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DERECHO PENAL
Y CRIMINOLOGÍA
DELITOS ECONóMICOS • CONTRAVENCIONAL •
GARANTÍAS CONSTITUCIONALES • PROCESal PENAL •
EJECUCIÓN DE LA PENA
Director
Eugenio Raúl ZAFFARONI
ÁREA PROCESAL
Miguel Á. ALMEYRA
COORDINADORES
MatÍas BAILONE
Gabriel Ignacio Anitua
EDITOR RESPONSABLE
FRANCISCO J. CROCIONI
COMITÉ ACADÉMICO
Eduardo AGUIRRE OBARRIO (Argentina 1923-2011)
Carlos Julio Lascano (ARGENTINA)
Lola ANIYAR DE CASTRO (Venezuela)
Luis ARROYO ZAPATERO (España)
David BAIGÚN (Argentina 1926-2015)
Nilo BATISTA (Brasil)
Roberto Bergalli (Argentina)
Jorge DE LA RUA (ARGENTINA 1942-2015)
Edgardo Alberto Donna (Argentina)
Luigi FERRAJOLI (Italia)
José Luis GUZMÁN DALBORA (Chile)
Julio B. J. MAIER (Argentina)
Sergio MOCCIA (Italia)
Francisco MUÑOZ CONDE (España)
Esteban RIGHI (Argentina)
Gladys ROMERO (Argentina 1933-2014)
Norberto SPOLANSKY (Argentina)
Juarez TAVARES (Brasil)
John VERVAELE (Holanda)
José SAEZ CAPEL (ESPAÑA)
COMITÉ DE REDACCIÓN
con el auspicio de
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Sumario
DERECHO PENAL
DOCTRINA
procesal PENAL
DOCTRINA
La privatización de la acción penal en el nuevo Código Procesal Penal de la Nación (ley 27.063)
Por Diomedes Guillermo Rojas Busellato....................................................................................... 120
A un año del fallo por el homicidio de Diana Sacayán: los tribunales y el acceso a la justicia de
las personas travestis y trans
Por Yamila Rodríguez......................................................................................................................... 134
NOTA A FALLO
EJECUCIÓN DE LA PENA
DOCTRINA
POLÍTICA CRIMINAL
DOCTRINA
DOCTRINA
Michel Foucault y los aportes de una historia política de la verdad a la Teoría del Derecho
Por Juan E. Ortiz................................................................................................................................. 226
Lo que se cree, lo que se escribe: dos preguntas cruciales para la sociología de la justicia penal
Por Ezequiel Kostenwein................................................................................................................... 246
Por Díaz,
Por Brito Vukusich, Guerra SofíaMena
BritoValdés
Vukusich (*)
, Maximiliano
y Quintanilla Jerez Guerra Díaz (**),
Juan Mena Valdés (***)
y Gabriel Quintanilla Jerez (****)
Más allá del revuelo mediático, las complejas para el orden público, viéndose legitimada (por
y dolorosas consecuencias que generan hechos los promotores de dicha política criminal) la ac-
violentos como los señalados, creemos necesa- tividad estatal tendiente a la supresión de dicha
rio indagar en el por qué situaciones como estas amenaza, ya sea por la vía legal (mediante leyes
se responden a través de respuestas legislativas. como “Aula Segura”) o por la vía de hecho (con el
¿Qué lleva al Poder Ejecutivo a consolidar una abuso policial).
solución legislativa para situaciones que, aunque
no negaremos su gravedad, no dejan de ser he- Para finalizar, se analizarán las implicancias
chos aislados dentro de las comunidades educa- político-criminales de “Aula Segura”, y se revisa-
tivas?, ¿no es suficiente acaso una investigación rán algunos conceptos propios del derecho penal
penal, tal como se aplicaría a cualquier ciudada- como el derecho penal simbólico, y el derecho
no que se viese involucrado en actos delictivos penal del enemigo. Si bien la normativa objeto
como los descritos?, ¿cuál es el marco y contexto de estudio no clasifica dentro de la rama del de-
social en que se produce esta normativa? En este recho penal stricto sensu, sino más bien como de-
trabajo analizaremos cómo esta nueva regula- recho administrativo-disciplinario, dichas teo-
ción se enmarca en una tendencia político crimi- rías ofrecen categorías útiles para comprender la
nal punitivista, que procesa las conflictividades lógica punitiva detrás de esta regulación y cómo
sociales a través del establecimiento de mayores dicho paradigma se expande a otras áreas del
grados de represión y castigo estatal. Para ello, se ordenamiento jurídico creándose un verdadero
hace necesario el análisis del proyecto presen- derecho administrativo del enemigo, sobre esto
tado por el Poder Ejecutivo, cómo este instala nos detendremos más en extenso. La posibilidad
el sentido común de enemigo sobre una cierta de identificar “Aula Segura” como una manifes-
categoría de la población, y se consolida como tación del derecho administrativo del enemigo
heredero de una tradición de propuestas legisla- arroja dos conclusiones consecuenciales que
tivas que buscan la estigmatización de las figuras adelantamos: a) la expansión del derecho penal
delictivas al interior del movimiento estudian- del enemigo, y su lógica interna, a otras ramas
til. En este sentido, lo que se busca analizar es del derecho, ahora fuera del derecho penal mis-
cómo la presentación de dicho proyecto se plan- mo, confirman las advertencias realizadas sobre
tea como una respuesta eficiente y eficaz frente tu poder expansivo; b) por lo tanto la calidad de
a un problema de seguridad ciudadana, que no ciudadano y sujeto de derecho se suspenden en
se resuelve por las investigaciones de delitos co- esferas jurídicas cada vez más amplias, poniendo
munes, sino que consolida una categoría de de- en riesgo su vigencia como categorías explicati-
lincuente como enemigo común, encarnado en vas de la persona en sociedad.
la figura del “encapuchado”. Es por este motivo
que se revisará la historia legislativa en materia II. El contexto del Proyecto “Aula Segura”
de criminalización del movimiento estudiantil y
protesta social, el rol que han jugado los medios En septiembre de 2018 se viralizan videos co-
de comunicación al respecto y cómo es que “Aula rrespondientes a incidentes ocurridos al interior
Segura” es una manifestación clave de dicha po- de dos de los liceos más emblemáticos de la co-
lítica criminal. muna de Santiago. Los llamados “overoles blan-
cos” se refieren a sujetos vestidos con overoles de
Luego, se dará cuenta de cómo esta política color blanco, que resguardan su identidad, y apa-
criminalizadora de la protesta social tiene una recieron en la escena pública a través de actos de
clara contracara: la total impunidad y despreo- violencia contra una profesora y un carabinero
cupación por parte del Legislador y las autori- de Fuerzas Especiales. Las respuestas mediáti-
dades del problema del abuso policial y la crimi- cas no tardaron en aparecer, pero frente a lo que
nalidad de las fuerzas de seguridad y orden. Ar- debiese tratarse como delitos comunes, algunas
gumentaremos que dicha falta de fiscalización y voces del municipio, así como de algunos par-
control sobre la criminalidad desplegada por los lamentarios, argumentaron la necesidad de una
efectivos policial dispuestos para la represión de nueva legislación que ponga mano dura contra
las distintas formas de protesta social en Chile es los actos de vandalismo que son cometidos al
una consecuencia necesaria de la identificación interior de los establecimientos educacionales.
de un sujeto social como enemigo, o amenaza Ante dicho fenómeno, el gobierno no tarda en
presentar al Senado el proyecto de ley conocido figura se vuelve una de las figuras delictuales de
como “Aula Segura” (Boletín 12.107-04), señalan- mayor connotación pública, generándose una
do lo siguiente en sus antecedentes: “Los últimos gran visibilidad de los incidentes en las manifes-
eventos de violencia ocurridos en algunos esta- taciones. Los medios de comunicación sobredi-
blecimientos educacionales del país han llegado mensionan la gravedad y frecuencia de estos he-
a niveles tan graves que la legislación vigente ha chos, provocando una imagen virtual que desen-
sido superada” (2). “Aula Segura” se vuelve así cadena la sensación generalizada de inseguridad
en uno de los proyectos del Gobierno de mayor frente a sus ataques. La forma en que se comuni-
relevancia durante el año 2018, considerándose ca la ocurrencia de dichos hechos delictuales “no
mediáticamente como una respuesta oportuna a se limitan a reconocer y presentar el ‘problema
las demandas por mayor seguridad en los espa- social’, sino que realmente construyen y comu-
cios educacionales. La criminalización del movi- nican una imagen virtual que no coincide con la
miento estudiantil, a través de la generalización real. De este modo, contribuyen a la aparición y
de este tipo de casos particulares de violencia al refuerzo de errores cognitivos en el auditorio
alcanza con este proyecto un nuevo giro comu- (por ejemplo, respecto a la probabilidad de ser
nicacional, teniendo una amplia cobertura por víctima del delito)” (4). Así las cosas, el encapu-
presentarse como la respuesta para acabar con chado se erige como figura relacionada con las
los actos violentos en el ámbito estudiantil. organizaciones estudiantiles, y las demandas
propias del movimiento estudiantil muchas ve-
II.1. “No son estudiantes, son extremistas, son ces pasan a segundo plano, o se ven desvirtuadas
delincuentes”: la mediatización de la violencia en por la ocurrencia de estos hechos. Claro ejemplo
el movimiento estudiantil de ello es un reportaje de Canal 13 (5) llamado
“Radiografía a los colectivos estudiantiles”, rela-
Desde los años noventa, las formas de mani- cionando diversas organizaciones políticas es-
festación del movimiento estudiantil se han visto tudiantiles con la explosión de la bomba en el
puestas en entredicho con diversas vías de cri- Metro Escuela Militar (6). Con el mismo modus
minalización y represión por parte de las fuerzas operandi, en medio de la discusión del proyecto
policiales. Dicha criminalización produce una de ley “Aula Segura”, y el revuelo mediático de los
estigmatización y genera la distinción entre “es- overoles blancos, el mismo canal de televisión
tudiante” y “delincuente”, y es así como autori- emite el reportaje “Adoctrinamiento en el Liceo
dades del gobierno, municipalidades, e inclusive 1” (7), mostrando imágenes de estudiantes en-
algunas de las mismas dirigencias del movimien-
to estudiantil han apoyado dicha distinción, al
tratarse de la figura del “encapuchado” (3). Dicha de esta forma, el discurso estigmatizador y criminaliza-
dor del Gobierno y los patrones. Luego, encuadrados en
el discurso de la “manifestación políticamente correcta”
(2) Proyecto de Ley Boletín 12.107-04. p. 1. Véase la se pueden llegar a convertir en delatores (cuando señalan
historia de la ley en https://www.bcn.cl/historiadelaley/ a sus compañeros a la policía), o en agentes directos de
historia-de-la-ley/vista-expandida/7604/. la represión (cuando detienen y entregan a la misma po-
(3) Es así como, por ejemplo, Pablo Zalaquett, alcalde licía a estos compañeros)”. La Tercera, 19 de mayo 2011.
de la Municipalidad de Santiago el 2011, señala frente a la Así como también el mismo vocero de la Coordinadora de
Toma del liceo Barros Borgoño: “Este es un acto delictual, Estudiantes Secundarios, llegó en el 2011 a manifestarse
no es un acto de jóvenes que vienen a un liceo emblemá- en contra los encapuchados en las marchas. El Mercurio,
tico. Cuando hay jóvenes que se encapuchan, no dan la 19 de junio 2011.
cara, destruyen el colegio, destruyen la calidad y la imagen (4) FUENTES OSORIO, Juan L., “Los medios de comu-
de la educación pública. Esto no tiene nombre”, El Mercu- nicación y el derecho penal”, Revista Electrónica de Cien-
rio, 2011, junio 7, p. C-8. La estigmatización se genera tam- cia Penal y Criminología, RECPC 07-16, 2005, disponible
bién en diferenciaciones de clase, como puede verse en en http://criminet.ugr.es/ recpc ISSN 1695-0194. p. 16:3.
este fragmento de un reportaje sobre los encapuchados: (5) Canal chileno de televisión abierta con altísima ca-
“(...) una parte de los estudiantes adscritos a las carreras pacidad de difusión mediática.
profesionales aparentemente más exitosas (medicina, in-
genierías, derecho, etc.), provienen de estratos socioeco- (6) Véase: Canal 13, “Radiografía a los colectivos estu-
nómicos más acomodados o dotados de un mayor ‘capital diantiles”, http://www.t13.cl/videos/reporteros/radiogra-
cultural’. Estos estudiantes universitarios se refieren a los fia-a-los-colectivos-estudiantiles.
jóvenes no universitarios (secundarios y sub-ocupados), (7) Véase: Canal 13, “Adoctrinamiento en el Liceo 1”,
como: ‘flaites’, ‘sopaipillas’, ‘lumpen’, etc., reproduciendo, http://www.t13.cl/videos/nacional/video-adoctrina-
deben ser claras y bien definidas, con el propósito de evitar arbitrariedades. Acorde a estas normati-
vas previas, el director tiene la facultad de expulsar, previo procedimiento racional y justo (debido
proceso), esto quiere decir que padres, madres, apoderados y estudiantes tienen derecho a defensa
y pedir la reconsideración de la medida dentro del plazo de quince días hábiles. No se puede can-
celar matrícula o expulsar en un período del año en que se haga imposible ser matriculado en otra
escuela, pero se contempla una excepción a lo anterior en casos que atenten contra la integridad
física o psicológica de un miembro de la comunidad, acorde la a circular del 20 de junio de 2018, de
la Superintendencia de Educación; así, medidas excepcionales podrán ser aplicadas “si existe un
peligro real para la integridad física o sicológica de algún miembro de la comunidad educativa (...)
en casos excepcionales se podrá aplicar la medida de suspensión por un período máximo de 5 días,
el que podrá prorrogarse por una sola vez por el mismo plazo, por causas justificadas” (10). Es de-
cir, la posibilidad de protección de las víctimas, así como la de un procedimiento acorde al debido
proceso, ya se encontraba estipulada en la legislación anterior.
Fuente: Elaborado sobre la base de Biblioteca del Congreso Nacional, “Historia de la Ley 21.128”; disponible en https://
www.bcn.cl/historiadelaley/nc/historia-de-la-ley/vista-expandida/7604/#h2_1_4 [Consultado en línea: 18/12/2018].
III. Abuso policial y protesta social como agravante que no es otra cosa que un “au-
toencubrimiento”, el que no es punible porque es
Visto el contexto social y comunicacional de- irracional pretender que el delincuente facilite la
trás de “Aula Segura”, creemos necesario poner en tarea de las policías (12). Es por esto por lo que se
evidencia que se trata de una manifestación más trataba de una figura típica irracional que no era
de lo que se puede denominar política de orden más que otra manifestación del derecho penal
en las calles, que tiene como principales objeti- simbólico como respuesta a la violencia en las
vos: la dilatación por parte de los sucesivos go- manifestaciones.
biernos en dar solución a las demandas sociales,
especialmente en materia educacional, lo que En vista de todo lo anterior, es evidente la
ha generado cada vez más violencia; y, por otro puesta en tensión de esta estigmatización de la
lado, una valoración de la política criminal diri- protesta social del movimiento estudiantil encar-
gida por el sentimiento colectivo de inseguridad nada en la figura de enemigo común del “enca-
ciudadana y la revalorización de la víctima real puchado”, con el abuso policial y la represión que
(11). Como se menciona en el apartado anterior, se produce por parte de las fuerzas policiales. La
se trata de un proceso dirigido en un principio en contracara de la criminalización del movimiento
contra de los “encapuchados”, a quienes se le ha estudiantil ha hecho común el uso desproporcio-
sindicado habitualmente la violencia desatada nado de la fuerza por parte de aquellas institu-
en las manifestaciones y que se generaliza como ciones que componen el brazo armado del Esta-
una forma de manifestación política asociada al do. En particular, es relevante resaltar el hecho de
movimiento estudiantil en su conjunto. que este tipo de abusos se da fundamentalmente
en contextos de represión de la protesta social.
“Aula Segura” es heredera de otros proyectos
de ley que han tenido los mismos objetivos. En Desde el 2011 a la fecha ha habido un aumento
el primer gobierno de Sebastián Piñera, entre significativo de las denuncias de abuso policial
los años 2010-2014, se presentan dos proyec- en el contexto de marchas. Según un informe
tos de ley: 1) el proyecto de ley Boletín 7903-07 presentado ante la Comisión Interamericana de
que “fortalece el resguardo al Orden Público”, Derechos Humanos el año 2016, “[h]a habido un
comúnmente llamada ley Hinzpeter, que fue significativo aumento de denuncias por violen-
rechazada por el congreso; y 2) el proyecto de cia innecesaria efectuada por efectivos policiales
ley Boletín 10304-07 que modifica el Código Pe- actualmente en trámite en el segundo juzgado
nal con el objeto de establecer el ocultamiento militar de Santiago: en el período 2011, 1777 ca-
como circunstancia agravante, que permanece sos, contra 2657 casos en el período 2012, repre-
dormida en el congreso. Este paquete legislativo sentando un aumento de 49.5% de denuncias en
tuvo por objeto hace frente a la violencia de las este juzgado militar” (13). A pesar de ello, no ha
manifestaciones, especialmente de los estudian- habido por parte de los gobiernos de turno me-
tes, y contenía tres núcleos problemáticos: a) el didas tendientes a intensificar las sanciones a los
establecimiento del ocultamiento del agente al funcionarios que se les reproche el uso desmedi-
momento de cometer el delito como una agra- do de la fuerza. En contraste a ello, vimos como
vante de responsabilidad penal; b) la nueva tipi- la tendencia ha sido la de criminalizar actos de
ficación de los delitos de desórdenes públicos y protesta social a través de proyectos de ley como
las penas asignadas; y c) las modificaciones que el que estamos analizando en el presente trabajo.
se proponían a los delitos de atentados contra la
autoridad. Los dos últimos fueron rechazados,
mientras que la ley de resguardo al orden públi- (12) En este sentido, si el Código Penal chileno en su
co no ha salido del Congreso a la fecha. Como vi- art. 17, inciso final exime de pena a los encubridores cón-
mos, incluso una de estas propuestas contempla- yuges y parientes, con mayor razón debe entenderse que
ba introducir la circunstancia del ocultamiento hay una razón de texto para sostener la no punibilidad del
autoencubrimiento.
(13) CASA MEMORIA JOSÉ DOMINGO CAÑAS, “El de-
(11) VILLEGAS, Myrna, “Procesos de reforma en Chile: recho a manifestación en Chile. Informe para su presenta-
aproximaciones desde el campo del derecho penal políti- ción a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos
co”, en AMARAL, Bruno (coord.), Justicia Criminal y De- (CIDH) de la Organización de Estados Americanos en su
mocracia I, Ed. Marcial Pons, 2015, ps. 252-254. 158 Período de Sesiones”, Santiago de Chile, 2016.
nantes, siendo los gases lacrimógenos una clara rios son efectivamente utilizados por carabine-
expresión de aquellos. ros al momento de enfrentarse a grupos de per-
sonas percibidos por estos como una amenaza al
Además de las infracciones a las garantías orden público.
constitucionales mencionadas, existe una falta
de regulación importante sobre el uso de gases IV. Radiografía de una política criminal
lacrimógenos por parte de Carabineros de Chile,
la que atenta contra el principio de reserva legal En vista de los antecedentes, y de la tenden-
máxima, Esto ya que a través de la interpretación cia de la cual es parte esta nueva normativa, se
del art. 62, Nº 20, CPR (el cual señala que es ma- vuelve evidente que Aula Segura está inserta
teria de ley toda “norma de carácter general y dentro de una clara política de criminalización
obligatoria que fije las bases esenciales de un or- del movimiento estudiantil y la protesta social.
denamiento jurídico”) se puede concluir que el Si bien sabemos que la regulación es de orden
uso de gases lacrimógenos debería estar regula- administrativa-disciplinaria, y no derecho pe-
do en sus bases esenciales por la ley. El problema nal propiamente tal, el recurrir a esta categoría
es que el único cuerpo normativo que se refiere entrega herramientas interpretativas para la
a la prohibición del uso o tenencia de este tipo realidad jurídica. En esta línea, Eduardo Melero
de sustancias se encuentra en la Ley de Control desarrolla el concepto de derecho administrativo
de Armas (LCA), la cual de todos modos levanta del enemigo, como aquel que opera en aquellos
esta prohibición respecto de las Fuerzas Arma- “ámbitos de actuación administrativa en los que
das y de Orden, en su art. 3º, inc. 4º. se utiliza el derecho como un instrumento para
combatir a aquellos individuos que son conside-
En consecuencia, la vulneración al principio rados como especialmente peligrosos” (16), pero
de reserva legal máxima se expresa de dos for- antes de entrar directamente en esta categoría, se
mas: abordarán como matrices de análisis los concep-
tos de derecho panel simbólico, y derecho penal
(a) Problemas con la regulación contenida en del enemigo.
la LCA en su art. 3º, ya que delega en la potestad
reglamentaria la regulación del uso de gases la- IV.1. Derecho penal simbólico
crimógenos. Así, este cuerpo normativo no con-
tiene ningún indicio, criterio, principio u orien- Manuel Cancio Meliá señala que el desarrollo
tación sobre cómo deben estos cuerpos emplear del fenómeno político criminal actual hacia un
dichos armamentos. En consecuencia, desde la derecho penal expansivo se ha manifestado co-
perspectiva de la reserva legal, le inexistencia de múnmente a través de dos fenómenos que cons-
una reglamentación de rango legal del uso de ga- tituyen la antesala del derecho penal del enemi-
ses lacrimógenos pareciera ser inconstitucional go, los cuales se encuentran relacionados entre
sí: a) el derecho penal simbólico; y b), el resurgir
(b) Problemas del Reglamento Complemen- del punitivismo de entreguerras (17). En primer
tario de la LCA el cual en ningún caso establece lugar, el derecho penal simbólico se refiere a un
“la forma” en la que podrán ser utilizados los ga- fenómeno de neo-criminalización respecto del
ses lacrimógenos, tal y como se lo enmendara la cual se afirma que tan solo cumplen efectos me-
LCA. Además, el reglamento, en relación con el ramente simbólicos, como elemento al interior
uso de estos materiales por las fuerzas de orden del mismo derecho penal. Desde un sentido crí-
público, vuelve a remitirse a la LCA. tico del concepto, se ha dicho que “cuando se usa
en un sentido crítico del concepto de derecho
En ausencia de una regulación completa y
comprehensiva en la LCA y su respectivo Regla-
mento, Carabineros ha procedido a establecer (16) MELERO, Eduardo, “El ‘derecho administrativo del
enemigo’ como categoría general de análisis del derecho
una reglamentación al respecto en su documen- administrativo”, en Libro en homenaje al profesor Ángel
to “Protocolos para el mantenimiento del Orden Menéndez Rexach, Universidad Autónoma de Madrid, Ma-
Público”, donde se deja a criterio de la institución drid, vol. 1, Aranzandi, Cizur menor, 2018, p. 399.
la posibilidad de proceder con este tipo de gases. (17) JAKOBS, Günther - CANCIO, Manuel, “Derecho
Vale preguntarse, en consecuencia, si estos crite- penal del enemigo”, Ed. Civitas, Madrid, 2003, p. 63.
penal simbólico, se quiere entonces, hacer refe- vimientos sociales, especialmente respecto de
rencia a que determinados agentes políticos tan los movimientos sociales estudiantiles, se conso-
solo persiguen el objetivo de dar la ‘impresión lida este enemigo común en el encapuchado, o
tranquilizadora de un legislador atento y decidi- en su actualización dada por el “overol blanco”.
do’, es decir que predomina una función latente
sobre la manifiesta” (18). De este modo, el proyecto de ley “Aula Segura”
se muestra como respuesta ágil a la inminente
Desde el punitivismo de entreguerras se co- necesidad por enfrentar atentamente al enemi-
mienza a demonizar determinados grupos de go común. El 13 de septiembre de 2018, día en el
infractores (terroristas, disidentes políticos, nar- que ocurre un hecho de violencia al interior del
cotraficantes), mediante la aplicación de una “le- Liceo de Aplicación, en un enfrentamiento entre
gislación de emergencia”, esto es, una legislación estudiantes y carabineros, que dejó a cinco efec-
que alteraba las reglas ordinarias de penalidad tivos lesionados, el ministro del interior Andrés
y suspendía garantías constitucionales autori- Chadwick señala: “Una vez más, en este caso el
zando en determinados casos la vulneración de Liceo de Aplicación, tenemos actos de violencia
derechos fundamentales (19). Por supuesto, esta muy fuerte. Hago un llamado al Congreso, tene-
legislación fue objeto de contundentes críticas, a mos que aprobar con la mayor urgencia posible
la vista de los principios que inspiraban el estado el proyecto de ley que le entrega facultades y
democrático, y se le acusó de ir deslizándose por atribuciones a los directores de los colegios para
la pendiente del autoritarismo. poder expulsar a aquellos que dentro de los li-
ceos están haciendo estos actos de violencia (...)
Estos dos fenómenos, tanto del derecho penal Es algo que ya no aguanta más, no podemos te-
simbólico como el del punitivismo, son elemen- ner ese nivel de violencia en nuestros estableci-
tos que no se pueden separar del todo, ya que mientos educacionales” (21). El ejecutivo apura
es evidente que uno de los elementos esencia- el proyecto justamente para dar la impresión de
les de la motivación del legislador a la hora de ser un gobierno atento y decidido, que responde
aprobar normativas de esta índole versa en los a las problemáticas actuales, buscando solución
efectos simbólicos obtenidos mediante su mera al problema de la violencia al interior de los esta-
promulgación, sin perjuicio de lo cual, las nor- blecimientos educacionales de manera efectiva
mas meramente simbólicas, pueden llegar a dar logrando poner sobre la palestra pública el en-
lugar a un proceso penal “real”. De este modo, el frentamiento directo al enemigo común encar-
derecho penal simbólico no se delimita por la nado en el encapuchado/overol blanco.
inaplicación o por la falta de incidencia real en
la solución a un problema social determinado, IV.2. Derecho penal del enemigo y derecho ad-
en términos instrumentales, sino que tan solo ministrativo del enemigo
identifica la especial importancia otorgada por el
legislador a los aspectos de comunicación políti- Como manifestación del fenómeno del dere-
ca a corto plazo en la aprobación de la respectiva cho penal simbólico, el derecho penal del ene-
norma. A través de los medios de comunicación, migo es relevante para entender ciertos aspectos
“la ciudadanía crea verdaderos frentes de soli- de la normativa impulsada por el Gobierno para
daridad ante lo que estima un enemigo común, “perseguir con toda la fuerza de la ley a aquellos
pide mayor severidad en la respuesta penal, y el delincuentes y violentistas que, disfrazados de
legislador, no escatima en proporcionarla, aun estudiantes, sin respetar a nada ni a nadie, pre-
cuando ello signifique mermar derechos y garan- tenden causar un clima de terror al interior de
tías fundamentales” (20). En el plano de los mo-
(18) Ibidem, ps. 64-67. (21) El Mostrador, “Tras ataque con molotov en el
Liceo de Aplicación: Gobierno apura al Congreso por
(19) VILLEGAS, Myrna, “El mapuche como enemigo en proyecto para expulsar a alumnos” [en línea], 13 de sep-
el derecho (penal): consideraciones desde la biopolítica y tiembre de 2018, https://www.elmostrador.cl/noticias/
el derecho penal del enemigo”, Instituto de Derecho Penal pais/2018/09/13/tras-ataque-con-molotov-en-el-liceo-
Europeo e Internacional, Universidad de Castilla La Man- de-aplicacion-gobierno-apura-al-congreso-por-proyecto-
cha, p. 4. para-expulsar-a-alumnos/ [Consulta: 18 de diciembre de
(20) Ibidem, p. 6. 2018].
(22) PIÑERA, Sebastián, 20 de septiembre de 2018 [en: Es relevante apuntar que para el autor no es
https://www.mineduc.cl/2018/09/20/proyecto-de-ley- necesario que se verifiquen todos los elementos
aula-segura]. propios del derecho penal del enemigo, o admi-
(23) JAKOBS, Günther, “Derecho penal del ciudadano
y derecho penal del enemigo”, en JAKOBS, Günther - PO-
LAINO NAVARRETE, Miguel, El derecho penal ante las so- (26) SILVA, Jesús M., “La expansión del derecho penal”,
ciedades modernas, Ed. Grijiley, Lima, 2006. Ed. Civitas, Madrid, 2001, p. 167.
(24) Ibidem, p. 33. (27) MELERO, Eduardo, ob. cit., p. 400.
(25) Ibidem, p. 37. (28) Ibidem.
nistrativo en este caso, para poder rotular la re- mos a la conclusión planteada por José Ignacio
gulación bajo esta categoría, basta la presencia Núñez: “El denominado derecho penal de ene-
de un número suficiente de estos en distintas migo —al menos algunas de sus manifestacio-
graduaciones (29). Por lo tanto es posible iden- nes— presenta diversas y profundas tensiones
tificar dentro del campo del derecho administra- con el concepto de Dignidad Humana, razón por
tivo regulaciones que presentan algunos de los la cual, al ser aquel un concepto constituciona-
elemento enumerados anteriormente, no todos, lizado convierte en inválida cualquier iniciativa
pero que de todas formas pueden ser cataloga- de su promulgación como norma vigente en un
das como derecho administrativo del enemigo. Estado constitucional garantista y Dignatario) de
El autor da como ejemplos variadas regulacio- derecho” (34).
nes administrativas españolas respecto de la mi-
gración que presentan las categorías suficientes IV.3. Análisis crítico del proyecto de ley “Aula
para su catalogación (30). Segura” y su redacción final aprobada a la luz de
las categorías del derecho administrativo del ene-
Cabe señalar que la elaboración del modelo migo
originalmente propuesto por Günther Jackobs
cumplía el propósito de dotar de legitimidad a El primer elemento que salta a la vista con toda
normativas penales existentes que no cumplían claridad es la identificación de una categoría de
con las exigencias mínimas del “viejo y buen sujetos como enemigos: los “overoles blancos”.
derecho penal liberal”. Sin embargo, la doctrina Lo que va de la mano del segundo elemento: la
ha valorizado el uso de las categorías por él pro- determinación de una legislación de lucha con-
puestas desde una perspectiva crítica, con el fín tra dicho enemigo. Ejemplo de ello es el uso del
de dar cuenta de la falta de legitimidad (o la ca- lenguaje de guerra, por el presidente Sebastián
tegoría de no-derecho) de alguna regulación en Piñera: “el mensaje es muy claro; les decimos a
específico, convirtiéndose en una herramienta todos nuestros compatriotas, nuestro Gobierno
de valoración jurídico-política (31). Lo mismo está comprometido con la calidad de la educa-
corre para el derecho administrativo del ene- ción de todos y cada uno de nuestros niños y jó-
migo, categoría que nace propiamente tal como venes, con la dignidad e integridad que merece
herramienta crítica (32), y en dicho sentido será toda la comunidad escolar, pero va a perseguir
utilizada en este trabajo. La finalidad por la que con toda la fuerza de la ley a aquellos delincuentes
se tratan los elementos dogmáticos vistos en este y violentistas que, disfrazados de estudiantes, sin
acápite es la de dar cuenta de la incompatibilidad respetar a nada ni a nadie, pretenden causar un cli-
estructural entre los “derechos del enemigo” (33) ma de terror al interior de nuestros establecimientos
con un Estado Democrático de derecho que mire educacionales (el destacado es nuestro)” (35). El
a todo ser humano como fin en sí mismo, igual mensaje es claro: como dice el mismo mandatario,
en dignidad y derechos. De este modo, adscribi- estamos nosotros, quienes tenemos el derecho
a recibir educación de calidad, niños y jóvenes
(29) Ibidem, ps. 400-401. que merecemos integridad y dignidad; y están
(30) MELERO, Eduardo, ob. cit., ps. 402-404. Si bien es- aquellos, delincuentes y violentistas, que se ha-
capa del objeto de este trabajo, es necesario hacer presen- cen pasar por estudiantes pero que no lo son,
te que un análisis completo de las normativas impulsadas solo buscan causar terror. Contra estos últimos
durante el último gobierno de Sebastián Piñera respecto no habrá tregua y se les perseguirá con todo el
de la migración seguramente arrojaría la verificación de rigor de la ley.
un alto número de elementos propios del derecho admi-
nistrativo del enemigo en su versión migratoria, incluso
el llamado “plan humanitario de regreso ordenado” de la Luego vemos que se adelanta la intervención
población haitiana en Chile. administrativa, y que dicho adelanto no se ve re-
(31) JAKOBS, Günther - CANCIO, Manuel, ob. cit., flejado en una rebaja de las consecuencias jurí-
p. 103.
(32) MELERO, Eduardo, ob. cit., p. 12.
(33) Entiéndase por “derechos del enemigo” toda regu- (34) NÚÑEZ, José I., “Un análisis abstracto del derecho
lación normativa que presente los principales elementos penal del enemigo a partir del constitucionalismo garan-
descritos por Günther Jackobs en su obra Derecho penal tista y dignatario”, Polít. crim. Nº 8[3], 2009, ps. 1-23.
del enemigo. (35) PIÑERA, Sebastián, ob. cit.
dicas. Siguiendo el ejemplo de la ley 17.798 sobre tamente (proyecto original de Aula Segura). Esta
el control de armas, el proyecto original igualaba división en grados, es plenamente compatible
los verbos rectores “uso, posesión, tenencia y al- con las “velocidades” de Silva Sánchez (36), y nos
macenaje”, sin distinción alguna entre la mayor muestra la similitud que esta regulación habría
gravedad que una u otra conducta suponen. Por tenido con el derecho penal del enemigo, un ver-
otro lado, contemplaba, remitiéndose a la letra e) dadero derecho administrativo del enemigo de
del art. 2º de la ley citada de armas, que “[l]as sus- alta intensidad con la verificación de cuatro de
tancias químicas que esencialmente son suscep- los cinco elementos distintivos de este.
tibles de ser usadas o empleadas para la fabrica-
ción de explosivos, o que sirven de base para la Ahora bien, como sabemos, el proyecto defi-
elaboración de municiones, proyectiles, misiles nitivo, que fue aprobado en todos sus trámites
o cohetes, bombas, cartuchos, y los elementos legislativos, dio como resultado la ley 21.128, pu-
lacrimógenos o de efecto fisiológico”. Este nivel blicada el 27 de diciembre de 2018 (solo casi tres
de amplitud en la redacción del tipo infraccio- meses después de su ingreso vía mensaje). Dicha
nal podría traer serios riesgos para la seguridad ley aprobada reduce ligeramente la privación de
jurídica, y la historia de la criminalización del garantías procesales del proyecto original, a saber,
movimiento estudiantil nos hace pensar que no la suspensión del estudiante se vuelve facultati-
existen buenas razones para no sospechar que va y no obligatoria para la o el director y existen
dicha normativa no habría sido usada para re- plazos más claros para resolver y poder recurrir
primir institucionalmente estudiantes que se or- contra la decisión de expulsión o cancelación de
ganizan y movilizan. matrícula. Pero por otro lado se mantienen el
adelantamiento de la intervención administrati-
Por último, podemos ver que en el proyecto va y la falta de proporcionalidad entre las sancio-
original existía una supresión casi total de ga- nes. También el sujeto enemigo fue plenamente
rantías procesales para el sujeto identificado delineado, y aunque el régimen se haya abierto
como enemigo. Así, Aula Segura contemplaba para toda sanción grave o gravísima de los regla-
en su versión original un plazo para presentar mentos internos de cada establecimiento educa-
un recurso contra la decisión de cinco días, en cional, la ley impone la gravedad de la conducta
contraposición con los 15 días contemplados en a todos los establecimientos, sin contar todo el
la legislación vigente anteriormente, y además despliegue mediático que supuso la promoción
se innovó con la separación inmediata de la o del proyecto de ley. Con todo esto, el carácter de
el estudiante del espacio educativo como medi- legislación de lucha contra los overoles blancos
da obligatoria a tomar por parte del director del es irreversible. En definitiva, el grado de intensi-
establecimiento. Integrando armónicamente el dad que reviste la ley 21.128 como derecho admi-
régimen disciplinario para la educación escolar nistrativo del enemigo se vio reducido en algún
era posible constatar que, de haber sido aproba- grado, pero no por ello perdió su carácter de tal,
do el proyecto en su propuesta original, se habría sobre todo en cuanto mantuvo la totalidad de los
verificado la existencia de tres procedimientos elementos más simbólicos del derecho del ene-
disciplinarios: un primer grado estaría dado migo, solo viéndose ligeramente aminorados los
por aquellas infracciones que no dan curso a un elementos sustantivos de la regulación.
procedimiento para investigar y sancionar, sino
que solo se castiga mediante la irrogación de un V. Conclusiones
mal menor (anotación en el libro de clases); el
segundo grado estaría formado por aquellas in- La ley 21.128, conocida como Aula Segura, es
fracciones más graves, y que por dicho motivo la una manifestación más de una política punitivis-
o el estudiante puede ser expulsado, razón por la ta. Situaciones de conflictividad social son res-
cual se da lugar a un procedimiento con el pro- pondidas de manera inmediata por el legislador
pósito de investigar y sancionar conforme a las con castigo y represión, ampliando de este modo
reglas del debido proceso (régimen general para las categorías del derecho penal, a otras esferas
cancelación de matrícula DFL nro. de 1998 del del ámbito jurídico, endureciendo los mecanis-
Mineduc); y por último un tercer grado, pensado
para infracciones calificadas, y que no da lugar
un procedimiento, sino que a la sanción direc- (36) SILVA, Jesús M., ob. cit., p. 163.
NÚÑEZ, José I., “Un análisis abstracto del de- EL MOSTRADOR, “Tras ataque con molotov
recho penal del enemigo a partir del constitucio- en el Liceo de Aplicación: Gobierno apura al
nalismo garantista y dignatario”, Polít. crim., Nº Congreso por proyecto para expulsar a alumnos”,
8[3], 2009, ps. 1 - 23. [en línea], 13 de septiembre de 2018, https://
www.elmostrador.cl/noticias/pais/2018/09/13/
SILVA, Jesús M., “La expansión del Derecho tras-ataque-con-molotov-en-el-liceo-de-aplica-
Penal”, Ed. Civitas, Madrid, 2001. cion-gobierno-apura-al-congreso-por-proyecto-
para-expulsar-a-alumnos/ [Consulta: 18 de di-
VILLEGAS, Myrna, “El mapuche como enemi- ciembre de 2018],
go en el derecho (penal): consideraciones desde
la biopolítica y el derecho penal del enemigo”, http://www.t13.cl/videos/reporteros/radio-
Instituto de Derecho Penal Europeo e Interna- grafia-a-los-colectivos-estudiantiles.
cional, Universidad de Castilla La Mancha.
VILLEGAS, Myrna, “Procesos de Reforma en Chi- Canal 13, “Adoctrinamiento en el Liceo 1”,
le: Aproximaciones desde el campo del Derecho http://www.t13.cl/videos/nacional/video-adoc-
Penal político”, en Justicia Criminal e Democracia I, trinamiento-liceo-1.
AMARAL, Bruno (coord.), Ed. Marcial Pons, 2015.
La Tercera, 2011, “Mayo 19”. Así como también
VI.3. Fuentes de prensa el mismo vocero de la Coordinadora de Estu-
diantes Secundarios, llegó en el 2011 a manifes-
CHADWICK, Andrés, 11 de octubre de 2018. tarse en contra los encapuchados en las marchas.
[en: https://www.emol.com/noticias/Nacional/ El Mercurio, 19 de junio 2011.
2018/10/11/923696/Tras-golpes-a-policia-de-
FFEE-Chadwick-anuncia-modificacion-para-en- PIÑERA, Sebastián, 20 de septiembre de
durecer-penas-a-quienes-agreden-a-carabineros. 2018, disponible en: https://www.mineduc.
html]. cl/2018/09/20/proyecto-de-ley-aula-segura. u