ENSAYO LA GRANJA

“Todos los corazones se corrompen”. Esta historia relata de cómo un grupo de

animales que debido a la falta de atención de su dueño (Sr. Jones), deciden implantar
un sistema donde con igualdad ellos mismos dirigiesen la granja. El cerdo Wllingdon
Beaty también llamado cerdo mayor, era el más viejo y sabio de todos los animales
plantea la idea de tomar el control la cual a la mayoría de los animales les pareció
magnífica a excepción del burro cínico y malhumorado de Benjamín, que su único
función principal en la vida era ser un sinvergüenza y Mollie la yegua.
Pocos días después de plantearse la rebelión fallece el viejo mayor, asumiendo así el
liderazgo los cerdos debido a que eran los más inteligente y con mejor memoria. A
estos se les dejo un mensaje de igualdad, donde sin importar las jerarquías todos
tuvieran las mismas condiciones. En poco tiempo debido a la precaria vida de los
animales, una noche se fueron en contra del Sr. Jones y sus empleados desterrándolos
así de la granja Manor.

Al principio todos seguían las reglas acordadas, Napoleón y Snowball eran los únicos
dos cerdos que daban propuestas a los demás animales. El primero simplemente
quería mandar sin aportar nada, mientras que el segundo deseaba ayudar a los demás
dándole apoyo, enseñanzas y poniendo orden. Snowball era quien debido a su gran
inteligencia, lideraba todo tipo de actividades en la granja pero claro sin antes entrar en
un empedernido debate con Napoleón, que por su poder de convencimiento muchas
veces podía salirse con la suya.

Napoleón, un cerdo cuya inteligencia le permite destacarse y ser el más indicado para
el control de la Granja Animal, sigue al pie de la letra una costumbre habitual de los
déspotas: Sujetos carismáticos arriban como Mesías encantando a las masas, con
discursos prometedores que al momento de materializar resultan desmentidos. Savater,
en su libro Política para Amador, lo mencionó: “A la mayoría se le engaña con facilidad,
cualquier sofista o demagogo que dice palabras bonitas es más escuchado que la
persona razonable que señala defectos o problemas”. La transitoriedad de sus
gestiones se ve interrumpida por una toma del poder perpetua, desembocando en la
implantación de tiranías, y aquí no puedo resistirme a mencionar la presente situación
venezolana, donde cierto individuo es un ejemplo vivo del cerdo arribista.

Pueblos que imploran una mejor gestión que la previa se entregan a continuos
ofrecimientos desmedidos e ilusorios, considerando que “lo previo fue peor”, dando
alimento a la ignorancia o el fanatismo, cerrándose a la posibilidad de entender la
situación de estancamiento que presentan tales regímenes y, finalmente, la desmejora
progresiva que resulta peor a la padecida anteriormente. Venezuela protagoniza un
“pecado popular” de esta índole en la actualidad, con una nación en su mayoría
aferrada a lo que el destacado periodista Andrés Oppenheimer denomina como un
“narcisismo-leninismo”. Un pueblo optimista, como los personajes de la fábula
simbólica, se encuentra esperanzado en una propuesta “socialista” que dista mucho de
resultar benefactora, pero una memoria recurrente de un pasado desfavorable le
empuja a sostenerse inútilmente a promesas que la realidad va desechando.

Rebelión en la granja representa de manera sublime una situación que hasta el sol de
hoy parece continuar latente: El anhelo de particulares de concentrar bajo su figura la
totalidad del poder, el control de las instituciones públicas, la explotación de la
propaganda política, la represión y una autoridad cuyos limitantes sean ficticios,
logrando así destruir la libertad que por derecho es merecida.

Podemos observar en esta historia el reflejo de una realidad, vivida en muchos países
del mundo. En la cual se puede representar las distintas opiniones de los diversos
bandos de una sociedad dividida en jerarquías donde siempre se ha tratador de
imponer una manera de ver las cosas y de manejar las situaciones por cierto sector de
la población que pueden llevar a discusiones fundamentadas en el mal manejo o mal
funcionamiento de actividades que no cumplen con el fin para el cual fueron creadas.
Por ende en todo país siempre habrá opiniones distintas y alegatos que puedan tener
relaciones en ciertos aspectos pero que su finalidad puede variar tanto en su proceso
como en su creación. Por ende nunca habrá una totalidad de opiniones que favorezcan
por unanimidad a un bando en específico, puesto que la sociedad varía mucho en
cuando a su pensamiento y a su forma de ver las cosas y entender los puntos de vista
de aquellos los cuales no comparte con este la situación por la cual se atraviesa en
dicha población. Lo cual nos da a entender que en toda sociedad siempre existirá
distintos bandos así como los representados en esta historia donde la sociedad de
animales y humanos se ve dividida por su diferencia de intereses.