Reseña sobre “Teoría de los sistemas” y “Cultura organizacional”

En la actualidad existen una gran y variada cantidad de organizaciones. Los científicos

sociales buscando comprender estas han optado por distintos enfoques que evalúan diferentes

aspectos de este tipo de sistemas. Una de las teorías usadas para este estudio es la “Teoría de

los sistemas” que según Katz Kahn (1987) trata de ver a la organización en cuanto a la

interdependencia que mantiene con su entorno, es decir, se empiezan a estudiar como sistemas

abiertos. Esto se aleja de las concepciones anteriores que consideraban a la organización como

un sistema inalterable al cual eran aplicables leyes prestablecidas como las de la física, ya que

cada una de estas estructuras tiene diferencias relevantes. Sin embargo, estas leyes siguen

siendo aplicables debido a que todos los sistemas abiertos tienen ciertas características

similares como la transformación de energía tomada del exterior con la finalidad de proveer un

producto.

Un claro ejemplo de lo anterior es la clara diferencia entre la Organización Mundial de

la Salud(OMS) y el Concejo Internacional de la Danza (CID). Mientras la OMS busca la

implementación de políticas de intervención en salud a nivel mundial el CID en su lugar busca

proteger y fomentar todos los tipos de danza existentes. A pesar de no estar en pro del mismo

objetivo ambas pueden ser consideradas sistemas abiertos, pues toman inversiones,

información y distintos tipos de energía externos para transformarla obteniendo como resultado

el cumplimiento de sus objetivos.

 Uno de los factores que puede llegar a ser de gran influencia en una organización es la

cultura del lugar donde se desarrolla. Entendiendo cultura como la forma de comportamiento

que se da en una sociedad. Este comportamiento se puede impregnar en los trabajadores ya que

es el que define su concepción sobre el trabajo y la manera en que desarrollan sus relaciones

interpersonales con sus colegas. De igual manera, el tipo de productos y objetivos que se dan

en una organización deben tener en cuenta las necesidades presentes en los potenciales

consumidores. Las cuales pueden variar dependiendo de la cultura.

Schein (como se cita en Zalpa, 2002), establece tres niveles que facilitan la forma en

que diferentes niveles del concepto de cultura pueden ser aplicados en las organizaciones. En

primer lugar, se encuentran los artefactos, que reúne comportamientos y estructuras

organizacionales visibles. Posteriormente se encuentran los valores declarados, que son

aquellos que nos permiten predecir el comportamiento humano bajo ciertas condiciones sin

que este signifique que este sea el comportamiento real que se dé. Y por último, se encuentran

los presupuestos básicos son los que conglomeran la forma en la que las personas perciben la

realidad.

Los anteriores niveles definen claramente, por ejemplo, la manera en que se desarrolla

una empresa de artículos electrónicos. Si las estructuras organizacionales(artefactos) no son lo

suficientemente estables el rendimiento de la empresa decaerá debido a una falta de claridad

en los procedimientos que permiten la producción. Al darse esto se puede predecir que los

trabajadores van a estar confundidos y emplearan mucho más tiempo del necesario para realizar
sus funciones (valores declarados). La percepción sobre el trabajo puede cambiar

drásticamente, debido a los problemas que causan las circunstancias anteriores los empleados

podrían llegar a realizar sus funciones de manera errónea o evadiendo responsabilidades.

Sin embargo, el hecho de que las organizaciones sean sistemas abiertos y se vean

impregnadas por la cultura trae ciertas consecuencias. La cultura se da por un largo proceso

histórico en el cual ciertos comportamientos y percepciones se vuelve repetitivos. A pesar de

llegar a ser flexible y enfrentarse a transmutaciones de valores, estos cambios no son fáciles de

efectuar por lo que aumentar el rendimiento de una organización intentando cambiar la

mentalidad de sus trabajadores se convierte en un trabajo dificultoso porque esta viene dada

por la cultura. Pero esto no significa que sea imposible. Si se logra rescatar los valores de

diferentes culturales e implementarlos cambiando la mentalidad del cuerpo que opera dentro

de la organización se puede llegar a mejorar diferentes características de funcionamiento. Por

ello no se debe pensar que la cultura tiende a ser estática y por esta razón es correcto mantenerla

de esta manera. Siempre hay espacio para la mejora y el progreso sin importar la velocidad en

que este se dé.

Bibliografía

Katz, D., & Kahn, R. (1987). Organizaciones y el concepto de sistemas. En: J. M.

Shafritz & J. S. Ott (Eds.), Classics in organization theory. Chicago: Dorsey Press, pp. 250-

262.
Schein, E. (1987). Definición de la cultura de organización. En: Cultura

organizacional y liderazgo. San Francisco: Jossey Bass