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APUNTES SEMINARIO HUMANISTICA II

1. Explique el Principio universal de finalidad o intencionalidad en el hombre.


Lo que especifica formalmente a la ética como ciencia es la ordenación del obrar humano y todo cuanto con él
se relaciona, al fin propio de la persona humana.
Si observamos todos los seres que pueblan el universo, caeremos en la cuenta de que todos ellos tienen un fin
determinado, es decir, tienden a determinadas cosas que les son propias. La piedra que cae “tiende” a un
“fin” que es alcanzar un estado de reposo. El árbol que crece, desde que es una simple semilla hundida en la
tierra, tiende a un fin que es alcanzar su plenitud como árbol. Todo lo que es tiende a algún fin. Ser es tender.
A esto podemos llamar principio universal de la finalidad.
El hombre no escapa a este principio universal. Todas sus acciones tienden, siempre a un fin.
Santo Tomas distingue en el hombre dos clases de actos, a saber, los actos propiamente humanos y los actos
del hombre. Los primeros son propios y exclusivos del hombre y Santo Tomás dice que son los que proceden
de una voluntad iluminada por la inteligencia. Estos son los actos que caen bajo la consideración de la ética.
Los otros actos (por ejemplo comer, beber, experimentar sensaciones, apasionarse, etc.), son actos del
hombre, puesto que son suyos, pero no propiamente humanos pues no proceden de la dimensión
específicamente humana de la persona, aunque le acaezcan en la persona.

2. Describa el objeto de la inteligencia y de la voluntad. ¿Cómo se vinculan ambas?


Los actos humanos proceden de la voluntad y de la inteligencia que son las facultades o potencias propias de
la dimensión intelectiva de la persona. Estas facultades actúan por un objeto dice Santo Tomás.
¿Cuál es ese objeto?
- Para la voluntad el deseo del bien
- Para el intelecto el conocimiento (verdadero) del ser
Ambos objetos están íntimamente vinculados. La voluntad ama y desea el bien. El intelecto especifica qué
cosa sea, en cada caso, el bien y que no es el bien. Por este motivo, cuando nos referimos al obrar humano,
preferimos hablar de principio de intencionalidad, para poner de relieve que el tender del hombre hacia su fin
último es consciente.
Dicho de otro modo entre todos los seres solo nosotros somos capaces de conocer algo como bueno, quererlo
y tender a eso, eligiendo entre los medios los que consideramos más aptos. Esto significa: conocer el fin en su
razón de fin, y conocer los medios como tales, además de tender hacia aquel.
3. Explica en qué consiste la tendencia humana a la felicidad y al bien.
El hombre siempre que actúa lo hace teniendo en vista un determinado fin. En lo que respecta al obrar ético,
el fin buscado recibe el nombre de bien.
Siempre actuamos buscando el bien o algo que de alguna manera suponemos que es un bien. La inteligencia
puede errar respecto de si algo es o no es un bien; pero el hombre siempre actuará buscando el bien. La
voluntad deseará o no un bien objetivo y real; pero lo desea tanto lo aprecia como un bien. De allí que
Aristóteles haya definido al bien como aquello a lo que todos tienden.
Este bien no es otra cosa que una Tendencia a la felicidad. La ética es, en última instancia, la ciencia de la
felicidad del hombre.

4-¿Qué es el bien?
El bien al igual que la libertad, es una noción análoga no unívoca, es decir con la palabra bien designamos una
serie de realidades distintas pero semejantes en razón de algo que es común a todas ellas. Es algo que
deseamos o queremos. Cuando suponemos que una cosa es buena por eso mismo la deseamos. Bien es lo que
todas las cosas apetecen.
Diferencia entre bien y bienes
Hay un Bien y hay bienes. La diferencia estriba en que el primero es un bien absoluto, un bien tan grande, tan
universal, total y definitivo que, una vez alcanzado, el hombre ya no desea nada más sencillamente porque no
puede desear más nada, su capacidad de deseo está colmada.
En cambio los bienes son solo eso, bienes determinados, particulares, bienes incompletos, deficientes que no
son capaces de saciar el deseo humano de bien.
¿Cuál es el Bien Ultimo del Hombre?
El bien ultimo del hombre es la felicidad, que consiste en la contemplación de la verdad pero de una verdad
cualquiera, sino la verdad primera que es Dios como podemos conocerlo con nuestra razón y nuestra vida, ya
que el pensamiento de la tradición cristiana, es que Dios es el bien ultimo del hombre que podremos verlo
cara a cara en la otra vida.
En otras concepciones la idea de bien está presente, no se concibe como en el caso anterior sino que se
reduce a la utilidad o al placer o al poder, como las éticas utilitaristas.
En la ética de Kant la noción de bien desaparece y es reemplazada por la autonomía absoluta de la voluntad
donde el hombre no actúa por deseo sino por deber.
5- Defina y Explique qué es el acto voluntario
El acto voluntario es aquel que procede de un principio intrínseco con conocimiento del fin.
Esta definición tiene dos miembros, el primero nos dice que el acto voluntario es intrínseco, como sabemos el
principio intrínseco de un acto puede ser o bien una potencia o facultad del alma o bien un habito. Desde
luego que el principio intrínseco del acto voluntario es la voluntad.
El segundo miembro nos dice que dicho acto se realiza con un conocimiento previo del fin al que se ordena.
Introducimos aquí un elemento cognitivo que pone ante nosotros dos cosas: por un lado las potencias o
facultades cognitivas, esto es, el intelecto y los sentidos internos y externos y por otro lado el objeto
conocido, el fin al cual se ordena el acto.

6- Clasificación del acto voluntario. Explique


Según las diferentes posibilidades de combinación del elemento material (movimiento de la voluntad) y del
formal (conocimiento del fin) es posible establecer diversos tipos de actos voluntarios:

a. Acto voluntario perfecto e imperfeto

Se dice que un acto es perfecto o imperfecto según el grado de conocimiento del fin. Es decir, se toma en
consideración el elemento formal (conocimiento del fin). Así, cuanto más perfecto sea el conocimiento del fin,
más perfecto será el acto. Por ejemplo el acto voluntario de un adulto.

b. Acto voluntario elícito o imperado


El acto voluntario elícito es el acto mismo de la voluntad, su querer, el cual es interior y no trasciende
necesariamente a la moción misma de la voluntad.
Por otro lado, la voluntad mueve o puede mover a las otras potencias (inteligencia, apetitos sensitivos) a
realizar sus propios actos, se trata de actos voluntarios imperados, los cuales no siempre presentan el mismo
grado de voluntariedad, incluso admiten involuntariedad.
c. Acto voluntario de acción (positivo) y de omisión (negativo)
El acto voluntario positivo procede de la voluntad en cuanto agente.
El acto voluntario negativo procede de la voluntad en cuanto causa negativa que nada hace ni obra.
d. Acto voluntario “en sí” o directo y acto voluntario “en la causa” o indirecto
En el primer caso, se dice que el acto procede a partir de una volición primaria y directa y es, en esencia,
aquello que la voluntad quiere y realiza en sí mismo como objeto inmediato de su acción.
En el segundo caso, en cambio, el acto no es causado o intentado por una voluntad eficiente e imperante sino
que es consecuencia de un acto directo anterior el que provoca un efecto no querido.
e. Acto voluntario en la causa y acto voluntario de doble efecto
El llamado acto voluntario de doble efecto es aquel que tiene dos efectos pero de tal modo que si se produce
uno necesariamente se produce el otro.
Un acto voluntario en su causa, es procurado o intentado en su causa, la cual puede ser física o moral, más o
menos próxima a los resultados indirectos que produce.

7. Enumere y explique los impedimentos que afectan el elemento cognoscitivo del acto
voluntario.

 Ignorancia: Es la ausencia de conocimiento debida en un sujeto capaz de poseer ese conocimiento o ciencia.
La ignorancia admite diversas formas, que es preciso tener en cuenta para poder discernir si hay o no
responsabilidad y en qué grado.

o Ignorancia de hecho: Recae sobre el acto en sí, sobre el objeto propio del acto dicho. (Por ejemplo, Usar algún
objeto sin tener conocimiento que puede dañar a los demás).
o Ignorancia moral o jurídica: Que juzga sobre la bondad o malicia de ese acto. (Por ejemplo, desconocer las
enseñanzas de la iglesia de la contracepción).

 Ignorancia puede ser Vencible o Invencible:

o Vencible: Cuando el sujeto podría salir de ella consultando o poniendo algunos medios que están a su alcance.
Si permanece la ignorancia es por negligencia, o bien, porque su ignorancia es afectada (Por ejemplo, cuando
no quiere saber porque)
o Invencible: Cuando el sujeto no puede salir de ella por los medios que tiene a su alcance o cuando habiendo
consultado no ha encontrado respuesta.

 Otros:

o El error: Consiste en un juicio equivocado sobre el acto, su objeto o sobre la cosa. Aquí no falta conocimiento
sino que tiene uno falso.
o Inadvertencia o falta de atención actual: respecto de algo que se conoce habitualmente.
o El olvido: pérdida o privación (actual o habitual) de un conocimiento que alguna vez se tuvo.
8. Enumere y explique los impedimentos que afectan a la voluntad.

 Las Pasiones: Son movimientos del apetito sensitivo, vehementes, intensos y transitorios acompañados
siempre de alguna alteración corporal. Cuando son intensas influyen directamente sobre el acto del sujeto
dificultado, independientemente que sea del apetito concupiscible o el irascible.
Si la pasión es anterior al acto voluntario su presencia disminuye la libertad puesto que impulsa al sujeto a
obrar en un solo sentido restando la posibilidad de optar por lo contrario.
Si la pasión es posterior al acto o lo acompaña, la voluntariedad y la libertad aumentan porque el sujeto se
auto determina libremente.
Hay que tener en cuenta que las pasiones en sí mismas, no son ni moralmente buenas ni malas, y que
tampoco es lo mismo obrar “con pasión” que “sin pasión”. Por ejemplo, es distinto obrar “por miedo” que
“con miedo”.
 La Violencia: Coarta la libertad física del sujeto, quien realiza el acto bajo la presión física o psíquica de otro.
Se trata de una acción externa de un sujeto sobre otro, para forzarlo a obrar en un determinado sentido. La
violencia no alcanza jamás los actos elícitos de la voluntad, por ello propiamente no toca a la voluntad, la cual
puede seguir queriendo lo contrario de lo que se le impone. En la medida que el sujeto violentado opere bajo
la presión de otro, no hay acto voluntario, y por lo tanto no es responsable de lo que hace.

9. ¿Qué es la moralidad del acto voluntario?


Es una cualidad específica de los actos humanos, en virtud de la cual estos son o buenos o malos. Esta
cualidad determina directamente los actos elícitos de la voluntad (puesto que la raíz de la moralidad es la
libertad) e indirectamente los demás actos imperados por la voluntad.
Todo acto voluntario debe ser considerado, simultáneamente, desde dos ángulos distintos pero
complementarios:

 El Acto en sí mismo: con independencia de su realización concreta, visto en abstracto, sin considerar un
sujeto que lo realice ni ninguna otra circunstancia particular, se trata de algo universal y objetivo. Por ejemplo
“caminar”, “robar”, “trabajar”, etc. Este aspecto objetivo y material es regulado por la Ley Moral. Así
considerados, los actos humanos pueden ser intrínsecamente bueno, malos o indiferentes.
 El Acto Concreto: En tanto realizado por un sujeto determinado, en circunstancias determinadas, aquí se
consideran los actos particulares y concretos del acto. El acto concreto es juzgado según su aspecto subjetivo
y formal por la conciencia del hombre. En este punto de vista no caben los actos indiferentes: o son buenos o
son malos, puesto que, mediante estos actos el hombre se ordena o no a su propia perfección.
Se pueden distinguir dos aspectos dentro de la moralidad de un acto:

 Un Material u Objeto según el cual se califica al acto en si mismo teniendo en cuenta su objeto a la luz de la
ley moral.
 Otro Formal o Subjetivo que especifica a un acto concreto en cuanto es realizado por este sujeto, libremente,
siguiendo un propósito o fin determinado, el fin del agente, con la guía de la conciencia la que, a su vez, ha de
ser iluminada por la ley moral.

El primero tiene en vista el “objeto del acto voluntario” es decir, su fin, esto constituye lo que se denomina
“Objeto Moral” que debe ser calificada como buena, mala o indiferente según si tiende a la perfección del
hombre. El segundo considera el fin o intención del agente moral, es decir, aquel que realiza el acto, en este
caso la bondad o maldad se miden por la conciencia personal.

10) Consideración psicológica y moral del acto voluntario


El acto voluntario supone la simultanea actuación de las potencias o facultades del alma.: Las potencias
cognitivas y apetitivas, ya sean sensitivas o intelectivas, pues las potencias vegetativas no participan, al menos
directamente en la realización del acto voluntario.
La voluntad, en tanto apetito racional, es el principio de donde procede el acto voluntario. Pero la voluntad se
encentra bajo la influencia de los apetitos sensitivos, los que a su vez, son movidos por la voluntad, en una
suerte de reciprocidad circular. Al mismo tiempo, la voluntad no sería sino un ciego impulso si no estuviese
iluminada por el intelecto, pero este por su parte, resulta inseparable de la acción de los sentidos, por donde
vemos una nueva reciprocidad circular. Dentro de los llamados sentidos internos, encontramos la valorativa o
cogitativa, cuyo objeto no son los contenidos formales sino los de valor.

Esta facultad cogitativa tiene un papel central en el acto libre. En el orden de la intención, el papel de la
cogitativa es mínimo, pero en el orden de la elección en cambio, es bien distinto. Nuestros procesos
deliberativos se reducen a tres actos cognitivos: El consejo, el juicio acerca del obrar y el imperio.
En cuanto al consejo, hay un verdadero razonamiento. Aquí la cogitativa influye por una doble vía: El saber
primero, y segundo, condicionando el juicio de la razón.
En cuanto a juicio acerca del obrar, la cogitativa interviene en la determinación del sujeto por vía de la
afectividad.
En cuanto al imperio, el papel de la cogitativa es fundamental pues aquí las operaciones las realizan las
potencias sensitivas. La cogitativa es el nexo entre nuestra vida sensitiva y nuestra vida racional
11) ¿Cuáles son las condiciones que deben concurrir para que un acto voluntario sea bueno?
Explique cada una.
Para que un acto voluntario sea bueno han de ocurrir tres cosas: Uno, la bondad del objeto; dos, recto fin del
agente; tres, circunstancias adecuadas. Si uno de estos tres elementos falta, el acto será malo. Se puede
realizar un acto malo con un fin bueno, pero esto no hará bueno al acto. También se puede realizar un acto
malo con fin bueno, pero esto no hará bueno al acto. También se puede realizar un acto bueno por un fin
bueno con lo cual el acto es mejor.
Sintetizando:
- El fin bueno no hace bueno un acto malo
- El fin bueno hace bueno un acto, indiferente y mejor un acto bueno.
- El fin malo hace malo un acto bueno o indiferente.
- El fin malo agrava un acto malo.

12) En los actos voluntarios indirectos, ¿cuáles son las condiciones que deben darse para
que se puedan imputar a una persona?
Si se tiene en cuenta no ya al sujeto que obra sino a las acciones humanas se habla de imputabilidad. Decimos
que un acto es imputable a aquel que lo realiza en la medida en que puede atribuírsele plenamente.
En los casos de actos voluntarios indirectos (voluntario en la causa y voluntario de doble efecto) es necesario
señalar con mayor precisión las condiciones de imputabilidad.
Así, en el caso de un acto voluntario indirecto, la imputabilidad depende de las siguientes condiciones:

a) Que el agente haya podido prever el efecto indirecto.


b) Que exista relación causal entre el acto y el efecto indirecto de modo que pueda establecerse que dicho
efecto se sigue de la moción voluntaria original.
c) Que el agente haya podido evitar la causa.
13- ¿En los actos voluntarios de doble efecto cuales son las condiciones que deben darse
para que se puedan imputar a una persona?

Para que un acto voluntario sea bueno han de ocurrir tres cosas: bondad, recto fin y circunstancias adecuadas.
Por lo que si llegase a faltar alguno de estos tres elementos el acto es considerado malo.
Se puede realizar un acto de suyo malo con un fin bueno, pero esto no lo hará bueno al acto.
Sintetizando:
-El fin bueno no hace bueno un acto malo.
-El fin bueno hace bueno un acto de suyo indiferente y mejor un acto de suyo bueno.
-El fin malo hace malo un acto de suyo bueno o indiferente.
-El fin malo agrava un acto de suyo malo.

14- ¿Cuales son las dos grandes normas morales que rigen el acto voluntario?
Las dos grandes normas que rigen el acto voluntario son:
-Responsabilidad: todo hombre tiene en razón de sus actos. Es una propiedad del obrar libre del hombre; es
el hecho de poder el hombre optar entre realizar un acto o no realizarlo, realizarlo de tal o cual modo, en tales
o cuales circunstancias, persiguiendo tal o cual fin.
-Impunidad: se tiene en cuenta ya no al sujeto sino a las acciones humanas. Decimos que un acto es impune a
aquel que lo realiza en la medida en que puede atribuirse plenamente. La impunidad es una calificación de los
actos humanos que se sigue de la libertad. Implica que, en tanto un sujeto obra libremente, se le pueden
atribuir las consecuencias de su accionar. Es decir, se le puede atribuir su acto moral.

15- ¿Cual es la norma objetiva y cuál es la norma subjetiva? Explique cada una

La ley moral es la norma objetiva, se vincula con el objeto del acto. Es la norma objetiva próxima de la
moralidad del acto humano.
La conciencia es la norma moral objetiva, se vincula con el fin intentado por el agente y las circunstancias. Es
la norma subjetiva próxima.
La ley es norma porque es regla, modelo y causa ejemplar del acto bueno. Indica la medida y dirección del
acto humano, teniendo como fin aquel que complete al hombre en cuanto hombre. Ahora bien es objetiva
porque mide el acto atendiendo a su objeto formal, aquel que lo determina en una especie moral; además
próxima de la moralidad, esto quiere decir que ella está en relación inmediata con el acto, es lo más cercano,
en tanto que criterio de conducta, al acto humano.
16. Enumere y explique los 3 tipos de ley.
a) La Ley Eterna,
b) La Ley Moral Natural,
c) La Ley Positiva humana.

Ley eterna: es lo que los antiguos llamaron el “Logos” o “Nous” divino, que establece un orden en el universo,
donde se pueden descubrir ciertas regularidades en el movimiento de los cuerpos a las que se les da el
nombre de “leyes físicas” que no pueden deberse ni remotamente a la casualidad. Es la misma Inteligencia
Divina en cuanto ordena todas las cosas hacia aquella perfección que les compete.
Participa en los diversos seres de distinta manera, según la naturaleza específica de cada uno. Los seres inertes
participan ejecutivamente, son movidos desde fuera por ella. Los seres vivientes participan a través de sus
funciones propias, el hombre es el único viviente que se inserta en el cosmos de un modo racional, libre y
responsable; se distingue porque posee la capacidad de ordenar el mismo las cosas y sus propios actos,
racional, lo cual lo capacita para ser el mismo, una “inteligencia ordenadora” aunque subordinada

Ley Moral Natural: en tanto que es una “ordenación”, la Ley Moral implica una relación entre la naturaleza
humana, y aquellos bienes que la perfeccionan y que aparecen como fines adecuados a sus tendencias
perfectivas.
Solo la recta razón es apta para establecer ese ordenamiento en los actos humanos, de modo que estos se
dirijan hacia los fines perfectivos del hombre. El objeto que es ordenado por la recta razón no es otro que el
obrar humano, estos actos mediante los cuales el hombre se conduce, se dirige así mismo, libremente, hacia
su fin último, puede dirigirse libremente hacia su fin y puede, también, apartarse de Él. El hombre tiene en
común con todas las cosas el “ser” y, tiende naturalmente a conservarse en la existencia.
La Ley Natural es la participación de la creatura racional en la Ley Eterna. La creatura racional, el hombre,
participa de la Ley Eterna descubriendo (mediante su razón) en su propia esencia una serie de tendencias
perfectivas.

La Ley humana o Ley positiva: actualiza y concreta los principios de la Ley Natural dándoles vigencia en el
tiempo histórico y en el espacio sociocultural. Corresponde reconocer, respetar y garantizar los bienes que
perfeccionan la naturaleza humana de lo contrario carecerá de validez. La ley natural y la ley positiva se
interrelacionan de tal modo que la primera es condición de validez de la segunda y esta condición de vigencia
de la primera.
17) ¿Cuáles son las características de la Ley Natural? Explique.
a) es intrínseca: el hombre la descubre en sí mismo, como algo que está en su mismo ser y en el de las cosas,
no en su mente, su conocimiento se funda en lo que es.
b) es universal: abarca a todos los hombres, pues todos tienen la misma naturaleza, y no cambia ni en el
tiempo ni en el lugar.
c) es inmutable: si bien diversos factores culturales pueden facilitar o dificultar la captación de algunos de
estos preceptos naturales, ocurre en relación con las conclusiones que se siguen de aquellos; pero los
esenciales, permanecen; la ley natural no cambia.
d) es cognoscible: en todo hombre se hace presente el primer principio del obrar moral, el que se percibe
como una inclinación natural a hacer y proseguir el bien y evitar el mal; es el entendimiento de que ciertas
cosas se adecuan al bien del hombre y otras no, la va realizando la razón práctica de un modo progresivo, en el
contacto directo e inmediato.
e) es indeleble: el hombre puede negar principios secundarios y conclusiones en las que más se da el error,
sea porque es difícil de captar la vinculación lógica y real con los primeros principios, sea porque algún vicio o
una costumbre perversa oscurece la inteligencia. Pero estos principios no pueden ser totalmente eliminados
de la conciencia.

18) Clasificación de los tipos de conciencia.


a) La adecuación o conformidad del juicio practico con el principio moral, puede ser, verdadero cuando hay
conformidad y se juzga bueno lo que es objetivamente bueno, o bien erróneo cuando no hay conformidad y se
juzga como bueno lo que no lo es.
b) Hablamos de conciencia recta cuando se ponen todos los medios posibles al alcance para conocer el
principio moral aplicable y adecuar el juicio a aquel de conciencia falsa, y esta puede ser laxa o relajada,
cuando le poca importancia, o escrupulosa, cuando exagera la malicia o la gravedad de las circunstancias. La
conciencia falsa termina siendo errónea porque en su actitud de indiferencia frente al precepto moral termina
desvirtuando la ley.
c) según el grado de firmeza con que se formula el juicio prudencial, se llama cierta cuando está segura de la
verdad del acto correcto, o dudosa cuando, no atina a decidiese acerca del valor moral del acto; la persona
oscila entre obrar o no hacerlo.
Se ha de procurar siempre, en la medida de lo posible, que el juicio de la conciencia sea verdadero, recto y
cierto.
19) Cuáles son los modos de cooperación material. Explique.
La cooperación es el concurso en la acción de otro. Consiste en la ayuda o facilitación que la acción de una
persona presta a la ejecución de lo que otro ya ha decidido automáticamente hacer.

La cooperación material se da cuando alguien concurre solo materialmente al acto malo prestando una ayuda
en sí misma indiferente, pero de la cual el otro abusa para realizar una acción mala.

La cooperación material se realiza por necesidad o bajo presión sin aprobar la acción ajena y es más bien
víctima de la situación. Sin consentir ni querer el acto ajeno, se participa de algún modo al hacerlo posible

Puede ser, por una parte, inmediata o directa y mediata o indirecta y, por otra, próxima como remota:

a) Cooperación material inmediata o directa: Se da cuando se ayuda a otro a realizar la acción mala; por
ejemplo, si un ladrón obliga a una persona, bajo graves amenazas, a ayudarlo en su acción de robar.
b) Cooperación material mediata o indirecta: Cuando se proporciona un instrumento que otro empleará para
hacer el mal; por ejemplo, el que vende armas que otro utilizará para robar.

20) Explique las condiciones de moralidad de la cooperación al mal.


En general se puede decir que la cooperación al mal es moralmente ilícita. Éticamente no es aceptable
participar de modo inmediato en una acción ajena mala. No hay que olvidar que “el bien de la persona
humana, no solo requiere que cada uno obre según la recta razón, sino que procure que, en lo que depende
de él, existan condiciones favorables para el bien de todos los demás, ayudando y contribuyendo en la medida
de las propias posibilidades.

Sin embargo pueden darse algunas circunstancias que hagan lícitas determinadas acciones con las que se
coopera materialmente con el mal. En estos casos, la cooperación no responde a una libre iniciativa del
sujeto, sino, más bien, a una cierta necesidad de conseguir un bien o de evitar un mal, a través de la acción de
la que otro se sirve para realizar sus propósitos inmorales.

Primero hay que dilucidar si existe realmente necesidad de realizarla, es decir, que no quede otra alternativa
posible para conseguir el bien necesario o de evitar el mal que es preciso apartar. Si hubiese algún modo de
actuar sin cooperar al mal, aunque lleve consigo cierto esfuerzo o presente alguna incomodidad, no será
moralmente admisible dicha operación.

Si no existe ninguna otra alternativa, cabe plantear la licitud de una cooperación material al mal cuando se
rechaza por completo el mal ajeno, de modo que éste sea un efecto accidental y no querido, de una acción en
sí misma honesta. Solo es lícita una cooperación al mal si es meramente material y se cumplen todas las
condiciones que hacen lícito un acto voluntario indirecto. Estas condiciones son:

a) Que la acción sea, en sí misma, buena o indiferente.


b) El fin del sujeto debe ser honesto
c) El efecto malo no ha de afectar al objeto moral de la acción
d) Debe exitir proporción entre la importancia y necesidad del efecto bueno que se pretende lograr y la
negatividad representada por esa cooperación.
21) Qué es la objeción de conciencia?
Las personas se ven presionadas a actuar en contra de los que consideran bueno o justo. Muchas veces en
función de un cargo o poder. En estos casos se presenta el derecho a la objeción de conciencia. Se denomina
así toda resistencia a una orden superior que la conciencia opone por fidelidad a sus propias convicciones
religiosas o morales.

La conciencia es el medio con el cual se puede conocer qué es lo bueno en un determinado momento y lugar.

Si bien la voluntad humana puede desviarse del dictamen de la conciencia, la persona experimenta este
mandato por encima de su voluntad.

De aquí que la desobediencia al imperativo de la conciencia supone, en el hombre, una renuncia a su


verdadera esencia humana, un sacrificio de su dignidad que puede llegar incluso a un desdoblamiento, en su
persona, de su razón y de su voluntad.

La objeción de conciencia no implica una pretendida autonomía del sujeto respecto de la ley un desprecio
hacia ella.

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