_t ä|wt VâtÇwÉ w|}|áàx tw|™á

Es un espejismo lleno de tristezas Quieren mis manos retenerte

engaños, desafíos y desilusiones. y mis labios se enmudecen,
Donde te pegan tan hondo impidiéndome decirte,
que a veces crees que la has perdido. que si te vas me muero.

Tantos sentimientos encontrados La mariposa pierde sus alas,

que escodemos en el secreto de la noche.
Velo oscuro que cubre el rostro,
cortina del cielo inmenso que da luz a la tierra
donde vivo.
La suerte, la única suerte que tengo
es tenerlos y haberte encontrado,
no te han visto mis ojos pero te siente mi pecho
cada vez que te llamo.
pierde su largo y agitado vuelo;
no la deslumbran las flores,
aquellas que perfuman el viento.
Y el cielo se entristece;
de sus ojos lágrimas llueven.
Aquellas que salen del alma,
Aquellas que al salir siempre duelen.

80  1
 gâ ÑtÜà|wt
Qué tristeza envuelve la tierra,
mantas oscuras han teñido su luz.
Y su pecho resquebrajado se corta,
se corta en pedazos de dolor.
Aun no te acompañen riquezas,
entre los humanos eres gigante.
Que profesa con tu vida:
honradez, humildad y pureza.

Los mares se derraman en su rostro;

una daga hace sangrar su corazón,
ya no se escucha el canto de los pájaros,
ya voló del árbol el ruiseñor.

Las raíces se quebraron en su vientre;

sangraban sus ojos de dolor,
dolor que trajo tu partida,
ausencia que el viento le dejo.

2 79 
 etÅ™Ç
_t vÜâvxá xÇ Å| Ñxv{É
San Juan tiene el honor
de ser la cuna de tu simiente
Se oscureció el vasto suelo de tristeza;
y el verdor de sus árboles
soplaban sobre él, vientos de amarguras.
la inspiración de tu esencia.
Cruces se incrustaban en su alma,
que hacían que gimiera de dolor.
Aun siendo parte importante
de la gran creación de Dios.
Cada cruz, su sonrisa apuñalaba;
Tienes el honor de surcar la tierra,
la alegría su rostro abandono.
dando vida en su vientre.
En su boca se escucha un lamento
Gran caballero valiente; y sus lágrimas salían con dolor.
que la geografía impregna en sus venas
y nunca muestra la pena, Se perdían los sueños que tenía desde niña,
que su alma aflige. como lobo el dolor se los comió.
Devastando el suelo admirado
Su rostro aliado del sol ardiente, y solo ruinas en él dejó.
siempre una sonrisa expone.
Que me complace en este día,
ser testigo de su grandeza.

78  3
 XÜxá àâ tÖâxÄ
Que cuando mis ojos vean todo derrumbar,
mi corazón en ti confiará
y verá grandes torres edificar.
Cuando sienta que no puedo más,
mi corazón en ti descansará
Y mi alma tu confortarás.
Cuando me llegue el dolor,
mi corazón en ti encontrará consuelo,
mis heridas sanarás y dejarán de sangrar.
Cuando la soledad me envuelva,
mi corazón no temerá
y es porque sé, que a mi lado siempre tú
estarás.
4
Ellos nunca se mueren,
porque viven en los recuerdos,
de los que le amaron tanto
y en los que sembraron amor eterno.
Espero que Dios me permita, vivir como tú lo
hiciste,
una vida llena de amor, servicio y perdón.
Estoy segura, que de hacerlo así, alcanzaré
como tú el cielo,
teniendo mis brazos el honor, de estrechar los
tuyos de nuevo.
77 
 TÅ|zt gtà|
No quise dejar partir tu cuerpo,
a la tumba fría de los que duermen.
Los que un día inesperado y gris;
dijeron adiós o un hasta luego.
No necesitaste título y fortuna;
para ser grande, excepcional y virtuosa.
Con tu vida imitaste al maestro,
aquel que estoy segura, hoy te está recibiendo
en el cielo.
Fuiste humana sí, todos aquí lo sabemos
pero tantas bellas cualidades adornaban a tu pelo,
que te hicieron especial,
maravillosa e inmortal en el tiempo.
Hoy quise venir hasta aquí,
a decir lo que hoy siento,
no ha despedirme de ti,
porque nunca se despiden, a los amigos
buenos.
76 
VâtÇwÉ áx wxáxt ÑtÜà|Ü
Llévame lejos esta noche,
llévame donde mi voz se vuelva silencio,
no vez que sucumbo de dolor.
¿No conoces los ojos de quien sufre?
Me quiero morir esta noche,
me quiero morir para que acabe mi pena.
Así no sentiré más dolor
y solo cenizas cubrirán la tierra.
Grandes olas surcaran los mares;
será incierta la noche.
El negro cubrirá la primavera
y las estrellas ya no brillaran en el cielo.
Será cierto lo incierto,
será posible lo imposible,
la vida pasara a ser muerte,
la muerte tal vez me devuelva la vida.
5
 XÄ zÜ|á áx tÑÉwxÜ™ wx àâ v|xÄÉ
XÄ {ÉÅuÜx }âáàÉ Nubes grises
envuelven el cielo azul,
de tus grandes cordilleras.
En el corazón del justo
anidan los buenos sentimientos,
Tus montañas escalpadas,
grandes pétalos que vuelan
son bañadas, con desaliento y tristeza.
perfumando el dulce viento.
Tus días son inciertos,
Es trinar de pájaros
solo sombras,
que alegran el bello cielo,
envuelven tus laderas.
que en la mañana mustia,
dan luz al oscuro suelo. Veo, que mis paisanos
tienen sus rostros,
Es el repicar de campanas como si fueran de piedras.
en medio de mucho silencio,
flores en las montañas Aquellas, que arrastraba
que alegran el firmamento. el Yaque,
antes que languideciera.

Así, como le pasó al coloso,

hoy te pasa a ti Quisqueya.
6 75 
fÉÄÉ Çâuxá zÜ|áxá ÜxvâxÜwÉ
Solo nubes grises recuerdo,
de días inciertos de tristeza
pero gracias a la piedad de Dios,
un fuerte sol hoy me quema.
Busco en el silencio recordarte
y veo que no hay huellas.
Que me enseñen el camino,
de encontrar tu alta silueta.
No dejaste en mí marcas,
nada sembraste que hoy crezca,
sólo dejaste en mis recuerdos,
todo lo que trae tristeza.
74 
aÉ ÄÄxzt
No llega el temible
perfume indeleble
que enmudece.
Hoy quiero mirarte
pero no vienes.
Dijiste por ahí pasaré
y frente a aquel jardín te esperaré,
me desconsolé mucho al no verte,
castigo que me enloquece
Porque he esperado sin encontrar el oeste.
7
 XÄ tw|™á
Cruces se clavaron en mi pecho aquella tarde,
blancas y limpias como el mismo viento.
Recordé que te quise mucho.
Y un velo gris, envolvió mi pelo
y la noche se apodero de mi cuerpo.
Enmudeciendo mis labios, en medio de tanto
silencio.
Sentí que se moria, lo que hace mucho estuvo
muerto,
llegando nuevamente las golondrinas
a surcar, el oscuro cielo.
8
W•tá wx |Çä|xÜÇÉ
Días de invierno se acercaban,
grandes nubes grises lo anunciaban.
Vi al lirio que su última flor gozaba
y en melancolía se sumergió mi alma.
Profundos mares de aguas negras,
arremolinaban la paz y la calma.
De la impetuosa e inocente niña,
la cual el llanto no refrenaba.
En un desierto sin flores,
los pájaros no se acercaban,
apagándose el trinar,
que a su vida alegraba.
73 

aÉ xávÉÇwtá wx Å• àâ ÜÉáàÜÉ
No escondas de mí tu rostro,
ven esta noche y consuélame;
quítame este dolor y lléname de ti.
No vez que por mis mejillas corren lágrimas,
aquellas que con tu amor haces blancas,
las cuales también son puras, porque salen del
alma.
No permitas que fallezca,
devuélveme la esperanza,
de un día ser feliz, cuando al fin vea tu cara.
72 
dâx |ÇÉvxÇàx yâ|
Busco en lo más profundo de tus ojos,
encontrar lo que nunca tuve,
encontrar lo que tanto quice.
Pero sólo fue un espejismo de sol,
en aquel verano tibió de aguas azules
y nubes blancas sobre el hermoso cielo.
Quise amarrar la noche a mi espalda,
colocarle zapatos a la madrugada
y partir en el sueño eterno de tu presencia.
Pero todo fue mentira; aún suene tonto,
Solo fue una simulación tu llegada,
de lo que pareció ser y de lo que nunca ha
existido.
9
 Es triste quizás ver partir lo ausente,
dejar ir lo que nunca se ha tenido, XÇ Ät w|áàtÇv|t
aún más triste aferrarse al recuerdo, de lo
nunca se ha perdido. Aún en la distancia,
no me olvides,
Suenan campanas, repican a lo lejos, amado mío.
explotando el llanto guardado en mí pecho
y se rompe el silencio de mi alma triste. Alimenta tus recuerdos,
aliméntalos como yo
¡Qué importa si lloro de rabia! alimento a los míos.
¡Qué importa si lloro por mi inocencia!
Que importa si hoy lloro, en este profundo Recuerda nuestra historia,
silencio que me rodea. aquella que escrita con sangre,
venció los desafíos.
Al abrir mis manos desnudo mi pecho,
dejo salir el alma, que gime y busca consuelo. De un mundo hostil y malvado,
Y al cerrar los ojos, veo lo tonto, que es el que hoy me separa de ti,
sentimiento. amado mío.

10  71 
 `|á ÜÉw|ÄÄtá
Mis rodillas se han quebrado,
un clamor interminable sale de mi boca,
al quedarme sin palabras,
el duro silencio, me arropa.
Torrenciales caen sobre mi vida,
ahogando mi atormentada existencia,
la cual un día por amor creaste,
aquella que por ti espera.
Escúchame, Señor mío.
Sácame de este vacío,
mírame, muero de frío,
en esta noche desierta y oscura.
dâ|xÜÉ áxÜ ztä|Éàt
Quiero ser gaviota para volar alto,
surcando los mares del mediterráneo.
Dividiendo lomas y montañas del mundo
entero.
Aquel que para todos, es incierto.
Pero no temeré, me guía el señor del cielo.
Aunque la noche me asuste,
una gran aurora es lo que espero,
encontrar al final de mi largo vuelo.

Abrígame con tus alas,

compasivas y tiernas,
aleja de mí esta pena,
ten piedad de esta alma, que reclama tu
presencia.
70  11 
 fx©ÉÜ? ”ÑÉÜ Öâ°R
Öâ°R
¿Señor, por qué me aprisionas en esta cárcel?
¿Por qué no me liberas de él?
¿Por qué se cierran tus ojos?
Al ver mis lágrimas correr.
Señor te busco y no te encuentro.
¿Por qué no te puedo ver?
¿Por qué mis palabras son para ti silencio?
Cuando la voz, estoy al perder.
Señor, me envuelve el roció,
tinieblas, solo alcanzo ver,
mi corazón, siento que se muere,
mi alma, no quiero perder.
12 
_t ÇÉv{x
Hoy la noche con sus alas,
arropó el sol que tanto amaba,
dejando en oscuridad mi vida,
llenando de sombras mi alma.
Ríos bañan las colinas de mi tierra,
no puedo detener las corrientes de sus aguas,
pues no tengo el remedio,
para detener la sangre, cuando sale del alma.
Se calientan los glaciares
y no se enjugan sus aguas.
Se contempla el despojos,
de aquella triste alma.
69 
 hÇt uÜ|át
Una brisa nefasta, ha desolado mi vida,
arrancando cada árbol, plantando en la tierra
mía,
cuanta crueldad en sus vientos, a mi me
devoraría,
cavando un hoyo profundo, donde me
sepultaría.
Con el cantar de pregones, una cruz me
sembraría,
en medios de los jazmines, que el suelo
cubrirían,
tapando el despojo, que en el lecho yacía
y solo lágrimas blancas. Vi correr por sus
mejillas.
Cuando los últimos suspiros,
salían del alma mía,
para encontrarme contigo,
mi dulce compañía.
68 
Yâ|áàx àtÇàÉ
Fue contradictoria tu llegada,
tristeza y alegría al mismo tiempo;
muerte y vida, muerte y vida;
llanto y canto, llanto y canto;
jardín de gloria, oscuro infierno.
Fuiste verdad, fuiste mentira,
fuiste todo, resultaste nada.
Consolador y precursor de mis heridas;
primavera y otoño en un mismo día;
roció y sequía al nacer la mañana.
Fuiste quien con detalles gano mi amor
y quien como un gran ladrón, me lo arranco.
Fueron tus besos y tus caricias, rosas de bello
color
pero estas traían espinas y mi alma se
desgarró.
Mis suspiros se convirtieron en llanto
y mi sonrisa se sepultó.
13 
 `| uxÄÄt ÑÜ|Çvxát
Crepúsculos risos cayeron
sobre la cúpula del castillo
de la bella princesa.
Que con sus ojitos de astro,
me deleitan con su belleza.
Ella tiene manos de hada,
que al tocarme me quita la pena,
aquella que está en el cofre
donde guardo mis tristezas.
14 
[Éç
Hoy emprendieron la huida los pájaros,
aquellos que un día colgaron sus nidos,
cruzando la frontera, buscando refugio,
desafiando lo impreciso.
Soy extranjera que vino de tierras lejanas,
en busca de una espiga de trigo.
Llena de esperanza,
cargada de ilusión.
De encontrar la fortuna,
ambicionando la paz,
del pájaro azul que canta
con en el tintineos de campanas.
67 
 ZÄÉÜ|t
Me acosté con la gloria
y fui presa de sus hiedras.
Dulces barriles de miel,
que se llevaron las penas.
Me arropó la locura,
perdí la noción del tiempo.
Cuando me cautivaban sus besos
y me embriagaba su veneno.
Cada una de sus gotas,
daba vida a un gigante,
me rodearon amigo,
que me llenaban de alardes.
Y un día me abandonó,
cautivada por otro cuerpo.
Todos se apartaron
y tras sus pasos se fueron.
66 
VtÄÄx wx {Éç
Te contemplo tendida,
tan quieta,
como si durmieras.
Entre grandes y pequeñas olas,
pintadas de tantas auroras,
que vienen y van con el tiempo.
Tu belleza empañada por el polvo,
que revolotea con el viento,
jugando a ser libre,
echando a volar el sentimiento.
Entre piedras,
se chocan los pensamientos,
de los transeúntes que por ti pasan
y veo en sus ojos morir todos sus sueños.
15 
 bÄä|w°
Olvidé tu rostro,
Ya no brillan las perlas de tu traje. para que recordar,
Pues, manchas negras, las oscurecieron hojas caídas en el fango
y las palomas blancas; hostil de tus mentiras.
no se posan en tu pelo.
Plumas tiradas al viento,
No se escucha la risa de los niños, ruinas sumergidas en la tierra,
jugando sobre tu pecho, hoguera que languidece por falta de fuego
sólo se oye un pregón, en un día de invierno.
que trae mucho lamento.
Estrella caídas,
Como duele vivir en un mundo, noche sin luna,
acelerado e incierto. día sin sol,
Te vi abrazar el amor, tierra sin cielo.
hoy solo traes sufrimiento.
Sufrí mucho,
no lo niego,
te amé con locura
pero al fin, te borré de mis recuerdos.

16  65 

XÇàÜx vtÜxàtá
Entre caretas y caretas
me impediste
contemplar tu rostro.
Como piedra preciosa
lo escondiste en un baúl,
en el fondo del mar azul.
No amo al ser que eres
sino al que vivirá en mis recuerdos,
de ese me enamoré, jurándole amor eterno.
64 
fâx©Éá
Tengo muchos sueños
detenidos en el tiempo,
quizás escondidos
esperando un largo vuelo.
Yo quisiera que ellos vuelen
pero alas ponerles no puedo,
quiero que tú me ayudes,
a soplarlos con el viento.
Viento que sale del alma,
aquel que llaman aliento,
aquel que nos da la vida,
sin el cual vivir no puedo.
Para que quiero la vida,
si no puedo tener sueños,
si ellos no pueden volar
para que seguir viviendo.
17 
 fÉÄxwtw
Cáliz amargo que bebo cada día;
cuando bajan por mi rostro,
lágrimas de desilusión,
lágrimas de desaliento.
La vida pierde el sentido,
cuando sola yo me siento,
cuando no puedes confiar
y no encuentras compañero.
Que me ayude con la carga,
que me abrace el sentimiento.
Aquel que me acompaña,
cuando todos ya se fueron.
Si la tarde se hace larga,
me alegra con un cuento.
Devolviéndome la vida,
cuando morir, es lo que quiero.
18 
_É Öâx Ñ|xÇáÉ wx à|
Si las aves hablaran,
hablaría al mundo de ti
pero a través de su canto,
dicen lo mucho que te aman a ti.
Si los arboles hablaran,
hablarían al mundo de ti
pero a través de su brisa,
dicen cuantas caricias reciben de ti.
Si los mares hablaran,
hablarían al mundo de ti
pero sus azules aguas,
dicen cuanta paz reciben de ti.
Si las montañas hablaran,
hablarían al mundo de ti
pero sus valles de flores,
dicen el amor que sientes por mí.
63 
 fx©ÉÜ àØ xÜxá
Eres torrente de agua fresca,
que corre por mis colinas,
la brisa cálida y suave
que me devuelve la vida.
Eres mi razón de vivir,
quien da luz a mi vida,
todo lo que yo amo,
el motivo que de mi sonrisa.
Eres lo que en mi canta,
tu mi dulce compañía,
a quien más amo en el mundo, solo ahogar tu ausencia en mis lágrimas
tú significas mi vida.
62 
XÇ ÄÉ áxvÜxàÉ
En lo secreto de mi cuerpo
llevo señales bien ocultas,
que el tiempo borrar no pudo.
De un amor que nunca se irá.
Extranjero de mis días eres
y en el silencio de las noches tristes;
reclama mi piel tu presencia
y mis labios la ausencia de tus besos.
Pero nada puedo hacer,
aún quiera mirarte, yo no puedo,
y llenar mi vida con el azul del cielo.
19 
 gxÇzÉ xÇ Å|á É}Éá âÇ VÜ|áàÉ
Xá w|y•v|Ä
Es difícil aprender a ser,
cuando fui sonrisa de tu boca,
caricias en tus dulces manos
y besos de tus tiernos labios.
Es difícil sonreír al mundo,
cuando por dentro tanto sufro,
por la llegada del triste adiós.
Entonces se pierde el sentido, de lo que llaman
razón.
Recogeré los pedazos, de mi triste existencia,
aprenderé aún sea difícil
a vivir de los recuerdos.
Y aunque ya no estés, muerta seguiré viviendo.
20 
Tengo en mis ojos un Cristo,
que a diario es crucificado,
por los que usan su nombre,
para engañar a sus hermanos.
Se visten de ropa blanca,
para cubrir su oscuro vestuario,
utilizan palabras bellas,
para ocultar sus largos látigos.
Le pido al Señor misericordia,
para mí y los llenos engaños.
Que nos permita tocar,
la sangre de sus heridas manos.
Para que esta pueda limpiar,
aquello que llaman pecado,
para que vuelva la luz,
que la oscuridad ha ocultado.
61 

gx Öâ|áx àtÇàÉ
Te quise tanto, tanto, pero tanto,
que una locura mi alma envolvió.
Todas las noches soñé con tus besos
y en el día me vestí con tu amor.
Pero la luna hoy no te nombra,
pues apagaste su lindo color.
Sembraste en la tierra espinas,
las cuales mataron la flor.
La flor que al fin no cuidaste,
aquella de bello color.
La que fue pintada con sangre,
aquella que llaman amor.
60 
`x äxáà• vÉÇ ÉávâÜtá ÄözÜ|Åtá
Me vestí con oscuras lágrimas
y cubrí mis pies descalzos
de caminos recorridos,
en busca de tus huellas.
Se llenaron mis días de angustia,
deseó mi alma volar,
en busca del infinito,
buscando la eternidad.
Me convertí en piedra de río,
que solo la corriente arrastra,
con sus torrenciales aguas turbias,
cargadas de malos recuerdos y amarguras.
Te suplico hoy al encontrarte, que me
envuelvas en tus aguas blancas,
aguas vivas que dan vida
y transformes estas cenizas
en tierra fértil para tu viña.
21 
 f| Ät {âÅtÇ|wtw
dâ° Öâ|xÜxá Öâx àx vâxÇàx Si la humanidad,
recordara mis palabras
Solo tristezas puedo contarte, y encontrara en ellas
Pues, ¿quieres saber de mí? el verdadero sentido de la vida.
No sé si te alcancen tus ojos para encontrarme, No habría en sus ojos lágrimas,
estoy sumergida en lágrimas. sino una gran sonrisa.

Sólo se puede ver la aurora de mi recuerdo, Abandonan mis preceptos

inerte en el pensamiento errante y cubren de espantos
del alma viajera las huellas de mi vida.
de la inocencia. Olvidando el testimonio,
que le brindaron mis días.
Que por mucho tiempo me permitió soñar
y al abandonarme se enmudecieron mis labios. Profanando el manto santo,
Aquel rostro de ángel que aquella noche mi cuerpo envolvía.
se convirtió en la esfinge de piedra, que hoy tus Cuando oscuras sobras,
ojos contemplan. mi alma terrenal cubría
y aquel féretro de piedra
guardaba las memorias de una ejemplar vida.

22  59 
 i|wt ÑÉÜ Öâ° Åx tzÉu|tá
¿Vida por qué me agobias?
XÇàÜx {É}tá áxvtá ¿Por qué te empecinas?
En derramar
Buscando entre hojas secas, el rocío de mis ojos.
bajo la sombra de un árbol,
te encontré un bello día. ¿Por qué no detienes el tiempo?
Refrescando mi alma en manantiales
Eran negros tus ojos que solo traigan alegría
y muy dulce tu sonrisa. aunque sea por un segundo.
En tu pecho una rosa,
que buscaba compañía. Mira, no tengo fuerza
Aunque mi voz se silencia,
Como olvidar la Julieta, eleva un gran grito mi corazón
que desde entonces traías, herido y cansado.
con tus manos de azucenas,
que acariciaban el alma mía. Detén las cizañas del mal que se enredan
para destruir el bien
que da luz a la tierra,
la cual agoniza de tanta pena.

58  23 
XÇàÜx Åâ©xvtá
Entre muñecas _t ØÄà|Åt Ñöz|Çt
fui tan feliz,
grande amigas Al amanecer escribí la última página,
con quien aprendí. la última de esta historia,
la cual selle con tu nombre.
Hacer mil juegos, Con gran dolor y oscura gloria.
con mil canciones
y como una boba La cual serré con un beso,
siempre reí. el que no olvidará mi boca,
aquella que te beso tantas veces,
Vivo en su mundo aquella a la que volviste loca.
de fantasías,
estático y frío Me despido con un adiós sincero,
como el marfil. aquel que solo un corazón puro evoca,
con el más profundo sentimiento,
Bellos vestidos, que hoy a mi alma enlutada arropa.
bellos peinados,
alma de ángel,
piel de rubí.

24  57 

Piensen en sus hijos,
miren que se oscurece alba,
no les nieguen la sonrisa,
no les maten la esperanza.
VâtÇwÉ àx vÉÇàxÅÑÄÉ
Al contemplar tus azules aguas
algunas veces quietas, otras veces intranquilas.
Meciendo tu silencio o quizás tu sonrisa
que vuelan con el viento.

Cuerpos extraños recorren tu cuerpo

que dejan cicatrices tras sus agigantados
pasos
y con sus grandes velas
arremolinan tu canto.

Tu tan perfecta creación,

vuelve a tu antigua calma
y te curas hasta las heridas del alma
sin dejar vestigio de dolor.

Si hoy pudieran tus sagradas aguas

hacer en mí un milagro de amor
y llevarte en cada ola
la amargura que han sembrado en mi corazón.
56  25 
 hÇtá ÜÉátá
fÉç Ät äÉé Öâx ÇÉ áx xávÉÇwx
Unas rosas no necesitan palabras
Soy la voz que no se esconde,
para decirte lo que siento
aquella que grita desde lo alto,
y sus pétalos de hadas
no importa la espesura del monte,
van perfumando el viento.
que quiera ahogar mi canto.

Son testigo de canciones

Que repiquen los tambores,
y lágrimas de río adentro.
que claman justicia latina,
Aquellas que salen del alma
aquellos que son subyugados,
y dicen que aún te quiero.
por sus hijos y sus hermanos.

Son lumbreras donde llegan,

Se abuza de la niña inocencia,
que alegran el pensamiento
con ayuda de su prima ignorancia
o destino de un entierro
de aquellos que son tan débiles,
donde se da luz al sentimiento.
que carecen hasta de agua.

Su entrega es un regalo especial

Grita mi alma, gime la tierra,
que me hace sierva de tus besos
se cierran mis puños, corren mis lágrimas
y como una humilde esclava
despierten mis hermanos,
por siempre servirte quiero.
piensen en el hoy constituyendo el mañana.

26  55 
f| Ñâw|xÜt tÜÜtÇ
tÜÜtÇvtÜ wx Å•
Si pudiera arrancar de mí,
la espina que clavaste en mi pecho,
descansaría mi alma,
de este largo sufrimiento.
Si pudiera arrancar de mis labios,
la dulzura que tienen tus besos,
descansaría mi mente,
del deseo de tenerlos.
Si pudiera arrancarte de mi piel,
el calor y perfume de tu cuerpo.
Descansaría mi carne,
del deseo de poseerlo.
Si pudiera arrancar de mí,
todo el amor que por ti siento,
descansaría mi llanto
y volvería a reír de nuevo.
54 
f| xáàtá ÜÉátá Ñâw|xÜtÇ {tuÄtÜ
Si estas rosas pudieran hablar,
te dirían lo mucho que te quiero.
Ellas no tienen palabras
pero expresan mi sentimiento.
Son hermosas como tú,
con grandes y bellos pétalos.
Que perfumarán el altar
donde descansan tus sueños.
Se feliz mi dulce reina,
se feliz que yo te quiero
y aunque no lo sepa explicar
te llevo aquí muy dentro.
27 
 Vtwt w•t Çtvx ç ÅâxÜx âÇ VÜ|áàÉ
ctÜt Öâ° Ät ä|wt á| ÇÉ àx àxÇzÉ
Para que la vida si no tengo
si te marchaste, para que rezo,
si me abandonaste y aún te quiero.
Oh llegaste, tardaste en regresar,
ven abrázame no me sueltes,
átame a tu cuerpo, no me dejes.
Adhiérete como un liquen a este árbol
olvidado por el tiempo, triste y callado.
Con raíces o sin raíces, pero si desolado
Se la primavera y renueva mi pasado
has que muera el otoño que me ha
acompañado
durante todo este tiempo que no estuviste a mi
lado.
28 
Cada día nace y muere un Cristo,
nace en todos los que luchan,
mueren en los que bajaron los brazos.
Cada día nace y muere un Cristo,
nace en los inocentes,
muere en los condenados.
Cada día nace y muere un Cristo,
nace en los que construyen,
muere en los que hacen daño.
Cada día nace y muere un Cristo,
nace en los humildes,
muere en los que el orgullo lo ha segado.
Cada día nace y muere un Cristo,
nace en todos los que aman,
muere en los que nunca han amado.
53 
 fx xávâv{t âÇ Öâx}|wÉ ÑÜÉyâÇwÉ
f| Ñâw|xÜt àxÇxÜàx
Se escucha un quejido profundo
Si pudiera hoy tenerte, entre sollozo y sollozo;
estuviera sonriendo junto a ti, la miro a ella, impetuosa
como liana adherida a tu cuerpo. tan fuerte y a la vez tan débil.

Sobre tu pecho, Sus ojos traen consigo tu recuerdo,

descansarían mis angustias de tu llegada, de tu partida.
y no existiera el dolor que profeso. ¡Dijiste adiós! Adiós eterno
y para ella no hay lágrimas, no hay consuelo.
La amargura que reflejan mis ojos,
inertes en el tiempo. En el silencio de la noche, se escucha su
Desde el día de tu partida, quebradiza voz,
al llamado sueño eterno. ¿dime hijo mío donde te busco?
¿Qué hago si no te tengo?
Seguir llorando, seguir sufriendo.

52  29 
 `tÜ
Posees una presencia impetuosa
que despliega tu grandeza,
que ínsita a los hombres
a descubrir nuevas tierras.
Le prestas tus inmensas olas
para que naveguen sus ideas
y les pides al viento
Que empuje sus grandes velas.
Se deslizan por tu manto,
pintado de azul turquesa
y se bañan en los corales;
sus ansiedades y tristezas.
Y los llevas a la orilla,
donde un nuevo mundo le espera,
el cual los hará más felices
o les aumentará las penas.
30 
XÇvÉÇàÜ°
En tus ojos oscuros
encontré un bello día,
la necesidad de amarte.
Cuán grande hermosos faroles,
que al contemplarlos,
me hacen vivir.
El encontrarlos fue motivo,
de risas y revivir sueños
sepultados en el tiempo.
Lo he hecho tan míos,
doy gracias a Dios,
por tenerlos.
Por darme la oportunidad de amarlos
y abrazarlos a mi pecho;
al salir la aurora en el hermoso cielo.
51 

TÅtÇxvx xÄ w•t
Amanece el día
y entre nubes grises,
una gran luz brilla.
Y en lo más alto del almendro,
se escucha repicar el canto
del triste ruiseñor.
Que un día enmudeció,
para hogar su llanto,
de creer haber perdido,
lo que no había encontrado.
Pero la noche fue testigo,
de todas las viles mentiras,
que causaron afección,
y casi destruyen mi vida.
50 
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Cielo quiero que sea testigo
de un destino marcado,
no fue Dios quien lo impuso,
sino cada cristiano.
He sentido en mi pecho,
un fatigoso cansancio,
quieren cerrarse mis ojos
o poner el Cd en blanco.
Pues hoy le pido al mar,
ser mi hermoso campo santo,
que abra dos grandes olas
para que abrigue mi canto.
Que su pecho sea mi nido,
donde se termine el llanto
y que cubran los corales
el pequeño féretro blanco.
31 

Que las perlas engalanen
aquel hermoso peinado,
que las estrellas adornen,
el blanco y frio vestuario.
Ya completo el ritual,
que se perpetúa el llanto.
Que se les canta al sueño eterno
al despedir a los cristianos.
y gota a gota, se desangra mi pecho.
32 
Wxáwx ÄÉ Åöá ÑÜÉyâÇwÉ
Desde lo profundo del abismo,
me prosterno ante tus pies,
a suplicarte que me perdones,
no ves que gime mi alma de dolor.
Levanta tus ojos, mírame,
te lo pido, te lo suplico,
no me dejes, mira que sangro,
puedo morir esta noche.
Me postro frente al madero
y entre la arena te busco.
Sueño con encontrar tus huellas
pero no lo consigo.
No te olvides de mí,
mira que muero,
mira han herido mi rostro
49 
 Llevo dentro un espectro grado,
VÉÅÉ áx |ÇÖâ|xàtÇ Å|á É}Éá
que refleja lo que fui y lo que soy.
¿Y que soy? Dime, después de hoy.
¿Dímelo, qué soy, qué no lo entiendo?
¿Dime el porqué de este sufrimiento?
¿Dime, voy escuchar para entenderlo?
Y así tal vez comprenda,
el por qué, de la aflicción que llevo dentro.
48 
Como se inquietan mis ojos,
frente a tu majestuosa presencia,
miro hacia lo lejos,
todo es azul y belleza.
Nido de gaviotas,
motivo de muchos poemas,
lugar donde me refugio
y logro desahogar mis penas.
Te miro en el infinito,
como si contar pudiera.
La gran cantidad de olas,
que bañan a mi rivera.
33 

XÜxá Å| öÇzxÄ
Eres mi ángel, como negarlo,
llegaste y me salvaste;
de este duro sufrimiento.
No te han visto mis ojos
pero aún yo te siento.
Como negar que te amo,
si ocupas mi pensamiento
y llora mi alma; con profundo sentimiento.
De saber que puedo perderte,
de saber que no te tengo.
Como no amarte,
si te llevo tatuada muy dentro.
Eres lo que tanto esperaba,
eres por quien yo siento.
34 
hÇt vÉÑt ÇxzÜt
Una copa negra con cáliz,
un día incierto y quejoso;
una noche oscura e infeliz,
llena de sombras, llena de abismo.
Llueven afuera cántaros de espantos,
pues adentro no caven más naufragios.
Se llenó la fuente de tanto llanto,
cuanto silencio hacen las aves.
Ya no se escuchar su melodioso canto,
aquel que nos hizo reír y también llorar.
La tierra gime desde lo más profundo
y brota de sus rocas manantiales de llanto.
Azulejos luminosos rodean mi vida,
reflejo de lo profundo de mí rostro,
incierto, callado, triste y turbado.
Que inspira dolor y espanto.
47 
 `x xÇvâxÇàÜÉ {xÜ|wt
Me encuentro herida entre guijarros, f| Ät àÜ|áàxét {Éç ÄÄxzt
que destrozan mi vida
y como un guiñapo
Si la tristeza hoy llega a mi puerta,
deambula por las calles el alma mía;
que puedo hacer, si no es decirle,
buscando un consuelo,
pasa, siéntate
buscando, buscando,
pero no te quedes mucho tiempo.
a que aferrar mi vida.
Márchate,
pues quiero seguir viviendo.
Entre sombras y tinieblas me encuentro.
Cuantas tristeza rodean mis días,
Sé que te acompañan las lágrimas
nubes grises cubren mi cielo,
y también el sufrimiento;
donde ayer volaban blancas gaviotas
lo recibo y absorto lo acepto
y hoy oscuras golondrinas.
pero necesito reír,
necesito soñar, como hace algún tiempo.
Cuan cruel y dura es la vida,
cuan dulce y amargos son los tragos que te brinda.
Unos llenos de penas y otros de alegrías;
unos llenos de rosas y otros llenos de espinas.

46  35 
 fÉÇ àÜ|áàxá
Son tristes mis noches y mis días.
Está sufriendo el alma mía,
manantiales me han cercado
y solo tengo dos salidas;
navegar en ellos,
aceptando la dura realidad de la vida
o creerme que no puedo
y sucumbir sin ver la orilla.
Miro al cielo, te llamo, te busco
y al fin te encuentro.
Escucho tu risa,
veo la ternura de tus ojos,
siento toque de tu pelo.
Ahora quiero que pases tus manos,
sobre mí herido pecho
para ver si se me calma,
este dolor que siento.
36 
Inclina tu rostro hacia mí,
sé que no soy digna de ti,
de tu perdón,
de tu compasión.
Pero permíteme derramar mis lágrimas
sobre tus pies.
Deja que desahogue mis penas,
¡escúchame!
Quiero contarte que sufro.
Sabes, me duele el alma,
ya no lloran mis ojos,
siento que sangran.
No puedo abrirlos,
no veo a través de ellos la luz del sol,
solo rodean tinieblas mi vida
y un profundo vacío
me acompaña todo el día.
45 
 VÉÅÉ xÄ özâ|Ät
Como el águila se oculta
entre lo más profundo,
de las entrañas de la madre tierra.
Hoy aquí me sepulto
y en el silencio te busco;
te llamo y espero encontrarte.
Sabes, muchas veces he soñado,
he soñado que te veo,
he soñado despierta y entre dormida;
que toco tus manos heridas,
las he estrechado a mi pecho
y las he sentido tan mías.
No me dejes sucumbir,
¡sálvame!
No me dejes morir,
mira mi rostro,
lloran mis ojos,
siente mi alma dolor.
44 
gx á|xÇàÉ
Te siento y te busco,
te busco y no te encuentro.
Te busco en el vacío,
del alto firmamento.
Te busco entre las nubes,
más arriba y no te encuentro.
Te busco en las estrellas,
de este oscuro cielo.
No sé donde te encuentras,
sólo sé que te quiero,
te extraño vida mía,
es todo lo que siento.
37 

V™ÅÉ ÉÄä|wtÜ
Como olvidar el mar,
si fue testigo de tus besos.
Aquellos que fueron tan dulces,
aquellos que aún yo siento.
Como olvidar la noche,
si fue abrigo de los sueños.
Aquellos que no llegaron,
aquellos que me dolieron.
Como olvidar tu rostro,
como olvidar que te quiero,
como olvidar que eres,
todo lo que deseo.
38 
[tÇ àxÇw|wÉ
Han tendido sobre la cruz un Cristo,
en aquel lugar sagrado.
El Cristo de los que sufren,
el Cristo de los olvidados.
Van a clamar al Cristo,
todos los desamparados.
Aquellos que sufren hambre,
aquellos por la justicia olvidados.
Se postran frente al Cristo
y al cielo elevan sus manos.
Pidiendo con todas sus fuerzas,
que les quiten el yugo de esclavos.
Que los liberen del infierno,
a lo que vida le han llamado.
Que se apiaden y le ayuden,
aquellos nombrados hermanos.
43 

f| Ñâw|xÜt ÉÄä|wtÜ
Si pudiera olvidar,
el primer beso que recibí de tus labios,
la primera mirada que tus ojos me dieron.
Si pudiera olvidar,
el primer abrazo que recibí de tus brazos,
las primeras caricias de tus manos me dieron.
Si pudiera olvidar,
el primer y último de tus recuerdos;
pasaría el dolor, que tus palabras me dieron.
Cuando parta, al sueño eterno.
42 
dâ|xÜÉ Öâx Çtévt
Quiero que nazca en mí,
ese sentimiento tan grande
llamando amor verdadero,
Compartir contigo,
mis últimas palabras,
mis últimos besos.
Regalarte mi última mirada
para grabar tu rostro
y llevarte en mis recuerdos.
Que tus brazos sean el nido
donde descanse mi cuerpo.
39 
 VÉÑÄtá àÜ|áàxá
Coplas tristes brotan de mis labios,
un día funesto y gris de mi vida.
Cautiva terrenal de amarguras,
dolor que me contagia, enmudeciendo mi risa.
Tinta carmesí que me baña,
manantial oscuro que yace en mi cuerpo.
Soy pelegrina que deambula por el mundo,
sin conseguir paz y sin consuelo.
Tapiz endurecido de tristeza,
que sepulta en la tierra mis deseos.
Ya no brotan de mi pecho las canciones,
sólo se escuchan quejidos y lamentos.
me darías aún sean migajas de tu amor,
Oh Dios, huésped de tierras oscuras,
yo no quiero seguir siendo,
quiero un ángel compasivo,
que me saque, de este oscuro sufrimiento.
40 
f| vÉÇÉv|xÜtá
Si conocieras como te amo,
abrirías las puertas de tu corazón.
Pintando con acuarela,
el rojo que simboliza el amor.
Si me permitieras entrar en tus sueños,
no abrirías tus ojos al sol.
Pues mi luz sería suficiente
para abrir todos los pétalos de tu flor.
Si supieras como te pienso,
las cuales serian suficiente
para alegrar mi corazón.
41 