LA MEJOR MANERA DE

UTILIZAR ESTE LIBRO

Este libro es el fruto de la extensa práctica de

enseñanza del autor; pretende ser una contri-
bución a la obra de difusión de la medicina
oriental en el mundo occidental.
La presentación del tema está dividida en
tres apartados que resulta conveniente leer de
forma correlativa.
El primer apartado narra la historia de la au-
riculoterapia, qué es, cómo ha nacido y cómo
ha llegado hasta nosotros.
El segundo apartado examina la oreja y el
mapa auricular, analizando cada uno de los
puntos, correspondientes a las diversas partes
del cuerpo humano.
El tercer apartado trata del diagnóstico de un
gran número de enfermedades y dolores y de
su posible terapia; consiste en una lista de afec-
ciones, con la indicación de los puntos co-
rrespondientes y del tratamiento que se debe
• seguir.
El texto, ejemplificado con ilustraciones y fi-
guras explicativas, permite tanto un enfoque
teórico de la auriculoterapia, como una "puesta
en práctica» inmediata de los conocimientos
adquiridos.
No obstante, se aconseja no dejar de lado la
parte teórica del texto, a menos que ya se
conozca y se haya llevado a cabo la técnica y
se quiera utilizar este libro como una especie
de " listado».

9
 AURICULOTERAPIA
-
AYER, HOYY MANANA
-
PARA UN AUMENTO DE LA SALUD

La base de todo servicio sanitario consiste

en la educación sanitaria. Con este criterio he
trabajado durante más de treinta años, con el fin
de influir en la actitud colectiva frente al proble-
ma de la salud.
La población mundial, y la europea en parti-
cular, en estos últimos decenios ha cambiado
demográficamente: se ha visto aumentada por
un fuerte porcentaje senil y presenil.
En consecuencia, tenemos una difusión de
enfermedades crónicas y degenerativas que no
son «curables» (es decir, que no se puede vol-
ver a las condiciones precedentes a la enferme-
dad), pero que son perfectamente «preveni- •
bies», ya que se mantienen por factores de
riesgo producidos por la misma sociedad.
El método y los contenidos de la educación
sanitaria han cambiado en el nuevo contexto
sociocultural, y los medios de defensa de la
salud se buscan precisamente dentro de esta
realidad, en los comportamientos individuales y
colectivos que están en la base misma de los
factores de riesgo .
La educación sanitaria en nuestros días es
• cada vez más participativa y menos informativa .
Es decir, que tiende a responsabilizar a los ciu-
dadanos, individual y colectivamente, ante el
problema de la defensa de la salud, respondien-
do así a una difundida exigencia de participa-
ción activa.

13
 y no se trata sólo de intenciones, pues el
programa de defensa de la salud está presente
en el estatuto mundial y europeo de la OMS
(Organización Mundial de la Salud) .
En tal programa de educación sanitaria
también se incluye la difusión de los métodos
de curación practicados en Oriente, sede de
antigua cultura y sabiduría. Este libro preten-
de representar una pequeña contribución a la
inmensa e importante obra de difusión de la me-
dicina oriental en el mundo occidental.
El libro es un compendio de algunas leccio-
nes prácticas llevadas a cabo por médicos en
las escuelas de perfeccionamiento en acupun-
tura de Roma, en el Hospital Fatebenefratelli y
en la SIB (Societa Italiana di Bioterapia) de
Roma.
Por tanto, el texto proviene de esta experien-
cia que es esencialmente didáctica, además de
tratarse de una experiencia clínica; esto ha per-
mitido una escritura muy sintética y esencial.
Sin perdernos en discusiones doctrinarias,
el libro expone los puntos comunes que pre-
sentan la escuela francesa de auriculoterapia y
la escuela china; se ha puesto el acento sobre
la práctica y, en el terreno de ésta, sobre lo que
pueda interesar a una.persona común, fuera de
todo ámbito especialista.
Agradezco a todos los médicos, a los para-
médicos y a los masofisioterapeutas que han
contribuido con su trabajo a la experimentación
y práctica y legitimar los temas aquí expuestos.
LOS ORIGENES DE
LA AURICULOTERAPIA

En los últimos tiempos hemos asistido a un

proceso cada vez más difundido de redimen-
sionamiento de la medicina contemporánea.
Esta ha alcanzado un grado de eficacia y de
precisión muy elevado, pero ha dejado de lado
el aspecto humano de la relación médico-pa-
ciente.
Por tanto, se advierte hoy la necesidad de
reconsiderar algunas actitudes de absolutismo
positivista y la tendencia excesiva a la ultra-
especialización. De hecho, el paciente, si bien
es aparentemente curado con métodos cada
vez más sofisticados, no ha visto disminuir su
angustia ante la enfermedad y el dolor.
La explosión del "fenómeno social .. y la pre-
potente intrusión de los poderes públicos en el
mundo de la medicina han acelerado la separa-
ción entre la medicina "humana.. y la medicina
"científico-estatal ... De aquí proviene la necesi-
dad de recurrir a formas de curación más sim-
ples, dulces, menos coercitivas y dolorosas, y
sobre todo más humanas. Por ello se renueva el
interés por la homeopatía, los masajes curati-
vos, la herboristería, las técnicas de toma de
cor¡ciencia corporal, la acupuntura y, además,
por la auriculoterapia.
La auriculoterapiaes la curación del enfermo
a través de la estimulación del pabellón auricu-
lar. Es una ciencia oriental de muy antigua data;
de la misma nos han quedado muy pocos do-

15
 cumentos históricos, porque, como pasa con
todas las ciencias antiguas aparecidas antes de
la invención de la escritura, esta disciplina se ha
transmitido oralmente.

La auriculote- El estudio de la oreja aparece en el texto más

rapia en China antiguo de medicina china, el Huang Di Nei Jing
(Libro de medicina corporal del Emperador
Amarillo), que se remonta a más de dos mil
años atrás.
La primera mención de una somatotopía
(proyección del esquema corporal) de la oreja
se encuentra en el Ling Shu, llamado también
Tchen Jing (un texto clásico que trata también
de la acupuntura), de datación incierta, aproxi·
madamente entre el 475 y el 221 a. C.
El primer médico chino especializado en el
estudio de la terapia auricular fue Pian Que
(400-310 a. C.?), quien también fue el padre de
la esfigmología (estudio diagnóstico del pulso).
Después, bajo la dinastía Tang (618-907 d.
C.), la estimulación del pabellón auricular, uti-
lizada para influir sobre la evolución de las en-
fermedades internas, tuvo una difusión muy
amplia.

la auriculote- Los egipcios conodan el uso de la estimula-

rapia en Europa ción del pabellón auricular con fines terapéuti-
cos. Hipócrates (siglo IV a. C.) habla de este
tema en su tratado Los aires, las aguas, los la-
gos, escrito después de una estadía en Egipto.
Seguramente algunas nociones de terapia
auricular fueron conocidas por los pueblos
nómadas, como los gitanos, quienes exporta-
ron de Oriente y difundieron por Europa algu-

16
nas intervenciones simples de auriculoterapia
(en caso de quemaduras, incisiones, heridas).
En 1637, Zacutus Lusitanus, un médico'
portugués, dejó informes documentados sobre
la utilidad de la cauterización auricular en caso
de ciática. .
Valsalva escribió en 1717 una obra titulada
De aura humana tractatus, donde se menciona-
ba la cauterización de la oreja. Más tarde, en
1810, IgnazioColla, médico de Parma, en cola-
boración con el cirujano Cecconi, realizó obser-
vaciones importantes sobre la auriculoterapia.
En 1850, Rulker, médico de Cincinnati
(USA), curó la ciática con la cauterización ae la
oreja.
Otros experimentos fueron realizados por
Lucciani, médico corso de Bastia, y por M.
Malgaigne, médico francés, pero estos experi-
mentos quedaron en el estadio de observacio-
nes empíricas, sin continuidad en el mundo
científico hasta el año 1950, momento en que
tanto en China como en Europa se volvió a
examinar y a estudiar esta forma de terapia.
En Francia, P. F. M. Nogier y R. J . Bour-
diol han tenido el mérito de haber hecho una
enorme contribución a los estudios de la auricu-
loterapia. A treinta años de distancia de sus pri-
meros trabajos y después de la larga experi-
mentación de los médicos de la República
Popular China, queda aún mucho trabajo por
hacer, para precisar la localización y los meca-
nismos de acción de la auriculoterapia.
 Este esquema expresa dos leyes importantes de la
doctrina médica china, ligadas a la teoría de los 5 elementos
y a las relaciones que se establecen entre ellos.
Las flechas en negro indican el ciclo (benéfico) de la
generación: la madera/ hígado genera el fuego/oorazón y
así sucesivamente. Las flechas en gris indican el ciclo
(maléfioo) de la destrucción o dominación: la madera
domina la tierra (cubriéndola), el fuego domina el metal
(fundiéndolo), la tierra domina el agua (absorbiéndola) , el
metal domina la madera (cortándola), el agua domina el
fuego (apagándolo).
LA PREHISTORIA DE LA
AURICULOTERAPIA EN IMAGENES

Las orejas han despertado a través del tiem-

po y entre todos los pueblos una rica serie de
sugerencias, analogías, aproximaciones sim-
bólicas.
Existe una estrecha relación entre las orejas
y los reflejos sexuales. Nuestros lóbulos, au-
" sentes en todos los otros primates, son zonas
erógenas que se vuelven hipersensibles duran-
te los contactos amorosos.
En la antigüedad, las orejas eran ofrecidas a
la Diosa Madre en sustitución de los órganos
masculinos. En Egipto los devotos dedicaban
las orejas a la diosa Isis y, hasta los primeros
decenios de la era cristiana, en muchas reg io-
nes de Medio Oriente se ofrecían a la Gran
madre pequeñas esculturas en forma de orejas.
Como el pene, el lóbulo auricular no tiene
hueso; se pensaba que si se estiraba el lóbulo,
ello podría traer como consecuencia un alarga-
miento del miembro sexuSiI masculino.
En Oriente, no se permitía a los tutores de los
niños reales que les pegaran; en cambio, se les
concedía la autorización para tirarles de las
orejas porque ello no comportaba una pérdida
del honor y porque los haría crecer sexualmen-
te vigorosos.
La perforación de los lóbulos no sólo tiene la
finalidad de colgar pendientes en ellos, sino
también la de alejar la influencia de los espíritus
malignos. En Alemania, Escocia e Irlanda (ade-

19
 En gran parte de las poblaciones de la Tierra existe la
costumbre de perforar el lóbulo auricular para colocar
pendientes (esta costumbre estuvo siempre tan extendida
que hasta las mismas estatuas aparecían ádornadas con
ellos; aquí vemos una de época helénica, encontrada en
Sicilia) . A esta práctica tal vez se le atribuyan virtudes
terapéuticas: en efecto, según la auriculoterapia moderna,
la zona que usualmente se pertora cae cerca del punto
correspondiente al oído. No obstante, la práctica no está
totalmente ausente de riesgos; algunos autores (por ejem·
plo D. Dervieux) desaconsejan absolutamente perforar la
zona demarcada con rayas.

20
 Ilustración que proviene de De aura humana tractatus
de Valsalva, del año 1717. El autor especifica, en este punto
del tratado y también en otros fragmentos, que la zona
indicada con la letra H se cauterizaba para calmar el dolor
de muelas. La cauterización se efectuaba con un hierro
caliente y la quemadura no era muy profunda.

21
 y no se trata sólo de intenciones, pues el
programa de defensa de la salud está presente
en el estatuto mundial y europeo de la OMS
(Organización Mundial de la Salud) .
En tal programa de educación sanitaria
también se incluye la difusión de los métodos
de curación practicados en Oriente, sede de
antigua cultura y sabiduría. Este libro preten-
de representar una pequeña contribución a la
inmensa e importante obra de difusión de la me-
dicina oriental en el mundo occidental.
El libro es un compendio de algunas leccio-
nes prácticas llevadas a cabo por médicos en
las escuelas de perfeccionamiento en acupun-
tura de Roma, en el Hospital Fatebenefratelli y
en la SIB (Societa Italiana di Bioterapia) de
Roma.
Por tanto, el texto proviene de esta experien-
cia que es esencialmente didáctica, además de
tratarse de una experiencia clínica; esto ha per-
mitido una escritura muy sintética y esencial.
Sin perdernos en discusiones doctrinarias,
el libro expone los puntos comunes que pre-
sentan la escuela francesa de auriculoterapia y
la escuela china; se ha puesto el acento sobre
la práctica y, en el terreno de ésta, sobre lo que
pueda interesar a una.persona común, fuera de
todo ámbito especialista.
Agradezco a todos los médicos, a los para-
médicos y a los masofisioterapeutas que han
contribuido con su trabajo a la experimentación
y práctica y legitimar los temas aquí expuestos.
LOS ORIGENES DE
LA AURICULOTERAPIA

En los últimos tiempos hemos asistido a un

proceso cada vez más difundido de redimen-
sionamiento de la medicina contemporánea.
Esta ha alcanzado un grado de eficacia y de
precisión muy elevado, pero ha dejado de lado
el aspecto humano de la relación médico-pa-
ciente.
Por tanto, se advierte hoy la necesidad de
reconsiderar algunas actitudes de absolutismo
positivista y la tendencia excesiva a la ultra-
especialización. De hecho, el paciente, si bien
es aparentemente curado con métodos cada
vez más sofisticados, no ha visto disminuir su
angustia ante la enfermedad y el dolor.
La explosión del "fenómeno social .. y la pre-
potente intrusión de los poderes públicos en el
mundo de la medicina han acelerado la separa-
ción entre la medicina "humana.. y la medicina
"científico-estatal ... De aquí proviene la necesi-
dad de recurrir a formas de curación más sim-
ples, dulces, menos coercitivas y dolorosas, y
sobre todo más humanas. Por ello se renueva el
interés por la homeopatía, los masajes curati-
vos, la herboristería, las técnicas de toma de
cor¡ciencia corporal, la acupuntura y, además,
por la auriculoterapia.
La auriculoterapiaes la curación del enfermo
a través de la estimulación del pabellón auricu-
lar. Es una ciencia oriental de muy antigua data;
de la misma nos han quedado muy pocos do-

15
 cumentos históricos, porque, como pasa con
todas las ciencias antiguas aparecidas antes de
la invención de la escritura, esta disciplina se ha
transmitido oralmente.

La auriculote- El estudio de la oreja aparece en el texto más

rapia en China antiguo de medicina china, el Huang Di Nei Jing
(Libro de medicina corporal del Emperador
Amarillo), que se remonta a más de dos mil
años atrás.
La primera mención de una somatotopía
(proyección del esquema corporal) de la oreja
se encuentra en el Ling Shu, llamado también
Tchen Jing (un texto clásico que trata también
de la acupuntura), de datación incierta, aproxi·
madamente entre el 475 y el 221 a. C.
El primer médico chino especializado en el
estudio de la terapia auricular fue Pian Que
(400-310 a. C.?), quien también fue el padre de
la esfigmología (estudio diagnóstico del pulso).
Después, bajo la dinastía Tang (618-907 d.
C.), la estimulación del pabellón auricular, uti-
lizada para influir sobre la evolución de las en-
fermedades internas, tuvo una difusión muy
amplia.

la auriculote- Los egipcios conodan el uso de la estimula-

rapia en Europa ción del pabellón auricular con fines terapéuti-
cos. Hipócrates (siglo IV a. C.) habla de este
tema en su tratado Los aires, las aguas, los la-
gos, escrito después de una estadía en Egipto.
Seguramente algunas nociones de terapia
auricular fueron conocidas por los pueblos
nómadas, como los gitanos, quienes exporta-
ron de Oriente y difundieron por Europa algu-

16
nas intervenciones simples de auriculoterapia
(en caso de quemaduras, incisiones, heridas).
En 1637, Zacutus Lusitanus, un médico'
portugués, dejó informes documentados sobre
la utilidad de la cauterización auricular en caso
de ciática. .
Valsalva escribió en 1717 una obra titulada
De aura humana tractatus, donde se menciona-
ba la cauterización de la oreja. Más tarde, en
1810, IgnazioColla, médico de Parma, en cola-
boración con el cirujano Cecconi, realizó obser-
vaciones importantes sobre la auriculoterapia.
En 1850, Rulker, médico de Cincinnati
(USA), curó la ciática con la cauterización ae la
oreja.
Otros experimentos fueron realizados por
Lucciani, médico corso de Bastia, y por M.
Malgaigne, médico francés, pero estos experi-
mentos quedaron en el estadio de observacio-
nes empíricas, sin continuidad en el mundo
científico hasta el año 1950, momento en que
tanto en China como en Europa se volvió a
examinar y a estudiar esta forma de terapia.
En Francia, P. F. M. Nogier y R. J . Bour-
diol han tenido el mérito de haber hecho una
enorme contribución a los estudios de la auricu-
loterapia. A treinta años de distancia de sus pri-
meros trabajos y después de la larga experi-
mentación de los médicos de la República
Popular China, queda aún mucho trabajo por
hacer, para precisar la localización y los meca-
nismos de acción de la auriculoterapia.
 Inserción de una aguja semi-permanente.

Imán que se hace girar cerca de una aguja semi-

permanente, con el fin de aumentar el efecto de estimula-
ción dE!.Ja-

Aplicación de un imán permanente polarizado.

118
LA PREHISTORIA DE LA
AURICULOTERAPIA EN IMAGENES

Las orejas han despertado a través del tiem-

po y entre todos los pueblos una rica serie de
sugerencias, analogías, aproximaciones sim-
bólicas.
Existe una estrecha relación entre las orejas
y los reflejos sexuales. Nuestros lóbulos, au-
" sentes en todos los otros primates, son zonas
erógenas que se vuelven hipersensibles duran-
te los contactos amorosos.
En la antigüedad, las orejas eran ofrecidas a
la Diosa Madre en sustitución de los órganos
masculinos. En Egipto los devotos dedicaban
las orejas a la diosa Isis y, hasta los primeros
decenios de la era cristiana, en muchas reg io-
nes de Medio Oriente se ofrecían a la Gran
madre pequeñas esculturas en forma de orejas.
Como el pene, el lóbulo auricular no tiene
hueso; se pensaba que si se estiraba el lóbulo,
ello podría traer como consecuencia un alarga-
miento del miembro sexuSiI masculino.
En Oriente, no se permitía a los tutores de los
niños reales que les pegaran; en cambio, se les
concedía la autorización para tirarles de las
orejas porque ello no comportaba una pérdida
del honor y porque los haría crecer sexualmen-
te vigorosos.
La perforación de los lóbulos no sólo tiene la
finalidad de colgar pendientes en ellos, sino
también la de alejar la influencia de los espíritus
malignos. En Alemania, Escocia e Irlanda (ade-

19
 En gran parte de las poblaciones de la Tierra existe la
costumbre de perforar el lóbulo auricular para colocar
pendientes (esta costumbre estuvo siempre tan extendida
que hasta las mismas estatuas aparecían ádornadas con
ellos; aquí vemos una de época helénica, encontrada en
Sicilia) . A esta práctica tal vez se le atribuyan virtudes
terapéuticas: en efecto, según la auriculoterapia moderna,
la zona que usualmente se pertora cae cerca del punto
correspondiente al oído. No obstante, la práctica no está
totalmente ausente de riesgos; algunos autores (por ejem·
plo D. Dervieux) desaconsejan absolutamente perforar la
zona demarcada con rayas.

20
 Ilustración que proviene de De aura humana tractatus
de Valsalva, del año 1717. El autor especifica, en este punto
del tratado y también en otros fragmentos, que la zona
indicada con la letra H se cauterizaba para calmar el dolor
de muelas. La cauterización se efectuaba con un hierro
caliente y la quemadura no era muy profunda.

21
 JOUItNAL DES CONNAISSANCES

MÉDICO -CHIRURGICALES.
N' 9. _ t" ~IAI 1850.

l. CLINIQUE. -IIIÉMOIRES. - OnSERvATtONS.

a
conque) , du cólé correspondant la parlie
afi'ectéc. Voie i comment se pratiquc cclle
'o De la (,'''''I:'"I""lIon de I'orelll"
opéralion.
co..... ., t,..I'rm~n' radical de l.
ad.tJcIUC.
00 arpliquc sur I'hélix un morceau de
fer plal (Og. t), qui a lout au plus un mil-
),tulla ren"c(nlur 'lile j~m c:ec.idcre •.• lírnetrc d'éparsseur i sur ce marcenu de
HoueE". fer re Irouve une auverture par laquelle
M. le docleur Lucciana, de Baslia, naus
com01uni'1uc des documenls pleios d'inté-
r~l lour une fIIclhode de traitemcot de la
scia tifJllc qui pilfail compter un nombre Fi,. 1,
)
co n ~ id crahlc de SlICCCS. CcUe méthodc n'a
on jotroduil un ler rougi don' la pointe
pas élé jusqu'ici dans des condilions qui
lu( pcrmi sse nt de se réparidrc ai sémeol,
tranchante s'adapte parlaitemenl cetle a
ouverture el cautérise le tissu de I'bé-
d'abord paree qu 'cllc n'est gucre mise en
praliqu.e que dan s les campagoes de la
Corsc. en sccond li eu, paree que ceux
qUll 'cmploient sont des personocs étran~
geres pour le reste A notre 8rt, prcs-
que loujours des marécbaux-fcrrants. Ces
lilres lI 'é lai cnt pas dI! nalure a la rendre
r~eommi\ndahle "UI yeuI des médeeins.
11 n'y R clone que I'évidence del rail. qui
.it ru pou8scr nrlfre conrr~re 1 rendre pu~
blic, dftlls I'intér(\t de la prntique J un trai ~
lement rurcment empirique I dont les
succ~s sont un sarcasme et un reproche
conlinuellcment jetés 1 la scieoce. Cene Fili. 2.
mcthode consiste en une cautérisatian faile lix jusqu'l ce qu'elle trou'fe un obslacle
.nce un fcr rauge sur un poiot de I'areille dans un poiot d'arrét situé t un demi~n..

22
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•,,~ • ..r.n."':\ .. f/Wa_.-¡,...., .. ..-...... e.... .. ".... ,._.,,'1w • ",,-, Ioq.......',.. - .... _ , . " . , .

En la página anterior se reproduce un artículo de una

revista médica del año 1850. donde se menciona la caute-
rización de la oreja como tratamiento contra la ciática; el
artículo aparecía acompañado por una interesante casufs-
tiea y a éste siguió una serie de otros artículos y testimonios,
publicados. en la misma revjsta y en otras publicaciones
científicas de la época (como por ejemplo la que se repro-
duce en esta página).
Debemos tener en cuenta que este procedimiento ya
era utilizado desde hacía siglos por los pueblos gitanos,
quienes aún mantienen esta práctica.

23
 :'Paf\tilt..t. ~"'~~~JI .. It" IIIIIL1:"'*ItL·m.&t.I._ .... *"
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~I\.I:"......1C..,.~U~ ......-:::-.,'>IJIlIo_t.."'c..,'t' .. ot"..

.
(-) ~ .. . S!

Esta página reproduce una de las primeras publicacio-

nes chinas sobre la auriculoterapia en tiempos modernos;
debemos notar que, de manera muy singular, el renovado
interés de los chinos por estos estudios se ha verificado en
tiempos recientes, luego de las investigaciones realizadas
por las escuelas occidentales.

24
más de en otros muchos países) se atribuye
a la práctica un valor terapéutico: el de agudizar
la vista y la capacidad intelectual. Aún hoy, en la
ciudad de Carmarthenshire, en Gales, se efec-
túa sistemáticamente a los niños una incisión
en el cartOago de la oreja para prevenir que no
sean «retardados» en cuerpo y espíritu.
En India existen algunas categorías de yo-
guis, a los que se les mutila las orejas de diferen-
tes maneras, ceremonialmente, con el fin de
hacerlos más receptivos a los «sonidos eté-
reos .. que ningún otro puede oír.

H. Boseh (145O?-1516), detalle de .EI iard ín de las

delicias». Esta imagen puede ser analizada de diferentes
maneras: se han hecho interpretaciones esotéricas, alquí·
micas, psicoanalíticas, etcétera. Desde el punto de vista de
la auriculoterapia se puede observar que la hoja de la
cuchilla corta las dos orejas, separando y escindiendo
la personalidad; la flecha atraviesa las orejas cerca del
punto de Shen Men (puerta de la espir~ualidad); el peque-
ño demonio emerge de la zona de las hormonas.

25
LAS SOMATOTOPIAS

Bases tradicio- Según la fisiología china, el corazón, los

nales orientales pulmones, los riñones, el hígado, el bazo y el
páncreas son órganos relacionados --cada uno
de ellos- con una víscera (intestino delgado,
intestino grueso, vejiga, estómago) y con uno
de los órganos de los sentidos. Es en estos
órganos de los sentidos donde se concentra la
especificidad fisiológica tanto del6rgano como
de la víscera correspondiente.
Esta concentración determina la presencia
de somatotopías particulares, pequeños ma-
La "proyección .. del pas que reproducen la anatomía humana en las
feto en el pabellón distintas zonas del cuerpo.
auricular, según un
antiguo texto chino . La oreja, en particular, reproduce en sí una
cartografía humana «ancestral" embrionaria.
Las somatotopías se encuentran en todas
las zonas de elevada sensibilidad: en la oreja,
en el ojo, en la nariz, en las manos yen los pies;
sobre estas zonas se proyectan «mapas': que
reproducen, de manera bastante clara, los
«homúnculos'~ que hallamos en las numerosas
proyecciones de la corteza cerebral, tanto en la
zona motora prerrolándica como en la zona
sensorial parietal ascendente.
Todo ello facilita el trabajo cuando se trata de
determinar el diagnóstico y la terapia estimulan-
te. Resulta suficiente con tener presente las
diversas somatotopías para guiarse en la selec-
ción de los puntos más oportunos.

27
Diagnóstico Sobre la base de esta teoría se han desarro-
y terapia llado, a través de los siglos, técnicas especiali-
zadas de diagnóstico del ojo (iridoscopía), de
terapia de la cara (rinoterapia), de masaje de la
mano (masaje pediátrico chino), del pie (masa-
je reflejo zonal) y además de la oreja (auriculo-
terapia o auriculopuntura) .
Las somatotopías funcionan como termina-
les que reciben una vasta gama de señales
externas (luz, calor, presión , electromagnetis-
mo) y de señales internas (estado funcional y de
malestar de órganos, vísceras , sistemas) .

Un ejemplo clásico de representación somatotópica

moderna (es decir, de representación de todo el cuerpo
organizada en proyección) es el homúnculus motor en la
circunvolución precentral de la corteza cerebraL
Los músculos están representados de manera propor-
cional a su importancia como sede de terminaciones ner-
viosas; ello explica la diferencia entre la superficie ocupada
por la mano y el pulgar, y la superficie ocupada por el
tronco.

28
 Es por todo ello que pueden utilizarse tanto
para profundizar el conocimiento del estado de
salud de un individuo en un determinado
momento (diagnóstico), como para decidir la
curación que debe llevarse a cabo, a fin de
aliviar el dolor (terapia).
La oreja en particular es una de las zonas de
más fácil acceso, puede palparse sin dolor, y
puede estimularse fácilmente en las pequeñísi-
mas zonas (puntos) de terapia.

En la medicina tradicional china también la cara y la

lengua re presentan y reflejan energéticamente los diversos
órganos y fun9iones del cuerpo humano.

29
 Tres proyecciones somatotópicas. ya conocidas en
Occidente, son las que se advierten en los ojos (iridología),
en el pie y en la mano (masaje zonal reflex6geno) .

30
 Un calco que forma parte de la colección de Cesare
Lombroso (1835-1909), el estudioso de antropología crimi-
nal que investigó y analizó las correlaciones entre la morfo-
logía de varias partes del cuerpo y el comportamiento
criminal.
ANATOMIA y FISIOLOGIA
DE LA OREJA

Según la medicina tradicional china la oreja

es el «orificio» de los riñones . Por tanto, se halla
sujeto a la energía de la alimentación y a la
energía ancestral situada en los riñones. De
hecho, los riñones son considerados la sede de
la «sabiduría ancestral», expresión de lo que co-
nocemos como la transmisión de los caracte-
res hereditarios.
Además, siempre según la tradición china, la
oreja oye los cinco sonidos y recibe los ecos
subyacentes de los cinco órganos. Ello signifi-
ca, expresado en un modo más prosaico, que el
pabellón auricular relaciona la compleja fisiolo-
gía de todos los órganos vitales .

El orificio Examinemos una oreja. Esta rodea una ca-

auditivo vidad, llamada orificio auditivo, que penetra en
profundidad hacia el interior del cráneo .

Las hemiconchas Este orificio está rodeado por una concha di-
vidida transversalmente en dos desde la raíz del
hélix (una prominencia cartilaginosa) ; estas
dos partes se denominan cymba conchae o
«concha cymba» (la superior) y cavum conchae
o «concha cavum» (la inferior) .
Lasconchas están, en parte, unidas al hueso
y son inervadas por el nervio vago , que a su vez
inerva las vísceras

El antehé/ix El antehélix cartilaginoso nace de dos raíces,

33
 .,.

Las dimensiones, las formas y las características de los

pabellones auriculares varían mucho de una persona a otra
(ya veces, incluso, en una misma persona). Es éste uno de
los aspectos que hace difícil la localización de los puntos de
la auriculoterapia, dado que los mapas están necesaria-
mente diseñados en base a la configuración media. P. F. M.
Nogier enumera seis formas muy diferentes: oreja de niño,
de persona anciana, oreja dismórfica de lóbulo grande,
oreja dismórfica de pabellón grande, oreja dismórfica de
relieve complicado. oreja armónica (de izquierda a derecha
y de arriba a abajo).

34
 superior e inferior, que delimitan la foseta trian-
gular o navicular. Es inervado por el trigémino,
un nervio de' grandes di~ensiones de la cara.

El hélix El hélix circunscribe todo el pabellón y termi-

na en una cola bajo la cual se halla el lóbulo.
El hélix está dividido por el tubérculo de
Darwin en dos regiones de diferente inervación
(en los animales el tubérculo corresponde a la
punta de la oreja).
La parte superior al tubérculo está inervada
por el trigémino, mientras que la parte inferior
por las ramas del plexo cervical superior.

La foseta Es una depresión entre las dos raíces del an-

triangular tehélix (en forma de tri ángulo o navecilla) .
(o fossa
triangularis)

El trago El trago cubre el orificio auricular. Tiene una

inervación muy compleja tanto en la parte exte-
rior como en la interior y está separado del
antitrago por medio de la fisura intertrágica.

El antitrago Es una eminencia triangular situada delante

de la cola . del hélix, en la prolongación del
antehélix.
Es una formación carnosa de la oreja.

El lóbulo El lóbulo consiste en un pliegue de la piel,

con un borde libre semicircular.

La fo sa scapha . Es una depresión en forma de surco longitu-

dinal descendente, situada entre el hélix y el
antehélix.

35
 HELlX SOBREDARWI NIANO

RAIZ SUPERIOR TUBERCULO DE DARWIN

DELANTEHELlX

RAIZ INFERIOR FOSETA

DEL ANTEHELlX TRIANGULAR

FOSASCAPHA
CODO DEL HELlXJ
---'-...1o--'\-- CONCHA CYMBA

RAMA ASCENDENTE ~
DELHELlX / , CONCHA CAVUM

~ ,.
RAIZ DEL HELlX

TUBERCULO SUPERTRAGICO
./'" '
. )
ii I
'.
!
POSICION
SUBDARWINIANA

MEATO AUDITIVO ...~ ~ ANTEHELlX

~SURCO
I
POSTERIOR

TRAGO -... / ANTITRAGO

FISURA INTERTRAGICA
-1--
.-1 LOBULO

Topografía anatómica de la oreja.

36
 NERVIO AURICULO-TEMPORAL

RAMA TEMPORAL

NERVIO
AURICULAR ~~~-'l~~Lc-."
POSTERIOR ~~M-ifzf- RMz DEL NERVIO FACIAL

NERVIO
OCCIPITAL-- 'W"
MENOR
- - - - NERVIO VAGO

NERVIO AURICULAR MAYOR

Mapa chino de los siete nervios principales que llegan

a la oreja.

INTESTINO
VESICULA --\--t--{ DELGADO
BILIAR

ESTÓMAGO
VEJIGA

Mapa chino que representa los meridianos que llegan a

la oreja. Según un antiguo texto «en la oreja se encuentran
todos los meridianos»; esta afirmación, que hoy no nos
parece demasiado precisa es, no obstante, muy sugestiva.

37
 Es!e retrato de V. van Gogh, realizado en 1889, lo
presenta después del conocido episodio del corte de la
oreja. En aquella época Van Gogh ya había presentado
signos de desequilibrio psíquico. El corte de laoreja puede
ser interpretado de diversas maneras (¿deseo de no volver
a oír? ¿Alejamiento de sí mismo de una parte indeseada de
su propia personalidad? ¿Autocastraci6n?)

38
LA SOMATOTOPIA AURICULAR

Según la intuición del médico francés P. F.

M. Nogier y de acuerdo con la tradición china,
es posible reconocer en la forma de la oreja la
figura de un feto con la cabeza hacia abajo.
Veamos cuáles son las principales relaciones
que se pueden establecer.

Las proyeccio- Las conchas son lugares de particular reso-

nes de las nancia víscero-orgánica. En la concha cavum
hemiconchas encontramos la proyección de las vísceras del
tórax' (corazón, pulmones, tráquea) y en la
concha cymba la proyección de las vísceras
abdominales (intestino, hígado, páncreas).

Las proyeccio- En la raíz del hélix, que separa las dos hemi-
nes del hélix conchas, se proyectan el diafragma, el plexo
solar y el estómago con todos los reflejos que
pueden interferir en la actividad digestiva. Estos
reflejos dividen la cavidad torácica, con fun-
ciones cardiocirculatoria y respiratoria, de las
funciones viscerales intestinales, hepato-pan-
creáticas , esplénicas (del bazo) y génito-urina-
rias, propias del abdomen.
La porción subdarwiniana del hélix es la sede
de la localización de la médula espinal.
El codo del hélix es sede de importantes
proyecciones relacionadas con los genitales
externos (pene y testículos en el hombre; los

39
 EI .. feto auricular.. según la escuela francesa de P. F. M.
Nogier.

40
El «feto auricular- según los estudios chinos.

41
 labios grandes y pequeños, el clítoris y la vulva
en la mujer).
La rama ascendente del hélix es sede de
proyecciones de la uretra, el recto y el perineo.

Las proyeccio- El antehélix es sede de las proyecciones de

nes del la columna vertebral. En particular, la porción
antehé/ix
cervical de la columna está proyectada detrás
de la concha cavum; la porción torácica o dor-
sal, en cambio, detrás de la concha cymba, y la
porción lumbosacral en la concha cymba, en la
raíz inferior del antehélix y debajo de la foseta
triangular. .
La raíz inferior del antehélix, que correspon-
de al borde inferior de la foseta triangular, es el
lugar de proyección de las zonas correspon-
dientes a la columna lumbosacral, al nervio
ciático, a los glúteos y a las articulaciones de la
cadera.
Algunos autores franceses sitúan a la altura
de la zona de proyección de la columna dorsal,
tanto en la cara interna del pabellón auricular
como en la cara externa, una zona de corres-
pondencia con los plexos del corazón.
La raíz superior del antehélix corresponde a
la proyección del miembro inferior.

La proyección La foseta triangular o navicular es el lugar de

de la foseta proyección de la pelvis o cavidad pélvica (según
triangular o el esquema de la fisiología china), el cual es
navicular sede de las funciones vitales más íntimas y de
las facultades reproductivas.

42
La proyección La fosascapha es sede de proyecciones del
de la fosa scapha miembro superior (brazo, antebrazo, mano y
sus articulaciones).

La proyección El ttlbérculo de Darwin regula las perturba-

del tubérculo ciones trofo-circulatorias de las piernas y los do-
de Darwin lores somáticos.

Las proyeccio- El trago en su cara interna actúa sobre las

nes del trago actividades de formación reticular (organiza-
ción neuronal del sistema nervioso central) .
Yen su cara externa actúa sobre la actividad del
sistema nervioso (hambre, sed ...)

Las proyeccio- El borde y la parte correspondiente de la

nes de la fisura fisura situada sobre la base de la concha cavum
intertrágica son sedes de acción sobre las hormonas, espe-
cialmente las prehipofisarias, y sobre las glán-
dulas de secreción interna.

Las proyeccio- El antitrago es sede de las actividades neuro-

nes del hormonales (allf se encuentra la proyección de
antitrago muchas glándulas endocrinas).

Las proyeccio- El lóbulo es la sede del macizo facial y de las

nes del lóbulo formaciones del sistema nervioso central (en-
céfalo, tronco cerebral) y, además, está relacio-
nado con el "psiquismo".

43
INTERPRETACION DE LA
SOMATOTOPIA AURICULAR

Según algunos autores, entre los que se

cuenta P. F. M. Nogier, la somatotopía auricular
debería interpretarse situándola en correspon-
dencia con las tres hojas embrionales (ectoder-
mo, mesodermo, endodermo). En cambio,
para otros (escuela reflexológica) la somatoto-
pía se explica a través de la inervación de la
oreja; por tanto, la acción terapéutica se ex-
plicaría basándose en un mecanismo de esti-
mulación refleja, mediata respecto al sistema
nervioso. Finalmente, según la teoría tradicio-
nal china, los datos de la auriculoterapia deben
ser interpretados basándose en la teoría de la
circulación energética en los meridianos.
Nosotros consideramos que tanto la teoría
embrionaria como los datos de la neurofisiolo-
gía coinciden y se hallan en armonía con la
teoría energética propia de la medicina tradicio-
nal china.

La leorra El feto deriva de tres hojas embrionarias

embriológica primitivas: ectodermo, mesodermo, endoder-
de Nogier mo. Por tanto, podemos subdividir el pabellón
auricular considerando las diversas formacio-
nes anatómicas de diversa derivación del feto
proyectado en la oreja: las funciones de de-
rivación ectodérmica, mesodérmica, endo-
dérmica.
Del mesodermo derivan el esqueleto, la
45
musculatura, el tejido conectivo, los aparatos
circulatorio y urogenital. Tales derivaciones se
proyectan en el hélix supradarwiniano, en la raíz
y el codo del hélix, en el antehélix y en las
tosetas triangular y scapha.
Del endodermo derivan las glándulas del
aparato digestivo, los epitelios que revisten
tanto este aparato como las vías respiratorias.
Estas derivaciones se proyectan en la con-
cha cymba y en la concha cavum.
Del ectodermo derivan la epidermis y el teji-
do nervioso. Estas derivaciones se proyectan
en el trago, en el antitrago, en el lóbulo y en el
hélix subdarwiniano.

o mC$Odermol

• o'!f1(100'·rm.

~ OCl odermtl

Proyección de las tres hojas embrionales en .el pabellón

auricular, Según P. F. M . Nogier l ~somatotoD ía auricular
debe interpretarse en relación con estas tres diversas for-
maciones anatómicas de la primera fase de la vida.
La teoria Las zonas de proyección ectodérmica están
energética inervadas por las ramas del plexo cervical. Es-
neurol6gica tas son «energizadas» por el meridiano Gober-
nador (du mal) y tienen correspondencia con
los puntos shu dorsales del meridiano de la
Vejiga (zu taí yang). Estas zonas tienen reso-
nancia prevalentemente yang.
Las zonas de proyección mesodérmica es-
tán inervadas por el trigémino y reciben la ener-
gía del yang míng (par de meridianos del estó-
mago y del colon) que «abren el interior» y
colaboran en la «nutrición alimenticia y psico-
espiritual» del hombre.
'Las zonas de proyección endodérmica es-
tán inervadas por el nervio vago (pneumogástri-
col yson «energizadas» porel renmaí (meridia-
no de concepción) que alimenta los puntos mu
anteriores, llamados también «puntos heraldo»
o «puntos alarma». Estas zonas tienen resonan-
cia yin.
LOS MAPAS DE LA OREJA:
LA ESCUELA AURICULOGICA
CHINA y LA ESCUELA
AURICULOGICA EUROPEA

El enfoque de las escuelas de auriculogía

china y europea difieren en algunos aspectos.
Estas diferencias han sido puestas de relieve
por algunos autores occidentales. que han
subrayado el contenido «reflexológico» respec-
to al contenido ..tradicionalista» de la medicina
auriculógica oriental.
Una confrontación objetiva pone en eviden-
cia que. si bien tienen nombres diversos, los
puntos que resultan más eficaces coinciden en
un 90% o aún más.
Un estudio clínico estadístico efectuado en
la Universidad de Los Angeles (California) ha
demostrado que las diferencias entre los re-
conocimientos chinos y europeos dependen
de los métodos empleados en la localización de
los puntos activos en los pacientes.
Usando métodos diversos. como distintas
frecuencias electrónicas en los aparatos revela-
dores de los puntos epidérmicos. o usando
estímulos luminosos, láseres o palpadores, se
llega a la localización de puntos que no siempre
se superponen entre ellos de modo exacto.
A todo esto es necesario agregar que la
compleja estructura anatómica tridimensional
del pabellón auricular no ayuda al trazado de
los mapas anatómicos topográficos planos y
exactos.

49

Junto a los mapas europeos y chinos existen

otros mapas auriculares, prácticamente desco-
nocidos en Europa, por ejemplo el mapa usado
por el doctor M. Wexu y el mapa de la medicina
ayurvédica (Suchi-Veda. 3000 a. C. aproxima-
damente) transmitido por el doctor Chandra-
shekhar.
 \
\

/
.' /

.'
Mapa auricular indio.
1) Vitalidad; 2) Asma bronquial; 3) Alergia, Dermatolo-
gía, Apendicitis; 4) Región del ano y del recto.

51
 Mapa auricular según P. F. M. Nogier.

52
 ./

(
\
\.
\

I
, /
./
, .'~

,1

Mapa auricular chino.

53
 \

\
\
\

I ,

/ /
I

Mapa del doctor Wexu.

1) Pan point (zona de autoidentificaci6n); 2) Control
hipotalámico; 3) Energía inmunocefensiva orgánica; 4)
Vigilancia psíquica; 5) Agresividad; 6) Dolores en las extre-
midades; 7) Energía cósmica (influencia del ambiente
sobre el hombre).
LA LOCALlZACION DE LOS
PUNTOS AURICULARES

la acción de la Los mapas de auriculogía presentan puntos

estimulación que llevan nombres y numeraciones diferentes,
según los autores y las escuelas que los utilizan.
Estos puntos, en realidad, son pequeñas
zonas que, estimuladas, pueden producir una
doble acción, que puede ser local o general.

Acción local La acción local tiene efecto sobre una vísce-

ra, un órgano, una zona del organismo y está en
correspondencia con la localización anatomo-
topográfica de la imagen fetal invertida.

Acción general La acción general incide menos claramente

sobre las zonas anatómicas, pero tiene un efec-
to generalizado sobre diversas partes o funcio-
nes del organismo.
Resulta interesante notar que esta correla-
ción de élcciones en cadena está en función de
los datos de la medicina tradicional china, es
• dec.ir, de la dialéctica Yin-Yang, de la ley de los
Cinco Elementos y Movimientos, y de la teoría
de los meridianos.

la identificación Los puntos auriculares han sido identifica-

de los puntos dos por medio del examen de infinidad de
auriculares pacientes en los ambulatorios y en los hospita-
les chinos y occidentales. El amplio número de
sujetos examinados ha llevado a la elaboración
de mapas estadísticos fiables. Podemos subdi-

55
 vidir los experimentos según las características
de los puntos en cuatro grupos.

Los puntos Un tipo de experimento preveía el uso de

sensibles y diversos instrumentos (palpaci6n instrumental
dolorosos o manual, estimulaci6n con terminales de apa-
ratos electr6nicos a alta y baja frecuencia,
moxibusti6n, láser de baja potencia, irradiacio-
nes luminosas con filtros coloreados, inducci6n
electromagnética) aptos para despertar el dolor
y la sensibilidad de determinados grupos de
puntos auriculares, correspondientes a los sín-
tomas de enfermedades presentes en el pa-
ciente.

La estimulación Un segundo grupo de experimentos consis-

de los puntos tía en curar las diferentes enfermedades, esti-
terapéuticos mulando los puntos auriculares sensibles o
dolorosos hallados precedentemente. La esti-
mulación se llevó a cabo mediante masajes
manuales, instrumentales y electrónicos; con la
acupuntura, la moxibustión, el láser, los apara-
tos electr6nicos, las ondas electromagnéticas
o luminosas.
Del estudio estadístico de los individuos
examinados se han obtenido los métodos de
terapia y la localización de los puntos auricula-
res útiles para diferentes enfermedades.

Los puntos Un tercer grupo de experimentos ha indaga-

con función do la función anestésica de la auriculoterapia, o
anestésIca sea la posibilidad de evitar el dolor durante una
intervención quirúrgica, actuando en la oreja.
Inicialmente la finalidad era la de aliviar los
dolores posoperatorios, pero el éxito obtenido
ha llevado a la extensión del método, practica-

56
 do también durante las operaciones quirúrgi-
cas mismas. A partir de 1959, en China se
llevaron a cabo cada vez un mayor número de
intervenciones en el cráneo, en el cuello , en el
corazón, en el tórax o en el abdomen, y también
en los casos de parto sin dolor, utilizando la
auriculoterapia con fines anestésicos.
De este modo, el proceso posoperatorio se
hace más rápido; la pronta curación de las
heridas y la ausencia de dolor facilitan la recu-
peración de las condiciones generales, favore-
cida también por la falta de disturbios metabó-
licos provocados por los fármacos.

Los puntos Un cuarto grupo de investigaciones está aún

de valor en vías de desarrollo. Partiendo del presupues-
psicoterapéutico to que los puntos locales expresan los síntomas
y los puntos generales expresan todos los
malestares somáticos y psíquicos del paciente
(Nogier escribe sobre esto: .. Los puntos soma-
totópicos o locales expresan la enfermedad, los
puntos maestros o generales representan el
terreno constitucional»), algunos psiquiatras
han utilizado los puntos generales durante las
entrevistas con sus pacientes. De hecho, la
estimulación de los puntos se ha revelado de
suma utilidad para facilitar y abreviar notable-
mente las indagaciones psicológicas y las psi-
coterapias.

EL MAPA AURICULAR
PUNTO POR PUNTO

Los puntos auriculares son, en realidad, pequeñas

zonas cutáneas del pabellón auricular, que tienen la
facultad tanto de hacerse hiperestésicas (hipersensi-
bies) o dolorosas, en caso de enfermedad, como de
servir positivamente a calmar los sfntomas, después
de ser estimuladas adecuadamente.
MAPA GENERAL DE LOS
PUNTOS AURICULARES

..
e

M L H G F E D e B A

El asterisco (*) indica los puntos ocultos, es decir, que

no pueden verse inmediatamente pues se hallan dentro de
un pliegue.

61
 Cada punto (o «zónula») está indicado con
un número y un nombre, que indica las principa-
les acciones fisiológicas .

1 Agresividad
¡~
Glúteos
2 Maxilar superior Lumbago
3 Maxilar inferior 48 Energia mental
4 Lengua-boca 49 [ng[e
5 Maxilar-base craneana 50 CoxofemoraJ
6 Mandíbula 51 Utero-próstata
Prefrontal 52 Hipotensivo
8
9 g~o interno 53 Asma
54 Dinamismo
10 Regi6n de los pómulos 55 Dedos-mano
11 Suprarrenales 56 Clav{cula
12 Purificación 57 Articulación escápula-
13 Faringe humeral
14 Fosas nasales " (56) Hombro
15 Sed Codo
16 Hambre ~¡ Muñeca
17 Ofdo externo 61 Depresión
18 Yu . cardiaco 62 Alergia
19 Hormonas 63 Oarwin
20 Gonadotropina 64 Genitales externos
21 Ojo y ojo 1 65 Uretra
22 Cerebro 66 Recto
23 Tálamo 67 Actividad sexual
24 Hipófisis 6B Diafragma
25 Occipital 69 Punto cero
26 Asma 70 Boca
27 Gónadas 1 Esófago

!~
Frontal 2 Est6mago
H[potá[amo 73 Duodeno
Temporal 4 Intestino delgado
31 Vértebras cervicales- 75 Apéndice
tiroides 6 Co[on
(32 Coxis 7 Vegga
33 Vértebras dorsales 8 Pr stata
34 Vértebras lumbares 9 Uréter
35 Cuello 80 Rir"lones
36 Plexo cardraco 81 PAncreas
37 Senos (mamarias) 82 Hígado
3B Metabolismo B3 Bazo
39 Dedos de los pies B4 Ascitis
talón
metatarso as Corazón
40)
41 Canilla
as Pulmón
87 Trá~uea~ronquioS
42 Rodilla 6B Trip ecalentador
43 Cadera 89 Yaman
44 Simpático 90 Plexo cardfaco
45 Ciática (proyección posterior)
M L H G F E D e B A

Denominación de las zonas anatómicas y cuadrícu-

la utilizada en las páginas siguientes para la localización
de los puntos auriculares A) lóbulo; B) hélix; e) antehélix;
D) foseta travicular o triangular; E) fosa scapha; F) trago;
G) concha cymba; H) concha cavum; 1) ant~rago.

63
ACCION FISIOLOGICA DE
LOS PUNTOS AURICULARES

Podemos imaginar que dividimos la oreja

en nueve zonas anatómicas. Esta subdivisión
comprende: el lóbulo, el hélix, el antehélix, la
foseta triangular o navicular, la fosa scapha, el
trago,laconcha cymba , la concha cavum, el an-
titrago. Cada una de estas zonas presenta sus
propios puntos auriculares.
Por comodidad, hemos dibujado el esque-
ma de la oreja dentro de una cuadrícula, cuyas
coordenadas ayudan notablemente a identifi-
car los puntos.

Los puntos El lóbulo nace debajo del pabellón auricular

auriculares y consiste en un pliegue de la piel, con un borde
del16bulo libre semicircular.
(1, i, h, 9 - 11, 10,9)
La anatomía comparada nos enseña que la
presencia de un amplio lóbulo demuestra un
alto nivel de encefalización, o sea un gran de-
sarrollo del cerebro. De hecho, si imaginamos
el dibujo de un feto humano con la cabeza hacia
abajo, inscripto en los contornos de una oreja,
el lóbulo corresponderá a la zona de proyec-
ción de la cabeza, de la cara, de los órganos
cefálicos del sentido y del sistema nervioso
central.
La cuadrícula divide el lóbulo en aproxima-
damente seis partes, donde se pueden localizar
los siguientes puntos.

65
 (8) Ojo. Se halla en las coordenadas h-1 O.
Este punto representa la vista (está indicado
en las perturbaciones visuales, en las inflama-
ciones, en el glaucoma, etcétera). Además , es
un punto importante para los problemas gene-
rales inherentes a la sensorialidad (sensacio-
nes generales evocadas por estímulos exter-
nos) ya la afectividad. También está indicado
en las cefaleas, en los vértigos, en las hemicra-
nias, en los desequilibrios neurovegetativos y
en ciertas disfunciones sexuales.

(7) Prefrontal. Se halla en las coordenadas

i-10.
Corresponde a la proyección de la zona
frontal del feto delineado en la oreja, a la de las
zonas cerebrales corticales prefrontales, sede
de la integración moral y espiritual. Se utiliza en
las perturbaciones psicoespirituales , en las
cefaleas frontales, en las perturbaciones olfati-
vas yen los problemas inherentes a los órganos
genitales.

(10) Región de los pómulos. Se halla en las

coordenadas h, 9-10.
Zona de proyección de los senos maxilares.
Se utiliza en las sinusitis, en las perturbaciones
del oído (percepción de zumbidos o silbidos) ,
en las otitis y en caso de dolores en la cara.

(9) Oído interno. Se halla en las coordenadas

g-10.
Corresponde a la función auditiva y del equi-
librio. Se utiliza en las otitis, las perturbaciones
del equilibrio, la sordera y los silbidos auricu-
lares.
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M L 1 H G F E D e B A

Los puntos auriculares del lóbulo .

•
 Debajo del punto (8) Ojo se encuentra el
borde inferior del lóbulo, sede de los deseos
imperativos (alcohol, tabaco, sexo, droga,
apetitos desenfrenados); el margen interno del
lóbulo, situado hacia la región mastoidea, co-
rresponde al cerebelo.

Por encima del punto (8) Ojo se encuentran,

en cambio, los puntos siguientes.

(1) Agresividad . Se halla en las coordenadas

1-9.
Está situado en la parte ante ro-superior del
lóbulo, debajo de la fisura intertrágica.
Actúa sobre el comportamiento airado y
agresivo, así como sobre las turbaciones y so-
bre los celos inmotivados.
(2) Zona maxilar superior. Se halla en las
coordenadas h-9.
Tiene acción local.

(3) Zona maxilar inferior. Se halla en las

coordenadas h-9.
Tiene acción local.

(4) Boca-lengua. Se halla en las coordena-

das h-9.
Está indicado en las glositis y en las estoma-
titis.

(5) Maxilar base craneana. Se halla en las

coordenadas g-9.
Tiene una acción difusa en la región máxilo-
facial, en la base craneana, con incidencia pi u-
rimetabólica (involucra diversas actividades del
sistema nervioso central en los centros que
controlan el metabolismo).
 (6) Mandíbula. Se halla en las coordenadas
g-9.
Está indicado en los dolores temporo-man-
. dibulares, en las disfunciones salivales y en el
insomnio.

Los puntos El antitrago es la región supralobular con

auriculares del forma casi triangular.
antitrago
(1, g, h, i - 8, 9)
(21) Y (21 ') Ojo. Se hallan en las coordena-
das i-8 y i-9.
Limitan por debajo con la fisura intertrágica y
responden a las mismas indicaciones del punto
(8) Ojo.

(29) Hipotálamo. Se halla en las coordena-

das h-8.
También se denomina «punto derma» o
«subcortical». Se encuentra en el borde externo
de la parte vertical posterior de la fisura intertrá-
gica. Actúa regulando algunas funciones cere-
brales conexas con dolores, inflamaciones,
insomnio, acciones antishock.

(24) Hipófisis. Se halla en las coordenadas

h-8. Está situado exactamente en el punto más
alto de la pirámide que forma el antitrago.
Es un regulador neuroendocrino, también
indicado en las enfermedades cutáneas y en el
asma.

(26) Asma. Se halla en las coordenadas h,

g-8.
Está situado exactamente sobre el borde,
entre los puntos (22) Cerebro y (24) Hipófisis.

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Los puntos auriculares del antitrago.

 Controla los centros bulbares de la respira-
ción y es de suma utilidad en la curación de
todos los síndromes disneicos (dificultad en la
respiración) .

(22) Cerebro. Se halla en las coordenadas

g-8.
Es una zónula entre el antitrago, la concha y
el antehélix, que se extiende hacia el punto (24)
Hipófisis y hacia la base de la concha cavum.
Corresponde al tronco cerebral y a la médula
espinal.
Comprende las diversas funciones hipotalá-
micas (el hipotálamo es una formación nerviosa
situada en el cerebro). Se utiliza en caso de
diabetes insípida, metrorragias (hemorragias
uterinas), menopausia, disneas, enuresis, in-
somnio.

(28) Frontal. Se halla en las coordenadas

h-9. Está algo debajo y detrás del punto (29)
Hipotálamo.
Tiene acción sobre el aparato genital, en el
comportamiento y en las cefaleas frontales.

Aproximadamente, en el centro del antitrago

están situados tres puntos que forman un trián-
gulo.

(27) Gónadas. Se halla en las coordenadas

h·9. Situado debajo y detrás de (24) Hipófisis.
Tiene acción sobre los ojos, los genitales, en
la vista y en el estado general del organismo.

(30) Temporal. Se halla en las coordenadas

g-8. Está situado debajo del (27) Gónadas.

71
 Tiene acción sobre el sistema nervioso cen-
tral.

(25) _Occipital. Se halla en las coordenadas

g-8_ Está situado debajo y detrás del punto (26)
Asma.
Está indicado en los síndromes talámicos (el
tálamo es un centro de recepción y distribución
de los impulsos nerviosos), en las cerebropa-
tías , en las perturbaciones ce rebelares (de l
cerebelo), en lasalteraciones del psiquismo. Es
importante en todos los estados de rigidez y en
las contracturas. También actúa en caso de
enfermedades cutáneas, de cinetosis (mareo
en viajes por mar) y de presbicia (se ve bien de
lejos y mal de cerca)_

Los puntos La concha cavum es la sede de correspon-

auriculares de la dencia con las vísceras torácicas _ Tiene una
concha cavum forma aproximadamente triangular. En ella se
(9 , h, i - 6, 7, 8) proyectan los pulmones y el corazón . En medi-
cina china estos órganos, junto con los gruesos
vasos mediastínicos (vasos que se sitúan en la
parte media de la cavidad torácica), las corona-
rias y la inervación especial de la región toráci-
ca, reciben en conjunto el nombre de «Maestro
del Corazón ...

(85) Corazón. Situado en el centro de la

concha, en el punto más bajo, se halla en las
coordenadas h-7.
Mantiene la regularidad del latido cardíaco.
Controla la mente, la «espiritualidad .. , la sereni-
dad. Por todo ello calma la ansiedad. Es un
punto útil en la curación de las perturbaciones

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Los puntos auricuiares de la concha cavum.

cardiocirculatorias·como, por ejemplo, las pal-
pitaciones, disneas provocadas por esfuerzos,
dolores precordiales. También está indicado en
las pesadillas, en casos de insomnio, en esta-
dos ansiosos, en las perturbaciones del psi-
quismo. Su «orificio» es la lengua, por lo cual el
punto del corazón es útil en todas las estomati-
tis, en las glositis (inflamación de la lengua) y en
las gengivitis.

(86) Pulmones. Se halla en las coordenadas

h, i-7 .
Es una zona peqyeña que se extiende hacia
la cavidad auditiva externa. (86) Pulmones y
(87) Bronquios y tráquea controlan la respira-
ción, los líquidos orgánicos, la termorregula-
ción. Se indican en todas las afecciones respi-
ratorias (desde la tos a las bronquitis, a las
pulmonías) , en las enfermedades de la piel, en
la calvicie , en el vitíligo (manchas en la piel),
en las verrugas , etcétera.

Sobre la base de la concha cavum , en

la fisura intertrágica, hallamos los siguientes
puntos.

(19) Hormonas. Se halla en las coordenadas

i-8. Situado en la base de la fisura intertrágica
entre el trago y el antitrago.
Corresponde al punto de contml diencéfalo-
hipotalámico sobre todo las funciones endocri-
nas del organismo (actividad de las glándulas
especializadas en el flujo de hormonas que
entran en la corriente sanguínea). Se recomien·
da en muchísimas perturbaciones: en todas las
endocrinopatías, en las alergias, en las enfer-
 medades de la piel, en las enfermedades geni-
tourinarias, en las perturbaciones de la sexuali-
dad, etcétera.

(20) Gonadotropinas. Se halla poco des-

pués del punto (22) Cerebro.
Tiene funciones gonadotrópicas (transmite
energía a las gónadas, las glándulas sexuales);
está particularmente indicado en las perturba-
ciones del ciclo menstrual y en las amenorreas
(falta patológica de menstruación).

(23) Tálamo. Situado en la base de la con-

cha. Partiendo del punto (22) Cerebro, este
punto se halla un poco más adelante y hacia el
interior.
Está indicado en la excitación que provoca el
insomnio, en los dolores dentales, en las pertur-
baciones de la diuresis (excreción de orina).

Los puntos La concha cymba está dividida de la concha

auriculares de la cavum por la raíz del hélix, que surge del centro
concha cymba de la oreja.
(9, h, i - 4, 5, 6)
(72) Estómago. Se halla en las coordenadas
h-6. Se relaciona, en su fisiología, con los pun-
tos (81) Páncreas y Vesícula biliar y (83) Bazo.
Rige todos los procesos digestivos, no sólo
de los alimentos materiales (comida), sino
también la de los alimentos espirituales (educa-
ción, ideas nuevas, experiencias emotivas).
Está indicado en todas las afecciones del
.aparato digestivo (gastritis, úlceras gastroduo-
denales, trastornos del apetito, náuseas, vómi-
tos, dispepsias, en resumen todas las irregula-

75
ridades digestivas) y en los trastornos nervio-
sos (como insomnio, neurosis, epilepsia, histe-
ria, hemicranias, mareos en viajes por mar o en
coche).
Siendo responsable del trotismo general
(nutrición) en tanto que distribuye la energía
rong gi, o sea la energía trótica y nutritiva, es útil
en los trastornos tróticos (adelgazamiento,
desnutrición) que provocan entre otras cosas
un envejecimiento de la piel (sequedad, arruo
gas).

(83) Bazo. Se l;Ialla en las coordenadas g·6.

Se encuentra detrás del punto (72) Estómago.
Favorece el control de la digestión, distribu-
ye sangre y energía (acción trótica); está indica-
do en los síndromes digestivos, gastrointesti-
nales, en las miodistrofias (distrofias muscula-
res), en las úlceras y en las aftas de la boca, en
los prolapsos (del recto, del útero, de los órga-
nos internos). Es útil en el control de las dia-
rreas. Se usa como coadyuvante en el acné o
eczema de la piel, en las esclerodermias (indu-
ración de la piel) y para diagnosticar una cirrosis
hepática.
•
Tiene acción sobre la inmunidad .

(83) Hígado. Se halla en las coordenadas

g-6, situado sobre el punto (83) Bazo.
Está indicado en todas las afecciones hepa-
tobiliares (hepatitis, colecistitis, ictericia).
Es eficaz en la digestión, depura la sangre,
activa la inmunidad, controla los músculos.
Facilita la recuperación y la reeducación en
caso de parálisis y ayuda a calmar las crisis
convulsivas.
Tiene acción poliendocrina e influye sobre el
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Los puntos auriculares de la concha cymba .

•
aparato genital (pene, testículos, vulva, vagina,
útero, ovarios) . Además, se utiliza en las afec-
ciones oculares, junto con los puntos (8) Ojo y
(24) Hipófisis. De hecho, los ojos representan,
según la compleja fisiología china, el orificio del
hígado.

Si desde el punto (83) Bazo trazamos una

línea que divida en dos, en sentido longitudinal,
la concha cymba, tendremos, en la parte supe-
rior, los siguientes puntos:

(78) Próstata. Se halla en las coordenadas

i-5. ,
Indicado en las disfunciones urinarias cau-
sadas por el prostatismo, es decir, esencial-
mente relacionadas con la hipertrofia de la
próstata.

(77) Vejiga. Se halla en las coordenadas i-5.

Situado detrás del punto (78) Próstata.
Está relacionado con los riñones, almacena
los líquidos y se indica en todos los trastornos
urinarios, como por ejemplo la enuresis infantil
(emisión involuntaria de orina), en los dolores
osteoartríticos de la columna vertebral, en las
ciáticas, en el insomnio (el meridiano corres-
pondiente también tiene un recorrido intracere-
bral) .

(79) Uréter. Se halla en las coordenadas

i, h-5.
Se indica en las disfunciones urinarias y en
los cólicos. /

(80) Riñones. Se halla en las coordenadas

h-5.
Rige el líquido seminal (sexualidad, potencia
genital y fecundidad) , la columna lumbar, el