La insistencia en estudiar la representación de discurso en la narración y Estilo indirecto Ubre
Alribuido y no abihuido J
siguiendo el esquema dual del estilo directo e indirecto, tanto en trabajos literarios
Narrativo
como gramaticales, ha impedido, hasta ahora, tratar adecuadamente casos de
"Sintético"
semejanza no marcados explícitamente (como (9) o (1 O)) o bien marcados por medio
PARÁFRASIS Explícito
de frases adverbiales, pero sin la estructura sintáctica de estilo directo o indirecto, Estilo indirecto
Atribuido 3
como (27). Debemos integrar todas estas manifestaciones en una descripción más
Narrativo
adecuada. "Sintético"

Estilo c11asi indirecto Expllclto/lmplfcito 3


Atribuido/No atribuido
5. LAS ACTIVIDADES REFLEXIVAS Narrativo e interactivo

Propongo a continuación un modelo general de las actividades reflexivas, o sea,


prácticas que consisten en la referencia a la estructura o al uso del lenguaje, entre las Se imponen dos advertencias inmediatas, familiares para todos los que trabajan
que se encuentran las que incluyen representación de discurso, ya sea que esta suceda en este tema. La primera es que las categorías tienen límites borrosos y además tienden
en textos narrativos o na narrativos. El modelo incluye las manifestaciones más a la promiscuidad. Nad~ impide que una glosa como "'Can' significa 'perro'"
incluya algún tipo de reíii·esentación, por ejemplo una imitación del modo en que
ÜRACIEI ,A REYES METAPRAGMATlCA. LENGUAJE SOBRE LENGUAJE, FICCIONES, FIGURAS 75
74
'¡·;·
11
alguien pronuncia la palabra perro. En los comentari?~ (del tip.o de En español ha~ he hecho en trabajos anteriores , no voy a llamar a estas conexiones intertextuales
varias fórmulas de tratamiento) puede haber tamb~en, y mas fácümente qmza, (realizadas implícitamente por 1narcadores discursivos o morfemas) "citas", sino que
fragmentos representativos. Ya hemos visto, ademas, que los estilos di~edos e voy a limitar aquí esta denominación genérica a los mecanismos que exhiben una
indirectos se mezclan y confunden. Pero recuérdese, sobre todo, que en las acl!Vldades reflexividad perteneciente a lo que llamo (arbitrariamente, por supuesto) nivel 3. A las
reflexivas del tipo 3 hay, en alguna medida, mención y uso del lenguaje, opacidad Y ligazones intertextuales podríamos denominarlas evocaciones, palabra algo vaga cuyo
transparencia, porque lo que se muestra (menciona) también se usa Pi:'.ª expresar algo contenido se superpone al de cita, pero que puede servir para no perder de vista que un
(véase Reyes, 1984, cap. 1). Solamente atribuyendo a la glosa la func10n de refenrse al elemento lingüístico puede provocar la presencia más o menos invisible de otro
código podemos distinguirla, aunque la distinción sea algo precana, del resto de las elemento sin que haya propiamente representación, o, al menos, sin que se 1nanifieste
citas metapragmáticas. la intención de explotar la semejanza entre dos textos para comunicar algo. Así, para
La segunda advertencia es que he recogido las categorías tradici~naks, bien poner un ejemplo, el anafórico tal evoca una descripción anterior de situación, es
conocidas, de estilo directo, indirecto e indirecto libre, y he agregado, s1gu1endo el decir, evoca una proposición no representada pero sí evocada, en un caso como (28)
mismo esquema, la de estilo cuasi indirecto, pero que no debe olvidarse que es~?s (cfr. Reyes, l 994a):
mecanismos de cita tienen origen sintáctico, no pragmático. Es cierto que la dimens10n (28) Llegados a tal situación, no les quedó escapatoria.
i.
• I, pragmática de cada actividad está relacionada con su est~ctura: el estilo indirecto Veamos primero cómo se manifiesta la deíxis discursiva. Hay en muchas
i.
libre, por ejemplo, es implícito porque carece de verbo ml!·oductor, aunque esta lenguas expresiones lingüísticas, llamadas generalmente conectores, que tienen la
implicitud alcanza a otros aspectos, como la incertidumbre sobre el acto de habla o de propiedad de señalar la presencia de un texto ajeno a la conversación pero accesible,
i.' pensamiento, que trataré abajo. En todo caso, las propiedades ~~e he mclmdo en m1 evocado por el hablante. También cumplen esa función ciertos morfemas de tiempo y
cuadro son sintáctico-pragmáticas, y requieren una exphcac10n, que !fé dando a de modo.
medida que considere las categorías del cuadro l. Los casos más simples de conexión son los que reflejan la necesidad de ir
Las funciones discursivas de estos tipos de práctica dependen de los géneros ligando lo que se dice a lo ya conocido o recuperable en el contexto, para asegurar la
textuales y de las necesidades comunicativas de los hablante~, y quedan fu~r~ de los comprensión y el procesamiento adecuados de la información nueva. Las
temas de este capítulo. Pero sus características nos darán una idea de sus pos1b1hdades presuposiciones, por ejemplo, realizan deixis intra e intertextual. La lengua posee una
funcionales. serie (larga) de mecanismos para que el hablante presuponga información y el oyente
Voy a indicar ahora algunos rasgos de cada actividad, sus manifestaciones Y pueda procesarla como información ya existente en su memoria, o bien creada como
características. La glosa y el comentario ya han sido presentados arriba, en 1, Y no nos resultado del acto de presuponerla. Véase el siguiente ejemplo:
interesan directamente, por no ser procesos representativos. La noción de conexión (29) Lamento que Irene se jubile.
intra e intertextual requiere una breve explicación, que daré inmediatamente, Y En la emisión de un enunciado así se presupondría, en virtud del verbo factivo
pasaremos luego a discutir algunos rasgos de la mimesis y la paráfrasis. lamentar, que Irene se jubila, ya que el hablante presupone o finge presuponer que el
interlocutor ya posee ese conocimiento, evocado para añadirle un comentario, el que
hace el verbo factivo. Lo mismo sucede en (30):
5.1. Conexión intra e intertextual (30) Fue en Barcelona donde me propuso casamiento.
La proposición presupuesta - '1ne propuso casa1niento' - es evocada mediante
Los textos orales y escritos con los que nos comunicamos diariamente serian una construcción escindida. Lo demás -que el hecho tuvo lugar en Barcelona- se
incomprensibles si no estuvieran interconectados entre sí, y si carecieran, además, de ofrece como información nueva. En estos casos, y muchos otros posibles (que pueden
conexión interna entre sus partes. Como el lenguaje sirve para hacer textos, su verse en Levinson, 1983, cap. 2), el hablante evoca un texto, implícitamente afirmado,
estructura refleja las presiones de esa función. Todas las lenguas poseen dispositivos
léxicos y sintácticos para referirse al texto mismo y a otros textos, y de este modo 11
Siguiendo una tradición de análisis influida por los trabajos de Ducrot (1985) y otros, en
asegurar las conexiones indispensables para la comunicación. Contrariamente a lo que esos trabajos yo hablaba, en estos casos, de "citas implicitas" (cfr. por eje:tnplo Reyes, l 994a). Creo ·¡¡
que esa deno1ninación es demasiado vaga, y que el crunpo designativo de cita es ya bastante a1nplio !~¡
si se emplea, como hago aquí, para agrupar a todos los casos en los que se puede inferir que el .1
;1¡
hablante produce imágenes.-de otros textos, con el propósito de explotar la se:tnejanza de la
reproducción para algún fin comunicativo. 1

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¡,
ÜRACIELA REYES
76 METAPRAGMATfCA, LUNGUAJESOBRELENGUAJE, FICCIONES, FIGURAS
77

",¡
sobre el que engarza otro, realizando así una intertextualidad elemental, que es sujetos a d.iversas normativas, preferencias y rechazos, la intertextualidad alcanza '
'
imprescincible para el desenvolvimiento del acto comunicativo. Por supuesto, muchas mamfestac10nes muy complejas. . 1

de las proposiciones evocadas de este modo pueden encontrarse en otros lugares del . La intratextualidad, o conjunto, de relaciones del texto consigo mismo tiene
texto, y en ese caso las presuposiciones realizan, propiamente, ligazón intratextual. también su gramática y sus procedimientos pragmáticos. Disponemos de una s.rie de
El valor metapragmático de los conectores intertextuales ha sido sefialado hace conec.tores ( conjuncione~ y organizadores textuales), deícticos y, además, sinónimos,
ya muchos afias (midiendo el tiempo con la perspectiva juvenil de la pragmática). antómmos Y construcciones elípticas que evocan partes del texto y permiten
Conectores como puesto que, así que, ya que, como, en vista de que fueron estudiados conJuntarlas con lo que se está diciendo, asegurando así la cohesión imprescindible.
por Ducrot (1980, 1984) como huellas de la enunciación en el enunciado, o, en otras
palabras, como deícticos discursivos. 5.2. Reconstrucción mimética '!,
Algunas expresiones y morfemas pertenecen a un tipo específico de conectores,
los evidenciales, cuya función general es indicar la procedencia del conocimiento del
hablante, y justificar (o limitar, o salvaguardar) el alcance de su afirmación y por lo " . .~ay un princip.io general de pragmática, que podríamos llamar algo así como
tanto su responsabilidad. Dentro de este grupo, los llamados "citativos" (traducción del pnnc!p~o de adecu~c1ón pragmática", que resulta de la condensación (heterodoxa) de
inglés quotative) son los que indican que lo afirmado procede de una fuente verbal (de las máx1.mas de Gnce (especialmente las de cantidad y relación) y la noción de
lo que dijo otro o dijeron otros, por ejemplo). En espafiol cumplen esta función una rel_evanc~a (considerada como "ganancia infonnativa", y 110 como propiedad
serie de adverbios y ciertas formas verbales que modalizan la proposición, ps1cológ¡~~, en este caso; cfr. aquí, Capítulo 1). Este principio especifica cuánta
orientándola hacía un discurso ajeno, anterior, que le sirve de origen, aunque quede mformac10n hay que dar y cómo debe ser esta información (qué conexión debe tener
implícito. Los siguientes enunciados, tomados de conversaciones, tienen una con el contexto Y_ con el propósito general de la conversación), para comunicar lo que
se qmere com':1mcar. 81 se me acepta la travesl)ra de conciliar lo inci:mciliable, de
1

calificación evidencia! (van en cursivas las formas lingüísticas que transmiten ese
modo trans1tono, p~ra proponer una ley mínima de adecuación contextual, podemos
1

significado): 11
suponer que este pnnc1p10 regula también el modo en que manejamos la semejanza
(31) Evidentemente, esta frase está mal traducida. ',,
verbal, o sea, la relación entre imágenes de textos. Según este principio la cantidad y 1

(32) Parece que no le aumentaron el sueldo. cualidad. o verd~d de la información deben ser adecuadas al contex;o: la cuantía
(33) Mañana volvía Paco de Madrid, ¿no? mformah."a pertmente es más importante que la verdad. Este principio explica la
(34) ¡Pero qué bien hablabas francés! aceptab1hd~d de enu~crndos que son solo aproximadamente ciertos, entre ellos
Estos ejemplos y otros, analizados en trabajos míos anteriores (véase Reyes, repres~ntac1ones de discursos ajenos vagamente semejantes a los originales, cuando
l 994b) realizan un comentario metapragmático: que la afirmación procede de otra hay ?ngmales. Desde este punto de vista, el hecho de que las citas directas o incluso
fuente. Esta fuente puede ser algo dicho por el interlocutor, o por otras personas, o por las ~nd1rectas sean reconstrucciones en lugar de imitaciones es perfectamente
un texto (una carta, por ejemplo, como era el caso en la conversación de donde exphcable, aunque no recurramos a las limitaciones de la memoria, a la mala fe de los
procede (33)). En el último ejemplo, el hablante contrasta su propia cognición pasada hablantes o a las necesidades retóricas de ser dramático para persuadir a otro: las citas
(que funciona como un texto previo) con su cognición presente, para realzar su son co~o .s~n porque su semejanza se regula por los principios generales de la
sorpresa, como ya hemos visto en el Capítulo 1, al hablar del imperfecto. comun1~ac1on, y a veces resu1:11ir libremente, esquematizar, tipificar el discurso ajeno,
Finalmente, debemos incluir en el grupo de deixis discursiva las expresiones ~onvert1: e':1 palabras estados mteroos, son operaciones más económicas y eficaces que
'
que contienen conectores como sin embargo, además, más aún, de todos modos, mtentar 1m1tar t~xtos escrupulosamente. Aquí la prag¡nática y la retórica convergen: :11
¡1·1
!
aunque, así que, y otros (véase Levinson, 1983, pág. 128 y Verschueren, 1999, cap. 6). mventar le?guaJe puede ser el mejor modo de comunicar algo, y por eso la
'1
metapragma!!ca de la conversa.ción lo permite implícitamente. Fluderoik dice que el
Las relaciones entre textos se verifican también en casos en que el texto
evocado es apenas visible. Este tipo de intertextualidad se manifiesta por la repetición
descmdo con que se tratan las citas en la conversación es como para que se nos pongan
12
"I,.¡,
de patrones temáticos y rítmicos, por las señales de obediencia a convenciones
los pelos de punta • Este efecto horripilante (presentado por Fludernik, cordialmente, 'il,,,
'1.'I.
genéricas o por su transgresión, y por alusiones más o menos veladas a otros textos del .n
mismo género o de otros géneros. Como ningún texto existe fuera de constelaciones i 1,1
Escribe Flud7mi~: "Not only can one observe a truly hair-raising sloppiness and disregard
12
, '1
intertextuales, este tipo de conexión es continua. No es extraño que la intertextualidad for rehable representatlon In the eve~yday oral language, which would be unthinkable for written 1,1
sea un tema predilecto de.fa teoría y la crítica literaria, ya que en los textos literarios, genres. A more than cursor i'eflectton on the bases of speech and thought representation in the 1

complex processes underlytng so-called representation indeed points up serious incoinpatibilities ª'
'"i

·.~·-· -. ..
~ ~~- -------~-- ··-- -
78 GRAClELA REYES METAPRAGMATICA. LENGUAJE SOBRE LENGUAJE, FICCIONES, FIGURAS 79

como un punto de partida para estudiar mejor lo que ella Han:a las ficciones _del metapragmáticos implícitos derivados del que he llamado "principio de adecuación
lenguaje) se origina en una expectativa equivocada: la que consiste en esperar citas pragmática", interpretamos automáticamente que una cita indirecta es más fiel que
"verdaderas y fieles" en lugar de citas (semejanzas) eficaces. Podemos tratar todas ~sas una cita directa, especialmente en los géneros de la lengua hablada. Pero los discursos
manipulaciones de un supuesto discurso original -esquematización, condensación, indirectos carecen, regnlarmente, de dramatismo. Una versión indirecta de (35)
tipificación- estudiadas por Fludernik (1993, esp. cap. 8), como figuras, más produciría unos efectos muy distintos en el intérprete:
específicamente metáforas. Si bien todas las citas son metafóricas y ope;an por (37) Bérénice le dijo que se despedía de él por última vez.
aproximación y semejanza, esta condición es más evidente en las que exhiben un
Falta aquí lo que podríamos llamar "sabor pragmático", es decir, la entonación
intento mimético: los discursos directos, los ecos y el estilo indirecto libre, como está
del lenguaje presentado en uso, contextualizado, y sobre todo dotado de una voz
indicado en el Cuadro l. perceptible. Aunque tal presentación sea un engaño más, una ficción del lenguaje (cfr.
Los siguientes son ejemplos de estilo directo y de estilo indirecto, de cita Fludernik, 1993, pág. 11 ), esas ficciones cotidianas no son adornos ni juegos: son
13
mimética y de reformulación del contenido proposicional de otro enunciado : 1naneras eficientes de comunicar y por lo tanto de impresionar, conmover, etc.
(35) Bérénice le dijo: "Pour la derniere fois, adieu, Seigneur". (recuérdese que la dimensión perlocutiva de los actos de habla es tan importante, por lo
(36) Dice San Agustín que no sabe cómo explicar el hecho extraño de que no menos, como la elocutiva, para mantener la terminología tradicional de la teoría de los
sabemos que sabemos ciertas cosas (nescio qua ... scire nescimu~). · actos de habla).
Mientras (35) reconstruye un icono de unas palabras (una instancia de un tipo de De hecho, las citas directas raramente reproducen, en la conversación, palabras
enunciado), en (36) se reformula un pensamiento y, en este caso,_ ~iguiendo ~na realmente pronunciadas. Véase el ejemplo signiente, que procede de una conversación:
convención de los textos expositivos, se da entre paréntesis el texto ongmal traducido. (38) Él estaba ahí... mirando. Y yo "Ay Dios mío si él supiera", imagínate ...
(35) es un caso canónico de estilo directo, tal como lo ejemplifican las gramáticas. Las Las palabras que están entre comillas reproducen un pensamiento, o, más bien,
palabras citadas son literales (provienen de Bérénice, de Racine, donde se presentan un estado de ánimo, no verbalizado, posiblemente, por la hablante en el momento
como efectivamente pronunciadas por Bérénice). (36) es una reformulación del pasado al que se refiere, o no con esas palabras exactas, que son, en cambio, típicas:
contenido de un pensamiento, semejante (pero no idéntico) al texto original, que aquí, típicas de lo que podría uno decir en ciertas circunstancias. La cita es, pues, metafórica.
por excepción, aparece citado verbatim, pero parcialmente, entre paréntesis. En la conversación abundan las citas directas metafóricas, que transmiten vívidamente
La cita de (35) es "mimética" si entendemos que mimético significa solamente estados de ánimo, puntos de vísta, reacciones del nan·ador y de los personajes citados.
el fingimiento deliberado de mimesis. No se trata, sin duda, ni nadie la tomaría por tal, Como cualquier otra metáfora, las citas se interpretan por su similitud con el
de una reproducción fiel, ad pedem litterae, de las palabras de Bérénice. De hecho, pensamiento literal del hablante, que representan de una manera muy aproximada, pero
ignoramos cuál pueda ser la versión literal de un acto de habla que ~unca tuvo lugar .en tratando de respetar los requisitos de la cantidad y cualidad de la información necesaria
la realidad. Lo que importa es la ficción de mimesis, que crea un discurso 1magmano, en contexto.
y con él nos da acceso a una voz y a una emoción. En este caso, y ~~ reforzar la En el ejemplo signiente queda descartada una versión original del texto que va
ilusión de intimidad, el hablante citador adopta no solamente los deicticos, smo la entre comillas:
lengua de la persona citada, Bérénice. Aplicando el principio enunci~do arriba, esta
(39) No sé si algún día podré decirte "estoy lista, ahora sí''.
cita monumental, en el sentido de Volosinov (1973), o sea esta cita directa que
mantiene las forma supuestamente original de las palabras citadas, sirve para narrar Estas citas aproximadas pueden reproducir también materiales no lingüísticos, '1
una voz, recrear una subjetividad y hacernos espectadores directos de una escena. La como sonidos y gestos, y palabras atribuidas a animales o a cosas. En el siguiente
ejemplo, que tomo de Cameron (1998), la hablante atribuye ciertos pensamientos (o la
accesibilidad al drama estaría ausente en una cita indirecta o versión sintética, en la
falta de ellos) a su perro, que elige el camino más largo para llegar al plato de comida:
terminología de Volosinov, donde solamente se retomara una proposición y se la
parafraseara sin fingimiento de mimesis formal. Por lo general, y siguiendo principios (40) Si [el perro) tuviera un sentido común, podría analizar por allá es más largo
y por acá es más corto. "Yo tengo hambre. Voy por acá. Llego rápido''. O sea eso ... es
mi percepción visual al yo ver... ".
;¡:
between the doxa ofreproduction and reliable rephrasing and the praxis in the tnost dogmatically En la charla espontánea podemos dar una versión de un estado de ánimo 1
restricted areas of legal and journalistic discourse" (l 993, pág. 17). Después de un cuidadosísimo traduciéndolo a palabras supuestamente pensadas, o podemos inventar textos, o 1
análisis, Fludemikjustifica estas tendencias aduciendo principios cognoscitivos: véase su capitulo 8.
atribuir palabras a seres no hablantes, sin que se ponga en cuestión la máxima de
l3 He tratado estos ejemplos y algunos que siguen en un trabajo anterior, todavía inédito
(Reyes, 2001 ), pero allí los enfoco desde una perspectiva ligeramente distinta. verdad. El registro serüdnapropiado si se tratara de un relato en el que se esperan
ÜRAC!ELA REYES METAPRAGMATICA. LENGUAJE SOBRE LENGUAJE, FICCIONES, FIGURAS
80 81

secuencias de hechos presentadas objetivamente, y no dramatizaciones. Cuando ~egistro coloquial es más espontáneo o descuidado que en otros géneros escritos
ofrecemos tales dramatizaciones es porque presuponemos que el interlocutor tiene ec1r, se parece más al de la conversación cara a cara: ' es
tiempo, interés y disposición para adoptar una actitud participativa. Calculamos su (44) Dijo que su narcisismo le atraía y repelía a la vez.
aprobación, y queremos reforzarla, o bien intentamos crear esa aprobación, es decir, (45) La quiere mucho, según él.
acentuar nuestra "imagen positiva" o solidaridad (Brown y Levinson, 1987).
(46) Le reproché que fuera tan egoísta.
Hay citas directas, que debemos incluir en la categoría estilo directo, que no
(47) No, claro que no lo voy a llamar.
i"' pertenecen necesariamente a contextos narrativos, ya que no están articuladas
.1!·' sintácticamente con un verbo introductor de comunicación. Pero son directas, puesto (48) Me felicitaron por mi generosidad y devoción a la causa.
1 ;¡ que se interpretan como representaciones formales de textos y exhiben voluntad d 11 En (44), su narcisismo le atraía y repelía a la vez puede ser una reproducción
'1
e enguaje us~do por la persona que se cita, si tiene importancia comunicativa en
'
,. i
,, mimética. En ciertos géneros las citas directas deben tener un original semejante o
'' ·1:
idéntico: en la prensa oral y escrita, en los textos académicos. Cada género tiene un cont~xto, refenrse a la fonna de su enw1ciado. Pero no lo sabemos si no conoc~mo::~
;."I sistema de convenciones sobre cómo interpretarlas, lo que provoca ciertas expectativas ~ontex~/or supuesto, Y .to mismo pasa en los demás casos. La reproducción de la
',1 on_na e ~nuncrndo ongmal es más evidente cuando hay una diferencia de estilo
,;¡· i en los hablantes o lectores. En los textos expositivos no deben aparecer citas directas
•,i/ de tipo metafórico, así como no deben aparecer otros procedimientos que pondrían en registro o dialecto entre el hablante citador y el hablante citado En (48) · 1'
duda la objetividad del periodista o autor. En la conversación, en cambio, esperamos el ton? b~ocrático de mi generosidad y devoción a la causa ~ugiere ~:eº~:J::: ~~
'1,.:
! ¡·,
citas reconstruidas y metáforas de lenguaje que facilitan la comunicación y refuerzan una mta directa del texto de la felicitación. En la escritura estos casos son más
las relaciones entre los interlocutores. ambiguos que e~ la lengua oral, donde la entonación distingue por ¡0 general las
Las citas directas pueden incrustarse libremente en la oración: cualquier frase, voces del enunciado, especialmente en la conversación (véase oÜnthner, 1999).'
dadas las condiciones apropiadas, puede interpretarse como icono de otra: L?s ~cos ,~º~ "~on~mental~", ~orno todas las representaciones miméticas
(41) Me ordenó traer "mis proyectos". (donde, ms1sto, m1metico nunca significa "copia") Son tamb' · · ¡· ·
contexto · d · rá · · • 1en, 1mp 1c1tos y el
~os m 1ca s1 se atribuye'.1 o no a una fuente. Aunque algunos entienden ue
la ca.tegona eco abarca las representaciones de la forma y del contenido de un te~to
(42) Ella defiende a su Alfonsito.
(43) Lo que hay que hacer para parar la olla, que dhia mi padre. previo (por ejemplo Sperber y Wilson, 1998, pág. 296), en nuestro cuadro la noción de
En (41) la expresión entrecomillada tiene, en la conversación, una entonación eco se restringe a la repetición, más o menos fiel, iucompleta y caricaturesca de un
especial, que marca la cita. En (42) puede suceder lo mismo con Alfonsito, aunque el texto. ant~nor, y siempre dentro de un diálogo y con el intento de mostrar alguna
cambio de entonación no es imprescindible si el diminutivo solamente puede atribuirse ieacc1ón mmediata: de ahí que en el Cuadro 1haya usado el calificativo "interactivo"
a ella. En (43), se cita una expresión relacionándola con una persona, y se comenta ~~~l:~a~pone a "narrativo". El eco es una forma de repetición propia de la lengu~
que es aplicable también a la situación presente: se evalúa la situación presente a través
del punto de vista de otra persona y su frase típica para expresarlo; la situación y la (49) -Y entonces se cubre con la crema pastelera.
persona citada quedan tipificados. Cualquiera de los tres ejemplos puede adquirir valor
-Con la crema pastelera.
irónico, si el oyente interpreta que el hablante ridiculiza la relación entre el lenguaje y
(50) -Se van a casar.
el objeto mencionado (si Alfonsito no es inofensivo o encantador como sugiere el
diminutivo, por ejemplo). Estas citas no se atribuyen explícitamente a nadie, como -¿Casar?
sucede en el estilo directo canónico. Pero el contexto es suficientemente informativo. (51)-Y parece que el libro es muy bueno.
A veces no sabemos de cierto si el hablante pone énfasis o no en los aspectos -Muy bueno, seguro.
formales del enunciado ajeno, si no nos ayudan entonaciones o signos gráficos. En (52) -¿Lo llamaste?
esos casos, las atribuciones son mucho más vagas, o bien la cita puede quedar sin -¿Que si lo llamé?
atribución específica. También sucede que se crean zonas borrosas en el texto, y no se
(53) -Quis.i~ra comprar otro diccionario, porque el que tengo ...
pueden distinguir las representaciones, aunque se pueden sospechar. Algunas palabras
-¿ Qms1eras comprar qué?
nos sonarán vagamente ajenas, sentire1nos el efecto de otra voz, pero no podremos
estar seguros de que haya representación discursiva. Considérense los siguientes En (49) la habfante repite para indicar comprensión, o quizá para grabar en la
,, ejemplos, todos provenieptes de cartas personales por correo electrónico, donde el memona lo .q~e ~e le d1c<1~ pe~o en lo~ ~emás ejemplos el eco tiene otros valores más
'1 mteresantes. md1ca sorpresa, ironía, 1mtación, burla o deseo de confirmación (entre
11
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GRACIELA REYES METAPRAGMATICA. LENGUAJE SOBRE LENGUAJE, FICCIONES, FIGURAS
82 83

otras posibilidades contextuales). Nótese que en (52) la pregunta eco no respeta el la literatura, pueden verse como operaciones e 1 .
sistema deíctico del texto original, lo que es un rasgo típico de este procedimiento, y impunemente) pensamientos o palabras a quie~~uqeu~z~~rraJ.or atnbuye libremente (e
0
no en esos término t . IJeron o pensaron nada o
:.;;:a:~ae~;i~:~~~º:~:~~~~~ :~~~:~~:º~ ~":ón~oj, del ti~? de
que en ( 53) el pronombre interrogativo qué es una reformulación, y no una repetición,
de otro diccionario, por lo cual no podemos decir que aquí el eco sea, exactamente, (19) y (20), la ficci¿:
eco formal, sino semántico. Aunque esto contradice la descripción que he propuesto, esta atr1bucióu falta en el indirecto libre. ' e po e uan dyo, y
creo que podemos dejar el rasgo de repetición formal como prototípico, e incluir en la
categoría eco estos casos de reformulación, siempre que se manifiesten otras 5. 3. Paráfrasis
propiedades de los ecos, como el hecho de ser reacciones inmediatas a un texto previo
y generalmente oral (cfr. Fludernik, 1993, págs. 170-177). E l · · ·
Nótese que los ecos y la categoría que le sigue en nuestro cuadro, el estilo sino refo~~1:::~:sc~::~'.~~ x:~:~~~~:~od:~:~~rsaciones, no hay cita directa,
indirecto libre, comparten todos sus rasgos excepto el que se refiere al tipo de
'.: (54) A. -¿Y tus cosas, qué tal?
contexto: el eco es oral e interactivo, no es narrativo. El estilo indirecto libre, aunque
sea coloquial, es propio de la narración, y eso lo distingue de los ecos, aunque, si B. -¿Mi divorcio, quieres decir? Bastante bien ...
,: !,d' extendemos el término y lo acercamos al uso corriente, podemos decir que en las (55) Es ... infantil, si tú quieres, pero eso es lo que siento.
' ! ,:¡ secuencias narradas en estilo indirecto libre encontraremos ecos o resonancias de la En (54), mi divorcio reformula y no d · .
l palabra o el pensamiento de los personajes. primer hablante. Tal interpretación podrí ~epro uce icómcamente lo dicho por el
La falta de subordinación que le da nombre es una diferencia importante entre el sería por ejemplo "No, me refiero a tu tr=~=jco'~z~~eC5~ªs~º::uación posib:e d~ \54)
estilo indirecto libre y el estilo indirecto canónico, del tipo de (20), arriba. Pero la alguien que quizá no ha dicho eso o ue . , . . . . uye una eva uacrnn a
adecuada. La expresión si tú quieresindiquiza m s1qmera piense. que tal evaluación es
diferencia más notable es, desde el punto de vista gramatical, la mezcla de deícticos y
de lenguajes (mezcla que, fuera de ciertos contextos, sería inaceptable). Desde el punto posible de su interlocutor y se adelanta ac;ef~:'r:~1habl!ante considera un pensamiento
ar o.

;~:~:~~~~~s~~~:r::~~i~~~~~::::: ;~;!~'!~:¡~~~~~ras, como en (56),


de vista pragmático, el estilo indirecto libre realiza una operación extremadamente
ambigua que, por eso mismo, da mucho juego al narrador y al lector: presenta la donde
realidad desde dos puntos de vista a la vez, que están enlazados de modo que no (56) ... Así que voy a bastantes entrevistas b h .
podemos desenredarlos, o bien son más o menos discordantes. La voz es siempre la del esta gente ... En otras palabras· le d' 1 y ue 'voy aprendiendo a tratar con
· s igo o que qmeren oír.
narrador, como en el estilo indirecto canónico, pero hay fragmentos subjetivos que
ofrecen vislumbres de la intimidad de una conciencia sin ninguna mediación aparente.
En el estilo indirecto el narrador intenta reproducir la semántica de un texto,
~~~ª;ip~ª~;7r;;J;~~~~'~ª~~e;:;i~f;~y~;;!~;~~t~Jt~~z:dr~!~:~n~º:~:~~c~
e iscursos, y responde no solamente a Ja necesidad d . .
ofreciendo una tácita garantía de fidelidad en la semejanza. En el estilo indirecto libre, de ofrecer las mismas ideas expresadas de di'~ t e corregirse, smo a la
., >eren es maneras para alcanz ¡
en cambio, no hay tal intento y menos tal garantía: ni siquiera sabemos si el personaje a decuacrnn contextual posible (véase Blakemore, 1993). ' ar a mayor
dijo, se dijo, pensó, sintió lo que el narrador fragmentariamente reproduce. En muchos
casos el contexto nos permite entender que el personaje sometido al estilo indirecto encua!:~::~oo~~~;~::~~~~:ás .se h~ estudiado son las de los estilos indirectos
libre no era totalmente consciente de sus sentimientos, e, incluso, que sería incapaz de un1cac1on, en contextos narrativos·
(57) María dijo que iría al día siguiente. ·
verbalizarlos. Sin duda se postula una semejanza entre el estado de ánimo o percepción
verbalizada por el narrador y la que podría haber verbalizado el personaje, pero se trata El discurso narrado retiene su referencialidad .
características formale d d' . • Y a veces también algunas
s e1 iscurso preVJo (por ej ¡ b .
. e~p o sulvoca ulano), y, por lo
de verbalizaciones posibles, no "reales", como prueba el hecho de que los rasgos
general, está orientado desde las coordinadas
lingüísticos indicadores de la subjetividad, tal como se reconstruyen en las secuencias No se puede derivar el d' . . d' espacio empara es del hablante citador.
de estilo indirecto libre, sean diferentes, a veces, del modo característico de hablar de referen . . . iscurso m !recto del discurso directo, puesto que las
esos personajes, presentado en las citas directas del núsmo relato. El narrador crns ong¡nales de los deícticos son irrecuperables (Reyes 1993 )
V l h . ' 'cap. 2 .
mimetiza una conciencia con palabras, pero no atribuye esas palabras, explícitamente, . o vamos a ora a los ejemplos que vimos al rinci i .
al personaje, y ni siquiera le atribuye un pensamiento o una sensación que el personaje estilo cuasi indirecto, del tipo de P P o, que clasificamos como
esté en condiciones de verbalizar: el narrador interpreta libremente y verbaliza (58) Ahora operan con láser [según el médico].
libremente. Por supuest<>; <odas las retransmisiones de discurso o estados internos, en

' -· ~---------~ ------· -----------


ÜRACIELA REYES MilTAPRAGMATICA, LENGUAJE SOBRE LENGUAJE, FICCIONES, FIGURAS
85
84

Las citas ejemplificadas por (58) no tienen soporte sintáctico alguno. Pueden ~~~ ~rtanto podri~ su~eder que no hubiera discurso citado: estamos en el límite entre la
llevar expresiones evidenciales del tipo de según X. o bien están respaldadas por a a propia.y a ajena, en una zona de maniobras impunes que pueden intentar
alguna mención de la fuente en el texto contiguo o en la memoria de los hablantes. :::o la tr:;i~m_1s1ón fiel como.la t~rgiversación. El estilo cuasi iodirecto es frecuente en
Estas citas comparten con el estilo indirecto libre la propiedad de ser implícitas, en el ra~óos ~a em1cos, textos penod1shcos, informes profesionales, o sea en textos cuya
n e s~r es, en gran parte, exprimir el contenido de discursos a. en
sentido de que no se menciona un acto de habla o un estado interno del hablante
citado. Se pueden definir como paráfrasis no explícitas, interpretaciones más o menos re~ontextuahz~los a conveniencia del que escribe. La identificación de esta fon::: l
CI ar nos p~rrn1tJrá detectar abusos del lenguaje: los más notorios son lo d e
libres del contenido de palabras ajenas, o bien de pensamientos, actitudes o voliciones.
Muy frecuentemente, estas citas aparecen después de la mención de un acontecimiento
?ral y escrüa, donde, sm embargo, la distinción entre voces y opioiones :s ~~ap~rmenersa
1mportanc1a. a
verbal:
( 59) Hablé de mi operación con el médico. Ahora operan con láser. .E~ otros textos, el uso de este procedimiento opera como una "caja negra"
~ompnm1ento las voces ajenas en un discurso unívoco reductor Un caso m '
(60) Llamó Violeta. Se va el miércoles a Roma. mteres.ante es el de la~ notas que toman los psiquiatras ; psicólo ~s en la ri uy
'' '
En cada uno de estos casos, la segunda oración es una paráfrasis de lo que dijo
alguien, readaptada a la situación enunciativa del hablante, y lo sabemos porque lo
~=ev1:ta con su~ pa.cientes; en ~stasnotas el profesional cita en ~iscurso Jre:~r:
rrec o, y va anad1endo también su interpretación de lo que cita C d ,
inferimos del contexto, ya que no hay ninguna señal explícita en ninguna de las dos. ad~lante, hace un in~orrne sobre el paciente (destinado a que quede e~ el~:n ~ ~as
I'
Estas citas, que llamé en otros trabajos "encubiertas", "cuasi indirectas" o también gu~~ futuros tratamientos, para justificar el pago del tratamiento ante lo;;e p ra
"discurso indirecto implícito" (cfr. Reyes, 1984 y 1994a) han pasado desapercibidas en I~:~~; etc.), el profesional usa todas esas citas y sus propias interpretacione~:
los trabajos sobre el "discurso referido" (pero no en algunos análisis recientes, que les
~ncasill~~ot~:: d:~1~~!~~:e~l~~ l;~::~º~ea~~~~:~ec~~:::e;~~n~t~elando y
0
dan por fin un lugar: véase especialmente Hickman, 1993, y también Authier, 1995).
En algunas de sus manifestaciones, estas citas se confunden con los ecos y también
con el estilo indirecto libre. Pero los ecos (si queremos atenernos a la descripción
~º~~cimiento profesional, d~scartando lo que no cuadre, y, en general, ter;~~:::~~
d:to:~:~~~ (o ~u~ho) la pnmera co_nversación. De.esta recontextualización de los
hecha arriba) se presentan en contextos interactivos muy particulares, que no es . e a pnmera entrevista surge un drncurso definitorio .
comparten con otras citas. Del estilo indirecto libre se distinguen, a su vez, por no co:ienar ~l paciente, como sostienen algunos investigadores, a una vida de ~~;ei::,e~
aparecer siempre en contextos narrativos, por no tener necesariamente rasgos pa ~de cierto punto, los pacientes colaboran con esta visión profesional reduciend
miméticos, y, además, por la ausencia de yuxtaposiciones de deícticos y tiempos sus smtomas
dis d a las categorías que
. les ha ido enseñando el psi· co, 1ogo Yco-crean
' do uno
verbales que señalan la mezcla de perspectivas en el relato. curso ca a vez má~ estereotipado (véase Ravotas y Berkenkotter, 1998).
El estilo cuasi indirecto es frecuente en nuestros trabajos universitarios: así En los textos hteraríos y en la charla espontánea sob t d
exponemos, en grau medida, las ideas y palabras de los demás, a veces simplemente mezclas de los cinco sistemas de cita del Cua ' re o o, se encuentran
para evitar la pesadez de repetir expresiones como ~'dice que" o "según X" en cada solamente el "horripilan! " d 'd dro !, y estas mezclas revelan no
e escm o con que tratamos el 1 n · b
1
oración. Este librito contiene unas cuantas citas cuasi indirectas. Como el género posibles. a los que acabo de aludir, sino la exquisita elabora~ó~=j~~~ s~~=te:~s
expositivo exige distinguir escrupulosamente las ideas propias de las ajenas, tenemos
cuidado por separar lo citado de lo no citado. Pero a veces los límites se borran,
~~;;!~juego con l~~ semejanzas. Quizá valga la pena indicar, para poner fin a est~
creand~· :~usar e d ~guaie ~os produce placer, y por lo tanto fingir que lo usamos
asumimos lo ajeno como propio. Los alunmos, en sus exámenes y monografías, citan a agenes e enguaje con sus voces propias es una de las f 'd d '
los profesores de esta manera equívoca: les devuelven su palabra, tal vez tergiversada
o mal comprendida, pero siempre medio asumida como propia, ya que suponen que
~e~tral~s d~ nuestras prácticas lingüísticas. Si se con~idera cuánta lite:~~~ :s~~
e .wa a a a reconstrucción de la actividad de conversar y de narrar podrá concluirse
eso esperan los profesores. En la prensa, el periodista dice como propio y como cierto ~ác1lmente q~e ~no de los valores culturales del texto literario consis;e precisamente en
lo que le ha llegado de diversas fuentes, quizá no todas fiables. En gran parte de ac~1os rev~v1~ las experiencias más preciadas del lenguaje entre ellas en lugar
nuestra vida de hablantes oscilamos entre la atribución y la asunción del lenguaje prominente, 11n1tar lenguaje. ' '
ajeno. A veces otros hablan por nuestra boca, y las voces se confunden. Otras veces,
nos apartamos, queremos marcar la cita.
El estilo cuasi indirecto es el más encubierto: no contiene señales explícitas de
cita y a veces no menciona fuentes. Aunque podemos inferir que hay discurso
indirecto, uo necesariaménte podemos inferir cuál es la fuente del discurso citado, y
..,.,.

CAPÍ11JLO 3

LA IRONÍA

1. ESTRUCTURA BÁSICA DE LAS IRONiAS VERBALES Y SITUACIONALES

La ironía es un uso figurado del lenguaje, es decir, una alteración intencional del
significado corriente o previsible, destinada a lograr alguna finalidad comunicativa.
"La figura", dice Quintiliano, "es una manera de hablar apartada del modo común y
más obvio". A diferencia de los tropos, nos dice, en los que se ponen unas palabras por
otras, "la figura puede formarse en las palabras propias y por su orden colocadas''.
Pero figuras y tropos por igual "añaden fuerza a las cosas y les dan gracia"
(Quintiliano, 1942, págs. 89-90).
Los empleos figurados presuponen significados habituales para modificarlos en
alguna 1nedida; en la economía comunicativa, esas innovaciones sirven para acrecentar
la información o bien para producir efectos determinados sobre el oyente. Suele
llamarse figuras a las expresiones resultantes de esas prácticas, que constituyen
propiedades del discurso, pero también a las prácticas mismas, y por eso hablamos de
ironías, 1netáforas o metonimias como procesos comunicativos o como productos
verbales. En este capítulo haremos hincapié en el proceso y no en el resultado, y lo
relacionaremos con el tipo de conocimientos y habilidades, lingüísticos y no
lingüísticos, de los hablantes, y con la dimensión social del significado lingüístico.
La ironía y la metáfora -que son las figuras más frecuentes y las más
estudiadas- tienen propiedades en común: en ambas hay una ruptura pragmática, ya
que se ofrece un significante inesperado o inapropiado y se exigen inferencias extras.
Pero mientras la metáfora es una recategorización de la realidad, y por lo tanto juega
con la relación entre el lenguaje y la realidad, la ironía juega a la vez con la relación
entre lenguaje y realidad y con el uso (corriente, caracteristico o esperable) de las
expresiones lingüísticas, y además de este doble juego, propone un tercero: por servir
para comunicar actitudes-, ..evaluaciones, sentimientos, la ironía invita a la complicidad,
1

!
GRACIELA REYES METAPRAGMATICA. LENGUAJE SOBRE LENGUAJE, FICCIONES, FIGURAS
88 89

alude a los acuerdos previos de los participantes, y deja afuera (a veces cruelmente) a . , Se ha escrito muchísimo acerca de la ironía, encarándola desde perspectivas
quienes pueden asociarse con la expresión objeto de la ironía y, además, a quienes no d1sti~tas, Y se han hecho '.'1uchas reseñas de lo escrito. No es mi intención hacer una
entienden la ironía. Estos dos últimos grupos suelen tener características en común. resena más. Me voy a hm1tar ~recordar las teorías pragmáticas, para poder encuadrar
Supóngase que varias personas, A, B, C y D, han sido invitadas ala casa de una adec~adamente una perspectiva metapragmática del fenómeno. Por ¡0 general Jos
conocida, que es una nueva rica. En un momento, una de ellas, A, señala un jarrón y trabajos sobre la 1ro~ía, sobre todo en el campo de la lingüística, proponen, como es
dice con expresión neutra: de esperar (¿por que volver a tratar el tema, si no?), una teoría mejor que todas las
(!) Me encantan los jarrones chinos. antenores. Tampoco voyª. pro!"mer aquí una teoría mejor que las anteriores. Lo que
B y C disimulan una sonrisa: ambos creen que el jarrón es horrible y que A ha qmero demostrar es que la 1roma es un fenómeno metapragmático, y que solamente si
sido irónica. D y la anfitriona, en cambio, no perciben la ironía. A ha contado con sus la enc~mos como tal podremos explicar su complejidad y sus funciones
mteracc10nales. La ironía tiene límites borrosos con otras formas de hablar no seria
pero. los hablante~ ?ª~i siempre están de acuerdo en que hay enunciados meramen:~
amigos B y C como interlocutores, ya que conoce sus ideas y sus gustos, haciéndolos
participar en su crítica tácita al jarrón, creando complicidad con los amigos. Ha
excluido, en cambio, a la dueña de casa y a D, o bien D se ha excluido sola, no ha grac1~sos Y ?~os 1romcos. Y los hablantes también coinciden en su apreciación de las
s~tuac1ones, 1ron1ca~. Hay s1tuac1ones cómicas y situaciones irónicas. Lo irónico es
entendido la ironía, o quizá ha sospechado que el enunciado deA tenía otro significado
s1e~pre 1n~s ~spec1fico, una fonna 1narcada de lo gracioso, lo ingenioso 0 lo burlesco.
posible, pero no lo ha captado o no está segura de haberlo captado. El comentario
irónico de A excluye también de su grupo de personas afines a todos aquellos que La, ironía md1ca una. dis~repancia a veces trágica, ausente de otros enunciados no
pueden encontrar bonito ese adorno, tenerlo en su casa, vivir en casas ostentosas, etc. senos'. Hay una conciencia metapragmática sobre qué enunciados son irónicos y qué
Esas personas son, como el jarrón, el objeto de la ironía, y probablemente las que enunc1ad~s no lo son,. y esa conciencia forma parte de una conciencia más general
tienen tendencia a decir Hme encanta ... " refiriéndose a cosas que A y su grupo sobre. las 1.ncongruenc1as y contr"'.'tes q~e hacen la vida tan dura, tan desconcertante,
consideran de mal gusto. Nótese que la frase misma, con su estructura familiar, que tan ~vertida, y, sobre todo, tan mexphcable. Si encaramos el estudio de Ja ironía
tantas veces usamos literalmente, es objeto de rechazo, ya que no refleja lo que lmguístic~ apela~do a esos conocimientos sobre la realidad veremos cómo los dos
verdaderamente siente A y por lo tanto es falsa e inapropiada a propósito. grandes l!pos de Ironía, la lingüística y la de las situaciones, se relacionan, y por qué
decimos que una frase, una persona, o el destino, son irónicos.
Un rasgo interesante de la ironía es su capacidad de autoanularse ante ciertas
personas: la hablante A se considera a salvo de la dueña de casa, puesto que ha dicho , La ~ronía ver?al es una desestabilización intencional del significado, una
algo que suena como un elogio y no ha usado ninguna entonación ni mímica para man1pulac1ón, casi siempre humorística aunque no siempre bienintencionada, que
recalcar su intención irónica. El hecho es que en este incidente lingüístico no todos afect~ nuestras creencias sobre la realidad y sobre el lenguaje que usamos para 1

están hablando de lo mismo, aunque, literalmente, estén hablando de Jo mismo. La refenmos a la reahdad. Sus efectos pueden ser meramente divertidos o bien !

discordia ha abierto una brecha entre Jos interlocutores, y esa discordia tiene por objeto d~vastadores, con toda~ las posibilidades intermedias. Como figura retórica, ha sido
inmediato -aunque no únic~ el lenguaje. A su vez, la hablante irónica protege su siempre una de las mas prestigiosas, porque se ha asociado con Ja superioridad
imagen y la de la dueña del jarrón. Quien no entiende o no entiende del todo la ironía mtelectual Y el control del lengu~je: con la habilidad de evaluar algo desde otras
queda confusa, y probablemente note, si hay alguna señal, que no pertenece al grupo perspectivas, de hacerlo m.ed~ante Juegos lingüísticos sutiles, y de revelar inteligencia y
de A, B y C, que parecen compartir algo. En este pequeño escenario, Ja ironía ha ~~deza, f~ando no supenondad moral, tanto en el productor de la ironía como en el
establecido una serie de significados y su propia política. Como en toda comunicación, mterpret~ . En l~ hteratura, .donde esperamos siempre pluralidad de significados y de
en la irónica algunos hablantes tienen más poder que otros y pueden crear alianzas; pe~spect1vas, la ironía ~~ ~ido en todas las épocas un procedimiento privilegiado,
dado que la ironía requiere colaboración para producirse, esta política es más evidente. objeto de numerosos anahs1s, Por ser un modo de reflexión sobre la realidad, es un
Intentaré mostrar en este capítulo que los enunciados irónicos tienen tres 'I
'

dimensiones: la de la relación lenguaje-realidad, la de la relación lenguaje-uso del


V~ase al respecto Ja opinión de un erudito: "L'espéce de gens aqui l'ironie est antipatique
14
, •
lenguaje, y por fin la de la relación entre los interlocutores, que se bifurca en inclusión eclatre auss1 sa nature. Ce sont. les fen1!'.1es ~t le peuple. Le peuple ne co1nprends pas l'ironie; la
y exclusión. Reinterpretando esta descripción desde el punto de vista metapragmático, fe1nme, non plus. Le peuple vott sous 1 1ron1e un orgueil de l'intelligence, une insulte ¡\ Caliban.
puede afirmarse que la ironía es un tipo de uso reflexivo del lenguaje donde se realizan Quant a la fe1nme, elle est p~uple par son incomprehension et par son mépris de l 'intelligence... La
tres comentarios simultáneos: el hablante hace un comentario implícito sobre el femtn~ est sou11out une phys1olog1e et une sensibilité, non un cervcau. L'ironie attitude de cérébral
lenguaje y la realidad, sobre el lenguaje y los usos del lenguaje y sobre los acuerdos en qut s'affirme le primat de l'intelligence sur le scntiment, lui est suspecte' et antipathique. La
femme est et reste un 13tre pamiionné dans sa chair et dans ses nerfs". (G. Palante 1906· citado por
tácitos con su interlocuto~'. Hutcheon, 1994.) ' '

1,
90 ÜRACIELA REYES
METAPRAGMATICA. LENGUAJE SOBRE LENGUAJE, FICCIONES, FIGURAS
91

fenómeno que ha interesado también a los filósofos. En los últimos años, ha si.do último adjetivo no se usa para caracterizar la conducta lingüística y a partir de esta los
analizada frecuentemente por psicólogos, antropólogos, especialistas en estudios atr1bu~os de las personas'. Del mismo modo, no decimos que la vida, 0 que tal
culturales, y por supuesto pragmatistas, ya que la ironía es una forma de comunicación s1tuac16n, es metafónca, ni metonímica, ni hiperbólica. Sí decimos y muchas veces
verbal, y aún más: un comentario sobre la comunicación misma. que la vida es irónica, que un asunto o un acontecimiento son iróni~os. '
En la definición de cualquier ironía verbal tienen que constar por lo menos las Las situaciones irón.icas, que suelen distinguirse de las ironías verbales que
siguientes características: que el hablante transmite dos o más significados diferentes, Y hemos caractenzado a partlf de casos como (1) y (2), son diseños de la realidad que
que intenta mostrar cierta actitud evaluativa, generalmente crítica. Si Elena me trata nos parecen c~ntrad~ct_or1os, chocantes: es irónico, suele decirse, que cuando por fin
mal y digo h~m.os aprendido, a vivir seamos demasiado viejos para hacer todo lo que queremos, es
(2) Qué amable es Elena. lfomco que el naufrago se muera de sed en medio del océano, o también en una
comunico por lo menos dos comentarios contrastantes: uno sobre la amabilidad versión ~ositiva, ~~e el hijo al que sus padres han prestado menos atención ~or ser el
y otro sobre el comportamiento desagradable de Elena. El primero, el explícito, parece del med10, o el úll!mo, etc.) haya resultado el más sano y feliz. Podemos ironizar
incongruente si está claro para mis interlocutores que no puedo dec1r senamente que sobre estas ironías, produciendo ironías verbales. Retomo un ejemplo ya analizado en
Elena es amable. El segundo significado transmitido, el implícito, es una evaluación otro trabajo (Reyes, 1992):
negativa del comportamiento de Elena, perfectamente aplicable a la situación. De (3) (El valioso objeto, extremadamente frágíl, ha recorrido medio mundo en una
modo que, al emitir (2), estoy haciendo un comentario indirecto: a partir de un maleta, sin romperse, pero se rompe al llegar a casa, lo que produce el siguiente
enunciado explícito incompatible con la realidad a la que me refiero, implico algo, o comentario:)
intento implicar algo, que mi interlocutor debe inferir y que contiene una evaluación -Por suerte llegó intacto.
sobre esa realidad. Esta ironía refleja el reconocimiento de una ironía situacional en la cual quedan
Los enunciados irónicos no son siempre tan simples, ni son siempre fáciles de contrapuestos lo normal y lo anómalo: lo "normal" es que un objeto se rompa cuando
interpretar: por el contrario, pueden ser polisémicos, ambiguos. Pero la estructura del se lo traslada durante un viaje largo, y no cuando se lo coloca en una vil!·ina. El
proceso es básicamente la que acabo de esbozar: conflicto de significados comentario irónico señala la contradicción, es una ironía verbal que sirve para
interactuantes para evaluar una situación. Los significados en conflicto pueden ser comentar una irorua situac'ional. Lo irónico de la situación misma surge de la violenta
varios y no solamente dos, pueden ser evidentes, sutiles o apenas perceptibles. La contraposición entre unas condiciones norm!(les y unas condiciones inesperadas,
evaluación puede ser más o menos patente o clara, más o menos benigna o ~oi::osiva. ª?ormales: lo normal selia que el objeto se hubiera roto en el viaje, o que pudiéramos
Y cada intérprete puede tener una versión algo diferente de cuál es el s1gn1ficado disfrutar de los lujos cuando tenemos dinero para costearlos, o que el náufrago muriera
irónico, de cuál es la intención, la finalidad y la mordacidad del hablante irónico, y eso ahogado Y no de sed, o que (en el ejemplo positivo) el niño desatendido fuera
variará según sean la intención, propósito y mordacidad del propio intérprete. melancólico. En las ironías situacionales lo normal y esperable ha sido alterado, por lo
La ironía es dificil de definir, entre otras cosas, porque no tiene límites claros: general para peor: el contraste enl!·e lo que tendria que ser y lo que es parece el diseño
no existe en términos absolutos, como otras figuras, sino que es relativa, se presenta en perverso de una fuerza superior a nosotros. Si no tuviéramos un punto de referencia
grados, e incluso puede ser dudosa, como lo es cuando no estamos seguros de que un fijo, una normativa o expectativa, no reconoceliamos las ironías de la vida en las que
enunciado haya sido dicho o escrito con ironía, y cómo debemos interpretarlo. Una hay desviaciones chocantes de las normas esperadas. '
breve respuesta o un libro entero pueden ser irónicos o no, depende de los intérpretes. En muchos análisis se considera casi automáticamente que las ironías
En todo caso, un texto puede ser más o menos irónico, puede tener "cierta" ironía, o situacionales son objetos diferentes de las ironías verbales, o que en todo caso no son
puede "quizá" ser irónico, o puede ser irónico para algunos y no para otros, o ser objetos de estudio para la lingüística (ver, entre muchos, Hutcheon, 1994; Sperber y
irónico en ciertas comunidades y no en otras, o en ciertas épocas y no en otras. Wilso~, 1995; Kerbrat-Orecchioni, l 980). Sin embargo, las ironías verbales y las
El adjetivo "irónico" se aplica a textos de todo tipo (verbales, visuales, s1tua~1onales, además de ponerse en contacto muchas veces, tienen, como veremos,
musicales), y también se aplica a las personas, para señalar que esa per~ona se propiedades básicas en común, que pueden explicarse desde una perspectiva
caracteriza por hablar con ironía. Es un adjetivo metapragmático, semejante a metapragmática.
socarrón, charlatán, reticente, parco, elocuente, taciturno ... Estos adjetivos reflejan
ideas acerca de cómo usamos o deberíamos usar el lenguaje, ideas que forman parte de
las ideologías lingüística~ .de una comunidad. Nótese que decimos María es una mujer
irónica pero no (salvo figuradamente) María es una mujer metafórica, ya que este
ÜRACIELA REYES
92 METAPRAGMATICA. LENGUAJE SOBRE LENGUAJE, FICCIONES, FIGURAS 93

2. DEFICIENCIAS DE LAS DESCRIPCIONES TRADICIONALES provocar que el interlocutor diga Y tú qué esperabas, Ya se sabe, etc. va más allá que
la mera negación). En otros casos, la negación implicada no es un equivalente del
Las descripciones tradicionales, inspiradas en la retórica, consideran que la significado de una ironía, como se ve en el caso de (1), donde nada impide entender
ironía consiste básicamente en una inversión de significados: consiste en decir una que a la hablante sí le gustan los jarrones chinos, pero no ese jarrón, y por lo tanto lo
cosa pero querer decirla contraria (Quintiliano, Libro IX; Lausberg, 1975, pag. 21.~). que quiere decir no es lo contrario de lo que dice, sino otra cosa u otras cosas. Según
En otros análisis, de inspiración parecida, se dice que la ironía contiene una negac10n los contextos, las ironías tienen múltiples significados potenciales. La ironía del
implícita: que lo implícito es la negación de lo explícito. Una tercera variank de este ejemplo (3), que acabamos de ver, no consiste en la inversión ni en la negación de lo
mismo análisis, propuesta porla pragmática (Grice, 1989, Searle, 1979) considera que dicho; el valor irónico de esa frase es mucho menos determinado. Véase otro ejemplo
los enunciados irónicos transgreden la máxima de verdad, o sea que afirman algo semejante:
evidentemente falso, obligando a inferir la negación del significado lireral. Esta visión (4) (El arroz con leche se ha quemado; está reseco, apelmazado y tiene mal
tiene la ventaja de ofrecer una descripción del enunciado irónico y del proceso que sabor. Ester lo prueba con repugnancia, y comenta lo siguiente):
activa la ironía, pero mantiene el problema de considerar la ironía una figura cuyo -El arroz con leche bien espeso es el más rico.
significado literal se opone, por negación, a su significado verdadero. V oomos las La ironía no se encuentra en lo contrario de lo que dice Ester, ni en su negación.
deficiencias de estas teorías. Ester no dice nada absurdo ni chocante, sino probablemente la verdad, pero esta
La primera deficiencia consiste en proponer que la ironía tiene un solo verdad, dicha con cierta entonación que refleja su opinión sobre el arroz con leche
significado, sea el inverso o sea el que surge de la negación implícita. Es verdad que, quemado y con un gesto de asco, provoca, en esta situación, otros significados, no
en el caso de enunciados breves, podemos recuperar un significado opuesto, uno solo. opuestos sino distintos. La ironía se encuentra en el juego entre lo dicho y lo no dicho,
Ante algún inconveniente, puedo comentar irónicamente qué bien e implicar qué mal. Y ese juego no es una mera inversión, ni tampoco una negación implícita.
Pero los textos irónicos suelen ser más complejos, y si no lo fueran resultaría muy La tercera deficiencia de las teorías tradicionales tiene que ver con uno de los
dificil explicarse por qué la ironía ha sido objeto de tantos estudios y de tantas teorías Y aspectos menos atendidos en los mnnerosos trabajos sobre este tema: el papel que
nos sigue ocupando después de tantos siglos de especulaciones. desempeña la parte explícita de la ironía. Estas teorías no solamente no se plantean por
Los enunciados irónicos suelen tener muchas resonancias, no solamente un qué el hablante elige hacer una evaluación de manera tan indirecta y a veces equívoca,
significado nítido que, además, deba ser exactamente opuesto al expresado o la en lugar de decir directamente lo que quiere decir (tema que veremos debajo, en 4)
negación del expresado. La ironía es un fenómeno que revela nuestras maneras de sino que no analizan qué propiedades poseen esos enunciados explícitos. Si
evaluar, apreciar y despreciar, y estos procesos son complejos, como lo son las ironías siguiéramos la concepción tradicional de la ironía, tendríamos que afirmar que el
resultantes, que suelen despertar en el intérprete distintas asociaciones, y dependen de significado literal, lo dicho en la comunicación irónica, es descartable y solamente
visiones del mundo y del lenguaje que cambian según las épocas y las culturas. Las sirve para dar paso al segundo significado, al implícito, que es el irónico. El implícito
ironías son por lo general ambivalentes, polisémicas, ricas en. evocaciones: Estas es, en el análisis tradicional, el "verdadero" significado. Lo explícito, lo dicho, es algo
propiedades son tan fácilmente verificables, como se verá en los ejemplos recogidos en absurdo o chocante, cuya única función es servir de puente hacia lo irónico. Pero ni el
este capítulo, que la teoría de la inversión del significado queda invalidada. primer significado, el explícito, es un mero sinsentido, ni el segundo, el inferíble, es el
Pero además (y esta es la segunda deficiencia de las descripciones tradicionales) verdadero e irónico. La ironía surge de la interacción de ambos significados. El
son pocas las ironías que surgen de inversiones del significado literal. Es un hecho hablante irónico contrapone significados distintos para mostrar alguna actitud,
innegable que hay muchas ironías que no indican lo contrarío de lo dicho, ni tampoco generalmente negativa, ante la situación que motivó el enunciado. La elección del
la negación de lo dicho. De hecho, una de las características de la ironía es que el enunciado lireral no puede ser caprichosa, ya que el comportamiento comunicativo no
significado implicado no es siempre fácil de formular de manera inequívoca. Hasta un es casi nunca caprichoso.
enunciado tan simple como (2), arriba, nos puede servir de ejemplo. ¿Qué sería La pragmática, desoyendo en esto a la tradición, debe conceder al componente
exactamente lo contrario de qué amable es Elena? Tampoco basta con proponer una explícito de la ironía toda su importancia, y no considerarlo un mero veWculo cuya
negación implicada, pues (2) puede significar, en contexto, más que su mera negación propiedad decisiva es ser incongruente o ser falso. Para la pragmática, los hablantes
(si Elena es empleada de un ministerio, el comentario podría abare.ar a las e,mpleadas son racionales, y por lo general tienen el propósito, más o menos claro para el
en general; si Elena es una adolescente, a las adolescentes; o bien podna reflejar interlocutor, de comunicar algo de manera eficiente: es poco probable que digan cosas
opiniones del hablante sobre la familia de Elena, sobre los malos modos, sobre su absurdas que el interlocutor tenga que olvidar al instante para entender algo
anterior relación con Elena... Cualquier comentario implícito de (2) que pueda exactamente contrarío. Lo más probable es que los hablantes irónicos confíen en que

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94 ÜRACIELA REYES MEI'APRAGMATICA. LENGUAJE SOBRE LENGUAJE, FICCIONES, FIGURAS
95

su interlocutor pueda conectar lo dicho con lo no dicho a partir de alguna propiedad de arriba. (a propósito de (2)) la propuesta de explicar su significado como una mera
lo dicho, y así entender el significado completo de su enunciado, que incluye tanto lo negación reduce su valor comunicativo.
dicho cuanto lo no dicho, tal y como sucede en todos los intercambios verbales. La Véase ahora el siguiente ejemplo:
pragmática ha teorizado exitosamente la conexión entre lo dicho y lo no dicho, y ha
(6) (El empleado Gutiérrez está sentado a su escritorio, pero no ha hecho nada
explicado los principios de la comunicación. Del mismo modo puede explicar la
en todo el día. Uno de sus compañeros pregunta a otro, delante de Gutiérrez:)
comunicación irónica, quizá un poco más complicada que la no irónica, pero
-Che, ¿vino hoy Gutiérrez?
básicamente la misn1a.
Alguna propiedad tienen que tener los enunciados explícitos, alguna propiedad Como el hablante está viendo a Gutiérrez, y sabe que sus interlocutores saben
que dé acceso a los sentidos irónicos. Para llegar a la solución de este problema, q~e lo está viendo y q~e saben que él sabe, etcétera, podemos admitir que su pregunta
propongo que veamos cómo intentan resolverlo los dos enfoques pragmáticos de la 1romca transgrede o bien la máxima de sinceridad o bien la condición de sinceridad
ironía: el enfoque griceano, que la hace depender del cumplimiento del principio de del acto de habla. Pero nótese que la estructnra del significado de esta ironía no
cooperación, y los enfoques metalingüísticos o polifónicos. coincid.e con la descripción de Grice, puesto que el hablante no quiere decir lo
contran~ ~e lo que dice, sino otras cosas, determinadas por el contexto, por ejemplo
que Gutierrez parece ausente aunque esté presente, que Gutiérrez no trabaja, etc.
Como, además, (6) es un ataque a Gutiérrez (aunque sea afectuoso, burlón o al.menos
3. LAS TEORÍAS PRAGMÁTICAS SOBRE LA IRONÍA con~agrado p~r las prácticas de agresividad consentidas en algunos lugares de trabajo)
realiza uuned1atamente una división en el grupo: todos somíen, incluso Gutiérrez
3.1. La ironía como transgresión deliberada de la verdad probablemente, pero Gutiérrez es objeto del comentario de los demás, que por lo tant~
se arrogan el derecho de opinar sobre él. Hasta un elogio es, políticamente, de doble
filo, porque el que elogia, como el que critica, se cree en una situación social 0
Grice (1989) indica cuál es la condición propia de los enunciados explícitos de
j~rárquica t~l que puede convertir a los demás en objetos de comentario (de ahí que
la ironía: transgredir abiertamente la máxima de verdad del principio de cooperación.
ciertos elog10s ofendan: no el elogio mismo, sino el hecho de recibirlo). En todo caso,
Si un enunciado es evidentemente falso, y esa falsedad es intencionahnente transmitida
no solo debemos atender a la fonna de la ironía, que tanto obsesiona a los
(a diferencia de las mentiras, donde la falsedad intenta ocultarse), el intérprete intentará
pragmatistas, sino a sus efectos, que son parte de su significado, y asociarla con un
hacer inferencias para obtener el significado que verdaderamente quiere transmitir el
problei:ia q~e la pragmática ha teorizado solo en parte, el problema del poder en la
hablante. Para Grice, el significado irónico contradice al literal, y así, X es un buen comun1cac1on.
amigo, dicho por un hablante que sabe que X ha sido un mal amigo y qne su auditorio
también lo sabe, solamente se explica si el hablante está intentando transmitir otra La trans.gresión de la máxim~ de verdad no es condición necesaria para que se
proposición, no la que finge comunicar. La proposición intentada debe estar produzca una ironía y, además, la ironía puede surgir de la violación deliberada de
otras máximas. Véanse los siguientes casos:
relacionada claramente con la contenida en el enunciado: la más obviamente conectada
es la contradicción (Grice, 1989, pág. 34). Al revisar esta primera explicación de la (7) (Pasa un joven con el pelo teñido de color anaranjado violento. Una amiga
ironía, Grice indica que la ironía está asociada a la expresión de un sentimiento, comenta a otra, irónica1nente:) '1
'
actitud o evaluación: "No se puede decir nada irónica1nente a menos que se intente -Este chico se tiñó el pelo, al parecer.
reflejar un juicio hostil o despectivo, o un sentimiento co1no indignación o desprecio" La hablante dice la verdad, una verdad que podría probar fácilmente. Pero su
(Grice, 1989, pág. 54; traducción mía). enunciad~ no es infonn~tivo: ha transgredido abiertamente la máxima de cantidad, ya
Como ya he dicho, la violación de la máxima de cualidad puede tener valor que es evidente que el Joven se ha teñido el pelo. La falta de infonnatividad de su
explicativo en algunas ironías. Véase el siguiente ejemplo: enunciado activa, en este caso, la ironía, y no la falta de sinceridad.
(5) (Luis intenta arreglar un aparato y lo rompe. Su mujer comenta:) La tra?sgresión d~ la máxima de manera también puede dar lugar a ironías,
-Eres un genio. como en el ejemplo s1gu1ente (tomado de Reyes, Baena y Urios, 2000, pág. 39):
Es obviamente falso, en esa situación, que la hablante crea que Luis es un genio. (8) Manuel se acostó con Yolanda y se emborrachó.
Luis debe entender que ella quiere decir otra cosa, en este caso algo contrario. Esta es . La iron~a de este enunciado depende, como toda ironía, del contexto, pero es
una ironía bastante frecu~nte y desgastada, pero aún en estos casos, como he dicho acllvada en pnmer lugar por el modo ostentoso en que el hablante altera lo que sería,
para muchas personas, el Orden 11nonnal" de los acontecin1ientos, en el que el alcohol

,, ______
~I
96 ÜRACIELA REYES METAPRAGMATlCA. LENGUAJE SOBRE LENGUAJE, FICCIONES, FIGURAS
97

es causante de comportamientos no previstos. Obsérvense de paso todos los matices 3.2. La ironía como enunciado polifónico
semánticos que podemos imaginar para el enunciado (8), todos ellos más complejos
que una inversión de significado. 3.2.1 La teoría del eco
En (9), se alteran conjuntamente las máximas de cualidad y de relevancia, sobre
todo la de relevancia.
(9) Ana: -Parece que Elsa termina la carrera este año. . Las teorías q~e agrupo bajo la denominación de polifónicas consideran que en la
1ronfa hay una dualidad de s1gmficados que podemos reinterpretar como dos "voces"
Delia: -Y yo soy la reina de Saba.
d1stmtas hablando simultáneamente. En la más difundida de estas descripciones la de
La ironía de Delia se origina en una transgresión evidente de la máxima de Spe,~ber YWilson (1981, 1995, 1.998), una de esas voces representa a la otra ("s~ hace
relevancia, ya que los acontecimientos asociados (terminar una ca1Tera u.na persona y eco ~e.otra) 1mphcando una actitud negativa hacia el contenido de lo representado (en
ser reina de Saba otra) son aparentemente inconexos. Por supuesto, Deba transgrede esto ultimo no se apartan de Grice; cfr. Grice, 1989, pág. 54).
también la máxima de verdad, pero la transgresión más evidente y la que parece
Para Sperber YWilson todo enunciado es la representación del pensamiento
desencadenar la ironía es la de la máxima de relación. del hablan!~, pero a veces el pensamiento interpretado es a su vez una interpretación
Veamos finalmente un caso de ironía en que es muy dificil determinar si el del pensam~~nto de otra persona (crf. Capítulo 2, nota 1). Ejemplos de este tipo de
hablante viola alguna máxima. Este enunciado fue interpretado como irónico por los repre~entac10n en segtmdo grado son los casos de estilos directos e indirectos y
interlocutores presentes, que lo celebraron con sonrisas y expresiones de complicidad también los ecos o repeticiones (más o menos fieles) de otros enunciados o ideas. P~ro
con el ironista. El contexto es el siguiente: Adolfo, que es radiólogo, por una confusión no todos los enunciados interpretativos son irónicos: sólo lo son aquellos ecos en los
que casi le cuesta la vida, ha bebido un trago del ácido que utiliza para revelar las que d hablante expresa una actitud negativa (de crítica, burla) hacia el contenido de Ja
radiografias. Su amigo Juan va a verlo al día siguiente y, cuando se le ofrece algo para opm1ón representada: "irony is an attitude toan echoed content" (1998, pág. 287).
tomar, dice, con expresión demasiado seria, levantando las cejas:
Lo ridiculizado ~s una opinión ajena, que puede ser la de alguien en especial, la
(10) Y ... yo quisiera una copita de algo fuerte. de un conse~so, .la de cierto tipo de personas, puede ser un cliché o una frase frecuente.
En el contexto de (10), la alusión al ácido es inequívoca, y la ironía está en El hablante irómco se burla de esa opinión citada por lo mal que se aplica a la sitúación
llamar al ácido "algo fuerte", imitando un supuesto pensamiento de Adolfo cuando presente: es el reconocimiento de esta actitud del hablante lo que activa la ironía il
tomó el ácido creyendo, claro, que era otra cosa. Puede objetarse que Juan estaba cuando la expresión ecoica y la actitud hacia su contenido resultan relevantes en u¿
transgrediendo la máxima de verdad, pero, si hubo transgresión, no fue evidente para contexto, o se~ cuando producen la ganancia informativa mayor con el menor esfuerzo
nadie, a diferencia de lo que estipula la teoría de Grice. Este enunciado tiene diferentes de procesarmento posible. La noción de eco pennite prescindir del concepto
significados, en su mayor parte burlones; uno de los significados es también literal, o, P.roblemático de significado inverso, ya que, en esta definición de la ironía, el
en el proceso, quedó interpretado como literal, ya que a Juan se le ofreció una copa de s1gn1ficado surge de la actitud de un hablante ante una opinión ajena que resuena
coñac y la aceptó como si la hubiera pedido. Pero el enunciado evoca una gama de como otra voz disonante, en la suya. '
significaciones posibles (es un comentario sobre el episodio del ácido, sobre las La teoría de Sperber Y Wilson entronca perfectamente con la tradición de la
distracciones de Adolfo, sobre el hábito de beber, etc.) E intenta evaluar con sorna una pragmática de.Grice por lo menos en tres puntos importantes. En primer lugar, Sperber
situación, intento transmitido y celebrado por el auditorio, pese a la expresión YWtlson consideran, como Grice, que la ironía es un significado intencional, de modo
imperturbable del ironista. que depe~de (como todos los significados) del reconocimiento de una intención. Lo
Aunque no sea satisfactoria, la teoría de Grice, que conecta las ideas que el mterprete recupera es una implicatura, ya que el contenido irónico no es nunca
tradicionales sobre la ironía con los principios pragmáticos que explican la producción explícito. También en esto la teoría de la relevancia es compatible con la de Grice en
de implicaturas, ha sido el punto de partida para las demás teorías pragmáticas, que la cual las ironías se caracterizan como implicaturas conversacionales. Finahnent~ el
intentan determinar las propiedades de los enunciados que activan ironías y tratan de papel de fa afectividad es reconocido por ambas teorías, si bien en Sperber y Wilso~ se
explicar por qué los hablantes recurren a ellas para comunicarse. da mayor importancia teórica a la actitud del hablante.
. La novedad de esta teoría, respecto del paradigma de Grice es considerar la
lfonía ~n fenómeno citativo (y por lo tanto metapragmático, aunque Sperber y Wilson
no utihcen esta expresión). Por ser ecoicos, los enunciados irónicos son reflexivos, se
refieren ante todo a sí mismos: la dimensión metapragmática queda incluida en el

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GRACIELA REYES METAPRAGMATICA. LENGUAJE SOBRE LENGUAJE, FICCIONES, FIGURAS
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· ., que depende
e utiliza la noción de eco o repetic1on, .
modelo desde el momento en que s . t f o lenguaje que interpreta lengnaJe. los plazos que me había puesto para finalizarlos y los esfuerzos que estaba haciendo
para cumplirlos, y añadía al final, con intención irónica:
a su vez del concepto de lenguaje! mterpí red al1avroelevancia repetición exacta, sino algo
. "[!
Nótese que "eco n~ s1 ~,
,, ·gnifica en a teor a e ' . . (12) No soy obsesiva, por supuesto.
definición ecoica de ironía es la stguten:e. a
semejante a evocación ? alus10n. La e b which a speaker tacitly commumc~tes a La teoría de Sperber y Wilson da cuenta bien del proceso comunicativo que
ironía es] a type of ech01c use oflanguag y ta"on which she tacitly attnbutes ilustra (12). En esta teoría, como en la Grice, la ironía es un fenómeno puramente
. · ti ttitude to a represen ~
mocking or, at Jeast, d1ssoc1~/e ah f ofutterance" (1998, pág. 297). pragmático: depende íntegramente del contexto. Pero, además, Ja noción de eco es la
to someone other than herse at t e ime t .ó c1.tada puede ser alguien que explica que el hablante pueda recuperar, en contexto, la actitud irónica. En (12)
tribuye Ja represen ac1 n
La persona a la cua se ~
1 estoy repitiendo, deliberadamente, no una frase determinada dicha por mi amigo o por
l . s i·nterlocutores en un momento
. 1 t s (mcluso os mismo , . 1 L mí en circunstancias también determinadas, es decir, no estoy citando un
conocido de Jos mter ocu ore h bl t genérico no identificab e. a
· ·6 )
d istinto al de la enunc1ac1 n o st 'mplementeun a an e ' acontecimiento lingüístico localizable, sino una frase típica, o posible, mía o suya, más
ta o más o menos va&ra no se
¡ ite de manera exac
versión original a la _que e eco r:no afecta Ja interpretación de Ja iro~ía. En (11) Jo probablemente mía, perteneciente a nuestro acervo de conversaciones, una frase en la
Puede, a veces, locahzar, pero es d t ero no un origen especifico: cual niego lo evidente. La cualidad de eco de la frase es lo que la hace irónica. Si yo
. d " icamente pue e en dijera, en el mismo mensaje, "no soy impaciente", no resonaría ningún eco, ya que 1ni
citado o "mterpreta o eco . h.. adolescente y le dice unas cuantas
(11) [La madi-e se pone fu,°?"ª con 8 ~ !JO amigo y yo nunca hemos hablado de mi impaciencia. Obsérvese que lo que cito
cosas duras. El Chico comenta iromcamente.] ecoicamente en (12) es bastante complejo: cito la afirmación, hecha por mi amigo
tantas veces, de que soy obsesiva, y la niego (ya que las negaciones de este tipo
-Nadie te qui"'."e como tu madre.e suele decir su madre, va sea un lugar común. incluyen necesariamente una alusión a su versión positiva, que queda negada), con lo
El chico está citando ya sea lo qu . 1 "" nte ft~se"r') en este caso que las cual también me cito a mí mis1na con burla, como si yo misma alguna vez hubiera
' .ó 't d (no haC!a a moce a ,
La actitud hacia Ja op1m.. n c1 ·a quena
a d.1e es 1o que hace i·rónico el enunciado, puesto negado ser obsesiva, lo cual, en vista de lo que cuento sobre mi trabajo y mi obsesión
h
madres quieren a sus !JOS mas , 1h hiante con Ja situación presente, que por terminarlo, sería absurdo. La ironía, al retomar charlas anteriores, refuerza las
que esa idea de madre amante contrasta, para e a ' ,
creencias compartidas por mi amigo y yo: no solamente significa "soy obsesiva'\ sino,
queda así indirectamente evaluada. d tros intercambios verbales está "como tú dices, soy obsesiva", o "como ya sabemos, soy obsesiva", o "como ya
Como una parte importante del contexto e nu:~estra disposición una serie de sabemos, quiero negar que soy obsesiva, pero lo soy", etc. Todos los significados que
formado por conversaciones anteriores, tenemos a tr s mismos Si las citamos tiene esta ironía, que son varios, desde criticarme a mí misma hasta criticar la
. t rlocutor o a noso o .
frases atribuibles a nuestro m e rt. se contexto podemos comprender Ja tendencia de mi amigo, e incluso de todos sus colegas psiquiatras, a poner rótulos a la
irónicamente, solamente los que compa irnos e
gente, dependen de la extensión o profundidad de las resonancias que adquiera el eco
ironía. Véase el siguiente caso. t do muchas veces, a Jo largo de en el contexto adecuado. Observemos, de paso, qué notablemente económica es una
. · · tra y hemos comen a
Un amigo mío es ps1qma : . . ¡ · ·cas generalmente en broma. Es un ironía: bastan unas pocas palabras, sin ni siquiera claves contextuales explícitas, para
los años, nuestras propias caract~nsticas ps1co obg¡es1·v'a y usamos esa categorización crear muchos significados implicados, quizá más de Jos que la misma ironista se ha
. tr s decir que yo soy os , .
lugar comun, para noso o , ¡· l tros amigos En un mensaje propuesto. En todo caso, la ironía es un recurso muy rentable, y no un procedimiento
· t b'énparaap1caraao · engorroso.
semi técnica con frecuencia, am t . 1 comentaba mis trabajos actuales,
electrónico que escribí recientemente a este arntgo, e
Cada relación humana contiene un caudal de charlas anteriores y temas ya
discutidos, y toda conversación nueva despierta necesariamente resonancias de ese
pasado. Las ironías son, entre otras cosas, comentarios más o menos burlones de ese
. a la teoría de Sperber y Wilson, Attardo atribuye a caudal lingüístico íntimo, o bien del caudal lingüístico de Ja comunidad: frases hechas,
IS Cfr. Attardo, 2000, pág. 807. En s~ ~í~ca. "M tion is nota sufficient condition of irony (... )
estos autores la idea de que todos los ~os s~n ~~on~~~ned :ntences are ironical" (pág. 805). Por ~upu~to refranes, o lo que dijo tal o cual persona conocida. La teoría del eco es perfectamente
This can be seen clearly fro~ the fact at.1: ;nSolamente los ecos que revelan una actitud de d1sta?c1a,
.ª compatible, por lo tanto, con un análisis metapragmático de la ironía.
no todas las oraciones inenc1?nadas s~n ir n1c~~ de S erber y Wilson. Por otra parte, Sperber y Wil~n La visión de Sperber y Wilson supera a las anteriores porque revela la
disociación o burla son iró?1cos, segun ~~ t~ iste en Jtilizar al referirse a esta teorí~ (lo que?acen trunbten
dimensión metapragmática de la ironía, y también porque reconoce la gama de
rechazan la noción de1nenetón, queAttm: o ~s 1989) Sperber y Wilson definieron la ironía, ~ ~us
otros autores por ejemplo Kreutz y Gluks erg, . . do ue'1nención"pareceindicarunarephca significados posibles de una ironía. Dejando muy atrás la idea de antífrasis o
'meros trabajos, cotno ''mención ec~ica", pero luego, ~ucien l~énuino que, sin embargo, sus críticos antinomia, Sperber y Wilson consideran que en la ironía -como en otras figuras-
:1acta, y los ecos irónicos no so,n réplicas exactas, aban onaron e ,
podemos recuperar una irilplicatura fuerte y vaiias implicaturas débiles. Partiendo de
siguen atribuyéndoles.
0RACIELA REYES METAPRAGMATICA. LENGUAJE SOBRE LENGUAJE, FICCIONES, PIGURAS
100 101

. d es la representación del pensamiento del hablante, y de que los Podríamos seguir agregando implicaturas del tipo de g. y h., muy débiles y
que un enuncia o . d ir suelen estar compuestos por vanas quizá no intencionales, a diferencia de las primeras, o al menos la primera, que
pensami~ntos suelen ser c01~:1:~º1~ t:~rí:~e la relevancia se distingue la implicatura podríamos considerar la implicatura fuerte del enunciado (13). 16
propos1c10nesynopor.unasol, ·m licaturas secundarías o débiles. La implicatura
1 La teoría del eco suele ser mal interpretada. Una de las causas de la
principal de un enunciado Y as P · d · t relación está siempre
principal es la más accesible ~l interlocu~, c~~~ tr~~:J:;1:~a:as débiles son más o incomprensión es la persistencia del concepto de mención, usado por Sperber y Wilson
(1981) en su primer trabajo sobre el terna, y descartado luego, como hemos dicho (cfr.
guiado por la búsqueda de rhe evandcia coa'ns ye':nás .débiles a medida que se alejan de la
ccesibles y se van ac1en o m · . . Nota 1). La c1itica más frecuente a Sperber y Wilson es que no todas las ironías son
menos a , . l" tu s débiles pueden ser mvoluntanas, a
id"mplicaturadcenlatrsalm.Aa'sl1%:~e~e eq:~".~~p~~:.~:!idas intencionalmente, y como tal
"1nenciones". Por mención suele entenderse la reproducción exacta de un enunciado
r..:erenc1a e ' localizable, y más aún si se habla de "mención ecoica", ya que se supone que el eco
repite un original recuperable. Estos críticos ri.o entienden el alcance de la noción de
reconocidas. · d · · ico típico
Véase cómo pueden distinguirse las implicaturas de un enuncia o iron . eco en la teoría de la relevancia, y exigen que cada frase ecoica tenga un original
(13) [Ana ve en un escaparate unos vestidos muy llamativos, que l,e ~~ecen de identificable (incluso un original en el mismo texto, como se propone en ciertos
mal gusto, y supone que a su amiga Elisa también le parecen de mal gusto . experimentos hechos por psicólogos Sperber y Wilson han dedicado numerosos
trabajos a explicar incansablemente su teoría y a analizar supuestos contraejemplos.
Ana: -Me tengo que comprar uno.
Irónicamente, pese a la difusión y éxito de la noción central de relevancia, la
El' y o descripción de ironía como eco sigue siendo rechazada, aceptada a medias o mal
isa: - Y · . ll · ma 0 por otros al ver
Ana imita declaraciones semejantes, dichas por e a mis 1 comprendida incluso por los seguidores de las teorías relevantistas (cfr. los trabajos
"t Tal declaración es cómica en este caso, puesto que os agrupados bajo el título "Symposium on irony" en Carston y Uchida, 1998).
algo que desean ? neces1 an. da a Elisa a interpretar su ironía con ningún tono de
vestidos son hornbles. Ana no ayud El. no necesita ayuda para entender su
voz entonación o gesto, confian o en que isa fl . te una serie de 3.2.2. La teoría de la simulación
' d 1 tid ya que las dos comparten, re ex1vamen '
~~;~ue:~~~ny p:e~:r:::ias~in efecto, Elisa comprende la ironía, pues contesta con otra
En las brevísimas notas que han señalado el camino para un estudio pragmático
semejante, siguiendo el juego. . . r lo tanto los
Analizándola como una situación estereotip1ca, y evitando po . . . la de la ironía, Grice observa que no se puede anunciar que uno va a ser irónico, diciendo
por ejemplo para decirlo irónicamente ... (aunque sí decimos, entre otras cosas, para
significados contextuaks más
Introducción sobre los eJemp1os po
d)ifíci~=~~p:!;:~e~~:~:\:::~s~~~=l~~a~~as
16
transmitidas por el enunciado irónico de (13): En cada contexto, el repertorio de implicaturas será diferente de las indicadas aquí, o se
(13) a. Los vestidos son horribles. . . . " presentarán con otra jerarquía. Recuérdese que las ironías son implicaturas particularizadas,
b. Hay gente de mal gusto que al ver esos vestidos dice o piensa Me teng0 totalmente dependientes del contexto. He preferido analizar las iinplicaturas débiles de un caso más o
inenos típico, que me parece más accesible para todos, y no de casos como los ejemplificados por
que comprar uno". ( 1O) y ( 12), cuyos contextos, que conozco, son muy particulares y deos, de 1nodo que la enumeración
c. Hay gente de mal gusto que usa ropa como esa. de significados irónicos se haría fatigosa, por la necesidad de añadir 1nás y más datos del contexto.
Pese a la sutileza de sus análisis, Sperber y Wilson nunca se plantean estos escrúpulos: recurren
d. Ana tiene gustos más sofisticados que esa gente. tranquilamente a la i1naginación de sus lectores para presentarles situaciones lingüísticas, confiando
e E lisa tiene gustos más sofisticados que esa gente. en que todos sean capaces de entender de la 1nis1na manera sus ejemplos. Este método de trabajo es
. . ~00 coherente con su idea central de que Ja interpretación mejor está garantizada por la búsqueda de
f. Ana y Elisa tienen mejor gusto que una o dos amigas comunes,
relevancia, pero, como sabrá quien haya intentado usar los eje1nplos de Relevance en una clase de
verían tan mal esos vestidos. f · prag1nática con alu1nnos de diversas procedencias lingüísticas y culturales, produce muchos
g Ana a veces siente el deseo alocado de comprarse ropa estra a1ana. desconciertos y tnalos entendidos, ya que algunas personas, con los datos ofrecidos por los autores,
h: A Ana no le vendría mal hacer algo alocado, aunque fuese un poco no pueden liegar fácihnente ni siquiera a la "explica.tura" de los ejemplos. Por supuesto, es imposible
esterilizar los ejemplos pm·a que su lenguaje quiera decir exactamente lo que el autor pretende, y no
hortera. inás, 1nenos, u otra cosa. Pero, ya que hablatnos de pragmática, debetnos mostrar que sotnos
conscientes de los riesgos de presentar eje1nplos de uso del lenguaje, con su contexto itnaginario,
provengan o no provengan de la realidad. Este problema-que se agudiza mucho cuando lo tratado es
la ironía- debe relacionarse- .con uno 1nás general que planteé en la Introducción: desde qué
extraterritorialidad tratatnos el lenguaje cuando analizmnos el lenguaje.
,I

¡:
i: ÜRAClELA REYES
i: 102 METAPJ{AGMATICA. LENGUAJE SOBRE LENGUAJE, FICCIONES, FIGURAS
103

decirlo metajoricamente.... ). Y esto es así, según Grice, porque ser irónico es fingir, y relevante, y si, reflexivamente, el locutor irónico es era .
el fingimiento, para que sea efectivo, no debe anunciarse (1989, pág. 54). ~eco~ozcan es_os rasgos de su enunciado, salvo que la iro~ía se;~~ i~~:n~~~:loc~tores
La idea de una dualidad de voces, una que se distancia, se disocia de la otra para 1rorna no prevrnta en la tradición pragmática dond 1 · .fi d al .(üpo de
criticarla, aparece también en el modelo polifónico de Duero! (1985) y ha reaparecido "s1b'gnl ificado del hablante", o sea el reconoci~ient: ~e ~~1k~~~ió~ ~·q~~~:re:ecm~1dón, el
:1 ha ante). Ir eun
en trabajos nuevos, procedentes de la lingüística y la psicologia, que proponen analizar
la ironía, o al menos algunas ironías, como pretense, simulación(cfr.Clark y Gerrig, La teoría ?~ Attardo reafirma que la ironía es un tipo de comunicación
1984, Haiman, 1998). El ironista, en estas descripciones, fmge decir algo, pero quiere pur~m~nte pragmaüca, co~textual e indirecta, pero rechaza la idea de que la ironía sea
decir otra cosa. A la luz de nuestra discusión del discurso representado, en el Capítulo un e~o~eno rnetacomun1cativo, o al menos no va más allá de dar or s
2, podemos preguntarnos si la diferencia entre citar y simular es una diferencia refldex1~1dad mutua propuesta por el modelo de Grice, reflexividad impi!scin~i~~da la
cualitativa. Creo que no, ya que las citas son recursos retóricos que producen ficciones. pro UCir Y esperar que se reconozca la violación de una máxima (en est edpalra
De todos modos, la teoría de la simulación es muy atractiva, permite prescindir de la máxima
. · do" , que habría que agregar al modelo) Sin embar eo caso
"sea apropia 1 , . e. , a
·!
noción para muchos incómoda de cita o eco, y además viene respaldada por una larga de Impropiedad sigue siendo central para un tratamiento de. la ironía ygn, : ~oc1on
'''11 tradición de estudios literarios sobre la ironía (véanse, por ejemplo, Booth, 1974; descartarla. Tengamos en cuenta, desde nuestra perspectiva meta ra , , f o e emos
ser apropiado o i~apropiado, un enunciado debe tener cierta rela¿ó1;:~ ~:· ;ue, para
1,
, ·I' Muecke, 1970).
: 1'
En estas teorías se propone que al enunciar una ironía, el hablante crea un :~~~~~~!1~~1 :~;~~:~· Y eso nos llevará a reconsiderar las propiedades de ~;;::t~
contexto ficticio. En ese contexto el ironista ha proyectado una imagen de sí mismo
como un ingenuo que dice cosas ridículas, insensatas o tontas a un imaginario
interlocutor igualmente ingenuo. Para crear ese efecto, el ironista a veces cambia la 3.2.4. La alusión a una nonna
voz, el gesto, el tono, registro o entonación de sus palabras. A través de esta
comunicación el hablante no ingenuo, que es el ironista fingidor, se comunica con su
1 cómplice igualmente listo. Para algunos (por ejemplo Clift, 1999), la relación entre los t Im~ginemos que María ha hecho una confidencia delicada a su amiga Luisa y
se en. era uego de que Luisa ha divulgado su secreto orbi et urbi Mari ch-í
'1·¡1 contextos es que uno es marco del otro, lo que serviría para indicar que la ironía es una
reaccionar con alguno de los siguientes enunciados: . a po a
! forma de metacomunicación (sin duda lo es, aunque no acudamos a este esquema). En
(14) a. -Qué bien.
.~I esta descripción del fenómeno, con sus cuatro personajes corno elenco rnínilno, hay la
,.~
' 1

misma polifonía que en la teoría del eco: dos voces y, por decirlo asi, dos orejas, b. -Qué buena amiga.
:•1' siempre disociadas. La diferencia, en este acercamiento al asunto, es que lo dicho no c. -Qué suerte tener buenas amigas.
·::
tiene las cualidades lingüísticas señaladas por las demás teorías pragmáticas: ni es una d. -No espero otra cosa de un~ amiga.
transgresión a las expectativas griceanas del intercambio de comunicación, ni es un e. -Luisa es una traidora.
eco, sino que es un enunciado inapropiado en contexto. El problema es ponerse de
f. -Compré geranios rosados.
acuerdo sobre qué es lo inapropiado.
g. -Es un ángulo recto.
. Estamh~s. trabajando con una situación estereotípica, lo que tiene la ventaJ·a de
3.2.3. Lo inapropiado redueIr mue rn1mo nuestro contexto (cfr N 0 ta 2) E
figuran gera · . , · · n ese contexto estereotípico no
. mos. m angu1os rectos, de modo que los enunciados f. y g .. son ara
Según Attardo, un enunciado es apropiado si todas sus presuposiciones son nosotr?d smsen!Idos. En cambio, los enunciados a-d son evidentemente irónic;s py el
idénticas o compatibles con las presuposiciones del contexto en que es emitido (2000, ~:~º 1 3L 0 e., en. cambio, no es irónico, sino que parece una evaluación since;a de
pág. 818). Esta característica tiene que ver con la máxima de verdad, pero no con la de ª'. 0 que importa aquí es cómo podemos discernir que algunos de estos
relevancia (que señala, en el modelo de Grice, lo que viene al caso, lo que es enun~iado~, en ~uestro contexto restringido, son irónicos y otros no. Si los lectores
secnencialrnente adecuado), y por lo tanto hay faltas de propiedad que son relevantes, P1;1~ an a Imagmru: más reacciones de María, verán que hay muchísimas posibles
y oü·as que no. La ironía cae en el primer grupo: "irony is essencially an inappropriate Ironi~as Y no irónicas, Y que las irónicas tienen una propiedad en común un~
utterance which is nonetheless relevan! to the context" (pág. 823). Attardo considera ~r~t1ed~d que da acceso a las ironías. Esa propiedad es metapragmática· es la al~sión
que un enunciado es irónico si es contextuahnente inapropiado pero al mismo tiempo e 1. ~ra ªª una norma Opxpectativa deseable, a una conducta esperabie a un valor
relevante, si es intencionát y se emite con conciencia de que es inapropiado pero positivo. '

'

1
104 GRACIEI ,A REYES METAPRAGMATfCA. LENGUAJE SOBRE LENGUAJE, FICCIONES, FIGURAS
105

En (14), la hablante reproduce lugares comunes de complacencia por tener abundancia d~ citas irónicas y los resultados de ciertos experimentos de !abo t .
buenas amigas: lo que solemos decir cuando celebramos la amistad. Toda la reflexión que parecen mdicar que las ironías d . . ra ono,
irónica se centra en el tema de la amistad, que parece ser entendida universalmente de . , . ,
l
facilidad (cfr. Kreutz y Gluksberg ~~;'1) a~ son ec01tcas, se perciben con mayor
, gunos au ores postulan dos clases d
la misma manera (por eso el ejemplo del Hbuen a1nigo" se usa con tanta frecuencia en ~ron1a,. ,1as ecoicas y las no ecoicas; estas últimas se explican por las teorías e
los trabajos sobre la ironía, por otra parte). Un buen amigo no traiciona secretos, no mversion o la negación implícita (cfr., entre otros, Carston y Uchida, 1998). de la
miente, está siempre ahí para ayudamos, etc. Cualquier desviación de esta realidad
1 No podemo~ ac~ptarque haya dos clases de ironía. Es verdad quesepuedec'tar
deseable es digna de reprobación. El valor que subyace no se cuestiona, sino que se o qu~ otro dijo anadiendole una mtención irónica, como en diálogos de este 1/ o
evoca para ratificarlo, frente a una situación que, lamentablemente, es discrepante. semejantes a las preguntas eco que vimos en el Capítulo 2: p '
La parte literal de la ironía puede referirse también a un deseo común, como que (15) A: -Estoy cansado. .
haga buen tiempo, el autobús no tarde o la comida esté rica. Aludiendo a ese tipo de
B: (irónicamente) ¿Cansado? ¿El señor está cansado?
realidad positiva, se pueden hacer comentarios donde la ironía es meramente amistosa,
una ratificación de acuerdos 1nínimos, incluso con interlocutores desconocidos, como Pero es:as ironías difieren de otras simplemente en que el texto citado está en 1
cuando decimos, para quejamos del tiempo malo, qué buen tiempo, ¿no? y casos enlomo o es facilmente recuperable. Creo, con Sperber y Wilson, que en todas l:s
semejantes. Los pensamientos positivos, deseables, Se evocan para contraponerlos a ironías se percibe lo que ellos llaman un eco y que yo llamare' in· · 1
't ( t d'd . ' as s1mp emente una
una realidad amarga y reforzar así acuerdos comunes sobre lo que está bien o debe c1 a en ~~ I a en el sentido amplio que propuse en el capítulo anterior) de una frase
!
esperarse. Si no hubiese propiedades, conductas o deseos aceptados culturalmente sin reconoc1 e P?r su forma.y su contenido, que se caracteriza por expresar, 'sobre todo en
discusión, tampoco habria ironías, porque los hablantes, si carecen del dato cultural y la conv~rsac1on, apetencias o expectativas normales de la comunidad má
social al que alude la parte literal de la ironía, no pueden hacer pie e inferir todos los ºº?~adicha: por u~a situación determinada, que queda así evaluada neg~tiva:n~~~e~~
significados implícitos. La valoración del significado literal puede depender también ~xt~ e una e ase de ironía no citativa, ni en la conversación ni en otros textos per~ los
de la comunidad formada por dos amigos, como hemos visto en (12), y no e a conversación son los que recurren con más frecuencia a citas im Ií~itas
necesariamente de los valores de toda la sociedad, pero eso no cambia las cosas: hagan resonar un pensamiento estereotípico, fácilmente accesible y ac~ table ci;',°
siempre hay algo presupuesto y aceptado tácitamente por las partes que intervienen en ~onía produce una alteración en el valor asertivo de un enunciado: el habla~te afi~m:
la comunicación, y sobre eso se monta el significado irónico. os cosas a la ve~, por lo menos, y de una de ellas, la explícita, no se hace car o del
todo o .en parte. 81 el texto no se percibe como ya usado, si no está "pragmatizaJ0 .: en
:!~~~~~º que v~mos en e~· capítulo 2, el tono, la intención y el contexto Je dará¡; el
. fo . lo ya vrnto o, mejor, de lo posible: la ironía es ante todo el resultado de una
4. LA IRONÍA, FENÓMENO METAPRAGMÁTICO m e~ncia. Su ~sque~a enunciativo es exactamente igual al de cualquier cita. Lo que
cam ia e.s la, mtenc1ón fundamental: más allá de un comentario doble ha un
La ironía es un tipo de cita. Si no se atiende a su lado reflexivo, es imposible c?mentano cnhco, hay lo que Linda Hutcheon llama "critica! edge", que es ~ondrción
explicarla bien. La teoría polifónica de Duero! propuso hace ya varios años una sine qua non de lo que solemos entender por ironía lingu"ística· "lrony's · ·
edge Is never b t d . d . . appra1smg
descripción correcta de la ironía como conflicto de voces, en el marco de una fo . . a ~en an ' m eed, is what makes irony work differently from other
concepción del discurso como lugar de diálogo entre voces distintas y a menudo árm~ lh1ch 1tm1ght structurally seem.to resemble (metaphor, allegory, puns)" (1994,
contrapuestas. La teoría del eco de Sperber y Wilson logró, en los últimos años, y P g., 2 · Recuérde~e que Sperber Y W1lson, en la misma línea de análisis, definen Ja
gracias a la difusión de la pragmática y de la idea de relevancia, instigar a los lingüistas ~~;;~como una aclltud hacia un contenido del que el hablante se hace eco (1998, pág.
a ampliar su noción de representación textual para considerar la ironía un caso de
representación. Como hemos dicho arriba, muchos de los que aceptan esta teoria la
aceptan a medias: dicen que solamente se puede probar que algunas ironías son ecos,
no todas, ya que no en todas se puede localizar el origen del eco. Sperber y Wilson han
insistido en que no es necesario localizar una fuente determinada, pero para sus criticos
17
persiste el problema de que, entonces, cualquier frase podría ser eco de otra • Ante la

17 El proble1na se resuelve auto1náticatnente, dentro del 1narco téorico de Sperber y Wilson,


puesto que la búsqueda de relevancia da como resultado la 1nejor interpretación posible, en contexto,

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106 ÜRACIELA REYES
METAPRAGMATICA. LENGUAJE SOBRE LENGUAJE, FICCIONES, FIGURAS
107

Toda cita contiene al menos un mínimo comentario reflexivo. En el caso de la , Los adverbio~ usados en estos ejemplos son indicadores metapragmáticos, que
ironía el comentario es la propiedad más importante: es un comentario negativo sobre evaluan y realzan (lud1camente, en estos casos) la enunciación misma y por eso sirven
el co¿tenido de la proposición citada. Algunos autores proponen que hay ironías para indicar contenidos irónicos, en el contexto adecuado. Pero la ironía no necesita
"positivas", en que todo sucede a la inversa: se cita una proposición que expresa un marcas, ya que el c?mentario, como en toda cita, está siempre implícito, pues la voz
contenido negativo para afirmar irónicamente algo positivo. Un ejemplo de esto sería del hablante se qmebra, deja oír una disonancia, queda subsumida en un marco
(16): comentativo.
(16). (Dicho a una adolescente que suele quejarse de su apariencia, con la El problema prin~~pal para aceptar una teoría citativa es cómo reconocer que
intención de felicitarla por un nuevo vestido o peinado:) Estás feísima. una frase es representac10n de otra, cuando no hay indicios lingüísticos de cita. Esta
Esta es una cita implícita de lo que la adolescente dice o bien deun pensamiento c~estió.n se puede.reso.lver solo en parte, pero lo mismo pasa con toda interpretación:
que se le puede atribuir burlonarnente, y que se contrapone con la situación sigue siendo un misten o, y así lo reconocen muchos pragmatistas, entre ellos Levinson
contrastante. Estas ironías existen, pero en porcentajes mínimos, lo cual no debe (2000,passim), cómo justificamos las inferencias contextuales, cuál es el proceso por
extrañamos, porque hacer una afirmación literalmente negativa para indicar a~~o . el cual reconstruimos lo implícito.
positivo es sumamente arriesgada: el interlocutor _puede to~arse la" ex~r~s10~ Nuestra profesión vitalicia de hablantes, heredada además, nos pennite tener
literalmente, o casi literalmente, y el hablante quedar mal. Las ironías pos1tivas una serie de conocimientos sobre el uso del lenguaje, entre ellos el conocimiento de
contravienen instintos tan persistentes sobre el mantenimiento de la imagen de los qué. frases son usuales, repetidas, más usadas. Los lugares comunes, las fórmulas
interlocutores, que no se hacen sino en casos muy contados, y no pueden ser muy hab1~ales, las verdades generales, han quedado relativamente congelados y se
creativas ni menos tomarse como ejemplos normales de ironía. perctben como textos ya usados, como textos en que se condensan muchas voces. El
El primer comentario reflexivo de una ironía prototípica (del tipo de nuestro reconocimiento de la cita irónica puede deberse a que la frase ha sido pronunciada en
caso (1), qué amable es Elena) podría parafrasearse así: "Esto que digo está mal la misma conversación, o es ooa frase dicha por personas conocidas de tos
dicho", o, quizá, "El lenguaje no siempre describe correctamente la realidad", o, i~t"':loc~tores, o. fácil de atribuir a colegas y amistades. Pero otros fragmentos
también, "Esta expresión, que se usa nmmalmente para decir algo bueno, la estoy hngüísl!cos provienen del acervo de la comunidad: pueden reconocerse fácilmente
usando yo para decir algo malo". Estos come?tarios básic~s construyen la ironía c~~o como fórmulas y expresiones muy usadas, que indican normas o deseos de casi todo el
mal uso deliberado del lenguaje, y son negativos, despectivos, revelan la conv1cc1on, mundo. Los fogares comunes que reflejan las opiniones aceptadas, o las expectativas, o
que todos tenemos, de que el lenguaje engaña. Mientras la mentira, tan parecida a la los deseos o IiuSiones de la comunidad son candidatos a ser ironizados, porque los
ironía y ejemplo típico de transgresión a la máxima de verdad, es un modo de sacar hablantes están atentos siempre a que la vida no es como debería ser.
provecho de la capacidad del lenguaje para engañar, la ironía es un comentano sobre Estas frases usadas que se emplean como tales se refieren a los estereotipos de
esa misma capacidad. A través de esa pseudomentira intencional se enfoca la situación lo bueno en una comunidad, como por ejemplo qué bien, qué mal, pero mira qué
que es objeto principal de la ironía, la situación discrepante con lo non,nal o d":'eable; amable, eres un genio, me encanta tal cosa, es una gran amiga, lindo día, no me
que queda así evaluada negativamente. Hay, pues, un doble comentano negativo: m1 digas, no hay nada como.. ., esto es vida, qué gusto, etc. etc. Estas expresiones no son
lenguaje está mal usado porque esta situación discrepa de lo bueno, deseable o ~ormal. irónicas por naturaleza, ya que no tenemos en español expresiones que funcionen
La parte explícita de la ironía, que es la frase evocada, no cumple con lo que Sie°'.pre siempre como ironías (parecería que sí existen en otras lenguas), pero nótese qué fácil
exigimos del lenguaje: que sea apropiado a la situación, que nos sirva para describir la sería imaginar un contexto en que esas frases, y otras similares, adquirieran significado
realidad. irónico .. Algunas ironías no recurren a frases reconocibles, y esas son las que corren
El comentario metacomunicativo puede marcarse con entonaciones, tonos, más peligro de no ser captadas por los interlocutores, si no hay señales que permitan
gestos, o bien con expresiones como sin duda, realmente, por supuesto, etc., que inferirlas. Pero, como en cualquier tipo de comunicación, el hablante tiene que 1

indican acuerdos inexistentes, y que suelen acompañar expresiones exageradamente ocuparse de guiar al oyente, para que este haga las inferencias que correspondan. Una 1:
positivas o rimbombantes: manera de guiarlo es emitir frases tan excesivamente positivas que no puedan ser
11
(17) a. Es una verdadera obra maestra. tomadas en serio, como las que vimos en (17). Y por supuesto tenemos la entonación
I'
b. Es algo sublime, realmente. la mirada, y sobre todo el tono de voz. En mi comunidad las ironías se dicen con ciert~
i
alargamiento y apertura de las vocales: Mirá qué bieeeeen. l 1.
c. Es una obra excelsa, sin duda.
· Mientras no se entienda que la cita es también cita de lenguaje posible no
necesariamente de un texil'J anterior, sino de un texto posible, no se podrá compre¿der I!

I,

'

---···r·.·. ,,.•
ÜRACIELA REYES METAPRAGMATICA. LENGUAJE SOBRE LENGUAJE, J1JCCIONES, FIGURAS
108 109

que la ironía es siempre una cita. Los lingüistas, que dedican tanto tiempo a inventar su ir?~ía: En el ejemplo (11), por ejemplo, el chico (recriminado por su madre) que
ejemplos -los ejemplos reconstruidos son muestras de lenguaje posible-, deberían ser dice "?mcamenteNadie te quiere como tu madre está comentando esa frase, opinando
los primeros en admitir que el lenguaje puede representarse sin ningún modelo 1~plfc1tamente sobre l~s que hacen esa afirmación u otras semejantes (su madre, en
anterior, simplemente porque la práctica nos permite imaginar lenguaje metido en pnmer lugar) Y reflex10nando amargamente sobre la diferencia con la situación
contextos estereotípicos. En todo caso, los ecos son más fáciles de descubrir de lo que P.res~te, o reflexionando sobre el amor maternal, que exige esos malos tratos, etc. Los
creen algunos pragmatistas, que olvidan que la práctica lingüística deja un sedimento s1gmficados son muchos, pero quedan contrapuestas ciertas verdades cristalizadas en
de frases reconocibles, asociadas automáticamente a ciertas situaciones agradables. Las fras~s hechas c.on las verrlades que se tienen delante de los ojos. Por eso es muy
frases de satisfacción están ligadas por los hábitos lingüísticos a ciertos estados de pos1bl~ que la idea. de "ironía de la vida" o "ironía de las cosas" provenga de una
cosas, y por lo tanto resultan instantáneamente díscrepantes si no se refieren a los extensión del térmmo, que pasaría de ser la designación retórica de un tipo de
estereotipos. La ironía subvierte esa relación automática entre un lugar común y una estrategia verbal a ser una evaluación de ciertos tipos de situaciones. Esta extensión
situación, o sea se burla de los usos habituales de la lengua, de las rutinas, pero sigue (que solo puedo conjeturar, a falta de modos de comprobarla) captaría lo esencial de la
siendo un comentario amargo sobre el hecho de que el mundo no es como esas rutinas ironía verbal, que es la incongruencia, y lo propondría como cualidad de ciertas
lingüísticas amables harían esperar. situaciones? consideradas in~~ngruentes de por sí. De la misma manera que decitnos,
El conocimiento del uso habitual (que, como hemos visto, potencia la po~ e~tenstón, que una mus1ca, un cuadro y también una persona son irónicos,
producción de implicaturas generalizadas y hace más ágil la comunicación; cfr. adjudicándoles el atributo de producir ironías, podemos decir que un estado de cosas
Capítulo 1) constituye una parte importante de la "cultura del lenguaje'', el conjunto es irónico, aplicando a la realidad una denominación metapragmática que distingue
de rasgos que caracteriza el uso del lenguaje en una cierta comunidad y es ~1er:os us?s .del lenguaje. El adjetivo irónico sería, en ese caso, una metáfora, y la
patrimonio de todos los hablantes. La ironía es siempre exclusivamente contextual, iroma, pracbca verbal muy cultivada y apreciada, sería un punto de referencia para
pero -sobre todo la ironía espontánea, la del coloquio- evoca la dimensión de los ~~tender el mundo. Lo que mostraría la penetración de la metaprag¡nática en nuestros
hábitos lingüísticos y los desestabiliza (cuando se vuelve previsible, pasa a ser JUICIOS sobre las realidades no lingüísticas.
hábito y pierde su fuerza). Estamos ante un un fenómeno metapragmático por La ,i~onía es un tema predilecto de la pragmática, ya que juega con lo mismo que
excelencia, que supone por un lado un conocimiento de los usos habituales del la pralfllallca trata de exphcar: la comunicación. Si partimos de los presupuestos
lenguaje, por otro cierta desconfianza sobre la capacidad del lenguaje para adecuarse ~perat1vos de nuestra disciplina, aceptamos que los hablantes son racionales, que
a la realidad (la ironía se burla de esa adecuación) y por otro hace servir el lenguaje, mientan de ?uena fe comunwarse y entenderse, que tienen ciertos propósitos, y que ',,I
lúdicamente, para hablar "mal". La ironía es un "mal uso" intencional creado entre para cumplirlos confian en una coordinación entre ellos, en un sistema de mutuo 11 ~

los interlocutores, ya que no existe sin dos intenciones, la del hablante Y la de su acuerdo en las acciones lingüísticas. De modo que en pragmática un hablante es il"
oyente (cfr. Hutcheon, 1994, cap. 5). irónico por algo que forzosamente tiene que ver con la eficacia de la comunicación. y
Los enunciados irónicos operan simultáneamente en el espacio discontinuo de la por eso, en lu~ar de ~ecir lo que piensa, dice otra cosa, contradictoria, y expresa
referencia (referencia de la palabra irónica -incongruente y crítica- a la realidad) Y en ~demás una.a~btnd crílica, gener.almente negativa. Como se ve, el planteamiento de la
el espacio continuo de la resonancia (resonancia entre la palabra irónica y el uso ironía ya es iromco, porque consiste en afirmar que los hablantes quieren comunicarse
habitual del lenguaje, mediante citas de frases más o menos identificables). Sí se le con eficacia y sin embargo dicen a propósito cosas que no son apropiadas. Pero así es,
quita esta doble reflexión esencial, la ironía no es ironía, sino simplemente mal uso, porque la ironía compendia, incluso en las escuetas manifestaciones cotidianas, toda
mentira, burla. una teorí~ ~obre.el uso del lenguaje y simultáneamente sobre la realidad {nadie, salvo
Como vimos en el apartado 1, en casi todos los trabajos sobre ironía se distingue un gramallco, piensa en el lenguaje solo por amor al lenguaje). En manifestaciones
18 más complejas y más sutiles (también más ambiguas), en la literatura, en el arte, en la
de entrada entre la verbal y la situacional, como sí fueran dos fenómenos dístíntos •
No creo que lo sean. A lo largo de este capítulo, y especialmente al analizar los cultura popular, es siempre un tratado sobre algo y responde a una ideología. Ya
ejemplos, hemos visto que el hablante irónico percibe y expresa wia incongruencia hemos di?ho,.~dem,ás: que las relaciones comunicativas son relaciones de poder, y que
entre la situación imaginaria evocada por una frase y la situación real a la que se refiere la com~mcac10n iromca refuerza alianzas o las destruye, señala objetos de desprecio,
. m~ca hn1~tes, provoca reacciones, y a la vez es más o menos impune: no es lo mismo
cnllcar ~biertamente que criticar irónicamente, en algunos casos. Todos estos efectos y
18 Dicen Sperber y Wilson: "There may exist interesting relations among (different forms), la posibihdad de expresar tantas creencias y opiniones hacen a la ironía enomemente
but there is no reason to expeet them to fall under a single unified theory ofirony", 1984, pág. 130. pragmática: eficiente y r~ptable, si no siempre humorística.
Véase una excepción a esta línea de análisis en Litt1nan y Mey, 1991.
110 ÜRACIELA REYES

Para terminar, podemos volver a lo enunciado al p1incipio. La ironía es una


operación compleja que consta de tres tipos de comentario metapragmático:
comentario sobre el lenguaje y la realidad, sobre los usos del lenguaje y sobre los
acuerdos con el interlocutor. Dicho más brevemente: comentario sobre la referencia,
sobre la resonancia y sobre la conexión. La primera reflexión subvierte el lenguaje y
refleja lúdicamente nuestras propias aprensiones sobre su adecuación. La segunda OBRAS CITADAS
arranca de nuestros saberes metapragmáticos sobre có1no se usa el lenguaje
habitualmente (lo que, como hemos visto en el Capítulo 1, facilita las inferencias, y por
lo tanto también el reconocimiento de las citas). La tercera incluye y excluye a grupos
de hablantes.
Nótese, a propósito de este tercer nivel reflexivo, que aun en los casos en que la
víctima de la ironía es el interlocutor, le exigimos complicidad, y por eso es tan
exasperante recibir una ironía que va contra uno mismo 19 • En (18) la profesora
devuelve a su alumno un examen reprobado, y le dice irónicamente: AITARDO, S. (2000): "Irony as relevan! inapprop1iateness" en Journal ofPragmatics 32
págs. 793-826. ' ' '
(18) Has estado genial.
La profesora obliga al alunmo a estar de acuerdo con ella, no tanto en el juicio AUTHIER-REVUZ, J. (1995): Ces mots qui ne vont pos de soi. Boucles réflexives et non-
coi"ncidences du dire. Pmis, Lm·ousse.
negativo sobre su persona cuanto en el hecho de que los dos se entienden bien, es
decir, lo fuerza a un acuerdo metapragmático, lo obliga a ser su cómplice en la BATESON, G. (1972): Steps toan Ecology ofMind. New York, Ballantine.
comunicación implícita. BLACKEMORE, D. (1993): "The Relevance ofRefonnulations", Language andLiterature, 2,
En suma: la ironía como metapragmática es un procedimiento comunicativo que págs. 101-120.
consiste en usar reflexivamente expresiones frecuentemente habituales, con resonancia BLOMMAERT, J. (Ed.) (1999): Languageldeological Debates. Berlin, Walterde Gruyter.
para los hablantes (muchas veces, ecos o citas identificables) que expresan ciertos (BAJTIN) BAKHTIN, M. M. (1981 ): TheDialogic Imagination. Editado por M. Holquist, trad.
supuestos positivos o deseables; estas expresiones reconocibles resultan inapropiadas y por C. Emerson y M. Holquist. Austin, University ofTexas Press.
evalúan una situación a través de un doble comentario implícito sobre el poder B001H, W. (1974): A Rethoric of/rony. Chicago, University ofChicago Press.
descriptivo del lenguaje y sobre sus usos habituales, y añade además un comentario BROWN, P. Y S. LEVINSON (1987): Po/iteness. Sorne Universals in Language Use.
sobre los acuerdos tácitos con el interlocutor. Cambridge, Cambridge University Press.
Incluso cuando usamos el lenguaje al revés, funciona. Es cierto que las ironías BYBEE, J, W. PAGLIDCA Y R. PERKINS (1991): "Back to the Future", en Traugotty Heine
revelan nuestra desconfianza sobre el lenguaje y sus poderes de engaño y confusión. (1991),págs.17-58.
Pero también nos dan un mentís (irónico, sin duda): lo usemos como lo usemos, el CAFFI, C. (1998). "Metapragmatics", en J. Mey, (Ed.), Concise Encyclopedia ofPragmatics.
lenguaje sirve o puede servir, porque el acuerdo entre los hablantes, esa coordinación Oxford, Elsevier.
misteriosa que nos une, apoyada en conocimientos compartidos sobre la realidad y CAMERON, R. (1998): "A Variable Syntax of Speech, Gesture and Sound Effect: Direct
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CLARK, H. Y R. GERRIG (1984): "On the Pretense Theory oflrony",Journal o/Experimental


19
Psychology: General, 113, págs. 121-126.
Las ironías dirigidas contra el interlocutor suelen llamarse sarcas1nos (véase entre otros
Mizzau, 1984; Sperber y Wilson, 198 l ). Por 10 general, el sarcas1no requiere una intención agresiva CLIFT, R. (1999): "lrony in Conversation", Language in Society, 28, págs. 523-553.
evidente, marcada por cje1nplo por una entonación peculiar. Si bien decitnos que una persona es DUCROT, O. (1980): "Analyse de textes et linguistique de l'énonciation", en O, Ducrotetal.,
sarcástica, no aplicmnos ese.:·@djetivo a las situaciones, de inodo que las situaciones pueden ser Les mots du discour:S,. Paris, Minuit.
irónicas, pero no sarcásticas.
-------- ----

112 ÜRACIELA REYES


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3.3.3. El caso del imperfecto ............................................................. 41
3.3.4. El subjuntivo ........................................................................... 44
3.4. Alcance de la noción de elección .......................................................... 45
3.5. Funcionalismo y pragmática ................................................................. 46
3.6. La cortesía como metapragmática ........................................................ 50
¡

1
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116 GRACIELA REYES

CAPÍTUL02
La representación de discurso ............................................................................. 55
l. La reflexividad .................................................................................................... 55
2. La noción de lenguaje semejante ........................................................................ 61
3. Representación y evaluación .............................................................................. 67
4. Modelo estándar de los tipos de cita ................................................................... 69
5. Las actividades reflexivas ................................................................................... 72
5.1. Conexión intra e intertextual ................................................................. 74
5.2. Representación mimética ...................................................................... 77
5.3. Paráfrasis ............................................................................................... 83

CAPÍTUL03
La ironía .............................................................................................................. 87
l. Estructura básica de las ironías verbales y situacionales .................................... 87
2. Deficiencias de las descripciones tradicionales .................................................. 92
3. Las teorias pragmáticas sobre la ironía ............................................................... 94
3.1. La ironía como transgresión deliberada de la verdad ........................... 94
3.2. La ironía como enunciado polifónico ................................................... 97
3 .2.1. La teoría del eco ...................................................................... 97
3.2.2. La teoría de la simulación ..................................................... 101
3.2.3. Lo inapropiado ...................................................................... 102
3.2.4. La alusión a una norma ......................................................... 103
4. La ironía, fenómeno metapragmático ............................................................... 104

OBRAS CITADAS ............................................................................................. 111

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