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FACULTAD DE DERECHO Y CIENCIAS

HUMANAS

TRABAJO RELAIZADO PARA EL CURSO DE DERECHOS


HUMANOS

Trabajo de investigación sobre la evolución de los


derechos humanos

Alumnos:
Aldo Alonso Edson Marin Aroni
James Eduardo Medina Angulo
Missela Milagros Bravo Escalante
Sally Yolanda Saavedra Jara
Jose Avelino Concepción Padilla

Docente:
Rodomiro Ildefonso alba herrera
diciembre 2019

INTRODUCCION

Determinar el momento preciso en que se formaron las ideas acerca de los


derechos humanos resulta difícil, pero, sin duda, podemos concebir la existencia
de derechos humanos a partir de la vida misma, porque la existencia de un ser
humano lleva inherente una serie de prerrogativas que deben ser respetadas por
los demás y de allí la necesidad de un reconocimiento mediante normas que
garanticen su goce y disfrute; y es respecto al reconocimiento de los derechos
fundamentales del hombre que a lo largo de los siglos se han librado intensas
luchas en busca de una justa proclamación hasta alcanzar su actual desarrollo
normativo e institucional que testimonia un avance sustancial en la conciencia
moral de la humanidad. Particularmente, a partir de la terminación de la Segunda
Guerra Mundial y de la creación de la Organización de las Naciones Unidas, se
han logrado avances sustantivos en su reconocimiento, desarrollo normativo
nacional e internacional y en la creación y funcionamiento de los medios de
protección.

A continuación, se presenta una breve referencia histórica acerca del


reconocimiento de los derechos humanos:

Algunos autores consideran que los antecedentes se encuentran en los Diez


Mandamientos de la Ley de Dios:

- Amarás a Dios sobre todas las cosas


- No tomarás el nombre de Dios en vano
- Santificarás las fiestas
- Honrarás a tu padre y a tu madre
- No matarás
- No cometerás actos impuros
- No robarás
- No dirás falsos testimonios ni mentiras
- No consentirás pensamientos impuros
- No codiciarás los bienes ajenos

Estos diez mandamientos se resumen en dos: Amar a Dios sobre todas las cosas
y al prójimo como a ti mismo

Otros autores sugieren la idea que el reconocimiento de los derechos humanos se


encuentra en el "Código de las Diez Libertades Humanas Esenciales y Controles
o Virtudes necesarias para la Vida Buena" cuyos autores fueron los pensadores
Buda y Manú

- Las cinco libertades son:


- Liberación de la violencia
- Liberación de la miseria
- Liberación de la explotación
- Liberación de la violación o deshonra
- Liberación de la muerte y enfermedad tempranas

Las cinco virtudes individuales son:

- Ausencia de intolerancia
- Compasión o sentimiento por el prójimo
- Sabiduría
- Libertad de pensamiento y de conciencia
- Liberación del miedo y de la insatisfacción o desesperación

GRECIA

Se consagra la libertad, pero regulada mediante el establecimiento de un orden


jurídico. Aristóteles en su tratado La Política expresó que "no nos dejemos
gobernar por un hombre, sino por la ley, pues el hombre tiende a gobernar en
función de sus intereses personales y así convertirse en tirano"
Durante el periodo helenístico, los filósofos estoicos formularon la doctrina de los
derechos naturales como algo perteneciente a todo ser humano, que le
corresponde en cualquier lugar donde se encuentre por el simple hecho de ser
persona. Los estoicos consideraban la existencia de una ley superior que regula
las relaciones entre el Estado y el individuo.

Derechos y deberes naturales:

- Deber de los padres a cuidar de sus hijos cuando pequeños


- Deber de los hijos a cuidar de sus padres cuando viejos
- Derecho de heredar propiedad
- Legitima defensa
- Libertad
- Igualdad
- Seguridad
- Propiedad privada, pero subordinada al bien común
- Principio "No bis in ídem"
- Relevancia del motivo

Anomalías:

- Esclavitud natural y de prisioneros de guerra


- Tortura
- Pena de muerte

ROMA

Los romanos, mediante la Ley de las Doce Tablas, aseguraban la libertad, la


propiedad y la protección de los derechos de sus ciudadanos. Con la finalidad de
ampliar y fortalecer la administración de justicia y acabar con el abuso de los
poderosos, se instituyó la figura del "Defensor Plebis" (Ombudsman o Defensor
del Pueblo); la noción helenística del derecho natural estuvo vinculada al Derecho
de Gentes; se estableció el derecho al debido proceso. Sin embargo, se mantuvo
la tortura y la pena de muerte; los derechos políticos y de propiedad estaban
limitados y las diferencias sociales(romanos y extranjeros) implicaban diferencias
en el reconocimiento de los derechos.

EDAD MEDIA

La idea de la dignidad humana nace como uno de los postulados fundamentales


de la doctrina cristiana, base filosófica en la que desarrollan el concepto de los
derechos humanos.

Proclaman la igualdad de las personas ante Dios, lo cual constituye un


antecedente del reconocimiento de la igualdad de las personas ante la Ley

El Nuevo Testamento proclama que Jesucristo, hijo de Dios, es el redentor de


todos los hombres y de todos los pueblos sin distinción alguna...

Al desintegrarse la sociedad greco-romana, la iglesia católica queda como el


único poder y organización con ascendencia social. Prevalecía la idea de que el
rey gobernaba por la voluntad de Dios y los hombres, por lo tanto, tenían una
obligación de obediencia incondicional; imperaba la costumbre como ley y se
establece la tortura como medio de investigación así como las penas corporales.

EDAD MEDIA ALTA

Santo Tomas de Aquino, máximo exponente de la doctrina cristiana de los


derechos humanos, afirma la idea central de los estoicos: la existencia de una Ley
Superior a la autoridad del Estado. Justifica la existencia del Estado en un servicio
para el individuo: Toda autoridad política emana del pueblo y las leyes deben ser
elaboradas por el pueblo o sus representantes. Así, refiere, que cabe
desobedecer un edicto que contravenga la ley natural porque las leyes injustas no
tienen validez moral. Expresa que la libertad se considera como derecho
inalienable del individuo, propio de las sociedades en que prevalece un
ordenamiento jurídico justo.

INGLATERRA
Mediante la Carta Magna suscrita por el Rey Juan sin Tierra en el año 1215, los
barones y el clero ingles impusieron al monarca el reconocimiento de un conjunto
de garantías individuales. Este documento ha tenido un importante impacto en la
historia política de Inglaterra y del mundo y se le considera precursora de las
grandes declaraciones en materia de derechos civiles.

La Carta Magna consagra, entre otros, la libertad personal, la libertad de la


iglesia, el derecho de propiedad y ciertas limitaciones a la imposición de cargas
tributarias.

Este documento contiene el principio que expresa: "ningún hombre libre será
detenido, puesto en prisión, colocado fuera de la ley, expatriado o de alguna
manera violada su personalidad, ni perjudicado o condenado, sino por el juicio de
sus pares o la ley del país" añadiendo que "la justicia no será vendida ni le será
negada a nadie, lo mismo que el derecho"

ESPAÑA

Las relaciones políticas entre la monarquía y sus súbditos dan vida a un conjunto
de documentos singulares, tal como el Pacto celebrado en 1188 entre Alfonso IX y
sus súbditos y en que el rey afirmó que haría sostener la justicia y la paz en el
reino, articulándose en preceptos concretos las garantías de los más importantes
derechos de las personas: seguridad, domicilio, propiedad y actuación en juicio.
Así mismo, el Acuerdo de la Corte de Valladolid de 1322 que proclamó del respeto
a la vida, a la libertad, y a la propiedad; las personas solamente podían ser
juzgadas según derecho y por jueces competentes.

Cabe destacar dentro de estas declaraciones de derechos a las Leyes de Indias,


que consistían en formulaciones que el rey español tuvo de hacer para regular y
humanizar el tratamiento que los conquistadores debían observar para con los
indios. Uno de los aspectos más resaltantes es la autorización del matrimonio
entre españoles e indios, lo cual significó una acción concreta contra la
discriminación social.
LA REVOLUCIÓN INGLESA

El proceso iniciado por la Carta Magna se prolonga a través de los siglos. En


1628 el parlamento exigió garantías para hacer frente a las detenciones arbitrarias
y el establecimiento de nuevos impuestos, produciéndose un documento de
importante significación: Petition of Rights.

En 1679, Carlos II de Inglaterra dicta una ley mediante la cual ningún británico
podía ser detenido o arrestado sino en virtud de un juicio que comenzaba con una
orden escrita y motivada de una autoridad competente, copia de la cual debía
obtener el detenido y el jefe del establecimiento carcelario no podía, sin esta
orden, recibir en custodia al detenido. Sin embargo, las detenciones se
continuaron realizando sin tomar en cuenta esta provisión legal, entonces fue
añadida entre las condiciones de la detención el ejercicio de una acción para
determinar la legalidad de la misma: Hábeas Corpus.

Diez años más tarde, en 1689, se formula en Gran Bretaña una nueva
declaración: Bill of Rights que garantiza los derechos civiles y contiene
reivindicativas para el pueblo reconocidas por el rey. Esta declaración constituye
el primer documento constitucional de la historia de Inglaterra. Ella da paso a un
nuevo régimen al abolirse definitivamente la monarquía absoluta y se da inicio a la
era del parlamento ingles.

LA REVOLUCIÓN NORTEAMERICANA

El 12 de junio de 1776, la Convención de Representantes aprobó la Carta de


Derechos o Declaración de Virginia, en la que se halla el antecedente de las más
connotadas afirmaciones del individualismo revolucionario del siglo XVIII.
Este documento establece en su sección 1 que "todos los hombres por naturaleza
son igualmente libres e independientes y tienen ciertos derechos fundamentales
que no pueden ser disminuidos ni coartados por ningún pacto, a saber: el goce de
la vida y de la libertad como medios para adquirir y poseer propiedades y para
buscar y obtener la dicha y la seguridad"

Así mismo consagra que nadie puede ser privado de su libertad sino por la ley del
país y el juicio de sus pares. Postula la libertad de prensa como uno de los
fundamentos de la libertad, la libre elección de los representantes del pueblo y la
división de los poderes del estado para mejor garantía de la libertad.

El 4 de julio de 1776, el Congreso de Filadelfia proclama la independencia de los


Estados Unidos. En el Acta correspondiente (Declaración de Filadelfia) se
estableció: "Sostenemos como verdades evidentes que todos los hombres han
sido creados iguales; que a todos confiere su Creador ciertos derechos
individuales entre los cuales están la vida, la libertad y la búsqueda de la felicidad;
que para garantizar esos derechos, los hombres instituyen gobiernos que derivan
sus justos poderes del consentimiento de los gobernados; que siempre que una
forma de gobierno tiende a destruir esos fines, el pueblo tiene derecho a
reformarla o abolirla, a instituir un nuevo gobierno que se funde en dichos
principios y a organizar sus poderes en aquella forma que a su juicio garantice
mejor su seguridad y su felicidad"

En 1787 se promulga la Constitución de los Estados Unidos de América y en 1789


la Constitución fue complementada con las diez primeras enmiendas que
consagran la libertad religiosa, las libertades de palabra, prensa y reunión; la
inviolabilidad del hogar; la seguridad personal; el derecho de propiedad, entre
otros.

LA REVOLUCION FRANCESA

La Revolución Francesa de 1789, contribuye poderosamente a la universalidad de


los principios de libertad y los derechos individuales en el mundo. Los
aportes de Montesquieu (El Espíritu de las Leyes) y de Rousseau (El Contrato
Social) resultaron trascendentales para esta revolución y han influido
notablemente en la cultura occidental..

En su obra, Montesquieu realiza una distinción entre la libertad filosófica (de


pensamiento) y las libertades políticas, que identifica con la seguridad, esta última
esencial en el proceso criminal; su tesis sobre la separación de poderes la
fundamenta sobre el control recíproco de cada uno de esos poderes a favor de la
libertad del ciudadano.

El Contrato Social de Rousseau, expresa la idea de que el hombre por naturaleza


es libre, sin trabas de ninguna especie; el origen de la autoridad del Estado se
encuentra en la voluntad de los ciudadanos y el fin es la preservación de las
libertades de cada uno.

La Revolución Francesa le proporcionó al mundo la Declaración Francesa de los


Derechos del Hombre y del Ciudadano (26 de agosto de 1789) que, sin
tardanza, asumió su carácter universal. En su Preámbulo, la Declaración dice: "…
Considerando que la ignorancia, el olvido o el desprecio de los derechos del
hombre son las únicas causas de los males públicos y de la corrupción de los
gobiernos, han resuelto exponer, en una declaración solemne, los derechos
naturales, inalienables y sagrados del hombre, a fin de que esta Declaración,
teniéndola siempre presente todos los miembros del cuerpo social, les recuerde
constantemente sus derechos y deberes…" El articulo 1 expresa que "los
hombres nacen y viven libres e iguales en derechos. Las distinciones sociales
solo pueden fundarse en la utilidad común" Estos derechos son: libertad,
seguridad, propiedad y resistencia a la opresión.

EDAD MODERNA

Para muchos autores el reconocimiento de los derechos humanos tiene como


antecedente:
- La practica humanitaria del asilo
- El control del trafico de esclavos
- Convenciones de La Haya de 1899 y 1907 sobre humanización
de la guerra
- Acuerdos internacionales para la protección de las minorías que se firmaron
entre la terminación de la primera e inicio de la segunda guerra mundial
Pero las primeras normas jurídicas propiamente dichas sobre el Derecho
Internacional de los Derechos Humanos nacieron en realidad como resultado de
la Primera Guerra Mundial. La entonces Sociedad de las Naciones - precursora
de la ONU -exigió que las potencias administradoras de los territorios en
fideicomiso se comprometieran a promover el bienestar de las poblaciones
locales, particularmente de las minorías que quedaban encerradas dentro de las
nuevas fronteras, mas no incorporaron el término “derechos humanos” en sus
acuerdos.

El antecedente más directo del Derecho Internacional de los Derechos Humanos


es el Derecho Internacional Humanitario. Ambos derechos, después de
encontrarse en el tiempo, continuaron un largo periodo de evolución separada.
Años más tarde, estas dos ramas de derecho se han acercado de nuevo de
manera progresiva, especialmente después de la II Guerra Mundial. Hoy sus
ámbitos de aplicación se entrelazan y aun cuando conservan sus diferencias en
cuanto a métodos de aplicación y tutela, tienen el mismo objetivo que es la
protección del ser humano.

El Derecho Internacional Humanitario tiende a garantizar protección y trato


humano a las personas puestas fuera de combate (prisioneros, heridos,
náufragos) o aquellas personas que no participan en las hostilidades (civiles)

Casi todas las grandes civilizaciones de la antigüedad y de la edad media tenían


normas que limitaban el derecho de los beligerantes a causar daño a sus
enemigos. También establecían normas mediante las cuales ciertas personas
estaban protegidas: las mujeres, los niños, los ancianos, los combatientes
desarmados y los prisioneros, mientras que se prohibía atacar ciertos objetivos,
tales como lugares sagrados o recurrir a medios desleales, tales como el veneno.

El actual Derecho de Guerra es una derivación, sobre todo bajo la influencia del
cristianismo y de las reglas de caballería, de las guerras que libraron entre sí los
estados europeos desde que apareció el sistema estatal europeo moderno. Se
expresaba en las ordenanzas y reglamentos dictados por los estados para sus
ejércitos en que se prescribía a sus tropas un determinado comportamiento ante
el enemigo, así como convenios bilaterales (treguas, capitulaciones, armisticios)
concertados entre los comandantes militares de los estados enemigos y cuya
finalidad era asistir a los heridos o canjear a prisioneros de guerra. La uniformidad
de tales reglamentos suscita la aparición de un derecho consuetudinario.

Pero no fue sino en el siglo XIX, bajo la fuerte impresión de las guerras en las
cuales combatían ya grandes ejércitos nacionales que utilizaban armas nuevas y
más mortíferas que causaban un numero considerable de heridos abandonados
sin socorro alguno en los campos de batalla, cuando se trabajó el empeño en la
elaboración de un derecho de la guerra, refrendado por convenios multilaterales.

El Convenio de Ginebra de 1864, cuyas normas estaban destinadas a proteger a


los militares heridos en campaña, marca un hito en el progreso del Derecho
Internacional Humanitario. Allí se establecía la obligación de los estados
contratantes de tratar de la misma manera a sus propios heridos que a los heridos
enemigos.

El Comité de Ginebra, que fue el promotor de ese convenio y que habría de


proseguir su acción con el nombre de Comité Internacional de la Cruz Roja
(CICR), ha contribuido notablemente al desarrollo del Derecho Internacional
Humanitario.

En los convenios de La Haya de 1899 y 1907 se reglamenta la conducción de las


operaciones militares. Se prohíbe, por ejemplo, que los estados beligerantes
ataquen a ciertas personas y ciertos objetivos o que recurran a ciertos medios o
métodos de guerra

En 1949, se aprobaron, en Ginebra, cuatro convenios destinados a proteger a


personas en manos del enemigo (heridos, enfermos, prisioneros, civiles) Dos
protocolos, aprobados en 1977, complementan estos documentos llamados
Derecho de Ginebra.
“Siendo el fin de la guerra la destrucción del Estado enemigo y no individuos
enemigos, uno tiene derecho de matar a sus ofensores mientras que están
armados. En el momento en que deponen las armas y se rinden, dejan de ser
enemigos o instrumentos del enemigo y vuelven a ser hombres, sencillamente, de
manera que uno ya no tiene derecho sobre su vida... La guerra da derecho
únicamente a lo que sea necesario para alcanzar el objetivo de la guerra. Estos
principios... emanan de la naturaleza de las cosas y son fundados en la razón”
Juan Jacobo Rousseau
“El Contrato Social”

Al inicio de la Primera Guerra Mundial, tres grandes corrientes de pensamiento


dominaban el escenario ideológico. Por una parte, el marxismo – leninismo que se
expresaba a través del movimiento comunista y que buscaba la justicia social, aun
cuando para ello fuera necesaria la liquidación de las libertades democráticas; los
socialdemócratas que buscaban la justicia social a través del fortalecimiento del
estado democrático; y el catolicismo social que desde entonces, se convirtió en la
base ideológica – programática de las doctrinas cristianas contemporáneas. La
justicia social era el ideal común de todos los movimientos, pero el camino para
alcanzarla era concebido de manera muy diferente.

Como los problemas sociales eran los más visibles y urgentes, se inició un
proceso de cooperación internacional para enfrentarlos. El Tratado de Paz de
Versalles, suscrito al terminar la Primera Guerra Mundial, significó un gran avance
en la protección de los derechos humanos sociales y económicos.

Este tratado contiene la constitución de la Organización Internacional del Trabajo


(OIT) El Preámbulo consagra la finalidad de la entonces Sociedad de las
Naciones que era la de asegurar la paz universal, la cual no podía alcanzarse sin
justicia social, presentándose a la OIT como un medio para lograr la consecución
de esa finalidad.
La OIT es el organismo internacional encargado de regular las relaciones entre
empleadores y trabajadores, determinar las condiciones de trabajo de los
asalariados, así como establecer normas relativas a las condiciones de trabajo,
accidentes de trabajo y enfermedades contraídas en el lugar de trabajo, entre
otros.

LOS DERECHOS HUMANOS EN LOS REGÍMENES TOTALITARISTAS

Como resultado de la I Guerra Mundial, Rusia, Alemania, Italia, España, Francia y


otros países europeos, entraron en profunda crisis económica y política.

Antes de que se produjera la gran depresión económica (1929), el régimen


parlamentario ya había dejado de existir en algunos estados europeos,
instaurándose en ellos gobiernos dictatoriales. La dictadura nazi se constituye en
la manifestación más implacable de la negación de los derechos humanos:
eliminación de los judíos, campos de concentración, cámaras de gas, ocupación,
entre otros, considerados crímenes de lesa humanidad.

LOS DERECHOS HUMANOS EN AMÉRICA

Antes de la II Guerra Mundial, América ya mostraba preocupación por los


derechos humanos. Las primeras convenciones se centraron en los derechos de
los extranjeros y luego en materias dirigidas a la paz y a los derechos de la mujer.

Hacia 1933, el número de resoluciones adoptadas en convenciones comenzó a


multiplicarse. Cabe destacar la Declaración sobre las Cuatros Libertades
proclamada por el presidente de EEUU Franklin Delano Roosevelt (1941):

Libertad de palabra y de expresión en cualquier parte del mundo.


Libertad de cada persona para adorar a Dios a su manera en cualquier parte del
mundo.
Liberación de la necesidad que, traducido en términos mundiales, significa un
entendimiento económico que asegure a cada nación una saludable vida pacífica
a sus habitantes en cualquier parte del mundo.
Liberación del temor que, traducido en términos mundiales, significa una
reducción mundial de armamentos, a un punto tal y de modo tan completo, que
ninguna nación se halle en condiciones de cometer un acto de agresión física
contra ningún vecino en ninguna parte.

En agosto de 1941, Winston Churchill, Primer Ministro del Reino Unido y Franklin
D. Roosevelt, Presidente de Estados Unidos, se entrevistaron a bordo de un
barco anclado en Placenta Bay (Terranova) y por sugerencia de Roosevelt,
firmaron una declaración conjunta en forma de tratado llamada la Carta del
Atlántico, cuyo contenido expresa que ninguno de los dos países pretendía
expansión territorial o de otro tipo para sí mismos y que no deseaban cambios
territoriales que no estuviesen de acuerdo con los deseos libremente expresados
por los pueblos que pudiesen afectar. En esta Declaración, ambos presidentes se
comprometieron a respetar el derecho de todos los pueblos a decidir bajo que
forma de gobierno deseaban vivir y que deseaban así mismo que fuese
restaurada la independencia la independencia de los pueblos que se hubiesen
visto privados de ella por la fuerza. Ambos mandatarios expresaron su deseo de
querer para todos los Estados, vencedores y vencidos, igual libertad de acceso
al comercio y a las materias primas y que pretendían laborar por la concepción
económica internacional, seguridad social y por todo aquello que contribuyese a
liberar del temor y de la penuria y se comprometieron a no facilitar armas hasta
tanto no se llegase a un más amplio y más general sistema sobre la seguridad
internacional de las naciones que amenazaren con agredir a otras y a adoptar
cualquier medida que fuesen necesarias para aliviar la pesada carga que
representan los armamentos para los pueblos amantes de la paz.

El 26 de junio de 1945, se firma en San Francisco la Carta de las Naciones


Unidas que viene a constituir el punto de partida para la proyección internacional
de los derechos humanos, antes limitados a la exclusiva protección que les brinda
el orden constitucional

Este documento tiene como antecedente los acuerdos de la Conferencia de


Dumbarton Oaks (mansión ubicada en Georgetown, Washington, DC.) en la que
los representantes de China, Unión Soviética, Estados Unidos y Reino Unido
formularon propuestas sobre la necesidad de crear un organismo mundial que
sustituyera a la Sociedad de las Naciones. Se aprobó la proposición y así fue
creada la Organización, la cual tiene como propósitos...” 1. Mantener la paz y la
seguridad internacionales y con tal fin, tomar medidas colectivas eficaces para
prevenir y eliminar amenazas a la paz y para suprimir actos de agresión u otros
quebrantamientos de la paz, y lograr por medios pacíficos y de conformidad con
los principios de la justicia y del derecho internacional, el ajuste o arreglo de
controversias o situaciones internacionales susceptibles de conducir a
quebrantamientos de la paz 2. Fomentar entre las naciones relaciones de amistad
basadas en el respeto al principio de la igualdad de derechos y al de la libre
determinación de los pueblos y tomar otras medidas adecuadas para fortalecer la
paz universal; 3. Realizar la cooperación internacional en la solución de
problemas internacionales de carácter económico, social, cultural o humanitario, y
en el desarrollo y estímulo del respeto a los derechos humanos y a las libertades
fundamentales de todos, sin hacer distinción por motivos de raza, sexo, idioma o
religión; y 4. Servir de centro que armonice los esfuerzos de las naciones por
alcanzar estos propósitos comunes...” Esta Carta introduce la denominación
genérica de derechos humanos.

Especial significación tiene la Declaración Universal de Derechos Humanos


aprobada el 10 de diciembre de 1948 por la III Asamblea General de las Naciones
Unidas reunida en París, es la más importante y amplia declaraciones de la
Organización de las Naciones en la materia. Constituye el núcleo que inspira y
orienta todos los demás instrumentos internacionales, generales y específicos,
adoptados desde entonces para promover y proteger los derechos humanos.

En su Preámbulo, la Declaración proclama que su contenido constituye “... el


ideal común por el que todos los pueblos y naciones deben esforzarse, a fin de
que tanto los individuos como las instituciones, inspirándose constantemente en
ella, promuevan mediante la enseñanza y la educación, el respeto a estos
derechos y libertades y aseguren, por medidas progresistas de carácter nacional
e internacional, su reconocimiento y aplicación universales y efectivos...”
DERECHOS HUMANOS EN EL PERÚ

En el Perú los derechos humanos son una prioridad de todas las organizaciones
del sistema ONU. Cada una de ellas, desde sus respectivos ámbitos, trabaja para
la protección de los derechos de los grupos más vulnerables, principalmente, así
como en la educación, promoción y difusión de los mismos.

Una de estas organizaciones es el Programa de las Naciones Unidas para el


Desarrollo (PNUD) en el Perú, que tiene como uno de sus ejes de acción el
fortalecimiento de la gobernabilidad democrática. Para ello, realiza múltiples
proyectos como el apoyo a: la educación ciudadana para el fortalecimiento de la
democracia; la Mesa de Concertación de Lucha contra la Pobreza; la Defensoría
del Pueblo; la modernización del Estado; el desarrollo de la Sociedad de la
Información; y la Comisión de la Verdad y de la Reconciliación. También ofrece
colaboración técnica en los lineamientos y principios de política a través de los
órganos de dirección del Ministerio de la Mujer y Desarrollo Social, entre otros.

Por su parte, la Organización Internacional del Trabajo (OIT), primer organismo


especializado de las Naciones Unidas, cuenta con una sede en Lima desde donde
trabaja para fomentar la justicia social y los derechos humanos y laborales
internacionalmente reconocidos. Sus actividades se desarrollan en el marco
del Programa de Trabajo Decente del Perú, que incorpora tres líneas prioritarias:
extensión de la cobertura de la protección social; respeto y aplicación de derechos
fundamentales en el trabajo -garantizados mediante una más eficaz
administración del trabajo y de justicia- y política nacional de empleo y de
promoción de la MYPE.

El derecho a la salud es preocupación constante de la Organización


Panamericana de la Salud (OPS/OMS), organismo que forma parte del sistema
de las Naciones Unidas. La OPS/OMS trabaja estrechamente con el Ministerio de
Salud (MINSA) como su principal contraparte. Asimismo, el Fondo de Población
de las Naciones Unidas (UNFPA) enfoca sus esfuerzos en el derecho a la salud
reproductiva, la planificación de la familia y la salud sexual.
La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) promueve el respeto y
protección de los derechos humanos de los migrantes. En esta línea, impulsa
distintas iniciativas para prevenir y combatir la trata y el tráfico de personas, a
través de capacitaciones, estudios especializados y campañas de información,
entre otras actividades. Asimismo, difunde el conocimiento de los derechos de
comunidades y poblaciones desplazadas o en riesgo de desplazamiento, en
estrecha coordinación con el Ministerio de la Mujer y Desarrollo Social.

Por su parte, el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) tiene
como misión la promoción y protección de los derechos de las niñas, niños y
adolescentes. El derecho a la alimentación y la lucha contra la desnutrición en el
país es preocupación constante de organizaciones de las Naciones Unidas como
el Programa Mundial de Alimentos (PMA), la Organización para la Agricultura y la
Alimentación (FAO) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS/OMS). La
promoción de los derechos de la mujer y por la equidad de género es también
trabajo constante de varias organizaciones de las ONU en el país.

Las organizaciones del Sistema ONU en el Perú trabajan también por los
derechos de los pueblos indígenas, los afrodescendientes, los discapacitados, las
personas que viven con VIH, la erradicación del trabajo infantil, entre otros.

Amnistía Internacional (AI) presentó a nivel mundial su informe anual sobre la


situación de los derechos humanos en el orbe. Como todos los años hay
importantes datos referidos a lo que ocurre en los cinco continentes respecto a la
violencia, la represión y el sufrimiento de millones de personas a nivel global,
víctimas de violación de sus derechos por parte de los gobiernos, agentes del
Estado y organizaciones terroristas y paramilitares.

En el caso Perú existe una preocupación por parte del organismo respecto a la
vulneración de los derechos de las personas con respecto a la libre asociación, la
libertad de expresión, así como la falta de respeto a los derechos de los pueblos
indígenas y comunidades rurales.
Asimismo, expresa su interés frente a la situación de desprotección de los
defensores y defensoras de derechos humanos ante la violencia y hostigamiento,
así como la situación de los derechos de la mujer, los derechos sexuales y
reproductivos y los derechos de la población LGTBI, en particular los derechos a
la igualdad y no discriminación. Finalmente se da cuenta de la situación del
derecho a la justicia, verdad y reparación de las víctimas y familiares del conflicto
armado interno.

A continuación, un resumen de algunos aspectos del capítulo Perú:

CRIMINALIZACIÓN DE LA PROTESTA SOCIAL Y USO EXCESIVO DE LA


FUERZA
Según los informes de la Defensoría del Pueblo en el último año, se han
registrado 212 conflictos sociales, de los cuales el 69% tuvo como origen
protestas por conflictos socioambientales, principalmente del sector minero (65%).
Para AI, la debilidad de las políticas públicas y leyes que regulan su desarrollo en
el país de acuerdo a los estándares internacionales, y la ausencia de mecanismos
de prevención de conflictos ha sido el origen para estos enfrentamientos, además
de la escasez de estrategias gubernamentales para enfrentar los conflictos
sociales a nivel nacional.
La protesta social, como derecho, está criminalizada y es reprimida de forma
violenta. La policía ha hecho uso indiscriminado de la violencia y armas letales
para reprimir a los manifestantes en diversas ocasiones. Durante el año 2016,
seis personas fallecieron y 195 resultaron heridas. Uno de los casos más
conocidos fue el de Quintino Cereceda Huisa (38) quien en octubre del año
pasado falleció por un impacto de bala en la cabeza producto de la intervención
policial durante la represión de la protesta por el proyecto minero Las Bambas en
Apurímac.

DERECHOS DE LOS PUEBLOS INDÍGENAS Y COMUNIDADES RURALES

Los pueblos indígenas y las comunidades rurales en el Perú continúan sufriendo


la vulneración del derecho a la consulta previa. Hay medidas que vulneran el
derecho al territorio y que siguen en vigor, como es la Ley N° 30230, que permite
la expropiación de tierras y reduce los requisitos para la aprobación de estudios
de impacto medioambiental en proyectos extractivos de gran escala sin consultar
con los pueblos indígenas.

En materia de la afectación a los derechos humanos producto del impacto de las


actividades extractivas, en el 2016 han ocurrido 13 derrames de petróleo en el
Oleoducto Norperuano, contaminando los cuerpos de agua y territorios de las
comunidades indígenas en la cuenca del Amazonas.

TRATA DE PERSONAS Y EXPLOTACIÓN SEXUAL

El Perú es un país de origen, tránsito y destino para la trata de personas. El 80%


de las víctimas son mujeres y el 56% menor de 18 años, en su mayoría captada
con fines de explotación sexual. Mucho de estos casos se dan en zonas de
explotación minera. La impunidad de este delito es alarmante. En setiembre la
Corte Suprema ratifico la sentencia absolutoria de un caso por el presunto delito
de trata de personas en agravio de una adolescente de 15 años. La Sala
argumentó que trabajar más de 13 horas al día como “dama de compañía" en un
bar en la zona de minería ilegal al sur de país no constituye explotación laboral ni
sexual, ya que “no agota la fuerza de trabajo de la trabajadora”.

DERECHO A LA IGUALDAD Y NO DISCRIMINACIÓN DE LAS PERSONAS

En este aspecto persiste la discriminación y violencia contra personas LGBTI por


su orientación sexual e identidad de género. Organizaciones locales reportan 43
casos de riesgo a la seguridad personal (casos de amenazas e intimidación) y
ocho asesinatos de personas LGBTI. A pesar de ello, el Plan Nacional de
Derechos Humanos finalizó el 2016 sin incluir medidas de protección para este
sector de la sociedad.

Finalmente, en diciembre se presentó en el Parlamento un proyecto de ley que


reconocería el derecho a la identidad de género de las personas trans,
permitiendo, entre otros, el cambio en el registro civil del nombre y sexo por vía
administrativa. Actualmente, según se ha reportado por activistas LGTBI solo 11
personas trans tienen un empleo formal, el resto no puede acceder a ello por la
incompatibilidad de su identificación con un género distinto.

AVANCES, PERO AÚN FALTA

Amnistía Internacional concluye reconociendo los importantes avances logrados


durante el último año para garantizar la protección de los derechos humanos de
todas las personas. Sin embargo, asegura que es necesario que el gobierno
peruano dé la debida prioridad a la protección y promoción de los derechos
humanos, en particular de las poblaciones en situación de vulnerabilidad, y que
implemente propuestas claras y especificas en esta materia con miras a poner fin
a la persistente inequidad y garantizar el pleno respeto a los derechos humanos
de todos y todas, sin discriminación alguna.

DERECHOS HUMANOS EN LA LEGISLACIÓN PERUANA

PROBLEMA DE LEGISLACIÓN EN LOS DERECHOS HUMANOS

En primer lugar, el Perú a través de los años ha sufrido de no tener una técnica
legislativa propia, o tener principios propios, por ser de concepción sui generis y
adaptación de otros ordenamientos jurídicos a nivel mundial, es así que no indica
cuando se deben usar expresiones abstractas y cuando no, cuando es bueno
ejemplificar, cuando se debe resumir y cuando se debe extender, cuando es
bueno utilizar imperativos, órdenes y cuando es mejor usar descripciones, pues
todo lo puesto en una ley cobra una vida independiente y muchas veces las cosas
se van por caminos inesperados.

Es así que, a lo largo de los años, se ha olvidado como teoría finalista los
principios rectores de la convivencia social, así como no se ha avanzado mucho
en el conocimiento de cómo legislar porque aún predomina la doctrina racionalista
impuesta desde el siglo XVIII que basada en la idea de la división de poderes
exigía que solo el Legislador promulgue leyes redactadas con fórmulas sucintas,
breves y abstractas casi como fórmulas matemáticas, para ser aplicadas a todos
los casos. Prometiendo así certeza, predictibilidad y seguridad pues los otros
poderes solo se limitarían a cumplir las leyes generales,
Con ese ideal se redactaron las constituciones, las leyes y reglamentos. Ahora
sabemos que no son suficientes las expresiones breves y generales; la mayoría
de las leyes son completadas y hasta corregidas por directivas, circulares,
resoluciones administrativas, sentencias, doctrinas que solo son accesibles a
entendidos y sin las cuales nada funciona, es decir la ley ya no sirve para ser
aplicada necesita siempre ser completada y a veces distanciándose de lo dictado
por el legislador, de modo que una batería de burócratas puede cambiar todo lo
previsto en la ley.

CONCLUSIÓN

- El derecho internacional de los derechos humanos se inauguró con la


Declaración Universal de Derechos Humanos, proclamada en 1948 por la
Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), tres años
después de concluida la barbarie de la Segunda Guerra Mundial.

- El reconocimiento de los derechos humanos en leyes nacionales e


internacionales ha significado un importante cambio de paradigma en las
relaciones de poder entre actores sociales y Estado y entre los pueblos de la
región y del mundo.

- Su conquista es el producto de luchas sociales que se reiteran a través del


tiempo, y significa una garantía legal para asegurar la plena inclusión social,
política y cultural de todos los hombres y mujeres a la dinámica cotidiana de una
sociedad

- Todavía estamos lejos de la construcción de una cultura crítica de derechos


humanos que favorezca su apropiación popular. Las visiones hegemónicas
todavía subyacen en el imaginario de 14 Derechos humanos buena parte de la
población que participa en la búsqueda de nuevas formas de organización social,
política y económica en diversos países
RECOMENDACIONES
- No debemos permitir ningún tipo de violación de los Derechos Humanos.

- Así mismo se debe trabajar para desterrar todo tipo de discriminación, que es
una forma de violación de los Derechos Humanos de cada persona.

- Toda sociedad que olvida su historia está condenado a repetirla. Jorge Agustín
Nicolás Ruiz de Santayana

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