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MARE NOSTRUM

Los Henríquez del Caribe Colombiano

El Caribe,
el “MARE NOSTRUM”…
Una semblanza biográfica de
JACOBO HENRÍQUEZ DE POOL Y
DE LA FAMILIA HENRÍQUEZ
Por: Rafael de J. Henriquez

Crédito: wallpaperstock.net
CONTENIDO Prólogo
p.04 Parte I - Jacobo el personaje de la historia
p.05 1- La llegada de Jacobo a Colombia
p.07 2- ¿Quién era Jacobo Henríquez de Pool?
p.09 3- Haití, las épocas del nacimiento, la infancia y la juventud de Jacobo
p.11 4- Los Judíos en España. Éxodo o muerte
p.13 5- El éxodo y la persecución
p.17 6- La Inquisición y el linaje de los Enríquez
p.19 7- La conexión holandesa. Los primeros Henríquez en Curazao
p.22 Parte II - La tradición familiar del apellido
p.23 8- Los Henríquez en la historia europea
p.25 9- Los almirantes de Castilla
p.29 10- Los reyes Henríquez de España
p.31 11- Los reyes Henríquez de Portugal
p.32 12- Los Henríquez que emigraron de Curazao
p.36 Parte III - Colombia en la época en la que llegaron los
Henríquez a la costa Caribe.
p.40 13- La llegada a Ciénaga, (Magdalena)
p.42 14- Jacobo Henríquez de Pool, el empresario masón
p.44 Parte IV- Los descendientes de Jacobo
p.46 15- Un apellido que ha hecho historia
Primera y segunda generación (hijos y nietos)
- Ruperto Henríquez Corcho, el famoso “Musiu” Corcho
- El General Ramón Demetrio Morán Henríquez
- El Coronel Luis Henríquez Visbal
- Daniel Demetrio Henríquez
- Diógenes Henríquez Pereira
Tercera generación (biznietos)
- Guillermo Buitrago Henríquez
- Max Henríquez Therán
- Guillermo Henríquez Torres
- Rafael de J. Henríquez Therán
- Adolfo González Henríquez

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Prólogo
Para buena fortuna de quien esto escribe y para todos los Henríquez en
Colombia a quienes está dirigida esta crónica, abundan entre los miembros de la
gran familia que ostenta este apellido, los escritores. Algunos de ellos escritores de
profesión como Guillermo Henríquez Torres, Demetrio Daniel Henríquez, Adolfo
González Henríquez, Jacobo Henríquez, Daniel Henríquez Ahumada y muchos
más. Otros aficionados a escribir como el suscrito y finalmente otros más que, sin
ser escritores, dedicaron una buena parte de sus vidas a investigar los
antecedentes familiares, tales como Nelson Henríquez Pascuales y Julia
Henríquez de Silva Illera , ambos ya fallecidos. Su legado oral y escrito sigue siendo
valioso.

Para el trabajo de elaboración de este ensayo he contado con la valiosísima y


constante colaboración del historiador, dramaturgo y novelista Guillermo
Henríquez Torres, cuyo libro, “El Misterio de los Buendía”, sirvió de inspiración para
ese pequeño ensayo y a quien constantemente he consultado sobre datos
históricos relacionados con la familia en la zona del Caribe. Han sido igualmente
valiosos los aportes de otros familiares. En fin, mi labor ha sido simplemente la de
recoger aquí y allá la información existente y organizarla dándole forma.

Si bien es cierto que este trabajo gira alrededor de la personalidad de Jacobo


Henríquez de Pool (o van Pool como seguramente fue su apellido materno
holandés) está igualmente encaminado a explorar la tradición histórica de los
Enríquez españoles y de los Henríquez portugueses (que son los mismos),
...es la historia de la audacia, personajes todos multifacéticos y trashumantes, exaltados algunas veces y
de la creatividad, del orgullo, condenados otras, pero que dejaron sin duda huellas indelebles en el pasado.
del tesón y del idealismo en
cada época. La historia de los Henríquez, hombres y mujeres, es la historia de la audacia, de la
creatividad, del orgullo, del tesón y del idealismo en cada época. Desde tiempos
remotos hasta el presente, han sido indistintamente guerreros, nobles
cortesanos, santos, artistas, marinos, corsarios, descubridores, empresarios,
científicos amén de muchas otras cosas buenas y no tan buenas. Lo cierto es que
todos han vivido la vida con vibrante intensidad a cada instante de la misma,
siempre con la mirada fija más allá del horizonte inmediato.

El objetivo de este escrito, dedicado a todos los Henríquez, se vería ampliamente


realizado si las informaciones en él contenidas llegasen a servir a los actuales
miembros de la colectividad de todos aquellos que llevan el apellido, para que
profundicen en sus propias raíces como una forma más de valorar la existencia
que les ha sido dada y vivirla con la integridad, el valor y la dignidad que merece.

Rafael de J. Henríquez Therán

Feb. 2010
Mare Nostrum
Parte I - Jacobo el personaje de la historia

Crédito: zeuthen.desy.de “Busqué en el pasado mis raíces...


y en secreto me identifico con ese antepasado
del que calló su nombre por prudencia;
ese HENRÍQUEZ inmortal e idealizado,
de quien ambiciono heredar su rica ciencia”.

Madalina Henríquez A.
1-La llegada de Jacobo a Colombia
Con el paso de los años se hace difícil reconstruir los hechos con exactitud, en
especial si se trata de acontecimientos lejanos en el tiempo y el espacio, sucedidos
en circunstancias diferentes a las actuales, en las que las acciones y motivaciones
pudieran poseer significados diversos. Sin embargo, los testimonios fidedignos
no pierden su valor fundamental. Vayamos a ellos.

Dice el escritor Alfredo González Henríquez (“El Caribe Colombiano”) lo siguiente:

“En la década de 1820 llegó a la costa Caribe mi tatarabuelo materno, el capitán


holandés Jacobo Henríquez de Pool, un judío sefardita a quien cabría perfectamente
el antiguo chiste semita: "Donde hay un judío, hay por lo menos tres partidos
políticos". El "musiú" Jacobo (en esa época le decían "musiú" a todos los extranjeros),
Crédito: zeuthen.desy.de marino de oficio, era una verdadera enciclopedia de nacionalidades: su origen
sefardita y su piel morena lo hacían oriundo de España, su patente de corso (pirata
con licencia) y sus vínculos comerciales inmediatos lo convertían en miembro de la
comunidad holandesa de Curacao”

“Su matrimonio con mi tatarabuela, la niña Anita Ricardo, rubia y blanca como un
camafeo e hija de un militar inglés, le abría, junto con su calidad de masón grado 33, el
trato con Inglaterra y con la comunidad intelectual de todo el continente. En pocas
palabras, estaba con Dios y con el diablo: con razón nunca le pudieron comprobar los
rumores de contrabando que con frecuencia le acompañaron”

En pocas palabras, estaba con Dios y “Se sabe que Jacobo nació en Santo Domingo y que luchó por la independencia de ese
con el diablo: con razón nunca le país. Se sospecha que tuvo muchas aventuras galantes: dicen que el pueblo de
pudieron comprobar los rumores de
contrabando que con frecuencia le Manaure (Guajira) fue poblado mediante los cruces de los Henríquez de Curacao,
acompañaron entre ellos el "musiú" Jacobo, y las indias del lugar. Se sabe, en cambio, que tuvo una
hija con una esclava en Martinica, Anita Henríquez, traída a Colombia por su papá en
1856 y madre, a su vez, de Digna Cabás Henríquez, legendaria bailadora de ritmos
negros en Ciénaga durante la primera mitad del siglo XX.”

“Precisamente en Cienaga fue donde se instalo definitivamente el “musiú” Jacobo y


allí tuvo un hotel de madera sobre ruedas. Como el impuesto municipal, dice la
leyenda, se tasaba por noche pasada en el predio, el "musiú" Jacobo lo evadía
sacando el hotel del predio para ponerlo a dormir todas las noches en la calle.”

“Y al morir este corsario, cuya misión original había sido convertir a los territorios
recién liberados de España en zona de influencia holandesa, no sólo había logrado
este objetivo inmediato, sino otro más difícil y significativo: integrarse a la sociedad
formal del antiguo estado soberano del Magdalena, dominada desde Santa Marta
por terratenientes y funcionarios coloniales de credo católico y ancestro español.

“Para ello se asoció con algunos notables samarios para exportar tabaco desde sus
propios cultivos en Ciénaga donde, a diferencia de lo que sucedía en otros cultivos de
tabaco en el país, la explotación económica utilizaba relaciones laborales modernas
como el trabajo asalariado; sobra decirlo, esta empresa se apoyó en sus vínculos con
el capital comercial holandés afincado en Curacao”.

“Su prestigio no sólo estaba en el comercio y la guerra, sino también en el arte. Formó
parte de un proyecto cultural desconocido pero importante en la Santa Marta del
medio siglo, que conocía un momento de prosperidad: la Sociedad Filarmónica de
Santa Marta, segunda sociedad de conciertos fundada en el Caribe colombiano,
después de la de Cartagena, en cuyos eventos participaron como cantantes y
pianistas sus sobrinas Eloísa y Josefina Henríquez, aunque las cualidades artísticas
familiares se mostrarían en todo su esplendor mucho tiempo después de su muerte, y
en campos distintos al de la música clásica, con su bisnieto Guillermo Buitrago
Henríquez, el juglar cienaguero que también fue el primer éxito radial de la música
vallenata durante muchos años”.

Veamos ahora el testimonio de otro hombre de letras de la familia, Guillermo


Henríquez Torres, en su libro “El Misterio de los Buendía” (Edit Nueva America
2006):

“Cuando el viejo Jacobo Henríquez tomaba una decisión, se podía esperarlo todo.
Quizá lo mejor suyo fue raptar una mañana a la dulce Anita Ricardo, que apenas salía
del colegio para regresar a su casa en Curazao. Las playas de Ciénaga acogieron a los
furtivos amantes en 1850.”

Agrega Torres Henríquez más adelante en su libro:


...su bisnieto Guillermo Buitrago
Henríquez, el juglar cienaguero que
también fue el primer éxito radial de la “Su itinerario de navegante lo llevaba hasta los confines del mundo, en busca de
música vallenata durante muchos años aventuras. Él era un aventurero perteneciente a la West India… Entonces va a la
floreciente aldea de Ciénaga como cultivador de tabaco. Al retirarse de la vida
marítima, ya viejo y algo cansado, vende su goleta “Anita” avaluada en diez mil pesos
en Cartagena , donde poseía una casa en la calle Gastelbondo...Al fracasar la
sociedad del tabaco, abre un almacén mayorista en los bajos del balcón, el único de la
aldea, aledaño a su choza primitiva… Es el primer almacén de que se tiene noticias en
Ciénaga. Los negocios debieron serle favorables, puesto que inmediatamente le
compra a un señor de Santa Marta, el balcón del general Carmona, revolucionario
radical.”

“No se han encontrado documentos que permitan conocer la fecha del nacimiento
del navegante, pero deducido que le llevaba a su viuda treinta años y que fallece en
1864, pudo haber nacido en 1800 en Haití. Hablaba francés y holandés, el español
nunca lo aprendió. Los Henríquez de Pool debieron emigrar a esa isla desde Curazao, a
raíz de una crisis económica en las Antillas Holandesas junto con otras familias
hebreas Los padres de Jacob fueron Domingo Henríquez y Margarita de Pool, inglesa.”

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2-¿Quién era Jacobo Henríquez de Pool?
Hablar de aquel hombre llamado Jacobo, un aventurero por naturaleza en
tiempos en que la vida era una verdadera aventura, no es fácil, en especial si se
intenta explicar su comportamiento dentro de los conceptos éticos actualmente
aceptados como normales. La época en la que vivió y en la que vivieron sus
antepasados, estaba lejos de la placidez y normalidad que hoy en día se
consideran ideales.

Era el tiempo en el que las poderosas monarquías del viejo continente se


debatían en luchas incesantes en busca del predominio social y económico; una
época en la que el mundo se partía en dos al descubrirse nuevas tierras más allá
del mar y se abrían nuevos horizontes al conocimiento humano; años en los que
el poder religioso, al ver amenazada la estabilidad de su imperio autocrático por
las nuevas ideas, las nuevas gentes y las nuevas tierras, castigaba sin misericordia
a reyes y plebeyos que osaban desviarse de los credos institucionalizados, por
Jacobo Henríquez de Pool medio del Santo Oficio de la Inquisición.

La normalidad de la vida de entonces, estaba lejos de serlo. Personajes como


Jacobo Henríquez de Pool y varios miles como él, eran el prototipo del “hombre
de la época”, gentes que utilizaban el mar como teatro de operaciones de sus
actividades y que estaban obligados a preservar sus bienes, su vida y la de los
suyos con el filo de la espada; que guerreaban contra los piratas - o lo eran de
acuerdo con las circunstancias- y que iban de un lado a otro del mar en busca de
amores de oportunidad y de fortunas de ocasión.
...y que estaban obligados a preservar
sus bienes, su vida y la de los suyos con Hablando de Jacobo, dice Henríquez Torres que:
el filo de la espada

“Era el navegante, un hombre alto, elevándose casi a los dos metros, moreno, usaba
bigotes largos, la principal característica de su rostro era la nariz larga y aguileña,
propia de los semitas. Tuvo alrededor de sesenta hijos con diferentes madres y en
diversos lugares. Se dice que cada mañana se paraba en el portón de su casa para
entregar el diario a sus distintas mujeres. Todo esto era soportado y hasta celebrado
por su hermosa y juvenil mujer Anita Ricardo Hermann, de quien se cree que era
nacida en Coro, Venezuela, aunque también se afirma que era de Túnez.”

No faltan versiones diferentes respecto la historia del navegante Jacobo. Uno de


sus descendientes afirma que con anterioridad a su matrimonio con Anita había
estado casado en Curazao con otra dama, que él sí hablaba el castellano con
fluencia ya se hizo pasar por español a su llegada a Santa Marta y que además era
agente secreto de la Corona Holandesa. Un hecho curioso, aunque no extraño en
esas épocas de intolerancia religiosa, se dio al parecer durante un banquete
ofrecido en su honor como prestante hombre de negocios por la alta sociedad
samaria, cuando al negarse a consumir un plato de cerdo, sus creencias judías, de
las seguramente se sospechaba, quedaron de manifiesto; por esto fue
encarcelado algunos días.

El marino Jacobo, en mi opinión una réplica del famoso “ Holandés Errante” de


quien se dice que hizo un pacto con el diablo para surcar los mares en contra de las
fuerzas naturales y cuya leyenda fue inmortalizada por Richard Wagner en su
ópera (De Vliegende Hollander) , es fundamental en la historia de los Henríquez del
Caribe colombiano. Lo es, no porque fuese el primer Henríquez que pisase el
territorio nacional - otros Enríquez y Henríquez lo hicieron antes- sino porque fue
en realidad uno de los pocos, sino el único, que definitivamente “vino a quedarse”
y a enraizarse en esta tierra rica y exótica en la que sentó sus reales, levantó una
familia ¿o muchas?, creó arriesgadas empresas que prodigaron riquezas a propios
y ajenos, y en la cual murió.

Ya habían venido personajes Henríquez al norte de Colombia y a todo el país. Dice


Correa Díaz Granados en “La Historia de Ciénaga”, que en 1510 el conquistador
Rodrigo Henríquez de Colmenares visitó esa región en busca de oro, mantas y
alimentos…y que en 1820 durante la campaña libertadora vino a luchar por la
Independencia, el teniente Jorge Henríquez natural de Curazao. Hay datos
históricos que afirman que un pueblo y fortaleza donde hoy en día se encuentra la
ciudad de Barrancabermeja, fue fundado por Luis Henríquez en Febrero de 1601 al
igual que Tenerife (Magd) que fue fundado por el Capitán Francisco Enríquez el
día 20 de Enero de 1543. Y que otro Luis Henríquez, Oidor de la Real Audiencia,
fundó a Guasca, Cundinamarca en Junio de 1600 y a Cáqueza el día 23 de Octubre
de 1600. Existen muchos más ejemplos de personas de éste apellido venidas al
país antes de 1840.

...sino porque fue en realidad uno de los Pero algo es cierto, el tronco fundamental de la familia Henríquez de la Costa
pocos, sino el único, que
definitivamente “vino a quedarse” y a Atlántica es sin lugar a dudas Jacobo Henríquez de Pool.
enraizarse en esta tierra rica y exótica...
En opinión de quien esto escribe, Jacobo Henríquez de Pool sintetizó en su
temperamento visionario, arrollador y audaz, múltiples características físicas,
emocionales y mentales que afloraron en sus acciones, lógicas algunas producto
de un sano raciocinio, emocionales otras en las que demostraba gran sensibilidad
artística y otras, bastante alborotadas, en las que afloró su exaltada virilidad,
quizás como producto de su heterogeneidad racial ancestral.

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3- Haití, las épocas del nacimiento,
la infancia y la juventud de Jacobo

Los barcos de la época de Domingo y Jacobo


Crédito: modelismocolombia.com

Los padres de Jacobo, Domingo Henríquez y Margarita de Pool debieron llegar a


...el odio a los judíos, la mayoría
procedentes de Curazao, se la isla La Hispaniola (Haití) entre 1785 y 1800 procedentes de Curazao.
manifestaba particularmente durante Precisamente, el escritor dominicano Carlos Esteban Deive en su ensayo “Los
las procesiones de Semana Santa
Judíos en el destino de Quisqueya, “Judíos y la dominación haitiana” -Diario “Hoy”
de Santo Domingo- dice, para ilustrar la crítica situación de los emigrantes judíos
en esa época, lo siguiente:

“Santo Domingo pasó a manos francesas en 1795. La migración masiva de judíos


ocurriría entre ese año y 1814 el odio a los judíos, la mayoría procedentes de
Curazao, se manifestaba particularmente durante las procesiones de Semana
Santa. Mujeres y niños portaban maniquíes que representaban a esos judíos,
muñecos que quemaban en calles y plazas mientras los soldados les disparaban
tiros de fusil. A veces, el furor llegaba a extremos de derribar y saquear las casas de
aquellos. Agrega que el año anterior al de su llegada, tres judíos fueron degollados
y varios franceses refugiados tuvieron que esconderse para hurtarse de las iras del
populacho.”

La presencia “formal” de los judíos en Santo Domingo y Haití y su participación en


la guerra de independencia de la República Dominicana, ocurre a inicios de 1800 y
con más significación durante la dominación haitiana de Jean Pierre Boyer .
De hecho, Domingo Henríquez, (el padre de Jacobo) nacido en Curazao,
empresario marítimo, parece haber jugado un papel importante no sólo en la
guerra entre las tropas haitianas y dominicanas, sino anterior o quizás
simultáneamente en la contienda de la liberación de Venezuela de España.

Existen relatos aislados, dignos de fe, de algunos cronistas de Curazao, en los que
se habla de la colaboración prestada por Domingo Henríquez al Almirante Brion,
aliado de Bolívar, no sólo en el movimiento de tropas y armas de Curazao a
Venezuela, sino también en el transporte marítimo del Libertador a La Hispaniola
con motivo de su visita a Alejandro Petión ,regidor de Haití por esa época. Es muy
probable que las naves de Domingo Henríquez fuesen las mismas que se hicieran
cargo del viaje de la hermana de Bolívar, doña María Antonia Bolívar, de Curazao a
La Habana y de allí a Haití donde residía su sobrino Guillermo Palacios.

Al parecer los lazos de la extensa familia Henríquez de Curazao con la revolución


liberatoria encabezada por Bolívar y Miranda en Venezuela eran muy estrechos.

Dice el “Registro Histórico de la Comunidad Sefardí de Curazao” que:

“Los sefardíes de Curazao también se distinguieron militarmente. Un sefardí, el


capitán Benjamín Henríquez se unió a Simón Bolívar en la guerra de la
independencia de Venezuela. Otros muchos Henríquez lo hicieron.

Al parecer era don Domingo una persona cuyas actividades estaban rodeadas de
una estricta confidencialidad ya que, siendo en teoría enemigo de la Corona
Inglesa, su colaboración con la liberación de Venezuela le hacía a su vez enemigo
Un sefardí, el capitán Benjamín de España y de cierta forma amigo de Inglaterra. Al parecer, su actividad como
Henríquez se unió a Simón Bolívar en la
guerra de la independencia de transportador marítimo excluía la fidelidad a compromisos políticos
Venezuela internacionales y se basaba fundamentalmente en la productividad económica
más que en ninguna otra consideración.

Sea como fuere, en ese ambiente nació y se desarrolló Jacobo. Los primeros años
de su juventud debieron ser un ir y venir junto a su padre en continuos periplos
oceánicos que tocaban los puertos de Haití, Curazao, Venezuela, Cuba, Cartagena,
Riohacha, Isla Margarita, Paramaribo, Veracruz, Santa Marta y otros, llevando de un
lado a otro, pasajeros, tabaco, añil, caña de azúcar, bananos, pólvora y municiones,
las más de las veces de contrabando. Más tarde, siendo Jacobo un adulto, cruzaría
el Atlántico en sus propias naves, trayendo esclavos negros, manufacturas
europeas, cañones alemanes, licores de España, Holanda y Francia, sin hablar de
los brocados de Damasco, las sedas chinas, los linos italianos y las espadas de
Toledo. Dice Henríquez Torres que

“hasta llegó a remontar tiempo después, la corriente del río Magdalena en una goleta
y varias embarcaciones fluviales, bongos, en los que trasladaba pasajeros y productos
agrícolas a partir de un puerto propio en la zona del mercado de Barranquilla”.

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4- Los judíos en España, éxodo o muerte
La casi totalidad de los Henríquez que vinieron a América eran “ sefarditas”, judíos
españoles o portugueses, salidos de sus respectivos países ante la persecución de
las coronas española y portuguesa en las épocas del descubrimiento de América
contra de quienes profesaban esa religión. Centenares de familias de nuestro
apellido fueron forzadas, junto con muchas otras, a abandonar los países ibéricos
so pena de enfrentar la amenaza de ser juzgados implacablemente por El Santo
Oficio, La Inquisición.

Un documento de la “Universidad Autónoma de Méjico” Marzo 98, explica, desde


sus remotos comienzos, el proceso y las causas de la emigración judía sefardí de la
península ibérica.

“Los hispano-hebreos, establecidos en la península ibérica desde el siglo I,


atravesaron por períodos alternados de paz y violencia hasta finales del siglo XV,
cuando se lanzó el edicto de expulsión, en 1492. Cuando los árabes invadieron la
península, en el 711 d. C., los judíos experimentaron una época de libertad
condicionada, ya que los musulmanes respetaron sus prácticas religiosas y sus
Isabel la Católica
costumbres, incluso confiaron en ellos para la defensa de las ciudades recién
Crédito: arteguias.com conquistadas (Sevilla, Granada, Toledo, etc.). La época del califato representó para
los judíos un espacio de tranquilidad que propició el desarrollo cultural de sus
comunidades y el posicionamiento del poder al lado de los gobernantes”. Al subir
al trono los Reyes Católicos, la situación heredada cargaba con vicios y aciertos
arrastrados desde la Edad Media: la fe cristiana interactuaba con las decisiones
...so pena de enfrentar la amenaza de políticas, es decir, había una identificación inseparable entre política y religión.
ser juzgados implacablemente por El
Santo Oficio, La Inquisición
La clave fundamental de la decisión de expulsión parece haber sido la presión que
ejercía el Papa Sixto IV sobre los Reyes Católicos, especialmente sobre Isabel,
quienes accedieron a solicitar, de acuerdo con el deseo papal, el establecimiento
en España del Tribunal del Santo Oficio, mejor conocido como la Inquisición.
Como primer Inquisidor General fue nombrado el dominico Tomas de
Torquemada, confesor personal de la reina de Castilla y hombre fundamental en la
expulsión de los judíos de España.

Sepan los lectores de este ensayo, que la pugna entre las autoridades eclesiásticas
y en general de la comunidad ibérica en contra de las prácticas religiosas de los
judíos españoles, no era nada nuevo. Desde siglos atrás los “sefardíes “ o
“sefaraditas” ( que en lengua judía significa “español” ) eran presionados para que
abjurasen de su fe y se bautizasen en la fe católica. Por su renuencia a comer la
carne de cerdo (en árabe moharrama), se les llamaba despectivamente “marranos”
palabra que se utiliza hoy en día para referirse al cerdo domestico.

Muchas familias judías españolas aparentaron aceptar el bautismo católico


aunque secretamente siguieron practicando su propia religión. Al ser
descubiertas eran castigadas por la Inquisición. Se les identificada por sus
comidas, sus costumbres y en especial por el lenguaje que usaban, un español
antiguo difícilmente entendible al que llamaron “ladino”, expresión utilizada para
calificar la falsedad y el engaño.

Sobre el tema de la expulsión judía, sigue diciendo la crónica de la U. A.M:

De esa forma, los Reyes Católicos lanzaron el edicto irrevocable de expulsión el 31


de marzo de 1492. Las alternativas entre las que los hispano-hebreos se vieron
Expulsión de los judíos en 1492, grabado forzados a elegir eran el exilio o la conversión al cristianismo. Así, algunos optaron
coloreado del siglo XIX. Madrid, Biblioteca
Nacional. por abandonar su país en busca de libertad de credo; otros, anular sin
Crédito: kalipedia.com cuestionamientos su religión. Sin embargo, un tercer grupo decidió aferrarse a sus
creencias judías, pero aparentando prácticas ajenas.”

La mayor parte de los exiliados vivió una etapa de búsqueda donde establecerse.

Algunos de los Enríquez judíos se trasladaron a Portugal que les permitió su


estancia durante ocho meses a cambio de una cuota.( Es posible que dentro de ese
proceso el apellido adquiriera la “H” que hoy ostenta en muchos casos). Otros del
mismo apellido se refugiaron en Holanda. Quienes buscaron asilo en Portugal no
tuvieron mucha suerte. Sólo cinco años más tarde (1497) el reino de Portugal
decretó a su vez una nueva expulsión de los judíos sefardíes españoles.
Obviamente, los Henríquez entre éstos.

Nota: Una crónica sobre el apellido Henríquez publicada por Editorial Panamá
America, EPASA en 1995 afirma que:
Así, algunos optaron por abandonar su
país en busca de libertad de credo;
otros, anular sin cuestionamientos su “En puridad, Enríquez es la forma literal del apellido en España; la variante
religión. Henríquez es oriunda de Portugal; no obstante esta distinción, el transcurso de las
épocas, la negligencia de los escribanos y párrocos, y la natural inestabilidad
idiomática propia de los siglos renacentistas y coloniales fueron los factores
decisivos para la confusión gráfica de ambos apellidos.”

Aquí surge algo curioso y contradictorio que sin dudas maravillará a los
Henríquez. que lean estas páginas. Como dicen por ahí, “las vueltas que da la vida”.

El Decreto de Granada de 1492 que expulsó a los judíos de España, estaba


lógicamente firmado por los reyes Católicos, por la reina Isabel de Castilla, gestora
de la idea, y por el rey Fernando de Aragón. Este rey, Fernando II, se apellidaba “de
Aragón y Enríquez” ya que era hijo de Juana Enríquez (hija de Fadrique Enríquez) y
Juan II de Aragón, El Grande. Vea usted. Y no sólo eso, su hija Isabel de Aragón y
Enríquez quien pasó a ser reina de Portugal al casarse con Manuel I, fue quien
presionó a su marido, para darle gusto a su madre, para que se expulsase a los
judíos de Portugal en 1497. ¿Cómo les parece?.

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5- El éxodo y la persecución

Iglesia de San Julián (Portugal)


Crédito: worldisround.com
Muchos de los Henríquez viajaron exilados a Ámsterdam ya que en Holanda los
sefardíes eran bienvenidos. Allí se asentaron y crearon grandes familias que se
...viajaron exilados a Ámsterdam ya extendieron por el norte de Europa (Dinamarca, Suecia y Alemania) modificando
que en Holanda los sefardíes eran
bienvenidos.
su apellido a “Hendriks”. Algunos optaron posteriormente por establecerse en
Curazao. Otros viajaron directamente a Curazao, México, Brasil, y Perú o a otros
lugares del mundo.

La expulsión de algunas ramas de la familia de los Henríquez de España es narrada


en el libro “Fronteras de la Historia” Vol. 5 de la siguiente forma:

Los Henríquez dejaron España en 1492. De ahí pasaron a Portugal por algunos
años y tuvieron que convertirse y añadir a su apellido original (Henríquez) el
Juliao, apelativo adicional referido al lugar a donde llegaron (la parroquia San
Julian de Lisboa). Hay que tener en cuenta que "Juliao" originalmente en
portugués no era apellido sino nombre y corresponde al español Julian o incluso a
Julio)

Después de que fueran expulsados también de Portugal se fueron a Ámsterdam,


Holanda y a otros países. Muchos volvieron al judaísmo otra vez. Es probable que
en ese momento hayan acortado el apellido a H.JULIAO para distinguirse de los
muchos otros Henríquez judíos que existían (El apellido Henríquez, a veces sin H,
Enríquez, era muy común entre los judíos españoles).
La Diáspora Sefardie
Crédito: liceus.com

Los Henríquez holandeses

Parecería ser que el tronco familiar del cual, siglos después, se desprenderían los
antecesores holandeses de Jacobo Henríquez y de los Henríquez de la Costa de
Colombia puede seguirse con certidumbre relativa en el pasado hasta mediados
del Siglo XVI tal como aparece en una crónica de Isaac Da Costa ( Noble Families
Among the Sephardic Jews) (1989) en la que se refiere a los judíos sefardíes que se
asentaron en Ámsterdam, Holanda, a mediados del Siglo XVII , datos que
coinciden con los de la “Studia Rosenthaliana Vol. 12 Pág. 253.
Se resaltan en negrilla aquellos
Henríquez que aparentemente
constituyen la sucesión de antecesores Dice el cronista que:
de Jacobo.

-“Manuel Pimentel Henríquez (alias Isaac Abeniacar) - 1563-1614-Holanda, de


ascendencia portuguesa, radicado en Francia y posteriormente en Venecia(1594)
quien fue miembro de la corte francesa y quien, gracias, entre otras cosas, a su
habilidad en los juegos de naipes se transformó en uno de los hombres màs ricos
de la comunidad sefardita. En Ámsterdam hizo grandes donaciones a la ciudad
entre ellas la compra de un terreno para la construcción del cementerio judío de
Ouderkerk, siendo el primer sefardí sepultado en él Se casó en 1558 con Violante
Pimentel, hermana del rabino de Constantinopla, el Rvdo. Alvaro Jacob
Abeniacar. Fueron sus hijos fueron Afonso y Felipe

Afonso Henríquez, (alias David Senior) nació en 1590.

Felipe Henriquez (Jeudah Senior y Pimentel) nació en 1589 en Amberes, Bélgica


y murió en Ámsterdam en 1656. Se casó con Esther de García Mordechai Pimentel .

Nota: Existe una observación en la publicación “ Emnanuel” (New York Blosch

p. 14 / 15
Publishing Co) que pone en duda el lugar de nacimiento de Felipe :Dice lo
siguiente:

“La familia Henríquez había estado presente en Ámsterdam desde antes de 1589
como se evidencia en la partida de nacimiento de un Philip Henríquez (b. 1589 d.
1656), en Ámsterdam. Esta familia había emigrado de Portugal a Holanda a finales
del Siglo XV y allí la mayoría de sus miembros se dedicaron al comercio marítimo.

Hijos varones de Felipe: Jacob Fundam y Mordechai de Jeudah Senior.

-Jacob Fundam Henríquez nació en 1618. Se le conoció con el nombre de Jacobo


Fundao. Se radicó junto con su hermano Mordechai en Recife , Brasil y se dedicó al
comercio entre Brasil, Barbados, Londres y Curazao.

Mordechai Henríquez de Jeudah Senior- Nació en 5 de Julio de 1620.y murió en


1689 en Ámsterdam. Se caso con Sara de Moses López en 1658.Sus hijos varones
fueron Phillip Henríquez (Jacob Senior),David, Abraham, Salomón e Ishak,
Benjamín, Salomón y otros.

Phillip Henríquez (Jacob Senior)-Nació en 1663 en Ámsterdam y murió en 1717


en Curazao. Fue comandante de navíos por encargo del los Gobiernos de Holanda,
Inglaterra y Portugal en la Compañía West Indies. Sus múltiples actividades
marítimas incluyeron el transporte de esclavos, el contrabando y, según algunos,
la piratería. Estuvo prisionero en la Inquisición de Cartagena de Indias y fue
liberado tras algunos meses de prisión.

Hacia 1700 ya eran 2000 personas. Se


dedicaron al cultivo del tabaco y la caña
David Mordecai Henriquez (David Senior) Nació en Ámsterdam en 1664 y
de azúcar. Luego al comercio. murió en Curazao en 1749.Participó en actividades de transporte marítimo junto
con su hermano Phillip (Felipe) al servicio de la West Indies..Se casó con Sara Hana
Isaac de Marchena y entre 1720 y 1750 tuvo tres hijos: Jacob de David Henríquez
(Senior), Abraham de David Henríquez Senior y Mordechai Isaac de David
Henriquez Senior.

En el texto de “Fronteras de la Historia Vol. 5” aparecen datos sobre la salida,


algunos años antes, de algunos de los descendientes Henríquez hacia Curazao :

“En 1651 doce familias judías de Ámsterdam atravesaron el Atlántico para


establecer en Curacao una nueva congregación judía. Algo después, los judíos de
Portugal y Brasil, que escapaban de la persecución religiosa, entre ellos los
Henríquez Juliao, se unirían a esta comunidad. Hacia 1700 ya eran 2000 personas.
Se dedicaron al cultivo del tabaco y la caña de azúcar. Luego al comercio.

En 1732 se fundó la primera sinagoga del hemisferio occidental: la sinagoga


Mikwe Israel-Emanuel, en Willenstad, la capital de Curacao. Entre 1759 y 1802, la
comunidad judía holandesa financió la emigración a las colonias americanas:
durante ese período, 136 familias fueron enviadas a Surinam, 72 a Curacao y 15 a
Jamaica.

“La pesadilla continúa”

Pero con el viaje al Nuevo Mundo no terminaron las penurias judías. La Inquisición
les siguió los pasos a quienes viajaron a América a través del establecimientos de
Inquisiciones de ultramar como las de Cartagena, México y Lima, entre otras.

Dice el libro “Los criptojudios y la Inquisición” de Matilde Gini de Barnatàn lo


siguiente:

Un prisionero torturado a manos del Tribunal


de la Santa Inquisición española, en torno al
“La maquinaria inquisitorial – paciente y tenaz – atravesaba continentes y
año 1500. océanos en su persecución hasta encontrar a los herejes y a los familiares y
Crédito: GETTY Images
sospechosos. Como el caso de la familia Henríquez. Los Henríquez eran
consideradas personas de las “prohibidas” por su adhesión secreta al judaísmo. Las
primeras denuncias provenían de Málaga, España, donde debido a ciertas
palabras y actitudes se les identificaba como judíos.

Afirma un registro histórico ( G.Deutsch Meyer Keiserling ) lo siguiente:

Muchos “Marranos” de apellido "Enríquez" cayeron víctimas de la Inquisición. En


1642 las hermanas Rafaela, Juana y Micaela Enríquez fueron juzgadas a ser
quemadas “en esfigie”. Igualmente lo fue Blanca Enríquez en Mejico. En 1680 una
familia entera de apellido Enríquez, compuesta por Antonio y María Enríquez fue
quemada “en persona”. Luis Enríquez su viuda María y su hija fueron sentenciados
La maquinaria inquisitorial – paciente y
tenaz – atravesaba continentes y a prisión perpetua. Blanca Enríquez y Beatriz Núñez Enríquez fueron quemadas
océanos en su persecución hasta “en esfigie”. Fueron sentenciados a diferentes penas, incluyendo la muerte en
encontrar a los herejes y a los familiares
y sospechosos. algunos casos, Josefa Enríquez, Catalina Enríquez, Luis Enríquez y Gaspar
Enríquez.

Estos fueron sólo algunos hechos dolorosos. Existieron centenares de otros en los
que, tristemente, ¿sería coincidencia? apareció casi siempre involucrado el
apellido Enríquez. Esto sucedió siglos atrás, mucho antes de la llegada de Jacobo
Henríquez de Pool y otros del mismo apellido a la zona del Caribe colombiano.

Debemos por lo tanto echar una ojeada a los tiempos pasados y revisar la historia
de la suerte corrida por las primeras migraciones de los Henríquez hispano-
portugueses a America.

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6- La Inquisición y el linaje de los
Enríquez
Dice Ricardo Escobar Quevedo (“Inquisicion y Judaizantes en la America
Española”- Edit Universidad del Rosario,2008-pag 51) lo siguiente:

“El núcleo del grupo “marrano”(judío) de origen portugués está constituido por
los linajes Enríquez y Lucena. Alrededor de ellos giran otras familias igualmente
emblemáticas del “marranismo” americano, con las que están unidas a través de
varias alianzas matrimoniales los Vàez, los Rivera, los Tristán y los Tejoso. La vida de
una pareja parece particularmente interesante como para que sirva de modelo
del período de implantación en las Indias ; se trata de aquella formada por
Francisco López Enríquez e Isabel Lucena, avecindados en Cartagena de Indias
hacia 1593 y quienes luego de varias peripecias se instalaron definitivamente en
Méjico”.

“La familia Enríquez, originaria de la población portuguesa de Crato, había llegado


a Sevilla a mediados del siglo XVI. Allí ve el día la generación siguiente y allí será
iniciada en la práctica del judaísmo. Cuatro ramas de esta familia van a emigrar al
Nuevo Mundo. El ya mencionado Francisco López Enríquez va a Cartagena
mientras que tres primas hermanas suyas se embarcan hacia Méjico. Ellas y sus
padres van a convertirse en el centro de la comunidad “marrana” mejicana: entre
ellas se encuentra la “dogmatista” Blanca Enríquez (se señalaba como tal en el
lenguaje inquisitorial a aquellas personas conocedoras y profesoras de la Ley de
Moisés)…”
El “sanbenito” era una pena que le
imponía a los judíos, consistente en
llevar a todas horas una camiseta “Hasta entonces los Enríquez-Lucena instalados en Cartagena de Indias no habían
amarilla con la cruz roja de San Andrés
que lo identificaba como un “marrano”.
sido inquietados. Sin duda la ausencia de tribunal en el área Caribe (éste sólo será
fundado en 1610) dejaba a los cristianos nuevos judaizantes una cierta libertad y
capacidad de maniobra en sus negocios. Es así que en corto tiempo ya habían
amasado una considerable fortuna, gracias a las tiendas que poseían en el puerto
caribeño y al comercio de perlas, esmeraldas y esclavos en dirección a Méjico.

La suerte de la familia Enríquez radicada en Cartagena no duró mucho tiempo.


Uno de sus parientes Lucena quien había sido capturado por las autoridades de la
Inquisición, denunció ante la Inquisición de Perú en 1605, a López Enríquez, quien
se había trasladado a Lima, de haber “judaizado” en Cartagena y en Sevilla con sus
familias. A López Enríquez le son confiscados sus bienes y condenado a llevar el
sanbenito durante tres años, además de a tres meses de prisión.

Pero la suerte acompañó a López Henríquez. En 1606 le llegó del Alto Tribunal
religioso, el ansiado perdón. Sus bienes le fueron devueltos, fue liberado después
de 1370 días de cárcel y se le autorizó quitarse el sanbenito. Eso sí, debió pagar una
gran cantidad de dinero (673 pesos y tres tomines) para cubrir los “gastos”
generados a la curia por su encarcelamiento. Dicen algunos que la transferencia
de algunos de sus bienes a las autoridades del Tribunal inquisidor de Lima, hizo el
ansiado milagro. Su esposa Beatriz que había permanecido en Cartagena, no tuvo
la misma suerte. Fue condenada a prisión por el Santo Oficio siendo ya una
anciana y murió al poco tiempo. Una de sus hijas, Blanca, se dice fue quemada en
persona algunos años después por el Tribunal de Cartagena.

El edicto de perdón papal a los judíos en a finales del siglo XVI causó cierto
disgusto a los radicales religiosos. En Méjico, donde se fue a residir López Enríquez
tras la muerte de su esposa, se horrorizaban que un “marrano” judío, traficante de
esclavos años atrás, anduviese haciendo alarde de su gran fortuna en público.
Un penitente usando el “sambenito”. de A
Life de John Hawkins. Schlegel, Hermann
(1804 a 1884). del Traité de Fauconnerie
Crédito:
skinnersroomfiveyears.blogspot.com

Para quienes no estén relacionados con


las macabras definiciones de la
Inquisición, la quema en “esfigie”
implicaba que no se quemaba
realmente a la persona sino una estatua
o esfigie de ella o sus pertenencias más
queridas. Esto no evitaba que se le
aplicase simultáneamente una
confiscación de bienes, pena de cadena
perpetua, flagelación o el
cercenamiento de algún miembro. En
otros casos se decretaba la muerte por
“quema en persona”, castigo que no
necesita mayor definición.

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7-La conexión holandesa de ultramar.
Los primeros Henríquez en Curazao.
La isla de Curazao fue descubierta por los españoles en 1499, más exactamente
por Alonso Ojeda, uno de los tenientes de Cristóbal Colón. La isla permaneció
española hasta ser conquistada en 1637 “por una expedición holandesa en la que
participaron judíos establecidos en Holanda” (Escobar Quevedo).

A partir de ese entonces, el lugar se convirtió en un sitio de almacenamiento y


provisión de esclavos traídos del África como trabajadores de las plantaciones en
Antiguo barco holandés
Crédito: vandaag.be varios países del continente. Quienes traficaban con esclavos hicieron grandes
fortunas o multiplicaron las ya habidas.

Tal es el caso del personaje Felipe Henríquez,(Jacob Senior) -nieto del navegante
holandés Philip Henríquez- (Judah Senior)- quien tenía su base de operaciones en
Cartagena de Indias, y de otros muchos portugueses y holandeses, la mayoría
judíos dedicados al comercio de esclavos. Con respecto al mismo tema, afirma
Escobar Quevedo en su libro, que:

“En esa misma época iniciaban operaciones varios comerciantes judíos de


Curazao como Manuel de Pina( en Holanda Jahacob Naar)…y Felipe Enríquez
(1660-1718), nacido en Amsterdam con el nombre judío-holandés Jacob Senior,
descendiente de una familia portuguesa que había tenido que escapar a la
persecución inquisitorial. Su abuelo, Felipe Enríquez (Juda Senior en Holanda) de
quien adoptó el apellido cuando comenzó la trata de “negros” , había sido
A partir de ese entonces, el lugar se
convirtió en un sitio de
mercader entre África y el Mediterráneo y en 1637 había sido denunciado como
almacenamiento y provisión de judaizante…
esclavos traídos del África como
trabajadores de las plantaciones en
varios países del continente. Nota: Ojo con estos dos caballeros, Felipe (Jacob) y David (Judah) porque
pudieran resultar posteriormente los antepasados directos de Jacobo y de todos
nosotros.

”Del lado materno, Felipe (Jacob) Enríquez venía de una familia rica y de alcurnia
(sobrino de Antonio López Suasso, Barón d Avernass Le Grass) . Es seguramente
gracias a su abolengo que en 1685, cuando Enríquez llega a Curazao a fundar su
propia compañía de esclavos, obtiene la autorización del Almirantazgo holandés
para transportar los “negros” en navío propio desde el África, siendo el único judío a
gozar de tal deferencia.. Fue después nombrado director del asiento de la Real
Compañía Africana y asociado con su hermano David Henríquez Senior… logra
expandir los negocios a lo largo y ancho del área caribeña.“

Nota: Hallará el lector atento que existe una relación directa entre el apellido
Enríquez (español) y el apellido Senior que sirvió como “alias” a muchos Enríquez
refugiados o nacidos en Holanda. Hoy en día en la costa Caribe colombiana,
ambos apellidos son independientes y no guardan relación aparente.

Confirmando lo anterior, Paolo Bernardini y y Norman Fiering en su libro “Los


Judíos y la expansión de Europa hacia el Oeste 1.400 a 1.800”, dedican un capítulo
completo a Felipe Enríquez.( alias Jacob Senior).”

“Dicen que llegó a Curazao a la edad de 25 años, acompañado de tres de sus


hermanos, allá por el año de 1618. Venía de una familia de “nuevos cristianos”
(judíos conversos) que habían huido de Portugal a Holanda en 1590. Otro de sus
hermanos permaneció en Ámsterdam encargado de asegurar el envío de
mercaderías desde ese puerto hacia las Américas.

Felipe (Jacob Senior) estableció relaciones con comerciantes de muchas de las


colonias españolas y con el paso del tiempo llego a ser un empresario exitoso y
capitán de su propio navío. La Corona española le concedió a Felipe Henríquez el
titulo de Cónsul Honorario en Curazao. Es altamente probable que entre los
Henríquez mencionados llegados a Curazao por esa época, se encuentren los
antecesores de Domingo Henríquez el padre de Jacobo.

Sin embargo, el estigma del judaísmo seguía activo. Dice Escobar Quevedo que
en 1698 los inquisidores cartageneros hicieron pública su decisión de proceder en
contra del holandés judío Felipe Enríquez, sin importar su noble linaje. Dicho y
hecho.
Palacio de la Inquisicion Cartagena
Crédito: travelpod.com
Cuando Enríquez llegó a Cartagena procedente de Curazao con 115 esclavos que
transportaba en su navío “Joffr Gerebrech” los inquisidores procedieron a su
La Corona española le concedió a Felipe arresto acusándolo de haber degollado una gallina a la manera judía y de haber
Henríquez el titulo de Cónsul Honorario
en Curazao. rezado en hebreo durante una anterior estadía en la ciudad de Santa Marta.

Luego de pasar 73 días en las cárceles secretas del Santo Oficio de Cartagena de
Indias, Enríquez obtuvo su liberación gracias a la presión de los holandeses, y en
particular del Gobernador de Curazao y socio suyo, quien viajó expresamente al
puerto del Nuevo Reino, y en tono amenazador se dirigió al gobernador,
considerando que un súbdito holandés debía gozar de la misma libertad que
tenía en Flandes…”

Algunos meses después de su liberación, Enríquez hizo llegar una carta al médico
de Cartagena que hizo cargo de su salud estando en prisión, en la que en tono
amigable le contaba algunas novedades. Por ejemplo que esperaba la llegada de
una fragata que había hecho armar en Holanda y que curiosamente había
bautizado “San Francisco” , un navío que ilustra bien su poder y sus ambiciones ,
habiéndolo armado con 36 cañones y con una tripulación de 116 marinos…le
envía además algunos espejos destinados a Santuario de Nuestra Señora de la
Popa”

Sorprende la ambigüedad de sus actitudes, que bien podrían ser un afán de


p. 20 / 21
congraciarse con las autoridades del importante puerto del Nuevo Mundo o
quizás el producto de una creencia sincrética en ambos credos, resultante de un
aparente deseo de su parte de profesar la fe católica. O quizás también una velada
advertencia de su poderío naval. De todas formas su encarcelamiento duró sólo
10 semanas y su febril actividad de aventurero y navegante continuó. Afirman
Bernardini y Fiering en el libro anteriormente citado, que Felipe fue nombrado
director general de una compañía naviera francesa y que participó en Europa
como diplomático durante la guerra de sucesión por la corona española, a favor
del Archiduque Carlos. Para esa facción de la monarquía, la influencia de Felipe
sobre las autoridades de Venezuela era valiosa como medio de acercamiento a
esa colonia y le fue prometida la Gobernación General de ella.
Desafortunadamente el plan fracasó al perder el Archiduque la guerra. Felipe
Henríquez llegó a ser un hombre inmensamente rico en Curazao.

Sin embargo, la prosperidad de la isla caribeña comenzó a decaer por la invasión


Barrio judío, Curazao
Crédito: yadbeyad.files.wordpress.com
inglesa a Holanda y la creciente influencia de las naves británicas en el Caribe
cercano. Se inició entonces un éxodo paulatino de los judíos, inicialmente hacia
Venezuela, República Dominicana y Haití y posteriormente hacia Colombia. Entre
los Henríquez que abandonaron Curazao por esa época con destino a Haití,
debieron hallarse Domingo Henríquez y su esposa Margarita de Pool.

Agrega Escobar que:

“Felipe Enríquez continuó frecuentando las colonias españolas durante los primeros
años del siglo XVIII hasta que le sobrevino la muerte La firma Enríquez cesó
definitivamente sus operaciones de comercio de esclavos en 1722”
Lo que si era imperdonable era la
práctica de la religión judía.
Dice también en el mismo libro, que los Enríquez, (Felipe Enríquez, Moseh López
Enríquez, Jacobo Enríquez y Jesurun Enríquez ) no eran los únicos en negociar con
esclavos. Un cuadro estadístico incluido en el texto citado indica que los
diferentes empresarios Enríquez negociaron en total alrededor de 250 esclavos
mientras que otras 7 compañías restantes lo hicieron con aproximadamente 900.

Nótese que la persecución inquisitorial a estos Enríquez no era en ningún caso un


castigo a su actividad de transporte de esclavos. Esta era, hasta cierto punto, una
actividad lícita en concepto de las autoridades civiles y eclesiásticas. Lo que si era
imperdonable era la práctica de la religión judía.
Mare Nostrum
La tradición familiar del apellido

¿ Qué tipo de individuos eran esos hombres


Ghost Ship – The Flying Dutchman
y mujeres que arriesgaban sus vidas por una
Crédito: adoceric.com fe religiosa prohibida y que se movían entre
las intrigas cortesanas de Europa como peces
en el agua?
8- Los Henríquez en la historia europea
¿Quiénes eran y donde salieron inicialmente los miembros de esa familia
particular que tanto dio que hablar en varios países del Viejo y del Nuevo Mundo?
¿ Qué tipo de individuos eran esos hombres y mujeres que arriesgaban sus vidas
por una fe religiosa prohibida y que se movían entre las intrigas cortesanas de
Europa como peces en el agua?, caballeros y damas que tenían apellido de reyes y
comerciaban esclavos ,que practicaban la piratería y adoraban a Dios, que
alternaban la vida entre palacios y rancherías, que amaban al prójimo y al dinero
con la misma intensidad; hombres que eran capaces de morir por el amor de una
mujer o por la amistad de un hombre y mujeres que combinaban el arte del amor
con la fiereza del tigre. En fin, gentes de sangre celta, árabe y judía mezclada con
holandeses, bretones y vikingos. Esos fueron los Henríquez.

Quizás por esas incomprensibles casualidades del destino que pone las cosas en
su lugar, llegaron muchos de ellos a la zona del Mar Caribe, un entorno que
armonizaba con sus exóticos temperamentos, donde los días idílicos alternaban
con los huracanes y la tierra ubérrima liberaba plantas mágicas de sus entrañas; un
lugar del mundo donde podía verse algunas veces a Dios y al Diablo andar
tomados de la mano.

Dice el registro heráldico español lo siguiente al referirse al apellido Henríquez, a


sus orígenes y características.

HENRÍQUEZ
...gentes de sangre celta, árabe y judía
mezclada con holandeses, bretones y
vikingos. Esos fueron los Henríquez. El nobilísimo apellido Henríquez es patronímico del nombre Enríquez y lo han
llevado en la Historia, no sólo casi toda la Grandeza de España, sino Reyes, Infantes
y Príncipes. Enríquez fue una Reina de Navarra; una Infanta de Portugal; el Rey de
Aragón, don Fernando "el Católico" de tan esclarecida memoria; una Gran
Duquesa de Toscana, cuyos descendientes fueron los Duques de Florencia; Reyes
de Francia y de Inglaterra, y un Elector de Baviera. Las diversas ramas reales
ostentaron también numerosos títulos. El Rey don Fernando III de Castilla "el
Santo", fue padre del Infante Enrique, llamado "El Senador", Señor de Ecija y
Medellín, y tutor del Rey don Fernando IV. Su hijo, Enrique Enríquez, primer Señor
de Villalba, casó con doña Estefanía Rodríguez de Cevallos, siendo a su vez padres
de Enrique Enríquez, segundo Señor de Villalba, quien casó tres veces. La primera
con doña Juana de Guzmán, tía del Rey don Enrique II; la segunda con doña Urraca
Ponce de León y la tercera con doña Teresa de Haro. El linaje del apellido Enríquez,
entroncó con ilustres linajes, como los Córdoba (1444), Cabrera (1518), Manrique
(1562), Gaitán (1601), Luján (1610), Dávila (1662), Luna (1787), Quintana (1794),
etc. Sería imposible describir tan noble y extensa trayectoria del apellido Enríquez.
Sólo resta resumir que sus descendientes brillaron como Caballeros de las
órdenes de Santiago, Calabrava y Carlos III, fundadas por los Estamentos Nobles,
para premiar la virtud y el mérito justificados en favor del servicio real.
Etimológicamente, el nombre Henríquez, variación ortográfica del apellido
Enríquez, viene del nombre de origen alemán "Henry" (hein-rich), que significa
"casa poderosa.

Para complementar lo anterior, sería interesante echar una breve ojeada a


aquellos Henríquez de la realeza Ibérica que dejaron huella en la historia de
España y Portugal.

Hispania, 1616
Crédito: tooleys.co.uk

p. 24 / 25
9- Los Almirantes de Castilla
Por razones de espacio se transcribe a continuación sólo una apretada síntesis del
escrito del académico español Esteban Ortega G. publicado por la Universidad
de Rioja (Esp) en el año de 1950 , titulado “Los Enríquez, Almirantes de Castilla”,
accesible a los lectores interesados en el tema a través de Internet:
dialnet.unirioja.es/servlet/fichero_articulo?codigo=1098484.

“Sabemos por la historia que Fernando III “El Santo” aproximadamente en 1217
creó la dignidad de Almirante en el Reino castellano, después de la reconquista de
Sevilla. Estaba este cargo revestido de gran autoridad y poder… Desde 1405 a
1705, en que este alto cargo desaparece, se constituye, durante 300 años, en
patrimonio de la familia Enríquez… Don Alonso Henríquez fue el primero que
De Don Alonso Enríquez y sus descendientes
Crédito: Esteban Ortega Gato
ostentó el Almirantazgo y el último, en 1705, fue Don Juan Tomas Henríquez de
Cabrera.

“Don Alonso Henríquez y su hijo Don Fadrique son las figuras de más acusado
relieve de su familia y los que más honraron su apellido… Corre por las venas de
los Enríquez sangre real y constituyen la casa de mayor alcurnia de sus tiempos.
Era lógico, dada su nobleza del más elevado rango, emparentasen con las familias
también más esclarecidas de Castilla.

A continuación el historiador Ortega hace una detallada reseña de los Almirantes


Enríquez de la que se extraen los siguientes datos:

Construyó el famoso Castiillo de “Don Alonso Enríquez de su ilustre casa y señor de Rioseco.
Torrelobatón “

Al primero de los Almirantes de esta familia Don


Alonso y a su mujer Doña Juana de Mendoza se les
considera como los verdaderos fundadores. Don
Alonso nacido en 1354 era hijo de Don Fadrique
maestre de Santiago muerto violentamente en el
Alcázar de Sevilla el 29 de Mayo de 1538… Era Don
Alonso-dice Fernàn Pérez de Guzmán-de mediana
estatura, blanco y rojo, espeso en el cuerpo , la razón
breve y corta, pero discreto y asaz gracioso en el decir;
sañudo, arrebatado, de grande esfuerzo, acogía a los
buenos, y los que tenían linaje de rey y no tenían tanto
Crédito: esacademic.com
estado, hallaban en él favor y ayuda…cultivó la
poesía…intervino en acciones y asuntos
marítimos…acompañó al infante Don Fernando en la guerra por tierra contra los
moros…Tuvo nueve hijos … Construyó el famoso Castiillo de Torrelobatón “ el
Castillo Enríquez de los Comuneros” Ya de edad avanzada (75 años) se retiró al
monasterio de Guadalupe donde murió en 1429.”
Don Fadrique Enríquez 2º Almirante y Primer Conde de Melgar.

El primogénito Don Fadrique heredó el título de Almirante con las posesiones y


dignidades que fueron de su padre: Rico-hombre, Maestre de la Orden de
Santiago,Señor de Medina de Rioseco, Castroverde, Torrelobatón … y muchas
más. Son contradictorias las opiniones emitidas por los historiadores para
enjuiciar a Don Fadrique. Predominan los que le consideran como el más
revoltoso de los grandes personajes… Usando de su oficio de Almirante anduvo
por el mar con gran flota armada y tuvo encuentros y batallas marinas con moros y
cristianos en las cuales fue vencedor…Evidentemente no hubo intriga en la que
no participase Don Fadrique… Estuvo casado dos veces…con su primera esposa
Doña Marina de Córdoba Ayala y Toledo tuvo una hija solamente, Doña Juana,
Reina de Aragón y madre de Fernando el Católico. Murió en Simancas en 1473”

Don Alonso Enríquez 3er Almirante

“El tercer Almirante, llamado Alonso como su abuelo,


al que los Reyes Católicos denominaban “nuestro
primo”, nada intervino en actividades navales; fue un
Almirante nominal… En varias ocasiones fue
encargado por los Reyes de organizar armadas sin que
Crédito: castillosdepalencia.es
en ello diese grandes muestras de competencia y
preocupación…Su misión quedó reducida a extender
nombramientos y a percibir los considerables rendimientos que el cargo le seguía
proporcionando. Tuvo problemas con la Corona Española causados por las
acciones de su hijo mayor Don Fadrique ( Nieto del Segundo Almirante) tan
Usando de su oficio de Almirante revoltoso como éste…Sin embargo, apoyó decididamente a la Princesa Isabel
anduvo por el mar con gran flota
armada y tuvo encuentros y batallas futura Reina Católica frente a los intentos de Enrique IV de apresarla para que no se
marinas con moros y cristianos en las uniese en matrimonio con Don Fernando de Aragón. Don Alfonso murió en
cuales fue vencedor…
Valladolid en 1485”.

Don Fadrique Enríquez 4º Almirante

“Pasa ahora el Almirantazgo al primogénito Don


Fadrique que, como su bisabuelo, fue amante y
protector de las Letras… De él se dice que cuidaba más
del mantenimiento de sus propios bienes que del
mantenimiento de la autoridad Real y que esperaba
una solución para las dificultades existentes sin un
llamamiento a las armas… Se destacó por su espíritu
moderado y conciliador y por ser amabilísimo…Que
Crédito: lavozderioseco.com era por naturaleza benigno y generoso…No dejamos
de admirar los buenos oficios de Don Fadrique en las
contiendas de las Comunidades. Estuvo casado con Doña Ana de Cabrera sin tener
descendencia por lo que el Almirantazgo recayó a su muerte en su hermano
Hernando. Murió en 1538.
p. 26 / 27
Don Hernando Enríquez ,5º Almirante y Primer Duque de Medina de Rioseco.

“Hernando Enríquez, hermano de Don Fadrique no ostentó mucho tiempo el


título de Almirante de Castilla; murió a los cuatro años de haberle heredado. De su
enlace con Doña María Girón nació su sucesor Don Luis I Enríquez de Girón el
Sexto Almirante de Castilla”

Don Luis I Enríquez De Girón,6º Almirante de>Castilla,2º Duque de Medina


de Rioseco y Conde de Módica.

“Tanto él como los que le sucedieron, con sus títulos heredados se beneficiaron de
aquella consideración que se dispensaba a la alta nobleza siendo depositarios de
todas las concesiones de villas y mercedes recibidas por sus mayores”

Don Luis II Enríquez de Cabrera 7º Almirante 3er Duque de Medina de


Rioseco.

“Era hijo de Luis I y Doña Ana de Cabrera y fue un


aristócrata muy señalado en la Corte. Parecía que era
obligada su presencia en todas las ceremonias y actos
palaciegos por su condición de noble de antiguo cuño
y por su delegación real… Hombre espectacular y uno
de los grandes apoyos de la aristocracia. Gran
diplomático. Fue condecorado por el Rey Felipe II con
el “Toisson de Oro” Esto revela la ascendencia y valor
Toisson de Oro crecientes que gozaron los Enríquez por merced de la
Fue condecorado por el Rey Felipe II con Crédito: losabdones.blogspot.com Corona. Se casó con Doña Ana de Mendoza en 1588. La
el “Toisson de Oro”
sucesión recayó en su hijo Luis III”.

Don Luis III Enríquez Cabrera y Mendoza 8º Almirante 4º Duque de Medina de


Rioseco y Conde Melgar

Luis III no aprovechó las favorables circunstancias en que le situó el haber


contraído matrimonio con Doña Victoria Colonna, hija de Marco Antonio
Colonna, Duque de Paliano, General de las Galeras del Papa y Condestable de
Nápoles. La ceremonia nupcial revistió gran esplendor en Madrid a la que
asistieron Grandes de España y títulos de rancia prosapia y en la que se hizo un
alarde extraordinario de lujo y ostentación. La Duquesa Doña Victoria mandó
“revocar” la memoria que hizo el Primer Almirante Don Alonso Enríquez en el
convento de Santa Clara de Palencia.

Don Juan Alfonso Enríquez 9º Almirante y 5º Duque de Medina de Rioseco.

Juan Alfonso Enríquez nacido en 1595 y muerto en 1647, 9º Almirante que


ostentó el título en el reinado de Felipe III y parte del de Felipe IV , se limitó a la vida
cortesana pero sin complicarse tanto en el tráfago palaciego. Así se explica que no
alcanzase la fama de sus predecesores. Casó con Doña Luisa de Sadoval y Rojas
matrimonio del cual nació su predecesor Don Juan Gaspar Enríquez.

Don Juan Gaspar Enríquez 10º Almirante, 6º Duque de Medina de Rioseco,


Conde de Melgar, de Módica, de Osona, Vizconde de Cabrera y Bas, Grande
de España,

Tuvo por maestro y ayo a al célebre Don Tomás


Tamayo de Vargas, quien le impuso en las ciencias y
especialmente en la poesía. Cultivó la pintura y la
escultura…Fue consejero de estado y Montero Mayor
del rey Carlos II. En su palacio de Madrid se reunía lo
mejor de la Grandeza para distraer sus ocios, atraídos
por la generosidad y galantería del Almirante. Se le
Iglesia de San Pascual - flickr.com
conoció internacionalmente como “El señor más
galante de la Corte española”. Tuvo por esposa a la noble dama Doña Elvira de
Toledo y Ponce de León de quien le nacieron tres hijos. El mayor, Don Juan Tomás
Enríquez de Cabrera sería el 11º y último Almirante Enríquez de Castilla.

Don Juan Tomás Enríquez de Cabrera 11º Almirante y 7º Duque de Rioseco.

Del Almirante Don Tomás se dijo que era el prototipo de las cualidades y defectos
de nuestra raza; galanteador, provocativo y audaz en la juventud, ambicioso y
dominante en los altos puestos que ocupó; astuto cortesano, afortunado
gobernante en Italia y en Cataluña… Fue Gobernador en Milán y Ministro
El señor más galante de la Corte
española
encargado de la Defensa Nacional. ..Fue nombrado por Felipe V como Embajador
en París distinción que rechazó marchándose a Portugal… Se enfrentó con la
autoridad del Papa alegando falsedad en el testamento del rey Carlos III por lo que
en 1705 el Concejo de Castilla le confiscó sus enormes bienes…fue condenado a
ser decapitado “en esfigie”. Estos acontecimientos le produjeron tal disgusto que
murió poco tiempo después.

“Triste fin el de los 11 Almirantes Enríquez de Castilla… Entre ellos hubo hombres
singulares en los que la época, el ambiente, les dio orientación y modo de ser”

Hasta aquí la crónica del historiógrafo Esteban Ortega G.

Además de los Almirantes mencionados, muchos Enríquez fueron parte de la


realeza española.

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10 - Reyes Enríquez de España
Esta familia de la nobleza castella procede directamente de los Reyes de Castilla, y
entronca con el linaje novohispano de los Fonseca.

La sucesión es como sigue, a partir de Alfonso X, "el Sabio", hijo de Fernando III "el
Santo":

I. Alfonso X, rey de Castilla y León, "el Sabio" (rey de Castilla de 1252 a 1284), hijo
de Fernando III "el Santo" y Beatriz de Suabia, nació en Toledo el 23-XI-1221. Murió
el 4-IV-1284 en Sevilla. Caso con Violante de Aragón (1236-1301; hija de Jaime I "el
Conquistador" y Violante de Hungría), y tuvo por hijo y sucesor a Sancho IV),
Fadrique, Fernando, Enrique, Felipe, Sancho, Manuel, Leonor, Berenguela y María.
Escudo de los Reyes de Castilla
Tuvieron por hijo a
Crédito: bisabuelos.com

II. Sancho I, rey de Castilla y León, "el Bravo" nació el 12-V-1258 en Valladolid.
Murió en Toledo el 25-IV-1295. Casó en junio de 1281, en Valladolid, con María
Alfonso de Molina "la Grande" (1264-1321). Tuvieron por hijo a

III. Fernando IV, rey de Castilla y León nació en Sevilla el 6-XII-1285. Murió en
Jaén el 7-IX-1312. Casó el 23-I-1301 en Valladolid con Constanza de Portugal
(1289-1313; hija de Diniz de Portugal e Isabel de Aragón). Tuvieron por hijo a

IV. Alfonso XI, rey de Castilla y León nació en Salamanca el 13-VIII-1311. Murió
en Gibraltar (Batalla del Salado) el 27-III-1350. Casó en Alfayete (1328) con María
de Portugal (1313-1356; hija de Alfonso I de Portugal y Beatriz de Castilla).
Tuvieron por hijo a Pedro I de Castilla "el Justiciero" (ver nota 1). Además, Alfonso XI
se unió fuera de matrimonio con Leonor de Guzmán (ver nota 3) y tuvo por hijos a
Enrique II (c.1333), rey de Castilla y a Fadrique Alonso de Castilla (c.1335, que
sigue).

V. Fadrique Alonso de Castilla, Señor de Haro, Maestre de Santiago, nació hacia


1335 y casó con una mujer de nombre desconocido. Tuvieron por hijo a

VI. Alfonso Enríquez de Castilla, Señor de Medina de Ríoseco, Almirante de


Castilla, nació en 1354 y casó con Juana de Mendoza "la Ricahembra" (hija de
Pedro González de Mendoza y Aldonza de Ayala: ver nota 2). Tuvieron por hijos a:
Fadrique Enríquez, Almirante de Castilla (c.1390, que casó con Teresa de
Quiñones), Inés Enríquez (c.1400, que casó con Juan Hurtado de Mendoza, Señor
de Almazán), Enrique Enríquez (c.1402, que sigue) y María Enríquez (c.1405, que
casó con Juan de Rojas, Señor de Monzón: ver nota 5).

VII. Enrique Enríquez, 1er. Conde de Alba de Liste nació hacia 1402 y casó con
María Teresa de Guzmán (c.1405-1479; ver nota 3). Tuvieron por hijos a Juana
Enríquez (c.1425, que casó con Diego de Quiñones, Primer Conde de Luna) y a
Juan Enríquez (4° hijo , c.1445, que sigue).

VIII. Juan Enríquez de Guzmán, Señor de Velver y Cabreros, nació hacia 1445 y
casó con Constanza de Almansa, hija de Diego de Almansa, Señor de los estados
de Almansa, Alcañices, Tavara y otros, y de María de Zúñiga, de los 1os. condes de
Nieva (por lo tanto, hermana de Juana de Zúñiga, ver su árbol genealógico,
antepasada de la novohispana Francisca Osorio de Castilla). Tuvieron por hijo a

IX. Francisco Enríquez de Almansa, 5° Señor de Alcañices, Tavara, Velver y


Cabreros, y Señor del estado de Valderrábano (en sucesión de su tío, Juan de
Almansa), 1er. Marqués de Alcañices. Nació hacia 1475 y murió en 1541. Casó con
Isabel de Ulloa y Castilla (ver nota 4), descendiente de Pedro I de Castilla. Tuvieron
por hijo a

X. Juan Enríquez de Almansa, 2° Marqués de Alcañices, nació hacia 1510 y


murió antes de 1544. Casó con Elvira de Rojas (ver ascendencia en nota 5).
Tuvieron por hija a

XI. Ana Enríquez de Almansa nació hacia 1535 (ver un curioso suceso de su
vida, cuando tenía 23 años de edad, en nota 6). Casó con Juan Alonso de Fonseca y
Toledo, hijo de Rodrigo Messía Carrillo (Señor de la Guardia y Santa Eufemia, hijo
de Rodrigo de Messía y María Ponce de León) y Mayora de Fonseca y Toledo (ver
Fonseca). Tuvieron por hijo a Alfonso de Fonseca Enríquez (c.1575), que casó con
Blanca de Villavicencio.

El Castillo de los Enríquez en Torrelobatón,


Valladolid construido por Alonso Enríquez, el
Primer Almirante de Castilla.
Crédito: panoramio.com

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11- Los reyes Henríquez de Portugal

Escultura de Alfonso Enríquez, primer Rey de Portugal, en el Castillo de Guimarães.


Crédito: esacademic.com

Los musulmanes, en señal de respeto, le


llamaron Ibn-Arrik ("hijo de Enrique") o
Alfonso Henriquez, Alfonso Enríquez o Alfonso I de Borgoña (Guimarães, 25 de
El-Bortukali ("el portugués"). julio de 1109 - Coímbra, 6 de diciembre de 1185) fue el primer Rey de Portugal.
Gracias a sus conquistas que, a lo largo de cuarenta años, sobrepasaron el doble
del territorio legado por su padre, fue conocido como El Conquistador; también se
le llamó El Fundador y El Grande. Los musulmanes, en señal de respeto, le llamaron
Ibn-Arrik ("hijo de Enrique") o El-Bortukali ("el portugués").

Alfonso era hijo de Enrique de Borgoña, conde de Portugal y de la infanta Teresa


de León (hija bastarda de Alfonso VI de León y Castilla). Nació en Coímbra y fue,
posiblemente, criado en Guimarães donde vivió hasta 1128. En 1120 tomó una
posición política opuesta a la de su madre (que apoyaba al partido de los Trabas),
bajo la dirección del arzobispo de Braga. Cuando el arzobispo fue forzado a
emigrar se llevó consigo al infante que, en 1122 fue armado caballero en Tuy.
12-Los Henríquez que emigraron de
Curazao.
Isle de Curacao ou Corassol. 1764.
Crédito: pennymead.com
No resulta fácil establecer la
conexión familiar exacta entre los
muchos Henríquez asentados en
Curazao que emigraron a Haití a
finales del Siglo XVIII y Domingo
Henríquez el padre de Jacobo
Henríquez de Pool.. No hay dudas
que Domingo debió ser
descendiente directo de alguno de
los inmigrantes holandeses llegados
a Curazao, bien sea de Felipe
Henríquez ( Jacob Senior) , de su
hermano David Mordecai Henríquez
( D av i d S e n i o r ) , e l f a m o s o
t ra n s p o r t a d o r d e e s c l avo s y
mercancías o de otros familiares
cercanos, todos ellos descendientes
de Phillip Henríquez (Judah)y de los
Pretto Henríquez de Ámsterdam.

Existe un gran problema en la búsqueda de las raíces familiares judías Henríquez


en la época posterior al éxodo de España debido a la utilización constante de
un Henríquez importante muy anterior
a Jacobo había sido Cónsul de Holanda sobrenombres o “alias”, algunos relacionados con la historia bíblica (Judah, Jacob,
en Curazao Moisés, David, Abraham y otros para indicar relaciones interfamiliares (Henríquez
Senior, López Henríquez, Pretto Henríquez, Cohen Henríquez. Al parecer muchos
de estos usos no tenían otro objeto que el de esconder o disimular apellidos
fácilmente identificables como “judaizantes” (caso de los Henríquez entre otros).

En ciertos casos era la simple adaptación del apellido al país donde se llegaba a
residir como inmigrante, (Heindriks, Henry, etc.) en el caso de los Henríquez en
Alemania, Dinamarca, Holanda, Inglaterra y otros.

Este inconveniente es palpable en la determinación exacta de la conexión entre


los Henríquez/ Senior y los Cohen Henríquez de Curazao y los Henríquez que
salieron de esa isla en el Siglo XVI y cuyos descendientes vinieron a Colombia.

En cuanto a lo de Curazao, la única referencia que poseo es la tradición oral


familiar. (Mi padre y mi hermana afirmaban que “un Henríquez importante muy
anterior a Jacobo había sido Cónsul de Holanda en Curazao”). No creo que se
tratara realmente de un cónsul holandés ya que la Isla era patrimonio de ese país.

p. 32 / 33
Lo que sí resulta coincidente es el nombramiento ya mencionado, hecho a Felipe
Henríquez (Jacob Senior) de Cónsul Honorario de España en Curazao por la
Corona española.

De acuerdo con ("Studia Rosenthaliana" Volume 12, July 1978, page 95.) Jacob
Senior (Felipe Henríquez) murió y fue enterrado en Curazao en 1718. Esto tiene
cierta lógica en el tiempo, ya que Domingo junto a su esposa de origen holandés
Margarita van Pool, debió emigrar a Haití alrededor de 1760. Jacobo debió nacer
en Haití entre 1780 y 1800.

Nota: El portal Roots Web –de la comunidad Ancestry.com dice, en relación con los
Henríquez nacidos en Haití en el siglo XVIII que:

“Jacobo Henríquez, nacido aprox. en 1780 fue el segundo hijo de Judah Ruben
Henríquez quien llego a Haití de Curazao entre 1775 y 1780. Otro hijo fue Alfonso
Henríquez.”

Podría llegarse así a la conclusión tentativa que la sucesión paterna (incompleta)


pudiera ser la siguiente:

Ÿ Phillip Henríquez,-Judah-,(holandés) – (1589-1656)

Ÿ ?

Ÿ Felipe Henríquez (Jacob Senior)-,(holandés) – (1660-1718)- o

Jacobo Henríquez, nacido aprox. en Ÿ David Mordecai Henríquez Senior (David Senior)-(holandés)(1664-1749)
1780 fue el segundo hijo de Judah
Ruben Henríquez quien llego a Haití de
Curazao entre 1775 y 1780. Otro hijo fue Ÿ Domingo( Judah Ruben? ) Henríquez (curazaleño) - 1738- 1805 ( ?)
Alfonso Henríquez.

Ÿ Jacobo Henríquez de Pool-(haitiano).-(1790-1864)

En las primeras décadas del siglo XIX, Curazao padeció los efectos de una grave
depresión económica, acompañada de sequías, y de una epidemia de viruela, a
causa de lo cual muchas familias judías emigraron hacia Venezuela y Surinam y
otras partieron hacia La Hispaniola, (Haití / República Dominicana). Algunos
Henríquez-Senior habían emigrado a Coro, Venezuela hacia 1825.

Nota: Hay datos de que Simón Bolívar se hospedó en la “Casa de los Henríquez-
Senior” durante su estadía en esa ciudad en 1826. Hoy día el lugar es sede del
Museo de Arte Contemporáneo de Coro y tiene la categoría de Monumento
Nacional de Venezuela.
Las damas esposas de los Henríquez

Todo parece indicar que Domingo Henríquez, curazaleño de ascendencia


Holandesa por su padre, y Margarita de Pool (van Pool) nacida en Holanda,
contrajeron matrimonio en Curazao entre 1730 y 1735.

Margarita de Pool

La familia de Pool tuvo su origen en Holanda y cuatro


de sus integrantes vinieron a Curazao: Jacobo Gabriel
de Pool y su esposa María Isabel Schubert, y sus hijos
Alexander Saturnino y Jacobo Zenón de Pool.

La familia de Pool se arraigó en Curazao y Venezuela y


son muchos los De Pool en esos países. A esa misma
familia perteneció el afamado escritor y pintor ya
fallecido John de Pool (“Bolívar en Curazao”, “El
Curazao de entonces” y otras obras). La familia de Pol
(escrito con una sola “o”) aparece en los registros de
apellidos judíos de Ámsterdam ligada a actividades de
orden diverso, sociólogos y científicos.

Existe la teoría, digna de estudiarse en el futuro, de que la familia de Pol o Van Pool
de Holanda guardaba cierta relación de parentesco con la familia de la realeza
británica De Pole en las épocas de Enrique VIII.

Anita Ricardo Hermann

Pasarían muchos años en la vida del Capitán Jacobo


Henríquez de Pool, hijo de Domingo y Margarita, antes
de que conociese a la que sería su esposa, Anita
Ricardo Hermann, en Coro, Venezuela en uno de sus
muchos viajes por el Caribe continental. Al parecer
había entre ellos una considerable diferencia de
edades. Según el escritor Guillermo Henríquez (“El
Misterio de los Buendía”)

“Anita era una niña colegiala” cuando dejó a su familia


y siguió al veterano marino hacia el territorio de
Colombia.

Los Ricardo eran de origen sefaradita. Entre ellos es famoso el abogado


Mordechay Ricardo quien, según todos los indicios, facilitó a Bolívar su propia
residencia en la cual parece haber existido una excelente biblioteca. La amistad de
Mordechay Ricardo con Bolívar fue mantenida a través del tiempo y mostrada en
p. 34 / 35
activa correspondencia. El abogado Ricardo, años más tarde (1814), también dio
albergue a las hermanas de Bolívar María Antonia y Juana Bolívar, cuando ambas
huían del terror desatado por José Tomás Boves.( “La comunidad hebrea en la
independencia de Venezuela” Gerardo Dorante-2009)

Fue en Coro, donde tuvo lugar el asentamiento judío más grande e importante.

El historiador y catedrático venezolano Roberto J. lovera De Sola resalta la gran


influencia positiva a las ideas bolivarianas de su amigo sefardí Ricardo, en Simón
Bolívar.

“Durante su permanencia de dos meses en Curazao, Bolívar logró curar, gracias a


Mordechay Ricardo y sus amigos curazoleños, su angustia, su interior enfermo,
recobrar nuevas fuerzas y ponerse de nuevo, con los hondos bríos, en aquello a lo
Arquitectura colonial Coro - Venezuela cual había jurado dedicar su vida: la independencia de Sudamérica”. Dice el mismo
Crédito: flickr.com
autor De Sola que “Los Ricardo tenían ancestro Holandés e inglés.

¡¿Donde nació realmente Anita Ricardo Hermann? Pudiera tener razón Guillermo
Henríquez Torres (“El Misterio de los Buendía)“ cuando registra en su libro la
suposición de que Anita hubiese nacido en uno de los países del Magreb(
Marruecos o Túnez) , lo cierto es que la diáspora sefardí entre Tánger y Venezuela
fue notable por esas épocas, especialmente a la ciudad de Coro que llegó a
transformarse poco a poco en el principal lugar de residencia de los judíos venidos
de todo el mundo.( “Los Judíos en Tánger”-S Mitchell.).

Es posible que uno de sus progenitores (Ricardo o Hermann) fuese de


Pronto estos judíos asentados en Coro nacionalidad inglesa ya que muchos miembros del ejército de Inglaterra se
alcanzarían gran prominencia
comercial e industrial y por su radicaron con sus familias en la ciudad de Tánger desde el comienzo de la
participación estelar en la vida ocupación del vecino Gibraltar de acuerdo al Tratado de Utrech, 1717).
científica, cultural, en la política, en la
diplomacia y en el periodismo
Es un hecho evidente que Jacobo debió conocer a Anita en Coro, Venezuela, ya
que ambos pertenecían a la extensa colonia judía y eran frecuentes los viajes
marítimos de Jacobo a esa ciudad. En sus apuntes familiares inéditos, Nelson
Henríquez Pascuales se refiere a Anita Ricardo como “la Condesa”. Al parecer así se
la llamaba en Ciénaga.

En cuanto a la comunidad hebrea en Coro, Paulina Gamus Gallegos, escribió:

“En Coro ya había algunos judíos desde el siglo XVIII. Para el año de 1831 vivían allí
David Maduro, Joseph Curiel, Isaac Abenatar, Gabriel Abenatar, Samuel Maduro,
Josua López, Elías Curiel y familias de apellido Brandao, Álvarez, Henríquez,
Correa, Fonseca, De Lima, Salcedo, Morón, Pereira, López, Capriles, Hoheb, Senior,
Ricardo, etcétera. Pronto estos judíos asentados en Coro alcanzarían gran
prominencia comercial e industrial y por su participación estelar en la vida
científica, cultural, en la política, en la diplomacia y en el periodismo
Mare Nostrum
Colombia en la época en la que llegaron
los Henríquez a la costa Caribe

Durante el período 1840 – 1872 Santa Marta


se convirtió en el principal puerto
importador de la Nueva Granada y durante
Mapa de la República de Colombia, 1840
Crédito: davidrumsey.com algunos años también fue el mayor
exportador. Así por ejemplo, en el año
1842/43 el monto de las importaciones
realizadas por Santa Marta fue cuatro veces
superior que las de Cartagena. Por esa
misma época Cienaga llegó a calificarse
como el puerto donde se cursaba una de las
más altas actividades comerciales…
Las familias holandesas por nacimiento o adopción, tal como los Henríquez, que
llegaron al Caribe colombiano a mediados del siglo XIV, venían con la voluntad
de establecerse, de negociar, crear familias y fabricar progreso. No eran ya los
tiempos en los que el conquistador extranjero llegaba simplemente a buscar el
oro y a exterminar a los nativos.

La zona geográfica era la misma de la conquista: “Castilla de Oro”; la costa que iba
del Cabo de la Vela a Panamá. La misma región de la Costa Atlántica en la que 200
años antes Pedro Fernández de Lugo había sacado de Santa Marta a su teniente
Jiménez de Quesada ordenándole navegar río arriba por el Rio Grande de la
Magdalena a buscar su nacimiento y de una vez llegar hasta el Perú. ¡Válgame
Dios ¡

Pero para el tiempo de la llegada de los primeros Henríquez a la costa del Caribe,
las cosas, sin ser ideales, eran un poco mejores. Al menos en teoría. Colombia se
había independizado de España aunque la guerra interna continuaba. Incipientes
corrientes políticas orientadas por caudillos regionales, pequeños monarcas, se
disputaban palmo a palmo el dominio del territorio para instaurar sistemas
copiados de los europeos o norteamericanos.

En la época de la llegada de Jacobo Henríquez de Pool, aproximadamente en


1840, Colombia vivía uno de esos vaivenes críticos, típicos de los países recién
independizados. Simón Bolívar había fallecido diez años atrás y se iniciaría pronto
la administración de Tomás Cipriano de Mosquera (1845-1849) un gobierno
conservador que sirvió de base a un posterior resurgimiento liberal en 1849
cuando, bajo la administración de José Hilario López, se iniciaron las reformas que
En la costa del Caribe, en Ciénaga, se dieron entrada al Federalismo que predominaría durante muchos años en la
había iniciado ya en 1840 una
revolución que intentaba cambiar la República.
forma central de gobierno por el
sistema federal.
Vendría posteriormente la rebelión de Mosquera , el derrocamiento del gobierno
de López (1861) y una larga y sangrienta guerra que llevó al establecimiento de
un sistema de gobierno basado en la Constitución de 1863.

En la costa del Caribe, en Ciénaga, se había iniciado ya en 1840 una revolución que
intentaba cambiar la forma central de gobierno por el sistema federal. El General
Francisco Javier Carmona, de origen venezolano y uno de los héroes de la Batalla
de Boyacá, asumió el mando como Jefe Supremo de los Estados en la costa norte
de Colombia, liderato que perdería en 1842 a manos del poder central.

No obstante la inestabilidad de los gobiernos y a las constantes luchas políticas de


la época en los primitivos puertos de la Costa del Caribe colombiano,( Santa
Marta, Ciénaga, Barranquilla y Cartagena) estratégicos y valiosos para el comercio
marítimo internacional, la dinámica comercial presentaba un ascenso de sumo
interés para la zona costera y para el país.
Humberto García Vargas en su estudio sobre “El Sector Empresarial del Magdalena
2006) dice lo siguiente.

Durante el período 1840 – 1872 Santa Marta se convirtió en el principal puerto


importador de la Nueva Granada y durante algunos años también fue el mayor
exportador. Así por ejemplo, en el año 1842/43 el monto de las importaciones
realizadas por Santa Marta fue cuatro veces superior que las de Cartagena. Por esa
misma época Ciénaga llegó a calificarse como el puerto donde se cursaba una de
las más altas actividades comerciales…

Para un marino como Jacobo Henríquez, para quien el mar era su medio de vida y
su lugar de estancia casi permanente, los sucesos de la tierra firme tenían una
trascendencia relativa. Siendo un hombre de mar por herencia y convicción, su
estadía en la tierra firme era fugaz, un corto intervalo de tiempo, semanas a lo
sumo, entre sus largos meses de periplos oceánicos. Además, no era un hombre
que se amilanase ante circunstancias conflictivas de tipo bélico o político. Sus
años de vida, bastantes para ese entonces, se habían desarrollado en ambientes
de tensiones y luchas por la sobrevivencia.

Dice Henríquez Torres que:

“Con Anita viajó en la goleta surcando el Caribe y traficando con ron, tabaco y
esclavos y agrega que: “su hijo mayor, Adolfo, nació en una travesía entre Curazao y
Cartagena, por eso se cree que se trata del niño que nació en el mar, a quien se
refiere Castañeda Aragón en un celebrado poema.

Con Anita viajó en la goleta surcando el Dice también que antes de residir en Ciénaga, Jacobo “había vivido en Cartagena,
Caribe y traficando con ron, tabaco y
esclavos Santa Marta y Riohacha. Su itinerario de navegante lo llevaba hasta los confines
del mundo en busca de aventuras. El era un aventurero perteneciente a la West
Indies”.

La West Indies era la Compañía Real Holandesa de las


Indias Occidentales, una empresa de servicios de
transporte marítimo de mercaderes holandeses
fundada en 1621, a quien (previo acuerdo entre varios
países europeos) se le garantizó el monopolio del
transporte en las Indias Occidentales (el Mar Caribe),
incluyendo el transporte de esclavos africanos a Brasil,
el Caribe y Norte América. Su área de operaciones comprendía el África
Occidental (entre el Trópico de Cáncer y el Cabo de Buena Esperanza) y las
Américas, incluyendo el Océano Pacífico y la parte Oriental de Nueva Guinea.

A la Compañía West Indies se le había acusado tiempo atrás en el siglo XVII en


muchos países, de ejercer la piratería. Algo de cierto habría ya que ésta era
generalmente auspiciada por los gobiernos europeos de intereses opuestos entre
sí (España, Inglaterra, Holanda, Francia o Portugal). El apellido Henríquez aparece
p. 38 / 39
involucrado en ciertas crónicas sobre piratas y corsarios en “La Historia Militar de
Puerto Rico” . Una de ellas dice:

“Lo cierto es que numerosas comunidades judías se


unían por rutas de piratería, pues ser judío en un país
gobernado por España o Portugal era ilegal. Jamaica
pasó a manos de la Corona Británica y por ello muchos
cirptojudíos se fueron allí. En esa zona operaba el
famoso Morgan, al que se unieron mucho judíos.
Llegando a formarse una colonia judía en la zona
pirata de Jamaica. No se puede olvidar a Moisés Cohen
Enríquez, uno de los más conocidos piratas de la
historia. En 1682, Enríquez navegaba con el almirante
Pitt Hayne. Atacaban desde Cuba a los barcos
españoles que se llevaban el oro de América a España”.

Otro corsario Henríquez muy conocido en el siglo XV


fue el portorriqueño Miguel Henríquez (1654-1713
hijo de un clérigo noble y una esclava, conocido como
“El Corsario Negro”, quien asoló el Caribe durante
varios años actuando como “protector” de las naves
españolas (La Saga Boricua,Santiago Maunez)

Otra referencia relacionada con las actividades de


Atacaban desde Cuba a los barcos piratería por parte de los judíos holandeses de la
españoles que se llevaban el oro de
América a España Dutch West Indies aparece en “Los Judíos de Jamaica”
de Joanna Newman (2007, en un artículo titulado “La
“ El Corsario Negro”
(gráfico de la Saga Boricua)
bolsa o la vida”.

En el Siglo XVII se pelearon batallas por la supremacía marítima y por el dominio de


las rutas del comercio a través de compañías privadas y gobiernos. Estas acciones
produjeron grandes ganancias a las empresas que muchas veces actuaban por
iniciativa propia. Los piratas judíos que muchas veces ejecutaban estas acciones a
título personal en contra de las naves Hispanas, eran capturados por las
autoridades ibéricas y condenados a prisión o muerte, excepto en casos
especiales en que aceptasen pagar grandes sumas por su libertad. En Junio de
1699 Phillip Henríquez, un marino comerciante judío holandés que había estado
actuando en el Caribe durante 12 años, fue capturado y Juzgado por la
Inquisición”
13-La llegada a Ciénaga, Magd.

Plaza de Ciénaga e iglesia de San Juan


Bautista
Crédito: fsenderosymemoria.blogspot.com

Al final, por alguna razón, pese al caos reinante en la zona del Caribe colombiano,
Jacobo decidió sentar sus reales Ciénaga quizás por hallarse ésta un poco alejada
de la sociedad eminentemente realista de Santa Marta donde sus actividades
marítimas pudieran ser cuestionadas, o porque siendo Ciénaga un asentamiento
...Ciénaga existía antes del
indígena en su mayoría, donde simultáneamente se gestaba un proceso
descubrimiento de América y era una revolucionario federalista (1840) sus acciones pasarían desapercibidas. Quizás
aldea aborigen, catequizada por Fray también y muy especialmente, porque entreviera la posibilidad de que fuese
Tomás Ortiz en 1529.
Ciénaga un campo ideal para nuevos y fructíferos negocios.

Dicen los historiadores que Ciénaga existía antes del descubrimiento de América
y era una aldea aborigen, catequizada por Fray Tomás Ortiz en 1529. Su ubicación
geográfica era ideal tanto para las actividades de navegación marítima como
para las faenas agrícolas ya que se hallaba ubicada en las proximidades de las
fértiles desembocaduras de los ríos Córdoba y Toribio, lo que la hacía una zona de
gran fecundidad, apta para los cultivos tropicales.

Comenta Alfredo López Henríquez que, ya instalado en esa ciudad:

Jacobo cimentó su estatus celebrando alianzas matrimoniales con las principales


familias del departamento y, para terminar de consolidarlo todo, se convirtió al
cristianismo. Masón, corsario y guerrero, el "musiú" Jacobo terminó sus días como
organista de la iglesia de Ciénaga y fue sepultado bajo el altar mayor; más
importante que esto, se había convertido en parte de un mito fundacional del
Caribe colombiano, allí donde, a diferencia de lo que ocurre en casi todo el mundo,
p. 40 / 41
ser judío da prestigio.”

En un aparte de la publicación del Centro de Estudios Económicos Regionales del


Banco de la Republica, se anota lo siguiente:

“Jacob Henríquez de Pool (judío sefardita, nacido en Haití de padres curazaleños,


por lo que tenía la nacionalidad holandesa) y otros comerciantes locales
conformaron una sociedad para cultivar tabaco en Orihueca y Cañabobal, que
exportaban a Alemania. Esta sociedad se disolvió en 1874, pero en el transcurso de
esos años sus socios lograron abrir al mercado una rica zona agrícola, que
empezaría a ser colonizada por agricultores nacionales y empresas extranjeras”.

Un registro de la Notaria Única de Cienaga Tomo de 1880 ,17 dice a la letra:

“Jacob Henríquez fue navegante, agricultor y comerciante establecido en Ciénaga


desde mediados del siglo XIX. De acuerdo con el juicio de sucesión entablado por
sus hijos en 1880, Henríquez dejó bienes valorados en $3.561 pesos, una fortuna
pequeña si se compara con los montos de Manuel Julián de Mier o C.H. Simmonds,
sus socios”.

El libro “El misterio de los Buendía” de Guillermo Henríquez T es fundamental si se


desea conocer detalles de la vida familiar y comercial de Jacobo:

“Cuando Jacobo Henríquez va a residir a Ciénaga, compra una casa pajiza situada
del templo de San Juan… va a la floreciente aldea de Ciénaga como cultivador de
tabaco. Al retirarse de la vida marítima , ya viejo y algo cansado, vende su goleta “
De acuerdo con el juicio de sucesión Anita” avaluada en diez mil pesos en Cartagena, donde poseía una casa en la calle
entablado por sus hijos en 1880,
Henríquez dejó bienes valorados en Gastelbondo” Por el documento se desprende que en esa ciudad tenía
$3.561 pesos descendencia pues el documento para la venta lo otorga a su hijo Jacobo Martínez
de 25 años de edad. Al parecer estaba casado legalmente en Curazao como lo
atestigua un informante familiar.

Sobre este punto hay razones para pensar que la teoría de un matrimonio previo
de Jacobo anterior a su salida de Curazao, o quizás de Haití, tiene alguna validez.
Algunos testimonios familiares dignos de crédito, afirman que Jacobo, antes de
relación con Anita Ricardo, había contraído matrimonio con una dama de origen
judío de apellido Imbert. Este apellido, de ancestro francés, es común entre las
colonias judías del Caribe, en especial en República Dominicana y Curazao.

Dice Nelson Henríquez Pascuales en sus apuntes, que uno de los hijos de este
matrimonio anterior Luis Henríquez Imbert, fue criado por “la Condesa” Anita
Ricardo a la par de sus propios hijos. Luis Henríquez Imbert resultaría ser la
cabeza del tronco familiar Henríquez de Sitionuevo y Tenerife del que resultarían
los Henríquez Visbal ( Luis y Maximiliano) y posteriormente los Henríquez
Pascuales y los Henríquez Theran .
14-Jacobo Henríquez de Pool,
el empresario masón

Declara el registro de la “Masonería del Atlántico” (Cartagena) que:

“El tronco de esta familia llegó a territorio colombiano, a la ciudad de Santa Marta,
igualmente de origen judío pero catequizados en territorio colombiano, siendo su
primera simiente el IL. H. Capitán de la Marina Mercante JACOBO HENRÍQUEZ,
grado 33, natural de Santo Domingo, quien apareció posteriormente como
fundador de la Logia Estrella del Atlántico No. 23, con sede en Santa Marta, a la que
comenzó a funcionar con Carta Patente del Supremo Consejo Neogranadino del
Grado 33 de Cartagena, la cual fue expedida con el No.23. El capitán de Marina
Mercante JACOBO HENRIQUEZ, navegaba periódicamente entre los puertos
Santa Marta - Cartagena - Chagres (Panamá), dejando en esta ciudad de
Cartagena, descendencia, así como en las ciudades de Santa Marta, Barranquilla y
Cartagena”.

Existe así mismo un registro de la masonería en el libro de Orlando Fals Borda “La
Doble Historia de la Costa”, Tomo IV Pág. 41, 2006. Es el siguiente:

Hicimos parte de las CColum:. MMas:. En Willemstad, Río Hacha, El Carmen de


Bolívar, Santa Marta, Cartagena de Indias, Barranquilla, Colón y Panamá. Fueron
algunos de ellos: Don Benjamín Moreno, 33º.Don Jacobo Del Valle Brandao,
33º.Don Elías Del Valle, 33º.Don Julián Del Valle, 33º.Don Jacobo Roíz Méndez,
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33º.Don Aharón Roíz Méndez, 33º. Don Arturo Del Valle Henríquez, 33º.Don
Jacobo Cortissoz Pinto, 33º. Don Ernesto Cortissoz Álvarez Correa, 33º.Don Jacobo
Henríquez De Pool, 33º. Don José María Penso, 31º.Don Jorge Isaacs Ferrer,
30º.Don Samuel Pereira, 30º. Don Nicanor Del Valle, 18º. Don Clemente Penso, 18º.
Don Isaac Senior, 18º. Don David Senior, 18º. Don Abrahám Senior, 18º. Don
Manuel Gómez Cásseres, 18º. Don Isaac J. Pardo, 18º.Don David De Sola, 18º.Don
Juan A. Cohén, 18º.Don Cornelio Pinedo, 18º.Don Eloy Henríquez, 3º.Don David
Henríquez, 3º.Coronel Don Benjamín Henríquez, 3º. Don Isaac Salas, 3º. Don David
Salas, 3º.Don Abrahám Salas, 3º. Don Abrahám H.Juliao Rois Mendes, 3º.”.

En los Cuadernos de “Historia Económica y Empresarial del Banco de la República”


aparece la siguiente información histórica:

“En 1856 los europeos caribeños Carl H. Simmonds (judío alemán radicado en la
isla sueca de San Bartolomé desde la década de 1810), Pedro Fergusson3 (inglés
nacido en Jamaica, que había llegado a Riohacha en la década de 1830) y Jacob
Henríquez de Pool (judío sefardita, nacido en Haití de padres curazaleños, por lo
que tenía la nacionalidad holandesa) y otros comerciantes locales conformaron
una sociedad para cultivar tabaco en Orihueca y Cañabobal, que exportaban a
Alemania. Esta sociedad se disolvió en 1874, pero en el transcurso de esos años sus
socios lograron abrir al mercado una rica zona agrícola, que empezaría a ser
colonizada por agricultores nacionales y empresas extranjeras”.

Aquí es imperativo utilizar como referencia obligada el libro “El Misterio de los
Buendía” de Guillermo Henríquez:

La compañía aludida (Henríquez, “La compañía aludida (Henríquez, Edwards y Fergusson) fue la primera
Edwards y Fergusson) fue la primera
transnacional, con fines expansionistas transnacional, con fines expansionistas en el territorio de Macondo y
en el territorio de Macondo y posiblemente de las más antiguas del país. Puede establecerse una relación entre
posiblemente de las más antiguas del
país.
el capital judío holandés que cede el paso al capital judío norteamericano,
teniendo en cuenta que los judíos dominaron la United…se puede decir que
Jacobo Henríquez hará una nueva asociación, esta vez de comercio mayoritario,
con unos acaudalados vecinos de Barranquilla pero naturales de Santa Marta, los
hermanos Obregón, que al emigrar a Barranquilla sentarán las bases para la
industrialización en Colombia…”
Mare Nostrum
Los descendientes de Jacobo

Muchos Henríquez, hombres y mujeres de


diversas ramas familiares, se han destacado
en diferentes campos a través de la historia
colombiana y son conocidos por el público.
Otros han hecho su labor de vida en silencio
sin aparecer en las páginas de los diarios
como autores de libros o en imágenes de
televisión. De todas maneras unos y otros
poseen el mismo valor.
Siguiendo a Guillermo Henríquez en su libro, se sabe que;

“En Ciénaga se asegura que Jacobo tenía dos hermanos: Luis, que vivió en
Riohacha y Remigio en Cartagena… La familia con Anita debió desarrollarse a
partir de 1845.

De ahí en adelante el asunto se complica y la diagramación exacta de un árbol


genealógico a partir de Jacobo Henríquez de Pool desde 1845 hasta las primeras
décadas de 1900 resultaría complicada, por no decir imposible. Fueron tantas sus
mujeres y tantos sus descendientes que se requeriría un volumen enciclopédico
para albergar tamaña cantidad de información (lamentablemente no existían en
esos tiempos los elementos informáticos de que hoy se dispone).

No es extraño que exista aún la costumbre judía de denominar como “primos” a


todos aquellos del mismo apellido cuando se desconoce la relación familiar
exacta. Tal costumbre subsiste aún en las zonas costeras del Departamento del
Magdalena.

Por razones de espacio me limitaré a sintetizar las múltiples informaciones sobre


algunos de los descendientes del prolífico antepasado, datos que nos depara
apretadamente “el primo” Guillermo en su famoso libro, una obra que
personalmente recomiendo a quienes deseen investigar más a fondo la
descendencia directa e indirecta de Jacobo por esas épocas.

Dice Guillermo que fueron hijos de Jacobo:

No es extraño que exista aún la ”Adolfo (el que nació en el mar), Diógenes, que aparentemente nació en Curazao-
costumbre judía de denominar como
“primos” a todos aquellos del mismo Atala, Zoraida y Jacobo junior que nacerán en Ciénaga. Con la señora Nicolasa
apellido cuando se desconoce la Vega de Santa Marta tuvo a Fenelón (que será abuelo de los Petro de Cereté,
relación familiar exacta.
Córdoba) además de Remigio, Priscila, Dorlysca y Maximina. Con la señora
Mercedes Corcho, a Ruperto el revolucionario. En la Martinica nace su hija Anita,
habida con su esclava africana María Delfina Calixto, nacida en Curazao…Con la
señora Francisa Acosta tuvo a Atenays Henríquez y en Cartagena a Jacobo
Martínez.

Obviamente “faltan aún datos de muchos municipios y corregimientos”.

Con respecto a la generación posterior inmediata que detalla Guillermo con


algunas referencias anecdóticas, me reduciré simplemente a transcribir algunos
nombres de aquellos Henríquez que forman parte de la descendencia de Jacobo
o de familias emparentadas con él o con su descendencia, entre mediados del
siglo XIX y comienzos del siglo XX, el equivalente a dos generaciones.

Nombres de algunos Henríquez descendientes de Jacobo Henriquez de Pool


desde 1845 hasta 1920
Adolfo 2º, Adolfo Ramón , Manuel Antonio, Alejandro, Julián, Sebastián, Luis,
Demetrio, Paulina, Adolfo 3º,Juan Modesto, Ana María, José Hilario, Lucila, Rafael
David, Emelina, Ramona, Adolfo Ramón, María Concepción, Juan Modesto,
Esteban, Antonio, Lucila 2º, Félix, Rosa, Cecilia, Manuel Antonio 2º, Ramona de
Jesús, Diógenes, Demetrio Daniel, Jacobo 2º, Enrique, Diógenes 2º, Carlos,
Zorayda, Ramón Demetrio, Anita, Sara, Zorayda 2ª, Guillermo, Julio, Clara, Alicia
,Ana, Emma, María, Rosa, Eloísa, Josefina Jacobo 3º,Aura, Luis 2º, Maximiliano y
muchos otros que se desconocen.

Apellidos de otras familias relacionadas sanguíneamente con los Henriquez de


Cienaga desde 1845 hasta 1920

Vega, Corcho, Calixto, Acosta, Imbert, Theran, Díaz Granados, Cabana, Ruiz, Creus,
Fernández de Castro, Villareal, González, Visbal, Pascuales, Ortega, Gaztañondo,
Torres, Escobar Camargo, Rueda, Anaya, Del Toro, Castañeda, Pereira, Ballestas,
González 2º, Morán, Bermúdez, Flórez, Peralta, Cepeda, Corvacho, Pavía, Petro,
Riascos, y algunas más.

15- Un apellido que ha hecho historia


Muchos Henríquez, hombres y mujeres de diversas ramas familiares, se han
destacado en diferentes campos a través de la historia colombiana y son
conocidos por el público. Otros han hecho su labor de vida en silencio sin
aparecer en las páginas de los diarios como autores de libros o en imágenes de
televisión. De todas maneras unos y otros poseen el mismo valor. Siendo que sólo
Ruperto Henríquez, más comúnmente se conocen los nombres de algunos que han alcanzado cierta fama, a ellos me
conocido con el cariñoso apodo del referiré en este trabajo. En el futuro se anexará al final un directorio actualizable de
Musiu Corcho
todos los Henríquez, de los que sea posible obtener información.

Primera y Segunda generación

-El “Musiu” Corcho. Ruperto Henríquez Corcho (1856-1900)

Entre la gran variedad y cantidad de descendientes de Jacobo Henríquez de Pool,


notables muchos de ellos a través de la historia en diversos campos, Ruperto
Henríquez “ El Musiú”, es un caso especial.

A éste antecesor nuestro, nacido en 1856, lo describe el conocido escritor de la


familia Demetrio Daniel Henríquez en un diario publicado en Ciénaga en Agosto
de 1928,de la siguiente forma:

Ruperto Henríquez, más comúnmente conocido con el cariñoso apodo del Musiu
Corcho era hijo natural de don Jacobo Henríquez, caballero respetable oriundo de
Curazao quien estableció su residencia aquí en el año de 1850, y de doña

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Mercedes Corcho. La circunstancias de ser el padre extranjero y tener la madre el
apellido dicho, hizo que desde niño se le llamara con el familiar distintivo que ya
conocemos. Simpático, bien parecido, levemente moreno de color, de buen porte
y genio agradable, era sugestivo y atrayente. En sus relaciones era sincero y leal, y
en sus modales, culto, aunque su educación no fue mucha ni esmerada.

Ruperto Henríquez vivió en una época difícil cuando liberales y conservadores se


juraban odios a muerte en la guerra entre centralistas y federalistas. A este
respecto dice Demetrio Daniel Henríquez más adelante en el mismo escrito:

“Liberal de probado temple , bautismo de sangre en (ilegible en el antiguo


documento original) donde le mataron a un hermano mayor; peleó en Santa
Marta en los tres días de Junio de 1889; el 11 de Febrero en Barranquilla; fue de los
del 95, en Sebastopol ; luchó en varios combates en esas revoluciones; se levantó
en armas en la última; libró tres refriegas en el Cerro del Amparo , aledaño a esta
ciudad; dos en Guacamayal; una en Riofrío; peleó en Chibolo con valor
descomunal , hasta que el 11 de Diciembre de 1900, en un ataque a Ciénaga acabó
la vida, más que por la fatalidad, por su salvaje valentía y por la incalificable
temeridad de su arrojo desmedido”.

“Militar, como la mayoría de los que surgen en nuestras contiendas civiles, sin
técnica alguna, improvisados, sin conocimiento del arte de la guerra, resolvió
tomar a Ciénaga sin plan inteligente ni el debido concierto. El combate comenzó
con el alba y duró hasta las cuatro de la tarde con regulares intermitencias; pero a
eso de las diez de la mañana ya se podía predecir cuál sería el final de la lucha; la
mayor parte de los compañeros del Musiu se preocupó más de francachelas en los
Ruperto Henríquez vivió en una época alrededores de la ciudad que de acompañar al jefe. Entonces, viéndose sólo y
difícil cuando liberales y conservadores
se juraban odios a muerte en la guerra notando perdida la acción, se fue decepcionado, impulsivo y desafiador, frente a
entre centralistas y federalistas. las más peligrosas posiciones del enemigo y una bala certera le atravesó el pecho.
Fue un suicidio”.

“Así, denodado y singularmente valeroso, entregó la vida el último ejemplar de las


históricas generaciones de Ciénaga. Con el Musiu Corcho se cerró la época de
aquellos valientes que tanto fatigaron a la fama; que tanta sangre derramaron,
muchas veces estérilmente, y que con tan tristes y heroicas acciones dieron

Guerra civil colombiana


Crédito: manuelcepeda.atarraya.org
nombre y blasones a su tiempo”.

Guillermo Henríquez T. dedica un capítulo de su libro “El Misterio de los Buendía”


a Ruperto Henríquez Corcho. Extraemos de éste algunos apartes:

“Por la fotografía ya borrosa que conservan algunos descendientes era un hombre


alto de rostro mestizo, ojos profundos y grandes de color oscuro, cejas retintas y
bigotes largos y negros. El caudillo era hijo del “Musiú” Jacobo HenrÍquez de Pool
con la señora Mercedes Corcho, nacido en 1856. A los 20 años, junto con su
hermano Fenelón, se unió a los avatares revolucionarios adscritos al radicalismo
federal; decisiones lógicas de un libre pensador y masón.

Guerra civil colombiana


Crédito: manuelcepeda.atarraya.org
Además de narrar los detalles de la batalla de Ciénaga donde falleció El Musiu
Corcho, agrega Guillermo en su libro una curiosa alusión mágica con referencia a
su deceso, de la cual me permito transcribir algunos apartes:

“Una de las mujeres del jefe liberal llamada Angelina, cuya madre y suegra lo
odiaba por no hacerse casado con su hija,..Ejercía la brujería y velaba a un muñeco
que representaba a Ruperto… Isabel -la suegra de Ruperto- sirvió de espía a los
conservadores, y en calidad de tal, les comunicó el arribo de Henríquez a Ciénaga.
En la casa había dos loros que gritaban”Viva el Partido Liberal” y “Viva Ruperto
Henríquez”, pero también hay informes que dicen que Isabel velaba al caudillo,
porque también cantaban “Velan a Ruperto”. Isabel bailaba unas extrañas danzas
de magia negra y exclamaba: “ !Que muera Ruperto! ”. Y Ruperto murió.

Tristes historias estas de guerras fratricidas en una época en la que Colombia


Isabel bailaba unas extrañas danzas de luchaba por obtener su propia identidad como país libre. Tiempos en que
magia negra y exclamaba: “ !Que
muera Ruperto! ”. Y Ruperto murió hombres y mujeres eran arrastrados por la vorágine de los acontecimientos,
debiendo jugar el papel que el destino les asignó en el momento en que vivieron.
Quizás sin saberlo, muchos familiares Henríquez se enfrentaron a muerte entre sí
en las múltiples batallas de aquellos tiempos. Es altamente probable que Luis
Henríquez Visbal y su hermano Maximiliano (conservadores), se vieran
enfrentados a su tío, el Musiu Corcho (liberal) en algunos de los combates de la
Guerra Civil entre 1895 y 1900. Algo igual que lo que sucedió al quedar
enfrentados en bandos opuestos (roblistas y campistas) Ruperto y Fenelón
Henríquez, hermanos de sangre y ambos liberales.

-Luis Henríquez Visbal (1876-1943)

En las filas políticas del conservatismo figuró en esos tiempos de guerra, Luis
Henriquez Visbal, nieto de Jacobo Henríquez de Pool e hijo de Luis Henríquez
Imbert y Emilia Visbal Martínez Aparicio. Sobre la vida de este personaje entre
1906 y 1917 escribe el poeta y escritor Lino Torregroza en el “Universal “de
Cartagena en Julio de 1917:

“Nació el coronel Luis Henríquez Visbal en la villa de Sitionuevo (Magd) el 27 de


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Noviembre de 1876.Fueron sus padres Don Luis A.
Henríquez Imbert, caballero culto y distinguido, rama
de aquel robusto tronco holandés que se nombró Don
Jacobo Henríquez de Pool y cuyos descendientes
forman hoy una larga familia de lo más connotado del
Magdalena, y Doña Emilia A. Visbal , matrona
virtuosísima de aquilatado carácter y linaje
distinguido.”

Emilia A. Visbal era hija del gentilhombre Don Pedro


Juan Visbal y de Doña Josefina Martínez Aparicio, en
cuyo hogar, en Soledad, Atlántico, se hospedó Simón
Bolívar en su postrer viaje a Santa Marta en 1829.

“ Estaba muy niño, continúa diciendo Lino Torregroza, cuando sus padres se
trasladaron a Panamá en donde permanecieron hasta 1897. A su regreso sirvió en
el ejército como soldado de filas en el Batallón Colombia No 17 bajo las órdenes
del General Roberto Urdaneta. Al estallar en 1899 la Guerra de los Mil Días, ingresó
a los ejércitos del gobierno y combatió entre otras, en las batallas de Chivolo, El
Pelado, El Piñón, Candelaria, Hato Viejo y Salamina. En esta última recibió una
herida que casi lo conduce a la tumba. Al terminar la nefasta guerra en 1904 fue
llamado al servicio civil y ocupó la Alcaldía de Tenerife y en los años siguientes las
Alcaldías de El Carmen de Bolívar y Sincelejo.“ En 1916 fue nombrado
Comandante de la Policía de Bolívar y posteriormente Comandante de la Policía
del Departamento del Atlántico en 1925.

A su regreso sirvió en el ejército como Se acogió al retiro de sus labores oficiales en 1930. Siendo poseedor de una
soldado de filas en el Batallón Colombia
No 17 bajo las órdenes del General cultura enciclopédica y de una disciplina ejemplar, inició labores como educador
Roberto Urdaneta

Simón Bolívar en la casa de los Visbal. 1829


en el 1936 en Barranquilla, creando el “ Instituto Colombia”, una institución
modesta a través de la cual pasaron algunos niños de las familias más distinguidas
de esa época , los Massard, Vásquez, Aycardi, Fiorillo, Racedo, García, Gihur,
Rosales, Ballestas, Cunha, Held, Carbonell, Palacios, Juliao, Madariaga, De la Hoz,
Gebauer, Chaljub, Verano, Borda, Dejong y muchas otras.”

El Coronel Henríquez contrajo matrimonio en 1913 en el Carmen de Bolívar con


Doña Julia Theran Cueto, de ascendencia turca. Fueron sus hijos Lácides
Henríquez, Julia Henríquez de Silva, Néstor Henríquez Theran ( padre de Max
Henríquez Daza el afamado meteorólogo), Max Henríquez Therán el insigne
artista gráfico , padre a su vez de las actrices Judy de Romero, Jacqueline y
Marlene Henríquez Lux ampliamente conocidas por el público, Gregorio
Henríquez Therán padre de la diseñadora de modas Julie Henríquez Valega de
Donado, y quien esto escribe, Rafael de J Henríquez Therán.

Tercera generación.

Guillermo de Jesus Buitrago Henríquez (1930-


1949)

Guillermo de Jesús Buitrago Henríquez nació el 1 de


abril de 1920 en Ciénaga (Magdalena) en el hogar de
Roberto Buitrago Muñoz y Teresa Mercedes
Henríquez.

Nunca hizo estudios de música, pero desde muy joven


se sintió atraído por la fuerza de su sensibilidad
musical y mostró sus inquietudes tocando en cajas de
madera, silbando y cantando.

La guitarra fue el instrumento que lo cautivó y con la


que grabó en junio de 1943 para discos Fuentes( “Las mujeres a mi no me quieren”
y “Compae Heliodoro”). Buitrago fue figura clave para la divulgación de la música
de la Provincia. El cantante cienaguero se presentó en emisoras regionales como
Ecos de Córdoba, Radio Magdalena y Emisora Atlántico.

En 1940 realizó una gira por la región central del Valle de Upar que le permitió
descubrir y dar a conocer muchos ejemplos del rico y abundante folclor musical
que permanecía casi oculto en la comarca.

Llamado el “Jilguero de la Sierra Nevada y el Trovador del Magdalena” fue un ídolo


en su tiempo, cantó con diversos grupos y estuvo vinculado a nombres
memorables del vallenato de guitarra. En una época configuró un conjunto
llamado Buitrago y sus Muchachos, del que formaron parte Julio Bovea y Angel
Fontanilla.
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Guillermo Buitrago ha sido uno de los compositores más importantes que tiene el
vallenato. Aunque es autor de algunos paseos notables, la deuda que con él tiene
el vallenato surge por haber sido su principal divulgador en los medios de
comunicación.

Buitrago falleció en 1949 a los 29 años, cuando estaba a punto de dar el salto a una
célebre orquesta de Cuba. Su voz era capítulo aparte y su talento de compositor
quedó eternizado en cantidad de canciones que hoy son motivo de repertorio
para agrupaciones criollas y foráneas. (Tomado de La Pagina Vallenato.net)

Max Henríquez Therán (1910-1977)

Max fue el tercer hijo del matrimonio de Luis


Henríquez Visbal y Julia Therán Cueto. Nació en el
Carmen de Bolívar el 9 de Septiembre de 1910. Eximio
artista de nacimiento, dedicó su vida al dibujo
publicitario en el cual sobresalió durante muchos años
como portadista de la revista Semana y director de
artes gráficas de “Propaganda Época” en Bogotá. En su
temprana juventud, en 1936, ganó el premio de la
revista “Carteles” de Cuba con su visión artística de la
belleza de la mujer caribeña. Trabajó con el Maestro Santiago Martínez Delgado
en la elaboración del mural del Salón Elíptico del Capitolio Nacional y recibió
varios premios en Salones de Artistas Nacionales. Contrajo matrimonio en 1938
con Margarita Lux Descag, de ascendencia francesa, una relación de la que
nacieron catorce hijos: Margarita, Judith, Max, Jackeline, Jimmy, Marlene, Myriam,
Julia, Carlota, Janeth, Ivonne, Betty, Jack y Lilian.

Guillermo Henríquez Torres( 1940)

El historiador, literato y dramaturgo Guillermo


Henríquez Torres nació el 10 de Julio de 1940 en
Cienaga ( Magdalena). Culminó la secundaria en el
Colegio de la Esperanza de Cartagena. Cursó estudios
de Sociología en la Universidad Nacional de Bogotá.
Realizó estudios de teatro en Barcelona (España) en la
Escola D,Art Dramatic Adriá Gual. La Licenciatura en
Teatro la obtuvo en el Institut du Teatre.

Entre sus obras figura el libro “El Misterio de los


Buendía” (Edit Nueva América ,2003) y cinco obras de teatro “El cuadrado de
astromelias” (1980) Maria Cibelina (1882) Escarpín de señora” (1984) “Detrás del
abanico”, (1986) Academia de baile”(1986) .

Como novelista, sus obras son:”Agotadas las localidades”, “El Eje” y “Set para un
filme oculto”. Fue ganador de la beca regional 1998 del Ministerio de Cultura con la
novela “La Perla Barroca”. Ha publicado tres libros de cuentos: Historia de un piano
de cola” 1989), “Tres para una mesa”, “Sin brujas ni espantos”, “El mundo de
Nostromo” (1999) “Ayer, sólo ayer”. Y “Regreso al trópico”.

Estudió Producción de Televisión en la Universidad del Norte en Barranquilla.

Fue fundador de la Casa de la Cultura de Ciénaga”.

Guillermo Henríquez Torres es hijo de Félix Henríquez Álvarez y Helena Torres


Guerrero

Adolfo González Henríquez (1948-2009)

Alfredo González Henríquez nació en Barranquilla en


1948 y murió en la misma ciudad, en Septiembre del
2009.Abogado y Sociólogo Fue investigador de
Colciencias, traductor del Banco de la República,
conferencista en el exterior y profesor e investigador
de la Universidad del Atlántico. Tradujo 'Música, raza y
nación' del antropólogo inglés Peter Wade, vital para el
marco conceptual del recién inaugurado Museo del
Caribe del Parque Cultural del Caribe.

Premios y reconocimientos

ŸBeca Francisco de Paula Santander, Colcultura - de 1989

ŸMatricula de Honor, Universidad Nacional De Colombia - de 1990

ŸMatricula de Honor, Universidad Nacional De Colombia - de 1991

ŸPrimer Premio II Concurso de Cuento, Instituto de Cultura del Magdalena - de


1978

Libros publicados:, "Biographical Dictionary of social and Cultural Anthropology”,


“Música, raza y nación” "Los estudios sobre música popular en el Caribe
colombiano", "El caribe colombiano: historia, tierra y mundo" y otros múltiples
trabajos en el campo sociológico.

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Rafael de J. Henríquez Therán (1933)

Nació el 30 de Enero de 1933 en Barranquilla. Hijo del


Coronel Luis Henríquez Visbal y Julia Therán Cueto.
Cursó estudios de Secundaria en el Colegio Jiménez de
Quesada de Bogotá. Estudió Sistemas Aeronáuticos
en la Facultad de Ciencias de la Aeronáutica y del
Espacio en Oklahoma City (USA) e hizo estudios de
especialización en la Real Aeronáutica Holandesa en
Amsterdam, Holanda, y en la administraciones de
aviación civil de Alemania, Francia, Inglaterra y Suecia.

Fue jefe de la División de Servicios de Aeronavegación y director del Centro de


Estudios Aeronáuticos de la Aeronáutica Civil de Colombia. En 1974 ingresó la
Organización de Aviación Civil Internacional OACI, organismo de las Naciones
Unidas hasta su retiro en 1988 siendo Director Regional para Sudamérica en Lima
Perú. Fue condecorado por el Gobierno Peruano con la” Medalla al Merito Jorge
Chávez Darnell” (1985) y el “Sol de Oro del Perú” en 1987. Rafael de J Henríquez
creó en 1990 la Fundación “Ariel” para la Investigación y el Desarrollo de la
Personalidad, entidad que funciona desde entonces en Tabio-Cundinamarca.

En 1990 escribió su primera novela “Los Dioses descienden al amanecer” (Plaza y


Janes) y posteriormente “La Señal” y “Tiempo Cero”. Su libro “El Despertar” es hoy
en día una guía especializada para el trabajo de mejora de la personalidad.

Contrajo matrimonio con Carmen Castillo Sánchez en 1956 y son sus hijos Rafael,
Henríquez Castillo, Ariel (fallecido), Danilo y Alexandra.
MARE NOSTRUM
Los Henríquez del Caribe Colombiano

El Caribe,
el “MARE NOSTRUM”…
Una semblanza biográfica de
JACOBO HENRÍQUEZ DE POOL Y
DE LA FAMILIA HENRÍQUEZ
Por: Rafael de J. Henriquez

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