Sie sind auf Seite 1von 19

CONFERENCIA DE LAS NACIONES UNIDAS SOBRE COMERCIO Y DESARROLLO

INTEGRACIÓN REGIONAL EN AMÉRICA


LATINA: DESAFÍOS Y OPORTUNIDADES
MONOGRAFÍA DE LA RED DEL INSTITUTO VIRTUAL DE LA UNCTAD

NUEVA YORK Y GINEBRA, 2010


artículo 4
Modelos alternativos para la
integración sudamericana 54

Por Carlos Aguiar de Medeiros


Profesor Asociado, Instituto de Economía
Universidad Federal de Río de Janeiro – IE/UFRJ, Brasil
carlosaguiarde@gmail.com
4

artículo
ExECUTIVE SUMMARy

Alternative models for South


American integration

With the advent of the new millennium, initiati- truments) is exercised by the region's strongest
ves aiming at establishing an integrated econo- economy, this kind of integration is very difficult
mic area in South America, such as the proposal to achieve.
of Venezuela to join MERCOSUR, the creation of
the Union of South American Nations (UNASUR) Section 2 briefly reviews several historical expe-
and the Bolivarian Alternative for the Americas riences of regionalization in Europe, Asia and
(ALBA), have gained increasing political and eco- North America in light of the integration models
nomic importance. As opposed to the US and the introduced in Section 1. This review sets the stage
neoliberal model of regional integration exempli- for the discussion of the recent experience of
fied by NAFTA, these South American initiatives South American integration.
aim to create an integrated region which would
increase the bargaining power of each country in In this context, Section 3 focuses in particular
negotiations with industrialized nations, and en- on MERCOSUR, currently the most advanced in-
hance social and economic cohesion in the region. tegration initiative in the region, and UNASUR,
However, the economic and political structures an ambitious project aimed at creating the most
that are shaping South American integration comprehensive South American bloc. The author
are not necessarily coherent with their original suggests that, after the prevailing neoliberal
geopolitical and social goals. The emphasis on consensus in the 1990s, a number of new propo-
free trade, the predominance of Brazil and its sitions have recently gained strength advocating
growing intra-regional trade surplus, as well as integration that is closer to the progressive mo-
wide regional disparities, weaken the construc- del described in Section 1.
tion of an integrated economic area.
The recent global financial crisis hit South Ame-
This paper critically analyzes the problems and rican countries in different ways. The collapse of
future perspectives of integration in Latin Ame- prices of mineral commodities, the deterioration
rica in light of the history of the region and in the of regional terms of trade and the economic sta-
context of the current political and economic de- gnation in developed countries – main export
bate on regional integration. markets for the region – strongly affected the
macroeconomic performance and exports of
Section 1 discusses the different models of regio- South American countries, as well as the trade
nal integration, highlighting their geopolitical, within the region. Against this background, some
trade, macroeconomic and fairness dimensions. countries have introduced protective measures
According to the author, in a neoliberal model, to safeguard their current account balances (Ar-
regional integration is shaped by unconditional gentina), while others have strengthened public
free trade agreements as the means to enhance control of mineral resources and gas (Bolivia). On
economic specialization as per static comparati- the other hand, Brazil, the region's largest econo-
ve advantages (i.e. to maximize the benefits from my and the most important Latin American actor
free movement of capital and goods across natio- in multilateral fora, is still defending free trade
nal frontiers) which require a growing macroeco- and further liberalization.
nomic coordination in monetary and fiscal policy.
In a progressive model, on the other hand, regio- Section 4 concludes by emphasizing how, in this
nalization is a process whereby a larger internal context, the challenge faced by UNASUR and
market creates new industries and leads to a MERCOSUR is to accommodate a growing (and
type of specialization that aims at developing inevitable) demand for national policy space, wi-
backward regions, and increasing convergence thout giving up the idea to create a more articu-
and social cohesion within the integrated econo- lated regional economic and political bloc based
mic space. However, unless a strong macroecono- on cooperation, economic opportunities and so-
mic leadership (through trade and financial ins- cial cohesion.

83
4 Modelos alternativos para la integración sudamericana
artículo

1 Introducción económicos y sociales incluidos en los procesos


de integración, es útil distinguir entre dos posi-
Con el inicio del nuevo milenio, las iniciativas que bles caminos para alcanzar la integración regio-
promueven la integración en Sudamérica se han nal. Estas dos alternativas caracterizan, de una
multiplicado. La propuesta de integración de Ve- manera sólo aproximada e imprecisa, a muchos
nezuela al MERCOSUR, la creación de la UNASUR procesos en la economía global. En primer lugar,
y la ALBA han alcanzado una creciente impor- el que aquí se denomina modelo neoliberal de
tancia política y económica. Estas iniciativas de integración pretende conseguir la integración de
integración regional defienden propuestas que espacios económicos por medio del comercio li-
difieren de las implementadas por los Estados bre. En segundo término, el que aquí se califica de
Unidos en Norte América, en América Central y modelo progresivo aspira a construir, por medio
el Caribe. También difieren de las que se han pro- de políticas comerciales estratégicas y compen-
puesto para todo el continente (el Área de Libre satorias, un espacio económico y social ampliado
Comercio de las Américas) así como de los acuer- que permita incrementar el poder económico de
dos bilaterales de libre comercio que Estados las economías involucradas.55
Unidos han firmado con países de la región como
Chile, Colombia, Perú y del Caribe. Las iniciativas En ocasiones estos dos caminos se asocian por un
de integración sudamericanas tienden a crear lado al predominio de intereses económicos, por
una región integrada que posibilite un mayor el otro a intereses políticos. La literatura sobre los
poder de negociación para los países involucra- acuerdos regionales de comercio hace de modo
dos en negociaciones con el mundo desarrollado, recurrente una distinción entre la “regionaliza-
y ofrezca la oportunidad de alcanzar un mayor ción” considerada como un proceso impulsado
nivel de cohesión social y económica. por el mercado (normalmente asociado a la expe-
riencia del Sudeste Asiático), y el “regionalismo”,
Sin embargo, a pesar de la intención de definir visto como el proceso de integración capitaneado
objetivos sociales y económicos centrales, las es- por instituciones políticas (típicamente asociado
tructuras económicas y políticas que dan forma a los ejemplos de la Unión Europea y el Mercado
a la integración en la región no son necesaria- Común del Sur). Esta distinción puede volverse
mente coherentes con sus objetivos sociales y un poco problemática si se asocia a la regiona-
geopolíticos. El énfasis en el libre comercio, el lización una mayor espontaneidad (siguiendo el
desajuste entre el papel predominante de Bra- orden natural), y al regionalismo un mayor nivel
sil y sus iniciativas, así como su creciente saldo de intervención estatal. Por ejemplo, el acuerdo
comercial positivo en el comercio intrarregional, de libre comercio del NAFTA no fue espontáneo,
las asimetrías entre los países involucrados, y la sino impulsado por el gobierno de los Estados
fragilidad de las iniciativas sociales, constituyen Unidos. Del mismo modo, la regionalización que
un freno para la construcción de un área econó- ha tenido lugar en el Asia del Este no fue tam-
micamente integrada, a menos que estos obstá- poco espontánea, sino que fue parte de decisio-
culos sean superados. nes de orden geopolítico y económico tomadas
por los gobiernos de Estados Unidos, Japón y
Con el objetivo de definir y profundizar esta pro- China. Sin embargo, esta distinción muestra de
posición, el presente trabajo se divide en tres modo incontestable que las fuerzas económicas
secciones. En la primera sección se presentan los centrípetas son más fuertes en algunas regiones
diferentes modelos de integración regional, resal- que en otras. Esto último no se refiere exclusiva-
tando sus dimensiones geopolíticas, comerciales, mente a los costos de transporte o a la existencia,
macroeconómicas y de equidad y justicia. En la o no, de complementariedades que surgen del
segunda sección se presentan algunas de las ex- proceso de internacionalización de las firmas y
periencias históricas de regionalización. La tercera de las estructuras económicas, sino al liderazgo
sección se centrará en las iniciativas de integración macroeconómico y político ejercido por la o las
más recientes. Por último se presentarán algunos economías de mayor tamaño.
comentarios finales.
En la última década, la apertura comercial y finan-
ciera, el final de la Guerra Fría, la desintegración de
2 Dos caminos para la integración la Unión Soviética, la apertura de China, entre otros
regional fenómenos, han llevado a una disociación entre el
espacio económico nacional y la escala económica
La integración regional significa la construcción de operaciones, dando lugar a nuevas estrategias
de un poder socio-espacial que trasciende los por parte de los Estados y las empresas.56 Conside-
límites políticos del territorio de una nación. rando el rol primordial que tienen los Estados Uni-
Teniendo en cuenta los aspectos geopolíticos, dos en el escenario económico y político mundial,

84
Modelos alternativos para la integración sudamericana

artículo
los procesos de regionalización han sido guiados corporan además del comercio libre de bienes, la
por intereses económicos y son el resultado de ini- libre movilidad de factores de producción) y las
ciativas directas de los Estados Unidos. uniones económicas y monetarias (que además
implican la adopción de reglas macroeconómicas
Esto constituye en esencia un nexo subyacente comunes) así como los acuerdos monetarios, son
entre el NAFTA, la proliferación de acuerdos de construcciones políticas dirigidas hacia proyec-
libre comercio, y la “liberalización competitiva” tos políticos más amplios, o son asimeno una
entre regiones y países, más allá de su proximi- reacción frente a otros proyectos políticos. Estos
dad geográfica (UNCTAD, 2007). Este proceso ha proyectos más amplios tienden a aumentar el
sido acentuado por la Unión Europea, orientada poder de negociación que las naciones involucra-
hacia la integración neoliberal y por la desunión das poseen vis-à-vis otras naciones o regiones, así
del viejo bloque de Europa Oriental (Council for como también trascienden los objetivos comer-
Mutual Economic Assistance, COMECON) y su ac- ciales y económicos derivados de estrategias de
ceso condicionado a la Unión Europea. poder de naciones individuales. En la medida en
que estos acuerdos proveen de nuevas oportu-
Lo que distingue a estos ALCs es la inclusión en nidades para las economías nacionales involu-
la negociación de temas relacionados con las cradas, y permiten alcanzar una mayor cohesión
políticas de inversión, propiedad intelectual, social dentro de un ámbito supranacional, han
compras públicas (temas sobre los cuales asumido históricamente una perspectiva pro-
es más difícil obtener un consenso en foros gresiva, pudiendo constituirse en la base para los
multilaterales de negociación), a cambio de un tiempos que se avecinan en Sudamérica.59
mayor acceso a los vastos mercados de Estados
Unidos y la Unión Europea. A pesar de la postura Áreas de Libre Comercio y Comercio Estratégico
crítica de la Organización Mundial de Comercio
respecto a la progresiva disolución de la cláusula Las dos diferentes formas de integración arriba
de nación más favorecida, y en consecuencia referidas tienen sus fundamentos teóricos en
la proliferación de ALCs, el significado clave de concepciones diferentes de la manera en que el
estos acuerdos es exactamente el mismo que comercio mundial funciona y afecta el desarrollo
defiende generalmente la OMC. Como indica un económico. Para la teoría neoclásica de las ven-
informe de la UNCTAD, la base de los acuerdos tajas comparadas, el libre comercio es la mejor
es la cláusula de “reciprocidad”, que nivela las política doméstica para incrementar el ingreso
negociaciones, y tiene diferentes consecuencias nacional y el bienestar. Esta proposición se aplica
para actores que se encuentran en diferentes a un país individual, independientemente de las
etapas de desarrollo.57 Debido al colapso de las políticas comerciales aplicadas por los otros paí-
negociaciones en el marco de la Ronda de Doha, y ses. La falta de realismo de los supuestos de pleno
al contragolpe del neoliberalismo de los noventa, empleo, substitución de factores, y rendimientos
las iniciativas de libre comercio se canalizan de constantes a escala, garantiza llegar de forma ló-
manera especial a través de ALCs. gica a este resultado (Maneschi, 1998).

Esta es la lógica detrás de la “liberalización compe- Partiendo de este análisis, Viner (1950), en un
titiva” que los Estados Unidos, después del colapso muy influyente trabajo, considera que las unio-
de la Ronda de Doha en 2003, han promovido en nes aduaneras (libre comercio entre países de
sus negociaciones con economías individuales y una región y aranceles comunes hacia el resto del
también a nivel regional, estableciendo alianzas mundo) pueden originar “desviación de comer-
y posibilitando acuerdos en función de intereses cio” y una disminución del bienestar agregado.
políticos y económicos.58 Estos acuerdos tras- Siguiendo esta tradición, en años más recientes,
cienden la esfera comercial, e incluyen aspectos es posible observar una proliferación de literatu-
tales como los derechos de propiedad intelectual ra crítica de los acuerdos comerciales que está a
y compras públicas. favor del libre comercio multilateral como meca-
nismo para alcanzar una mayor eficiencia en la
A pesar de que hoy predomina la visión neolibe- asignación de los recursos y un mayor bienestar.
ral de integración regional, hay también reali- La proliferación de acuerdos regionales de comer-
dades y fuerzas alternativas que presionan para cio, tales como uniones aduaneras, es percibida
una integración regional con objetivos diferen- como generadora de desviación de comercio y
tes. Los procesos de integración no sólo compren- promotora de actividades rentistas. “Nivelar el
den elementos económicos o sólo se justifican campo de juego” es, entonces, considerado como
en base a ellos. La regionalización, y en particular la mejor política, con independencia del nivel de
sus formas más profundas tales como las unio- desarrollo en que un país se encuentre.60
nes aduaneras, los mercados comunes (que in-

85
4 Modelos alternativos para la integración sudamericana
artículo

En este sentido, sólo si un acuerdo preferencial diversificación de la producción es limitado. Por


“crea comercio” y reproduce las condiciones de lo tanto, la búsqueda de una regionalización di-
“comercio libre” puede ser considerado como una rigida hacia el comercio estratégico es parte de
estrategia de second best y efectivamente contri- la estrategia global de los países a favor de sus
buir al desarrollo económico. Entonces, siguiendo industrias, no quedando limitada sólo al espacio
esta línea argumental, es posible conceptuali- nacional, sino que se sitúa dentro de un marco
zar un “regionalismo hacia el libre comercio” o que trasciende los límites territoriales. Las re-
“regionalismo abierto”, en el cual prevalece la giones menos desarrolladas dentro de un país
creación de comercio, y en el que las ganancias requieren también de una estrategia destinada
de eficiencia están aseguradas por la baja en los a reducir las diferencias con respecto a las regio-
costos debido a una especialización basada en nes más ricas. En este último caso, si bien la mo-
las ventajas comparadas. Este regionalismo que vilidad laboral y las devoluciones fiscales pueden
está orientado hacia el mercado y manejado por ayudar a compensar, por lo menos parcialmente,
las empresas, precisa de un marco institucional las desigualdades existentes, la magnitud de las
que garantice los contratos y que establezca re- diferencias supera lo que países menos desarrol-
glas comerciales favorables a la integración y a lados pueden permitirse afrontar con recursos
la estabilidad macroeconómica. Este es el tipo de propios (Kaldor, 1970; Myrdal, 1957).
regionalización neoliberal que no sólo no contra-
dice el libre comercio, sino que constituye en sí Tal como Presbisch (1959) observó cincuenta años
mismo un proceso hacia él. atrás en su análisis sobre los límites de la indus-
trialización en Latinoamérica, la regionalización
Desde una perspectiva heterodoxa de la teoría del (por ejemplo, la construcción de un área econó-
comercio, la inexistencia de mecanismos automá- mica integrada) puede ser considerada como una
ticos que lleven a la economía hacia el pleno em- opción a la política de substitución de importa-
pleo y la presencia de rendimientos crecientes a ciones, siempre y cuando facilite "el desarrollo
escala crea, en una economía global heterogénea, de exportaciones industriales hacia otros países
un modelo de especialización comercial (nacio- (de la región) a cambio de bienes provenientes
nal, subnacional, o regional) basado en ventajas desde estos últimos” (Presbisch, 1959: 476). La re-
absolutas (medida por los costos unitarios de tra- gionalización, entonces, posibilitaría una mayor
bajo) (Shaikh, 2003). Por ello es evidente que las racionalidad económica en un sentido estático
regiones, dentro de un país o entre varios países, (reducción de producción local e importación
no tienden a desarrollarse de modo convergente. desde un país de la región que produzca a me-
Por el contrario, la existencia de rendimientos cre- nor costo) y en un sentido dinámico, siempre y
cientes a escala se traduce en ventajas asociadas cuando fortalezca la diversificación exportadora
al avance tecnológico y a economías de escala que y la capacidad de los países, lo que relajaría la res-
están geográficamente localizadas y concentra- tricción impuesta por los déficits crónicos de ba-
das en actividades industriales.61 lanza de pagos y permitiría a una mayor tasa de
crecimiento. Merece destacarse que, a pesar del
De este modo, debido al principio de “causalidad substancial incremento en el precio de los pro-
acumulada”,62 países en una etapa inferior del ductos básicos, observado en tiempos recientes,
proceso de desarrollo, o regiones dentro de un la especialización en recursos naturales puede
país, pueden quedar atrapados en una especiali- ser una fuente de inestabilidad y fragilidad en un
zación desventajosa y, a menos que logren incor- mercado interno integrado e inclusivo.
porar mecanismos generadores de economías
de escala para sus industrias, no les será posible El énfasis de Prebisch en el proceso de industria-
intensificar la división del trabajo y diversificar lización revela que la existencia de una proxi-
sus estructuras productivas. Este es el motivo midad geográfica no constituye, por sí sola, una
principal por el cual, desde su creación, la UNC- base económica para la regionalización. Si los
TAD promueve una modificación de la cláusula países tienen un modelo exportador basado en
de nación más favorecida, y defiende la cláusula bienes primarios, el comercio regional entre ellos
de “no reciprocidad” para los países en desarrollo, es “naturalmente” frágil; por lo tanto, la indus-
adoptando la idea de que “tratar como iguales a trialización es el mecanismo para estimular el
desiguales simplemente exacerba las desigual- comercio dentro de la región, tal y como lo sostie-
dades” (Gibbs y Ognivtsev, 2004). ne Prebisch. La inexistencia de complementarie-
dades en la estructura productiva, lo exiguo del
A pesar de que por medio del uso de subsidios y mercado regional en relación al mercado mun-
aranceles se pueden contrarrestar las eventuales dial y el diseño de la infraestructura, se traducen
pérdidas asociadas con el retraso tecnológico, su en escasas ventajas para el comercio regional. No
uso como estrategia de expansión de mercados y obstante, aún cuando la regionalización puede

86
Modelos alternativos para la integración sudamericana

artículo
ser un instrumento a favor de la industrializa- nal: una basada en el concepto de “nivelar el ter-
ción, nada garantiza que las regiones más atra- reno”, que aboga por el libre comercio; y otra que
sadas se beneficien de las ventajas de un mayor presupone la necesidad de establecer distintas
mercado interno a través de la exportación de reglas de juego para socios diferentes, y que en-
bienes industriales, las cuales pueden ser cap- fatiza el comercio estratégico.66
turadas por el país más desarrollado dentro de
la región.63 Este último elemento ha adquirido 2.1 Convergencia macroeconómica versus
nuevas dimensiones con el reciente boom del regionalismo keynesiano
comercio intra-firma, que interrumpe la cadena
de valor agregado y el desarrollo de oportunida- De manera similar a la dicotomía que se observa
des históricamente asociadas a los procesos de en el caso del comercio, hay dos concepciones
industrialización. Más aún, esta transformación vinculadas a los aspectos macroeconómicos de
muestra los límites de la industrialización expor- la integración que se desprenden de los modelos
tadora como generadora del crecimiento. Esto de integración. Por un lado, coincidiendo con el
sólo adquiere un significado estratégico cuando regionalismo del libre comercio, el objetivo de las
se encuentra enmarcado dentro de un proceso políticas macroeconómicas debe centrarse en la
conjunto de industrialización.64 estabilidad de los precios y del tipo de cambio, de
forma a inducir al sector privado a invertir según
La regionalización genera beneficios para todos las ventajas comparadas. Cuanto más pronto
los países involucrados cuando sus estructuras de se alcance la armonización y la convergencia
producción y el nivel de desarrollo son similares, macroeconómica, más rápidamente se adoptará
o cuando existen mecanismos compensadores una moneda común y un mercado único am-
de transferencia hacia los países y regiones más pliado. El elemento clave es la estabilización de
pobres. Debido a la polarización de fuerzas, la las tasas de cambio como prerrequisito para la
implementación de acuerdos de libre comercio o adopción de un sistema articulado de flotación
de uniones aduaneras tiene efectos asimétricos cambiaria y de una moneda común. En un sis-
a favor de los países/regiones más desarrollados tema de libre movilidad de capitales, el énfasis
(tal como sucede en el caso más general del libre en la convergencia recae en las políticas fiscales
comercio multilateral) a menos que se establez- (deuda pública y objetivos de déficit) y moneta-
can compensaciones que beneficien a las expor- rias (objetivos de inflación), en la flexibilización
taciones de la producción de los países/regiones del mercado laboral.
más pobres. Esto implica que “nivelar el terreno”
no representa la mejor política para los países o re- La otra perspectiva, basada en el comercio estra-
giones que se encuentran en un grado de desarro- tégico, asigna a la macroeconomía regional un
llo inferior, ya que genera “efectos regresivos” que rol diferente: la de articuladora del crecimiento.
pueden contrarrestar los “efectos propulsores”.65 Este “keynesianismo regional” depende de ele-
mentos estructurales y de la orientación de la
El argumento económico a favor de la “regio- política económica del país de mayor mercado
nalización hacia un comercio estratégico” entre doméstico. Mientras se desarrolle el comercio in-
países está, por lo tanto, basado en los siguientes trarregional, el crecimiento de los países más pe-
principios: (a) la percepción de que el comercio queños dependerá en gran medida del aumento
libre amplifica las diferencias tecnológicas entre de las importaciones del país más grande. Por
países/regiones, concentrando los beneficios del otro lado, mientras las importaciones desde fue-
avance tecnológico; (b) la regionalización puede ra de la región tiendan a aumentar con el creci-
ser considerada como una política de promoción miento económico, los países más desarrollados
industrial cuando permite la expansión del mer- deberán financiar, por medio de inversiones o dé-
cado nacional y del comercio intrarregional me- ficits comerciales, las deudas de los demás países
diante el acceso de los países involucrados a un en su relación comercial con el resto del mundo.
mayor mercado para sus productos industriales Este punto puede entenderse mejor cuando se
y favorece la especialización; (c) la regionalización observan las relaciones entre distintas regiones
requiere dedicar atención a la coordinación entre dentro de un mismo país. Contrariamente a lo
los países de una región para establecer prácticas que sucede entre los países, cuando una región
comunes, invertir en infraestructuras y, lo más “exporta” menos de lo que “importa”, ésta paga
importante, para compensar los desequilibrios menos impuestos a la unión, pero no deja por ello
intrarregionales. de recibir transferencias desde la misma, lo cual
automáticamente financia el déficit regional.67
De este modo, como se indicó respecto a los dos
modelos de integración regional, también hay Por lo tanto, cuando una economía de mayor
dos concepciones diferentes del comercio regio- tamaño, en un área económica específica, crece

87
4 Modelos alternativos para la integración sudamericana
artículo

rápidamente, pero confiere simultáneamente un estabilidad de las tasas nominales de cambio


tratamiento comercial preferencial a sus socios, evitando las devaluaciones competitivas.
esto induce, espontáneamente a través de sus im-
portaciones, un tipo de regionalización, que será El elemento clave que la cooperación subregional
más importante cuanto más complementarias necesita avanzar es el de alcanzar una tasa de
sean las estructuras productivas de los países in- cambio regional competitiva mediante un fondo
volucrados. Esta dimensión macroeconómica (la de reserva y de un sistema de préstamos recípro-
configuración de un centro regional cíclico) tiene cos. En la medida que esta política promueve las
amplia autonomía en relación a los arreglos mo- exportaciones y reduce la vulnerabilidad externa,
netarios y de tipo de cambio en el ámbito regio- puede contribuir a alcanzar una mayor estabili-
nal, y no puede ser alcanzada por intermedio de dad de las tasas de cambio nominales.69
objetivos de convergencia macroeconómica.
2.2 Polarización versus incorporación
Lo que es esencial, desde la perspectiva macroe-
conómica, es el grado en que la regionalización La regionalización puede crear efectos asimétri-
puede reducir la vulnerabilidad externa, por cos entre países, entre regiones dentro de un país,
medio del aumento de las exportaciones. Esto y entre clases sociales. Estos efectos dependen de
depende, en parte, del comportamiento del país cuáles son los objetivos centrales que persigue
“locomotora”. El corolario de esta menor vulne- el proceso de regionalización, de los mecanismos
rabilidad es la relativa estabilización del tipo no- de transferencia asi como de las transformacio-
minal de cambio, permitiendo de esta forma una nes en el mercado de trabajo. Considerando la
mayor estabilidad monetaria. Tal como lo señala desigualdad existente entre los países de una
Ocampo (2006), la demanda de una mayor coope- región, el elemento clave reside en el impacto
ración financiera regional (tanto para financiar el de la regionalización sobre el empleo, los sala-
desarrollo como para afrontar problemas de liqui- rios y el crecimiento económico. Lo que permite
dez de corto plazo) depende del grado de profun- una mayor convergencia de los países que per-
dización de la integración comercial y financiera. tenecen a una región es la existencia de políti-
cas positivas que beneficien a los países menos
Respecto a los elementos macroeconómicos, desarrollados por medio de instrumentos fisca-
es importante señalar que, en contraste con la les comunitarios. Estas mismas asimetrías pue-
moneda única – el caso extremo de otorgar la den existir entre regiones que pertenecen a un
soberanía monetaria a un organismo supra- mismo país, especialmente si los mecanismos
nacional – la introducción de mecanismos de fiscales creados para apoyar el proceso de regio-
cooperación macroeconómicos y financieros, nalización entre países limitan la utilización de
tales como un fondo regional de reservas o los medidas compensatorias entre regiones o pro-
acuerdos de créditos recíprocos entre Bancos vincias. Por otro lado, los efectos internos de la
Centrales, otorga un mayor grado de libertad a regionalización sobre la distribución del ingreso
las políticas macroeconómicas domésticas, al entre los grupos o clases sociales dependen de
mismo tiempo que aporta asistencia ante pro- los efectos que la regionalización tenga sobre
blemas de liquidez y promueve el intercambio los precios relativos, sobre el empleo, y sobre los
regional. Numerosas iniciativas entre países en diferentes grupos que componen el mercado de
desarrollo, tales como el Chian Mai entre países trabajo. Es por esto que, dependiendo de la na-
del ASEAN,68 confirman la importancia de este turaleza del proceso de regionalización y de las
tipo de arreglos para la defensa de los países en políticas macroeconómicas alternativas, la re-
desarrollo frente a ataques especulativos, y una gionalización puede estimular una mayor com-
mayor estabilidad de la moneda. Por otro lado, petencia entre los trabajadores y centrarse en la
la expansión del comercio regional utilizando las flexibilidad de salarios y estándares laborales.
monedas locales (en vez de una moneda inter- Por el contrario, también, puede permitir alcan-
nacional de reserva) es un mecanismo de vital zar mejores estándares sociales por medio de
importancia para la regionalización entre países mayores tasas de crecimiento, de una protección
que poseen monedas no convertibles a la unidad social y de políticas de cohesión.
de cuenta internacional. La cooperación macroe-
conómica regional representa un paso impor-
tante para la profundización de la integración 3 Experiencias históricas
económica, en la medida que permite reducir la de integración regional
dependencia de las economías involucradas res-
pecto a una moneda de reserva internacional y a La experiencia histórica pone de manifiesto los
las agencias multilaterales de financiación (FMI, propósitos de los distintos modelos de integra-
Banco Mundial). Permite asimismo una mayor ción a los que hemos hecho referencia en la sec-

88
Modelos alternativos para la integración sudamericana

artículo
ción anterior. Brevemente exploraremos la regio- Si Alemania se estableció históricamente a sí
nalización en tres partes del mundo: Europa, Asia misma como la fuente de crecimiento en Europa
y América del Norte. y como un ancla de la Comunidad Económica Eu-
ropea, a fines de los años setenta comenzó a ejer-
3.1 La regionalización en Europa cer una presión deflacionaria sobre Europa con la
creación del SME. Esta influencia perduró en los
El proceso de regionalización en Europa ha segui- años siguientes, durante la retracción de la eco-
do dos proyectos muy diferentes. El primero que nomía mundial, debido la estrategia neoliberal
se desarrolla en los años justo posteriores a la que condujo al establecimiento de la Unión Mo-
finalización de la Segunda Guerra Mundial está netaria Europea. El programa keynesiano expan-
guiado por un progresismo social y económico. El sivo dirigido a forjar una región socialmente in-
segundo se concretiza en un proyecto de integra- tegrada y progresiva, fue sustituido por la Unión
ción neoliberal concentrado entorno al Sistema Monetaria Europea que adoptó una plataforma
Monetario Europeo (SME), y se consolida con el diferente. Mediante una política macroeconómi-
Tratado de la Unión Europea de 1993 (el Tratado ca obsesivamente concentrada en la estabilidad
de Maastricht) (Ryner y Cafruny, 2007). Estos dos monetaria, se creó una economía de mercado
modelos resaltan la manera en que los objetivos “altamente competitiva” tal cual se establece en
estratégicos de política y de liderazgo económico el Tratado Constitucional de Europa (2004), con
regional definen los tipos de integración indu- el objetivo de atacar la denominada euro-escle-
ciendo las trayectorias nacionales (Medeiros, rosis. Este modelo neoliberal de regionalismo fue
2004). simultáneamente la consecuencia de las políti-
cas y presiones de los Estados Unidos respecto a
El proyecto original para el establecimiento del la apertura financiera, así como de intereses de
mercado europeo tenía claramente un objetivo política internos. El resultado fue una implosión
geopolítico (la formación, en Europa del oeste, de los acuerdos institucionales preexistentes.
de un bloque político alrededor de Francia y Ale-
mania occidental), un objetivo económico (la am- Con el establecimiento del SME, las monedas
pliación del mercado interno para posibilitar ga- nacionales se anclaron al marco alemán, con un
nancias de escala en las industria pesadas), y un limitado margen de maniobra. Países con ba-
objetivo socio-político (dirigido a la promoción de lanzas de pagos más frágiles (Italia, España, así
derechos sociales y políticas de empleo). como también Francia) se vieron forzados a in-
crementar sus tasas de interés y a reducir el gasto
Desde la perspectiva económica, es importante público, para mantener las paridades cambiarias
resaltar que no fueron los cálculos sobre posibles dentro de los límites permitidos por el SME. La
ganancias estáticas de libre comercio los motivos apertura financiera fue fuertemente acelerada
para el avance hacia una unión aduanera sino por intermedio de la Single European Act de 1986.
que, por el contrario, fueron razones de comercio El enfásis en la integración pasó a ser el financiero
estratégico y desarrollo nacional (Milward, 1992). y monetario, mientras ya había un alto grado de
En lugar de pasar del proteccionismo al neoli- integración productiva y comercial.
beralismo, la Europa del oeste de la posguerra
se dirigió hacia la construcción de un sistema De manera pragmática Alemania sucumbió a los
económico nacional y regional en el cual se es- intereses de sus grandes empresas y a las presio-
tablecieron aranceles y barreras no arancelarias nes de los grupos conservadores. En primer lugar,
alrededor de industrias estratégicas nacientes. siendo Alemania la economía de mayor producti-
vidad en Europa, la apreciación del marco alemán
Por otro lado, en este sistema keynesiano de Es- frente al dólar (en los años setenta, y luego a prin-
tados nacionales de bienestar (Jessop, 2002), la cipios de 1985) no causó un efecto negativo sobre
única coordinación macroeconómica regional sus exportaciones hacia el resto de los países de
fue la definida por el acuerdo de Bretton Woods, Europa, cuyas monedas estaban atadas al marco
por medio de la fijación de tasas de cambio fijas, alemán sin tener los mismos niveles de producti-
aunque ajustables, y de controles al movimiento vidad. En segundo lugar, la reacción conservadora
de capitales con objeto de aislar a las monedas frente a las presiones migratorias de trabajado-
nacionales de los movimientos especulativos. res originarios de Turquía, Argelia y Grecia (que
Pero este proyecto sólo podía avanzar con el li- en realidad han promovido el milagro alemán)
derazgo económico de Alemania. Debido a su reforzó políticas generadoras de un bajo creci-
apertura comercial y al gran dinamismo de sus miento. La defensa de un área monetaria que ha
exportaciones industriales, la economía alemana obligado al resto de las monedas a permanecer
guió por medio de sus importaciones al resto de ancladas al marco alemán, la eliminación defini-
los países de la Europa occidental. tiva de las restricciones sobre los flujos de capita-

89
4 Modelos alternativos para la integración sudamericana
artículo

les, así como políticas fiscales rígidas caracterizan de programas regionales supranacionales cohe-
a la unificación europea desde Maastricht (1992). rentes y la ausencia de consenso político sobre la
Asimismo el euro, desde su creación en diciem- estrategia deseada, así como la falta de una clara
bre de 1999, adquirió un rol similar al del sistema predisposición de un país o grupo de países con
monetario basado en el oro, subordinando las po- recursos, voluntad y legitimidad para proponer y
líticas sociales y laborales a la disciplina impuesta liderar tal estrategia.
por una moneda y finanzas saludables.
Tal como observan Ryner y Cafruny (2007), la in-
Para los conservadores y neoliberales, la unión tegración económica neoliberal ha condenado a
monetaria ha sido un instrumento de integra- Europa a disminuir su crecimiento, al desempleo
ción económica y de estabilidad de precios para masivo y también a una reducción de muchos
aumentar la productividad. Su adopción fue una derechos sociales históricamente garantizados.
consecuencia de la hegemonía de una visión70 a En muchos países, tales como Alemania y Fran-
la cual parte de los sindicatos y de la socialdemo- cia, la política de “austeridad competitiva” ha
cracia de izquierda en Europa han adherido, con comprometido el contrato social implícito entre
la esperanza de una mayor unidad política en los principales grupos sociales y ha debilitado
torno a valores sociales democráticos.71 El movi- las formas tradicionales de solidaridad. Algunos
miento de Alemania tuvo otro corolario esencial países menos desarrollados, como Portugal y Es-
derivado de su estrategia de unificación interna paña, que absorbieron una alta proporción de los
posterior a la caída del Muro de Berlín de 1989. fondos de transferencias, pudieron mejorar sus
Este hecho tuvo un impacto muy importante so- sistemas de protección social. Sin embargo la rea-
bre la regionalización europea. Las transferencias lidad de los países integrantes de Europa del este
hacia Alemania del este (5 por ciento del PBI) fue- es muy diferente. Estos, con objeto de alcanzar
ron pensadas para promover la integración “des- los objetivos macroeconómicos, han tenido que
de arriba”, con prioridades totalmente diferentes mantener bajos derechos y estándares sociales,
de las que prevalecieron para el resto de Europa por lo que se ha amplificado la heterogeneidad
occidental.72 En oposión a las políticas fiscales social en Europa.
expansivas, el Bundesbank incrementó signifi-
cativamente las tasas de interés para contener 3.2 La regionalización en Asia
supuestas presiones inflacionarias originadas
por el crecimiento, lo que provocó una crisis ex- La historia de la regionalización en Asia es dis-
terna en Italia y la ruptura del SME en 1992/1993. tinta de la europea, y sus orígenes modernos
Este movimiento por parte de Alemania generó deben analizarse desde la particular configura-
preocupaciones de que el país estuviera girando ción geopolítica en la que se diseñó el Sudeste
hacia Europa del este, alejándose del proyecto de Asiático durante la posguerra, como un área de
la Europa occidental. En respuesta, el programa directa influencia de los Estados Unidos. También
de unificación monetaria fue acelerado (con el se debe considerar la posición estratégica y polí-
establecimiento del restrictivo Pacto de Estabili- tica de China, la preponderancia del dólar ame-
dad y Crecimiento en 1997), lo cual resultó en la ricano y la gran desigualdad entre las naciones
implementación del euro bajo condiciones muy en Asia. Debido a los legados políticos de la Se-
restrictivas. gunda Guerra Mundial, las históricas rivalidades
y la Guerra Fría, sólo los Estados Unidos tenían la
Desde la perspectiva geopolítica, con la desapari- legitimidad y el poder político para promover un
ción de la Unión de las Repúblicas Socialistas So- bloque económico y comercial. El establecimien-
viéticas (URSS), se extinguió también la gravita- to de una economía regional en el Sudeste Asiá-
ción de las economías de Europa del este (Polonia, tico no se basó en un proceso económicamente
Hungría, Checoslovaquia, Bulgaria) alrededor del impulsado por un poder regional como en el caso
bloque liderado por la URSS y, después de un in- de Europa.
tenso declive, estos países comenzaron a gravitar
alrededor de Alemania. El primer componente de integración económica
fue la reestructuración de la producción en Japón
Las contradicciones de la UE se derivan del hecho impulsada por las presiones mercantilistas de
de que sus gobiernos cedieron, a favor de un los Estados Unidos (Medeiros, 2004), las cuales,
Banco Central supranacional, la soberanía mo- a partir de 1985, resultaron en una gran apre-
netaria y la capacidad de fijar automáticamente ciación del yen y transformaron a Japón en un
sus tasas de interés, sin que se estableciera simul- importante inversor regional. Simultáneamente,
táneamente un organismo de igual jerarquía que el segundo componente fue la inversión y la red
pudiera financiar los desbalances nacionales. La comercial de la “Gran China”. Contrariamente a
regionalización de Europa revela la inexistencia lo que sucedió en Europa occidental, donde las

90
Modelos alternativos para la integración sudamericana

artículo
discrepancias entre los niveles de PBI total y la De manera diferente a Europa, donde los trata-
relativa similitud de ingresos per capita crearon dos y arreglos prevalecen, en Asia, el proceso de
un área comercial con una especialización hori- formalización se da por etapas para no dificultar
zontal entre industrias similares, en Asia, debido una dinámica que es lo suficientemente flexible y
a las importantes disparidades en los ingresos que se ajusta a las circunstancias que atraviesan
per capita, la orientación comercial siguió el mo- las naciones involucradas. Sin lugar a dudas, la
delo de “los gansos voladores”, potenciado por la regionalización en Asia muestra dos modelos: él
inversión extranjera directa y el comercio intra- de la Cooperación Económica del Asia y el Pacífico
firma, en el cual cada país cumplía una función (APEC), diseñado por los Estados Unidos para las
específica dentro el modelo de exportaciones economías en el Océano Pacífico, y el de la Aso-
destinadas a Asia y a los mercados occidentales ciación de Naciones del Sudeste Asiático en sus
(Medeiros, 2006). versiones ASEAN+1 (bloque formado por las na-
ciones integrantes del ASEAN más China o Japón)
Si bien durante los años setenta y ochenta este y ASEAN+3 (las naciones del Sudeste Asiático más
modelo mostraba una especialización en bienes China, Corea del Sur y Japón). A pesar de la exis-
finales, durante los noventa la especialización tencia de un área de libre comercio entre los paí-
en la producción de partes y componentes ha ses miembros del ASEAN, el proyecto regional se
dirigido un proceso de integración vertical. El caracteriza por las restricciones sobre la liberali-
gran dinamismo del comercio regional está aso- zación del comercio agrícola y el establecimiento
ciado a los cambios estructurales en los mode- de compensaciones en acuerdos bilaterales, ya
los de exportación de los países involucrados. A que de ninguna manera se prevé una coordi-
diferencia de África y de América del Sur, cuya nación macroeconómica formal como en la era
especialización está basada en la dotación de post-Maastricht en Europa.
recursos naturales, en Asia la especialización se
efectúa en las industrias donde las ventajas ob- La creciente articulación regional alcanzó una
tenidas mediante la tecnologia y el bajo costo etapa importante cuando, tras la crisis de 1997-
del trabajo posibilitan el cambio en la estructu- 98, se aprobó en el marco del ASEAN+3 la inicia-
ra de producción. Esta dinámica ha sido particu- tiva Chian Mai, con objeto de facilitar asistencia
larmente importante en el caso de la industria financiera a miembros con problemas de liqui-
informática. dez. Esto se llevó a cabo al convertir las monedas
nacionales en un pool de reservas, a través de una
Contrariamente a lo que sucedió en Europa, la for- red de swaps bilaterales operados por los Ban-
ma inicial de la regionalización en el este de Asia cos Centrales. Evidentemente, la fuerza de estos
no fue impulsada por una economía de la región. acuerdos vino dada por la participación de China,
Japón no cumplió el rol de locomotora similar Japón y Corea del Sur, con sus importantes reser-
al de Alemania Occidental en el caso de Europa; vas de dólares.75
fueron los Estados Unidos los que jugaron ese rol
por motivos económicos y políticos. Tampoco el Debido a esta dinámica geopolítica y económica,
yen adquirió la importancia que el marco alemán al menor énfasis en la integración monetaria,
ejerció dentro de la Unión Europea.73 a la alta capacidad exportadora, y a las impor-
tantes complementariedades en la producción
En tiempos más recientes, China ha asumido un de manufacturas, junto con el rol expansionista
fuerte rol de líder como motor de crecimiento re- adoptado por China, la integración regional en
gional. Más aún, debido a las conexiones con los el Sudeste Asiático ha traído aparejada un pro-
flujos de inversiones procendentes de Gran China greso económico caracterizado por el fomento de
y Japón, el crecimiento económico de China (que altas y difusas tasas de crecimiento, aún frente a
desde las crisis de Asia y de los Estados Unidos la ausencia de una preocupación explícita por la
está siendo impulsado por el gasto público y cohesión social.
las inversiones, en particular en infraestructura
enfocadas hacia el mercado interno) se ha afir- 3.3 La regionalización en el caso del NAFTA
mado como una fuente de demanda y compe-
tencia para el Sudeste Asiático. Sus importantes El Tratado de Libre Comercio del Norte estableció
excedentes comerciales con los Estados Unidos y en 1994 una integración profunda (el tratado in-
Europa se deben a la alta proporción de partes y cluye, además del comercio de bienes, los servicios
componentes fabricados en otras partes de Asia. financieros, las compras públicas, la inversión ex-
Este déficit comercial de China con muchos de los tranjera y los derechos de propiedad intelectual)
países de la región crea un fuerte estímulo para entre dos países de alto ingreso, Estados Unidos y
la conformación de un bloque regional.74 Canadá, y también México. Los objetivos de los Es-
tados Unidos eran dos: sortear el lento progreso

91
4 Modelos alternativos para la integración sudamericana
artículo

de las negociaciones multilaterales de liberaliza- resultado importante de la liberalización fue el


ción de la Ronda Uruguay del GATT; y mejorar la aumento de las importaciones de bienes agríco-
competitividad de las empresas domésticas en las desde los Estados Unidos, causando un des-
sectores intensivos en trabajo no calificado. Des- censo en la producción local de alimentos.
de el punto de vista de México, las principales ra-
zones fueron incrementar sus exportaciones de El NAFTA es un acuerdo de libre comercio sin una
manufacturas hacia el enorme mercado nortea- cláusula social, por lo tanto su impacto depende
mericano y atraer inversiones. Además de estas de sus efectos sobre el empleo, los salarios y el
motivaciones económicas también hubo otros ingreso. En México, a pesar de ciertas expectati-
objetivos de orden político. El acuerdo recibió el vas, no ha habido una convergencia con los socios
apoyo de las grandes empresas (Carranza, 2002) más ricos. Asimismo, el proceso fue acompañado
como una manera de garantizar la perdurabili- por un alto desempleo y una disminución en el
dad de las reformas de tipo neoliberal llevadas a crecimiento de los salarios y el ingreso, lo que ha
cabo en México, y también de consolidar el apoyo generado un proceso masivo de emigración ha-
de los Estados Unidos para asegurar la estabi- cia los Estados Unidos.
lidad macroeconómica. Estos objetivos fueron
importantes para fomentar una nueva estrate-
gia de acumulación diferente del modelo previo, 4 La integración regional
basado en el crecimiento dirigido por el Estado. en Sudamérica
En este nuevo modelo, el desarrollo de una pla-
taforma exportadora hacia los Estados Unidos y 4.1 Orígenes y evolución de las iniciativas
las oportunidades creadas por las privatizaciones regionales en América del Sur
(Medeiros, 2009) fueron los principales atractivos
para los magnates de negocios mexicanos. La necesidad para América Latina, y de manera
especial para América del Sur, de construir un
El NAFTA fue precedido por una importante li- proceso de integración regional fue un elemento
beralización unilateral y universal por parte de de relevancia desde el final de la Segunda Guerra
México durante los primeros años de la década Mundial. Raúl Prebisch (1959) lo consideró como
de los noventa, como parte de un paquete de una forma de garantizar una mayor racionaliza-
reformas estructurales. Partiendo del concepto ción del proceso de substitución de importacio-
de “nivelar el terreno de juego”, el NAFTA fue di- nes, por medio de mayores escalas de producción
señado sin ningún tipo de consideración espe- y nuevos mercados de exportación para la pro-
cial hacia la economía más débil. De esta forma ducción industrial. Este proyecto aplicaba a una
el NAFTA estableció relaciones económicas y so- región el concepto de desarrollo que Prebisch y
ciales asimétricas entre dos economías ricas e la CEPAL en sus orígenes consideraron para las
industrializadas y México. naciones de manera individual. Durante los años
sesenta se lanzaron algunas iniciativas, como la
Este modelo neoliberal de integración tuvo un propuesta de creación de la Asociación Latinoa-
efecto perdurable sobre la estructura económica mericana de Libre Comercio (ALALC) basada en
mexicana. La explosión de las exportaciones de la perspectiva del libre comercio. Es importante
manufacturas desde firmas localizadas en las señalar las dos posiciones que, desde un princi-
áreas de procesamiento, las maquiladoras, (el pio, se han cristalizado alrededor del tema de la
principio más positivo asociado a este acuerdo)76 integración en América Latina:
fue acompañada por un aumento muy impor-
tante de las importaciones, con un consecuente “Mercantilistas’ e ‘Integracionistas’ discrepa-
lento crecimiento del ingreso. El alto grado de ban respecto al marco que se daría a la inte-
componentes importados y una débil demanda gración. Bajo el primer rótulo estaban inclui-
de productos elaborados por la cadena local de dos Argentina, Brasil y México, que percibían
proveedores, han tenido un impacto reducido a la ALALC como un mecanismo de liberaliza-
sobre la evolución del valor agregado del sector ción comercial. El segundo grupo, en cambio,
de manufacturas. Además, los bajos niveles de estaba constituido por países que defendían
inversión pública en infraestructura y tecnolo- a la ALALC como una herramienta para el de-
gía han contribuido a que el país se limite a la sarrollo regional – no sólo para la promoción
especialización en bienes intensivos en trabajo del comercio – abarcando la interconexión
barato. Si bien tanto el balance comercial de las industrial, la complementariedad económica,
maquiladoras como el comercio agregado con la promoción de inversiones, etc. Los países
los Estados Unidos han sido positivos, México ha andinos eran los que, en general, se encontra-
mostrado un persistente déficit comercial global. ban alineados detrás de esta visión” (Prazeres
A pesar del crecimiento de las manufacturas, un et al., 2006: 22).

92
Modelos alternativos para la integración sudamericana

artículo
De este escenario surgió en 1969 el Pacto Andino acuerdo con las características de un modelo de
(el antecedente de la actual Comunidad Andina integración progresivo pero con una implemen-
de Naciones) integrado por Bolivia, Chile, Ecuador, tación conservadora.
Colombia y Perú. A pesar de su éxito como área
comercial, existían ciertos factores que impedían Con los acuerdos preferenciales adoptados, y el
una expansión mayor: problemas políticos, el atra- boom de financiamiento externo, el comercio
so industrial de los países miembros y las caracte- entre Argentina y Brasil mostró inicialmente un
rísticas macroeconómicas de los años setenta.77 crecimiento considerable, especialmente en los
bienes industriales, en el sector del automóvil y
La crisis de la deuda de los ochenta, junto con las las piezas de recambio, de gran significado para
altas tasas de inflación y la salida de capitales, im- la exportación de este tipo de bienes en ambas
pidío la construcción de un proyecto regional. Sin economías (Vaillant, 2007). A pesar de su impor-
embargo, a iniciativa política de los gobiernos de tancia, este flujo comercial sufrió desequilibrios
Argentina y Brasil,78 se dio inicio al MERCOSUR. debido a la fuerte vulnerabilidad externa que ca-
Este fue un proyecto diseñado para acelerar el de- racterizaba a los modelos económicos de Argen-
sarrollo económico y la justicia social en el marco tina y Brasil. Más aún, la evolución del comercio
de un mercado común. En 1991, bajo el Tratado entre los dos países ha sido fuertemente influen-
de Asunción, los dos países, junto con Paraguay y ciada por el tipo de cambio real y por el balance
Uruguay, firmaron el acuerdo dirigido a la forma- comercial con terceros países. Hasta 1994, debido
ción de un mercado común en el sur. A pesar de la a la apreciación del peso argentino (anclado al
intención inicial, esta iniciativa tuvo lugar duran- dólar americano a una tasa fija) vis-à-vis el dólar
te un cambio de orientación de Argentina y Brasil y la moneda brasileña, se produjeron fuertes
hacia el liberalismo y las reformas del Consenso déficits comerciales. Cuando la nueva moneda
de Washington.79 El MERCOSUR se creó casi al brasileña experimentó una fuerte apreciación,
mismo tiempo que el NAFTA y la Empresa para las exportaciones Argentinas mostraron un auge
la Iniciativa de las Américas, la estrategia lanzada notable. Sin embargo esta situación no perduró.
por los Estado Unidos para establecer el Área de Debido al creciente déficit con el resto del mundo,
Libre Comercio de las Américas. Brasil aplicó cuotas temporarias sobre las impor-
taciones de autos – el sector más importante del
De esta forma y, como lo señala Carranza (2003), comercio regional – que se hicieron extensivas
desde 1991 el MERCOSUR ha estado oscilando también a las provenientes de Argentina.
entre dos modelos de integración regional. El pri-
mero, similar al que Prebisch promovía, tiene, de Por el mismo motivo, Brasil redujo unilateral-
acuerdo a nuestra clasificación, una perspectiva mente los aranceles sobre partes y maquinarias
progresista (aunque sin una clara preocupación del sector automotor, eliminando el beneficio que
por lo social), se orienta hacia una industrializa- los mayores aranceles sobre las importaciones
ción más autónoma y una integración sostenible, y desde fuera del MERCOSUR ofrecían a la indus-
difiere políticamente de los objetivos promovidos tria argentina. En 1999, con el colapso de la mo-
por los Estados Unidos. Este objetivo fue acompa- neda (el real) en Brasil y el consecuente aumento
ñado por una estrategia destinada a fortalecer el en las obligaciones externas, las exportaciones
poder político de los países sudamericanos en las a Brasil disminuyeron de forma considerable, lo
negociaciones multilaterales. El segundo modelo, que intensificó la fragilidad de la balanza de pa-
similar al que definimos como integración regio- gos de Argentina. La decisión unilateral de Brasil
nal neoliberal, pretende alcanzar un área de libre reflejó, en parte, su dependencia del financia-
comercio transitoria que sería una etapa hacia miento externo y la menor dependencia de sus
la liberalización global del comercio. Desde esta vecinos. Bajo el peso de las obligaciones externas
segunda perspectiva, la liberalización constituye y la salida de capitales, Argentina devaluó su mo-
el fin en sí mismo, mientras la regionalización es neda en 2001 y declaró una mora parcial sobre su
un instrumento de la globalización. Esta segunda deuda externa. Como resultado, Argentina tam-
estrategia no es muy diferente del “regionalismo bién aplicó medidas unilaterales que afectaron
abierto” que la CEPAL comenzó a adoptar en los los acuerdos firmados en el marco del MERCO-
años noventa, cuando la liberalización comercial SUR: aumentó los aranceles sobre los bienes de
recibió un fuerte impulso en todos los países de consumo y disminuyó considerablemente aquel-
Sudamérica. En 1995, se intentó adoptar un aran- los que recaían sobre las importaciones de bienes
cel externo común (característico de una unión de capital e informática procedentes de fuera del
aduanera) sin plantear previamente una discu- bloque.80 Estos cambios, aunque fueron justifi-
sión amplia y profunda sobre las complementa- cados como medidas transitorias, trajeron a dis-
riedades estructurales y la política industrial. Es cusión la conveniencia de transformar la unión
así como se forjó el concepto del MERCOSUR: un aduanera del MERCOSUR en una simple área de

93
4 Modelos alternativos para la integración sudamericana
artículo

libre comercio, permitiendo a los países aplicar cia en los productos básicos (especialmente en
los aranceles que consideraran más convenientes Argentina) reduciendo la importancia macroe-
sobre las importaciones desde fuera del bloque. conómica del comercio regional. Sin embargo,
en términos absolutos, el comercio regional ha
Esta historia reciente revela que, bajo las condi- tenido también una evolución favorable que no
ciones de fuerte vulnerabilidad externa y de- debe menospreciada.
pendencia financiera, la expansión del comercio
intrarregional siguió un modelo muy inestable, El proyecto original del MERCOSUR ha sido debili-
favoreciendo esencialmente a las grandes empre- tado por otras políticas, por cambios instituciona-
sas en sectores con importantes economías de les en América Latina y por la polarización de dos
escala. Los beneficios fueron captados de forma modelos muy diferentes de integración regional
asimétrica a favor de Brasil, la economía con el económica y política. En particular, han ocurrido
mayor sector industrial en la región. Durante los dos procesos clave en los años recientes. Por un
años noventa se discutieron propuestas destina- lado, como vemos en la tabla 13, ha habido un
das a la realización de objetivos macroeconómi- avance de los acuerdos de libre comercio promo-
cos (de política monetaria y fiscal) y de un meca- vidos por los Estados Unidos con América Central
nismo de alineación de las tasas de cambio (para y el Caribe, y con otros países de América del Sur
finalmente implementar una moneda común).81 (tal como los recientemente acordados con Chile
Sin embargo estas propuestas no prosperaron, y Perú, y como las negociaciones actuales con Co-
siendo abandonadas, en vista de la intensa vo- lombia). También, en el marco de la ALADI se han
latilidad de las tasas de cambio y de la fragilidad firmado entre el MERCOSUR y la CAN un numéro
financiera de las dos principales economías. Más considerable de acuerdos subregionales.
aún, en economías como las de Argentina y Bra-
sil, financieramente vulnerables, ningún alinea- Por otro lado, en cambio, el retorno al naciona-
miento cambiario con una moneda externa ha lismo económico ha aparecido en muchos países
sido estable. En ambos casos apreciaciones de la como resultado del defectuoso neoliberalismo
moneda terminaron en una gran contracción y en radical típico de los años noventa.85 Con ello se
un colapso del comercio. Bajo estas condiciones redefinió el proceso de regionalización, y se han
las propuestas para crear un mecanismo de pa- introducido en la agenda de negociaciones ob-
gos regional, una vieja idea en América Latina, no jetivos y preocupaciones “no comerciales”, tales
han tenido éxito.82 Del mismo modo, la coordina- como la cooperación, la reducción de asimetrías
ción de políticas macroeconómicas se ha vuelto y la cohesión social. Desde esta perspectiva, la
irrealizable.83 llamada de Venezuela para la creación del ALBA
y la generalización de la relación establecida con
4.2 El escenario con posterioridad a 2001 Cuba, emergieron como un contrapunto al ALCA.
Se basa en los principios de complementariedad,
La situación comenzó a cambiar en 2001. Más que solidaridad, cooperación y soberanía de los pue-
los esfuerzos políticos para establecer un meca- blos (CEPAL, 2007), y pone mayor énfasis en la edu-
nismo de resolución de disputas comerciales, fue cación, la cultura, la infraestructura y también el
el fuerte crecimiento del mercado mundial entre comercio. Esta propuesta incluyó una importante
2001 y 2008, y en consecuencia la mejora en las iniciativa de cooperación financiera.86
balanzas de pagos de las economías de la región,
lo que permitió en los últimos años una mayor La posible ampliación del MERCOSUR ha osci-
estabilidad de la unión aduanera.84 Entonces, lado entre dos modelos diferentes. A pesar de
bajo condiciones de baja vulnerabilidad externa, la importancia otorgada a las cuestiones de asi-
como ha sido el caso desde los años 2002 hasta metrías y desarrollo económico, las prioridades
la crisis actual, diferentes iniciativas crediticias definidas en las reuniones que delinearon la
y financieras – como la recientemente introdu- Unión Sudamericana de Naciones (formada por
cida entre Argentina y Brasil – han experimen- los países del MERCOSUR y la CAN, más Chile, y
tado resultados positivos. Pero si bien las nuevas las repúblicas de Guyana y Surinam) tratan de
condiciones externas abrieron nuevas posibili- conciliar el libre comercio87 con un mayor én-
dades para el bloque comercial, algunos cambios fasis en temas de energía, infraestructura, co-
estructurales han tenido el efecto contrario. De municaciones e inversiones sociales. El proyecto
hecho, tras la serie de crisis externas de finales de para la Integración en Infraestructura Regional
los años noventa y el principio del presente siglo, en América del Sur, una iniciativa brasileña fuer-
el importante crecimiento de las exportaciones temente apoyada por el Banco Interamericano
sudamericanas fue motivado por el fuerte incre- de Desarrollo, otorga prioridad a un eje centrado
mento en el precio de los productos básicos. Este en la infraestructura de transporte, energía y
resultado exportador incrementó la dependen- comunicaciones como pilares principales de in-

94
Modelos alternativos para la integración sudamericana

artículo
tegración. De acuerdo a la opinión del BID, esto medio de inversiones extranjeras, mejoras en in-
facilitará las condiciones para que América del fraestructura y la firma de acuerdos comerciales
Sur se integre dentro de la economía global, por regionales y subregionales.88

Tabla 13
Principales acuerdos comerciales regionales en América
Acuerdo Fecha de la firma Entrada en vigencia

Uniones Aduaneras

Mercado Común de América Central (CACM) 1960 1961

Comunidad Andina (CAN) 1969 1969

Comunidad del Caribe (CARICOM) 1973 1973

Mercado Común del Sur 1991 1995

Acuerdos de Libre Comercio

Chile-México 1991 1992

Chile-Venezuela 1993 1993

Tratado de Libre Comercio de América del Norte 1992 1994

Chile-Colombia 1993

Costa Rica-México 1994 1994

Grupo de los Tres 1994 1995

Bolivia-México 1994 1995

Chile-Ecuador 1994 1995

Chile-MERCOSUR 1996 1996

Canadá-Chile 1996 1996

Bolivia-MERCOSUR 1996 1997

México-Nicaragua 1997 1997

Chile-Perú 1997 1997

CACM-República Dominicana 1998 1998

CARICOM-República Dominicana 1998 1999

CACM-Chile 1999 2000

México-Triángulo del Norte 2000 2001

Canadá-Costa Rica 2001 2001

CACM-Panamá 2002 2003

CACM: Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Honduras y Nicaragua;


CAN: Bolivia, Colombia, Ecuador y Perú. Venezuela abandonó el bloque en 2006;
CARICOM: Antigua y Barbuda, Las Bahamas, Barbados, Belice, Dominica, Grenada, Guyana, Haití, Jamaica, Montserrat, Santa Lucia,
San Cristóbal y Nieves, San Vicente y las Granadinas, Surinam y Trinidad y Tobago;
Grupo de los Tres: México, Colombia, Venezuela; Triangulo del Norte: Guatemala, Honduras, El Salvador.
Fuente: Laens y Terra (2003).

Aunque se intente promover un modelo progre- de vista económico, Brasil tiene un PBI que más
sista de integración para América Latina y que que duplica el de Argentina, es diez veces mayor
abra nuevas oportunidades para la reducción que el de Perú, y seis veces mayor que el de Ve-
del desempleo, la cohesión social y un cambio es- nezuela. Es evidente que es una economía podría
tructural, hay una dimensión macroeconómica ejercer una influencia positiva sobre una región
que está ausente en la región. Una región que es integrada. Pero, debido a decisiones de política
económicamente heterogénea requiere que la económica, Brasil ha sido la economía de Lati-
economía de mayor tamaño juegue el papel de noamérica que menos ha crecido en los últimos
locomotora en el proceso de integración regional. años. Asimismo, debido a su mayor grado de in-
Sin embargo, los recientes excedentes comercia- dustrialización y menor crecimiento, Brasil ha ex-
les de Brasil respecto a sus vecinos ejercen una perimentado crecientes excedentes comerciales
influencia depresiva, aunque sus flujos de inver- con todos los países de América del Sur, quienes a
siones directas puedan tender a compensar el su vez exportan productos básicos a países fuera
lado comercial de la relación.89 Desde el punto de la región. Estas condiciones estructurales im-

95
4 Modelos alternativos para la integración sudamericana
artículo

piden a Brasil, desde una perspectiva económica, La agenda macroeconómica de integración regio-
ocupar el rol de locomotora de la economía regio- nal ha evolucionado desde las discusiones sobre la
nal, por lo menos en términos comerciales. adopción de una moneda común y la introducción
de políticas de coordinación macroeconómica ha-
Otra importante restricción es el bajo nivel de cia políticas más pragmáticas, sin incluir objeti-
producto por habitante de Brasil con respecto a vos de convergencia. Se han reforzado iniciativas
Argentina, Uruguay o Venezuela. Brasil muestra dirigidas a la expansión de créditos recíprocos y al
fuertes disparidades y asimetrías entre sectores, análisis de iniciativas de integración regional a la
regiones, individuos y clases sociales. Estas dispa- luz de la experiencia del Fondo Latinoamericano
ridades aumentan el atraso relativo y los costos de Reservas. Este último mecanismo, tal como lo
de producción en un área tan importante para la observado para los países andinos durante los no-
integración de América del Sur como es la Ama- venta, se destina principalmente al apoyo de las
zonía brasileña, región que limita geográfica- balanzas de pagos y a la mejora de la liquidez de
mente con ocho países. Más aún, en años recien- las reservas internacionales de los países miem-
tes la polarización de ingresos entre las regiones bros y constituye, de manera similar al mecanis-
de Brasil se ha incrementado debido al estanca- mo de créditos recíprocos, una forma flexible de
miento de las inversiones en infraestructura y el cooperación macroeconómica.
aumento de los costos de transporte.
Finalmente, es importante subrayar las dimen-
La ampliación del proceso de integración y la siones políticas y distributivas del proceso de
oferta de infraestructura depende de adecuados integración. Estas recibieron mucha más aten-
mecanismos financieros y fiscales. Incluso los ción bajo los proyectos de la UNASUR y el ALBA,
países de la Unión Europea, que se encuentran aunque no se hayan concretado en un proyecto
comprometidos con estrictos objetivos fiscales exhaustivo que estuviera destinado a satisfa-
bajo las condiciones del Tratado de Maastricht, cer las demandas sociales. Más que a formas
toleran un déficit público de hasta un 3 por de gobierno – como la unánime defensa de la
ciento de su PBI, una cifra que, en muchos casos, consolidación de la democracia establecida en
corresponde a los niveles de inversión pública. los foros de la UNASUR – el tema sustantivo
Hasta hace poco tiempo, Brasil adoptó objetivos común al proceso de integración regional está
fiscales muy estrictos – en los últimos años la relacionado con la definición de prioridades y un
inversión pública fue del 1,8 por ciento del PBI, capítulo social que permita una cohesión econó-
después de alcanzar niveles del 2,6 por ciento mica y social más intensa entre países, regiones
durante la primera mitad de los noventa (Singh subnacionales y clases sociales. Con respecto al
et al., 2005)90 – que impidieron un comienzo capítulo social, el principal riesgo – como en el
más veloz del proceso de integración regional. El caso de los países de reciente ingreso a la UE –
denominado Fondo de Convergencia Estructural reside en el avance de la integración de mercado
del MERCOSUR, establecido en 2006 con objeto mientras se incrementa la competencia para el
de disminuir las asimetrías entre los países del trabajo barato, lo cual degrada aún más la base
bloque no tiene fondos suficientes, ni está en- del trabajo organizado. Junto con este tema, en
focado hacia los procesos de cambio estructural el caso de América del Sur, emerge él de las pe-
que favorecerían una mayor complementarie- queñas propiedades agrarias (cuya presencia es
dad y estrategia comercial en la región.91 significativa en algunos países), que se encuen-
tran amenazadas por la agricultura de alta pro-
La necesidad de una mayor cooperación interna- ductividad destinada al mercado de exportación.
cional en la región, y la creación de instituciones Tal fue el caso de la agricultura en México que
afincadas en la región, son la base de la reciente experimento un fuerte impacto cuando quedó
expansión de la Corporación Andina de Fomento, sujeta a la competencia de las exportaciones
la cual está suplantando al BID en el financia- de Estados Unidos bajo el marco del NAFTA. Una
miento a las naciones andinas y ha jugado un integración sin compensaciones puede resultar
papel importante en la creación del Banco del Sur en un masivo desempleo de agricultores de baja
(una iniciativa de Venezuela) cuyas dimensiones productividad al no disponer de un mercado de
y diseño estratégico pueden estimular la inver- trabajo que se asemeje en tamaño o en dina-
sión regional. Mientras que estas instituciones mismo al de los Estados Unidos, el receptor neto
posibiliten a los países de la región una mayor (aunque parcialmente) de los excedentes de po-
autonomía financiera respecto de las institucio- blación.
nes multilaterales y faciliten el financiamiento
de países y sectores de menor desarrollo, se van Las propuestas de los sindicatos (sistemática-
a poder abrir nuevas e importantes posibilidades mente repetidas en las reuniones del MERCOSUR)
de cooperación y desarrollo regional. se concentran en acuerdos sectoriales a nivel re-

96
Modelos alternativos para la integración sudamericana

artículo
gional, políticas de complementación productiva tos comerciales y financieros, estos objetivos son
y mecanismos de protección social. Los sindica- de difícil realización.
tos básicamente defienden (Alimonda, 2000) las
políticas productivas coordinadas a nivel regio- El MERCOSUR (el proceso de integración en Amé-
nal para cada sector; la creación de fondos para rica Latina que más ha avanzado) que desde su
la reconversión productiva; una armonización inicio abarcó ambos conceptos, y reflejó las dife-
“hacia arriba”, incluyendo derechos sociales; el rentes orientaciones económicas y políticas, ha
reconocimiento de sindicatos a nivel regional; y evolucionado según las estrategias de inversión de
el establecimiento de comités de trabajadores en las empresas multinacionales localizadas en la re-
más de un país. gión. Después del consenso neoliberal que predo-
minó durante los años noventa, nuevas propuestas
Por otro lado, debemos mencionar (CEPAL, 2007) y orientaciones han ganado presencia en grupos
que hasta el momento los efectos del MERCO- tales como la UNASUR, el bloque más amplio en
SUR sobre el desarrollo regional han reforzado América del Sur.
las desigualdades subnacionales, favoreciendo al
estado de San Pablo y a la región sur, en el caso de En la actualidad se puede decir que la integración
Brasil; y a Buenos Aires y a la región pampeana en América del Sur está en una encrucijada. La
en el caso de la Argentina.92 Estos impactos re- crisis financiera de 2008 en los Estados Unidos
flejan la polarización espacial de los dos países, se ha expandido hacia el resto del mundo, afec-
especialmente importante en el caso de Brasil. tando a los países sudamericanos de diferentes
En general, esta cuestión subraya la precaria in- maneras y grados. El colapso de los precios de
fraestructura de transporte, y la debilidad del fi- los productos básicos y minerales, la caída en los
nanciamiento regional, las cuales contrarrestan términos regionales de intercambio, así como
las fuerzas económicas regionales y refuerzan la el estancamiento de los mercados externos oc-
polarización espacial. cidentales afectaron de manera importante el
comportamiento macroeconómico y las exporta-
ciones de los países de Sudamérica, al igual que el
5 Algunos comentarios finales comercio dentro de la región. Recientemente, Ar-
gentina introdujo medidas de tipo proteccionista
A lo largo del presente trabajo se ha argumenta- en las importaciones para preservar su cuenta
do que hay principalmente dos dinámicas y mo- corriente, mientras que Bolivia intensificó su
delos que caracterizan la historia de los procesos política nacionalista y aumentó el control de los
de integración regional que se han desarrollado recursos minerales y de las exportaciones de gas
desde el fin de la Segunda Guerra Mundial. En el hacia sus vecinos. El comercio regional favorece
modelo neoliberal, la integración toma la forma a la economía brasileña; sin embargo su actual
de acuerdos de libre comercio como instrumento orientación hacia la defensa del libre comercio no
para incentivar la especialización económica de puede conseguir el apoyo regional en las condi-
acuerdo a las ventajas comparadas estáticas. Este ciones actuales. En este sentido, el desafío que
proceso exige una creciente coordinación de po- enfrenta la UNASUR es cómo acomodar la de-
líticas fiscales y macroeconómicas. En el modelo manda creciente (e inevitable) de mayores espa-
aquí denominado progresivo, la regionalización cios nacionales, sin dejar pasar la oportunidad de
es un proceso que permite crear un mercado in- crear un bloque más articulado económica y so-
terno más grande para el desarrollo de nuevas cialmente, que también se centre en la cohesión
industrias y de especializaciones destinadas a lo- social, la cooperación y las oportunidades econó-
grar la convergencia de las áreas más retrasadas micas. Dado su tamaño económico y la creciente
y una mayor cohesión social. A menos que exista presencia política en los foros internacionales, el
un liderazgo macroeconómico por parte de la rol e iniciativa de Brasil adquieren una importan-
economía más fuerte de la región, e instrumen- cia relevante para el éxito de este proceso.

97
4 Modelos alternativos para la integración sudamericana
artículo

BIBLIOGRAFÍA

Alimonda, H. (2000). “Brazilian Society and Regional Integration”, Latin American Perspectives, Issue 115, Vol. 27 (6),
Noviembre 2000: 27-44.

Berrettoni, D. y Cicowiez, M. (2005). “El Acuerdo de Libre Comercio Mercosur-Comunidad Andina de Naciones: Una evaluación
cuantitativa”, Serie Estudios Estadísticos y Prospectivos, No. 33,CEPAL, División de estadísticas y proyecciones Económicas, Abril
2005, Santiago de Chile. Disponible en: http://www.eclac.org/publicaciones/xml/4/21554/lcl2310e.pdf.

Cárdenas, E., Ocampo, J. y Thorp R. (2000). “Industrialization and the State in Latin America: the postwar years”.
En: An economic history of twentieth-century Latin America. Volume 3, Nueva York, Palgrave.

Carranza, M. E. (2002). “Neighbors or Partners? NAFTA and the Politics of Regional Economic Integration in North America”,
Latin American Politics and Society, Vol. 44 (3), Septiembre 2002: 141-157.

Carranza, M. E. (2003). “Can MERCOSUR Survive? Domestic and International Constraints on Mercosur”.
Latin American Politics and Society, Vol. 45 (2), Julio 2003: 67-103.

Cason, J. (2000). “On the Road to Southern Cone Economic Integration”, Journal of Interamerican Studies and World Affairs,
Vol. 42 (1): 23-42.

CEPAL (2007). “Latin America and the Caribbean in the World Economy, 2006. 2007 Trends”, CEPAL, División de Comercio
Internacional e Integración, Octubre 2007, Santiago de Chile.
Disponible en: http://www.eclac.org/publicaciones/xml/8/29528/PANINISAL_2006_2007_ingles.pdf.

Chang, H. J. (2002). Globalization, Economic Development and the Role of the State, Londres/Nueva York, Zed Books.

Durán, J. E. y Masi, F. (2007). “Diagnóstico de las asimetrías en los procesos de integración de América del Sur”, Documento
de Proyecto, CEPAL, División de Comercio Internacional e Integración, Mayo 2007, Santiago de Chile.
Disponible en: http://www.eclac.cl/publicaciones/xml/6/29746/DIAGNOSTICOS_ASIMETRIAS_INTEGRACION_AMERICA_DEL_SUR.pdf.

Eichengreen, B. (1998). “Does MERCOSUR Need a Single Currency?”, NBER Working Paper, No. 6821, National Bureau of Economic
Research, Diciembre 1998. Disponible en: http://www.nber.org/papers/w6821.pdf.

Gibbs, M. y Ognivtsev, V. (2004). “International Trade”. En UNCTAD. Beyond Conventional Wisdom in Development Policy:
An Intellectual History of UNCTAD 1964-2004, United Nations, Nueva York y Ginebra.
Disponible en: http://www.unctad.org/en/docs/edm20044_en.pdf.

Gudynas, E. (2006). “El Camino de la Integración Sudamericana”, CLAES/CEADES, Noviembre 2006, Montevideo/Santa Cruz.
Disponible en: http://www.comunidadsudamericana.com/analisis/CumbreSudamericanaClaesCeades.pdf.

Helleiner, E. (2006). Towards North American Union?, Montreal, McGill Queens University Press.

Jessop, B. (2002). The Future of the Capitalist State, Londres, Polity Press.

Kaldor, N. (1970). “The Case for Regional Policies”. En: Kaldor, N., ed. Further Essays on Economic Theory. Duckworth, 1978.

Krueger, A. O. (1995). “Free Trade Agreements versus Customs Unions”, Working Paper, No. 5084, National Bureau of Economic
Research, Avril 1995, Cambridge.

Kume, H. y Piani, G. (2005). “MERCOSUL: O Dilema entre União Aduaneira e Área de Livre Comércio”, Revista de Economia Política,
Vol. 25 (4), Octubre/Deciembre 2005: 370-390.

Laens, S. y Terra, I. (2003). “Integration of the Americas: Welfare Effects and Options for the MERCOSUR”. En: Lorenzo, F. and Vaillant,
M. eds. MERCOSUR and the reaction of the Free Trade Area of the Americas. Woodrow Wilson International Center for Scholars. Dis-
ponible en: http://www.wilsoncenter.org/index.cfm?doc_id=116291&fuseaction=topics.publications&group_id=29679&topic_id=1419

Lavagna, R. y Giambiagi, F. (1998). "Hacia la Creación de una Moneda Comun: Una Propuesta de Convergencia Coordinada de Polí-
ticas Macroeconomicas en el Mercosur", BNDES Ensaio, No. 6, Marzo 1998, BNDES, Rio de Janeiro. Disponible en: http://www.bndes.
gov.br/SiteBNDES/export/sites/default/bndes_pt/Galerias/Arquivos/conhecimento/ensaio/ensaio6.pdf.

Machinea, J. L. y Rozenwurcel, G. (2005). “Macroeconomic Coordination in Latin America: Does it have a future?”,
Series Informes y estudios especiales, No. 15, CEPAL, Diciembre 2005, Santiago de Chile.
Disponible en: http://www.eclac.cl/publicaciones/xml/0/23510/lcl2431i.pdf.

Maneschi, A. (1998). Comparative Advantage in International Trade, Cheltenham, Edward Elgar.

Mansfield, E. D. y Milner, H. V. (1999). “The New Wave of Regionalism”, International Organization, Vol. 53 (3), Summer 1999: 589–627.

98
Modelos alternativos para la integración sudamericana

artículo
Medeiros, C. A. (2004). “A Economia Política da Internacionalização sob Liderança dos EUA: Alemanha, Japão e China”. En: Fiori,
J. L. ed. O Poder Americano, Petrópolis, Editora Vozes.

Medeiros, C. A. (2006). “A China Como um Duplo Pólo na Economia Mundial e a Recentralização Asiática”, Revista de Economia
Política, Vol. 26 (3): 381-400.

Medeiros, C. A. (2009). “Asset Stripping the State”, New Left Review, Vol. 55, Enero-Febrero 2009: 109-132.

Milward, A. S. (1992). The European Rescue of the Nation State. Berkeley, University of California Press.

Moreno-Brid, J. C., Napoles, P. R. y Valdivia, J. C. R. (2005). NAFTA and the Mexican Economy: A Look Back on a Ten-Year Relationship.
FLACSO.

Motta Veiga, P. M. y Ríos, S. P. (2007). “O regionalismo pós-liberal, na América do Sul: Origens, iniciativas e dilemas”. Serie Comercio
Internacional, No. 82, CEPAL, Julio 2007, Santiago de Chile.
Disponible en: http://www.eclac.cl/publicaciones/xml/5/30045/S82CI_L2776e_P_Oregionalismo_pos_liberal_America_do_Sul.pdf.

Myrdal, G. (1956). “Development and Underdevelopment”. National Bank of Egypt, Fiftieth Anniversary Commemoration
Lecture, Cairo.

Myrdal, G. (1957). Economic theory and underdeveloped regions, London, Gerald Duckworth.

Ocampo, J. A. (2006). “Cooperación Financiera Regional: Experiencias y Desafíos”. En: Ocampo, J. A., ed. Cooperación Financiera
Regional, CEPAL, Septiembre 2006, Santiago de Chile:
Disponible en: http://www.eclac.org/publicaciones/xml/5/27495/lcg2319e.pdf.

Prazeres, T. L., Diniz, A. M. y Rocha, M. (2006). “O Brasil e a América do Sul: Desafios no Século XXI. Coleção América do Sul”,
Prêmio América do Sul - 2005, Brasília. Disponible en: http://www.dominiopublico.gov.br/download/texto/al000172.pdf

Prebisch, R. (1959). “El Mercado Común Latinoamericano”, En: Gurrieri, A., ed. La Obra de Prebisch en la CEPAL. Fondo de Cultura
Económica, 1982.

Prebisch, R. (1964). Hacia una Política Comercial en pro del Desarrollo, UNCTAD, Nueva York y Ginebra.

Ryner, J. M. y Cafruny, A. W. (2007). Europe at Bay, London, Lynne Rienner Publishers.

Sakwa, R. y Webber, M. (1999). “The Commonwealth of Independent States, 1991-1998: Stagnation and Survival”, Europe Asia
Studies, Vol. 51 (3), Mayo 1999: 379-415.

Shaikh, A (2003). “Globalization and The Myth of Free Trade”. Trabajo presentado en Conference on Globalization and Free Trade,
New School Univesity, Nueva York, 05.04.2003. Disponible en: http://causaestudiantil.com.ar/bibliotecavirtual/BIBLIOTECA%20
DEL%20PENSAMIENTO/SHAIKH%20ANWAR%20-%20GLOBALIZATION%20AND%20THE%20MYTH%20OF%20FREE%20TRADE.pdf.

Singh, A., Belaisch, A., Collyns, C., De Masi, P., Krieger, R., Meredith, G. y Rennhack, R. (2005). “Stabilization and Reform in Latin
America: A Macroeconomic Perspective on the Experience since the Early 1990s”, Occasional Paper, No. 238, FMI, Febrero 2005,
Washington D. C. Disponible en: http://www.imf.org/external/pubs/ft/op/238/index.htm.

UNCTAD (2007). Informe sobre el Comercio y el Desarrollo, 2007 – Panorama General. Nueva York y Ginebra. Disponible en:
http://www.unctad.org/sp/docs/tdr2007_sp.pdf.

Vaillant, M. (2007). “Convergencias y divergencias en la integración sudamericana”, Serie Comercio Interncional, No. 83, CEPAL,
Agosto 2007, Santiago de Chile. Disponible en: http://www.scribd.com/doc/7306109/Convergencias-Divergencias-Integracion-
Sudamericana.

Viner, J. (1950). The Customs Union Issue, Nueva York, Carnegie Endowment.

99

Das könnte Ihnen auch gefallen