Sie sind auf Seite 1von 8

 E – 14-918-A-10

Aspectos fisiopatológicos
del dolor en reumatología
P. Vergne-Salle, P. Beaulieu, A. Coutaux, P. Sichère, S. Perrot, P. Bertin

La evolución de los conocimientos sobre las bases neurofisiológicas del dolor ha permitido
captar mejor la complejidad del fenómeno doloroso, muy frecuente en reumatología. La
fisiopatología del dolor conduce a distinguir clásicamente tres tipos principales: los dolores
nociceptivos, caracterizados por una estimulación anormal de los nociceptores periféricos
en un sistema nervioso normal; los dolores neuropáticos, caracterizados por una lesión
del sistema nervioso, central o periférico, que induce los fenómenos dolorosos, y los
dolores no clasificados o disfuncionales, que no dependen de una estimulación periférica
de los nociceptores ni de una lesión definida del sistema nervioso. Por otra parte, las
lesiones periféricas, por ejemplo articulares, pueden producir una hiperexcitabilidad de los
nociceptores y, de forma secundaria, una hiperexcitabilidad central medular. Además, la
dicotomía entre estos tipos de dolor no siempre es real, y buena parte de ellos, sobre todo
en reumatología, son mixtos; pueden asociar, por ejemplo, un componente nociceptivo
y otro neuropático. Un mejor conocimiento de la fisiopatología de los dolores permite
determinar dianas terapéuticas y adaptar mejor el tratamiento.
© 2015 Elsevier Masson SAS. Todos los derechos reservados.

Palabras clave: Dolores reumatológicos; Dolores osteoarticulares; Fisiopatología del dolor;


Neurofisiología del dolor; Mecanismos del dolor

Plan  Introducción
■ Introducción 1 La transmisión del dolor es un fenómeno complejo de
■ Mecanismos periféricos 1 mecanismos electrofisiológicos y neuroquímicos que se
Fibras aferentes 1 cumplen en tres etapas sucesivas [1] (Fig. 1):
Génesis del dolor osteoarticular 2 • elaboración del impulso por el nociceptor y paso del

impulso a la fibra nerviosa aferente periférica;
Proyección medular de las fibras aferentes primarias 3
• relevo y modulación por el asta posterior de la médula
Primeras neuronas centrales 3
(convergencia, amplificación, bloqueo de los impul-
Neuromediadores de la primera sinapsis 3
sos);
■ Vías ascendentes 4 • integración cerebral que transforma el impulso en
Haz espinotalámico 4 mensaje consciente: sensación precisa y repercusión
Haz espinorreticular 4 emocional y afectiva.
Haz espinomesencefálico 4 En cada etapa existen mecanismos de amplificación del
■ Estructuras supraespinales 4 impulso (sensibilización), pero también de freno fisioló-
Formación reticular bulbar 4 gico, y de ellos resulta un mensaje que llega al cerebro,
Estructuras talámicas 5 donde es integrado como dolor.
Corteza cerebral 5
■ Mecanismos de control de la nocicepción 5
Controles segmentarios 5  Mecanismos periféricos
Controles de origen supraespinal 5
■ Tres tipos principales de dolor en reumatología 5 Fibras aferentes
Dolores nociceptivos y sensibilización secundaria 5
En los nervios periféricos, la transmisión del mensaje
Fisiopatología del dolor neuropático 6
nociceptivo depende de las fibras A␦ y C, en cuyo extremo
Dolores no clasificados o disfuncionales 7
se encuentran los nociceptores [2] .

EMC - Aparato locomotor 1


Volume 48 > n◦ 1 > marzo 2015
http://dx.doi.org/10.1016/S1286-935X(15)70086-9
E – 14-918-A-10  Aspectos fisiopatológicos del dolor en reumatología

inflamatorio tisular, son algógenos directos la bradicinina,


8 los iones potasio, la adenosina trifosfato, la serotonina, la
histamina y los protones (iones H+ ). Las prostaglandinas
1 y los leucotrienos son sustancias poco algógenas por sí
mismas, pero desempeñan un papel fundamental porque
sensibilizan los receptores a la acción de otras sustan-
a cias [4] . Este proceso de sensibilización permite disminuir
2 el umbral de activación de los receptores y probablemente
sea una de las explicaciones del fenómeno de hiperalgesia
de los estados inflamatorios.
3
En la génesis y la persistencia de la inflamación, la con-
centración del factor de crecimiento nervioso (NGF), que
pertenece a la familia de las neurotrofinas, aumenta de
manera considerable en los tejidos periféricos inflamato-
b
4 rios. El NGF estimula la desgranulación de los mastocitos
LC
y contribuye de forma indirecta en la sensibilización de
SGP los nociceptores. Además, la subpoblación de las fibras C,
denominadas «peptidérgicas», que sólo expresan el recep-
5 9 tor específico del NGF, sintetizan neuropéptidos como la
c NRM sustancia P (SP) y el péptido liberador del gen de la cal-
ENK 10 citonina (CGRP) en el asta dorsal de la médula. Estos
NA neuropéptidos también son producidos en abundancia en
5-HT la periferia de las fibras en el tejido inflamatorio. Tam-
11
bién participan en estos procesos las citocinas (factor de
12
necrosis tumoral alfa [TNF-␣], interleucinas 1 y 6), libe-
II I
III radas respectivamente por los macrófagos activados, así
IV 13 como muchos otros mediadores [4] .
6 V
El impulso nervioso nociceptivo se propaga no sólo
d desde la periferia hacia la médula, sino también de manera
«antidrómica» hacia las otras terminaciones periféricas
14
de la misma fibra, que a su vez van a liberar péptidos
como la SP: el resultado de ello es una vasodilatación y
7 una desgranulación de los mastocitos, responsable de la
liberación de histamina. Esta cascada de sucesos, deno-
Figura 1. Esquema general de las vías del dolor (según minada «inflamación neurógena» o «reflejo de axón»,
Fields [1] ). a: corteza; b: mesencéfalo; c: bulbo raquídeo; d: permite la propagación de la hiperalgesia en «mancha
médula espinal. 5-HT: serotonina; ENK: encefalina; LC: locus de aceite».
cerúleo; NA: noradrenalina; NRM: núcleo del rafe mayor; SGP:
sustancia gris periacueductal. 1. Corteza somatosensorial (S1,
S2); 2. corteza insular; 3. tálamo (medio [emoción], lateral Génesis del dolor osteoarticular
[discriminación]); 4. vías espinomesencefálicas; 5. vías espinorre-
ticulares; 6. asta dorsal de la médula; 7. vía espinotalámica; La cápsula, los ligamentos, los meniscos, el periostio y el
8. corteza cingular anterior; 9. vías descendentes inhibidoras [5- hueso subcondral están ricamente inervados por una red
HT, encefalina, noradrenalina]; 10. ganglio raquídeo; 11. lesión de fibras mielínicas y amielínicas. La sinovial está bási-
tisular/inflamatoria; 12. fibras A␦ y C; 13. neurona aferente pri- camente inervada por fibras amielínicas, mientras que el
maria (nociceptiva); 14. interneurona. cartílago carece de inervación.
La inervación articular agrupa diversos órganos senso-
riales articulares, a los que se puede clasificar en cuatro
Las fibras C están presentes en número elevado, tanto tipos según Wyke [5] . Los órganos sensoriales de tipo I
que representan el 60-90% de todas las fibras aferentes y II son órganos corpusculares (corpúsculos de Paccini,
viscerales. Golgi, Ruffini), localizados en la cápsula, los ligamentos
Sólo las fibras A␦ y C codifican las informaciones noci- y los meniscos, y ausentes en la sinovial. Son meca-
ceptivas y térmicas, aunque no de forma exclusiva, ya que norreceptores no nociceptivos, sensibles a la presión y al
algunas de ellas pueden ser activadas por estímulos mecá- estiramiento, que transmiten el impulso por fibras mie-
nicos de umbral bajo y, por tanto, no dolorosos. Cabe línicas. Los receptores de tipo III están formados por las
señalar también que el 20% de las fibras C son fibras sim- fibras A␦ y se localizan en la superficie de los ligamen-
páticas posganglionares eferentes. tos. Funcionan como mecanorreceptores dinámicos de
Los nociceptores son receptores sensoriales, es decir, umbral elevado que responden básicamente a los intensos
estructuras celulares especializadas que desempeñan un estímulos mecánicos y, en menor grado, a los estímulos
papel de interfaz entre la energía física del estímulo y térmicos. Los receptores de tipo IV son receptores poli-
el sistema sensorial. Codifican la información dolorosa modales formados por fibras amielínicas C. Constituyen
y no tienen una estructura histológica individualizada. el contingente más numeroso de receptores en todas las
Los mensajes nociceptivos son generados por las termi- estructuras articulares, pero están ausentes en el cartílago.
naciones libres de las fibras A␦ y C que constituyen los Silenciosos en estado basal, descargan en presencia de
verdaderos sitios de transducción. Estos nociceptores pue- estímulos mecánicos, térmicos y químicos en determina-
den ser activados por una gran variedad de estímulos das condiciones patológicas, sobre todo en presencia de
susceptibles de provocar una lesión tisular. un estado inflamatorio. Así, en la artritis, las propiedades
Los termonociceptores responden a los estímulos tér- sensoriales de los receptores de la cápsula articular están
micos y permiten la percepción de una sensación de frío modificadas.
al activar las fibras A␦ y C, mientras que la percepción del El dolor óseo de origen tumoral (cáncer, tumor
calor sólo se obtiene por estimulación de las fibras C [3] . benigno), metabólico (osteopatías fragilizantes), vascular
Los quimiorreceptores responden a los estímulos quí- (angioma), distrófico (Paget, síndrome regional complejo)
micos, sobre todo a la acción de sustancias algógenas o inflamatorio (osteomielitis, osteítis aséptica) se explica
producidas a raíz de una lesión tisular. En este «caldo» por la hiperpresión, las fracturas y las lesiones periósticas

2 EMC - Aparato locomotor


Aspectos fisiopatológicos del dolor en reumatología  E – 14-918-A-10

que ponen en acción las conexiones y las terminaciones


nerviosas. La inervación de los huesos es compleja y en 4
ella participan fibras sensitivas y simpáticas. Todos los
componentes de los huesos (periostio, hueso mineral y 1 5
médula ósea) están inervados, pero en particular el perios-
6
tio, cuya inervación está acompañada por una vasta red de
fibras que contienen CGRP. Además, en caso de dolor óseo I 7
de origen tumoral, el tumor libera sustancias pronocicep- 2 II
tivas que contribuyen al estado doloroso. Esto incluye 3 8
III
las prostaglandinas, el NGF, el TNF-␣, las endotelinas y
IV 9
algunas interleucinas.
La reabsorción ósea estimulada por un tumor provoca V
dolor. 10
Los dolores de la artrosis tienen varios componentes,
probablemente vinculados a diversos tipos de activación 11
y a distintos mecanismos fisiopatológicos: dolores mecá- Figura 2. Esquema de un nociceptor periférico y de sus
nicos en relación con dolores óseos, inducidos por cargas conexiones en el asta dorsal de la médula (según Baron et
y presiones considerables sobre el hueso subperióstico; al [9] ). 1. Asta dorsal de la médula espinal; 2. exterior; 3. interior;
dolores inflamatorios en los períodos de agudización y 4. fibras A␣ y A␤; 5. fibras C; 6. piel; 7. fibra inhibidora descen-
vinculados a la inflamación de la sinovial. Por último, dente; 8. neurona secundaria (espinotalámica); 9. interneurona
en algunos casos existen dolores neuropáticos o incluso GABAérgica; 10. microglía; 11. neurona de amplio espectro
una alodinia a distancia de la articulación lesionada. En (amplio rango dinámico).
pacientes afectados por dolores crónicos de artrosis pue-
den producirse fenómenos de sensibilización central y
anomalías sensoriales difusas, asociados a un componente
neuropático [6] . Esto ha sido confirmado en estudios rela- Primeras neuronas centrales
tivos al cerebro de los pacientes afectados por dolores
artrósicos: en los pacientes artrósicos, algunas zonas cere- Al llegar al asta dorsal de la médula espinal, las
brales tienen una hiperactividad relacionada con el dolor fibras aferentes primarias realizan la primera sinapsis
crónico, y en los pacientes afectados por una artrosis de la (Fig. 2):
cadera o la rodilla también se observa una pérdida volu- • las interneuronas excitadoras o inhibidoras medulares
métrica de la sustancia gris [7] . Esto expresa, por tanto, participan en los mecanismos de control o transmiten
una remodelación y una neuroplasticidad alterada. En sus informaciones a las motoneuronas para generar los
estudios recientes se ha demostrado que las anomalías reflejos espinales;
volumétricas cerebrales eran reversibles y podían mejo- • las neuronas con proyecciones espinales informan a los
rar a los 6-9 meses de un reemplazo de cadera o de rodilla centros superiores; se distinguen dos grupos principa-
en pacientes curados [8] . les:
La membrana sinovial está ricamente inervada por ◦ las neuronas nociceptivas inespecíficas que respon-
fibras C y, en menor grado, por fibras A␦ y fibras simpá- den a los estímulos mecánicos leves, térmicos y
ticas. En la artritis reumatoide disminuyen las fibras C químicos. Tienen la propiedad de aumentar su des-
y predominan las fibras A␤ (propioceptivas), responsa- carga en función de la intensidad del estímulo. Los
bles del dolor despertado por el movimiento. Además, la cuerpos celulares se disponen en su mayoría en
inflamación sensibiliza las fibras C y A␦, aumentando las la lámina V según una distribución somatotópica.
respuestas al movimiento o a la presión. Esta sensibiliza- Son las neuronas de «convergencia» o de amplio
ción depende de numerosos mediadores, entre los que se rango dinámico, que tienen un vasto campo receptor
encuentran las prostaglandinas y la bradicinina. La expre- cutáneo. Pueden ser activadas por estímulos noci-
sión de los receptores opioides de la membrana sinovial ceptivos de origen visceral. Esta propiedad permite
aumenta por efecto de la inflamación articular. explicar los dolores proyectados, como los de la
angina de pecho con irradiación dolorosa al brazo
izquierdo,
◦ las neuronas nociceptivas específicas se localizan
 Proyección medular principalmente en la lámina I del asta dorsal de la
médula espinal, y sólo son activadas por estímulos
de las fibras aferentes mecánicos o térmicos intensos. Su campo receptor
primarias es reducido. Sólo reciben aferencias de las fibras A␦
y C cuyos orígenes diversos, sobre todo musculares,
Las fibras aferentes primarias alcanzan el sistema ner- pueden explicar el fenómeno de convergencia visce-
vioso central a través del asta dorsal de la médula espinal rosomática;
por las raíces posteriores, cuyos cuerpos celulares se loca- • la microglía (células inmunitarias del sistema nervioso
lizan en los ganglios raquídeos. El asta dorsal de la médula central [los astrocitos, los oligodendrocitos y la micro-
espinal está subdividida en varias láminas, según la clasi- glía forman las células gliales]);
ficación de Rexed [9] (Fig. 2). • fibras inhibidoras descendentes que proceden de diver-
Las fibras A␦ y C se dividen en una rama ascendente y sas regiones supraespinales (cf infra).
otra descendente, y envían colaterales escalonadas sobre
algunos segmentos adyacentes, pero sólo hacia el asta pos-
terior de la médula; Neuromediadores de la primera
• las fibras A␦ sólo se proyectan localmente hacia las lámi- sinapsis (Fig. 3)
nas I y V, y en menor medida hacia la lámina II, del asta
posterior; El asta dorsal de la médula espinal es muy rica en
• las fibras C, tras discurrir por algunos segmentos en el aminoácidos excitadores, en particular glutamato y aspar-
tracto de Lissauer, se proyectan básicamente hacia las tato, que desempeñan un papel esencial en la transmisión
láminas superficiales I y II si el origen es cutáneo, pero espinal del impulso nociceptivo. Se han identificado
también V, VII y X si el origen es visceral (sobre todo dos tipos principales de receptores del glutamato, los
articulares y musculares). metabótropos y los inótropos, que se distinguen por

EMC - Aparato locomotor 3


E – 14-918-A-10  Aspectos fisiopatológicos del dolor en reumatología

1 2 3 4

Receptores y canales iónicos


implicados al nivel espinal

Ganglio Médula espinal


raquídeo

Fibras Aδ

Nociceptor peptidérgico
(NGF, sustancia P, CGRP,
etc.)
Fibras C
Nociceptor no peptidérgico
(GDNF, ATP, etc.)
H+
Fibras Aβ Calor
Frío doloroso
Tacto Presión
Sustancias
químicas
Figura 3. Fibra aferente primaria y neuromoduladores/canales iónicos en el ganglio raquídeo (GR, A) y el asta dorsal de la médula
espinal (B), implicados en la modulación de la propagación del mensaje doloroso (según Beaulieu [11] ). Ganglio raquídeo: serotonina;
adenosina trifosfato (ATP); bradicinina; calor (TRPV1); endocannabinoides; galanina, H+ ; neuropéptido Y; factor de crecimiento nervioso
(NGF); presión; prostaglandinas; sustancia P. Médula espinal: serotonina; acetilcolina; ␣2 -adrenérgicos; receptores cannabinoides 1 y 2;
ácido ␥-aminobutírico; opioides endógenos (sustancias inhibidoras) y canales iónicos sensibles al ácido; canales Ca2+ ; canales Na+ ; cole-
cistocinina; péptido liberador del gen de la calcitonina (CGRP); neurocinina 1; N-metil-D-aspartato; proteína cinasa C de tipo gamma;
receptor de potencial transitorio vainilloide 1 (sustancias excitadoras). 1. Epidermis; 2. células M; 3. pelo; 4. dermis.

sus mecanismos de acción. Los receptores metabótropos  Vías ascendentes


modifican procesos metabólicos intracelulares a través
de una proteína G y de mensajeros intracelulares. Los Tras el relevo de las fibras aferentes en el asta poste-
receptores inótropos actúan a través de canales y flu- rior, los axones cruzan en la médula por la comisura gris
jos iónicos. Estos últimos se dividen en dos subclases anterior y toman el cuadrante anterolateral ventral de la
según el tipo de agonista que activa el receptor inó- médula, para formar esencialmente dos haces.
tropo glutamatérgico: los receptores N-metil-D-aspartato
(NMDA) y los receptores no NMDA (receptores AMPA
y receptores kainato). El receptor NMDA es inactivo en Haz espinotalámico (Fig. 1)
estado basal, ya que su canal está obstruido por un ion Debido a la alta proporción de neuronas nociceptivas,
Mg2+ . La repetición de un estímulo nociceptivo intenso el haz espinotalámico ocupa un lugar privilegiado en la
permite la despolarización de la neurona gracias a la supre- transmisión de los mensajes nociceptivos hacia la corteza
sión de la inhibición del Mg2+ . Por consiguiente, este cerebral, así como en el aspecto sensorial y discrimina-
receptor NMDA participa en los mecanismos centrales de tivo del dolor. Las neuronas del asta posterior se proyectan
hiperalgesia [10] . sobre el tálamo lateral en el núcleo posterolateral ventral,
Numerosos péptidos se encuentran en las fibras aferen- y las de las láminas VII y VIII lo hacen sobre el tálamo
tes primarias y en las láminas superficiales de la médula, medio en el núcleo central lateral.
pero la gran mayoría de los datos actuales se refieren a
la SP, un péptido que pertenece al grupo de las neuroci-
ninas y actúa sobre los receptores NK1. Durante mucho Haz espinorreticular (Fig. 1)
tiempo considerado como el neurotransmisor esencial
Este haz se origina en el asta posterior de la médula
o el neuromediador excitador de las terminaciones de
y después pasa al cuadrante anterolateral ventral. Ter-
las fibras aferentes, hoy se revela más bien como el
mina en la sustancia reticular del tronco cerebral y,
«neuromodulador» de los impulsos nociceptivos. La SP
principalmente, en el bulbo en los núcleos reticulares
modularía la transmisión sináptica dependiente de los
gigantocelulares y lateral.
receptores NMDA [10] . Por ejemplo, los antagonistas de
la SP pueden bloquear los fenómenos de sensibilización
central, es decir, el aumento progresivo de la descarga Haz espinomesencefálico (Fig. 1)
de las neuronas nociceptivas de la médula durante la
Sale del asta posterior de la médula y después pasa
repetición de una estimulación periférica. Sin embargo,
al cuadrante anterolateral ventral, para terminar en los
la SP no sería necesaria ni suficiente para provocar
núcleos mesencefálicos.
dolor.
En la médula, el CGRP liberado por las fibras aferen-
tes primarias potenciaría los efectos excitadores de la
SP, pero el papel respectivo de cada uno de los neuro-
 Estructuras supraespinales
péptidos no está claramente definido. Estas actividades Formación reticular bulbar
también estarían moduladas por la presencia de aminoá-
cidos inhibidores, como el ácido ␥-aminobutírico (GABA) Constituye una zona de control y de interacciones de
y la glicina [11] . múltiples sistemas que probablemente desempeñen un

4 EMC - Aparato locomotor


Aspectos fisiopatológicos del dolor en reumatología  E – 14-918-A-10

papel de interfaz. En presencia de estímulos nocicepti- medulares convergentes dependen de aferencias excita-
vos se activan las neuronas del núcleo gigantocelular. Este doras periféricas, pero también de aferencias inhibidoras
núcleo participaría sobre todo en la elaboración de las medulares y supraespinales (Fig. 1). En el asta posterior
reacciones conductuales consecutivas a la aplicación de de la médula, las fibras A␣ y A␤ (que conducen la infor-
un estímulo nociceptivo. El subnúcleo reticular dorsal está mación táctil) bloquean la transmisión de los mensajes
situado en la parte caudal del bulbo; sus neuronas serían dolorosos por medio de interneuronas inhibidoras. Esto
excitadas por estímulos nociceptivos de origen cutáneo corresponde a la teoría del control de la puerta (gate con-
y visceral, procedentes de las láminas I, V y VI. Envía trol) de entrada del dolor de Wall y Melzack [12] .
haces ascendentes hacia el tálamo medio y descendentes El dolor aparece cuando se rompe el equilibrio a favor
hacia la médula, cumpliendo así una función estratégica de las aferencias excitadoras: ya sea por «exceso de
de intermediación entre estas dos estructuras. La forma- nocicepción», caso en que la excitación de las fibras afe-
ción reticular, gracias a sus proyecciones descendentes rentes es demasiado intensa y la puerta de control es
bulboespinales, participa en los controles descendentes de superada, transmitiéndose el mensaje a los centros supe-
la nocicepción. riores, o bien por «defecto de inhibición» en los casos
en que existe una lesión neurológica que altera los sis-
Estructuras talámicas temas de control. Por ejemplo, la lesión de las fibras A␣
y ␤ induce una supresión de inhibición de la transmisión
El tálamo es una estructura compleja formada por varias de los mensajes dolorosos (desaparición del control de la
regiones. Existen dos tipos de vías con características fun- puerta).
cionales muy distintas:
• las vías que terminan en el tálamo lateral, básicamente
en el núcleo posterolateral ventral, que emite nume- Controles de origen supraespinal
rosas proyecciones hacia la corteza somatosensorial S1 Se ejercen a partir de algunas regiones del tronco
y S2. Las neuronas de este núcleo permiten analizar cerebral, en particular la sustancia gris periacueductal,
el componente sensoriodiscriminativo del dolor, su cuyas neuronas originan vías descendentes inhibidoras
localización, su intensidad y su duración. El núcleo que inducen depresión de las neuronas del asta posterior
posterolateral ventral se define en primer lugar por sus de la médula, implicado en la transmisión de los mensa-
aferencias lemniscales, procedentes de los núcleos grá- jes nociceptivos por las vías siguientes: la sustancia gris
cil (de Goll) y cuneiforme (de Burdach), en los que se periacueductal se proyecta directamente sobre la región
encuentran en número más reducido las aferencias del bulbar rostral central en el núcleo del rafe mayor, que se
haz espinotalámico; proyecta de forma masiva hacia la médula posterior por el
• las vías que terminan en el tálamo medio, básica- funículo posterolateral (Fig. 1). La sustancia gris periacue-
mente en los núcleos intralaminares y submedial. ductal y el núcleo del rafe mayor contienen abundante
Las neuronas de estos núcleos emiten proyecciones serotonina, que representa el neuromediador principal
sobre las áreas motoras y premotoras corticales y cin- de estas vías descendentes inhibidoras [12] . Sin embargo,
gulares, que pueden intervenir en la elaboración de también coexisten mecanismos noradrenérgicos, dopami-
reacciones motoras y emocionales vinculadas al dolor. nérgicos, colinérgicos, opioidérgicos y, menos conocidos,
Las neuronas talámicas reciben aferencias de las vías GABAérgicos.
espinorreticulotalámicas y tienen un campo receptor
periférico bastante difuso, de lo que resulta una discri-
minación sensorial del dolor de menos buena calidad.
 Tres tipos principales
Corteza cerebral de dolor en reumatología
La corteza somestésica primaria (S1) es considerada En reumatología, los dolores por exceso de nocicep-
como la diana principal de las aferencias somestésicas pro- ción son bien conocidos. Se trata, pues, de un aumento
cedentes del núcleo posterolateral ventral del tálamo, con del mensaje doloroso en un sistema nervioso normal. La
una representación somatotópica similar a la establecida barrera medular es superada. Un buen ejemplo son los
para el área motora primaria por Penfield y con una dis- dolores articulares de tipo inflamatorio o degenerativo.
torsión en función del número de aferencias y no de la Sin embargo, existen numerosos cuadros dolorosos en
superficie corporal. También existe un área somestésica los que el mecanismo neuropático coexiste, incluso pre-
secundaria (S2). domina, con el mecanismo por exceso de nocicepción.
Las nuevas técnicas de imagen, que acoplan la resonan- Por último, existen dolores no clasificados, respecto a los
cia magnética y la tomografía por emisión de positrones, cuales los datos disponibles no permiten distinguir meca-
han permitido demostrar la activación de las áreas S1 nismos nociceptivos o neuropáticos puros. El análisis del
y S2 por estímulos térmicos nociceptivos, así como la tipo de dolor requiere una evaluación fina [13] para poder
activación concomitante de la corteza cingular e insular guiar la conducta terapéutica [14] .
perteneciente al sistema límbico, que pueden explicar el
componente «afectivo» y «emocional» del dolor. La acti-
vación de la corteza prefrontal podría estar en relación con Dolores nociceptivos y sensibilización
los aspectos cognitivos de la percepción dolorosa (Fig. 1). secundaria
 Mecanismos de control Los procesos inflamatorios, secundarios a lesiones tisu-
lares de diversa índole provocan una estimulación intensa
de la nocicepción de los nociceptores. Los dolores nociceptivos se relacio-
nan, por tanto, con un aumento de la estimulación de
Los mensajes nociceptivos están sometidos de forma los nociceptores periféricos en un sistema nervioso nor-
constante a modulaciones que se ejercen en varios niveles: mal. Se trata de los dolores reumatológicos por lesiones
periféricos, espinales y centrales. articulares, periarticulares o raquídeas, de los dolores trau-
máticos, postoperatorios o secundarios a una isquemia,
Controles segmentarios etc.
La amplificación de la reactividad del nociceptor
El asta dorsal de la médula espinal es el primer lugar participa en los fenómenos de reducción del umbral
de integración del mensaje nociceptivo. Las neuronas nociceptivo (alodinia) y de amplificación del dolor tras

EMC - Aparato locomotor 5


E – 14-918-A-10  Aspectos fisiopatológicos del dolor en reumatología

Cerebro
Tacto 1

Cerebro
Ca2+ TrkB
MAPK
Nociceptor C y Aδ Dolor
Glu NMDA
PKC PKA
SP Src
P13K Gli-R/
CGRP Fractalquina
ATP GABA-R
GABA CX3CR1
ATP P2-R
Glu Gli
Láminas I-II int.

Toll-R

Citocina
BDNF
Glu NMDA
Gli-R 3
Gli
Fibras aferentes Aβ

Figura 4. Fenómeno de sensibilización central (según Basbaum et al [17] ). Tiene tres componentes: (1) sensibilización en relación con
el glutamato (receptores NMDA); (2) desinhibición; (3) activación de la microglía. ATP: adenosina trifosfato; BDNF: factor neurotrófico
derivado del cerebro; Ca2+ : calcio; CGRP: péptido liberador del gen de la calcitonina; CX3CR1: receptor de las quimiocinas CX3C1
o de la fractalquina; GABA: ácido ␥-aminobutírico; GABA-R: receptor GABA; Glu: glutamato; Gli: glicina; Gli-R: receptor de la glicina;
MAPK: proteínas cinasas activadas por mitógenos; NGF: factor de crecimiento nervioso; NMDA: N-metil-D-aspartato; P2-R: receptores
purinérgicos 2; PKA: proteína cinasa A; PKC: proteína cinasa C; SP: sustancia P; TNF-␣: factor de necrosis tumoral ␣; Toll-R: receptor Toll;
trkB: tirosina cinasa B; TRPV1: receptor de potencial transitorio vainilloide 1.

estimulación por encima del umbral nociceptivo (hipe- tras cirugía discal, o de síndromes de compresión ner-
ralgesia) observados en clínica. El fenómeno inflamatorio viosa igualmente persistentes después de una cirugía. La
puede producir una hiperalgesia primaria en el lugar de la manifestación semiológica es característica [13, 14] .
lesión y otra secundaria a distancia [15, 16] . Numerosos estudios experimentales con modelos de
La sensibilización es una característica de los noci- lesiones nerviosas periféricas han permitido proponer
ceptores durante la cual las respuestas a los estímulos varios mecanismos con relación a la generación de los
aumentan en el sitio de la lesión. La sensibilización peri- dolores neuropáticos periféricos [12] (Fig. 5).
férica inducida por la inflamación aumenta la intensidad Una lesión nerviosa provoca modificaciones periféricas
de los impulsos nociceptivos proyectados hacia el sis- y centrales:
tema nervioso central. Los impulsos nociceptivos activan • descargas espontáneas y ectópicas, con participación
las neuronas centrales y, en algunos casos, las sensibili- de algunos canales iónicos, como los de sodio (Nav1.3,
zan. Se denomina sensibilización central a una respuesta Nav1.7, Nav1.8), de calcio (sobreexpresión de la subuni-
aumentada de las neuronas (nociceptores) del sistema ner- dad a2 d de los canales de calcio dependiente del voltaje)
vioso central a un estímulo aferente normal o inferior y de los receptores de la familia del receptor de potencial
al umbral [17] . La amplitud de la sensibilización central transitorio;
depende de numerosos factores periféricos, sobre todo del • conducción por medio de «cortocircuitos» entre fibras
tipo de tejido y de la extensión de la lesión. Los mecanis- de diámetro grande y pequeño (conducción efáptica)
mos de esta sensibilización suponen diversos mecanismos o fenómeno de «acoplamiento eléctrico» entre fibras
y numerosos mediadores, como los aminoácidos neuro- nerviosas, con una activación de fibras contiguas que
excitadores, las cininas, los factores de crecimiento y las se prolonga más allá de la descarga inicial y sensibiliza
prostaglandinas (Fig. 4). Así, el fenómeno de sensibiliza- al nociceptor;
ción central (cf supra) representa una forma elemental de • ramificaciones de las neuronas aferentes primarias y de
la sensibilización dependiente del receptor NMDA y de los las neuronas simpáticas;
aminoácidos neuroexcitadores. • modificaciones metabólicas de los cuerpos celulares
En resumen, la inflamación induce una sensibilización de neuronas aferentes primarias: modificaciones de la
del sistema nervioso y una amplificación del mensaje síntesis y la liberación de los neuropéptidos y modi-
nociceptivo por una asociación de factores periféricos, ficaciones de la expresión de numerosos genes (varios
centrales y humorales. cientos). Estos genes no están forzosamente implicados
en el fenómeno doloroso, sino más bien en los procesos
de degeneración y regeneración nerviosa;
Fisiopatología del dolor neuropático • transformaciones fenotípicas que afectan a las fibras A␤
(mensaje no nociceptivo), que podrían actuar como
La definición del dolor neuropático actualmente acep- nociceptores y sintetizar neuromediadores pronocicep-
tada señala que se trata de un dolor consecutivo a una tivos, participando de este modo en el desarrollo de una
lesión del sistema somatosensorial. Los dolores neuropá- sensibilización central;
ticos siempre son patológicos y expresan disfunciones del • sensibilización central correspondiente a una hiperex-
sistema nociceptivo fisiológico. Los dolores neuropáticos citabilidad de las neuronas nociceptivas centrales del
más comunes en reumatología son de origen periférico y asta posterior de la médula. La liberación de SP y de
producto de compresiones nerviosas prolongadas, como factor neurotrófico derivado del cerebro, así como de
las observadas en algunas ciáticas crónicas que persisten muchos otros mediadores del asta dorsal de la médula,

6 EMC - Aparato locomotor


Aspectos fisiopatológicos del dolor en reumatología  E – 14-918-A-10

Cambios Dolores neuropáticos Figura 5. Mecanismos de los dolores


fenotípicos neuropáticos periféricos (según Bouhas-
Galanina, CCK, VIP NPY, Alteración de sira [12] ). CCK: colecistocinina; VIP: pép-
alfa-2-delta, etc. los controles tido intestinal vasoactivo; NPY: neuro-
SP, CGRP, opioides descendentes péptido Y; SP: sustancia P; GABA: ácido
␥-aminobutírico.
Glutamato
Descargas Péptidos
ectópicas

Fibra C Hiperexcitabilidad
neuronas nociceptivas
Lesión

Fibra Aβ
SP ?
Descargas
ectópicas

Cambios Activación
fenotípicos microglía
Reducción inhibición segmentaria
SP GABA, glicina, KKC2

activa los aminoácidos excitadores, como el gluta- no tienen una denominación consensuada y se los cali-
mato, por medio de sus receptores AMPA y, sobre todo, fica como «disfuncionales». En este sentido, aun cuando
NMDA, que desempeñan un papel fundamental en esta estos síndromes dolorosos se acompañan a menudo de
sensibilización central; comorbilidades comunes (por ejemplo, síndrome depre-
• alteración de los sistemas de modulación de la trans- sivo, trastornos de ansiedad, trastornos cognitivos), se ha
misión de los mensajes nociceptivos. Se trataría de un avanzado la hipótesis de una disfunción de origen central
fenómeno de desinhibición segmentaria por reducción de los controles moduladores del dolor.
de la concentración de GABA en el asta posterior. Tam-
bién se ha mencionado la destrucción o la disfunción
de interneuronas inhibidoras locales. Por último, algu-  Bibliografía
nos autores han propuesto una pérdida de eficacia o
una inversión de función en la inhibición neuronal [1] Fields HL. State-dependent opioid control of pain. Nat Rev
mediada por el GABA o la glicina, debida a una altera- Neurosci 2004;5:565–75.
ción específica de un cotransportador potasio-cloro, lo [2] Fortier J, Williams S, Donati F, Beaulieu P. Pharmacologie en
cual perturba la entrada de los iones cloro y, por tanto, anesthésiologie. En: Beaulieu P, Lambert C, editores. Précis
el funcionamiento de los canales iónicos inhibidores; de pharmacologie. Montréal: Les Presses de l’Université de
• fenómenos de neuroplasticidad. Existirían ramificacio- Montréal; 2010. p. 425–57.
nes de las neuronas de diámetro grande no nociceptivas [3] Jordt SE, McKemy DD, Julius D. Lessons from peppers and
(que conducen la información táctil) hacia las lámi- peppermint: the molecular logic of thermosensation. Curr
nas superficiales de la médula (lámina II), creando así Opin Neurobiol 2003;13:487–92.
conexiones con las segundas neuronas que conducen [4] Meyer RA, Ringkamp M, Campbell JN, Raja SN. Peripheral
la información dolorosa hacia los centros superiores y mechanisms of cutaneous nociception. En: McMahon SB,
dando una explicación anatómica a la alodinia. Estos Koltzenburg M, editores. Textbook of pain. London: Churchill
fenómenos de reorganización también podrían ocurrir Livingstone; 2006. p. 3–34.
a nivel central (tálamo o corteza); [5] Wyke B. The neurology of joints: a review of general princi-
• activación de las células gliales. Mecanismos neuroin- ples. Clin Rheum Dis 1981;7:233–9.
munitarios con participación de las células gliales [6] Hochman JR, Davis AM, Elkayam J, Gagliese L, Hawker GA.
podrían explicar la hiperexcitabilidad de las neuro- Neuropathic pain symptoms on the modified pain DETECT
nas nociceptivas. En este sentido, una lesión neuronal correlate with signs of central sensitization in knee osteoarth-
ritis. Osteoarthritis Cartilage 2013;21:1236–42.
periférica induce una activación considerable de la
[7] Wylde V, Palmer S, Learmonth ID, Dieppe P. Somatosensory
microglía (en el sistema nervioso central, las células
abnormalities in knee OA. Rheumatology 2012;51:535–43.
microgliales son equivalentes de los macrófagos).
[8] Gwilym SE, Filippini N, Douaud G, Carr AJ, Tracey I. Tha-
Los dolores neuropáticos centrales se deberían a una
lamic atrophy associated with painful osteoarthritis of the
sensibilización central y/o a una desinhibición termosen- hip is reversible after arthroplasty: a longitudinal voxel-based
sorial. Esta última teoría propone que los dolores centrales morphometric study. Arthritis Rheum 2010;62:2930–40.
se deben a una reducción de la inhibición ejercida fisio- [9] Baron R, Binder A, Wasner G. Neuropathic pain: diagno-
lógicamente por el sistema espinotalámico lateral, que sis, pathophysiological mechanisms, and treatment. Lancet
termina en la corteza cingular. Neurol 2010;9:807–19.
[10] Woolf CJ. The dorsal horn: state-dependent sensory proces-
sing and the generation of pain. En: Wall PD, Melzack R,
Dolores no clasificados o disfuncionales editores. Textbook of pain. Edinburgh: Churchill Livingstone;
1994. p. 101–12.
Estos dolores no son producto de una estimulación [11] Beaulieu P. La douleur : guide pharmacologique et théra-
de los nociceptores ni de una lesión nerviosa identifi- peutique. Montréal: Les Presses de l’Université de Montréal;
cada. Esta categoría incluye un conjunto de síndromes 2013 [240 p].
dolorosos crónicos como la fibromialgia, el síndrome del [12] Bouhassira D. Mécanismes physiopathologiques des dou-
colon irritable, el síndrome doloroso regional complejo de leurs neuropathiques. En: Bouhassira D, Calvino B, editores.
tipo I, las cefaleas tensionales, etc. Estos dolores, durante Douleurs : physiologie, physiopathologie et pharmacologie.
mucho tiempo considerados como psicógenos, todavía Paris: Arnette; 2009. p. 145–61.

EMC - Aparato locomotor 7


E – 14-918-A-10  Aspectos fisiopatológicos del dolor en reumatología

[13] Vergne-Salle P, Beaulieu P, Coutaux A, Sichère P, Perrot S, [15] Woolf CJ. Central sensitization: implications for the
Bertin P. Moyens d’évaluation de la douleur en rhumatologie. diagnosis and treatment of pain. Pain 2011;152:
EMC (Elsevier Masson SAS, Paris), Appareil locomoteur, S2–15.
15-918-A-12, 2014. [16] Ma Q, Woolf CJ. Nociceptors - Noxious stimulus detectors.
[14] Vergne-Salle P, Beaulieu P, Coutaux A, Sichère P, Perrot S, Neuron 2007;55:353–64.
Bertin P. Traitements de la douleur en rhumatologie. EMC [17] Basbaum AI, Bautista DM, Scherrer G, Julius D. Cellu-
(Elsevier Masson SAS, Paris), Appareil locomoteur, 15-918- lar and molecular mechanisms of pain. Cell 2009;139:
A-14, 2014. 267–84.

P. Vergne-Salle, Professeur des Universités, praticien hospitalier de thérapeutique (pascale.vergne-salle@chu-limoges.fr).


Service de rhumatologie et consultation de la douleur, CHU Dupuytren, 2, avenue Martin-Luther-King, 87042 Limoges, France.
P. Beaulieu, MD, PhD, professeur agrégé.
Départements d’anesthésiologie et de pharmacologie, Faculté de médecine, Université de Montréal, C.P. 6128 – Succ. Centre-ville,
Montréal (Québec), Canada.
A. Coutaux, Praticien hospitalier rhumatologue.
Centre d’évaluation et de traitement de la douleur chronique, Hôpital de la Pitié-Salpêtrière, 47-83, boulevard de l’Hôpital, 75013 Paris,
France.
P. Sichère, Rhumatologue attaché.
Centre hospitalier de Saint-Denis, Hôpital Delafontaine, 2, rue du Docteur-Delafontaine, 93200 Saint-Denis, France.
S. Perrot, Professeur des Universités, praticien hospitalier de thérapeutique.
Centre de la douleur et d’éducation thérapeutique, Hôtel-Dieu, 1, place du Parvis-Notre-Dame, 75001 Paris, France.
P. Bertin, Professeur des Universités, praticien hospitalier de thérapeutique.
Service de rhumatologie et consultation de la douleur, CHU Dupuytren, 2, avenue Martin-Luther-King, 87042 Limoges, France.

Cualquier referencia a este artículo debe incluir la mención del artículo: Vergne-Salle P, Beaulieu P, Coutaux A, Sichère P, Perrot S, Bertin P.
Aspectos fisiopatológicos del dolor en reumatología. EMC - Aparato locomotor 2015;48(1):1-8 [Artículo E – 14-918-A-10].

Disponibles en www.em-consulte.com/es
Algoritmos Ilustraciones Videos/ Aspectos Información Informaciones Auto- Caso
complementarias Animaciones legales al paciente complementarias evaluación clinico

8 EMC - Aparato locomotor

Das könnte Ihnen auch gefallen