1.

HOLISMO

En primer lugar hablaremos del concepto de holismo en un sentido más genérico para

poder hablar de la visión holística de Marx.

Holismo: Del Griego “hólos” que quiere decir entero o completo. Es una posición

metodológica y epistemológica según la cual el organismo debe ser estudiado no como

la suma de diferentes partes sino como una totalidad organizada, de modo que a través

de “todo” conseguimos distinguir y comprender el funcionamiento de cada una de las

“partes” y no al contrario. Las partes, independientemente de un todo, no tienen ninguna

entidad ni significado por lo que difícilmente se puede aceptar el todo como una simple

“suma” de las partes.

La posición holística de Marx y Durkheim.

Marx y Durkheim adoptan el principio de holismo metodológico para explicar las

conductas de los individuos apelando a las leyes macroscópicas y hacen unas

descripciones acerca de la posición que ocupa cada individuo en un conjunto social.

La presentación del carácter holístico en Marx se ve reflejado en cada uno de los

conceptos que utiliza para formular su teoría, como por ejemplo: conciencia de clase,

relaciones de producción, etc.

Otra de las circunstancias en las que podemos ver este método holista la encontramos en

la teoría marxiana del materialismo histórico, donde se expone la transformación del

mundo material por medio del trabajo. Entender los modos y las relaciones de

producción es entender la formación de sociedades. De este modo lo que hacen los

individuos con el mundo material constituye las bases para entender la Historia como la

historia de las sociedades. Los cambios en los modos de producción son los que

determinan los cambios sociales e históricos.

Durkheim por otro lado mantiene una perspectiva holística en cuanto que su teoría

afirma que la sociedad no es sólo una suma de individuos. Por lo cual la interacción

social genera propiedades y fenómenos que son irreducibles a fenómenos individuales:

se opone al reduccionismo de las otras teorías de las ciencias sociales.

En La división del trabajo social se ofrece una definición con respecto a la orientación

epistemológica escogida:

“La conciencia colectiva o común es el conjunto de creencias y de sentimientos

comunes al término medio de los miembros de una misma sociedad, constituye un

sistema determinado que tiene vida propia... es independiente de sus manifestaciones

particulares, es la misma en las grandes y pequeñas ciudades, en las distintas

profesiones, en las diferentes generaciones…”1

Otra de las cosas que tenemos que tener en cuenta en relación con este autor es la visión

del sujeto como un sujeto pasivo y no actuante.

En contraposición con esta metodología estaría la escuela de Marx Weber por si visión

individualista, la cual propone una visión del hombre según sus propias motivaciones.

1
La división del trabajo social; Shapire; Bs. As., Argentina; 1978; cap. I, II y III.