CAPÍTULO II

MARCO TEÓRICO

BASES TEÓRICAS

Residuos de Aparatos Eléctricos y Electrónicos

Según las diferentes legislaciones y asociaciones que manejan los RAEE, existen diversas
definiciones a los términos asociados al tema. De acuerdo a los Lineamientos para la Gestión
de los Residuos de Aparatos Eléctricos y Electrónicos (RAEE) en Latinoamérica, publicado
por la Plataforma RELAC en 2011, los AEE se definen de la siguiente manera:

Todos los aparatos que para funcionar debidamente necesitan corriente eléctrica o
campos electromagnéticos, y los aparatos necesarios para generar, transmitir y medir
tales corrientes y campos pertenecientes a las categorías descritas en el presente
documento y que están destinados a utilizarse con una tensión nominal no superior a
los 1000 voltios en corriente alterna y 1500 voltios en corriente continua. (p. 5)

Asimismo, establece que los residuos de aparatos eléctricos y electrónicos (RAEE) son
“residuos de AEE descartados por el consumidor al final de su vida útil, cuyas características
hacen que sea necesario ser sometidos a un manejo especial y que deberán ser entregados a
un sistema de gestión ambientalmente adecuado” (RELAC, 2011, p. 6)

Por otra parte, la iniciativa Step propone que un AEE es “cualquier artículo preveniente
de hogares o negocios, que contenga circuitos o componentes electrónicos y una fuente de
energía o batería”. Igualmente, define el término RAEE como “todos los tipos de aparatos
eléctricos y electrónicos y sus partes, descartados por su propietario como residuo sin la
intención de reutilización” (Step, 2014).

Gestión Integral de RAEE

La gestión de los RAEE o de sus componentes comprende un conjunto acoplado e

interconectado de acciones de carácter político, administrativo, social, educativo, de
planificación y monitoreo de los residuos de RAEE, abarcando desde la generación y
recogida, almacenamiento, transporte, clasificación y tratamiento, ya sea reciclarlos o
reutilizarlos, hasta la disposición final de los mismos. Todo esto se realiza por medio de
programas especiales formales o informales llevados a cabo por organismos, empresas o
instituciones, dependiendo de la capacidad y de las políticas de reciclaje del país en el cual
se producen (Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible [MinAmbiente], 2017).

La composición de los RAEE se caracteriza por ser heterogénea, pueden llegar a contener
hasta más de 1000 sustancias diferentes, las cuales se clasifican entre “peligrosas” y “no
peligrosas” (MinAmbiente, 2017). En ellos podemos encontrar una variedad de materiales y
componentes, tales como piezas plásticas y metálicas, tarjetas de circuito impreso, pantallas
de cristal líquido, cables, baterías, tubos de rayos catódicos, componentes eléctricos y
electrónicos, metales férreos y no férreos, polímeros, vidrios, entre otros. De igual forma,
contienen elementos altamente tóxicos que, a pesar de que garanticen su funcionamiento,
resultan nocivos y contaminantes para el medio ambiente y perjudica la salud de los seres
humanos (Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente [Magrama], 2015)

Debido a esto, la gestión de los RAEE debe realizarse a través de procesos especiales y
bajo condiciones seguras, sin mezclarse con otros flujos de residuos, evitando así la
incorrecta manipulación que pueda conllevar a que se liberen este tipo de sustancias al medio
ambiente o la exposición de las personas que trabajan con este tipo de residuos en dichos
procesos (Magrama, 2015; UIT, Convenio de Basilea, CRBAS-Centro Regional Basilea para
América del Sur, UNESCO, OMS, ONUDI, OMPI, CEPAL, 2016).

La gestión integral de RAEE incluye los procesos descritos en la tabla 1:

Tabla 1. Terminología y procesos de gestión de RAEE

Proceso Especificación
Extensión de la vida útil del equipo o sus
componentes para ser usado para el mismo
propósito para el cual fue conceptualizado
Reutilización inicialmente; puede o no incluir un cambió
en la propiedad del equipo. Este proceso
pretende promover un uso óptimo de los
recursos disponibles, sin embargo, hay que

Desensamblaje y segregación
Reciclaje y recuperación
Reacondicionamiento
Disposición final
Fuente: (UIT, et al) (2016)
Reciclaje Formal e Informal
Los procesos de reciclaje pueden ser formales o informales, una fracción de los residuos
es exportada a países desarrollados que dispongan de un adecuado sistema de gestión para
tener presente los riesgos sociales o
ambientales asociados a una mala gestión.
Consiste en la separación manual y
cuidadosa de las partes y componentes de un
equipo en desuso. Se sugiere que esta
actividad se realice por recicladores
autorizados, compañías especializadas en el
reacondicionamiento.
Consiste en la recuperación del equipo, sus
componentes y materiales. El
desmantelamiento o desensamblaje puede
ser manual o semimanual. La recuperación
de materiales forma parte del proceso de
reciclaje de RAEE sobre todo para la
recuperación de metales que requiere
instalaciones especializadas e inversiones
importantes.
Toda operación que permite que el AEE
considerado como RAEE pueda funcionar
nuevamente. Incluye cambios en el
hardware y el software
Es el proceso de eliminación final de
residuos o materiales, los materiales no
recuperables pueden ser eliminados en
vertederos controlados o mediante
incineración.
un reciclaje controlado, sin embargo, otra fracción se envía a países en vía de desarrollo,
como China, India, Nigeria o Ghana, para su reutilización o reciclaje. Ahora bien, estos países
no cuentan con suficiente tecnología para aplicar métodos de obtención de materiales seguros
y adecuados, por lo que trabajan en el sector informal dedicados a técnicas rudimentarias y
no aprobadas para el reciclaje, que generan contaminación ambiental y afectaciones a la
salud.

La aplicación de este tipo de métodos se centra principalmente en la recuperación de

materiales con alto valor económico, como es el caso del cobre o el oro, convirtiéndose así
en una importante fuente secundaria de ingresos y de materias primas de este sector. La
extracción de estos componentes es considerada como un tipo de minería urbana que, aunque
pueda suponer una actividad bastante lucrativa y productiva, con un menor costo, ahorro de
energía, al mismo tiempo que de los recursos naturales del planeta que al extraerlos
directamente de la naturaleza, se debe considerar los riesgos que conlleva desarrollar
procesos sin ningún tipo de control (UIT, et al, 2016).

Gestión en Venezuela

En Venezuela no se han implementado políticas ambientales que regulen el manejo seguro

de desechos eléctricos y electrónicos, así como tampoco sistemas formales de recolección,
transporte y reciclaje de AEE; además se cuenta con pocas organizaciones que se encarguen
del reciclaje de RAEE, y los alcances de las existentes para abarcar el manejo a nivel nacional
de estos desechos resulta insuficiente. El Estado venezolano, a través del Ministerio del Poder
Popular para el Ambiente (MPPA), Ministerio del Poder Popular para Ciencia, Tecnología e
Innovación (MPPCTI), Centro Nacional de Tecnología Química (CNTQ) y demás entes, se
han encargado de impulsar proyectos para contribuir con la disminución de estos residuos,
trabajando en conjunto con algunas organizaciones sin fines de lucro, realizando jornadas y
estableciendo puntos de recolección, enviando los equipos reunidos a empresas
correspondientes de reciclaje.

Por otra parte, existen algunas empresas que se dedican a tratar algunos aparatos,
principalmente computadoras, electrodomésticos como refrigeradores, lavadoras, cocinas,
entre otros, siempre y cuando los mismos todavía contengan algún potencial para ser
reutilizados. (Centro Nacional de Tecnología Química [CNTQ]; Ministerio del Poder
Popular para Ciencia, Tecnología e Innovación [MPPCTI], 2015).

EcoReciclaje Integral, ubicada en Caracas, es una empresa dedicada a prestar servicios en

materia ambiental a industrias, instituciones y personas naturales, encargándose de las
diferentes actividades necesarias para la gestión de RAEE, tales como la recolección de
materia prima, residuos industriales y equipos tanto eléctricos como electrónicos, la
disposición final de los mismos, así como la aplicación de procesos de desarme, clasificación,
empaque y reciclaje de los diferentes materiales que componen a estos equipos, con el
propósito de disminuir las repercusiones ambientales que ocasiona la incorrecta e
irresponsable manipulación de éstos residuos. Desde sus comienzos de operaciones en 2008
hasta la actualidad han logrado el reciclaje de más de 1,000,000,00 Kg, evitando así que
lleguen a vertederos municipales y estadales.

Figura 1. Total de material reciclado por EcoReciclaje

Fuente: (EcoReciclaje Integral, 2019)

Dispone de un servicio de reciclaje sin costo para las comunidades residenciadas en el

área metropolitana con el objetivo de reciclar sus equipos eléctricos y electrónicos de una
manera ecológica; logrando esto a través de jornadas de recolección ayudadas por la alcaldía
de Baruta en conjunto con otras empresas recicladoras, siendo EcoReciclaje la autorizada
para el manejo de RAEE.
Figura 2. Jornadas de recolección apoyadas por la alcaldía de Baruta

Fuente: (EcoReciclaje Integral, 2019)

De igual manera, el servicio de reciclaje electrónico también está orientado a pequeñas y

medianas industrias que requieran deshacerse de sus residuos de equipos de manera
responsable y segura, el cual consiste en la recolecta y transporte de los residuos desde el
lugar de origen hasta las instalaciones de la empresa, en donde el material procede a ser
separado y clasificado de acuerdo a su composición, luego, los materiales obtenidos de estos
procesos son distribuidos a diferentes empresas consumidoras finales de materiales
secundarios a nivel nacional con las que EcoReciclaje mantiene relaciones comerciales;
mientras que los desechos peligrosos y contaminantes son tratados según las normativas
aplicables en el país para que su disposición final sea la adecuada.

En el caso de los circuitos impresos y materiales peligrosos, estos son enviados a empresas
en el exterior para realizarles el tratamiento específico que requieren. Algunas de estas
empresas son Umicore Precious Metals, ubicada en Bélgica, la cual se encarga del
refinamiento y reciclaje de metales preciosos; también se encuentra Sims Recycling
Solutions, con sede en el Reino Unido, ofreciendo servicios de reparación, renovación y
reciclaje de aparatos eléctricos y electrónicos, además de recuperar materiales como metales
preciosos, plástico y vidrio.
Figura 3. Proceso global realizado por EcoReciclaje Integral

Fuente: (EcoReciclaje Integral, 2019)

Por otra parte, en Caracas y en el estado Miranda se encuentra la empresa Vitaambiente

C.A., la cual se enfoca en un modelo del manejo integral de desechos peligrosos y no
peligrosos, garantizando la recolección, transporte ambientalmente seguro, almacenamiento
adecuado, valorización, reciclaje, reutilización de los residuos para que sean reincorporados
en el sector productivo y, finalmente, disposición final de los desechos que no sean
recuperables; brindando así una solución a diferentes entes públicos y privados,
gubernamentales y comunidades al darle un apropiado destino, que también resulte
económicamente sustentable, a este tipo de residuos que se generan regularmente en su
entorno.
Figura 4. Instalaciones de Vitaambiente

Trabajan conjuntamente con diferentes organismos gubernamentales locales, tales como

gobernaciones y alcaldías, además de grupos y organizaciones no gubernamentales,
realizando jornadas de recolección de aparatos eléctricos y electrónicos. Asumen el reciclaje
de pilas, baterías y demás basura electrónica, concentrando sus actividades principalmente
en bombillos ahorradores y luminarias.

Figura 5. Bombillos Ahorradores

Fuente: Vitaambiente C.A.

Figura 6. Luminarias

Fuente: Vitaambiente C.A.

La empresa dispone de equipos especialmente diseñados para la destrucción segura y

controlada de bombillos ahorradores, así como para la separación de sus componentes,
permitiendo trabajar diferentes rutas de reutilización, reciclaje o valorización de los mismos.
Además, cuentan con contenedores especiales dispuestos para el almacenamiento temporal
y seguro de lámparas fluorescentes, bombillos ahorradores y demás residuos eléctricos y
electrónicos.

Gestión en otros países

Según MinAmbiente (2017), en Colombia, existen por lo menos 36 empresas que cuentan
con licencia ambiental, concedida por las autoridades competentes en materia ambiental
regionales y urbanas, las cuales se encargan de desarrollar correctamente todos los procesos
que involucra la gestión de RAEE. De dichas empresas, 13 realizan exportaciones de los
materiales, partes y componentes que son recuperados a países como China (50,2%), Estados
Unidos (8,5%), Hong Kong (8,2%), España (6,8%), Corea del Sur (4,9%), Holanda (4,1%),
Taiwán (3,6%), Bélgica (2,1%) y otros 27 países (11,7%). Solo una cuarta parte de los
gestores formales ejecutan las actividades de desensamble, recuperación y aprovechamiento
de metales ferrosos y no ferrosos, mientras que las tarjetas electrónicas desechadas o
extraídas de los residuos son enviadas a otros países para la adecuada recuperación de metales
preciosos.

En ese país, la capacidad de gestión formal de RAEE se calcula en aproximadamente

14.000 toneladas por año. Por otra parte, no se ha realizado un estudio a profundidad referente
a la dinámica de la gestión informal de RAEE en Colombia, sin embargo, se ha llegado a la
conclusión de que, ante la falta de sistemas de recolección eficientes en el sector domiciliario,
la determinación de terceros a pagarle al usuario por su basura electrónica está ocasionando
indirectamente un rápido crecimiento del sector informal orientado al aprovechamiento de
los residuos de aparatos eléctricos y electrónicos.