From my point of view in the “Declaration of the Special Rapporteur on the right to adequate

housing, Leilani Farha, during the Interactive Dialogue in the Human Rights Council,” It gives
us an overview of the universal right to decent housing and appropriate, which is contemplated
in the Universal Declaration of Human Rights in its article 25, paragraph 1 and in article 11 of
the International Covenant on Economic, Social and Cultural Rights (ICESCR), which give us
the baselines of understanding to have Keep in mind that everyone has the right to an adequate
standard of living that assures him, as well as his family, health and well-being, and especially
food, clothing, housing, medical assistance and social services necessary; You also have the
right to insurance in case of unemployment, illness, disability, widowhood, old age or other
cases of loss of your livelihoods due to circumstances independent of your will. And that is why
in the International Covenant on Economic, Social and Cultural Law tells us that everyone has
the right to an adequate standard of living for himself and his family, including adequate food,
clothing and housing and a continuous improvement of the conditions of existence, the medical
assistance and the necessary social services; You also have the right to insurance in case of
unemployment, illness, disability, widowhood, old age or other cases of loss of your livelihoods
due to circumstances independent of your will. A a a a a aaa a

And although the International Covenant on Economic, Social and Cultural Rights (ICESCR)
has echoed in the background of this problem, a mention of housing has been incorporated in
the last part of article 34, concerning social security and social assistance: “In order to combat
social exclusion and poverty, the right to social assistance and housing assistance must be
recognized and respected to guarantee a dignified existence to all those who do not have
sufficient resources, according to the modalities established by the Community law and
national laws and practices. ”This brief mention in the International Covenant on Economic,
Social and Cultural Rights (ICESCR), is insufficient to meet social reality because in the current
circumstances, it is observed how many citizens are It makes them even harder to access or
keep a home. Most of these people belong to vulnerable groups because of their low income
or because of their added limitations (young people, the unemployed, immigrants, retired
people and the elderly, the disabled, large families and single parents, women victims of gender
violence or people victims of terrorism). A a a a a a a a a a a a a a

Faced with the different obstacles that the right to housing possesses, it must recover its social
function against the particular interests in the policies designed and developed by public
administrations. Certainly, these policies have an influence on economic aspects, but it should
not be forgotten that the backbone of housing policies must take into consideration the social
function of housing in any structural measure that is carried out in the medium and long term.
Given these current crisis circumstances, and as a consequence of the fact that during the last
intense construction of housing, more affordable housing prices have not been achieved, the
possibility of greater government public intervention in the land market should be considered
and housing Another of the measures that must be carried out by public administrations is the
revitalization and mobilization of public land to be used for the construction of social housing.
The Government is the great participant in taking decisive measures to prevent, in the final
analysis, land speculation to avoid rising housing prices by companies and private entities that
see in these constructions a strong business that only benefits individuals.

In the social and political perspectives of the right to housing, it is necessary to propose
recommendations that contribute to improve and overcome this period of regression in the
content of social rights and the right to decent housing for all people. Among others, it can be
pointed out mainly: • Greater public intervention in the land and housing market, revitalization
and mobilization of public land to be used for the construction of social housing, and the fight
against corruption and urban speculation. • Ensure decent and adequate housing for all social
groups, including the most disadvantaged, and contribute to the social cohesion of
neighborhoods, avoiding overcrowding and marginalization of some areas of the periphery of
cities. • Adopt environmental measures that protect and conserve resources

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Desde mi punto de vista en la “Declaración de la Relatora Especial sobre el derecho a una

vivienda adecuada, Leilani Farha, durante el Diálogo interactivo en el Consejo de Derechos
Humanos”, Nos brinda una visión general sobre el Derecho universal a una vivienda digna y
adecuada, que aparece contemplada en la Declaración Universal de los Derechos Humanos
en su artículo 25, apartado 1 y en el artículo 11 de Pacto Internacional de Derechos
Económicos, Sociales y Culturales (PIDESC), las cuales nos dan las líneas base de
entendimiento para tener en cuenta que toda persona tiene derecho a un nivel de vida
adecuado que le asegure a él, así como a su familia, la salud y el bienestar, y en especial la
alimentación, el vestido, la vivienda, la asistencia médica y los servicios sociales necesarios;
igualmente tiene derecho a los seguros en caso de desempleo, enfermedad, invalidez, viudez,
vejez u otros casos de pérdida de sus medios de subsistencia por circunstancias
independientes de su voluntad. Y es por esto que en el Pacto Internacional de Derecho
Económicos, Sociales y Culturales nos dice que toda persona tiene el derecho a un nivel de
vida adecuado para sí misma y para su familia, incluyendo alimentación, vestido y vivienda
adecuadas y una mejora continuada de las condiciones de existencia, la asistencia médica y
los servicios sociales necesarios; tiene asimismo derecho a los seguros en caso de
desempleo, enfermedad, invalidez, viudez, vejez u otros casos de pérdida de sus medios de
subsistencia por circunstancias independientes de su voluntad. A a a a a a aa a a

Y aunque el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales (PIDESC) ha

hecho eco en el trasfondo de esta problemática se ha incorporado en la última parte del
artículo 34, relativo a la seguridad social y ayuda social, una mención a la vivienda: “con el fin
de combatir la exclusión social y la pobreza, se debe reconocer y respetar el derecho a una
ayuda social y a una ayuda de vivienda para garantizar una existencia digna a todos aquellos
que no dispongan de recursos suficientes, según las modalidades establecidas por el derecho
comunitario y las legislaciones y prácticas nacionales.” Esta breve mención en el Pacto
Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales (PIDESC), resulta insuficiente
para atender a la realidad social ya que en las circunstancias actuales, se observa cómo a
muchos ciudadanos se les hace aún más difícil el acceder o conservar una vivienda. La
mayoría de estas personas pertenece a colectivos vulnerables por sus bajos ingresos o por
sus limitaciones añadidas (jóvenes, desempleados, inmigrantes, jubilados y ancianos,
discapacitados, familias numerosas y monoparentales, mujeres víctimas de violencia de
género o personas víctimas de terrorismo). A a a a a a a a a a a a a a

Frente a los diferentes obstáculos que posee El derecho a la vivienda, debe recuperar su
función social frente a los intereses particulares en las políticas diseñadas y desarrolladas por
las administraciones públicas. Ciertamente, estas políticas tienen su influencia en aspectos
económicos, pero no debe olvidarse que el eje vertebrador en las políticas de vivienda ha de
tener en consideración la función social de la vivienda en toda medida estructural que se lleve
a cabo a medio y largo plazo. Dadas estas circunstancias de crisis actuales, y como
consecuencia de que durante los últimos la intensa construcción de viviendas, no se ha
logrado unos precios de la vivienda más asequibles, se debe considerar la posibilidad de una
mayor intervención pública del Gobierno en el mercado del suelo y la vivienda. Otra de las
medidas que debe llevarse a cabo por parte de las administraciones públicas es la
dinamización y movilización del suelo público para destinarlo a la construcción de viviendas
sociales. El Gobierno es el gran participe en la toma de medidas contundentes para impedir,
en último término, la especulación del suelo para evitar subidas del precio de la vivienda por
empresas y entidades privadas que ven en estas construcciones un fuerte negocio que solo
beneficia a particulares.

En las perspectivas sociales y políticas del derecho a la vivienda se beben proponer

recomendaciones que contribuyan a mejorar y superar este período de regresión en el
contenido de los derechos sociales y derecho a una vivienda digna para todas las personas.
Entre otras, se pueden señalar principalmente: • Mayor intervención pública en el mercado del
suelo y la vivienda, dinamización y movilización del suelo público para destinarlo a la
construcción de viviendas sociales, y lucha contra la corrupción y la especulación urbanística.
• Garantizar una vivienda digna y adecuada a todos los grupos sociales, incluyendo los más
desfavorecidos, y contribuir a la cohesión social de los barrios, evitando el hacinamiento y la
marginalización de algunas zonas de la periferia de las ciudades. • Adoptar medidas
ambientales que protejan y conserven los recursos y potencien las energías renovables, y
contribuyan a reducir los costes ambientales a través de la utilización de materiales
sostenibles. • Reconocer por ley el derecho a acceder a una vivienda digna y adecuada para
que pueda ser invocado ante la jurisdicción ordinaria y, en su defecto, fortalecer el papel que
desempeñan los defensores del pueblo en esta materia. • Implementar y ejecutar las
recomendaciones realizadas por el relator especial sobre la vivienda adecuada como
elemento integrante del derecho a un nivel de vida adecuado • Potenciar la construcción de
viviendas públicas protegidas en régimen de alquiler para la población con menos ingresos, y
aumentar la oferta de viviendas públicas de alquiler social. • Proporcionar mecanismos a
través de las políticas de vivienda que faciliten la emancipación de los jóvenes, incidiendo
positivamente en el mercado laboral y favoreciendo su movilidad voluntaria. • Promover el uso
social de las viviendas vacías, aumentando la presión fiscal a los propietarios que mantengan
casas desocupadas. • Garantizar una eficiente gestión de la vivienda social a través de
organismos, preferentemente públicos, que sirvan al interés general. A a a a a a a a a a a a a
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