E.P.S.

La Rábida Administración de Empresas

I.T. Informática de Gestión
Universidad de Huelva
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TEMA 2: EL EMPRESARIO

1. Consideraciones Generales sobre el Empresario

2. Concepción clásica del Empresario

3. Visión actual de la figura del Empresario

3.1. El espíritu empresarial
3.2. Motivaciones del empresario y factores accesorios

4. Motivación de los emprendedores y factores accesorios

Bibliografía
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1. Consideraciones Generales sobre el Empresario

El empresario es la figura que adopta las decisiones generales en la empresa, que planifica los objetivos a
conseguir y diseña los medios para alcanzarlos, aunque después puede delegar las decisiones operativas a niveles
inferiores de autoridad.

En términos generales las funciones del empresario consisten en planificar, organizar, dirigir, y controlar el
proceso productivo.

2. Concepción clásica del Empresario

No se comienza a estudiar la figura del empresario hasta principios del siglo xviii, con Cantillon que
introdujo por primera vez el término entrepreneur. Los economistas clásicos del siglo XVIII como Richard
Cantillon, Adam Smith y otros, no prestaron mucha atención a la función del empresario, lo que mas podemos
destacar de esta primera etapa es que estos autores no diferenciaban la función de capitalista (propietarios de los
medios de producción) con la del empresario.

Todavía en el marco de los economistas clásicos pero un siglo más adelante, Jean Battiste Say definió el
empresario como “el agente que combina a los otros elementos económicos en un organismo productivo o
empresa”. Este autor supo ver la diferencia entre el beneficio y el interés del capital aportado por el empresario y
por tanto comienza la distinción de las funciones del empresario y capitalista.

De cualquier forma, hasta entrado el siglo actual no se identifica de forma clara el concepto del empresario.
Una visión secuencial de los enfoques teóricos principales aparece a continuación.

1. Teoría del empresario capitalista: (A. Smith, 1776). Concepto de empresario como propietario de los
medios de producción y patrón o maestro del trabajo.

2. El empresario como agente u hombre de negocios (R. Cantillon, 1730): Concepto de empresario como
agente u hombre de negocios que compra los medios de producción a ciertos precios y los combina en un
producto que venderá a un precio incierto en el momento del compromiso de sus costes.

3. El empresario como cuarto factor de la producción: factor de organización (A. Marshall, 1890): El
empresario como factor productivo asume la función de organización y dirección.

4. El empresario riesgo: (F. Knight, 1921): Según esta visión, el empresario es el sujeto que compromete su
capacidad en el funcionamiento de la empresa y, en consecuencia, afronta el riesgo patrimonial de la actividad
y, por tanto, deberá asegurar las rentas de los factores productivos, soportando el riesgo de la actividad
económica de la empresa y el beneficio empresarial es la recompensa por asumir dicho riesgo (aun se confunde
capitalista con empresario).

5 .El Empresario innovador (J.A. Shumpeter, 1911 y 1942): Al innovar (un nuevo producto, servicio, etc.) el
empresario altera la situación del equilibrio del sistema justificando su beneficio como renta residual del
sistema.

6. El empresario control o tomador de decisiones (H. A. Simon, 1947): Concepto de empresario como
“hombre administrativo” que toma decisiones para llevar el control del proceso económico.

7. Teoría del empresario como tecnoestructura ( basada en la separación de la propiedad y el control)

(J.K. Galbraith, 1967): Concepto de empresario como función directiva, normalmente compuesta por un grupo
de personas que aportan conocimiento especializado, talento o experiencia a la elaboración de las decisiones de
grupo que rebasan la capacidad de conocimiento de cada uno de ellos.

8. Teoría del empresario líder o función de liderazgo (W.G. Bennis y E. H. Scheim, 1956-1983): Concepto
del empresario como visionario, motivando y cohesionando el grupo humano, creando y buscando nuevos
caminos y desarrollando una cultura para lograr con éxito los objetivos.

3. Visión actual de la figura del Empresario

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El empresario es la figura que da vida y gobierna la empresa, aquella persona que ejecuta las
acciones de organización, coordinación, dirección y control del proceso productivo. La faceta de
creación es quizá la más característica del empresario, ya que de su mano, las ideas se convierten en
realidad, los proyectos se materializan.

De esta forma se constituyen las funciones del empresario desde una perspectiva actual, no
vinculando la función de empresario necesariamente a la propiedad de los medios de producción sino de
una figura engloba las siguientes funciones:

• Configura el Sistema de Dirección de la empresa

• Ejerce funciones de liderazgo e innovación
• Asume el riesgo del sistema: lo que quiere decir que:
9 Percibe necesidades
9 Organiza el Sistema de Producción
9 Remunera anticipadamente a los factores
9 Satisface las necesidades percibidas
9 Recupera vía precios el esfuerzo realizado

Para poder llevar a cabo las funciones descritas el empresario deberá reunir las siguientes
cualidades, además de poseer espíritu empresarial:

• Ser un experto estratega

• Tener un conocimiento profundo del mercado
• Tener habilidades de comunicación
• Tener capacidad negociadora
• Tener capacidad de resolución de conflictos
• Tener actitud para gestionar el cambio.

Para ejercer las funciones de liderazgo e innovación, la figura del empresario se perfila como un
creador, aquella persona encargada de llevar a la práctica técnicos tanto propios, fruto de su formación
y experiencia, como de sus asesores, desarrollando proyectos empresariales que se materializan en
realidades que juegan un gran papel en la sociedad.

Cabe preguntarse ahora, si se ha venido asignando a los empresarios la labor de creación,

coordinación, asignación de recursos y control de la organización, ¿a qué se dedica un directivo? La
respuesta es fácil: en la medida en que los distintos factores como la edad, desfase de conocimientos,
crecimiento de la firma u otros aconsejen el abandono de las tareas citadas por parte del empresario
fundador en manos de administradores profesionales, estaremos incorporando a la organización nuevos
directivos o administradores que, bien gradualmente o de manera directa asuman estas funciones en
detrimento de los fundadores de la empresa.

3.1. El “espíritu empresarial”

La persona que decide convertirse en empresario debe poseer unas características que le confieren
un carácter fuerte para afrontar los inconvenientes y desafíos que cualquier aventura empresarial
conlleva. Se denomina “espíritu empresarial” al conjunto de rasgos en la personalidad, que se podrían
resumir en los siguientes:

• Carácter emprendedor, ya que desarrollara iniciativas por si mismo. Su inquietud hará que no
espere las oportunidades, sino que acuda a crearlas y a descubrirlas por si mismo y además las
haga realidad, materializándolas en proyectos empresariales concretos y definidos, más allá de
la pura teoría.

• Alma creativa, puesto que dar vida a una empresa requiere de inventiva para conseguir nuevas
formas de satisfacer las necesidades de los consumidores, de innovación para tratar de ser
diferentes a los competidores, de capacidad organizativa para prever las necesidades del nuevo
proyecto y cómo evolucionarán éstas en el futuro próximo.

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• Capacidad de asumir riesgos, de afrontar situaciones de cuyo resultado dependerá, en algunas
ocasiones, el futuro personal del propio empresario. En una iniciativa empresarial se emplea
mucho dinero, tiempo y esfuerzo, y no siempre se llega a buen término.

• Talante optimista y de autoconfianza, para permitirle llevar a cabo su difícil empeño

3.2. Motivación de los emprendedores y factores accesorios:

Al margen de las características personales, se podrían plantear otras cuestiones acerca del empresario,
como, por ejemplo, las razones que le llevaron a fundar su empresa o los factores más comunes entre aquellos
que propiciaron dicha fundación.

Con respecto a las motivaciones podemos destacar las siguientes:

• Independencia, búsqueda de libertad en el trabajo

• Prosperidad económica
• Autoempleo, obtener un trabajo por si mismo
• Aplicación práctica de una idea
• Necesidad de seguridad

No basta con tener inquietudes y razones para que un emprendedor se transforme en un empresario en la
práctica, ya que existen condicionantes que apoyan o dificultan algunas iniciativas. Los factores que por regla
general influyen positivamente a la hora de dar el paso son las siguientes:

• Tradición familiar
• Capacidad financiera
• Experiencia en el sector
• Formación académica
• Dotes comerciales
• Contactos con empresarios

4. Lectura recomendada

Los españoles Alex Rovira y Fernando Trías han escrito 'La buena suerte. Claves de la prosperidad'
(Urano, 2004). El libro en concreto se engloba dentro del género llamado ‘soft-business’. Aquí se engloban los
libros de autoayuda para empresarios que, en lugar de presentarse como una guía cargada de conceptos técnicos,
aparecen bajo la excusa de una fábula (130 folios). Y cuentan, esos sí, con un mensaje claro que puede ayudar a
cualquiera. Lo de 'soft', o blando, se debe a que “puede servirle tanto a un ejecutivo de cuentas como a un ama de
casa, una periodista, un jubilado o incluso a un niño”.

¿La clave del éxito? Algo tan sencillo como la diferencia entre buena y mala suerte. Según los autores, "La
Buena Suerte está al alcance de todos, pero sólo algunos son capaces de crear las circunstancias para obtenerla".

BIBLIOGRAFÍA

BUENO CAMPOS, E. A Curso Básico de Economía de la empresa. Un enfoque de organización. Ed.

Pirámide, 1994.

GARCIA DEL JUNCO, J et al. Fundamentos de gestión empresarial. Ed. Pirámide, 2000.

http://www.uam.es/personal_pdi/economicas/urda/35