Escuela Aspectos La validez del derecho deriva de la esencia del hombre. Por tanto, el derecho debe ser consustancial a la vida humana, y reconocer los criterios éticos y virtuosos que deben coincidir con la naturaleza del hombre. La corriente del iusnaturalismo se divide en dos grandes grupos: el teológico y el laico o racional. La diferencia Naturalismo Jurídico entre estas subdivisiones estriba en que la primera propone que la validez del derecho natural o justo, se origina en la naturaleza del hombre como "hijo de Dios", y la segunda, sustituye la idea del Creador, por el carácter racional del ser humano; esto es, que el derecho es válido porque resulta de la naturaleza del hombre como "ser racional". El formalismo jurídico llama a la interpretación rígida del texto a aplicar y no da ninguna alternativa a aplicar en caso de oscuridad o vaguedad de la ley. El formalismo jurídico consiste pues en la aplicación de reglas preexistentes, fácilmente determinables por el buen juez, a través del Formalismo Jurídico examen de la letra de la constitución, las leyes y los precedentes establecidos. El formalismo critica el poder discrecional del Juez en la aplicación de las normas y por el contrario plantea la visión del Juez como un aplicador mecánico del derecho.
Esta doctrina surge en los años 30 del siglo XX,
constituye una especie de positivismo, pero orientado en el derecho que es, no en el que debe ser. Los realistas distinguieron el derecho de los libros y el derecho de la acción, para ellos lo importante es lo que los jueces hacen y no lo que dicen. Dentro de sus principales precursores podemos destacar a Kar Llewellyn, para este jurista el derecho era la pura decisión emanada no sólo de Realismo Jurídico. los jueces, sino también de todas aquellas personas que de una u otra forma inciden en las tomas de decisiones o solución de conflictos jurídicos. Este filósofo sostenía que las personas no debían preocuparse por tener un sistema de normas coherentes, sino que deben preocuparse del estudio de las controversias y cómo las resuelven los funcionarios a su cargo. Otro partidario de la teoría realista lo fue Jerome Frank, este filósofo sostenía que el derecho era esencialmente incierto, indefinido y sujeto a cambios incalculables, en virtud de que no hay forma de alcanzar la exactitud con que sueña el público, los abogados y los jueces.
Es la escuela del pensamiento jurídico que
establece la necesidad de estudiar el derecho separado de cualquier otra disciplina, es decir sin vinculación con los fenómenos sociales. El positivismo supone que el derecho es lo que se ha promulgado sin tener en cuenta su contenido en concreto respecto a la bondad o maldad moral. Esta escuela ve el derecho como puro Positivismo Jurídico mandato y divorciado de la moral y la ética. El positivismo planteaba que el objeto de estudio de las ciencias jurídicas debía ser el Derecho, pero entendiendo éste sólo como un sistema de normas emanadas de la autoridad con calidad para dictarla y nada más éstas debían ser consideradas como derecho.
El positivismo metodológico encuentra su
organización con John Austin, jurisconsulto que se encargó de organizar de manera metodológica las distintas teorías existentes sobre el positivismo; este filósofo consideró que el derecho positivo debía ser estudiado fuera Positivo Metodológico. de otro tipo de derecho, como lo son los usos sociales (costumbres) y entendía, al igual que los demás positivistas, que el derecho como norma reguladora emanada de la autoridad con competencia para realizarla, era el único derecho. Los jurisconsultos que propinaban esta doctrina consideraban la verdad como algo inalcanzable y el conocimiento como algo imposible. El Escepticismo Consideraban las ideas como fantasías producidas por la sensibilidad del hombre, por lo que entendían éstas podían variar de un hombre a otro. El realismo axiológico se ocupó de la valorización del derecho, de buscar una medida para procesar el buen derecho, el que debe ser. Los realistas norteamericanos contribuyeron a la descripción de lo que verdaderamente ocurre en Axiológico el curso del proceso decisorio, denunciaron con vigor muchos de los mitos que nublan la versión del proceso, combatieron el entendimiento del derecho como: “simple conjunto de normas”. Le dieron relevancia a la indagación axiológica. El neopositivismo no sólo admite únicamente la experiencia como fuente de conocimiento, sino que sostiene que las proposiciones científicas Neopositivismo solamente son válidas cuando poseen verificabilidad, es decir, cuando se pueden comprobar o verificar experimentalmente. Justificación Las escuelas psicológicas son aquellas que nos proporcionas explicaciones o técnicas terapéuticas sobre la posible resolución de los problemas mentales que de alguna manera estan afectando la personalidad del ser humano, por otra parte, contamos con las escuelas del pensamiento jurídico las cuales responden a los deseos de los pensadores por buscar garantizar en base a la equidad la interpretación y aplicación del derecho. Ahora bien, comentemos sobre la importancia que tienen las escuelas psicológicas sobre las escuelas del pensamiento jurídico, las primeras brindan ayuda a las escuelas el pensamiento jurídico ya que estas buscan una respuesta al comportamiento humano y como ayudar a su mejoría, tal como la relación de la psicología y el derecho, la psicología estudia el comportamiento de la mente, las escuelas psicológicas dan una explicación y una posible solución ante ese problema presentado. Aunque en una escuela del pensamiento jurídico hace mención sobre que el derecho debe estudiarse por sí solo, sin ninguna otra rama, es necesario la rama para complementar y explicar el comportamiento del hombre, sea bueno o malo, el derecho interviene en ese momento. Referencias • Flores, I. (1997, 1 enero). La concepción del derecho en las corrientes de la filosofía jurídica. | Flores | Boletín Mexicano de Derecho Comparado. Recuperado 28 agosto, 2019, de https://revistas.juridicas.unam.mx/index.php/derecho- comparado/article/view/3509/4171 • J, Fabra y otros. (2015). Enciclopedia de Filosofía y teoría del derecho, volumen uno. México: UNAM.