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Pensamiento #18

Universitario

Jaqueline Vassallo Decorriendo el velo de la


presencia femenina en la Universidad Nacional
de Córdoba (1884-1920). Natalia Bustelo Construir
una universidad científica y social. Los proyectos
institucionales de los primeros reformistas argentinos
(1918-1923). Ernesto Villanueva y Aritz Recalde
Reformistas radicales y reformistas peronistas: debates
parlamentarios y nueva legislación entre 1946 y 1955.
Manuel Gil Antón La universidad hoy: un viaje a la
incoherencia. Roberto Follari Repensar la Reforma:
un epitafio para la cátedra.

AÑO 18 • NÚMERO 18 - ARGENTINA, SEPTIEMBRE DE 2019 - ISSN 0327 - 9901


Pensamiento
Universitario

#18
Pensamiento
Universitario

Consejo Asesor
Sonia Alvarez de Trogliero
Sonia Araujo
Alcira Argumedo
Fernanda Beigel Colaboraciones
Denis Baranger
en el exterior
Ana Barletta
Rodrigo Arocena (UDELAR)
Enrique Barés
Carlos Alberto Torres (UCLA)
Dora Barrancos
Comité de Antonio Camou
Daniel Levy (Suny)
Víctor Manuel Gómez
Redacción María Caldelari
Campos (UNC - Colombia)
Martín Aiello Sandra Carli
Luis Antonio Cunha (UFRJ-BR)
Daniela Atairo Paula Carlino
Carmen García Guadilla
Pablo Beneitone Adriana Chiroleu
(CENDES-Venezuela)
Victoria Kandel Cayetano De Lella
Adrian Acosta Silva
Lucas Krotsch Gabriela Diker
(Universidad de
Laura Rovelli Gloria Edelstein
Guadalajara - México)
Martín Unzué Ana Fanelli
Manuel Gil Antón
Daniela Perrotta Roberto Follari
(Colegio de México)
María Paula Pierella Juan Carlos Geneyro
Roxana Puig Diego Hurtado de Mendoza
Edith Litwin +
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Carlos Mazzola
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Marcela Mollis www.hernandelafuente.com.ar
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Marcelo Prati Federico Joselevich Puiggrós
Carlos Prego www.federicojoselevich.com
Adriana Puiggrós
Claudio Suásnabar
Emilio Tenti Fanfani
Leonardo Vaccarezza
Mariana Versino Pensamiento Universitario ©
Ernesto Villanueva es una publicación
independiente de
periodicidad anual.
La revista no se hace
cargo de de las opiniones
contenidas en los artículos,
que corren por cuenta exclusiva
de sus autores.
Sumario
Presentación Pag. 9
Por Juan Carlos Geneyro

• ARTÍCULOS
Decorriendo el velo de la presencia femenina
en la Universidad Nacional de Córdoba (1884-1920) Pag. 15
Por Jaqueline Vassallo

Construir una universidad científica y social. Los proyectos


institucionales de los primeros reformistas argentinos (1918-1923) Pag. 28
Por Natalia Bustelo

Reformistas radicales y reformistas peronistas:


debates parlamentarios y nueva legislación entre 1946 y 1955 Pag. 44
Por Ernesto Villanueva y Aritz Recalde

•• ENSAYOS
La universidad hoy: un viaje a la incoherencia Pag. 59
Por Manuel Gil Antón

Repensar la Reforma: un epitafio para la cátedra Pag. 68


Por Roberto Follari

••• CRÓNICAS
Un Centenario en disputa: balance provisorio de la CRES 2018 Pag. 75
Por Yamile Socolovsky

•••• RESEÑAS
Mauro Benente (comp.) (2018). La universidad se pinta de pueblo: educación
superior, democracia y derechos humanos. 1a ed, José C. Paz: Edunpaz. Pag. 79
por Micaela Battisacchi

Antonio Camou, Marcelo Prati y Sebastián Varela (coords.) (2018).


¿Ya votaste?: experiencias de participación política de jóvenes estudiantes
de la UNLP. La Plata: EDULP. Pag. 83
por Agustina Luques

Rinesi, Eduardo; Peluso, Natalia y Ríos, Leticia (Comp.) (2018).


Las Libertades que faltan. Dimensiones latinoamericanas y legados
democráticos de la Reforma Universitaria de 1918. Pag. 88
por María Luz Prados

Villanueva, E. (2019).
Universidad y Nación: asignaturas pendientes. Pag. 92
Por Julián Dércoli
Presentación
Por Juan Carlos Geneyro

Hace poco más de 25 años, en noviembre de académicas y curriculares, como tampoco ge-
1993, se publicó el primer número de la Revista neró un mayor autoconocimiento como orga-
Pensamiento Universitario dirigida por Pedro nización compleja.
Krotsch; distinguido académico y amigo entra- También, señaló que fue a partir de la Re-
ñable. En su Presentación, apuntó entonces al- forma de 1918 que comenzó a perfilarse un mo-
gunas notas sobre la situación y desafíos de la delo latinoamericano de universidad; modelo
universidad argentina, entre las cuales pueden que orientó el quehacer universitario durante
destacarse las siguientes: una reconfiguración décadas, para señalar luego que los procesos de
del papel del Estado y de sus relaciones con globalización le requerían ahora la construcción
las universidades; renovadas demandas socia- de un discurso alternativo a la matriz conceptual que
les; un contexto intelectual caracterizado por hace de la empresa y del mercado el supuesto único de
la fractura de la memoria y por la debilidad de toda racionalidad. Reivindicaba, además, la au-
los instrumentos conceptuales disponibles pa- tonomía de la universidad y su independencia
ra comprender los problemas que confrontaba de los poderes económicos, políticos y religiosos; así
la propia universidad, lo que demandaba en su como el pensamiento crítico y la necesidad de
opinión actualizar la reflexión teórica y fundar generar una visión estratégica de largo plazo
los juicios sobre su acontecer con más informa- que atendiera a los grandes retos de presente
ción empírica. Advertía, además, que si bien la y los aún inciertos del futuro.
universidad en Argentina se había multiplica- Desde ese contexto, planteó que la Revis-
do institucionalmente a partir de los años 60’, ta pretendía contribuir al pensamiento y a la
así como su matrícula, no hubo una amplia- reflexión para un mayor y mejor autoconoci-
ción significativa de sus comunidades cientí- miento de la universidad y de sus actores, in-
ficas ni una actualización de sus estructuras dagando en todas aquellas problemáticas pro-

Pensamiento Universitario • Nº 18

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PRESENTACIÓN

pias de sus actividades y sus relaciones con el gación de la Ley de Educación Superior (LES)
entorno social, así como ser un instrumento y en 1995, que estableció pautas e instancias de
un estímulo para la investigación. Sin duda que funcionamiento tendientes a una reorgani-
ambos propósitos fueron logrados en gran me- zación sistémica de las instituciones univer-
dida a través de los distintos números de la Re- sitarias nacionales y de las privadas, interre-
vista y, gracias al impulso decidido y reiterado lacionando algunas organizaciones existentes
que realizaron Pedro y otros colegas mediante con otra nuevas, como también una instancia
la organización y desarrollo de varios encuen- encargada de favorecer una planificación re-
tros de un seminario de alcance nacional y lue- gional del desarrollo de la educación univer-
go internacional, que tuvo como eje principal sitaria, así como una agencia encargada de pro-
convocante el de la Universidad como Objeto piciar un aseguramiento de la calidad de la
de Investigación. Su tesón y pasión –acompa- educación universitaria. Así, por ejemplo, el
ñado por el Comité de Redacción y particular- Consejo de Universidades, integrado por recto-
mente por María Caldelari– les permitió sobre- res de universidades públicas y privadas desig-
llevar y superar más de una vez, me consta, las nados por sus respectivos Consejos; los Conse-
dificultades de financiamiento para mantener jos Regionales de Planificación de la Educación
la calidad académica y la periodicidad de la Re- Superior (CPRES) y la creación de la Comisión
vista sin tener que adscribirla y hacerla depen- Nacional de Evaluación y Acreditación Univer-
diente aunque solo fuera en términos financie- sitaria (CONEAU). Los procesos de evaluación
ros de una universidad; más allá de que tuvo institucional de las universidades, así como los
varios ofrecimientos al respecto. Una decisión propios de la acreditación de las carreras de
que realza aún más su legado y que a mi enten- grado incluidas en los preceptos del art. 43 de
der sería conveniente reafirmarlo. Ahora se rei- la LES; y los referidos a los proyectos de nue-
nicia la Revista con un renovado Comité de Re- vas carreras y carreras en funcionamiento de
dacción: Lucas Krotsch –que estuvo a cargo de posgrado, han registrado un crecimiento sos-
la administración desde el primer número– y tenido a lo largo de los años. El funcionamien-
un grupo de jóvenes académicos de reconoci- to de los CPRES, por su parte, merecería una
das trayectoria estarán a cargo de recoger ese revisión de sus propósitos, así como de su fun-
legado y seguir enriqueciendo el excelente con- cionamiento y de sus resultados en las distin-
junto de trabajos, entrevistas, informaciones y tas regiones. Cabe apuntar que en los primeros
reseñas que ha ofrecido Pensamiento Universi- años del presente siglo hubo varios intentos
tario. No dudo que así será. Para ellos un deci- de modificación o sustitución de la LES, pero
dido apoyo y mi agradecimiento por invitarme ninguno de ellos prosperó. Posiblemente en
a participar en el presente número. un futuro más o menos cercano haya otras ini-
A partir del lúcido diagnóstico presentado ciativas al respecto; de ser así, puede ser mo-
en la Introducción del primer número de esta tivo para que haya una línea de trabajo de la
Revista, se sucedieron principales hechos que Revista sobre los temas que pudiera abarcar
reconfiguraron el sistema universitario argen- una posible modificación o sustitución de la
tino y su desarrollo: por un lado, la promul- Ley vigente.

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PRESENTACIÓN

Desde principios de los años 90s se conti- a las demandas y expectativas de ingreso a la
nuó con la creación de nuevas universidades universidad de muchos jóvenes y adultos, si-
nacionales; sin duda, uno de los hechos más no también a aquellas condiciones que posi-
trascendentes para el sistema universitario des- biliten la continuidad de la trayectoria en la
de aquel entonces. En 1993 había 29 universi- carrera elegida y el egreso. En otras palabras:
dades nacionales con una matrícula de poco ingreso, permanencia y egreso son principales
más de 700.000 estudiantes; en tanto que en la desafíos que persisten e interpelan al quehacer
actualidad hay 60 instituciones universitarias universitario en nuestros días. Principalmen-
nacionales, más 63 universidades privadas; y la te, son desafíos que convocan a la docencia y
matrícula alcanza a poco más de 2 millones de la pedagogía universitaria, así como a intensi-
estudiantes; la mayor parte de ellos cursan sus ficar aquellas políticas y programas que con-
estudios en universidades nacionales. tribuyan a promover mejores resultados, si se
Hay que decir que la creación de estas nue- quiere, mejores finales para las trayectorias de
vas universidades nacionales contribuyó sig- quienes transitan las carreras universitarias.
nificativamente para que vastos sectores de la Sin duda que la promulgación en el 2006
población, hasta entonces postergados, tuvie- de la Ley Nº 26.206, que estableció la obliga-
ran más y mejores posibilidades de acceder a toriedad de la educación secundaria también
la educación universitaria. Conviene destacar amplió las expectativas de sus egresados por
al mismo tiempo que diversos entornos socia- continuar estudios universitarios. Es este un
les se han beneficiado –no sólo en términos cul- tema de principal atención y concurre al de-
turales sino también socio-económicos– de los safío de generar una mayor y mejor articula-
procesos de su creación y desarrollo allí donde ción entre ambos niveles educativos, ya que
fueron instaladas. Cabe agregar que dicha ex- en los últimos años se han recrudecido seña-
pansión universitaria fue acompañada por más lamientos respecto a las carencias de saberes
carreras de pregrado, grado y posgrado, junto y/o disposiciones intelectuales de los egresa-
con el desarrollo de nuevos campos disciplina- dos de la educación media inscriptos en los cur-
res así como la afiliación y dignificación de sa- sos de ingreso (muchas veces de índole reme-
beres y prácticas profesionales hasta entonces dial) y, también, atento al cursado del primer
relegadas del ámbito universitario; otro hecho año de carreras de grado según sus respecti-
a tener en cuenta para indagar sobre su inci- vos planes de estudios. Hay bastante informa-
dencia en las organizaciones que los albergan ción que indica el considerable número de in-
así como sus contribuciones al desarrollo cien- gresantes que no continúan sus estudios luego
tífico, tecnológico y cultural. del primer año. Tránsitos interrumpidos que,
Esta sostenida expansión de la universidad muchos de ellos, indican la necesidad de gene-
pública en términos institucionales y académi- rar estrategias para advertir cuándo y por qué
cos, así como las políticas y programas destina- se producen esos hechos, mal caracterizados a
dos a generar una mayor inclusión de poblacio- veces como “abandonos”, cuando en verdad no
nes privadas de los estudios universitarios, han pocos de esos estudiantes pueden considerar-
generado nuevos desafíos. Ya no basta atender se como “abandonados” por las instituciones

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PRESENTACIÓN

universitarias que los han recibido, cuando lo tribuyan a repensar las concepciones y dise-
que requieren es atención y apoyos para conti- ños de los planes de estudios de las carreras de
nuar sus trayectos. grado universitario, en consideración no solo
Generalmente dichos planes, en su inicio, de la heterogeneidad de las poblaciones de in-
parten del supuesto de un ingresante ideal, que greso (que suelen tener características parti-
no se corresponde con la heterogeneidad de culares cada año) y de la índole de las carreras,
los perfiles reales de los ingresantes en cuan- sino también de los recursos, saberes y prácti-
to a su procedencia y a su disposición de deter- cas que origina el desarrollo de las tecnologías
minados saberes y disposiciones. En este sen- de la información y la comunicación. En esta
tido, conviene advertir que planes de estudios perspectiva, hay que decir que otra de las notas
diseñados con el modelo de “talle único” no se distintivas que ha incorporado el sistema uni-
condicen con la realidad. Y poco o nada con- versitario en los últimos años es la creciente di-
tribuye a encarar y resolver la cuestión adjudi- versidad de propuestas formativas con mayor o
cándole una responsabilidad retroactiva a los menor incorporación de recursos tecnológicos
niveles educativos precedentes. Sin embargo, de la comunicación y la información; en parti-
puede apuntarse que las concepciones, planes cular, de la modalidad de educación a distancia.
y programas de estudios de la educación secun- Ello genera tensiones y replanteos sobre algu-
daria merecen una especial atención para pro- nos de los pilares y supuestos constitutivos del
pender a formulación de políticas y propuestas sistema que se desarrolló en buena medida con
pedagógicas que le otorguen un sentido propio el modelo tradicional de educación presencial:
al egreso de sus estudiantes, tal como lo tuvo el aula y los procesos de enseñanza y aprendiza-
hasta poco más de la segunda mitad del S.XX je; los criterios para la definición y asignación
en sus distintas modalidades (Magisterio; Ba- de cargos y dedicaciones para el trabajo acadé-
chiller; Perito Mercantil, Técnico Industrial), a mico (docencia, investigación y extensión); ro-
la vez que habilitar para el ingreso universita- les y funciones de los servicios de apoyo; el re-
rio de quienes elijan proseguir esos estudios. corte territorial de las propuestas formativas
Posiblemente esa búsqueda de nuevos sentidos ofrecidas por las universidades en el marco de
para la educación secundaria, pudiera requerir los CPRES, entre otros.
trayectos formativos posteriores menos esco- Uno de los desafíos centrales para la moda-
larizados y, al mismo tiempo, más orientados lidad de educación a distancia es cómo lograr
a los intereses y necesidades de sus egresados que los estudiantes que cursan estudios con esa
para conseguir trabajo y realizar su proyección modalidad dispongan de los entornos académi-
de vida futura. Dichos trayectos podrían luego cos institucionales, así como de aquellas rela-
ser reconocidos para proseguir estudios en ins- ciones y experiencias que son parte del proce-
tituciones de educación superior en algunas de so formativo, al mismo tiempo que propician
aquellas carreras acordes con la índole de tales los atributos para el ejercicio de la ciudadanía
trayectos formativos. universitaria y el desarrollo personal. Así, por
Quizás Pensamiento Universitario pueda ejemplo, las relativas a la participación en pro-
abrir líneas de estudios y propuestas que con- cesos electorales para distintas instancias del

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PRESENTACIÓN

gobierno universitario, como en programas y des públicas y sociales, así como sus relaciones
actividades de las funciones sustantivas. Agre- con el Estado y también con las distintas orga-
gando, por otra parte, el requerimiento de fa- nizaciones de la sociedad.
vorecer el acceso y disposición de aquellos ser- Quiero finalizar estas líneas destacando la
vicios de apoyo que son fundamentales para visión de Pedro Krotsch y de quienes lo acom-
sus estudios y prácticas pre-profesionales, co- pañaron en los Comités de la Revista, para
mo también las relaciones interpersonales con ofrecer a través de sus distintos números los
pares, docentes y directivos de sus respectivas trabajos de reconocidos académicos naciona-
universidades. Entre otras, son condiciones pa- les y extranjeros sobre una variedad de temas
ra lograr una efectiva equiparación en cuanto relacionados con el quehacer universitario.
a las posibilidades que ofrecen dichos entor- Bienvenidos quienes ahora retoman ese lega-
nos, relaciones y experiencias formativas pa- do. Sin ninguna duda, contarán con el apoyo
ra quienes estudian bajo el sistema de educa- entusiasta de muchos universitarios para pro-
ción a distancia. seguir esta buena gesta académica. Dejo un sa-
El desarrollo institucional del sistema ludo reiterado, empecinado y memorioso al
universitario de las últimas décadas ha esta- querido Pedro.
do acompañado por una considerable produc-
ción académica que ha contribuido a un mayor
conocimiento de la universidad, tanto pública
como privada. Se ha avanzado en el desarro-
llo de comunidades y redes académicas y pro-
fesionales; también en cuanto a la disposición
de información empírica respecto a su desa-
rrollo, sus actividades y sus resultados; asimis-
mo, hay mayor atención a las demandas socia-
les. Dicho esto, pienso que muchos de los otros
señalamientos realizados en aquél lúcido diag-
nóstico hecho por Pedro siguen vigente pese a
los años transcurridos como cuestiones que de-
mandan nuestra atención y que debemos ocu-
parnos de ellos. En este sentido, considero que
Pensamiento Universitario fue y seguirá sien-
do un ámbito para los estudios y análisis de las
cuestiones relativas a la legislación –y normas
que de ella derivan–, los actores, el gobierno,
los fines, funciones e instancias organizacio-
nales de la universidad en general y de nues-
tras universidades en particular; así también la
cuestión de su autonomía y sus responsabilida-

Pensamiento Universitario • Nº 18

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• ARTÍCULOS

Decorriendo el velo
de la presencia femenina
en la Universidad
Nacional de Córdoba
(1884-1920)
Por Jaqueline Vassallo*

* Facultad de Filosofía y Humanidades,


Universidad Nacional de Córdoba/ CONICET.

La Reforma de 1918 ha dejado múltiples Estas fotos trasmitieron durante décadas la ima-
huellas documentales que se encuentran alber- gen de una universidad totalmente masculiniza-
gadas fundamentalmente en el Archivo Gene- da. Sin embargo, hacía más de tres décadas que
ral e Histórico y en el Museo Casa de la Reforma las mujeres cursaban y se graduaban en carreras
Universitaria de la Universidad Nacional de Cór- vinculadas a las Ciencias Médicas en la Universi-
doba. Entre los documentos, podemos señalar dad Nacional de Córdoba. Evidentemente, ellas
las fotografías que retrataron a sus protagonis- no “salieron” en esas paradigmáticas fotos que
tas, donde aparecen casi exclusivamente varo- desde entonces, recorren el mundo.
nes. Varones subidos a los techos del emblemáti- Sin lugar a dudas, la historia de la Univer-
co edificio de la Universidad, jóvenes detenidos sidad Nacional de Córdoba, como la de tantas
en un carro policial, o comiendo en platos de la- otras instituciones, se escribió en clave andro-
ta en una dependencia de la policía de Córdoba. céntrica y la Reforma no escapó a ello.1 Inclu-

1. Entre los pocos trabajos que se escribieron sobre el tema podemos citar: VERA DE FLACHS, Cristina.
(2001). “Las primeras mujeres universitarias en Córdoba (Argentina) y la Escuela de Parteras”, en Revista de
Historia de la Educación Latinoamericana, No. 3, Santa Fe de Bogotá; (2010). De comadronas a obstetras: la institu-
cionalización del saber. Córdoba: Báez Ediciones; (2018). “Mujeres Universitarias argentinas y movimientos es-
tudiantiles del siglo XX”, en Revista de Pedagogía Crítica Paulo Freire, N°20,pp. 123-143. Asimismo, VASSALLO,
Jaqueline (2016) “Introducción”, en Índice de las Primeras Mujeres Egresadas de la UNC 1884 – 1950. Entre la
autonomía y la exclusión. Ediciones del Archivo, Archivo General e Histórico de la UNC, Córdoba.pp.8-17

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ARTÍCULOS / JAQUELINE VASSALLO

so, en el trabajo que se publicó sobre la histo- del acto, las autoridades oficiantes; el grado (o
ria de la Facultad de Medicina en el marco de la título) recibido y el nombre de los egresados y
celebración de los 400 años, no se menciona la egresadas. Cada acta se inicia con la indicación
Escuela de Parteras, la primera carrera que las del lugar, fecha y las autoridades que la suscri-
mujeres pudieron cursar.2 Cuestión que quedó bieron, el grado académico y, a continuación,
subsanada por el estudio de Dora Barrancos, aparece el listado de las personas que lo obtu-
quien participó en la obra general sobre la his- vieron, acompañadas de sus datos personales
toria de la Universidad, en el que hizo un pri- (nombres y apellido, nacionalidad, estado civil
mer rastreo general sobre las primeras egresa- y edad). El documento finaliza con la firma de
das de la institución entre 1884 y 1910.3 las autoridades correspondientes.
Obviamente ninguna de las estudiantes Somos conscientes de las limitaciones que
pudo estar sustraída de los hechos que conmo- tienen las fuentes con la que trabajaremos, pe-
vieron no sólo a la Universidad, sino a Córdoba, ro dada la originalidad de las mismas y la escasa
al país y la región. Durante 1918, las aulas fun- consulta que han tenido, nos atrevemos a reali-
cionaron de forma dispar y sin lugar a dudas los zar este trabajo para dar cuenta de presencias
debates y sucesos acaecidos pudieron interpe- que fueron invisibilizadas por gran parte de la
larlas, conmoverlas, preocuparlas e incluso in- historiografía especializada.
centivarlas a intervenir en las discusiones. Sin
embargo, no aparecieron en las fotos oficiales,
al menos las que hoy se conservan en el Archi- Mujeres en la Universidad
vo General e Histórico de la UNC. Nacional de Córdoba tras siglos
En este trabajo, nos proponemos visibili- de ausencia.
zar la presencia de las mujeres en la Universi- Argentina, Brasil, México, Chile y Cuba fueron
dad Nacional de Córdoba durante las últimas los primeros países latinoamericanos que vie-
décadas del siglo XIX y principios del XX, en cla- ron por primera vez mujeres en las aulas uni-
ve de género y a través de las actas de colación versitarias durante el siglo XIX. Alicia Palermo
de grados que contienen los Libros de Grado, señala que si bien se trató de un fenómeno que
albergados en el Archivo General e Histórico puede enmarcarse en un contexto latinoame-
de la Universidad. ricano y en un marco más amplio del mundo
Los Libros de Grados son los únicos origina- occidental, en Argentina coincidió “con el au-
les en los que aparecen identificados quienes se ge de la inmigración, con el desarrollo del pro-
graduaron de la institución desde sus comien- yecto liberal y con el predominio de corrientes
zos hasta la actualidad. Reúnen las actas de co- de pensamiento positivistas entre nuestros cír-
lación de grados, en las que constan la fecha culos intelectuales”.4

2. FAVACCIO, Carolina. (2013) “La creación de la Facultad de Ciencias Médicas en el marco de un


saber médico de matriz naturalista (1869-1884)”, en Facultades de la UNC. 1854-2011. Saberes, procesos
políticos e institucionales. Mónica Gordillo y Laura Valdemarca. (Coords). Editorial de la Universidad Nacional de
Córdoba, Córdoba, pp. 73-91.
3. BARRANCOS, Dora (2013) “La Universidad esquiva las primeras egresadas (1884-1910)”, en
Universidad Nacional de Córdoba. Cuatrocientos años de Historia. Daniel Saur y Alicia Servetto (Coords). Tomo I.
Editorial de la Universidad Nacional de Córdoba, Córdoba. pp. 363-377.
4. PALERMO, Alicia (2006). “El acceso de las mujeres a la educación universitaria”, en Revista
Argentina de Sociología, Año 4 N° 7. p. 41.

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ARTÍCULOS / JAQUELINE VASSALLO

En Córdoba, las primeras mujeres que con- tarios, pues ya estaban en posesión de la Uni-
cretaron sus estudios superiores fueron quienes versidad por las lecturas a las que asistían, y
se graduaron de parteras a partir de 1884, en la era el movimiento del mundo hoy abrir de par
Facultad de Medicina de la Universidad, que por en par a las mujeres las puertas del seminario
entonces era caja de resonancia de las confron- del saber”.7 Al respecto, se ha señalado que Sar-
taciones entre el liberalismo de la dirigencia po- miento entendía que la educación constituía
lítica local y nacional y el conservadurismo de un aspecto nodal de integración de las muje-
la jerarquía eclesiástica.5 Durante aquellos días, res a la cultura, así como el derecho a la parti-
Elida Passo se encontraba estudiando la carrera cipación en campos vedados y la coeducación.8
de Farmacia en la Universidad de Buenos Aires, Las mujeres se incorporaron a los estudios
lo que la hizo convertir en la primera graduada universitarios cuando la Universidad de Córdo-
de dicha institución, en 1885. También hubiera ba ya había sido nacionalizada. Y si bien sus es-
sido la primera médica, de no haber fallecido de tatutos no contemplaban expresamente la ex-
tuberculosis antes de recibirse.6 clusión ni las obligaron a solicitar el ingreso
La Universidad Nacional de Córdoba, que por vía judicial como habían tenido que hacer
reconoce sus orígenes en el Colegio Máximo las mujeres en la UBA, por entonces confluían
fundado por los jesuitas de manera definitiva a discursos, normas jurídicas y prácticas sociales
partir de 1613, durante siglos abrió las puertas que las seguían considerando inferiores e inca-
a los varones de los sectores más acomodados paces. Basta repasar las normas prescriptas en
que buscaban formación en Artes, Teología y el Código Civil que había entrado en vigencia
Cánones y Derecho, y en el siglo XIX, en Cien- en 1871, para darnos cuenta de las exclusiones
cias Médicas y Ciencias Exactas, Físicas y Natu- y restricciones de las que eran destinatarias y
rales. Desde que en 1614 se dio la primera clase por las que se alzaron las primeras voces femi-
de teología en el Colegio Máximo a cincuenta nistas en la Argentina de fines del siglo XIX.
alumnos, entre los que había una treintena de El cuerpo normativo que fue redactado por
seminaristas, pasaron 243 años hasta que las Dalmacio Vélez Sársfield –uno de los “egresa-
mujeres pisaran las aulas universitarias. Unos dos estrella” de la Universidad cordobesa–, re-
años antes que se habilitara el ingreso, Domin- cogía el discurso jurídico y las representaciones
go Faustino Sarmiento, siendo Ministro del In- de género impuestas por los españoles a par-
terior de Avellaneda, anunció en una conferen- tir del siglo XV, en combinación con lo dispues-
cia que dio en la Casa de Trejo: “que no estaba to por el Código napoleónico de principios del
lejos el día en que [las mujeres] asistiesen con XIX. De esta suerte, estipuló que las mujeres ten-
sus libritos bajo el brazo a los cursos universi- drían una capacidad jurídica restringida, lo que

5. GONZALEZ, Marcela (2011). “La ideología liberal en una ciudad religiosa. Contextualizando la
tesis de Ramón J. Cárcano”, en Ramón J. Cárcano. De los hijos adulterinos, incestuosos y sacrílegos. Editorial de
la Universidad Nacional de Córdoba y EDUCC, Córdoba, p. 22.
6. PALERMO. op. cit. p.36.
7. BISCHOFF, Efraín (2008). Historia de Córdoba. Tomo I Lerner Editora, Córdoba, p.403.
8. Para mayor información: ROITEMBURD, Silvia (2009) “Sarmiento, entre Juana Manso y las
maestras de EE.UU. Recuperando mensajes olvidados”, en Antíteses, Vol 2. Nº3 (Enero) pp. 39-66.

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ARTÍCULOS / JAQUELINE VASSALLO

hacía imprescindible una tutela masculina.9 La mesticidad” a las que fueron destinatarias. Fue
existencia de un discurso jurídico teñido de in- así como creó la presunción legal de que conta-
fluencias católicas, incidió en la persistencia de ban con “autorización tácita” del marido, aque-
instituciones coloniales que repercutieron en llas mujeres que trabajaran como maestras y
la regulación del matrimonio, la familia y en directoras de escuela, o actrices.
la definición de los roles de sus integrantes. De La docencia era una actividad laboral so-
esta suerte, los matrimonios que el estado re- cialmente aceptable para las mujeres, ya que
conocía como válidos debían ser celebrados si- era entendida como una continuación de la
guiendo reglas religiosas porque el legislador función “directa” asignada a las mujeres: la ma-
cordobés no instituyó el matrimonio civil, y por ternidad.10 En tanto que las actrices estaban
ende, tampoco el divorcio vincular. asociadas a la “liviandad moral”, por lo tanto,
El régimen civil de la familia continuó ba- la ley suponía que el marido conocía el trabajo
sado en la “potestad”, que se sustentaba en la de la esposa y de su posible incidencia sobre el
autoridad del padre y luego, del marido; y el honor familiar. Como bien señaló Malgesini,
deber de obediencia, primero como hijas y lue- en el Código civil había cuajado el modelo pa-
go como esposas. Las mujeres casadas resul- triarcal de la tradición hispana por lo que “las
taron destinatarias de un estricto marco legal mujeres no tenían las mismas posibilidades de
en el ordenamiento jurídico, caracterizado por acceder al mundo material que sus esposos,
su necesaria sujeción al marido y la solicitud sólo lo hacían cuando era inevitable”. Por ese
de autorizaciones para realizar distintos actos entonces el trabajo era valorado como una ac-
y negocios jurídicos. Tampoco podían ejercer tividad propia de los varones, incluso cuando
la patria potestad sobre sus hijos, administrar no había opción de hacerlo.11 Las afirmaciones
los bienes del matrimonio –ni siquiera los pro- que hace Ballarín para las primeras universi-
pios–, no estaban autorizadas a aceptar heren- tarias españolas, también nos ayudan a pen-
cias, estar en juicio por sí mismas –ni por ter- sar la situación de las mujeres de este lado del
ceros–, ser testigos testamentarias, obligarse Atlántico: incluso ante una situación familiar
como fiadoras, ni firmar contratos sin expresa límite las mujeres que deseaban trabajar para
autorización. Estas restricciones incidían a la evitar la miseria se encontraban con la negati-
hora de trabajar o ejercer una profesión. Y aun- va del padre o esposo, ya que ello suponía “un
que Vélez Sársfield nunca mencionó de manera desclasamiento: dejar de ser «señorita» y pasar
expresa la exclusión de las mujeres del mundo a ser «pueblo».12
del trabajo, trazó algunas excepciones con el Sin lugar a dudas, a las mujeres se les impe-
objetivo de no transgredir el “discurso de la do- día acceder a las mismas oportunidades que te-

9. VASSALLO, Jaqueline (2004) “Modelo de Mujer y Construcción Jurídica en el pensamiento de


Vélez Sársfield”, en Escenarios y Nuevas Construcciones Identitarias en América Latina. María Susana Bonetto,
Marcelo Casarín y María Teresa Piñeiro (Eds). Centro de Estudios Avanzados, UNC, Córdoba. pp. 401-414.
10. ROITENBURD, Silvia (1998) Nacionalismo católico cordobés: educación en los dogmas para un proyecto
global restrictivo. Universidad Nacional de Córdoba, Córdoba. pp. 226–227.
11. MALGESINI, Graciela “Las mujeres en la construcción de Argentina en el siglo XIX”, en Historia de
las Mujeres Georges Duby y Michelle Perrot (Dirs), Tomo 4. Taurus, Madrid, pp. 686-687.
12. BALLARÍN-DOMINGO Pilar (2010). “La educación de la mujer española en el siglo XIX”, en Historia
de la Educación, Vol. 8. p. 251. citado 27 Abr 2019]; 8(0). Disponible en: http://revistas.usal.es/index.
php/0212-0267/article/view/6837

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ARTÍCULOS / JAQUELINE VASSALLO

nían los varones de su mismo grupo social, en ricamente las mujeres habían cumplido en el
especial la educación superior. Una formación cuidado de los enfermos de la familia.15 Por lo
que podía abrirles las puertas al mundo exte- tanto, la elección de carreras vinculadas a las
rior, así como desarrollar capacidades y actitu- Ciencias Médicas no representaba una ruptu-
des para desempeñar profesiones cualificadas ra brusca con la división sexual del trabajo im-
en espacios públicos. Los impedimentos para el puesta por el patriarcado.
ingreso a las aulas universitarias también pro- La Escuela de Parteras fue la primera ins-
venían de muchos padres, maridos, hermanos tancia de educación superior a la que pudieron
o hijos varones que les aseguraban un susten- acceder las mujeres, y a los pocos años llega-
to económico y que, por lo tanto, no veían la ron a cursar las carreras de Farmacia, Medicina
necesidad de esta búsqueda de autonomía per- y Odontología. La partería era un saber y una
sonal y de responsabilidades profesionales. Sin práctica que históricamente las sociedades vin-
olvidar los posibles temores de que se distan- cularon a las mujeres. Según Carrillo, la partera
ciaran del orden doméstico, como también de profesional nació con el doble carácter de acti-
que compitieran con los varones en distintos vidad necesaria para la profesión médica, pe-
espacios del mundo del trabajo profesional.13 ro subordinada a ella; y como práctica represo-
Por ese entonces, la Facultad de Medicina ra de la actividad de las parteras tradicionales
de la UNC –fundada en 1877–, se concebía co- que competían con la “medicina académica”.16
mo un espacio en el que se debían discutir y to- A lo que añade Barrancos, que con la apertu-
mar decisiones en torno a la salud reproducti- ra de estos estudios, la corporación médica se
va de las mujeres, la planificación familiar, los proponía combatir el curanderismo e impedir
embarazos de riesgo y la práctica de los abor- la realización de abortos, asociados a las prác-
tos terapéuticos. Desde sus inicios, la unidad ticas de las comadronas.17
académica estuvo en manos de profesionales Las aspirantes a estudiar en la Escuela, de-
liberales y sobre todo, extranjeros; razón por bían tener como mínimo 20 años –por enton-
la cual buena parte de su cuerpo docente y de ces, se accedía a la mayoría de edad a los 22–,
gestión sufrió los embates de los sectores más contar con formación hasta sexto grado, “tener
reaccionarios de la Universidad y de la políti- buena conducta, gozar de buena salud, carecer
ca local.14 Fue precisamente en esta Facultad de impedimento intelectual y no tener imposi-
donde las estudiantes, al igual que muchas eu- bilidad física para el ejercicio de la profesión”.18
ropeas y latinoamericanas, encontraron un lu- En este punto, cabe mencionar que el requisi-
gar porque “el impulso a la medicina parecía to de no tener “impedimento intelectual”, no
ser natural en las mujeres” debido a que histó- aparece en la reglamentación de lo solicitado

13. FLECHA GARCIA, Consuelo (2008) “Memoria de mujeres en la Universidad española”, en Mujeres y
Universidad en España y América Latina. Buenos Aires, Miño y Dávila. pp. 16-19.
14. ROITEMBURD, Silvia. (2000) Nacionalismo Católico. Córdoba (1862-1943). Educación en los dogmas para
un proyecto global restrictivo. Ferreyra Editor, Córdoba pp. 52-53.
15. PALERMO, op. cit. p. 5
16. CARRILLO, Ana María (1999) “Nacimiento y muerte de una profesión. Las parteras tituladas en
México”, en DINAMYS. Acta Hisp. Med. Sci. Hist. N° 19, p. 170.
17. BARRANCOS, op. cit. p. 368.
18. PUBLICACION INSTITUCIONAL (1916) La Universidad Nacional de Córdoba. Universidad Nacional de
Córdoba, Córdoba.

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ARTÍCULOS / JAQUELINE VASSALLO

para cursar la carrera de Medicina ni para la de caron hasta la Universidad para hacer lo propio
Farmacia; carreras que cuando se formalizaron en la Córdoba decimonónica: Dulue era una in-
no se contempló expresamente que pudieran migrante francesa, proveniente de “Lot i Garo-
ser cursadas por mujeres. na” [sic], de 29 años de edad y obtuvo su título
La carrera de Partería implicaba un cursa- argentino el 9 de diciembre de 1890,22 y Giobe-
do de tres años, en donde se estudiaba anato- llino, provenía de Novara, contaba con 30 años
mía, fisiología, patología específica del apara- y obtuvo su reválida el 28 de octubre de 1891.23
to genital; luego se avanzaba sobre el proceso Debido a los aportes realizados por Bosch,
del embarazo, a parto y puerperio. En segundo sabemos que las egresadas se incorporaron al
año estudiaban patología focalizada en el par- mercado de trabajo local, que desde 1861 venía
to y en el bebé. En tercer año hacían las prácti- desplegando una etapa de formación y trans-
cas, en la que debían acreditar la atención en formación. Las parteras se sumaron al gran co-
treinta partos. Las clases teóricas las recibían lectivo de mujeres trabajadoras que por en-
de los docentes de obstetricia de la Facultad y tonces se desempeñaban como adornadoras
las prácticas las hacían en el Hospital San Ro- de sombreros, niñeras, directoras, secretarias
que.19 Las mujeres que traían sus títulos del ex- y docentes de conservatorios y escuelas, can-
tranjero, debían forzosamente gestionar una tantes, actrices, personal de servicio domésti-
reválida ante la UNC, a la que accedían después co, profesoras y cajeras, así como obreras en ge-
de rendir exámenes. neral. Sin olvidar a todas las mujeres que vivían
La primera egresada en Córdoba fue Ánge- y trabajaban en el campo, en las tareas pro-
la Sertini de Camponovo, la única mujer que pias de dichos espacios productivos.24 La auto-
obtuvo el título de partera el 15 de setiembre ra citada señala que ha encontrado numerosos
de 1884.20 A partir de 1890, numerosas extran- avisos clasificados en los que las parteras ofre-
jeras comenzaron a solicitar reválidas, entre cían sus servicios a principios el siglo XX, en la
las que encontramos fundamentalmente fran- ciudad mediterránea; incluso algunas mujeres
cesas e italianas que habían tenido oportuni- publicaban los ofrecimientos durante meses y
dad de estudiar en universidades europeas.21 hasta años.25
Tal vez, el perfil que nos muestran los libros Por ese entonces, la partería profesional y
de grado de Margarita Dulue y Rosa Giobelli- el magisterio eran las únicas opciones de for-
no, dos extranjeras que solicitaron reválidas mación profesional que tenían las mujeres de
en 1890 y 1891, respectivamente, pueden ser Córdoba de finales del siglo XIX, hasta que a
ilustrativos de las demás mujeres que se acer- partir de 1905 comenzaron a graduarse farma-

19. BARRANCOS, op. cit. p. 371


20. ARCHIVO GENERAL E HISTORICO DE LA UNC (en adelante AGH). Libro de Grado 2, f.99.v.
Lamentablemente, la escasa información que presenta la fuente no nos permite trabajar con mayor
profundidad el perfil de esta mujer.
21. PALERMO, op. cit. p. 15.
22. AGH. Libro de Grados 2, f. 113 r. 
23. AGH. Libro de Grados 2, f 117.
24. BOSCH ALESSIO, Constanza (2012) “Las mujeres en el mundo del trabajo, ciudad de Córdoba,
1904-1919”, en Prohistoria, N° 17, Año XV, pp.56-58.
25. BOSCH ALESSIO, op. cit. p. 58.

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ARTÍCULOS / JAQUELINE VASSALLO

céuticas y en 1908, médicas.26 Cabe agregar que mientras que las estudiantes de partería per-
todas ellas transitaron sus experiencias labora- tenecían a sectores más bajos.28 Sin lugar a du-
les en tiempos en que el mundo del trabajo aún das, ambas formaciones profesionales eran
se regía por las normas del Código civil (como vías concretas para mejorar las condiciones de
locación de servicios) y del Código Comercial, vida, pero también las seguía situando en los
hasta que a partir del 1900, comenzaron a san- ideales modélicos maternales.
cionarse normas específicas, entre ellas, la ley Las actas nos señalan que había un gran
sobre el trabajo de las mujeres y menores que número de estudiantes extranjeras que perte-
estaba destinada al trabajo obrero (1907). necían a familias llegadas de ultramar, en el
La Escuela Normal para Maestras, fundada marco de la inmigración masiva. Como es sa-
por el gobierno provincial durante las últimas bido estas familias que llegaban por miles a las
décadas del XIX imponía requisitos menos es- recónditas tierras del sur en general y a Córdo-
trictos que la Universidad: saber leer, escribir ba en particular, habían sido empujadas de sus
y contar, tener 14 años de edad, gozar de bue- lugares de origen por situaciones restrictivas
na salud y conducta moral y poseer el consenti- y en Argentina buscaban alcanzar una mejor
miento de los padres o tutores. Al cabo de cinco calidad de vida. Según Malgesini, las mujeres
años (entre estudio y práctica), obtenían el tí- inmigrantes tuvieron que realizar un enorme
tulo habilitante.27 Como puede observarse, las esfuerzo de adaptación personal y de integra-
maestras podían graduarse antes que las parte- ción de sus hijos a la sociedad receptora, bajo
ras para ingresar más rápidamente al mercado un “doble fuego”: por un lado, la presión exte-
laboral formal. Sin embargo, como señala Ba- rior constante del Estado por socializar a través
rrancos, los sectores medios altos promovían de la educación nacional y, por otro, la deriva-
entre sus hijas que se dedicaran a la docencia, da de la organización patriarcal de la familia,

26. CORTES, Nuria y FREYTES, Alejandra (2016). Índice de las primeras mujeres egresadas de la Universidad
Nacional de Córdoba (1884-1950) Serie Auxiliares descriptivos. Córdoba: Ediciones del Archivo,
Universidad Nacional de Córdoba. http://archivodelauniversidad.unc.edu.ar/files/INDICE_PRIMERAS_
EGRESADAS.pdf.
27. BOSCH ALESSIO, op. cit. p 68.
28. BARRANCOS, op. cit. p. 375.

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ARTÍCULOS / JAQUELINE VASSALLO

basada en hábitos culturales europeos y forta- dicina en 1908.31 Posteriormente Margarita se


lecida por las prácticas criollas. En definitiva, casó con un colega médico, se estableció en el
mucho se esperaba de ellas: que trabajasen en Litoral de Argentina donde aparentemente no
el hogar y fuera de éste si era necesario, que no ejerció sus profesiones, para terminar murien-
comprometiesen el honor familiar, que obe- do con 44 años en Rosario.32
decieran al padre y al marido, que se hicieran Las parteras siguieron obteniendo sus títu-
cargo de los niños, ancianos y enfermos, que los en forma numerosa,33 mientas unas pocas
consideraran las demandas de integración que siguieron el camino trazado por Margarita. En
imponía el nuevo país, pero que a la vez man- 1912 se graduó la segunda farmacéutica: la ga-
tuvieran las tradiciones europeas a través de ditana, Isabel Rodríguez quien con apenas 21
la lengua, la música, las comidas, la ropa en el años y siendo soltera, obtuvo el título el 8 de
seno del hogar y en la comunidad con sus con- diciembre de dicho año.34 Y en 1917, hizo lo
géneres de la misma procedencia.29 propio la segunda Doctora en Medicina y Ci-
En muchas familias europeas a las que rugía, Amparo Lafarga, argentina, soltera y de
ellas pertenecían existían valores que admi- 24 años.35 Isabel y Amparo iniciaron el perfil
tían y fomentaban la educación de las muje- de estudiantes jóvenes y solteras que se acre-
res, ya que en ello veían una oportunidad de in- centará unos años más adelante. Evidentemen-
tegración y de movilidad socio-económica. Las te, muchas mujeres que cursaban la carrera de
fuentes nos señalan que la mayoría provenian Partería ya venían ejerciendo el oficio, estaban
de Italia, Francia, España; y en menor medida casadas y tenían entre 25 y 40 años. El título
cursaron alemanas, austríacas y rusas. Muchas oficial seguramente les sirvió para legalizar
de ellas tramitaron reválidas, lo que significa y legitimar sus saberes, salir al mercado con
que ya habían cursado y aprobado la carrera cierta tranquilidad e incluso, tener un “oficio
en sus respectivos países.30 Desde 1884 hasta honrado”. También pudo ayudarlas a atravesar
principios del siglo XX, se graduaran 20 muje- el período de recesión y desempleo que se vi-
res de parteras y 4 obtuvieran la reválida de los vió Argentina durante la Primera Guerra Mun-
títulos obtenidos en sus países de origen, hasta dial. Las fuentes nos revelan que entre 1914 y
que en 1905, se graduó la primera egresada de 1918, se graduaron 30 parteras entre quienes
Farmacia. Se trató de Margarita Zatzkin, una encontramos mayormente argentinas, segui-
mujer que había nacido en Odesa (Rusia) y en das por italianas, españolas, uruguayas y una
el seno de una familia que debió migrar a es- alemana.36
tas tierras debido a la opresión que el régimen Sin lugar a dudas estas mujeres debieron
zarista ejercía sobre los judíos. Ella también afrontar prejuicios, discriminaciones y has-
fue la primera en obtener el Doctorado en Me- ta desandar sospechas en torno a sus capa-

29 MALGESINI, op. cit. p.p 698-699.


30 AGH. Libro de Grados 2, 3, 4 y 5.
31 AGH. Libro de Grados 3, f. 140; Libro de Grado 3, f. 172.
32 BARRANCOS, op. cit. 366.
33 CORTES Y FREYTES, op. cit .
34 AGH. Libro de Grados 3, f.189.
35 AGH. Libro de Grados 4, f. 36.
36 Entre ellas, encontramos 15 argentinas, 8 italianas, 3 españolas, 3 uruguayas y 1 alemana.
CORTES y FREYTES, op. cit.

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ARTÍCULOS / JAQUELINE VASSALLO

cidades intelectuales y el cómo harían para “Desde la casi total indiferencia en que
compatibilizar el ejercicio profesional con los se encontraban [las mujeres argentinas]
roles de madres y esposas que la sociedad pa- en 1870 con respecto a las avanzadas de
triarcal les imponía. Silvia Roitemburd seña- otras naciones en el terreno de la cien-
la que la retórica aceptación del derecho al cia, hasta la altura envidiable a que hoy
acceso a las profesiones era invalidada por un ha llegado, pudiera decirse que pasaron,
discurso que presentaba la imposibilidad “in- no 40 años, sino más de un siglo. Eso bas-
nata” de ejercerlas: “La mujer débil por natu- tará para formar juicio de sus envidiables
raleza, dulce por su carácter, suave y tierna aptitudes, aún sin detenernos a analizar
por educación, por costumbre, por su delica- gran obra”.39
da complexión, ejerciendo hoy día la más pe-
nosa, la más árida, la más dura de las profesio- En igual sentido, en la primera proposi-
nes; una mujer médico y cirujano, es el colmo ción que surgió de la Comisión de Ciencias que
de los absurdos”.37 sesionó en este evento –y que fue aprobada co-
Estas discusiones se sostuvieron vívida- mo “axioma” por unanimidad de las asisten-
mente en el Congreso Femenino Internacio- tes–, se afirmaba:
nal de 1910, que fue organizado por la Asocia-
ción de Universitarias Argentinas. Ya lo decía “Ninguna condición psíquica ni social
Concepción Alexandre, en su ponencia presen- hacen inepta a la mujer, para entregar-
tada en dicho evento: se a las investigaciones científicas como
lo demuestran ejemplos cada vez más
“Después de meditar despacio sobre to- numerosos”.40
do lo expuesto, comprendemos mejor los
resultados obtenidos en el estudio com-
parativo del cerebro de la mujer, como el Ellas, en 1918.
del hombre, a pesar de creer muchos que 1918 comenzó con alboroto en los claustros y
existían entre éstos ‘radicales diferen- en las calles de Córdoba. Gracias a las referen-
cias’. Los sabios anatómicos después de cias que proporcionan las actas podemos co-
concienzudos análisis aseguran lealmen- nocer que a pesar de la convulsión que vivió la
te que los dos son ‘por igual aptos para Universidad durante esos meses, las autorida-
discernir y pensar’”.38 des continuaron otorgando títulos durante los
meses de marzo y julio.
Asimismo, Alexandre señalaba el poco Francisca de Caram,41 una entrerriana, ca-
tiempo transcurrido desde que las primeras sada, se graduó de partera el 9 de marzo de
mujeres accedieron a las aulas universitarias 1918, y 4 días después, en una concentración
y los logros obtenidos. celebrada en la Plaza San Martín, los estudian-

37 ROITEMBURD, op. cit. p. 79.


38 ALEIXANDRE, Concepción (2008) “La mujer en medicina”, en Primer Congreso Femenino. Buenos
Aires, 1910. Historia, Actas y Trabajos. Editorial de la Universidad Nacional de Córdoba, Córdoba. p. 338.
39 Idem. p. 341.
40 PRIMER CONGRESO FEMENINO. BUENOS AIRES, 1910. HISTORIA, ACTAS Y TRABAJOS (2008). Editorial de la
Universidad Nacional de Córdoba, Córdoba. p. 382.
41 AGH. Libro de Grados 4, f.46.

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ARTÍCULOS / JAQUELINE VASSALLO

tes reformistas declararon la huelga general. participaron en numerosas actividades que se


Asimismo, hemos constatado que el Consejo llevaron adelante por aquellos días, como el acto
Superior, en la sesión del 8 de marzo de 1918, en el que se derrumbó la estatua del Rafael Gar-
trató varias solicitudes de los Centros de Estu- cía el 16 de agosto, ubicada en la plazoleta de la
diantes, entre ellas, la de la Srta. María Haydeé Compañía de Jesús a pocos metros del rectora-
Capellini, maestra normal, para cursar como do. También, debieron leer con avidez –y otras
alumna regular la carrera de Farmacia.42 No con preocupación, el texto del Manifiesto Limi-
hemos encontrado la resolución tomada por la nar, publicado en la Gaceta Universitaria.
Comisión de Enseñanza –donde fue remitida–; Al año siguiente, y mientras se gradua-
lo cierto es que esta mujer, no figura como gra- ban de farmacéuticas Juana Glembosky, Otilia
duada en los Libros de Grados. Núñez, Amalia Martínez y Rosa Ravea; y de par-
El día 20 de julio de 1918, y durante el po- teras Rosalía Campaner, Ángela Campra, Ma-
lémico rectorado de Antonio Nores, se recibie- ría Cangiano, Francisca Corte, Palmira Ghio de
ron de parteras las estudiantes argentinas Rosa Acosta, Claudia Gutiérrez, Paulina Lichieri, Te-
Serra de Rovira, Dominga Rapaccioli y la espa- resa Llavot, Natalia Salomonoff y María Elena
ñola –natural de Tarragona–, Magdalena Pelea- Voisard,47 tal vez leyeron el texto que se publi-
to y Vila.43 Tres días después, lo hizo Agustina có en la Gaceta Universitaria el 18 de agosto de
Buenader una joven catamarqueña de 23 años, 1919, sobre los derechos que gozaban las mu-
la única farmacéutica de ese año.44 A los pocos jeres en la Rusia revolucionaria. Derechos que
días de estos sucesos, renunció el rector Nores. ellas todavía no gozaban y que constituían la
Más allá que las actas de colación dan cuen- agenda feministas del país:
ta de quienes terminaron efectivamente sus ca-
rreras en esos años y que las estudiantes matri- “[En Rusia], ya no quedan como en an-
culadas pudieron ser más, entre 1918 y 1920, taño dos humanidades, una femenina,
hemos identificado 46 estudiantes de la UNC masculina la otra, sino una sola con los
cuyas vidas y carreras estuvieron atravesadas mismos derechos civiles y políticos. La
por la Reforma. Muchas de ellas eran cordobe- vieja institución del matrimonio no es
sas, pero también había un buen número de obligatoria...
santafesinas y porteñas que se establecieron Si es verdad que los hombres gozan de
en la ciudad para poder estudiar.45 entera libertad, no es menos verdad que
Si bien ya es sabido que algunas simpatiza- las mujeres gozan de iguales derechos y
ron y hasta militaron en la causa reformista y libertades... Uno de los defensores y pro-
hasta ocupando lugares de importancia como pulsores de estas medidas progresistas
Prosperina Paraván, una joven santafesina, estu- (...) ha sido Máximo Gorki, actual Minis-
diante de Odontología,46 seguramente muchas tro de Instrucción Pública (...).

42 CORTES, Nuria y FREYTES, Alejandra (Comps). (2018) La Reforma Universitaria del 18 en los
documentos del Archivo. Editorial de la Universidad Nacional de Córdoba, Córdoba. p.59.
43 AGH. Libro de Grados 4, f.49; 4, f.48; 4, f.48.
44 AGH. Libro de Grados 4, f.49.
45 Remitimos a la información brindada en el cuadro elaborado por la autora (Anexo)
46 Prosperina se graduó de odontóloga a los 36 años, dieciocho años después de los hechos de la
Reforma, seguramente por sus obligaciones de esposa y madre. AGH. Libro de Grados 5, f.133.
47 CORTES y FREYTES, op. cit.

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ARTÍCULOS / JAQUELINE VASSALLO

No se debe mantener a la mujer en la ig- gular consideración de incapaces relativas de


norancia y en este sistema son educadas hecho y en derecho constitucional, la falta de
desgraciadamente nuestras mujeres. En derechos políticos.50
la Rusia revolucionaria, cada mujer que Un párrafo aparte merece Mercedes Or-
ha pasado los 18 años y se encuentra en gaz, hermana de los célebres reformistas,
buenas condiciones de salud, trabaja y quien seguramente compartió junto a ellos
tiene derecho a unirse libremente con las discusiones y ansiedades de aquellos años.
quien más le plazca. En posesión de to- Mercedes se recibió de Notaria, el 13 de di-
dos sus derechos, la mujer ha adquirido ciembre de 1923 siendo soltera y con 30 años
la libertad económica, base fundamen- cumplidos,51 tras rendir libre en el Monserrat
tal de todas las libertades... El prejuicio y ahogar su deseo de estudiar Medicina, por-
de los sexos, felizmente, pese a todas las que sus hermanos no consideraban que fue-
religiones y a todos los retardatarios, va ra una carrera apropiada para las mujeres.52
a desaparecer del mundo bien pronto y Mientras tanto, algunas fotos que circulaban
será reemplazado por un Humanismo por la sociedad cordobesa en las que apare-
integral donde todos sean iguales en de- cían sus hermanos, seguían registrando varo-
rechos y todos iguales en deberes”.48 nes debidamente ataviados con sacos y moñi-
tos a la moda, compartiendo eventos sociales,
¿Cuál habrá sido el impacto que causó en- como la visita del diputado socialista Alfredo
tre ellas? ¿Lo habrán conversado con Natalia Palacios.53
Salomonoff, una mujer casada de 26 años y de Más tarde, llegarían a graduarse arqui-
origen ruso?49 ¿Habrá llegado este texto a ma- tectas, ingenieras, peritos traductoras, pro-
nos de Margarita Zatzkin, que por entonces ya fesoras de francés, inglés, alemán e italiano,
no vivía en Córdoba y estaba sumida en una vi- doctoras y licenciadas en Filosofía; contado-
da hogareña? Son peguntas que no podemos ras públicas, geólogas y doctoras en ciencias
responder. naturales, en tiempos en que las mujeres ad-
Lo cierto que es que las mujeres siguieron quirieron los derechos políticos.54 A media-
cursando, e incursionando en otras carreras. La dos del siglo XX, el camino estaba abierto, pe-
década del 20 trajo la primera notaria, Merce- ro los desafíos sociales eran enormes ya que
des Orgaz y la primera abogada, Elisa Ferreyra los esfuerzos no se agotaban en obtener un tí-
Videla. Sin lugar a dudas, el ingreso a estas ca- tulo, luego había que insertarse en el mundo
rreras fue un poco más tardío ya que estaban laboral y/o en el académico. Mundos marca-
ligadas con el prestigio y el poder. Ellas debie- dos con una fuerte presencia masculina que
ron compartir las aulas con sus compañeros, no estaba dispuesta a ceder sus lugares ni sus
repitiendo en las clases de derecho civil, su sin- privilegios.

48 TATIAN, Diego (2018). La incomodidad de la herencia. Breviario ideológico de la Reforma Universitaria.


Encuentro Grupo editor, Córdoba. pp. 31-32
49 AGH. Libro de Grados 4, f. 70.
50 VASSALLO, Jaqueline. 2016. “Introducción”, en Índice... op. cit. pp 13-14.
51 AGH. Libro de Grados 4, f. 243.
52 Asimismo, véase: VERA DE FLACHS, Cristina (2018). “Mujeres Universitarias...”pp. 123-143.
53 TATIAN, op. cit. p. 39.
54 VASSALLO, Jaqueline. 2016. “Introducción”, en Índice... op. cit. pp 13-14.

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ARTÍCULOS / JAQUELINE VASSALLO

Anexo. Mujeres que transitaron la UNC en tiempos de la Reforma


1918 Buenader, Agustina Farmacéutica Argentina, de Catamarca Soltera 23 años
Caram, Francisca de Partera Argentina, de Entre Ríos Casada 25 años
Peleato y Vila, Magdalena Partera Española, de Terragona Casada 46 años
Rapaccioli, Dominga Partera Argentina, de Santa Fe Casada 31 años
Serra de Rovira, Rosa Partera Argentina, de Córdoba Casada 28 años
1919 Glembosky, Juana Farmacéutica Argentina, de Santa Fe Soltera 21 años
Núñez, Otilia Farmacéutica Argentina, de Buenos Aires Soltera 22 años
Martínez, Amalia Farmacéutica Argentina, de Buenos Aires Soltera 23 años
Ravea, Rosa Farmacéutica Argentina, de Santa Fe Soltera 21 años
Campaner, Rosalia B. de Partera Argentina, de Córdoba Casada 28 años
Campra, Àngela Partera (reválida) Italiana, de Torino Casada 43 años
Cangiano, María L. de Partera Argentina, de Buenos Aires Casada 29 años
Corte, Francisca M de Partera Argentina, de Santa Fe Casada 26 años
Ghio de Acosta, Palmira P. Partera Argentina, de Buenos Aires Casada 33 años
Gutiérrez, Claudia Partera Argentina, de Mendoza Soltera 27 años
Lichieri, Paulina Partera Argentina, de Córdoba Soltera 22 años
Llavot, Teresa F. de Partera. Española, de Barcelona Casada 29 años
Salomonoff, Natalia M. de Partera Rusa, de Nicolaieiv Casada 26 años
Voisard, María Elena Partera Argentina, de Córdoba Soltera 27 años
1920 Ceballos Lujan, Pura Farmacéutica Argentina, de Córdoba Soltera 21 años
Amaya, Albina Partera Argentina, de Córdoba Soltera 29 años
Baggine, Valentina P. Partera Argentina, de Santa Fe Viuda 45 años
Banucci de Pieri, Saida Partera Italiana, de Lucca. Casada 32 años
Bazzoler de Sánchez, Petra Partera Uruguaya, de Montevideo Casada 30 años
Bessouet, Ángela N. de Partera Italiana Casada 27 años
Casellas, María Partera Argentina, de Buenos Aires Soltera 30 años
Chiesa, Ana Gaby de Parter Argentina, de Córdoba Casada 24 años
D'Ellio de Mazzei, Clementina R. de Partera Argentina, de Buenos Aires Casada 33 años
Eiman, Genara M. de Partera Argentina, de Entre Ríos Casada 27 años
Erbetta, Alina B. de Partera Italiana, de Toscana Casada 26 años
Eula, María Partera Argentina, de Santa Fe Soltera 25 años
Fochi, Adela N. Partera Argentina, de Santa Fe Soltera 25 años
Genissans, Elvira Partera ( Reválida) Española, de Barcelona Casada 27 años
Massaria, Luisa S. de Partera Argentina, de Córdoba Viuda 38 años
Melchionna, María A. Partera Argentina, de Córdoba Soltera 23 años
Núñez, Cruz Partera Argentina, de Córdoba Soltera 22 años
Peralta, Dositea de Partera Argentina, de La Rioja Casada 37 años
Pinchirolli, Rosa Partera Argentina, de Santa Fe Soltera 23 años
Pochettino de Alberto, Teresa Partera Argentina, de Córdoba Casada 23 años
Rabinovitz, Ana M. de Partera Argentina, de Buenos Aires Casada 22 años
Rodríguez, Isabel Partera Argentina, de Córdoba Soltera 35 años
Rodríguez, María Beatriz Partera Argentina, de Córdoba Soltera 25 años
Rossi de Marna, Clelia Partera Italiana, de Alessandria Casada 30 años
Urrea, María Luisa A. Partera Argentina, de Córdoba Viuda 36 años
Vaccaro, Carmelina Partera Italiana, de Sicilia Soltera 21 años
Zapata, Paz Partera Argentina, de San Juan Soltera 22 años

Fuente: Índice de las Primeras Mujeres Egresadas de la UNC 1884 – 1950. Entre la autonomía y la exclusión (2016). 
Ediciones del Archivo, Archivo General e Histórico de la UNC, Córdoba.

Pensamiento Universitario • Nº 18

26
ARTÍCULOS / JAQUELINE VASSALLO

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Pensamiento Universitario • Nº 18

27
• ARTÍCULOS

Construir una
universidad científica
y social. Los proyectos
institucionales de los
primeros reformistas
argentinos (1918-1923)
Por Natalia Bustelo*

* FFyL-UBA; CeDInCI-UNSAM. Profesora de


Filosofía (UBA), Doctora en Historia (UNLP).

La Universidad, si ha de cumplir la misión organización institucional que los matriculaba


que le corresponde, tiene que difundir su en carreras ligadas a la medicina, el derecho y
pensamiento y su obra en el organismo la ingeniería. La particular impronta católico-
social de que forma parte y del cual ella conservadora de la pequeña Universidad Na-
es la más elevada expresión cultural; al cional de Córdoba (UNC) no impidió que los re-
mismo tiempo que en su seno deben tener clamos se expandieran en facultades y escuelas
eco todas las preocupaciones sociales, todos secundarias de distintas ciudades de Argentina
los problemas que atañen al destino de la y de otros países. En pocos años pudo advertir-
Humanidad. se un movimiento que señalaba a la “juventud
Carlos Astrada, universitaria latinoamericana” como un nue-
“Nuestro Kulturkampf”, 1922. vo actor social y que se articulaba en dos claras
dimensiones, una institucional ligada a la re-
novación y democratización de las casas de es-
A mediados de 1918, estallaba en Córdoba la tudio y otra político-cultural, desde la que por
Reforma Universitaria. Los estudiantes y jóve- primera vez el estudiante se pronunciaba con-
nes graduados cordobeses reclamaban a las au- tra las oligarquías que venían gobernando los
toridades la renovación de la enseñanza y de la estados nacionales.

Pensamiento Universitario • Nº 18

28
ARTÍCULOS / NATALIA BUSTELO

En el presente artículo nos detenemos en Es la muerte de un régimen. Como en Cór-


diversas iniciativas desplegadas por los grupos doba, hay defensores de lo anacrónico, mi-
reformistas en su inicial intento de construir lo noría familiar, guardianes de sus papás ca-
que identificaban como una universidad cientí- tedráticos; esto en vez de desalentarnos nos
fica y social. Para ello, además de recurrir a los conforta. Santa Fe aguarda ansioso pro-
discursos y artículos hallados en las compila- nunciamiento solidario de esa federación.
ciones documentales y a la bibliografía crítica Telegrama de Federación
sobre el tema, consultamos la prensa periódica, Universitaria de Santa Fe a
los fondos personales de los reformistas y las Federación Universitaria de Córdoba1
revistas universitarias. Es que esos materiales
–despreciados hasta hace poco como “fuentes
menores”– ofrecen la mejor vía para iluminar Cuando en junio de 1918 los estudiantes
los frágiles equilibrios que resultaron decisi- impiden que el profesor católico-conservador
vos en los proyectos institucionales y la vin- Antonio Nores asuma el rectorado de la UNC,
culación que esos proyectos mantuvieron con hacía dos años que la Argentina se organizaba
una primera definición política del estudiante, bajo un régimen democrático-liberal. En 1916
que, si entre 1918 y 1923 era interpelada por la la élite político-económica que había consoli-
Revolución Rusa y el bolchevismo, en los años dado un Estado nacional de carácter oligárqui-
siguientes se cargaría de la denuncia antiim- co perdía las elecciones y transfería la presi-
perialista latinoamericana y en la década del dencia a Hipólito Yrigoyen, el líder de la Unión
treinta del pronunciamiento antifascista. Cívica Radical. Si bien durante los seis años
de su mandato tuvieron lugar las brutales re-
presiones conocidas como la Semana Trágica
Renovar las universidades (1919) y la Patagonia Rebelde (1921), Yrigoyen
Conflicto en pie. Asamblea ratificó decla- ensayó un rol de mediador en varios conflic-
ración huelga federación hasta tanto se re- tos tanto obreros como estudiantiles. A fines
suelva favorablemente movimiento. Pedi- de agosto de 1918, intentó canalizar los recla-
mos estatutos dignos y profesorado capaz. mos estudiantiles a través de un decreto que
Rector negóse a renunciar no obstante so- obligaba a las tres universidades nacionales –
licitud insistente. Los nores cambian de la UBA, la UNLP y la UNC– a reformar sus esta-
nombre pero no de alma.[...] Ante pasivi- tutos universitarios.2 Estos debían incorporar,
dad academias desprestigiadas, resolucio- entre otras condiciones, la provisión de cargos
nes enérgicas adquieren fuerza simbólica. universitarios a través de concursos periódicos,

1. Cit. Caballero Martín, Ángel S. (1931), La Universidad en Santa Fe, Imprenta de la Universidad, Santa
Fe. pp: 114-115.
2. La UBA contaba para 1918 con más de 5000 estudiantes y, junto a la UNC –de unos 500
estudiantes– y UNLP –donde estudiaban unos 700 jóvenes–, tenía un carácter nacional. Mientras
que en la UBA y la UNC primaba la formación en profesiones liberales (abogacía, ingeniería y
medicina), en la UNLP se ofrecían carreras profesionales y algunas de orientación técnica o científica.
Las pequeñas universidades de Santa Fe y de Tucumán tenían un carácter provincial e impartían
educación técnica ligada a la producción regional. La nacionalización de ambas estuvo en el centro de
las campañas reformistas y fue conseguida en 1919 la primera, y en 1921, la segunda. BUCHBINDER,
Pablo (2005), Historia de las universidades argentinas, Sudamericana, Buenos Aires.

Pensamiento Universitario • Nº 18

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ARTÍCULOS / NATALIA BUSTELO

la renovación periódica del gobierno universi- La Reforma parecía haber llegado a Derecho
tario –que en la UBA se venía realizando desde en 1921, cuando el decanato de Mario Sáenz im-
la reforma de 1906 y en la UNLP desde su cons- plementó algunas de las reivindicaciones refor-
titución en ese año–, la participación de los es- mistas, renovó la revista institucional y dictó cur-
tudiantes en el gobierno universitario, el siste- sos de extensión en locales obreros orientados a
ma de cátedras libres, la asistencia libre de los organizar “la reacción resultante de toda injus-
estudiantes y la aprobación de nuevos planes ticia, lo que vale decir resultante de un conoci-
de estudio armados a partir de comisiones es- miento más denso del Derecho” para acelerar “la
peciales en las que, por primera vez, estarían evolución” y alzarse “contra las iniquidades que
representados los estudiantes con voz y voto. violan la armonía social”.3 Pero esas iniciativas re-
La elaboración de los nuevos estatutos tu- formistas fueron frenadas y revertidas a comien-
vo su expresión más conflictiva en la UNLP y zos de 1923 por un grupo de los profesores titu-
en la Facultad de Derecho de la UBA. Su peque- lares que recurrieron incluso a matones.4 Así lo
ña Facultad de Filosofía y Letras incorporó en recuerda uno de los primeros líderes estudianti-
septiembre de 1918 el cogobierno estudiantil les y el –hasta la actualidad– más esmerado com-
e inició una progresiva renovación de la planta pilador de fuentes reformistas, Gabriel Del Mazo:
docente que condujo a la profesionalización de
las letras, la historia y la filosofía. En la masiva La Facultad contaba con un grupo de
Facultad de Medicina se registraron tensiones profesores individualmente buenos, pe-
ante la elección del decano pero para 1919 se ro funestos cuando se asociaban con de-
logró un equilibrio institucional. En cambio, en terminados otros, asociación que se vol-
la aristocrática Facultad de Derecho el intento vía todopoderosa por el propio sistema
de aplicar reformas mínimas desencadenaba oligárquico. […] Ya implantado el siste-
conflictos que sólo podían frenarse con la in- ma estatutario de la Reforma, tal Facul-
tervención del rectorado y del poder judicial. tad fue la única que dio el espectáculo de

3. “Notas del Centro”, Revista Jurídica y de Ciencias Sociales, enero-mayo de 1922, p. 333, cit. en BUSTELO,
Natalia (2016), “Derecho, extensión universitaria y revolución social. La Reforma Universitaria en la
Facultad de Derecho y Ciencias Jurídicas de la Universidad de Buenos Aires (1918-1930)”, Conflicto social.
Revista del Programa de Investigaciones sobre Conflicto Social, vol. 19, n° 16, Buenos Aires, julio-diciembre de
2016, pp. 60-90. http://publicaciones.sociales.uba.ar/index.php/CS/article/view/2160/0.
4. Sobre esa violencia contamos con los detalles que ofrece quien fue un líder estudiantil clave de la
gestión de Sáenz, Florentino Sanguinetti. Inmediatamente después de renunciar le relata a su madre
lo que no se enteraría por la prensa: “Durante el conflicto recibí toda clase de amenazas y el asalto al
local de la calle Victoria y Ceballos fue con el propósito de darme una paliza. Tenían gente asalariada
y uno de los métodos del Dr. P…., es el terror. A mi socio Lartigau, lo asaltaron cerca de la facultad a
donde acudía para acompañarme sabiéndome en peligro y le han golpeado malamente. A Monner
Sans le apedrearon la casa y el decano ha tenido permanentemente un escuadrón de seguridad,
custodiando la suya. […] el adversario conoce la fuerza de mis afectos entre los estudiantes y querían
amilanarme para reducirme en la acción […] yo he trabajado allí con la convicción de que se puede
mudar la orientación espiritual de los estudios e indicarlos dentro de los nuevos soplos que sacuden
a la humanidad. Contra ello se han alzado los intereses de casta, de clase, de círculo […] Deben Uds.
saber que nuestra renuncia se resolvió a raíz del retiro de las fuerzas policiales que custodiaban
la facultad, por orden del presidente de la república y a instancias de Leopoldo Melo”. “Carta de
Sanguinetti a su madre”, Buenos Aires, 29/03/23, en SANGUINETTI, Florentino (2002), Epistolario. 1921-
1975, Colegio Nacional Buenos Aires, Buenos Aires, p. 30.

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ARTÍCULOS / NATALIA BUSTELO

la sublevación de los profesores contra la asistencia libre por la vagancia que incenti-
sus autoridades legítimas. Pues quedó en vaba en los estudiantes y sostenía que la repre-
buena parte subsistente el claustro profe- sentación estudiantil sólo podía ser correcta-
soral, y 27 profesores, que después llega- mente ejercida a través de doctores.
ron a 45, dieron un golpe de mano contra A la versión democratizadora e izquierdista
el Consejo reformista, y en combinación de la Reforma que difundía la Federación Uni-
con los círculos áulicos del alvearismo versitaria de La Plata (FULP) en coordinación con
[…] exigían como puede adivinarse, la re- la nueva Federación Universitaria Argentina se
forma de los estatutos, o sea, la vuelta de sumó el malestar que había generado la denun-
la oligarquía profesoral. […] la mayoría cia de 1918 contra los profesores de la Facultad
del núcleo de esos profesores insurrectos, de Veterinaria y Ciencias Agrarias por malver-
ligados a los intereses extranjeros, pasó sar dinero estatal. Y ello dio lugar, en octubre
directamente de la Facultad al gobierno de 1919, a una “huelga grande” que se prolongó
dictatorial.5 hasta junio de 1920, cuando Rivarola presentó
su renuncia. El nuevo presidente universitario,
Sin duda, una de las primeras enseñanzas el radical antipersonalista Carlos Melo, aproba-
que hicieron del Mazo, Sanguinetti y otros de ba el cogobierno estudiantil con voz y voto pero
los líderes que apostaban a la confluencia en- pronto se desataba otro álgido conflicto. Por ini-
tre Reforma y emancipación de la humanidad, ciativa de la FULP era nombrado rector del Co-
fue que los cambios institucionales solo podían legio Nacional dependiente de la UNLP el cor-
realizarse si no quedaba “en buena parte sub- dobés Saúl Taborda. Éste llegaba a fines de 1920
sistente el claustro profesoral”. Y los conflictos junto a Héctor Roca (hermano de Deodoro), Car-
iniciados en La Plata a fines de 1919 ofrecían la los Astrada, Emilio Biagosch y Manuel T. Rodrí-
primera confirmación. guez, todos reformistas cordobeses que insistían
En marzo de 1918 asumió la presidencia en que el reformismo tenía un vínculo político
de la UNLP el profesor y político conservador estrecho con el horizonte emancipatorio mun-
Rodolfo Rivarola. Éste y la mayoría de los pro- dial abierto en 1917 por el bolchevismo y que se
fesores que componían el Consejo Superior se incorporaban al plantel docente para empren-
reconocieron reformistas, pero lo hicieron des- der reformas pedagógicas que serían acusadas
de una peculiar versión de la Reforma que no de “anarquizantes”.6 Entre las reformas se en-
lograron instalar. En septiembre de 1919 fun- contró el reemplazo del aristocratizante Inter-
daron La República Universitaria, un “periódico nado del Colegio por una Casa del Estudiante
universitario independiente” que cuestionaba organizada desde un amplio conjunto de doctri-

5. DEL MAZO, Gabriel (1970), Vida de un político argentino, Plus Ultra, Buenos Aires, p. 76.
6. Por la prensa sabemos que Taborda intentó sin éxito el nombramiento del reconocido anarquista
bolchevique Julio B. Barcos. Además, el Archivo del Colegio Nacional muestra que en ese momento
ingresaron como profesores interinos, nombrados hasta el 30/04/1921, seis intelectuales porteños también
simpatizantes del bolchevismo: Alberto Palcos, Carmelo Bonet, Roberto Giusti, Carlos Scotti, Leopoldo
Hurtado y Alberto Massa. El criterio político que operaba en la renovación de profesores que emprendía
Taborda era tan evidente que el mismo diario que apoyaba su gestión declaraba que se propusieron
“catedráticos cuyos méritos consisten en haber luchado en favor de las reformas universitarias de Córdoba
o de La Plata, de ser redactor de una revista bonaerense o tal o cual diario” (“Primeros frutos”, El Argentino,
29/11/1920). Sobre la “huelga grande” y la gestión de Taborda véase BIAGINI, Hugo (2012), La contracultura
juvenil. De la emancipación a los indignados, Capital Cultural, Buenos Aires.

Pensamiento Universitario • Nº 18

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ARTÍCULOS / NATALIA BUSTELO

nas asociadas a la “Nueva pedagogía”. Además, ro la FULP se apuró a rebatir esa acusación de
la gestión de Taborda y el Centro de Estudiantes desorden y anarquía antinacionalistas con un
dispusieron un ciclo de “actos culturales”, que lacónico volante:
tuvo una impronta bolchevique y contó con la
presencia de obreros provenientes de sindica- La F. U. dice:
tos afines.7 Contra ello reaccionó en noviembre Carlos F. Melo debe irse de la Universidad
de 1920 el grupo estudiantil que convocó a una por ser un peligro para la Reforma.9
asamblea “para formar un centro tendiente a la
normalización del instituto y el objeto de con- Algunos líderes reformistas sumaban la
trarrestar el avance maximalista que en alum- fundación del Comité Pro-Afianzamiento de la
nos, profesores y dirigentes viene invadiendo”,8 Reforma Educacional, desde el que realizaron
al tiempo que, en un intento de forzar la renun- actos de apoyo a Taborda y editaron al menos
cia de Taborda, 32 profesores presentaron su re- un número del boletín La Reforma. Pero ni los
nuncia. Y un volante declaraba: mítines ni el Comité lograron mantener una
gestión educativa cuya impronta izquierdis-
ARGENTINOS: ta producía tanta resistencia en el perviviente
Taborda está haciendo desde el puesto claustro profesoral. En marzo de 1921 el “pe-
que detenta, prosélitos del desorden y la ligroso” Melo y algunos consejeros superiores
anarquía, es preciso reaccionar contra los enfrentados a Taborda debieron renunciar, a
que a costa de UN SUELDO DE HAMBRE, pesar de ello la presión sobre el cordobés y su
escarnian nuestras instituciones y nues- grupo no cesó. El 21 de abril de 1921 los diarios
tras leyes. platenses anunciaban que el día anterior Tabor-
Es preciso demostrarles que está latente da había sido separado de su cargo y que los 28
el sentimiento nacionalista y que sacare- estudiantes que desde hacía dos semanas man-
mos de sus puestos a los intrusos, refor- tenían la toma del Colegio habían sido apresa-
madores de nuevo cuño. dos. Los dos diarios platenses reprodujeron una
crónica sobre el ingreso policial al Colegio que
Si la Gran Colecta Nacional, organizada a confirmaba la sensibilidad izquierdista desde
fines de 1919 por la Iglesia, y la creciente pre- la que Taborda y sus aliados habían emprendi-
sencia de la Liga Patriótica indicaban la conso- do la renovación institucional:
lidación de un nacionalismo antiizquierdista,
el volante confirma que también tuvo simpa- En uno de los cajones del escritorio del rec-
tizantes entre los universitarios platenses. Pe- tor existían diarios y folletos que ha incau-

7. En el marco del ciclo, en noviembre de 1920 el mencionado Barcos y Nemesio Canale disertaron
sobre el aniversario de la Revolución Rusa, al mes siguiente el profesor y líder del Partido Socialista
Internacional (antecedente del Partido Comunista) Alberto Palcos pronunció una conferencia sobre
la Nueva Cultura y la Civilización que traía Rusia y en marzo del año siguiente el dominicano Max
Henríquez Ureña disertó sobre “Estados Unidos y la América Latina” (“Aniversario de la revolución
rusa. En el Colegio Nacional”, El Argentino, 06/11/1920; “Conferencias del Sr. Alberto Palcos”, El
Argentino, 20/12/1920, y “Conferencia en el Colegio Nacional”, El Argentino, 02/03/1921).
8. “Colegio Nacional”, El Argentino, La Plata, 15/11/1920.
9. Ambos volantes se encuentran en el Fondo Reforma Universitaria, Museo de Instrumentos
Musicales Emilio Azarilli, UNLP.

Pensamiento Universitario • Nº 18

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ARTÍCULOS / NATALIA BUSTELO

tado el juzgado, entre los cuales figura un nómicas–. La década del treinta los encontrará
número de Tribuna obrera, un folleto sobre juntos en otros proyectos institucionales refor-
Obra educacional de la Rusia revolucionaria y el mistas, pero también en la Alianza Civil con la
número ocho de la revista Insurrexit, órga- que disputaron a los conservadores las eleccio-
no del grupo universitario comunista, en el nes de autoridades provinciales.11
que aparece en el primer artículo una ana- Desplazado Melo en 1921, la UNLP comen-
tema contra los maestros que han jurado el zaba a ser presidida por el decano de la Facul-
voto profesoral. También se ha secuestra- tad de Ciencias Jurídicas y Sociales, Benito Nazar
do un gran pizarrón en el cual se transcri- Anchorena, quien a los pocos meses rompió sus
ben los telegramas que los estudiantes han acuerdos reformistas y no sólo no reincorporó a
estado recibiendo últimamente, entre los Taborda sino que además introdujo muy pocas
cuales hay uno del consejero de la Facultad medidas democratizadoras.12 En los años pos-
de Derecho de Córdoba, Deodoro Roca, que teriores, la Universidad recuperó su estabilidad
dice: “Imposible aceptar separación doc- institucional. El proyecto renovador más radical
tor Taborda”, otro telegrama del mismo Ro- estuvo encabezado por el socialista Alfredo Pa-
ca dice: ‘la caída de Taborda es el mejor ín- lacios. Éste asumió como decano en las eleccio-
dice de la fuerza que representan nuestros nes que sucedieron a la salida de Nazar Anchore-
ideales; ella nos animará para las nuevas lu- na y entre sus iniciativas de marcada tendencia
chas. Pronto nos veremos”. En el telegrama reformista se destacó el Laboratorio de Psicofi-
dirigido a Taborda, también transcripto en siología, que buscó precisar un proyecto de le-
el pizarrón, Roca le dice “Taborda: tu actua- gislación laboral a partir de experimentos dise-
ción representa el más alto y trascendental ñados desde la nueva psicología experimental.
esfuerzo que se ha hecho en la historia edu- Pero ninguna de las innovaciones logró la fuerza
cativa del país. Ha salvado con todo la dig- institucional para perpetuarse más allá de 1925,
nidad de la Reforma. Doblemente unido en año en el que Palacios terminó su mandato y fue
el ideal y en el afecto piensa que estaremos elegido Ángel Casares como nuevo decano. El re-
siempre a tu lado”.10 formismo platense encontraría su fracción más
entusiasta en el grupo Renovación, que en la dé-
Taborda junto a varios de sus compañeros cada del veinte inició una experiencia teatral de
regresó a Córdoba para sumarse con Roca a los extensión universitaria, luego reivindicada co-
consejeros que impulsaban los nuevos ideales mo la antecesora del Teatro del Pueblo. Y editó,
–y que entonces intentaban también desplegar entre 1923 y 1928, bajo el padrinazgo del filóso-
en la nueva Facultad rosarina de Ciencias Eco- fo Alejandro Korn, doce números de la revista

10. “La toma del colegio”, El Argentino, 21/04/1921.


11. TCACH, César (2009), “Deodoro Roca: militante socialista”, en ROCA, Deodoro, Obra reunida. III
Escritos jurídicos y de militancia, Editorial Universidad Nacional de Córdoba, Córdoba.
12. El líder reformista Carlos Sánchez Viamonte ofrece una breve y elocuente reconstrucción de las
alianzas que le permitieron a Nazar Anchorena romper el pacto con la revoltosa FULP y, sin embargo,
mantenerse durante dos mandatos en la UNLP. SÁNCHEZ VIAMONTE, Carlos (1928), La cultura frente
a la Universidad, Samet, Buenos Aires. La alianza más importante seguramente haya sido con Luis
Sommariva, quien dejaba la conducción de la FULP y asumía el cargo de Taborda. De ahí que Ciria
y Sanguinetti califiquen como un “tránsfuga”, CIRIA, Alberto y SANGUINETTI, Horacio (1968), Los
reformistas, Buenos Aires, Jorge Álvarez. p. 45. Sobre la gestión antirreformista de Nazar Anchorena en
la UBA en 1930, BUCHBINDER, Pablo (2005).

Pensamiento Universitario • Nº 18

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ARTÍCULOS / NATALIA BUSTELO

Valoraciones y en la década del treinta se incorpo- décadas para participar con voz y voto en el
ró al Partido Socialista.13 gobierno universitario.14
Las dos iniciativas reformistas que en los La Universidad Nacional del Litoral era fun-
primeros años sí lograron una inscripción ins- dada por una ley nacional, fechada el 17 de oc-
titucional fueron la fundación de una univer- tubre de 1919, a partir de la Universidad Pro-
sidad nacional en las provincias del litoral y vincial de Santa Fe (compuesta de la Facultad
la nacionalización de la hasta entonces pro- de Derecho y la Facultad de Farmacia y Obste-
vincial Universidad de Tucumán. Esta última tricia), las Escuelas de Estudios Superiores de
continuaría siendo muy pequeña –apenas un Rosario y la Escuela Normal de Paraná. Pero la
centenar de estudiantes– y seguiría orienta- ley llegaba luego de una agitación estudiantil
da a la preparación de técnicos para la pro- tan masiva y radicalizada que su líder, el estu-
ducción regional. Sus estudiantes protagoni- diante de abogacía Pablo Vrillaud –firmante del
zaron varios conflictos pero, a distancia de los telegrama que transcribimos en el epígrafe–, la
platenses y porteños, debieron esperar varias describe para su familia mediante una humo-

13. Tanto sobre el decanato de Palacios como sobre Renovación, véase GRACIANO, Osvaldo (2008),
Entre la torre de Marfil y el compromiso político. Intelectuales de la izquierda argentina 1918- 1955, UNQ, Bernal.
En su primera compilación, aparecida en 1927, del Mazo dedicó el tercer tomo, íntegro,
a los conflictos platense de 1919-1920.
14. BRAVO, María Celia (2018), “Los avatares de la Reforma en la Universidad de Tucumán.
Sus fases y significaciones” (mimeo).

Pensamiento Universitario • Nº 18

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ARTÍCULOS / NATALIA BUSTELO

rística comparación con la revolución que aca- va Universidad que nos empeñamos en crear
baba de conmover al mundo: en reemplazo de aquellos conventos jesuíti-
cos que heredamos de España. De acuerdo
Tuvimos tres días de huelga y anduve he- con ello, adjúntote, para [el rector Francisco]
cho un “bolsebicki” –por poco me man- de la Torre, recorte de un periódico alemán
dan a presidio–. No te asustes, esto es para que informa del propósito de establecer en
nosotros un diploma de honor. Lo que te las universidades talleres auxiliares donde
aseguro es que a pesar de los pesares, es- los estudiantes adquieran nociones de oficios
toy entero y no pierdo la esperanza de ser prácticos con los cuales contribuir a ganarse
mañana o pasado el jefe del soviet. […] La la vida durante las vacaciones. Para los po-
huelga ha terminado, aunque el ambiente bres, esto es muy útil y para los demás una
siempre continúa cargado. No sería extra- enseñanza necesaria: que el trabajo del obre-
ño que de aquí a unos días volviera a ex- ro es tan respetable como el de ‘Doctor’.
plotar con mayor violencia.15 Carta de Enrique Barros a Gregorio
Bermann, Friburgo, 23/01/1922.
Como los “revolucionarios” cordobeses de
1918, los que surgían en Santa Fe y en La Plata La carta del epígrafe proviene de uno de los
sabían que el éxito de sus reclamos necesitaba primeros líderes cordobeses de la Reforma. A
del apoyo de los estudiantes de otras ciudades. mediados de 1918, el joven Barros fue uno de
El apoyo llegaría, pero la nacionalización par- los representantes estudiantiles encargados de
ticipó de un sistema de alianzas con la Unión viajar a Buenos Aires para negociar con Yrigo-
Cívica Radical, que el Partido Socialista denun- yen la intervención de la UNC. En noviembre de
ció como un doble intento de cooptación del ese año, en medio del cuestionamiento a su ne-
movimiento estudiantil y de consolidación po- gociación ante la segunda intervención, fue gra-
lítica en la región.16 vemente herido por dos estudiantes de un gru-
po antirreformista; y esa agresión convenció al
movimiento estudiantil y al obrero de articular
Crear la nueva universidad una activa –a pesar de breve– Campaña Nacio-
Sabes que anoto todo lo que observo o leo nal de Separación de la Iglesia del Estado, que
que pueda encontrar aplicación en la nue- delineó un programa en el que la democratiza-

15. Carta de Pablo Vrillaud, s/d (mayo de 1919, aprox.), Fondo Pablo Vrillaud, Museo de la Reforma,
Universidad Nacional del Litoral.
16. Es más, los parlamentarios socialistas votaron en contra de la creación de la UNL, al tiempo que
Nicolás Repetto publicó en La Vanguardia “Cátedras para socialistas. Nueva táctica del señor Yrigoyen”, nota
que inició una enérgica polémica a través de la que intentó –sin éxito– expulsar del Partido a los profesores
socialistas que habían aceptado cargos nombrados por decreto en la nueva universidad. Las piezas de la
polémica se conservan en el Fondo Roberto Giusti, CeDInCI. La mencionada compilación de Del Mazo
de 1927 recogió en su quinto tomo varios documentos relativos al conflicto estudiantil y en el tercero los
vinculados a la nacionalización. El rector interventor de la nueva Universidad fue Benito Nazar Anchorena,
quien fue sucedido por Benjamín Ávalos y, luego de nuevos reclamos estudiantiles, por Pedro Martínez,
candidato de la Federación Universitaria del Litoral. PIAZZESI, Susana y BACOLLA, Natacha (2015), El
reformismo entre dos siglos. Historia de la Universidad Nacional del Litoral, Ediciones UNL, Santa Fe.

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ción universitaria convergía con el divorcio, el coby para Química, Robert Wildbrandt –junto
reparto de la tierra y el sufragio femenino.17 En con Goldschmidt– para Economía Política y Otto
1920, meses después de recibirse de médico en Karl Willy Prausnitz para Higiene.18
Córdoba, Barros partía a Europa para especiali- En la universidad cordobesa la renovación
zarse en neurología, primero en el Instituto de había comenzado en octubre de 1918, luego de
Anatomía Patológica de la Universidad de Fri- las elecciones de autoridades dispuestas por la
burgo y luego en la Clínica del Niño de Floren- segunda intervención. Y, como en el caso san-
cia, y regresar a Córdoba en 1923. Como confir- tafesino, se trató de una renovación posible por
ma su epistolario con Bermann, en esa estadía un frágil equilibrio con el yrigoyenismo, que se
Barros se constituyó en un actor clave del inten- quebraría en 1923 con la presidencia de Mar-
to de construir tanto una universidad cientifi- celo T. de Alvear.
cista y social identificada con la Reforma como La FUC no consiguió que la intervención
de moldear a un estudiante que se distanciara organizara concursos para cubrir los cargos de
de la elite político-cultural para inscribirse en el profesores, pero sí logró que ingresaran en cá-
reclamo de las izquierdas por una sociedad más tedras de sensible importancia graduados jó-
justa. Una de las vías de esa construcción fue la venes que convergían en una amplia cultura
proyección –no concretada– de los “talleres au- liberal a la que intentaban imprimirle un ses-
xiliares”, otras fueron el envío de más de 60 ar- go izquierdista. En la Facultad de Ciencias Jurí-
tículos de científicos europeos para la Revista de dicas (que comprendía las escuelas de notaria-
la Universidad de Córdoba y las gestiones para con- do, derecho y procuración), Arturo Capdevila
tratar en 1922 a dos científicos alemanes perse- quedó a cargo, por un breve período, de la cá-
guidos por su condición izquierdista y judía: el tedra de Filosofía de las Ciencias Jurídicas y
fisiólogo humanista Georg Nicolai y el econo- Sociales, Arturo Orgaz ocupó Introducción al
mista marxista Alfons Goldschmidt. Si bien solo Derecho y las Ciencias Sociales, Enrique Mar-
esos dos profesores arribaron a Córdoba, Barros tínez Paz estuvo en Derecho Civil Comparado,
le había ofrecido el contrato con la UNC –que es- mientras que Raúl Orgaz en Sociología y Deo-
tipulaba la fundación de un instituto de investi- doro Roca en Filosofía General.19 Como adelan-
gación y de la cátedra universitaria respectiva– tamos, luego del conflicto en La Plata, Taborda
a una docena de científicos europeos. Entre los volvía a Córdoba y era elegido consejero; Astra-
convocados se encontraron Bruno Taut para Ar- da también regresaba y se encargaba de la re-
quitectura, Heinrich Poll para Morfología, Rusz- novación bibliográfica a través de la creación
tem Vambery y Hübner para Criminología, Ja- de la Sección de Librería y Publicaciones de la

17. AGÜERO, Ana Clarisa y NUÑEZ, María Victoria (2018). “Los asesinos de Barros. Una pesquisa
sobre la derrota”, en MAURO, Diego y ZANCA, José (eds.), La reforma universitaria cuestionada, Fhumyar
Ediciones, Rosario, 47-65. El epistolario con Barros puede consultarse en el Fondo Gregorio Bermann,
Museo Casa de la Reforma Universitaria, UNC.
18. BARROS, Enrique, “La contrarreforma”, Renovación, 1924, en DEL MAZO, Gabriel (1927, t.V), pp.
239-244.
19. GRISENDI, Ezequiel (2018), “Nuestro Kulturkampf. Derivas políticas e intelectuales del
reformismo universitario en la Córdoba de entreguerras”, en BACOLLA, Natacha y MARTÍNEZ,
Ignacio(eds.), Universidad, élites y política. De las reformas borbónicas al reformismo de 1918, Fhumyar
Ediciones, Rosario. pp. 265-291.

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Facultad.20 Biagosch, en cambio, llegaba a Ro- por varios de los profesores listados– renova-
sario para participar de la Facultad de Ciencias ba esas páginas con un juvenilismo que, lejos
Económicas y del nuevo Colegio Nacional y vol- del aristocratismo intelectual de José Enrique
ver a Buenos Aires a fines de los veinte, luego Rodó y José Ortega y Gasset, se preocupaba por
de haber dirigido La Gaceta Universitaria a co- la emancipación social y los debates sobre la
mienzos de 1918, y la Revista del Centro de Estu- nueva jurisprudencia sugerida por los soviets.
diantes de Derecho en junio de 1919. Y en lugar Gregorio Bermann, un joven médico discí-
de ceñirse a la difusión de apuntes de cátedra y pulo de José Ingenieros, se incorporaba al plan-
noticias estudiantiles, Biagosch –acompañado tel de profesores de la UNC en 1922. En los años

20. Hasta donde pudimos relevar la colección se editó entre 1921 y 1925 y se compuso de cinco
series. La primera estuvo constituida por el Boletín, la segunda por un boletín bibliográfico, la tercera
por “Conferencias”, la cuarta por “Varia” y la quinta por “Actas y Documentos”. En la tercera serie se
editaron al menos: 1. Orientaciones del pensamiento en México de José Vasconcelos y 2. El nuevo Código Penal
de Julio Herrera. En la cuarta serie aparecieron: 1. El conflicto de la cultura moderna de Georg Simmel
(traducido por Astrada y reproducido en la revista Ariel de Montevideo), 2. Los fundamentos filosóficos
de la obra de Spengler de Kurt Sternenberg (anunciados pero inhallable), 4. La obra de Osvaldo Spengler:
una cultur-psicología mística de Raúl A. Orgaz, 5. “Lo desconocido” en las ideas y en las instituciones de Arturo
Orgaz. Agradezco parte de esta información a Ana Clarisa Agüero.

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anteriores había sido clave en el apoyo porte- teriales ligados a la cultura general y a la re-
ño a los cordobeses a través de la Federación forma institucional que entonces tenía lugar.
de Asociaciones Culturales y, por insistencia Allí se publicó el nuevo catálogo de la Biblio-
de Barros, se mudaba a Córdoba, donde se su- teca Mayor junto al saludo de las obras con las
maría a Roca y otros perseverantes animado- que Bermann renovaba la cultura científica y
res de una versión radicalizada de la Reforma. política de los universitarios, se publicó un ar-
A fines de 1921, Bermann ganaba el concurso tículo sobre la teoría política helenista –y pro-
de la cátedra de Medicina legal y toxicología, fundamente anticristiana– de Leopoldo Lugo-
en la que dictó clases hasta 1936. Las cartas de nes, entonces simpatizante de la Revolución
Barros sugieren que en su decisión de radicar- Rusa, y dos sobre la filosofía del catalán Euge-
se en Córdoba pesó la mayor incidencia insti- nio d›Ors, quien desde una impronta soreliana
tucional que allí lograban los reformistas radi- simpatizaba también con Rusia y el obrerismo
calizados en comparación con Buenos Aires. catalán. Por la insistencia de algunos reformis-
Barros le aseguraba a Bermann que su espo- tas, d’Ors llegaba a la Argentina en septiembre
sa, Leonilda Barrancos, conseguiría en Córdo- de 1921 para dictar un curso sobre la nueva fi-
ba el puesto educativo que en Buenos Aires le losofía en la UNC y unos meses después Barros
negaban por su condición socialista y feminis- conseguía que Nicolai y Goldschmidt se con-
ta mientras que Bermann, además de obtener viertan en profesores e investigadores de la
la cátedra de Medicina legal, podría suplir a misma universidad.
Roca en la cátedra de Filosofía. Y poco después
de su arribo conquistó dos espacios cruciales
en la construcción de la nueva universidad: el Los maestros europeos
rector Francisco de la Torre, entonces cercano [El empeño de la generación del 18] hubo
a los reformistas, lo designó director de la Re- de asegurar a la Universidad de Córdoba
vista de la Universidad Nacional de Córdoba y, al po- el concurso de los más reputados sabios
co tiempo, lo nombró director de la Biblioteca del mundo, hombres como no pueden ni
Mayor de la UNC, de la que renovó su catálogo ostentarlos aquellas universidades que,
y amplió el horario de atención hasta las 23hs. cual la de Buenos Aires, no tienen por
Capdevila asumía la renovación del Bole- galardón su prehistórica antigüedad,
tín de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales de sino su importancia científica y cultural,
Córdoba. Entre junio de 1921 y agosto de 1922 universalmente reconocidas.
aparecieron cuatro números; un quinto, y úl- Enrique Barros, “Discurso”, 1924.
timo, se editó en 1923, con menos páginas y
bajo la dirección de Arturo Orgaz. Ante la au- Desde mediados de los años diez, la filoso-
sencia de una facultad cordobesa de filosofía fía de Eugenio d›Ors y sus Quaderns habían in-
y letras, fue en la de Derecho donde tendie- teresado a los jóvenes que en Buenos Aires em-
ron a procesarse los problemas de la cultura. prendían una renovación antipositivista desde
Mientras que al llegar Raúl Orgaz a la cátedra el Colegio Novecentista y los Cuadernos (1917-
de Sociología se exponía, por primera vez, un 1919). Pero también d’Ors atrajo al intelectual
estudio científico de la sociedad; con Roca, la más destacado de nuestra cultura científica, Jo-
cátedra de Filosofía iniciaba la difusión de las sé Ingenieros –con quien inició una amistad
corrientes antipositivistas. Asimismo, los bo- epistolar y planeó, sin éxito, reunirse en Bue-
letines de la facultad intercalaban cuestiones nos Aires–, y a uno de los líderes intelectuales
específicas de las ciencias jurídicas con ma- de los reformistas cordobeses, Deodoro Roca.

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La recepción cordobesa de d’Ors iba a portar un ver desmentida semejante información, ya que
signo político inverso al de la recepción porte- fuimos de los que auspiciamos la venida a Cór-
ña, pues hacia 1918 el Colegio se definió a fa- doba de Eugenio d’Ors, no porque fuera más o
vor de una versión nacionalista de la Reforma, menos filósofo, sino porque lo creíamos sincera-
que temía al caos izquierdista, mientras que mente izquierdista y revolucionario”.21
Roca y algunos reformistas no dudaban de que La desilusión que los reformistas cordobe-
la Revolución Rusa había abierto un horizon- ses se llevaron con d’Ors no los paralizó en su
te emancipatorio y apostaban a que la filosofía búsqueda de maestros ni en su disputa por la
novecentista ofreciera las claves para pensar y politicidad de los profesores. El 21 de abril de
actuar en los nuevos tiempos. 1922 arribaba a Buenos Aires el barco que traía
En Córdoba la formación universitaria no a Goldschmidt, Nicolai y sus esposas. Al pisar
estaba marcada por la reverencia a la ciencia si- suelo argentino todos eran detenidos por el De-
no al cristianismo. En su intento por reempla- partamento de Inmigraciones, que los acusaba
zar esa reverencia por un perfil emancipatorio, de “agentes de los bolcheviques”. El pacifismo
Roca pronunció discursos que retomaban citas filobolchevique de Nicolai era conocido y salu-
de d’Ors, pero también intentó que éste llega- dado desde hacía años por las revistas cultura-
ra a la ciudad. A instancias de Roca, el vicerrec- les de la izquierda argentina, incluso en 1920
tor de la UNC, Enrique Martínez Paz, le escri- el folleto El gran europeo Nicolai de Romain Ro-
bió la primera invitación al catalán en junio de lland era publicado en Buenos Aires por la pe-
1920. La visita se concretó un año después y, en queña editorial Pax –que dirigía Manuel Gál-
tanto participaba de la renovación institucional vez con financiación del socialista bolchevique
que analizamos, no podía dejar de estar reco- Augusto Bunge. Ante la llegada del alemán la
rrida por una fuerte tensión política. Las ideas editorial anarquista Argonauta fundaba el se-
de d’Ors aparecían asociadas a la posibilidad de llo Minerva para publicar Nicolai y el pensamien-
pensar filosóficamente los tiempos abiertos por to social contemporáneo, libro en el que apareció
la Gran Guerra y la Revolución Rusa. Pero, ya an- una nueva traducción de aquel folleto junto a
tes de su llegada, d’Ors insinuaba que la filosofía un breve prólogo del traductor y un artículo en
de su visita abandonaría el sorelismo bolchevi- el que Nicolai resumía las tesis de Biología de la
que para saludar el tradicionalismo y restringir- guerra, el libro que lo había consagrado como
se a una crítica antipositivista al cientificismo. humanista.22 De Goldschmidt seguramente se
A su vuelta a España, d’Ors se mudaba a Madrid ignoraba que desde 1919 participaba del círcu-
y confirmaba su giro filosófico-político antiiz- lo de propaganda bolchevique que, por encargo
quierdista. Ante la noticia, Ingenieros –bajo su de la Internacional Comunista, coordinaba en
alter ego filosófico– aclaraba en su Revista de Fi- Berlín Willi Münzenberg, pero sí se sabía que
losofía: “Mucho nos complacería, por supuesto, había visitado Rusia en 1920 y había publicado

21. LYNCH, Julio Barreda, “Un ocaso de Ortega y Gasset”, Revista de Filosofía, mayo de 1923, p. 333.
Sobre el compromiso de d’Ors con el nacionalismo reaccionario, véase el agudo análisis de GARCÍA
QUEIPO DE LLANOS, Genoveva (1988), Los intelectuales y la dictadura de Primo Rivera, Alianza, Madrid.
22. En junio de 1922, el joven Luis Juan Guerrero, el más entusiasta editor de Argonauta, le escribe
a su camarada Diego Abad de Santillán que “ha resultado una buena publicación”, lo que explica la
segunda edición que hemos hallado (Fondo Diego Abad de Santillan, Instituto de Historia Social).

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un diario de viaje, Moskau 1920, que saludaba la meños–, pero su llegada se demoró hasta el 10
experiencia bolchevique.23 de mayo y la FUC esperó hasta entonces para
En 1922, la FUC estaba dirigida por el es- realizar el acto conjunto de recibimiento.
tudiante de derecho y miembro del Partido So- La Voz del Interior tomó contacto con los pro-
cialista Edmundo Tolosa y tenía una marcada fesores y una semana después publicaba dos
orientación izquierdista. Ante la detención de entrevistas que confirmaban que, a distancia
los profesores, declaró una huelga por 24 horas de d’Ors, Nicolai y Goldchmidt sí estaban dis-
“con el propósito de si dentro de ese plazo no se puestos a proseguir la construcción de la uni-
les pone en libertad, dicha resolución quedará versidad social de la Reforma. Y ello no podía
planteada por tiempo indeterminado”.24 Golds- más que dar un nuevo impulso a la campaña
chmidt y Nicolai fueron liberados al día siguien- de desprestigio, cuyo órgano de difusión privi-
te y llegaron a Córdoba el 25 de abril en medio legiado era el diario católico Los Principios, que
de una campaña nacionalista que rechazaba la encontró su líder en Lucas Olmos uno de los
contratación de profesores extranjeros y la ca- miembros de la conservadora Corda Frates y
pacidad, sobre todo de Goldschmidt, en la ma- el profesor titular de la cátedra de Economía
teria. La FUC invitó a los estudiantes a recibir a Política. Cuando el neotomista Olmos presen-
los profesores en la estación de trenes y allí asis- tó su renuncia denunciando que se lo despla-
tió Bermann en representación de la Universi- zaba por el marxista Goldschmidt, el Centro
dad.25 Estaba previsto que tres días después arri- de Estudiantes de Derecho no federado se su-
bara Víctor Raúl Haya de la Torre –entonces el maba al desprestigio del “profesor extranjero”
joven presidente de la Federación de Estudian- con una encuesta que volvía a poner en duda su
tes del Perú conocido por haber encabezado las preparación científica y su capacidad docente.
exitosas reivindicaciones de los estudiantes li- La contratación se realizaba mediante un

23. Los archivos de la Unión Soviética registran que en 1921 Münzenberg informó a la Internacional
Comunista sobre la decisión del Comité Central de la Ayuda Obrera Internacional de enviar a la
Argentina a un representante para crear el Comité de Ayuda al Pueblo Ruso. JEIFETS, Lazar y JEIFETS,
Víctor (2015), América Latina en la Internacional Comunista, 1919-1943. Diccionario biográfico, Ariadna
ediciones, Moscú, p. 445. Al igual que los reformistas, Goldschmidt negó que su defensa de los
soviéticos tuviera un correlato partidario, pero además de dictar las lecciones económicas se dedicó
a fundar ese Comité. Por otra parte, sus defensores cordobeses no podían desconocer el vínculo
comunista tanto porque participaban de las iniciativas de la Federación Obrera Local, de conducción
comunista, como porque la FUC ya venía organizando una Campaña pro Hambrientos en Rusia desde
mediados de 1921.
24. La Voz del Interior, 22/04/1922.
25. “Nicolai y Goldschmidt. Su llegada a ésta”, 25/04/1922. En 1922 también arribaron a Córdoba el
sociólogo francés Lucien Levy-Bruhl y el intelectual mexicano José Vasconcelos, quienes, al igual que
d’Ors, Goldschmidt y Nicolai, ligaban la universidad a un proyecto social y despertaron afinidades
izquierdistas. Pero detrás de la llegada de aquellos, no se encontraba la gestión de los reformistas
cordobeses: la visita de Levy-Bruhl fue financiada por el Instituto Universitario de París en Buenos
Aires, mientras que la de Vasconcelos por el gobierno mexicano. Por otra parte, en julio de 1922
el Consejo Directivo de la Facultad de Derecho aprobó la contratación del filósofo español Manuel
García Morente para que dictara un curso de filosofía. La intervención de la Universidad al año
siguiente reemplazaría a los integrantes de ese consejo y suspendería ese y otros proyectos. De todos
modos, García Morente sería profesor en las universidades argentinas en 1937, cuando fue contratado
a instancias del filósofo porteño Coriolano Alberini.

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acto de recibimiento el 12 de mayo de 1922. Allí inesperado. Otras notas, cartas, volantes y mani-
fue el rector Francisco de la Torre quien subra- fiestos confirman que Goldschmidt persistió en
yó la función social para la que fueron llamados la difusión de teorías económicas que legitima-
los alemanes: en la época moderna, si la Univer- ban las decisiones de la Unión Soviética y que
sidad quiere volverse el alma mater de la socie- Nicolai optó por desplegar su humanismo en
dad, debe abandonar las disquisiciones abstrac- una entusiasta participación, desde los treinta,
tas para atender a los hechos proporcionados en la sede rosarina del Colegio Libre de Estudios
por los centros de investigación. Y respondien- Superiores y, en los cincuenta, en el núcleo chi-
do a la prensa nacionalista sostenía que también leno del Congreso por la Libertad de la Cultura.27
las universidades europeas y estadounidenses
habían recurrido a profesores especializados en
disciplinas científicas, y que en la Argentina esa Algunos comentarios
tradición había sido iniciada por una figura de para concluir…
indiscutible prestigio como Sarmiento.26 Si nuestro interés se acota al rastreo y análisis
Al igual que durante la breve gestión pla- de las fuentes que permiten reconstruir la breve
tense de Taborda, las revistas y grupos que apos- permanencia cordobesa de ambos profesores, es
taban a una orientación izquierdista y científi- porque nos interesa mostrar que esa permanen-
ca de la Reforma dieron su decidido apoyo a los cia fue parte de una disputa político-cultural por
nuevos profesores. Pero sólo lograron que Golds- la definición de la Reforma que, además de en-
chmidt impartiera sus lecciones sobre la auspi- contrar la resistencia de los nacionalistas, guar-
ciosa economía soviética hasta fines de 1922 y dó estrechos lazos –materiales e ideales– con los
tres años después también Nicolai era despla- proyectos institucionales que revisamos en los
zado de la universidad cordobesa. La FUC des- apartados anteriores. En efecto, la contratación
pedía al primero con una carta abierta, fechada de Nicolai y Goldschmidt, la dirección de la Bi-
en noviembre de 1922, que volvía a explicitar la blioteca Mayor asumida por Bermann, la visita
orientación izquierdista de la renovación insti- de d’Ors, la gestión de Taborda, los decanatos de
tucional: “Olvide Dr. Goldschmidt el veneno de Mario Sáenz y de Alfredo Palacios así como la re-
los que no ven otro mundo mejor que el actual, novación de algunas revistas universitarias for-
que están en constante movimiento por hacer maron parte de los pocos proyectos que duran-
fracasar cuanto intento de bien y de luz se perci- te el primer quinquenio reformista no dudaron
ba en este siglo pues, son los eternos directores de que renovar la organización universitaria era
de la contramarcha social”. Y ante el desplaza- también acercarla a los movimientos que recla-
miento del segundo en octubre de 1924, La Voz maban por sociedades más justas e igualitarias. Y
del interior declaraba: “Por demasiado útil arro- si bien alcanzaron una inscripción institucional
jaron de la Universidad a Goldschmidt y desean débil y breve, ello no impidió que se conformara
hacer lo mismo con Nicolai. Es como si hubiesen un movimiento reformista que en las décadas si-
querido hacer ley de esa frase: ‘Aquí no mandan guientes unió la denuncia del imperialismo esta-
y viven sino los burros!’”. Los itinerarios político- dounidense y del fascismo a aquel reclamo de jus-
intelectuales de ambos no registrarían un giro ticia e igualdad.

26. “Notas”, Revista de la Universidad de Córdoba, nº 2-3-4, abril, mayo y junio de 1922, pp. 449-456.
27. JANNELLO, Karina (2014), “Los intelectuales de la Guerra Fría.
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• Tarcus, Horacio (dir.) (2007), Diccionario biográfico


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• Tcach, César (2009), “Deodoro Roca: militante


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Pensamiento Universitario • Nº 18

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• ARTÍCULOS

Reformistas radicales
y reformistas peronistas:
debates parlamentarios
y nueva legislación
entre 1946 y 1955
Por Ernesto Villanueva* y Aritz Recalde**

* Sociólogo, Rector de la Universidad Nacional


Arturo Jauretche.
** Sociólogo, Docente en la Universidad Nacional
Arturo Jauretche y en la
Universidad Nacional de Lanús.

Juan Domingo Perón accedió a la Presidencia pendiente (conservadores) y de sectores nacio-


luego del triunfo electoral del 24 de febrero nalistas, el peronismo integró a un importan-
del año 1946. El instrumento político que lo te grupo de miembros de distintas corrientes
llevó a la primera magistratura se compuso de la Unión Cívica Radical (UCR). El Vicepresi-
de un entramado pluriclasista, pluripartida- dente de Perón desde 1946, Hortensio Quija-
rio y pluri-ideológico. Por un lado, el Justicia- no, fundó la UCR Junta Renovadora (UCR-JR)
lismo organizó una estructura partidaria con y con este sello veintisiete legisladores alcan-
miembros de distintos orígenes ideológicos, zaron la banca de la Cámara de Diputados de
ya desde 1943, Perón entabló un vínculo con la Nación. Se sumaron al Justicialismo otros
dirigentes del socialismo y miembros de esa diez diputados de distintas corrientes inter-
fuerza participaron en la creación del Partido nas del radicalismo, en un bloque partidario
Laborista que fue un instrumento fundamen- compuesto de ciento nueve miembros (CEHP
tal de la campaña electoral. Los socialistas Ati- 2019), además un grupo de radicales de FOR-
lio Bramuglia y Ángel Borlenghi ocuparon la JA ocupó lugares importantes de la adminis-
titularidad de la Cancillería y del Ministerio tración de la Provincia de Buenos Aires (Go-
del Interior desde 1946. Además de dirigentes doy 2015). Y, por otro lado, el peronismo fue
originarios de la izquierda, del Partido Inde- un movimiento pluri-ideológico en tanto fue

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ARTÍCULOS / ERNESTO VILLANUEVA Y ARITZ RECALDE

integrado por católicos, judíos, musulmanes versitaria de la etapa, que adquirió marcados
y dirigentes marxistas y agnósticos. Esta di- rasgos reformistas.
versidad estuvo estrechamente vinculada a la
estratificación social de la Argentina, edifica-
da con la afluencia de inmigrantes de diver- La política nacional ingresa
sas comunidades étnicas y nacionales. Tal cual a la universidad
documentó Raanan Rein (2007 y 2018), el pe- La Revolución de 1943 y el posterior ascenso
ronismo protagonizó una experiencia de asi- del peronismo dividió a todas las fuerzas par-
milación cultural sumamente exitosa. Si bien tidarias y la disputa política nacional se trasla-
la iglesia católica aumentó su influencia en el dó al seno de las universidades. Uno de los es-
área educativa desde los años treinta, las seis cenarios de la disputa fue la campaña electoral
universidades argentinas1 durante el peronis- de 1946, en la cual se movilizaron docentes y
mo mantuvieron su condición de institucio- estudiantes en ambas expresiones electorales.
nes con una amplia pluralidad religiosa, étni- La Federación Universitaria Argentina (FUA) y
ca y partidaria (Recalde, 2016; Puiggrós, 1993; las federaciones de Buenos Aires y del Litoral
Dércoli, 2014). integraron las columnas de la Unión Democrá-
Este entramado amplio se puede observar tica y encumbradas autoridades académicas fir-
en los procesos que permitieron al Justicialis- maron una solicitada auspiciando la detención
mo canalizar históricas demandas sociales y de Juan Domingo Perón y el traspaso de poder
culturales de los trabajadores, entre las cuales a la Corte Suprema de Justicia.
se destacó el ingreso gratuito e irrestricto a la En el contexto del debate de la Ley Universi-
universidad consagrado en noviembre del año taria del año 1947 se produjeron fuertes debates y
1949. Además de la creación de la Universidad acusaciones cruzadas que revelaron el alto grado
Obrera Nacional, orientada a favorecer el ingre- de politización de las universidades que el pero-
so de los hijos de la familia trabajadora y a res- nismo no inventó, pero que innegablemente po-
ponder a las nuevas demandas de capacitación tenció. Hubo profesores y estudiantes de origen
y de formación profesional del pujante empre- e ideario radical y socialista en ambos espacios
sariado nacional, que impulsaron las discipli- políticos, aunque las conducciones de la UCR y
nas tecnológicas y las líneas de investigación li- del Partido Socialista se manifestaron en pública
gadas al nuevo patrón de desarrollo industrial. oposición a Perón. Por ejemplo, en el recinto de
Es así que durante el tratamiento del Pro- la Cámara de Diputados el radical Alfredo Calcag-
yecto de Ley Universitaria en 1947, represen- no cuestionó la vinculación de Ricardo Labougle
taron al Justicialismo varios diputados de ori- –interventor de la UNLP de 1944– con el conser-
gen UCR-JR que eran docentes y académicos vador Patrón Costas. El dirigente justicialista ori-
como Raúl Bustos Fierro (UCR-JR Córdoba), José ginario de la UCR-JR, Eduardo Colom, le respon-
Luis Moreno (UCR-JR Mendoza), Ricardo Guar- dió acusándolo de que los rectores universitarios
do (UCR-JR Capital Federal) o Leonardo Obeid concurrieron a un banquete con el embajador de
(UCR-JR Córdoba). Estos radicales tuvieron una los Estados Unidos de América, Spruille Braden
influencia fundamental en la organización uni- (Sesiones Cámara de Diputados 1947: 702).

1 En la etapa existían las universidades nacionales de Córdoba, Buenos Aires, La Plata, Litoral,
Tucumán y Mendoza. En el año 1948 se fundó la Universidad Obrera Nacional con regionales
en diversas provincias.

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Durante la etapa se crearon nuevas agru- des. Incluso, el estatuto de la UBA de 1956 esta-
paciones y el oficialismo impulsó la Confedera- bleció la prohibición de la cátedra para quienes
ción General Universitaria (CGU), la Agremia- se identificaran con el peronismo.
ción del Profesorado Universitario (ADA) y la
Confederación General de Profesionales (CGP),
que oficiaban como la contracara de la Federa- Los Planes Quinquenales y la
ción Universitaria Argentina (FUA) y de los Co- Constitución Nacional de 1949
legios Profesionales ligados directamente a la “La enseñanza impartida hasta el presente
oposición partidaria nacional. ha tenido un carácter enciclopedista, y
Esta situación derivó en renuncias, cesan- nosotros debemos ir a la especialización.
tías docentes y en enfrentamientos entre los Hacen falta especialistas y no los hay (…)
grupos identificados con el oficialismo y con La mejor colaboración que pueden prestar
la oposición. Las tensiones en la universidad los profesores al Plan Quinquenal es
de 1946, fueron análogas a las disidencias de estudiándolo para ver cuáles deben ser las
la UCR con los conservadores de Córdoba en el especializaciones a crearse”.
año 1918. La diferencia entre ambos procesos Juan D. Perón, 1947
es que el peronismo supuso una continuidad
mayor con la institución reformista,2 a diferen- Una de las características centrales del justicia-
cia de esta última tradición que rompió más ta- lismo fue que planificó las políticas del Estado.
jantemente con las autoridades y con los acadé- En varios aspectos, esta voluntad entraría en
micos anteriores al radicalismo (Recalde, 2016). colisión con una tradición que no percibía la
Si bien esa disputa malgastó esfuerzos y necesidad de un diálogo permanente entre ne-
conllevó a que valiosos académicos3 se aleja- cesidades nacionales y formación académica,
ran de la universidad, no impidió el desenvolvi- producto de una visión profesionalista estrecha.
miento de un proyecto científico y tecnológico El Gobierno Nacional sancionó el Primer
sumamente importante para las instituciones Plan Quinquenal (1947-1952) que incluyó on-
hasta nuestros días. Lamentablemente para el ce metas generales para la universidad y un
país y para la comunidad académica en parti- proyecto de ley para su regulación. La inicia-
cular, esta lucha entre partidos nacionales y tiva adjuntó una “exposición de motivos”, en la
corrientes universitarias siguieron y se radica- cual la nueva fuerza política reivindicó el le-
lizaron durante el período culminando en el gítimo derecho a regular la vida académica. El
golpe de Estado de 1955 que expulsó a numero- documento consideró necesario vincular más
sos profesores4 y autoridades de las universida- estrechamente el desarrollo nacional y la cien-

2 Hay investigaciones que documentaron que los cargos de los docentes salientes en 1946,
fueron ocupados por concurso por profesionales con larga trayectoria académica de la misma
universidad (Del Sel, 2012; Recalde, 2016; Buchbinder, 2010).
3 No hay cifras objetivas y documentadas sobre los profesores efectivamente expulsados
de los cargos en 1946. Según el diputado Nerio Rojas de la UCR, entre renuncias, jubilaciones y
exoneraciones habrían salido de las universidades 1247 profesores (Sesiones Cámara de Diputados
1947: 719). Guardo corrigió las cifras y le atribuyó a los legisladores radicales un error al incluir
en el universo de “expulsados” a renunciantes voluntarios. De la cifra mencionada por Rojas, alrededor
de 400 de estos docentes fueron exonerados y el resto son renunciantes.
4 La dictadura cívico militar sancionó el Decreto-Ley 6403 que prohibió el acceso al concurso
docente a quienes habían alcanzado su cargo en la democracia (1946-55).

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cia. Entre otras metas, el Plan Quinquenal con- nizar los conocimientos universales” y a “profundi-
templó extender la dedicación exclusiva de los zar el estudio de la literatura, historia y folklore de
docentes y su ingreso por concurso. Proyectó su zona de influencia cultural, así como a promover
establecer la gratuidad de los estudios y crear las artes técnicas y las ciencias aplicadas con vistas a
un sistema de becas, entre otros temas funda- la explotación de las riquezas y al incremento de las
mentales en los que había acuerdo entre oficia- actividades económicas regionales”, e incluyó “cur-
lismo y oposición. sos obligatorios y comunes” tendientes a la forma-
En el año 1949 se sancionó una nueva ción política de los egresados, que tenían que
Constitución Nacional. Por primera vez en la adquirir “conciencia de la responsabilidad que debe
historia de la Argentina, la Carta Magna inclu- asumir en la empresa de lograr y afianzar los fines re-
yó la autonomía5 de las universidades cuyos al- conocidos y fijados en esta Constitución”.
cances serían determinados “dentro de los límites La nueva Carta Magna modificó el esque-
establecidos por una ley especial que reglamentará su ma de los cinco ministerios incluidos en la
organización y funcionamiento”. La Constitución Constitución de 1853. Gracias a esta reforma,
estableció que: “El Estado encomienda a las univer- en el año 1949 se creó el Ministerio de Edu-
sidades la enseñanza en el grado superior, que prepa- cación de la Nación como un desprendimien-
re a la juventud para el cultivo de las ciencias al servi- to del de Justicia e Instrucción Pública. Con el
cio de los fines espirituales y del engrandecimiento de flamante organismo y conjuntamente con el
la Nación y para el ejercicio de las profesiones y de las Consejo Nacional Universitario, integrado por
artes técnicas en función del bien de la colectividad”. los rectores de las universidades nacionales,
Además plantea la creación de “regiones univer- instituido en 1947, el Estado propendió a re-
sitarias” y se mandató a la institución a “orga- organizar y a reglamentar la cultura, la cien-

5 La ley 13.031 de 1947 había establecido que las universidades cuentan con “autonomía técnica,
docente y científica”. Al momento de tratarse esta última norma en la Cámara de Diputados, el
Ministro de Justicia e Instrucción Pública detalló que la ley 1597 de 1885 no habló de “autonomía”
y que en dicha reglamentación el Consejo Superior meramente trataba temas contenciosos, fijaba
aranceles o sancionaba reglamentos. El Ministro destacó que el proyecto del Justicialismo le otorgó
a las universidades autarquía presupuestaria, autonomía científica, salarios docentes altos y otro
importante número de competencias académicas (Sesiones Cámara de Diputados 1947: 776-778).

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cia y la investigación de las Casas de Altos Es- comunidad y protegiéndolos mediante una adecuada
tudios. La nueva cartera educativa empezó a legislación”. La conducción de la política científi-
definir estándares y a regular con mayor exac- ca estaba a cargo del flamante Consejo Nacional
titud el funcionamiento del conjunto univer- de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONI-
sitario. Se instauró la asistencia obligatoria de CyT), institución ignorada posteriormente como
los alumnos, el monopolio de la emisión de tí- real antecedente del actual CONICET.
tulos habilitantes, se coordinaron los planes
de las carreras vinculadas y se homologaron
condiciones de admisión, de equivalencias y El nuevo modelo económico
de tipos de ingreso. Se regularon los mecanis- y la Universidad Obrera Nacional
mos de entrada a la enseñanza por concurso y El peronismo fue el primer gobierno argentino
se instauraron las Carreras Docentes, tendien- que postuló el objetivo de la industrialización co-
do a conformar un sistema más integrado de mo causa nacional. Si bien a partir de la Prime-
Educación Superior (Ministerio de Educación ra Guerra mundial el país sustituyó importacio-
de la Nación 1952: 30-31). La etapa estuvo ca- nes y proliferaron las fábricas, desde 1943 y con
racterizada por la implementación de grandes más fuerza en 1946, esta tendencia se integró a
programas de obra pública en todas las univer- un programa planificado de desarrollo. El Justi-
sidades de la Argentina. cialismo bautizó a la meta de la industrialización
En el año 1952 se aprobó el Segundo Plan como “independencia económica”. El proyecto que-
Quinquenal (1953-1957) que postuló ocho gran- dó formulado en los tres grandes documentos
des metas universitarias, entre las que se des- que ya mencionamos, el Primer y Segundo Plan
tacaron la de formar profesionales con “res- Quinquenal y la Constitución del año 1949 que
ponsabilidad social y plena conciencia de que están en su preámbulo introdujo la “irrevocable decisión”
obligados a servir al pueblo”; la de consolidar una de conformar una “Nación socialmente justa, econó-
educación “gratuita, eminentemente práctica y es- micamente libre y políticamente soberana”.
pecializada”; avanzar en la implementación de En una gran síntesis, la independencia eco-
la dedicación exclusiva de los docentes; abrir nómica suponía:
centros universitarios en todo el país; incluir • Una amplia participación estatal en la
de manera obligatoria “cursos para posgradua- economía: la Constitución declaró de
dos” y entablar una “vinculación permanente con propiedad estatal a los servicios públi-
el mundo a fin de mantener el nivel de enseñanza uni- cos, a los minerales, a las caídas de agua,
versitaria”. El Plan propuso que las universida- a los yacimientos de petróleo, de carbón
des asesoraran al Gobierno Nacional. y de gas. El comercio exterior quedaba
Sobre estas bases, la planificación guberna- en manos del Estado (Artículo 40).
mental puntualizó que el Estado aseguraría el • Un apoyo a la actividad económica de
ingreso a todos los aspirantes y que las institu- capital nacional y de aquella orientada
ciones tenían que incluir a 200.000 alumnos al al mercado interno: la Constitución de-
año 1957 (un 100% más que en 1951). El Segundo claró la “función social” de la propiedad
Plan Quinquenal contempló la apertura de las privada y fijó que el “capital debe estar al
Facultades Obreras creadas por la ley 13.229/48. servicio de la economía nacional” y “sus di-
La planificación incluyó un apartado especí- versas formas de explotación no pueden con-
fico de “investigaciones científicas y técnicas”. La ini- trariar los fines de beneficio común del pueblo
ciativa proponía formar investigadores con con- argentino” (Artículos 38 y 39).
ciencia social, “exaltando el valor de su misión en la • Un desarrollo de la industria que fue

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conceptuada como el principio funda- nal de Aprendizaje y Orientación Profesional


mental del nacionalismo: los Planes (CNAOP - Decreto 14.538/44 y ley 12.921/46) y la
Quinquenales proyectaron en el tiempo Dirección General de Enseñanza Técnica (Puig-
las metas de la industria liviana y pesa- grós, 1993). Y la gratuidad universitaria proyec-
da y programaron la edificación de una tada desde 1947 estaba orientada a masificar la
infraestructura material y científica pa- institución y formar a los nuevos profesionales
ra su efectiva realización. requeridos por una economía en crecimiento.
Entre estas diversas acciones, un capítulo apar-
Con estos principios ideológicos ordena- te supuso la creación de la Universidad Obrera
dores, a partir de 1944 se nacionalizó el Banco Nacional (UON), institución que tenía la finali-
Central, los depósitos bancarios y el comercio dad de formar profesionales de origen trabaja-
exterior (Instituto Argentino de Promoción del dor, de consolidar un equipo docente formado
Intercambio). También se fundaron los bancos en talleres, de asesorar a la industria y de pro-
Industrial e Hipotecario Nacional, entre otros mover investigaciones aplicadas a la industria,
instrumentos gubernamentales que destina- entre otras. Los egresados obtendrían el título
ron los excedentes financieros y agropecua- de ingenieros de fábrica. Cabe destacar el enor-
rios al desarrollo productivo y social. Tal cual me parentesco de esta Universidad con el Insti-
demostraron investigaciones recientes, duran- tuto Politécnico Nacional mexicano, creado du-
te la década de 1945 a 1955 se produjo un cre- rante la gestión de Lázaro Cárdenas.
cimiento del PBI y un avance de la producción La UON fue la primera gran experiencia ar-
manufacturera, que favorecieron el fortaleci- gentina de regionalización universitaria,6 ini-
miento de actividades de alto contenido de va- ciativa que fue largamente debatida en varias
lor agregado y científico como la metalmecá- sesiones legislativas y finalmente aprobada por
nica o la producción de una industria de línea la ley 13.229 de 1948. Sus distintas sedes impul-
blanda (Rapoport, 2010; Basualdo, 2006). saron carreras y líneas de investigación propias
Para acompañar este proceso económico, de cada distrito en el cual se instalaron las Fa-
el gobierno impulsó la investigación aplicada cultades Regionales. Inicialmente, se crearon
desde la Dirección General de Fabricaciones unidades académicas en Capital Federal, Santa
Militares creada en 1941 por iniciativa de Ma- Fe, Rosario y Córdoba. Poco tiempo después, se
nuel Savio, y potenció la labor científica de las fundaron las regionales de Bahía Blanca, La Pla-
Industrias Aeronáuticas y Mecánicas del Esta- ta, Mendoza, Avellaneda y Tucumán.
do (1951-52) y de la Sociedad Mixta Siderúrgica El diputado de la UCR Luis Dellepiane se
Argentina (1947). También fueron sumamente opuso en el Parlamento a la creación de la
importantes las tareas de investigación del Ins- UON, argumentando que no podía impulsar-
tituto Antártico (1951), de la Comisión Nacio- se una educación de “clase” y que sería más
nal de Energía Atómica (1950) y del CONICyT. oportuno incluir las nuevas demandas técni-
Tal cual adelantamos, la política universita- cas en las universidades ya existentes. En su
ria integró un apartado específico en los Planes óptica, a la UON le faltaba formación “cultural
Quinquenales y entre su metas centrales esta- y humanística” (Sesiones Cámara de Diputados
ba la de acompañar la incipiente industrializa- 1948: 1981-1986). Un argumento similar adujo
ción. En esa línea, se creó la Comisión Nacio- el radical Gabriel del Mazo el 22 de julio cuan-

6 La segunda experiencia de regionalización universitaria fue impulsada por el Plan Taquini.

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do manifestó que a la UON no le interesaban taciones de la vida nacional. Y es el gobierno, señores


los “motivos de la educación humana (...) cuando la diputados, el que pone la fuerza del Estado a disposi-
técnica usurpa para si la totalidad, se vuelve de he- ción de la reforma y democratiza la universidad, ter-
cho un totalitarismo”. minando con su vieja oligarquía. Esa historia de ayer
El justicialista Ricardo Guardo (UCR-JR) re- se repite hoy. La chusma de ayer son los descamisados
plicó la crítica del bloque de la UCR y en su opi- de hoy, que se encuentran en la misma tarea (…) pues
nión los “representantes obreros” en la Cámara por más puros que puedan haber sido los ideales del
de Diputados le otorgaban “significado social” a la 18, la verdad es que su aplicación práctica, los resul-
propuesta y la justicia social era la “base, nervio tados no han sido tan halagüeños como se esperaba”
y doctrina de nuestra conducta y de nuestra orienta- (Sesiones Cámara de Diputados 1947: 713-714).
ción”. Destacó que era necesario consolidar una Por su parte, Leonardo Obeid (UCR-JR) de-
“conciencia técnica nacional”, sin la cual no podría- talló que “ha llegado la hora de cumplir con la re-
mos superar el rol de “zona agropecuaria” en el forma, no aniquilándola, como pretendieron sus ene-
cual nos ubicó el “capitalismo internacional”. To- migos, sino realizándola e incorporándola al esfuerzo
mando el modelo histórico norteamericano, ordenado de la República” (Sesiones Cámara de Di-
Guardo puntualizó que sería “fatal para nosotros putados 1947: 698). Y Héctor Cámpora (Parti-
mantenernos ajenos a la realidad mundial sin que do Laborista de Provincia de Buenos Aires) fue
la tecnología forme parte del patrimonio cultural de terminante al afirmar con orgullo que él era re-
nuestro pueblo”. En su opinión y a diferencia de formista, que en su juventud había ocupado un
Luis Dellepiane, creyó que las asignaturas de cargo directivo en la Federación estudiantil de
geografía e historia incluidas en los Planes de Córdoba y que desde la conducción del Centro
Estudio de la UON, les daban a los estudiantes de Estudiantes había bregado activamente por
una clara visión humanista (Sesiones Cámara el triunfo de una “conciencia que se revelaba con-
de Diputados 1947: 1986-1993). tra injustos privilegios de los que usufructuaba una
clase que acaparaba las cátedras”. Desde su punto
de vista, la propuesta del Justicialismo no era
El Peronismo anti reformista sino que, por el contrario, re-
y la Reforma de 1918 tomaba su ideario y “traduce los sentimientos de
Como mencionamos, el modelo universitario la revolución abriendo las puertas de todas las facul-
del Justicialismo fue formulado y defendido tades a la juventud, cualquiera sea su origen, raza o
en el recinto por diputados de origen radical y ideología en la vida ciudadana” (Sesiones Cámara
reformista. En el parlamento, Ricardo Guardo de Diputados 1947: 763).
sostuvo que: “Hoy somos nosotros quienes vamos a
dar la nueva interpretación del viejo y auténtico an-
helo de la universidad argentina, ya que los conti- La Ley Universitaria 13.031
nuadores de 1918 han encallado la nave” (Sesiones de 1947 y su reforma de 1953/54
Cámara de Diputados 1947: 716). El diputado El diputado justicialista José Luis Moreno (UCR-
puntualizó que: “La universidad se pone a tono en JR de Mendoza) elevó el Informe del Proyecto7
un movimiento integral que abarca todas las manifes- de Ley Universitaria, que finalmente se apro-

7 Ricardo Guardo puntualizó en el recinto que el Proyecto de Ley Universitaria surgió de una
encuesta previa efectuada a docentes. En respuesta al diputado Rojas (UCR), Guardo sostuvo que “voy a
mostrar al señor diputado la estadística en la que se verá que la mayoría, casi la totalidad de los profesores están de
acuerdo con los puntos fundamentales de la ley” (Sesiones Cámara de Diputados 1947: 720).

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bó con la norma 13.031/47 que remplazó la presupuesto a las instituciones y formuló im-
1597/85. El despacho de la mayoría justicialista puestos especiales para garantizarlo.8 La UCR
de la Cámara de Diputados fue firmado por los presentó un proyecto de ley alternativo por la
dirigentes oriundos del Partido Laborista como minoría que llevó la firma de Alfredo Calcagno
Alcides Cuminetti Correa (Santa Fe) y Aman- y de Luis Dellepiane. En la iniciativa proponían
do Vergara (Catamarca), y por tres miembros encausar a las universidades en institutos de
de origen radical: Teodoro Saravia (UCR Yrigo- “alta cultura” que laboraran “por la ciencia, por la
yenista de Córdoba), Leonardo Obeid (UCR-JR Patria, por la Libertad y por América”. Es bueno re-
de Córdoba) y el mencionado Moreno. Este úl- marcar, que pese a las diferencias también ha-
timo caracterizó a las universidades como el bía muchos puntos de encuentro entre ambos
“cerebro de la Nación” y creyó que tenían que re- proyectos. De los cinco aspectos considerados
fundar su funcionamiento por el hecho de que por Moreno, el de la “elección de autoridades” fue
impedían a las clases humildes estudiar y di- el que más resistencia generó en el recinto por
fundían los valores de “esencia material y utilita- parte del bloque de la UCR.
ria y de confort, evidentemente necesarios, pero tran-
sitorios”. También consideró que la Reforma de
1918 tuvo un origen positivo, pero que luego Organización del
se fue desvirtuando y era “un movimiento reno- Gobierno Universitario
vador destinado en su finalidad a tener honda reper- El peronismo articuló las tradiciones reformis-
cusión y trascendental consecuencia en la estructura tas con los sistemas de administración acadé-
de nuestra enseñanza superior”, y puntualizó que mica propios de los países centrales. El tema
los reformistas impulsaron la renovación de la más debatido de la iniciativa de ley fue el he-
Universidad de Córdoba por el hecho de que es- cho de que el Rector era designado por el Po-
taba sumida en “un tranquilo sueño colonial” y que der Ejecutivo y lo acompañaba un Consejo Uni-
la vida de la institución era manejada por “cír- versitario de Decanos. Las Facultades estaban a
culos oligárquicos cerrados”, aunque con el trans- cargo de un Decano designado por los docentes
curso del tiempo el reformismo se desvirtuó y en base a una terna enviada por el Rector. Los
“entronizó otro tipo de política” donde las “malas estudiantes tenían representación en los Con-
prácticas y la corrupción” eran moneda frecuente. sejos Directivos y sus delegados eran seleccio-
Finalmente, Moreno resumió la propuesta del nados atendiendo a sus altas calificaciones y te-
Poder Ejecutivo en cinco grandes ejes: la elec- nían voz, pero no voto.9
ción de autoridades; la retribución adecuada La ley 13.031/47 creó el Consejo Nacional
y la dedicación exclusiva de los profesores; la Universitario constituido por los Rectores y
selección de los catedráticos por concurso; la presidido por el Ministro de Educación de la
obligatoriedad de asistencia a clase de los estu- Nación. Tenía tres grandes tareas que eran la
diantes y la gratuidad de la enseñanza (Sesio- de vincular la acción académica con la resolu-
nes Cámara de Diputados 1947: 678-681). Un as- ción de los problemas del país, asesorar al go-
pecto sumamente importante de la iniciativa bierno y articular y armonizar planes y accio-
legislativa fue que el Estado se obligó a dotar de nes entre las Casas de Altos Estudios.

8 Artículos 107 a 110 de la Ley 13.031/47 y artículos 62 a 68 de la ley 14.297/54.


9 Esta cuestión se modificó en la ley 14.297 y los estudiantes tenían voto en los temas
propios de su incumbencia.

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ARTÍCULOS / ERNESTO VILLANUEVA Y ARITZ RECALDE

El apartado de los órganos de gobierno designado por el gobierno; es el tipo de solución que
recibió fuertes críticas de la UCR. Gabriel del adopta la gran universidad de Columbia, la más im-
Mazo consideró erróneo impulsar el “sistema portante de todas las universidades de Estados Uni-
unilateral fracasado del gobierno exclusivo de los pro- dos, que ha tenido como rector al actual presidente
fesores” y abogó por sumar a estudiantes y a gra- de la Nación americana. Es el tipo de solución que
duados (Sesiones Cámara de Diputados 1947: adopta la Universidad de Austin en los Estados Uni-
738). Ricardo Guardo le respondió que estos úl- dos, que está considerada como el arquetipo de las
timos no habían integrado nunca el gobierno universidades” (Sesiones Cámara de Diputados
de la institución, con la excepción de un breve 1953: 2783).
paso por la UNLP. Humberto Messina (UCR-JR) detalló que so-
Por su parte, Alfredo Calcagno creyó que la lamente en la UBA los estudiantes tenían voz
participación estudiantil no tenía que incluir y voto y que en la UNLP no votaban en los Con-
criterios académicos en su selección y que era sejos Directivos. Sostuvo que “ni en las grandes
oportuno integrar a los graduados como sostu- universidades europeas que han sido cuna de la or-
vo Gabriel Del Mazo (Sesiones Cámara de Dipu- ganización democrática dentro del régimen universi-
tados 1947: 699-709). Guardo replicó que no se tario, ni la de Michigan, madre de las universidades
suprimía la representación estudiantil y que estatales de los Estados Unidos, ni las inglesas, ni aun
la inclusión de criterios académicos permitiría mismo las germanas, dan participación al estudian-
que lleguen los jóvenes más capaces. te en el gobierno de la Facultad”. Remarcó que el
El oficialista Bustos Fierro respondió a los proyecto del oficialismo le otorgaba a los jóve-
cuestionamientos de la UCR, argumentando nes el derecho a elegir un delegado estudiantil,
que el Justicialismo organizó el gobierno si- que actuaba como “contralor de aquellos profeso-
guiendo los modelos de las instituciones “más res que se apartan de su función docente” (Sesiones
tradicionales y democráticas del mundo, como son Cámara de Diputados 1947: 741).
las inglesas y norteamericanas”. Puntualizó que no En el Proyecto de Ley de Dellepiane y Cal-
existía acuerdo sobre el rol de los jóvenes en el cagno, el Rector sería designado por la Asam-
cogobierno dentro del mismo sector opositor blea Universitaria, compuesta por igual núme-
y “Bernardo Houssay propone como base de toda en- ro de profesores, estudiantes y graduados.10 El
señanza seria la limitación del número de alumnos” Consejo Superior se conformaba por un docen-
(Sesiones Cámara de Diputados 1947: 753). Es- te titular de cada Facultad, por los Decanos y
te mismo argumento fue retomado por el di- por tres miembros de los claustros de gradua-
putado en el recinto en 1953 y destacó que “no dos y de los estudiantes. En los Consejos Direc-
está sola la ley argentina en este tipo de soluciones. tivos participarían los tres claustros, aunque
Es el tipo de solución que adopta la republicana Fran- el docente conservaba la mayoría. Por primera
cia, la magnífica universidad brasileña, que tiene a vez en la legislación universitaria se incluyó a
su frente en Río al eminente profesor Pedro Calmón, los no-docentes en el gobierno11 de la institu-

10 El sistema de gobierno universitario instaurado por la Dictadura cívico militar de 1955, no


aplicó la igualdad de representación de los tres claustros introducida en este Proyecto y los docentes
mantuvieron la mayoría proporcional para ejecutar las decisiones.
11 El tema no fue mencionado en el debate del recinto de la Cámara de Diputados y el bloque de la
UCR se centró en exigir más participación de los estudiantes y en la inclusión de los graduados. Los
no-docentes recién lograron participar de los Consejos Directivos y Superiores de la universidad en
1974 con la ley 20.654.

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ARTÍCULOS / ERNESTO VILLANUEVA Y ARITZ RECALDE

ción y el proyecto detalló que “cuando se traten sa diga lo contrario” (Sesiones Cámara de Dipu-
asuntos que conciernen directamente al personal au- tados 1953: 2768).
xiliar, técnico y administrativo, y al sólo efecto de in- Además, la ley establecía que los estudian-
tervenir en consideración tendrán derecho a asistir a tes tenían que asistir de manera obligatoria a
sesiones del consejo superior, de los consejos directivos las clases teóricas y prácticas y podían cursar
y de sus comisiones, con voz y voto, dos representan- bajo la modalidad regular, libre y vocacional,
tes de dicho personal, designados en votación directa solo los primeros poseían el derecho a acceder
o por asociación de empleados de la universidad que a becas para la enseñanza gratuita. En línea con
es su órgano legítimo”. Finalmente, la propuesta la tradición reformista y con las metas del Plan
de la UCR también creaba un Consejo Interuni- Quinquenal, la ley incluyó la enseñanza para
versitario, pero no le daba intervención al Go- graduados en cursos de perfeccionamiento y
bierno Nacional y sí a las federaciones de es- de especialización y promovió la creación de
tudiantes y de graduados (Sesiones Cámara de Institutos de Investigación científica, la estruc-
Diputados 1947: 673-678). tura de cátedra y los Centro de Investigación.

La labor docente La ley 14.297 de 1954


y de investigación La reforma de la ley 13031/47 se trató en la Cá-
La ley 13.031 estableció el derecho a la dedica- mara de Diputados el 18 de diciembre de 1953.
ción exclusiva12 y a la Carrera Docente. Los pro- Según la exposición en el recinto del diputado
fesores titulares tenían autonomía de cátedra e oficialista por Buenos Aires Eduardo Forteza, la
ingresaban por un concurso realizado por una modificación se originó en el intento de adecuar
Comisión Asesora compuesta por profesores ti- el funcionamiento de la universidad a las metas
tulares. La designación era ratificada por el Po- de la Constitución Nacional de 1949 y del Segun-
der Ejecutivo.13 Los profesores adjuntos y los do Plan Quinquenal. Entre los principales aspec-
demás miembros de cátedra, eran nombrados tos incluidos estuvieron la obligación de garan-
por un concurso ratificado por los Consejos. tizar la gratuidad universitaria, la necesidad de
La ley mantuvo la docencia libre siguiendo la ligar a las instituciones a los “problemas nacio-
tradición reformista, lo que fue destacado por nales” y la posibilidad de requerir asesoramien-
el justicialista Díaz de Vivar en el debate de Di- to por parte del gobierno. También se introdu-
putados de 1953 cuando sostuvo que “nosotros jeron cursos de cultura filosófica y de doctrina
deseamos una universidad libre y una docencia libre, nacional,14 se incluyó la figura de regiones uni-
que de hecho existe, aunque la afirmación calumnio- versitarias de la Constitución Nacional, se otor-

12 Esto mismo había propuesto el proyecto de la minoría radical utilizando la figura de “full-time”.
13 En el universo de los profesores titulares el texto mantuvo la regulación de la ley 1597 de 1885,
que estableció que la terna de profesores concursados sería ratificada por el Poder Ejecutivo.
14 En el año 1949 la Universidad Nacional de Cuyo con apoyo del Gobierno Nacional, organizó el
Primer Congreso Nacional de Filosofía. En ese marco, Perón presentó el esquema de la Comunidad
Organizada al que postuló como una propuesta de Doctrina Nacional. La Constitución Nacional estuvo
influenciada por estas nociones y tal cual mencionamos, incluyó una mención a que las universidades
tenían que formar profesionales con conciencia nacional y política.

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ARTÍCULOS / ERNESTO VILLANUEVA Y ARITZ RECALDE

gó voto a los representantes estudiantiles15 en la gratuidad de la universidad para los estudian-


temas de su incumbencia e insto a las univer- tes de bajos ingresos. La planificación incluyó
sidades a organizar centros de graduados (Se- un Proyecto de Ley de “Estatuto Universitario”
siones Cámara de Diputados 1953: 2728-2233). que fijó la meta de la “gratuidad de la enseñanza
universitaria”. La iniciativa estableció que “la en-
señanza universitaria es completamente gratuita en
La gratuidad todos sus aspectos para todos aquellos alumnos ins-
de la enseñanza criptos que carecieren de medios para costearla. Los
“Queremos la libertad y queremos la estudiantes que por sí o por su familia no se hallaren en
igualdad; pero esa libertad y esa igualdad ha las condiciones señaladas en el párrafo anterior costea-
de estar amparada por la ley, por esa ley que rán la referida enseñanza en todo o en parte, según las
ha de hacer al rico igual que al pobre, porque circunstancias de cada caso, conforme a los aranceles y
para el Estado no existen ricos ni pobres, sino demás disposiciones universitarias”. Como comple-
argentinos. Si Dios me ayuda, he de asistir mento, en el artículo 50 de la propuesta se in-
en el futuro a la colación no de mil, sino de cluyó la obligación del Estado de crear Becas de
diez mil hijos de obreros que se gradúen como “compensación económica familiar” y de “estudios”.
Profesionales en la universidad. Porque yo no Es interesante detallar que, a diferencia de
quiero una universidad para el privilegio: yo la iniciativa contemplada en el Proyecto de ley
quiero una universidad para el Pueblo”. del Primer Plan Quinquenal, la norma 13.031/47
Juan D. Perón, 1949 de “Régimen Universitario” no incluyó la gratui-
dad plena de los estudios. En su lugar, el artículo
La UCR y el Justicialismo compartían la vo- 87 fijó que: “El Estado creará becas para la enseñanza
luntad de democratizar el acceso a la universi- gratuita, cuya distribución entre las diversas universi-
dad. En el año 1946 el diputado de la UCR Ga- dades de la Nación, se hará por el Poder Ejecutivo”. Los
briel Del Mazo integró el bloque radical y era miembros de familias “obrera, artesana o emplea-
reconocido por su histórica militancia refor- da” carentes de recursos podrían requerir el be-
mista. En el contexto del Primer Congreso Na- neficio y la “beca consistirá en obtener gratuitamente
cional de Estudiantes de 1918, había elevado un la enseñanza universitaria en todos sus aspectos y gra-
Proyecto de Resolución de “Gratuidad de la En- dos, el suministro de libros y útiles, y en el otorgamiento
señanza Superior”. Si bien la iniciativa no fue tra- del diploma o título que se obtuviere, y en conceder una
tada por el Gobierno Nacional, los reformistas compensación económica familiar que equivalga lo más
instalaron el tema en la agenda y la demanda aproximadamente posible a la aportación del alumno”.
democratizadora reapareció en el Segundo Con- Esta cuestión fue discutida en el recinto por
greso Nacional de Estudiantes Universitarios del mes el diputado radical Alfredo Calcagno, quien pun-
de agosto de 1932 y en encuentros posteriores. tualizó que la gratuidad de la enseñanza “insi-
El Primer Plan Quinquenal Justicialista nuada en el Plan Quinquenal, no figura en el proyecto
(1947-1951) planteó que el Estado instauraría (…) nuestro proyecto suprime las limitaciones numé-

15 De manera similar al año 1947, Bustos Fierro retomó el debate de la participación estudiantil en
1953. Respondiendo al diputado UCR por la Capital, Santiago Nudelman, sostuvo que se debía enfocar
el tema desde un “enfoque más amplio de la participación” y el estudiante está “vinculado a todos los aspectos
de la vida universitaria, a la extensión universitaria, a las cooperativas, al movimiento de trabajos prácticos, a las
organizaciones estudiantiles, como, por ejemplo, el Ateneo Universitario de la Facultad de Derecho que cuenta con
3729 afiliados, contra 500 que responde a la FUBA” (Sesiones Cámara de Diputados 1953: 27).

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ARTÍCULOS / ERNESTO VILLANUEVA Y ARITZ RECALDE

ricas al ingreso y consagra el principio de la gratuidad la gestión del gobierno detallando que entre
sin restricciones, así como la compensación económica 1946 y 1952 la matrícula estudiantil aumentó
a la familia proletaria”. La iniciativa de ley eleva- un 189% y en el mismo período el presupuesto
da por la UCR en el artículo 28 fijó que “la ense- pasó de 48 a 307 millones de pesos moneda (+
ñanza será gratuita y laica. No se exigirá contribución 636%). El Justicialismo había destinado 4 millo-
pecuniaria ni regirá tasa alguna para ingresar a las nes de pesos a becas y distribuyó gratuitamente
universidades”. Si los nuevos estudiantes priva- 174.642 ejemplares de apuntes. El Estado fun-
ban de ingresos económicos a su familia, estás dó una Comisión de Construcciones Universi-
tendrían “derecho a una ayuda pecuniaria” (Sesio- tarias, instaló residencias y subsidió viajes y
nes Cámara de Diputados 1947: 676 y 706-708). congresos y acompañó una “labor de extensión
Finalmente, la gratuidad total de la univer- universitaria desarrollada con los obreros en los sin-
sidad se alcanzó con la sanción del Decreto Pre- dicatos y fábricas y con los industriales” (Sesiones
sidencial 29.337 del día 22 de noviembre del año Cámara de Diputados 1953: 2732-2733; Minis-
1949.16 Un aspecto fundamental se estableció con terio de Educación de la Nación 1952: 30-31).
el artículo 2 que comprometía al Estado Nacional
a dotar a las universidades de los recursos com- Reflexiones finales
plementarios necesarios para alcanzar ese obje- El modelo universitario del peronismo impul-
tivo. Como ya mencionamos, la gratuidad fue ra- só una propuesta original que articuló el idea-
tificada por el Segundo Plan Quinquenal y por la rio del reformismo y la vocación planificadora
Ley Orgánica de Universidades 14.297 de 1954. El del desarrollo propia de los Estados nacionales
resultado de la eliminación de los aranceles fue el de la etapa. Dentro del Justicialismo hubo una
aumento exponencial de la matrícula: importante participación de políticos reformis-
tas de origen UCR y ello conllevó a que el deba-
TABLA 1: Evolución de la matrícula te de la legislación universitaria de 1947 fuera
universitaria durante el gobierno peronista una discusión, centralmente, entre reformistas
radicales oficialistas y radicales opositores.17
Año 1945 1950 1955 La sanción de la autonomía científica a ni-
vel constitucional, la existencia del cogobierno,
Matricula 47.400 80.445 138.317
la instauración del régimen de concursos y de
FUENTE: Elaboración propia con datos del Ministerio carreras docentes, la docencia libre o la partici-
de Educación de la Nación.
pación en la vida académica de los graduados en
En el debate de la Cámara de Diputados del centros de posgrados, eran medidas reformistas.
18 de diciembre de 1953, el diputado justicia- Lo mismo se puede decir en lo concerniente a la
lista Eduardo Forteza realizó un repaso sobre democratización social de la institución alcan-

16 El 7 de marzo de 1952 el Poder Ejecutivo sancionó el Decreto 4493 que eliminó la “percepción
de aranceles y otros derechos fiscales que gravan la enseñanza que se imparte en los establecimientos respectivos
dependientes del Ministerio de Educación” (Ministerio de Educación de La Nación 1952: 78).
17 Los vínculos entre ambas fuerzas permitieron que en el año 1972 Perón formalizara un acuerdo
con la UCR denominado “Coincidencias Programáticas del Plenario de Organizaciones Sociales y Partidos
Políticos”. Allí se incluyó una propuesta universitaria conjunta que derivó en la ley 20.654 de 1974 que
fue votada por los bloques de la UCR y el Justicialismo. En líneas generales, era una norma similar
a las de 1947 y 1954 con la diferencia fundamental de que el gobierno universitario era tripartito
(docentes, no-docentes y estudiantes) y que el Rector sería nombrado por Asamblea Universitaria.

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ARTÍCULOS / ERNESTO VILLANUEVA Y ARITZ RECALDE

zada con la gratuidad. El peronismo promovió


que las universidades tengan mayores vínculos
políticos y sociales con el medio y esa meta era
la de 1918. El proyecto de ley universitaria de la
UCR de 1946 postuló la noción “por la Ciencia, por
la Patria, por la Libertad y por América” y ese con-
cepto era aplicable al ideario del Justicialismo.
A diferencia del reformismo tradicional,
el peronismo hizo mayor hincapié en alcanzar
una nueva y fecunda articulación de la univer-
sidad y el conjunto de políticas del Estado. Era
comprensible este anhelo ya que el país atrave-
saba modificaciones estructurales en los ámbi-
tos sociales y económicos y los objetivos de los
Planes Quinquenales demandaban una nueva ca y que siguen vigentes en la actualidad. Es bue-
ciencia en el corto plazo. La creación de la UON no remarcar que dentro del bloque opositor tam-
fue una respuesta a esta demanda. poco había acuerdo sobre el tipo de gobierno
La designación de autoridades por parte del universitario y que el esquema del Justicialismo
Poder Ejecutivo de la leyes de 1947 y de 1954 se fue promovido por académicos y docentes que
explica, al menos, por dos cuestiones. Por un la- también se consideraban reformistas.
do, en el país existió una histórica tendencia a El Justicialismo le dio al Estado mayores
que la lucha política nacional se desenvuelva co- competencias para organizar un sistema inte-
mo una disputa dentro de la universidad. En el grado de Educación Superior, cuestión que co-
siglo XX la institución fue intervenida por Yri- lisionó con la visión tradicional y conservadora
goyen (Reforma), por Alvear (contrarreforma) de la autonomía reformista. El gobierno Justi-
y en varias ocasiones durante los años treinta, cialista había ganado la elección por un amplio
contando en varios de los casos con el apoyo de margen y consideraba que tenía la legitimidad
miembros de la misma UCR y del PS. Incluso, hu- suficiente para empujar estos cambios.
bo docentes, profesores, federaciones y autorida- El debate acerca de los alcances de la au-
des que auspiciaron la asonada militar de 1930. tonomía y de la relación de la universidad con
Las expulsiones de los años cuarenta son parte el conjunto del país, recorrió toda la historia
de una triste historia de intolerancia y lo mismo posterior al año 1918 y sigue vigente en la ac-
debe decirse de las renuncias de los profesores. tualidad. Por ejemplo, las tensiones iniciadas
Esta última actitud de no reconocer la voluntad en 1946 fueron anticipatorias de la discusión
democrática del electorado argentino, fue una generada con la Ley de Educación Superior de
forma de auspiciar la dictadura que se inició en 1995 que creó la CONEAU (Comisión Nacional
1955 y que varios estudiantes y profesores acom- de Evaluación y Acreditación Universitaria).
pañaron entusiastamente. Por otro lado, la par- Aquí, nuevamente, se puso en discusión la re-
ticipación del Gobierno Nacional en la designa- lación entre la autonomía y la voluntad de los
ción de autoridades era considerada un medio funcionarios de la democracia de masas que
para hacer más eficiente el sistema científico y definen metas y pautas científicas y culturales.
tecnológico. No era un invento del oficialismo, A la fecha, este debate sigue abierto e in-
sino que reproducía los modelos científicos de tentar explicarlo con el eje reforma y anti re-
las potencias occidentales y orientales de la épo- forma, supone una inmensa simplificación.

Pensamiento Universitario • Nº 18

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ARTÍCULOS / ERNESTO VILLANUEVA Y ARITZ RECALDE

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Pensamiento Universitario • Nº 18

57
•• ENSAYOS

La universidad hoy:
un viaje a la incoherencia
Por Manuel Gil Antón*

* Centro de Estudios Sociológicos


del Colegio de México

En recuerdo, vivo, a nuestro colega como pocos), al mismo tiempo que, también, y
Pedro Krotsch, maestro. por esa misma razón y los vericuetos que implicó
transitar para lograrlo, nunca antes nuestras
¡Un colega, mi reino por un colega!1 instituciones de educación superior han sido
tan frágiles. Henchidas de signos inequívocos
que las deberían hacer potentes, sí, mas vacías
de vida colegiada: ajadas cual piel de anciano,
Desde donde escribo (en)cubiertas con el maquillaje quebradizo de
De una buena vez, pues “el que avisa no enga- los indicadores en boga.
ña”, la conjetura que guía a este texto es que Luego de 33 años –a partir, digamos, de
desde mediados de los años ochenta del siglo 1985– el esfuerzo tenaz por alcanzar los indi-
XX, hasta el sol de hoy –ya por terminar la se- cios propios de una noción de calidad (que la su-
gunda década del XXI– se han producido cam- pone existente y sólida si se aglomeran muchos
bios de gran calado en las universidades lati- individuos que los ostentan), permite llenar los
noamericanas que generaron una paradoja: formatos de evaluación, nacionales e internacio-
nunca antes habían tenido nuestras casas de es- nales, de tal manera que las universidades “son
tudio tanta calidad (en el sentido de cuantiosos mejores” que antaño. Y mucho: ya se parecen,
rasgos que hacen visible a este adjetivo, elusivo o van por ancho camino real para asemejarse a

1. A diferencia de Ricardo III, que viéndose derrotado, pedía un caballo para huir y salvarse, con la
venia de Shakespeare empleo una frase semejante, pero en sentido inverso: la petición de un colega
en el epígrafe es para regresar, y seguir peleando, por la universidad que perdimos, imaginaria o
realmente, ya sea en la dimensión de la utopía, o en el retorno y rescate de una tradición derrotada.

Pensamiento Universitario • Nº 18

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ENSAYOS / MANUEL GIL ANTÓN

las que sirvieron de modelo. Los pasos son fir- otros aspectos, no dejan duda: dejamos atrás,
mes y, desde hace un poco más de seis lustros, ya, a la universidad que simulaba serlo, para
invariantes. La tenacidad en el empeño ha sido llegar a la que sí es como debe ser. Y mire, no
ejemplar, digna, dirán algunos, de mejor causa. miento ni invento, tengo datos duros: los datos,
Cumplimentar los cuestionarios con éxito ya endurecidos, son, de nuevo: doctores, pro-
hace que, en el papel –que aguanta todo– las yectos, publicaciones, planes y programas de
“comunidades” académicas tengan las caracte- estudio certificados y miles de volúmenes da-
rísticas pertinentes de acuerdo con un mode- dos a luz. La prueba de la solidez de las univer-
lo que se muerde la cola, que retorna sobre sí sidades actuales es la concreción –con creces–
complacido frente al espejo de su profecía auto- de las medidas que impulsaron, impusieron y
cumplida. Los gerentes que han guiado el pro- financiaron. Sería imposible encontrar, como
ceso presumen, ufanos, las metas alcanzadas. resultado, otra cosa: la victoria, decía José Vas-
Narcisos de la administración de los guarismos. concelos, no es argumento. Y en este caso, pro-
No saben que no saben. Que ignoran lo que ad- bar lo realizado con el efecto de la acción diri-
virtió hace años Birnbaum (2000): gida a lograrlo, es tautológico.
Estos rasgos son, bien visto, la cristaliza-
“Si no podemos medir lo que es valioso, ción de la idea de calidad por aglomeración de
en educación superior, individuos con rasgos positivos, que se compla-
acabaremos por valorar, nada más, lo que ce consigo misma. Los guardianes de la calidad
es medible”. no caben en sí de gusto.

¿O saben bien lo que hicieron, guiados por


convicciones ajenas a quienes piensan diferen- La rueda del infortunio
te, pero afines a los que adhieren a un proyecto Vaya un ejemplo del círculo vicioso que los se-
mayor que, al deshilvanar la trama del tejido, por ñores de traje gris de las instituciones conside-
deshilacharlo, genera condiciones de control ex- ran virtuoso: en México2 –podemos empezar el
cepcionales sobre cada uno de los hilos? Quién relato por cualquiera de sus partes, dado que es
sabe: los efectos, sin embargo, son los mismos. un periférico perfecto que circunda un aguje-
ro– para que, al nivel de los individuos:

Con nosotros, el eco incesante 1. un programa de posgrado sea consi-


Escuchemos su voz: la cantidad de académicos derado bueno, y sea inscrito en el Pa-
con doctorado, o algún posgrado; el número de drón Nacional de Posgrados de Calidad
proyectos de investigación y publicaciones; la (PNPC),
magnitud de programas de estudio, de pregra- 2. requiere que sus docentes tengan pos-
do o superiores, certificados por agencias que grado (lo que sería esperable, sin duda)
saben medir la calidad; la multitud de revistas pero, además,
creadas en estas décadas, con alto factor de im- 3. que pertenezcan al Sistema Nacional de
pacto merced a las citas que pueden recibir, y Investigadores (SNI) y,

2. Solicito licencia a los lectores para reseñar, con detalle, lo que sucede en el país en el que vivo.
La expectativa es que, cambiando ciertos nombres o la lógica de antecedente y consecuente de algún
mecanismo, sea traducible a otras naciones en nuestra región, y quizá más allá.

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ENSAYOS / MANUEL GIL ANTÓN

4. en proporción considerable, estén (o b. los profesores gradúan a tiempo a los


sean) de los que ocupan niveles altos3 de estudiantes –sea cual sea la relevan-
este mecanismo de Transferencias Mo- cia de las tesis y publicaciones asocia-
netarias Condicionadas (TMC) que se ha das– con el fin de:
consolidado como un sistema de estrati- i. colaborar –solidarios– con su Pos-
ficación con base en la magnitud de los grado,
recursos que se perciben. ii. hacer méritos en sus currículos pa-
5. Una de las condiciones para estar –o ra renovar la distinción de ser SNI,
ser4 – SNI consiste en graduar, en un pla- y el dinero mensual hasta ahora sin
zo no mayor al establecido por el Conse- carga fiscal, libre de polvo y paja.
jo Nacional de Ciencia y Tecnología (CO- iii. Es conveniente aumentar las pu-
NACYT), a varios doctores, blicaciones con el trabajo de sus
6. cuestión que se engarza con el indicador estudiantes, los cuales, a su vez,
de “eficiencia terminal” –graduación en iv. ya con el doctorado, pueden aspi-
tiempos esperados– so pena de perder, el rar a ser académicos en el extra-
sujeto, el nombramiento en el SNI, ño caso que se abra una plaza, que
7. y por las dos razones (producción a contendrá, entre sus requisitos,
tiempo y el sello de la categoría en el v. obra suficiente para ser –máximo
SNI), el nivel de calidad del posgrado del en un año– integrante del SNI.
que se trate,
8. pues sin suficientes Snis se puede des- En otro nivel de observación, en la escala
cender del nivel de posgrado de Calidad institucional, pero ligado al previo,
Internacional, al de Calidad Nacional o
más abajo en otra pirámide. 10. una universidad conforma su calidad,
9. Sin ser de calidad suficiente, los estu- entre otras cosas, mediante la cantidad
diantes que se inscriben no tienen be- de Posgrados de Calidad que contenga,
cas que les permiten sobrevivir mien- de tal suerte que
tras estudian, de tal manera que: 11. el financiamiento que recibe depende
a. esos posgrados no tendrían aspiran- de la cadena:
tes dada la ley de la necesidad de ali- a. docentes en el Sistema,
mentarse y pagar un alquiler (o ayu- b. alumnos graduados a tiempo,
dar al gasto de la casa familiar) y, por c. evaluaciones cuantitativas al respec-
lo tanto, to y, por ello,

3. Hay Candidatos a Investigador Nacional, y luego: Investigador Nacional nivel I, II, III y Emérito,
con emolumentos crecientes, libres de impuestos, conforme se asciende en la escala.
4. La maravilla de distinguir, en castellano, a ser y estar, permite apreciar una mutación en el
empleo de este sistema de recuperación, no salarial, de la capacidad de compra de los ingresos,
desmoronada a mediados de los ochenta del siglo XX: al iniciar el empleo del dinero como guía de las
trayectorias académicas, se estaba en el SNI. La forma de expresarlo era que Sutano de Cual pertenecía a
este sistema. Con el tiempo, en una presentación pública, se dice: el doctor Fulano de Tal es SNI-III. En
las mitocondrias del sujeto se ha incrustado esa característica y, en la percepción individual, ocurre
algo semejante: soy SNI-III. Y lo soy en la misma dimensión que está mi nombre: en la identidad que
nos distingue y ubica socialmente.

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ENSAYOS / MANUEL GIL ANTÓN

d. si una profesora o un maestro tienen 15. Y se requieren recursos para investigar,


riesgo de no poder renovar su mem- que no provienen de la institución en
bresía en el club de los excelsos, que se labora, sino… del CONACYT: ¿su
i. puede pedir a su Rector(a) o proyecto de investigación requiere fi-
presidente(a) que le conceda un nanciamiento? Ponga atención:
año sin docencia para poder pro- a. asegúrese que está en una institución
ducir la cantidad de “papers” (favor de calidad manifiesta y contable,
de no decir artículos y pronunciar b. vaya al CONACYT y pida los recursos
bien: “peipers en yurnals”) y docto- que hacen falta.
rar a varios alumnos. c. En los formularios para apoyarle en su
12. Más vales por el nivel en el Sistema que indagación –antes de hacerla– señale:
consigues, que por la docencia que im- i. cuántas publicaciones se deriva-
partes: eres más valorado por los in- rán del mismo,
dicadores que aportas, que por la sol- ii. a cuántos congresos se asistirá,
vencia con la que llevas a cabo tus iii. qué tipo de ponencia llevará, de
actividades. preferencia indicando el título,
13. Ahora bien: si las instituciones logran iv. la cantidad de doctores que produ-
tener los rasgos de calidad verificables, cirá mientras lo lleva a cabo, y
a. reciben dinero adicional al que se les v. cuáles son las conclusiones de la
otorga como irreductible, y que sólo indagación.
alcanza para pagar sueldos y los gas- 16. Cuidado: no vale decir que, si se pide
tos elementales. apoyo para investigar, no es posible an-
b. Esos recursos extra, pequeños en ticipar lo que se ignora (por ello quiero
proporción con el total del subsidio, recursos para investigar).
pero libres de ataduras como los gas- 17. No sea necio: por favor, escriba lo que se
tos ineludibles, son oxígeno para im- le pide en todas sus partes,
pulsar… ¿impulsar qué? a. y un grupo de pares (involucrados en
c. Pues que se cumplan los indicadores el mismo sistema) valorará si su in-
necesarios para reiniciar el eterno re- vestigación merece contar con fon-
torno de siempre es lo mismo. dos, y cuántos.
14. Como cada universidad realiza algo pa- b. Si la evaluación para ser SNI es cada
recido a un Programa Institucional de tres o cinco años, ponga atención:
Fortalecimiento Institucional (PIFI), i. no haga proyectos con riesgo: me-
a. que consiste en comprometerse a lo- jor investigue nimiedades pero
grar que sus indicadores de calidad que sean publicables, de preferen-
aumenten, cia fragmentando los hallazgos en
b. de manera incesante tenemos Pro- distintos textos.
gramas que solicitan recursos para ii. ¿Una indagación que requiere es-
doctorar docentes si no lo han hecho, tudios longitudinales que llevan
c. tener dinero para publicar papers y, más tiempo que el que está esta-
con ello, blecido para renovar la distinción?
d. estar preparadas para la revisión pe- Cambie de tema, y pronto.
riódica de los mismos aspectos que iii. Y, nada más por no dejar de men-
los gerentes del sistema impulsan. cionarlo, no publique para que lo

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ENSAYOS / MANUEL GIL ANTÓN

lean esos hipotéticos lectores con que los una, sin varillas que den sustento a
los que antes se soñaba. las columnas.
iv. No, hágalo en el Padrón de Revis-
tas de Calidad que hemos confec-
cionado, pues si no lo hace, El Génesis desde el Éxodo
v. el artículo no será valorado por lo Cuando se estudia el Pentateuco, esos cinco li-
que dice o aporta: el nivel nacio- bros atribuidos a Moisés en las tradiciones ju-
nal o internacional de la revista deocristianas, los que saben afirman que el li-
(su factor de impacto) es la clave bro del Génesis, de los orígenes del mundo y
para su ponderación, la humanidad, primero en el orden de publica-
vi. y puede perder su nivel en la esca- ción, no lo fue en el orden de su concepción y
la de los distinguidos. escritura. Fue escrito en el desierto, en pleno
vii. No se inquiete: las bodegas de las Éxodo, y desde la ingente pregunta sobre un lu-
instituciones aún tienen espacio gar en el pasado que no debió ser tan rudo, y las
para resguardar revistas y libros razones que hicieron que se perdiese.
que se produjeron para que fue- A partir de la carencia, la pesadumbre por
ran “contadas” por las Comisiones una tierra prometida que se alejaba como el
Evaluadoras del PNPC o del SNI. horizonte, alimentados por una especie de in-
viii. Reiteramos: escriba pensando sípido pan –Maná– que caía del cielo para no
en Las Comisiones, es decir, para desfallecer, sin mirar los mojones de la tierra
los cinco o siete “pares” o “nones” nueva sino más arena y más arena, además del
de los que depende que usted sea peso en la espalda de los Mandamientos ya de-
parte de: clarados, los escribanos –a partir de esa preca-
18. un posgrado de calidad, riedad– imaginaron y redactaron cómo era an-
19. que dará recursos a su universidad, tes, un antes previo a la estancia en Egipto, una
20. y a usted también para que pague anterioridad anterior a todos los pretéritos: y
la hipoteca. surge el Jardín del Edén, un Dios pródigo que
brinda a los humanos árboles frutales, ríos, pas-
Y a darle de nuevo al carrusel: no se descui- tos donde retozar, animales a su merced inclu-
de pues no se detiene. so para ponerles nombre y ser Los Señores. Y,
Se puede advertir, en el relato de este enca- por algún pecado muy fuerte, fuimos expulsa-
denamiento, que cada persona establece una re- dos de ese paraíso: esa inveterada costumbre
lación laboral con las instancias que distribuyen humana que, en la vida, la ciencia y la relación
certificados de calidad para poder permanecer que sea pretende negar nuestra condición fali-
y pertenecer a una entidad que emite indica- ble para “ser como dioses”.
dores. Uno de esos indicadores es uno mismo. El Génesis, entendido como contraste del
Y así, individuos yuxtapuestos, repletos de dis- Éxodo, siempre es un buen “detente” ante las
tinciones y abultados currículos, conforman, balas de la mitificación del pasado: en este caso,
apilados, a las instituciones de educación su- como se ha descrito la universidad de nuestros
perior de “calidad” comprobable. tiempos, no basta y hay que estar precavidos con
Es como si se alabara la fortaleza de una idealizar el pasado, antes de la venida de los ge-
pared, mirando la solidez de cada uno de los rentes educativos y su afán por la calidad medi-
ladrillos que están amontonados en una es- da, la “mejora constante”, la excelencia y suce-
quina: sin formar una hilera, sin argamasa dáneos. En este caso, es imprescindible recordar

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ENSAYOS / MANUEL GIL ANTÓN

a Les Luthiers que, sabios, modificaron el refrán: la vida en la academia. En este, como en otros
“todo tiempo pasado fue mejor”, por otro irre- temas, hace falta mucha investigación históri-
futable: “todo tiempo pasado… fue anterior”. ca bien documentada.
Lo que antecede a las universidades en este Ni el cielo, ni el infierno: pero sí otro mo-
período, al menos en el país “donde quedó en- do de regular las cosas de índole colectivo, con
terrado el ombligo”5 de quien esto escribe, es menos indicadores de calidad como los actua-
un decenio en que el poder adquisitivo se de- les, y más empeño en trabajar cuando se deci-
rrumbó junto con la posibilidad de ejercer au- día hacerlo.
toridad legítima en las instituciones, de tal ma-
nera que se ganaba cada vez menos, y daba lo
mismo trabajar que “hacer de cuenta”. El demiurgo entre las costillas
Más allá de los límites del dinero (Gil-Antón,
2000), hemos entrado en el terreno ilimitado
La edad de oro del prestigio como valor mayor a las monedas.
Los viejos de la tribu, ahora y antes de partir, Estamos pasando de las Trasferencias Moneta-
nos hablan de, y reseñaron a, una universidad rias Condicionadas, a las Transferencias de No-
en que los colegas eran el mejor de los patrimo- biliarias Condicionadas (TNC), que, igual que
nios, en que se estudiaba e investigaba porque las monedas, por cada nivel otorgan distinto
había pasión por ello, donde la docencia era la quantum de distinción.
reina y el compromiso con los alumnos el prin- Y si de eso se trata, estamos en otra etapa
cipal motivo de estar ahí. Comprometida con el en el desarrollo de las instituciones de educa-
país, con las mejores causas, sitio de resistencia ción superior. Valga otro caso como muestra:
al autoritarismo, afanosa institución que peleó Un académico, con 34 años de trabajo en
por la autonomía y puso muertos en el empeño las alforjas, había conseguido pertenecer al ni-
social por otro modo de conducir a los países. vel más alto del Sistema Nacional de Investiga-
Con una estructura salarial que daba sufi- dores previo al Nirvana (ser Emérito). Estaba –o
ciente para vivir bien, con modestia, pero sin era– nivel III. Hace 5 años, al presentar sus tra-
privaciones, y en que no había prisa por hacer bajos para que fuesen evaluados, consideró que
las cosas a la trompa talega. Llena de semina- permanecería en ese nivel, dada la “producti-
rios para estudiar juntos, con individuos pron- vidad” que había mantenido. Las constancias
tos a salir a la calle a marchar unidos porque de todo, separatas de todo, certificados de to-
eran parte de la universidad y de los sindicatos, do fueron entregadas en tiempo y forma: cin-
muchos de los cuales tenían un proyecto de co años en que constaba la actividad académi-
universidad más, o además, que una propuesta ca de este colega. Sus papeles y constancias los
de defensa gremial, y su identidad hacía equi- entregó en marzo. El resultado de las evalua-
valente ser universitario con ser progresista. ciones se publicaría en septiembre.
¿Eran las cosas así, o es la reconstrucción Cuando se acerca ese mes, el sector de las
de un pasado idílico desde la precariedad y los académicas y los académicos que presentaron
entuertos actuales? Sin duda habrá matices: ni sus papeles espera con ansia saber lo que ha pa-
todo era así, ni faltaban espacios en que estas sado. ¿Permanecí en el nivel que tenía? ¿Subí
modalidades de relación realmente regulaban al escalón siguiente? ¿Me bajaron de categoría

5. Esta expresión es traducción literal de la pregunta que, en Tzeltal (una lengua mayense aún
hablada en Chiapas) suena así: ¿Banti yax laj te a´muxuc?, y equivale a, ¿dónde naciste? ¿De dónde eres?

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y por ende de centavos? ¿Me sacaron del siste- molesta, o me saca de onda. Lo de la evaluación
ma? A veces de manera conjunta, o en la inti- para nada, no me afecta. Eso lo tengo claro.
midad del despacho de cada uno, se abre la pá- Siempre es bueno tener un amigo sabio y
gina del CONACYT para saber si ya se publicó que comprenda que la amistad es ser muy fran-
lo que ha sucedido. co. Luego de escuchar su aflicción por la mane-
Una mañana, el académico al que refiero, ra en que era visto, simplemente le dijo: ¿sabes
encontró en su expediente electrónico el dic- qué? No son ellos, ni sus ojos: son tus ojos los
tamen que lo colocaba en el nivel II, esto es, que te miran así. Eres tú proyectado en ellos. Es
descendía, pues sus pares habían encontrado tu mirada. No te confundas: te ves en un espe-
insuficientes sus productos y actividades en el jo y crees que son los otros los que piensan así.
quinquenio. No solo se enteró él, sino “todo Le dio un abrazo y se fue a trabajar.
mundo”, esto es, los colegas del área donde se El académico se quedó a solas. Era cierto,
trabaja, ya sea por preguntar o al ver las listas se sentía degradado, como cuando a un militar
de los amigos, enemigos o adversarios. le quitan las insignias o a un cura le raspan las
En el comedor, al medio día, al llegar a la manos para excomulgarlo. Es más, si de una
mesa de costumbre, ya sabían sus contertulios imagen estaba seguro, es que caminaba con
el resultado y sus caras y voces fueron de so- una camisa en la que había un signo que in-
lidaridad, de apoyo y, sobre todo, interesadas dicaba que había sido “reprobado” en el SNI.
en saber cómo estaba el profesor luego de sa- El profesor del que relato esta historia es
ber el resultado. un viejo conocido mío. Al menos, toda mi vida
¿Cómo te sientes? Con aplomo, hasta son- hemos convivido de cerca: soy yo. Eso me pa-
riendo, dijo que estaba bien. Que a él lo que le só a mí –al que esto escribe– y tuve la fortuna
importaba era el avance del conocimiento, ha- de tener un amigo leal que me hizo ver que yo
cer su trabajo por convicción y no con miras a ponía, en los ojos de otros, el reproche de mi
permanecer en el SNI. Ya había algo en su voz, mirada sobre mí.
si no quebrada, un tanto enfática y sin acusar Foucault, a juicio de sus estudiosos, consi-
recibo del descalabro económico. Pasar de re- deraba que cuando fuésemos el patrón de cada
cibir, al mes, cerca de 3 mil dólares, a quizá uno, habría libertad. No habría nadie a quién
un poquito más de la mitad no es cosa menor. obedecer. Pero no es así: Byung-Chul Han re-
Al día siguiente, luego de estacionar el au- flexiona y muestra que, en “la sociedad del
to, se dirigió a la cafetería para pedir su exprés cansancio”, cuando nos convertimos en nues-
doble, que siempre lo acompañaba a su despa- tros propios jefes, lo que en realidad sucede
cho en el quinto piso. Saludó a varios colegas es que nos hemos tragado al Amo y, desde el
en el camino. interior, es más despiadado con nosotros mis-
Cuando un amigo cercano escuchó que mos, Esclavos nuestros a la vez, que el antiguo
abría la puerta, se acercó y, desde el quicio, le Mandamás.
dijo: ¿cómo estás?, ¿cómo vas con la noticia? Pa- El “sujeto de obediencia” tenía a la vista, a
sa y siéntate. No estoy mal, sigo tranquilo, lo la posibilidad de la mirada, allá afuera, al Amo
que no me gusta es que, cuando voy por el pasi- con el que se relacionaba como Esclavo. El trán-
llo o el patio, veo que la gente me mira, y algu- sito al “sujeto de rendimiento” es, quizá, es el
nos piensan: “pobre, no es justo”; otros me ven logro central del neoliberalismo, usando la pa-
con cara de “qué bueno, para que se le quite lo labra como un sustantivo (como el nombre de
presumido” y no falta quien me ve con piedad o un proyecto político de control social) y no co-
compasión, no acierto a distinguirlo. Eso sí me mo un adjetivo hueco, muy manido y poco útil.

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ENSAYOS / MANUEL GIL ANTÓN

“El sujeto de rendimiento está libre de un juzga o somete al que las incumple y, sin parar
dominio externo que lo obligue a trabajar mientes en su crueldad, acusa, acosa y denigra.
o incluso lo explote. Es dueño y soberano Soy yo la víctima y el victimario. El más despia-
de sí mismo. De esta manera, no está some- dado juez de mi trabajo. Y, lo “peor” del caso,
tido a nadie, mejor dicho, solo a sí mismo. es que el ingreso al SNI es voluntario.6 ¿Volunta-
En este sentido, se diferencia del sujeto rio? Doy fe de la severidad del juicio, y el repro-
de obediencia. La supresión de un domi- che, que enderecé contra mí, con toda libertad.
nio externo no conduce hacia la libertad; Si una tarea de la sociología consiste en “des-
más bien hace que la libertad y coacción naturalizar” lo considerado “natural”, dado que
coincidan. Así, el sujeto de rendimiento todo lo social es artificial, producto de relacio-
se abandona a la libertad obligada o a la libre nes de dominación que se consideran válidas y
obligación de maximizar el rendimiento. El legítimas pese a su asimetría, habrá que trabajar
exceso de trabajo y rendimiento se agudiza con más ahínco para desanudar una naturaliza-
y se convierte en auto explotación. Esta es ción que ya no ofrece otredad en el castigo. ¿O sí?
mucho más eficaz que la explotación por
los otros, pues va acompañada de un senti-
miento de libertad. El explotador es al mis- El sendero del mérito
mo tiempo el explotado. Víctima y verdugo Este relato, los anteriores y otros posibles, son
ya no pueden diferenciarse. Esta autorre- ubicables en el contexto del predominio de la me-
ferencialidad genera una libertad paradó- ritocracia como eje de las trayectorias de los in-
jica, que, a causa de las estructuras de obli- dividuos: a solas, contra o con las reglas. No hay
gación inmanentes a ella, se convierte en colegas: a veces, para conseguir cumplir con los
violencia”. (Byung-Chul Han, 2012) mandatos que una vez fueron exteriores, se bus-
can cómplices de una simulación compartida: fir-
¿Cuál es el mejor sistema de control de las mo lo que escribes, y firmas lo que yo redacto.
poblaciones? ¿Cómo asegurar un comporta- La meritocracia tiene buena prensa y goza
miento esperado por quien, asimétricamente, de cabal salud. Y su legitimidad atraviesa am-
impone su modo de ver y hacer las cosas? El pro- plias dimensiones de la vida social. En el terre-
cedimiento es: pasando de un mecanismo de no de la profesión académica y su reproducción
control exterior, del panóptico donde un Gran en los estudios de grado y posgrado, tiene car-
Escrutador nunca pestañea y siempre nos está ta de ciudadanía y sus mecanismos son mone-
viendo, a una estrategia interior: el dictador está da de curso legal.
dentro de mi concepción de las cosas y es –soy– Individuos agrupados sin relaciones entre
mucho más despiadado que el Gerente externo. sí para generar vida colegiada, con sobrepeso,
No solo me tragué las normas, sino a quien so- u obesidad, por la carga de indicadores, some-

6. Cala escribirlo: en buena medida, mi adscripción al SNI procede de trabajos que he llevado a
cabo, en los que, analíticamente, se critica este sistema de Transferencias Monetarias Condicionadas
dentro de la reconstrucción sociológica de las condiciones para el desarrollo de la profesión
académica en México. Este texto es prueba de ello, incluso cuando se propone analizar la mutación a
las Transferencias Nobiliarias Condicionadas. El sistema es complejo: premia con su reconocimiento a
quien lo pone en cuestión, y cuando hay un “fracaso”, aún un crítico del sistema – por no escapar a la
lógica del sujeto de rendimiento – termina rindiendo pleitesía a lo que cuestiona, y se rinde, rendido,
reprendido, por su propia mirada.

Pensamiento Universitario • Nº 18

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ENSAYOS / MANUEL GIL ANTÓN

tidos por ellos mismos al control del prestigio equivocarse,


que uno ha aceptado como válido pese a que, en tomar las cosas con calma para poderlas
otro nivel de análisis se le pueda criticar, vamos entender…
construyendo una institución en La Sociedad del Todo esto consume un tiempo que no hay
Cansancio: la Universidad del Agotamiento, la que tirar: el tiempo es oro.
supresión de los encuentros entre indagadores,
el cese del estudio para el crecimiento del escrito Nuestro próximo peiper, con los requisitos
que se pueda colocar en una revista que otorgue revisados para que valgan ante nuestros pares o
nuevos indicadores. Se ha naturalizado y cuenta nones que juzgan lo que hacemos, no puede es-
con legitimidad: se la otorgamos nosotros. perar la maduración de un proceso intelectual
Así vamos. Al menos en México –y quizá, de hondura: todo urge, todo es de prisa en la
con sus variaciones, pase en otros de nuestros Universidad del académico atado al rendimien-
países– estas son las condiciones de contorno to. Se rinde al proceder, le rinde cuando cun-
para el desarrollo de la vida académica de quie- den los recursos y el reconocimiento, se rinde,
nes cuentan con contratos de Tiempo Comple- en el caso de no ser reconocido, a la más ultra-
to, posgrados y condiciones para acercarse al jante manera de estar rendido: aplastado por
cumplimiento de lo establecido como natural. sí mismo, creyendo que es otro el que lo hace.
Para la mayoría, personal de tiempo par- ¿Hasta cuándo? ¿Cómo? No sé: quizá se pue-
cial, por asignatura, contratados por horas cla- da terminar como al inicio: mi reino por uno,
se, o que trabajan sin cobrar en espera de una dos, más colegas. A solas no hay remedio.
oportunidad, no hay nada más que un salario
magro y ningún reconocimiento. No todos, pe-
ro para muchas de ellas y una parte considera-
ble de ellos, el horizonte de la felicidad o del
éxito sería ser uno de los engranes de este sis-
tema que no solo se muerde la cola, sino que
muerde a todos los que participan en la cadena.
Y quizá lo que cierra y con un candado in- Bibliografía
menso el circuito: los estudiantes que llegan a • Birnbaum, Robert (2000). Management fads in
los posgrados donde trabajamos, son habilita- higher education: where they come from, what they do,
dos para ser parte de este entuerto estructural: why they fail, San Francisco, Jossey-Bass.

les damos, junto a los cursos, la habilitación pa- • Byung-Chul, Han. (2012) “La sociedad del
ra reproducirse en el sitio donde estamos, esto cansancio”, Pensamiento Herder, Barcelona.
es, les hacemos pasar por natural lo que es arti- • Puede leerse en esta liga, siempre y cuando
ficial, y a los más avanzados, les damos las me- no se lleve a cabo un proceso de lucro o
jores oportunidades para hundirse en el fango mal uso del texto: http://otrasvoceseneducacion.
donde se incrustan los cimientos de un siste- org/wp-content/uploads/2018/04/sociedad-del-
cansancio.pdf
ma meritocrático que confunde mérito con lo-
gro (esfuerzo con alcance), y que todo premia, • Gil-Antón, Manuel. (2010) “El Oficio
menos perder el tiempo: Académico: Los Límites del Dinero”, en Alberto
Arnaut y Silvia Giorguli, (Coordinadores), Los
estudiar,
Grandes Problemas de México Volumen VII:
pensar, Educación, Ed. El Colegio de México, Ciudad
conversar, de México. Disponible en: https://2010.colmex.
guardar silencio, mx/16tomos/VII.pdf

Pensamiento Universitario • Nº 18

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•• ENSAYOS

Repensar la Reforma:
un epitafio
para la cátedra
Por Roberto Follari*
* Profesor de posgrado,
Facultad de Ciencias Políticas y Sociales,
Universidad Nacional de Cuyo

La Reforma de 1918 fue históricamente mayor tió afirmar que la gratuidad de la universidad
de lo que pueda advertirse desde el solo hori- pública provenía de 1918, cuando es bien sabi-
zonte argentino: tuvo fuertes consecuencias in- do que ella fue establecida durante el primer
cluso en Europa y en todo el resto de América peronismo en 1949. Incluso cuando se le hizo
Latina y hubo naciones –es el caso de México– notar que su referencia histórica estaba errada,
donde la autonomía universitaria surgió casi en términos muy actuales de “post-verdad” el
como un puro reflejo de lo que había sucedi- funcionario adujo que ello no tenía importan-
do previamente en nuestra ciudad de Córdoba. cia, y que todo se resumía en un único espíritu
Ello produjo lo que todo gran hecho his- que la Reforma había inaugurado y sostenido.
tórico: sirvió a algunos para inspirarlos hacia No se está a la altura de ningún gran he-
consolidar sus logros para luego ir más allá de cho del pasado, sólo cristalizándolo y buscando
ellos, y fijó a muchos otros en una nostálgica repetirlo. Menos aun canonizándolo sin rigor
reivindicación de lo logrado en su momento, histórico. Lo que hace un siglo fue un avance
con el consiguiente efecto de servir a petrifi- monumental, hoy puede ser una condición ya
carse en el pasado, y de reificar sus posiciones consolidada. Y, por cierto, en algunos casos, su-
como si fueran inamovibles. perada por las nuevas exigencias de la vida ins-
Así, la tradición de la Reforma se inventó titucional y social.
a sí misma –como toda tradición, según la sa- Sin dudas que la autonomía universitaria
biduría de Hobsbawn– y hasta hemos escucha- es una condición que debemos sostener y pre-
do alguna alocución universitaria (Universidad servar. Está establecida, pero no se mantiene de
Nacional de San Luis, junio de 2017) donde una una vez para siempre: la entrada nocturna de
persona formalmente encargada de un sitial de la policía al predio de la Universidad Nacional
memoria de la Reforma en Córdoba, se permi- de Jujuy en los primeros meses de 2017, bien lo

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ENSAYOS / ROBERTO FOLLARI

Pensamiento Universitario • Nº 18

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ENSAYOS / ROBERTO FOLLARI

demuestra. O la insólita imputación por el fis- neralmente escasos, y aun cuando abundan-
cal Marijuan de 52 universidades a la vez, por tes no satisfactorios por igual para todos– es
supuesta administración fraudulenta, cuando permanente, sordo y lleno de rispideces y zan-
para imputar un delito hay que contar con in- cadilla (Follari, 2008), lo que logra una moda-
dicios específicos (con lo cual está visto que la lidad organizativa muy añeja como la cátedra
autonomía, cuando sectores del Poder Judicial (que responde a lo que en México llaman mo-
se subordinan al Ejecutivo, hay que plantearla delo napoleónico de universidad) es instituciona-
también respecto del Judicial, lo cual implica lizar el aislamiento de cada docente titular en
un intríngulis legal evidente). En ese punto, el relación con los otros, y establecer una serie de
de la autonomía fijada por la Reforma de 1918, pequeños feudos donde cada uno de esos titu-
así como en el del co-gobierno, pueden discutir- lares goza de plena potestad para decidir sobre
se los niveles de cumplimiento e incluso –en el aquellos que le quedan subordinados. Por cier-
segundo de ellos– las formas de ejercicio (por to que hay casos en que se da el conflicto abier-
ejemplo, cuál es el peso relativo de los trabaja- to al interior de las cátedras, que suele resol-
dores administrativos y de apoyo en los Con- verse por simple relación de fuerzas: el titular
sejos): pero el principio rector está totalmente lleva ventaja siempre, pero también depende
legitimado, y por completo fuera de discusión. quién tenga mejor acuerdo con las autoridades,
Otros puntos de la Reforma, sin embargo, acuerde con el gobierno de turno, pueda apelar
no pueden permanecer congelados en el freezer a los estudiantes como fuerza de apoyo y otras
de la historia: por ejemplo, el rol de los consejos. variables siempre contingentes. En los cuales
Mientras se siga discutiendo los trámites admi- la calidad académica o la seriedad institucional
nistrativos rutinarios en los organismos delibe- de cada uno de los inscriptos en el conflicto es
rativo-decisorios de las universidades, seguire- lo menos importante, si bien no por completo
mos con una burocratización que hace lenta e indiferente a cómo se decida la situación que
ineficiente la tarea administrativa, a la vez que –es obvio recalcarlo– en tales casos perjudica
impide a esos organismos dedicarse a la discu- considerablemente a los alumnos y a la insti-
sión estratégica de los grandes lineamientos ins- tución toda, y no encuentra modos de resolu-
titucionales, dado que se está obligado a tratar ción dentro de esa asfixiante y mínima unidad
permanentemente temas de urgencia. de funcionamiento que es la cátedra.
En el mismo sitial se ubica un cuasi-feti- La cátedra impide un uso fluido del recurso
che de las universidades argentinas (sobre to- docente e investigativo; el docente queda apre-
do las más antiguas, y –a menudo– con estu- sado en el mismo sitio, y no se lo puede cam-
diantado más numeroso: las de Buenos Aires, biar a otro. Ello lleva a un uso disminuido de
La Plata, Tucumán, Córdoba, Cuyo): el de la cá- las posibilidades combinatorias en la actividad
tedra como modalidad de organización admi- docente, a la vez que redunda en un inevitable
nistrativo-académica de la actividad docente y necesario achatamiento de la creatividad y de
y de investigación. la actualización del personal académico, que
Si según Burton Clark toda universidad es puede fácilmente repetirse de manera indefi-
de por sí una anarquía organizada, de muchos nida en sus modalidades de ejercicio sin una
jefes dispersos y en competencia entre sí; si autoridad académica superior que no sean los
los docentes universitarios no comparten en directores de carrera o los secretarios académi-
una misma institución horarios, reuniones de cos, que en general carecen de atribuciones pa-
conjunto ni espacios físicos comunes de traba- ra decidir por encima de los profesores a la ho-
jo; si el enfrentamiento por los recursos –ge- ra de las decisiones que hacen a cada cátedra.

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ENSAYOS / ROBERTO FOLLARI

Una carrera, dentro del régimen de cáte- Sin dudas que se requiere mejores formas
dras, resulta una incoherente combinación de de organización del personal académico que la
docentes mutuamente incomunicados o débil- de la cátedra: y en esto, la modalidad departa-
mente comunicados entre sí, a los cuales algún mental, sin ser una suma de bondades –como
director de carrera debe convocar cada tanto yo mismo he planteado en su momento (Folla-
para promover alguna constitución de concien- ri y Soms, 1981)–, es obviamente superadora,
cia en común. Pero es notorio que hasta incluso y parece increíble que no se haya avanzado ha-
en lo identitario, la cátedra suele anteponerse cia ella. Hemos visto en la Universidad Nacio-
a la carrera (o las carreras, si esa cátedra ejerce nal de Cuyo a dirigentes sindicales de izquier-
en varias de ellas), con lo cual la segmentación da y pertenecientes a carreras que se asumen
del trabajo –muy propia de la fetichización ca- como progresivas ideológicamente –tal el caso
pitalista– se plasma casi a plenitud. de Sociología– oponerse sin más a la departa-
A todo esto se agrega un efecto nada me- mentalización, por reflejo defensivo hacia que
nor de la organización por cátedras: la imposi- los docentes tengan asegurado qué cursos han
bilidad para la promoción del personal acadé- de dar desde hoy y para siempre, y por flagran-
mico. Cuando el titular llega a esa posición –lo te desconocimiento de otra modalidad de orga-
que a veces sucede siendo un docente joven– nización que no sea la de las cátedras.
queda ya en el techo de lo posible; de tal ma- El departamento permite una mirada que
nera, sólo le resta hacer la siesta o, en el me- ordene, coordine y evalúe a los docentes, inclu-
jor de los casos, trabajar a cabalidad sabiendo so a los de más jerarquía y calidad: desde su di-
que ello no importa consecuencias institucio- rección se promueve una condición en la cual
nales de ningún tipo (lo cual, es obvio, desa- no subsisten tantas jefaturas independientes, co-
lienta cualquier esfuerzo de perfeccionamien- mo sucede con el sistema de cátedras. A su vez,
to personal). Los demás miembros del equipo los docentes pueden ser llevados a modificacio-
de cátedra quedan en extraña y tensa situación nes en cuanto a los cursos que ofrecen; por su-
de ambivalencia afectiva para con el titular: sólo puesto que esta es una elasticidad que supone
si este se va, se jubila o se muere, pueden ellos límites, y que no significa que cualquier docen-
aspirar a ser titulares de esa cátedra. Si entran te será llevado a dar cualquier curso, sino que
en competencia abierta con el titular promue- –dentro de las competencias y temáticas que
ven una situación conflictiva sin salidas, desa- cada uno maneje– hay un margen para evitar
gradable y disfuncional para todos. En caso de la repetición y la esclerosis, y a la vez que para
resignarse a su situación de forzada inmovili- diversificar la oferta académica de la universi-
dad en la categoría académica, están obligados dad. Se supera así la irresoluble situación con
a llevarse bien con el titular, sea que este ayude las cátedras, de que no pueden cambiarse los
a que así sea o que no lo haga. El docente que planes de estudio (menos aún proponer una
no es titular (obviamente, la mayoría del per- carrera nueva, y/o el cierre de una que esté en
sonal docente de nuestras universidades si se curso y se advierta institucionalmente agotada
incluye entre ellos a los Jefes de Trabajos Prác- para cambiarla por otra) sin que se tenga que
ticos, categorizados en muchas universidades adaptar el plan de estudios a lo que ya está. O
como auxiliares) habrá entonces de frenar sus sea: que en vez de decidir qué contenidos ha-
ímpetus y vivirá en la espera semibudista de brá de tener la carrera a iniciar o el nuevo plan
que alguna vez la suerte o el paso del tiempo de estudios a inaugurar, tenemos que asegurar-
le den ocasión de una promoción en su rango nos que los mismos no dejen fuera a las cáte-
académico. dras y los académicos tal cual ya están defini-

Pensamiento Universitario • Nº 18

71
ENSAYOS / ROBERTO FOLLARI

dos por sus respectivos lugares concursados en Es esta una muestra más del atraso gestio-
cátedras. Situación por la cual, casi sobra decir- nal de la universidad argentina. En el gobier-
lo, con ese régimen de ordenamiento adminis- no anterior (tomando por tal la administración
trativo-académico estamos imposibilitados de de 2003 a 2015) se avanzó mucho en el presu-
cualquier modificación seria en la oferta aca- puesto, el salario docente, las becas, la inclu-
démica de nuestras universidades, y quedamos sión de nuevos sectores sociales en la educa-
condenados a la inmovilidad y la eterna repeti- ción superior: pero hubo escasas políticas de
ción de lo mismo. modificación institucional, las que si bien no
La organización departamental deberá dependen del Estado nacional, se pueden aus-
adecuarse para, por ejemplo, responder espe- piciar y favorecer desde allí. Situación agra-
cíficamente a las demandas educativas que les vada en el presente, cuando con el gobierno
lleguen desde diferentes carreras, ya que los de- macrista el salario docente está en baja, el nú-
partamentos no se superponen con las carre- mero de becas también así como el financia-
ras de una Facultad o una universidad. Y debe- miento todo del sistema, sin que –además– las
rá dividirse por áreas para organizar mejor la reformas anteriores no realizadas se pongan
discusión académica entre sus docentes/inves- en curso (lo cual, con ese contexto de restric-
tigadores, así como las tareas de investigación ción financiera, en cualquier caso resultaría
mismas. Pero en cualquier caso se disminuirá muy problemático).
la segmentación del trabajo, se plurificará las Este retraso gestional es añoso en nuestras
opciones de ejercicio del personal académico universidades. Ya hace 40 años en sitios co-
y además podrá independizarse la carrera aca- mo Brasil o México, el espacio jerárquico de
démica de cada docente de la de los demás; ya las universidades (secretarías de planeamien-
no se será “adjunto” porque haya un titular to, académica, de extensión) estaba ocupado
instalado, sino que alguna comisión dictami- por personal especializado, muchas veces gra-
nadora a establecer, fijará el nivel y la catego- duado en universidades extranjeras. Personal
ría académica de cada docente sólo en relación profesionalizado en la dirección de la actividad
a sus propios logros, y no en la encerrada red universitaria, formado para cada una de esas
de los escasos cargos que existen al interior de funciones, o –cuanto menos– para la gestión
una cátedra. universitaria en su conjunto. Entre nosotros
Es hora de cambiar el régimen de cátedras no sólo está garantizada la discontinuidad en-
en las múltiples universidades en que subsis- tre diversas gestiones (lo cual es seguro si tie-
te; si bien es difícil hacerlo, tanto por la dificul- nen diferente pertenencia política, pero suce-
tad legal-administrativa que ello conlleva, co- de a veces incluso con igual pertenencia si se
mo por la resistencia –a veces frontal y también trata de la sucesión por otra tribu académica),
a menudo subterránea– que el personal docente sino que está garantizado que el personal sea
suele hacer cuando estos procesos se inician. de académicos que dejan momentáneamen-
Pero las nuevas universidades que se están te sus funciones (o las mantienen) mientras
creando no debieran reproducir esta modali- se dedican a tareas que previamente descono-
dad, y las otras –consolidadas en este régimen cían, por lo cual su adecuación al cargo es ba-
añejo y disfuncional– debieran iniciar claros ja, y también –hay que subrayarlo– donde no
caminos de modificación, en debate y diálogo han de durar más allá de una gestión, a más de
con los sindicatos que nuclean a los docentes, no ser profesionales del área. En el caso mexi-
y con la representación de los mismos en los cano, el personal técnico contaba con un mar-
consejos universitarios. gen de posibilidad (nunca absoluto, por cierto)

Pensamiento Universitario • Nº 18

72
ENSAYOS / ROBERTO FOLLARI

de continuar en varias gestiones, a partir de la Referencias


calidad instrumental de su aporte. Bibliográficas
De modo que hay una modernización que • Atairo, Daniela (2016), El gobierno universitario
en la Argentina no terminamos de hacer; y en la agenda académica y política de América Latina,
por cierto que la apelación a la Reforma poco ANUIES, México.

nos dice de todas estas cuestiones: la depar- • Follari, Roberto (2008), La selva académica
tamentalización no estaba en el programa de (los silenciados laberintos de los intelectuales en la
1918 como no lo estaban los criterios actua- universidad), Homo Sapiens, Rosario.

les de gestión eficiente, simplemente porque • Follari, Roberto. y SOMS, Esteban


en esos tiempos no existían tal cual los cono- (1981), “Crítica al modelo teórico de la
cemos hoy. departamentalización”, Revista de la Educación
Superior de ANUIES, núm. 37, vol.10, México.
La superación de la actividad de los con-
sejos como decisorios sobre cuestiones rutina-
rias, es otra situación parecida: el co-gobierno
no debiera entenderse como espacio de deba-
te interminable sobre lo cotidiano, sino como
decisión estratégica sobre los grandes temas,
guardando (por cierto como importante) per-
manente vigilancia sobre las decisiones dia-
rias de las autoridades ejecutivas. Pero no es
en vano que estas sean cada vez más puestas
en posición de fortalecimiento y mayores atri-
buciones de decisión a nivel latinoamericano
(Atairo, 2016): si las decisiones se empanta-
nan se pierde en efectividad, al punto de que
las universidades de propiedad privada (pero
efectos de índole pública) pueden a menudo
aparecer como opción mejor a los fines de en-
contrarse –los estudiantes– con un universo
administrativo más eficaz y de resultados más
rápidos y previsibles.
Ojalá emprendamos de una vez los cam-
bios necesarios. Nada lleva a suponerlo así,
pues la tendencia a la reproducción autosa-
tisfecha (y la dificultad intrínseca que con-
lleva el manejo del conflicto con docentes y
eventualmente con alumnos) se hace a veces
mayoritaria en nuestras instituciones. Pero si
queremos ir más allá de la sola reivindicación
ritual del pasado, el aniversario de la extraor-
dinaria Reforma Universitaria de 1918, debie-
ra ser base para pensar en la necesidad de nue-
vas y otras reformas universitarias presentes
y futuras.

Pensamiento Universitario • Nº 18

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••• CRÓNICAS

Un Centenario
en disputa:
balance provisorio
de la CRES 2018
Por Yamile Socolovsky*

* Secretaria de Relaciones Internacionales


y Directora del Instituto de Estudios
y Capacitación (IEC), CONADU

A diez años de la realización de la II Con- pronto la última trinchera defensiva del lega-
ferencia Regional de Educación Superior en do de un ciclo de democratización social, polí-
Cartagena de Indias, y bajo los auspicios ce- tica, económica y cultural ensayada en Améri-
lebratorios del Centenario de la Reforma Uni- ca Latina en los primeros años de este Siglo, y
versitaria, la CRES que se reuniría en Córdoba jaqueada ahora por la reconfiguración de una
en junio de 2018 parecía signada por un augu- estrategia de restablecimiento de privilegios
rio nefasto: el cambio drástico de las coorde- oligárquicos asociada a un nuevo embate del
nadas políticas en la región ponía en entredi- capital financiero transnacional sobre las eco-
cho la posibilidad de, al menos, evitar un giro nomías de la periferia.
retórico que suprimiera el logro de la Declara- El desarrollo de la Conferencia de Córdoba
ción que en 2008 había definido a la educación fue finalmente mucho menos desfavorable de
superior como un derecho humano universal, lo esperado, aunque su resultado y proyeccio-
y una responsabilidad de los Estados. Aquella nes aún parecen inciertas. Tal vez no sería ocio-
afirmación, que poco a poco había trascendi- so recordar, en este punto, que en las semanas
do el plano discursivo para convertirse en la previas a la reunión convocada por el Institu-
fórmula distintiva de un cambio de etapa que to de Educación Superior para América Latina
colocaba a nuestra región a la vanguardia de y el Caribe (IESALC) de UNESCO, advertíamos
la defensa de la educación superior y del co- sobre la importancia de explicitar la existencia
nocimiento como factores determinantes de de una confrontación de proyectos políticos en
la construcción democrática, parecía ser de los que antagonizan visiones de la universidad

Pensamiento Universitario • Nº 18

75
CRÓNICAS / YAMILE SOCOLOVSKY

y su rol en la sociedad, disputa que apenas lo- largo de estos años han contribuido a construir
gró perforar el pesado manto del consenso que un campo específico de estudios críticos sobre
los modos diplomáticos de la burocracia guber- la universidad, a sumarse a un espacio común
namental y académica tejen pacientemente so- que contribuyera a instalar un debate que en-
bre la base de una retórica de los derechos va- tendíamos debía de algún modo resonar en la
ciada de potencia crítica. Conferencia. El masivo Encuentro Latinoame-
En tanto la convocatoria a la CRES, conce- ricano y Caribeño por una Universidad Demo-
bida según IESALC como una reunión de “los crática y Popular, que fue precedido de foros pú-
actores (sic) del sistema” destinada a plantear blicos y horizontales de discusión en distintas
a los gobiernos de la región una propuesta de universidades del país, así como la gran movili-
lineamientos de política para el sector en la zación que recorrió las calles de la ciudad horas
próxima década, carece del respaldo de una antes del tenso comienzo de la CRES –en cuya
institucionalidad representativa que determi- sesión de apertura el Ministro de Educación ar-
ne claramente las formas de participación y gentino fue abucheado espontáneamente por
los niveles de responsabilidad de “los actores” la concurrencia– prologó el planteo de no pocas
que componen el espacio de la educación su- voces críticas que participaron en las comisio-
perior, el evento se convierte en un cenagoso nes y en la redacción de una Declaración final.
territorio de prueba de fuerzas de los diversos Allí no sólo se reafirma el principio que estable-
sectores que pretenden incidir en el diagnós- ce el derecho humano universal a la educación
tico de la situación y en la determinación de superior, sino que incluso avanza en el señala-
perspectivas de acción inevitablemente asocia- miento de la amenaza que representa en la ac-
das a intereses muchas veces irreductiblemen- tualidad el avance de la mercantilización de la
te contrapuestos. educación y el conocimiento, impulsada por el
Es así que las organizaciones sindicales capital financiero transnacional, incorporando
docentes, considerándonos también “actores/ también dimensiones relevantes para la demo-
actrices del sistema”, y reivindicando nuestra cratización del sector, como la demanda de la
representación colectiva a nivel nacional y re- igualdad de género, la reivindicación de la di-
gional, tomamos la CRES como una oportuni- versidad cultural de nuestra región, o la am-
dad para llevar nuestras preocupaciones, recla- pliación de una noción de la actividad acadé-
mos, y propuestas en torno a la actualidad y el mica que reconoce a las artes como una de sus
futuro de la educación superior en América La- dimensiones constitutivas.
tina, convocando a otros sectores sindicales, a Tal como señalara entonces la Rectora de la
las organizaciones estudiantiles y a quienes a lo UNGS, Gabriela Diker, la cuestión de la Declara-

Pensamiento Universitario • Nº 18

76
CRÓNICAS / YAMILE SOCOLOVSKY

ción de principios no constituía un desafío me- bación” de un programa mal articulado, que
nor. En esa tesitura, es importante valorar que yuxtapone conceptos originados en perspec-
el pronunciamiento de la CRES expresa una se- tivas políticas antagónicas, y que difícilmen-
rie de consensos básicos que vuelven a situar a te pueda ser asumido como una guía clara pa-
nuestra región en una clara contradicción con ra la acción. Luego de que la reciente reunión
la orientación que hoy adopta la política educa- de Lima, en la que la posibilidad del debate fue
tiva y científica de la mayoría de los gobiernos escamoteada por la aplicación de una absurda
en esta zona del mundo como a nivel global, grilla que condicionaba operacionalmente to-
y que permea, si no conduce, la actuación de da participación, no lograra siquiera el acuerdo
organismos internacionales como la UNESCO. necesario para establecer una Comisión de se-
Precisamente en la tramitación posterior de la guimiento del Plan de Acción, el desenlace de
elaboración del Plan de Acción de la CRES es- la CRES 2018 sigue abierto y disputado.
tas contradicciones se evidenciaron en una ma- Ante esta situación, cobra aún mayor re-
nipulación escandalosa del procedimiento que levancia la tarea de conformar un ámbito per-
debía producir el documento que, siguiendo manente, y genuinamente representativo, pa-
los lineamientos establecidos en junio, y reto- ra establecer acuerdos estratégicos que puedan
mando los aportes propuestos en las Comisio- aspirar a incidir efectivamente en el desarrollo
nes, planteara estrategias concretas para el de- actual y futuro de las políticas gubernamenta-
sarrollo de políticas públicas e institucionales les relacionadas con la educación superior en
adecuadas a aquellos principios rectores. La es- la región. En este sentido, vale la apuesta a di-
casa y confusa información sobre la dinámica namizar y consolidar ENLACES, el espacio de
de construcción de dicho Plan, con la interven- encuentro propuesto por la CRES 2008. En todo
ción de equipos técnicos no vinculados a las caso, y mientras resulta evidente que el hori-
instituciones y redes académicas del sector pú- zonte de cualquier proyecto de regionalización
blico, en una trama que incluyó el bochornoso de la educación superior está inexorablemen-
intento de modificar el texto de la Declaración te ligado al destino de la lucha democrática en
aprobada por aclamación en Córdoba, configu- cada uno de nuestros países, se torna urgente
raron un desenlace en el cual el desencuentro la construcción de una articulación política de
de la burocracia de la UNESCO con las asocia- los sectores comprometidos con la defensa del
ciones de universidades públicas, así como la derecho a la educación superior y la democra-
dispersión de estrategias entre las propias agru- tización del conocimiento, en la perspectiva de
paciones que conforman el mapa regional de la emancipación de los pueblos latinoamerica-
la educación superior, concluyó con la “apro- nos y caribeños.

Pensamiento Universitario • Nº 18

77
•••• RESEÑAS

La universidad Reforma de 1918 es el posicionamiento de la


se pinta de pueblo: universidad en sus sociedades. Lejos de las fra-
educación superior, ternidades o hermandades europeas y anglo-
democracia y sajonas dedicadas a lo festivo, las preocupacio-
nes de los estudiantes argentinos se centran
derechos humanos
en las cuestiones del acceso, producción y con-
Mauro Benente. (compilador) ducción de los conocimientos en el nivel supe-
1a ed . - José C. Paz: Edunpaz, 2018. rior. Esa preocupación está siempre en defensa
244 páginas. de la misión social de la universidad en aten-
ción a los desafíos de su tiempo y de su región,
lo que justamente la posiciona como arena (y
más de una vez como blanco) de disputas a lo
largo de la turbulenta historia argentina del si-
glo veinte. Unzué destaca que el legado de los
cuestionamientos y decisiones reformistas so-
bre el qué y cómo se produce y se enseña el co-
nocimiento en el nivel superior es central pa-
Este libro se organiza en 11 apartados: un pró- ra dar respuesta a los embates actuales sobre
logo, ocho capítulos, dos entrevistas. La mitad la calidad y la democracia universitaria argen-
más uno de sus autores son mujeres. Todos los tina que desconocen los sentidos del compro-
autores son graduados de la Universidad de miso universitario.
Buenos Aires, a excepción de un autor que rea- Desde la Universidad Nacional de Córdoba,
lizó su trayectoria educativa en la Universidad Sebastián Torres realiza una reconstrucción de
Nacional de Córdoba, y tienen estudios de pos- los sentidos de la educación superior para pre-
grado. Casi todos cuentan con experiencia de sentar a los derechos sociales como condición
desempeño en cargos de gestión universitaria. de justicia, como forma concreta de reponerse
Todos son docentes del nivel superior y se des- a la desigualdad y nos convoca a realizar una re-
envuelven en al menos dos universidades na- construcción de la educación como condición
cionales. En esta obra compilada por Mauro Be- de libertad colectiva caracterizada por víncu-
nente y publicada por la Editorial Universitaria los, contenidos y posibilidades plurales que re-
de la Universidad Nacional de José Clemente vierten las intenciones de opresión y sumisión.
Paz, escriben estudiosas y estudiosos de distin- Destacando que hay un encuadre norma-
tas áreas para presentar una observación dete- tivo internacional que concerta a una dismi-
nida en los colores del pueblo que significan a nución de las perspectivas mercantilistas de
la educación como derecho humano. la educación superior y a un crecimiento de
La obra comienza con un prólogo a car- las posibilidades de estudios no arancelados,
go de su compilador. Continúa con un capítu- Mauro Benente, nos explica que la institución
lo a cargo de Martín Unzué en el que se desta- emancipatoria puede llevarse adelante me-
ca que una de las improntas perdurables de la diante una revisión de los sentidos de lo común

Pensamiento Universitario • Nº 18

79
RESEÑAS

que están compelidos en el entendimiento de


la educación superior como derecho humano
y bien público social. Para ello, es importan-
te identificar que en la gramática reformista
hay nexos entre las categorías de revolución
y de derechos humanos. Entre ellos, la idea de
la participación en la vida pública del país en
cumplimiento de su función social y la ida de
la universidad al pueblo (y no al revés).
A continuación, Victoria Kandel presenta
el análisis sobre un relevamiento de los dispo-
sitivos universitarios que se ocupan de los De-
rechos Humanos. A lo largo de todas las regio-
nes del país, en 59 universidades nacionales,
hay 170 dispositivos que en su nombre llevan
el término “derechos humanos”. Hay centros,
observatorios, institutos, comisiones, áreas, se-
cretarías, querella y unidades curriculares de
grado y posgrado. En la mayoría de las univer-
sidades se desarrollan a través de más de una
modalidad y, si bien todos fueron creados con
posterioridad a la recuperación de la democra- rechos humanos en Argentina. Este capítulo
cia (el primer formato es de la UBA en 1985), se interpela a las comunidades universitarias a
registra un aumento notable de ellos a partir construir sociedades más justas y más inclusi-
del año 2012. En este sentido, la autora señala vas mediante la consolidación y ampliación de
que la incorporación institucional de los dere- miradas críticas, responsables y comprometi-
chos humanos en las universidades argentinas das con la expresión transformadora e institu-
es heterogénea, se sostiene en el tiempo y se yente de los derechos humanos.
entiende por la confluencia articulada de tres Luego, el capítulo a cargo de Julián Dérco-
fuerzas: los lineamientos de la agenda interna- li posiciona al derecho a la educación superior
cional sobre la educación en derechos huma- en relación de mutua dependencia con la trans-
nos, las organizaciones de la sociedad civil y las formación de la función de la universidad en
trayectorias personales y colectivas de los pro- el marco de la realización de un destino nacio-
pios académicos. La diversidad y acumulación nal soberano. Muestra que es importante reto-
de temáticas bajo la denominación de derechos mar distintas cuestiones de los debates parla-
humanos que abordan las universidades, res- mentarios del año 1948 sobre la creación de la
ponde al rasgo de dinamismo y amplitud que Universidad Obrera Nacional y de la caracteri-
caracteriza a las luchas, intereses, demandas zación de las nuevas universidades nacionales
y preocupaciones de los movimientos de de- para reflexionar más allá de la valoración de la

Pensamiento Universitario • Nº 18

80
RESEÑAS

diversificación de la oferta y de la ampliación taban los jóvenes reformistas de 1918 al posi-


de las posibilidades de ingreso. En función de cionar una transformación de la universidad
estas instituciones, se pueden revisar las distin- en vinculación a la de la sociedad en su conjun-
tas significaciones de la idea de universidad en to. A la idea de una universidad cogobernada,
torno a distintos binomios, entre ellos, huma- con intervención en los problemas sociales y
nismo-tecnicismo, alienación-realización, par- con programas de estudio que se enfoquen en
ticularismo-universalismo. La revisión de es- las realidades concretas, le subyace una orien-
tas significaciones pueden ser de utilidad para tación a la democratización del saber en tan-
poder proyectar instituciones universitarias to posibilidad de emancipación. Un siglo des-
que no reifiquen el derecho en privilegio. Pa- pués, la democratización del conocimiento es
ra poder hacer universidades que se dediquen un espacio de permanente tensión por el que
a transformar el país en uno donde quepan to- la universidad tiene la tarea de posicionarse
das y todos, con su historia, sus trayectorias y contra las injusticias y exclusiones del mundo
sus intereses, con su sentido de lo colectivo y contemporáneo. Para pensar a la educación co-
no con el que se establece desde las ideas tra- mo un derecho, es fundamental que los Esta-
dicionales de universidad ilustrada. dos latinoamericanos promuevan la igualdad
En el capítulo a cargo de Anabella Lucardi de oportunidades y posiciones de los distintos
se muestra el peso de las políticas públicas rea- sujetos en su tránsito por todo el sistema edu-
lizadas entre 2003 y 2015 para la ampliación de cativo a la vez que sostengan políticas públicas
la igualdad de posiciones como presupuesto pa- de integración económica, justicia social y eco-
ra el ejercicio real de derechos individuales y co- nomía nacional.
lectivos. Entendiendo a la democratización co- En el noveno apartado, Ariel Langer expli-
mo ampliación de derechos inclusivos, analiza ca que el proceso actual de expansión de la ma-
las acciones estatales de corte social, económi- trícula universitaria surge de las formas de pro-
co y educativo que pudieron fortalecer y garan- ducción de conocimiento que las universidades
tizar distintos derechos. La autora nos recuer- del conurbano representan en estrecho víncu-
da la importancia de la articulación de distintas lo con las demandas territoriales. Esta produc-
contribuciones orientadas a posibilitar progre- ción del conocimiento centrada en la demanda
sivamente el derecho a la educación superior y, adquiere un carácter específico al estar vincu-
consecuentemente, a la configuración de hori- lada a prioridades y orientaciones de las ne-
zontes de igualdad en nuestras sociedades. cesidades sociales, así como la conformación
En esta línea, el libro continúa con un ca- de la matricula con estudiantes en su mayoría
pítulo a cargo de Ana Laura Herrera y María mujeres, con menores ingresos económicos y
Carolina Calvelo en el que se visibilizan distin- mayor edad que las de las otras universidades
tas conceptualizaciones sobre las perspectivas del país, diferencia a estas jóvenes institucio-
mercantilistas que pueden obstruir el ejercicio nes del pensamiento ilustrado que caracteriza
concreto del acceso, permanencia y promoción a las universidades tradicionales.
en la educación superior. Nos recuerdan la mo- Langer demuestra que el carácter centra-
ción cuestionadora de lo establecido que deten- do en la demanda impacta en la forma de pen-

Pensamiento Universitario • Nº 18

81
RESEÑAS

sarse a sí mismas como instituciones, más aún En la segunda, Dora Barrancos detalla cues-
cuando sus destinatarios no imaginaron la po- tiones más que interesantes. Entre ellas, distin-
sibilidad de estar en un establecimiento uni- gue que al actual proceso de construcción de un
versitario y, a reconcebir las formas en que se sistema científico y una universidad con sensi-
piensan las vías de producción y apropiación bilidad feminista lo preceden la diversificación
del conocimiento que no se condice con la ló- y ampliación de la oferta de escuelas secunda-
gica de acumulación de publicaciones que se rias a mitad del siglo veinte, la profesionaliza-
requiere en los sistemas de evaluación (y asig- ción de las tareas de cuidado y las acciones co-
nación de fondos) para el desarrollo científico. lectivas e individuales realizadas por muchas
En este sentido, las universidades del conur- mujeres para reponerse a los no pocos procesos
bano bonaerense nos interpelan a desarrollar históricos plagados de misoginia. De la mano
sistemas de evaluación, de financiamiento de de Dora Barrancos, Romina Smiraglia y Anabe-
la investigación y distribución del presupuesto lla Di Tullio, este libro finaliza con un señala-
que favorezca el protagonismo académico de miento sobre la urgencia de efectuar cambios
los desarrollos que se centren en la resolución en el mercado laboral y en la asignación de las
de las problemáticas locales, a razón de las de- tareas de cuidado.
mandas socioproductivas y de la mejora en las Este libro se propone visibilizar las parti-
condiciones de vida de su población en cuan- cularidades de una universidad pintada de pue-
to a las efectivización de sus derechos sociales. blo. Lo cumple. Destaca alcances, implicancias,
Para finalizar, el libro presenta dos inte- desafíos. También pone en valor los matices y
resantes entrevistas. Mauro Benente conversa la nitidez de esos colores recuperando notas de
con Eduardo Rinesi y Romina Smiraglia y Ana- legados de autores, actores, categorías, proce-
bella Di Tullio conversan con Dora Barrancos. sos, relatos y hechos del último siglo, revisan-
En la primera, Eduardo Rinesi especifica que do el presente de cara al futuro.
las distintas funciones de la universidad pue-
den pintarse de pueblo en la medida en que se
redefinan en términos republicanos las catego- Micaela Battisacchi
rías de autonomía y de libertad. Ampliando el
Licenciada en Ciencias de la Educación (UBA),
legado de los derechos instituyentes proclama-
Trabajadora nodocente y docente del Centro
dos en la Reforma de 1918, esto implica conce- para el Desarrollo Docente de la Facultad
bir a la educación superior como un derecho de Derecho de la Universidad de Buenos Aires
individual pero también propio de un sujeto
colectivo que es el pueblo nacional y latinoa-
mericano. Sujetos que tienen derecho a ingre-
sar de modo irrestricto, a no pagar arancel por
su educación superior, a ser protagonistas de
una educación de alta calidad y sobre los temas
de interés actual y futuro para la sociedad que
sostiene y apuesta por la universidad.

Pensamiento Universitario • Nº 18

82
RESEÑAS

¿Ya votaste?: experiencias y socio-territorial (campo político nacional).”


de participación política En los capítulos del libro indagarán los alcan-
de jóvenes estudiantes ces de esta hipótesis, recuperando distintos pla-
de la UNLP nos de análisis de una investigación situada en
la Universidad Nacional de La Plata a partir de
Antonio Camou, Marcelo Prati diversas fuentes de información: encuestas y
y Sebastián Varela (coords.) entrevistas a estudiantes en la institución y la
La Plata: EDULP, 2018. realización de registros etnográficos, durante
el año 2011.
La estructuración del libro recupera las
principales fases de una contienda electoral
universitaria estudiantil, dando lugar a un or-
denamiento de los capítulos en tres secciones:
una primera parte denominada “campañas”,
una segunda parte denominada “votaciones”
y, por último, los “escrutinios”, realizando así
El libro “¿Ya votaste? Experiencias de partici- una analogía de esta contienda con el proceso
pación política de jóvenes estudiantes de la de investigación realizado.
UNLP” estudia e invita a reflexionar sobre las La primera parte, llamada “Campañas”,
particularidades que asume la experiencia po- contiene tres capítulos que describen la estra-
lítica estudiantil en la configuración universi- tegia teórico-metodológica, donde se profun-
taria nacional de estos últimos años, retoman- diza en las claves conceptuales, se problema-
do la propuesta de Pedro Krotsch, anclada en tizan las categorías utilizadas y se presenta el
ahondar y complejizar las investigaciones so- anclaje contextual de la investigación. El pri-
bre las orientaciones políticas y culturales de mer capítulo está escrito por los coordinadores
lxs estudiantes universitarixs. En la “Entrada” del libro, que realizan un amplio recorrido so-
(o introducción) del libro, los coordinadores bre los ejes conceptuales que estructuran su ar-
Antonio Camou, Marcelo Prati y Sebastián Va- gumento. En principio introducen los modelos
rela, parten de una hipótesis general: “la expe- crítico-hermeneúticos y neo-institucionalistas
riencia política de los jóvenes estudiantes uni- de investigación para proponer puentes de diá-
versitarios es fruto de un complejo proceso de logo entre los mismos, apostando a construir
socialización, individuación y subjetivación en una mirada que contemple ambas corrientes
el que se vinculan sus trayectorias personales para comprender la participación política es-
con diferentes campos de la vida social, entre tudiantil. Retomando los aportes de Bourdieu
los que se destacan las lógicas propias del ám- y Wacquant (1997), se diferencia dentro de la
bito disciplinar (campo académico), las diná- participación política una “doble vida” que es
micas específicas de la política institucional de al mismo tiempo objetiva y subjetiva: la pri-
las casas de estudio (campo político universita- mera se encuentra ligada a los modos de acu-
rio) y el papel jugado por la política partidaria mulación de poder institucional, partidario y

Pensamiento Universitario • Nº 18

83
RESEÑAS

territorial; y la segunda, en cambio, al involu- movimiento estudiantil, y se expande a par-


cramiento y vivencias de lxs estudiantes, en las tir de estudios que contemplan la experiencia
cuales conviven valores ligados tanto al senti- del estudiante universitarix no solo a partir de
do de pertenencia y solidaridad como a una su vínculo con la política. Dentro del capítulo
lógica estratégica y calculatoria. El capítulo se también se realiza un recorrido por las relacio-
estructura en cuatro secciones: en la primera, nes y los alejamientos que se establecen entre
se describen distintos modelos que trabajan el ambas categorías (estudiantes y universitarios)
problema de la socialización política, retoman- durante la última mitad del siglo XX. Este re-
do así los aportes de distintos sociólogos con- corrido permite ampliar la noción de partici-
temporáneos –principalmente Parsons, Mar- pación política estudiantil asociada a la adhe-
tucelli, Touraine y Foucault– para ampliar las sión militante, para comprender la pluralidad
miradas clásicas sobre la socialización de lxs jó- de expresiones que encuentran actualmente.
venes, comprendiéndola en relación a sus pro- La autora propone condensar en la categoría
cesos de individuación y subjetivación, sien- jóvenes estudiantes universitarixs este carác-
do estos tres procesos convergentes entre sí. ter histórico, plural y contextual.
A su vez, se retoman aportes de Bourdieu y El tercer capítulo escrito por Daniela Atai-
Lahire para introducir el concepto de sociali- ro y Lucía Trotta concluye este primer segmen-
zación múltiple. El capítulo también realiza to del libro, allí se recuperan distintas coorde-
un recorrido por distintas conceptualizaciones nadas para caracterizar a la UNLP y enmarcar
de la experiencia, retomando aportes de la so- los datos relevados dentro de la institución. Las
ciología, en particular de Jey (2009) que la ubi- autoras sostienen que la relación que estable-
can como una intersección entre el lenguaje cen lxs estudiantes universitarixs con la polí-
público y la subjetividad privada. Por último, tica se construye dentro de un orden institu-
se aborda la participación política estudiantil cional, político e histórico determinado. Por
y sus particularidades dentro del ámbito uni- ello, en primer término, se describen en clave
versitario, delimitando desde una perspectiva histórica los orígenes de la UNLP como insti-
institucionalizada las figuras de votante, ad- tución y las discusiones de principios de siglo
herente y militante que son retomadas para el XX que orientaron su conformación. Se resal-
análisis de datos. tan las referidas al perfil de la institución cris-
El capítulo 2, “Juventud/es, estudiantes talizadas en los modelos científicos y profesio-
universitarixs y política” focaliza la mirada en nalistas de universidad, y aquellas que hacen
la categoría de “jóvenes”, discutiendo una pers- a la conformación del co-gobierno. La segun-
pectiva reduccionista que la establece como un da clave de análisis es organizacional: las auto-
todo homogéneo, a partir de introducir aque- ras realizan una caracterización comparando
llos estudios que comprenden a las juventu- el perfil de la institución con las otras univer-
des en plural. También señala la amplitud de sidades del país, focalizando en la multiplici-
la categoría de “estudiantes universitarixs” al dad de variables que la configuran como una
describir cómo gradualmente la producción de universidad grande y con orientación científi-
conocimiento deja de estar sólo centrada en el ca. Por último, se realiza un abordaje del perfil

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político de la UNLP analizando la relación que tas realizadas a lxs estudiantes, comparando la
la institución establece con el Estado nacional experiencia de lxs estudiantes militantes fren-
y, en particular, con los partidos gobernantes. te a aquellxs que no tienen un involucramien-
Se describe cómo los posicionamientos de la to directo con la política universitaria y se de-
institución desde el retorno de la democracia nominarán “votantes”. El tercer apartado del
hasta la actualidad influyeron en reformas or- capítulo tiene un lugar primordial en tanto se
ganizacionales, así como también en las rela- profundiza en las entrevistas realizadas a mi-
ciones de los actores al interior de la institu- litantes de la UNLP. Se indaga en sus patrones
ción y con los actores externos. de acceso a la vida política, delimitando tres
En la segunda sección del libro, “Votacio- grandes modelos para comprender sus trayec-
nes”, se analizan los datos relevados del trabajo torias: la militancia o politización por el “lega-
de campo. Esta sección contiene al capítulo 4, do”, a través del “conflicto” y por “contacto”.
en el cual Daniela Atairo y Sebastián Varela pre- Finalmente, su última sección analiza cómo se
sentan un “Caleidoscopio universitario” sobre configura la práctica política de los militantes,
los resultados generales de la encuesta realiza- resaltando la tensión entre las prácticas eman-
da a estudiantes de las distintas facultades de cipatorias y calculatorias que conviven en su
la UNLP. Lxs autorxs focalizan en las relaciones experiencia y se retroalimentan. Por último,
que estos establecen con la política, pero tam- sobre el final del capítulo los autores ponen el
bién se trabaja a partir de otras dimensiones de foco nuevamente en las prácticas políticas de
análisis de carácter socioeducativo y cultural. aquellos estudiantes “votantes”, delimitando
El capítulo permite explorar cuáles son las ca- tres perfiles para su análisis: el del “agremia-
racterísticas comunes y construir un perfil del do”, el del “votante medio” y el del “huérfano
estudiante platense y las diferencias que se es- de la política”.
tablecen en el enorme espectro de estudiantes En el capítulo 6 “’Sociología para la trans-
de la UNLP, comparando los resultados obteni- formación’: militancia y formación académi-
dos en las distintas unidades académicas a par- ca”, escrito por Cecilia Carrera, enfatiza en la
tir de distintas variables de análisis. El capítulo experiencia de lxs estudiantes de la carrera de
se divide en cuatro bloques delimitados según Sociología de la FaHCE (UNLP), preguntándose
la segmentación propia de la encuesta realiza- de qué manera relacionan su condición de estu-
da: socioeducativo, cultural, de política univer- diantes con su experiencia de militancia. Para
sitaria y de política nacional. ello recupera entrevistas realizadas a estudian-
“Escrutinios” es la última sección del libro, tes de la Comisión de Estudiantes de Sociología
y en ella se presentan las principales conclu- (un espacio de organización conformado por
siones de la investigación. En el capítulo 5, los estudiantes de la carrera en la facultad), pro-
coordinadores del libro profundizarán en la ex- fundizando en las prácticas, relaciones y signi-
periencia política de los estudiantes militan- ficaciones que se construyen a partir de su mi-
tes de la UNLP, realizando primero un estado litancia, y su especificidad del espacio frente a
de la cuestión de los estudios sobre socializa- la militancia en agrupaciones estudiantiles. Re-
ción política y, luego, un análisis de las encues- tomando el concepto de “comunidad de prác-

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tica” desarrollado por Lave y Wenger (1991), se cipan de una cultura juvenil que trasciende su
recuperan las experiencias colectivas que ellxs condición estudiantil? ¿Qué dimensiones re-
asocian a la política (y que caracterizan como sultan relevantes para complejizar una mira-
“experiencias de organización”) y a su forma- da homogénea del universo estudiantil? Y, por
ción como sociólogxs. La autora concluye que último, ¿qué relaciones pueden establecerse
es posible pensar a las prácticas de militancia entre ciertos estilos o perfiles derivados de las
como recursos de la formación universitaria. prácticas culturales con la participación políti-
El séptimo capítulo se titula “Acá no se dis- ca estudiantil? El capítulo constituye un aporte
cute, esto es folklore..!”, haciendo alusión a una fundamental para comprender la socialización
de las tantas frases que Malena Battista, Laura de lxs estudiantes desde una mirada actual, al
Lugano y Ana Santilli Lago recuperan del tra- considerar cómo la tecnología y los medios de
bajo de campo realizado en las elecciones es- comunicación ocupan un lugar cada vez más
tudiantiles de la UNLP. Las autoras ahondan en notorio en este proceso.
clave etnográfica en los procesos de campañas, El noveno capítulo, realizado por los coor-
votaciones y escrutinios, así como también en dinadores del libro, se plantea como su “Salida”
implicancias de estos procesos para lxs militan- presentando algunas conclusiones generales. Se
tes estudiantes y sus representaciones sobre recupera la hipótesis planteada al comienzo a
qué es la militancia y sobre el resto de lxs estu- partir de un exhaustivo análisis de datos refe-
diantes no agrupadxs. De esta forma, se reco- ridos a la experiencia política de lxs estudian-
nocen diversas representaciones o imaginarios tes, en clave sincrónica y diacrónica. Sus con-
sociales en los discursos de lxs militantes, y se clusiones finales presentan a la representación
analiza cómo éstos dan forma a distintas estra- política estudiantil actual con distintas rupturas
tegias y prácticas observadas durante el proce- y continuidades con la política nacional, y po-
so de elecciones que ponen en tensión los sen- nen en discusión la hipótesis de “reactivación”
tidos construidos sobre la militancia. de la participación política de los jóvenes de los
El capítulo 8 escrito por Lucía Trotta, Pao- últimos años. Los autores resaltan que existe un
la Santucci y Yamila Duarte indaga en las rela- interés importante por la política entre lxs jó-
ciones establecidas entre lxs jóvenes universi- venes, pero que este no se traduce en participa-
tarixs con las nuevas tecnologías, los medios ción efectiva, y que a su vez existe una acentua-
de comunicación y otros espacios de socializa- da falta de credibilidad en el sistema político y
ción, enfatizando entre ellos a las instituciones los medios de comunicación actuales.
universitarias. Los datos de la encuesta realiza- En la medida en que se avanza en la lectu-
da en la UNLP se contraponen con datos simi- ra, se puede observar cómo la articulación rea-
lares relevados a nivel nacional que enfatizan lizada por lxs autores de los distintos capítulos
en los consumos culturales de lxs jóvenes, y a en torno a una pregunta común, lejos de caer
partir del análisis realizado las autoras abordan en redundancias, deriva en múltiples miradas
las siguientes preguntas: ¿Lxs jóvenes universi- que se complementan y enriquecen entre sí.
tarixs platenses tienen una cultura estudiantil De esta manera, se analiza el involucramien-
distintiva del resto de lxs jóvenes o bien parti- to político de lxs estudiantes en la Universi-

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dad durante los últimos años, discutiendo con Referencias bibliográficas


el imaginario que sitúa a la participación estu- • Bourdieu, Pierre y Wacquant, Löic (1997).
diantil desde un lugar estático o sacralizado, e Respuestas por una Antropología Reflexiva, México:
invitando a pensar la misma desde su comple- Grijalbo.
jidad, al desentrañar las prácticas y los sentidos • Jay, Marín (2009). Cantos de experiencia.
que comúnmente se le atribuyen. Siendo que Variaciones modernas sobre un tema universal,
gran parte de quienes habitamos la Universi- Buenos Aires: Paidós
dad pública coincidimos en que son necesarias • Lave, Jean y Wenger, Etienne (1991). Situated
transformaciones que actualicen sus sentidos, learning. Legitimate peripheral participation.
y teniendo en cuenta el rol que lxs estudiantes Cambridge: Cambridge University Press.
ocupan particularmente en la vida política de
las universidades en nuestro país, profundizar
en las configuraciones propias de la experien-
cia estudiantil actual constituye un aporte fun-
damental para avanzar en este desafío.

Agustina Luques
Becaria CONICET, IdIHCS-UNLP

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Las Libertades que progresistas, con una fuerte vocación de democra-


faltan. Dimensiones tización, dirá Rinesi, y, por el otro,  la declaración
latinoamericanas y de la Conferencia Regional de Educación Superior
legados democráticos realizada en 2008, que determinó a la educación
superior como bien público y derecho humano.
de la Reforma
El libro compila 15 artículos, organizados
Universitaria de 1918
en 5 apartados temáticos y un epílogo, fruto de
Rinesi, Eduardo; Peluso, Natalia una investigación llevada adelante entre inves-
y Ríos, Leticia (Comp.). tigadores e investigadoras de Argentina, Brasil
Los polvorines,  Ediciones y Paraguay, en el marco de dos redes interuni-
Universidad General Sarmiento, versitarias internacionales. Una de las redes,
2018, 349 pp. llamada “Las dimensiones latinoamericanas de
la Reforma y sus impactos en los sistemas de
la región”, estuvo dirigida por Eduardo Rine-
si y reunió equipos de la Universidad General
Sarmiento (UNGS), la Universidad Nacional de
Córdoba (UNC), la Universidad de Buenos Ai-
res (UBA), la Universidad Nacional Autónoma
de México y la Universidad de la República del
Uruguay. La otra Red, denominada “Estudios
Interdisciplinarios sobre Democracia y Uni-
Este libro, escrito al calor del centenario de la versidad en América Latina”, estuvo bajo la Di-
Reforma Universitaria de 1918, tiene como ob- rección de Diego Conno y reunió esfuerzos de
jetivo, ni más ni menos, que emprender el si- equipos de trabajo de la Universidad Nacional
nuoso camino de reinterpretar las herencias y Arturo Jauretche, la Universidad General Sar-
legados de aquella gesta. Tarea emprendida en miento (UNGS), la Universidad Nacional de Cór-
un año en que no faltaron, tal como Eduardo doba (UNC) y la Universidad Nacional de Goiás
Rinesi mismo señala en el libro, abundantes in- de Brasil. Cabe destacar la enorme importancia
tervenciones conmemorativas. que reviste el hecho de que las investigaciones
Sin embargo, son las claves en que tal tarea sean producto de un esfuerzo de cooperación
interpretativa se realiza lo que lo distingue. El li- regional que tiende puentes entre universida-
bro se propone trabajar en dos dimensiones de des de distintos países de América Latina, en
análisis: la “dimensión latinoamericana” y los “le- momentos donde se promueve la política de
gados democráticos”; a la vez que realiza un inten- “salir al mundo” como inserción alineada y su-
to por tender puentes entre tal hecho histórico y bordinada a los países desarrollados del norte,
sus legados, y los procesos políticos que se suce- particularmente con los Estados Unidos; deses-
dieron en América Latina con el cambio de ciclo. timando las lógicas de integración regional de
Por un lado, la emergencia de una serie de gobier- América Latina o con eje sur-sur (García Delga-
nos en la Región, que podemos denominar como do y Gradin, 2017)

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El primer apartado se titula “Tiempos de gentes llegan a un punto de encuentro: uno de


rara felicidad” y comienza con la siguiente re- los principales legados de la Reforma del 18 fue
flexión de Diego Tatián: “La pregunta por el la búsqueda de nuevas formas de democratiza-
gran legado reformista (...) se vuelve una tarea ción donde el “afuera” aparece como posibilita-
por supuesto intelectual (...) pero también una dor de la democratización de la vida “interna”.
tarea política en un momento de contrarrefor- El segundo apartado denominado “Ecos la-
ma como el que transitamos” (p.37). Momen- tinoamericanos de la Reforma” aglutina 3 artí-
tos de contrarreforma, afirma el autor, en los culos en los cuales se analiza otro de los legados
cuales se desmantela la educación pública y la fundamentales de la Reforma: el latinoamerica-
educación superior y en donde, entonces, recu- nismo. Natalia Peluso inaugura esta sección con
perar el legado de la Reforma del 18 es impedir un artículo en el cual retoma a Adriana Puiggrós
la malversación de lo público. cuando señala a la Reforma del 18 como el Pri-
Ante ese llamado político a impedir la mal- mer Discurso Pedagógico Latinoamericano. Asi-
versación de lo público es que los autores y au- mismo, esta autora destaca que el Manifiesto Li-
toras del libro responden señalando cuáles son minar marca un destino común de los países de
las tareas del actual momento político en rela- América Latina e identifica la lucha antimperia-
ción a la educación superior y su defensa, e in- lista como causa común. Así, figuras como Jo-
dagan en los hechos del 18 para hallar huellas sé Carlos Mariátegui, Julio Antonio Mella, Fidel
por las cuales des-andar las respuestas y echar a Castro, entre otros, son reconocidas en su ins-
andar algunas preguntas nuevas: ¿Qué significa cripción dentro del legado inaugurado por los
la autonomía universitaria hoy? ¿Frente a quie- estudiantes que protagonizaron los hechos del
nes necesita autonomía la Universidad? Cómo 18. Por su parte, Hugo Casanova Cardiel y Agus-
pensamos hoy la democracia en las institucio- tín Cano Menoni señalan las redes que se tejen
nes universitarias? ¿Qué es la libertad? ¿Qué sig- entre los sucesos en Argentina y en México, don-
nifica hoy la libertad de cátedra en tiempos de de aparece la Revolución de 1910, en este últi-
derecho a la educación superior? ¿El único enfo- mo país, tensando la trama que dará lugar a la
que con el cual podemos abordar las problemáti- creación de la Universidad Nacional de México,
cas de la inclusión y la calidad es el dicotómico? heredera del pensamiento autonomista. Final-
A lo largo de los artículos de este aparta- mente, Antonio Romano cierra este apartado
do se sostiene esta perspectiva de reinterpreta- analizando el exilio en Uruguay del antropólo-
ción de la herencia y los legados de la Reforma go brasileño Darcy Ribeiro. En su artículo el au-
del 18, para pensar nuevas preguntas y ensa- tor halla una convergencia entre dos procesos
yar respuestas a nuestro presente. Así las auto- de descubrimiento de la identidad latinoameri-
ras Carolina Rusca, Lidia Mercedes Rodríguez cana: el protagonizado por Ribeiro en ocasión
y Daniela Morán se centran, respectivamente, de su exilio en Uruguay, debido a la imposición
en tres dispositivos para realizar tal ejercicio de la Dictadura Militar en Brasil, y el de Uruguay
interpretativo: El Diario “La Gaceta Universi- mismo al tomar conciencia de su condición de
taria”, la Extensión universitaria y la Radio de país periférico en el contexto de una economía
la Universidad de La Plata. Por caminos diver- controlada por los países centrales.

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El tercer apartado, “Reformismo y Pero- logación entre modelo reformista y modelo demo-
nismo”, engloba 3 artículos donde se aborda crático de universidad. Esto supone, para el au-
un polémico debate acerca de los encuentros y tor, que otras tradiciones como el peronismo
desencuentros entre el movimiento reformista no formaran parte de la tradición democrática
y el peronismo. Guillermo Vázquez se centra de las universidades. Así, este modelo reformis-
en el concepto de autonomía y en las apropia- ta de la Universidad, afirma Dércoli, se redujo
ciones que realizan distintas vertientes políti- a la autonomía y al co-gobierno como produc-
cas de la figura de Deodoro Roca. Respecto de to una determinada apropiación, en clave libe-
la autonomía, señala los diferentes significa- ral, por parte de los reformistas del legado de
dos que adoptó en distintos momentos políti- la Reforma. Dicha apropiación supuso, para el
cos arribando con el peronismo a adquirir  un autor, una interpretación determinada, como
carácter negativo, es decir, como libertad ne- todas, de los hechos pero que, a la vez, recupe-
gativa frente al Poder Ejecutivo. Siguiendo el ró solo algunas de las banderas, dejando en el
mismo hilo de pensamiento, Julián Dércoli se- camino otras como: el latinoamericanismo, el
ñala que el mito sobre el cual se construyó la antimperialismo y la función social de la Uni-
idea de universidad democrática es la homo- versidad. Cerrando el apartado, Leticia Caroli-

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na Ríos analiza los legados de la Reforma del 18 Cabe destacar que todos los autores y auto-
–democratización, participación juvenil y com- ras del libro se afirman en el sentido político,
promiso social universitario– en los discursos como asevera Tatián, de la herencia reformista
de Cristina Fernández concluyendo que en el en tanto clave para disputar la orientación de
kirchnerismo hubo una búsqueda de supera- las políticas educativas y universitarias actua-
ción de la dicotomía reformismo/peronismo. les. Herencia constituida por las banderas de la
El cuarto apartado, integrado por un solo democracia, la participación estudiantil, la fun-
artículo, se denomina “Entre Córdoba y París”. ción social, el latinoamericanismo, el antimpe-
En este, las autoras Jésica Rojas y Cintia Cór- rialismo, y que se ve reactualizada por los desa-
doba trazan una línea de continuidad entre la fíos que plantea este siglo XXI de concebir a la
Reforma del 18 y el Mayo Francés de 1968. Lí- educación superior como derecho humano. A
nea de continuidad signada por la búsqueda ese gran desafío se le suman, agregamos desde
por tomar facultades en tanto traducción sim- los colectivos de mujeres y feministas, los nue-
bólica del tomar la palabra. Esto es, en la toma de vos retos que trajeron aparejados la marea vio-
la palabra hay una búsqueda por el pensar por sí leta y verde en las universidades. Retos asocia-
mismo, por asumir, a la vez, el pensar y el decidir, dos a la crítica del conocimiento androcéntrico y
y por transformar problemáticas comunes en heteronormativo, a las prácticas machistas que
cuestiones públicas. imperan en las relaciones entre estudiantes y
Finalmente, el quinto apartado llamado docentes e, incluso, entre colegas, a la división
“La Universidad como derecho” agrupa 4 artí- sexual del trabajo al interior de las cátedras, a
culos escritos por Mauro Benente, Anabella Lu- la reproducción de estereotipos de géneros, a la
cardi, Sebastián Torres, Paula Hunziker y Sofía invisibilización de las identidades disidentes, así
Teszza y, de yapa, el Epílogo llamado “Demo- como la desvalorización del cuerpo y el eros co-
cracia, universidad y América Latina” a cargo mo motores de conocimiento.
de Diego Conno. Estos trabajos giran en torno
a las significaciones que adquiere el derecho a
la universidad en el siglo XXI y a las maneras en María Luz Prados
que se reactualiza el debate acerca de la auto- Instituto Rosario de Investigaciones en Ciencias
nomía, la democracia y la libertad en tiempos de la Educación (IRICE) – CONICET/UNR.
de avanzada de la mercantilización de la edu-
cación y de retroceso de derechos de la mano
de la implementación de políticas neolibera-
les en la región y en el mundo. Así, las autoras
y autores se preguntan ¿Es el derecho a la uni-
versidad un derecho al acceso de otros y otras Referencias
antes ausentes? ¿Es simplemente el derecho • García Delgado, D y Gradin, A. (2017).
“Neoliberalismo tardío: Entre la hegemonía y la
al conocimiento que se produce en la Univer-
inviabilidad. El cambio de ciclo en la Argentina”.
sidad? o ¿La Universidad debería dejarse inter- En García Delgado, D y Gradin, A. (Comp.)
pelar por otros saberes? ¿Esta apropiación de (2017). Neoliberalismo Tardío. Teoría y Praxis. Bs. As.,
saberes debería ser individual? Argentina: Flacso.

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Universidad y Nación: a partir de la siguiente idea: la universidad Ar-


asignaturas pendientes gentina forma parte del entramado institucio-
nal y cultural de la dependencia. De esta forma,
Villanueva, E. (2019). Villanueva ordena y clarifica los nudos proble-
Florencio Varela: Universidad máticos de la política universitaria y de sus de-
Nacional Arturo Jauretche. 290 págs. safíos a escala nacional y regional. Siguiendo
esta premisa, el libro inicia un recorrido, que
como no puede ser de otro modo, se remonta
a 400 años atrás a Córdoba y concluye con el
proceso de creación de universidades durante
el kirchnerismo. Este último proceso da pie a
una pregunta central: ¿nuevas universidades,
viejos problemas? ella sobrevolará todo el se-
gundo apartado, en el cual nuestro autor se in-
¿Acaso existen relaciones simples? tal vez nin- terroga sobre la persistencia de problemas de
guna lo sea, pero sin dudas el vínculo entre larga data en el sistema universitario. Allí abor-
Universidad y Nación estuvo y está marcado da cuestiones como la falta de articulación al
por tensiones, desencuentros, desavenencias. interior del propio sistema de educación su-
Ernesto Villanueva forma parte de una gene- perior y con la Escuela Media; él sostiene que,
ración que intentó e intenta dar un cauce posi- a pesar de que parecen estructurales, estos se
ble a aquella relación compleja, proponiéndole encuentran relacionados también con anqui-
mojones alternativos. Digamos, y esto a riesgo losadas tradiciones y formas de habitar la uni-
de sobreinterpretar, que parte de aquel pro- versidad. Nuestro autor encuentra parte de la
yecto colectivo aparece en este libro, un pro- explicación de estos problemas en la falta de
yecto que se propone politizar la universidad planificación, en el fraccionamiento, en el ais-
y sus problemas, sin reducirla a un epifenóme- lamiento como cultura institucional. La ne-
no, ni quitarle especificidad como institución cesidad de una mayor planificación tiene un
formadora, y a la vez atravesada, por la cultura. lugar central en la propuesta explicativa del li-
Es esta una de las posibles claves de lectura de bro; concretamente, aquella vuelve a aparecer
las nueve secciones que conforman este libro. cuando él aborda el tema de la investigación y
Nueve secciones que reúnen artículos, reflexio- la innovación en las universidades. Aparece allí
nes, polémicas, semblanzas, a fin de cuentas di- la pregunta por la planificación pero a través de
versos tipos de registros que a lo largo de una una cuestión puntual: ¿Quién fija las priorida-
vida tienen un objetivo: pensar la universidad des en materia de investigación? Retoma así la
en función de una sociedad anhelada y en ese temática que a fines de los ´60 ocupó a Varsavs-
proceso transformarlas. ky, quien, mediante el concepto de colonialismo
Entonces, empecemos, si nuestra propues- científico, afirmó que tras la supuesta “libertad”
ta de lectura fuera válida, afirmaríamos que la en la elección de temas de investigación y de-
diversidad de registros y de temas se ordenan sarrollo, no había más que seguidismo a impo-

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siciones de los centros hegemónicos; de forma corporaciones que actualmente hegemonizan


tal, que la centralidad de una política científica las disciplinas. Villanueva retoma esta dispu-
soberana pasa por la independencia para fijar ta cuando aborda la problemática del asegura-
prioridades acordes a las demandas de una so- miento de la calidad, y propone reconvertir los
ciedad que pelea por su soberanía. Como bien sistemas de acreditación en herramientas que
destaca Villanueva, aquel colonialismo cientí- permitan complejizar el concepto de calidad, no
fico podemos verlo hoy en la ausencia de una sólo en el sentido de ruptura del monopolio de
política de transferencia y patentamiento. Tan- corporaciones, sino también en el de integrar
to la falta de planificación, como la escasa inte- al proceso a diversos actores, sin ir más lejos, al
gración, tienen como resultado sistemas cuyo territorio, a sectores de la producción y el tra-
objetivo es reproducirse en sí. Queda así plan- bajo, entre otros. Por este camino convierte al
teada la crítica, pero también una propuesta: la “afuera” en sujeto activo de legitimación de los
necesidad de buscar e inventar sentidos y fines procesos de aseguramiento de la calidad. Inclu-
para estos sistemas, a partir de estrechar vín- so, sostiene que el desarrollo de la acreditación
culos con la sociedad, con el Estado, teniendo podría servir también para facilitar una mayor
siempre presente la necesidad de un programa integración regional. Este tema le preocupa y lo
cultural corrido de los ejes del consumismo y la ubica como uno de los principales desafíos de la
diferenciación social, recuperando, entonces, Educación Superior en América Latina; según él,
las ideas de comunidad y solidaridad. los frenos a la integración se explican en algún
Estos últimos planteos aparecen con fuer- caso por las inercias aislacionistas, pero central-
za en el momento que el autor profundiza sus mente por la “encandilación” que producen los
análisis en torno a las experiencias de las nue- países centrales en los países colonizados, cuyo
vas universidades, en particular de la Universi- resultado es que estos orientan toda su actividad
dad Nacional Arturo Jauretche. Otra idea fuerza, de internacionalización siguiendo una lógica de
en ese análisis, es la de cuestionar la asimilación prestigio y no desde la perspectiva de la integra-
del concepto de calidad educativa al de minorías ción a partir de problemas comunes.
y al de restricción. Este será el punto de partida Recapitulando, si la cultura nace del en-
para plantear un desafío para el sistema: elabo- trecruzamiento entre experiencia e institucio-
rar un concepto de calidad que no esté reñido nes y siendo la universidad una institución que
con el de masividad. Nuestro autor sostiene que “produce” cultura, que modela experiencias,
este es uno de los desafíos más importantes pa- que construye subjetividades, hay que pensar a
ra el sistema, ya que hoy existen un conjunto de la universidad y su transformación como parte
acuerdos extendidos en temas otrora conflicti- de ese drama argentino y latinoamericano, el
vos, tales como la cuestión de la función social o drama de la dependencia económica, cultural,
de la autonomía universitaria; aún así sobre la tecnológica, política, pedagógica. Esta premisa
calidad faltan discusiones y sobre todo consen- de nuestro autor es tributaria de intelectuales
sos que no reproduzcan la doctrina de la merito- como Jauretche, Hernández Arregui y Rodolfo
cracia, ni que tampoco afirmen una idea de ca- Puiggrós, a quienes él revisita más con la inten-
lidad que sea la de reproducir los patrones de la ción de recuperar la actualidad de sus planteos,

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que con lo vocación de reducir nuestro presen- go, anuda pasado y presente, porque es con una
te a una repetición de aquel pasado. Ya apare- mirada histórica de la forma en la que se puede
ce en aquellos autores la particularidad de pen- huir de esencialismos y propuestas dogmáticas.
sar la universidad en esa ambigüedad, entre la De esta manera, por ejemplo, el problema de la
universidad determinada y la universidad que falta de planificación se nos presenta como un
transforma, entre la universidad colonizada y tema complejo, no sólo resoluble en el campo
la universidad para la liberación; revisitar sus de la mejora de dispositivos institucionales, sino
planteos es entonces necesario para recuperar además como herencia de tradiciones constituti-
esa ambigüedad que se manifiestan en los pro- vas de la propia mirada que sobre la universidad
blemas de la universidad, problemas que se re- tienen los universitarios. En este sentido, Univer-
piten pero que no son los mismos y que nece- sidad y Nación: asignaturas pendientes es un aporte
sitan de la creatividad, no sólo de quienes la sustancial para el estudio, la comprensión y la
habitan, para el planteo de otros horizontes. transformación de nuestras universidades, des-
Para concluir, como decíamos al comienzo, de una perspectiva no autocentrada sino con el
la apuesta por abordar problemas específicos de eje puesto en la relación de qué universidad que-
un campo sin escindirlos de una dimensión polí- remos para la sociedad que anhelamos.
tica e histórica, es para nosotros uno de los ma-
yores atractivos de la mirada de nuestro autor.
Una mirada que, como él sostiene en el prólo- Por Julián Dércoli

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Ilustraciones
Federico Joselevich Puiggrós*

* Artista tecnológico, programador y docente


en distintas carreras de Arte y Tecnología
en las Universidades de La Plata, Quilmes
y Buenos Aires.

Las ilustraciones que aparecen en el número 18 traciones animadas del Manifiesto Liminar y
de Pensamiento Universitario tienen un doble de fragmentos de los textos publicados en este
juego. En homenaje a la Reforma Universitaria mismo número. Las versiones estáticas de las
del ’18, como a la primera publicación de Pen- ilustraciones que aparecen tanto en el PDF co-
samiento Universitario en formato web, Fede- mo en la versión impresa, son algunos extrac-
rico Joselevich Puiggrós desarrolló una serie de tos de las interactivas. Estas especies de poesías
animaciones que juegan con la idea de la letra, digitales, hacen también un homenaje particu-
la palabra, la frase, como elemento estético. En lar a la poesía concreta de los años '30s.
los artículos que comprenden la versión web de
Pensamiento Universitario, se pueden ver ilus- Puden ver su trabajo en http://www.ludic.cc/

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www.pensamientouniversitario.com.ar

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