Mariposa: Los lepidópteros (Lepidoptera, del griego «lepis», escama, y
«pteron», ala) son un orden de insectos holometábolos, casi siempre
voladores, conocidos comúnmente como mariposas; las más conocidas son las mariposas diurnas, pero la mayoría de las especies son nocturnas (polillas, esfinges, pavones, etc.) y pasan muy inadvertidas. Sus larvas se conocen como orugas y se alimentan típicamente de materia vegetal, y algunas especies pueden ser plagas muy dañinas para la agricultura. Muchas especies cumplen el papel de polinizadoras de plantas y cultivos. Cucaracha: Los blatodeos (Blattodea, del latín Blatta, «cucaracha» y del griego eidés, «que tiene aspecto de»), conocidos también como cucarachas, cutias o baratas,2 son un orden de insectos hemimetábolos paurometábolos de cuerpo aplanado, que miden entre 3 cm a 7,5 cm. Incluye también a las termitas, infraorden Isoptera. Se conocen más de 4500 especies de cucarachas en cerca de 500 géneros.3 Suelen ser de color castaño u oscuro y de cuerpo aplanado. Algunas especies tienen colores llamativos. Escarabajo: Los coleópteros (Coleoptera) (del griego κολεός koleos: «caja o estuche», πτερον pteron: «ala»), comúnmente conocidos como escarabajos, son un orden de insectos con unas 375 000 especies descritas; tiene tantas especies como las plantas vasculares o los hongos y 66 veces más especies que los mamíferos.1 Contiene más especies que cualquier otro orden en todo el reino animal, seguido por los lepidópteros (mariposas y polillas), himenópteros (abejas, avispas y hormigas) y dípteros (moscas, mosquitos). El nombre vulgar de escarabajos se usa como sinónimo de coleópteros,2 pero muchos tienen nombres comunes propios, como gorgojos, carcomas, barrenillos, mariquitas, sanjuaneros, aceiteros, cucarrones, ciervos voladores, luciérnagas, congorochos (en Venezuela), caculos (en Puerto Rico), etc. Abeja: Los antófilos (Anthophila, gr. ‘que aman las flores’), conocidos comúnmente como abejas, son un clado de insectos himenópteros, sin ubicación en categoría taxonómica, dentro de la superfamilia Apoidea. Se trata de un linaje monofilético con más de 20 000 especies conocidas. Las abejas, al igual que las hormigas, evolucionaron a partir de avispas. Los antepasados de las abejas eran miembros de la familia Crabronidae y eran depredadores de insectos. Es posible que las primeras abejas se hayan alimentado del polen que cubría a algunas de sus presas y que, gradualmente, hayan empezado a alimentar a sus crías con polen en vez de insectos.